• las chicas del coro libro - Jennifer Ryan

    https://gigalibros.com/las-chicas-del-coro.html

    A principios de 1940, los estragos de la guerra se hacen notar incluso en la pequena poblacion de Chilbury, en el condado de Kent. Con la mayoria de los hombres en el frente, el vicario decide cancelar los ensayos del coro, pero la directora, Primrose Trent, se opone a esta decision y convierte el tradicional coro mixto en un coro formado solo por mujeres. Bajo su firme batuta, las chicas del coro siguen adelante, superan los desafios propios del tiempo que les ha tocado vivir y hasta participan en un concurso del condado. A traves de la narracion de cuatro mujeres del coro, que se alternan a lo largo de la novela, el lector sigue las idas y venidas de los habitantes de Chilbury. A pesar de las duras circunstancias propias de la guerra &mdash eurosracionamiento, cortes de luz, toques de queda, bombardeos&mdash euros, habra lugar para el amor, traiciones, disputas familiares y se revelaran secretos. Las protagonistas comprobaran hasta que punto las creencias mas arraigadas pueden ser puestas a prueba en tiempos dificiles.

  • Las chicas del coro (Grandes Novelas) - Libros - Amazon

    https://www.amazon.es/Las-chicas-coro-Grandes-Novelas/dp/8416690588

    Las chicas del coro, de Jennifer Ryan es una oda a la sororidad, a la empatía primigenia entre mujeres. A través de fragmentos de diarios y cartas de las ...

  • Las chicas del coro (Grandes Novelas) eBook - Amazon

    https://www.amazon.es/Las-chicas-coro-Grandes-Novelas-ebook/dp/B078RLR5N7

    Mirar en el interior de este libro. Las chicas del coro (Grandes Novelas) de [Jennifer Ryan, Maeva, Álvaro. Jennifer Ryan y 2 más. Jennifer Ryan.

  • CHICAS DEL CORO, LAS | JENNIFER RYAN | Casa del Libro

    https://www.casadellibro.com/libro-chicas-del-coro-las/9788417108441/11427026

    El libro CHICAS DEL CORO, LAS de JENNIFER RYAN en Casa del Libro: ¡descubre las mejores ofertas y envíos gratis!

  • “Las chicas del coro” - Jennifer Ryan - Libros que hay que leer

    http://librosquehayqueleer-laky.blogspot.com/2018/03/las-chicas-del-coro-jennifer-ryan.html

    13 mar 2018 — ... libros de no ficción en Londres, y comenzó a escribir en su tiempo libre. Tras el nacimiento de sus hijos, finalizó Las chicas del coro, ...

  • LAS CHICAS DEL CORO. RYAN, JENNIFER. Comprar libro

    https://www.popularlibros.com/libro/las-chicas-del-coro_892927

    LAS CHICAS DEL CORO (Libro en papel) ; ISBN: 978-84-16690-58-9 ; Páginas: 392 ; Encuadernación: RUSTICA ; Colección: GRANDES NOVELAS ; Idioma: Castellano ...

  • LAS CHICAS DEL CORO - JENNIFER RYAN - 9788416690589

    https://www.agapea.com/Jennifer-Ryan/Las-chicas-del-coro-9788416690589-i.htm

    Comprar el libro Las chicas del coro de Jennifer Ryan, Maeva Ediciones (9788416690589) con ENVÍO GRATIS desde 18 € en nuestra librería online Agapea.com; ...

  • Las chicas del coro - Anika Entre Libros

    https://anikaentrelibros.com/las-chicas-del-coro

    "Las chicas del coro" es, al mismo tiempo, una crónica de la vida en Inglaterra durante la contienda. Chilbury va a sufrir los bombardeos alemanes, sus hombres ...

  • Las chicas del coro - Jennifer Ryan - Babelio

    https://es.babelio.com/livres/Ryan-Las-chicas-del-coro/42445

    Críticas (5), citas extractos de Las chicas del coro de Jennifer Ryan. En primer lugar, dar las gracias a ... Comprar este libro en papel, epub, pdf en ...

  • LAS CHICAS DEL CORO - RYAN JENNIFER - Quelibroleo.com

    http://quelibroleo.com/las-chicas-del-coro

    Las protagonistas comprobarán hasta qué punto las creencias más arraigadas pueden ser puestas a prueba en tiempos difíciles. Información del libro. Género ...

  • Las chicas del coro - Ryan, Jennifer - Todos tus libros

    https://www.todostuslibros.com/libros/las-chicas-del-coro_978-84-16690-58-9

    7 feb 2018 — Con las historias que le contaba su abuela y con escritos de la época como fuente de inspiración, la autora relata a cuatro voces cómo un ...

  • Las sombras del poder de Ian Rankin

    https://gigalibros.com/las-sombras-del-poder.html

    Malcolm Fox, agente de Asuntos Internos y Conducta, se encuentra investigando a un policia por presunto abuso de poder cuando se cruza por su camino un caso lejano: la enigmatica muerte de un abogado sobre el que recayeron sospechas de colaborar con grupos terroristas. Con Escocia sumida en un momento de inestabilidad que despierta viejos fantasmas, Fox correra un grave peligro al descubrir hasta que punto los antano activistas ocupan hoy influyentes puestos de poder y estan dispuestos a todo con tal de mantener enterrado su turbio pasado.

  • Amante y Cautiva (Millonarios italianos 2) de Florencia Palacios

    https://gigalibros.com/amante-y-cautiva-millonarios-italianos-2.html

    En un oscuro rincon de una ciudad italiana perdida en la lujuria y el vicio, una guapa e inocente chica es subastada y vendida al mejor postor. Pero ella esta feliz pues acaba de escapar de la miseria y el terror.
    No imagina que ese guapo millonario italiano que ha pagado por ella tanto dinero, quiero algo mas que su virginidad. la quiere a ella por entero, cautiva y prisionera.

  • El secreto de tu nombre de Mel Ulrrich

    https://gigalibros.com/el-secreto-de-tu-nombre.html

    ?Te imaginas tener que dejarlo todo por alguien a quien amas? ?Te imaginas renunciar a todo incluyendo tu nombre? ?Te imaginas tener que cambiar de piel para poder sobrevivir?

  • Manual de la buena vida de Luis Racionero Grau

    https://gigalibros.com/manual-de-la-buena-vida.html

    Un sabio de nuestro tiempo. Un gourmet. Un recalcitrante amador casado seis veces. Un viajero curioso. Un inquieto buscador de lo espiritual. ?Por favor, senor Racionero, nos podria dar las claves de una buena vida, de su buena vida, atendiendo mas a lo material que a lo espiritual? A esta pregunta responde esta obra que destila los mas sabios consejos para ser feliz y resume lo mejor de una vida intensa.

  • El crimen del conde Neville de Amelie Nothomb

    https://gigalibros.com/el-crimen-del-conde-neville.html

    <p>El conde Neville acude a la casa de una vidente para recoger a su hija menor. La vidente se la encontro la noche anterior en pleno bosque, en posicion fetal y tiritando de frio. Al parecer la adolescente, que responde al singular nombre de Serieuse, se habia fugado del castillo familiar. Pero, antes de llevar al aristocratico progenitor ante su hija, la vidente le toma la mano y le anuncia: <> En efecto, los Neville, excentrica familia de alcurnia, van a celebrar en breve su fastuosa fiesta anual, a la que invitan a lo mas selecto de la sociedad. Esa garden party es una tradicion irrenunciable, pese a que los Neville pasan por serios apuros economicos y el conde incluso ha tenido que plantearse vender el castillo y el bosque que lo rodea. Con toda probabilidad esta sera la ultima gran fiesta que organicen alli. ?Acabara, tal como anuncia la prediccion de la vidente, con un asesinato?</p>

  • Una mujer sin pasado de Anna Ekberg

    https://gigalibros.com/una-mujer-sin-pasado.html

  • Cautivada por el vizconde de Emily Windsor

    https://gigalibros.com/cautivada-por-el-vizconde.html

    Lucy recupero la conciencia con un sollozo y trato de abrir los ojos. Los pesados parpados no se levantaron, sometidos por la palpitante cabeza. No percibio luz en la alcoba y trato de alzar las manos para frotar el dolor. Pero estas no se movieron. Una punzada le apunalo las munecas. Entonces se dio cuenta de que las tenia atadas a la espalda, no con demasiada fuerza, sino de tal manera que no podia girarlas. Esa rigida posicion habia conseguido que se le entumecieran los dedos. Se lamio los labios resecos y lucho de nuevo por abrir los ojos. El panico, que le surgio desde dentro, la ayudo a elevar los perezosos parpados. Basto una oscura y suave penumbra, filtrada por una ventana, para que Lucy pudiera discernir que se hallaba en un gran dormitorio; un fuego brillaba suavemente en una esquina. Era a mediados de mayo, pero habia vuelto a ser un amargo invierno y el frio aun persistia en primavera. Las llamas ayudaban a calentar aquel lugar de aspecto bastante decrepito, aunque no conseguian reducir la humedad de la atmosfera. Las desnudas paredes, llenas de manchas, hacian que la habitacion fuese opresiva. Unos grandes muebles oscuros se alineaban en los laterales. Parecia estar acostada en una recargada cama con dosel, que, a pesar de la impresion general de abandono y humedad, vestia unas sabanas de lino que olian frescas y lucian secas. Viendo que no habia ninguna amenaza inmediata, Lucy intento sentarse; dando a las pobres manos un poco de la libertad, que tanto necesitaban. Cerro los ojos nuevamente para evocar lo que podia recordar. Lluvia. Habia estado lloviendo. Dejo a la modista y el lacayo se apresuro, mas que ella, hacia el carruaje para que no se mojasen los paquetes. Colette de Montmarron, la duena francesa, comento algo respecto a como, en ocasiones, sus grandes creaciones se empapaban. Decidio no esperar a que el sirviente volviera con el paraguas y salio corriendo de la tienda, cuando, de repente, unos brazos la agarraron por un costado. En el momento en el que se encontraba a punto de gritar, una palma grande y carnosa le cubrio la boca y se sintio lanzada al interior de otro coche. Tan pronto como se sento en el solido asiento trato de huir por la puerta opuesta, pero una mano robusta la sujeto con fuerza por el hombro arrojandola lejos de su objetivo. Golpeo con la cabeza el panel lateral del carruaje. Sintio un gran dolor y malestar, y, por un momento, el mundo quedo en blanco antes de caer envuelta en la oscuridad. Se batio en contra de esa sensacion, y abrio la boca para chillar, mientras golpeaba el aire y rasgaba con las unas afiladas todo aquello que encontraba. Escucho un debil grunido como unica respuesta, antes de ser empujada hacia atras en el asiento, y, una vez mas, se golpeo la parte trasera de la cabeza. Le colocaron una tela aspera y maloliente sobre los labios para detenerle los alaridos, y el cuerpo de la muchacha finalmente cedio en aquel combate contra las tinieblas. No recordaba mas... Lucy no estaba completamente segura de que debia hacer entonces, considerando que nunca antes habia sido secuestrada. Los pensamientos le daban vueltas y la mente le vagaba a la deriva. Se sugirio a si misma la idea irracional de que quizas sonaba. Especialmente, porque acababa de leer una novela espeluznante de Mrs Whittaker, en la cual una deslucida heroina se veia involucrada en un secuestro pirata. Esa heroina, sin embargo, recupero la conciencia en un barco decadente rumbo a Jamaica y no en un cuarto, viejo y desnudo, que olia a moho y hollin humedo. Ademas, tampoco habia senales de un heroe de tez y pelo moreno. Incluso uno palido y rubio hubiese sido suficiente. Se imagino al vizconde de Danbury, el caballero que la estuvo cortejando el mes anterior, ya que con certeza seria un apuesto adalid. Aunque, para ser sinceros, con el cabello negro como el carbon y los ojos tan profundos como la misma oscuridad, correspondia mejor en el papel de pirata. Era facil imaginarselo con el machete en alto, la camisa abierta por el cuello, la garganta desnuda y... El relincho de un caballo sobresalto a Lucy y le hizo abrir los ojos de par en par. No era un sueno, se dio cuenta, y eso no era una novela. Las paredes de la pieza se encogieron. ?Quien la habia secuestrado y por que? ?Querrian hacerle dano? El terror se apodero de ella y la respiracion se le torno superficial. ?Querrian asesinarla? -Tranquilizate, Lucy -susurro, tratando de calmar la rapida respiracion. Pero la vision se le expandio de manera incontrolada, causandole el efecto contrario en el aliento. El pecho la oprimia. Necesitaba pensar en otra cosa para serenar la mente. <>, se ordeno a si misma. Lord Danbury... Dejo escapar un largo y lento suspiro. Lord Danbury -o Jasper, como a ella le gustaba llamarle en privado, solo para ella- probablemente se estaba preparando para asistir al baile de etiqueta de Thornwood. Indudablemente, alli hallaria a muchas jovenes guapas para acompanarlo y flirtear con el. No, ella nego abruptamente. Era injusto etiquetarlo como un casanova ya que el habia estado muy atento en los ultimos meses. La respiracion comenzo a equilibrarse y obligo a sus pensamientos a continuar fluyendo, por mas triviales que fuesen. Jasper habia sido tan amable, de hecho, que ella a veces no podia creer en la suerte que tenia. Esa percepcion le provocaba una timidez no deseada ante la presencia del vizconde. Despues de todo era simplemente la hija de un baronet, un titulo que poseia ahora su hermano. Ademas, Lucy solo se creia hermosa de forma aceptable. Ella, ciertamente, no era una gran belleza; pero si tenia unos enormes ojos azules. Sus otras caracteristicas las consideraba normales, incluso aburridas. En el estado de animo mas optimista describiria el tono de su melena como castano claro en vez de pardo, un color mas preciso. No era toda de una misma tonalidad, mas bien una mezcla de rubio y marron que se aclaraba u oscurecia en funcion de la estacion. Ni rolliza ni delgada, tenia, eso si, un pecho bastante abundante para la moda corriente; la mirada de Jasper siempre parecia detenerse alli placenteramente, causando en ella un escalofrio que le recorria hacia abajo la espina dorsal. Quizas, la tendencia del momento no afectaba las inclinaciones personales de ese hombre. Mientras se retorcia, para sentarse aun mejor en la cama, Lucy se dio cuenta de que la distraccion la estaba ayudando. La nerviosa respiracion habia disminuido y los latidos del corazon eran mas o menos normales, es decir, normales para una persona recien secuestrada. Pronto veria a Jasper de nuevo. En ese momento solo la ira la invadia. En realidad, ella no era una pusilanime como para acobardarse en una esquina ante sus captores. Debia haber una salida. A juzgar por la triste luz de la tarde, penso que deberian ser alrededor de las siete. Feliz de no tener las piernas atadas, se deslizo hacia un lado de la cama y dejo caer los pies al suelo. Se dio cuenta de que el secuestrador le habia quitado los botines, que extrano. Lucy odiaba el calzado. No importaba cuanto tiempo tardase el zapatero en confeccionarlo, siempre se sentia incomoda. Para ella, caminar con medias, o, mejor aun, con los pies descalzos, era un placer incuestionable. Los botines, los podia ver, se hallaban en el otro extremo de la camara cuidadosamente colocados debajo de un divan descolorido. -Mmm, un secuestrador al que no le gusta el calzado sobre las sabanas limpias. Entonces no es, ni un ser descuidado, ni un villano cualquiera -murmuro, levantandose de la cama. Deambular alrededor del aposento resulto ser una perdida de tiempo: tan solo le produjo algun estornudo, provocado por el polvo, y el conocimiento de que al dueno de todo aquello le gustaba leer sobre extranas razas de cerdo. Descubrio un espejo mugriento, aunque, con las manos sujetas, no podia hacer nada con los cabellos; que, en ese momento, soltados de las horquillas, le caian en cascada por la espalda en un torrente de bucles bastante lacios. Una mancha oscura le cubria la frente y el vestido de paseo, color limon, se encontraba arrugado y sucio. -Realmente no deberias preocuparte por tu apariencia -le reprendio su reflejo-. El peinado es ahora el menor de tus problemas. De repente, unas voces masculinas sonaron desde fuera, cada vez mas cerca. Si esa alcoba era el destino previsto de quienesquiera que fuesen, posiblemente podria enterarse de lo que estaba sucediendo si ellos la creian dormida; por lo que corrio hacia la cama y se lanzo sobre ella. El colchon se hundio bajo la apresurada llegada y levanto una nube de polvo. El pelo le cubrio el rostro y lo unico que pudo hacer fue escupir aquellos que se le introdujeron en la boca, mantener inmoviles los miembros y esperar. La llave giro y la puerta se abrio con un crujido. Lucy sintio como si los latidos acelerados de su corazon hiciesen eco en toda la habitacion. Se materializaron la luz tras sus parpados, asi como unos pasos viniendo hacia ella. Trato de mantener la respiracion profunda y lenta, aunque el mundo se le evaporaba sabiendo que unos extranos la observaban desde arriba. Una mano le aparto suavemente el cabello hacia atras. Casi se estremecio. Habria esperado un fuerte pellizco, o una bofetada para despertarla, pero los dedos eran afectuosos mientras le acariciaban parte de la cara, retirandole mas mechones de las mejillas ardientes. La mano siguio el flujo de los cabellos, cuello abajo, hacia el hombro, y los dedos se deslizaron perezosamente sobre los tirabuzones, suaves y enredados, antes de posarse en el pecho. Lucy, desesperadamente, mantuvo el aliento. No es que ya no tuviese miedo. Sencillamente sintio una expectacion, casi placentera, sobre a donde irian a parar aquellos delicados dedos merodeadores. Escucho la fuerte exhalacion de otro individuo y percibio la retirada brusca de las manos. -?Era necesario golpearla? -pregunto una voz profunda y fuerte-. Esta sonrojada y respira con rapidez. -!Uf! Era igual que un gato en el infierno, casi me arana los ojos. Y no es que yo la golpeara exactamente, solo le di un empujon y quedo sin conciencia. Dejala hasta manana, estara bien - contesto el otro varon, mostrando bastante indiferencia hacia Lucy. -!Por el amor de Dios! ?Y que pasaria si ella enfermase mientras esta inconsciente? !Maldita sea, aqui tampoco hay agua! -?Para que? -respondio-. Las manos de la nina estan atadas. Siguio un comentario muy grosero, algo que ella habia escuchado en palabras de su hermano cuando estaba de mal humor... o con unas copas de mas. Suavemente se sintio girada hacia un lado y se esforzo por mantener el cuerpo flacido. Pero no pudo detener un leve quejido de dolor, que se le escapo, mientras le liberaba las manos rigidas. Otra maldicion salio de la boca del hombre mientras la colocaba en una posicion mas comoda. Debia estar preparada para patearlo y huir. Aunque entonces tendria que lidiar tambien con el otro majadero, que habia demostrado menor interes por su bienestar. Lucy tampoco podria contener demasiado tiempo esa apariencia agradable, ni la falsa inconsciencia, mientras ese personaje la atendia. Este le frotaba las manos heladas. Persistia en la zona dolorida, alli donde la cuerda le habia rodeado las munecas. Despues le asento dulcemente las manos sobre la cama. -Bill, ve a por un poco de agua -ordeno la voz profunda. El patan llamado Bill gruno, y luego escucho unos pasos que se alejaban. Era la oportunidad de escapar. Repentinamente sintio como el otro hombre se inclinaba y le posaba una calida y callosa mano en el cuello. !Oh, Dios! El solo pretendia ser amable y, ahora que el despreocupado Bill se habia ido, la iba a estrangular. Pero no. La mano se movio buscandole el pulso en la garganta, presionando suavemente con los dedos. El corazon se le acelero y los ojos le parpadearon imperceptiblemente. Seguramente el ya debia saber que ella estaba despierta, sin embargo, los dedos siguieron vagando. Se movieron hacia arriba, pasando por la oreja, la mejilla y deteniendose al final sobre la frente, donde el hombre oprimio la palma buscando cualquier signo de fiebre. Finalmente, ella lo sintio escorarse aun mas cerca; la camisa de lino crujio y otra vez aquella sensacion horrible, aunque innegablemente placentera, la envolvio. Podia oir la ruda respiracion, y notar el calido aliento y el perfume de sandalo impregnandole los sentidos. La familiaridad se apodero de Lucy. Ese perfume. Ella conocia ese perfume. Incluso la voz le parecia ahora familiar. Sintio que la persona se le acercaba mas y el cuerpo se le tenso involuntariamente. <>, se repitio para si misma.

  • En ruta al destino, Lee Vincent de Lee Vincent

    https://gigalibros.com/en-ruta-al-destino-lee-vincent.html

    Cuando Lara Mackenzie dijo con voz firme frente al altar del pueblo de Walden: "No, no acepto", jamas imagino que esa frase le diera a su vida un giro inesperado que la colocaria frente a un enigmatico y apuesto hombre.

  • Mi error fue ser solo tu mejor amiga. Parte 1 de Moruena Estringana

    https://gigalibros.com/mi-error-fue-ser-solo-tu-mejor-amiga-parte-1.html

  • Cafe con leche y extra de azucar de Tatjana Frigar

    https://gigalibros.com/cafe-con-leche-y-extra-de-azucar.html

    Voy a salir de la oficina y hace un dia de playa irresistible. ?Te recojo? -Claro, princess, te espero en el portal. Maria bajaba las escaleras de la oficina en direccion a su coche. Tenia un cabriolet rosa chicle al mas puro estilo Barbie en Beverly Hills. Le encantaba poder disfrutar de los dias de buen tiempo llevandolo descapotado por las calles que rodeaban la playa. Sentir el viento en su piel blanca mientras ondeaba su melena rubia (de bote, pero rubia). Tuvo dudas el dia que se tino, pero su peluquera encontro un tono que, de verdad, parecia natural. Y Maria quedo encantada con ello, tanto que ya hacia mas de cinco anos que lo llevaba, y sin ninguna intencion de cambiarlo. Arranco su coche y, mientras lo descapotaba, salio su jefe por la misma puerta que segundos antes habia pasado ella. ?Como conseguia coincidir siempre con ella? ?Tenia una camara que apuntaba su mesa? ?Olia su perfume avanzar por el pasillo? ?O es que, simplemente, la estaba vigilando durante toda la jornada? -!Maria! No sabia que ya habias salido -se apresuro a decir Carlos con un semblante que no mostraba ningun tipo de expresion. -Vaya, si, que casualidad. Ya me iba, tengo prisa. Adios, Carlos. -Adios, Maria. Disfruta del sol. No tardo en encender la musica a todo volumen y salir de alli sin que nadie mas le hiciera perder el tiempo. Piso el acelerador mientras pensaba que Alicia ya debia estar esperandola en el portal, pasando un calor de mil demonios y preparando un sermon de los suyos para reprocharle que siempre llegara tarde. Habia recibido la llamada de un cliente que habia esperado toda la manana y que no recibio hasta el ultimo momento; asi que no le quedo mas remedio que atenderlo. -Ya era hora de que llegaras. Hace 30 minutos que me has dicho que ya salias de la oficina y trabajas a diez. Siempre me haces lo mismo. Tienes que aprender a llegar a los sitios a la hora, Maria, no puedes andar siempre con el cohete en el culo, haciendo esperar a la gente. !Que mi paciencia no es ilimitable! Mientras tanto, Maria sonreia escuchando <>. Ya conocia cada una de sus palabras, no era la primera vez que le echaba ese mismo sermon. Si, eran completamente distintas. Alicia era correcta, premeditada, calculadora… Maria, en cambio, era transparente, impulsiva y se dejaba llevar. -Vaaale, vale, ya me callo -contesto al fin resignada-. Hija, es que hace un calor insoportable y ya no sabia donde meterme. No hay ni un trozo de sombra en toda la calle y ya sabes como huele mi portal; no me quedo ahi dentro ni cinco minutos, vaya a ser que me desmaye y acabe en el hospital con un brazo o una pierna rotos. El conserje es un guarro. Deberiamos ponernos de acuerdo todos los vecinos y echarlo. -Relajate, va -la animo sonriendo-. Vamos a disfrutar de nuestro primer dia de playa este verano y alli se te pasaran todos los males. Y, por cierto, ?no te dije yo que no te pusieras esas pintas para ir a la playa conmigo? -la reprendio Maria mientras se reia a carcajadas repasandola de arriba abajo. Alicia era una morena despampanante, extremadamente proporcionada (debia ser hija del diablo, no habia otra explicacion). Ya nacio con la piel bronceada y no tenia ni un resquicio de celulitis. Su melena larga, oscura y ondeada caia sobre sus hombros. Se habia puesto un bikini verde esmeralda que aun resaltaba mas el tono chocolate de su piel. Cubierto con una camiseta blanca de tirantes adornada con una pluma plateada dibujada por encima de la cintura. Ella decia que era un vestido; pero, no nos enganemos, un vestido que apenas tapaba el culo no se podia llamar vestido. Se habia puesto unas chancletas de playa Adidas que a Maria no le gustaban nada. Ella era fiel a su estilo, y ni caso de la moda. Pero la guinda del atuendo era esa maldita pamela que se ponia para refugiarse del sol. Color canela y con una cinta que la rodeaba terminando en un lazo. De color verde esmeralda tambien, claro, conjuntada con su bikini. A ver, ?quien os pensais que es ella? Siempre tan puesta y perfecta. Llegaron a la playa en tan solo diez minutos mas y tras encontrar donde aparcar, que eso ya fueron otros quince minutos, cerraron la capota y se bajaron con una sonrisa a disfrutar de su tarde de playa. Todavia estaban a finales de mayo, pero el sol era abrasador. A esas horas del mediodia podia parecer mediados de agosto. Daba gusto esa epoca del ano, las temperaturas eran ideales, calurosas de dia y fresquitas de noche. Y lo mejor de todo es que todavia no habia muchos turistas, practicamente solo habia gente del pueblo disfrutando de los placeres de su entorno. Buscaron el sitio ideal donde dejar las toallas, bien cerca del agua, mientras Maria se sentia observada y sabia perfectamente por que. -?Alicia, ves como nos mira la gente? Esa maldita gorra tuya le quita el sol a media playa -dijo mirando a su amiga con reproche. -Lo que mira la gente es su propia envidia, princess. Somos las diosas de la playa y por ello nos miran. Mi pamela -dijo remarcando cada una de las silabas-, que asi es como se llama, no tiene nada que ver. -Por supuesto que tiene que ver, y mucho. Y esta claro que miran a la diosa morena, pero no solo por su cuerpo de infarto, ricura. ?Ves a la senora del bikini negro que tenemos a unos quince metros? No le da el sol, y es por culpa de tu sombrerito. -Las dos se unieron en unas sonoras carcajadas que si que hicieron que las mirara todo el mundo, pero eso ya no les importo. Estaba claro que no le gustaba ser el centro de atencion, pero sabia de sobra que salir a la calle con su amiga significaba eso. Era consciente de que lo unico que tenia ella que no pasaba desapercibido era su coche, pues no habia otro igual a kilometros. Pero lo que no tenia claro era en que pensaba el dia que decidio comprarselo, aunque hay que decir que cada vez que lo miraba se convencia de que eso tenia que ser amor. Cuando ya llevaban un rato al sol, sintiendo como los rayos entraban por cada uno de los poros de su piel, Maria decidio ir a pegarse un bano, estaba empapada en sudor y ya no aguantaba mas. Le gustaba pensar que asi era como se activaba la melanina de su piel, pero sabia que su tono no le permitia abusar, o acabaria roja como un tomate. Su amiga ya la habia embadurnado con proteccion solar alta, pero ya estaba escarmentada de veranos anteriores y no iba a tentar a la suerte. No quedaba nada sexy ponerse una camiseta palabra de honor con toda la piel roja y las marcas del bikini en blanco; ni tampoco era plato de buen gusto no pegar ojo en toda la noche porque te duele y no sabes como ponerte, o pasarte el dia concentrada en no rascarte porque te vas a hacer una carniceria. Alicia no tenia ese problema, ni siquiera se ponia crema; un poco de aceite de proteccion quince, para que no se dijera que no se ponia nada. Ademas, le daba un tono brillante que a ella le encanta. Con un ratito de sol conseguia un tono tostado que era la envidia de todas aquellas que en abril empiezan a hacer sesiones de solarium para estar estupendas en junio. Para que ella se cansara de hacer la lagartija y decidiera banarse, el calendario tenia que chillar que era quince de agosto, con repiqueteo de tambores y campanillas, aliarse con el sol y que este sacara su furia mas intensa en rayos de fuego. Y la mala suerte es que ese dia ni siquiera iban a la playa porque la piel de Maria no podia aguantarlo. Tomaduras de pelo de la vida. Cuando sintio el agua del mar rozar los dedos de sus pies un escalofrio recorrio todo su cuerpo. El cambio de temperatura era algo agradable en esas fechas. Sentir el sol ardiente sobre su cabeza y el frescor del agua bajo sus pies era algo revitalizante. Cerro los ojos, suspiro y relajo todos los musculos que durante la semana iban acumulando tension. Y, sin dejar de mirarse los pies, empezo a caminar adentrandose en la playa, sintiendo las olas chocar contra sus piernas y colarse resbalando como si no fueran impedimento suficiente. Cuando ya se habia mojado por encima de las rodillas, levanto los brazos, los junto y de un salto que le permitio arquear su cuerpo en media luna se sumergio tan al fondo como podian aguantar sus pulmones. Estuvo nadando un rato, haciendo grandes brazadas para llegar hasta las boyas, volver y repetir. Disfrutando de las vibraciones que su nado provocaba alrededor de su cuerpo. Se habia puesto las gafas y se sumergio para admirar los peces que buscaban algo de comer por debajo de la arena. Cuando se canso, volvio a la toalla y salpico con un poco de agua de su pelo a la morena que tomaba el sol casi sin respirar. Le provoco un chillido agudo que arranco sonrisas a mas de un individuo de los alrededores. Se rio y se tumbo de nuevo a su lado. -Como me gustaria poderme pasar el dia aqui. -Y a mi; ?por que no hemos nacido ricas? -pregunto Alicia casi para ella misma. -Pues, la verdad, ricas tampoco haria falta. Yo me conformo con poco. Podriamos trabajar en invierno y tener todo el verano de vacaciones para disfrutar de la playita, ?no? -?Y eso es pedir poco? -rio-. A ver, princess, por pedir…, !yo no quiero trabajar! -exclamo su amiga haciendo reir a ambas-. Cuentame como te va en el trabajo, tienes que ponerme al dia. -Pues nada de nuevo, solo llevo un par de meses. Me siento muy bien con el equipo, que ya sabes que eso es importante para mi. Por ahora, poco mas puedo decir. -?Y que tal con el jefe? -Pues igual que lo ultimo que te conte, siento que me observa mas de la cuenta, pero supongo que, como soy la ultima que se ha incorporado, le toca echarme el ojo y hacer de jefe. No se, he escuchado comentarios por la oficina y la verdad es que no hablan muy bien de el. Dicen que es un tipo muy desagradable. -Andate con ojo, ese tipo tiene pinta de creerse que el personal de su oficina tambien es suyo -le advirtio. Cuando el sol empezo a dejar de calentar con fuerza, recogieron sus toallas y se fueron a casa de Maria. Se pegaron una ducha refrescante y se pusieron ropa comoda. Esa noche era noche de chicas. Llamaron al restaurante chino que habia a tan solo dos manzanas y le pidieron sus platos favoritos para cenar: rollitos de primavera, fideos Singapur, arroz tres delicias, pollo picante y ternera con salsa de ostras. Se acomodaron en el sofa y empezaron a hablar de sus historias mientras esperaban el capricho de la noche. Este no tardo en llegar. Sono el timbre del portal y Maria abrio sin preguntar, solo miro por la camara y ya vio quien era. -Buenas noches, senorita -dijo el joven. -Buenas noches, Yin -contesto Maria con total confianza. -Su pedido. Espero que lo disfruten. -Seguro que si, siempre nos haces disfrutar -le solto picara, haciendo que el pobre muchacho se sonrojara. Cerro la puerta, lo dispuso todo sobre la mesa que su amiga ya habia preparado en milesimas de segundo y se sentaron a disfrutar de su cena como dos osas hambrientas que acaban de despertar de la hibernacion. -Pobre Yin, seguro que se muere por tus huesos. -Alicia, no empieces a decir tonterias o no te dejo nada de cena -rio. Pusieron un nuevo capitulo de la serie que estaban viendo juntas, una de chicas, amores y esas cursiladas que Alicia no podia ver con su novio y solo veian cuando estaban juntas. Las noches de chicas eran para hacer todas esas cosas que no se podian hacer cuando estaban con los chicos, como criticar. Terminaron de cenar y disfrutando de la temperatura agradable de la noche se prepararon unos cocteles de frutas mientras terminaban, emocionadas, el ultimo capitulo, donde la protagonista, al fin, conseguia casarse con su amado. Lloraron lo que no esta escrito. ?Entendeis por que no podian ver esas series con los chicos? Perderian la fama de chicas fuertes. CAPITULO 2 Carlos llevaba dirigiendo la asesoria seis anos, el tiempo que hacia que se habia puesto en marcha la empresa. Era el director principal, aunque el que habia dado el pistoletazo de salida habia sido uno de sus mejores amigos. Este solo habia planteado la idea y puesto la parte economica necesaria, del resto siempre se habia encargado Carlos. El llevaba unos meses en paro, lo que habia hecho tambalear su matrimonio. Los problemas economicos habian sido motivo de muchas discusiones y no tenia claro hasta donde aguantarian esa situacion. Por suerte, cuando su amigo le dio esa opcion, no se lo penso dos veces, estaba suficientemente capacitado para dirigir una asesoria y a todo el equipo necesario. Era una buena oportunidad y la emprendio con mucha ilusion. En ese tiempo, la empresa habia funcionado con mucho exito y no habia parado de crecer, lo que le proporcionaba un buen sueldo y, asi, el fin de las discusiones con su mujer. No formaban un matrimonio sumamente unido, pero fuera de las discusiones economicas, que ya habian terminado, tenian una buena relacion. Carlos siempre la definia como <>. Su amigo ya habia recuperado la inversion inicial y, aunque colaboraba en las decisiones importantes de la empresa, le dejaba a Carlos todo lo demas. Practicamente ni aparecia por alli. El tenia su empresa de seguridad desde joven y seguia en ello (que bastante trabajo le daba ya). La asesoria para el nunca fue ni una gran ilusion ni un gran problema. Tenia un beneficio extra del que no se tenia que preocupar y encima le habia podido acomodar la vida a su amigo despues de pasar por un tiempo complicado. De las contrataciones de personal se encargaba Carlos, unica y exclusivamente. Acertando y fallando. Porque no siempre las contrataciones salian bien. En ocasiones empezaba a trabajar alguien nuevo en la oficina y ni superaba el periodo de prueba. Habia gente que no entregaba lo suficiente como para que pudiera formar parte de su equipo. Queria personas entregadas e ilusionadas con su trabajo, que fueran felices a ejercer su jornada y que dieran el cien por cien. Ir a trabajar no tenia que ser un suplicio. El departamento laboral siempre habia sido uno de sus mayores dolores de cabeza. No habia parado de crecer y solo Marta seguia desde que empezaron. El resto de departamentos tenia practicamente la misma plantilla desde los inicios. Marta empezo sola, pero al poco contrataron a una ayudante en practicas, que cuando las hubo terminado se fue a otra asesoria donde le pagaban mas. Cogieron a otro ayudante y volvio a suceder lo mismo. Carlos estaba un poco desesperado con la situacion y Marta no dejaba de presionarlo con que ella sola no podia con todo el trabajo y los estudiantes en practicas no eran la mejor opcion para darle el suficiente apoyo. No pretendia hacerle caso, seguramente los ayudantes plegaban por su culpa, y asi se lo hizo saber. Marta se estaba planteando hacer ella lo mismo e irse de alli. No se sentia valorada. Pero, cuando iba a presentar su carta de dimision, este cedio a sus peticiones y contrato a una chica joven que ya habia terminado su carrera. Resulto ser una buena profesional y una gran decision. Cuando comunico que estaba embarazada fue una alegria para todo el personal de la oficina, menos para Carlos, al que le cayo una nueva preocupacion sobre los hombros: otra vez tenia que contratar a alguien; porque despues de la baja de maternidad, seguramente le tocaria despedirla. No iba a aceptar peticiones horarias ni historias maternales. A su oficina se venia a trabajar y, como ya he dicho antes, a dar el cien por cien. Tocaba volver a empezar con las entrevistas. Y asi llego Angel. El pelirrojo empezo con muchas dudas por parte de su jefe, no tenia claro que este chico tuviera las aptitudes que el deseaba, pero aun asi decidio darle una oportunidad. No habia sido su primera opcion, pero esta en el ultimo momento le fallo, asi que tuvo que escoger al segundo candidato. A Marta le habia gustado mucho cuando lo vio caminar por los pasillos hacia el despacho el dia de la entrevista. Le mando una sonrisa que le parecio sincera y su mirada le dijo algo; algo como que este chico podria ser un buen candidato. Pero ella no tenia opcion de escoger, ella solo estaba alli para sacar faena y no dar problemas. Tuvo suerte y acabo siendo el elegido. Habia resultado ser un muchacho agradable y trabajador que se llevaba bien con todo el personal de la asesoria. Nunca habia escuchado la minima disputa a su alrededor. Desprendia simpatia por donde pasaba. Asi que, pasados un par de meses y visto que el trabajo no paraba de aumentar, Carlos decidio que se lo quedaria, independientemente de que estaba pendiente la vuelta de Monica. Finalizada la maternidad, Monica comunico que no iba a volver por el momento. Sus mellizos la demandaban veinticuatro horas al dia y ella no queria prescindir de la compania de sus pequenos. Era una madre sumamente feliz. Carlos intento que presentara una baja voluntaria en la empresa, y se lo maquillo como que se preocupaba de que pudiera ejercer de madre con total libertad, aunque lo que queria era quitarsela de encima. Monica no queria dejar del todo su vida laboral y, aunque todavia no era momento de volver, encontro otras opciones. Asi que pidio una excedencia de un ano, con la puerta abierta a alargarla otro ano mas. A pesar de no haber conseguido lo que queria, eso le dio un suspiro. Mientras durara la excedencia no le suponia ningun gasto y asi, cuando volviera, quizas lo hacia al cien por cien y no tenia que echarla. Pero, por otro lado, tenia que contratar a una tercera persona para el departamento. Empezo con las entrevistas y, para variar, el mercado no estaba boyante. Hasta que entrevisto a una chica de veintipocos, con una melena rubia lisa que le llegaba hasta el pecho. Llevaba un vestido de algodon fino, gris perla, con manga tres cuartos que acababa en sus rodillas. Las medias del tono de su piel casi no se apreciaban. Llevaba una americana negra arremangada a la altura del vestido, dejando ver sus delicadas munecas; en una de ellas llevaba una pulsera muy sutil, plateada, que tenia unas letras escritas, pero Carlos no las alcanzo a leer. Bordaba el look con unos stilettos negros, que tenian los laterales de encaje; la hicieron entrar triunfal a la entrevista. -Buenos dias. Adelante. Soy Carlos. Director de la asesoria. -Le indico sentarse en la silla del despacho que quedaba libre para todo aquel que lo visitara. Rodeo la mesa respirando profundamente para concentrarse y ocupo su lugar. -Encantada, Carlos. Mi nombre es Maria y es un placer que conteis conmigo como candidata – sonrio de la forma mas tierna y agradable. Esas sonrisas que solo ella era capaz de transmitir sin darse cuenta.

  • Dia y noche de Linda O. Johnston

    https://gigalibros.com/dia-y-noche.html

    La reportera Cara Hamilton acababa de conseguir la historia de su vida. Pero lo que la ponia mas nerviosa era el insoportable… e increiblemente atractivo ayudante del sheriff.

  • Camino de espinas de Alberto Gomez

    https://gigalibros.com/camino-de-espinas.html

    Si te dijeran que te esta prohibido amar, ?lo creerias?

  • Un estado del malestar de Joaquin Berges

    https://gigalibros.com/un-estado-del-malestar.html

    Ricardo Marco, subdirector de unos grandes almacenes, disfruta de un alto nivel de vida, pero desde hace un tiempo siente que ha renunciado a demasiadas cosas para conseguirlo y cada vez se reconoce menos en las personas de su entorno. Ese malestar se acentua cuando recibe el comunicado de su prejubilacion, y cuando su mujer, directora de una revista de decoracion, se empena en que compren sobre plano una lujosa residencia en las afueras, cuyo interior se encargara de disenar personalmente. Cuando un dia Ricardo se adentre en el mercadillo que se instala todas las semanas cerca de sus oficinas para reclamar una venta ilegal de algunas prendas, se topara con una enigmatica y hermosa joven que regenta uno de los tenderetes junto a su familia. Ricardo volvera repetidamente por alli para averiguar quienes son los que la rodean, sin sospechar que en ese mundo y entre esos tipos pintorescos tal vez encuentre un inesperado refugio, una tabla de salvacion.

  • Entre brasas de Juan Manuel Benayas

    https://gigalibros.com/entre-brasas.html

    La cocina con brasas, esta mas de moda que nunca, se desarrolla en los mejores restaurantes del mundo y tiene millones de seguidores. Una elaboracion con cierta magia cuyos secretos quedan al descubierto en este libro gracias a los conocimientos, tecnicas, consejos y recetas del maestro Juan Manuel Benayas, hijo y nieto de carboneros, y asesor y maestro de grandes cocineros y restaurantes de todo el pais.

  • Un cadaver muy frio (Las cosas y casos de la senora Starling 1) de Ana Bolox

    https://gigalibros.com/un-cadaver-muy-frio-las-cosas-y-casos-de-la-senora-starling-1.html

    Abrio los ojos como si los parpados soportasen el peso del planeta. Estaba oscuro y el aire viciado le lleno los pulmones con un olor acre. La nausea subio rapida hasta la garganta, sin avisar. Se incorporo sobre un costado y devolvio. Un dolor punzante le recorrio el cerebro, como el rayo que se ramifica con dedos cada vez mas finos hasta alcanzar el ultimo rincon del firmamento, y durante un instante la oscuridad se torno roja y se lleno de chispas que se apagaban tan pronto como se encendian. Sintio el hedor acido del vomito y tosio. Un hilillo de baba le resbalo por la barbilla y se deslizo hasta el cuello cuando se dejo caer sobre la espalda. La oscuridad volvio. ?Donde estaba? Fruncio el ceno en un intento por concentrarse y una nueva punzada de dolor le atraveso el craneo. Se llevo la mano a la frente y apreto con fuerza. Sintio un alivio pasajero, pero el dolor seguia alli, detras de las cuencas de los ojos. El ultimo recuerdo que lograba extraer de la memoria era que habia salido a realizar algunas compras para Navidad. Ya habia oscurecido y avanzaba cargada con algunas bolsas junto al Yankee Stadium. La brisa agitaba las ramas de los arboles que se alzaban ante la puerta numero cuatro. Eso podia recordarlo bien. Habia pasado por delante de ella. Despues solo era capaz de evocar el sonido de sus propios pasos alejandose de la explanada que se abria ante el estadio. A lo lejos, un semaforo parpadeaba en ambar. Luego ya no habia nada hasta aquella oscuridad. CAPITULO 2 Danny’s Coffeeshop No parecia una asesina. La anciana senora Lacey entro en el Danny’s Coffeeshop, el lugar donde se habian citado, envuelta en un abrigo de pano grueso y abrazada a su bolsito de imitacion de piel de cocodrilo, como si temiera que alguien fuera a arrebatarselo en cualquier momento. Anne Starling, parapetada tras las hojas de un ejemplar atrasado del New York Times, la observo desde la mesa. No se movio. Aunque venia bien recomendada, queria estudiarla antes de darse a conocer. Llevaba la cabeza embutida en un ridiculo sombrero de cuyo frontal, sujeto con alfileres, caia un velo oscuro, rigido como la visera del yelmo de un caballero medieval, pero que apenas le cubria la mirada huidiza con la que escrutaba a su alrededor. Parecia una abuela venerable. Cuando la telefoneo la noche anterior, la senora Lacey le conto que habia conseguido su numero a traves de una vecina, amiga de una tal senorita Tarckle que hablaba maravillas de ella. Aquel comentario encendio su vanidad, ?para que negarlo? No era tan frivola como para fingir que el hecho le ruborizo. No lo hizo en absoluto. Dejo que el halago removiera el recuerdo de la pasada primavera, cuando ella y James viajaron a Washington. Alli, junto a la avispada Jane Tarckle, habia tenido la oportunidad de resolver un caso de asesinato del que, desde luego, James no habia sabido nada. Una circunstancia que ella no estaba dispuesta a alterar, como no pensaba contarle ni una palabra de este. Si es que habia caso, naturalmente, porque durante la conversacion que mantuvo con ella, la senora Lacey no le habia parecido una mujer muy en sus cabales. Con voz misteriosa le pregunto si era posible que su vecino, el senor Snow, cuya desaparicion la inquietaba y habia motivado su llamada, hubiera sido raptado por una boa y llevado a lo largo de la enorme tuberia que el ayuntamiento habia obligado a montar en el patio interior. Le habia costado disimular la carcajada que le subio a la garganta y no llego a estar segura de si la tosecilla con la que pretendio camuflarla consiguio su objetivo. Cuando recupero la compostura, le pregunto si por casualidad estaba leyendo a Edgard Allan Poe. La senora Lacey enmudecio durante un segundo y luego exclamo una serie de agudos aaahes y ooohes, mientras farfullaba alabanzas porque habia sido capaz de averiguar la lectura con la que entretenia los largos atardeceres de invierno. Cuando, despues de colgar, James le pregunto quien habia llamado a esas horas, Anne se cuido de ocultarle a su marido la insolita conversacion, que disimulo bajo la absurda excusa de una vendedora telefonica que pretendia seducirla con las bondades de la nueva aspiradora AX7, capaz de succionar al propio Nueva York, segun le habia asegurado, de haberselo propuesto. James enarco las cejas y ella se encogio de hombros y adopto el gesto ingenuo que hasta entonces le habia proporcionado tan buenos resultados. --?Y que pinta Poe en todo esto? --le habia preguntado. Anne habia vuelto a encogerse de hombros antes de acercarse, abrazarlo y recorrerle el cuello con pequenos mordiscos. James no habia preguntado mas. Eran las diez de la noche y su marido, un bendito credulo. La sonrisa de Anne al recordar lo que habia ocurrido despues de los mordisquitos desaparecio tras la taza de cafe, de la que dio un largo sorbo antes de volver a observar a la senora Lacey. La anciana miraba a su alrededor en busca, sin duda, de la figurita de Shiva labrada en jade que Anne le habia indicado como sena para que la identificara. Por supuesto, no habia ninguna talla de aquel tipo en todo el Danny’s Coffeeshop porque Anne, despues de comprarla a precio de oro en una almoneda del Upper West Side, la habia dejado en el maletero del coche. ?Y si la senora Lacey era una espia sovietica con ganas de tomarse la revancha por aquel asunto del elefante lanudo que ella habia ayudado a resolver, pocos meses antes? La mujer se toco la rosa que llevaba prendida en el ojal del abrigo y que debia identificarla ante Anne, que entrecerro los ojos y la midio con la mirada. De ser una agente rusa, exageraba demasiado su nerviosismo, de modo que decidio que debia de tratarse de la autentica senora Lacey, una simple anciana preocupada por la desaparicion de su amigo. Anne doblo el periodico, lo dejo sobre la mesa, junto a la taza de cafe, y la saludo con la mano. La senora Lacey abrio mucho los ojos, pero no se movio. Anne se sintio estupida. Tal vez deberia haber traido consigo la figurita. Se levanto y camino hasta ella. --?La senora Lacey, supongo? --?Como lo sabe? --No es dificil: me habia citado aqui, a esta hora, con usted. Y, ademas -- Anne senalo el ojal en el cuello del abrigo--, lleva la rosa con que dijo que se identificaria. La anciana fruncio el ceno y la observo en silencio durante algunos segundos. --?Donde esta Shiva?

  • El vuelo de las perseidas de Raquel Silva Merchan

    https://gigalibros.com/el-vuelo-de-las-perseidas.html

    Helena hace las maletas y escapa del amor de su vida, Carlos. Tiempo despues regresa a su pueblo natal y debe enfrentarse a todos los fantasmas de su pasado.

  • Oliver (Australia 3) de Emma Madden

    https://gigalibros.com/oliver-australia-3.html

    -!Vamos, Sean!, corre... Agarro a su sobrino en brazos y corrio con el hasta el final del jardin para marcar un Try. El pequenajo, que solo tenia un ano y medio, no solto el balon hasta llegar a la linea de goal, tal como le habia ensenado, y se tiro con el sobre el cesped muerto de la risa. -!Sean Campbell marca cinco puntos, senores! !Bravo! !Campbell!, !Campbell! -?Que haceis? -Sophie se les acerco entornando los ojos y el nino, al ver a su madre, corrio hacia ella para abrazarse a sus piernas-. ?Que haces con el tio Oliver, carino? -Estamos aprendiendo a jugar al rugby, ?verdad, Sean? El balon que le he traido es perfecto. -Es muy bonito -inspecciono el balon pequeno y blandito que le habian hecho por encargo y luego miro a su hijo-. Que suerte tienes de que el tio te ensene a jugar al rugby, mi vida, pero ahora vamos a entrar a comer, ?quieres? -!No! -Si, si, campeon, para jugar al rugby hay que comer mucho y bien, asi que, a comer con mama, luego seguimos jugando. ?De acuerdo? -Le revolvio el pelo rubio y el asintio-. Genial. -Nosotros comemos en media hora, Oliver ?Te apetece tomar algo mientras tanto? Tengo croquetas, tortilla de patatas, jamon serrano... -Quiero de todo, eres la mejor, Sophie... espera... -se detuvo al sentir vibrar el telefono movil en el bolsillo de los vaqueros y le hizo un gesto para que entrara en la casa-. Tengo que contestar, ahora voy. -Vale... vamos, mi vida, ?tienes hambre? -Hola -Respondio siguiendolos con los ojos y su amiga Tricia, que ademas de amiga era su jefa de prensa y su asistente personal, lo saludo en su tono habitual. -Hola, macho, ?donde te metes? -Estoy en Piper Point, en casa de mi hermano William para comer una paella en familia. -?Casera? -Por supuesto, es una de las especialidades de mi cunada, que es medio espanola, ?recuerdas? -?Estais todos? -Si te refieres a los tres hermanos, si. Sashi esta como nueva y ha venido con el bebe y con Alex, tambien con mi sobrino Jackson, que ha llegado de Escocia para conocer a su hermanito, aunque se vuelve en seguida a Edimburgo. ?Tu que te cuentas? -?Cuando nacio el bebe de Sashi? -Hace un mes, dio a luz en cuatro horas y ahora esta igual que antes. Un milagro de la naturaleza. -Que envidia, dicen que eso es genetico. -Eso dice mi madre, pero no tengo ni idea. En fin, ?que necesitas?, no puedo entretenerme. -Isabella vuelve a Sydney. -... -Guardo silencio y al no recibir respuesta Tricia siguio hablando. -Ha dejado su trabajo en Wellington y pasara unos dias aqui porque se marcha a vivir con su novio a Inglaterra, la buena noticia es que ha suspendido la boda. -Madre mia -Respiro hondo pasandose la mano por la cara, porque llevaba muchas semanas intentando pasar de su ex y de su nuevo novio, y trago saliva. -Se que quieres olvidarla, pero tambien se que te mueres de ganas por tener noticias suyas. Te conozco demasiado bien, Oli. -En serio, no puedo seguir hablando, me estan esperando para comer. -Creo que esto necesitabas saberlo. Adios y portate bien, capullo. Colgo, arrepintiendose de inmediato de haber cogido el telefono a Tricia, que era amiga suya desde el instituto, una tia leal y muy divertida, aunque en lo referente a Bella solia sacarlo bastante de quicio, y penso en ella, en Bella, en Isabella Howard, su novia de siempre, la mujer de su vida, esa que lo habia dejado despues de anos de rupturas, dramas y reconciliaciones, y un agujero en el centro del estomago lo paralizo. Respiro hondo intentando calmarse, levanto la cabeza y se encontro de frente con su hermano Alex, que salia a buscarlo con un botellin de cerveza en la mano. -Tio, dijimos que nada de moviles. -Si, lo siento, pero era importante, ahora lo apago. Gracias -cogio la cerveza y camino hacia la casa tratando de espantar el desconcierto-. ?Que tal el peque? -Durmiendo, gracias a Dios, ha tomado el pecho y se ha quedado frito, pero a saber. Duerme fatal. -Bueno, es lo habitual, ?no?, es un recien nacido. -Hay otros mas tranquilos, a este le gusta la juerga. ?Estas bien? -Lo detuvo antes de entrar en la casa y busco sus ojos. -Si, ?por que? -Hace media hora estabas fenomenal y ahora te has venido abajo. ?Quien te ha llamado?, ?que te ha dicho?, ?hay algun problema? -Isabella vuelve a Sydney. -?Y? -Ha dejado su trabajo y se marcha a vivir con su novio a Inglaterra. -?Te ha llamado ella? -No, me ha llamado Tricia, ya sabes que nos conoce a los dos. -Vale, pero crei que ese tema estaba zanjado y que tu... -Si, hermano, no te preocupes, no pasa nada. Ha sido el shock inicial, pero estoy bien. Vamos a comer, me muero de ganas de probar esa paella. 1 -?Sigues a gusto en los Sydney Roosters, Oliver?, las malas lenguas aseguran que tienes ofertas para marcharte a jugar al Reino Unido. ?Es eso cierto? -Si, siempre hay ofertas, pero no es mi intencion mudarme a vivir al Reino Unido, no soportaria el clima. Bromeo, guinandole un ojo a esa chica tan guapa, la periodista de Men’s Health Australia, que le estaba haciendo una entrevista mientras un fotografo, dos asistentes, un productor, un estilista, una peluquera, una maquilladora, su representante, su jefa de prensa, su madre y dos personas que no tenia ni idea de quienes eran, los observaban atentos, y suspiro. -Me han contado que tienes familia en Escocia, eso podria facilitar las cosas ?no? -Todos los australianos tenemos familia en alguna parte. -Ya, pero igual te apetece estrechar lazos con tu familia paterna. -!Stop! -Solto Tricia muy seria y miro a la periodista desde su metro ochenta de estatura haciendola parpadear asustada-. Nada de temas personales, Lucy, y mucho menos en esa linea, en el contrato habia quedado claro. ?Necesitas que te lo ensene? -?Que tiene de malo hablar de su familia paterna? -No habla de su vida personal. -No le estoy preguntando quien es su novia o si piensa casarse este ano, le estoy preguntando por su familia escocesa, la Wikipedia dice... -Genial, ?documentas las entrevistas en la Wikipedia?, que profesional. -No te pases, Tricia, le estamos haciendo un reportaje fotografico espectacular, hemos hecho todo lo que no habeis pedido, solo necesito que me conteste a temas que vayan mas alla del rugby o de su rutina de ejercicios, ?sabes? -Y yo te repito que no vayas por ese camino o esto se acaba aqui... -Basta -levanto la mano para aplacar a Tricia, que solo estaba defendiendo su filosofia con respecto a la prensa, pero que se estaba pasando cuatro pueblos, y le sonrio-. Esta bien, no pasa nada, le contestare a Lucy un par de cosas personales para que complete su reportaje. -Tu mismo -Bufo ella, se dio la vuelta y desaparecio cabreada. -Gracias. Lucy -miro a la periodista y le sonrio-. Supongo que ya sabes que conozco desde hace poco a mi familia paterna. Es verdad que tengo tios y primos en Edimburgo, y son encantadores, pero no pienso mudarme a jugar a Escocia, ni a ningun otro equipo del Reino Unido o de Europa, me quedo en los Sydney Roosters hasta que me quieran aqui. -?Es cierto que tienes dos hermanos en Australia? -Dos hermanos, dos cunadas y tres sobrinos. Todas personas anonimas a las que quiero, con las que paso mucho tiempo y de las que no voy a dar mas detalles para respetar su intimidad. -?Por que ahora usas el apellido Campbell?, durante anos solo fuiste Oliver Watson, es... -Mi apellido es compuesto, me llamo Watson-Campbell desde siempre, mis padres lo decidieron asi, sin embargo, cuando entre a jugar en la liga profesional me empezaron a llamar solo Watson y ahora, desde hace un tiempo, la prensa usa el apellido completo. No es algo que yo decida o imponga o... -?No es un homenaje a tu padre que salio a la luz tras anos de permanecer en el anonimato? -Acabo de decir que no es algo que yo haya decidido o haya impuesto -Respondio un poco aspero y ella sonrio. -Es muy curioso que muestres tanto celo en lo referente a tu entorno familiar paterno, porque siempre has sido muy abierto con tus fans, con la prensa... -Bueno, hay cosas que son sagradas y me gusta respetarlas. -Acabas de cumplir treinta y dos anos, ?has pensado en sentar la cabeza?, ?casarte y ser padre? -Me encantaria ser padre, no se si llegare a casarme, pero espero, algun dia, formar una gran familia. -?Que buscas en una mujer? -No se, aun no lo tengo claro -Volvio a bromear para quitar hierro a la situacion, y miro a su madre, que observaba la escena con el ceno fruncido. -?Que opinas de ser uno de los hombres mas deseados del pais y el australiano mas deseado del mundo? -?Quien dice eso? -Una encuesta de nuestra revista y de otros medios de comunicacion. -?En serio? -?No te condiciona tu aspecto fisico?, obviamente eres muy atractivo, no puedes negar el efecto que produces en las demas personas. -No se de que me hablas.

  • Pachinko de Min Jin Lee

    https://gigalibros.com/pachinko.html

    Yeong-do, Corea, 1911

  • El secreto del orfebre de Elia Barcelo

    https://gigalibros.com/el-secreto-del-orfebre.html

  • Yo, La Peor de Monica Lavin

    https://gigalibros.com/yo-la-peor.html

    La novela definitiva sobre sor Juana Ines de la Cruz. Una mujer fuera de epoca, una escritora flagrante, apasionada y sensual que entregada a la razon y consagrada en su fe, tomo los retos mas grandes para lograr que su alma se dejara conducir por los seductores caminos del conocimiento.

  • Bancos de niebla de

    https://gigalibros.com/bancos-de-niebla.html

    Un misterio, un joven con ansiedad social, una travesia por algunos aspectos de la psicologia humana, personajes tan diferentes entre si que parece imposible que el destino cruce sus caminos. En la ultima novela de Ariel Zorion todo es posible. Las cosas no son lo que parecen, las situaciones cambian de manera inesperada. ?Y que es un libro si no un viaje indescriptible?

  • Y vendra la oscuridad de Katy Rose Pool

    https://gigalibros.com/y-vendra-la-oscuridad.html

    Durante generaciones, los Siete Profetas usaron sus visiones del futuro para poner fin a las guerras y mantener unidas las naciones: hasta que llego el dia en que desaparecieron, cien anos atras. Lo unico que dejaron fue una ultima profecia, secreta, que predecia la llegada de la Era de la Oscuridad y el nacimiento de un nuevo Profeta que podia salvar al mundo… o causar su destruccion.
    En mitad del caos, cinco vidas se cruzaran:
    Un principe exiliado de su reino.
    Una asesina implacable conocida como la Mano Palida.
    Un lider leal en una encrucijada entre su deber y su corazon.
    Un jugador que tiene el poder de encontrar a cualquier persona o cualquier objeto.
    Una chica al borde de la muerte y a punto de darse por vencida.
    Uno de ellos, o todos ellos, podrian desencadenar el fin del mundo.
    ?Seran los salvadores o los destructores de la humanidad?

  • Fantasmas de luz de Agustin Fernandez Paz

    https://gigalibros.com/fantasmas-de-luz.html

    Desde hai trinta e cinco anos, Damian traballa como operador de cabina no mellor cine da cidade. Cando recibe a noticia de que a sala vai desaparecer e que todos os empregados seran despedidos, a sua vida experimenta un cambio extraordinario que tamen afecta a Marga, a sua dona. Dun xeito progresivo, os seus corpos comezan a se volver transparentes, invisibles aos ollos das persoas que viven ao seu redor.Empregando recursos da novela fantastica e combinando o suspense cunha delicada melancolia, Fantasmas de luz falanos dun dos grandes dramas contemporaneos: o da exclusion e a invisibilidade a que se ve sometida unha parte da sociedade.Fantasmas de luz tamen quere ser unha homenaxe ao cine, tanto as vellas salas que foron esmorecendo como as grandes peliculas que, sen ser a vida mesma, <>.

  • La rapsodia de la gata Holmes de Jiro Akagawa

    https://gigalibros.com/la-rapsodia-de-la-gata-holmes.html

    Tras recibir una amenaza de muerte, la joven violinista Mari Sakurai permanecera aislada junto al resto de finalistas de un prestigioso certamen musical en una residencia a las afueras de Tokio. El detective Katayama es el elegido para proteger a los participantes. Durante la semana que estaran incomunicados, Katayama, junto a la perspicaz gata Holmes, se enfrentara a un sinfin de sucesos inesperados y desvelara la oscuridad que se esconde tras las bambalinas del brillante escenario musical. Un prestigioso concurso de violin. Siete finalistas. Una amenaza de muerte. Una residencia a las afueras de Tokio. Una espiral de crimenes... El regreso de la Gata Holmes, uno de los personajes mas populares y queridos de la ficcion nipona.

  • Besos de Copos de Nieve de Dawn Brower

    https://gigalibros.com/besos-de-copos-de-nieve.html

    Mack Taylor ha llevado una vida encantadora desde que se fue de su casa y al escandalo que dejo atras. Su pasado lo persigue y lo lleva por un camino de caos personal. Las pesadillas lo atormentan hasta que se ve obligado a enfrentar las decisiones que ha tomado. En un intento por corregir los errores de su pasado y encontrar la manera de seguir adelante con su vida, regresa a casa para pedir perdon.

  • Voragine 1 de Estefania Blanco Reyes

    https://gigalibros.com/voragine-1.html

    ?Estarias dispuesto a abandonar tu propia humanidad por salvar al resto del mundo?

  • Kiss Me 3, Inmune a ti de Elle Kennedy

    https://gigalibros.com/kiss-me-3-inmune-a-ti.html

    Seis mensajes me esperan cuando reviso mi telefono movil a la salida del gimnasio del campus la noche del viernes. Son todos de Sean, mi ex desde anoche. Y aunque su progresion emocional, de suplica a cabreo, no me pasa desapercibida, no puedo evitar fijarme en sus errores gramaticales. Merezco mas de esto. <>, en vez de <>. Y dudo que el culpable sea el autocorrector, porque Sean no es precisamente el mas listo de la clase. Bueno, eso no es del todo cierto. Es superinteligente para algunas cosas. Como por ejemplo... para el beisbol. En serio, podria recitar las estadisticas al reves, incluso las que se remontan a los anos sesenta. Pero todo lo que tenga que ver con los libros no es su fuerte. Ser un NOVIO MARAVILLOSO tampoco entra dentro de su lista de fortalezas, por lo menos, no en los ultimos dias. Nunca he querido ser una de esas chicas que corta y vuelve con el mismo chico una y otra vez. De verdad pensaba que yo era mas fuerte, pero Sean McCall me tiene atrapada desde mi primer ano en la Universidad Briar. Me conquisto con su look pijin y su sonrisa de nino pequeno. Esa bonita sonrisa, torcida, con sus hoyuelos... y llena de promesas. Miro mi telefono de nuevo y mi desconfianza crece como la yedra del edificio que tengo a mi espalda. !Argh! ?De que quiere hablar? Anoche ya nos dijimos todo lo que nos teniamos que decir. Cuando le asegure que habiamos terminado, antes de salir corriendo de su casa en la fraternidad, iba muy en serio. Hemos terminado de verdad. Esta es nuestra cuarta ruptura en tres anos. No puedo seguir haciendome esto a mi misma, no puedo seguir en este circulo retorcido de alegria y dolor, sobre todo cuando la persona con la que se supone que deberia estar construyendo un futuro esta decidida a lastrarme. Aun asi, me duele el corazon. Es dificil dejar marchar a alguien que ha sido una parte muy importante de tu vida durante tanto tiempo. Y es aun mas dificil cuando esa persona se niega rotundamente a dejarte marchar. Suspirando, bajo corriendo las escaleras y me dirijo al sendero empedrado que atraviesa serpenteando el campus. Por lo general, me tomo mi tiempo en admirar el paisaje: los magnificos edificios antiguos, los bancos de hierro forjado, los inmensos arboles. Pero esta noche solo quiero correr hasta mi residencia, taparme con el edredon hasta la cabeza y aislarme del mundo. Por suerte puedo hacerlo, porque mi companera de cuarto, Hannah, esta fuera este fin de semana, lo que significa que no podra darme lecciones sobre los peligros emocionales que tiene revolcarme en mi propia miseria. Aunque anoche no me dio ninguna leccion. No, en vez de eso, asumio la responsabilidad de mejor amiga y lo hizo fenomenal. Despues de salir de la casa de Sean, Hannah me esperaba en nuestra sala comun con un bote de helado, una caja de Kleenex y dos botellas de vino tinto, y se quedo despierta hasta la madrugada pasandome panuelos de papel y escuchando mi incoherente balbuceo. Las rupturas son una MIERDA. Siento que he fracasado totalmente. No, mejor dicho, me siento como una desertora. El ultimo consejo que mi madre me dio antes de morir fue que nunca me diese por vencida en el amor. En realidad, ya me habia inculcado eso mucho antes de ponerse enferma. No conozco todos los detalles, pero no era ningun secreto en casa que el matrimonio de mis padres estuvo a punto de desmoronarse mas de una vez durante los dieciocho anos que estuvieron juntos. Pero se esforzaron en seguir adelante. Trabajaron duro por la relacion. Cada vez que pienso en que ayer deje a Sean, se me revuelve el estomago. Tal vez deberia haber luchado mas por nosotros. A ver, yo se que el me quiere... Si te quisiera, no te habria dado un ultimatum. Has hecho lo que habia que hacer, me asegura una voz ronca. Mi garganta se contrae cuando reconozco la voz en mi cabeza. Pertenece a mi padre, que resulta ser mi mayor defensor y admirador. A sus ojos, nada de lo que hago es malo. Es una lastima que Sean no sea capaz de verme a traves de esa lente. Mi telefono vibra cuando estoy a cinco minutos de la Residencia Bristol, donde comparto una suite de dos dormitorios con Hannah. Mierda. Otro mensaje de Sean. Y doble mierda porque dice: Siento mucho habert insultado, amor. No lo decia en serio. Estaba enfadado. Significas todo xa mi. Espero q lo sepas. Un segundo mensaje aparece en la pantalla: Voy a tu habita despues de clase. Asi podremos hablar. Me detengo en seco, una sacudida de panico sube por mi espina dorsal. No tengo miedo de Sean, al menos no en el sentido fisico. Se que el nunca me pondria la mano encima o me montaria un pollo de los gordos. Pero me da miedo su capacidad de persuadirme con palabras bonitas. Es superbueno en eso. Todo lo que tiene que hacer es llamarme <> y sacar a relucir su adorable sonrisa, y estoy perdida. La ira, el miedo y el cabreo lidian una batalla para captar mi atencion mientras releo sus mensajes. Es un farol. No va a venir sin ser invitado, ?verdad? Joder, joder, joder. Con dedos temblorosos, busco el numero de Hannah. Dos tonos mas tarde, la voz tranquilizadora de mi mejor amiga resuena en la linea. --!Hola! ?Que tal? ?Estas bien? Puedo oir a alguien charlando en el fondo. Una voz femenina: Grace Ivers, la novia de Logan. Eso significa que Hannah y su novio, Garrett, ya han salido para pasar el fin de semana en Boston. Me invito a ir con ellos, pero lo rechace porque no me apetecia ir de sujetavelas por partida doble. ?Dos parejas enamoradas con locura y yo? No, gracias. Ahora desearia haber aceptado la invitacion porque me quedo sola este fin de semana y resulta que Sean quiere <>. --Sean va a venir a casa esta noche --suelto. Hannah grune. --?Que? !NO! ?Por que le has dicho que te parece bien que...? --!Yo no le he dicho nada! Ni siquiera me ha preguntado si me parecia bien. Solo me ha enviado un mensaje diciendo que se pasa luego. --Pero ?que cono dice? --suena tan indignada como yo me siento. --Muy fuerte, ?verdad? --Mi panico se desborda--. No puedo verle, Han. Todavia estoy demasiado sensible por la ruptura. Si se acerca a mi, podria terminar volviendo con el. --Allie... --?Crees que si apago todas las luces y cierro la puerta pensara que no estoy en casa y se ira? --?Conociendo a Sean? Se quedara esperando en la puerta toda la noche -- contesta Hannah--. ?Sabes que? No deberia haber aceptado ir al partido de los Bruins. Deberia estar en casa contigo. Espera, le digo a Garrett que de la vuelta... --Ni de cona --interrumpo--. NO vas a cancelar el viaje por mi. Esta es tu ultima oportunidad de hacer algo divertido juntos. El novio de Hannah es el capitan del equipo de hockey de Briar, lo que significa que su calendario de entrenamientos y partidos estara hasta arriba ahora que la temporada ha comenzado. Y eso quiere decir que Hannah no le podra ver mucho. Me niego a ser la persona que arruina un fin de semana de libertad para ellos. --Solo quiero consejo. --Trago saliva--. Asi que, por favor, dime que puedo hacer. ?Le pregunto a Tracy a ver si me puedo quedar en su habitacion? --No, es mejor que no estes en la resi si Sean va a estar vagando por los pasillos. Tal vez Megan... No, espera, su nuevo novio ha venido de visita este fin de semana. Probablemente querran estar solos. --Hannah parece reflexionar--. ?Y Stella? --Ella y Justin acaban de irse a vivir juntos. Justo la semana pasada. No creo que les apetezca una invitada de ultima hora. --Espera un segundo. --Hay otra larga pausa. Oigo la voz apagada de Garrett, pero no puedo entender lo que esta diciendo. Vuelvo a oir a Hannah--. Garrett dice que te puedes quedar en su casa este finde. Dean y Tucker estaran alli, asi que si Sean se entera de donde estas y se pasa por alli, le mandaran a la acera de una patada. --El murmullo de voces llena el fondo de nuevo--. Puedes dormir en el cuarto de Garrett --anade. La indecision me sacude a fogonazos. A ver, todo esto es ridiculo. No puedo creer que este pensando en permitirle a Sean que me eche de mi propia residencia... Pero mi mente se inunda con imagenes de el aporreando mi puerta. O peor aun, de el imitando a John Cusack en la peli Un gran amor fuera de mi ventana con unos altavoces. Uf, ?y si pone la cancion de Peter Gabriel? ODIO esa cancion. --?Seguro que les parece bien a todos? --pregunto. --Si. Totalmente bien. Logan esta escribiendo a Dean y a Tucker en este momento para informarles. Puedes ir en cualquier momento. Una oleada de alivio me inunda junto con una punzada de culpabilidad. --?Me pones en manos libres? Quiero hablar con Garrett. --Por supuesto. Un segundo. Un instante despues, la voz profunda de Garrett Graham aparece en la linea. --Las sabanas limpias estan en el armario de la ropa y es posible que quieras llevar tu propia almohada. Wellsy piensa que las mias son demasiado blandas. --Es que SON demasiado blandas --protesta Hannah--. Es como dormir en una nube de azucar. --Es como dormir sobre NUBES esponjosas --corrige Garrett--. Creeme, Allie, mis almohadas son lo mas. Pero aun asi, llevate la tuya, por si acaso. Me rio.

  • Romina Rossi de Angella Aryes

    https://gigalibros.com/romina-rossi.html

    Romina Rossi, en la recta final de su carrera tiene tantos suenos: ejercer su carrera y realizarse como profesionista, clasificar para las Olimpiadas, establecerse en la empresa familiar; sin embargo, un golpe del destino la pone frente a frente de Leonardo Bianchensi, un hombre 11 anos mayor que ella, dando un giro a su mundo de 180 grados. Leonardo Bianchensi, considerado “El Midas del siglo XXI”. Controlador, perfeccionista, su mundo se pone de cabeza al saber que la nina a quien conocio y aprendio a querer a traves de las platicas de su mejor amigo y hermano de Romina, Rafael, ha secuestrado su corazon como una atractiva mujer y sin que el se diera cuenta.
    ?Que hara Romina cuando su mundo estable y siempre bajo la proteccion de su familia, se tambalea ante la nueva perspectiva que se vislumbra para ella?
    ?Que hara Leonardo para manejar la necesidad de proteger y control a Romina? Ambos tendran que, Aprender a amar.

  • Entre leyendas de Lourdes Tello

    https://gigalibros.com/entre-leyendas.html

    Gloria esta a punto de cambiar su vida cuando vuelve a encontrarse con Raul, su amor del instituto. Ella, la siempre timida y sensata Gloria, esta inmersa en la duda de lo que podria suceder si se entregara al deseo que lleva ocultando tantos anos. Mientras, su extrovertida amiga Clara la anima a que se deje llevar por la nueva vida que las espera. Hasta que David, un guapo y extrovertido companero aparece para tratar de ponerla sus dias patas arriba.

  • Inteligencia artificial de Pablo Rodriguez

    https://gigalibros.com/inteligencia-artificial.html

    Los datos son el combustible de la inteligencia artificial. Dicen tanto de nuestro comportamiento e interacciones y de como nos relacionamos con el entorno que, con la ayuda de potentes ordenadores y sofisticadas tecnicas estadisticas, y en conjuncion con la inteligencia artificial, pueden transformar para mejor la vida de millones de personas.

  • La sombra de una mentira (Bilogia Skye 1) de Yolanda Revuelta

    https://gigalibros.com/la-sombra-de-una-mentira-bilogia-skye-1.html

    Madison McAllen vive en Georgia. Es pintora y su mundo se tambalea cuando descubre una carta que su madre le ha dejado antes de morir. Su primera opcion es olvidarla y seguir con su vida, pero la necesidad de saber de donde viene y quien es su familia es cada vez mayor.
    Madison emprendera un viaje del que quiza no pueda regresar jamas.

  • Comenzar de nuevo de R.m. De Loera

    https://gigalibros.com/comenzar-de-nuevo.html

    El informe de ventas de fin de ano no saldra a tiempo y el empleo de Alcine Varga, una contable hungara, depende de una buena presentacion ante sus jefes, sobre todo el. Cedric Berger, el director de ventas, un suizo con ojos aguamarina, a quien hace tres anos encontro en su oficina con otra mujer. Sin embargo, los dos tienen algo en comun. ?Podra Alcine olvidar esa primera impresion y continuar? O ?Su similitud en personalidades sera un obstaculo para comenzar de nuevo?

  • Tu reflejo – Claudia Cardozo de Claudia Cardozo

    https://gigalibros.com/tu-reflejo-8211-claudia-cardozo.html

    Lorraine es una joven que suena con convertirse en una afamada disenadora de modas. Alegre, vivaz y un tanto alocada, solo piensa en el ahora y en la vida que tendra una vez que consiga cumplir sus metas. Tiene buenos amigos y un novio que esta a punto de sumarse a su lista de fracasos amorosos; el unico hombre que le ha llamado realmente la atencion y por quien lleva anos suspirando es Eric, pero ellos no tienen nada en comun, y con su historial de miedo al compromiso seguro que el intentar algo con el seria una mala idea.

  • Ondina o la ira del fuego de Irene Gracia

    https://gigalibros.com/ondina-o-la-ira-del-fuego.html

    Un teatro en llamas celebrando las nupcias del fuego y el agua. Una representacion convertida en una hoguera en mitad de la noche, clausurando las funciones de Ondina, la primera opera del Romanticismo aleman, compuesta por el escritor E. T. A. Hoffmann, amante de los cuentos de terror y bebedor inveterado. Un agape tras las llamas en el que tambien se desata un incendio, un banquete baquico donde las narraciones fluyen tan deprisa como el vino y el deseo. Un enigma que se desliza por el cuerpo y el alma de los asistentes: ?quien ha quemado el recinto y desea el cese del espectaculo? ?Es la envidia una pasion cuyo poder supera todas las creaciones del arte?

  • Sinfin de Martin Caparros

    https://gigalibros.com/sinfin.html

    Sinfin es una distopia hiperbolica que orbita alrededor de la gran obsesion humana: la inmortalidad. Una novela en la que el escritor y periodista argentino Martin Caparros combina lo mejor de la escritura periodistica y la ficcion.

  • Hasta que me recuerdes (Fragiles 1) de Valentina R. Anderson

    https://gigalibros.com/hasta-que-me-recuerdes-fragiles-1.html

    Mis dos amigos y un chico, ?Un chico? No, no. Bueno, si.Ya me estaba resignando y perdiendo la esperanza de hablarle. Porque Dorian no hablaba nunca, y eso complicaba las cosas.Hasta que un dia, todo cambia. Y cuando digo todo es TODO, porque a partir de ese momento, lo que sucede empieza a tener una razon mas que clara. Eso asegura una excelente explicacion en el segundo en que esa mascara de perfeccion se rompe. Ya no existian los recuerdos, y los que quedaban eran dolorosos.

  • En suenos fue de Una Fingal

    https://gigalibros.com/en-suenos-fue.html

  • Yo no soy de las que se enamoran de C. J. Benito

    https://gigalibros.com/yo-no-soy-de-las-que-se-enamoran.html

    Tania es una chica rebelde, alocada y divertida que vive su vida sin complicaciones, no es de esas que se enamoren o crean en el amor, demasiados palos le ha dado la vida ya.
    Su trabajo en la cafeteria es insufrible, no lo soporta, pero con los tiempos que corren, cualquiera se atreve a dejarlo. Se pasa el dia sirviendo cafes, cervezas y algo de picar a los aburridos clientes. !Vamoooos, una vida de pelicula!
    Todo cambiara para ella cuando su jefe contrate a un cocinero, arrebatador, guapo, sexy y un completo idiota. ?Sera Tania capaz de aguantar a este tipo tan irritante?

  • Una noche con su ex de Katherine Garbera

    https://gigalibros.com/una-noche-con-su-ex.html

    El reencuentro inolvidable de dos amantes.

  • La ciudad de las viudas de Paloma Sanchez Cortes

    https://gigalibros.com/la-ciudad-de-las-viudas.html

    Esta novela la escribi durante varios anos pese a ser corta y la acabe en 2005. La he reescrito varias veces. Y la historia que subyace se me ocurrio al leer un articulo en un semanario de los domingos y fue asi como la comence. Nuestra protagonista Andrea tiene que hacerse cargo de una herencia al fallecer su abuela y es asi viajando a la tierra de sus padres como descubrira un gran secreto de su pasado y encontrara su destino. Por el tema que toco he de comentar que esto es solo una historia de ficcion. Nada que ver con la realidad. No voy a hacer spoilers ya os ireis enterando de a que me refiero. Espero que os guste. Es una historia en la que caben el misterio, los sucesos paranormales, el romance y los secretos del pasado de la protagonista. Es muy distinta a lo que he publicado hasta el momento y solo espero que la disfruteis y me pongais vuestras opiniones en Amazon. Os doy las gracias por adelantado por escogerme y leer esta historia a la que siempre he tenido especial carino. CAPITULO 1 La primera vez que oi hablar de La Ciudad de las Viudas creo que tendria alrededor de unos cinco anos. Fue mi abuela quien me conto la historia. Ella era una gran contadora de cuentos. Y ese, era mi favorito, aunque pueda resultar extrano. Es la historia de una pequena ciudad de provincias llamada Las Viudas aunque se la conocia mas popularmente por el sobrenombre de La Ciudad de las Viudas. Todo el mundo o al menos casi toda su poblacion, estaba compuesta por mujeres viudas de todas las edades aunque tambien habia algunos hombres, hijos y ancianos solteros que nunca habian contraido matrimonio. Asi comenzaba el cuento y entonces era yo la que preguntaba: --Abuela, y ?por que eran viudas? --y mi abuela replicaba--. Porque los maridos de esas mujeres se morian al poco de casarse en rarisimas circunstancias. Aquel lugar estaba maldito decia mi abuela, todo aquel que se casaba terminaba cavando su propia tumba. La maldicion de la gitana era la culpable de todo. Hacia como unos 85 anos, habia llegado a la ciudad un circo, con sus carromatos y sus artistas, en su mayoria gitanos. Parecia ser que una de aquellas mujeres, que iba vestida como una zingara y que se dedicaba a leer el futuro, se enamoro de un guapo mozo que habitaba en el lugar. Se trataba de un mozo rico que le prometio matrimonio. Aquel la dejo encinta y no quiso casarse con ella y la gitana lanzo su maldicion: todo hombre oriundo de aquella poblacion que contrajera matrimonio no viviria mucho tiempo y aquel lugar quedaria lleno de mujeres viudas, hasta que pronto quedara despoblado por la ausencia de natalidad. La unica forma de huir de aquella maldicion era escapar de alli, vivir en otro municipio, pero a veces, la maldicion, alcanzaba a aquellos que se creian a salvo de ella. Cuando yo le pregunte a mi abuela si habia algun modo de romper aquel hechizo me dijo que si, que solo si un descendiente varon de la gitana se enamorara y casara con una mujer descendiente de aquel mozo, la maldicion terminaria y ya nunca mas alcanzaria a ninguno de sus habitantes. Aquel relato me subyugaba. Se lo hacia repetir una y otra vez. Y la abuela me lo contaba a reganadientes. Solo cuando me fui haciendo mayor me percate de la mirada acuosa y triste que se le ponia a mi abuela cuando me contaba aquel cuento. Jamas de nina cai en la cuenta de cuanto le afectaba aquella historia que yo creia de ficcion. No fue hasta que cumpli 32 anos que fui atando cabos. Fui criada por mi abuela ya que mis padres murieron cuando yo era todavia un bebe, aunque aun no sabia como, puesto que mi abuela nunca quiso contarmelo. Era un secreto que ya no podria revelarme. Una manana, al entrar en su dormitorio, la halle extranamente quieta y palida. Cuando la toque para despertarla su piel estaba extremadamente fria y entonces comprendi que la habia perdido para siempre. Nadie que no haya perdido a un ser querido puede saber lo desamparada y sola que me encontraba. El dolor de aquella perdida, de aquella mujer que era la unica madre que yo habia conocido fue inmenso. Tuve que hacerme cargo de su entierro y de su funeral, al que acudieron pocas personas, amigos mios y algunos vecinos del barrio. Pase unos dias muy malos tras el entierro de mi abuela. Lucinda se habia ido, con ochenta y cinco anos recien cumplidos. Habia sido mi madre y aunque siempre me habia educado de un modo un poco estricto perderla habia sido como un hachazo inesperado. Tenia buena salud y no esperaba que un ictus cerebral se la llevara de mi lado de forma tan rapida. Ya no tenia mas familia y saber que estaba sola en el mundo me desolo por completo. Pase unas semanas en casa sola sin saber que hacer, sabiendo que la unica persona a la que amaba ya no estaria mas a mi lado. Fue duro tener que recomponerme sobre todo porque en ese momento no tenia un trabajo al que dedicarme para no pensar tanto en su fallecimiento y a pesar de que algunos amigos estuvieron ahi para consolarme fue un trago muy dificil de digerir. A los pocos dias recibi una llamada de un despacho de abogados que me notificaba que mi abuela habia dejado escrito un testamento y que yo, era la unica beneficiaria. Hasta el momento no habia imaginado que mi abuela tuviera alguna propiedad que dejarme en herencia que no fueran los escasos muebles y enseres de la casa donde viviamos, que ni siquiera era nuestra. Decidi aquella tarde acudir al bufete de aquel letrado porque me moria de curiosidad por saber que era lo que me tenia que decir. Cuando atravese el umbral de la oficina de Don Jose Miraflores me encontre ante un despacho austeramente amueblado, que contaba con los muebles justos, a saber: un escritorio con su correspondiente asiento, una libreria y unas paredes que aparecian ante mi desnudas de cuadros o de cualquier otro adorno a excepcion, claro esta, del titulo de abogado que se encontraba suspendido en el aire en un marco bastante antiguo y ya de por si un tanto estropeado. Tras la mesa se encontraba un senor de mediana edad, con una calva incipiente y unas gafas de cristal con un aumento tal que su mirada verde aparecia ante mis ojos multiplicando por dos su tamano. El buen hombre era bajito, segun pude comprobar cuando se incorporo de su asiento para estrecharme la mano; bajito y rechoncho. Le sobraban algunos kilos, pero eso si, parecia muy agradable, o al menos esa era la impresion que me causaba su rostro; una cara normal, ni guapo ni feo, pero si graciosa, sobre todo por el modo que tenia de abrir los ojos, muy, muy abiertos con una expresion de sorpresa continua. Llevaba un pequeno bigotito e iba vestido con un traje algo pasado de moda. --Encantada de recibirla, siento mucho la muerte de su abuela. --Muchas gracias. --Sientese por favor. --Gracias, de modo que mi abuela ha dejado testamento. --Pues si, hace cosa de un ano vino aqui y me nombro su albacea. Espere que busque el documento, si, aqui esta. --Saco un sobre lacrado de un cajon y lo abrio, extrayendo el documento que me depararia algunas sorpresas. --Pues bien, creo que le interesara que le lea el documento. --Como usted supone si, adelante. --Bien pasare por alto el lenguaje juridico, en resumen que su abuela le lega una casa en Las Viudas, un pueblo pequeno conocido popularmente como La Ciudad de las Viudas y el dinero que guardaba en su cuenta corriente, cantidad que asciende a 12 millones de pesetas. --?Ha dicho usted La Ciudad de las Viudas? ?Pero ese lugar existe? --Claro que si --se levanto y extrajo de una estanteria un atlas de Espana.

  • Ocultos de Jordi Sierra I Fabra

    https://gigalibros.com/ocultos.html

    ?Quien no ha oido hablar alguna vez de los libros prohibidos?

  • El honor de Preston de Mia Sheridan

    https://gigalibros.com/el-honor-de-preston.html

    <>. Annalia se ha criado en la granja de los Sawyer, y ha crecido junto a los hijos gemelos de los duenos: a Cole le dio su primer beso, pero con Preston le une algo mas, algo mucho mas intenso, y ella sabe que es amor puro. Preston ama profundamente a Annalia desde siempre, pero su sentido del honor, por su familia, por su gemelo, le impide conquistarla. Hasta que no puede resistirse mas, y durante una calurosa noche de verano en la que sus mundos --y sus cuerpos-- impactan, se desencadena una serie de acontecimientos que alteraran sus vidas para siempre y que provocan que Annalia desaparezca. Pero Annalia regresa a la granja pasado un tiempo para reclamar lo que tanto ansia su corazon, y se encontrara a un Preston que no sabe si puede perdonarla y que no quiere arriesgarse a volver a sufrir. ?Impediran el orgullo y la amargura que Preston se abra a lo unico que ha anhelado siempre? ?Podra Annalia arreglar algo que esta irremediablemente roto? ?Se puede perdonar lo imperdonable?

  • Trilogia Oli de Luis A. Santamaria

    https://gigalibros.com/trilogia-oli.html

    EL SECRETO DE OLI:
    OS CONTARE LA HISTORIA DE COMO FUI ENGANADO POR LA HISTORIA QUE MAS QUERIA.
    Asi comienza Alfonso Morales el relato sobre como, hace 23 anos, se vio sumergido en una atipica historia con una joven ambarena que le cambio la vida.
    En la actualidad, Oli, un entrometido nino de diez anos, descubre que una enfermedad letal amenaza la vida de su madre. Inmediatamente construye en su peculiar imaginacion un plan para salvar a su familia. Para ello cuenta con la ayuda del ‘Yayo’, sarcastico cirujano retirado, conocido por los inmorales tratos utilizados con sus discipulos y que tiene buenas razones para no preocuparse por las consecuencias del manana. Juntos se adentraran en los oscuros misterios de la familia y en una trama en la que saldran a la luz algunos turbulentos sucesos ocurridos en el pueblo pesquero de Ambar: venganzas, corrupciones, traiciones... y un secreto que cambiara el destino de todos para siempre.

  • 4:36 de Anna De Ulibarri

    https://gigalibros.com/4-36.html

    Ana Moreno es una joven inteligente, imaginativa y extremadamente sensible que viaja a un pequeno poblado de Mexico para localizar una pintura novohispana como parte de la investigacion de su tesis de historia, ahi, sin embargo, el destino la llevara a descubrir en las ruinas de un convento franciscano, un viejo manuscrito que cambiara el rumbo de su vida...

  • Vertigo por perderme en ti, Rebeca Banuelos Ortiz de Rebeca Banuelos Ortiz

    https://gigalibros.com/vertigo-por-perderme-en-ti-rebeca-banuelos-ortiz.html

  • La ciudad sentida de Manuel Longares

    https://gigalibros.com/la-ciudad-sentida.html

    Un juego de ficciones y certezas, originalidad y vanguardia. Una ciudad que alberga un secreto…

  • Crimen perfecto de Brenda Novak

    https://gigalibros.com/crimen-perfecto.html

    Esos tipos que mataban a sus esposas no tenian la menor idea de como hacer las cosas bien, de como liquidarlas y salir despues de rositas. Malcolm Turner fruncio el ceno disgustado mientras aparecian los creditos que senalaban el final de un programa basado en crimenes reales que acababa de ver en la television. El de aquel dia habia tratado el caso de un enfermero que habia asesinado a su esposa, una mujer rubia y respondona. Por lo que a Malcolm concernia, se merecia la muerte, porque se habia comportado como una autentica perra. ?Pero que clase de estupido hablaba con nadie de cloruro de succinilcolina justo antes de utilizarlo para poner fin a una vida? --Que estupidez --musito Malcolm. Miro de nuevo a su esposa, que dormia a su lado. Cuando el matara a su mujer y a su hijastro, nadie se haria ni una sola pregunta. Creerian exactamente lo que queria que creyeran, porque el sabia lo que se hacia. No podia ser de otra manera. Al fin y al cabo, llevaba quince anos trabajando como policia. Capitulo 1 Mary tenia muy buen aspecto. Mejor que cuando estaba en el instituto. Habian aumentado sus curvas, su rostro mostraba una nueva sofisticacion y parecian ocultarse muchas cosas tras su sonrisa. Pero se mostraba recelosa. El divorcio le habia pasado factura. Y estaba completamente entregada a sus dos hijos. Malcolm, que estaba parcialmente oculto tras un alamo, cambio de postura y se agacho al oir el ruido de un motor. A juzgar por el volumen de la musica de lo que parecia ser un potente automovil, el conductor del coche que se acercaba debia de ser un adolescente tan ensimismado y despistado como todos los de su edad. Pero aun asi, no queria que le viera mirando por la ventana de Mary. El coche, con los bajos atronando a traves de los altavoces, paso sin reducir la velocidad. El sonido de la musica y del motor se fueron desvaneciendo y el vecindario volvio a quedar envuelto en el silencio de la noche. Aquella era la hora en la que a Malcolm le gustaba contemplar a Mary. Pero a veces, si pensaba que habria vuelto ya del trabajo, tambien se acercaba de dia. Desde que se habia quedado sin trabajo le resultaba dificil llenar las veinticuatro horas del dia. Su nueva vida no se parecia en absoluto a lo que habia imaginado cuando habia comenzado a planificarla. Echaba de menos a sus viejos conocidos, se moria de ganas de ponerse en contacto con alguno de ellos, pero todos le daban por muerto y el preferia que asi fuera. A lo mejor esa era la razon por la que, al cabo de tantos anos, se habia decidido a localizar a su primer amor y le habia seguido hasta California. De otro modo, no tendria ningun sentido aquel impulso de reencontrarse con el pasado. Veinte anos atras, se habia alejado de su lado sin preocuparse si quiera. Se habia casado dos veces, se habia divorciado una y… No queria pensar en lo que le habia hecho a su segunda esposa. No se arrepentia de haberla matado, ni de haber matado a su hijastro. Se lo merecian. Pero desde que se habia jugado la mayor parte del dinero del seguro que se habia llevado de Jersey, se veia obligado a vivir en casas miserables que alquilaba en areas rurales, en las que el olor a estiercol era tan fuerte que a veces se sentia como si estuviera rodeado de excrementos de animales. Era dificil conseguir algo mejor cuando solo tenia acceso a trabajos en companias de seguros de segunda categoria por los que le pagaban poco mas que el salario minimo. Maldijo en silencio al recordar su ultimo empleo. No le molestaba tanto lo exiguo del salario como la falta de respeto. Despues de haber sido un autentico policia, no lo soportaba. Rebusco en la bolsa que llevaba siempre con el y se sento cerca de la ventana para poder disfrutar de una mejor vista de Mary mientras esta consultaba su ordenador. Probablemente esperaba tener noticias suyas. Diciendo ser alguien a quien Mary una vez habia conocido brevemente, se habia puesto en contacto con ella a traves de la web en la que Mary publicitaba sus joyas y habia conseguido mantener una relacion con ella. Pero aquella noche no le bastaba con esconderse tras un alias y un ordenador. Estaba aburrido, inquieto. Despues de pasar unos cuantos minutos frente al ordenador, Mary se levanto y comenzo a apagar las luces de la casa. Tenia dos hijos en edad escolar y trabajaba como enfermera, de modo que sus horarios eran extraordinariamente predecibles. Malcolm sabia que de alli iria al dormitorio, bajaria las persianas y el espectaculo habria terminado. A no ser que no se molestara en bajar las persianas. Durante los meses que llevaba observandola, solo se habia olvidado de bajar las persianas en una ocasion, pero eso le hacia albergar esperanzas. Se dirigio a escondidas hacia el otro lado de la casa, se agacho detras de un seto y espero a que entrara en el dormitorio. La vio llegar, encender la television, apartar la ropa que antes habia doblado y sentarse en una butaca. Despues se acerco a la ventana. Estaban a solo unos centimetros de distancia, tan cerca, de hecho, que podia apreciar que se le habia corrido la mascara de ojos, lo que queria decir que se los habia estado frotando. Y entonces bajo las persianas. Mierda. Malcolm se agacho todavia mas. ?Que podia hacer? ?Deberia dirigirse al casino y esperar alli durante unas horas? No. Necesitaba algo mas visceral, mas emocionante. Algo que le recordara el poder del que en otro tiempo habia disfrutado. Jugo con la idea de meterse en la casa, explorar las habitaciones vacias, acariciar los objetos de Mary y robarle una prenda de ropa interior. Quiza incluso de observarla mientras dormia. La tentacion de hacer algo asi era mas fuerte cada dia. Pensaba mucho en ello. Pero temia que pudiera descubrirle y arruinar de esa forma la posibilidad de mantener una verdadera relacion cuando reuniera el valor suficiente como para revelar su autentica identidad. Habia ido demasiado lejos como para echar todo a perder por culpa de su impaciencia. Tenia que marcharse. Pero es no significaba que tuviera que renunciar a la noche. Al pensar en la sirena que conservaba en la furgoneta mejoro su humor. Hacerse pasar por policia no le iba a llevar a la cama de Mary, pero le proporcionaria la adrenalina que tanto ansiaba… y quiza tambien algunos favores sexuales. Tres semanas despues… Jane Burke era capaz de reconocer una oportunidad cuando la veia. Desde que habia empezado a trabajar en El Ultimo Reducto, habia estado esperando que se presentara algun caso que le permitiera demostrar su valia. Y estaba segura de que ese caso acababa de cruzar la puerta de la organizacion.

  • Bandidos de Eric Hobsbawm

    https://gigalibros.com/bandidos.html

    Un buen dia Eric J. Hobsbawm se sintio intrigado por el hecho de que las mismas historias sobre bandidos justicieros y redistribuidores de riqueza se repetian en el mundo entero. De ahi nacio esta fascinante exploracion por la vida y el mito de unos personajes que abarcan desde Robin Hood hasta Salvatore Giuliano, pasando por Pancho Villa, por los haiduks balcanicos, los dacoits de la India, los cangaceiros brasilenos o los guerrilleros urbanos del anarquismo espanol. Su libro se habia convertido ya en un clasico de la historia social, pero en esta nueva edicion Hobsbawm no se ha limitado a actualizarlo, sino que le ha anadido nuevos materiales, ha situado el fenomeno del bandidaje en el contexto politico en que actua y ha adecuado la obra a un tiempo como el nuestro, en que los estados son cada vez menos capaces de mantener la ley y el orden. Su libro ha ganado con ello vigencia y sigue siendo, como ha dicho el Times Literary Supplement: <>.

  • Un oscuro anhelo (Amor encubierto 4) de Lori Foster

    https://gigalibros.com/un-oscuro-anhelo-amor-encubierto-4.html

  • Los seres huecos (Las cintas de Blackwood 1) de Guillermo Del Toro

    https://gigalibros.com/los-seres-huecos-las-cintas-de-blackwood-1.html

    Encajada entre dos edificios del distrito financiero de Manhattan, el 13 y el 15 de Stone Street, hay una finca estrechisima que consta oficialmente como el 13 y medio de esa calle. De aproximadamente metro veinte de ancho y compuesta por una franja de piedra colonial que recorre de arriba abajo el espacio entre los dos edificios y termina unos diez metros por encima del suelo, no sirve para otro proposito aparente que albergar un corrientisimo buzon eduardiano de hierro fundido, que no posee ornamentos ni caracteristicas distintivas, salvo una enorme ranura para los sobres, y no presenta puertecilla ni cerradura para la recogida del correo depositado alli. Detras del buzon, un trozo macizo de piedra y argamasa. La escritura de este minusculo misterio urbano data de la epoca colonial holandesa y la firma Lusk & Jarndyce ha venido abonando puntualmente los impuestos correspondientes desde 1822. Antes de eso, solo se encuentran referencias al inmueble, siempre en perfecta situacion juridica. La mencion mas antigua al buzon se remite de hecho a un panfleto publicado en lo que entonces se llamaba Nueva Amsterdam: El relato mas completo de las vicisitudes de Jan Katadreuf e y su ascenso final y virtuoso al Reino de Nuestro Senor . En dicho panfleto, publicado por Long and Blackwood en 1763, en folio y a cuatro paginas, un acaudalado comerciante de especias hace un trato con el demonio para garantizar la llegada de sus barcos y cargamentos. Los barcos llegan, pero a partir de ese momento se desata un espiritu maligno que tortura al comerciante, todos los dias al anochecer, mordiendole de forma salvaje, aranandole la espalda y montando su cuerpo como un jinete mientras el alma descarriada grita, presa de un sufrimiento absoluto, y comete actos pecaminosos de extraordinaria violencia. En el drama, un seglar, en un intento de ayudar, le habla a un docto sacerdote de una posible solucion: <<... El buzon de hierro de la calle mayor, alli se halla para sus desgracias recibir. Una carta sellada lleva el nombre de Blackwood. Y al caer la noche con vos se reunira...>>. El cura propone al Senor y los sacramentos como unica solucion viable. Katadreuffe paga un sinfin de misas y queda liberado de su tormento solo unas horas antes de fallecer, purificado. Una lapida pequena y modesta recuerda su defuncion. La lapida, situada en el lado de Rector Street de Trinity Church, reza lo siguiente: AQUI YACE EL CUERPO DE JAN KATADREUFFE, ANTIGUO COMERCIANTE DE ESPECIAS Y MADERAS QUE PARTIO DE ESTE MUNDO EL 16 DE OCTUBRE DE 1709, A LOS 42 ANOS. RECORDAD, CUANDO POR AQUI PASEIS, QUE COMO AHORA SOIS YO UNA VEZ FUI, Y COMO AHORA SOY PRONTO SEREIS. PREPARAOS PARA LA MUERTE Y SEGUIDME... A lo largo de los siglos, el 13 y medio de Stone Street ha resistido muchos litigios: de demarcacion urbana, corporativos y de otros tipos. Cada una de esas batallas legales se ha ganado con un gasto considerable. Y por eso el buzon sigue ahi, un misterio a plena vista. La mayoria de los transeuntes pasan por delante si verlo siquiera. Hace un decenio, una gran compania aseguradora con sede en la acera de enfrente instalo tres camaras de seguridad. El encargado de supervisarlas pudo atestiguar que, aunque llegan al buzon algunas cartas (mas o menos una cada tres semanas), nadie las recoge, pero el buzon tampoco rebosa nunca. De ese pequeno enigma se ha corroborado una cosa repetidas veces a lo largo de los siglos: cada sobre que llega al buzon es una carta de necesidad imperiosa, un grito de ayuda desesperado, y todos y cada uno de los sobres van destinados a la misma persona: Hugo Blackwood. 2019, Newark, Nueva Jersey Odessa solto la carta y echo un vistazo por el Soup Spoon Cafe en busca de las ofertas. Las encontro, en una pizarra blanca cerca del pequeno mostrador de recepcion, escritas en mayusculas con rotulador rojo. Por alguna razon, aquella caligrafia le trajo a la memoria un recuerdo hacia tiempo olvidado de sus dias en la Academia del FBI, en Quantico, Virginia. El profesor de Ciencias de la Conducta dibujaba las definiciones de homicidio con un rotulador rojo deleble en la gran pizarra que habia frente al auditorio. La diferenciacion, les explicaba, no tenia nada que ver con los propios homicidios, su gravedad, metodo o modo, sino mas bien con el periodo de reflexion entre ellos. <> Las dos ultimas clasificaciones podian solaparse. Un caso dificil de clasificar, y que en general se consideraba la primera matanza de un asesino compulsivo en Estados Unidos, habia tenido lugar a ciento veinte kilometros al sur de la cafeteria donde la agente se encontraba en ese momento. El 6 de septiembre de 1949, Howard Unruh, un veterano de la Segunda Guerra Mundial de veintiocho anos, salio de la casa de su madre en Camden, Nueva Jersey, vestido con su mejor traje y una pajarita a rayas. Habia discutido con su progenitora en el desayuno y ella habia ido corriendo a casa de sus vecinos a decirles, histerica, que temia que algo horrible estuviera a punto de ocurrir. Unruh entro en el pueblo armado con una Luger alemana y treinta balas de nueve milimetros. En un lapso de doce minutos, disparo y mato a trece personas e hirio a tres mas. En una farmacia, una barberia y una sastreria. Aunque se demostro que su deseo de matar era premeditado (despues se descubrio que tenia una lista de enemigos en su diario), entre sus victimas habia una mezcla de objetivos prioritarios y personas que habian tenido la mala suerte de cruzarse en su camino aquel esplendido martes por la manana. Tanto las victimas como los testigos oculares coincidieron en que ese dia Howard parecia como en trance, aturdido. Para cualquier persona ajena a las fuerzas del orden, la clasificacion de un delito importa poco. Lo unico verdaderamente importante es que, durante mas de sesenta anos, el tiroteo de Unruh se considero la peor masacre de Nueva Jersey. Hasta la noche en que Walt Leppo pidio rollo de carne picada. --?Esta recien hecho? --le pregunto a la joven camarera al volver del aseo de caballeros. --Si, desde luego --contesto ella. --?Me harias un favor, entonces? --le dijo el--. ?Podrias mirar si os quedan una o dos rodajas de la comida, que a ser posible lleven unas horas bajo la lampara infrarroja, supersecas y con los bordes tostados? La camarera le sostuvo la mirada un instante, intentando decidir si le estaba tomando el pelo. Seria estudiante, muy posiblemente de alguna de las facultades de Derecho cercanas. Odessa se habia pagado hasta tercero de Derecho en Boston sirviendo mesas y recordaba vivamente la inquietud que le producia que determinados clientes varones le hicieran peticiones culinarias espeluznantes rayanas en el fetichismo, hombres por lo general solitarios, a los que seguramente les habria gustado pedir mujeres a la carta, no solo comida. La camarera se volvio hacia Odessa, sentada enfrente de Leppo, y la agente le dedico una sonrisa de aliento, confiando en tranquilizarla. --Voy a ver --dijo. --Gracias --respondio el, cerrando la carta y entregandosela--. Por cierto, prefiero los extremos. --La joven se fue con las comandas--. En casa llamabamos "talones" a los extremos -- le comento a su companera. Odessa asintio con la cabeza, fingiendose fascinada. --Psicopata --le dijo carinosamente. Walt se encogio de hombros. --?Porque me gusta el rollo de carne picada como lo hacia mi madre? --Ay, Dios, anade fijacion oral. --Te voy a decir una cosa, Dessa: todo se puede sexualizar. Todo. Hasta un rollo de carne picada, por lo visto. --Apuesto a que tambien te gustan las tostadas requemadas. --Como el carbon. Pero ?aun no sabes que la normativa prohibe a los agentes novatos perfilar a los veteranos? Los dos se volvieron hacia el ventanal del Soup Spoon Cafe cuando empezaron a repiquetear en el las primeras gotas de lluvia. --Genial --dijo Leppo. Odessa miro el movil. La app del tiempo mostraba una masa de precipitacion en tonos jade y menta que se acercaba a Newark a modo de nube de gas toxico. Giro el dispositivo para ensenarselo a su companero. Casualmente la agente se habia dejado el paraguas junto con la Remington 870 del calibre doce en el maletero del coche, aparcado a media manzana de alli. --La lluvia de Jersey --dijo Leppo, desdoblando la servilleta-- es como banar a un perro a manguerazos: se moja todo, pero no se limpia nada. Aquel nuevo "leppoismo" hizo reir a Odessa, que miro afuera, donde cada vez mas gotas ametrallaban el cristal. Las pocas personas que habia en la calle circulaban ya mas rapido, con una especie de urgencia indefinida. Todo se aceleraba. En el preciso instante en que Leppo preguntaba por el rollo de carne picada (como constataria despues la cronologia), a una veintena de kilometros al norte de Newark, Evan Aronson aguardaba a que su aseguradora, que lo tenia en espera escuchando rock suave de los setenta, le explicara el suplemento que le habian cobrado por una visita a Urgencias. En la reunion de los diez anos de su promocion de Rutgers, hacia unas semanas, se habia distendido el biceps izquierdo recreando el tradicional salto de madrugada al bano portatil, instaurado por su fraternidad, con la intencion de ganar a su antiguo companero de cuarto, Brad <> Bordonsky, pese a que este habia engordado unos quince kilos desde la graduacion.

  • Promesas de arena de Laura Garzon

    https://gigalibros.com/promesas-de-arena.html

    Solo el amor y la tolerancia pueden trazar rutas entre la violencia, la desolacion y el odio.
    Lucia acaba de terminar su carrera y viaja a Palestina como cooperante de una ONG. Esta llena de ilusiones, de buenos propositos, pero lo que encuentran en los Campos de refugiados rompe todas sus ideas preconcebidas. Las carencias rozan el limite de la supervivencia y nadie les espera, ni espera nada de ellos. En los campos de refugiados no solo hay intereses altruistas, las facciones politico-religiosas mantienen una lucha de poder constante entre si y contra su enemigo Israel y por extension Occidente.
    Lucia se encontrara con los dos polos humanos que imperan en los Campos: quienes lo dan todo, como Fathia y Hamid; y con el Halcon, un palestino de padre ingles, educado en diferentes paises, y con un magnetismo y atractivo que subyuga perdidamente a la joven cooperante. Descubrir quien es este hombre en realidad le va a costar muy caro a Lucia. Su pasion le alcanzara la gloria y la arrastrara al abismo.

  • El dueno del mundo (Los Austrias) de Jose Luis Corral

    https://gigalibros.com/el-dueno-del-mundo-los-austrias.html

    Fines de primavera del ano de 1539; Carlos de Austria, emperador de Alemania y rey de las Espanas y de las Indias, se encierra, desesperado por la muerte de su esposa Isabel, en un monasterio cercano a Toledo. Entretanto, sus enemigos amenazan su poder y sus dominios. En Gante, su ciudad natal, los comerciantes se rebelan en protesta por los excesivos impuestos. Los turcos avanzan hacia Europa y ganan posiciones en el Mediterraneo. Los protestantes cuestionan su autoridad.