• la sonrisa eterna - Juan J. Prieto

    https://gigalibros.com/la-sonrisa-eterna-la-primera-meiga-2.html

    13 de marzo de 2013
    En Roma Habemus Papam. Al mismo tiempo, miles de fieles llegan a un pueblo portugues llamado Nazare. Siniestros Monjes Negros les rodean. Acaba de nacer Jesus, aquel que traera al mundo la sonrisa eterna.
    Y a la misma hora, repartidos por el mundo, doce apostoles reciben la llamada de Lilium, la constelacion perdida de los dioses. Belshazzar, un mago arabe, acude al alumbramiento, guiado por su estrella, para ser el mentor de Jesus.
    Hordos, el oscuro prelado, no cedera en su deseo de arrancar la vida al recien nacido. Reclamara el trono de Dios que considera legitimo e incluso pactara con sus enemigos, los Hijos del Profeta. Pero Jesus ha venido al mundo para darle su sonrisa.
    Una historia epica sobre los dificiles equilibrios entre el bien y el mal. Un canto a la tolerancia entre todas las civilizaciones y sus religiones. Un viaje fantastico por el interior de la autentica esencia humana. Y un canto al milagro de la verdadera inclusion.

  • La Sonrisa Eterna (La Primera Meiga) Versión Kindle

    https://www.amazon.es/Sonrisa-Eterna-Primera-Meiga-n%C2%BA-ebook/dp/B07V3T6T8C

    La Sonrisa Eterna (La Primera Meiga) eBook : Prieto, Juan J.: Amazon.es: Libros.

  • Sonrisa eterna Tapa blanda – 24 septiembre 2012 ...

    https://www.amazon.es/Sonrisa-eterna-Dolores-Morales-Serrano/dp/8415643349

    Sonrisa eterna : Morales Serrano, María Dolores: Amazon.es: Libros.

  • LA SONRISA ETERNA - Librería Central Librera Ferrol

    https://www.centrallibrera.com/libro/la-sonrisa-eterna_407683

    LA SONRISA ETERNA, PRIETO PERROTE, JUAN JOSÉ, 19,95€. 13 de marzo de 2013. En Roma Hqbemus Papam. Al mismo tiempo miles de fieles llegan a un pueblo ...

  • LA SONRISA ETERNA de JUAN JOSÉ PRIETO PERROTE

    https://www.casadellibro.com/libro-la-sonrisa-eterna/9788409127856/9847202

    El libro LA SONRISA ETERNA de JUAN JOSÉ PRIETO PERROTE en Casa del Libro: ¡descubre envíos rápidos y gratis!

  • LA SONRISA ETERNA - Central Librera Real

    https://www.centrallibrera.net/es/libro/la-sonrisa-eterna_381840

    LA SONRISA ETERNA, PRIETO PERROTE, JUAN JOSÉ, 19,95€. En Roma Habemus Papam. Al mismo tiempo, miles de fieles llegan a un pueblo portugués llamado Nazaré.

  • Juan Prieto muestra su nueva novela "La sonrisa eterna"

    https://www.farodevigo.es/pontevedra/2020/02/07/juan-prieto-muestra-nueva-novela-15350265.html

    7 feb 2020 — Hoy, a las 20 horas, en el Ateneo Santa Cecilia, el escritor afincado en Marin, Juan Prieto, presenta su segundo libro "La sonrisa eterna".

  • Sonrisa eterna (Tapa blanda) - El Corte Inglés

    https://www.elcorteingles.es/libros/A7609310-sonrisa-eterna-tapa-blanda/

    Ahora, puedes contratar "El Corte Inglés PLUS", nuestra tarifa plana de envío ¡Pruébalo GRATIS! 5% de descuento en todos los libros de papel. Exclusivo online.

  • Sonrisa Eterna La - - PRIETO PERROTE,JUAN J. - Imosver

    https://www.imosver.com/es/libro/sonrisa-eterna-la_NOB0074487

    comprar SONRISA ETERNA LA, ISBN 978-84-09-12785-6, PRIETO PERROTE,JUAN J., TICHA E MOFI EDICIONS, librería.

  • SONRISA ETERNA - MARIA DOLORES MORALES ...

    https://www.agapea.com/Maria-Dolores-Morales-Serrano/Sonrisa-eterna-9788415643340-i.htm

    Comprar el libro Sonrisa eterna de María Dolores Morales Serrano, Eride Ediciones (9788415643340) con ENVÍO GRATIS desde 18 € en nuestra librería online ...

  • La promesa de Pisa de Juan J. Prieto , Mano Bouzamour

    https://gigalibros.com/la-promesa-de-pisa.html

    Sam Zafar, hijo de inmigrantes analfabetas y fieles seguidores del Islam, le hizo una promesa a su hermano en Pisa: no equivocarse como el lo hizo, no terminar en la carcel.

  • Mi Vida en la Maleza de los Fantasmas de Amos Tutuola

    https://gigalibros.com/mi-vida-en-la-maleza-de-los-fantasmas.html

    <>, basada en narraciones tradicionales de la mitologia africana, es la aventura de un nino que se adentra en un territorio poblado de seres que han fallecido a deshora y que esperan que llegue su momento para trasladarse definitivamente a la tierra de los muertos; seres que conviven con los vivos (a veces con el unico objeto de molestarlos), hablan y poseen poderes magicos. Seguir a Tutuola en ese viaje iniciatico a traves de la maleza es dar un paso adelante en el conocimiento de aquello que conforma el imaginario de millones de africanos en la actualidad. Pocas veces el lector occidental se enfrenta de forma tan descarnada e imaginativa a la esencia del miedo: el pavor del hombre solo en la naturaleza, del hombre postrado ante los dioses, convertido a su vez en dios y siempre dispuesto a impregnar su alma de nuevas creencias. Amos Tutuola, cuya lengua materna es el yoruba, escribe en ingles para reflejar mejor el sincretismo que se produce en las ideas y en la vida de un pueblo que, apegado a sus tradiciones, ha visto cambiar el mundo a su alrededor.

  • Eternamente Tygrain (Lover Tygrain Al de Kelly Dreams

    https://gigalibros.com/eternamente-tygrain-lover-tygrain-al.html

    Jasmine Mukhtar estaba convencida de que el karma la odiaba, prueba de ello era que su regreso a Bahir vino acompanado de un ataque en pleno desierto que cambio su futuro en un abrir y cerrar de ojos. De pronto se encontro luchando no solo por su vida, sino por la del principe tygrain que el destino volvio a poner en su camino y a quien habia jurado proteger.
    Sharif Al-Hanak tenia en mente dos cosas: Capturar a los bastardos que estaban sembrando el caos en las tribus del desierto y llevarlos ante la justicia. Una tarea sencilla que, sin saberlo, lo conduciria a una trampa mortal en la que no solo estaria a punto de perder la vida, sino que tambien pondria en su camino a la unica mujer a la que un tygrain no podia resistirse.
    Unidos por una promesa, un principe tygrain y su guardiana deberan poner a prueba el vinculo que los une y enfrentarse a los secretos de un pasado que nunca debio ser desenterrado.

  • Mas Alla Del Abismo de Emanuela Riva

    https://gigalibros.com/mas-alla-del-abismo.html

    El viento habia comenzado a soplar imperterrito sobre las ramas, haciendolas temblar violentamente. La luna, casi en el apice de su plenitud, apenas iluminaba el mar, debido a una improvisada perturbacion que oscurecia el cielo. --Malos augurios --anuncio Joseph, el grumete de la nave Royal Harmony, con el gesto preocupado y mirando al cielo. No le gusto como estaba cambiando rapidamente el clima. Deseaba atracar lo antes posible en el puerto de la ciudad de Namnha. Las tormentas le daban un miedo terrible. En sus anos de servicio, siempre hubo viajado en aguas tranquilas. En verdad no queria experimentar una tormenta en aquel momento. Respiro hondo intentando tranquilizarse. Poco antes de la tormenta, el capitan habia advertido que llegarian en una hora. --Relajate, ya casi llegamos --dijo en voz alta para darse valor. En ese momento, un resplandor en las profundidades del oceano llamo su atencion. El olor salado se mezclaba con un regusto amargo, como a podrido, de algas en descomposicion. Se inclino mas aun sobre la proa, pero no vio nada anormal. Un escalofrio sin embargo lo hizo estremecer cuando escucho una cancion celestial que parecia expandirse en el aire. Provenia de las profundidades, estaba seguro de ello. Nunca en toda su vida habia escuchado una voz tan sublime, irresistible, seductora. Joseph comenzo a sudar frio. Contra toda logica, estaba excitado. ?Podria una voz, tan solo una voz, volverlo loco de deseo? Se pregunto mientras gritaba, manteniendo las manos apretadas sobre sus oidos. Aquella cancion estaba trasgrediendo su mente y alma. En seguida, la lluvia llego prepotente junto a una secuencia de truenos y relampagos que luchaban provocando una atmosfera mas oscura aun. Las olas aumentaron exponencialmente chocando contra la nave una y otra vez. Los ojos de Joseph se abrieron cuando perdio el equilibrio y termino tragado por las oscuras aguas. El impacto contra el agua helada le corto el aliento y su cuerpo fue blanco de multiples aguijones punzantes. Era el final, penso, incapaz de mover un solo musculo, hundiendose lentamente en agonia. Ahora, acabando sus fuerzas, vio una silueta que se acercaba. Intento abrir mas los parpados para ver mejor. Quedo con la boca abierta por el terror. Era un pez, pero parecia una muchacha solo desde la cabeza a la pelvis. La parte inferior era una sucesion de tentaculos que lo envolvieron por los costados, arrastrandolo hasta pocos centimetros a la cara de la criatura. Lo ultimo que vio Joseph antes de morir fue la sonrisa de la chica y un brillante caparazon colgando del cuello de la criatura. Pronto, sintio su ultimo latido. Capitulo I Cris estacionaba no lejos de la orilla del mar de la ciudad de Namnha, una ciudad muy soleada, cuyas olas eran la envidia de los centros turisticos costeros. Su mirada, como cada vez que escudrinaba las aguas verdes, limpidas y majestuosas, siempre era la misma, melancolica y fria como el hielo. Suspiro, apretando los punos por la frustracion. Otro maldito ano y luego finalmente volveria con su madre a las profundidades. Tambien extranaba terriblemente a sus amigos, excepto a Victor. Por culpa de el, seria castigado por su padre, el rey de los mares. Habia desobedecido sus reglas, yendo al continente, haciendose pasar por un ser humano comun con sus amigos tritones: Mack, Giveon y Victor. De ser descubiertos pondrian en peligro a toda la especie. Cris estaba fascinado con los humanos, por sus costumbres y habitos, pero sobre todo le encantaba divertirse con sus mujeres. Ellas mostraban un caracter completamente diferente a las sirenas que conocia. Tenia que ingeniarselas con mil trucos para llevarlas a la cama y cuando lo conseguia obtenia una gran satisfaccion para su ego de triton mujeriego. Victor los habia delatado para no meterse en lios, poniendo a Cris, Mack y Giveon en problemas. Sin embargo, solo Cris habia sido castigado de forma drastica y debia permanecer en tierra durante dos largos anos sin tener contacto con el mundo marino. Se le habia prohibido sumergirse en el mar y para evitarlo, se aseguraron de que ante el mas minimo contacto con el agua sufriria una fuerte descarga electrica. Por suerte su padre no le habia quitado el poder del viento. Cris cerro los ojos color aguamarina, inhalo el olor a sal en los pulmones y luego volvio a abrir los parpados muy lentamente. Arreglo su rebelde cabello color caramelo y se dispuso a ir a trabajar. Por una extrana broma del destino, habia encontrado trabajo como camarero en un restaurante a pocos metros de la playa. De otra manera, ?que otras tareas podia realizar? habia pensado con amargura. No sabia hacer otra cosa que servir comida y bebida a las mesas. A el no le importaba mucho, tambien porque su salario era decente y le bastaba para sobrevivir. --Llegas tarde muchacho. Date prisa, cambiate y ve inmediatamente a tomar los pedidos a las mesas --grito George, el dueno del restaurante con impaciencia. Era un hombre de unos cuarenta anos, con el pelo canoso y un abdomen abultado. --Si, lo se, lo se. Me pongo directamente a su servicio jefe --respondio Cris en tono de broma y con una sonrisa de sorna. Odiaba que le dieran ordenes. George lo miro, entrecerrando los ojos molesto: --Intenta ser menos fanfarron. No te despedire solo porque desde que te contrate hace un ano, la clientela femenina ha aumentado exponencialmente. Ante esas palabras, el ego de Cris se agrando. --Anos y anos de duro entrenamiento en el fondo del mar --dijo mientras se quitaba la camiseta para ponerse el polo verde oscuro con el nombre amarillo del restaurante. En ese momento, una docena de chicas aullaron excitadas al ver los esculpidos abdominales de Cris. Como respuesta movio los largos dedos entre su cabello sonriendo a las chicas y revelando unos dientes perfectos. Luego, sin ser visto, soplo ligeramente en direccion a una chica de pelo negro y una rafaga de viento la sacudio haciendo que su falda se levantara. El sonrio al pasar junto a la joven y la elogio por la ropa interior de encaje negro. Sonrojada de verguenza y con las manos aferradas a su falda, la chica le agradecio balbuceando. Antes de que Cris pudiera darle su numero de telefono, sono un ruido en el salon y se escucho a George reganando a Melanie. Cris suspiro poniendo una mano sobre su rostro. Melanie habia estado trabajando con ellos durante dos semanas, pero no acertaba una y ademas, tenia un caracter muy fragil, con lagrimas siempre dispuestas a correr por sus mejillas a la minima reprimenda. --Esta es ya la quinta vez en dos semanas que se te caen los pedidos de clientes de las manos. La proxima vez te despido --advirtio George severamente con la cara enrojecida mientras Melanie se echaba a llorar delante de todos. Vamos a rescatar a la damisela, penso Cris con los labios apretados en una sonrisa de goce, ya anticipando su triunfo. Cada vez que la consolaba, ella le ofrecia un trago en casa para pagarle y ofrecerle su fruta prohibida. A pocos pasos de Melanie, Cris se detuvo con los labios entreabiertos. Un intenso olor a sal lo remitio al extasis, nublando su vista por unos momentos mientras el corazon comenzo a latirle furiosamente en el pecho. Una hermosa joven se habia interpuesto entre ellos. Estaba emocionado porque nunca le habia sucedido oler el aroma de alguien asi. Ella tenia el pelo largo y rojo como el fuego, hasta la cintura, atado con una cinta verde. Sus ojos azules permanecian entreabiertos, brillando con impetu y sensualidad. En toda su vida marina nunca habia visto una criatura tan hermosa. Cuando la misteriosa chica hablo con Melanie, su garganta se seco y le hizo tragar varias veces. --Si puedo darte un consejo, nunca llores en presencia de un hombre. Nunca. ?Me entiendes? Melanie la miro algo asustada, pero inmediatamente despues asintio, secandose las lagrimas. Luego le dio las gracias llamandola Kirsten. Tiene un nombre, penso Cris, estirando el cuello de su camisa y sin poder respirar. Kirsten noto que la observaban y automaticamente levanto la cara hacia Cris. Tan pronto como sus ojos se encontraron, ella sintio un ligero temblor en todo su cuerpo, delgado y perfecto. Las mejillas comenzaron a arder involuntariamente y el corazon comenzo a latir desenfrenado. Era un joven realmente agradable, se dijo, pero al rato su mirada se volvio fria. --?Que miras con cara de pescado? --pregunto ella irritada. Cris se endurecio y cerro la boca aclarandose la garganta. Era la primera vez que no sabia que responder. Al ver que el muchacho quedaba alli atravesado y sin hablar, Kirsten tomo el pedido de un cliente y se dirigio a servir a unos caballeros. --Ehi Cris. Tu tambien te quedaste sin palabras al verla ?verdad? --murmuro Lucas dandole una palmada en el hombro a Cris que le sacudio trayendolo de vuelta al presente. --Esta trabajando aqui --dijo Cris. El colega lo miro asombrado por su extrano comportamiento. --Si, trabaja aqui Cris. Hace tres dias vino a hacer la entrevista y George la contrato. --No lo sabia. Realmente es una belleza. Lucas se rio brevemente diciendole que se limpiara las babas que le caian y que desafortunadamente para el, Kirsten estaba comprometida. A Cris no parecio preocuparle mucho. Queria tenerla a toda costa. Experimentaba una suerte de posesion primitiva con Kirsten y no lograba dominarlo. Pero si, habria hecho cualquier cosa para conseguirlo. Pero no sin antes poder calmar sus hormonas y apaciguar su miembro entre las piernas. Durante el turno no pudo concentrarse en nada, no dejaba de observar de reojo a Kirsten mientras servia a los clientes. Con cada mirada que ella le devolvia, conseguia en el que el tiempo se detuviera. Su vientre se retorcia y mas de una vez se vio obligado a cubrir sus partes nobles con el menu del restaurante y correr al bano. En mas de una ocasion se las arreglo para acercarse a ella, aprovechando que tenia pedidos en las mesas cercanas, pero cada vez que trataba de hablar con ella, la voz no le salia. Era realmente frustrante. Si continuaba asi, no iba a ser facil poseerla y hacerla suya. Solo quedaban cinco minutos hasta el final del turno, debia resistir. "Resiste Cris, tu puedes" decia tratando de convencerse, mirando su gesto estupefacto en el espejo del bano del personal. Nunca le habia pasado de excitarse tanto con una mujer sin poder intercambiar ni unas palabras. Estaba mal, se sentia sofocado. De repente, un intenso aroma a sal lo hizo temblar por unos momentos, como si una poderosa descarga electrica lo hubiera golpeado; la ereccion en sus pantalones aumento haciendolo jadear. Tenia imperiosamente que vaciarse o enloqueceria, pero antes de que pudiera hacerlo escucho golpear la puerta. --?Se puede? --Cris abrio los ojos como platos mientras con la mano sostenia el miembro erecto. Era Kirsten. --Diablos … --exclamo sin darse cuenta. --?Como? -- pregunto la chica al otro lado de la puerta con expresion confusa. --Si, no, esta ocupado. Salgo pronto. Abrio el grifo del agua rapidamente y se masturbo, pensando en ella. En ella, que estaba a unos pasos de el. Ella, que en tan solo un dia con su olor y su belleza lo habia dejado asi. No tenia otra opcion, era absolutamente impensable abrirle la puerta en esas condiciones. Cuanto le hubiera gustado agarrarla y poseerla hasta que gritara. Cuando salio del bano, la decepcion se marcaba en su cara. Frente a el, estaba su jefe algo furioso. --?Que demonios te pasa hoy, se puede saber? !Los ingresos en caja son pesimos y no atendiste a Tara lo mas minimo! --grito George que parecia volverse morado. Tara. Ahora que lo pensaba, le habia parecido verla a ultima hora de la tarde. Ella era una cliente habitual, una mujer de mediana edad, viuda y con dinero. Se habia encaprichado de Cris y el, todos los miercoles por la noche despues de las horas de trabajo, iba a la casa de la mujer y se prestaba para hacerla disfrutar en todas las variantes. Ese dia, sin embargo, la dama, al ver a Cris completamente ido por una estupida muchacha, se levanto de la mesa sin esperar la bebida e indignada regreso a su casa. El joven triton bostezo como respuesta, aparto la cabeza casualmente y se fue a buscar a Kirsten. George quedo atonito, apreto los punos convulsivamente y grito: --!Cris! No te despido porque desde que te contrate hace un ano ... Cris lo interrumpio concluyendo la frase: --… la clientela femenina ha aumentado exponencialmente --rio divertido, pero por dentro sintio un vacio, una extrana tristeza. Eran poco mas de las tres de la manana y Kirsten, despues de narrar la pesadilla recurrente en la que mataron sin piedad a su madre, Ursula, estaba en el bano, tumbada en el suelo en posicion fetal. Esta vez no era la arcada habitual, sino un dolor lacerante en las piernas. Cada punzada le producia un sollozo que la dejaba sin aliento. Tenia que resistir el dolor, tambien porque siempre supo que pasaria al usar la magia del caparazon para obtener aquellas malditas piernas humanas. Era la unica forma de encontrar al primogenito de Neptuno. No sabia que aspecto tendria el joven y nunca le importo, hasta el fatidico dia de luto. Solo sabia que Neptuno lo habia castigado enviandolo a tierra firme. Queria venganza. Ahora tenia piernas; las habia obtenido gracias al alma del marinero que con su caparazon habia absorbido, pero aun no encontraba al hijo del Dios de los Mares. Habia estado buscandolo durante un ano y empezaba a perder la esperanza. En aquel momento, la imagen de Cris surgio en su mente haciendola sonrojar y por un momento se olvido el dolor. Tal vez el … sacudio ligeramente la cabeza porque era imposible que el fuera el triton que estaba buscando tan desesperadamente. Demasiado estupido, incluso si su belleza era divina. Sin tiempo para nuevas conjeturas, los dolores aumentaron rapidamente causando pequenos hematomas. Kirsten ya no pudo contenerse y comenzo a llorar y gritar sufriendo aquel dolor tan intenso. Unos momentos despues, la puerta del bano se abrio de par en par. --Mierda, Kirsten. ?Por que no me dijiste que estabas empeorando? --Disculpame --dijo debilmente, con la boca manchada de sangre. Los dolores habian sido tan fuertes que se habia mordido la lengua varias veces. Poco antes de perder el conocimiento, pudo apenas levantar el rostro y cruzar la mirada verde esmeralda de los ojos preocupados de su inseparable amigo. Kirsten se desperto sobresaltada con la primera luz del amanecer y la mano presionada contra el pecho para tratar de calmar sus freneticos latidos. Las manos de Dan se posaron con delicadeza sobre la cara de la muchacha que pudo notar su calor y calmarse un poco. --Oye, no te preocupes. Estoy aqui contigo. !Sssh! se acabo, no te preocupes. --?Dan? --pregunto con voz entrecortada por el sollozo y las lagrimas. No podia ver, la vista estaba cargada de innumerables puntos amarillos que bailaban por todas partes. El confirmo que era Dan y la beso en la frente. En respuesta a su gesto, lo abrazo cerrando los ojos. Dan era toda su familia, todo lo que le quedaba. Sonrio tristemente sosteniendolo mas cerca de si. Fue el unico que no la excluyo. El unico en no temer a la hija de Ursula, la bruja que infundia terror en las profundidades. --Gracias --expreso ella. El la aparto un poco, sonriendo y levantandole la cara para admirarla. --?De que, si puedo saber? --dijo el burlandose. Ella lo miro con los parpados entreabiertos y su vision aun turbia. --Por todo. No estoy bromeando, sin ti, bueno, no se si podria haber continuado. Y perdona porque por mi culpa ahora estas en problemas con Neptuno y … Dan la interrumpio colocando un dedo sobre sus labios: --No tienes que agradecerme o disculparte Kirsten. Nunca me arrepenti de haberte seguido. Somos mas parecidos de lo que piensas. Mi odio por esta raza nacio incluso antes de que mataran a tu madre. Kirsten lo beso en la mejilla y lo abrazo afectuosamente, devolviendole el con mas enfasis y respirando su perfume. --Voy a preparar el desayuno. !Ah! Llamas a tu jefe para decirle que no vas a ir hoy. --Pero … --Nada de "peros", tienes que recuperarte --indico senalando los vendajes de sus piernas que le hubo practicado durante la noche mientras estaba desmayada. Afortunadamente, habian traido algunas algas Olij, que crecian solo a una profundidad de tres mil metros. Eran milagrosas para los dolores y contusiones. La chica se ruborizo al mirar sus piernas vendadas y le agradecio. Cuando vio a Dan y su cabellara negra como el azabache desaparecer tras la puerta de la habitacion, Kirsten suspiro. Nunca quiso meterle en problemas, pero el dano ya estaba hecho y ademas, ambos eran calificados como marginados. Ninguna criatura marina se habria acercado a ellos si hubieran vislumbrado la marca del tridente invertido grabada en sus munecas. Llamo a su jefe para decirle que faltaria aquel dia y antes de ir a desayunar, se quito las vendas y entro prontamente en la banera llena de agua con sal marina. Aquella manana Cris estaba muy agitado, las palmas de sus manos sudaban y se reia como un idiota. ?Pero que le estaba pasando? De hecho, ?que le estaba haciendo esa misteriosa chica? Por mucho que se preguntara, simplemente no podia encontrar respuesta. Oteo el mar con cierta melancolia, como hacia todos los santos dias antes de ir a trabajar. Cerro los ojos y trato de respirar el aroma de sal, algas y peces hasta la saciedad. Era aquel perfume llamado hogar. --?Quien lo hubiera dicho? No crei que echaras tanto en falta vivir con nosotros, pobres peces -- se burlaba Mack, sacudiendo con los dedos la arena de su grueso cabello rojo. --Tiene razon. Nadar todo el dia es un aburrimiento mortal --dijo Giveon sonriendo. Cris abrio los ojos de repente mostrandose incredulo por momentos. Despues su rostro se ilumino de alegria. --Chicos, ?que estan haciendo aqui? Que linda sorpresa. Dios, os extrane --dijo lanzandose para abrazarlos. --Oooh, tomalo con calma, amigo. Realmente nos extranaste, ?eh? --Mack se echo a reir a carcajadas, revolviendole el cabello, algo que Cris no le gustaba demasiado. El se alejo un poco mirandolo fruncido y arreglando su masa de rizos. --No, justo esto no lo extrane. ?Sabes cuanto tiempo me llevo arreglarlos? Giveon tomo la masa de rizos y los revolvio el tambien. --Oye, oye. No, no os he extranado. Para nada --dijo Cris tratando de alejarlos mientras los continuaba a reganar, pero terminaron echandose a reir todos juntos. Se sintio vivo de nuevo, feliz. Si, habia extranado a sus mejores amigos. --El castigo de nuestro padre no os basto si estais aqui --les recordo Cris, arrugando ligeramente la frente --algo me dice que vendra otro tiron de aletas. --Ah, no te preocupes por nuestro padre. Ya sabes como es --recordo Giveon. Mack puso su brazo alrededor del cuello de su amigo y lo acerco a el diciendole: --Recordemos que tampoco es un santo, !eh! El va y viene divirtiendose con las mujeres terrestres. De alguien habremos salido. Tal padre … tales hijos. Los tres tritones se miraron entre si echandose a reir hasta hacerles saltar las lagrimas. --Y ademas no podriamos perdernos el concierto en la noche de las estrellas fugaces. Estamos impacientes por escucharte cantar. Tienes la voz mas extraordinaria de todas en el abismo. Cris se sintio halagado e incluso un poco avergonzado por el cumplido de Giveon. --Y luego --concluyo Mack--, no podiamos dejarte con todas las chicas. Entre hermanos todo se comparte. Cris se cubrio el rostro sonriendo. Esos dos nunca cambiarian. --Gracias. ?Que haria yo sin vosotros?

  • No lo llames amor, Noelia Amarillo de Noelia Amarillo

    https://gigalibros.com/no-lo-llames-amor-noelia-amarillo.html

    La convivencia no es facil en una comunidad de vecinos. En la mia hay malentendidos, vecinos cotillas, ninos ruidosos, ancianas de rigidas tradiciones, mujeres de disipadas costumbres (por lo visto, una de esas soy yo), divorciadas rompepelotas, apuestos metrosexuales y, aunque te cueste creerlo, hasta un par de personas que estan en sus cabales. Bueno, mas o menos…

  • Tu voz entre un millon de voces de Marian Viladrich

    https://gigalibros.com/tu-voz-entre-un-millon-de-voces.html

    Es oscuro, cinico, hurano y egoista.
    Miles Baker, antiguo dios del rock, es ahora un ermitano incapaz de escribir una cancion.

  • Un Vaquero de Ojos Verdes (Rancho Atkins 2), Tess Curtis de Tess Curtis

    https://gigalibros.com/un-vaquero-de-ojos-verdes-rancho-atkins-2-tess-curtis.html

  • El cuento que nunca vio el final (Un mundo para Hector 1), Estefania Yepes de Estefania Yepes

    https://gigalibros.com/el-cuento-que-nunca-vio-el-final-un-mundo-para-hector-1-estefania-yepes.html

    Hector, a su corta edad, lo tiene todo. Una familia que le adora, un dormitorio que parece sacado de un cuento de hadas, todos los munecos de superheroes que admira e infinitos lapices de colores con los que dar rienda suelta a su imaginacion. Sin embargo, hay algo que a dia de hoy trae a Jana de cabeza pues, a sus tres anos de edad, Hector todavia no ha pronunciado palabra alguna. Jana, aparentemente feliz con su vida, con su pequeno, con su tienda y con la compania alocada de la pelirroja que tiene por amiga, siente que el vacio que impera en su vida se hace cada dia mas fuerte, mas intenso, llevandose a su paso el control de su propia voluntad, de su entereza y de todo cuanto habia construido hasta el momento, amenazandola sin piedad, poniendo en peligro su propia vida. y tal vez mucho mas que eso. Martin, un reputado psicologo especializado en el tratamiento y terapia en el ambito infantil, recibe el curioso expediente de un nino que, a pesar de los indicios iniciales que apuntan a un posible nuevo caso de autismo, esconde tras ese silencio extrano y permanente algo muy distinto a todo lo que ha visto hasta el momento.

  • Perros y lobos de Herve Le Corre

    https://gigalibros.com/perros-y-lobos.html

    Un thriller de ambiente sofocante y adictivo que confirma a Herve Le Corre como uno de los grandes maestros del crimen europeo.

  • Cuando un hombre ama (Gillander’s Whisky 1) de Eleanor Rigby

    https://gigalibros.com/cuando-un-hombre-ama-gillander-8217-s-whisky-1.html

    Vuelve Eleanor Rigby con una nueva serie que tiene de todo: amor, intriga y mucha mucha pasion, ambientada en la regencia inglesa.

  • Los origenes de la ciencia moderna de Herbert Butterfield

    https://gigalibros.com/los-origenes-de-la-ciencia-moderna.html

    Un viaje a la Revolucion cientifica, uno de los momentos mas fascinantes de la historia de nuestra cultura.

  • Usos rudimentarios de la selva de Jordi Soler

    https://gigalibros.com/usos-rudimentarios-de-la-selva.html

    En la plantacion de cafe La Portuguesa, situada en la selva de Veracruz, en Mexico, una familia espanola intenta salir adelante en un ambiente hostil, continuamente asediada por bandidos, guerrilleros, politicos corruptos o por los mismos otomies, los habitantes originales de la region, que sienten a los de la finca como invasores de sus tierras.

  • La transparencia del tiempo (Mario Conde 9) de Leonardo Padura

    https://gigalibros.com/la-transparencia-del-tiempo-mario-conde-9.html

    A un Mario Conde a punto de cumplir sesenta anos, y que se siente mas en crisis y mas esceptico que de costumbre con su pais, le llega de manera inesperada un encargo de un antiguo amigo del instituto, Bobby, que le pide ayuda para recuperar la estatua de una virgen negra que le han robado. Conde descubre que esa pieza es mucho mas valiosa de lo que le han dicho, y su amigo tiene que confesarle que proviene de su abuelo espanol, que, huyendo de la Guerra Civil, la trajo de una ermita del Pirineo catalan. En los bajos fondos de La Habana, Conde da con un sospechoso al que acaban matando. Con el asesinato de otro complice, Conde descubre una inesperada trama de galeristas y coleccionistas extranjeros interesados en la talla medieval, y se tropieza inevitablemente con la policia de homicidios de La Habana. Pero, en capitulos intercalados, La transparencia del tiempo tambien cuenta la epopeya a lo largo de los siglos de la estatua, una virgen negra traida de la ultima cruzada a una ermita del Pirineo por un tal Antoni Barral, y sera otro Antoni Barral quien la salve y se vea obligado a embarcar como polizon rumbo a La Habana.

  • La ideologia invisible de Javier Benegas

    https://gigalibros.com/la-ideologia-invisible.html

    "Nos enfrentamos a un nuevo y temible totalitarismo, una ideologia invisible, liquida y polimorfica que desborda las tradicionales fronteras ideologicas. Un monstruo con vida propia que apela a las emociones y no a la razon, a las ensonaciones y no a la realidad, que promete proporcionar aquello que cada uno desee, aunque sea una identidad imposible. Incrustado dentro del propio poder, compra voluntades, proporciona prebendas a quienes son sus complices y castiga con la muerte civil a quienes lo desafian.

  • Una sentencia al corazon de Hugo Sanz

    https://gigalibros.com/una-sentencia-al-corazon.html

    Lucia es una inspectora de policia, joven y con un futuro prometedor. Asier es un juez capaz de hacer derretir a cualquier mujer a su paso. Tras coincidir una noche, entre ellos estalla algo que va mas alla del amor que sienten hacia sus respectivas profesiones. Sin embargo, el lio que genera un capitulo no cerrado de la vida de uno de ellos los envolvera sin remedio.

  • Confio en ti de Susana Oro

    https://gigalibros.com/confio-en-ti.html

    Tina Martinez es una respetada escritora de autoayuda. Llena auditorios cuando dicta conferencias, y sus talleres son uno de los mas concurridos. Ha publicado varios libros, pero "La confianza es la clave de un matrimonio feliz" es el que le ha dado la fama. Tina tiene muchos fans y se ha convertido en una referente de la autoayuda con sus lemas: "Si confias nadie te defraudara". "Ama y recibiras amor". Pero su vida perfecta se tambalea cuando su marido le deja ver que las palabras no son como la vida real.
    David Valente era un hombre felizmente casado hasta que descubrio la traicion de su esposa. La palabra confianza esta fuera de su diccionario. El se ha convertido en el hombre mas esceptico sobre la tierra. Su lema es: "La vida es una mierda". "La gente esta llena de matices". "Nadie es confiable".
    Ella positiva. El negativo. Nada bueno puede salir de dos personas tan diferentes. ?O si?

  • Dr. Bully y el bebe secreto (Ritmo cardiaco 3) de Larissa De Silva

    https://gigalibros.com/dr-bully-y-el-bebe-secreto-ritmo-cardiaco-3.html

    Estaba viendo doble. Y me gustaba lo que estaba viendo. Era tan alto, con una mata de pelo castano oscuro, y grandes ojos marrones. El tambien me sonreia, y mientras la musica golpeaba a nuestro alrededor, nos acercabamos cada vez mas. No importaba que estuvieramos afuera y la noche estuviera extranamente humeda, o que un monton de otros estudiantes universitarios nos rodearan y pudiera oler el champu, la colonia y el aliento contaminado por el alcohol de todos. Wes se inclino y me hablo al oido. --?Quieres otro trago? --pregunto, y su discurso se torcio. Yo asenti. --Bien --dije. Wes me cogio la mano. La suya estaba caliente y pegajosa, pero la mia probablemente tambien. Estaba sudando, y la agradable sensacion de alcohol habia sido reemplazada por un mareo apremiante. Vi como Wes miraba por encima del hombro, acercandome a el. --Quedate conmigo, chica -- dijo, mostrandome una sonrisa tonta cuando lo hizo. Me rei, pero hice lo que me dijo, acercandome cada vez mas a el. Nuestros cuerpos practicamente se tocaban mientras navegabamos por el mar de la danza, estudiantes borrachos, hacia su suite estudiantil. Habiamos hecho este viaje muchas veces, pero normalmente estabamos solos. No estabamos rodeados por un millon de otros estudiantes. El patio estaba normalmente desierto, pero siempre nos encontrabamos en medio de la noche. No fue intencional, habia sucedido asi, cuando el semestre habia comenzado. Pense en ello cuando finalmente llegamos a la escalera de hormigon que lleva a la suite de Wes. Me acerco a el, me tropece y practicamente me cai, y me agarro envolviendome el brazo alrededor de la cintura. Se rio. --?Estas bien? Asenti con la cabeza, mirandolo. --Si --dije, mi corazon saltando en mi pecho cuando puse mi mirada en su cara. Estaba tan impresionada con el, y lo odiaba. No ibamos en serio, nunca ibamos a estar en serio, y yo tenia que estar de acuerdo con eso. Me gustaba, pero era realista. Estaba fuera de mi alcance, y lo sabia con certeza. Si hubieramos crecido en la misma ciudad, el nunca me habria echado una segunda mirada. Pero esto era la universidad, un universo en si mismo, y eso era suficiente. Me miro fijamente. --Ace, ?seguro que estas bien? Asenti con la cabeza, cerrando los ojos. --Creo que he bebido demasiado. Me miro de arriba a abajo, con sus ojos brillantes. --?Te acompano a tu dormitorio? --No --respondi--. No, no. No quiero ver a mis companeras de cuarto. Sonrio. Solo tuvimos que subir unas cuantas escaleras mas antes de llegar a su puerta roja, el numero ‘tres’ grabado sobre la mirilla en letras doradas. Me solto, hurgo en su bolsillo y recupero su llave. Me sonrio, triunfante, y abrio la puerta, aunque le costo mucho esfuerzo. Una vez abierta la puerta, extendio su mano y yo la agarre. Entro en la habitacion, y yo entre detras de el. Me rei un poco mientras miraba su suite, que siempre me parecio extranamente limpia. Tal vez esa era una de las ventajas de no tener que vivir con companeros de cuarto. Me las arregle para abrirme paso de forma inestable hacia su cocinita improvisada. La bebida, de alguna manera, se las habia arreglado para emborracharme aun mas que antes, acercandose sigilosamente a mi como un repentino golpe de suerte. --Agua --dijo Wes. Practicamente podia oir lo seca que tenia la boca. --Para los dos Le sonrei mientras tomaba dos vasos de la tabla de drenaje y me daba uno. Me apoye en el mostrador e hice lo posible para llevarme el vaso a la boca. Lo tenia en la barbilla, lo que me hizo reir, y tambien hizo reir a Wes. --Escucha --dice. --Los dos estamos demasiado… Intentemos esto de nuevo manana, ?vale? Sacudi la cabeza. --No --dije, senalandolo sin ninguna razon. --No, no. Vine aqui para hacer una cosa y solo una cosa. Wes se rio, echando la cabeza hacia atras. --?Asi que no estas aqui solo porque te gusta pasar el rato conmigo? Me queje en negacion. --No eres malo. Pero no eres un gran conversador --dije. O trate de decir. Estaba borracha, y la palabra “conversador” sonaba como una absoluta tonteria. --Grosera --dijo, riendose. --Termina tu agua, y luego te llevaremos a la cama. --?Nos meteremos los dos en la cama? --No --dijo, sonriendome. --Esta noche no, Ace. --Boo --le respondi, mirandolo fijamente, pero termine mi agua. Me cogio la mano y me llevo a su cama. Le rodee el cuello con los brazos y me rei mientras intentabamos besarnos torpemente, sin poder hacerlo. --Manana --dijo--. Duerme ahora. --No estoy cansada. --Lo estas --respondio--. Simplemente no lo sabes todavia. Estamos demasiado jodidos para esto.--Nosotros… no. Estamos bien. --Vale --dijo, riendose mientras me esponjaba una almohada. --?Que tal si hacemos un trato? Si sigues despierta en cinco minutos, nos besaremos. Me rei, dandome la vuelta. --Si --dije--. Me gusta como suena eso. Y luego no recordaba nada en absoluto. *** Me desperte con un dolor de cabeza punzante, mis labios secos y mi estomago en nudos. El sol estaba justo en mi cara y no estaba en un lugar particularmente familiar. Las mantas eran muy pesadas y me daban calor. Intente quitarmelas, pero me dolia todo el cuerpo. Grunendo, finalmente me las arregle para mover el edredon de la parte superior de mi cuerpo. --Cafe --dijo Wes, entregandome una taza de poliestireno con el logo del campus. --Parece que lo necesitas. Me gire. --No hay necesidad de gritar --dije en voz baja. --?Quieres decir, ‘gracias, Wes’? Cerre mis ojos, agarre el cafe y tome un sorbo. Todavia estaba muy caliente, pero lo aprecie. --Gracias, Wes --dije. --Tambien te traje un McMuffin --dijo--. Son particularmente buenos cuando los dejas enfriar por un rato. Sonrei. --?Cuanto tiempo estuve dormida? --Demasiado tiempo --dijo, mostrandome una bolsa de papel marron con la comida dentro. -- Tuve tiempo de ir a tomar un cafe, luego a McDonald’s, e incluso tuve tiempo de contemplar la posibilidad de estudiar. Me volvi hacia el. --Claramente me he quedado demasiado tiempo --le dije--. Me comere esto y desaparecere de tu vista. ?Cuanto te debo? --? Por el McMuffin de huevo? Creo que estare bien --respondio. Puse los ojos en blanco. No parecia una amabilidad cuando estaba siendo sarcastico. Parecia notar el cambio en mi expresion, porque se acerco a mi y me aparto el pelo de la frente. --Oye --dijo--. Lo siento. No quise hacerte sentir mal. Todavia podia oler el alcohol en su aliento, y no creia que me estuviera yendo mejor. Lo mire, con esos enormes ojos marrones, y sonrei. --No --dije--. No me debes nada. Gracias. Asintio, sonriendome, y luego se acerco a mi hasta que sus labios estuvieron sobre los mios. Su toque fue calido y suave, y el beso solo duro unos segundos antes de que se alejara. --Tengo una sorpresa para ti --dijo. --?Ah, si? --Si --respondio--. Te traje… un pastel de manzana. Esta mas caliente que el sol, y probablemente asqueroso, pero pense, ?que es el desayuno sin postre? --Puede que seas uno de los buenos --respondi. --Tal vez --dijo--. Lo intento. Una vez que comi y bebi mi cafe, me senti mucho mejor. --No eres malo en esto --dije, limpiandome la boca con una servilleta de la marca. --?Como te sientes? --Bastante bien, considerandolo todo --dijo, sentado a mi lado en la cama, hundiendo su cuerpo en el colchon a mi lado. --Anoche estaba mas que borracho, y no se si ese futon es bueno para mis articulaciones. --Tienes como veinte anos --dije, un poco indignado. --?Como puedes estar preocupado por tus articulaciones? --Atletismo --respondio--. Necesito asegurarme de que mis rodillas estan en forma si quiero ser capaz de competir. --Podrias intentar engrasarlas. --Idea sensata --respondio--. Tal vez deberias ser medico, Ace. Incline mi cabeza mientras lo miraba. --Escucha --dije--. Lamento haberme puesto muy mal anoche. No te envie ese mensaje de texto para que tuvieras que cuidarme toda la noche. --Lo se --dijo, luego me miro y sonrio. --Tampoco es por eso que te recogi, pero no me importo. Pense que era algo agradable, de verdad. --?Lo hiciste? --No eres una persona dificil de cuidar --dijo--. No vomitaste nada, asi que eso te da una ventaja en mi libro. Me lami los labios. --?Haces esto a menudo? Ladeo la cabeza, levantando una ceja perfectamente enmarcada. --Teniamos un acuerdo. Me mordi el labio inferior. --Tienes razon --dije--. Lo siento. Suspiro, y luego Levanto mi cara con un dedo torcido bajo mi barbilla. Presiono sus labios contra los mios otra vez, y supo salado y dulce. Estaba exhausta y me dolia el cuerpo, pero de repente me quede sin aliento por el, y supe lo que tenia que hacer. Lo que mi cuerpo me exigia hacer. Cuando se alejo de mi, estaba sonriendo. --Sabes a tarta de manzana --dijo. --Sabes a cafe --le respondi. Ladeo la cabeza, con los ojos entrecerrados. --?Estas totalmente sobria ahora? --Como monja --dije. Se mordio el labio inferior. --Sigue hablando asi --dijo--. Y no podre quitarte las manos de encima. --No sabia que te gustaba la mujer religiosa --le respondi, riendo mientras se arrastraba sobre mi, presionando sus labios contra los mios y bajando su cuerpo sobre mi. Llevaba un pijama muy caro, y me di cuenta de que aun llevaba el vestido de la noche anterior. La tela de su camisa era mucho mas bonita y suave que el edredon, que mi propio vestido. Pero solo me concentre en la suave tela de su camisa por un segundo, porque en el momento en que mis manos tocaron su pecho, pude sentir que mi corazon comenzaba a latir rapido, y todo mi cuerpo comenzaba a calentarse debajo de el. Sus besos fueron suaves al principio, luego mas insistentes. Respiro profundamente, presionando su cuerpo contra el mio, y yo agarre la parte inferior de su camisa y meti la punta de mis dedos en su piel sorprendentemente suave. Gimio, con su voz baja y tranquila, lo que siempre fue suficiente para volverme loca. Mi pierna subio sola, y pronto me di cuenta de que habia abierto mi cuerpo de tal manera que el suyo estaba justo encima de mi, y pude sentir lo duro que estaba, y habia empezado a mover sus caderas hacia adelante y hacia atras, solo un poco, lo suficiente para hacerme saber cuanto me deseaba. Incluso a traves de la tela de panties y sus pantalones para correr, ya sentia que iba a explotar. Hizo una pausa, por un segundo, y luego se mordio el labio inferior. --?Quieres que te coja? Lo mire. Sus ojos marrones brillaban, y habia dejado de moverse en absoluto. Sus mejillas estaban rojas, y pude ver las gotas de sudor en su frente. Cerre los ojos y asenti con la cabeza. --Dime --dijo. Volvi a abrir los ojos y lo mire directamente. Siempre habia sido dolorosamente timida. Solo que no lo era cuando estaba cerca de el. Algo me paso cuando estaba cerca de el, y fue como si quisiera ser alguien que no era. Como si quererlo, como si deseara a este hombre, porque era el primer hombre de verdad que habia encontrado, fuera suficiente para quitarme todas mis inhibiciones, y solo… pedir lo que queria. Pedir lo que necesitaba de el. Y cada vez que me hacia pedirselo, me volvia loca. --Follame, Wes --dije, mi voz temblaba. Se mordio el labio inferior, una sonrisa en su cara. --?Que dices? --Follame, por favor--, dije. Sonaba como si estuviera suplicando. Lo estaba haciendo. No habia que decirselo dos veces. Movio su mano suavemente desde mi brazo, a traves de mis pechos, a traves de mi estomago, y hasta entre mis piernas. Senti las puntas de sus dedos rozando mi cuerpo, y mi cuerpo se tenso, mi espalda se arqueo para buscar su toque. --Realmente quieres esto, ?no? --Si --dije, apenas reconociendo mi propia voz. --De verdad que si. Enhebro su dedo entre el elastico de mi tanga y mi piel, y luego la deslizo por mis piernas muy habil y rapidamente, y de repente quede completamente expuesta ante el. Se tomo un segundo, solo un segundo, para mirarme. --Mierda --dijo, mas para si mismo que a mi. Lo mire, buscando en su cara para averiguar si era algo bueno o malo, pero no tuve que esperar mucho tiempo. Antes de que pudiera averiguar lo que estaba pasando, pude sentir su aliento en el interior de mis muslos. Uso sus dedos para abrirme y luego lamio alrededor de mi clitoris, lenta y deliberadamente, esperando que reaccionara antes de insertar un dedo libre en mi, enroscandolo ligeramente y dejando que me acostumbrara a el primero. Me estaba prestando atencion, y lo senti en la forma en que su lengua se movia por mi clitoris, aplicando un poco de presion extra de vez en cuando, su respiracion se aceleraba cada pocos segundos. El me queria, tenia hambre de mi, y yo podia sentirlo con cada movimiento, con cada gemido, con cada toque. Presiono su dedo dentro mio, uno al principio, luego dos, luego otro, todo mientras me lamia el clitoris, mientras me veia practicamente morir de placer debajo de el y luego se alejaba de mi cada vez, siempre negandome la dulce liberacion de un orgasmo desesperadamente necesario. --Bien --dijo, su aliento me hacia cosquillas en la piel. --Esta bien. Lo vi arrodillarse. Deslizo sus pantalones de correr por sus piernas, y luego se los quito por completo. Mire su polla, que fue estrangulada por sus calzoncillos Calvin Klein negros, y tardo un segundo demasiado largo antes de quitarselos tambien. Le gustaba que me gustara mirarlo, pero sabia cuanto lo queria. Cuanto lo necesitaba.

  • La fruta del borrachero de Ingrid Rojas Contreras

    https://gigalibros.com/la-fruta-del-borrachero.html

    Bogota. Los noventa. La familia Santiago vive en una comunidad exclusiva y cerrada, a salvo de la agitacion politica que aterroriza el pais. La pequena de la familia, Chula, que tiene siete anos, parece vivir en una burbuja, pero la amenaza de los secuestros, los coches bomba y los magnicidios se cierne fuera del barrio, donde el omnipotente Pablo Escobar elude a las autoridades y coarta a la nacion. Cuando su madre contrata a Petrona, una criada procedente de las barriadas ocupadas por la guerrilla, Chula intenta congeniar con ella. Pero Petrona, que trata de sustentar a su familia mientras el primer amor la lleva en la direccion equivocada, oculta mas de lo que parece. Asi, nina y criada se ven envueltas en una red de secretos que las obligara a elegir entre el sacrificio y la traicion.

  • Breviario de historia de Espana de Laura Lara , Maria Lara

    https://gigalibros.com/breviario-de-historia-de-espana.html

    En los ultimos 20 anos no se ha publicado una Historia de Espana en un solo volumen que sirva de lectura para el publico en general y, a la vez, como manual para los estudiantes que deseen obtener una vision completa y proporcionada desde el Antecessor a la crisis de la globalizacion. Con ese fin, el afan de buscar la verdad y la intencion de generar amistad con nuestra propia Historia, aparece esta obra en la que las autoras reflexionan en clave actual sobre todos los eventos que Espana ha protagonizado. ?Sabia que el Neanderthal ya era detallista cuando ensayo destrezas de joyero? ?El joven Balbo, gaditano y millonario, mostro dotes publicitarias al organizarle la campana a Julio Cesar? ?Que a Alvar Nunez Cabeza de Vaca no lo echaron al caldero gracias a que los nativos lo tomaron por curandero, o que en la Espana de los Austrias el personaje que mas pavor causaba, en ninos y adultos, era el corsario ingles Francis Drake? ?Que nuestro horario es producto de que, en 1942, Franco decidio retrasar 60 minutos los relojes para alinear el tic tac espanol con el huso de Centroeuropa durante la Segunda Guerra Mundial? Todos estos misterios, y mucho mas, se resuelven con un estilo ameno y desde una perspectiva sumamente didactica para que los lectores disfruten descubriendo como ha discurrido la vida en el mayor imperio sonado.

  • Sin rodeos de Jana Aston

    https://gigalibros.com/sin-rodeos.html

    Hacerte pasar por tu hermana gemela puede ser divertido. y peligroso En tan solo una semana, Violet ha perdido a su novio, su trabajo y su casa. Asi que su hermana gemela, Daisy, le ofrece alojamiento, pero, a cambio, le pide que se haga pasar por ella en su trabajo. La noche antes de su primer dia, Violet conoce a Jennings, un britanico muy atractivo con el que tendra una aventura. Pero ambos se llevaran una gran sorpresa al descubrir que ninguno de los dos era quien afirmaba ser.

  • La vida es corta y luego te mueres de Enric Pardo

    https://gigalibros.com/la-vida-es-corta-y-luego-te-mueres.html

    <>

  • La mafia que nos une (La mafia 1) de Anny Peterson

    https://gigalibros.com/la-mafia-que-nos-une-la-mafia-1.html

  • El Dragon de Su Majestad ( Temerario 1), Naomi Novik de Naomi Novik

    https://gigalibros.com/el-dragon-de-su-majestad-temerario-1-naomi-novik.html

  • Callate y besame, tonto de Raquel Mingo

    https://gigalibros.com/callate-y-besame-tonto.html

    Llega la segunda entrega de <>.

  • Infidelidad (Mentiras con amor 1) de Chris Razo

    https://gigalibros.com/infidelidad-mentiras-con-amor-1.html

    Primera entrega de la trilogia <> de Chris Razo.

  • Padre a la carrera de Noni Garcia

    https://gigalibros.com/padre-a-la-carrera.html

    P 1 aola nunca penso que la vida pudiera cambiar tanto de un dia para otro. Alli estaba, embarazada de seis meses y completamente sola. Tenia a su familia y amigos, pero el no estaba. Tan solo le dejo una nota diciendo que estaba enamorado de otra, que lo olvidara y que no queria volver a saber nada de ella ni de la hija que estaba por llegar. Cayo en tal estado de depresion que penso que su embarazo no saldria adelante, pero fue precisamente la vida que crecia en ella la que le dio la fuerza necesaria para hacerlo. Eso y saber que no habia sido la primera vez que lo habia hecho. Tres meses despues de aquel fatidico dia, sabia que su hija tenia dos hermanos mas. Y alli estaban Lorena y ella, sentadas en la terraza de un bar, tomandose un refresco despues de haber comprado la pintura para el dormitorio de Lucia. Tres meses atras, su vida era perfecta... O al menos eso creia, pero tambien lo era en aquel momento. El nunca habria sido un buen padre ni un buen companero de vida. Ni para ella ni para ninguna mujer que se cruzara en su camino. --!Paola, Paola! ?Donde tienes la cabeza? --Lorena la saco de sus pensamientos. --Perdona, Lorena. Estaba en mi mundo. --?Otra vez pensando en Ivan? --Si, pensaba en el, pero no de la forma que Lorena creia. En ese momento de su vida, Ivan habia pasado a ser una mala pesadilla que le habia regalado un gran sueno. --No como tu crees. Pensaba en lo mucho que me ha cambiado la vida en los ultimos tres meses. --Pues si, carino, pero piensa que ha sido para mejor. !Tremendo tunante te has quitado de encima! --Oye, aquel chico que viene por alli... --!Anda! Mi primo Andres. --Hace tanto que no lo veo que ni lo habia reconocido a primera vista. --Yo no lo veo desde que se separo de Gabriela hace unos meses. --No tenia ni idea de que se habia separado. ?Por que no me lo has contado? --Porque no estabas en tu mejor momento cuando solto la bomba. Andres era siete anos mayor que ellas y siempre las trato como si fuera su hermano mayor. Los recuerdos eran muchos, pero el que siempre le arrancaba una gran sonrisa era el del dia de su boda. Lorena y ella cogieron su primera borrachera y Andres estuvo casi dos meses sin hablarle a ninguna de las dos. Con el paso del tiempo lo recordaban entre risas, pero aquel dia solo le falto echarlas del salon de celebraciones. Cuanto mas cerca estaba, mas guapo lo veia; era ese tipo de hombres al que los anos le sentaban bien. Nada tenia que ver con aquel adolescente que las tiraba a la piscina, las hacia rabiar y les hacia cosquillas hasta perder la respiracion, pero tambien las cuidaba y protegia de todo lo que les pudiera hacer dano. Se habia convertido en un hombre de treinta y cinco anos alto, fuerte, guapo y muy atractivo. <>. Fue el pensamiento que lleno su cabeza al darse cuenta de las cosas que estaba pensando de el. Ese no era el sentimiento que siempre habia sentido hacia Andres. Llevaba un par de anos sin saber nada de su vida. Ivan nunca quiso que mantuvieran el contacto porque pensaba que Andres no la miraba con ojos de hermano. En los ultimos tres meses se habia arrepentido de acatar muchas de las decisiones que tuvo que tomar estando a su lado. --Siempre ha habido ricos y pobres. --Andres se giro al escuchar la voz de su prima Lorena y la alegria se dibujo en su rostro. Hacia mas de dos meses que no la veia, ya que sus vidas habian cambiado mucho en los ultimos tiempos. --!Lorena! ?Como estas, primita? --Se acerco a ella y la saludo como siempre habia hecho. --Muy bien, ?y tu? --Pues bien, mejor de lo que esperaba. --Desvio la mirada y sonrio al darse cuenta de quien estaba junto a Lorena--. ?Paola? !No me lo puedo creer! --Paola se levanto para saludarle, el la tomo en brazos y giro con ella varias veces como cuando eran ninos. --!Andres, para! Que voy a echar a la nina por la boca, loco. --?Estas embarazada? No lo sabia. Lorena no me he dicho nada. --De seis meses y siento que voy a explotar. --Pues todavia te queda lo peor. --Lo se y estoy temiendo. --Vamos a hacer una cosa. --Andres saco su cartera del bolsillo trasero del pantalon vaquero y, de ella, una tarjeta que le entrego a Paola--. Te espero el miercoles en mi consulta para ver como va esa pequena y te invito a comer... Si no va a suponer un problema para ti. --Sabia perfectamente que sus palabras hacian referencia a Ivan, la ultima vez que se vieron estuvieron a punto de llegar a las manos. --No hay problema. Tengo dos semanas de vacaciones y... Lucia y yo estamos solas en esto. --?Solas? No entiendo... --!Ay, primo! Eres un poquito lento pillando las cosas. Vamos, que no las cazas al vuelo. --El no tiene por que saberlo al igual que yo no sabia que se habia separado de Gabriela. Hace mucho tiempo que no nos vemos. --Desvio la mirada y vio en Andres esa cara que siempre ponia cuando Lorena y ella hablaban en clave--. Ivan me dejo cuando estaba embarazada de tres meses. --!Sera cabron! Por lo menos se preocupara de como va el embarazo y de su hija, ?no? --Penso que aquellas cosas estaban a la orden del dia, pero saber que le habia pasado a Paola, hizo que sintiera una rabia que no alcanzaba a comprender. --Pues no y, la verdad, es que lo prefiero. Para Lucia, yo soy su madre y su padre. --Sabes que no estas sola, ?verdad? --Acaricio su rostro con el carino que siempre le habia tenido y le arranco una sonrisa--. Ahora os tengo que dejar porque he quedado para comer con unos amigos. --Le dio un beso en la frente a cada una como cuando eran ninos--. A ti te veo el miercoles, y a ti el sabado de la semana que viene en la boda de tu hermano. --?A que hora quieres que vaya? --Vente sobre la una y despues salimos a comer. Andres se marcho dedicandoles una sonrisa y pensando en que la pequena Paola estaba preciosa con aquella barriga de seis meses, con aquel brillo especial que solo tienen las embarazadas; bien lo sabia el por su trabajo. Volvio a girar la cabeza para mirarlas cuando ya estaba a la suficiente distancia para que ellas no se dieran cuenta de que lo estaba haciendo y en su mente solo habia un pensamiento: <>. Por su parte, Paola se sorprendio a si misma al darse cuenta de que no podia apartar la vista de ese culito prieto que casi no se movia al andar. Se sintio una pervertida y una oleada de verguenza la inundo al darse cuenta de que Andres se habia convertido en su ginecologo. --?Que te pasa, Paola? --Nada, ?por que? --Intento disimular el cumulo de cosas que estaban rondando por su cabeza, pero Lorena la conocia demasiado bien. --Yo conozco esa cara, a ti te gusta Andres. --!No! ?Como puedes decir eso? Andres es como un hermano para nosotras. Es solo que... que me da verguenza que me mire... que me mire el chocho. --!Ay, Madre! No habia caido en eso. --No voy a ir, Lorena. --El hecho de pensar que estaria toqueteandola subida en el burro, hizo que un extrano calor se concentrara en su cara, y en otras partes mas bajas del cuerpo, hasta el punto de abanicarse con la carta del bar. --Pero piensa que no podeis estar en mejores manos. Andres es uno de los ginecologos mas importantes de Andalucia, su lista de espera es de mas de dos meses y te va a ver el miercoles en su tiempo libre. --Si, tienes razon. El miercoles ire, pero… !joder, que es Andres! --No lo pienses mas y ahora vamos a comprar ropita para mi ahijada. --?Mas? Eran las nueve de la noche cuando Paola cruzo la puerta de su casa despues de un largo dia de compras. Tenia previsto pintar la habitacion de Lucia al dia siguiente, pero penso que lo mejor seria dejarlo para un poco mas adelante. Los domingos se hicieron para descansar, y la habian invitado a comer los padres de Lorena, en su casa, para celebrar sus veinte anos de matrimonio. Todavia tenia por delante dos semanas de vacaciones en las que podria hacer muchas cosas. No tenia mucha hambre, por el agotamiento, y decidio que un par de mandarinas y un platano serian suficiente comida para una cena. Se tumbo en la cama. Tenia los pies hinchados de estar todo el dia de un lado para otro sin descanso alguno. Se le empezaron a cerrar los ojos y no tardo mas de quince minutos en caer en un profundo sueno que esperaba durara hasta la manana siguiente. A 2 ndres estaba cansado de andar con mujeres que no le hacian sentir nada. Si, cada noche podia tener a la que quisiera en su cama, y cuando la separacion fue un hecho un ano atras, le sirvio para pasar buenos ratos, pero pronto se canso. Hacia tres meses que se habia divorciado de Gabriela y se podian contar con los dedos de una mano las veces que habia salido de fiesta con los pocos amigos solteros que le quedaban. En ese momento, en el que ya no tenia que esconderse de nadie y podia vivir su vida de solteria completamente tranquilo, sin miedo al que diran, eso era lo que menos le apetecia. Con treinta y cinco anos, lo que menos le preocupaba en ese momento era si tenia relaciones sexuales con frecuencia o no. Lo unico que deseaba era encontrar a esa mujer que le hiciera sentir vivo de nuevo, que llenara su vida de ilusion y a quien pudiera dar todo ese amor que tenia dentro. Gabriela no dejo de ser una ilusion de adolescentes, un deslumbramiento, un acomodarse a lo que tenia, pero cuando todo se fue al garete, se dio cuenta de que no le dolia. No le dolia porque realmente nunca estuvo enamorado de ella. Muchas veces se reprocho el haberse casado tan joven con una mujer que conocia demasiado bien, exactamente desde que estaban juntos en la catequesis para la comunion. Eso debio servir para darse cuenta de que ella nunca cambiaria y de que aquella relacion estaba abocada al mas absoluto de los fracasos. Habia pasado un buen rato comiendo con sus amigos, pero tras una estupenda tarde de risas, cafe y gin-tonics, lo unico que le apetecia era llegar a casa, cenar algo ligero, sentarse tranquilo en el sofa, ver la tele o leer un libro. Se excuso alegando que al dia siguiente tenia compromisos familiares, aunque realmente no seria hasta las dos de la tarde cuando fuera a comer a casa de sus tios. Lo cierto es que no pensaba ir a ningun sitio al dia siguiente, pero despues de haber visto a Lorena, le apetecio pasar un rato con esa familia que nunca le habia dado la espalda, con la que se sentia tan comodo como si fuera la suya propia. Aunque cualquiera seria mejor que la de el. Una infancia marcada por unos padres que vivian en una eterna discusion, y casi lo ignoraban, hacia que su madre siempre lo mandara a pasar mas tiempo con ellos que en su propia casa. Su tia le habia invitado a esa comida en mas de una ocasion en las ultimas dos semanas y, sin entender muy bien por que, en ese momento sentia la necesidad de pasar con ellos aquel domingo, de celebrar la felicidad matrimonial que el nunca tuvo. Al recordar el encuentro con Lorena, no pudo evitar pensar en Paola. Estaba mas bonita que nunca con aquella perfecta curva que ya tenia un considerable tamano en su vientre. Los buenos momentos que los tres habian pasado juntos hicieron acto de presencia en sus pensamientos. A pesar de que Tomas tenia la misma edad que el, nunca tuvo la conexion que tenia con Lorena y con Paola... Aunque a Paola siempre la habia visto de una forma muy distinta a los ojos con los que miraba a Lorena. Siempre habia despertado en el un carino de hermanos, como mucho el de una amistad, pero nada mas.

  • Amor contracorriente de Annabeth Berkley

    https://gigalibros.com/amor-contracorriente.html

    La joven lady Allyson Connelly se miraba en el espejo con cierta inseguridad. Estaba en el salon de la modista a la que solian acudir al inicio de cada temporada. Podria decirse que le gustaba lo que veia. Su cabello rubio perfectamente recogido, el precioso vestido celeste que resaltaba el azul de sus ojos, los bonitos y comodos botines que le permitirian bailar toda la noche... Estaba satisfecha del resultado, sin embargo... sentia que le faltaba el aire. Madame Leonard, la solicitada modista francesa a la que la mayoria de la nobleza de Londres encargaba sus vestidos desde que se habia instalado alli hacia unos anos, la miraba extranada con varios alfileres sujetos entre sus finos labios. Era alta, delgada y su demostrada experiencia y los altos precios que cobraba daban la razon a la soberbia con la que se conducia. Miro la estrecha cintura de la joven. Estaba segura de que el corpino no estaba tan apretado como para no dejarle respirar, asi que no le presto mayor atencion. Allyson sintio como sus mejillas perdian el color y un sudor frio le recorria el cuerpo. Intento distraerse mirando a su alrededor. Las paredes forradas con papel en tonos claros, las lujosas telas de diferentes colores sobre una mesa alargada, varios espejos diseminados por la habitacion, estanterias con diferentes tocados que sobresalian de sus cajas, cajones a medio cerrar con vistosas plumas, abalorios y delicados encajes... --Crei que ya tenia pretendiente --comento Madame Leonard mientras se alejaba para dar el visto bueno a su diseno desde la distancia. --Y lo tiene --afirmo altiva y satisfecha lady Josephine Connelly, la elegante matriarca de la familia--. Esta temporada, Christine causara la misma sensacion que su hermana en la anterior. No tengo duda de ello. Josephine miraba a su hija mayor con el ceno fruncido, molesta porque aun no hubieran fijado la fecha de la boda. Si la modista sabia que tenia pretendiente, pero aun no se habia casado, lo sabria, sin duda, el resto de la alta sociedad. No comprendia el porque de su reticencia cuando el conde de Nokfolk era tan buen partido para cualquier joven casadera. --El delicado vestido de color petalo que han escogido, sin duda, hara que encuentre pretendiente tan rapido como su hermana --comento la modista sonriendo friamente a la joven morena de ojos azules a la que acababa de quitarle el elegante y decoroso vestido encargado para la fiesta. Allyson miro a Christine, su hermana un ano menor, que la miraba con los ojos brillantes, emocionada por su inminente presentacion en sociedad. Sin duda, estaria preciosa y mas que preparada para encontrar esposo. La mas pequena, Laura, rubia como ella y de ojos verdes, estaba sentada indiferente junto a su madre. Ella aun tendria que esperar un ano mas para su presentacion en sociedad, y no parecia que tuviera mucho interes al respecto. Allyson volvio a mirarse en el espejo. A ella se le acababa el tiempo. La falta de aire era cada vez mas acuciante. El conde de Nokfolk, el afortunado pretendiente al que sus padres habian aprobado, ademas de pertenecer a su clase social y ser correcto y educado, habia sido muy paciente con sus caprichos de retrasar la boda entre ambos. Ese ano la acompanaria en los bailes para confirmar la union matrimonial que todos esperaban que se fuera a producir en breve. Era un buen hombre y seria un buen marido, se dijo tratando de convencerse. --Allyson, por Dios, ?que te ocurre? --le pregunto alarmada su madre, notando su palidez y angustia, cada vez mas visible. Allyson cogio aire y lo solto con rapidez varias veces mientras se doblaba sobre sus rodillas. Christine y Laura fueron preocupadas hasta ella. Madame Leonard se acerco agitando un abanico de color crudo con su mano. Solo Josephine la miraba seria, levantado una ceja con frialdad. --Se... me pasara pronto.... --les tranquilizo Allyson con un hilo de voz mientras la modista le soltaba los lazos del vestido para quitarselo. --No creo que sea necesario arreglarlo --les comento Madame Leonard con firmeza--. Quiza la joven esta nerviosa. Josephine apreto los labios con fuerza, mirando cenuda a la mayor de sus hijas. --Probablemente --murmuro entre dientes. Allyson miro de reojo a su madre antes de desaparecer tras la cortina que servia de biombo para vestirse con su ropa de paseo. --Al ano que viene me tocara a mi ponerme otro de estos vestidos --comento la joven Laura pasando la mano por el vestido que Christine iba a llevar. Christine asintio, mirando risuena su bonito vestido. Sabia que todos la compararian con su bonita hermana mayor, pero afortunadamente ella no seria rival puesto que a su boda con el conde solo le faltaba establecer la fecha. Josephine no se movio de donde estaba hasta que no vio salir a Allyson vestida con su traje de paseo de colores crudos y visiblemente mas recuperada. Christine y Laura fueron hasta ella preocupadas. Allyson les sonrio evitando la mirada de su madre. --Muy bien, Madame Leonard --le comento Josephine a la modista mientras se dirigia a la puerta--. Espero que envie estos vestidos manana mismo, y el resto de los que le hemos encargado, en una semana. La mujer asintio satisfecha. Poco antes de empezar la temporada en Londres, recibia cientos de encargos que le permitian vivir muy holgadamente el resto del ano, cuando la alta sociedad solia retirarse a pasar la temporada de caza a sus segundas viviendas alejadas de la vida social de la ciudad. Justo antes de salir, se encontraron con lady Flanigan, una vieja conocida de la familia, que entraba con su hija, probablemente con la misma intencion con las que ellas habian ido. Era alta y ligeramente corpulenta, y llevaba un moderno sombrero sobre su cabello oscuro. Su hija, con el cabello un poco mas claro, parecia su joven reflejo. Las madres se saludaron con una afectuosa sonrisa. Las jovenes se miraron con curiosidad. No solian relacionarse entre ellas. --Supongo que nos veremos en la fiesta de lord Bondshire --comento lady Flanigan. Josephine asintio complacida. --Si, Helen, aunque tenia entendido que Josselyn ya habia encontrado pretendiente el ano pasado. La mujer sonrio asintiendo y manteniendo la mirada a su interlocutora. --Asi es, pero parece ser que tiene la misma prisa que Allyson por contraer matrimonio. Las dos jovenes aludidas se miraron y se sonrieron con amabilidad. Aunque recordaban haberse visto en alguna ocasion, apenas habian hablado entre ellas. Josephine miro al cielo, como si pidiera la paciencia que necesitaba para la incomodidad que le producia la situacion de su hija mayor. --Este ano debuta Christine. Ya lo tenemos todo preparado, y estamos seguras de que todo ira... mejor. Helen asintio con una sonrisa educada. --Te deseo la mejor de las suertes, Christine --miro a la ilusionada joven--. Mucho gusto en saludarlas. Josephine y sus hijas volvieron al carruaje que les estaba esperando al otro lado de la calle. Allyson se distrajo mirando a su alrededor. Las calles de la ciudad eran amplias y estaban limpias. Habia varias personas paseando distraidas. Todo le parecia que estuviera dentro de la normalidad a la que estaba acostumbrada... y de la que habia empezado a dudar. --Allyson, ?por que te detienes? Allyson miro a su madre sonrojada. Bajo la cabeza y fue hacia el carruaje justo cuando otro carruaje similar paro frente al de ellas. Un joven apuesto de cabello castano y ojos del mismo color bajo de el para saludarlas. --Lady Connelly, Christine, Laura, Allyson. Todas sonrieron y devolvieron el saludo al prometido de Allyson. --Es un placer haberlas encontrado. Ahora iba a ver a su esposo --les explico mientras Allyson se acercaba a el. --Madre, ?puedo irme con Robert? --pregunto la joven tratando de aparentar indiferencia. --No es buena idea, Allyson. Cualquiera puede veros... --Aun no es mediodia, madre --insistio Allyson. --Voy a una de las fabricas --le explico Robert, el conde de Nokfolk, serio--. Nada me gustaria mas que compartir el tiempo contigo, Allyson, pero quiza no sea buena idea... Allyson fruncio el ceno mientras hacia un entrenado mohin con los labios que le dedico a Robert y a su madre. --Siempre os quejais de que no pasamos tiempo juntos... Josephine entrecerro los ojos mirando a su hija mayor con desconfianza. Allyson evito su mirada fijandola en su guapo pretendiente, que miraba a su madre esperando un permiso. --Puedo quedarme esperando en el carruaje... --insistio Allyson con dulzura. --Yo cuidare de ella, lady Connelly, y en cuanto termine la diligencia que me lleva hasta alli, la acompanare a casa. Josephine asintio con un gesto serio, visiblemente molesta con su hija mayor. Allyson se despidio de su madre y sus hermanas sin perder mas tiempo y dedico a Robert una bonita sonrisa mientras subia al elegante carruaje con asientos de terciopelo en color verde oscuro. El joven la siguio al interior, sentandose frente a ella. La miro detenidamente mientras golpeaba con su baston el techo para indicar al cochero que se pusiera en marcha. Pocas veces conseguian estar a solas. --No esperaba que quisieras venir conmigo --le comento Robert, con mucha calma, casi arrastrando las palabras. Allyson se encogio de hombros, sintiendose ligeramente incomoda con su tono de voz. Sentia su mirada condescendiente sobre ella, como si todavia la estuviera evaluando para saber si seria o no una buena esposa, o como si estuviera dispuesto a reganarla si no hacia lo que el consideraba correcto. --Apenas nos vemos... --le contesto ella, suponiendo que era logico que pasaran algun momento a solas. --Tu madre ya no esta. No tienes que fingir delante de mi --le indico serio mirandola a los ojos. --No estaba... --?A quien trataba de enganar? Quiza Robert habia empezado a conocerla--. Nunca he visto una fabrica --le respondio compartiendo la verdadera razon por la que habia querido acompanarle. --Ni tienes por que verla --le explico con cierta frialdad, manteniendole la mirada. Allyson lo miro por unos segundos. Habia creido que Robert apoyaria sus inquietudes o le permitiria dirigirse con mas libertad que la que tenia en casa de sus padres. Quiza fueran imaginaciones suyas, pero en determinadas ocasiones, el le hacia sentir insegura y no era nada agradable sentirse asi. --?Por que no? ?Que habria de malo? --le pregunto mirando hacia la ventana para disimular su decepcion. --Ese no es un sitio para una dama --insistio Robert mientras el carruaje iniciaba un incomodo traqueteo debido al desgastado suelo de las calles por las que habian empezado a transitar. --Oh, vamos... --Allyson le miro impaciente. --Ademas, has dicho que te quedarias en el carruaje. Allyson le miro seria. Cierta tension se palpaba en el ambiente. Ella sabia que no debia llevarle la contraria, que debia mostrarse sonriente y sumisa, pero cada vez le costaba mas comportarse asi con el. --Allyson... --le recrimino molesto--. No se que esperas encontrar alli, pero no es como te lo imaginas. Las fabricas... --entorno los ojos con una mueca--. ?Que has estado leyendo? Allyson se sonrojo, pero no le respondio. Se limito a mirar por la ventana, dandose cuenta de que habian dejado muy atras el centro londinense. --?Donde vamos exactamente? --A una parte del East End... barrios obreros... tu padre se encuentra en una de las fabricas --Allyson se asomo por la ventana sin ningun reparo--. Allyson, esto no es un viaje de placer. Vuelve dentro. Allyson lo miro molesta. --Nunca he estado en un barrio obrero. --Y no vas a estarlo --le respondio serio--. Te repito que no es sitio para una dama. Pasaremos por el barrio, pero no nos detendremos. Allyson le mantuvo la mirada, pero cedio separandose de la ventana. De nada iba a servir enfrentarse con el, ademas de que seria algo imperdonable por su parte. --?Por que no? --susurro a reganadientes. --Allyson, no hay nada que quieras ver, creeme. Allyson lo miro extranada y molesta. Ella queria asomarse por la ventana. Por eso habia ido con el. Era algo que no se podia quitar de la cabeza desde que habia leido a escondida los ultimos libros de Charles Dickens. Le costaba creer que la ciudad que el describia fuera donde ella residia. Robert decidio cambiar el rumbo de la conversacion. Tenia claro que discutir con Allyson no llevaba a nada, ademas de que no tenia por que hacerlo. Sin duda seria una esposa perfecta cuando se acostumbrara a su verdadera posicion como condesa. La acaricio con la mirada. Era preciosa, quiza demasiado transparente en sus expresiones. --Crei que querias estar conmigo... a solas. Allyson se sonrojo consciente de la intimidad del momento. Estiro su espalda pegandose aun mas al asiento en el que estaba, como si pudiera poner mas distancia entre ellos. --Si, claro... --le respondio visiblemente incomoda mientras el carruaje se movia de manera mas abrupta al dejar totalmente atras las cuidadas calles de la ciudad. Miro a Robert. Era un buen hombre, guapo, distinguido, educado. Estaba casi convencida de que seria un buen esposo, pero no sabia por que le estaba costando tanto fijar una fecha para su boda. Sabia que era lo que un marido podia exigir a su esposa. La habian educado para ello. Estaba dispuesta a ser una esposa sumisa y obediente, aunque solo pensarlo le causaba cierta ansiedad. Los pocos y robados besos que el le habia dado en contadas ocasiones no la conmovian lo mas minimo ni mucho menos le interesaba repetirlos. Su madre le habia explicado, sin muchos detalles, lo que pasaba en la intimidad del dormitorio entre un hombre y una mujer, y no tenia ningun interes en experimentar el molesto momento. Lo peor era saber que no habia manera de evitarlo. Desvio su mirada sonrojandose ante sus pensamientos. Parecia que entraba un olor fuerte y desagradable por la ventana y Allyson saco un panuelo del pequeno bolsito que llevaba colgado de la muneca y se lo llevo a la nariz. Robert la seguia mirando detenidamente. --Allyson... ?buscabas estar a solas conmigo? Allyson lo miro ruborizada. Cierto desasosiego la invadio ?Por que insistia? Los ojos de Robert habian empezado a brillar. Realmente estaban los dos a solas. ?Lo veria como una oportunidad de acercarse a ella y besarla? No le apetecia en absoluto. --No digas esas cosas, Robert. Soy una mujer decente. Robert sonrio con arrogancia. Por fin parecia que Allyson se habia dado cuenta de que estaba en sus manos, de que dependia de el. --No dudo de que lo seas... --?Donde estamos? --le interrumpio con curiosidad acercandose a la ventana al ver que pasaban junto a unos edificios que no conocia. Robert le impidio que lo hiciera sujetandola por el brazo. --Allyson, no tienes por que ver esto. Se mantuvieron la mirada por unos segundos. La tension entre ambos fue mas que visible y parecia que ninguno de los dos estaba dispuesto a ceder. Robert se incorporo ligeramente sobre ella. Allyson se rindio. Lo tenia demasiado cerca. Bajo la mirada, sumisa y volvio a apoyarse en su asiento. --Si no querias estar conmigo a solas, ?Que pretendias con este viaje? --No lo se. Pense que podria ver a mi padre... --?Ahora? ?Tienes algo urgente que decirle? Una fabrica no es lugar para una mujer de tu clase. Te ruego que no bajes del carruaje cuando lleguemos. Puede ser peligroso. Allyson lo miro con cierta desconfianza. Sus palabras parecian sinceras y su tono de voz amenazador. --?Peligroso? ?Y por que mi padre viene todos los dias? ?Por que vienes tu? --Peligroso para una mujer como tu, querida --le respondio protector sin dejar de mirarla. Allyson asintio antes de girar la cabeza hacia la ventana. Estaba deseando ver lo que habia en las calles. Siempre habia vivido protegida, entre sedas y algodones, pero ultimamente tenia muchas dudas acerca de si su vida era real o era un espejismo en el que solo unos cuantos afortunados podian vivir. Robert se sento de repente a su lado buscando su contacto. Allyson se sobresalto y con rapidez se levanto de su asiento para ocupar el que el habia dejado libre. --!Robert, por favor! Robert hizo una mueca de autosuficiencia.

  • Trece fantasias (STEEL 2) de Rose Gate

    https://gigalibros.com/trece-fantasias-steel-2.html

    Laura esta viviendo una pasion arrolladora junto a Marco, poco a poco todas sus fantasias se van haciendo realidad. Pero un nuevo sentimiento esta comenzando a nacer en Laura, la pasion que siente por el Genio de sus deseos se esta convirtiendo en algo nuevo y diferente para ella ?sentira Marco lo mismo? Marco ha descubierto una mujer llena de pasion que ha desequilibrado su mundo, le ha hecho revivir experiencias que le marcaron en el pasado pero de un modo totalmente diferente. Un sentimiento de posesion y algo mas inunda su pecho cada vez que esta con ella. ?Podra acabar Laura con los fantasmas del pasado de Marco? ?Sera Laura una catarsis para curar su alma? ?Se le puede llamar amor cuando siempre ha sido sexo?

  • Una casa al sur de Munich de Lola Munoz

    https://gigalibros.com/una-casa-al-sur-de-munich.html

    Elena Morey, una joven estudiante espanola, viaja a Munich para perfeccionar su aleman trabajando como au pair.
    En un desafortunado incidente durante la Oktoberfest conoce a Gerhard Huber, un atractivo ingeniero con el que inicia una intensa pero complicada relacion.
    La desaparicion de su vecina, Aileen Bauman, hace que la policia empiece a investigar su entorno. Los extranos comportamientos de quienes le rodean le llevan a sospechar de todos, incluso del hombre del que no ha podido evitar enamorarse.
    Una espiral de intrigas, pasiones, infidelidades y ambiciones que estara a punto de terminar con su vida.

  • Las flores perdidas de Alice Hart de Holly Ringland

    https://gigalibros.com/las-flores-perdidas-de-alice-hart.html

    Galardonada en 2019 con el prestigioso premio ABIA al mejor libro del ano en la categoria de ficcion, Las flores perdidas de Alice Hart se ha convertido desde su salida reciente en un bestseller internacional cuyos derechos de traduccion se han vendido a veintiocho paises. Holly Ringland ha conquistado el favor del publico y el aplauso de la critica con esta novela emocionante sobre una joven australiana que tiene que romper con los patrones que tejieron su infancia y tomar las riendas de su vida.

  • Bajotierra de Robert Macfarlane

    https://gigalibros.com/bajotierra.html

    Robert Macfarlane nos invita a bajar la mi

  • La vida a traves del espejo de Nathaly Melendez

    https://gigalibros.com/la-vida-a-traves-del-espejo.html

    La vida de Sofia no es inusual, es una hija modelo, estudiante ejemplar, buena amiga y novia. La perfeccion es su meta, su obsesion, pero nadie parece notarlo, nadie tiene problema con ello. Asi que, cuando por fin deja el nido y se marcha de casa para estudiar en la universidad, cree tenerlo todo cubierto, cree que llevar su vida sera mas sencillo y que podra controlarlo todo. Pero la universidad no resulta ser tan sencilla como esperaba y el control que creia tener, comienza a escurrirse como el agua entre sus dedos cuando conoce a Samanta y Andrea, unas chicas vivaces y extrovertidas. Porque ella esconde un gran secreto con el que ha cargado gran parte de su vida y la presencia de Angel y la montana rusa de emociones a su lado, la llevaran a tener que enfrentarse a su mas grande miedo.
    A veces, tu peor enemigo, eres tu mismo.
    Una novela basada en hechos reales, la vida de una chica que batalla contra unos ideales irrisorios de belleza en la busqueda de una perfeccion inalcanzable. Un amor juvenil con ansias de ser suficiente para sanar las heridas del pasado y del presente.
    ?Podra el amor ser suficiente para hacerte libre? o, ?el monstruo que ve en el espejo ganara esta batalla una vez mas?

  • Te quiero, pero solo un poco de Olga Salar

    https://gigalibros.com/te-quiero-pero-solo-un-poco.html

    Estaba de vuelta en su hogar, penso Blair. Lo habia sentido asi en el instante en el que el taxi paso por Lombard Street mientras los llevaba hasta Grove Street, en Alamo Square, el barrio en el que vivian sus padres. Mientras habia estado lejos de casa, habia echado de menos el aire perfumado de San Francisco, mezcla de especias de los diversos restaurantes que poblaban la ciudad, el aire salado del oceano y el dulce de la bahia; el constante ruido del cable car, su clima impredecible, y la familia que habia dejado alli dos anos atras, cuando decidio retomar en Boston la vida que, hasta ese momento, habia dejado en suspenso. Marcharse a la otra punta del pais habia sido necesario por su salud mental, pero no por eso habia sido mas facil hacerlo. Regresar, contra todo lo esperado, estaba siendo igual de complicado. No obstante, a pesar de llevar ya dos horas en la ciudad desde que se bajo del avion en el International Airport of San Francisco, no habia sido hasta ese instante, en el que las viviendas de colores le dieron la bienvenida, que se sintio verdaderamente en casa. --?Necesitas ayuda con las maletas? --pregunto Mike saliendo del taxi junto con el propio conductor, quien silenciosamente se dedico a sacar las pertenecias de Blair del maletero--. Te las dejare en la puerta antes de marcharme. --Ofrecio al tiempo que trataba de adivinar su estado mental mirandola con intensidad. --No es necesario. Pero, espera, ?no vas a entrar conmigo? Su mejor amigo nego con la cabeza. --Tus padres tienen ganas de verte y yo solo seria un estorbo. --Mis padres te quieren como a un hijo. Estaran encantados de verte y alimentarte. El sonrio sabiendo que era cierto. --Saludales de mi parte --y anadio con un suspiro resignado--, yo tambien he de ir a ver a mi madre. El gesto no paso desapercibido para Blair. La madre de Mike, quien, a la muerte de su esposo, habia tratado de sacar a su hijo adelante regentando un pequeno restaurante italiano en Little Italy, habia terminado siendo la duena de una franquicia de exito. Y su dedicacion la habia llevado a estar menos tiempo en casa, a pesar de que habia contado con la ayuda de su mejor amiga, la madre de Blair, quien desde el primer momento se ocupo de Mike como si de su propio hijo se tratara. Summer y Gina habian sido amigas inseparables desde el instante en que esta ultima se mudo a la casa de al lado de la que vivia Summer cuando ambas contaban con seis anos. --!Es cierto! Dile que en cuanto pueda pasare a verla. Mike asintio sonriendo. --!Se lo dire! Estoy seguro de que mi madre estara mas feliz de verte a ti que a mi. --No digas tonterias, Michele --lo regano usando su nombre en italiano tal y como hacia Gina. Mike la miro molesto, pero no protesto. --Recuerda que manana a las nueve pasare a recogerte. Si no desayunas antes podemos pasar por el Spiro y ponernos ciegos de waf les. Blair fruncio el ceno confundida. ?Por que debia de pasar a recogerla tan temprano? Adivinando sus pensamientos, Mike explico: --El agente inmobiliario, ?lo has olvidado? Tenemos una cita con el para encontrar el local que buscamos. Asintio muy seria tratando de disimular su despiste. --Aprovechare para buscar un apartamento. Deberias hacer lo mismo --recomendo sabiendo que por mucho que Mike y su madre se quisieran, era imposible que vivieran juntos sin que aquello terminara en tragedia. De hecho, ella misma habia compartido hogar con el en Boston, mientras los dos terminaban sus estudios, tras dejar Stanford, y, de no ser porque era su mejor amigo, practicamente desde que nacio, habria acabado asesinandolo. Mike era una persona descuidada y desordenada, mientras que ella era meticulosa hasta la obsesion. --!Lo hare! --Mike se acerco a ella y le dio un beso en la mejilla--. !Hasta manana! Se dio la vuelta y entro en el taxi que lo esperaba. Blair se quedo alli parada con las dos enormes maletas a su lado. No se movio hasta que el vehiculo se perdio por la pendiente. Despues de dejar de verlo, tomo su equipaje y se acerco hasta la casa con la fachada y la puerta pintadas de azul celeste. Una vez alli, se tomo unos segundos para asimilar que estaba de vuelta, con todo lo que ello comportaba. Saco las llaves de su bolso y, sin mas excusas, abrio la puerta y entro, poniendo una voz jovial: --Papa, mama, estoy en casa. Capitulo 1 Cuatro anos despues... --Ezra, necesito que te hagas cargo del caso Walton --pidio George al tiempo que abria la puerta del despacho de su socio sin siquiera anunciarse. Ezra vio a Alice, su secretaria, detras del intruso con la cara descompuesta. Sabia lo mucho que su jefe odiaba que se invadiera su espacio privado de improviso. No obstante, no habia tenido tiempo para detener a George, ya que este habia pasado como una exhalacion por delante de su mesa. Sabiendo lo que le preocupaba, Ezra la miro con una sonrisa serena y agito levemente la cabeza para tranquilizarla. Despues centro su atencion en el culpable de aquel pequeno caos. --Creia que el caso Walton era un divorcio --musito con el ceno fruncido por la confusion. Vio como Alice salia del despacho visiblemente mas relajada, lo que le permitio volver a centrarse en la conversacion--. ?De que se trata? ?Asesinato? ?Malversacion? ?Acoso sexual? Peter Walton era un conocido productor musical que manejaba mucho dinero y se codeaba con grandes estrellas tanto del cine como de la musica. En esos ambientes cualquier cosa era posible. --No, es un divorcio. Ezra arqueo una ceja. --Buscate a otro. Los divorcios no son lo mio --zanjo volviendo a centrar su interes en los documentos que habia estado revisando antes de ser tan descortesmente interrumpido por su socio. --Tienes que hacerlo tu. La esposa de Walton ha conseguido a la mejor abogada de divorcios de todo San Francisco. --?Y que tiene eso que ver conmigo? George lo miro con enfado mal disimulado. --?Aparte de que eres socio principal del bufete, quieres decir? Ezra ni siquiera levanto la mirada de los documentos. --Eres el unico que tiene alguna posibilidad de ganarle. Las infidelidades de Walton son vox populi. Ademas, no hay contrato prematrimonial. Estoy seguro de que su esposa planea usar sus aventuras para sacarle toda la sangre. --Habla con James, es el mejor abogado matrimonialista del bufete. Lo contratamos para eso, ?no?--No, debes de hacerlo tu. Ezra estaba comenzando a molestarse. George podia ser su mejor amigo y la unica persona que se habia atrevido a arriesgarse con el para fundar el bufete, pero eso no restaba que su insistencia comenzara a ser molesta. Desde el instante en que fundaron el bufete, habia dejado claro que aceptaria cualquier caso o cliente, que no haria distinciones por su estatus o necesidades. Lo unico que no estaba dispuesto a representar era a sus clientes en divorcios. Y de algun modo, en el bufete no entro ningun tipo de trabajo de ese tipo hasta que conscientemente, tanto George como el decidieron ampliar horizontes y contrataron a James para que se hiciera cargo de esa parte del trabajo. Por lo que la peticion de George no solo era inesperada, sino que tambien era desconsiderada, sabiendo como sabia que Ezra se negaba a intervenir en nada que oliera remotamente a disolucion matrimonial. --!No! --Este caso es muy importante y... --!No! --repitio cortandole para evitar que siguiera insistiendo. --!Dejame terminar! Consciente de que no se marcharia hasta que hubiera dicho todo lo que tenia previsto decir, se armo de valor y lo miro, mostrandole lo poco interesado que estaba en sus argumentos. --La abogada de la senora Walton se llama Blair Miller. Ezra no dijo nada durante unos segundos eternos. --Es un nombre bastante comun --opino finalmente. --Es ella. --?Estas seguro? George asintio. --?Finalmente termino la carrera? --?De que te sorprendes? Era una estudiante impresionante, su beca en Stanford era buena prueba de ello. --?Desde cuando lo sabes? --?Que se dedica a la abogacia? Ezra asintio. --Hace un tiempo. --?Cuanto? --Un tiempo. No insistio. No era necesario. El que no quisiera ser mas especifico ya era un dato importante. --?Cuando regreso a San Francisco? --!No lo se! --?Entonces que sabes? --Como te he dicho, estoy al tanto de que es la mejor abogada de divorcios de la ciudad -- insistio su amigo. --?Se ha especializado en divorcios? George suspiro. --Eso parece. --?Esta casada? --No lo se. No la he investigado. --?Por que? --?Que por que no la he investigado? Pues no se, seguramente porque no sabia que tuviera que hacerlo. Es una abogada matrimonialista, no era competencia para el bufete. Nosotros raramente nos ocupamos de este tipo de casos. Solo hace un par de meses que contratamos a James. --Tal vez ha llegado el momento de que eso cambie. --?Te refieres a que vas a hacerte cargo del divorcio de los Walton o a que esperas que le pida a Daniel que la investigue? --Las dos cosas. --?Estas seguro? --!Por supuesto! ?Quien mejor para enfrentarse a ella en un divorcio? Despues de todo, ambos tenemos experiencia en el tema.

  • Vainilla de Megan Hart

    https://gigalibros.com/vainilla.html

    El gusto se adquiria. lo unico que necesitaba el era adquirirlo.Elise tenia muy claro lo que le gustaba en la cama, y se aseguraba de conseguirlo. Su sed de dominacion estaba saciada desde hacia tiempo gracias a unos cuantos hombres mas que felices de inclinarse ante ella.Sin embargo, la satisfaccion sexual no era lo mismo que el amor, y ella ya se habia quemado en el pasado por ofrecer su corazon con excesiva libertad.Niall era guapo, inteligente, triunfador y dulce. dulce como la vainilla. Al instante de conocerse, su atraccion hizo saltar chispas, a pesar de que el no compartia sus gustos sexuales. Aunque Elise intento evitarlo, termino por sucumbir y enamorarse de el, pero ?como podria funcionar una relacion en la que ambos amantes querian colocarse encima?

  • Muerte en el Nilo de

    https://gigalibros.com/muerte-en-el-nilo.html

    Durante unas placenteras vacaciones en Egipto, el detective Hercules Poirot coincide con Linnet y Simon, unos conocidos suyos que estan de luna de miel en el pais de los faraones.

  • Piscinas vacias de Laura Ferrero

    https://gigalibros.com/piscinas-vacias.html

    Piscinas vacias es el primer libro de relatos de Laura Ferrero, una joven autora que irrumpe con fuerza en el panorama literario y que ha sido calificada como <> por ABC.

  • Tu, mi deuda pendiente de Scarlett O'connor

    https://gigalibros.com/tu-mi-deuda-pendiente.html

    !Scarlett lo ha hecho de nuevo! <> es una novela llena de sensualidad y erotismo que te volvera a hacer creer en el amor.
    -Melanie Rogers

  • Vidas Infinitas de A. R. Cid

    https://gigalibros.com/vidas-infinitas.html

    ?Cuantas vidas puedes experimentar sin llegar a volverte loca?

  • Enoch Soames de Max Beerbohm

    https://gigalibros.com/enoch-soames.html

    Enoch Soames es un poeta decadentista tan mediocre como pedante, autor de tres obras que, muy a su pesar, no le han procurado fama ni prestigio alguno. Convencido de ser un escritor de talento injustamente ignorado, suena con el reconocimiento que, quiza, reciba de manera postuma. Un dia, mientras cena en el Soho londinense con Beerbohm, el involuntario testigo de sus desgracias, un personaje con pinta de pendenciero que afirma ser el diablo le ofrece la oportunidad de viajar al futuro para comprobar que le depara la posteridad.

  • La maldicion de los reinos de Erya

    https://gigalibros.com/la-maldicion-de-los-reinos.html

    Una rosa. Un cetro.
    Un palacio. Un oceano.
    Una maldicion. Un castigo.
    Un solo destino.
    ?Y si la sirena hubiera nadado al castillo de la bestia?

  • Un novio millonario por Navidad de Ella Valentine

    https://gigalibros.com/un-novio-millonario-por-navidad.html

    Molly cogio una caja vacia de la sala de fotocopias, la llevo hasta su despacho y coloco dentro todas sus pertenencias con la ansiedad convertida en bola en su estomago. Hacia meses que un rumor sobre una posible reduccion de plantilla corria por la oficina. La agencia de publicidad en la que trabajaba llevaba tiempo perdiendo clientes importantes y no estaba pasando por su mejor momento, pero Molly creyo que la situacion no era para tanto. No hasta que el senor Sanders la llamo a su despacho, le ofrecio un bastoncito navideno a rallas blancas y rojas del tarro que tenia sobre su mesa y, con cierta afliccion, la despidio porque, a pesar de ser una buena profesional, habia sido la ultima persona en incorporarse en la empresa. Se mordio el labio sintiendo un torrente de frustracion recorrer sus venas. Hacia 24 horas tenia todo lo que una mujer de 27 anos podia desear: un novio que la queria y un trabajo que le entusiasmaba. 24 horas habian bastado para que esa vida perfecta se desplomara como un castillo de naipes tras un golpe de viento. Cuadro los hombros y salio del despacho intentando ignorar las miradas llenas de compasion que le dirigieron sus companeros desde sus puestos. Quizas aquella escena hubiera sido menos dramatica si la decoracion navidena no ocupara cada centimetro de aquella oficina con suelos de linoleo azul, sin apenas luz natural, o si Frank Sinatra no cantara White Christmas con un entusiasmo desbordante desde el hilo musical, o si un Santa Claus diminuto no saltara sobre su muelle sobresaliendo de la caja que sostenia entre las manos. En aquel momento se maldijo por haberlo comprado en uno de esos mercadillos navidenos que tanto le gustaban pensando en lo bien que quedaria en su escritorio. Faltaban diez dias para Navidad y su vida estaba patas arriba. Subio en el ascensor, bajo hasta la planta baja y salio por la puerta rotatoria del edificio de oficinas en el que se ubicaba la agencia sintiendo como el frio le calaba los huesos. Se ajusto el gorro rosa que llevaba sobre el cabello color chocolate y dio una vuelta mas a la bufanda alrededor del cuello fijandose en la explosion de luces y color de las calles de Nueva York. La agencia estaba emplazada en la Quinta Avenida, una ubicacion muy privilegiada y agradecida para trabajar. Para alguien originario de Nueva Jersey y enamorada de la Gran Manzana como Molly, pasear a diario por esa zona era una gozada. Decidio acercarse a ver el arbol de Navidad del Rockefeller Center. Contemplarlo siempre la animaba y en aquellos momentos necesitaba grandes dosis de animo. Mientras caminaba hacia alli, no dejaba de pensar en la desgracia que se cernia sobre ella. Si quedarse sin trabajo ya era un desastre de por si, hacerlo el dia despues de que tu novio te de la patada, lo era aun mas. Penso en John y lo odio mas que nunca por haberla plantado con la patetica excusa de necesitar tiempo para estar solo y encontrarse a si mismo. No eres tu, soy yo, le habia dicho. Eso es lo que Molly se merecia despues de tres anos de relacion y uno de convivencia: que la dejaran usando la frase mas trillada de la historia. Ahora, sin trabajo y sin nadie con el que compartir los gastos del piso de alquiler, no tenia la menor idea de como iba a llegar a fin de mes. Haciendo cuentas podria sobrevivir sola dos meses como mucho. Y dudaba que encontrase un nuevo trabajo en tan poco tiempo. Cuando llego al Rockefeller Center los pies le dolian horrores. En aquel momento haberse gastado trescientos dolares en aquellas botas preciosas pero incomodas a mas no poder, le parecio la peor idea de la historia. Observo el arbol, hermoso e iluminado, frente a la pista de patinaje sobre hielo, pero en aquella ocasion no la recorrio por dentro el torrente de bienestar habitual. La situacion era demasiado deprimente como para que un arbol navideno fuera suficiente para levantar su moral. El movil vibro dentro de su bolso. Lo saco y comprobo que se trataba de uno de los mensajes de audio de su madre. Imagino que seria uno de sus monologos interminables de siempre, pero esta vez se equivoco. --Hola, cielo, soy yo, mama --Molly puso los ojos en blanco, por mucho que le dijera que no hacia falta que se presentara cada vez, lo seguia haciendo--: Veras, tengo que contarte una cosita, !tu padre y yo hemos cometido una locura! --La escucho reir tontamente y se le pusieron los pelos de la nuca de punta, porque cuando sus padres cometian una locura lo hacian a lo grande--. Acabamos de subirnos a un avion rumbo a Hawai. Nuestras primeras Navidades fuera de casa, ?no es maravilloso? Como nos dijiste que este ano el dia de Navidad cenarias con los padres de John, hemos decidido darnos este capricho. Bueno, Molly, te dejo, que esto esta a punto de despegar y nos obligan a poner los moviles en modo avion. Un beso. Muaaaa. Molly miro el aparato, perpleja. Aquello no podia ser verdad. Hizo el intento de llamar al movil de su madre, pero el numero estaba apagado o fuera de cobertura. Ya no habia vuelta atras; iba a pasar sola la noche de Navidad. Resoplo, lamentandose una vez mas por su mala suerte. Tenia que haberla llamado por la manana para explicarle la nueva situacion, pero no lo hizo porque... porque sabia que su madre adoraba a John y que la noticia de su ruptura seria un duro golpe para ella. Y una decepcion. Y Molly odiaba decepcionar a su madre por encima de todas las cosas. Entonces, empezo a nevar. Pequenos copos de nieve danzaron en el aire hasta posarse en el suelo y desaparecer. Frente a ella, decenas de personas patinaban en la famosa pista de hielo con la nieve cayendo a su alrededor en una imagen tan bucolica que, de no haberse encontrado en la tesitura que se encontraba, hubiera sacado una foto y la hubiera subido a Instagram con el hashtag "#magia". Molly subio su mirada al cielo, donde los copos de nieve se deslizaban sin parar, y se dijo que era hora de regresar a casa. Tenia muchas cosas que hacer si pretendia seguir viviendo en Nueva York: actualizar su curriculum, darse de alta en los directorios digitales de busqueda de empleo, buscar un piso mas barato para reducir gastos... Empezo a andar con la cabeza hecha un hervidero cuando, al girar en una esquina, se fijo en un Santa Claus sentado en el suelo. Al acercarse comprendio que habia errado en su apreciacion y que no se trataba de un Santa Claus, sino de un mendigo de barriga prominente, barba blanca y chandal rojo que sostenia entre las manos un cartel en el que podia leerse: “Deseos a 3 dolares”. Frente a el, habia un vaso de plastico vacio. Se dijo que por muy mala que fuera su situacion, siempre habria alguien peor que ella, y llevada por ese pensamiento saco tres dolares de su monedero y los deposito dentro del vaso. Hizo ademan de reemprender su camino cuando el senor barbudo la interpelo: --Senorita, ?y su deseo? Molly lo miro con una mezcla de lastima y escepticismo. --No tengo mucha fe en los deseos, senor --dijo con un encogimiento de hombros y una media sonrisa. --Pero no pierde nada por intentarlo, ?verdad? --Emmm... Bueno... Supongo que no. --Entonces, ?que desea? --El falso Santa movio sus manos regordetas en un gesto de apremio. --No se... --Molly se mordio el labio pensando en una respuesta. Su vida estaba patas arriba, con un deseo no tenia ni para empezar, asi que echo mano de su sarcasmo--: ?La verdad? Lo unico que podria mejorar mi situacion en este momento seria un novio millonario. Se dijo que si, que un novio millonario seria la solucion a todos sus problemas. No es que fuera la clase de mujer que espera ser salvada por un principe azul subido sobre un corcel blanco, nunca habia querido vivir a costa de un hombre, era una mujer independiente y autosuficiente, pero puestos a sonar… El hombre, frente a ella, sonrio enigmatico, cogio una campanilla que habia sobre la manta donde estaba sentado y la hizo sonar. --Ho, ho, ho. !Deseo concedido! !Feliz Navidad! Molly movio la mano a modo de despedida y siguio caminando calle abajo. Vivia bastante cerca de alli, en un mini apartamento que ella y John consiguieron alquilar por un buen precio pese a la zona, asi que acelero el paso con ganas de llegar a casa y darse una ducha calentita. La nieve caia cada vez con mas intensidad y no llevaba paraguas, por lo que la humedad le estaba calando la ropa. Iba tan concentrada en llegar a casa que, al cruzar, no se fijo en la alcantarilla que habia en medio de la calle, con tan mala suerte que, al pisarla, uno de sus tacones se hundio en uno de sus agujeros. --!Mierda! --exclamo Molly intentando en vano sacar el tacon del agujero. Parecia haberse quedado atascado--. Oh, venga, no me fastidies. ?Es que hoy no puede salirme nada bien? Los focos de un coche acercandose a gran velocidad la deslumbraron y, presa del panico, solto la caja con todas sus cosas que se esparcieron por el pavimento mientras intentaba desencajar el dichoso tacon de aquel sitio. El Santa Claus diminuto se activo y una melodia navidena empezo a sonar de repente poniendola aun mas nerviosa. Dios, iba a morir. El coche estaba a punto de arrollarla y en lo primero que Molly penso ante su inminente muerte fue que, por suerte, aquella manana se habia puesto su mejor vestido. Ya que iba a morir, que menos que hacerlo con clase. Con el panico paralizando su sistema nervioso, cerro los ojos y espero. 2 Molly 15 de diciembre Faltan 10 dias para Navidad --!Oh, Dios mio! ?Estas bien? Molly parpadeo, completamente aturdida, y por un momento se pregunto donde estaba. Le llevo un tiempo darse cuenta de que estaba tirada en el asfalto. !Genial! Era simplemente genial. Habia perdido el novio, el trabajo y casi muere atropellada por un... un... Miro al hombre que casi la manda al mundo eterno y abrio la boca de par en par. Molly no tenia muchas prendas de marca, pero sabia perfectamente cuando algo era caro. Aquel chico vestia un pantalon y un jersey de cuello alto que debian costar una fortuna, a juzgar por como le sentaba el conjunto, incluso estando encorvado sobre ella. Ademas, olia a dinero. Esas cosas se notaban. Era moreno y tan guapo que quitaba el aliento. Su pelo encrespado por arriba daba un aire informal a su aspecto y... !y casi la mata! Molly se solto de un tiron cuando el quiso ayudarla a levantarse. Lo hizo por sus propios medios, y aunque su pie protesto un poco, se cercioro pronto de que no tenia nada, salvo el aturdimiento propio por el susto y la caida. Al menos habia conseguido desatascar el tacon del maldito agujero. --Es increible --mascullo--. De verdad que esto es increible. --Perdona ?que? Miro a su lado, al chico que seguia pendiente de ella mientras el trafico los esquivaba y varios claxones sonaban al mismo tiempo. --!He dicho que es increible! !Justo lo que me faltaba en un dia tan malo como hoy! !Un ricachon que casi me mata! --Ah... --?Eso es todo lo que tienes que decir? Oye, para ti la vida de los demas probablemente no valga mas que ese reloj tan caro que llevas, pero mi vida es valiosa. !Aunque ahora mismo no lo parezca!

  • Nietzsche para estresados de Allan Percy

    https://gigalibros.com/nietzsche-para-estresados.html

    Este manual reune 99 maximas del genio aleman y su aplicacion practica a entornos y situaciones de cada dia. Tanto en el mundo de la empresa como en el ambito personal, la filosofia de Nietzsche es altamente efectiva para hallar la salida de cualquier encrucijada. Cada capitulo del libro se abre con un aforismo de este pensador, seguido de una interpretacion en clave actual para mejorar nuestra calidad de vida. Este breve curso de filosofia cotidiana ha sido disenado como ayuda para tomar decisiones, recuperar el aliento, enderezar el rumbo perdido y relativizar la importancia de las cosas que nos suceden en la jornada. Nos hallamos ante un manual de autoayuda sabio --por el personaje que lo inspira--, provocador y estimulante. Un libro para los que buscan inspiracion en el pensamiento del filosofo mas influyente de la era moderna, que nos ensena a combatir las angustias y los miedos de hoy en dia. Junto con los 99 fogonazos de lucidez de la filosofia de Nietzsche, el manual se cierra con un cuaderno explicativo sobre la filosofia como terapia y sus aplicaciones para la vida cotidiana. Popularizada por su libro de gran exito Mas Platon y menos Prozac, conoceremos el trabajo de los consultores filosoficos y como las maximas de los pensadores de todos los tiempos pueden ser una ayuda terapeutica de primer rango. Antes de dar voz al filosofo que ha inspirado este manual de autoayuda, hagamos una breve visita a la biografia del maestro. Friedrich Wilhelm Nietzsche nacio en 1844 en la localidad germana de Rocken. Hijo de un pastor evangelico que fallecio cuando el tenia cinco anos, crecio en un ambiente de pietismo protestante dominado por mujeres. Tras estudiar en un internado donde se iniciaria en la antiguedad griega y romana, estudio filosofia clasica en las universidades de Bonn y Leipzig. Fue en esta ultima donde entro en contacto con el ideario de Schopenhauer y la musica de Wagner, compositor admirado a quien despues conoceria en persona. En 1869, a la temprana edad de veinticinco anos, Nietzsche ya era catedratico de filologia clasica en la Universidad de Basilea. Sin embargo, su actividad docente en esta institucion fue interrumpida en 1870 por el estallido de la guerra franco-prusiana. Nietzsche participo en la contienda como enfermero, hasta que tuvo que abandonar el frente a causa de la disenteria, afeccion de la que no llegaria a restablecerse totalmente. En 1881 conocio a Lou Andreas Salome, mujer de la que se enamoraria perdidamente, pero que acabaria casandose con un amigo suyo. Aquel rechazo acabaria afianzando en el su proverbial misoginia. Obligado a jubilarse prematuramente debido a las secuelas de su enfermedad, se traslado a la Riviera francesa y al norte de Italia para pensar y escribir. Solo y frustrado porque sus obras no obtenian la acogida que el esperaba, en 1889, un Nietzsche practicamente ciego fue victima en Turin de los primeros accesos de locura. Despues de largas temporadas internado en clinicas de Basilea y Jena, pasaria el resto de su vida en casa de su madre, que cuido de el hasta que a su muerte quedo al cargo de su hermana. Nietzsche fallecio en el ano 1900. Su legado filosofico posee una enorme ambicion que no ha perdido en la actualidad su poder inspirador y provocador. 99 pildoras para despertar la mente 1 Aquel que tiene un por que vivir puede enfrentarse a cualquier <> El estres y la desorientacion hacen presa de nosotros cuando perdemos de vista nuestros objetivos vitales. La sensacion de <>, el agotamiento que produce la dispersion tienen su antidoto en una meta clara que de sentido a lo que estamos haciendo, con sus buenos y malos momentos. Sobre esto, Viktor Frankl consideraba que basta con que el individuo encuentre un sentido a su vida para superar la mayoria de los problemas que le aquejan. La logoterapia busca justamente eso: en lugar de escarbar en el pasado del paciente, se explora que puede hacer con lo que tiene aqui y ahora. Dicho de un modo mas sencillo: encontrar un motivo para levantarse cada dia de la cama. El drama de muchas personas insatisfechas con su existencia es que tampoco se plantean cual es la vida que desearian vivir. Y la primera condicion para dejar de estar perdido es saber, al menos, adonde se quiere llegar. Al igual que Frankl medio siglo despues, Nietzsche senala la importancia de encontrar un <>. Cuando nuestra vida se llena de sentido, de repente los esfuerzos ya no son fatigas, sino pasos necesarios hacia la meta que nos hemos fijado. 2 El destino de los seres humanos esta hecho de momentos felices, toda la vida los tiene, pero no de epocas felices La felicidad es fragil y volatil porque solo puede vivirse en determinados momentos. De hecho, si pudieramos experimentarla ininterrumpidamente perderia todo su valor, ya que unicamente podemos percibirla por contraste. Tras una semana de cielo cubierto, el dia soleado nos parece un milagro de la Creacion. Del mismo modo, sentimos la alegria mas radiante al salir del pozo de la tristeza. Ambas emociones se complementan y necesitan, porque ni la melancolia es eterna ni podriamos soportar cien anos de felicidad. Este es uno de los factores de estres de la sociedad moderna: creer que tenemos la obligacion de ser felices en todo momento y lugar. La negacion de la tristeza hace que se dispare el consumo de antidepresivos, las terapias y el derroche en cosas que no necesitamos. Parece como si no esgrimir una sonrisa permanente fuera motivo de verguenza. Contra esta perspectiva falsa e infantil, Nietzsche nos recuerda que la felicidad se da solo a destellos y que al pretender perpetuarla matamos incluso esos mismos destellos que nos ayudan a avanzar en el largo y tortuoso camino de la vida.

  • Monstruos de la vida real de Sergio Sepulveda

    https://gigalibros.com/monstruos-de-la-vida-real.html

    Sergio Sepulveda, quien a lo largo de su carrera profesional ha revelado los casos mas inverosimiles olvidados por la historia y los ha llevado a la pantalla nacional, abre los expedientes de los 15 homicidas mas terribles de todos los tiempos, hombres que saltaron a la fama por su sadismo y sangre fria, y que tocan esa parte oscura de la naturaleza humana tan dificil de creer:

  • Bilogia Completa Nunca de Kris Buendia

    https://gigalibros.com/bilogia-completa-nunca.html

    ?Quien puede empezar a amar de nuevo cuando lo ha perdido todo?
    Ellie Roth esta atrapada en un amor del pasado y una relacion abusiva en el presente, la decision no es tan dificil de tomar, mas si ese amor del pasado regresa y no precisamente a continuar algo que nunca comenzo... sino a hacerla sufrir mas de lo que ya ha sufrido.
    ?Crees en los finales felices?
    Ellie no creen en los finales felices. Y es gracias a Logan Loewen, el ganador de cinco copas consecutivas de la NASCAR. El le ha ensenado que no hay finales felices, lo sabe porque con el aprendio a no esperar, a no tener miedo y lo peor... dejar de amar.
    Logan ha regresado con mucho equipaje, pero lo que Ellie no sabe es si regreso porque esta huyendo de algo o si realmente ahora tendran suerte en amar. El unico obstaculo es que Ellie ya no esta sola, ha encontrado un nuevo amor y Logan tendra que aceptarlo.
    ?Se quedara Logan esta vez o la dejara ir?
    ?De cuantos capitulos sera su amor ahora?
    Y lo peor de todo, es que en el pasado de Logan hay alguien mas que definitivamente no es Ellie.

  • El amor es una montana rusa de Romina Naranjo

    https://gigalibros.com/el-amor-es-una-montana-rusa.html

    Nina es un desastre. Y superdramatica. Un torbellino de emociones locas. Todo le pasa a ella, que solo suena con ser una periodista de verdad. mientras trabaja como guionista en un reality que se esta viniendo abajo por momentos. Un ultimo error fatal la situa en la primera linea de fuego: pasara a ser la protagonista de un nuevo proyecto de telerrealidad que le augura fama y exito a manos llenas. si obvia ciertos escrupulos y a ciertas personas, como al camara que la productora le impone, Lucas, un clon de Jim Morrison (mas hipster, y mas guapo, y mas irresistible, y mas. buf) con el que va a chocar en todo, todo y todo. La vida de Nina quedara expuesta ante la audiencia las veinticuatro horas del dia, y entre idas y venidas llegara el momento de tomar decisiones importantes. o de dejarse llevar por la montana rusa que es el amor.

  • Venganos Tu Reino de Juan Gabriel Vazquez

    https://gigalibros.com/venganos-tu-reino.html

    Rodney R. Campbell es un policia que hace su recorrido por Manhattan . Ese dia pasa algo que cambiara su vida , Mandandolo mas tarde a algunos paises latinoamericanos, hasta llegar a Mexico.Sonora, Mexico. Francisco Villavicencio, el candidato a la presidencia por parte del PRI (Partido Revolucionario Institucional), da un discurso para convencer a todos, que es la solucion de los problemas de ese pais. Lo que no sabe que un magnicidio se esta preparando hacia su persona.Luca, un asesino letal, esta a punto de hacer su trabajo mas importante de su carrera. El jefe de un cartel, con ayuda de un poderoso politico, se escapa de una carcel de alta seguridad, pero al poco tiempo se da cuenta que lo han traicionado y lo que realmente quieren, es verlo muerto.Don German De La Rivera, es el padrino de Mexico y mantiene un poderoso imperio. Sin embargo, Armando Logrono, dueno de la televisora mas importante de ese pais, suena con obtener ese imperio y empieza a mover sus piezas para lograrlo, aunque sabe que un paso en falso, le costara la vida.Abigail Najera, la actriz del momento, suena con llegar a Hollywood y su inspiracion es Salma Hayek. Pero antes tiene que recorrer un largo y obscuro camino en ese medio.

  • Blutstein de Allyn O'callaghan

    https://gigalibros.com/blutstein.html

    Un macabro asesinato no debe ser el final de su historia y Carlos se pondra a prueba para desenmascarar lo que parece ser una muerte ritual.
    Pero no todo es lo que parece y un psicopata no se conforma con arrebatar vidas, sino que es capaz de llevar a sus perseguidores por los caminos de la locura y el miedo.

  • La senora Dalloway de Virginia Woolf

    https://gigalibros.com/la-senora-dalloway.html

    La senora Dalloway relata un dia corriente en la vida de Clarissa Dalloway, una dama casada con un diputado conservador y madre de una adolescente. La historia comienza una soleada manana de junio de 1923, con un paseo de Clarissa por el centro de Londres, gran escenario de la novela, y termina esa misma noche, cuando comienzan a retirarse de casa de los Dalloway los invitados a su fiesta. Aunque en el curso del dia sucede un hecho tragico: el suicidio de un joven que vuelve de la guerra, lo notable de la historia no es ese episodio, ni los pequenos sucesos y recuerdos que la componen, sino que toda ella este narrada desde la conciencia de los personajes y del analisis de todo lo que pasa por sus mentes antes de actuar.

  • Una voz escondida, Parinoush Saniee de Parinoush Saniee

    https://gigalibros.com/una-voz-escondida-parinoush-saniee.html

    Tras el extraordinario exito obtenido con el El libro de mi destino, donde dio voz a las mujeres iranies oprimidas por el fanatismo religioso, Parinoush Saniee aborda en su segunda novela las aciagas secuelas de la insensibilidad y la ignorancia. Basandose en el caso real de un nino que no hablo hasta cumplir los siete anos, Saniee toma el pulso a la sociedad de su pais con una historia en la que el silencio cobra la fuerza de un grito de protesta.

  • Deseo concedido (Las guerreras Maxwell 1) de Megan Maxwell

    https://gigalibros.com/deseo-concedido-las-guerreras-maxwell-1.html

    Lady Megan Phillips es una joven y bella luchadora que tiene a su cargo a sus dos hermanos pequenos. Su vida no ha sido nada facil, por lo que ha forjado el caracter de una autentica guerrera que no se doblega ante nada ni nadie.
    El highlander Duncan McRae, mas conocido como el Halcon, es un guerrero acostumbrado a liderar ejercitos, librar batallas y salir victorioso de ellas junto a su clan. Pero al llegar al castillo de Dunstaffnage para el enlace de su buen amigo Alex McDougall, se encuentra con un tipo de enemigo con el que no esta acostumbrado a batallar: lady Megan Phillips, una morena que no tiene miedo a nada.
    Asombrado por el impetu y descaro de la joven, el Halcon no puede apartar sus ojos verdes de ella y, tras hacerle una promesa al abuelo de la muchacha, se ve unido a ella en una boda que durara un ano y un dia.
    ?Que les deparara el destino a los senores McRae? ?Conseguiran entenderse o acabaran odiandose para el resto de sus dias?

  • Navidad en el Club de Nina Klein

    https://gigalibros.com/navidad-en-el-club.html

    P C A P I T ULO 1 or un momento tuve miedo de que el portero no me dejase entrar al club. Le mire, alto y grande, con un traje oscuro y camisa tambien oscura, debajo del letrero con el nombre del club, al lado de la puerta cerrada. Yo no estaba vestida para matar, como el resto de gente que estaba en la puerta, algunos haciendo cola detras de las catenarias, otros parados en grupitos en la acera. La gente no solo estaba vestida de viernes por la noche, estaban vestidos de fiesta: lentejuelas, boas de plumas, brillantina en la piel y en el pelo… Los hombres iban practicamente todos con traje y no habian podido usar mucho su imaginacion: alguna corbata roja, y poco mas. Aquel era un sitio con clase. ?Que llevaba yo puesto? El abrigo negro casi hasta los pies, de corte masculino, que usaba todos los dias. Debajo del abrigo, unos vaqueros pitillos oscuros, unos botines, y un jersey fino negro que era el mismo que habia llevado ese dia a la oficina. Ahora estaba alli, con el pase de socia que no era mio quemandome en el bolsillo del abrigo. Con las prisas, no habia cogido ni bufanda ni gorro, y debia hacer como cero grados. Se me estaban congelando las orejas. Tampoco habia cogido bolso: todas mis cosas -bueno, el movil, las llaves y la cartera, lo unico que llevaba encima- estaban en los bolsillos interiores de mi abrigo. Mire de nuevo al portero que, a pesar de toda la gente que habia en la puerta, me miraba directamente a mi, con curiosidad. Lei el letrero sobre la puerta. Poison. Tome aire. Tenia que entrar. Tenia que saber lo que estaba pasando, necesitaba saber la verdad. ?Que era una neurotica y una desconfiada? Quizas, pero llevaba dos dias sin poder dormir ni concentrarme ni hacer nada mas, y necesitaba salir de dudas. Me quite la coleta que llevaba y me pase los dedos por mi melena negra, para intentar mezclarme un poco mas con el ambiente. Era absurdo, porque llamaba un monton la atencion de todas formas. Sobresalia exactamente por mi normalidad: era la unica persona que no iba de punta en blanco, la unica que no se habia pasado mas de dos horas preparandose antes de acudir alli. Que clase de sitio es este, pense. Bueno, sabia exactamente el tipo de sitio que era. Y por eso estaba alli. Me acerque al portero, nerviosa, con el corazon en la garganta. Me sonrio y me dio las buenas noches. Bueno, por lo menos parecia amable. Trague saliva y le tendi la tarjeta. Paso el escaner por encima. -Que pases una buena noche, Lidia -dijo el gigante. Me imagine que el nombre le habia salido en el escaner, y por eso me habia llamado Lidia. Y no, no iba a pasar una buena noche, porque no iba a socializar, ni a divertirme. Mi objetivo era otro. Y tampoco me llamaba Lidia, la tarjeta con la que iba a entrar al club no era mia. Pero evidentemente no dije nada de eso. Le sonrei de vuelta, o lo intente, musite un gracias apresurado y entre en el club. ?Que hacia alli, un 23 de diciembre, en el club Poison, un club sexual del que no habia oido hablar hasta un par de dias antes? Buena pregunta. Todo habia empezado exactamente entonces, un par de dias antes, en la oficina. TRABAJO en el departamento de marketing de una gran empresa, una firma de moda prestigiosa con oficinas en todo el mundo. Ropa que no me puedo permitir ni en suenos. No gano mal, pero no puedo pagar mil dolares por un jersey o unos pantalones, ya ni hablar de un bolso, que costaba mas del doble. Asi era el mundo de los articulos de lujo. Estaba en la oficina, decia, hablando con mis companeros en el descanso, hablando de lo que iban a hacer por Navidad. Era dia 21 de diciembre, habia un ambiente festivo en la oficina y muchos de ellos se iban directamente al aeropuerto cuando terminasemos la jornada para pasar las fiestas con sus familias. De eso estabamos hablando, de con quien ibamos a pasar el dia de Navidad: habia tres personas que se quedaban solas en la ciudad y estaban organizando una comida navidena para no sentirse tan miserables. -Al final este ano tambien me sumo, chicos… -dije, un poco de bajon. Los dos ultimos anos era lo que habia hecho, mi familia tan desperdigada por todo el globo terraqueo que juntarnos una vez al ano todos en el mismo sitio era practicamente imposible. Aparte, mis padres ya no estaban y mis hermanos tenian sus propias familias y casas. -!Anda! No te habiamos dicho nada porque pensabamos que ibas a pasar las navidades con Henry. Suspire. Eso pensaba yo tambien. Llevabamos saliendo casi un ano y nos habiamos prometido un par de meses antes. La idea era pasar las navidades con el y conocer a su familia, pero al final se habia torcido la cosa. -No, Henry esta en Vermont, se fue hace un par de dias. Iba a ir con el este ano a celebrar las navidades en su casa, con su familia, pero su padre esta en el hospital y la verdad, me ha dicho que mejor no vaya, no es el momento para presentaciones… Era una faena, porque llevabamos casi un ano juntos y aunque conocer a la familia politica siempre era un palo, no me apetecia pasar las navidades sola, la verdad, otro ano mas. Y queriamos poner la fecha de la boda ya, un mes que le fuese bien a todo el mundo. -?Henry esta en Vermont? -pregunto extranada mi jefa, Lidia. En realidad era la jefa del departamento, pero era como una de nosotros, no haciamos distinciones. Solo que ella tenia el despacho grande, en vez de trabajar en un cubiculo como nosotros, y seguramente el triple de sueldo. Aparte de eso, minucias. -Si… ?por que? Habia llevado a Henry a un par de eventos de la empresa, y alli era donde le habian conocido. Lidia tenia el ceno fruncido. -No, por nada… -dijo, y cambio de tema inmediatamente, recomendandonos restaurantes para la comida de Navidad. No me quede satisfecha, pero lo deje correr. Durante el resto de la conversacion me aparto la mirada y no era lo que solia hacer. Cuando se acabo la pausa y volvimos todos a nuestros puestos y ella a su despacho, la segui. Habia dejado la puerta entreabierta. Aun asi, llame antes de asomar la cabeza. -?Se puede? Levanto la cabeza del ordenador y me miro con la cara un poco palida. Entonces supe que no me lo habia imaginado: algo pasaba. -Sara… pasa. Cerre la puerta detras de mi. Las paredes de la oficina de Lidia eran de cristal -literalmente, se veia todo lo que pasaba en su oficina-, pero no queria que nadie nos oyese. -?Que ha sido eso? -?El que? Lidia me miro con cara de nada, intentando hacerse la inocente. Esperaba que no le diese por jugar al poquer, porque iba a arruinarse. No sabia disimular. -Antes, cuando estabamos hablando de que hacer en navidades. Me has preguntado si Henry estaba con su familia en Vermont, como si te extranase… ?por que? Me miro con los ojos muy abiertos, como un ciervo en medio de la carretera. -No, no, solo era un comentario… Estaba empezando a tener una sensacion muy chunga, como un agujero que se abria en mi estomago. -Lidia… pensaba que no pasaba nada, pero tu reaccion no es normal. ?Que pasa? Puedes decirme lo que sea. Trago saliva. -?Has oido la expresion matar al mensajero? -pregunto, sin mirarme directamente. -No voy a matar a ningun mensajero, Lidia. Por malo que sea lo que vayas a decirme. Y, sinceramente, me esperaba cualquier maldita cosa. Mi imaginacion era seguramente peor, mucho peor que la realidad. Entonces todavia no sabia lo equivocada que estaba. La realidad era peor que cualquier cosa que podria haberme imaginado. Lidia me miro por fin, con cara de pena. -?Cuando se supone que se fue Henry a Vermont con su familia? ?”Se supone…”? No empezaba muy bien. Me empezo a latir el corazon a mil por hora. -Hace tres dias. -Tres dias -repitio, como para asegurarse, y empezo a tamborilear con los dedos en el escritorio-. No es la primera vez que le veo, pero pensaba que teniais algun tipo de acuerdo… pero cuando has dicho que estaba en Vermont, he empezado a sospechar que no sabias nada. -?Nada de que? ?Que no es la primera vez que le ves, donde? Me faltaba informacion. Era como si Lidia estuviese hablando en clave, o siendo obtusa a proposito. Al fin suspiro, dejo el molesto tamborileo con los dedos y levanto la vista para mirarme. -Henry no puede estar en Vermont porque anoche estaba en el club Poison. P C A P I T ULO 2 ues muy bien. Me habia quedado igual. -?El club Poison? ?Donde esta eso? No lo habia oido en mi vida, me sonaba a chino. Tambien era verdad que no solia salir muy a menudo de copas, tampoco era como si me conociese todos los clubs de la ciudad. -Te voy a contar algo, pero por favor, que no salga de aqui -dijo Lidia, seria. Hice un gesto de impaciencia con la mano, para que siguiese hablando. -No, en serio. Que no salga de aqui, Sara, porque tu no sabes como es la gente. Me ha costado mucho llegar adonde estoy y no quiero que una montana de cotilleos me entierre y acabe teniendo que irme. Si te cuento lo que te voy a contar es para hacerte un favor, ?me entiendes? Por favor no repitas nada de lo que te voy a contar a continuacion. Es secreto. No lo sabe nadie, ni alguna de mis amigas mas antiguas. -Esta bien, esta bien. Soy una tumba. No lo decia por decir, era una persona discreta. Aunque a aquellas alturas lo que me imaginaba era que me iba a decir que era una espia rusa, o a saber, con tanto secretismo. -El club Poison es un club… de sexo. Levante las cejas. -?De sexo? -La gente va a alli a tener sexo, mayoritariamente con desconocidos, aunque puedes tambien ir con tu pareja a experimentar. -Vale… No sabia donde queria ir con todo aquello.

  • The Hot Affaire. una cita inolvidable de Lina Galan

    https://gigalibros.com/the-hot-affaire-una-cita-inolvidable.html

    <>

  • Juego de reinas de Pablo Nunez

    https://gigalibros.com/juego-de-reinas.html

    Cuando Tautinkom, rey de Erin, cae destronado por Irvyn El Blanco, sus dos hijas se ven obligadas a separarse. Elvia, la montanesa, seguira a su padre en el destierro a tierras galaicas. Sin embargo, Wen, conocida como la Dama Blanca, quedara cruelmente cautiva en manos del nuevo rey, a quien jurara venganza eterna. Mas alla de la torre de Breoghan, el propio destino y el mar del Norte alejan a quienes nacieron para ser libres, a quienes han de devolverle la libertad a su pueblo. Son tiempos de guerra, de traicion, de pasiones., y las naciones celtas se tambalean. Los caudillos llaman a sus ejercitos a la guerra, mientras que los druidas, aquellos que pueden ver tras las fronteras del futuro, presagian tiempos oscuros. Roble Gris, el mas poderoso de ellos, augura lo inevitable. Ambas hermanas han sido predestinadas a encontrarse de nuevo. Y ya nada sera lo mismo.