• libro os salvare la vida - Joaquin Leguina

    https://gigalibros.com/os-salvare-la-vida.html

    Os salvare la vida es una solida y emocionante novela que recrea la vida de Melchor Rodriguez, personaje
    historico y singular absolutamente apasionante con un papel infravalorado hasta ahora durante la Guerra Civil y en la trayectoria del anarcosindicalismo espanol. El Angel Rojo, como es conocido, defendio a ultranza siempre, aun a riesgo de su propia vida, todo aquello en lo que creia y puso fin a las lamentables sacas producidas a principios de la guerra, sacas que se cobraron la vida de miles de espanoles. Director de Prisiones, evito vejaciones en las carceles y ejecuciones irregulares y arbitrarias. Tras la guerra, fue detenido y juzgado. En uno de los consejos de guerra al que fue sometido, en una escena casi de pelicula, solo el testimonio del general del bando nacional Munoz Grandes y miles de firmas de personas a las que habia salvado, de todo sesgo politico, evitaron que lo condenaran a pena de muerte.

  • Os salvaré la vida - Joaquín Leguina,Rubén Buren - Planeta ...

    https://www.planetadelibros.com/libro-os-salvare-la-vida/253430

    5 sept 2017 — Su obra teatral está centrada especialmente en el rescate de la memoria histórica y en el reconoci... Leer más. Otros libros de los autores.

  • Os salvaré la vida: Premio 2017 de Novela Histórica Alfonso X ...

    https://www.amazon.es/Os-salvar%C3%A9-vida-Hist%C3%B3rica-NARRATIVA/dp/8467050519

    Os salvaré la vida: Premio 2017 de Novela Histórica Alfonso X El Sabio (ESPASA NARRATIVA) : Leguina, Joaquín, Buren, Rubén: Amazon.es: Libros.

  • (pe) os salvaré la vida (premio de novela histórica alfonso x el ...

    https://www.casadellibro.com/libro-pe-os-salvare-la-vida-premio-de-novela-historica-alfonso-x-el-sabio/9788467050516/5738185

    El libro (PE) OS SALVARÉ LA VIDA (PREMIO DE NOVELA HISTÓRICA ALFONSO X EL SABIO) de JOAQUIN LEGUINA en Casa del Libro: ¡descubre las mejores ofertas y ...

  • Os salvaré la vida. Premio Alfonso X el Sabio de Novela ...

    https://www.fnac.es/a1392423/Ruben-Buren-Os-salvare-la-vida-Premio-Alfonso-X-el-Sabio-de-Novela-historica

    Os salvaré la vida. Premio Alfonso X el Sabio de Novela histórica, libro de Rubén Buren, Joaquín Leguina. Editorial: Espasa. Libros con 5% de descuento y ...

  • Os Salvaré La Vida - Joaquín Leguina; Rubén Buren - Agapea

    https://www.agapea.com/Joaquin-Leguina/Os-salvare-la-vida-9788467050516-i.htm

    Comprar el libro Os salvaré la vida de Joaquín Leguina, Espasa Libros, S.L. (9788467050516) con ENVÍO GRATIS desde 18 € en nuestra librería online ...

  • os salvaré la vida - Margen Libros.

    https://www.margenlibros.com/libro/os-salvare-la-vida_414568

    OS SALVARÉ LA VIDA. PREMIO 2017 DE NOVELA HISTÓRICA ALFONSO X EL SABIO, JOAQUÍN LEGUINA;RUBÉN BUREN, 19,90€. Os salvaré la vida es una sólida y emocionan...

  • Crítica a "Os salvaré la vida" de Joaquín Leguina - Qué Leer

    https://www.que-leer.com/2017/12/13/critica-os-salvare-la-vida-joaquin-leguina/

    13 dic 2017 — Diego Abad de Santillán, el viejo líder ácrata, autor del libro Por qué perdimos la guerra, escribió que «el acto fue conmovedor: un testimonio ...

  • Os salvaré la vida - Joaquín Leguina - Babelio

    https://es.babelio.com/livres/Leguina-Os-salvare-la-vida/26894

    Críticas, citas extractos de Os salvaré la vida de Joaquín Leguina. ... >Voir plus. Añadir cita · Añadir crítica. Comprar este libro en papel, epub, pdf en ...

  • Os salvaré la vida, de Joaquín Leguina y Rubén Buren - Juan ...

    https://www.juanherranz.com/libro-os-salvare-la-vida/

    En este libro, el retrato de Melchor Rodriguez, con su alias de Ángel Rojo, se convierte en una ficción literaria que parecería impensable, increible sin su ...

  • os salvaré la vida - Librería Sinopsis

    https://www.libreriasinopsis.com/libro/os-salvare-la-vida_293412

    OS SALVARÉ LA VIDA. PREMIO 2017 DE NOVELA HISTÓRICA ALFONSO X EL SABIO, VARIOS AUTORES; LEGUINA, JOAQUIN; BUREN, RUBÉN, 5,72€. Os salvaré la vida es una s .

  • La ultima carta de Mercedes Guerrero

    https://gigalibros.com/la-ultima-carta.html

    Mitad thriller mitad novela romantica, esta es la historia de la transformacion de una mujer enfrentada a si misma y a su cruda realidad.

  • Al pie de la Muralla de Begona Pro Uriarte

    https://gigalibros.com/al-pie-de-la-muralla.html

    Fui arrancado con sana de la inocencia de la ninez. Los banelatus robaron mis juegos infantiles y aniquilaron a mis parientes y amigos, obligandome a presenciar su exterminio. Decidieron robarme mi vida para jugar con ella. Me crie entre seres sin sentimientos, que aunque de aspecto semejante al nuestro, carecen de alma y, simplemente, buscan el modo de aniquilar a una raza que creen inferior. Lo hacen a base de herirnos una y otra vez con el fuego de sus mentes. Creci en Bankada, la ciudad mas importante del supremio banelatu del oeste, y juro que cada dia alli fue una batalla continua en la que todos queriamos morir. Pero ellos se empenaban en sanarnos una y otra vez para volver a intentar matarnos al dia siguiente. Hasta que una vez lo consiguieron; me mataron.

  • Ni se te ocurra de Gema Samaro

    https://gigalibros.com/ni-se-te-ocurra.html

    Barbara le comunica a su jefe que en un mes deja su trabajo de ortodoncista porque se muda a Perth, Australia, donde va a casarse con Alex.
    Desde ese instante, Gustavo, su jefe, sabe que tiene exactamente treinta dias de plazo para evitar que Barbara se case.
    Y no porque la necesite como el aire en su clinica dental de Madrid, que tambien, sino porque la noticia de la boda hace que se percate de algo que siempre se ha negado a reconocer.
    Gustavo ama a Barbara.

  • Cierra los ojos y entregate de Pilar Parralejo

    https://gigalibros.com/cierra-los-ojos-y-entregate.html

    TAN pronto como termino la reunion, Miranda Warhol, editora jefe de Stardust Miracle, cerro la libreta sobre sus rodillas, estirandose sobre el puf en el que habia estado sentada durante mas de dos horas. Se puso en pie elegantemente y se coloco bien la chaqueta del traje. --Bien, chicas. Nos vemos aqui el proximo martes con los articulos de los zapatos mas extravagantes del mundo, --senalo a un par de chicas-- el articulo sobre vestidos de epoca, -- miro a otro par de ellas-- y el de los peinados sencillos pero elegantes para citas de ensueno. -- ?Y el de los consejos para conquistar al hombre de tus suenos, del mes proximo? --respondio una de las redactoras a medida que se acercaban a la puerta. --Bueno, de ese articulo me encargo yo --sonrio--. De vez en cuando tambien me gusta colaborar, ya lo sabeis. Cuando todas salieron de la enorme sala de colores en la que se reunian siempre, Miranda indico a su asistente que las siguiera, y este no tardo en unirse a ellas. Las chicas se acercaron a la puerta del ascensor de cristal exterior, desde donde se veia gran parte de la ciudad en una imponente panoramica. --Parece que hara buen tiempo el resto de la semana. Las chicas y yo iremos el viernes a un sitio nuevo ?Querras venir? --pregunto Pauline, una de las redactoras y alguien con quien Miranda se llevaba especialmente bien desde hacia algo mas de tres anos. --Pues no lo se, ese viernes por la tarde vienen los de la mudanza y no se si tardaran mucho --explico--. De todas formas enviame la direccion en un mensaje, si terminan rapido me pasare por alli, no me gustaria perdermelo. --!Hecho! --exclamo--. ?Sabes? A ese sitio nuevo suele ir tu amado Sebastian Jefferson --canturreo con intencion de avergonzar a su jefa. --Por dios Pauli, !callate! --Miranda la regano con los dientes apretados mientras le daba un golpe con el codo en las costillas. -- Vamos Warhol, ya todo el mundo sabe que te gusta el jefazo --rio, entrando en el elevador y corriendo para esconderse detras de sus companeras, haciendo que la editora se sonrojase por ver su secreto al descubierto. --Es cierto… --confirmaron las otras chicas asintiendo efusivamente. Miranda se abrazo a su asistente y fingio que se ponia a llorar, haciendo reir a las muchachas y al secretario. No podian negar que lo pasaban genial en aquel trabajo. Casi como si de una broma se tratase, Bastian, el guapo y sexy director general de New York Paper Ind., la editorial a la que pertenecia la revista de las chicas, esperaba en la puerta del ascensor. Cuando este se detuvo, la mandamas del grupo salio caminando de espaldas y, sin haber visto al hombre, choco aparatosamente con el. Las chicas empezaron a reir y a pasar sobre los papeles para ir a sus puestos y dejarlos solos. --!Oh, madre mia! Lo siento tanto… Disculpa. Lo lamento muchisimo --murmuraba completamente avergonzada, mientras recogia el monton de papeles que el choque entre ellos habia dejado desperdigados por el suelo. --No importa. ?Estas bien? --Si, estoy bien. Tu… ?te he hecho dano? Lo lamento de verdad. --Si, tambien estoy bien --sonrio el, poniendose en pie y presionando el boton para que las puertas del ascensor volvieran a abrirse-- Ten un buen dia. --Gracias, tu… tu tambien --dijo la editora, sonriendo como una tonta antes de darse la vuelta y correr a su despacho hecha un manojo de nervios. A Miranda nunca le habia gustado un hombre como Sebastian. El no era mucho mas alto que ella, tenia el cabello semi-largo, de un castano casi rubio, y ojos azul grisaceo. Era un hombre que siempre llevaba barba sin afeitar de varios dias y mayor que ella por varios anos. Miranda siempre se habia enamorado de tipos como Maximilien, su asistente, chico atractivos, jovenes y seductores. Hombres jovenes con los que podia acostarse una noche y olvidarlos la noche siguiente. Tampoco es que lo hiciera asi, se habia acostado con al menos una decena de chicos desde su adolescencia, pero salio con todos ellos como minimo por un mes. Pauline la habia visto correr a su despacho y, abrio una ventana de chat con el resto de las chicas para burlarse de ella. --Realmente te quita el aliento, ?no? --No --la miro a traves del cristal de su despacho con la cara aun colorada--. ?Por que siempre exagerais tanto? Solamente lo encuentro atractivo. Una de las redactoras habia encontrado una foto del ejecutivo en internet y la compartio en el chat. Miranda se puso en pie para reganarlas por su falta de decoro, pero su expresion risuena cambio inmediatamente, palideciendo mas por momentos. Bastian se acercaba directo a su despacho, con su siempre recta y elegante postura. NYPaper tenia reuniones todas las semanas en la sala de juntas contigua a la que usaban las chicas. Esta, por el contrario, no era en tonos blancos, rosas, naranjas y violetas, ni tenia como asientos cojines, pufs y sillones acolchados. Era una sala fria, gris, con una gran mesa de cristal ahumado en el centro y rodeada de sillas de simil piel color negro. Bastian solto la pila de papeles sobre la mesa conteniendo una sonrisa por el choque con esa chica. --?Pasa algo? --pregunto uno de los editores de la revista masculina que su editorial llevaba. --No, no en realidad. Desvio la mirada al monton de documentos y se dio cuenta de que los suyos estaban mezclados con los de la editora. Por un momento penso en mandar a Sean, su secretario, pero le apetecia verla de nuevo asi que, despues de rebuscar y seleccionar los informes y recortes de Miranda, bajo a su despacho. Al salir del ascensor la vio reir dentro de su acristalada oficina. Su cara aun lucia llena de color y parecia interesada mirando algo en el monitor de su ordenador. Camino despacio, observandola mientras se acercaba, hasta que ella alzo la vista y le miro. Su expresion perdio todo color que pudiera tener. --Buenos dias de nuevo, Senorita Warhol. --Saludo, apoyandose en el marco de cristal de la puerta. --Buenos… dias --respondio ella, colocandose frente a la pantalla en la que aun estaba la imagen. Las chicas reian, mirandolos. Ellas tambien estaban sorprendidas por la visita del jefazo, pero la cara de su editora era un poema y era inevitable no reirse. --Supongo que te sorprende mi visita. --!No! Bueno si. Pero por favor, pasa, sientate. --No. En realidad vengo a por los papeles de mi reunion --ella lo miro sin saber a que se referia, pero Bastian senalo con la mirada el monton que habia en una mesita al lado de su escritorio. --Oh, !lo siento! De verdad que lo siento… --No te disculpes tanto, yo tambien me he llevado los tuyos --anadio, sacudiendo los que llevaba en la mano. Maximilien miraba desde fuera. Habia ido a por los cafes que la mandamas le habia pedido y dudaba si entrar o no. Las chicas le llamaron con gestos, como si le dijeran que se apartase de alli. Su jefa se veia tan emocionada que, obedeciendo a las redactoras se acerco al escritorio de Pauline para no interrumpirles. --?Que ha pasado? ?Por que esta el jefazo en su despacho? --pregunto soltando las bebidas calientes en la mesa de la pelirroja, pero ella no respondio, solo se encogio de hombros sin apartar la mirada de su amiga. Mientras ella rebuscaba entre los papeles para devolverle los que se habia llevado por error, el ojeo el despacho y con el, el reflejo en el espejo que habia detras de ella. Desde ahi pudo ver el monitor, donde habia una foto suya en primera plana. Sin intencion alguna de disimular dio la vuelta al escritorio para verla mejor. --?Y esto? --pregunto risueno. Miranda se giro horrorizada, sin poder articular palabra-- Esa no es de mis mejores fotos, la verdad… ?Son esos? --pregunto, cambiando de tema, restandole importancia a lo que habia estado mirando. --Si… estos son. --Vale. Gracias. Espero chocar mas veces contigo, me gusta sonreir antes de una reunion importante, ayuda a aliviar tensiones --Bastian tendio una mano como saludo y ella la estrecho timidamente. Nunca antes habia pasado esa verguenza. Habia chocado con el, tirando todo lo que llevaba en las manos, le habia hecho ir a por los documentos que se habia llevado y, ademas, le habia pillado con un retrato suyo en la pantalla. Cuando el ejecutivo se marcho Miranda se llevo las manos a la cara, percibiendo sin querer, el aroma que la mano de ese hombre habia dejado impregnado en la suya.

  • Hoyos de Louis Sachar

    https://gigalibros.com/hoyos.html

    Los chicos buenos van al cielo, los malos… al Campamento Lago Verde. Stanley Yelnats se convierte en interno del campamento despues de ser acusado del robo de unas zapatillas; alli conocera a Zero y su vida cambiara para siempre. ?Donde estan los limites entre el bien y el mal?Una historia estremecedora para reflexionar sobre el significado de la justicia.

  • El Sol de Breda de Arturo Perez-reverte

    https://gigalibros.com/el-sol-de-breda.html

    <

  • Beso feroz de Roberto Saviano

    https://gigalibros.com/beso-feroz.html

    Con esta novela basada en la muy cruenta realidad napolitana, Roberto Saviano continua explorando las entranas de la Camorra. En Beso feroz retoma a los adolescentes mafiosos de La banda de los ninos alli donde los dejo. Si ese libro se cerraba con una madre clamando venganza por la muerte de su hijo, este arranca con el intento de llevar a cabo esa venganza de la forma mas terrible posible: asesinando a un bebe en la sala de recien nacidos de un hospital.

  • Mariposas heladas (Mistery Plus), Katarzyna Puzynska de Katarzyna Puzynska

    https://gigalibros.com/mariposas-heladas-mistery-plus-katarzyna-puzynska.html

    El hallazgo del cuerpo sin vida de una mujer en un paraje helado destapa una cadena de secretos que se inicio en la decada de 1950.

  • Un dia para no olvidar de Dylan Martins

    https://gigalibros.com/un-dia-para-no-olvidar.html

    Un guino de amor a todas esas lectoras que comparten un momento conmigo.
    Por todas y cada una de vosotras…
    El amor en el dia de San Valentin en esta variedad de relatos.

  • Mademoiselle Coco. y la pasion por el numero 5 de Michelle Marly

    https://gigalibros.com/mademoiselle-coco-y-la-pasion-por-el-numero-5.html

    Una novela que no solo revela el significado del mitico Chanel no5, sino que muestra a una mujer sensible, apasionada y generosa. Por sus paginas desfilan sus grandes amigos y amores, personajes reales como Picasso y Stravinski, y la esencia de ciudades como Paris o Venecia. Paris, 1919. La ciudad se ha rendido a los disenos de Gabrielle <> Chanel.Su moda es revolucionaria y su creadora se ha convertido en un simbolo de elegancia. Pero cuando su gran amor muere en un accidente automovilistico, Coco se derrumba y tiene la sensacion de que su propia vida se ha terminado. Solo la idea de crear un perfume unico que inmortalice su amor logra sacarla de un estado de profunda tristeza. Mientras busca la esencia perfecta, visita Venecia, donde conoce a Dimitri Romanov y la historia del perfume de Catalina la Grande. Un viaje que marcara un antes y un despues en la vida de Coco.

  • No puedes ser mi jefe de Dina Reed

    https://gigalibros.com/no-puedes-ser-mi-jefe.html

    Audrey entro en el despacho del senor Stone, en uno de los rascacielos mas elegantes de Midtown, a las ocho de la manana en punto, de un lunes de primeros de febrero, y saludo al joven que estaba mirando por el ventanal como no paraba de nevar. --!Buenos dias! --saludo Audrey, convencida de que ese joven no podia ser el senor Stone. Y es que, a pesar de que era un misterio todo lo que rodeaba a la figura de Duncan Stone, porque no concedia entrevistas, no habia publicada ni una sola foto suya y ni siquiera tenia perfil profesional en LinkedIn, Audrey suponia que ese hombre tendria unos sesenta anos y, en cualquier caso, jamas tendria la planta del tio que tenia delante. Porque era un joven de unos treinta anos, alto, moreno, con un cuerpazo espectacular, buen corte de pelo, abundante y liso, y una voz profunda que era como para derretirse ahi mismo. Pero Audrey no se derritio, porque no estaba ahi para eso... --!Buenos dias! !Menudo dia! ?Le ha costado mucho llegar? --pregunto el senor Stone sin despegar la vista del ventanal y con cierto desden. No en vano, esta era la octava asistente que iba a contratar en seis meses y estaba mas que harto. Desde que la senora Carter se habia jubilado no habia vuelto a encontrar a nadie que estuviera a su altura. De hecho, todas las asistentes que habian venido despues de ella, por desgracia, habian salido despavoridas a las pocas semanas de trabajo duro y muy intenso. El no sabia hacerlo de otra manera... Y suponia que con la chica que acababa de enviarle la agencia iba a pasarle lo mismo. Tanto era asi, que ni se habia molestado en ojear su curriculum, para que, si ya sabia lo que iba a suceder con ella. --He venido en metro --respondio Audrey a ese tio que no tenia ni idea de quien era. ?Tal vez el hijo del senor Stone? Porque el traje azul oscuro que llevaba, y que le quedaba perfecto, tenia pinta de ser carisimo. El caso fue que ese joven replico, sin demasiado entusiasmo, justo antes de darse la vuelta: --Es lo mas inteligente que se puede hacer estos dias. Nueva York cuando nieva es... Duncan no pudo acabar la frase, ya que en cuanto se giro y comprobo quien era la chica que tenia en frente se quedo atonito. --!No! --exclamo Audrey que estaba tan perpleja como el. Y es que no podia creerlo. Aquello no podia ser. Era imposible. Y Duncan estaba pensando otro tanto de lo mismo, porque la chica que tenia enfrente no podia ser ella. La mujer con la que habia pasado el mejor verano de su vida... --?Audrey? ?Tu eres la Audrey que me envia la agencia como asistente de direccion? Audrey se encogio de hombros, resoplo y luego asintio sin salir de su asombro: --Yo soy Audrey Lacer. Pero tu no puedes ser el senor Stone. O al menos, el senor que Stone que es dueno de la compania. Tu debes ser Duncan Stone, hijo; o el sobrino del senor Stone, o... Duncan sonrio divertido, pues se alegraba muchisimo de que Audrey estuviera de nuevo en su vida, y replico: --Soy el unico Duncan Stone, soy el dueno de la compania Dunfly. Audrey se quedo boquiabierta, puesto que no podia ser que el chico con el que habia pasado la mejor semana de su vida fuera a ser su maldito jefe: --No, o sea, no. Es que no me lo puedo creer. Duncan se cruzo de brazos y pregunto sin dejar de sonreir: --?Por que te cuesta tanto creer que la compania sea mia? Audrey sabia que era un chico listo, pero habia tantos chicos en Nueva York que estaban sirviendo mesas que replico: --Estaba convencida de que el senor Duncan tendria la edad de mi padre o mas. ?Como demonios puedes tener una compania de aviones privados con treinta anos? Duncan se quedo mirandola, con esa coleta tirante, un traje sastre marron, botines de tacon cuadrado y un bolso de lo mas anodino, y no pudo evitar preguntar: --?Y tu? ?Como has podido vestirte asi? Audrey le miro con el ceno fruncido y replico mosqueada: --?Asi como? --Como si fueras una chica aburrida, formal y gris. --Es un traje de corte recto, elegante y serio. Visto como se supone que tiene que hacerlo una asistente de direccion. Te recuerdo que esto no es Malibu. A Duncan se le encendio la mirada y se le fue la sangre a la entrepierna de solo escuchar la palabra Malibu. --Si esto fuera Malibu, ahora mismo estariamos follando contra esa pared --mascullo Duncan, sin dejar de mirarla. Audrey sintio que un calor subito se le subia hasta el rostro y repuso: --?Que? --Lo que paso entre nosotros fue muy intenso. Una atraccion salvaje. La mas bestia que he tenido en mi vida. Asi que si esto fuera Malibu... --Ya, pero no lo es --se apresuro a decir Audrey. --No. No lo es. Y ademas estoy prometido --dijo Duncan, clavando la mirada en la de ella. Audrey sintio un escalofrio extrano al notar la mirada de Duncan, trago saliva y replico forzando la sonrisa: --Eso es genial. Pero ?tu no eras el que no creias en el amor? Duncan, que no podia dejar de mirarla, sintio tambien algo extrano y unas ganas absurdas de volver a besarla. Pero no le dio la menor importancia y replico sonriendo tambien: --No me caso por amor. Me caso por placer y por negocios. Audrey levanto una ceja de pura perplejidad y repuso: --Lo del matrimonio por interes ?no es algo que esta pasadisimo de moda? --Yo no sigo las modas. Y ahora sientate, por favor, y echemos un vistazo a tu curriculum. Duncan le senalo la silla que estaba frente a el, Audrey se sento y el hizo lo mismo en su sillon giratorio de piel negra, moderno, funcional y elegante. --?Todavia no te ha dado tiempo a echarle un vistazo? Duncan abrio la carpeta donde estaba el curriculum de Audrey y respondio con la misma sinceridad que ella estaba gastando con el: --Las asistentes no me duran demasiado y pense que tu serias una mas. --?Que pasa que en la agencia te mandan a todas las incompetentes o es que tu eres un jefe tocapelotas que no hay Dios que te aguante? Duncan levanto la cabeza de la carpeta y se echo a reir, porque le encantaba como era esa chica. --?Ves? Tu ropa no tiene nada que ver con como eres. Una chica que no tiene pelos en la lengua jamas se pondria ese traje marron tan feo. ?De donde diablos lo has sacado? Audrey bufo, dio un manotazo al aire y replico tras fijarse en que Duncan seguia llevando en su muneca las pulseras de cuentas de madera que le habia comprado en un puesto callejero en Malibu: --!Que pesadito estas con mi traje! Y ahora responde: ?por que no aguantan las asistentes ni dos tardes? --No te pases, tampoco salen por piernas en cuanto me ven, pero si al cabo de unas semanas porque soy un jefe cabron, exigente, duro y si, muy tocapelotas. Audrey que no daba credito, porque la verdad era que le costaba creer que el surfero jodidamente divertido y sexy que habia conocido en Malibu fuera todo un senor don importante, replico: --Supongo que por ser como eres has logrado el exitazo que tienes con tu compania. --Trabajo muy duro, pero tambien he tenido suerte. --Me temo que en tu caso la suerte tiene que ver mucho con el talento tambien --observo Audrey. Y es que le habia conocido lo suficiente como para saber que era un tio muy talentoso, y no solo en la cama... --?Me estas haciendo la pelota, senorita Lacer? Por cierto, si supieras la de veces que me pregunte como te apellidarias... --Jajajaja. A mi tambien me despertaba mucha curiosidad saber cual seria tu nombre completo. Pero como decidimos que era mejor que lo nuestro fuera sin preguntas... Duncan sonrio de solo recordar otra vez aquellos dias tan felices y afirmo: --Y fue genial. Pero ahora que vas a ser mi asistente voy a tener que hacerte unas cuantas preguntas. Audrey sonrio de oreja a oreja y repuso: --Y yo a ti, senor Stone...

  • Correr mejor, vivir mejor de Santiago Garcia

    https://gigalibros.com/correr-mejor-vivir-mejor.html

    En su segundo libro, Santiago Garcia, el critico de cine que un buen dia
    empezo a correr y ya no pudo parar, vuelve a abordar la pasion por el
    running desde esa dimension intima que invita como ninguna a calzarse
    las zapatillas y sumarse a esa aventura que tarde o temprano se
    convertira en la vida misma.

  • Hozuki, la libreria de Mitsuko de Aki Shimazaki

    https://gigalibros.com/hozuki-la-libreria-de-mitsuko.html

    Mitsuko tiene una libreria de viejo especializada en obras filosoficas. Alli pasa los dias serenamente con su madre y Taro, su hijo sordomudo. Cada viernes por la noche, sin embargo, se convierte en camarera en un bar de alterne de alta gama. Este trabajo le permite asegurarse su independencia economica, y aprecia sus charlas con los intelectuales que frecuentan el establecimiento. Un dia, una mujer distinguida entra a la tienda acompanada por su hija pequena y los ninos de cada una se sienten inmediatamente atraidos entre ellos. Ante la insistencia de la senora y por complacer a Taro, a pesar de que normalmente evita haceramistades, Mitsuko aceptara volver a verlos. Este encuentro, sin embargo, podria poner en peligro el equilibrio de su familia.

  • Anecdotario de una solterona de Dalia Rodriguez Sanchez

    https://gigalibros.com/anecdotario-de-una-solterona.html

    Novela – Tercer puesto del Concurso Internacional de Novela Contacto Latino (Estados Unidos) – Anecdotario de una solterona nos presenta a una mujer madura e independiente que enfrenta su pasado y sus peores miedos despues de la muerte de su madre. El volver a la casa de su infancia y remover los muebles viejos y los recuerdos, la hace reflexionar sobre las culpas y estereotipos que ella misma se ha impuesto. Se da cuenta que si no tiene pareja es porque se ha negado a abrirse al amor y que el ser “solterona” lo determina exclusivamente la actitud que se toma ante la vida.

  • La guerra en el fin del mundo de Ian Ross

    https://gigalibros.com/la-guerra-en-el-fin-del-mundo.html

    La guerra en el fin del mundo, la primera entrega de una nueva serie epica situada en el ultimo periodo del imperio romano, en tiempos del emperador Constantino, sigue las aventuras de Aurelio Casto, centurion recien ascendido, en una tumultuosa batalla de la que depende el futuro de Roma.

  • Por Olvidarte de O. M. Courtly

    https://gigalibros.com/por-olvidarte.html

    Al perdio al amor de su vida,
    Al no ha vuelto a ser la misma desde entonces,
    no le importaria rogar por tener ese amor de vuelta.
    Pero ya no hay nada que hacer, ella lo debe olvidar.

  • S.E.C.R.E.T. Deseos revelados, L. Marie Adeline de L. Marie Adeline

    https://gigalibros.com/s-e-c-r-e-t-deseos-revelados-l-marie-adeline.html

  • Una novia de pelicula de Carla Tristan

    https://gigalibros.com/una-novia-de-pelicula.html

    El:
    La vida de un actor es rapida, cambiante y estricta. Y cuando la mia iba cuesta arriba sucedio lo impensado, cayo al piso.
    Lo bueno es que la conoci a ella y aun que solo era un juego de mis amigos para hacerme sentir mejor, resulto ser de lo mas agradable. Linda, perspicaz, divertida, una sonadora muy sexy. Justo lo que le faltaba a mis dias. Claro que no estaba seguro de que fuera lo correcto en este momento.
    Yo debia enfocarme en mis asuntos y reconciliarme con mi publico...

  • La mejor venganza (La Primera Ley 1) de Joe Abercrombie

    https://gigalibros.com/la-mejor-venganza-la-primera-ley-1.html

    La guerra puede ser un infierno, pero para Monza Murcatto, la Serpiente de Talins, a sueldo del duque Orso, tambien es una forma excelente de hacer dinero. Sus victorias la han hecho muy popular ?quiza demasiado para el gusto de Orso. Traicionada y dada por muerta, la recompensa de Murcatto es un cuerpo desfigurado y una sed de venganza que no se detendra ante nada. Sus aliados son el borracho menos fiable de Styria, el envenenador mas traicionero de Styria, un asesino en serie obsesionado con los numeros y un barbaro que quiere enderezar su vida? Entre sus enemigos estan los mas poderosos del pais, y eso antes de que el Orso envie al hombre mas peligroso para acabar con ella? La mejor venganza es una novela independiente que tiene todas las caracteristicas que hicieron un exito de la trilogia La primera Ley . ?Entre sus personajes hay tiranos y torturadores, un par de envenenadores, un asesino en serie, un borracho traidor, un oscuro barbaro y un sangriento mercenario. Y estos son los buenos? Las batallas son vividas y viscerales, la accion brutal, el ritmo imparable y Abercrombie amontona las traiciones y los giros de la trama de forma que no dejamos de preguntarnos como acabara todo. Este es su mejor libro hasta el momento.? George RR Martin Elegido entre los diez mejores libros de 2009 por los lectores de SF Site. Seleccionado por Amazon como una de las mejores publicaciones del genero en 2009. Libro favorito de SFFWorld en 2009. Finalista del British Fantasy Award 2010. Finalista del David Gemmel Legend Award 2010.

  • Ninguno de nosotros volvera de Charlotte Delbo

    https://gigalibros.com/ninguno-de-nosotros-volvera.html

    Uno de los pocos testimonios femeninos sobre los campos nazis, una obra maestra de la literatura concentracionaria.

  • Corona de trueno (Bestias de la noche 2) de Tochi Onyebuchi

    https://gigalibros.com/corona-de-trueno-bestias-de-la-noche-2.html

    Taj ha logrado escapar de Kos, pero la reina Karima hara hasta lo imposible por cazarlo. Pronto Taj se dara cuenta que debe volver, no solo porque sera imposible huir por siempre, sino porque el pueblo de Kos sucumbira ante el terror de Karima. El necesita un plan, y pronto. Con la ayuda de Arzu, Taj y Aliya llegaran al pueblo de sus ancestros, hogar de los tastahlik, los devoradores de pecado, donde descubrira que todo bien tiene sus trazos de mal, y que no existe un hogar terrenal sino personas que lo hacen posible. Y Bo, su antiguo hermano de armas y mejor amigo pondra a prueba todo lo que conoce sobre la humanidad. Tochi Onyebuchi vive en Connecticut, donde ademas de presumir cuatro titulos universitarios en espectros del conocimiento tan distantes como las artes, la escritura, la economia y la jurisprudencia, trabaja en la industria tecnologica. Sus escritos han aparecido en importantes revistas de ficcion cientifica como Asimov’s e Ideomancer.

  • Elogio de la duda de Victoria Camps

    https://gigalibros.com/elogio-de-la-duda.html

    Fue Bertrand Russell quien dijo que la filosofia es siempre un ejercicio de escepticismo. Aprender a dudar implica distanciarse de lo dado y poner en cuestion los topicos y los prejuicios, cuestionar lo incuestionable. No para rechazarlo sin mas, sino para examinarlo, analizarlo, razonarlo y, por fin, decidir.

  • Pedir la luna de Blanca Garcia-valdecasas

    https://gigalibros.com/pedir-la-luna.html

    El dia cuatro de Enero del ano 2.000 Constanza Morales cruza el Parque del Retiro camino de su trabajo. Va deprisa en la manana helada mientras recuerda como fue su vida en el ultimo ano del siglo y del Milenio. A causa de una pelea con su hermana, que involucra a toda la familia, a principios del ano, deja su Sevilla natal y se traslada a Madrid. Alli solo conoce a una prima de su padre, la tia Flora y su marido, Bernardo; son un matrimonio sin hijos y la acogen con gran afecto, y a un chico, Francis, que conocio en el tren y le gusto mucho. Pronto ensancha el circulo de sus amistades, la chica que le busca un piso donde vivir, los habitantes de los otros pisos en la casa, amigas de la tia Flora, companeros de trabajo… Le ocurren mas cosas de las que esperaba y aprende que muchas de ellas no son lo que al principio parecian. I Dicen que habeis llegado. Ademas, sin el ruido y el caos que esperaban algunos. Bienvenido, Tercero. Bienvenido, Veintiuno. Siglo nuevo y un nuevo Milenio: es emocionante. No hay tanta gente que haya vivido esta experiencia. Abuela Joaquina tenia mucha ilusion en llegar, la pobre; solo por tres anos no lo ha visto… una lastima. Y yo, Constanza Morales, una chica sin importancia, os saludo, camino de mi oficina en el segundo dia laborable de este ano dos mil. Es Martes, cuatro de Enero; en realidad, primer dia de trabajo porque ayer no se hizo gran cosa. Tambien espero que sea para mi el principio de muchas cosas buenas y estimulantes, como encauzar mejor mi vida y sacarle mas partido; desde luego lo voy a intentar. Hoy me siento mas real: peso y volumen. Piso la tierra dura, estoy aqui; este sitio que lleno es mio propio. Curioso como todo esta en la cabeza, en la disposicion, no necesariamente en ningun acontecimiento. Y he decidido: voy a ser feliz. Bueno, si me dejan entre unos y otros. He salido mas temprano de casa, asi puedo dar un paseo. El frio de la manana hace brotar de mi nubecitas de vapor si abro la boca. Voy por la calle Principe de Vergara, entrare al Retiro por la puerta que llaman de Madrid y cruzare el Parque hasta salir a la Plaza de la Independencia. No se si de verdad estoy estrenando Siglo y Milenio; se ha armado bastante discusion con eso: que si empieza ahora o en dos mil uno. Yo recuerdo fotos que guardaba mi abuela, seguramente de la suya, de la Exposicion de 1900. Ellos celebraron entonces la entrada del siglo veinte, asi que yo celebrare hoy el XXI y el Milenio y, si viene a cuento, lo volvere a celebrar cuando sea. El ano en si me parece lo mas importante, la sensacion de que acaba uno y otro empieza, la continuidad de esa cinta de anos --anillos de oro alrededor del sol-- que nos lleva por nuestra vida. Fue Arthur quien dijo que el anillo, como se dan los matrimonios, es simbolo de fidelidad porque es un "anito," annellus, y representa la continuidad de la Tierra alrededor del Sol. O al reves, como pensaban antes, el Sol alrededor de la Tierra. Arthur es la unica persona que conozco que sabe latin para hablarlo de corrido. Los anos son continuidad aunque unos sean tan diferentes de otros. Desde luego, el que acaba de terminar habia empezado mas bien aburrido para mi. Monotono, dentro de una rutina, como quien duerme la siesta. Pero a mediados de Enero cambio todo de golpe. Mi hermana y yo tuvimos una bronca monumental que involucro fatalmente a toda la familia, mas algunos amigos cercanos, y acabo haciendome la vida muy dificil. A partir de ese momento las cosas fueron como si salieran unas de otras, desenvolviendose en mas cosas inesperadas. De no haber sido por aquello, mi adorable Jefe del trabajo no habria insistido en trasladarme de la oficina de Sevilla a la de Madrid. Si no hubiera ido a Madrid no habria conocido a Francis, si no hubiera buscado piso nunca habria conocido a Misi. Ni Misi ni yo hubieramos conocido a Martin y Arthur ni… Enfin, nunca ningun ano me habia traido tantas cosas, malas o buenas, como el que acababamos de dejar. Parece mentira, pero hace unos meses estabamos Misi y yo sentadas en una cerveceria de la Plaza de Santa Barbara, bajo la sombra manchada de unos arboles medio tuberculosos, en pleno centro de Madrid; delante de nosotras dos cervezas, aceitunas y dos pinchos de tortilla. Sabado, hora del aperitivo, hartas de andar. Ella me dijo: --?Sabes cual es tu principal problema? Y mio tambien. Que no somos capaces de pedir la luna. Buscabamos vivienda para mi, habiamos visitado tres pisos aquella manana. El ultimo, en la calle Santa Teresa, nos habia llevado a restaurarnos con asiento y las canas. La casa necesitaba aun mas restauracion que nosotras. La fachada amenazaba con perder sus bonitas cornisas y la escalera estaba tan dilapidada que uno quiza se encontrase un buen dia sin poder bajar hasta la calle. Desalentada, habia insinuado que tal vez deberia comprar el apartamento que habiamos visto antes cerca de la Plaza de Castilla: pequeno y sin gracia pero recien pintado. No hacia mas que unas semanas que conocia a Misi y ya era, pensaba yo, una de mis mejores amigas. A las de Sevilla, mi tierra, las habia borrado despues de mi pelea con Macarena y a Queti, la que mas queria, no la veia desde hacia cuatro anos; al acabar la carrera se sumo a una organizacion de voluntarios para trabajar con los mas pobres de no se que lugar en Africa. Ya ni me escribia siquiera; quiza no hubiera alli correo o tenia tanto trabajo que no podia escribirme. Yo la echaba de menos Misi se estaba portando muy bien conmigo. Entonces no sabia cuanto no sabia de la vida de Misi. Solo que trabajaba en una agencia de propiedades pequena, y acaso furtiva, de la que era socia con tres amigas mas. Me encontraba en Madrid: atras quedaban familia, amigos, las calles de mi ciudad con sus arboles y olores, esa calida luz que no se encuentra en ninguna otra parte. Los rincones que amaba del Parque Maria Luisa, la Glorieta de Becquer donde solia ir desde los trece anos a mirar con devocion al poeta del que estaba --y pensaba que siempre iba a estar-- profundamente enamorada… mi mundo, todo. Dura tarea estar sola aqui pero suavizada por la presencia de los tios, Flora y Bernardo, desde luego de Francis desde el principio y enseguida despues por la amistad de Misi. Tal como habian ocurrido las cosas, a Sevilla nunca iba a volver como no fuera de visita; ya no habia sitio para mi en la casa de mis padres. Tenia algun dinero ahorrado de mi trabajo, mas una cantidad que me dejo mi madrina, la hermana mayor de mi padre, al morir. Pobre, una de esas enfermedades que no perdonan. Decidi comprar mi propio piso; no era tan facil como habia imaginado. De momento estaba en una pension con una duena pesada, habladora y llena de pretensiones, a mi ver totalmente injustificadas. Me habia acogido con muestras de aprecio pero habia ido cambiando con el paso de los dias. Tal vez se hartaba de la gente o le molestaba que recibiera a Francis en la habitacion. Me resultaban cada dia mas desagradables ella, su casa y el olor de ambas. A veces me decia a mi misma que seria mejor comprar cualquier cosa antes que seguir alli. --?Estas hablando de cosas personales o de ese apartamento?, -- pregunte a Misi, cuando me dijo lo de pedir la luna. --Ya te he dicho que era tuyo y mio pero es todo el mismo problema. El piso me parece caro para lo que es. Y, no se, a ti no te veo ahi dentro. Tampoco estas entusiasmada y cuando compres tienes que estarlo. Me disgusto que Misi tuviera la sensacion de que se conformaba con cualquier cosa. Merecia ser feliz: era buena persona, guapa, simpatica y cien cosas mas, entre otras una excelente amiga. Ahora lo estaba demostrando. A ella, como agencia, le convenia vender, comprar, hacer negocio y cobrar comisiones. A poco que me hubiera animado me habria decidido; era de agradecer que fuera en contra de sus intereses para ayudarme. Curiosamente el hilo que me llevo hasta Misi habia partido de dona Juanita, mi madre. Le parecia cutre que estuviera en una pension, sonaba mal. Un hotel resultaria mejor pero los hoteles eran caros o malos o las dos cosas. Dio en llamarme por telefono desde Sevilla todos los dias a ver si habia encontrado casa. Todo solia entrarle por rachas, igual me atosigaba sin darme respiro como parecia haberme olvidado por completo. Cuando me dijo que se proponia venir a Madrid, convencida de mi incapacidad para desenvolverme, me espante. --No, por Dios, no vengas. Me sentiria fatal y no te gustaria la pension. --No iria a esa pension en ningun caso. Me iria a casa de mi prima Flora… No era su prima; era prima de mi padre pero se la adjudicaba. Intente convencerla como pude. Que estaba ocupadisima, dije, y era perfectamente capaz de arreglarme yo sola. --!Que vas a ser! Has vivido siempre con nosotros sin tener ningun problema. Asi que ningun problema. Lo deje pasar. Dije que, en realidad, no teniamos los mismos gustos. Es extrana la gente. Puede criticar todo lo que haces o como te vistes; pero cuando dices "no tenemos los mismos gustos", se molesta. Mi madre se molesto. --No seas tonta --dijo--. Por lo menos ve a casa de tu tia Flora y le pides consejo. Ella lleva en Madrid toda la vida y conoce a mucha gente --Me da un poco de apuro --proteste--. No he tenido tiempo de pasar a saludarla y presentarme alli para pedirle un favor… --No seas tonta, --volvio a decir-- anda y le pides ayuda. Siempre ha sido muy carinosa con mis hijas. Era verdad. Aunque solo era prima de mi padre, mi madre y ella eran muy amigas. Anos atras cuando mi padre, en dos ocasiones, tuvo que pasar algun tiempo en Madrid para cursos de ascenso en su carrera militar, fuimos a vivir los cuatro en la casa de la calle de Velazquez donde los tios tenian sitio de sobra. Al salir de la oficina fui en busca de un puesto de flores que habia cerca y compre un ramo de rosas pequenas que olian un poco a tabaco pero no habia mucho donde elegir. Llegue con mi ramo a casa de los tios que me recibieron como si no hubiera pasado tiempo desde aquellos anos de la infancia. Lo primero que me dijo tia Flora: "Me ha dicho tu madre que tienes novio. ?Cuando lo vamos a conocer?". --Novio, no. Salgo con un chico pero es algo como empezando, sabes. No se si resultara. Lo que si sabia, que Francis no queria nada con mi familia ni mis amigos. Me queria a mi pero lo nuestro tenia que ser super reservado. --Bueno, rica, todavia es pronto. Pero como no has venido a esta casa. Estariamos encantados de tenerte, ?verdad, Bernardo? --Verdad, verdad. Ya estuviste aqui de pequenita. ?O es que no te acuerdas? Tio Bernardo tenia mucho pelo muy blanco, la cara rosada, los ojos claros acuosos, un poco abultados. Siempre iba vestido con trajes muy formales de tres piezas, camisas invariablemente blancas con gemelos y corbatas a rayas. --?Como no me voy a acordar, tio? Y todos los recuerdos que tengo de vosotros son estupendos. Era verdad, pero solo en parte. Me gustaba la casa, los tios eran muy carinosos con nosotros --no tenian hijos-- y habia una cocinera bastante vieja, Virtudes, que nos hacia platos especiales. Macarena y yo comiamos en el office, lo que preferiamos con mucho al comedor y las personas mayores, sopa de panecillos, natillas, croquetas… menus hechos solo para nosotras. Por otro lado yo notaba una incomodidad: la sensacion de que no era nuestra casa, mis padres no mandaban alli, eran solo invitados. Una situacion desacostumbrada que no sabiamos manejar. Pero lo peor era mi madre, llena de emulacion por la vida de tia Flora, sus muebles y cuadros, sus muchos amigos, la manera de hablar y de vestirse… no se en que consistia exactamente pero dona Juanita parecia una provinciana algo cateta, queriendo aparentar lo que yo en el fondo bien sabia que no era, queriendo alcanzar donde yo sabia bien que no llegaba. En aquella epoca ni siquiera hubiera podido decirlo con palabras pero estaba ahi, una inexpresable angustia. Verguenza ajena, a la que algunos crios son propensos. Hoy, sencillamente me diria a mi misma: "es una cateta, snob como todas las catetas", y ya esta. --Se lo dije a tu madre, que te vinieras --siguio la tia-- y me dijo que querrias libertad para salir con tu novio, aunque aqui libertad la tendrias toda… y la llave del piso, ademas. Con su edad, cuatro o cinco anos menor que mi madre, no podia decirle que mas que salir con mi novio era cuestion de entrar. La mire con carino: habia tenido muy buen tipo y un bonito pelo rubio, aunque de cara no era guapa. Aun se conservaba joven, y se vestia siempre muy elegante, pero todas aquellas cosas de la juventud y enamoramientos seguramente se le habrian olvidado… y, mirando al tio, era lo mejor que le podia pasar. Demasiado tranquilo casi seguro. --Erais dos chiquitas muy guapas --dijo el tio Bernardo, reminiscente-- Muy distintas. Una morenita y menuda y la otra tan rubia con aquellos rizos y los ojazos azules… una verdadera Marylin Monroe en miniatura. Aunque luego… Ni siquiera suspire, estaba acostumbrada a aquella clase de comentario. Mi madre era rubia con ojos muy azules; Macarena le habia salido a ella, en mejor. Mas alta y mas 'neumatica', con pinta voluptuosa que nunca supe si respondia a una condicion real o era solo el aspecto. El tio, quiza pensando que me habia hecho de menos, seguia. --Pero tu eres mas distinguida, tu tienes clase. Castana y delgada, mucho mas elegante, y tu nariz es perfecta. Quise decirle "los chicos me hablan bien de mis piernas, pero no me han dicho nada de la nariz." La verdad, mis facciones no tienen nada llamativo, estoy un poco delgada de mas para gustar, al menos en Sevilla, y se que tengo cosas a mi favor: buen pelo brillante, buenos dientes, buen cutis y buenas piernas. Para el gusto-de-hombre al lado de mi hermana no tenia nada que hacer. Pero a Francis le gustaba, asi que no estaria tan mal. La nina que cuida de los tios, una filipina tan flaca como yo pero con quince centimetros menos, se llevo las flores y trajo una bandeja del te con bollitos calientes hechos en casa. Nos habiamos sentado en la sala atiborrada de muebles y adornos y, despues de la puesta al dia sobre la familia, que no tardo mucho porque habian venido a la boda de mi hermana poco antes, les conte mi problema. Inmediatamente me volvieron a decir que me fuera a vivir con ellos. --Muchisimas gracias, de verdad os lo agradezco pero me conviene comprar. Tengo una cuenta de ahorro para vivienda y debo emplearla y… puedo hacerlo. La cosa es que no encuentro nada que acabe de gustarme. --?A que agencias has ido? --pregunto la tia Flora. Habia ido a un par de ellas que vi en el periodico. La tia dijo que eso no era arreglo; las casas mejores casi nunca llegaban a estar en los anuncios. Su amiga Nosecuantas tenia una nuera que tenia una hermana que, a su vez, tenia una agencia con otras amigas. Trabajaban muchisimo porque conocian a la mar de gente. Estaban muy bien relacionadas. Dichosas ellas, pense. Y dije: "?No te importaria preguntar a tu amiga?". El mejor favor es el que se hace mas rapido. Al minuto tia Flora estaba hablando por telefono en plan eficiente. "A ver si le encuentran a esta nina una cosa en condiciones… que es mi sobrina. Si, ya se que se lo tomaran con el mayor interes. Muy bien, que la llamen aqui, se va a quedar todavia bastante rato. Entonces esperamos la llamada. Un abrazo muy fuerte… si, tenemos que vernos. No, no, gracias a ti por ocuparte." Volvia a su butaca con la satisfaccion del deber cumplido. --Ya veras como estas te solucionan el problema. --Ojala. Estoy aburrida de buscar. Y me han ensenado cada asco… Es una perdida de tiempo. --Espera y veras. Ya te he dicho que estas conocen a todo el mundo. Decia 'todo el mundo' con la misma entonacion que mi madre, por lo demas no se parecian en nada. El tio Bernardo hablaba de inversiones y lo que deberia pagar por metro cuadrado mientras yo asentia a todo, pensando que algunos metros cuadrados eran mucho mas metrocuadrados que otros. Antes de quince minutos me habia telefoneado una de las cuatro socias, Margarita. Hablaba muy deprisa y era simpatica; me cito al dia siguiente por la tarde en su diminuta oficina en un bajo de la calle Serrano. Alli conoci a las cuatro primeras que trabajaban con otras cinco o seis agencias formadas por otros tantos grupos de senoras como ellas, bien vestidas, visiblemente ricas y mundanas. Ninguna parecia necesitar aquel trabajo. Margarita, la que me habia llamado, era muy guapa, morena, menudita; llevaba un traje de chaqueta color de rosa que casi me deja sin respirar. Con aire eficaz, me aseguro que encontrariamos algo conveniente aunque no veia que yo tuviera mi criterio formado. Todas eran amigas, me dijo. Se comunicaban posibles negocios y se repartian las comisiones con arreglo a un baremo complicado que nunca se saltaban y les funcionaba de maravilla. En los dias siguientes me fueron presentando a las demas, unas y otras se volcaron conmigo, no sabria explicarme por que. Tal vez se volcaran con todo el mundo. Todas tenian Audis o Mercedes, todas eran jovenes aunque mayores que yo, trabajaban sin parar, todas llevaban telefonos moviles con los que hablaban constantemente, organizando visitas y entrevistas… o hasta daban ordenes a personas a su servicio. Todas debian de tener montones de dinero pero llevaban unas vidas mas aperreadas que la mia. La verdad es que ellas se fascinaban por las casas; formaban una raza aparte, de la cual yo no habia conocido antes a ningun ejemplar. Su interes por las casas no bajaba nunca. A veces, si yo iba a ver un piso, por ejemplo, con Sofia, Margarita o Misi se apuntaban: "Ah, yo tambien voy porque ese no lo he visto. No te importa, ?verdad?". Eran geniales. Al principio me sentia apabullada con mi presupuesto pobreton y los conjuntos nuevos de Zara que me habia comprado para quedar bien en la oficina, (con los que hasta entonces me habia encontrado tan mona), frente a sus coches, sus Armanis, sus Pradas, sus Max Maras, sus Valentinos, sus Donna Karanes, Antonios Pernas y demas. Cuando me hice amiga de Misi gane confianza en mi misma, me volvi a sentir comoda. Eso si, me prometi secretamente asomarme por las tiendas de la calle Serrano cuando estuvieran las rebajas. No supe si las socias habian decidido que Misi se encargara de mi o si lo decidimos nosotras; la verdad es que se dedico a solucionarme el problema. Dijo que no me preocupara porque encontrariamos. Casi todos los dias a una hora o a otra me llevaba a ver algo y las mananas de los sabados siempre teniamos varias visitas en perspectiva. Con todas estas cosas llegamos a aquella manana en que me dijo que no sabia pedir la luna. --Mira, Constanza, este asunto lo vamos a tener que enfocar de otra manera. Tu trabajo esta en Alcala, ?no? ?A que altura? --Al lado de la Plaza de la Independencia. Es un piso alquilado en un edificio muy bueno. Llevan anos alli. --Vamos a centrarnos en los alrededores de tu oficina. Por lo menos lo mas cerca posible. No tienes coche, ?verdad? --Tengo, en Sevilla. No me lo he querido traer hasta ver si me manejo en Madrid… No se, a lo mejor le digo a mi padre que me lo venda. Me pregunte cuanto tiempo pasaria antes de que Macarena se apropiara de mi Ibiza amarillo. Quiza me lo habia cogido ya. Lo mejor iba a ser venderlo. --Pero --segui diciendo-- mi novio prefiere que no compre ni en el barrio de Salamanca ni en la zona de Zurbano, Paseo del Cisne, Fortuny y todo eso. --Pero ?por que demonios? ?Porque son zonas caras? ?Y el quien es para decirte donde tienes que comprar? O es que te va a dar el dinero… ?Vais a comprar a medias? Yo creo que es muy mala cosa…. Demasiadas preguntas. Era logico que no entendiera nada. A aquellas alturas ya tenia bastante confianza para decirle la verdad. --Mira, no digas ni media palabra de esto a nadie, por favor. Es que… es que esta casado. Ahi grito. "!?CASADO?! !Por favor! !No me lo puedo creer!" --Pues si y, claro, no quiere que compre el piso ni cerca de donde vive el ni cerca de su trabajo. ?Por que no te lo puedes creer? --Hija, es que no te pega. Eres joven, eres muy mona, tienes un buen trabajo, una buena educacion y una vida agradable. No entiendo que te enredes con un casado. Como si no hubiera chicos de tu edad estupendos y libres… --Pues asi son las cosas. --No, asi no son las cosas, asi las has puesto tu. Pero pueden cambiar y espero que cambien. Eso no es decente, creeme, y tu tambien lo sabes. Me habia deprimido de repente. La silla del bar, de plastico, se me pegaba al cuerpo, la cerveza me habia dejado en la boca un sabor amargo. Era uno de esos dias madrilenos en que no sabes como vestirte; por la manana sales con frio y al mediodia te asas de calor. Misi con un jersey muy fino de color azul porcelana haciendo dibujos se veia tan fresca y planchada como si acabara de salir de una caja atada con un lazo. En la mesa de al lado una pareja ventilaba a gritos sus diferencias, molesta discusion, a base de 'tu has vuelto conmigo porque Veronica te echo de su casa'. La gente que pasaba por Alonso Martinez me parecio feosa, cansada y de mal humor. Suspire; Misi se dio cuenta. --No te preocupes, que encontraremos un buen sitio. Pero vas a pensar primero en ti y en lo que te conviene a ti. Los novios van y vienen. --Si, puede ser… No se… El corazon se me hacia piedra de pensar que Francis se fuera de mi vida… no podia. En parte por el habia dado el paso definitivo de venirme a Madrid y cambiar por completo mis costumbres. --Mira, yo tengo que ir a mi casa ahora sin mas remedio. Pero si quieres a las cuatro nos vemos en la oficina. Estaremos solas y tendremos tiempo y tranquilidad para mirar ficheros. Lleva el cuaderno verde. En un cuaderno apuntaba los pisos que habia visto. Quedamos asi y nos fuimos cada una por su lado hasta las cuatro. Yo no tenia donde ir ni nadie a quien hablar. Miriam, la companera del trabajo con quien compartia despacho, dedicaba sabados y domingos a su novio o sus padres. A comer no podia presentarme en casa de los tios sin avisar, me daba apuro. Camine despacio por la calle Genova para subir por Goya a Serrrano. Al menos tendria la distraccion de mirar tiendas. No podia llamar a Francis el fin de semana, estaba prohibido. Ni siquiera tenia el telefono de su casa sino un movil al que solo podia recurrir en horas de trabajo, si fuera absolutamente imprescindible. Me pesaban las palabras de Misi, estaba claro que me censuraba y ella no era ninguna estrecha. Vivia con su novio pero era viuda y el soltero. Sabia por conversaciones anteriores que habia estado doce o trece anos casada, hasta que su marido se mato en un accidente de automovil. Despues paso algun tiempo sin nadie y con este novio, que se habia ido a vivir a su casa, llevaba dos anos o algo asi. A veces, me dijo, estaba un poco harta. Yo le habia preguntado si pensaba casarse. "No tengo ningunas ganas", me habia respondido. "No lo veo. Fuera por el ya nos habriamos casado pero no me decido. No se si puede ser el hombre de mi vida, le falta… fundamento… Para mala experiencia ya tuve una". Aquel dia me rei, diciendo que tener un voluntario para el matrimonio, tal y como estaban las cosas, me parecia genial. Pero eso de no saber si era el hombre de su vida lo decia como esperando que no lo fuera, que hubiera otro, el autentico. Suspire: unos tanto y otros tan poco. Yo lo unico que queria era casarme con Francis… o, mas honradamente, que Francis estuviera libre. Cruzando el lateral de la Castellana un coche me pito iracundo, casi me atropella. Un senor bien vestido me regano: "Nina, pero como anda usted tan distraida, no se da cuenta del peligro". Que fino, llamandome de usted. Me empareje con el para cruzar el subterraneo que no me gustaba nada. Nunca pasaba por debajo de la calzada si podia ir por encima, de no haber andado despistada habria subido por la Castellana hasta un cruce.

  • El dia en que Goliat vencio a David de A. M. Vozmediano

    https://gigalibros.com/el-dia-en-que-goliat-vencio-a-david.html

    Madrid, 1987. Luz es una adolescente del monton. Un poco friki, quiza, pero del monton. O eso piensa ella. No es brillante, no es atractiva, no destaca en los estudios y no tiene demasiados amigos. Ni siquiera tiene detras un drama familiar digno de mencion. Su unico rasgo distintivo es su ojo albino, pero prefiere taparselo con el pelo para que los demas no se burlen.

  • Se hace tarde y anochece de Cardenal Robert Sarah

    https://gigalibros.com/se-hace-tarde-y-anochece.html

    “En la raiz de la quiebra de Occidente hay una crisis cultural e identitaria. Occidente ya no sabe quien es, porque ya no sabe ni quiere saber que lo ha configurado, que lo ha constituido tal y como ha sido y tal y como es. Hoy muchos paises ignoran su historia. Esta autoasfixia conduce de forma natural a una decadencia que abre el camino a nuevas civilizaciones barbaras”. Esta afirmacion del cardenal Robert Sarah resume el proposito del tercer libro de entrevistas con Nicolas Diat, la profunda crisis espiritual, moral y politica del mundo contemporaneo: crisis de la fe y de la Iglesia, declive de Occidente, traicion de sus elites, relativismo moral, globalizacion sin limites, capitalismo desenfrenado, nuevas ideologias, agotamiento politico, entre otros.

  • La botella de la etiqueta roja de Carlos Lloret Sirerol

    https://gigalibros.com/la-botella-de-la-etiqueta-roja.html

    Adrian “Adry” Rodriguez es un chico timido que, contando tan solo con la compania de dos amigos, detenta acrecentar su status social dentro de su clase, y esta dispuesto a hacer cualquier cosa para lograr su objetivo. Empecinado en llevar a termino exitosamente sus anhelos de ascender en una jerarquia que lo ha relegado al ultimo de sus estratos, encontrara su esperadisima oportunidad en el aniversario Maria Sendra, la chica mas guapa y deseada de su populosa clase. Siendo asi, emprendera su viaje en busca de una mejora de la aceptacion que le prodigan sus renuentes companeros.

  • La mentira os hara libres de Fernando Vallespin

    https://gigalibros.com/la-mentira-os-hara-libres.html

    Como decia D'Israeli, la politica es el <>.En efecto, el espacio de lo politico se ha visto siempre como una esfera especialmente propicia para la mendacidad, la hipocresia y la simulacion.Y, sin embargo, los politicos de hoy apenas necesitan recurrir a la mentira. ?Para que hacerlo si es posible enganar por otros medios? Entre estos el mas eficaz es la construccion de la realidad a la medida de sus intereses. Han adquirido autentica maestria en el arte del enmascaramiento detras de marcos, narrativas u otros instrumentos dirigidos a manipular la percepcion del mundo. Sobre todo en unos momentos en los que necesitan encubrir su impotencia frente a los dictados de la economia detras de todo tipo de estratagemas. Su objetivo es convencernos de que son algo mas que meros gestores de un sistema economico sobre el que han perdido toda capacidad de iniciativa, impedir que veamos que la democracia ha devenido ya casi en un mero simulacro, y reafirmarnos en la idea de que ellos <>.Los ciudadanos, ante un mundo huerfanoya de una realidad objetiva que sirva de referente comun frente al cual contrastar nuestras opiniones, y en ausencia de eficaces medios de argumentacionpublica, nos mostramos encantados antela posibilidad de pronunciarnos liberrimamentesobre casi todo.

  • Un maestro de las sensaciones de Andres Ibanez

    https://gigalibros.com/un-maestro-de-las-sensaciones.html

    Hay un hombre en un cafe que se dedica a interpretar las sensaciones. La gente se acerca a el y le cuentan las que han tenido, cosmicas o banales, cotidianas o intrigantes, y el, el Maestro de las Sensaciones, les revela lo que significan. En esta coleccion hay cuentos largos y cuentos muy breves, cuentos fantasticos y cuentos realistas. Ninguno es similar al siguiente, no solo por los temas, sino tambien por el estilo narrativo y el genero.

  • Mi chica golosa de Ruben C. O

    https://gigalibros.com/mi-chica-golosa.html

    Mi pequeno mini Cooper del 2010 se veia realmente pequeno en la entrada de la casa de los Johnson's. Deteniendome por completo, exhale un suspiro de alivio. Lo habia logrado. Mi auto no se habia descompuesto (y eso si que era un logro). Mi auto era mi orgullo, junte dinero y cuando me gradue, mis padres me aportaron el resto, para mi pequeno auto usado, sin embargo, ya llevo tres anos con el y a estas alturas ya no me acompana como en un principio, y no es su culpa, simplemente ya esta viejo. Estaba juntando dinero para otro auto y esperaba poder salir a tiempo de la universidad para comenzar a ganar dinero en grande, bueno al menos para una vida tranquila con un auto decente. Aun asi, le daba las gracias a mi autito por haber resistido hasta aca, ya habia llegado a mi cita de trabajo y estaba justo a tiempo. Hace casi un ano que no era ninera en la casa de los Johnson's, y el dinero definitivamente seria util, ya en mi tercer ano de universidad costear los materiales y utiles se hacia un poco pesado para mi familia, y me hacia bien ahorrar para costear mis propias cosas. Pero mientras tomaba mi cartera del asiento de atras y me acomodaba para salir del auto, se me escapo otro suspiro porque probablemente el camino de entrada no era la palabra adecuada para describir el camino de ripio que debia seguir para llegar a la puerta principal. El sitio de los Johnson era hermoso y grande, tenian una gran rotonda circular, del tipo que se podria imaginar, un ejercito de caballos y carruajes tirando hacia arriba, con un mayordomo que responde a la puerta, con los labios rigidos y una bandeja de bebidas. Y ademas de la enorme mansion de piedra, habia un vasto jardin, ademas de una piscina infinita que se podia ver a la vuelta de la esquina, el agua tranquila y suave en la luz de invierno todo eso, antes de la puerta de la casa. Asi que si, los Johnson's vivian como reyes. Y a pesar de que tecnicamente eramos vecinos de la misma comunidad privada, mis padres estaban en la parte mas modesta, con casas medianas y patios pequenos, mientras que mis empleadores vivian en la colina en la extravagante seccion de millonarios. Pero eso no me importaba realmente, mi vida la estaba forjando recien, nada de lo que mis padres lograron es lo que marcaria mi futuro, sino que yo misma debia encontrar mi propio camino, asi que estaba aqui, por dos razones, por un trabajo que me diera dinero y tambien por la pequena Vania que era la cosa mas linda, una bola de entusiasmo con piernitas. Habia cuidado a Vania desde que era una recien nacida, sentia un carino especial por ella, este ultimo ano en la universidad me habia demandado mucho tiempo, y los Johnson's no habian solicitado mis servicios cuando yo estaba disponible, asi que ahora no podia esperar a verla otra vez, no podia imaginar cuanto habia crecido, y cuanta belleza habia ganado, ella era solo una bebita pero era encantadora, esos rizos color lino y sus redondos ojos azules de bebe que podrian derretir el corazon de cualquiera. Incluso cuando estaba en sus momentos de rabieta, la pequena rubia todavia era adorable, un pequeno torbellino de energia que podia hacer sonreir a cualquier adulto y suspirar con exasperacion a la vez. Asi que, apague el motor, arregle mis cosas por ultima vez y sali de mi automovil maltratado antes de subir con cuidado los infinitos escalones para tocar la puerta grande de entrada. Hace solo unos anos atras, habria subido los escalones de prisa, atletica y delgada como un latigo. Pero he cambiado en este ultimo tiempo, creo que mi desarrollo fue muy tardio, habia crecido en altura, pero mis senos y caderas eran casi inexistentes, sin embargo, despues de los dieciseis anos mi cuerpo comenzo una etapa distinta y donde solia ser larguirucha y delgada, fui formando curvas, mis senos y caderas tenian mas carne y ahora que soy una mujer adulta, el peso que he ganado me hace sentir mas pesada cuando se trata de ejercicios como este. No tenia como quejarme, no era gorda, solo era mas robusta de lo que estaba acostumbra a manejar, quizas muchas chicas deseaban un cuerpo delgado, pero ahora tenia lo mio, y me sentia a gusto con mi nueva version. Aunque cuando se trataba de escaleras habia demasiado rebote y carne que controlar, demasiado peso blando al que no estaba del todo acostumbrada. Asi que camine como una dama, moviendo las caderas, tratando de mantener las cosas en su lugar. Cuando por fin estuve arriba el silencio total me saludo despues de tocar el timbre. Raro, comunmente habia gente en la casa, personal de aseo, jardinero, o la senora Johnson ponia musica para pasearse por la casa. Despues de otro minuto, volvi a llamar al timbre. ?Tal vez estaban todos arriba y no podian oir? De pronto sonaron algunos ruidos, algunos baches, y finalmente se abrio la puerta, revelando al Sr. Johnson. Sonrei timidamente, tratando de no mostrar mi nerviosismo porque el Sr. Johnson siempre habia sido magnifico y esta vez no era una excepcion. El hombre no era viejo, pero era mayor que yo obviamente, era corpulento y misterioso, llenando la entrada, haciendome sentir positivamente pequena, del tamano de una taza de te. Por supuesto que siempre lo habia notado, pero verlo de nuevo solo confirmaba su esplendor, era realmente candente. Cabello color carbon y ojos azules tan intensos que me encendian con su mirada. Ademas, tenia un cuerpo para morirse, nada de cosas flacidas de papa cervecero. Los hombros anchos se estrechaban en una cintura fina, con piernas largas y poderosas vestidas con pantalones de tela. "Oh, hola Mai", retumbo. "Lo siento, estabamos un poco… !Vania, detente!" Grito hacia atras al oir un ruido. Y mientras estabamos alli, un estruendo sono en el piso de arriba como cuando cae algo al suelo, era un plastico, por el sonido podia imaginar a Vania sacando algo del mueble de los juguetes y sin querer boto algo mas, y el senor Johnson hizo una mueca con sus labios y cerro los ojos. "Entra, entra", dijo, exasperado, respiro profundamente y continuo "Ha sido un largo dia". Y a pesar de que mi corazon latia en su cercania, me obligue a sonreir y entre al vestibulo. Esto, definitivamente lo recordaba. El espacio era enorme, todos los pisos de marmol con una lampara de arana gigante colgando sobre nuestras cabezas. "?Donde esta Vania?", Le pregunte tentativamente, tratando de parecer indiferente. El Sr. Johnson suspiro profundamente. Ahora que lo podia ver con mas detencion, estaba mas viejo en sus facciones, habia corchetes alrededor de sus profundos ojos azules que no habian estado alli antes y sus lineas de risa eran un poco mas prominentes. Debe ser cansancio por su trabajo, sabia que trabajaba en algo relacionado con las finanzas, y muchas veces debia abordar aviones y hacer viajes tarde, y volver al siguiente dia para continuar con las cosas aqui. "Vania", grito de nuevo, con una mano en la barandilla. "Baja, por favor, tu persona favorita esta aqui". Y el sonido de unos pequenos pasos sono antes de que un pequeno bulto rubio se precipitara por las escaleras hacia mis brazos. "Mai, Mai", grito la nina de cinco anos. "!Estas aqui!" La nina era muy carinosa. A pesar de ser un dia regular y no un dia de fiesta, lucia un vestido de bailarina purpura, completo con un tutu rigido y una corona reluciente en la cabeza. Tan linda como siempre, y mas grande como lo pense. "Hola carino", dije alegremente. "Me gusta tu ropa. ?Estabas jugando a la princesa arriba?" Vania se echo hacia atras por un momento y vi que su cara regordeta estaba surcada de lagrimas y los ojos rojos por el llanto. "?Estas bien carino?", Le pregunte, esta vez con mas suavidad. "?Vino la malvada bruja?", asumi que por alguna razon habia estado llorando, verla hizo que se me apretara el estomago, no me gustaba ver llorar a los ninos. Ella asintio en silencio, sus ojos azules mirandome con ligeras manchas de chocolate alrededor de su boca. Pero eso estaba bien, los ninos se ensucian muy facilmente y podria arreglarse con un pano tibio, no habia problema. Pero habia algo diferente en el aspecto de Vania, que no era mi imaginacion. Al igual que su padre, parecia agotada, lo cual no estaba bien para una nina de cinco anos. Los ninos se cansan, claro, pero se duermen de inmediato y se despiertan completamente renovados, cada dia es un nuevo dia para ellos. Asi que me preocupe, aunque intente no mostrarlo. Murmurando de manera tranquila, dije, "Vania, te preparare la cena, te limpiare y luego nos prepararemos para ir a la cama ?de acuerdo?" Pero la pequena nina grito entonces, pateando y sacudiendo violentamente sus piernas contra mi. "Oof!" El aliento salio de mi estomago, sus zapatos de charol golpeando dolorosamente contra mis caderas. "!Ay!" Entonces, el Sr. Johnson intervino, sacando a su hija de mi cuerpo y apretandola contra su gran figura. "Lo siento, hemos estado teniendo problemas recientemente, ya sabes, con Romina mudandose y todo". Me detuve en seco antes de recuperarme e intentar parecer normal. ?La senora Johnson se habia mudado? ?Que? ?Cuando? ?Por que mis padres no me lo habian dicho? Y el Sr. Johnson asintio de nuevo, notando mi expresion de incertidumbre. "Romina se mudo hace un par de meses", dijo con voz ronca, "y ha sido duro para Vania. Ella no ha estado durmiendo bien, ha hecho berrinches por cualquier cosa, todo el dia. Entonces, si puedes manejarla esta noche, seria un milagro". Sonrei tentativamente. "Estoy segura de que estaremos bien", le dije de manera tranquilizadora mientras mi mente giraba en miles de pensamientos. "Quedese tranquilo Sr. Johnson, manejare de la mejor forma todo aqui. Y... lamento mucho lo que me comenta", Intente no ser grosera, ni inoportuna, pero en realidad sentia un pesar por lo que me dijo. Dios mio, la pobre pequena. Su madre se habia ido y ahora estaba respondiendo al cambio. Diablos, cualquier nino haria lo mismo, incluso si Romina Johnson apenas habia estado presente en la vida de su hija. La mayoria de los dias, por lo que pude ver cuando estuve aqui, la mujer no se levantaba antes del mediodia y habia dejado la mayor parte del cuidado de Vania a una ninera que hacia todo, la alimentaba, banaba y jugaba.

  • ?Todavia suenas conmigo? (Destino 1) de Lina Galan

    https://gigalibros.com/todavia-suenas-conmigo-destino-1.html

    Mario, rico y atractivo empresario. Su tipo de vida no admite relaciones largas ni estables. Incontables mujeres pasan por su vida atraidas por el y el misterio que parece envolverle.

  • Montenegro (Cienfuegos 4) de Alberto Vazquez-figueroa

    https://gigalibros.com/montenegro-cienfuegos-4.html

    La cuarta entrega de la apasionante saga Cienfuegos.

  • Carvalho. Problemas de identidad de Carlos Zanon

    https://gigalibros.com/carvalho-problemas-de-identidad.html

    Sin saber bien como ni por que, Carvalho anda desgarrado entre Barcelona y Madrid. En Barcelona le quedan los restos de su tribu y el despacho en el que sigue trabajando. En Madrid anda perdido en el laberinto de una mujer casada con un prohombre de la politica nacional, y que le ha desestabilizado mas de lo que consiguio nadie antes. Quiza se esta haciendo viejo o le asaltan -como al propio pais- problemas de identidad a todos los niveles: ?quien eres, Carvalho?, ?que quieres?, ?que buscas? Estamos en 2017 y las placas tectonicas de la sociedad parecen moverse de un modo inedito. Los problemas de siempre, la desaparicion de una prostituta o una vieja amiga que acude en busca de ayuda por un sangriento crimen familiar. En lo personal, la complicidad con Biscuter pasa por horas bajas, y su salud no es la mejor noticia del momento.

  • Por ley superior de Giorgio Fontana

    https://gigalibros.com/por-ley-superior.html

    Roberto Doni tiene mas de sesenta anos y es fiscal en Milan: serio, formal, inaccesible, su vida transcurre con total normalidad junto a una mujer inteligente y, de vez en cuando, se preocupa porque su hija haya decidido llevar su vida con total independencia. Sin embargo, esa cotidianidad empezara a resquebrajarse cuando se llame a declarar a un albanil tunecino acusado de cometer un crimen en la Via Padova que ha puesto en alerta a los medios de comunicacion. A pesar de que el acusado esta preparado para declararse culpable, una joven periodista acude a Doni para decirle que pida la absolucion del albanil, puesto que cree en su inocencia y, ademas, cree que puede demostrarla. Esta aparicion hara que Doni empiece a cuestionarse el funcionamiento de la justicia y la sociedad: parece que para todo el mundo es mucho mas facil creer que el albanil es, en efecto, el culpable del crimen, y la busqueda de la verdad, a veces, resulta demasiado incomoda. Giorgio Fontana ha escrito una emocionante novela en la que un dilema etico da paso a una reflexion existencial y social del estamento de la justicia y de sus responsabilidades.

  • Irresistible 4 de Robyn Hill

    https://gigalibros.com/irresistible-4.html

    Su cadera se contoneaba de una forma febril, salvaje, provocando en mi cuerpo un estado de continua excitacion. El cuerpo de aquella mujer era fantastico: unas piernas bien torneadas, unos pechos generosos que a duras penas lograba contener el bikini de lentejuelas, y un ombligo muy sexy. Su flexibilidad no dejaba de asombrarme. Tan pronto se sentaba sobre mi regazo, como se levantaba para girarse y ensenarme su trasero; todo en movimientos elegantes y energicos. Trague saliva. Era dificil no caer en la tentacion ante aquel despliegue exuberante y erotico. Su melena pelirroja no cesaba de moverse sobre sus hombros, o sobre su espalda cuando echaba la cabeza hacia atras. A lo lejos sonaba la musica, creando una burbuja de espacio y tiempo en el que ambos nos encontrabamos muy comodos. Ella dominaba la situacion al ser una profesional, mientras que yo era testigo de su maravilloso talento para la seduccion y el baile. Sin darme tiempo a reaccionar, me coloco sus pechos sobre mi cara hasta el punto de imposibilitarme la respiracion. ?Como me ha dicho que se llama?, me pregunte. Debido a la masiva ingesta de alcohol, mi memoria habia menguado a un cincuenta por cien de su capacidad. Se giro de nuevo al son de la musica para que observase su espalda, y como se desabrochaba la parte de arriba al tiempo que me lanzaba una mirada coqueta. La prenda cayo al suelo, pero mis ojos esperaban el excitante momento de ser colmados con la vision explosiva de sus pechos. Senti la ereccion incomodandome en mis calzoncillos, pero estaba concenciado a no airear el pene de su madriguera. Por eso una parte de mi, para enfriarme, busco el recuerdo de personas u objetos nada sexuales, como una abuela o un billete de autobus. Nada de eso sirvio, aquella chica sabia bien la reaccion que causaba en los hombres. Por fin, sus pechos quedaron a la vista y no pude mas que reconocer su perfeccion. El detalle del piercing en los pezones resultaba provocador, por lo que sacudi la cabeza para que evitar que los malos pensamientos me invadieran por completo. El numero acabo con su pierna por encima de mi cabeza, muy cerca de su tanga de lentejuelas. Haciendo gala de su celebre flexibilidad, me beso la mejilla. --Eres guapo. Si quieres fiesta, te espero en la habitacion de alli --dijo senalando con la cabeza. Asenti, aun abrumado por el exuberante espectaculo. La chica recogio el bikini y desaparecio ante la atenta mirada de Lou, David y la mia, por supuesto. --Lo pagareis caro, malditos --dije mirando a mis amigos. La fama de las fiestas de despedida de soltero son legendarias, pero ellos me habian prometido que las strippers se mantendrian al margen. Desde la irrupcion de Amanda en mi vida, el deseo por otras mujeres habia desaparecido. Ella me llenaba de arriba a abajo. No necesitaba a nadie mas. --No sera para tanto, Eric --dijo Lou, entregandome una copa de whisky y sentandose a mi lado. --Ademas, una ereccion no cuenta como infidelidad --dijo David, sonriendo mientras se palpaba su entrepierna. --?La tuya o la mia? --pregunte. --La de los dos. Sera mejor que nadie diga ni una sola palabra --dijo David mirando a Lou. --Sere una tumba. Os lo prometo. Ademas, manana con la reseca se me habra olvidado todo --dijo Lou despues de tomar un trago de su copa. --Entonces lo de pasar a la habitacion con ella, ni hablar --dijo David. Los tres nos miramos sin decirnos nada durante unos segundos. A continuacion, estallamos en una carcajada al unisono. Confieso que estaba disfrutando mucho mas de lo que pensaba, y eso era asi porque me sentia arropado por la amistad de Lou y David. Los tres formabamos un trio de lo mas pintoresco: un frances a punto de casarse, un americano ya casado, y otro empezando una relacion. --Me parece que es hora de regresar a casa --dije mirando mi reloj, que marcaba las dos de la madrugada. --Ni hablar --dijo Lou negando con la cabeza. --?Te has vuelto loco? --pregunto David con los ojos bien abiertos--. Aun queda mucha noche. --?Que mas teneis planeado? --pregunte alzando las manos en senal de rendicion. Lou y David se miraron, encogiendose de hombros. --?Nada mas? --pregunte--. Entonces, vamonos a casa que ya echo de menos a mi futura mujer... --Tu lo que pasa es que estas cachondo --dijo Lou, soltandome un codazo. --La verdad es que si --dije, riendo--. Ademas, tampoco hay ningun plan. --Eric, esto es Las Vegas, algo sucedera. Llevas el tiempo suficiente para saber que cualquier cosa puede pasar... --Oh, vamos, no sera para tanto... En ese momento entro en la habitacion una chica de cuerpo escultural. Llevaba el pelo muy corto, casi rapado al cero. De su nariz colgaban unos flamantes piercings y sus brazos estaban tatuados al completo. --Hola, chicos. Me llamo Sally y necesito testigos para mi boda, ?os apuntais? Me quede de piedra mientras David y Lou me lanzaban miradas como diciendo <>. *** Los cuatro nos montamos en una limusina que nos esperaba a la salida del club. Sally nos presento a su prometido, un tipo gordito con cara de buena persona y vestido de Elvis, el cual nos saludo efusivamente. --Gracias, chicos, por hacernos este favor. Sally y yo nos acabamos de conocer, ?no es fantastico? --?Esta noche? !Enhorabuena! --exclame sorprendido por la locura, aunque cada vez menos, ya que desde que habia llegado a Estados Unidos me habia pasado de todo. --Es tan romantico... --dijo Sally, mirando tiernamente a su prometido. Ambos se besaron con pasion, sobandose el cuerpo del otro, ignorando nuestra presencia. --Nos pone que haya gente mirandonos --dijo Elvis, a modo de excusa. --Oh, estupendo --dijo Lou mirando fijamente--. Por nosotros, no os corteis. --Estais hecho el uno para el otro, no hay duda --dijo David, ironico. Mientras los novios no dejaban de saciarse carnalmente, me incline sobre el minibar y empece a servir copas a mis amigos. Los tres brindamos por la boda de Elvis y Sally, y nos bebimos el vodka de un sorbo. La cabeza empezaba a darme vueltas. Me costaba recordar la ultima vez que me habia emborrachado. --?Esta bien? --me pregunto Lou. --Si, si --dije con una sonrisa. --!Por cierto, os regalo unos puros! --exclamo Elvis de repente, deshaciendo el beso con su prometida. Del bolsillo interior de su chaqueta blanca y con flecos, saco tres puros que repartio a cada uno de nosotros. --Vaya, que nivel, es un Monte Cristo numero 4 --dije oliendo el aroma intenso del tabaco--. El puro mas famoso del mundo, y cubano. Elvis saco de otro bolsillo un cortador de puros y un encendedor. Procedio a cortar la vitola y, finalmente, para los encendio con solemnidad. --?Se puede fumar aqui? --pregunte. --No, pero un dia es un dia --dijo Elvis con una amplia sonrisa. David y yo aspiramos el suave aroma del tabaco, mientras que Lou tosio un par de veces. Al parecer, no estaba acostumbrado a fumar. Enseguida el humo se apodero de la atmosfera de la limusina como si fuera una niebla. Por suerte, llegamos a nuestro destino a los pocos minutos. Estaba deseoso de participar en una de esas boda rapidas y locas de las que tanto se describen en las peliculas de Hollywood. Cuando nos apeamos de la limusina, me fije en un letrero luminoso que decia "Capilla Viva Las Vegas". Nos encontrabamos aun El Strip, pero en la zona alejada de los casinos. En la puerta se encontraba un Cadillac adornado con flores y cintas blancas. Una pareja de recien casados salio de la capilla y, tras despedirse de los invitados, se subio al coche y se marcharon ante mi estupefacta mirada. Al entrar, dejamos que los novios hablaran con el recepcionista. Tras recibir el pago, enseguida se nos invito a pasar a la capilla. Mi primera impresion fue que se asemejaba al decorado de una pelicula. Las flores eran de plastico y la musica sonaba enlatada. David, Lou y yo nos quedamos de pie, detras de la novia. De una puerta trasera salio un reverendo con barba grisacea y calvo como una bola de billar. Empezo a soltar el discurso mientras mis amigos y yo nos mirabamos con asombro, divertidos y encantados de vivir una experiencia tan insolita. --Es la primera vez que estoy en una boda de estas --dijo Lou, entusiasmado. --Yo tambien --dijo David. --Yo tambien --dije yo. Sally se veia radiante, y deduje que bajo esa imagen dura que le gustaba llevar, se escondia una mujer dulce y romantica. Elvis no paraba de sonreir, pero su mirada parecia un tanto perdida, por lo que me pregunte si estaria colocado. --Si, quiero --dijo Sally sin dejar de mirar a Elvis cuando el reverendo le formulo la ansiada pregunta. --?Y tu, Mike Post, aceptas a Sally Carter como tu esposa? -- pregunto. Elvis en vez de responder afirmativamente, bajo del altar y empezo a correr con expresion de angustia. --!No quiero casarme! --exclamo, fuera de si. Miramos a la novia, quien con un gesto de la mano nos ordeno que lo detuvieramos. El cuerpo de Elvis era robusto, pero entre los tres conseguimos retenerlo, a pesar de su pataleo. Elvis insistia en su deseo de no contraer nupcias, por lo que los tres nos miramos sabiendo que era algo a lo nosotros no le podiamos obligar. Nuestra etica nos lo impedia. --Si no me caso con el, me caso con uno de vosotros, pero hoy me caso --dijo tajante Sally. Ante esa ferrea determinacion, empujamos al novio hacia el altar. La situacion no resultaba sencilla, pues Elvis se revolvia como un autentico profesional de lucha libre. El reverendo, para nuestra sorpresa, permanecia inmutable, como si fuese una escena mil veces vista. Sally, brazos en jarra, esperaba a su prometido con el ceno fruncido. --!Nos acabamos de conocer esta noche! !Es de locos! -- exclamo Elvis. --Soy el amor de tu vida, lo que pasa es aun no lo sabes --dijo Sally, emocionada. Elvis solto un punetazo al aire que impacto en el estomago de Lou, el cual se doblo por el dolor y por la falta de aire. Aqui fue cuando se desmadro todo. David, en solidaridad con su amigo, le propino una patada a Elvis, pero fue un acto que no gusto demasiado a la novia. --!Eh, a mi prometido no se le pega! --exclamo Sally bajando del altar. Sin esperarlo nadie, la novia armo su brazo y propino un punetazo a David, que se agacho a tiempo. Sin embargo, el golpe lo recibio mi mandibula. Cai hacia atras. Lou se revolvio contra Elvis, y este contra David. Sally sacudia con el ramo de flores a quien se pusiera por delante. En un segundo se formo un magma de pies y brazos que resultaba imposible de dilucidar quien atizaba a quien. El reverendo con gran parsimonia, suspiro y grito por un interfono situado en la mesa. --Seguridad, por favor.

  • Hierro y poder (El trono del cesar 1) de Harry Sidebottom

    https://gigalibros.com/hierro-y-poder-el-trono-del-cesar-1.html

    PRIMAVERA 235 d. C.

  • Mariposa de piedra de Concha Alvarez

    https://gigalibros.com/mariposa-de-piedra.html

    Serie Mariposas negras, libro 1o
    El dia que la madre de Sara muere en un accidente de trafico, la joven descubrira que su mundo ha dejado de ser perfecto. Cuando su obsesion por dibujar tumbas se convierte en algo mucho peor, Sara comprendera que vive una pesadilla. Su mente jugara con ella hasta hacerla creer que sus suenos pueden transformarse en realidad. Una realidad tan enloquecedora como enamorarse de un angel de piedra; la escultura mas antigua del cementerio de Pravia.

  • Nuevos hombres buenos de Ritxar Bacete

    https://gigalibros.com/nuevos-hombres-buenos.html

    El feminismo ha revolucionado y redefinido, en el ultimo siglo, el papel de las mujeres en la sociedad, en un proceso que ha supuesto, inevitablemente, cuestionar y transformar el rol de lo masculino. Y pese a que cada vez mas hombres apoyan -al menos desde la teoria- ese proceso de acercamiento a la igualdad, una de sus consecuencias es que ha dejado a la mitad de la humanidad huerfana de un modelo de referencia: el viejo ya no sirve para la convivencia equitativa con las mujeres en una sociedad democratica y el nuevo esta aun en construccion.

  • Objetivo principal de Jessica Andersen

    https://gigalibros.com/objetivo-principal.html

    Cuando un paciente suyo murio de manera misteriosa, la doctora Ripley Davis comenzo a buscar respuestas… Pero entonces aparecio Zachary Cage, agente de seguridad en cuestiones de radiacion, y le lanzo un sinfin de acusaciones. Ripley no disponia de tiempo para demostrarle su inocencia a aquel atractivo hombre. Lo unico que la preocupaba era salvar a sus pacientes y mantenerse con vida.

  • Calle Este de Philippe Sands

    https://gigalibros.com/calle-este.html

    En las paginas de este libro excepcional se entretejen dos hilos: por un lado, el rescate de la historia del abuelo materno del autor a partir de un viaje de este para dar una conferencia en la ciudad de Lviv, que fue polaca y actualmente forma parte de Ucrania. Por el otro, la peripecia de dos abogados judios y un acusado aleman en el juicio de Nuremberg, cuyas vidas tambien confluyen en esa ciudad invadida por los nazis. Los dos judios estudiaron alli y salvaron sus vidas porque emigraron a tiempo -uno a Inglaterra, el otro a Estados Unidos-, y el acusado -tambien brillante abogado y asesor juridico de Hitler- fue gobernador durante la ocupacion. Y asi, a partir de las sutiles conexiones entre estos cuatro personajes -el abuelo, los dos abogados judios que participan en Nuremberg, uno con el equipo de juristas britanico y el otro con el americano, y el nazi, un hombre culto que acabo abrazando la barbarie-, emerge el pasado, la Shoa, la Historia con mayusculas y las pequenas historias intimas. Y frente al horror surge la sed de justicia -la lucha de los dos abogados por introducir en el juicio el concepto de <>- y la voluntad de entender lo sucedido, que lleva al autor a entrevistarse con el hijo del criminal nazi. El resultado: un libro que demuestra que no todo estaba dicho sobre la Segunda Guerra Mundial y el genocidio; un libro que es al mismo tiempo un bellisimo texto literario con tintes detectivescos y de thriller judicial, un relato historico sobresaliente sobre el Holocausto y los ideales de unos hombres que luchan por un mundo mejor y una meditacion sobre la barbarie, la culpa y el deseo de justicia. Pocas veces esta tan justificado aplicar a una obra el calificativo de imprescindible.

  • Tras el grito, Johann Hari de Johann Hari

    https://gigalibros.com/tras-el-grito-johann-hari.html

    El periodista Johann Hari se embarco en un viaje epico de tres anos de duracion y cerca de 50.000 kilometros con el fi n de desvelar los secretos de la guerra contra las drogas; y de esa manera pudo constatar que existe una disparidad asombrosa entre lo que nos han transmitido y lo que en realidad sucede.

  • Legado de amor (Haven Manor 1.5) de Kristi Ann Hunter

    https://gigalibros.com/legado-de-amor-haven-manor-1-5.html

    Lo que menos esperaba Sarah Gooding era que, al devolverle un camafeo a una anciana senora eso la llevara a conseguir un empleo... y a conocer al nieto de la dama, alguien que, socialmente, esta muy por encima de ella.

  • El duque del cielo de R.m. De Loera

    https://gigalibros.com/el-duque-del-cielo.html

    Mirela Imamovic conocio el significado de la intolerancia cuando apenas era una nina y la guerra estallo en Bosnia y Herzegovina, lo que era la antigua Yugoslavia.
    Veintitres anos despues ella es una de las mejores controladoras aereas del mundo. Esa pasion por el cielo le nacio quizas por todas las mudanzas que enfrento junto a sus padres. Mirela amaba observar a los aviones surcar los aires. Una especie de hoguera incendiaba su corazon.
    Su vida tomo un nuevo rumbo hacia unos meses cuando fue juez de los preliminares en el festival de acrobacias que se celebraba en la ciudad de Gothenburg en Suecia. Alli se reencontro con el. el duque de Gotland. Lo dirigio durante unas inundaciones en Croacia, si bien, nunca se vieron. Durante el festival el piloto y ella se quedaron solos y hablaron de su amor por los aviones y el cielo hasta que fueron interrumpidos por un militar. El imam de Brcko, el padre de Mirela, los caso una semana despues. Su amor era como un cuento de princesas.

  • La duena de la santa de Mariana Guarinoni

    https://gigalibros.com/la-duena-de-la-santa.html

    Basada en la historia real de Ana de Matos y Encinas, una mujer fuera de lo comun, que para redimirse de sus pecados compro una estatuilla famosa por realizar milagros. Hoy es la santa patrona de la Argentina, la Virgen de Lujan.

  • Necios y mortales de Bernard Cornwell

    https://gigalibros.com/necios-y-mortales.html

    Londres, siglo XVI.
    En el corazon de la Inglaterra isabelina, el joven Richard Shakespeare suena con una brillante carrera en los teatros londinenses, dominados por su hermano mayor, William. Aunque este le da trabajo en su compania, los papeles son minimos, y Richard esta sin un centimo y tiene que buscarse la vida para sobrevivir. La gratitud que siempre ha sentido hacia William comienza a resquebrajarse, y llega a plantearse robar los manuscritos de su hermano y venderlos a teatros rivales.

  • Superwoman de Begona Ameztoy

    https://gigalibros.com/superwoman.html

    La protagonista de esta historia, Almudena Cortazar, vive la ficcion de un mundo imaginario construido a su imagen y semejanza. Se cree una heroina, un icono de belleza y elegancia, una triunfadora temida y envidiada por la fauna de mediocres que la rodea. Pero, en realidad, es un bluf, y aun no lo sabe. Lo descubriras tu misma en cada linea y en cada pagina de esta historia divertida y original.
    Superwoman es un prototipo de nuestro tiempo, el mito erotico y robotico que esta sociedad de mierda merece. Un hibrido aberrante de progre implacable, liberada y canalla con toques del marujeo mas cutre y ramplon.
    Dinero, poder, amor, sexo. Solo son salidas de emergencia que ella utiliza para escapar de sus frustraciones y complejos.
    Como no podia ser de otra manera, el final de su recorrido es tan catastrofico y sorprendente como la vida misma. Y tan impredecible que no hay dios que te haga un spoiler.

  • Corazon indomable (Trilogia Corazon 2), Elena Montagud de Elena Montagud

    https://gigalibros.com/corazon-indomable-trilogia-corazon-2-elena-montagud.html

    Esta historia tierna y pasional puede provocarte los suenos mas eroticos.

  • Torrijos Parador de Helena Acosta

    https://gigalibros.com/torrijos-parador.html

    En pleno siglo de Oro Espanol, en un parador de Toledo, un muchacho al que apodan El Pequeno se cuela por los rincones y recorre los pasillos para luego sentarse a la mesa de la cocina y deleitar a los sirvientes con sus historias. Nada escapa a la mirada curiosa del Pequeno, y menos cuando se trata de los devaneos y amorios prohibidos de los nobles senores ahi alojados. Esta obra es un compendio de alguno de esos relatos, que te transportaran a un mundo lleno de erotismo y sensualidad en las postrimerias del siglo XVI.

  • Cazadora de hadas, Jennifer L. Armentrout de Jennifer L. Armentrout

    https://gigalibros.com/cazadora-de-hadas-jennifer-l-armentrout.html

  • Algo privado de Debra Webb

    https://gigalibros.com/algo-privado.html

    La periodista mas apreciada de Atlanta queria que despidieran a su camara. ?Por que? Pues porque con solo mirar a aquel atractivo latino se moria de ganas de tocarlo y comprobar si realmente era tan ardiente como aparentaba. Aquel hombre era una distraccion que no se podia permitir… cuando su principal preocupacion era mantenerse viva. Pero habia algo que Piper Ryan no sabia y que podia salvarle la vida. Resultaba que Ric Martinez era algo mas que un camara guapo y altanero capaz de hacerla derretir y empenado en protegerla…

  • Aunque tu y yo nunca, tu y yo siempre de Ariadna Tuxell

    https://gigalibros.com/aunque-tu-y-yo-nunca-tu-y-yo-siempre.html

    Gala es azafata de vuelo y adora su profesion. Disfruta viajando por el mundo junto a sus dos companeras de trabajo, Aitana y Dafne, quienes se han convertido en sus inseparables amigas y con las que comparte muchas horas de su vida.

  • El desamor segun Alba de Mira Lau

    https://gigalibros.com/el-desamor-segun-alba.html

    Alba es muy fan de “La Casa de Papel”, el sushi y las olas del mar.
    A sus 29 anos lo tiene todo: amigos estupendos, un buen trabajo y un novio genial.
    Eso, hasta que Marc le pide un “tiempo para pensar”.
    Ahora Alba tendra que decidir como afronta ese tiempo para sufrir lo menos posible.
    Y si Marc no regresa…?Podra Dave, su joven y sexy companero de trabajo, ayudarla a recuperar la ilusion?
    Una novela breve, que nacio pensada como guion de TV y que esta siendo ya traducida al ingles.

  • Nunca digas tu nombre de Christian Martins

    https://gigalibros.com/nunca-digas-tu-nombre.html

    Siempre he pensado que lo mejor de una amistad es compenetrarse con la otra persona. Creo que esa es la clave para encontrar un amigo de verdad, uno de los que con los anos no se pierde. Y supongo que, por esa misma razon, Cailyn y yo somos, desde que eramos unas crias, una y carne. Terminamos juntas prescolares, nos inscribimos en el mismo instituto y entramos a formar parte del equipo de animadoras de forma simultanea. Nos costo, pero, a pesar de que Cailyn no tenia tantos creditos como yo, conseguimos ir a la misma universidad y que nuestros caminos no se separasen. Tuvimos que sobornar a un chico de administracion para que, de forma fortuita, el destino nos colocara como companeras de habitacion en el campus. Y ahora, unos cuantos anos despues, seguimos compartiendo piso a pesar de que Cailyn continue estudiando el ultimo ano de carrera y de que yo ya me este especializando. Creo que, con los anos, nuestros propios padres terminaron por asumir que eramos, somos y seremos inseparables. Y, cuanto mas viejas nos hacemos, mas claro tengo que Cailyn y yo no nos separaremos jamas. Estoy convencida de que nuestra amistad puede con todo porque, como ya he explicado previamente, nos complementamos de forma perfecta. Cailyn es el fuego, yo el hielo. A ella le encanta el picante, a mi el chocolate. Ella es la locura en persona y yo, a pesar de no ser la sensatez personificada, pienso las cosas un par de veces mas que ella antes de actuar. --Se lo estan pasando bien, ?eh? --me dice Arnie sin quitarle los ojos de encima a mi amiga. Le miro de reojo y veo su sonrisa tonta en la cara. Es evidente que esta disfrutando del espectaculo tanto como ellos. Cailyn esta tumbada en la mesa, echandose tequila en el escote mientras Mike le lame los senos de forma obscena. Suspiro hondo antes de propinarle un buen trago a mi vaso de ron-cola. Cailyn y Mike, en realidad, no estan juntos. Solamente se ven de vez en cuando y, cuando lo hacen, disfrutan juntos sin pensar en el manana. Ambos saben que no tendrian futuro como pareja, asi que ni siquiera se molestan en darse una oportunidad. Arnie y yo, en cambio... Bueno, decir que "estamos juntos" es un tanto precipitado, porque todavia nos estamos conociendo. Pero vamos en serio. Arnie es un chico formal, carinoso y respetuoso, puede que en un futuro me sorprenda, pero por ahora lo poco que se ha dejado ver, me gusta. Me gusta mucho, ademas. El problema que suelo tener a la hora de encontrar pareja es que todos los tios de entre veintiseis --nuestra edad-- y treinta y dos --mi limite antes de considerarlos vejestorios-- son demasiado inmaduros para mi forma de ser y pensar. Es como si los hombres necesitaran muchisimo mas tiempo para madurar y asentar la cabeza. Aunque debo admitir que Arnie parece diferente a lo que suelo encontrar por ahi. Le gusta disfrutar, el cachondeo y salir con los amigos. Se que ahora mismo esta disfrutando viendo a mi amiga semidesnuda tirada en la mesa --!es un hombre!--, pero tambien se que a la hora de la verdad es un chico decente. Y creo que con eso me basta. Si, a diferencia de Cailyn, yo soy bastante mas conformista y no se decir que no. Esa es desvergonzada y no le cuesta dejar claro que quiere en su vida y que no. Y, cuando estamos juntas, nos complementamos de forma perfecta. Incluso en la convivencia. Mike le baja ligeramente la camiseta a mi amiga, dejando sus pechos al descubierto. Arnie, que se lo estaba pasando en grande con la escenita, aparta la mirada de forma brusca y se rie, avergonzado. --Creo que estos dos necesitan algo de intimidad, ?eh? Yo me rio. No me molesta que mire. En realidad, yo tambien estoy mirando, ?no? --Creo que si --le digo, cogiendole de la mano para guiarle a mi habitacion. Pero no hemos dado ni un paso cuando suena el timbre. La musica a todo volumen amortigua el sonido y decido que, sea quien sea, se cansara de llamar. Pero no. Insiste. Suspiro hondo, dirigiendome a la puerta principal. Abro sin mirar por la mirilla, adivinando que se tratara de nuestra vecina del quinto, Aida. Aida es una senora amargada que lleva tiempo buscando una excusa para echarnos del edificio, pero como no la encuentra, se dedica a tocar las narices y molestarnos en cada ocasion posible. Pero cuando abro la puerta de par en par, me doy de bruces con la realidad. No es Aida, no. Son dos hombres vestidos de uniforme que, a no ser que sean strippers contratados por Cailyn, son policias. --Buenas noches --me dicen con voz seria y tono autoritario, cruzandose de brazos mientras echan un vistazo descarado al interior. Me giro para comprobar si desde aqui pueden observar el espectaculo que tiene montado mi amiga y, en efecto, descubro que asi es. Siento el rubor ascendiendo por mis mejillas. --?Desean algo? --pregunto, procurando simular una voz infantil e inocente. Pero no cuela, claro. Sus facciones serias no se ablandan con mis triquinuelas. --Una vecina ha llamado quejandose por la musica alta --explica uno de ellos, el que peor pinta tiene--. Parece ser que estais molestando al vecindario. Trago saliva. --Si, ya... Habra sido Aida --les digo, senalando hacia arriba--. No soporta que pongamos la tele a mas del cinco. Es una cascarrabias. El policia que se habia dirigido a mi traga saliva y tuerce el gesto en una mueca de desagrado. --Creo que en esta ocasion se esta quejando con razon --me replica--. No se si lo sabra, senorita, pero son mas de la una de la madrugada. Asiento con la cabeza. --Ahora mismo quito la musica --prometo, avergonzada. Ni siquiera era consciente de la hora. --Si, ahora mismo --repite el policia. Suspiro hondo y me alejo de la puerta, dirigiendome a la minicadena. Giro la ruleta del volumen y, de la misma, escucho los quejidos de Cailyn, protestando por la interrupcion. --No la volveremos a poner --aseguro, a pesar de que mi amiga no para de gritar que "continue la fiesta". --Eso espero --dice el otro policia--. Porque si tenemos que volver a esta casa, no sera solamente para dar un aviso. Asiento, comprendiendo perfectamente a lo que se refiere. --No sera necesario --respondo de forma apresurada. Cailyn continua quejandose como una nina pequena mientras yo aprovecho para despedirme de ellos lo antes posible y cerrar la puerta. Me giro hacia ella y la fulmino con la mirada. Esta sentada sobre la mesa, en sujetador, empapada en sudor y fingiendo unos pucheros demasiado infantiles. --Se acabo --digo, dando un par de palmadas--. El proximo fin de semana, mas y mejor, pero creo que por hoy cerramos la licoreria. Cailyn niega rotundamente. --Pero si nos lo estabamos pasando genial... --protesta con vocecita infantil. Mike le da la razon y yo, desesperada, le lanzo una mirada a Arnie que significa "ayudame con este par de borrachos". --?No os lo estabais pasando bien? ?No quereis seguir con la fiesta? --No quiero terminar pagando una multa --le corto con rapidez--. Asi que bajate de la mesa y ponte un pijama. Cailyn sonrie con malicia y, en ese preciso instante, soy consciente de que algo malo se le esta pasando por la cabeza. --?Y por que no seguimos en otro sitio? --dice, levantando la botella de tequila--. Se me ha ocurrido una idea... Pongo los ojos en blanco. Algo me dice que no sera una buena idea.