• libro torpe de miras - Patricia C. Ramos

    https://gigalibros.com/torpe-de-mi.html

    ?Que haces cuando te das cuenta que te has estancado en algun punto en tu vida?

  • Feminismo para torpes (Fuera de Colección) Tapa blanda

    https://www.amazon.es/Feminismo-para-torpes-Fuera-Colecci%C3%B3n/dp/8427045301

    Descubre más libros del autor, mira autores similares, ...

  • Tan torpe que me enamoré: Romance lésbico Versión ...

    https://www.amazon.es/Tan-torpe-que-enamor%C3%A9-Romance-ebook/dp/B0868XD751

    Tan torpe que me enamoré: Romance lésbico eBook : Rodríguez, ... Descubre más libros del autor, mira autores similares, lee blogs de autores y más.

  • Ser CORTO de MIRAS ¿Qué significa esta expresión? - Ana ...

    https://anarecuero.org/ser-corto-de-miras-que-significa-esta-expresion/

    10 feb 2020 — ¿EL ÁRBOL NO TE DEJA VER EL BOSQUE? SER CORTO DE MIRAS… NO VER MÁS ALLÁ DE TUS NARICES…son expresiones que hacen referencia a una persona ...

  • El alma de los libros | Cultura | EL PAÍS

    https://elpais.com/cultura/2013/06/26/actualidad/1372256062_358323.html

    28 jun 2013 — Puede un título torpe torcer un destino de gloria? Para unos escritores es la piedra sobre la que construyen; otros llegan a él de manera ...

  • Yo, el Lazarillo de Torpes | Crónica - El Mundo

    https://www.elmundo.es/cronica/2018/09/11/5b94fbabe2704e2c148b4571.html

    11 sept 2018 — De ahí pasé a los libros y, como todo el mundo sabe, quien mucho lee pronto escribe. Igualmente es bien sabido que si alguien quiere ...

  • VALERIE MREJEN | Casa del Libro

    https://www.casadellibro.com/libros-ebooks/valerie-mrejen/121824

    VALERIE MREJEN: Libros y Biografía en Casa del Libro. ... los excesos de atención con los reproches, de una manera tan torpe como, finalmente, conmovedora.

  • En la casa del guarda de Julie Klassen

    https://gigalibros.com/en-la-casa-del-guarda.html

    ?Por que habria una dama de esconderse en una casa llena de secretos?
    La senorita Mariah Aubrey desaparece tras un escandalo y se esconde en la casa abandonada de un guarda, en los confines de la hacienda de un pariente. Para ganarse la vida y pagar a su leal sirvienta, Mariah se dedica a lo unico que sabe hacer: escribir novelas.
    El capitan Matthew Bryant, que acaba de volver de la guerra rico y condecorado, alquila una enorme hacienda a un noble empobrecido, decidido a demostrarle a la bella mujer a la que un dia amo y lo rechazo que se equivocaba, y de que manera.
    Al visitar la propiedad, descubre la vieja casa de un guarda y le sorprende encontrar en ella a una joven de cuya identidad no sabe nada, ni tampoco de su pasado. Sin embargo, cuanto mas sabe de ella mas se da cuenta que debe alejarse de alli. Enamorarse de una mujer a la que ha rechazado la buena sociedad no serviria mas que para arruinar sus planes. Ademas, la propia casa alberga sus secretos. ?Podran Mariah y el capitan Bryant descubrirlos antes de que el astuto heredero de la propiedad los entierre para siempre?

  • Dibuja tu nombre en mi piel (Tierras Altas 1) de Josephine Lys

    https://gigalibros.com/dibuja-tu-nombre-en-mi-piel-tierras-altas-1.html

    Duncan McPherson no pensaba buscar esposa, no volveria a forjar una alianza sin que hubiese amor de por medio. Por eso, cuando acudio por mandato del rey a la reunion en tierras del clan MacLaren jamas imagino sucumbir a ese sentimiento de una forma tan inmediata. Nada lo preparo para aquella muchacha que lo tiro al barro, hirio su orgullo y se metio bajo su piel.

  • Nueva historia de la Espana de Jose Alvarez

    https://gigalibros.com/nueva-historia-de-la-espana.html

    Esta es una nueva historia de la Espana contemporanea, vista en toda su diversidad politica y cultural. El volumen esta estructurado alrededor de tres ejes que se entrecruzan y entre los que hay constantes referencias mutuas. La primera parte consta de siete capitulos definidos por la cronologia, que proporcionan la narracion historica basica. Le sigue una segunda parte, mas analitica, dividida en trece capitulos sobre temas especificos que cubren todo el periodo 1808-2018: la economia, los nacionalismos, las relaciones de genero, los modos de vida, el imperio y las colonias, la cultura, la vida intelectual, los movimientos sociales, la religion, el Estado, la guerra y los militares o las politicas de la memoria y la justicia transicional. La tercera parte reune una quincena de breves biografias de figuras representativas del mundo politico y cultural. Se anade asi una dimension humana a la historia con ejemplos ilustrativos de los problemas antes narrados, con detalles, matices y complejidades que no se abordan en los otros capitulos. Los autores, todos ellos especialistas de primera categoria, proceden de diversos campos historicos, como conviene a la pluralidad tematica de esta obra, asi como de paises distintos, Espana, Canada, Gran Bretana, Estados Unidos, Francia o Israel, lo que tambien asegura la diversidad de enfoques. No pertenecen a una misma escuela historiografica ni, por supuesto, comparten orientacion politica alguna, sino que expresan una gran diversidad en su formacion intelectual, experiencias y puntos de vista. Gracias a esta estructura tripartita y a una eleccion de autores tan variada, el libro ofrece una vision innovadora, mas rica y matizada de lo habitual, de una apasionante y compleja historia nacional que siempre fue tambien europea y global.

  • Condenada por tu amor de Sophie Saint Rose

    https://gigalibros.com/condenada-por-tu-amor.html

    Lady Esther esta cumpliendo condena en la lavanderia de Palacio por desobedecer las ordenes de la Reina y poner en peligro a la Marquesa de Brentwood. Los malos tratos y las vejaciones la han llevado a una situacion extrema, asi que decide enviarle una carta a su tia abuela a Escocia pidiendo ayuda pero aparecio el Conde de Hackford.

  • Mujer en punto cero de Nawal El Saadawi

    https://gigalibros.com/mujer-en-punto-cero.html

    “Todos los hombres que he conocido solo me han inspirado un deseo: el de alzar la mano y dejarla caer con fuerza sobre su rostro”.

  • Las sombras del poder de Ian Rankin

    https://gigalibros.com/las-sombras-del-poder.html

    Malcolm Fox, agente de Asuntos Internos y Conducta, se encuentra investigando a un policia por presunto abuso de poder cuando se cruza por su camino un caso lejano: la enigmatica muerte de un abogado sobre el que recayeron sospechas de colaborar con grupos terroristas. Con Escocia sumida en un momento de inestabilidad que despierta viejos fantasmas, Fox correra un grave peligro al descubrir hasta que punto los antano activistas ocupan hoy influyentes puestos de poder y estan dispuestos a todo con tal de mantener enterrado su turbio pasado.

  • Fidelidad de Marco Missiroli

    https://gigalibros.com/fidelidad.html

    Carlo y Margherita son una pareja joven a la que se podria considerar feliz. Una pareja como muchas. Hasta <>. Asi es como empiezan a llamar a un atisbo de duda que poco a poco va erosionando su matrimonio. Alguien vio, alguien aviso, los colegas hablaron, y la supuesta traicion acaba por convertirse en una poderosa coartada que abre la puerta a las fantasias. ?Somos capaces de no caer en la tentacion de ser infieles a nuestros propios sentimientos? Marco Missiroli lo cuenta con un estilo punzante y envolvente, dirigiendose al corazon de sus personajes: el, ella, la otra, el otro. Nosotros mismos. Preparate para leer tu propia historia.

  • Entre los suenos de Elio Quiroga

    https://gigalibros.com/entre-los-suenos.html

    El cineasta y novelista Elio Quiroga, ganador entre otros galardones del Premio Minotauro, construye un adictivo thriller psicologico con unos personajes llenos de secretos que ni siquiera ellos mismos conocen del todo.

  • La Llama de Alejandria de Michael Peinkofer

    https://gigalibros.com/la-llama-de-alejandria.html

    Una aventura sin limites de la arqueologa Sarah Kincaid. La busqueda de la antigua biblioteca de Alejandria la lleva de Londres a Egipto, pasando por Paris y Malta. Paris, 1882. La joven aristocrata inglesa Sarah Kincaid viaja a un simposio sobre arqueologia en Paris. Alli sabra, a traves del vidente e hipnotizador Maurice du Gard, que su padre, quien estaba en una mision secreta para el gobierno britanico, corre peligro. Sarah contravendra todas las advertencias de Lord Kincaid y resolvera ir en su rescate. De Paris a Alejandria, pasando por Malta, se embarcara en un viaje de aventuras no solo por mar y tierra sino tambien por las profundidades del Mediterraneo. Perseguida por un misterioso asesino, Sarah encontrara finalmente a su padre. En una Alejandria aquejada por la guerra, durante la revuelta de Urabi, y bombardeada por los britanicos, padre e hija se adentraran en las catacumbas de la ciudad en busca del que quiza sea el mayor misterio de la Antiguedad: la desaparecida biblioteca de Alejandria. <>. RTL.

  • Laura en las Highlands (Julia y amigas 2) de Kate Dawson

    https://gigalibros.com/laura-en-las-highlands-julia-y-amigas-2.html

    Laura ha cambiado de empleo y ahora trabaja en un periodico de los grandes.
    Por eso no es nada facil que su jefe acepte que se marche unos dias a Escocia, para la boda de Julia.
    Laura no se ha enamorado nunca, al menos no como para estar segura de haber encontrado al hombre de su vida.
    ?Y como saber si es el hombre de tu vida?
    ?Y si el hombre de tu vida aun no ha nacido?
    ?Y si el hombre de tu vida vive en la otra parte del mundo?
    Pensandolo bien, quiza sea mas sencillo dejar que el te encuentre a ti.

  • Como salir del armario y no morir en el intento de Helga Fernandez Ruiz

    https://gigalibros.com/como-salir-del-armario-y-no-morir-en-el-intento.html

    Mercedes, una joven recien licenciada en periodismo, criada bajo los estrictos ideales patriarcales de su familia, con todo lo que esto supone, tiene un matrimonio concertado practicamente desde su nacimiento, sin ella saberlo. Para poder llevarlo a cabo, sus padres y los de Antonio, el joven abogado que quiere formar una familia por encima de todo, deciden reunirse al llegar el verano y realizar una pedida de mano como Dios manda.
    Pero Mercedes tiene otros planes, unos que le haran sentir en sus propias carnes mil y un sentimientos encontrados, unos que la alejaran de un camino y la acercaran a otro... Y aunque nada de todo lo que ocurre entraba en sus planes, la muchacha se vera envuelta en una situacion que la obligara a tomar las riendas de su propia vida y se enfrentara a todo un huracan de personas, emociones y situaciones que la conduciran a ser ella en estado puro.

  • Casos de pruebas circunstanciales de Janet Lewis

    https://gigalibros.com/casos-de-pruebas-circunstanciales.html

    Las tres novelas que forman la celebre trilogia de Janet Lewis <>, reunidas en un solo volumen.

  • Fantasias Eroticas 1 de Jacinda Minx

    https://gigalibros.com/fantasias-eroticas-1.html

    Una coleccion erotica de historias prohibidas y fantasias que atraparan sus sentidos y satisfaran sus deseos traviesos.

  • La tentacion de Adan, Adriana Rubens de Adriana Rubens

    https://gigalibros.com/la-tentacion-de-adan-adriana-rubens.html

    Libro 2o de la bilogia Pecado original

  • La isla sin nombre de Manel Ronda Carrasco

    https://gigalibros.com/la-isla-sin-nombre.html

    El cuerpo de Pablo Ayala cuelga de una soga cuando un terremoto provoca que el techo se venga abajo, salvandole la vida justo antes de exhalar su ultimo aliento. Habia tomado esa drastica decision al recibir la noticia mas dolorosa que jamas hubiera querido escuchar. Su esposa, junto a otras nueve mujeres, habia sido fusilada en la carcel del Faro, condenada por subversion contra el regimen que lidera con mano de hierro el general Alonso del Potro.
    A pocos quilometros de alli, en el colegio San Rafael, el seismo no deja supervivientes. Sin embargo, el cuerpo de Diego, el hijo del general, es el unico que no ha aparecido bajo los escombros. El Chino Perrone, un sicario sin escrupulos a sueldo del Estado, debera dar con su paradero en una carrera contra el tiempo.
    ?Que tienen en comun estos hechos? ?Quien esta detras del ultimo intento por derrocar a la sangrienta dictadura de Alonso del Potro?
    El pasado volvera a la isla sin nombre para saldar cuentas pendientes, en esta historia de venganzas, traiciones y amores no correspondidos.

  • La hermana perla (Las Siete Hermanas 4) de Lucinda Riley

    https://gigalibros.com/la-hermana-perla-las-siete-hermanas-4.html

    La hermana perla es el cuarto volumen de la emocionante saga de Lucinda Riley <>, una serie de novelas basada en la mitologia griega y en la astrologia que enamorara a sus lectoras.

  • INFIDELIDAD de Nath Lor

    https://gigalibros.com/infidelidad.html

    Alexandra creia que tenia todo lo que deseaba en la vida. Hasta que un dia lo conocio a el…
    Vivira intensamente desde aquel dia debatiendose entre la culpa y sus miedos. Sumergiendose en el pasado y en los recuerdos.
    ?Podras juzgarla por sus acciones?
    ?O tambien caeras a los pies de ese apuesto germano rudo y sensual?

  • El asesinato de Aveloc de Maria Del Mar Meseguer

    https://gigalibros.com/el-asesinato-de-aveloc.html

    Rachel , una joven enamorada de la mitologia celta, viaja a un pueblo de Irlanda para ver sus paisajes, conocer sus historias e inspirarse con los bosques donde crecen hadas y ninfas, sin embargo, al llegar a lo que se supone es un lugar tranquilo, la muerte violenta de uno de sus habitantes desconcertara a todo el pueblo.

  • Las malditas de Stacey Halls

    https://gigalibros.com/las-malditas.html

    En un tiempo de miedo y sospechas ser mujer es el mayor de los riesgos.

  • El sol y sus flores de Rupi Kaur

    https://gigalibros.com/el-sol-y-sus-flores.html

    Segundo y poderoso poemario de esta autora best seller. Dividido en cinco movimientos (marchitarse; caer; enraizar; crecer; florecer), este poemario se desliza desde las profundidades de un desamor y el dolor que conlleva hasta la fuerza y la alegria que pueden florecer tras ese sufrimiento. Un vibrante y trascendental viaje sobre el crecimiento y la curacion, la descendencia y el honor por las raices de uno, la expatriacion y la busqueda del hogar en uno mismo

  • En tu mundo (Entre dos mundos 1) de Nadia Noor

    https://gigalibros.com/en-tu-mundo-entre-dos-mundos-1.html

    Primera entrega de la bilogia <>.

  • Enganar a la muerte de Maryse Riviere

    https://gigalibros.com/enganar-a-la-muerte.html

    No hay suficiente agua para ahogar a un hombre, ni madera para una horca, ni tierra para enterrarlo. Oculto en la dura Irlanda, un librero de Montmartre intenta escapar a su destino. En realidad, se trata de un asesino en serie perseguido por las policias francesa --que le habia dado por muerto-- e irlandesa, que se escabulle como los espectros en el fondo de los pantanos, se fusiona con la niebla, languidece en los bares. Sombras y luces de leyendas celtas, misterios del alma irlandesa, el corazon de la accion policial…

  • No quiero solo un verano de Dama De Hierro

    https://gigalibros.com/no-quiero-solo-un-verano.html

    Mis vacaciones de verano dieron un giro inesperado cuando papa dijo que se casaria , eso no tendria nada de malo a no ser que la novia, sea la madre del chico que me robo el corazon el primer dia que llegue a este hermoso pais.

  • Mis Ojos En Ti de Lisy Noboa

    https://gigalibros.com/mis-ojos-en-ti.html

    ?Se puede amar en un mundo lleno de dolor y traiciones?

  • Nunca pense llegar amarte… y ya estamos a miercoles de A. R. Cid

    https://gigalibros.com/nunca-pense-llegar-amarte-8230-y-ya-estamos-a-miercoles.html

    … Contenido …?Que harias si entraras a la consulta de tu ginecologo con toda la pelambrera esperando ver al viejo de siempre y descubrieras a todo un bombon?

  • Las palabras heridas de Jordi Sierra I Fabra

    https://gigalibros.com/las-palabras-heridas.html

    La nieve era blanca. Parecia lo mas normal. Pero ?cuanto llevaba sin ver nieve blanca? Era como si ya cayese sucia del cielo. Sucia por las pisadas de las botas, por el silencio, el miedo y la desolacion. Sucia porque era como si los propios pensamientos de unos y otros, soldados y prisioneros, la contaminaran. Sucia porque en el aire flotaba la misma niebla, gris y opaca, que se les metia en el cuerpo y les anulara los sentimientos. Sentimientos, alli. Li Huan se detuvo frente al barracon. Si, la nieve que lo rodeaba era blanca. Impoluta. Una extrana sensacion. Como si aquello fuese una isla. Estaba cansado, habia sido un viaje largo. Cuanto antes terminara con los prolegomenos y la burocracia, mejor. Aun asi, permanecio quieto unos segundos, con la puerta a menos de cinco pasos. La puerta tras la cual se adivinaba un cierto calor, porque de la chimenea salia una columna de humo oscuro que se elevaba directa hacia el cielo. No habia viento. Nada. Solo el silencio. Li Huan enderezo la espalda, estiro su maltrecho uniforme, se calo bien la gorra. En el cuartel del que procedia, un simple boton mal abrochado representaba gritos, un castigo, una cruz en el expediente militar. Claro que alli, tan lejos de ninguna parte, en un campo de prisioneros politicos, tal vez las cosas fueran distintas. Se miro las botas embarradas. Imposibles de limpiar. Pese a ello, hizo lo que pudo con la mano izquierda. Cinco pasos. Dio el primero, y con el ultimo abrio la puerta de madera. Al otro lado, un soldado, como el, levanto la cabeza. Estaba sentado detras de una mesa llena de papeles y parecia muy concentrado en ellos. Su cara no cambio de expresion. Siguio siendo hieratica. Tendria tres o cuatro anos mas y debia llevar mucho tiempo haciendo lo mismo. La piel era tan blanca como la nieve que rodeaba el barracon. Li Huan penso que, probablemente, el sol nunca iluminara aquel rincon sombrio de la tierra. --Cierra la puerta --le espeto el soldado al ver que se detenia mas de la cuenta en el umbral. Le obedecio. El frio quedo en el exterior. --?Eres el nuevo? --volvio a hablar el soldado. --Si. --Papeles. --Oh, claro. Los saco del bolsillo derecho del uniforme y se los entrego. El examen fue rapido. Tampoco le tocaba a el darle la bienvenida. Eso le correspondia al oficial al mando. El soldado acabo poniendose en pie. --Espera. --Si --asintio. La siguiente puerta estaba a espaldas de su anfitrion. Le vio desaparecer tras ella y se quedo solo. Li Huan miro a su alrededor. Nada. Pragmatismo puro. Algunos estantes, un mapa de la zona, ningun libro. La chimenea debia de estar en el despacho del oficial. La sensacion de desaliento acabo impregnandole mas y mas, como consumacion de su largo viaje. Que lejos estaba la capital. Su mundo. Su casa. Por su cabeza revolotearon las voces. --Cuanto mas lejos llegues, mas mundo conoceras --le habia dicho su padre. --Cumpliras una mision sagrada. Hay muchas formas de servir a la patria -- le habia dicho su madre. --Haz bien tu trabajo y volveras --le habian dicho los amigos. --!Que suerte tienes! --le habia dicho su hermano pequeno--. !No haras sino vigilar a unos desgraciados, lejos de cualquier problema! ?Suerte? ?Alli? !Suerte la de el, que por ser el segundo se quedaba a cuidar de sus padres, escapando de la obligacion del servicio militar que le correspondia al hijo mayor! Tardaria no menos de tres anos en regresar a casa. Para entonces quiza Shi Lin estaria ya prometida o casada con otro. Li Huan volvio a sentir aquel dolor. Aquella frustracion. Recupero el semblante serio al volver a abrirse la puerta. Si alguien interpretaba sus pensamientos, veia un resquicio o leia en sus ojos, acabaria alli mismo, pero preso. Cualquier duda equivalia a una sentencia. No podia cundir el desanimo ni el desaliento entre la tropa. Servian al lider. Servian al Partido. Servian a una idea. Defendian su libertad frente a la opresion caduca y ruin del decadente Occidente. Esa era su fuerza. --Te recibira ahora mismo --le dijo el soldado. --Bien. El otro no se sento. Dio un par de pasos, se apoyo en la mesa y cruzo los brazos sobre el pecho. --?Que tal va todo por ahi fuera? --pregunto de manera mas amigable. --Como siempre. --Li Huan se encogio de hombros. --?Como siempre? --Si. --Repitio el gesto--. Todo esta muy tranquilo. --Aqui no llegan muchas noticias, ?sabes? --Lo imagino. --Ya te acostumbraras. --Supongo. La voz del superior llego hasta ellos con fuerza. El soldado se aparto de la mesa y le dejo paso. --Le gusta controlarlo todo personalmente --dijo. --Gracias. Li Huan cruzo el segundo umbral. --Entra --ordeno el oficial al mando. No levanto la cabeza para mirarle. Siguio escribiendo algo en un cuaderno. Li Huan cubrio la breve distancia, tres pasos, y se cuadro. El oficial llevaba galones de capitan, asi que alli la maxima autoridad tenia un rango inferior a comandante. Una prueba mas de lo lejos que estaban de todo. El fuego rugia en la estufa. Unos troncos de madera se apilaban junto a ella. Por detras del hombre, presidiendo la estancia y sus vidas, un enorme retrato del lider, el Gran Padre, con su mirada seria y penetrante. La leyenda decia que algunos incluso habian muerto al estar en su presencia o al mirarle directamente a los ojos. Nadie se atrevia a negarlo. Para algo eran leyendas. Cuando acabo de escribir, el oficial levanto por fin la cabeza y hundio en el sus acerados ojos. Los papeles que acababa de entregarle al soldado de la entrada estaban alli, a un lado. No hizo falta que los leyera de nuevo. --Li Huan. --Si, mi capitan. --Dieciocho anos. --Si, mi capitan. --Sabes leer y escribir mucho mas alla de la evaluacion media. --Si, mi capitan. El oficial se reclino en su silla. Unio las dos manos frente a si mismo y las apoyo en la mesa. Seguia muy serio. --Deja de llamarme capitan, ?quieres? --Su tono rezumaba fastidio--. Tengo dolor de cabeza. --Hizo una pausa--. Llamame camarada, o mejor solo asiente. Li Huan hizo esto ultimo. --Ahi dice que eres listo. --Senalo el expediente--. Y que eras un buen estudiante. --Si, camarada. --?Que pretendias con eso? --Queria ser escritor. --Fue sincero, porque mentir significaba una traicion al Sistema--. No era mas que un nino, claro. Fue antes de la Revolucion. Por suerte tuve buenos maestros y me di cuenta de mi temeridad. Eso me hizo reflexionar. Se sirve con la fe ciega, no con las ideas o las palabras. El capitan fue ahora el que asintio con la cabeza. --Nos vendras bien aqui --dijo--. Son nuevos tiempos, nuevas directrices, y se necesitan nuevos empujes para llevarlas a cabo. Por eso te han mandado a este campo. --Si, cap… camarada. --?Sabes que clase de prisioneros tenemos aqui? --Politicos. --No. --Chasqueo la lengua--. Es algo mas que eso. Mucho peor. --Volvio a aproximarse a la mesa y se acodo en ella, sin apartar los ojos del recien llegado--. Aqui tenemos a la escoria, al cancer de nuestra sociedad. Los disidentes politicos son los peores, Li Huan. Un traidor es un traidor, un enemigo. Pero un disidente, un intelectual, que dice amar a la patria pero niega el orden, el Sistema, el Estado popular, las directrices del Partido y de nuestro Gran Padre… --Arrastraba las palabras con asco--. Este no es un campo de prisioneros normal. Tenemos a lo peor de nosotros mismos, de nuestro pueblo. Podriamos matarlos, y eso seria lo mas sencillo. Muerto el perro, muerta la rabia. Sin embargo, no somos bestias. Esa es la magnanimidad de nuestro lider. Aqui intentamos que juzguen su mal por si mismos, con la esperanza de una reeducacion ejemplar. A la mayoria les bastaria una palabra, pero no la pronuncian. Prefieren morir. Son obstinados. Nuestra mision, pues, no es facil. Pero el Gran Padre confia en nosotros. Por cada uno que se salva, ganamos todos. ?Entiendes lo que estoy diciendote, Li Huan? --Si, camarada. El capitan le apunto con un dedo. --No hables con ellos. Eso lo hacen los reeducadores. Ten mucho cuidado: te envenenan con las palabras y te confunden con las ideas. Va a haber cambios, de los que te informare oportunamente. De momento haz tu trabajo y sirve a tu patria. Es un honor del que pocos pueden presumir. Li Huan asintio. El oficial tambien lo hizo. Fin del primer encuentro. --Presentate al sargento de guardia. El te dara instrucciones. --Gracias, capitan. --Se cuadro de nuevo--. Servire con lealtad al maximo de mis capacidades. Su superior correspondio al saludo. Un minuto despues, caminando sobre la nieve, Li Huan penso que todo habia ido mejor de lo esperado. A fin de cuentas, aunque <>, no era mas que un soldado. ?O no? 2 El sargento de guardia estaba en el barracon central. Recogio su petate de la entrada, donde ya se lo habian inspeccionado y controlado, y se dirigio a el. No tuvo que preguntar. Lo primero que escucho fueron sus gritos, su vozarron grueso, de tono marcadamente grave, como si no hubiera hecho otra cosa en la vida que gritar y gritar. Cuando se cuadro ante el hombre, se sintio empequenecido por su envergadura, el doble de la normal. Se pregunto si era sargento mayor a causa de ello o si por su tamano lo habian colocado en aquel escalafon militar. --?Tu eres el nuevo? --le aullo en la cara. --Si, mi sargento mayor. --?Como te llamas? --Li Huan, mi sargento mayor. --?Vas a repetir siempre eso? --?El que, mi sargento mayor? Tenia la cara a un palmo de la suya. Pero seguia gritandole. Mirada afilada. Aliento podrido. --!Wu! --Sono como si quisiera asustarle--. !Mi nombre es Wu! --Si, sargento Wu. --?Que edad tienes? --Dieciocho. No le gusto. Lo demostro con su cara de desprecio, sin cortarse. --?Ahora nos mandan ninos? Li Huan no se atrevio a contestarle. --Algo traman --rezongo Wu--. Pero aqui no nos dicen mucho. ?Has visto ya al capitan Qun Ming? --Si, mi sargento. --?Y? --Ha ordenado que me presente, camarada. El corpachon vacilo un par de segundos. Debia gustarle que le llamaran camarada. --Descansa. --Dejo de hablarle tan cerca de la cara--. Pareces un palo tieso. Li Huan adopto una posicion mas relajada. Sin bajar la guardia. --?De donde vienes? --Del Centro Asistencial 9. --Esta vez se ahorro el tratamiento. No paso nada. --?Y te mandan aqui? --Wu movio la cabeza de lado a lado--. Si, algo traman. En lugar de arrasar este lugar nos envian a chicos como tu. De la capital, nada menos. --Miro por la ventana, hacia la oscuridad exterior--. Yo nunca he estado en la capital, ?sabes? No era una pregunta. Solo un comentario en voz alta. Tal vez una queja. Transcurrieron cinco, seis segundos. Hasta que el sargento mayor recupero su tono mas agresivo. Se volvio hacia el. --Escucha, soldado. --Senalo al otro lado de la ventana--. Estamos aqui para cuidar de unas bestias. Si por mi fuera, ya estarian todas bajo tierra. Pero yo no soy nadie. Si nuestros lideres se empenan en no rendirse, demostrando su valor y buen juicio, ?quien soy yo para obstinarme en lo contrario? Si ellos creen que recuperarles sirve a un bien comun y es una victoria para el Sistema, !haremos lo posible para que asi sea! ?Estas de acuerdo? --Si, sargento Wu. --Pero eso no significa que debamos bajar la cabeza, ni ser debiles, ni respetar a quien no nos respeta. !Si para reeducarles hay que emplear el latigo, se emplea! !Si para hacerles ver la verdad hemos de hacerles sangrar, les hacemos sangrar! !Y si ellos prefieren morir, van a morir, pero no a su manera, sino a la nuestra! --Volvio a aproximar su rostro al de Li Huan--. !Esos intelectuales nos miran con superioridad aun estando aqui! !Se creen superiores! !Viven en un mundo falso creado por sus mentes fanaticas! No podemos mostrar la menor debilidad, soldado. !Jamas! Si ellos creen que tenemos dudas, a su modo van a ganar. !Y eso no podemos consentirselo! !Si para que uno entienda hay que matar a diez, mataremos a diez, y finalmente a ese uno si, a pesar de todo, sigue sin cambiar de actitud! !Ese es el desafio, soldado Li Huan! !Ese y no otro! ?Lo has entendido? --Si, sargento Wu. Volvio a apartarse de el y, tras los gritos, acompaso la respiracion. Wu era calvo, pero mantenia un fino bigotito que iba de un lado a otro de su labio superior. Tenia las manos grandes. Manos capaces de aplastar a una persona con solo un golpe. --Quiero el maximo de disciplina. --Si, camarada. --Me contaras a mi personalmente todo lo que veas, todo lo que oigas, todo lo que intuyas, todo lo que pienses. No al capitan: a mi. Soy yo el que debe informarle a el. --?Y si es el quien me pregunta? --?Me tomas por tonto? !Entonces le respondes, naturalmente! --Perdone, sargento Wu. --Se estremecio de manera instintiva. --?Tienes frio? --Si, camarada. --Ve a que te den ropa de abrigo. Luego te llevaran a tu alojamiento. Descansa esta noche. Manana, a las seis en punto, en pie. Que tu companero de habitacion te cuente las normas del campo. ?Alguna pregunta? Tenia muchas, pero no quiso hacerlas. No al sargento Wu. El barracon de intendencia estaba justo al lado. No habia mucho donde escoger. Tenian media docena de uniformes, de abrigos, de botas y de casi todo lo demas. El soldado que lo examino de pies a cabeza lo evaluo sin hacerle preguntas y le entrego un abrigo y un gorro. Luego le puso un papel sobre el mostrador. --Pon aqui tu nombre. --?He de firmar conforme recibo esto? --?Tu que crees? --El soldado le miro con sorna--. Abrigo numero 57 y gorro numero 35. Pobre de ti si cuando te vayas no los devuelves. --?Y si se rompen? --Se cosen y en paz. --?Y si pierdo algo? No hizo falta que le contestara. Basto con la nueva mirada de <>. Recogio las dos cosas y salio sin ponerselas. Las distancias en la zona exterior no eran grandes. De hecho, el campo tampoco lo era. La <> residia en el hecho de que estaban muy lejos de cualquier pueblo, ciudad o lugar habitado. Fugarse era una locura. Le habian dicho que alli permanecian encerrados menos de doscientos hombres. Pocos salian

  • El dulce sabor del amor de Yolanda Bello

    https://gigalibros.com/el-dulce-sabor-del-amor.html

    El hambre puede volver loco a una persona. Ese vacio dentro que te retuerce y te apunala hasta que la unica cosa en la que te puedes concentrar, es en llenarlo. Poder, dinero, mujeres... comida. Algunos hombres tienen apetitos que nunca podran ser apaciguados. Un hambre tan grande, tan poderosa, que es imposible parar. Hombres como yo. --Llegamos, Sr. Flint. Levanto la vista de las facturas y ordenes de trabajo en mi regazo y veo a mi conductor mirandome por el espejo retrovisor. Asiento con la cabeza mientras el Maybach se detiene frente al restaurante. Normalmente conduzco yo mismo. Dios sabe que tengo suficientes autos para manejar, pero hoy ha sido un dia ajetreado, y he pasado todo el tiempo que he podido revisando el papeleo para un nuevo lugar en Las Vegas. --Gracias, Cliff --Le digo mientras abre la puerta y salgo a las luces de 'Cuchillo': el restaurante mas concurrido de Los Angeles. Le doy cien dolares--. Tomare un taxi de regreso. Puedes irte, gracias. Sonrie con amistad, vuelve a entrar en el auto y se va, dejandome de pie por un momento frente al lugar. Todavia se ve hermoso despues de todos estos anos. Una gran entrada; un cristal tan fino que juraria que no hay nada alli, enmarcado por madera en grano escogida a mano de los troncos de Portland. Un dosel de color rojo intenso, inspirado en los cines de epoca de la Prohibicion, se asoma por encima de las puertas. Mas arriba de eso, la palabra ‘Cuchillo’ en letras de acero. A traves del cristal a ambos lados de la entrada, brillando en el oro de la luz de las velas contra la mamposteria vista, puedo ver a los comensales sentados en sus mesas. La musica de sus charlas, sus risas y sus cubiertos es tenue, tanto como el aroma del ajo y la salsa de vino blanco en los mejillones, la dulzura de un souffle recien caramelizado. Sensaciones que te invitan como las pestanas parpadeantes de una mujer, instandote a acercarte mas, lo suficientemente cerca como para devorar lo que has puesto en tu mirada. El lugar es limpio, elegante, moderno. Y en una noche como esta, incluso despues de un dia como hoy, cuando la brisa del Pacifico que se mueve por Los Angeles empuja las hojas de las palmeras como si estuvieran conjurando un sueno, es casi magico. Lo que no se ve es la sangre, el sudor y las lagrimas incrustadas en esos ladrillos. La lucha y las dificultades que los unieron. Las traiciones, las amistades rotas, el empuje ardiente y la determinacion resistente que puso sus cimientos. Solo yo puedo verlos. Parado aqui, soy el unico que puede entender como se lograr formar desde cero un lugar como este. Subo y entro, saludado por el maitre de pie detras de su podio. --Buenas noches, Sr. Flint --dice. --Buenas noches, Alvaro. El hombre a trabajado aqui durante seis anos y sigue siendo el mejor. El chiste dice que Alvaro es tan bueno haciendo esperar a la gente que es solo cuestion de tiempo antes de que el DMV lo contrate. El trabajo esta en su sangre. Tanto asi que no me llama Xavier, no importando cuantas veces se lo haya pedido. --?Que desea hoy, senor? --Bueno, he pasado un dia entero tratando con los idiotas de Las Vegas, no he comido desde esta manana, y me gustaria llegar a casa a tiempo para ver lo mas destacado de los Clippers. Mientras traes el vino mas alcoholico que tengas, no me importa lo que la carta ofrece. Alvaro sonrie ironicamente. --Muy bien, senor. La mayoria del personal del restaurante empezaria a sudar ante la idea de escoger algo del menu ellos mismos, pero como dije, Alvaro es de una raza diferente. Su truco esta en saber lo que la gente va a pedir mientras sigue esperando. Un talento, que a mi juicio, merece aplausos. Acabo de decirle que estoy cansado y que me falta tiempo, lo que significa que no me molestare con un aperitivo. El vino mas alcoholico que tienen es un tinto Zinfandel, que se recomienda para los platos de carne de vacuno. Y ademas, es martes de mayo, asi que acaban de recibir una nueva entrega de cortes de rib eye, que por lo demas es de un sabor unico y exquisito. --?La mesa cuatro, senor? Asiento con la cabeza y me muevo hacia adentro. Es una noche relativamente tranquila, lo que significa que la mayoria de las mesas estan llenas, pero no hay fila afuera. Mi instinto mueve inmediatamente la atencion sobre las tres mujeres atractivas que se encuentran en una mesa al otro lado del lugar. Especificamente la rubia recatada que me mira de reojo, con un vestido verde tan ajustado que no necesito de mucha imaginacion para saber que hay debajo. Me pilla mirando e inmediatamente coge su copa de vino para esconder la verguenza en sus labios. Segundos despues de tomar asiento, el vino es traido y vertido en mi copa. Me inclino hacia el camarero y apunto sutilmente en la direccion de la rubia. --?Que estan bebiendo alli, Ned? Hizo un gesto sutil, con indiferencia, y luego me miro a mi. --El rosado de la casa, senor. --Enviales otra botella, yo invito. Diles, pero mira a la rubia cuando lo hagas, que es por lucir tan elegantemente esta noche. --Si, senor. El camarero se va y yo espero a que la rubia me mire de nuevo antes de levantar la copa en su direccion. Ahora sonrie mas ampliamente, y luego susurra a sus amigas, que miran a su alrededor. Solo una rapida mirada antes de que vuelvan a su posicion, inclinandose para reirse entre ellas como conspiradoras. Un clasico que jamas pierde poder cuando se trata de mujeres, siempre genera un gusto delicioso. Tal vez me reconozcan del programa de television que tuve hace un par de anos, donde ensene a un grupo de ex convictos y jovenes delincuentes a cocinar profesionalmente. Fue un momento divertido, pero abandone el programa cuando me di cuenta de que la productora seguia tratando de crear un drama entre los miembros del elenco. En realidad, la mayoria de ellos amaban la cocina como patos el agua, y el trabajo arduo no dejaba a ninguno con suficiente energia para causar problemas. Asi que los productores tuvieron la "brillante" idea que eso condimentaria un poco el espectaculo y provocaron algunas peleas, para que los cocineros se pusieran nerviosos. Bueno, y a mi no me gusta el drama, especialmente en mis cocinas. Asi que renuncie. Cambie los delantales blancos de chef por trajes finos, empece a peinarme por las mananas, y decidi volver al lado de los negocios ya que 'Cuchillo' parecia estar funcionando bien, solo con una supervision limitada de mi parte. Fue entonces cuando empece mis planes de abrir otro restaurante, esta vez en Las Vegas. Volvamos al vino, ese espectaculo si que me gusta, las mujeres aun tienen la boca escandalizada y rubores leves. El camarero me senala y yo levanto una ceja, manteniendo los ojos en la rubia mientras me llevo la copa a los labios, saboreando el dulce sabor del vino y la elegante curva de su escote al mismo tiempo. Ahora sonrie, se esconde timidamente detras de ese cabello y me echa unas cuantas miradas. Sus delgados dedos sostienen delicadamente el tenedor que juega alrededor de su plato. Suave y cuidadoso. No dire que llevar a esta mujer a la cama esta noche sera facil, pero la verdad es que no va a ser dificil. Y despues de la semana que he tenido, me vendria bien la distraccion. --Su filete, Xavier. Me alejo de la rubia para ver a Ned, el camarero, colocar el plato grande frente a mi. --Gracias --Un pequeno grunido sale de mi voz mientras miro hacia abajo a la carne jaspeada. Apetitosa y jugosa, delineada por los chorros de granos de pimienta y las lineas de la parrilla, la salsa de vino tinto que brilla de tal manera que parece casi viva. La rubia tendra que esperar un poco. Corto un trozo, me gusta ver que los cuchillos han sido afilados, y revelo el centro; rojo como la lujuria. Lo lanzo, tomo un pedazo de la patata crujiente como si fuera una idea de ultimo momento, y me lo pongo en la boca. Mi cerebro tarda aproximadamente un segundo en recibir los mensajes que mi lengua me esta enviando, pero cuando me doy cuenta, vuelvo a poner los cubiertos en el plato lo suficientemente fuerte como para hacer que los comensales que me rodean giren en mi direccion. Ned se apresura, sus cejas de muneco Ken suben mientras ve mi mandibula apretada y mi expresion fija. --?Algo va mal? --dice timidamente--. ?Quien trabaja en las verduras esta noche? --Um… Camila. --?Camila? --Si… la nueva chef. La contratamos la semana pasada, ?recuerda? mientras usted estaba en Las Vegas. Frunzo el ceno. --Traela aqui. Ned duda por una fraccion de segundo, obligandome a mirarlo y a borrar cualquier duda de que estoy siendo cien por ciento serio. Luego, desaparece de la escena. Despues de golpear con los dedos el fino mantel por unos instantes, el camarero regresa, la chef viene siguiendolo de cerca. Camina elegantemente, orgullosa. Hombros hacia atras y barbilla alta. Su parte superior de color blanco y los pantalones negros holgados que esconden su cuerpo, el cabello rubio oscuro retorcido y enterrado bajo una redecilla, el cuello largo y las delicadas facciones de su cara son aun mas llamativas para la sencillez del atuendo. Ojos marrones con forma ovalada, labios que se mueven como si estuvieran en medio de un beso, y una nariz ligeramente respingona tan perfecta que solo un artista podria haberla hecho.

  • Sombras en el bosque de Phoebe Locke

    https://gigalibros.com/sombras-en-el-bosque.html

    Un asesinato sin sentido. Una leyenda terrorifica. Una familia poseida.

  • Amos y Mazmorras IV de Lena Valenti

    https://gigalibros.com/amos-y-mazmorras-iv.html

    Desde que el agente de la SVR Markus Lebedev y la agente del FBI Leslie Connelly se encontraron en las Islas Virgenes en la mision de Amos y Mazmorras, una cosa quedo patente: la tension sexual y el deseo les iba a matar. Ahora deberan trabajar juntos para llegar hasta la raiz de las bandas rusas de trata de blancas.

  • Intrigas de alta sociedad 1 de Ana Allende

    https://gigalibros.com/intrigas-de-alta-sociedad-1.html

    Elizabeth Salt, es la unica hija del acaudalado abogado Marcos Salt y de una madre que solo conocio por fotografias. Al caer su padre gravemente enfermo, ella se encarga de su prestigiosa firma de abogados sin pensarlo y sin miedo, a fin de cuenta, habia sido criada para ese dia. --De la mano de su mejor amiga y secretaria, pasan sus dias sin salir de su rutina normal, sin embargo, acontecimientos inciertos empiezan a acumularse alrededor de su dia a dia, los cuales entorpecen su concentracion y hacen volatiles sus estados de animo. Una noche, al surgir un encuentro casual con un viejo amigo, se abren las posibilidades para que un amor improbable y aventurero llegue a su vida, causando estragos en su forma de pensar y demostrandole que aun en lo complicado, existen momentos de plena felicidad. Aunque todo esto podria verse opacado por traiciones inesperadas, mentiras descubiertas y fantasmas del pasado que quieren reaparecer para convertir su vida en un caos total. CAPITULO I Es una tipica manana de lunes en Manhattan, Elizabeth abria sus ojos a un nuevo dia que no prometia grandes cosas; pero si debia cumplir con grandes responsabilidades que su padre habia colocado en ella. Marcos Salt, padre de Elizabeth, era un hombre de aproximadamente 75 anos de edad, con una tez blanca, aunque no tanta, unos ojos grises y cabello totalmente blanco; su contextura era un poco robusta, pero para ella siempre fue muy buen mozo. Aparte de ser su padre, era un reconocido abogado de Nueva York, dueno de un bufete de abogados muy prestigioso llamado Salt, Lenon & Associates y, aunque habia logrado tener en sus haberes un monton de metas realizadas tanto personales como profesionales, sin esperarlo cayo gravemente enfermo hace unos meses atras, no quedandole mas opciones, tuvo que utilizar a su unica hija y vicepresidenta del mencionado Bufete como representante de sus intereses. De su madre Elizabeth nunca tuvo mucho conocimiento, solo poseia de ella una pequena foto tamano carnet en donde se veia sonriente y jovial; era de piel blanca, cabello castano claro, unos ojos color cafe y de contextura delgada, no puede negarlo, era preciosa y tampoco puede evitar encontrar una minima similitud con ella misma y la fotografia, por lo menos fisica; de pequena siempre le preguntaba a su padre ?Donde esta mami, papi? Y su padre siempre le daba la misma respuesta: "tu madre se fue un dia porque se canso de cuidarte hija, pero pase lo que pase yo nunca te abandonare, tu siempre seras mi rabbith, mi conejita de la suerte". Durante 22 anos esas palabras retumbaban en su cabeza de vez en cuando, sobre todo en los dias nublados o lluviosos; siempre le habian causado cierta nostalgia ese tipo de clima y hoy era uno de esos dias; ella nunca pudo entender como una madre se podria cansar de cuidar y atender a una nina que solo tenia dos anos cuando ella se marcho. A pesar de que ella misma todavia no habia vivido esa etapa, siempre se lamento el hecho de que tal vez, si se hubiera criado con su madre, hubiera podido ser una mujer un poco diferente a la que era ahora. Elizabeth Salt era una mujer sencilla, pese a todas las virtudes economicas de la cual su padre la habia podido colmar, era carismatica y muy inteligente, estudio Derecho igual que su padre, pero no por vocacion, sino por obligacion, su sueno de nina siempre fue bailar, pero su padre nunca lo considero una profesion; para el era menos que un hobby, sin embargo, en el transcurso de su educacion se dio cuenta de que su carrera no era tan mala como lo habia pensado y se graduo con honores de la universidad. A los pocos meses su padre la convirtio en la vicepresidenta de su importante compania; como hija unica, cualquiera pudiera pensar que era su obligacion. Su herencia genetica la habia colmado de una belleza incomparable; era blanca como el papel, de piel totalmente inmaculada, poseia unos grandes ojos grises rodeados de unas largas pestanas, su mirada era intensa, tanto que podian convencer al mismisimo Papa que el cielo era rosado y no azul si ella asi lo disponia; su cabellera era larga, con pequenas ondas y de un precioso color castano claro y, aunque no era del todo delgada, poseia unas largas piernas torneadas y una pequena cintura; mejor dicho, era todo un encanto de mujer, pero debajo de todas esas caracteristicas que a la vista de los demas la hacian parecer perfecta, solo era una mujer de 24 anos, molesta con un padre que fue sumamente sobreprotector y triste por el hecho de que ni su propia madre la quiso. ?Quien me podra querer si ni mi propia madre lo hizo? Siempre fue la pregunta que rondaba en su cabeza; con ese mantra que repetia varias veces al dia, era casi imposible tener cualquier relacion amorosa, la misma solo consistia en un par de noche al mes, al llamar a una agencia de acompanantes y asi desahogar el calor que su cuerpo emanaba. Pero sacudiendose todas esas malas sensaciones con las cuales habia despertado esa lluviosa manana, se levanto de la cama y se encamino al bano, era hora de tomarse una ducha con agua bien fria para despojarse de todos esos malos recuerdos con los cuales se habia levantado; odiaba despertar asi, su dia solia ser patetico cuando eso ocurria. Abrio la ducha, el agua estaba un poco mas fria de lo normal, pero no le importaba; mientras mas fria mejor. Se quito su pijama y entro en ella; las primeras gotas de agua que cayeron sobre su cuerpo le supieron a gloria, era como si de alguna manera le dieran frescura a su vida y borraran de su mente todos esos tristes acontecimientos por los cuales ella habia tenido que pasar, aun siendo tan joven. Aquella agua helada que sentia sobre su piel, le devolvia poco a poco cada sensibilidad en su cuerpo entumecido, no sabia si de dolor o de pena, pero el hecho era que el agua fria la hacian sentir muy bien. Despues de unos 15 minutos en la ducha, salio de ella y se encamino a su habitacion para vestirse, queria colocarse algo fresco, hoy no estaba de humor para algo muy formal, a lo que abrio su elaborado closet de madera color caoba, el cual hacia juego con su cama, su peinadora y sus dos pequenas mesitas de noche. Encontro el vestido perfecto, era de color morado con un hermoso estampado de flores negras, no era tan largo, un poco mas abajo de las rodillas, con una falda acampanada y un escote alto hasta el cuello, sin nada de mangas, era simple y precioso, tal como a ella le gustaban las cosas; cuando se disponia a colocarselo con toda la calma, ya que todavia era muy temprano para llegar a la oficina, su celular sono, inmediatamente se puso de mal humor. Samanta Brice, su secretaria, sabia cuanto le molestaba que la llamaran tan temprano, aparte de su relacion laboral, era la unica amiga que todavia le quedaba, y por la cual colocaria las manos en el fuego, ha sido incondicional y eso se agradece y se valora, pese a todo; de mala gana tomo el telefono de la mesita de noche y contesto: --Disculpa Liz, solo queria informarte que aqui esta esperandote la Sra. Loise Green, la viejita que a estas alturas se quiere divorciar.-- dice en voz chillona, segun ella disimulada, mis ojos giran como si ella pudiera verme, es inevitable, su torpeza e indiscrecion me exasperan la gran mayoria de las veces. --Samanta. -- Le digo casi con la misma voz chillona de ella a ver si entiende su indiscrecion, pero no, nada, esta muchacha es como un baul cerrado. --Yo no entiendo como estas viejecitas pueden siquiera pensar en retomar una vida, ya las senoras de su edad son para que hagan tortas y cuiden a sus nietos, mas nada, es ridiculo lo de este senora. Pongo mi dedo pulgar e indice en mi frente y aprieto esa pequena arruguita que se me forma entre las cejas cuando estoy molesta, por no decir furiosa. --Samanta, por el amor de dios ?cuando vas aprender a ser un poco mas discreta? Eres la secretaria de la vicepresidenta de la compania, comportate como tal. --Dile a la Sra. Green que en aproximadamente 30 minutos estoy en la oficina. Del otro lado del telefono solo escucho la respiracion entrecortada de una Samanta apenada; por un momento siento pena, pero debe de aprender, mi padre siempre dijo que en este mundo todos tenemos un papel muy importante que debemos saber interpretar y ella debe de aprender el suyo, no se puede valer siempre de nuestra amistad para actuar de manera poco profesional. Corto la llamada antes de arrepentirme y pedirle disculpas casi de rodillas; no lo puedo evitar, es mi amiga y la adoro, a pesar de que somos dos polos opuestos, nos complementamos de una manera increible, yo soy la chica estructurada y ella es una morena de ojos cafe oscuro y de un cabello negro corto, mas despreocupada que yo y de un alma salvaje e indomable; respiro hondo y prosigo mi rutina, me coloco mi ropa interior, paso mi hermoso vestido por encima de mi cabeza y hago medias acrobacias, casi contorsionismo para poderme subir el cierre, pero despues de un momento lo logro, tomo mi cabello y lo ato en una cola alta, escojo unos bellos zapatos negros de punta con un tacon no muy alto y me coloco unos pequenos aretes plateados en forma de luna, son mis favoritos y ya por ultimo, hecho un poco de polvo y rubor sobre mi rostro, un claro color en mis labios y estoy lista. Al bajar las escaleras de mi casa, una hermosa propiedad ubicada en el barrio Upper East Side

  • El seductor de Veronica Valenzuela

    https://gigalibros.com/el-seductor.html

    La vida da muchas vueltas, algunas imprevisibles.
    Puede convertir a un hombre sencillo como Roberto, en un gran mentiroso, bajo el disfraz de un caballero enigmatico y muy sexy.
    O transformar la insulsa vida de una periodista como Carla, frustrada por un odioso trabajo en el que no la valoran, en su divertido y carismatico alter ego.
    En el Londres menos conocido y mas intimo, dos personas se encontraran para disfrutar de la aventura mas excitante de sus vidas.
    ?Seran igual de valientes para revelar su verdadero corazon?

  • Amor ciego de Alina Covalschi

    https://gigalibros.com/amor-ciego.html

    No eran amigos y tampoco novios, sino todo lo contrario. Tenian una relacion complicada y destinada al fracaso.
    Se separaron y tomaron caminos opuestos.
    Pasaron anos y el hilo invisible que los mantenia conectados se enredo y se rompio.
    Pero el primer amor nunca se olvida y siempre deja huellas imborrables.
    Angelica y Raul aprendieron que hay segundas oportunidades, y que son las definitivas.

  • Oye, Bombon! de Indhira Jacobo

    https://gigalibros.com/oye-bombon.html

    Me encanta, me encanta -- murmuro para mi misma al terminar de aplicar mi pintalabios rojo mate. Miro mi cabello y contemplo las ondas perfectas. Tengo el pelo liso y pase una hora con la tenaza para obtener este resultado. !Estoy euforica! Hoy voy a salir a celebrar mi cumpleanos; no cumplo veintiseis hasta manana, pero como todos los anos lo paso con mi mama y los pesados de mis tres hermanos he decidido salir hoy sabado a festejarlo con mis amigos. Guardo el tubo de labios en mi bolso de mano negro y le echo una ojeada a mi vestido rojo, segun los expertos de la moda es el color de temporada. Suena mi telefono mientras estoy embobada mirando mi atuendo. --!Hola nena! --Hola carino, --me saluda Samia -- ya estoy aqui. --De acuerdo bajo en dos minutos --replico antes de colgar. Guardo el Samsung en mi bolso y giro una vez mas sobre mis zapatos negros Jimmy Choo. Son hermosos, comodos y me costaron un dineral, no obstante, valen cada centavo. <> --pienso con una sonrisa. Le pedi a Samia que pasara por mi ya que esta noche pienso beber hasta que se olvide el nombre y lo que no pueda tomar me lo pienso untar porque hoy es mi noche y me la pienso gozar. En primer lugar, pense en pedirle a Carlos que me viniera a buscar dado que llevamos unos cuantos meses saliendo, saliendo no.... mas bien follando como locos, pero luego me lo pense mejor y me arrepenti; no quiero que se haga falsas ideas. Acordamos que lo nuestro seria solo sexual, nada de compromisos y me va bien de esa forma. Cuando tengo ganas de pasar el rato, lo llamo, echamos un buen polvo, de esos que me gustan, salvajes, duro y ya esta. No quiero que eso cambie. Ni siquiera se lo he contado a las chicas, si lo hago se van a poner pesadas con el temita; me van a cantar las cuarentas y no habra quien las detenga. Entro en el salon buscando las llaves, pero como cada vez, no las veo por ningun lado. Creo que es tiempo que empiece a usar el portallaves que Adri me regalo hace unos meses. Despues de buscar durante casi diez minutos, les echo las manos bajo una montana de papeles sobre mi escritorio y salgo flotando sobre mis adorados zapatos. La noche me espera. Bajo la escalera, salgo a la calle y me recibe el calor asfixiante. Ya se que estamos en verano, pero cono son pasada las nueve, la noche deberia estar mas fresca. Visualizo el Fiat Punto azul oscuro de Sam frente a mi edificio; en cuanto repara en mi baja el cristal del coche y lanza un silbido de admiracion. --!Oye bombon! --me grita Miguel desde el asiento del copiloto--. ?Quieres una bola? Me rio y camino en direccion del carro contoneando mi cadera al mismo tiempo que balanceo mi melena castana clara suelta. Toda digna de uno de los Angeles de Victoria Secret. Al llegar, apoyo la mano en la puerta del conductor y me inclino ligeramente.

  • El manantial de Catherine Chanter

    https://gigalibros.com/el-manantial.html

    Los peores augurios se han hecho realidad. A causa del cambio climatico, las precipitaciones han menguado de forma drastica en el Reino Unido y la escasez de agua empieza a deteriorar la vida cotidiana. En esta situacion de desconcierto, Mark y Ruth Ardingly deciden marcharse del polvoriento Londres para instalarse a vivir en el campo, cada uno impelido por sus propias razones: Ruth busca una nueva oportunidad; Mark, un sitio donde refugiarse del mundo y de si mismo, y ambos, un hogar apacible donde criar a su pequeno nieto, Lucien.

  • ?Y si probamos…? de Tierra Salvaje

    https://gigalibros.com/y-si-probamos-8230.html

    ?Y si probamos…?
    A Nico y a Mamen les gusta fantasear con terceros. Es un juego, una forma de excitarse mutuamente, hasta que se convierte en algo demasiado tentador. La aparicion de Jorge cambia sus vidas por completo.

  • Un capricho del corazon 3 de Kate Ross

    https://gigalibros.com/un-capricho-del-corazon-3.html

    Despues de haber sido rescatada por Liam, el amor de su vida, de las garras de su psicopata hermano, Ellie esta pasando por una etapa de sanacion que marcara un antes y un despues en el amor entre ella y su atractivo ex vecino. Por su lado, aunque lo unico que Liam quiere hacer es ir tras su hermano para vengar a Ellie, se abstiene de hacerlo ya que lo primero en su mente es recuperarse. Ambos haran lo que sea para devolver la paz a su relacion de pareja, junto a sus dos mejores amigos, sin saber que esto es otra gran mentira mas.
    Pese a todos sus intentos, nada funciona. Ni el brillante sol de El Caribe los ayudara en esa encrucijada que se les avecina.
    Porque el quiere venganza.
    Y ella quiere olvidar.

  • Cementerio de Babel (Negra y recortada 1) de Fernando De Cea Velasco

    https://gigalibros.com/cementerio-de-babel-negra-y-recortada-1.html

    Felix es un marido celoso, que no aguanta mas los flirteos de Paula, su mujer. Quiere romper con ella, pero eso significa perder la empresa que tanto le ha costado crear, ya que Paula le engana con uno de sus socios. El problema no parece tener solucion hasta que un empresario amigo de Felix le propone resolverlo de una forma extrema…

  • Historias de un agente inmobiliario de Jacobo Armero

    https://gigalibros.com/historias-de-un-agente-inmobiliario.html

    UNA NOVELA PARA ENTRAR A VIVIR

  • El club de las cincuenta palabr de Ana B. Nieto

    https://gigalibros.com/el-club-de-las-cincuenta-palabr.html

    Dia largo, el de mi cumpleanos. Tres hijos y seis nietos, subidos encima de estos setenta inviernos y sin respetar turno alguno, despues de comer tres platos en lugar de mi habitual plato unico. Tienen, como todas las grandes familias, esa vocacion de circo en transito. Eso es la felicidad, despues de todo: las babas de un bebe que aun esta aprendiendo a dar besos, el abrazo de mi nieto de tres anos que apenas abarca mi contorno al abrazarme, la sonrisa benevola de mi hija, permitiendo que beba vino para celebrar la ultima comida de este ano 2015. Jerseis de regalo, alguno tejido a mano, y bromas con esa cosa que llamaron la <>. Como si fuera parte de una ceremonia, han sacado el album de recortes de todos los anos: <>, <>, <>, <>. Nunca se cansan de esas fotografias y me alegro. Son recuerdos que ya han difuminado la fatiga y la angustia obsesiva del proximo puerto. Ya solo queda la alegria de la imagen final, el broche del titular, el destello intimo del logro. Me han pedido que cantara una cancion marinera que me enseno mi padre. Las de mi madre las guardo para mi. Mi familia siempre me ha visto como ese gran viajero que vivia en un mundo geograficamente ilimitado: el mundo sin fin que me descubrio mi padre. Gracias a el conoci todas y cada una de las voces del oceano. Sus rostros femeninos. El mar es indomable, pero hay maneras de camuflarse, como si uno fuera parte de la ola, de los peces y la sal. Solo es necesario un disfraz de viento para llegar con ellos a un destino comun. Todavia era un nino cuando aprendi que luchar contra el oceano es perder sin remedio. Hay que danzar con el, dejar que te coja por la cintura y te guie. En cambio, la palabra <> es peligrosa. El oceano es capaz de arrebatarnoslo todo en un instante. Para ellos siempre he sido ese chico de las fotos, el nino que nacio en un barco. No pueden imaginarse que antes de mi padre hubo otro mundo: el mundo de ella, diferente por completo. Estamos a mitad del dia y aun me queda mucho camino que recorrer. Mi hija mayor me ha preparado la habitacion en el piso de arriba y me ha prometido que los ninos no me molestaran, pero estoy demasiado inquieto para la siesta. Se que esta noche nos encontraremos, que ella puede aparecer en cualquier momento, que debo estar atento durante nuestra cita. Si no lo estoy, puede que ya no vuelva a verla. Prefiero escribir a dormir. En los ultimos cumpleanos apenas consegui oirla o distinguirla en la oscuridad. Me fallan los sentidos cada vez mas. Dicen que estamos hechos de ceniza de estrellas y yo siento cada vez mas el peso del polvo sobre mis hombros, asentandose en el interior de mi cabeza. Soy ceniza que flota en el mar y llega hasta las mas lejanas orillas, en los lugares que descubri en mi juventud. Me imagino a mi mismo esta noche, con la luz casi extinta, bajo el faro cubierto de algas y de lapas. Sus cimientos parecen haberse fundido con la roca: mitad construccion, mitad naturaleza. No comprendo como ha podido suceder tan rapido: el mar lo ha asimilado como si fuera uno de sus hijos, un prodigo leviatan que estuviera de regreso. Estara hermoso, aunque el abrazo apasionado del mar lo esta destruyendo. La erosion acentua su aspecto abandonado. Puertos del Estado lo inutilizo hace anos y la pequena casa fue victima de vandalos y okupas, hasta que resulto incomoda incluso para ellos. Las luces lejanas del pueblo llenaran la noche de incandescencias; se encenderan y apagaran como en una delicada pieza de musica visual. Y alli, en solitario, la esperare. 1 Diario de a bordo Me mire una ultima vez en el espejo del portal de la Milla de Oro de Madrid para rehacerme la coleta y que no se escapara ni un mechon. Si mi viaje en tren deslucia mi aspecto de reportera seria, mi entrevistada se pondria a la defensiva. Y ella era la unica persona que podia abrirme las puertas al misterio de David Steer, el unico record Guinness que habia dado mi pueblo. Llevaba semanas preparando aquel reportaje, rebuscando entre las fotos y preguntando a la gente. Suscitaria interes a nivel nacional, estaba segura, por fin mi trabajo recibiria un poco de atencion, ese nutriente que a todos los que escribimos nos hace falta de vez en cuando para continuar en una profesion tan mal pagada e inestable. Me alise las arrugas de la falda confiando en que mi traje de chaqueta compensara mi juventud, que me delataba desde el rostro apenas maquillado. Me alegre de que aun faltaran un par de minutos para la hora acordada. No queria hacer esperar a quien me iba a regalar sus recuerdos para que yo los transformase en dinero. Y como mi anfitriona era una mujer tan mayor, y ademas britanica, debia ser aun mas escrupulosa. Me sorprendio que, junto a la puerta de roble veteado, conservara el letrero dorado con las letras negras en una tipografia clasica en italica, aunque ya llevara cinco anos retirada: <>. Sin duda, podia permitirse tener un despacho vacio y sin alquilar en una zona tan cara. O quizas, aunque ya no pasara consulta, lo seguia utilizando para investigacion. Hay personas que, en realidad, no se retiran nunca. Mande un mensaje con el movil a Ernesto, mi editor, para que se quedara tranquilo: <>. El me habia conseguido la entrevista y yo no habia hablado con la senora Simmons ni siquiera por telefono. Y sin embargo, no estaba nerviosa. Era excitante volver a Madrid y salir del asfixiante entorno local, donde las noticias hacian que empequenecieras dia a dia como profesional: la entrega de trofeos de futbol escolar, las condiciones de una nueva licencia de pesca o la apertura de la franquicia de una gran cadena de hamburgueserias junto a la gasolinera, con las inevitables protestas de buena parte del pueblo, preocupado por conservar su tradicion rural y por la competencia que suponia para sus bares, y nada interesado en el publico joven que pudiera atraer a un lugar envejecido en exceso. Silencie el telefono y llame al timbre

  • El agente caido de Christoffer Carlsson

    https://gigalibros.com/el-agente-caido.html

    En un oscuro callejon de Estocolmo aparece muerto el cuerpo de Thomas Heber, un profesor universitario. Le asignan el caso a Leo Junker y a su antiguo rival, Gabriel Birck. Leo, que sigue sin atravesar uno de sus mejores momentos, acaba de volver a la unidad de homicidios tras una larga ausencia. Aun abusa de los farmacos para luchar contra sus viejos demonios del pasado, pero trata de aparentar total normalidad para acometer su trabajo.

  • Cristina en las Highlands (Las Highlands 3) de Jana Westwood

    https://gigalibros.com/cristina-en-las-highlands-las-highlands-3.html

    El silencio. El atronador silencio. Abrio los ojos lentamente mientras el dolor lo acompanaba en su regreso al mundo de los vivos. Trato de levantar la cabeza para vislumbrar el manto de cadaveres que se extendian a su alrededor, pero el dolor que le produjo ese sencillo gesto le resulto insoportable y se desmayo. Cuando volvio a abrir los ojos su cerebro reacciono con mayor rapidez y los recuerdos de la batalla regresaron en forma de gritos, ruidos metalicos y olor a polvora. La ultima imagen antes de caer habia sido la de su padre desplomandose con la sangre saliendo a borbotones de la herida de su cuello. Trato de incorporarse, pero la cabeza le daba vueltas. Rodo hasta colocarse bocabajo. Quiza asi pudiera tener una vision clara del campo de batalla y le seria mas sencillo llegar hasta su padre. Volvio a levantar la cabeza, pero todo a su alrededor habia cambiado. Ya no habia cadaveres y estaba entre arboles. Se apreto las sienes con las manos, convencido de que veia visiones. --Agachate --dijo una voz a su izquierda. --?Patrick? El otro le hizo un gesto para que callase y le senalo con el dedo hacia su espalda. Cuando se giro vio el color rojo del uniforme ingles y comprendio que esas alimanas estaban recorriendo el campo de batalla en busca de supervivientes para acabar el trabajo. Patrick le hizo otro gesto con el dedo, como si se cortase el cuello para advertirle de que eso era exactamente lo que estaban haciendo los dragones de su majestad. Miro a su amigo y sin emitir sonido vocalizo ampliamente para preguntarle por su padre. El otro le confirmo que habia muerto. Los dolores que lo atacaban por todo el cuerpo, desde la cabeza hasta los pies, resultaron nimios frente al sentimiento que se abrio paso en su pecho al saber que Joseph Done, el hombre mas admirable de la tierra, estaba muerto. A su mente llegaron los primeros momentos de la batalla cuando la furia y la hombria se abrian paso frente al raciocinio, empujandolos contra el enemigo. Las primeras filas de highlanders habian levantado sus espadas con determinacion. Morir matando, esa era la consigna. Las demas tropas salieron de los flancos y se unieron a ellos con un ritmo desigual. Por el rabillo del ojo pudo ver que algunos de los soldados habian dudado y mantuvieron su posicion demasiado tiempo. Entre esos hombres estaban los MacDonald. Su abuelo los maldeciria un millon de veces por la actitud que habian tenido. Por las venas del viejo corria sangre MacDonald, aunque para su padre siempre fue tan solo un bastardo. Se toco la cara y desprendio parte de la capa de sangre y barro que la cubria. No recordaba el primer golpe, tan solo el ultimo. La imagen de su padre desplomandose con aquella mirada sorprendida despues de que el maldito ingles le cercenara el cuello. Jamas olvidaria esa mirada. Si los que portaban enormes espadas habian caido, no queria pensar en todos aquellos pobres diablos que iban pertrechados con hojas de guadana, azadas, palos y arpones. Campesinos cuyo odio habia convertido sus herramientas de labranza en armas con las que destripar a su enemigo. Los ingleses tenian mejores armas y soldados entrenados. Ellos solo contaban con el conocimiento de su propia tierra y un exaltado fervor por defender su modo de vida y a su rey. Y el fervor no fue suficiente. Patrick le indico que lo siguiera y se arrastro por el suelo utilizando los codos. El lo imito en silencio con un insoportable dolor en el brazo y en la pierna. Hasta ese momento no se habia dado cuenta de que no podia moverla. Detras de ellos les perseguian los gritos de los heridos a los que los dragones estaban rematando. Cuando estuvieron lo suficientemente lejos como para poder ponerse de pie, Patrick se paso el brazo bueno de su amigo por el cuello y lo sujeto de la cintura para ayudarlo a caminar. La suerte volvio a sonreirles en aquel aciago dia y se toparon con uno de los caballos extraviados de la contienda. Montaron en el, no sin muchas dificultades a causa del herido, y se alejaron silenciosamente. Ninguno de los tres queria regresar a aquel infierno. Tan solo querian alejarse lo mas posible. Detuvo el caballo en lo alto de la colina, desde alli se divisaba el castillo de Robert Done. Giro la cabeza lo suficiente para asegurarse de que su amigo estaba consciente. Habia perdido mucha sangre y estaba muy debil, por lo que habia tenido que recogerlo del suelo dos veces. --No nos acogera --dijo casi sin fuerzas--, nos echara a patadas o nos entregara a los ingleses. --Te moriras si no te curan esas heridas --sentencio Patrick mientras apretaba las piernas contra el caballo para que se pusiera en marcha, sujetando las riendas con firmeza y evitando que se moviera demasiado. --Entonces dejame frente a la casa y tu, marchate --dijo el otro inclinandose peligrosamente hacia un lado. --Aguanta un poco mas. Capitulo 1 Cristina se dejo caer contra el respaldo de la silla todavia en shock. Las imagenes que habia estado revisando en el ordenador de Deacon seguian pasando frente a sus ojos sin que pudiera darles credito. ?Que pretendia hacer con ellas? Les habia puesto incluso fecha a futuro, como si tuviera pensado publicarlas. Pero el no le haria eso. No podia ser. Fuese por el motivo que fuese, las habia grabado sin su consentimiento y no habia ninguna razon para que ella deseara que aquellos videos existieran. De modo que los borro, asegurandose de que no quedaban almacenados en la papelera. Tambien borro los otros, los de Kalinda, aunque fuera una puta era una mujer y no se merecia eso. Porque estaba segura de que ella tampoco sabia que la habia estado grabando, de haberlo sabido jamas habria dejado que se le viese la celulitis. Se puso a buscar por toda la casa hasta encontrar todas las tarjetas de memoria de Deacon. Borro todo lo que habia en ellas, no le apetecia ver mas porno y no se iba a arriesgar. Sonrio, taimada, iba a tener que grabar mucho para tener material para sus videos. Se sentia amenazada, como si una sombra oscura estuviese acechandola para saltar sobre ella en cualquier momento. No habia peligro, sabia que tenia tiempo de sobra, habia salido a surfear con sus amigos y nunca regresaba antes de las cinco de la tarde, pero igualmente sentia aquella urgencia, aquel temor a ser <> antes de haber terminado con todo. Tuvo tanto miedo de que pudieran recuperarse aquellos videos que se guardo las tarjetas para destruirlas cuando estuviese en su casa. Se sento frente al ordenador y lo miro con odio. ?Como habia podido Deacon hacerle eso? Lo de que la estuviese enganando con Kalinda ya era una putada, pero que estuviese guardandose videos de ellos dos haciendolo era una violacion en toda regla. No era una mojigata, le gustaba el sexo, por supuesto, pero practicarlo. ?Quien le impedia compartir los videos? Estaba claro que iba a cortar con ella, ?para que los guardaba? Y ?por que tenian fechas a futuro? Subio los pies a la silla y se abrazo a sus rodillas. No pudo contener los sollozos y todo su cuerpo se agito como las olas sobre las que Deacon surfeaba en ese mismo momento. ?A quien trataba de enganar? Lo de Kalinda le habia hecho dano. Las cosas entre Deacon y ella no iban bien, pero todas las parejas tienen problemas. La imagen de la youtubera del momento, que estaba causando sensacion con sus videos de maquillaje, se fue haciendo mas y mas nitida en su cerebro. De pronto un monton de senales luminosas se encendieron en sus recuerdos. La ultima, en la fiesta del sabado en casa de Clara, cuando entro en la cocina y vio a Deacon delante de Kalinda, que estaba sentada en la encimera de marmol. El actuo con tanta naturalidad que creyo lo que dijo, aunque ahora solo recordaba la mirada de Kalinda, su sonrisa inocente y el abrazo con el que la obsequio... Luego estaban los comentarios con sus amigotes sobre lo buena que estaba la youtubera y el exito que le esperaba. A su mente llego tambien su conversacion con Marta. --No me gustan nada estas fiestas --dijo Marta. --Lo se --habia respondido Cris. Marta se habia escabullido hasta el patio delantero y Cris la encontro sentada en el suelo, recostada contra la pared con una cerveza en la mano. Se habia quitado los zapatos de tacon que, aunque no tenian mas que siete centimetros, para ella eran una tortura. Todo el mundo estaba en la parte de detras de la casa, en la zona de la piscina, bebiendo cocteles. --No se por que he venido. Cris se sento a su lado poniendo cuidado en que la piedra del suelo no le hiciese una rozadura en su terso y desprotegido trasero. Aun tenia el pelo mojado del chapuzon que acababa de darse en la piscina y solo llevaba puesto un bikini de lo mas cuco. --?Por que no te gustan? --pregunto cogiendo la botella de cerveza que le ofrecia. Marta la habia mirado de un modo extrano y, al recordar ahora aquella mirada y sus palabras, todo cobraba sentido. --Porque siempre veo cosas que no quiero ver. En ese momento Cris penso que se referia al suceso con Wichi, que se habia tirado a la piscina como su madre lo trajo al mundo. --Creo que no voy a volver a aceptar estas invitaciones --dijo Marta--. Ya se que es bueno para el canal tener contactos, pero siempre me ha ido bien por mi cuenta. --Todo el mundo te quiere --habia dicho Cris. Y era cierto. Su canal de belleza era de los mas respetados y todo era gracias a su sinceridad y buen trabajo. --Yo me tomo esto en serio. Y no se que narices hago en una fiesta con gente como Wichi, Sanders o Deacon, que lo unico que hacen es ponerse a parir todo el tiempo y luego los ves planificando a escondidas su proxima bronca mediatica. --Tienen millones de seguidores --siguio Cris. Marta giro la cabeza y la miro con tristeza. --Tu tambien deberias alejarte de todo esto, Cris. --Se puso de pie con los zapatos en la mano--. En serio, acepta mi consejo: alejate de toda esta gente. En ese momento comprendia muy bien a que se referia con <>. Estaba claro que ella tambien sabia lo de Deacon con Kalinda. Para ser honesta debia reconocer que ella tambien habia fallado. ?Cuanto hacia del ultimo polvo? Era cierto que a ella ya no le apetecia casi nunca, pero el tampoco es que insistiera mucho. Solto el aire que se le habia acumulado en los pulmones y se limpio las lagrimas. No, de ningun modo iba a permitir que le hiciese lo que le hizo a Mayte, su antigua novia. Se levanto de la silla, cogio el ordenador y salio con el por la puerta que daba al jardin, recorrio el trecho que habia hasta la piscina y sin un apice de duda lo lanzo al agua y lo observo mientras se hundia. --Que te jodan, imbecil. --?Que ha hecho que? --Maria la miraba con los ojos como platos--. Deacon es gilipollas, pero eso es demasiado incluso para el. Cristina asintio hecha un mar de lagrimas. --?Como puede haberme grabado sin mi permiso? Estoy segura de que eso es ilegal. --Eso esta claro. --!Dios! --sollozo con la nariz tan roja que parecia iluminada. --Vamos a tranquilizarnos --dijo Maria acercandole el paquete de panuelos--. Deja de llorar que no se lo merece. ?Estas segura de haber borrado todos los videos? ?Tambien los de la camara? Cristina se limpio la cara al tiempo que asentia. --Todos. --Esperemos que no tuviera ninguna copia en el movil. Nego con la cabeza.

  • Destinada al Oeste (Destino de reyes 2) de Eilana Osorio Paez

    https://gigalibros.com/destinada-al-oeste-destino-de-reyes-2.html

    Soy la reina del Este. Destinada a un hombre que no conozco y amando a otro. Soy la heredera de un reino por el cual debo luchar, en una batalla de la que espero salir victoriosa. No se trata de poder, se trata de igualdad.

    Una promesa realizada hace milenios, una deuda que se debe pagar con sangre y dolor, un amor empanado por la mentira, el egoismo y el egocentrismo masculino. No se si pueda enfrentarme a lo que se avecina. confio en la esperanza depositada en mi . Porque no es defender un amor, es hacer lo correcto. Soy la Reina. una sola voz ha depositado su confianza en mi.

    – Debes estar dos pasos detras de mi, es la tradicion Yelena -se dio la vuelta y volvio dirigirse a su pueblo-. Deben comprenderla, es de otro mundo y sus costumbres son diferentes -volvio a mirarme, no me habia movido, ergui mi postura, desprendi toda mi energia-. ?Que haces Yelena?
    - ?Acaso no te das cuenta? -su desconcierto me confirmo que esto es lo que debo hacer, por mas que duela-. Tu energia es igual a la mia, estare a tu lado no atras.
    - Aqui es diferente -sonrei.
    - Ya no.

    Hay amores que se cruzan en el camino de tu vida, que no puedes olvidar, por mas que la sabiduria diga que el tiempo lo cura todo. En mi caso esa regla no se ha cumplido, al contrario, el sentimiento se afinca en mi alma al punto de no saber quien es el que domina mi ser. Pero por mas amor que se le tiene a un ser, hay actitudes que no se pueden pasar por alto. Aunque duela, el debera aprender. volvi para ensenarle. Ensenarle a amarme.

  • Manual de perdedores de Juan Sasturain

    https://gigalibros.com/manual-de-perdedores.html

    Una joya de Sasturain. Esta novela policial se publico por primera vez
    en episodios en el diario La Voz, de Cordoba, y habia sido escrita ocho
    anos antes. Es una obra del genero negro <>, ambientada en
    los dias de la dictadura.

  • El valle de dos caras de Amador D. Gervasio

    https://gigalibros.com/el-valle-de-dos-caras.html

    Al final de la Guerra de Secesion, en un minusculo pueblo del Salvaje Oeste, Abigail y su madre son atormentadas por un terrible circulo religioso recien llegado. Un enigmatico reverendo viene para imponer su fanatismo a base de versiculos biblicos y condenar a los infieles.
    Un oscuro secreto del pasado obligara a Abigail a reclamar una vida arrebatada. Un juicio impredecible la llenara de desilusion, brutalidad y depravacion hasta el punto de cuestionar su propio codigo moral.

  • La gente en los arboles de Hanya Yanagihara

    https://gigalibros.com/la-gente-en-los-arboles.html

    El debut literario de la autora de Tan poca vida., el fenomeno editorial que ha cautivado a mas de un millon de lectores.

  • El ladron de cartas de Rogelio Aronna

    https://gigalibros.com/el-ladron-de-cartas.html

    Paulino Chain tenia una unica obsesion, robar cartas en los buzones, hasta que un dia descubre que una de las cartas resulta una seria amenaza para la destinataria. Impedido de recurrir a la policia decide iniciar la investigacion por su cuenta. A partir de alli se implica en una pesquisa que lo llevara a vivir las peripecias mas insolitas e insospechadas.

  • Afectos secundarios de Fatima Casaseca

    https://gigalibros.com/afectos-secundarios.html

    Un dia lluvioso y deprimente de primavera, cuatro mujeres coinciden en una clinica de Madrid. Alicia es joven, bastante pardilla y se ha quedado sin amigos. Sonia es prostituta, malhablada y hace tiempo que dejo de confiar en el genero humano. Lola es una intelectual indignada contra el mundo y con un estricto concepto de la sororidad. Y Begona, resignada mujer de la limpieza y madre de familia, ha cometido el mayor error de su vida. Por eso, no puede evitar echarse a llorar en un oscuro soportal rodeada por unas desconocidas con las que, sin embargo, comparte el mismo secreto. Poco tiempo despues, un cadaver inoportuno hara que sus caminos vuelvan a cruzarse y pondra a prueba la sinceridad de su altruismo y los afectos secundarios de su primer encuentro.

  • Somos naturaleza de Katia Hueso

    https://gigalibros.com/somos-naturaleza.html

    La tecnologia, el turismo de masas, la urbanizacion, los trajines del dia a dia y las exigencias de la vida moderna parecen habernos hecho victimas de lo que Richard Louv --reconocido escritor y periodista-- llamo “sindrome de deficit de naturaleza”.

  • No robaras de Blas Ruiz Grau

    https://gigalibros.com/no-robaras.html

  • Herencia misteriosa de Leona Karr

    https://gigalibros.com/herencia-misteriosa.html

    Una tormenta empujo a la rica heredera Stacy Ashford a los brazos de un misterioso desconocido, un hombre duro y tremendamente atractivo. Pero ese encuentro con Josh Spencer parecia algo mas que una casualidad. Para hacerse con su herencia, Stacy tenia que reconstruir el fantasmagorico hotel en el que habia muerto la hermana de Josh. Y aunque Stacy no podia confiar en los motivos por los que el la ayudaba, su presencia la hizo mantenerse fuerte cuando alguien… o algo intento atemorizarla.

  • Incitame (Solo por ti 4) de Angy Skay

    https://gigalibros.com/incitame-solo-por-ti-4.html

    ?Te gusta el postre? --pregunto acercandome demasiado a ella. --Si...Ejem... --Disimula para separarse un poco de mi. El gesto me molesta, pero decido no darle importancia, hoy es mi noche. Es la gran noche. Agarro su silla y la arrastro hacia mi. El estridente ruido hace eco en el salon. La gente nos mira pero no me preocupa en absoluto. --Max...Nos esta mirando todo el mundo. --?Y que mas da? Pongo mi mano encima de su muslo, lo que hace que ella se sonroje de momento. --!Vamos Marian! ?Ahora te da verguenza? Aparta mi mano y me mira de malas formas por mi elevado tono de voz. --Max, no es el momento ni el lugar. !Por Dios comportate! Vuelvo a poner la mano encima de su muslo e igualmente se aparta disimuladamente. Es toda una actriz, y piensa que no me dado cuenta. Lo vuelvo a intentar. --!Para! --Me regana. --Eres una seca --digo amargamente. Coge su copa de champan y posa sus finos labios en ella. Bebe un pequeno sorbo sin apartar los ojos de mi. Me esta provocando, para nada... --Lo que se hace de rogar es lo mejor Max... --Y las cosas improvisadas algunas veces tambien. Cojo un poco de nata del postre y le doy un toquecito en la nariz manchandola. Se alarma, demasiado para mi gusto. --?!Pero que haces!? --Grita histerica dando un pequeno bote en la silla. Baja el tono y se sienta de nuevo al ver que todo el mundo la mira. --Tranquilizate Marian, que solo es nata...--Intento calmarla. --!Me has estropeado el maquillaje! !De verdad que no entiendo por que haces estas estupideces! Hace una mueca de disgusto con los labios y seguidamente fija sus ojos castanos en mi intensa-mente. --?Me compraste esa pulsera que vimos ayer? --pregunta coqueta. Suspiro y recuesto mi musculoso cuerpo en el respaldo de la silla. !La chaqueta me aprieta bastante! Tengo que dejar de hacer tanto ejercicio. !Mujeres! Siempre quieren regalos y de los caros. Saco la caja de terciopelo azul del bolsillo de mi chaqueta, en ella hay una fina pulsera de diamantes con forma ovalada, la pongo encima de la mesa, Marian la coge inmediata-mente y muestra su cara de satisfaccion. --Me ha costado una fortuna. --!Oh vamos Max! Tienes dinero de sobra --dice sin importancia y sin mirarme, esta completamente perdida en la pulsera. Se la pone encima de la mano y asiente alegre --, he visto unos pendientes a juego, manana pasaremos para que me los compres. --Claro carino --suspiro agotado. Llamo al camarero y le pido la cuenta. Cuando llega como siempre, Marian la coge y le echa un vistazo sin preocupacion. Me pasa la factura a mi y sonrie. --Toma --dice extendiendo la factura --, vas a gastarte un poquito mas de tu fortuna. --No me molesta gastarme dinero en ti, creo que eso ya te lo he demostrado en varias ocasiones. --Hombre, que minimo. Yo tambien tengo que aguantar lo mio con tus cosas --dice con desprecio. Niego con la cabeza, no tiene remedio. Pago y salimos del restaurante. Antes de cruzar la calle hacia el coche, me reajusto mi chaqueta y cojo sus manos. --Marian... Se gira en sus tacones de diez centimetros y me echa como de costumbre el humo de su cigarrillo en la cara. Me molesta, pero no le doy importancia. Como siempre. Nunca le doy importancia. Me quedo embelesado con su bonita figura, esta demasiado delgada pero aun asi, me tiene completamente hechizado. --?Que pasa? ?Vamos a ir al local de Eduard? --Sabes que no es santo de mi devocion, pero si quieres ir, iremos. El local esta lleno de gente podrida de dinero, son todos unos estirados. No me gusta nada estar en ese ambiente, se me hace pesado y aburrido a la misma vez. Solo se acercan a ti por interes. --Aunque si lo piensas, podemos ir a cualquier otro sitio de copas. Por ejemplo donde vamos Bryan y yo. Pone cara de asco de inmediato. --!Por favor! Eso si que es cutre. Me gustan los gin tonics que ponen en el local de Eduard. Asiento de mala gana. En fin, no se puede luchar contra un imposible. --De acuerdo, iremos entonces. Se gira para ir de nuevo al coche y le cojo de la mano. Me mira sin entender nada. No se porque me cuesta tanto hablar, estoy un poco incomodo, nervioso, no se, todo a la misma vez. --?Que pasa? --Pues... --!Max! Arranca de una vez, ?nos vamos o que? --dice exasperada. Remango un poco mi pantalon y pongo mi rodilla en el suelo. Ella me mira con cara de horror. No se mueve, solo me mira. --?Que haces? --pregunta arrogante. --Marian, creo que ya es hora de que demos el paso. Me tienes completamente enamorado y... --!Por favor Max! --Dramatiza --?No se te ocurrira pedirme matrimonio aqui? ?En medio de la calle? !No seas tan miserable! --Pero... No me deja terminar de hablar, me interrumpe. --Ni peros ni nada. Me lo tendras que pedir ante mi familia, mis amigos y mas gente !ya se! Organizaremos una fiesta por todo lo alto este fin de semana... Se da la vuelta en direccion al coche hablando como un loro de la fiesta. --Llamaremos a un catering !el mas caro de todo Londres! Haremos una fiesta por todo lo alto y entonces, solo entonces, podras pedirme matrimonio. Ahora si, espero que adquieras una buena joya para mi precioso dedo porque si no... !te dejare plantado delante de todos! --Parece que lo dice de broma, pero se de sobra que seria capaz si no le llevo un anillo que la encandile. Por un momento pienso en que estoy haciendo el gilipollas en medio de la calle. La gente me mira, creo que con cara de pena, no es para menos. Se para en la puerta del coche y me mira, aun viendome que sigo con una rodilla en el suelo. --?Se puede saber que haces? !Vamos abre Max! No tengo todo el dia--chilla desde lejos. Pulso el boton para que el coche se abra y me levanto. --Ahora te has manchado el traje, vas a poner el coche perdido !si es que no haces nada bien! No digo ni una palabra mas. Me subo en el coche y me mira. --?Te pasa algo? --?Me deberia pasar algo? --pregunto con sorna. --Pues no, creo que no te he hecho nada asi que, ya puedes ir cambiando la cara !pareces enfadado! Suspiro fuertemente. --Siempre con los suspiritos, arranca ya !quiero mi copa! Por cierto... ?Te ha quedado claro como lo haremos? Hago lo que me dice y me dirijo hacia el club. --Si me ha quedado muy claro Marian. Fiesta a lo grande, catering, champan y pedida delante de trescientas personas. Me ha quedado clarisi-mo--ironizo. --!Asi me gusta! Que hagas las cosas bien de una vez por todas. Seis meses despues... Llego el gran dia… Ato la corbata, pongo los zapatos negros de charol hechos a medida en mis pies, porque claro hoy en dia no hay muchos numeros del cuarenta y ocho tan exquisitos como a mi me gustan. Cojo la chaqueta negra de pinguino y me la paso por los brazos hasta que la ajusto a la perfeccion en mi moldeado cuerpazo. Si, pensareis que soy un creido pero es la realidad. Mi cuerpo desarma a las nenas. Aunque la unica que me importa es a la que voy a esperar en el altar, Marian. Llevamos tres anos juntos y creo que ya ha llegado el momento de dar un importante paso en nuestras vidas y que mejor manera de hacerlo que candandonos. Toc, toc. --?Se puede? Aqui esta, otro monumento andante como yo. Mi fiel y unico amigo, Bryan. Y cuando digo unico es porque verdaderamente, lo es. No he conocido a un tio en todos estos anos como el y dudo que a estas alturas vaya a hacerlo. Siempre esta cuando se le necesita y aunque tiene sus cosas, es un hermano para mi. --Claro, pasa. Me mira de los pies a la cabeza. --Esto... ?Estas seguro de lo que vas a hacer? Arqueo una ceja y niego con la cabeza mientras me termino de atar el ultimo boton de la chaqueta. --?Eres tu el que me lo pregunta? Porque te recuerdo que tu, te casaste hace poco con Dona porcelana. Bryan suelta una estridente carcajada. Si, la llamo Dona porcelana porque me da la gana. La mujer de mi mejor amigo, Abigail, es repelente, maleducada y consentida. Es pronunciar su nombre y la expresion de mi cara es de asco, inevitable. --No se como has podido casarte con esa mujer... --La tuya no se queda atras...--Contraataca. Lo observo durante un segundo. --Lo siento. No queria recordarte cosas indebidas el dia de tu boda. Pero eso te pasa por tirarme de la lengua. Niego con la cabeza. --No lo sientas, puede que el idiota aqui sea yo. Pero me consuela saber que tu estaras conmigo. Me rio y el hace una mueca graciosa. --Abigail esta embarazada. Ahora si que mi cara es un poema. --?Como? --Pues eso, que esta embarazada. Inspecciono a mi amigo e intento descifrar la cara que tiene. --?Cual es el problema? ?Ambos lo buscabais no? Se limita a asentir. --?Entonces? --No se, Creo que ella no es feliz. --Quieres decir que ella no quiere ninos. Estoy seguro. No querra estropear su figura de Barbie. --Sabes lo que me ha costado convencerla. Al principio estaba muy reacia pero luego parecio aceptarlo sin mas. No se... --Mira que me extrana que esa mujer quiera a alguien mas que a si misma. Bryan entrecierra los ojos un poco. --?Quieres ir con un ojo morado el dia de tu boda? Ahora el que suelta una estridente carcajada soy yo. --No me pegarias por ella, lo se --afirmo chulesca-mente. --Llevas razon, no lo haria. Pero echa el freno un rato, la estas avasallando siempre. Niego con la cabeza. No sabe a quien tiene por mujer todavia. --?Quieres que te maquille un poco? --pregunta con sorna. --No gracias, yo no uso esas mierdas. Le devuelvo una sonrisa ironica. --Vamos deja de mirarte Max. !Vas a llegar mas tarde tu que la novia! --Bueno estaria bien que por una vez en la vida el novio llegue mas tarde, ?no crees? --Mi madre moriria de un infarto y te mataria antes. Asi que, mejor llega el primero. Giselle. Es la madre de Bryan y la mia en cierto modo. La madre que nunca tuve. --Tu familia es la unica que tengo en la boda. --Mi familia es tu familia desde hace mucho tiempo, no lo olvides. Asientos y mis ojos se entristecen un poco. No se porque motivo, llevo toda la vida luchando solo, excepto cuando Anthony, el padre de Bryan, me encontro. Pero aun asi, el dia de tu boda parece que necesitas a la familia mas que nunca. Doy gracias por tenerlos a ellos. --!Max vamonos! --Ya no me los esta insinuando, me lo esta exigiendo.

  • Docil de Aro Sainz De La Maza

    https://gigalibros.com/docil.html

    El lunes al amanecer un joven se presenta en comisaria. Va empapado de sangre de pies a cabeza. <>, balbucea, y acto seguido se desmaya. El analisis de sus ropas constata que la sangre pertenece, como minimo, a tres personas. ?Se encuentran ante una victima mas, un superviviente? Pero, entonces, ?por que guarda silencio cuando recupera el conocimiento? Cabe otra posibilidad: que se trate de un asesino multiple. Sin embargo, todo su entorno lo define como un chico docil, incapaz de matar a una mosca. ?Que es en realidad Lucas Torres?