• libro aroma de azafran - Almudena Navarro Cuartero

    https://gigalibros.com/aroma-de-azafran.html

    Aroma de azafran es una apasionante novela costumbrista con tintes de novela policiaca, ambientada en pequeno pueblo manchego a finales del siglo XIX.

  • (IBD) AROMA DE AZAFRAN - Casa del Libro

    https://www.casadellibro.com/libro-ibd-aroma-de-azafran/9788417915254/11193338

    Aroma de azafrán es una apasionante novela costumbrista con tintes de novela policíaca, ambientada en pequeño pueblo manchego a finales del siglo XIX.

  • Aroma de Azafrán (Caligrama) : Navarro, Almudena - Amazon ...

    https://www.amazon.es/Aroma-Azafr%C3%A1n-Almudena-Navarro/dp/8417915257

    Aroma de Azafrán (Caligrama) : Navarro, Almudena: Amazon.es: Libros.

  • AROMA DE AZAFRÁN Versión Kindle - Libros - Amazon

    https://www.amazon.es/AROMA-AZAFR%C3%81N-Almudena-Navarro-ebook/dp/B08R962C7P

    AROMA DE AZAFRÁN es una novela costumbrista con tintes de novela policíaca, ambientada en pequeño pueblo manchego a finales del siglo XIX, años tumultuosos en ...

  • AROMA DE AZAFRÁN - NAVARRO CUARTERO ALMUDENA

    http://quelibroleo.com/aroma-de-azafran

    Una lucha que la llevará a descubrir sus límites y la realidad del mundo quela rodea. Información del libro. GéneroNovela negra, intriga, terror; Editorial ...

  • "Aroma de azafrán" - Almudena Navarro - Libros que hay que ...

    http://librosquehayqueleer-laky.blogspot.com/2020/03/aroma-de-azafran-almudena-navarro.html

    26 mar 2020 — Aroma de azafrán es una apasionante novela costumbrista con tintes de novela policíaca, ambientada en pequeño pueblo manchego a finales del ...

  • AROMA DE AZAFRÁN - ALMUDENA NAVARRO CUARTERO

    https://www.alibrate.com/libro/aroma-de-azafran/5e73c88e34389a0597d33ad3

    Encuentra el libro AROMA DE AZAFRÁN en Alibrate. Descubre reseñas, sinopsis, frases y más de este libro de ALMUDENA NAVARRO CUARTERO.

  • 'Aroma de azafran' - Almudena Navarro Cuartero - Babelio

    https://es.babelio.com/livres/Navarro-Cuartero-Aroma-de-azafran/103472

    Críticas (4), citas (2) extractos de 'Aroma de azafran' de Almudena Navarro Cuartero. “Aroma de azafrán” nos ... Comprar este libro en papel, epub, pdf en ...

  • Aroma de Azafrán - ALMUDENA NAVARRO - Agapea

    https://www.agapea.com/Almudena-Navarro/Aroma-de-Azafran-9788417915254-i.htm

    Comprar el libro Aroma de Azafrán de Almudena Navarro, Caligrama (9788417915254) con ENVÍO GRATIS desde 18 € en nuestra librería online Agapea.com; ...

  • Aroma de Azafrán - -5% en libros | FNAC

    https://www.fnac.es/a7252658/Aroma-de-azafran

    Aroma de Azafrán, libro de . Editorial: Caligrama. Libros con 5% de descuento y envío gratis desde 19€.

  • Construyendo un destino (Corazones rotos 1) de Catherine Brook

    https://gigalibros.com/construyendo-un-destino-corazones-rotos-1.html

    Una comedia romantica de mano de Catherine Brook en la que se pondran a prueba amor y confianza.

  • Tapas en Nueva York de Erina Alcala

    https://gigalibros.com/tapas-en-nueva-york.html

    Estrella Rodriguez se pasaba los veranos trabajando como recepcionista en un hotel de cualquier parte del mundo, echando de menos su Andalucia. Habla cuatro idiomas, aunque su pasion es la cocina y sobre todo… Nueva York. Asi que ?iba a renunciar a su sueno? !Por supuesto que no! Tapas y Nueva York, podrian funcionar estupendamente.
    Angelo Santerini es un tiburon de las finanzas y operaciones inmobiliarias. ?Mujeriego y playboy? Claro que si, por eso su imagen copa las revistas, tanto financieras, como del corazon. Pero todo cambia cuando su abuela contrata, para su cumpleanos, el catering de Estrella. Ella es tan enigmatica y distinta a todas las demas… Todo un reto. Y a Angelo le encantan los retos.

  • Jugando con una serpiente de Silvia Garcia Ruiz

    https://gigalibros.com/jugando-con-una-serpiente.html

    Suburbios de Londres, 1803 --!No puedo creer que ese mocoso aun este vivo! --gritaba Hal, uno de los rufianes de los barrios bajos de Londres para quien los ninos de la calle solo eran una herramienta para enriquecerse. --Por lo menos, su hermano es rapido y aprende a matar con facilidad, pero ?para que nos sirve el y su cara bonita? --pregunto Hugh, otro de los andrajosos tipos que miraban al mugriento nino, que, cansado, hambriento y lleno de golpes de su ultima aventura, se habia derrumbado en el suelo del viejo almacen que esos tipos usaban como escondite en sus distintos trapicheos. --Si no sabe robar y no puede matar, tal vez con ese bonito rostro nos sirva para otra cosa... --declaro maliciosamente Hal, alzando el rostro del nino de bonitos cabellos rubios, consiguiendo con ello que unos airados ojos azules se clavaran en el y que el chiquillo, al que todos creian rendido, sacara unas ultimas fuerzas de su cansado cuerpo para morder la mano que se atrevia a tocarlo--. !Mierda de mocoso! !Me ha mordido! --exclamo Hal con indignacion mientras apartaba de una sonora bofetada al rapaz que habia reclamado su sangre con un mordisco. --Ya sabes que no puedes hacerle dano, o de lo contrario el jefe tendra problemas a la hora de controlar al Cuchillas. --Su hermano si nos sirve: ha aprendido a matar como todo un asesino, pero este bribonzuelo es un completo inutil. No veo por que motivo nuestro jefe no se deshace de el. --Yo tampoco lo se. Parece como si estuviera esperando algo de este mocoso. Ni siquiera se ha dignado darle un nombre como a los demas chiquillos que estan a su cargo. --Si, pero a los demas ya nos ha quedado claro como se llama este crio, ?verdad, Inutil? -- declaro Hal entre carcajadas, recibiendo a cambio una fria mirada llena de furia que el nino, a pesar de su precaria situacion, todavia se permitia exhibir--. !No me gusta como me miras, mocoso! --grito Hal sin saber por que lo incomodaba tanto esa molesta mirada, al tiempo que levantaba al andrajoso nino del suelo, agarrandolo por el cuello de la camisa. El pequeno no hablo ni emitio queja alguna. Simplemente se limito a seguir mirando desafiante a ese sujeto, quitandole el poder que este ejercia sobre el gracias a sus amenazas al mirarlo sin miedo o al no retroceder frente a el. Cuando el chiquillo sonrio con ironia a su inutil intento de intimidacion, Hal sintio un inexplicable acceso de miedo ante esa sonrisa e intento ocultar rapidamente su debilidad con los punos. --!Insolente mocoso! --grito levantando la mano para borrar del rostro de ese nino esa sonrisa que tanto lo molestaba. Hasta que su mano fue detenida por una serena y dulce voz que todos temian mas que ninguna otra cosa, ya que sabian como se las gastaba el frio hombre que gobernaba los suburbios de Londres. --?Que te he dicho acerca de maltratar mi mercancia? ?Es que acaso quieres perder esa mano, Hal? --pregunto un individuo vestido con unas elegantes ropas negras al que todos llamaban <>, y a cuyos despiadados ojos no pasaba desapercibida ninguna de las malas acciones de ese lugar, tanto las que el mandaba llevar a cabo como las que otros hacian sin su permiso. Hal temblo de puro miedo y se apresuro a soltar al muchacho y a ocultar esa mano que no sabia si perderia ese dia, porque las acciones del Cuervo siempre eran impredecibles para los que desobedecian su mandato: en un momento te estaba sonriendo y al siguiente habia atravesado tu corazon con su cuchillo. Por fortuna para Hal, la mirada retadora que ese mocoso aun mantenia hacia ellos, observandolos como si fueran basura, molesto tanto al Cuervo como lo habia hecho con ellos. Y, dejando a un lado su castigo, el rey de los suburbios dirigio sus pasos hacia el insultante nino que, sin poder alguno, aun osaba desafiarlo. --?Donde esta mi dinero? --exigio el Cuervo al mugriento crio de apenas diez anos. Y este, por toda respuesta, le dirigio una sonrisa ironica mientras se alzaba de hombros y le mostraba sus manos vacias--. Si no eres de utilidad para el trabajo de las calles, en donde lo unico que tienes que hacer es arrebatarles la bolsa a los incautos, tendre que utilizarte de otra manera... --advirtio senalandolo con su baston negro, en cuya empunadura siempre llevaba la amenazante cabeza de un cuervo, recordandole asi a todo el mundo cual era su nombre y el poder que tenia en ese lugar, en donde el los manejaba a todos bajo sus firmes alas. --Asi pues, dime, pequeno infeliz, ?en que tipo de trabajo podria utilizarte? ?Tal vez en alguna fabrica mugrienta donde los ninos mueren a decenas cada semana? ?O quiza podria reservarte para el disfrute de algun vicioso noble al que puedas entretener con tu bonito rostro...? --intento amenazar el Cuervo. Pero el mocoso, ante sus palabras y al contrario que sus hombres, no retrocedio--. !Contestame! !Se que puedes hablar: te he oido murmurar junto a tu hermano en mas de una ocasion! --lo increpo airadamente el Cuervo, perdiendo la poca paciencia que tenia para luego volver a serenarse, intentando ocultar el monstruo que era detras de una encantadora mascara que podia enganar a quienes no lo conocieran, pues siempre habria algun incauto en esas calles que se dejaria enganar por su siempre impecable presencia y amistoso rostro. >>Se que no eres idiota, pero lo pareces cada vez que me provocas a mi o a mis hombres. No se por que te niegas a hablar desde que os recogi a tu hermano y a ti, sacandoos de las frias calles y dandoos un hogar --continuo el Cuervo, fingiendo ser el alma caritativa que nunca seria, consiguiendo que el nino tan solo sonriera ironicamente ante esas palabras en las que ahora ya no creia, pero en las que una vez confio. --!Ahi esta otra vez esa sonrisa impertinente que tanto me molesta y esa mirada audaz con la que te atreves a desafiarme! Esos rebeldes actos tuyos son los que me motivan a permitir que mis hombres te aleccionen. Y si sobrevives a sus lecciones en esta ocasion, tal vez te ganes un nombre. Si no..., bueno, simplemente moriras a causa de un desgraciado accidente que excusaremos ante tu hermano. Despues de todo, quiero seguir utilizando los fabulosos talentos para la muerte que tiene el Cuchillas, de los que un nino bonito como tu carece... Hal, Hugh... Es todo vuestro --sentencio el Cuervo, despreocupandose de la airada mirada que lo perseguia reclamando su sangre y sin inquietarse demasiado por ella, ya que, despues de ese dia, no volveria a ver mas a ese impertinente nino. O eso era lo que el creia... * El Cuervo habia ordenado a sus secuaces que le dieran una leccion a ese mocoso lejos de la ciudad, en un lugar desde donde los rumores no pudieran llegarle a su hermano. Y, asi, esos dos vengativos sujetos habian llevado al nino sin nombre hasta las afueras, en donde habian oido que se encontraba instalado un viejo campamento gitano. Con sus coloridos carromatos agrupados en torno a una enorme fogata, este mostraba una bulliciosa multitud llena de vida y alegria que cantaba y bailaba con jubilo, pero pronto la presencia de los compinches del Cuervo acabo con sus risas y apago sus canciones. Ese generoso pueblo nomada viajaba por todo el mundo aceptando entre ellos a cualquiera que quisiera acompanarlos, consiguiendo unos espectaculos muy entretenidos y exoticos con los que se ganaban unas monedas, entre los que destacaban una voluptuosa mujer de rasgos orientales que danzaba con cuchillos o un extrano hombre procedente de la lejana India que hacia bailar a una peligrosa serpiente al son de una humilde flauta. A los gitanos nunca les habian gustado los escandalosos tipos de la ciudad que, cuando iban a visitarlos, llamaban demasiado la atencion sobre su campamento y en ocasiones provocaban que los nobles los miraran con reprobacion y pensaran dos veces si permitirles acampar en sus tierras. Pero como dejaban buenas propinas, y como conocian la temible reputacion de los hombres del Cuervo, todos en el campamento guardaron silencio e intentaron no atraer la atencion sobre sus mujeres o sobre los mas debiles del clan, que podian verse avasallados por esos granujas. Cuando los secuaces del Cuervo acudian a su campamento, las bocas de ese pacifico pueblo siempre se mantenian en silencio, dejandoles hacer lo que les diera la gana, pero en esa ocasion no pudieron evitar protestar al ver como dos hombres intimidaban a un nino de apenas diez anos que, a pesar de su maltrecho aspecto, permanecia con la cabeza bien alta ante sus maltratadores. --Pero ?que le estais haciendo? !Si tan solo es un nino! --gritaron con indignacion algunas de las mujeres, siendo retenidas por los hombres para evitar que corrieran en auxilio de ese pequeno, pues esa bondadosa accion unicamente atraeria la ira del Cuervo hacia ellos. --!Mejor meteos en vuestros asuntos si no quereis ocupar su lugar! !El Cuervo nos ha dado permiso para aleccionar a este mocoso, y eso estamos haciendo! --grito Hal, arrancando la botella de vino de las manos de uno de los hombres del campamento, que ante esos conocidos matones de los suburbios de Londres no pudo hacer otra cosa mas que agachar la cabeza mientras apretaba con furia los punos. --Veamos si despues de esto sigue negandose a hablar... --apunto Hugh burlonamente, arrojandolo a un pozo. Los gritos aterrados de las mujeres silenciaron el del nino, que en esta ocasion no pudo guardar silencio. --No os preocupeis, no es profundo y hace anos que esta seco. Lo mas que le ha podido pasar a ese mocoso es un dolor de trasero. Eso si: no podra salir de ahi salvo que use una cuerda. Ahora comprobaremos si la oscuridad y el miedo doblegan el rebelde caracter y la fiera mirada de ese mierdecilla. Y si no aprende la leccion, nos desharemos de el. Los hombres del campamento, sintiendose impotentes, intentaron apartar del pobre nino la atencion de esos despreciables sujetos que lo habian convertido en el blanco de su crueldad para que, mientras esos canallas bebian junto a la hoguera y charlaban animadamente con ellos, las mujeres pudieran deslizar con disimulo algunos restos de la cena hacia el fondo del pozo. Los leves tirones de impaciencia que el nino daba a la cuerda en sus intentos por alcanzar su comida eran toda la prueba que tenian de que continuaba con vida, pues no se veia nada en la negrura del pozo. * Un rato mas tarde, en mitad de la noche, la bebida y el entretenimiento ya no eran diversion suficiente para esos tipos, y al no oir ningun grito procedente del pozo, los dos rufianes se percataron de que no habian logrado doblegar el espiritu del chiquillo. --Me pregunto si ese mocoso chillara si le arrojamos algo aterrador... --musito cruelmente Hal mientras fijaba los ojos en uno de los espectaculos del campamento gitano, en el que un extrano hombre con un punto rojo sobre la frente y un turbante en la cabeza tocaba una rara flauta para hacer bailar a una aterradora serpiente. --!Cuidado! Este animal es extremadamente peligroso: una sola mordedura puede llevarte a la muerte --previno el hombre, deteniendo la melodiosa musica de su flauta, con lo que la serpiente por poco no mordio la osada mano del insolente que se atrevia a acercarse a ella. Luego, para calmarla, prosiguio con su cancion hasta que volvio a meterse en su cesta, no sin antes dedicar una desdenosa mirada al hombre, que no le gustaba, y hacerle una ultima advertencia al ensenarle los afilados colmillos que tenia en sus fauces, repletos de un mortifero veneno. Tras cerrar la cesta, el hindu se apresuro a alejarse con su peligrosa amiga hacia un lugar lo suficientemente apartado de esos sujetos y de su crueldad, pero sus viejas manos no fueron lo bastante rapidas y uno de ellos le arrebato la canasta para arrojarla de inmediato al pozo. Sabiendo lo peligroso que era ese animal, todos los miembros del campamento lloraron en silencio por el terrible destino de ese pequeno al que no habian podido ayudar por miedo. Las mujeres dejaron que sus lagrimas se derramaran abiertamente por sus rostros a la vez que rezaban por el alma de ese nino, mientras que los hombres apretaban sus punos, furiosos consigo mismos por no hacer nada y con esos dos malnacidos que habian sido tan crueles con un simple nino unicamente porque su mirada los molestaba. --Hasta los condenados tenian derecho a defenderse cuando los arrojaban ante las bestias -- proclamo el hindu Ranjit en voz alta mientras negaba con la cabeza, apenado por la vida que se habia desperdiciado. --!Oh! ?Es que no estais contentos con nuestro castigo? Esta bien, que no se diga que no somos misericordiosos: arrojemosle algo a ese mocoso con lo que pueda defenderse... --se burlo Hal. Y, arrebatandole la flauta a Ranjit de sus viejas manos, la lanzo a la oscuridad del pozo. --!Ahi tienes tu arma para defenderte de la bestia, mocoso! --grito Hugh, uniendose a las burlas de su amigo. Ranjit no era especialmente valiente, pero aun asi, ante las despiadadas burlas de esos dos despreciables sujetos, no pudo evitar emitir su opinion en voz alta para borrar sus complacidas sonrisas. --Y a pesar de su cruel castigo, no he oido ni un solo grito ni una sola palabra salir de la boca de ese chiquillo. El silencio se hizo en medio del campamento, y cuando los furiosos ojos de los secuaces del Cuervo posaron sus miradas en el viejo Ranjit para convertirlo en el nuevo blanco de su ira, como si ese nino hubiera estado esperando el momento oportuno para llamar la atencion de sus torturadores, la musica de una melodiosa flauta comenzo a sonar burlandose de ellos con su insolencia, haciendoles saber que el todavia estaba en pie y usaba las armas que le habian entregado en son de broma para devolverles la burla a esos despiadados tipos que unicamente querian su muerte. --Muy bien. Veamos cuanto dura esa melodia... --repuso Hal burlon, alejandose del pozo junto a su amigo, creyendo que el joven tan solo habia pospuesto ligeramente el momento de su muerte, que no tardaria en llegar. * --!?Tres dias?! !?Me estais diciendo que ese mocoso lleva tres dias en ese pozo, tocando una punetera flauta, y que no os atreveis a bajar porque lo habeis encerrado con una maldita serpiente venenosa?! --grito el Cuervo, muy descontento, a sus secuaces. --En el campamento nos han dicho que ese bicho es extremadamente peligroso, y cada vez que le arrojamos la cuerda al nino para subirlo, el tira de ella con todas sus fuerzas... Tememos caer junto a el y ese mal bicho. --Os encargo una tarea muy simple: darle una leccion a un nino..., !?y me venis con esto?! Es mas que evidente que si ese chiquillo ha sobrevivido, esa serpiente no es tan venenosa como todos dicen. Por esta vez voy a ir con vosotros para sacar al maldito crio del pozo..., aunque aun no tengo claro si no deberia arrojaros a vosotros a el --manifesto el Cuervo ofuscado, apresurandose a seguir a sus hombres hasta el campamento gitano para no retrasar por mas tiempo la leccion que debia recibir ese chiquillo. Cuando el Cuervo llego junto al pozo, los gitanos, que siempre habian temido su presencia, huyeron nuevamente de el. Pero en esta ocasion al Cuervo no le pasaron desapercibidos los gestos que varios de esos hombres intentaban ocultar frente a el: unas complacidas sonrisas asomaban a sus rostros, apreciando en secreto el valeroso desafio que un simple nino estaba planteandole al senor de los barrios bajos de Londres. --!Tu, baja a por el! --grito el Cuervo con furia, senalando a Hugh para que se atara una cuerda en torno a la cintura, y, tras asegurarla enrollandola alrededor de un arbol cercano, el rufian descendio por el resbaladizo pozo con dificultad. Cuando oyeron que Hugh llegaba hasta el fondo, la musica de la flauta ceso. Y al contrario que el silencioso chiquillo, el hombre grito, lleno de dolor y agonia, dejando claro a los presentes que la vibora que habia favorecido al pequeno habia reclamado la vida del maleante. --!Escuchame bien, mocoso! !Si no sales de ese pozo voy a matar a todas las personas del campamento! !Y si pese a ello todavia sigues empecinado en continuar ocultandote en ese agujero, recuerda que tengo la vida de tu hermano en mis manos! Unos momentos despues, por toda respuesta, la cuerda se tenso y el nino comenzo a escalar el pozo hacia su libertad. Una vez que llego arriba, Hal cogio airadamente la mano del nino con la que se agarraba al borde del pozo. Su impaciencia por vengarse de ese chiquillo lo llevo a olvidar la peligrosa presencia que el pequeno mantenia junto a el: para asombro de todos, el nino no mantenia a la serpiente encerrada en su cesta, sino que la llevaba enrollada en un brazo, y el reptil, sin consentir que nadie se acercara a su pequeno protegido, mordio la mano del furioso individuo, lo que le provoco la muerte. Tras la caida de Hal, el nino salio por su propio pie del pozo con la serpiente aun enrollada en torno a su brazo. Ranjit, tras ver la imperturbable presencia de ese chiquillo y sus frios ojos azules, tan desafiantes como los de una serpiente, solo fue capaz de realizar una profunda reverencia al tiempo que murmuraba algo en un extrano idioma. Posteriormente, Ranjit repitio sus palabras en el idioma comun para que todos lo entendieran: --Naga... El dios serpiente... Ranjit creia que ese nino era uno de los nagas, dioses serpiente hindues que adoptaban forma humana y que su pueblo veneraba. Y entonces el pequeno, sonriendo maliciosamente a su enemigo, hablo por primera vez para declarar ante todos: --Me llamo Snake.

  • Quien mato a Angela Blanco de Adrian Aragon

    https://gigalibros.com/quien-mato-a-angela-blanco.html

  • Cautiva de una Mentira de Emma Gigan

    https://gigalibros.com/cautiva-de-una-mentira.html

    Alexia jamas se planteo que, cuando se casara, en su matrimonio no existiese el amor.
    Su padre, harto de esperar, decidio poner en el camino de su hija a un hombre que la hiciese renunciar a su rebeldia y desobediencia.
    El elegido para llevar a cabo sus planes, sera Lord Jacob Sherwin. Un hombre que se juro a si mismo, tras la muerte de su prometida, que ninguna otra mujer ocuparia jamas su lugar.
    El exitoso plan, consigue que acaben unidos en un tormentoso matrimonio que pronto les hara sufrir por las innumerables diferencias surgidas. A pesar de todos los obstaculos que se alzan ante ellos, Alexia debera rescatar a Jacob de su frio y autodestructivo comportamiento, si quiere conseguir su anhelado deseo de vivir feliz junto a su esposo.

  • Confie en ti (Por amor) de Maria Beatobe

    https://gigalibros.com/confie-en-ti-por-amor.html

    La noche prometia, aunque el plan previsto no me entusiasmara demasiado desde el principio. Cloe se habia puesto tan pesada en que la acompanara que, al final, tras sobornarme con invitarme a unos buenisimos profiteroles banados en chocolate caliente si iba con ella, hizo que definitivamente pudiera mas la gula que mis pocas ganas de ir. Al fin y al cabo, solo era una fiesta de fin de curso con la misma gente del instituto que, dia tras dia y durante cuatro largos anos, me habia encontrado por los pasillos. Ir a tomar algo a una discoteca para volver a ver a la gente de siempre y fingir una sonrisa como si te alegraras de verlos. !Que divertido! (Notese la ironia.) Tambien tengo que reconocer que soy bastante antisocial. Con esto no me refiero a que vaya ignorando a la gente que me habla ni que sea una borde malcriada, pero bueno, digamos que no hacia mucho por ampliar mi circulo de amistades. Me sentia segura en mi zona de confort, con mi espacio, mi gente y mis manias. Porque tambien era un poco maniatica --mas bien diria que perfeccionista--, aunque no una de esas chifladas que vigilan obsesivamente si sus cosas estan en el mismo sitio donde las habia dejado treinta segundos antes. Me gustaba hacer las cosas bien aunque tardara mas tiempo en realizarlas, y eso hacia que a veces mi paciencia, que ya os digo que tenia bastante, empezara a rozar limites poco agradecidos para la gente que se encontrara en esos momentos a mi alrededor. --?Que tengo que hacer que? Estas de cona, ?verdad, Cloe? --dije mirandola incredula. --Anda, no seas carca, lo pasaremos bien --respondio mientras sacaba de su bolso un pequeno espejo y ponia morritos para comprobar que sus labios maquillados seguian manteniendo el mismo tono rosa palo que llevaba cuando habia llegado a su casa. --No es cuestion de ser carca, es cuestion de dignidad --respondi mirando al techo y resoplando. --?Dignidad? Y que mas da eso. Hoy en dia casi nadie tiene --alego mi amiga sin mirarme. --Cloe, me estas pidiendo que aparezca en la fiesta vestida como una jodida verbena --dije mirandola de medio lado. No pudo evitar soltar una carcajada, que termino por contagiarme. Cerro despacio el espejito y lo volvio a guardar en el bolso. --?Una verbena? !Anda ya! Iremos... a ver que palabra utilizo para que me entiendas... --Se quedo pensativa para encontrar el termino exacto--. Atrayentes --dijo por fin. --?Atrayentes? Venga ya. Ridiculas, diria yo. --Pero vamos a ver, Naira --dijo incorporandose en el sillon y poniendose frente a mi--. La consigna de la fiesta es la misma para todos, asi que si quieres definir que nuestro atuendo sera ridiculo, todos iremos ridiculos. Asi que espabila y mueve el culo. --Joder, ya podrias habermelo avisado antes; faltas un par de dias al instituto y te pierdes la informacion mas importante de todo el ano. !A ver ahora lo que encuentro! --proteste. --No seas fatidica y ve a casa a prepararte. Yo voy a darme una ducha. !Y no te quedes ahi sentada, que te conozco! Mi amiga se levanto con agilidad, y mientras se dirigia hacia el bano, volvio la cabeza con alegria y me dijo adios con la mano, tipo despedida de una princesa o una reina, moviendola y girando solamente la palma de un lado a otro. --!Luego nos vemos, guapi! --Venga, vale... Que si, que voy... --respondi con desgana apoyando los brazos en el sillon con total apatia y resoplando. Me levante del asiento, cogi el bolso de mariposas que habia dejado apoyado en una de las sillas del comedor y me fui de casa de Cloe, no sin antes despedirme de su hermano, que jugaba a la consola en su habitacion. --!Chao, enano! --exclame asomando solo la cabeza por el marco de la puerta. --!Adios, Naira! --respondio sin apartar los ojos de la television. Viviamos cerca una de otra, apenas cruzar una calle y ya estaba en mi casa. Era un barrio centrico de Madrid, la Latina, uno de los mas castizos de la capital. Cloe y yo viviamos en la calle Colegiata y Noemi en una calle cercana, Duque de Rivas. Cuando llegue no habia nadie en casa. Mi madre trabajaba hasta las seis y mi padre llegaria como a las siete. Ahora eran las cuatro y media, y a las ocho de la tarde habia quedado en el portal con Cloe y mi otra amiga, Noemi. Nada mas entrar en mi casa fui directa a mi habitacion y me plante frente al armario con los brazos en jarras pensando que ponerme para la fiesta y, sobre todo, recapacitando en que momento habia aceptado ir. No me apetecia absolutamente nada romperme ahora la cabeza pensando en como hacer el mayor ridiculo de mi vida en la fiesta de fin de curso antes de hacer la selectividad. La consigna era clara, muy a mi pesar: teniamos que llevar en nuestro atuendo, y repartidos como nos diera la gana, !todos los colores del arcoiris! !Pero a quien se le habra ocurrido semejante chorrada! Mi fondo de armario no era nada del otro mundo. Reconozco que me gustaba la ropa, pero para conseguir todo lo que deseaba tener y de las marcas que quisiera comprar habia que disponer de mucho dinero, y yo... no lo tenia. Vivia con mi madre y mi padre en nuestra casa, y yo sobrevivia con la paga que me podian dar y con lo que me sacaba de vez en cuando cuidando a la nina de cuatro anitos de la vecina de arriba. Tenia diecisiete anos y mis padres me decian que debia acabar mis estudios, que no hacia falta que buscara un trabajo mas estable, que estaba bien ahora como estaba y que ellos me pagarian mis cosas. Pero claro, dentro de un limite, y no es que sea de gustos caros, pero la ropa era en cierto modo mi debilidad, la unica, tengo que reconocer. No fumaba, no salia mucho con mis amigas y los libros que adquiria me los compraba digitales para que me salieran mas baratos, aunque donde este un libro en papel, con su olor caracteristico, su tacto, su textura... Pero bueno, que me desvio, que no sabia que ponerme para la fiesta de fin de curso del instituto antes de realizar los examenes de acceso a la universidad. Estaba algo agobiada por esas pruebas; te lo jugabas todo a una carta, pero habia que hacerlos y demostrar todo lo que se habia estudiado durante el ano. Era la ultima celebracion y el instituto habia hablado con una discoteca grande de la zona para celebrar que nos despediamos de este centro para cambiar de escenario y comenzar la universidad, quien quisiera ir, claro. Otros preferian hacer algun modulo o directamente comenzar su vida laboral y dejar de estudiar. Yo, por mi parte, queria hacer la selectividad y estudiar Magisterio. Magisterio de primaria. Desde siempre me habia gustado ser profesora y, aunque mis padres me dijeron que me lo pensara antes, que habia muchas mas carreras con mas salidas laborales, una tarde les argumente mis razones por las que queria estudiar esa carrera y su respuesta fue que si a mi me hacia feliz, no habia nada mas que hablar. Tenia muy buena relacion con mis padres; eramos un prototipo de familia en la que podiamos hablar de todo. Bueno, de todo, no. Obviamente habia temas que yo no comentaba con ellos, como, por ejemplo, chicos, citas, de si me gustaba uno u otro..., !y de sexo, menos!, pero, por lo demas, nunca dudaba en pedirles consejo. Y el tema relacionado con los estudios que queria cursar fue uno de ellos. Mientras seguia mirando mi armario con cara de total ostracismo y pereza, mi movil empezo a sonar. Me acerque al escritorio, donde habia dejado el telefono, y lo cogi. Mire la pantalla y vi que era Noemi, otra de mis grandes amigas. --Noe, dime que no vas a la fiesta porque te han salido unas paperas enormes y que quieres que me quede contigo toda la noche cuidandote --dije del tiron nada mas descolgar. Detras del auricular se escucho una carcajada. --Pues no, nena --respondio ella--. Te llamo para animarte porque se que no estas con muchas ganas de ir. --Ya te ha escrito Cloe, ?no? --dije tirandome de espaldas en la cama. --?Que mas da eso? !Vamos a disfrutar que acabamos ya de una vez el conazo de instituto! !Aunque sea solo por decirles adios a todos con el dedo corazon! --Ella siempre tan sutil--. Anda, nena, preparate y !vamos a darlo todo! --Joder, estas animadisima, ?eh? --dije sin mucha euforia. --Ya ves... hay que disfrutar de la vida, nena. Ademas, piensa que tu queridisimo <> estara tambien por ahi... --dijo sarcasticamente. --Anda, !no seas tonta! --me queje esbozando una sonrisa invisible para ella--. Fijate que no me lo imagino diciendo <> --recite en un tono teatral exagerado

  • Virus Luna. El Torreon de V.m. Granda

    https://gigalibros.com/virus-luna-el-torreon.html

    Cuando Corea del Norte libera un letal y desconocido virus, este se propaga velozmente por occidente y a los pocos dias, millones de enfermos colapsan los centros sanitarios, pero cuando llega el crepusculo y la luna brilla, se convierten en bestias sedientas de sangre que salen en busca de presas con las que saciar su hambre.

  • Amurao. Dos dientes de plata de Fran Barrero

    https://gigalibros.com/amurao-dos-dientes-de-plata.html

    Acurrucadas en el sofa, para envidia de Pablo, que juega con la pequena Eva a adivinar los animales que dibuja con extranos garabatos en un cuaderno, Cristina y Livia estan terminado de ver una pelicula de policias. --!Otra vez, otra vez! --grita Livia, derramando las pocas palomitas que quedan en el cuenco sobre su regazo. --?Que dices? ?Te ha dado un flus? --Su mejor amiga la observa entre asombrada y divertida. --?No lo ves, Cris? Mira la tele. El malo esta usando a uno de los polis como escudo humano, y sus companeros no disparan por miedo a herirle. --Claro, es logico. --Pero eso es absurdo a la vez. Casi todas las peliculas de policias muestran escenas asi en el final, con lo sencillo que seria salir de esa situacion. Cristina sonrie. --En alguna pelicula he visto que se dispara al costado o el hombro del policia y asi se abate al malo. --Pero eso no es efectivo, Cris. El malo puede disparar como acto reflejo y volarle la cabeza. --Eso es cierto, pero solo es una pelicula. No deberias tomartelo tan al pie de la letra. --?Y si pasa en la vida real? ?Y si nos enfrentamos alguna vez a alguien y nos vemos en esa situacion? --Esta bien, pues dime que quieres que hagamos. --Cristina sonrie, le encanta ver a su amiga tan entusiasmada con el trabajo. --No se, supongo que habria que apartarse muy deprisa del malo para que tu companero le disparase en la cabeza. --Para eso se necesitan muchas cosas. --?Como cuales? --Livia se gira y se sienta frente a ella con las piernas cruzadas como un indio. --Pues necesitas que quien dispare tenga una precision y rapidez de tiro casi perfectos. --Yo 95 y tu 96, somos las mejores. --No tan rapido, tambien requiere una rapidez de movimiento extremo por parte del rehen. Y lo ultimo y mas dificil de todo --Livia la observa como un nino de diez anos viendo por primera vez Los Gremlins--: usar una especie de codigo entre companeros. --?Un codigo? ?Como es eso? --Pues imagina que te guino un ojo para que sepas que me voy a apartar rapido. --?Y cuando tendria que disparar yo? --Pues tras una cuenta atras coordinada, por ejemplo, guinando el ojo tres veces. --Pero eso puede llevar a error, serian cuatro guinos, el primero para avisar y los otros tres para disparar. --Vale, pues otra senal, quizas con las manos. La V de victoria. --No me gusta. --Estas un poco puntillosa. --Es que prefiero la senal del triple de baloncesto. --?Como es eso? Pablo interviene y lo hace con la mano, describiendo un circulo entre el pulgar y el indice, de modo que los otros tres dedos queden hacia arriba. --Me parece bien. La senal del triple y luego los tres guinos. --Y tenemos que acordar si disparamos al tercer guino o despues. --Ahora eres tu la que lo complica, Livia. ?Que es eso de despues? --Ya sabes. A la de tres y disparas, es decir: <> y luego disparas, <> y disparas. --Esa ultima, mismamente, ?que mas da? --Es la parte mas importante, la que decide si me vuelas la cabeza a mi o al criminal. --Vale, pues uno dos y disparo. Por cierto, me he perdido todo el final de la pelicula por tu culpa. --?Y que importa? No habia ningun chico guapo. Dos dientes de plata Rumania Nicoleta sabe hacerlo, no tiene que ensenarle nadie. Lo ha visto hacer muchas veces y tambien ha practicado cuando sus padres y su hermano no la observaban. La nina otea el horizonte al otro lado de la ventana del pequeno salon, solo logra ver las lejanas copas de los arboles mecidas por la brisa y un leve destello azulado empujando el manto negro de la noche sobre el cielo. En menos de media hora estaran todos despiertos en la casa y se sorprenderan de que ella haya demostrado que no es tan pequena como aseguran. Sabe donde esta todo, incluso el sitio en el que guardan las cerillas. Una vez reunidos los materiales necesarios, hace una bola con dos hojas de una vieja revista y las coloca en el centro del hogar; encima, pasto seco y fino, creando una pequena montana que crece a medida que anade palos delgados, luego mas gruesos. Cuando la cerilla se adentra en el conglomerado y toca el papel, todo comienza, tal cual lo ha visto hacer cientos de veces. No hay error posible. Tarda unos quince minutos en obtener la recompensa. Su padre, el primero que se levanta cada dia, entra en el salon y observa el fuego, luego a ella, vuelve a mirar el fuego, sonrie y se marcha. La nina no esperaba mas. ?Para que? Es mas que suficiente. Ya es mayor. Una vez desayunado y en el patio de atras, justo al lado del cobertizo de las herramientas del huerto, su hermano Costel corta lena, aunque tienen de sobra almacenada para el siguiente invierno. La nina se acerca, como cada dia, y ruega para que le deje ayudarlo. --Es muy peligroso para ti, puedes cortarte. --Tu usabas el hacha cuando tenias mi edad. --Es diferente, soy un chico. --Yo tambien puedo hacerlo. Ya oiste a mama esta manana, igual que tata cuando vio el fuego en la chimenea. Ya puedo hacer todo lo que quiera. Ya soy mayor. --No digas tonterias, eso te lo han dicho para que te sientas bien, por el detalle de encender el fuego. Encender fuego puede hacerlo hasta un mono. --!Eso es mentira! !Retiralo! --Bueno, esta bien, tu lo has querido. --Costel mira hacia la casa. Padre esta en el huerto y parece que madre no les vigila desde la ventana de la cocina--. Toma el hacha y haz lo que te diga. La nina se embriaga de emocion, responsabilidad y valentia a partes iguales. Toma el hacha por primera vez en su vida, nunca habria imaginado que pesaria tanto, casi no puede sostenerla con las dos manos, ni siquiera usando los consejos de su hermano mayor. Levanta la herramienta como le indica Costel, con la mano derecha en la parte inferior del mango y la izquierda casi pegada al frio metal. La eleva sobre su cabeza con determinacion y luego la deja caer con todas sus fuerzas sobre un pequeno tocon que ha colocado su hermano sobre la base. El filo ni roza el tocon, tampoco la base del enorme roble que se seco antes de que ellos nacieran y que usan para trocear la lena. Nicoleta siente que ha gastado las energias de una semana entera para hacer el ridiculo, pero eso solo le dura unos segundos. --Quiero intentarlo otra vez. --Te vas a hacer dano. Has estado a punto de darte en una pierna, te la habrias cortado y luego tata me mataria . --Solo una vez mas, por favor. Ni siquiera espera la autorizacion de su hermano, levanta el hacha y lo deja caer con mucha mas fuerza que antes, sin medir en ningun momento la precision para lograr su objetivo. El hacha se incrusta en el centro del tocon, pero no mas de unos milimetros. Costel rie al ver demostrada su teoria. El casi partio un tocon parecido cuando lo intento por primera vez, de eso hace seis anos. --Las chicas no teneis fuerza. Las chicas solo podeis trabajar en la casa. Vete a la cocina o a limpiar. Ella se enfada, observa el tronco y escupe al suelo con furia, como ha visto a su tata hacer desde que tiene uso de razon cuando esta enfadado. Mierda de vida, ella no decidio nacer chica. Se marcha corriendo a la casa, tiene muchas tareas pendientes de hacer. Habia pensado, ingenua, que podria cambiarlas si demostraba esa manana que podia encender fuego y cortar lena. Creia que mama usaria su autoridad para cambiar definitivamente las tareas de cada uno y asignarle las que ella queria desempenar. <>. Aun. Se pasa dos semanas preparandose para un nuevo intento, catorce dias en los que se levanta temprano, antes que los demas, enciende el fuego y luego se marcha a golpear con el hacha los troncos que coloca sobre la base del roble seco. Tambien lo hace algunas tardes, cuando su hermano y sus padres estan ocupados y sabe que no la observan. Practica hasta tener callos sangrantes sobre los anteriores callos resecos, hasta que suena por las noches con dar golpes, hasta que su vida se limita exclusivamente a golpear un estupido trozo de lena para convertirlo en dos. Esta manana no practica, se limita a esperar a que Costel este por la zona, ahora interesado en encontrar su azadon para ir al huerto. Nicoleta camina con decision hacia su objetivo, toma la herramienta y coloca un tocon mayor del que puso su hermano dos semanas atras. Este la observa desde la puerta de cobertizo, a tres metros, entre sorprendido e intrigado al ver su determinacion. No necesita un segundo golpe, el tocon se parte en dos ante el asombro del adolescente. --?Lo has visto? ?Lo has visto, Costel? De un solo golpe. --Habras tenido suerte, seria un trozo muy seco o podrido. --Puedo hacerlo otra vez. --Solo si yo elijo el tronco. --Me da igual, lo cortare de un solo golpe de nuevo. El chico coloca un trozo mucho mayor que el anterior, uno que el mismo no seria capaz de cortar de un solo golpe. Ella nunca lo ha intentado con semejante trozo de madera, ni la mitad. Sabe que no lo lograra, y no es una duda, se trata de logica, como dice su padre cuando le explica que la lena humeda no es buena para prender fuego, que no se puede plantar patatas en octubre y que una mujer nunca servira para nada mas que trabajar en el interior de la casa. <>. La nina aprieta los dientes, se aferra al mango del hacha y lo eleva sobre su cabeza. Usa el punto de apoyo del pie izquierdo, luego equilibra, pasa al derecho, adelantado, y deja caer con todas sus fuerzas la herramienta. El tocon no se parte, pero el hacha entra hasta la mitad del mismo. Todo un logro que no esperaba. Se gira con cara sonriente. Su hermano no sonrie, alberga un semblante extrano en la cara. La nina baja la mirada y observa la hoja del cuchillo que le ha brotado al chico en mitad del pecho, gotea sangre espesa y oscura, despacio. Vuelve a mirar la cara de su hermano, la mueca es ahora grotesca, como una mascara, un hilo de saliva rojiza cae de su boca abierta. Corre en un acto reflejo, corre con todas sus fuerzas. En casa esta mama y ella sabra que hacer. Antes de llegar a la puerta trasera, la que da a la cocina, un tipo enorme aparece y ella resbala antes de chocar contra el, esta aterrada, lo mira sin comprender como ha salido ese extrano, ese monstruo, del interior de su casa. El tipo enorme sonrie y muestra dos dientes de plata entre otros deformes y oscuros. Se agacha ante ella y le susurra. --?Tienes miedo, pequena? --Si. --Nicoleta ni siquiera sabe de donde ha salido el susurro de la respuesta. --No deberias tenerlo. ?Sabes que, segun la Biblia, el diablo no ha matado a nadie nunca? -- Y sonrie de nuevo, a sabiendas del efecto que produce la vision de su dentadura en la nina.

  • Homicidium de Jerusalem Elizondo

    https://gigalibros.com/homicidium.html

    Clara Schafer, una joven y novata investigadora, recien incorporada al Grupo de Delitos Civiles y Politicos de la Policia Foral de Navarra, recibe el aviso de un asesinato en las ruinas romanas de Santa Criz, una ciudad romana semidesenterrada por los arqueologos.
    La inspectora tendra que hacer frente a una serie de crimenes cuyas victimas tienen un nexo en comun, su trabajo en la Universidad Publica de Navarra. En sus pesquisas contara con importantes aliados, pero no todo sera lo que parece, ni el caso resultara tan sencillo, en una investigacion contrarreloj por descubrir a la persona culpable antes de que siga asesinando.
    Homicidium se desarrolla en torno a la universidad y a la arqueologia romana en Navarra, en una trama compleja, que combina las acciones policiales con los asuntos mas oscuros del mundo universitario, creando un ambiente de intriga y sospecha sobre las motivaciones de los personajes.

  • Azul De Medianoche, Simone van der Vlugt de Simone Van Der Vlugt

    https://gigalibros.com/azul-de-medianoche-simone-van-der-vlugt.html

  • Por ultimo, el corazon de Margaret Atwood

    https://gigalibros.com/por-ultimo-el-corazon.html

    Duena de una de las mentes mas lucidas del panorama literario actual, Margaret Atwood no es solo una institucion de las letras canadienses, sino tambien una figura relevante que se ha volcado por igual en la promocion de la literatura y la proteccion del medioambiente. Esta novela, su ultima obra publicada, se inscribe en el ambito de la ficcion especulativa, genero en el que Atwood ha cosechado algunos de los mayores exitos de su formidable bibliografia.
    Victimas de la debacle economica, Stan y Charmaine se instalan en el coche tras perder su casa. Malviven gracias a los escasos ingresos que ella consigue en un bar de poca monta. Es entonces cuando llama su atencion un anuncio acerca del Proyecto Positron, un experimento social en el que los habitantes de la idilica ciudad de Consiliencia se dividen en dos grupos que alternan su modus vivendi cada treinta dias: mientras el cincuenta por ciento se recluye en la Penitenciaria Positron para mantener el sistema, la otra mitad disfruta de plena libertad y lleva un estilo de vida propio de la clase media. Al cabo de un mes, intercambian sus roles: los libres ingresan en prision y los encarcelados se instalan en las viviendas que ocupaban los nuevos reclusos, haciendo uso comun de todos los objetos, enseres y aparatos. Agotado el entusiasmo inicial, Stan y Charmaine no tardan en percatarse de que Consiliencia no es el paraiso que habian imaginado y pronto se ven envueltos en una serie de aventuras disparatadas, atrapados en un torbellino de lujuria que les hara cuestionarse sus valores y sentimientos mas profundos.

  • Ordesa de Manuel Vilas

    https://gigalibros.com/ordesa.html

    El fenomeno literario de 2018

  • El mundo que nos dejais de Lucas Barrero

    https://gigalibros.com/el-mundo-que-nos-dejais.html

    Durante anos, cuando se hablaba del terrible impacto que tendria el cambio climatico, se solia mencionar a las generaciones futuras. Pues bien, estas ya estan aqui y han nacido en un planeta al borde del colapso. Por eso, cada vez mas estudiantes de todo el mundo toman conciencia del problema y se suman a la huelga del movimiento Fridays for Future.

  • Sal con alguien que no lea de Charles Warnke

    https://gigalibros.com/sal-con-alguien-que-no-lea.html

    Para todos los amantes de la lectura… y del amor.
    Si dudas, regalale este libro.

  • La inefable senorita Olivia (Damas inadecuadas 3) de Kathia Iblis

    https://gigalibros.com/la-inefable-senorita-olivia-damas-inadecuadas-3.html

    Arabia, Golfo Persico Bahrain 1860 --Cuando sea grande quiero casarme con un caballero como papa --declaro la pequena Olivia Wentworth con todos sus diez anos de inocencia, mientras danzaba alrededor de la habitacion infantil. No era la primera vez que hacia declaracion de esa clase y, aunque en un comienzo su hermana la habia imitado, ahora la jovencita en cuestion estaba sentada sobre la cama. --Pero mama y papa no estan casados... --Emma, de doce anos, le comento a su hermana menor, dejando mas que en claro con grandes dosis de escepticismo sus dudas en lo que concernia la relacion de sus padres. --!Si lo estan! --No. No lo estan. --!Que si! --Entonces ?por que no vive con nosotras? ?Por que solo lo vemos cuando viene de visita? Apenas si lo vemos mientras vive con los barbaros --practicamente le grito mientras se levantaba de su lugar y encaraba a su hermana. --!Papa no es un barbaro! --la pequena Oli ya estaba al borde del llanto cuando grito esas palabras. --Quizas... igual no creo que nos quiera tanto como dice. Si no, estaria siempre con nosotras --declaro con dureza la jovencita--. Pero mama tan solo era su... amante. --!Emma! --La nodriza, Marianne, especialmente contratada por su padre, observo consternada y horrorizada por partes iguales a la mayor de las ninas. Y aunque eso de inmediato las silencio a ambas fue la tristeza en el rostro de su madre, que segundos despues aparecio en la entrada de la habitacion, lo que logro inmovilizarlas por completo. --Thadi... --Thadi... Ambas ninas corrieron y se aferraron al vestido de su madre mientras lloraban calladamente. Fatima sabia lo que la ausencia de su padre les costaba a sus hijas, pero era la primera vez que las escuchaba abiertamente quejarse al respecto. Y eso hacia sufrir su corazon de madre. En momentos como aquel, anhelaba que Kenneth pudiera estar mas presente en sus vidas, pero sabia que eso no era posible. --Ninas... su padre nos ama mas que a nada en el mundo.... --Pero el no vive con nosotras como otros papas --declaro Emma de nuevo con terquedad. La mujer cerro los ojos por unos instantes, parecia estar sopesando que tanto revelar sobre las razones de ello a sus hijas. --El tiene muchas responsabilidades en Inglaterra y eso le dificulta el estar con nosotras como el desearia, pero una vez que su hermano se haga cargo van a ver como todo va a cambiar. --Un hermano que no nos quiere... --declaro Emma aun dolida con toda la situacion. Fatima sabia que no era asi. Si habia alguien que amaba a sus medias hermanas ese era el joven Andrew Kane Wentworth. Pero como unico heredero al ducado de Devonshire sus responsabilidades eran muchas. Fatima sintio como las decisiones del pasado volvian a pesarle con dolor en el alma. En momentos como aquel se arrepentia de su propia debilidad. De haberse doblegado a las demandas de su padre, pero tambien sabia que de no haberlo hecho el habria asesinado a Kenneth y a las ninas. Sin embargo, tambien sabia que volveria a hacerlo todo de nuevo. Inconscientemente se llevo una mano al vientre, un recuerdo en particular hacia aun llorar su corazon de madre, pero viendo ahora los rostros de sus ninas y las segundas oportunidades que los dioses le habian ofrecido... las estrecho con fuerza contra si. Un dia, les revelaria toda la verdad a sus hijas, pero mientras el tiempo se lo permitiera preferia que siguieran en la bendita ignorancia del precio que su abuelo le exigio para poder tener su propia vivienda lejos del hogar familiar y el ser la mujer de un barbaro. Pronto, su Kenneth vendria a visitarlas, y juntos decidirian que tanto revelarle a sus hijas y la mejor manera de hacerlo. Asi fue como, pese a la distancia, su amor seguia tan vivo como desde el primer momento en que sus miradas se cruzaron en el bazar hacia tantos anos atras. Ella tan solo podia orar y pedir que en el futuro les fuera finalmente posible el estar juntos por siempre. Capitulo 1 Chatsworth House Campina inglesa Marzo 1871 Olivia espero a que la persona se marchara antes de abandonar la seguridad de su refugio. Agradecio que el cielo estuviese nublado, lo cual ocultaba la luna llena y le daba a todo un aura irreal, cubierto como estaba por la nieve que habia caido a lo largo del dia. Una inesperada sorpresa para todos, pero mas que bienvenida por ella. No se debia a que los invitados de su padre no supieran de su arribo a Londres, sino porque la indumentaria que vestia en aquellos momentos, de ser vista, bien podria causarle un serio dano a su reputacion. Como si ser una de las dos hijas desconocidas del duque de Devonshire no hubiese ya causado un escandalo mayor. Sin olvidar que el hecho de que su padre la hubiese reconocido y dado su apellido habia hecho que las malas lenguas adoptaran una actitud despiadada y, aun asi, no dejaban de invitarla a todo evento habido y por haber. Porque ya sea que les gustase o no, Lord Kenneth Humphrey Wentworth era un hombre poderoso y de temer si uno se ganaba su enemistad. Pero en algun punto, y luego de llevar dos semanas en la ciudad, se alegraba de que el medico de su padre le hubiese ordenado que se retirase al campo a descansar. Oli se sentia mas que algo agobiada por las constante presion de tener que comportarse como la perfecta flor inglesa cuando ella distaba bastante de serlo. De hecho, estaba segura que no habia nadie mas inadecuada que ella... a excepcion quizas de su hermana mayor, Emma. Lo cual no implicaba que si ella se llegase a descubrir lo que Oli estaba por hacer no fuese a querer asesinarla. Ambas habian acordado que se mudarian a vivir con su padre y cuidarian de el mientras su hermano mayor estaba ausente. E incluso, una vez este regresara, si ellas asi lo deseaban, se quedarian de manera indefinida. Lo que implicaba dejar atras y bien silenciados ciertos detalles de la vida que llevaban en Bahrain junto a su madre. Por ende, ser <>, la misteriosa y popular odalisca conocida y admirada por un amplio publico, estaba complemente fuera de toda discusion. Renuncio a ello cuando abandono Arabia y se comprometio a honrar a su padre. Pero lo extranaba.... Extranaba el perderse en el ritmo de la danza y olvidarse por completo de lo que se esperaba de ella. Extranaba el anonimato que ese rol le conferia. Y sabia que esa fue la razon de conservar su traje rojo y traerlo consigo a Inglaterra. Iba mas alla del obvio afecto que le tenia por haber sido disenado y bordado a mano por su madre. Oli cerro brevemente los ojos, los abrio e inhalo hondo el fresco aire de la noche mientras avanzaba hasta detenerse en el centro de la antigua estructura sin techo. Asumio la postura inicial de todos sus actos. La cadera ligeramente arqueada, las manos semiestiradas por sobre su cabeza, el velo rojo transparente que permitia que la audiencia pudiera observarla a placer pero al mismo tiempo dejandolos deseosos de mas. Finalmente, inhalo hondo, el recuerdo de los acordes broto de su interior y se dejo llevar. *** Las dos damas observaron a la joven comenzar a bailar y sonrieron con satisfaccion. Se las habian arreglado para hallar la unica habitacion desde la cual se veian las antiguas ruinas de lo que otrora fuese una iglesia. --Sabes que el va a enfurecer si se entera de lo ocurrido, ?no? --comento lady Clarisse Kensington con picardia. --Pero el no tiene por que enterarse... porque ni tu ni yo le diremos nada. --Lady Desdemona Hawthorne le guino el ojo claramente disfrutando de la situacion. --Ademas, Desi, lord Herbert es tan... --?Estirado? ?Tieso? ?Constipado? --!Desdemona! --Es la verdad, querida, y lo sabes. --La dama sacudio la mano restandole importancia a la fingida alarma de su querida amiga ante el vocabulario utilizado--. Precisamente por eso Oli es perfecta para el. --Quizas. Pero ella es tan diferente a la jovencita Grey y a Sophie. --Ahora se la veia preocupada a la dama--. ?O crees que nos equivocamos? ?Acaso ella es demasiado inadecuada incluso para estos tiempos que corren? --Solo aseguremonos de que cierto lord no se entere. Porque si ello llegase a ocurrir... --!Boberias! Con los rumores que han circulado sobre su familia. ?O acaso olvidas como es que su antepasado obtuvo el titulo? --La dama se referia al casamiento de este con Anne Parr, hermana de Catherine Parr, la sexta esposa de Enrique VIII. Luego de eso los Herbert asumieron el titulo de condes de Pembroke y fundaron una larga linea de poderosos senores. --Esa es su familia. No el. Ambas sabemos que es uno de los caballeros con mejor reputacion del reino. Ni un solo escandalo se ha visto asociado a su nombre --declaro con seguridad la dama --. Y eso es lo que lo hace bueno para Oli. --Pobrecita nina. Ambas damas volvieron a focalizar su atencion en la bella joven cuya exotica apariencia no podia mas que atraer la atencion de cualquiera que se cruzara en su camino. Lamentablemente tan pronto los rumores sobre ella llegaban a oidos de quien fuese su interlocutor era desdenada al instante. Lo peor era que ninguno de los rumores era cierto. Aunque aun no habian logrado precisar con exactitud el origen de los mismos, lo que en parte tambien las habia empujado a idear un plan tan drastico y descabellado a la vez. Simplemente no podian permitir que la situacion continuase de esa manera o la joven estaria arruinada para siempre y sin siquiera haber cometido falta alguna. Ellas mismas habian sido testigos de varias de las escandalosas propuestas que recibio en mas de una ocasion por caballeros que jamas tratarian de aquella manera a una dama inglesa. Eso las habia instado a intervenir en un primer momento. Oli podria ser considerada inadecuada por las malas lenguas, pero en lo que a ellas concernia era la dama perfecta para el estirado conde de Pembroke. Ahora solo era cuestion de poner en marcha su plan y sabian que todo saldria a la perfeccion. Como si alguien lo hubiese convocado por arte de magia, ambas vieron como el susodicho abandonada la seguridad de la antigua construccion y se alejaba en direccion a las ruinas, complemente ajeno a lo que el destino le tenia deparado. --Clarisse, calmate, por favor. Me estas poniendo nerviosa y ambas sabemos lo dificil que es eso --declaro Desi aferrando una de las manos de su querida amiga--. Todo va a estar bien. Hasta ahora nuestra intuicion jamas nos ha fallado, si no, tan solo mira a Gigi y a Sofi. --Son tan felices... --respondio la otra dama con obvio afecto en la voz pensando en las otras dos jovenes que habian logrado casarse con los hombres que amaban. --!Exacto! Y ahora podemos hacer lo mismo por Oli. Ademas, no te olvides que ambas nos ofrecieron su ayuda, asi como tambien Cali y el resto de las casi florero. Todo va a salir. Ten un poco de fe. Capitulo 2 Lord Wulfgar Ambrose Herbert, conde de Pembroke, observaba hechizado la vision frente a el. Sabia que lo correcto y lo que cualquier caballero haria seria dar la media vuelta y marcharse de regreso a la residencia, pero el se hallo incapaz de hacerlo. Sus intenciones al abandonar la calidez de la propiedad estaban basadas en su deseo de alejarse de las asfixiantes atenciones de las damas casaderas presentes y sus carabinas. Lo que apremio sus pasos y que buscara alejarse de la casa mientras intentaba no verse como un mal invitado. El frio de la inesperada y tardia nevada en su rostro lo impulso a continuar deambulando sin rumbo fijo, pero en todo momento atento a cualquier dama desesperada que intentase atraparlo en una situacion comprometida. Si habia algo que no necesitase su familia era verse involucrado en un escandalo. Ya bastante de ellos habian conjurado sus antepasados. Es mas, el estaba seguro de que de no ser por la cercania de su abuela con la Reina Madre hacia rato que habrian caido en desgracia durante del reinado de su majestad. Tan solo pensar en el resto de sus parientes le producia jaqueca. Sin embargo, en su busqueda de algo de paz y tranquilidad jamas espero cruzarse con esa vision en rojo. Por unos instantes, incluso, dudo respecto a su cordura. Habia pasado bastante tiempo desde que disfrutara del algo de distraccion de indole femenina. Bien podria ser que su mente le estuviese jugando algun truco. Dudo por largos instantes, pero finalmente decidio que, mas alla de lo eterea que se viera, ella era tan de carne y hueso como el. Cuando los tenues rayos del sol se abrieron paso entre las nubes y la iluminaron, esto se confirmo porque, de haber sido un fantasma, ella se habria desvanecido frente a sus ojos. Sin embargo, a medida que los pequenos copos de nieve anidaban en sus cabellos azabaches, ella continuo cautivandolo, hechizandolo con cada uno de sus sensuales movimientos, danzando al ritmo de una musica que ella sola lograba oir. Sin embargo, no lograba ver su rostro... salvo que revelase su presencia, y eso era algo que se rehusaba a hacer. El contraste entre la efimera tela roja y su piel ligeramente dorada hizo que le cosquillearan las yemas de los dedos, inundandolo de anhelo por saber si eran tan sedosas como se veian. Apenas si avanzo unos pasos, y se detuvo. Deseaba acercarse, pero al mismo tiempo no queria quebrar la conexion entre ambos. El ruido fue fuerte e inesperado, sobresaltandolos a ambos. Pero antes de poder reaccionar percibio el miedo de la joven aun desde donde se hallaba, quien dio media vuelta y huyo por una entrada lateral de la antigua catedral, bien escondida por la frondosa enredadera. Wulfgar no supo que fue lo que lo impulso a hacerlo, pero apenas el jinete, a quien el suponia responsable del sonido, se abrio paso en el claro cerca de ellos, aprovecho el abrigo de las sombras y corrio detras de ella. Le sorprendio la rapidez de sus pasos, dado que obviamente su calzado no parecia el ideal para andar por terrenos tan agrestes y pedregosos, con trozos de la abandonada catedral proliferando todo a lo largo del paisaje. No tardo en ver su delicada figura desapareciendo detras de un grupo de altos arbustos que indicaba que estaban cerca de la residencia principal. Finalmente creyo que habia logrado alcanzarla cuando el delicado panuelo traslucido con el que ella danzo le cubrio el rostro obligandolo a aminorar su paso. La dulce fragancia le asalto los sentidos y se encontro inhalando hondo mientras maldecia por no haber podido alcanzar a la cautivante y misteriosa joven. Se juro a si mismo que sus caminos volverian a cruzarse mientras se reacomodaba la chaqueta y ocultaba en su interior la prenda perdida. *** Oli se desvistio a la carrera mientras atravesaba la antesala de su alcoba con la velocidad de un rayo, en todo momento teniendo cuidado de no desgarrar el traje. Sin embargo, el instante en que la puerta que conectaba con el pasillo se abrio sintio que se le detenia el corazon. Y no fue hasta que vio aparecer a Marianne, su antigua ninera, vistiendo ropa de cama, que solto el aliento que habia estado conteniendo. --!Nina! Vamos. Rapido. Agradezcamos a los dioses que su tia Florence aun no ha llegado de la ciudad. --Oli no pudo mas que sonreir al oirla hablar de aquella manera. Con el paso de los anos, entre ella y Fatima se habia desarrollado una entranable amistad que hizo que, incluso cuando ellas ya habian sido consideradas demasiado grandes para tener una ninera, su madre insistiera en que se la ofreciera el puesto de institutriz de ambas. Kenneth, siempre dispuesto a complacer a la mujer que no se cansaba de llamar <>, se aseguro de que asi fuera y desde entonces la dama habia sido una parte constante de su vida. --Hablas como mama --le susurro divertida mientras le permitia que le trenzara los abundantes cabellos azabaches, luego de que ella se colocase el abultado camison que en su opinion tenia demasiada tela. --Que yo sepa eso jamas ha sido algo malo, pequena --le respondio, y la apuro a meterse en la cama--. Cubrete bien, que lo unico que nos falta es que te pesques un resfriado. --Al menos esa seria una buena excusa para no tener que lidiar con todos esos... estirados -- murmuro por lo bajo, pero supo que Marianne la escucho cuando desvio la mirada de su tarea y la focalizo en su rostro. --Oh, carino, ?otra vez? --A pesar de haber pasado una buena cantidad de anos en Inglaterra, luego de vivir anos alejada, la dama habia albergado la esperanza de que las cosas hubiesen cambiado, en especial con las nuevas aperturas comerciales que implicaban nuevos tratos con otras culturas, pero por lo visto las cosas seguian exactamente iguales que antes. Y ella odiaba eso. Al no haber tenido una familia propia, las ninas y Fatima habian pasado a ocupar ese lugar en su corazon. No habia nada que no hiciera por ellas, y esa habia sido parte de la razon de contactar a dos viejas conocidas de su madre. Creyo que ellas podrian ayudar a Oli, y al mismo tiempo tambien ofrecerle algo de proteccion al albergarla bajo sus alas, pero parecia que la aristocracia londinense estaba decidida a no darle cabida a la adorable joven. --Vas a ver que cuando llegue tu tia y nos marchemos a la ciudad todo va a mejorar --le dijo finalmente en un intento por levantarle el animo. --?En serio lo cree? --Por supuesto que si, carino. Vas a ver. Londres es bellisima. Una ciudad como jamas has visto. Llena de vida y actividades para hacer en todo momento --le aseguro mientras la cubria bien con el acolchado. Luego de darle un beso en la frente se alejo en direccion a la puerta de la habitacion. --?Y la tia? Emma me dijo que es una bruja. --Oli, tienes que entender algo... Tu tia era una bellisima debutante, pretendida por muchos de los solteros mas codiciados de aquel entonces. Cuando tu padre se enamoro de Fatima, eso causo un gran revuelo aqui --le respondio con cierto pesar en la voz--. Imaginate cuando se supo del nacimiento de ustedes dos... --?Nosotras arruinamos su vida? --?Que? !No! No. Jamas piense eso, amor --se apresuro a responderle--. Pero eso creo una brecha entre tu padre y ella. Kenneth jamas iba a permitir que alguien despreciara a su esposa ni a sus hijas. Menos aun una criatura caprichosa y consentida como lo era su hermana... Oli fruncio el ceno, preocupada. --Ella no va a hacer nada que pueda perjudicarte, pequena. Asi que quedate tranquila en ese sentido --le aseguro mientras entreabria la puerta para salir--. Tu padre puede estar algo delicado de salud, pero su espiritu esta intacto. Te aseguro que el aclaro todo con su hermana antes de permitir que se te acerque. --?Y por que no puedes tu seguir siendo mi carabina? --Aunque habian ido a una pocas y pequenas reuniones, Oli no habia podido conocer nada de Londres porque a las pocas semanas habian partido hacia el campo por orden del medico de su padre--. Contigo me siento cuidada. --Porque mi pedigri no es el adecuado para los eventos a los que asistiras a partir de ahora, Oli. Pero sabes que siempre voy a estar aqui para ti --logro susurrarle a traves del nudo que se le habia hecho en la garganta--. Ahora, duerme, pequena, que la dama es conocida por madrugar. Y estoy segura que cuando llegue va a querer hablar contigo. --!?Que?! --Su padre no le habia mencionado nada al respecto de eso. --Es solo para que se conozcan, Oli. Tranquila. Ten confianza. --Le ofrecio una sonrisa que esperaba fuera reconfortante--. Ahora, a dormir, pequena. --Hasta manana --susurro en respuesta, y la puerta se cerro dejandola sola con sus pensamientos y preocupaciones.

  • Hue 1968: El punto de inflexion en la guerra del Vietnam de Mark Bowden

    https://gigalibros.com/hue-1968-el-punto-de-inflexion-en-la-guerra-del-vietnam.html

    Gracias a un acceso sin precedentes a archivos de la guerra en EEUU y en Vietnam, asi como a entrevistas con participantes de ambos bandos, Bowden narra cada fase de esta crucial batalla a traves de multiples puntos de vista.

  • Como detener el tiempo de Matt Haig

    https://gigalibros.com/como-detener-el-tiempo.html

    Tom Hazard esconde un secreto: puede que parezca un hombre de unos cuarenta anos pero, debido a una rara enfermedad, lleva vivo desde hace varios siglos.
    De hecho, tiene aproximadamente cuatrocientos anos y, entre otras muchas cosas, ha actuado con Shakespeare, ha explorado el mar con el capitan Cook y ha compartido cocteles con Scott Fitzgerald.
    Tom debe cambiar a menudo de pais y de identidad para preservar su secreto. De este modo, ha sido testigo y protagonista de grandes momentos historicos. Ahora solo desea sentirse un hombre mas. Asi,
    se instala en Londres tratando de llevar una vida corriente y empieza a trabajar en un instituto como profesor de Historia, donde ensena a los ninos sobre guerras y sucesos de los que ha sido testigo de primera mano.
    Una historia de amor eterno sobre un hombre perdido en el tiempo, la mujer que podria salvarlo y las vidas necesarias para aprender a ser feliz.

  • Distintas formas de mirar el agua de Julio Llamazares

    https://gigalibros.com/distintas-formas-de-mirar-el-agua.html

  • Inocencia Sensual de Carol Marinelli

    https://gigalibros.com/inocencia-sensual.html

    El implacable multimillonario Ethan Devereux sabia que la prensa seguia todos sus movimientos y, cuando descubrio que el resultado de la asombrosa noche que habia compartido con la actriz Merida Cartwright era un embarazo, decidio moverse a toda prisa para controlar el escandalo.

  • El silencio de los goteros de Enfermera Saturada

    https://gigalibros.com/el-silencio-de-los-goteros.html

    Un libro mas vendido que el ibuprofeno.

  • Leo sobre Aries (Signos de amor 1. 5) de Anyta Sunday

    https://gigalibros.com/leo-sobre-aries-signos-de-amor-1-5.html

    Tu cabezoneria te va a complicar la semana, Leo, y hasta que no cedas, no podras descansar. Centrate en hacer concesiones y pon tu terquedad a dormir porque, si no lo haces, te esperan muchas noches en vela. ?E daba cada vez mas en el clavo? Theo cerro el mail que su madre le habia mandado y tiro el telefono sobre el edredon gris con el que habia cubierto su cuerpo desnudo. Se apoyo en el frio cabecero y observo la habitacion en la que Jamie habia crecido: esa alfombra que estaba deseando que le raspara manos y rodillas; el armario contra el que Theo se habia imaginado empujando a Jamie mientras se arrodillaba frente a el; los posteres enmarcados de LA COMA y EL APOSTROFE que Theo queria hacer vibrar contra la pared... Metio la mano bajo las mantas y acaricio su ereccion. Llevaba tres dias sin tener sexo con Jamie y estaba al borde del colapso. ?Por que se le ocurrio apostar que un Leo podia con un Aries? Y, entonces, ese Aries entro en la habitacion recien salido de la ducha, con una toalla sobre la parte baja de sus caderas. No se habia molestado en secarse, asi que gotas de agua se deslizaban desde su pelo rubio hasta su pecho. Jamie se estiro haciendo que los musculos de su estomago se contrajeran y su mano fue deslizandose hacia abajo a la vez que sus dedos jugueteaban con la fina linea de vello que se perdia bajo la toalla, muy cerca del pubis. Ahi Theo dejo de respirar. Jamie hablo en voz baja y controlada: --?Seguro que puedes con esto, Theo? Theo, al que se le estaba cayendo la baba, cerro la boca de golpe y levanto la vista reparando en la expresion divertida de Jamie. Fingiendo una sonrisa aburrida, se encogio de hombros y dijo: --Sera usted quien se rinda antes, Sr. Jamie Cooper. --Ya veremos --contesto Jamie como si nada mientras se quitaba la toalla de la cintura y empezaba a secarse el pelo y el pecho con ella. Su endurecida polla apuntando en direccion a Theo. La ereccion de Theo iba a atravesar el edredon, pero, haciendo un gran esfuerzo, la ignoro y enlazo los dedos tras la cabeza. --Si me reconoces que yo gano, te dejo que me folles como te de la gana. El calor en la mirada de Jamie envio escalofrios por su pecho, poniendole los pezones de punta y obligandole a enlazar los dedos mas fuerte para evitar pellizcarselos. Tirando la toalla al suelo, Jamie se subio a la cama y se puso sobre el, cubriendole con su peso dulce y calido. Acercandose, rozo su nariz con la de Theo y esa picara mirada gris logro que todo su cuerpo se estremeciera. Con un leve movimiento de caderas Theo hizo que sus erecciones se presionaran juntas. Se estarian tocando si no fuera por el maldito edredon. Theo reprimio un gemido y le sonrio. Jamie curvo sus labios e hizo amago de besarle. --Tentador, Leo, pero pocas cosas me apetecen mas que ver como sales de esta. Jamie se quito de encima y se tumbo en su lado de la cama, dejando a Theo ardiendo, molesto y cachondisimo. ?Poner su terquedad a dormir? ?Con Jamie provocandole tan abiertamente? Nunca. Theo dio un punetazo a la almohada, apago la lampara de su mesilla y se movio inquieto bajo las sabanas. No llevaba ni cinco minutos con la mirada perdida en la oscuridad, cuando empezo a notar leves movimientos bajo la manta. El colchon temblo y escucho como la respiracion de Jamie salia estrangulada. Joder. Este hombre iba a acabar con el. Theo se acerco mas a el, presionando la nariz contra su nuca y respirando ese olor a madera y decadente vainilla. --?Necesitas que te eche una mano? Jamie gimio y el colchon se estremecio con mas fuerza. Se puso bocarriba, acariciandose largo y lento primero y con toques cortos y rapidos despues. Theo sintio su polla palpitar. --Con mi mano me va bien, gracias. Pero tocame si quieres, si no puedes resistirte. --Si que puedo resistirme --fue la respuesta de Theo. Apenas. --Lo que veas. Jamie acelero el ritmo, gimiendo al descargar sobre la parte baja de su vientre. Se quedo ahi inmovil durante unos segundos tratando de recobrar la respiracion. Despues guino un ojo a Theo y se fue al bano. Casi inmediatamente Theo metio la mano bajo la manta y se agarro la polla. Jamie volvio con una sonrisilla de <> en la cara, se tumbo a su lado y le dio un beso en el brazo que Theo tenia bajo la manta. Eso hizo que dejara de acariciarse. --No pares, esta claro que necesitas aliviarte. Theo solto su increiblemente dura polla y volvio a poner las manos detras de la cabeza. --Que va, estoy bien. Nooooooooooooo. Jamie nego con la cabeza, a punto de reirse. --Si cambias de opinion, ya sabes. --Puedo con ello. Que alguien le disparara ya. Pues parecia que este Leo cabezota tenia una larga noche en vela por delante.

  • Pidemelo con flores de Ariadna Baker

    https://gigalibros.com/pidemelo-con-flores.html

    Rosas, claveles, orquideas, margaritas... no sabria cuales elegir, y es que todas las flores me vuelven loca desde nina. Y mi madre, como si ya hubiese intuido desde antes de yo nacer mi gusto por ellas, tuvo a bien ponerme el nombre de Azucena. Para mas inri, me apellido Ramos. Recuerdo que, siendo aun muy pequena, mi abuela me llevaba por todos esos campos de Castilla plagados de girasoles y amapolas solo por ver mi cara de satisfaccion. Mi sensacion era la de adentrarme en otro mundo; un mundo magico inventado solo para mi. Alli no me hacian falta munecas, ni amigas ni nada por el estilo para entretenerme. Con sus vivos colores, gozaba como la enana que todavia era. Creo que esa pasion la herede de ella precisamente. A mi abuela Maruja tambien le encantaban, aunque tampoco teniamos que ir muy lejos para deleitarnos con tan fascinantes obsequios de la naturaleza. Ese ser tan entranable siempre tenia el suelo del patio de su casa lleno de tiestos con hortensias y geranios. Daba gloria ver tambien las buganvillas rosas y violetas en los macetones, trepando en verano por los enrejados buscando el sol; un hechizante espectaculo multicolor y un embriagador abanico de aromas procedentes de la lavanda y la dama de noche, esta ultima, una de sus flores preferidas. Cuanto daria por volver a verla con la regadera en mano y hurgando con sus dedos entre la tierra de las macetas para trasplantarlas. O podando con las tijeras los rosales del jardin trasero de aquella coqueta casita. Por desgracia, todo eso queda ya tan solo en mi memoria y en un sinfin de fotos que conservo como oro en pano. Contemplandolas, me parece estar oyendola aun. --Mira, Azu --asi solia llamarme carinosamente--, ya van a empezar a abrirse los capullitos de esos claveles. --Me los senalaba con el dedo. --Que bonitos. Van a ser blancos, yaya. --Ummm --negaba con la cabeza--. No, creo que estos van a ser rojos. Yo la miraba incredula, examinando el blanco de las puntas de esos petalos que comenzaban a asomarse. --Que no, yaya, que estos son blancos, mira. Los tomaba entre mis dedos para hacerle ver que era yo quien tenia la razon. Cualquiera me la quita cuando la tengo... --Bueno, ya veras que te estas equivocando --me contestaba con gesto burlon aprovechando mi inocencia. Me contradecia tan solo para picarme. --Te digo yo que seran rojos. O rosas... Asi estabamos siempre. La echo muchisimo de menos. Mi abuela, con ese carisma que tenia, era un personaje al que no solo queria una; la adoraba todo el mundo en el pueblo. Fallecio el dia antes de yo cumplir los quince anos y, ademas, de repente. Sin estar enferma ni nada que se le parezca, el de ahi arriba hizo la "gracia" de pararle su corazoncito una soleada manana de sabado de aquel mes de abril, cuando la pobre mujer se encontraba enfrascada en sus labores de jardineria, para no variar. El mio tambien se detuvo por unos instantes al enterarme de tan fatidica noticia y todavia no me he recuperado por completo de aquel mazazo. Algo se quebro dentro de mi para siempre con su partida, pero ese dia, en mi dolor, me jure que mantendria vivo su legado; que esas maravillosas flores que adornaban su casa no se marchitarian mientras yo pudiese evitarlo. Lo hice durante un tiempo, pero claro... nada dura eternamente. Mi madre y mi tia Carmen decidieron vender aquella casa en que fui tan feliz durante mi infancia aprendiendo el oficio. En nuestro pequeno pueblo segoviano no seria tarea facil encontrar un comprador, pero la casualidad quiso que, al cabo de seis meses, un matrimonio que se encontraba de paso por alli posase sus ojos en el letrero de "Se vende". Y estoy segura de que las flores, todavia en todo su esplendor gracias a mis mimos, jugaron un buen papel en ello. El dia de la entrega de llaves llore lo indecible, a sabiendas de que nunca mas podria poner mis pies alli. No podia imaginarme todo aquello en manos extranas. Me apenaba sobremanera pensar que esos increibles colores se apagaran por dejadez o cualquier otro motivo. --Hija, no tenia sentido mantenerla. Una casa vacia lo unico que hace es deteriorarse. --Mi madre trataba de consolarme. --Lo se, mama, pero no te haces una idea de la pena que me da. Esas personas solo la quieren para vacaciones, asi que las plantas se van a morir en un suspiro. No voy a poder pasar nunca mas por delante de la cancela porque me va a dar algo si miro para dentro. La casa de mi abuela quedaba bastante retirada de la nuestra, casi saliendo del pueblo ya, por lo que podria evitarme semejante sofocon si queria. Sin embargo, me estaba equivocando de medio a medio. La familia en cuestion vivia en Segovia capital y, tras la compra, comenzo a ir por alli todos los fines de semana. Rosalia, la nueva propietaria, parecia compartir el mismo gusto de mi abuela y mio por las flores, y es que no solo las cuidaba con esmero, sino que se dedico a plantar un sinfin de ellas mas, cosa que podia verse a traves de los barrotes. Yo la espiaba a escondidas y en cierto modo me sentia aliviada viendo que nada de aquello se habia perdido. Al reves. El patio lucia como nunca, como si el espiritu de mi abuela estuviese tambien constantemente en guardia velando por el. Justo por aquellos dias comence a salir con Javier, un chico del pueblo al que conocia desde la ninez. El mismo colegio y el mismo instituto nos vieron crecer dia a dia. Javier era hijo del farmaceutico, lo digo asi sin mas senas porque en nuestro pueblo todo se contaba por unidades; una farmacia, un supermercado, una panaderia, una carpinteria... Lo unico que faltaba por aquellos lares era una floristeria, y aunque la idea de poner mi propio negocio de flores era un sueno que siempre me rondo la mente, fue el quien mas me animo a materializarlo. --Carino, no hay nada que te haga mas feliz en este mundo. Estaria genial que te dedicases a eso porque lo de trabajar en lo que a uno verdaderamente le gusta no tiene precio --me dijo.

  • Lo que el jeque quiere de Alex Anders

    https://gigalibros.com/lo-que-el-jeque-quiere.html

    “LO QUE EL JEQUE QUIERE” es la ultima publicacion del autor superventas internacional Alex Anders y es para aquellos a quienes les encantan las pequenas historias de amor en las que virgenes inocentes son corrompidas por poderosos machos alfa que exigen sumision y que disfrutan del BDSM.

  • Tu tambien puedes tener un cuerpo como el mio de Alexandra Kleeman

    https://gigalibros.com/tu-tambien-puedes-tener-un-cuerpo-como-el-mio.html

    La singular primera novela de Alexandra Kleeman es un cruce sorprendente y a ratos inquietante entre La subasta del lote 49 de Thomas Pynchon y Ruido blanco de Don DeLillo.

  • La escuela de musica de Pablo Montoya

    https://gigalibros.com/la-escuela-de-musica.html

    La nueva novela de Pablo Montoya sobre una escuela de musica en Tunja en los anos ochenta.

  • El Alcalde y la Activista de Laura Benet

    https://gigalibros.com/el-alcalde-y-la-activista.html

    Cristina aparco su coche frente al lujoso hotel donde tendria la reunion. Habia llegado el momento. A sus veinticinco anos, era la presidenta de Ecomovie, una asociacion dedicada a la defensa del medio ambiente, y por fin habia conseguido una audiencia con el alcalde. Ese hombre debia entender que no podia jugar con la salud de las personas. Que no podia permitir que se construyera esa urbanizacion. La vida salvaje tambien era importante. Sonrio. Lo conseguiria. Sabia ser convincente. -Debe de ser por aqui -murmuro mirando a su alrededor. De estatura media y morena, Cristina era guapa, pero destacaba sobre todo por sus llamativos ojos azules y su personalidad arrolladora. Su mayor atractivo era su valentia y su decision. Su cita era a las doce y faltaban cinco minutos. Perfecto. No llegaria ni pronto ni tarde. Solo le faltaba encontrar la sala donde la recibiria el alcalde. La Sala 3. Un letrero senalaba la ubicacion de dicha sala, y Cristina se dirigio hacia alli. -!Cristina! -una voz conocida la llamo desde unos metros atras. -!Carlos! -exclamo Cristina sonriendo. Vaya. !Que casualidad! Cristina conocio a Carlos en una boda. En realidad, en una boda doble. Andrea y Teresa, sus mejores amigas, se casaron con Alberto y Daniel, dos amigos de Carlos. Durante el banquete que siguio a la ceremonia, alguien, no recordaba quien, se lo presento. Y a ella le parecio superatractivo. Alto, rubio y con la cara cuadrada, no solo la dejo impactada, sino que lo paso realmente bien con el. Carlos y ella estuvieron flirteando durante toda la noche. Bailaron, rieron, pero no llegaron a nada. Carlos le gustaba y esperaba que la llamara, pero todavia no lo habia hecho y ella estaba algo mosqueada. -Justo estaba pensando en llamarte -dijo Carlos cogiendole las manos y mirandola a los ojos. Se mostraba tan contento de verla, que Cristina lo perdono enseguida. -Estas guapisima -dijo el haciendola girar sobre si misma-. ?Que haces por aqui? -Una reunion con un pez gordo -contesto ella evasiva. No le gustaba dar datos sobre sus actividades-. Un tio desagradable de verdad -fruncio el ceno. -!Pobrecita! ?Como de desagradable? -pregunto el solidario. -Seguro que tiene sobrepeso y una papada descomunal -Cristina sonrio de su imaginativa descripcion-. ?Y tu? -Una reunion tambien, pero la mia es aun peor -Carlos bajo la cabeza-. Es con una tocapelotas. Una senora que se ha pasado las ultimas semanas fastidiando de todas las formas que se le ocurrian. Supongo que no tendra sobrepeso – Carlos suspiro con paciencia-. Pero si lo tuviera, puede que no estuviera tan amargada y que no les amargara la vida a los demas. Se miraron a los ojos y ambos sonrieron con simpatia. Cada uno compadeciendose del otro. -?Nos tomamos un cafe en cuanto nos libremos de ellos? -pregunto Carlos mientras se dirigian juntos hacia las salas de reuniones. -Vale -contesto ella-. Supongo que ese tio me echara en media hora o asi. -Pues yo creo que tambien podre librarme de la mia mas o menos en ese tiempo. Quedamos en la cafeteria despues. -De acuerdo -sonrio ella. Casi habia llegado a su destino. -?A que sala vas? -pregunto el. -A la tres. ?Y tu? Carlos paro en seco y miro los papeles que llevaba en la carpeta. Leyo algo, incredulo, y luego fijo la vista en Cristina con los ojos muy abiertos. -!Eres la activista! -acuso-. Cristina Bartual, ?verdad? !Me has tomado el pelo! -?De que me hablas? -pregunto Cristina sorprendida. -Tienes una reunion con el alcalde, ?no es cierto? Cristina afirmo con la cabeza. ?Como lo sabia? Y ademas, ?que le pasaba? Estaba muy raro. -?Lo conoces? -pregunto Carlos al cabo de unos instantes, que a Cristina se le hicieron eternos. -No -contesto ella-. No lo he visto nunca en persona. No tengo ningun interes en conocer a ese tipo de gente -explico muy ufana-. Son unos explotadores. Hablare con el, intentare convencerle de algo que es mas que evidente que debe hacerse, y luego espero no volver a verlo nunca. ?Por que lo preguntas? -Soy yo. Carlos Fuenlabrada soy yo. Cristina se quedo traspuesta unos segundos. Eso no podia ser verdad. ?Carlos el alcalde? El majisimo Carlos, tan agradable y educado, no podia ser ese tipo egoista y marrullero que habia concedido la licencia para la construccion del bodrio. Imposible. Ademas, el alcalde no podia estar tan bueno. El alcalde tenia que ser gordo. Y feo. Por las cosas que hacia. Carlos la miraba con el ceno fruncido. -!Me tomas el pelo! -exclamo ella. -Hablo en serio. Mira -dijo el mostrandole los datos de la reunion a la que ambos tenian que acudir. Cristina estaba viviendo una pesadilla. Nunca se le habria pasado por la cabeza que, el Carlos alcalde, fuera tambien el atractivo Carlos que tenia frente a ella. -Preparate -dijo finalmente, sobreponiendose a su incomodidad, y entrando decidida en la Sala 3-, porque esa tocapelotas enjuta y amargada va a hacer honor a su nombre. -Bien -contesto Carlos entrando tras ella-, porque el gordo de la papada no va a dejarse amedrentar. * * * La reunion estaba siendo un desastre. Cristina no podia convencerlo de nada, Carlos no daba su brazo a torcer en ninguno de los puntos que trataban, y ninguno de los dos cedia. -!No quieres entenderlo! -exclamo Cristina. -Eres tu la que se empena en no aceptar las ventajas de una gran urbanizacion. La gente podra comprar su primera vivienda con mas facilidad. -?Y que pasa con el medio ambiente? ?No te das cuenta de la repercusion ecologica? -pregunto Cristina desesperada- Eso sera un desastre. -Hemos calibrado las ventajas y los inconvenientes -dijo Carlos sin inmutarse. -Esa zona incluye un humedal. Muchas aves anidan ahi. Pero Carlos se empenaba en no entenderlo. Durante mas de media hora estuvieron calibrando fuerzas. Se levantaban, volvian a sentarse, amenazaban, razonaban,… y seguian discutiendo. Pero naturalmente, la autoridad jugaba con ventaja y Cristina se fue con las manos vacias. Salio tal y como habia entrado, pero con un sentimiento de rabia y frustracion anadido. -!Olvidate del cafe! -dijo Cristina cuando salio. Tuvo que esforzarse en no cerrar de un portazo- Y hasta nunca. !Ojala que no se hubiera enterado de que Carlos, el Carlos que ella conocia, era tambien el alcalde! Aun le costaba creerlo. Carlos, el simpatico y encantador Carlos, seria el responsable del deterioro de una zona paradisiaca. Esa urbanizacion acabaria con la vida animal de la zona. Total para que unos cuantos urbanitas, que no tenian ni idea de las consecuencias, pudieran comprar sus casas algo mas baratas. Subio al coche enfadada y se dirigio hacia el emplazamiento donde pretendian construir el bodrio. Alli habia quedado con los demas activistas y socios de Ecomovie. -Manana empieza la movida -dijo como saludo. -?Como ha ido? -pregunto Alejandro, uno de los manifestantes-. !Ah! – exclamo al mirar su cara con atencion- Parece que no muy bien. Alejandro era un joven arquitecto muy vinculado a las asociaciones en defensa de la naturaleza. Alto, rubio y en buena forma fisica, era muy atractivo, y Cristina sabia que ella le gustaba. Pero a ella no le gustaba el. Le faltaba garra y era demasiado predecible. Aunque era un buen tipo y un buen amigo. Podia confiar en Alejandro. No como en otros. -Pues no, no ha ido bien. Habra que movilizarse. Todos prometieron acudir al dia siguiente. No eran muchos, pero tenian que impedir la tala de dos alcornoques. Eran muy antiguos y merecian un respeto, pero los constructores querian cortarlos para meter las excavadoras. -Nosotros vendremos a las ocho -dijo Alejandro. -Supongo que empezaran a las nueve -contesto Cristina-, pero saben que estaremos aqui, asi que nunca se sabe. -No saldra bien -dijo Alejandro con tristeza-. Lo intentaremos, pero no saldra bien. No era el momento de hundirse, y Alejandro era demasiado pesimista. -Yo seguire intentando parar esto de la forma habitual -hizo una pausa-. Pegando la paliza -sonrio-. Pero no conseguire nada. El alcalde es demasiado cazurro. Lo que si espero es tocarle las narices lo bastante como para que nos haga caso a la larga. Al final, ganaremos. -?Y que pasara con los alcornoques? -pregunto Alejandro. -De los alcornoques te puedes despedir. No llegaremos a tiempo. * * * Cristina se dirigio preocupada hacia el pueblo cercano. No habia comido en todo el dia y necesitaba nutrirse. ?Donde podria encontrar fruta fresca? Porque no le servia cualquier comida. Cristina era vegana. No comia ni animales ni sus derivados. Y no siempre le resultaba facil encontrar alimentos adecuados y nutritivos fuera de casa. Por suerte, pronto encontro una fruteria y pudo comprar la cena y el desayuno del dia siguiente. Ya mas tranquila, se dirigio hacia su hotel. Mejor dicho, hacia el que habia sido su hotel hasta ese dia. Porque ya no podria quedarse alli, pero tenia que recoger su maleta

  • Pizzeria Vesubio de Walter Riso

    https://gigalibros.com/pizzeria-vesubio.html

    Receta para una novela inolvidable

  • La perla de John Steinbeck

    https://gigalibros.com/la-perla.html

    Cuando la noticia del gran hallazgo de Kino –la “Perla del Mundo”– se esparcio por el pueblo, nadie imagino el poder que esta tendria para enganar, corromper y destruir.

  • La Reina de Macarena Moya Solis

    https://gigalibros.com/la-reina.html

    Ailith sera la soberana absoluta de los reinos de su padre. Empenada en demostrar que es tan capaz como un hombre, se convierte en una gran guerrera experta en espada, arco y flecha, defensa, decidida a demostrar que no necesita ser un hombre para gobernar y proteger a su reino. En sus andanzas nocturnas para proteger a su pueblo, Ailith conoce a Lamorack, un hombre sin hogar, sin rumbo aparente, que es mas de lo que desea mostrar. Pero una reina debe hacer lo que es mejor para su pueblo y un simple hombre no esta en el futuro de Tremarand. Ailith debe decidir con la cabeza, dejando de lado su enamorado corazon. ?Podra mantenerse fiel a su pueblo o sucumbira ante el amor de este misterioso hombre? Acompana a La Reina en sus batallas, enfrentandose a brujas, fieros guerreros en sangrientas batallas, acompanada siempre de los hombres que la han amado.

  • Las ansias carnivoras de la nada de Alejandro Jodorowsky

    https://gigalibros.com/las-ansias-carnivoras-de-la-nada.html

    <> Alejandro Jodorowsky

  • El submayordomo Minor de Patrick Dewitt

    https://gigalibros.com/el-submayordomo-minor.html

    Lucy Minor, un joven que esta dejando atras la adolescencia y adentrandose en el mundo adulto, se marcha del pueblo entre montanas del que no ha salido jamas. Lo hace despues de sufrir un desengano amoroso y constatar que en ese lugar en el que abundan los rudos gigantones sera siempre un marginado. Lleva en el bolsillo una carta con una oferta de trabajo: un puesto de ayudante de mayordomo en el castillo Von Aux.

  • Tenerte nunca es suficiente (Para toda la eternidad 4) de E. L. Todd

    https://gigalibros.com/tenerte-nunca-es-suficiente-para-toda-la-eternidad-4.html

    Mientras Cayson se debate intentando tomar una decision sobre la Facultad de Medicina, se percata del extrano comportamiento de Slade. Parece que nunca esta donde asegura encontrarse y esta claro que le esta ocultando algo a todo el mundo. Cayson esta convencido de que tiene novia y se siente mas dolido cuanto mas lo niega Slade. ?Por que no le estara contando la verdad? Decide investigar mas el asunto y descubre algo que nunca habria creido posible... especialmente de Slade.

  • Quiza lo quiso el destino de Jorge Zaton Perez

    https://gigalibros.com/quiza-lo-quiso-el-destino.html

    Tras un ultimo ano en el que pierde a sus padres, su novia lo abandona y ve la relacion con su hermano seriamente danada, Berto se reencuentra con Lisa, un antiguo amor de la infancia. Con miedo y muchas dudas, no tarda en renacer en ellos su amor olvidado, aunque su relacion no es precisamente un camino de rosas. En Quiza lo quiso el destino vemos lo mas bello y lo mas amargo del amor, en una mezcla de sentimientos que cautivaran al lector.

  • Liebres de Sonora de Rafael R. Costa

    https://gigalibros.com/liebres-de-sonora.html

  • En algun lugar de venecia de Federico Basteri

    https://gigalibros.com/en-algun-lugar-de-venecia.html

    Martin regresa a la ciudad de Venecia despues de diez anos en busca de una mujer cuya fotografia tomo sin conocer nada de ella.
    Aferrado a tan solo una ilusion y una idea, emprendera un viaje marcado por su pasion por las mujeres, su devocion a sus ideales de romance y su creencia en un amor puro.
    Pero durante su estadia en la mitica Ciudad de los Canales, se vera enfrentado a los crudos recuerdos de su primera visita y cuestionara sus propias convicciones.
    ?Encontrara Martin lo que busca? ?Sera la mujer de la foto todo lo que el busca?

  • Por fin es viernes de Javier Romero

    https://gigalibros.com/por-fin-es-viernes.html

    INSPIRADA EN HECHOS REALES. Si ayudo a una sola persona a tener esperanza, no habre vivido en vano (Martin Luther King).Esperanza. Una simple palabra que define esta preciosa y entranable historia de amor en la que Pedro, a pesar de su aspecto, luchara por hallar aquello que mas anora. Un hombre roto y desmadejado, como un muneco de trapo, que encontrara en Sara la razon para seguir viviendo; la unica razon.Una fabula, la busqueda de una quimera, pero, por encima de todo, una leccion inspirada en hechos reales que ensena el bien mas preciado y que, en ocasiones, dejamos morir en el intento: la esperanza es lo ultimo que se pierde.

  • Un “te quiero” por Navidad de Christian Martins

    https://gigalibros.com/un-8220-te-quiero-8221-por-navidad.html

    La carrera literaria de la joven Gabrielle no va demasiado bien y, decidida a dejar ese bache atras y desbloquearse, aceptara escribir un relato con la historia de Logan; un chico que ha viajado muchisimos kilometros para reconquistar al amor de su vida por segunda vez. Logan esta dispuesto a recorrer Nueva York de punta a punta hasta dar con su chica, y Gabrielle le acompanara en esa aventura.
    ?Conseguira Logan encontrar a la mujer de la que esta enamorado? ?Reconquistarla?
    ?Que descubrira Gabrielle durante la busqueda?

  • Lanzado al vacio de A.a Espigares-sanchez

    https://gigalibros.com/lanzado-al-vacio.html

    “El ano es 2048.
    En una peninsula iberica arruinada e incomunicada del resto de Europa por un infranqueable muro, un hombre despierta una manana de invierno sin el mas minimo recuerdo de su pasado en la memoria. Como unica respuesta tiene una escueta nota: por sus crimenes pasados ha sido expulsado de las Islas Baleares, alli donde las personalidades espanolas mas poderosas se refugiaron cuando la Peninsula colapso. Este hombre sin nombre ha sido condenado de por vida a vagar por un territorio enfermo de pobreza, violencia y odio. Pero no esta solo; alguien de su pasado olvidado parece dispuesto a sacarle de alli a cualquier precio, aunque no es una tarea sencilla.”

  • Vacaciones en los Hamptons de Sarah Morgan

    https://gigalibros.com/vacaciones-en-los-hamptons.html

    ?La escapada veraniega perfecta?

  • El jardin de Pepa Fraile Colorado

    https://gigalibros.com/el-jardin.html

    Susana, amiga de la infancia de Inaki, intenta convencer a este para que se anime a acompanarla a una salida que el grupo de amigos de la infancia tiene prevista para los proximos dias. El acaba de regresar a su ciudad despues de unos meses en los que ha necesitado permanecer solo y lejos de todo lo que le recordara a ella, a su mujer, fallecida poco tiempo atras. Su recuerdo, el duelo en el que permanece y su anclaje en el pasado no le permitiran ver los verdaderos sentimientos que Susana ha sentido siempre por el, hasta que un encuentro, tan inesperado como agridulce, pondra de manifiesto la verdad que Susana guardaba solo para ella.

  • Guardame el secreto de Carol Martin

    https://gigalibros.com/guardame-el-secreto.html

    Yo, lo unico que tenia que hacer, era cubrirle las espaldas a mi mejor amiga. No necesitaba en mi vida mas complicaciones pero, muy a mi pesar, accedi a ayudarla para que enganara a su pareja, quien, ademas, era mi empleado.
    Nunca podria haberme imaginado que ese hombre llegaria a convertirse en alguien mas para mi y que, ahora, quienes teniamos que guardar un secreto, eramos nosotros.

  • Chispas de Luis Goytisolo

    https://gigalibros.com/chispas.html

    La sonrisa del carrolliano gato de Cheshire sirve de portico a este libro, que contempla sin piedad -y con un humor de lo mas singular- la generalizada estulticia del mundo actual, retratado en forma de vinetas que escrutan comportamientos, actitudes y conversaciones. Por estas paginas desfilan los moviles que acaparan toda la atencion, las hirsutas barbas hipsters y la moda de la depilacion corporal; los botellones y las raves; la dictadura de lo digital, de las dietas y de lo politicamente correcto; los libros de autoayuda y la pretenciosidad artistica. Y tambien situaciones disparatadas como las de un par de menages a trois que toman derivas imprevistas, la incansable actitud fisgona de un quisquilloso detective de hotel, la aficion de Joyce por la escatologia.

  • Anatomia del fascismo de Robert O. Paxton

    https://gigalibros.com/anatomia-del-fascismo.html

    Robert Owen Paxton (1932) es un politologo e historiador estadounidense especializado en la Francia de Vichy, el fascismo y Europa durante la epoca de la Segunda Guerra Mundial. Ha sido profesor en la Universidad de California, Berkeley y en la Universidad Estatal de Nueva York en Stony Brook antes de unirse a la facultad de la Universidad de Columbia en 1969. Trabajo alli durante el resto de su carrera, retirandose en 1997. Sigue siendo profesor emeritus. Ha contribuido con mas de veinte revisiones a The New York Review of Books, desde 1978 hasta 2017.

  • Todo empieza en ti de Vik Ria

    https://gigalibros.com/todo-empieza-en-ti.html

    Empezare explicando quien soy y porque he querido escribir este libro que ahora esta entre tus manos y estas a punto de leer. Mi nombre es Victoria, y escribi estas hojas con la intencion de poder ayudar a aquellas personas que, como yo en su dia, necesitan ese empujon para realizar un salto, un cambio vital y necesario hacia su propia felicidad o hacia aquello que pueda aportar luz a sus vidas. Aqui narro parte de mi historia, un relato que empieza en mi pasado para llegar hasta el mas presente de mis dias, contando todo lo que he tenido que vivir, sufrir y modificar, para que hoy pueda estar sonriendo y disfrutando de la vida como nunca, intentando ser feliz a cada instante. Este libro no es ningun manual de autoayuda donde poder encontrar soluciones o trucos para la vida, es mas una historia real, donde una persona de carne y hueso como podrias serlo tu, lucha por afrontar muchos de sus miedos e intenta perseguir algunos de sus suenos saliendo de un bucle de infelicidad en el que parecia haberse instalado eternamente. Entre las lineas de este libro cuento una bonita historia de amor, la mia. Un relato en el que intento explicar como vivia atrapada en una relacion que no me hacia feliz, un tiempo pasado donde a pesar de no sonreir los miedos no me dejaban escapar, manteniendome paralizada. Pero un dia todo empezaria a cambiar, un tiempo en el que lucharia por recuperar de nuevo mi sonrisa, una realidad en la que una persona lo desencadenaria todo… Poco a poco me ireis conociendo, partiendo de un pasado infeliz hasta el salto que decidi realizar, pasando por diferentes epocas de mi vida, en las que complejos, miedos, inseguridades, pequenos logros y hasta un gran amor que aparecio sin avisar, hilaron nuevos caminos que cambiarian por completo mi destino.... Esa luz y ese empujon que necesitaba llegaria un dia en forma de persona, un 9 de marzo del ano 2016, mas concretamente, a las puertas de mi oficina… Aqui comienza una historia basada en hechos reales, que trata de emociones, sentimientos, miedos, ilusiones y grandes cambios que tejeran el presente que siempre habia sonado.... *Todas las conversaciones que aparecen, son reales. Por ello, podreis encontrar faltas de ortografia o abreviaturas gramaticales ya que han sido sacadas de los historiales. El pasado "Al que juzgue mi camino, le presto mis zapatos"-Anonimo Muchas veces nos juzgan sin ni siquiera conocer el camino que nos ha tocado recorrer, a mi me ha sucedido en varias ocasiones como seguramente te haya podido ocurrir tambien a ti. Hubo un tiempo en el que pense que quizas lo que estaba viviendo era lo que me tocaba, sin importar si eso realmente me hacia feliz. Decidi incluso tirar la toalla, convenciendome de que todo aquello que no me aportaba nada era lo que realmente merecia, aunque tuviera tan solo veintitres anos. Pensar asi era realmente el unico error que cometia, pues aquellos momentos eran los mejores para comenzar a sentir la vida. El conformarse no era mi unico error, tambien lo era sentirse pequena o vencida cuando tienes toda la vida por delante o incluso pensar que se nos pasa el arroz y siendo igual las circunstancias en que puedas encontrarte, seria una memez sentirse minusculo o rendido, siempre hay opcion para encontrar la felicidad, lo unico que hay que saber es como hacer para que esta aparezca en nuestras vidas. Recuerdo cuando pude darme cuenta de ello, fue exactamente el momento en que mi cabeza solo me decia que debia conformarme con esa vida que estaba llevando, desde hacia anos. Algo dentro de mi me pedia a gritos que hiciera algo, que dejara de utilizar tanto la cabeza, que me diera cuenta de lo que mis ojos podian llegar a ver, si me empenaba en ello, fuera de aquella realidad. Siempre observaba gente feliz a mi alrededor, regalando sonrisas sin necesidad de forzarlas, momentos en que algo de envidia me invadia haciendome formular la misma pregunta, ?Por que yo nunca conseguia disfrutar de ese estado como lo hacian ellos? Tras cansarme de hacerme siempre esa pregunta, sin conseguir ninguna respuesta, decidi que llegaba el momento de realizar algun cambio, de dar ese "salto" que necesitaba para hacer que todo lo que un dia crei perdido, volviese a mi presente para siempre. Las cosas se aceptan, se cambian o se dejan Ese cambio que yo llamo tomar una decision o dar un salto, es esa accion que hace que te lances por cambiar y mejorar tu vida, cuando ya te has cansado de lamentarte o de seguir llorando buscando mejorar, luchando por hacerte mas fuerte de lo que pensabas y seguir adelante como deberiamos hacer siempre. Al principio tuve mucho miedo, sobre todo al llamado "que diran", y a poder ser juzgada por todo el mundo, algo inevitable cuando decidimos tomar una decision que afectara tambien a la vida de terceras personas. Ese miedo, ahora despues de haber pasado por todo aquello, puedo asegurar que desaparece de repente cuando llega el momento en que te decides a dar el salto, instante en el que te das cuenta de como realmente esos miedos los creamos nosotros mismos y son unicamente obstaculos que nos impiden llegar a nuestros objetivos o suenos. Limitaciones que solo existen en nuestra imaginacion, obstaculos que siempre dependieron de nosotros mismos y que siempre pudimos hacer desaparecer, simplemente, afrontandolos. Pude darme cuenta de que realmente lo unico que hacia que me conformara con la vida que tenia y tambien con el hecho de ser una infeliz, era yo misma. Sabia perfectamente muchos de los cambios que debia realizar y como tenia que hacerlo para poder sonreir de nuevo y empezar a vivir esa vida que tanto ansiaba. Pero a pesar de ser consciente de que estaba en mis manos conseguirlo, nunca era capaz de dar el mas minimo de los pasos que me ayudasen a volver a sonreir, por miedo. Siempre me sucedia lo mismo, barreras y obstaculos venian a mi como cubos de agua fria cada vez que me decidia a tomar una decision o dar un paso, y eran estos mismos los que hacian que me volviera para atras y regresara a esa zona que podria llamar “mi zona de confort”, donde seguia infeliz, pero tranquila porque todo era lineal, sin cambios y por ello tambien sin mas o distintos problemas. Es complicado salir de algo, y mas cuando llevas muchisimos anos metido en ello, pero una vez te decides a hacerlo y das un primer paso, te das cuenta de que jamas fue complicado. Antes de decidirme a cambiar mi forma de ver las cosas, de dar el paso, avanzar y seguir adelante, tuve miedo. Me cree una barrera en mi cabeza, obstaculos que no existian y temia realizar cambios radicales, debido al temor al "que diran" y a todos aquellos danos colaterales que aparecian despues o a todo cuanto dejaba atras... Una cosa que no tenia clara en esos momentos, pero que a dia de hoy puedo decir que es de lo primero que pude darme cuenta, es que no puedes ganar sin antes haber perdido. Y aunque me llevaria aun tiempo comenzar a caminar por esa nueva "yo" que parecia querer nacer, una frase me ayudaria a recordar que…. "Todo lo nuevo y bueno en la vida, nace de un salto al vacio" Alan Moore Comprendia que ese pensamiento en forma de remordimiento que nos corroe por dentro cuando pensamos en lo que podemos perder, no nos deja ver tampoco todo lo que podemos ganar despues, todo aquello que puede llegar a nuestras vidas sin tener que buscarlo y esa felicidad que al final nos invadira tras salir de algo que no nos aportaba nada. Muchas veces nos conformamos en una vida infeliz o sinsentido por ese tipo de educacion que hemos recibido o el estilo de vida que hemos llevado. Seguramente como a mi me ha sucedido, te has criado entre la sociedad que cree que cuando llevas toda la vida con alguien, seria un pecado mortal pensar en separarte por sentirte infeliz. Esta sociedad quiere que pienses que tener hijos, comprarte una casa o pasar por el altar sera lo que al final arregle esa infelicidad, un sistema que parece decirte y saber lo que se necesita en esta vida para sonreir. Pero, ?Por que hacerlo? ?Acaso no es mas importante luchar por nuestra propia felicidad, que por esa que parece dictarnos la sociedad? Por fortuna en mi realidad, contaba con unos padres que siempre valoraron mi libertad. Nunca me exigieron que estudiara una carrera, o que me casara o tuviera hijos, lo unico que siempre priorizaron fue que escogiera todo lo que me pudiera hacer feliz, y seguramente mucha de la historia que ahora os cuento les deba muchas cosas buenas a ellos. Y esa seria mi solucion precisamente, buscar todo aquello que me aportara felicidad o me hiciera sentir viva, comenzando por buscarlo en personas, trabajos, estudios o incluso aventuras en nuevos paises. El problema de ir probando, es que no encontraba la verdadera felicidad, ya que habia buscado por todas partes menos en un lugar, el mas importante de todos, en mi misma.

  • Cuando Sonries de Erica Vera

    https://gigalibros.com/cuando-sonries.html

    Buenos Aires. 2016. —Uh. Me olvide de contarte. Hoy te llamo tu madrina —dijo Jimena mientras terminaba de secar el plato que le alcanzaba Damaris—. Atendi porque no dejaba de sonar y pense que era importante, perdon. —Esta bien. Vi la llamada. Me escribio tambien. —?Y? —Nada. No le he dicho nada. —!?Por que?! Deberian saber lo que paso. —No. Y no me vas a convencer. —Creo que deberias contarles, Dami. —Le acaricio la mano en el intercambio de vajilla y le sonrio con dulzura. Aun pese a los dias que habian pasado y los antiinflamatorios que habia tomado, seguia llevando la marca de la mano de su marido en el rostro. —No creo que sea buena idea. Podria llegar a provocar una tragedia. No. —No estas sola, amiga. —Lo se. !Gracias! —Entonces… —Entonces… cuando me recupere, analizare que hacer. Yo no quiero volver y ser una carga para nadie, Jimena. No quiero que se compadezcan de mi. Ya tu sabes. —Si… pero alla esta tu mama, tu familia. Creo que… —Lo se. No creas que no pienso en ellos. —?Y entonces? —Entonces, nada. Por ahora no pienso volver y es decision tomada. —Te vas a arrepentir y lo sabes. Jimena y Damaris se acostaron a dormir sin hablar demasiado. La noche caia sobre el departamento que compartian en la capital portena desde hacia unas semanas. Sin embargo, una de las dos no podia conciliar el sueno. Como cada vez que hablaban sobre su tierra, todo volvia a comenzar. Los recuerdos regresaban como disparos que dolian como el primer dia. Todo lo que habia vivido en Republica Dominicana afectaba sus dias en el presente y estaba segura de que afectarian su futuro para siempre. Se acaricio la cicatriz del labio que, de a poco, iba sanando y se rebullo en la cama. Al cabo de unos minutos de pestanear en la negrura de la habitacion, se sento y tomo el celular para releer el mensaje de su madrina Margarita: Margarita: Mi nina, la casa no es la misma sin usted. Su madre la extrana, la necesita… igual o mas que yo. Vengase, aunque sea de visita. ?Estaba bien lo que hacia? ?Era correcto condenar a toda su familia por culpa de los recuerdos? ?Debia alejarse de sus seres queridos para olvidar? Cerro los mensajes y googleo el precio de los pasajes. Conocia de memoria los montos exactos y cada tanto controlaba si habia habido alguna variacion. Sabia, tambien, cuando y en que fecha serian mas economicos. Enseguida ingreso un dia cualquiera de agosto y encontro lo que ya sospechaba. Caro, muy caro. Aunque quisiera volver, no podria. Jimena desayunaba sobre la pequena mesita de la cocina: dos tostadas y un cafe con leche. Damaris se levanto cuando escucho la puerta cerrarse. No deseaba cruzarse con la mirada punzante de su amiga; sabia que podia ser insistente cuando queria. Desde que ella habia llegado con las marcas de su marido en el rostro, Jimena intentaba convencerla de que se marchara a su tierra, aunque mas no fuese de vacaciones. Insistia en que debia alejarse de Tom, de sus malos tratos y del infierno en que se habia convertido su matrimonio. Con las pantuflas puestas y la bata suelta en el cuerpo, camino hasta la cocina y puso la pava. Sonrio. Jimena, siendo argentina, no tomaba mate. Ella, dominicana, amaba con pasion aquel <> del que se enamoro apenas llego. Coloco la yerba en el recipiente, lo giro dejando la boca sobre su palma, y lo batio unos segundos. Le agrego un poco de azucar e inserto la bombilla tal y como habia aprendido a hacer. Se sento con los pies estirados y contemplo el edificio que le tapaba el sol. Odiaba vivir rodeada de cemento y ruido. Si algo extranaba de su pueblo era el silencio y la naturaleza. Ultimamente, los dias se hacian cada vez mas pesados porque las imagenes de su casa, del mar y de su familia la sorprendian a cada momento. Jimena tenia razon. Debia volver. Debia llenarse el alma de carino, de abrazos y sobre todo de amor… del bueno, del sano. La tarde la encontro en la misma posicion y la sorprendio el horario. Debia alistarse para ir a trabajar. Habia aprendido a viajar en subte y a hacer las combinaciones necesarias para ahorrarse dinero y tiempo. Al principio le habia costado; todo era nuevo para ella. Sin embargo, su curiosidad y, mas que nada, la necesidad la instaron a moverse por la ciudad como si fuera una portena mas. —Hola, ?Como estan? —saludo con una sonrisa enorme; la misma que siempre llevaba clavada en el rostro. A nadie se le ocurriria pensar que sufria, que su alma dolia y mucho. Eran pocos los que sabian la verdad y la razon sobre su labio partido y el moreton que su nariz aun cargaba. —!Damaris! !Por fin! —Walter se acerco y la abrazo con fuerza—. No se te ocurra dejarme otra vez con estas bichas. ?Que te paso en la boca? —Nada… Estoy bien. —Pero mira como tenes… —No es nada, Walter. Dejalo. Cuentame… ?Que te han hecho? —Lo abrazo para alejarlo del escrutinio y asi entraron a la cocina del restaurante donde trabajaban. —?Que hiciste? ?Donde fuiste? —A ningun lado, carino. Descanse mucho. —Damaris habia tenido que pedir unos dias obligada. No queria presentarse a trabajar en el estado en que la habia dejado Tom despues de la ultima pelea. Una semana para curarse las heridas de la piel. Las del alma… llevarian mucho mas, si es que algun dia sanaban—. Salimos con Jime a comer y a tomar algun trago por ahi, pero nada mas. —Una semana de vacaciones y… ?vos te quedas durmiendo en tu casa? —Creeme que lo necesitaba. —!Que bien mentia! !Cuanto habia aprendido de el! Walter y Damaris saludaron a los cocineros y al resto del staf de Pentos, el famosisimo restaurante de Puerto Madero. Gisela y Pia sonrieron con picardia cuando la vieron llegar. —Pero miren quien volvio… —comento Gisela cruzandose en el camino de Damaris. —No empecemos, Gisela. —Se interpuso Walter. —Si, mejor. No vale la pena. ?Vamos, Pia? Las dos se alejaron del pasillo, dejando una estela de veneno en el aire. —No les hagas caso. —Es que no las entiendo. ?Cual es su problema? —No les des bola. Vamos. Victoria ya debe haber llegado. Victoria era prima de Jimena. Asi fue que Damaris habia conseguido aquel puesto de trabajo aun siendo indocumentada. Aquel era un gran favor que le debia a su amiga y a Victoria tambien. Porque arriesgarse a perder el restaurante era una gran posibilidad. Los controles en Capital Federal eran exhaustivos, y cada vez que alguien con traje y corbata entraba preguntando por la duena, Damaris temblaba. —Ay, pero !que bonita! —Victoria la abrazo y, de a poco, recupero la calma que Pia y Gisela le habian arrebatado con sus gestos. Su jefa, al igual que Jimena, si sabia que habia ocurrido. Habia tenido que contarle para poder pedirle los dias necesarios. —Gracias. ?Como estas tu? ?Como ha estado todo por aqui? —le pregunto. —Igual. Ninguna novedad. Con Walter te extranamos mucho, Dami. —Pues veran, yo no puedo decir lo mismo —bromeo—. Disfrute mucho mis dias en casa. —Me alegro —respondio Victoria con la voz apagada, sabiendo que aquello era todo un montaje—. ?Estan listos para abrir? —!Claro! La noche estuvo bastante tranquila. El frio del invierno amedrentaba a la gente y, aunque el lugar estaba casi lleno, la jornada paso sin grandes sobresaltos. Pia y Gisela no tuvieron tiempo de molestar a Damaris porque su sector fue el mas concurrido. Ella, en cambio, agradecio volver al trabajo en una noche como aquella. —Dami, anda a comer. Pia se queda en tu lugar. Despues cambian. —Que la cubra Walter que tiene dos mesas —protesto la joven. —Vas vos, nena —le dijo Victoria con la peor cara. —Anda, corazon —animo a Damaris que se habia quedado dura en la puerta de la cocina. —Puedo comer mas tarde, no hay problema. —No. Vas a ir ahora que no hay muchos clientes. Devoro el plato de ravioles que Justino, el cocinero, habia preparado para ella y salio apresurada para volver a su puesto. Le sonrio a Walter mientras avanzaba hacia su sector y, cuando giro por el costado de la barra, se detuvo en seco. Sentado en una mesa un hombre de cabello corto, con una sonrisa igual a la de… !No! No diria su nombre. No lo habia pronunciado desde la ultima vez que se vieron. Pestaneo. Pestaneo. Pestaneo. !A Dios gracias! Era muy parecido, si, pero no era el. Capitulo 2 Un pasado que se fue Hay un delicado equilibrio entre honrar el pasado y perderse en el. Eckhart Tolle Jimena, como siempre, roncaba. Damaris abrio con mucho cuidado la puerta de su cuarto y la cerro lentamente para que el ruido de las bisagras no despertase a su amiga. Se quito la ropa, se puso el pijama y se sento en la cama con el espejito y las toallitas desmaquillantes entre las piernas. Habia utilizado bastante base para enmascarar el moreton que le habia quedado en la nariz. Mientras la pintura desaparecia de su rostro, sus ojos vagaban por los rasgos que aun conservaba de aquella nina que se habia criado en una tierra completamente diferente a la que pisaba en este momento. Damaris. Damaris Juarez Penaloza. Su madre, al igual que muchas otras, habia bautizado a su primera hija de aquella manera porque era comun unir los nombres de sus padres para formar el de los hijos. Su padre se llamaba Dalmiro y ella Marisa. Habia nacido en Abreu, un pueblito remoto en la provincia de Maria Trinidad Sanchez, al noreste de la Republica Dominicana, donde el verde enarbola la ciudad y el azul del mar son parte del paisaje cotidiano; donde las casas se banan en flores y la paz anida en el corazon de sus habitantes. Suspiro y cerro los ojos. Se echo hacia atras, dejandose envolver por las imagenes de su vida, de su pasado. La casa de Damaris esta —porque aun sigue ahi— ubicada a un paso de la carretera que une Rio San Juan (Norte) con Cabrera-Nagua (Sur) en el corazon de Abreu, dentro de un extenso solar[1] repleto de arboles de aguacate[2], chinola[3] y guandules[4]. En el centro, una vivienda de concreto con los pisos pulidos de rojo carmesi no la diferencian del resto que tienen las mismas caracteristicas. Comoda. Con tres habitaciones amplias, frescas y una galeria ancha desde donde se puede observar el pueblo en todo su esplendor. Detras de la propiedad se extiende un manto verde que finaliza con una caida libre de rocas afiladas y puntiagudas, donde el mar arremete sin descanso los dias tormentosos. Desde muy pequena fue servicial, amable, pero con mucho caracter. Se acostumbro a ayudar a su familia en cualquier tipo de quehacer domestico y nunca, jamas, tuvo una objecion sobre el destino que le toco en suerte. Ademas, cargaba con la gran responsabilidad de cuidar de sus tres hermanos mas pequenos desde que tuvo memoria. El espejo le devolvia una imagen triste que nada tenia que ver con esa muchachita que reia feliz los dias de sol, que corria por el campo con las manos repletas de limoncillos[5]. Se acaricio el rostro y sus dedos siguieron hasta la cabeza. Su cabello siempre perfecto parecia ser lo unico que no habia cambiado a lo largo de los anos. Su pelo negro seguia lacio, suave, sedoso, y aun caia sobre sus hombros, como una lluvia azabache. Al enredar los dedos entre los mechones, el cuero cabelludo se quejo; en Buenos Aires jamas se soltaba el pelo. La cola que, apretada, llevaba siempre como un estandarte, guardaba dentro recuerdos de su pasado. Tener el cabello atado significaba mantener su historia atada tambien; firme, contenida. Por la noche, cuando era el momento de liberar su pelo, se dejaba llevar por todo lo que su imagen le devolvia y liberaba tambien la melancolia, el miedo, la tristeza que cargaba con ella. No se dejo ganar por la angustia que le provocaba sentir los recuerdos y continuo con la inspeccion del rostro que le devolvia el espejo. Su cuerpo, el que habia comenzado a florecer con apenas once anos, tampoco era el mismo. Y sus ojos… Sus ojos verdes, que siempre llamaban la atencion de quien la mirase, habian perdido tiempo atras su brillo esmeralda. Ya no arrancaban los mas intensos suspiros y, en cambio, solo inspiraban lastima. Lastima y preocupacion. Esa noche, como nunca antes le habia pasado, deseo encontrarse en los brazos de su mama y llorar para sacar fuera todo el dolor que cargaba dentro. Las lagrimas se fueron formando con lentitud en su garganta. Porque la angustia suele nacer alli; justo entre las cuerdas vocales y el plexo solar. Luego, se propaga hacia arriba y llega con fuerza a los ojos que ya no tienen manera de aguantar el dolor que quema en el pecho. Como cada vez que pensaba en su madre, las penurias vividas a su lado y los problemas atravesados cobraban fuerza, y las cicatrices de lo vivido picaban, ardian, molestaban. Y no solo las que cargaba su cuerpo, sino tambien su alma. Marisa, su madre, habia aceptado trabajar en el Hotel de La Catalina, poco despues de que su esposo Dalmiro abandonara la casa. El altercado habia sucedido cuando Damaris era apenas una nina y su hermano Miguel acababa de nacer. Una madrugada lluviosa, el hombre habia regresado a dormir pasado de copas. Irreconocible y enojado ante la indiferencia de su esposa, le confeso que se habia acostado con Joanne, una extranjera para la cual trabajaba haciendo jardineria en una de las villas de Orchid Bay. Loco y aturdido por el ron, le grito a su mujer que no volveria porque se mudaria con su amante al dia siguiente. Y cuando todos pensaron que Marisa se tenderia a llorar y lo perdonaria, ella tomo las cosas de Dalmiro y las arrojo, una a una, fuera de la casa. No le importo su estado ni el que diran. El griterio se esparcio como la polvora y alerto a los vecinos que no se perderian otro espectaculo, igual o mejor, al que estaban acostumbrados. De a poco, fueron apareciendo detras de las ventanas, para disfrutar del show de los Penaloza. —!Se me larga de aqui! ?oyo? —le grito desencajada desde la puerta. —Pero claro que me largo, cono. !Vieja loca! —respondio el, balanceandose de aca para alla con las pocas cosas que sus manos pudieron juntar. Despues de anos y anos de infamias, golpes y sobre todo verguenzas, Marisa por fin habia logrado defenderse y poner punto final. La mujer, con casi treinta y seis anos y en la flor de su vida, comenzo a trabajar en el hotel por recomendacion de dona Margarita, su mejor amiga y madrina de Damaris. A partir de aquel momento, su mente se expandio hacia otros horizontes. Su actitud cambio completamente; era otra persona. Entendio que su independencia economica y la ayuda de su hija mayor era todo lo que necesitaba para salir adelante. No paso mucho tiempo hasta que Dalmiro se arrepintiera y regresara pidiendo disculpas. Luego de rogar, en vano, el perdon de Marisa, se mudo a Gaspar Hernandez con su familia y jamas nadie volvio a saber de el. Los anos pasaron. La vida y la rutina se acomodo: Damaris, cuidando a sus hermanos y yendo del liceo[6] a la casa. Las vacaciones con los amigos y los primos en El Breton. Las risas, las tardes largas y los bailes bajo la lluvia. Hasta que una manana soleada, uno de sus hermanos amanecio volando de fiebre y ella, luego de dejar a los dos mas chicos en lo de dona Margarita, se monto a una guagua[7] y se dirigio al hospital de Cabrera. Braulin estuvo internado mas de un mes sin que ningun medico supiese que lo afectaba. El dia en que el doctor Suarez Alcequiez les informo que estaba casi seguro de que el nino sufria de malaria y que, segun sus calculos, el cuadro estaba demasiado avanzado, las mujeres creyeron morir. Les dijo que, la unica y ultima esperanza, era que el nino fuese trasladado al hospital General de Nagua donde contaban con mas recursos. Y asi, los planes cambiaron y ya nada fue igual. —?Que haremos ahora? —sollozaban madre e hija, mientras aguardaban los partes medicos sentadas en un banco de madera de la sala de espera. El doctor aclaro que, a pesar de sus esfuerzos, traer la medicina que Braulin necesitaba se estaba complicando cada vez mas. No solo por razones economicas, sino tambien burocraticas; demasiados papeles y dinero. No habia otra manera: Braulin seria traslado inmediatamente a Nagua. Al cuadro complicado se le sumo una deshidratacion importante y una insuficiencia renal. Marisa no tuvo mas opcion que pedir permiso en el hotel para ausentarse y acompanar a su hijo. Hasta el momento Damaris, en complicidad con las enfermeras y doctores, cuidaba a su hermano desde muy temprano para luego cambiar el turno con su madre, quien se quedaba por las noches. Era mas que obvio que en Nagua no tendria los mismos privilegios y que dicho viaje requeriria de la presencia de Marisa constantemente. El gerente general del hotel le dejo bien en claro cual era la situacion. No habia mucho que pensar; no trabajaba, no cobraba. Fue asi que Marisa, lejos de abandonar a su hijo, partio hacia Nagua esperando y rogandole a Dios que al regresar contara con aquel puesto laboral. Damaris quedaba a cargo de Juan y Miguel, abandonaba el liceo y comenzaba a trabajar algunas horas en un salon de belleza en La Catalina. Se dedicaba a su casa y a sus hermanos mientras que su mama acompanaba a Braulin. Pero… la vida volvio a poner a prueba a la familia. Un mediodia caluroso, pesado y fatigoso, el tio Rosario Penaloza se apeo rapidamente de la pasola[8] y le trajo la noticia mas triste. Braulin no habia sobrevivido. Su madre acababa de llamarlo por telefono y le habia pedido que Damaris hablara con el pastor Lucero para acordar los detalles de su velatorio. La muchacha dejo a los pequenos solos en la casa, corrio en busca del religioso y se ocupo del sepelio de su hermano. ?Estaba preparada para aquello? Por supuesto que no. Damaris poco recordaba de su padre. Tenia presente algunos momentos que habian pasado juntos, pero no mucho mas. Ni siquiera habian quedado las fotos. Ningun recuerdo de el y de su paso por sus vidas quedaba en la casa de la familia. Sonrio avergonzada mientras se quitaba el labial de la boca. Casualmente, o no, habia encontrado un companero igual o peor que su padre. Quizas, como dicen, la manzana no se cae muy lejos del arbol. Sin embargo, con el pequeno Braulin era diferente. De el si tenia muchos recuerdos, fotos, sonidos, aromas. Braulin era dos anos mas chico que ella y con quien habia compartido no solo la habitacion, sino muchisimas aventuras durante los primeros anos de infancia. Si cerraba los ojos y volaba hacia la playa, podia verlo saltar las olas del mar con una sonrisa gigante en el rostro. Con los ojos iguales a los de su hermana; de un verde esmeralda magico y particular iluminando sus gestos.

  • El Rey de los cuatro confines. La estrella caida de Marc Sans

    https://gigalibros.com/el-rey-de-los-cuatro-confines-la-estrella-caida.html

    La paz duradera en los Cuatro Confines se sostiene con pinzas. Las dos superpotencias mundiales (los Dominios Aliados de Kramel y la Comunidad de Vyneran) tienen suficientes reservas del mineral magico urum para lanzarse Canones de Sizla entre ellos y aniquilar a todo el planeta. En estas fragiles circunstancias -conocida como la Guerra Sigilosa- el Consejero Real Oxdon (en nombre del Rey Drogivus de los Dominios) llega a lomos de su dragon Flecha de Fuego a la Fortaleza Roja para parlamentar con el Rey Kurvezh, amenazado por todos los frentes posibles. El acercamiento entre los dos paises se ira sucediendo de forma sorprendente, dejando ver la cara mas oscura de todos los personajes involucrados en este conflicto de intereses.

  • Yo no soy nadie de Patrick Flanery

    https://gigalibros.com/yo-no-soy-nadie.html

    Tras unos anos como profesor en Oxford, Jeremy O’Keefe regresa a los Estados Unidos donde ha sido contratado como profesor de Historia de Alemania en la Universidad de Nueva York. Jeremy se siente bien con su nueva vida y feliz de estar otra vez cerca de su hija, quien se ha instalado, gracias a su matrimonio, en la clase alta de la ciudad. Jeremy, cercano a cumplir los sesenta, contempla con placidez los anos que le quedan por vivir. Pero un dia recibe en su casa un paquete anonimo que contiene mas de dos mil folios impresos por las dos caras con lo que parecen direcciones de internet. Y unos dias mas tarde, otro paquete con miles de numeros de telefono. Estupefacto, Jeremy examina el contenido de los paquetes sin entender nada. Hasta que descubre que recogen el historial de su actividad online y de sus llamadas de telefono de los ultimos anos. ?Quien y por que querra hacer un seguimiento exhaustivo de su vida personal? ?Y por que ese alguien quiere que Jeremy lo sepa? ?Quien es ese hombre que parece seguirle desde hace unos dias? ?Y quien llama a su madre con amenazas para Jeremy? En una sociedad sin secretos como la nuestra, asustar a un hombre es lo mas facil. Y Jeremy empieza a repasar su vida que el creia hasta ahora la de un hombre comun, buscando a quien pudo hacer dano o que pudo hacer mal.

  • Seduciendo al principe (Seduciendo a la corona1), Amanda J. Queiroz de Amanda J. Queiroz

    https://gigalibros.com/seduciendo-al-principe-seduciendo-a-la-corona1-amanda-j-queiroz.html

  • El caso de las japonesas muertas de Antonio Mercero

    https://gigalibros.com/el-caso-de-las-japonesas-muertas.html

  • Los Propietarios del Miedo de Sebastian Abdala

    https://gigalibros.com/los-propietarios-del-miedo.html

    Es un compendio de relatos, acerca de distintas situaciones donde el miedo es el desencadenante… Pero no miedo de terror, si no miedos a, por ejemplo, la soledad.

  • La vida desnuda de Monica Carrillo

    https://gigalibros.com/la-vida-desnuda.html

    Una llamada de telefono lo cambio todo. Cuando Gala emprende el viaje para despedirse de su abuela Rosario no puede imaginar que pronto descubrira que nada es lo que parece en su familia: a pesar de las apariencias, o precisamente por ellas, todos tienen una vida publica que muestran al mundo, una vida privada reservada para unos pocos y una vida secreta que permanece oculta para todos. Poco a poco, Gala ira destapando las distintas capas que envuelven a sus padres, a su hermano Mauro y a su tia Julia. Y en la cima de tantos descubrimientos hallara aquello que siempre busco y que se le resistia: el amor sin condiciones. LA VIDA DESNUDA Monica Carril o Premio Azorin de Novela 2020 Esta novela obtuvo el Premio Azorin de Novela 2020, concedido por el siguiente jurado: Reyes Calderon, Manuel Cifo Gonzalez, Juan Eslava Galan, Jose Ferrandiz Lozano, Luz Gabas, Julia Parra, que actuo como presidenta del jurado, Belen Lopez Celada y Amparo Koninckx Frasquet, que actuo como secretaria sin voto. La Diputacion Provincial de Alicante y Editorial Planeta convocan y organizan el Premio Azorin de Novela. Editorial Planeta edita y comercializa la obra ganadora. A Alex y a Vega. Por ensenarme nuevas formas de amar Me doy cuenta tambien de que he vivido tres vidas: la vida publica, la vida privada y la vida secreta. GABRIELGARCIA MARQUEZ Mi vida Vida 1 La culpa me pesa desde el dia en que mate a mi abuelo. Llevaba mas de un ano postrado en una cama tras sufrir un ictus que le habia dejado medio cuerpo paralizado. La hemiplejia habia relegado la vida del yayo Fermin a una habitacion, donde su unico entretenimiento era mirar el techo y las paredes recubiertas de gotele, en las que imaginaba siluetas y rostros de otras vidas que pudieron ser. Aquel dia su cuerpo dijo basta. Esa fue la version oficial del equipo medico que lo atendio durante todo el proceso degenerativo, aunque yo, y nadie mas que yo, sabia la verdad. Aquel 15 de septiembre de 1995 su nieta Gala corto el fino hilo que sujetaba a Fermin a la vida. Para entonces mi abuelo ya no era mi abuelo. Ya no hablaba y apenas nos reconocia. Con suerte algunos dias, sobre todo a primera hora de la manana, lograba abrir los ojos y sonreirnos con la mirada. Al menos eso interpretaba yo, o eso queria entender de sus escasos gestos. En algunas ocasiones, mientras le acariciaba el entrecejo para que lo relajara, me apretaba suavemente la otra mano. Como diciendo: <>. Fermin fue muchas cosas, pero en el carne de identidad se podia leer que su profesion era la de practicante. Nos ponia las inyecciones con una destreza que no he vuelto a ver en nadie tantos anos despues. El abuelo hervia el material en una cazuela para esterilizarlo y lo reutilizaba luego en cada una de las nalgas que se le ponian a tiro. Aquella diminuta sala de tortura tenia un olor muy particular. Una mezcla de alcohol, medicamentos y miedo. Porque el abuelo seria muy diestro y atinado en lo suyo, pero eso no impedia que mi hermano y yo temblaramos cada vez que nos tenia que pinchar el antibiotico con aquella aguja cargada por el mismo diablo. Fermin el Agujas, el Espadachin, el Lanzaflechas: al abuelo le acompanaban muchos motes en el pueblo. Mi favorito era el de Azotaculos. Y era cierto. El ritual siempre se repetia: cogia una gasa y la empapaba en alcohol, te daba unos golpecitos en el gluteo y te hincaba la aguja sin piedad hasta descargar todo el contenido de la inyeccion. Una vez que el embolo tocaba el extremo, el abuelo repetia las mismas palabras: <>. Y se reia. Los dias previos a su muerte, su salud habia empeorado mucho y los mayores --como mi hermano y yo llamabamos a los adultos en aquellos tiempos-- decidieron ingresarlo de nuevo en el hospital. Ya no salio de alli con vida. Lo intubaron, oxigeno, suero, sondas… Aquel si que ya no fue mi abuelo nunca mas. Mi recuerdo de aquella nueva habitacion era aun peor que el que conservaba de su casa. En el hospital compartia el reducido espacio con otro paciente, un hombre con una enfermedad terminal a quien, como a Fermin, le quedaba un resuello de vida. Fueron cuatro o cinco dias de internamiento en los que apenas pudieron hacer nada por el. <>, dijeron mis padres a la tia Julia. Con ocho anos, yo no era capaz de saber a que se referian exactamente. ?Que tipo de trastorno tendria el abuelo? ?Acaso era posible empeorar mas? Yo lo miraba y veia las llagas de las caderas en carne viva, las extremidades retorcidas y la inapreciable masa muscular, fruto de la apisonadora del tiempo que juega en contra. A mi mente inocente e infantil le parecia imposible que hubiera algo peor que aquello. Pero lo hubo. Hay veces en las que, por muy luminoso que se haya despertado el dia, en nuestra casa anochece pronto. Aquel iba a ser uno de esos dias. Veinticinco anos despues de ese 15 de septiembre de 1995 recibi una llamada que me transporto en el acto a aquel momento: a la noche en que le quite la vida a mi abuelo. Vida 2 Existen personas a las que sabes que no podras olvidar en toda la vida, pero llega un dia en el que dejas de quererlas. No fue mi caso. Nunca llego ese dia. El tiempo solo curo las heridas que ya no importaban, lo intrascendente, lo que era ajeno a mis sentimientos. Practicamente nada. Fuera llovia. Era una de esas tardes en las que esta justificado enfundarse el pijama y arroparse con la manta sin salir de casa, y justo eso habia decidido. Estaba dibujando ensimismada en mis bocetos cuando sono el telefono. Sin saber por que, me inquieto. <> Fue un mal presagio, aunque al segundo siguiente lo estaba achacando a alguna operadora telefonica dispuesta a tentarme con una oferta. Me equivocaba. --?Si? --Hola, preguntaba por Gala. Era la voz de un chico joven. Tenia un timbre agradable. --Si, soy yo. --!Hermanita! Soy Mauro. Perdona, no te habia reconocido. Me quede bloqueada, aturdida, paralizada. Mi hermano nunca me habia llamado al fijo, no sabia a que venia aquello. Otra vez el mismo presentimiento. --!Vaya sorpresa! --acerte a decir al fin--. Yo tampoco te habia reconocido. Que raro que me llames a este telefono. --Tienes el movil apagado. Lo mire: sin bateria. --?Va todo bien? --pregunte, directa al grano. --Bien… Bueno, mas o menos. Te llamo por papa. Me ha pedido que lo haga. --?Que le ocurre? --me apresure a preguntar. --No, tranquila, el esta como siempre, Gala. Es la abuela… Mi corazon se agito con violencia y senti que me mareaba y me fallaban las piernas. Me acerque con el inalambrico al sofa donde un momento antes disfrutaba placidamente de la entrada del otono y me sente despacio. --?Que ha ocurrido, Mauro? No me asustes. --Bueno, el diagnostico es complejo, pero por la evolucion de las ultimas horas, creo que no hay mucho margen de mejora. Gala, la vida de la abuela se apaga y hemos creido que deberias saberlo. --?Donde esta? ?Donde esta la abuela? Lance la pregunta con un grito seco, desesperado, mientras un intenso dolor se instalaba en mi garganta y me comprimia las cuerdas vocales, impidiendome articular correctamente las palabras. La voz me temblaba al compas de las manos, que de repente se tornaron frias como el cristal que tenia delante. Esa ventana a traves de la cual habia contemplado el paso de las horas, vacias de todo salvo de recuerdos. --Esta en el Hospital del Norte. Hemos preferido que la ingresen aqui porque asi puedo tratarla yo mismo. Ahora estoy de guardia -- anadio mientras yo pensaba si seria mas rapido el puente aereo o un AVE a Madrid. Vida 3 Me deje caer a plomo en el asiento: coche 11 del AVE Sants-Atocha, ventanilla. Habia llegado por los pelos despues de una carrera hacia el control de seguridad, de un traspie que me lanzo de bruces contra el suelo camino de los andenes y de un esprint final con la mochila para viajes relampago a la espalda, mientras el ultimo revisor gritaba: <>. El doble pitido de aviso me pillo en el aire, literalmente, saltando para salvar los escalones y no quedarme en tierra. No podia creerme lo que habian dado de si los ultimos cinco minutos. Por lo general, el tiempo, y en muchas ocasiones tambien la vida, me pasa por encima. Las horas transcurren lentas y rapidas a la vez. Y yo continuo imperterrita, haciendo caso omiso al devenir de las rutinas. Siempre ha sido asi. Desde nina he tenido una enorme facilidad para quedarme embobada observando el aleteo de una mosca, la laboriosa tarea de una hormiga que carga con una pipa o las mil y una imagenes distintas que adivino en el suelo de marmol en casa de mis padres. --Gala, ?que haces? --me preguntaba mas de una vez mi padre desde el otro lado de la puerta del cuarto de bano. --Estoy en mi trono, que para algo soy una princesa --le respondi ufana en una ocasion. --?Todavia seguis ahi, alteza? Se os van a dormir las piernas. -- Mi padre siempre fue muy rapido en las respuestas. --Mejor. Si se me duermen, quiza suenen con algo bonito --le conteste igual de deprisa. Nos encantaba hacer eso. Era como jugar un partido de tenis que se va convirtiendo en otro de ping-pong; cada vez las respuestas mas veloces y el ritmo mas endiablado. Escuche la risa de mi padre desde el otro lado, pero ya no dijo nada. Espero a que se abriese la puerta para espetarme a bocajarro: --?Y bien? ?Con quien han sonado esas piernas dormilonas?

  • Toda una vida para recordar de Nuria Pradas Andreu

    https://gigalibros.com/toda-una-vida-para-recordar.html

    Con solo dieciseis anos, Sophie Simmons deja a su familia para ir a Los Angeles durante la Gran Depresion persiguiendo un sueno: trabajar como dibujante en Disney Studios. Pronto descubrira, sin embargo, que no es un mundo para mujeres. Y asi, entre amores y desamores, encajando los golpes que le da la vida, Sophie luchara hasta el final en medio de una epoca convulsa que marcara un antes y un despues entre los profesionales de la animacion de principios del siglo xx.
    Toda una vida para recordar es una novela con una protagonista femenina decidida, un entorno historico fascinante y una lograda mezcla de personajes de ficcion y de la vida real.