la narradora libro
-
la narradora libro - Traci Chee
https://gigalibros.com/la-narradora-mar-de-tinta-y-oro-3.html“Erase una vez, pero no siempre sera. Este es el final de toda historia.”
-
La narradora (Literatura infantil y juvenol) Tapa blanda
https://www.amazon.es/narradora-Literatura-infantil-juvenol/dp/6075279679La narradora (Literatura infantil y juvenol) : Chee, Traci: Amazon.es: Libros.
-
LA NARRADORA (MAR DE TINTA Y ORO 3 DE 3) - Casa del ...
https://www.casadellibro.com/libro-la-narradora-mar-de-tinta-y-oro-3-de-3/9788412030402/10044506LA NARRADORA es un libro del autor TRACI CHEE editado por OCEANO EDITORIAL,S.L. LA NARRADORA tiene un código de ISBN 978-84-120304-0-2 y consta de 544 ...
-
Libro La Narradora, Traci Chee, ISBN 9786075279671 ...
https://www.buscalibre.es/libro-la-narradora-traci-chee-gran-travesia/9786075279671/p/51994958Libro La Narradora, Traci Chee, ISBN 9786075279671. Comprar en Buscalibre - ver opiniones y comentarios. Compra y venta de libros importados, ...
-
Libro La Narradora, Traci Chee, ISBN 9788412030402 ...
https://www.buscalibre.es/libro-la-narradora/9788412030402/p/51998410Libro La Narradora, Traci Chee, ISBN 9788412030402. Comprar en Buscalibre - ver opiniones y comentarios. Compra y venta de libros importados, ...
-
LA NARRADORA. CHEE,TRACI. Comprar libro
https://www.popularlibros.com/libro/la-narradora_941687LA NARRADORA 17,05€ Ahora un 5% descuento. Envío gratis. Una aventura compulsiva con personajes completamente desarrollados que exploran la memoria y el ...
-
Reseña: La Narradora - Traci Chee (Mar de tinta y oro #3)
https://suenos-entre-paginas.blogspot.com/2019/11/resena-la-narradora-traci-chee-mar-de.html24 nov 2019 — Hoy les vengo hablar de un libro que moría por leer y que sin duda alguna estaba entre mis libros más esperados de este año. Si, como lo dice el ...
-
LA NARRADORA - TRACI CHEE - 9788412030402 - Agapea
https://www.agapea.com/Traci-Chee/La-narradora-9788412030402-i.htmComprar el libro La narradora de Traci Chee, OCEANO EDITORIAL,S.L (9788412030402) con ENVÍO GRATIS desde 18 € en nuestra librería online Agapea.com; ...
-
LA NARRADORA | Traci Chee | Librería Nacional
https://librerianacional.com/producto/la-narradoraErase una ves, pero no siempre será. Éste es el final de toda historia. Tal y como el libro había profetizado siempre, la Guerra roja se ha desencadenado y ...
-
Seducida por mi enemigo de Jose Rodriguez
https://gigalibros.com/seducida-por-mi-enemigo.htmlEstaba mirando por la ventana del avion mientras volaba de regreso a casa. Finalmente, me gradue de la Universidad de Oxford. Estaba tan emocionada de volver a casa. Extranaba a mis padres, a mi mejor amiga, Jane, ya mi novio, Isaac. Isaac y yo habiamos estado saliendo desde la secundaria. Estabamos planeando casarnos despues de mi graduacion. Les dije que volveria manana. Porque queria sorprender a Isaac. Hoy era el cumpleanos de Isaac. Solo Jane sabia que venia hoy. Cuando el avion aterrizo, fui al atico de Isaac despues de enviar mi maleta al apartamento de Jane. Estaba tan emocionada. No podia esperar a ver a Isaac. Agarre mi llave de repuesto que Isaac me dio el ano pasado en mi cumpleanos. Sonrei, mirando el regalo que le habia traido y abri la puerta. Mi corazon se apreto cuando vi zapatos y ropa de mujer esparcidos por el suelo. Apenas subi las escaleras; me temblaban las piernas. La puerta de su dormitorio estaba entreabierta. Empuje la puerta lentamente. Jadee en estado de shock, tapandome la boca con la mano cuando vi a Isaac en la cama con una mujer. Mi mundo entero colapso. Sus ojos se abrieron en estado de shock. La mujer se sento en la cama, cubriendo sus pechos con una manta. “… ?Eleanor? …” Isaac murmuro, mirandome. Le di una mirada insolente. ?Como pudo hacerme eso? Le amaba. Estaba jodidamente enamorado de el. “!Maldito bastardo!” Rompi. “Te odio te odio”. Gruni y le arroje el regalo. Sali corriendo cuando las lagrimas empezaron a caer por mis mejillas. Tome un taxi en cuanto sali del edificio. Entre en la discoteca y fui hacia la barra del bar, chocando con la gente. Mi mente estaba confusa de tanto llorar. Me senti entumecida. Queria olvidarme de todo, especialmente de ese bastardo. Le odiaba. Rompio mi corazon en un millon de pedazos. Estaba bebiendo mi whisky cuando senti que alguien se sentaba a mi lado. “Oye.” Gire mi rostro hacia el. Mis ojos se encontraron con un par de ojos cautivadores. Su mirada era tan intensa. Tenia cabello castano oscuro y cautivadores ojos castanos. Se veia tan guapo. Diabolicamente guapo. “Oye.” Murmure con indiferencia. “?Cual es tu nombre?” Pregunto, dandome su encantadora sonrisa. “Desconocido”. Respondi, dandole una sonrisa perezosa. Se rio entre dientes, mirandome a los ojos. “Encantado de conocerte, Extrana”. Dijo mientras extendia su copa hacia la mia y chocaba mi copa. “Eres hermosa”. Comento con voz ronca. Bebi un sorbo de whisky sin decir nada. “?Te gustaria bailar conmigo?” Pregunto. Respire profundamente y me levante. El tambien se puso de pie. Di un paso hacia el, acortando la distancia entre nosotros. “Tengo una mejor idea. ?Que tal si vamos a un lugar mas tranquilo?” Pregunte seductoramente, agarrando su corbata. La comisura de sus labios se curvo en una sonrisa diabolica. “Con placer. ” Respondio mientras tomaba mi mano y nos dirigia hacia la salida. Paso la tarjeta de acceso del hotel y abrio la puerta sin separar nuestros labios. Me acerco a el, me beso bruscamente y cerro la puerta con el pie. Pase mi mano por su cabello, respondiendo a su exigente beso. !Mierda! Es un buen besador. Como estabamos sin aliento, se retiro. Puso su mano en mi mejilla. “Eres muy hermosa.” Murmuro, mirandome a los ojos, derritiendome bajo su intensa mirada mientras acariciaba mi mejilla lentamente. Tu tambien lo eres. ” Sonrei. Puse mi mano en la parte de atras de su cuello y roce mis labios contra sus labios. Deslice mis manos debajo de su chaqueta y me la quite. Envolvio sus brazos alrededor de mi cintura, presionando su miembro contra mi estomago y movio sus labios a mi cuello, colocando besos humedos. Gemi. Deslizo su mano por debajo de mi vestido, acariciando mi muslo y quito la tira de mi vestido lentamente mientras besaba, chupando mi cuello. Cerre los ojos, gimiendo. Me quito el vestido, lo tiro y capturo mis labios. Jadee, agarrando su cabello mientras deslizaba su mano debajo de mis bragas y metia sus dos dedos dentro de mi. Movio su mano a lo largo de mi espalda y desabrocho mi sosten mientras jugueteaba con mi punto sensible con sus dedos. Mis piernas empezaron a temblar mientras me acercaba. Agarre su cabello, gimiendo mientras me corria. Deslizo sus labios desde mi cuello hasta mi pecho, colocando varios besos. Arquee la espalda con sensacion, gimiendo mientras chupaba mi pezon. Se aparto y vago por mi cuerpo con ojos lascivos. Mis mejillas se pusieron de un rojo carmesi bajo su mirada. “Creo que ya no eres una extrana. Se demasiadas cosas sobre ti”. Dijo seductoramente, dandome una sonrisa arrogante y paso la yema del dedo por mi piel, enviando escalofrios por mi columna. Era como si mi piel ardiera bajo sus toques. “Creo que estoy demasiado vestido”. El me guino. Mordi mi labio inferior y comence a desabotonar su camisa. Me estaba mirando sin apartar los ojos de mi por un segundo. Le quite la camisa y movi mis labios sobre su piel, colocando besos de mariposa. Se puso tenso bajo mis toques, haciendome sentir como una diosa. Luche con mis pestanas hacia el, mientras lo miraba y desabrochaba su cinturon. Gimio cuando puse mi mano sobre su duro bulto. Le di una sonrisa traviesa. Levanto la ceja juguetonamente y agarro mis brazos. Me empujo hacia la cama y se quito los pantalones y el boxer. Mis ojos se agrandaron cuando vi su miembro grande. La esquina de sus labios se curvo en una sonrisa de satisfaccion. Se inclino y me quito mi ropa interior negras de encaje. “Creo que no lo necesitas ahora”. Dijo con voz ronca y la tiro. Agarro sus pantalones y saco una lamina de su bolsillo. Separo mis piernas y se coloco entre mis piernas. Rasgo el papel de aluminio con los dientes y lo puso en su miembro. Luego se inclino y capturo mis labios en un beso feroz mientras su mano exploraba mi cuerpo. Estaba gimiendo una y otra vez. Sostuvo mis munecas por encima de mi cabeza con un fuerte agarre y estrello su miembro dentro de mi. Grite de dolor mientras unas gotas de lagrimas caian por mis mejillas. Se congelo de inmediato. Me estaba mirando con los ojos muy abiertos.
-
Lo que crees es mentira (Las doce puertas 4) de Vicente Raga
https://gigalibros.com/lo-que-crees-es-mentira-las-doce-puertas-4.htmlDos historias narradas en paralelo. La primera trascurre en los principios del tribunal de la inquisicion de Valencia, donde es protagonista destacado el humanista Luis Vives y sus secretos. Todos los personajes existieron en su epoca y todos los hechos narrados se corresponden con la realidad historica. La segunda historia es protagonizada por un grupo de amigos en actualidad, que descubren que el misterio que creian resuelto, en realidad no ha hecho mas que comenzar.
-
Despues de caer de Melanie Harlow
https://gigalibros.com/despues-de-caer.html“No necesito ser su primer amor, pero ojala me dejara ser el ultimo.”
Jack no es el tipo de Margot. En absoluto. Es granjero y, aunque las peliculas de cowboys estan bien, ella prefiere un hombre elegante, con traje y corbata.
Jack es muy atractivo, pero tambien tosco y grosero.
No obstante, pronto empezaran a saltar chispas entre los dos y Margot descubrira que Jack esconde un duro pasado y necesita que lo salven. -
La seleccion natural de Charles Darwin
https://gigalibros.com/la-seleccion-natural.html<"Expresado muy brevemente, Darwin sustancio con muy variadas evidencias la idea (que otros antes que el habian propuesto) de que las especies evolucionan, encontrando ademas un mecanismo que hacia plausible tal evolucion; defendio que la vida es como un arbol, de cuyas raices han ido brotando diferentes ramas, esto es, especies, que con el paso del tiempo continuan diversificandose, dando origen a otras bajo la presion de determinados condicionamientos. [...]A lo largo del siglo y medio que nos separa de la publicacion de El origen de las especies, la esencia de su contenido no ha hecho sino recibir confirmacion tras confirmacion. Puede que aun resten cuestiones por dilucidar, pero el evolucionismo darwiniano nos suministra un marco conceptual y explicativo imprescindible para comprender el mundo natural de manera racional, sin recurrir a mitos".
-
Desconocidos en un anden, Noa Pascual de Noa Pascual
https://gigalibros.com/desconocidos-en-un-anden-noa-pascual.html -
Ahora eres Mi Jefe de Emma K. Johnson
https://gigalibros.com/ahora-eres-mi-jefe.htmlJuntos viviran un amor que ni el tiempo borrara.
-
Lago negro de tus ojos de Guillem Lopez
https://gigalibros.com/lago-negro-de-tus-ojos.htmlpor todo el mundo. La periodista Carla Babiloni regresa a El Clot, donde esta la mas grande de todas ellas, para investigar la desaparicion de una actriz. Pero el regreso es un ajuste de cuentas con el pasado, un reencuentro con todo aquello que creia haber dejado atras de forma definitiva. Debera enfrentarse a policias corruptos, militares de una agencia de seguridad mundial y sectarios fanaticos, ademas de a sus propios miedos y temores, atrapada en un torbellino de recuerdos y profecias funestas.
-
Ladrones de libertad (Marabilia 3) de Iria G. Parente , Selene M. Pascual
https://gigalibros.com/ladrones-de-libertad-marabilia-3.htmlLa tripulacion del Angelique esta orgullosa de ser lo que es: una tripulacion de piratas. Su dia a dia consiste en navegar por los mares de Marabilia entre aventuras, asaltos a barcos y busquedas de riquezas; en definitiva, los piratas del Angelique viven sin acatar leyes ni obedecer ordenes de nadie.
Hasta que el rey Geraint de Dahes los captura y todo apunta a que eso se ha terminado. La pena por pirateria es la muerte. A menos, claro, que alguien les proponga un trato que les permita salvarse… Uno que a su vez ofrezca la posibilidad de una venganza muy ansiada.
Ante un tesoro tan valioso como la libertad, cualquier precio parece escaso. -
Ahogada de Magenta Perales
https://gigalibros.com/ahogada.htmlAlicia estuvo a punto de morir.
Un simple accidente de coche.
Acabo en el rio. Atrapada. Ahogandose.
Y todo se volvio negro. -
Sirenas de Joseph Knox
https://gigalibros.com/sirenas.html -
Cuando no te tengo de Donna Kenci
https://gigalibros.com/cuando-no-te-tengo.htmlCon la fuerza del primer amor...
-
Te pintare un mundo de colores de Paloma Perez
https://gigalibros.com/te-pintare-un-mundo-de-colores.htmlMartina no volvera a ser la misma desde que sufre un atraco en la sucursal donde trabaja. Y no sera por el miedo que pasa, sino por la sensacion que le produce uno de los atracadores. Unos ojos que consiguen helarle el alma, pero que tambien le ensenaran que solo se pisan los que bailan. No puedo dejar de pensar en aquellos minutos, en aquel dia que marco mi vida pasa siempre. No puedo dejar de recordar los pasamontanas que cubrian las caras de aquellos hombres, pero, sobre todo, no puedo olvidar esos ojos. Esa mirada que me traspaso y que no puedo sacar de mi mente ni un solo segundo. Esos ojos que intentaban tranquilizarme a pesar de estar amenazandome de muerte. Esos ojos que no pudieron hacerme dano.
-
Cuando los hechos cambian de Tony Judt
https://gigalibros.com/cuando-los-hechos-cambian.htmlPor el autor de Postguerra, Algo va mal y Pensar el siglo XX.
-
Dos copas y una noche (Dos mas dos 1) de Ana Alvarez
https://gigalibros.com/dos-copas-y-una-noche-dos-mas-dos-1.htmlPrimera entrega de la bilogia <
> de una de las autoras mas exitosas del sello digital Selecta. -
Barrotes de Ruben Gozalo
https://gigalibros.com/barrotes.html?Donde crees que vas? Marcos observa el rostro afilado, los ojos saltones y los dientes ennegrecidos de Aitor, su jefe. La voz grave repiquetea en su cabeza como el redoble de un tambor. --A... a casa --dice titubeante. --De eso nada. --?Ah, no? --No. Aun no. --Pe... pero si ya he terminado mi turno. --Te quedas hasta las doce y media. !Hay mucha gente! --dice mientras senala a las personas que ocupan las mesas de alrededor. Tiene ganas de cerrar el puno y estamparselo en la cara, pero sonrie y se contiene. Sabe que las horas extras nunca apareceran en su nomina. Pero lo peor es que tampoco las cobrara. Aun no ha percibido el salario del mes pasado. El tio es un despota. Le paga cuando le sale de las narices, le trata peor que a un animal y ni siquiera le deja cinco minutos para fumar un cigarro. En cuanto le ve parado, le llama la atencion. Algunos dias le cronometra el tiempo que esta en el cuarto de bano. --Cla... claro. El asiente y trata de pensar que se halla en otro sitio y no en un maldito bar que da de comer y cenar a camioneros y currantes de un poligono industrial. Cobra una miseria, pero no se puede quejar. Es un exconvicto. Nadie en su sano juicio contrataria a un preso, por mucho que los politicos hablen de reinsercion y segundas oportunidades. --Ponme una hamburguesa gigante de beicon, queso, lechuga, tomate, cebolla y pepinillos. !Deprisa! !Ah! Y sin mostaza --dice con voz autoritaria. --!Desde luego, jefe! Con paso cansino entra en la cocina y se vuelve a embutir el delantal. En el aire flota un olor a fritanga. De la nevera saca dos trozos de carne picada y los coloca encima de la parrilla. Cuando las hamburguesas estan en su punto, las pone en el pan. Luego anade la lechuga, el tomate, los pepinillos, el beicon y la cebolla. <
>, piensa. Por suerte, hoy esta algo acatarrado. Asi que absorbe los mocos y escupe un par de flemas en el pan. La saliva se envuelve con la masa. --Ni hara falta ketchup --dice en voz alta. Aplasta la hamburguesa, anade unas patatas de bolsa al plato y sale fuera. En el local hay mas de quince clientes. Se acerca hasta la mesa donde esta su jefe y esboza una sonrisa de conejo. --Que aproveche --farfulla con sorna. Antes de ponerse detras de la barra le observa de reojo mientras la prueba. Un gesto de satisfaccion se refleja en su semblante. --!Delicioso! --dice a la persona que esta con el. Aitor es un cabron, pero ?que jefe no lo es? Mientras atiende a dos clientes, piensa en lo miserable que es su existencia. En los ultimos meses su vida se ha limitado a ir de casa al trabajo y del trabajo a casa. No hay mas. Ahora comprende la razon de que muchos convictos no quieran salir del talego. En la carcel te lo dan todo. No tienes que preocuparte por fichar ni por la comida. Tampoco necesitas pagar el alquiler de la habitacion en la que vives o hacer numeros para llegar a final de mes. En los pabellones existe una rutina, unos horarios, un funcionamiento interno. Detras de las rejas eres alguien. Los otros reclusos te llaman por tu nombre y te respetan cuando coincides con ellos en el patio. Pero, una vez que te conceden la libertad condicional, lo duro se encuentra fuera. Al principio Marcos no lo entendia, pero tras unos cuantos dias en libertad comprendio la decision que habia tomado Luis, su antiguo companero de modulo. Nada mas salir por la puerta de la carcel de Topas, se subio en el primer autobus que se detuvo en la parada. Cuando llego a Salamanca dirigio sus pasos hacia una ferreteria. Alli compro un cuchillo bien afilado y, tras tomarse un cafe con leche, se persono en una caja de ahorros. Una vez dentro, se acerco con educacion hasta una de las mesas donde habia un asesor comercial y, con suma delicadeza, le coloco el cuchillo en la garganta. --!O me das toda la pasta o rajo a tu companero! --le grito a una de las cajeras. La mujer, asustada, hizo lo que le pidio. Despues, con el botin en los bolsillos, Luis salio de la entidad bancaria, se sento en el tercer escalon, extrajo un cigarrillo del bolsillo y se limito a esperar a que llegase la policia. Tan solo buscaba que un juez lo volviera a encerrar. Le cayeron quince anos. Cuando llevas la mayor parte de tu vida detras de unos barrotes, la vida en libertad se hace dura, muy dura. --?Que tal? La voz de Alfredo le saca de sus pensamientos. Es un cliente habitual. El hombre tiene unos cuarenta y tantos, voz de pito y una galopante alopecia ha deforestado gran parte de su cuero cabelludo. Posee un rostro vulgar: los ojos, marrones y achinados; la nariz, pequena; y es proclive a que le salgan ampollas en los labios. A pesar de que hace poco deporte, esta mas delgado que un alfiler. Viste como si se hubiera quedado estancado en otra epoca. Lleva chaquetas de pana con coderas, camisas de rayas con pajarita y pantalones acampanados. El tio trabaja como redactor creativo en una agencia de publicidad. Es culto. Se licencio en Filologia inglesa y tiene un posgrado en marketing digital. Sabe varios idiomas y le gusta hablar sobre literatura. Algunos dias le presta algun libro para que lo lea. Hace meses Alfredo se jactaba de ser una persona progresista, pero dejo de serlo cuando hizo las maletas y se mudo a otro barrio. --De mal en peor. En fin... ?Que te apetece tomar? --Ponme un corto de cerveza y un pinchito de tortilla. --No te lo recomiendo. La tortilla sabe a culo. Y el habia escupido tres veces, pero omitio esa parte. --!Joder! Entonces... --dice mirando los platos que quedan en el mostrador-- Mejor unas jetas. --Buena eleccion. Del bolsillo de la americana saca un ejemplar. En la portada se distingue el dibujo de una mujer asiatica embutida en un quimono. --Te he traido algo --dice mientras deja el libro encima de la barra. Marcos se limpia las manos en el delantal, esboza una sonrisa y lo coge. Al menos hay alguien fuera que le aprecia. --Rashomon y otras historias. -
La ira de Zygmunt Miloszewski
https://gigalibros.com/la-ira.html -
Viva la Revolucion de Eric Hobsbawm
https://gigalibros.com/viva-la-revolucion.htmlEn su autobiografia Anos interesantes. Una vida en el siglo XX, Eric Hobsbawm escribio que America Latina era la unica region del mundo fuera de Europa donde se sentia realmente en casa. Siempre se sintio atraido por el potencial de la revolucion social en America Latina: despues del triunfo de Fidel Castro en Cuba en enero de 1959, <
> -escribio- < >. -
Oh, sorpresa de Carlota Manzano
https://gigalibros.com/oh-sorpresa.htmlDevastada, aplastada, humillada, arrollada, pateada, y todos los adjetivos que terminaran en – ada y tuvieran una connotacion negativa. Asi me sentia aquella fatidica noche de viernes. Mi amiga Zoe a un lado y la calle para correr; eso era todo lo que me habia quedado. ?No habeis sonado alguna vez que vuestra vida se hace anicos en cuestion de minutos y luego habeis despertado, contentos porque se trataba de una pesadilla? Pues asi estaba yo, salvo por el "detalle" de que, por mucho que me pellizcara, no me iba a despertar. ?Lo que pensaba? Que sin duda tenia que tratarse de una broma de mal gusto del destino, que a veces se mostraba caprichoso. Vale, ya habia captado el mensaje, ?y ahora que? Veintiun anitos y la carrera de Derecho recien terminada. Si, porque estaba esperando la nota del Trabajo Fin de Grado, pero eso lo tenia chupado. Y a ver, preciso, no porque yo le hubiera hecho ningun trabajito extra a un miembro del tribunal, que lo de "chupado" ha sonado fatal; sino mas bien porque me habia dejado los codos encima de mi mesa de estudios desde que ingrese en la universidad. Nunca olvidare el primer dia que puse los pies en ella, entre otras cosas porque ese fue el que mi mirada se topo con la de Toni y note un saetazo en el costado que no podia venir de ningun otro lado que del arco del traviesillo Cupido. ?Tenia Toni mi edad? Pues ni mucho menos. A ver, entre que el estaba cursando el ultimo curso de Derecho y que antes se habia graduado en Direccion y Administracion de Empresas, como que me sacaba ocho anos. Pero ?que son ocho anitos de nada cuando sabes que acabas de darte de bruces con el amor de tu vida? En honor a la verdad, yo siempre crei que mi alma gemela seria relativamente parecida a mi, pero la primera ensenanza que recibi tras conocer a Toni es que dos personas pueden estar destinadas a unir sus vidas, aunque se parezcan lo que un huevo a una castana, es decir, nada de nada; ni por dentro, ni por fuera. La primera sorprendida por aquella relacion fue Zoe, a la que habia conocido en el instituto y con la que no me aburria. Como buena argentina, Zoe hablaba hasta debajo del agua; para mas senas, la muy condenada hablaba hasta en suenos y despues lo negaba, pues menudita era ella para reconocer algo que no le conviniera. Lo que mas le llamo la atencion de mi amiga es que, segun ella, la jeta de Toni indicaba que era mas acido que un limon y que, ademas, a su entender, no es que fuera mas feo que Picio; pero un poco molesto de ver, como que si. ?Como lo veia yo? Pues bueno, loca de amor como estaba, para mi no lo habia mas atractivo. Vale que yo entendia que el chico no estaba destinado a ganar el concurso de Mr. Universo, pero su inteligencia lo hacia atractivo a rabiar. En cuanto a su cara, la jodida de Zoe se pasaba tres pueblos, porque en eso era del monton; ni mas, ni menos. No ser el tio mas bueno de la facultad como que hacia todavia mas meritorio el hecho de que las chicas acudieran a el como las moscas a la miel. Y es que mi Toni tenia un carisma que no se lo saltaba un galgo, y la competicion por echarle el guante estaba servida. Aparte, el que su familia estuviera podrida en billetes era un aliciente mas para alguna cazafortunas de pacotilla de esas que tienen la lengua muy suelta, igual que la gomilla de sus bragas. En medio de tamana algarabia, me senti la chica mas afortunada del mundo la primera vez que el se dirigio a mi. Yo seguia siendo una novata total el tercer dia de clase y el se ofrecio a acompanarme a la biblioteca, despues de que mi habitual despiste hiciera que chocaramos y mis libros salieran volando en direccion a su estomago, que los repelio al contraerse. Y es que fuerte si que estaba el chico, pues podia partir nueces con aquel abdomen duro como un lebrillo de lavar de los antiguos. --?Que te he hecho yo para que atentes contra mi de esa manera tan vil? --Me regalo una sonrisa que hizo que mis mejillas se pusieran a reventar de color. --Perdona, yo, yo... --Estuve unos segundos barajando una respuesta que no acerto a salir de mis labios. --Lo que te pasa a ti es que eres mas nueva que el parte del dia y necesitas la ayuda de un veterano como yo. --Me ayudo a recoger los libros y me parecio la amabilidad en persona. --Pues un poco perdida si que estoy, que te voy a contar. Yo creo que Walli a mi lado esta de lo mas ubicado--resople. --Eso lo arreglo yo en un periquete. ?Comenzamos por la biblioteca y te hago despues un tour turistico por todo el campus? Te aseguro que llevo aqui mas tiempo que el picaporte de la puerta y que no vas a encontrar mejor cicerone. Si estais pensando que igual me aferre a Toni en ese instante como a un clavo ardiendo, ya os voy adelantando que no. Camino de la biblioteca, senti un cosquilleo inusitado en el estomago que tenia los sintomas de ser aquel sindrome del que todos hablaban, y al que yo habia permanecido inmune hasta aquel dia; ese sindrome llamado "primer amor". Desde el instante en el que comence a notarlo nos volvimos inseparables y yo, sin comerlo y sin beberlo, me converti en el centro de todas las miradas del campus. Tamana novedad me cogio de improviso, pese a que yo ya estaba acostumbrada a que pusieran los ojos en mi, sobre todo los hombres; vamos que, por decirlo de alguna manera fina, yo solia paralizar las obras a mi paso. Pero no paralizarlas de, "vaya tela lo que te han dicho" y ya, sino que las obras cerraban durante dos dias por shock del personal. Eso es lo que decia Zoe, al menos. ?Yo lo veia? Pues no tanto, la verdad. Reconocia que la madre naturaleza se habia portado muy bien conmigo y lo agradecia, pero tampoco es que pensara que fuera para tirar cohetes. ?La realidad? La realidad es que habia hecho mis pinitos como modelo, ya que ser alta, delgada (pero con un muestrario de curvas por cuerpo), rubia y con ojos azul zafiro me habia abierto muchas puertas. Otra cosa es que yo las cerrara a cal y canto cuando viera la clase de "favorcitos" que algunos energumenos pedian a cambio de una portada o un par de desfiles. ?Patetico? No, eso hubiera sido quedarse muy, muy corta. Con autenticas arcadas sali de esos despachos, con animo de no volver mas. En ocasiones asi, siempre pensaba en aquellas palabras de mi madre "tu lo unico que tienes que hacer es meter la cabeza en los libros y no sacarla hasta que te vea la toga puesta, que a ti un plato de comida no te va a faltar nunca". Con esa premisa, yo dije aquello de "nunca mais" y me matricule en una carrera que suponia la ilusion de mi vida. Y como colofon alli conoci a mi principe azul. ?Se podia pedir mas? Sin embargo, ?habeis escuchado alguna vez aquello de "que dia tan bonito, ya vereis como viene alguno y lo jode"? Pues eso me paso a mi, pero no con un dia, sino con mi vida al completo, el ultimo ano de carrera. Para cuando llego el caos que enseguida os describire, Toni ya llevaba varios anos casi enclaustrado en su jaula de oro, su casa. ?La razon? Unas durisimas oposiciones de notarias por delante, para que el unico vastago masculino de aquella adinerada familia siguiera los pasos de papa. Y matizo lo de masculino porque el tenia una hermana, Olimpia, mas vaga que el fango y mas mala que la quina. Ea, pues ya os he hecho una descripcion tan simple como ilustrativa de la arpia de mi cunadita, que no me podia ver ni en pintura, al considerarme una "muerta de hambre de tres al cuarto". En semejante escenario, que se completaba con unos padres mas estirados que las gomillas del tanga de Falete, como que no me movia yo como pez en el agua en casa de mi novio; menos mal que tampoco me invitaban demasiado a menudo, que la tirria que yo les tenia era reciproca. ?Cual habia sido mi error? Pues costarme demasiado confesarle a Toni, el dia que mi padre se marcho detras de las faldas de una chica diez anos mas joven que mi madre, que lo poco que esta pudiera ganar limpiando escaleras, apenas cubriria nuestros gastos de manutencion. Vive Dios que lo intente, pero entre que yo no me exprese con la suficiente claridad y que el tampoco le dio mucha importancia al tema, aquello se solapo con un polvazo y asunto concluido. No obstante, pronto comprobe que manuales, fotocopias de apuntes y materiales varios no se compraban solos; y todo fuera por terminar una carrera cuyo final tenia ya delante de mis narices, a pocos meses vista. El dia que Zoe, que estudiaba Enfermeria en el mismo campus, y que tampoco andaba sobrada de pelas, me dijo que iba a trabajar de stripper una temporadita, la tilde de loca. Pese a ello, dos semanas mas tarde ambas hicimos en conjunto nuestra primera despedida de soltero. Si, como ya estareis imaginando, no le dije ni mu a Toni, quien hubiera puesto el grito en el cielo. La idea era tirar con aquel trabajo, haciendo un servicio una vez a la semana, hasta final de curso y luego "aqui paz y despues gloria". Y a gloria me supieron los doscientos euros que nos pusieron a cada una en la mano aquel primer viernes noche. Pocas explicaciones tuve que darle a mi amor, puesto que sus oposiciones solo le permitian que salieramos los sabados, con lo cual en breve podria retirarme como stripper y con mi titulo de abogada en la mano. La noche de marras, en la que mi vida estallo por los aires, iba a ser en la que Zoe y yo nos cortaramos la coleta, habida cuenta de que ya nos graduabamos y los gastos de estudios tocaban a su fin. --Fijate que me da mala espina--le confese camino de aquella despedida de pijos. --La concha de tu madre, boluda, no me seas ceniza. --Zoe no habia perdido parte de su caracteristica forma de hablar, pese a que llevaba desde los trece anos en Espana. --Yo que se, Zoe, es que cada vez que lo hacemos, siento que traiciono a Toni. -- No podia evitarlo, y vaya si lo habia intentado, pero no habia manera. --Che, tranquilita. No te me montes peliculas que te veo venir. A nosotras no nos pone una mano encima ni Dios, ni que estuvieramos franeleando con esos tios. --?Franeleando? Yo me muero con tus cosas. Por muchos anos que pasen me sigues dejando locas con tus expresiones. --Procure dejar las preocupaciones a un lado
-
El aliado de Ivan Repila
https://gigalibros.com/el-aliado.htmlAl conocer a una importante activista del movimiento feminista, el protagonista de esta novela, un hombre contemporaneo que se considera igualitario, se da cuenta de que el mundo aun no esta donde deberia en cuestiones de igualdad. Convencido de que toda conquista social ha requerido una revolucion violenta para llegar a ser efectiva, decide emprender una campana anonima de machismo extremo para provocar un cambio radical. Poco a poco desarrollara una doble vida, como cabecilla de un grupo anonimo y violento ferozmente machista que actua en varios niveles de la sociedad, y como
pareja de la lider del movimiento feminista que le da replica en las calles. El precio a pagar para <>, convertirse en el ser que mas odia la mujer que ama. -
Un affaire casi perfecto de Elizabeth Subercaseaux
https://gigalibros.com/un-affaire-casi-perfecto.html?Sera ese el juez Rementeria?, se pregunta un periodista que debe entrevistarlo una hora mas tarde, mientras lo ve escapar del lugar donde ha muerto Amalia Griffin. ?Que hacer en un caso asi? ?Le preguntara que hacia en el Club de Golf? Por otro lado Teresa, la amiga de Amalia, ?aceptara la explicacion que se ha dado a pesar de existir un escrito que incrimina al juez? o ?escarbara hasta saber la verdad? Haber visto a ese hombre escapando y silenciarlo se convierte en la pesadilla de este periodista. Descubrir al asesino se convierte en la unica meta de Teresa. Escapar de si mismo es el ultimo anhelo del juez.
-
El secreto de las hermanas Blackwood de Ellen Marie Wiseman
https://gigalibros.com/el-secreto-de-las-hermanas-blackwood.htmlL CAPITULO 1 LILLY Julio de 1931 Blackwood Manor Horse Farm Debbin's Comer, Nueva York ILLY BLACKWOOD, DE NUEVE ANOS, SE PLANTO EN LA buhardilla del atico de Blackwood Manor por milesima vez, deseando que la ventana se abriera y poder asi oler el aire fresco. Al dia siguiente seria su cumpleanos y no podia pensar en un regalo mejor que aquel. Seguramente, papa le traeria un vestido nuevo y otro libro cuando volviera de Pensilvania, pero habia estado lloviendo y queria saber si afuera se estaba igual que adentro. Se pregunto si las gotas de lluvia habrian impregnado el ambiente de suavidad y frescura, como le pasaba al agua cuando se daba un bano de esponja. ?O afuera tambien estaria el aire caliente y pegajoso como el de su cuarto? Le habia pedido cientos de veces a mama que cambiara la ventana por otra que pudiera abrir, y quitar aquella reja enroscada para poder ver mejor, pero mama, como de costumbre, nunca la escuchaba. Si mama supiera que papa la dejaba jugar en la otra parte del atico cuando ella se iba a misa, papa estaria en apuros. Mas que cuando la enseno a leer; mas incluso que cuando le regalo una gata en su tercer cumpleanos. Lilly suspiro, saco el telescopio por el alfeizar, y arrimo el ojo. Por lo menos era verano y no tenia que rascar el hielo del cristal. Papa llamaba a aquella hora del dia <
>, cuando el paisaje parecia pintado unicamente con dos colores, verde y azul. La hilera de pinos al otro lado del establo, pasando por los prados donde jugaban los caballos, parecia hecha del mismo fieltro que Lilly usaba como mantas para las munecas. Las sombras, cada vez mas oscuras, estaban por todas partes. Fue deslizandose por el borde del bosque buscando al ciervo que habia visto el dia anterior. Ahi estaba el sauce torcido; la roca junto al arbusto que el invierno pasado se puso roja; el tronco quebrado junto a la valla de piedra; y ahi estaba la... Paro y volvio con el telescopio a la valla. Habia algo diferente al otro lado del bosque, cerca de las vias del tren que atravesaban el lejano prado. Aparto el telescopio del ojo, parpadeo, miro nuevamente y jadeo. Le silbo el pecho, como cada vez que se ponia nerviosa. Habia una serie de luces azules, rojas, amarillas y verdes, como las que papa colgaba en su cama en Navidades, colgando sobre una gigantesca casa de tela. Habia otras luces rodeando mas casas con forma de fantasmillas regordetes. Lilly no pudo distinguir las palabras, pero tambien habia senales con letras iluminadas por bombillas de colores. Las banderas ondeaban desde lo alto de sus postes, y una linea de luces amarillas flotaba a lo largo de las vias del ferrocarril. Parecian las ventanas de un tren que estuviera detenido. Uno de los largos. Lilly dejo el telescopio, espero a que sus pulmones dejaran de silbar, fue a la estanteria y cogio su libro ilustrado favorito. Paso las paginas hasta encontrar lo que estaba buscando --un colorido dibujo de una tienda a rayas rodeada de vagones, caballos, elefantes y payasos--. Se apresuro de vuelta a la ventana para comparar la forma de la tienda del libro con la casa brillante del otro lado del bosque. Estaba en lo cierto. Era un circo. Y podia verlo. Normalmente, las unicas cosas que podia ver a traves de su ventana eran caballos y pastizales, y a papa trabajando junto a su ayudante junto a las vallas blancas, o el establo amarillo de los caballos. A veces, mama paseaba cruzando los pastos hasta el establo, con su larga melena rubia arrastrandose tras ella como un velo. Otras veces, los camiones paraban a la entrada del establo y el ayudante de papa subia y bajaba los caballos de los remolques o descargaba sacos y balas de heno. Una vez, dos hombres vestidos con ropas anchas --papa los llamo gandules-- se encaminaron hacia la entrada, donde el ayudante de papa salio a recibirlos con la escopeta. Cuando Lilly tenia suerte, podia ver a los ciervos asomando por el bosque, o a los mapaches corriendo a lo largo de la valla en direccion al cobertizo, o el tren acercandose por las vias. Y si pegaba la oreja a la ventana, el ruido de la maquinaria del tren o el pitido del silbido llegaban hasta ella atravesando el cristal. Pero ahora habia un circo ahi fuera, al otro lado de la ventana. !Un circo de verdad, en ese mismo instante! Por primera vez en su vida, estaba viendo algo diferente y lo estaba viendo en vivo, no en un libro ilustrado. Se puso muy contenta, pero al mismo tiempo, tambien se puso triste. Si no se hubiera pasado la tarde leyendo, habria podido ver como descargaban las cosas del circo en la parada del tren; podria haber visto como traian las tiendas; podria haber visto los elefantes, las cebras y los payasos. Ahora estaba demasiado oscuro para ver nada salvo las luces. Dejo el libro y conto los travesanos de la ventana. A veces contar la hacia sentirse mejor. Uno, dos, tres, cuatro, cinco. Nada. No funcionaba. No podia dejar de pensar en lo que se habia perdido. Apreto la oreja contra el cristal. A lo mejor podia oir los gritos del director o la musica del circo. Pero lo unico que oyo fue el pitido de su pecho y los latidos acelerados del corazon. En el alfeizar de la ventana, su gata, Abby, se desperto y parpadeo con somnolencia. Rodeo con el brazo al atigrado felino anaranjado, atrayendola hacia si, y hundiendo su nariz en el suave pelaje del animal. Abby era su mejor amiga y la gata mas lista del mundo. Podia apoyarse en sus patitas traseras para dar besitos y levantar la zarpita para tocarla y llamar su atencion. Incluso podia saltar a la cama de Lilly o bajarse de ella cuando se lo pedias. --Apuesto a que mama ira al circo --dijo Lilly-- porque la gente no le tiene miedo, asi que ella no tiene por que preocuparse de eso. La gata ronroneo. ?Como sera el hombre elefante?, se pregunto Lilly. ?Que se sentira al tocarle la piel arrugada y quedarte mirando esos ojos marrones y grandotes? ?Y montar en el caballo rosa y blanco de un carrusel? ?Como sera? ?O caminar entre la gente, comer cacahuetes y algodon de azucar? ?Y ver un espectaculo de leones autentico, en vivo y en directo? Habia noches en las que, tras apagar las luces y acurrucarse en la cama, los pensamientos salian de su mente abandonando la habitacion, corriendo escaleras abajo. Habia leido bastantes libros como para saber que la casa tenia mas de una planta, y se imaginaba a si misma escabullendose por el atico, encontrando una escalera, abriendose paso por las plantas inferiores de Blackwood Manor, y saliendo por la puerta principal. Se imagino alli fuera, con los pies sobre la tierra, respirando profundamente, oliendo a algo mas que madera vieja, telaranas y polvo caliente, para variar. Durante las visitas semanales de papa, uno de sus juegos favoritos consistia en adivinar a que olia su ropa. A veces olia a caballos y heno; otras veces a betun o humo, pan horneado o... ?Como se llamaba esa cosa que se suponia que era una mezcla de limones y cedro? ?Colonia? Bueno, fuera lo que fuese, olia bien. Papa le habia hablado mucho del mundo exterior. Tambien sabia como era por lo que habia leido en los libros, pero no tenia ni idea de lo que era sentir la hierba entre los dedos, ni como era el tacto de una corteza. Sabia que las flores eran aromaticas porque su padre le traia un ramillete cada primavera, pero se moria por pasear a traves de un campo de margaritas y dientes de leon y poder sentir la tierra y el rocio en los pies descalzos. Queria oir a los pajaros cantando y escuchar el viento. Queria sentir la brisa y el sol sobre su piel. Habia leido todo lo que se podia leer sobre plantas y animales, podia recitar el nombre de cada uno de ellos si era necesario, pero al margen de Abby y el raton que habia visto correr por el zocalo aquel invierno, jamas habia visto ningun otro animal de cerca. Su otro juego favorito era escoger un lugar en el atlas y leer todo lo que pudiera sobre el para, seguidamente, planear un viaje hasta quedarse dormida, decidiendo que hacer y donde ir cuando estuviera alli. Su lugar favorito era Africa, donde se imaginaba corriendo con los leones, los elefantes y las jirafas. A veces imaginaba que rompia la ventana de la buhardilla, se arrastraba hasta el tejado y se deslizaba hacia abajo por un lateral de la casa, escapando furtivamente hasta el establo para ver los caballos. Y es que por todo lo que habia visto y leido, eran sus animales favoritos, aparte de los gatos, por supuesto. No es solo porque fueran fuertes y hermosos, sino porque podian tirar de remolques, trineos y arados. Dejaban que la gente los montase y podian encontrar el camino de regreso a casa si se perdian. Papa decia que los caballos de Blackwood Manor estaban demasiado alejados de la ventana del atico, asi que Lilly los bautizo con nombres de su propia invencion: Gypsy, Eagle, Cinnamon, Magic, Chester, Samantha, Molly y Candy. Como le habria gustado acercarse a ellos, acariciarles las crines y cabalgar sobre sus lomos por los prados. Si esos estupidos barrotes de la ventana que mama decia que eran por su propio bien no estuvieran ahi... Entonces recordo la advertencia maternal, y sus suenos se convirtieron en pesadillas. --Esos barrotes son para protegerte --le habia dicho su madre en mas de una ocasion--. Si alguien se atreviera a entrar y te viera se asustaria, y trataria de hacerte dano. Cuando Lilly le pregunto por que tendrian que tener miedo de ella, mama le dijo que era porque era un monstruo, una abominacion. Lilly no sabia lo que era una abominacion, pero sonaba mal. Bajo los hombros y suspiro en mitad de la quietud de su habitacion. No habria circo para ella. Ni ahora ni nunca. Jamas podria salir del atico. El unico modo en el que podria ver el mundo seria a traves de los libros. Papa decia que afuera el mundo tampoco es que fuera una maravilla, como ella creia, y que debia estar agradecida y feliz por tener una cama caliente y comida que echarse a la boca. Habia mucha gente que no tenia casa ni trabajo, y tenian que hacer cola para que les dieran un trozo de pan y algo de sopa. Le conto algo sobre bancos y dinero, y no se que crisis financiera, pero ella no entendio ni jota. Y tampoco la hizo sentir mejor, la verdad. Rodeo a Abby entre sus brazos y se sento en la cama de hierro que habia medio escondida debajo de un rincon de papel pintado de un cielo azul redondeado. La lampara de su mesilla de noche proyectaba sombras alargadas sobre el suelo de madera, lo cual significaba que pronto oscureceria y seria hora de apagar la luz. No queria olvidarse de apagarla. De lo contrario, tendria que aguantar las monsergas de mama, siempre con la misma cantinela. Le habia dicho mas de cien veces que si alguien veia luz en su habitacion y la descubria alli se la llevarian lejos y nunca mas volveria a verlos. Pero la semana anterior hubo una noche que se olvido de hacerlo porque habia empezado a leer un libro nuevo y se habia quedado durmiendo. Dejo a la gata en la cama y examino las cicatrices de sus dedos. Papa tenia razon, la locion estaba surtiendo efecto. !Pero hay que ver como quemaba la llama de la lampara de mama! --La letra con sangre entra --habia dicho mama. Lilly estuvo a punto de preguntarle si la Biblia decia algo sobre aquello de la letra con sangre entra, pero al final no se atrevio. Se suponia que debia saber lo que decia la Biblia. --Me pregunto que haria mama si supiera que me paso el dia leyendo los libros de papa en lugar de esa vieja Biblia --le dijo a Abby. La gata restrego el hocico contra el brazo de Lilly. Despues se hizo un ovillo y se volvio a dormir. Cogio la Biblia de la mesilla de noche --no se habria atrevido a ponerla en ningun otro lugar --, movio el punto de lectura hasta situarlo unas cuantas paginas mas adelante, y volvio a dejarla en el mismo sitio. Mama solia revisar cuanto avanzaba la lectura, y si el marcapaginas no se movia, empezaban los problemas. De acuerdo a su madre, la Sagrada Biblia y el crucifijo que habia colgado en la pared sobre su cama eran las dos unicas cosas que necesitaba para ser feliz. El resto de cosas que habia en la habitacion eran cosa de papa: la mesa de mimbre para las fiestas de te, con tapete de encaje, su bandeja de plata y sus tazas de porcelana, la mecedora a juego y el osito de peluche que habia sentado en el taburete acolchado de color azul junto al armario; la casa de munecas con los muebles en miniatura y sus munequitas; la maqueta de la granja de animales asomando desde la balda superior de la biblioteca, con aquellas caras que parecia que se iban a poner a cantar de un momento a otro; tres munecas de porcelana con vestidos de encaje en un cochecito de bebes, de esas que tenian ojos que se abrian y se cerraban. Y, por supuesto, la biblioteca llena de libros. Hubo un tiempo en que parecia que no habia cosa en el mundo que papa no fuera capaz de darle, hasta que leyo Blancanieves y le pidio un espejo. A veces, en mitad de la noche, cuando estaba segura de que todo el mundo estaba durmiendo y no habia mas que una oscura negrura al otro lado de la ventana, encendia la luz y estudiaba su reflejo en el cristal. Lo unico que veia era una mascara fantasmagorica y borrosa devolviendole la mirada, con los barrotes rizados serpenteando sobre su piel. Observaba aquel reflejo blanco detenidamente, se tocaba la frente, la nariz y las mejillas, intentando hallar lo grotesco, o el trozo que faltaba, pero todo parecia encajar a la perfeccion. Cuando le preguntaba a papa que habia de malo en ella, le decia que para el era muy hermosa y eso era lo unico que importaba. Pero ponia ojos comicos cuando lo decia, asi que no creia que dijera la verdad. Pobre de el si mama llegaba a enterarse alguna vez, porque su madre siempre decia que mentir era pecado. Por suerte para el, ella nunca le delataria. Papa le habia ensenado a leer y escribir, a hacer sumas y restas. Fue el quien decoro las paredes de su habitacion con el papel pintado rosa, y era el quien le traia vestidos y zapatos cuando los que tenia se le quedaban pequenos. Traia comida para Abby y dejaba que Lilly fuera a la otra parte del atico para que pudiera estirar las piernas. Una vez, hasta trajo un fonografo para ensenarle a bailar el charleston y el tango, pero ella se ahogo de cansancio y tuvieron que parar. Le encantaba la musica. Le suplico que dejara el fonografo en su habitacion pero tuvo que llevarselo de vuelta abajo, y es que si mama se hubiera llegado a enterar de que lo habia cogido, se habria puesto hecha una furia. -
bajo el cielo de paris de Arlette Geneve
https://gigalibros.com/bajo-el-cielo-de-paris.htmlArianne alzo el rostro para mirar el cielo que en esa manana calida de verano estaba completamente despejado. En los ultimos dias aviones americanos e ingleses habian surcado los cielos de Francia de forma continua, y sin tregua. Miles de soldados que se lanzaban desde el interior de las bestias de metal, habian tintado el cielo azul de puntos negros, para convertirse poco despues de abrir los paracaidas, en flores de algodon blanco. Oscilaron suspendidos en el aire durante varios minutos antes de tomar tierra firme, y llevar la esperanza de libertad a la poblacion oprimida. La ciudad de Paris habia sido liberada del yugo teuton, y Alemania que sufria derrota tras derrota, se replegaba hacia Belgica. La guerra llegaba a su fin, y los franceses podian respirar con un profundo alivio. Arienne clavo sus pupilas en los Campos Eliseos atestados de gente, de patriotas deseosos de darle la bienvenida a los aliados. A lo lejos se podia escuchar las notas de La Marsellesa que estaba siendo ofrecida con un sentido de orgullo y patriotismo sin parangon, y el alborotado repique de las campanas del Notre Damme, daban el punto festivo a la celebracion que se alargaria durante dias. Una muchedumbre aplaudia con fervor al paso de los soldados que en ese momento hacian su entrada triunfal en la ciudad, con una sonrisa en los labios, y sorpresa en los ojos. Blindados de la 2a Acorazada rendian honores, y los oficiales miraban, con un brillo de satisfaccion en sus pupilas, el desfile de sus companeros. Muchos de los espectadores se negaban a mantenerse pasivos, y blandian panuelos blancos en senal de bienvenida. Algunas muchachas osadas y risuenas, lanzaban besos a los sonrientes soldados que pasaban a su lado, estos, les devolvian el gesto lanzandoles chocolatinas. Arianne queria disfrutar del jubilo, pero no habia logrado una posicion ventajosa para ello a pesar de que lo habia intentado. Aunque se ponia de puntillas, no lograba ver mas alla de las espaldas de los parisinos, y de los oficiales que hacian una fila de honor con sus jeeps y blindados, para proteger el desfile de la gente agrupada en la gran avenida. Resignada, solto un suspiro y comenzo a darse la vuelta sin percatarse que la multitud la cercaba impaciente por aproximarse todo lo que permitia el estrecho pasillo. Robert St'James tenia los ojos clavados en la muchacha que tenia delante de el, habia dejado un momento su asiento en el jeep para buscar una botella de agua, ahora que regresaba de nuevo a su lugar con una bien fria, se topaba con la mujer mas extraordinaria que habia contemplado nunca. Lo habia dejado noqueado. Trabado en un suspiro que lo descentro. La muchacha tenia el cabello castano, y brillaba bajo los rayos del sol hasta el punto de cegarlo. El perfume de la satinada piel, le llenaba las fosas nasales produciendole un placer que creia olvidado. Olia a lavanda cuando la mece una brisa primaveral. La guerra era tan cruel con los recuerdos que los extinguia. Llevaba demasiado tiempo fuera de casa. Anoraba a su madre, a sus hermanas, y todo lo bueno que habia aprendido a valorar durante esos meses en los que habia estado privado de lo mas elemental: la familia. El vestido de fino algodon, y estampado con vivas flores en rojo y blanco, se ajustaba de forma perfecta al bien formado cuerpo femenino, y caia con soltura hasta las rodillas. El aire movia el tejido de forma juguetona y lo arremolinaba en torno a los muslos delineandolos a placer. Por alguna inexplicable razon, no podia apartar los ojos de ella, ni comprendia las ganas que sentia de pasar la yema de los dedos por las mejillas lozanas. Por la piel sedosa del cuello que le parecia tan incitante y subyugador. La habia visto hacerse un hueco entre el gentio para ver el desfile, pero su pequena estatura le impedia ver mas alla de los hombros de los ansiosos espectadores. Ella se movia hacia la izquierda y hacia la derecha buscando una posicion mejor, y cuando se percato de que no iba a lograrlo, desistio de su intento. Al tratar de darse la vuelta, las tres filas de personas que gritaban y agitaban sus brazos, le impidieron moverse del sitio. Robert contemplo el descorazonamiento de ella al no poder dar un paso hacia delante, o hacia atras. Estaba trabada entre el gentio que mostraba su alegria gritando al paso de los soldados y al contemplar los hermosos ojos que se cubrian de miedo, decidio acudir en su ayuda. Arianne sentia que se ahogaba. Estaba atrapada entre una multitud de personas que gritaban exaltadas, y que agitaban sus brazos sin percatarse de los codazos que daban al resto de viandantes parados. Trato de moverse para abandonar la fila, pero su intento resulto inutil. Habia sido tanta su ansia por contemplar la llegada de los vencedores, que se habia olvidado por completo que toda la ciudad desearia lo mismo que ella: ofrecer la bienvenida. -!Por favor! -Rogo con un hilo de voz. Pero era imposible hacerse oir entre la muchedumbre que gritaba enaltecida y llena de entusiasmo. La poblacion civil se abalanzaba sobre los soldados con vivas, aplausos, y aclamaciones. Los recibian con besos y con flores. Las botellas del mejor vino frances se vaciaban sobre las cabezas de ellos a manera de bautismo pagano. Arianne cerro los ojos porque comenzo a sentir un leve mareo. Apenas veia mas alla de los hombros o pecho de los hombres que oprimian su cuerpo y lo empujaban hacia delante, creyo por un instante que iba a terminar en el suelo y que seria aplastada por decenas de pies. El panico comenzo a aduenarse de ella. Se giro con inusitada brusquedad, y entonces, su cuerpo tropezo con un pecho amplio y robusto que la desestabilizo por completo. Trastabillo de forma precaria hacia atras, pero unos fuertes brazos la sujetaron e impidieron que cayera bajo los pies de las personas que jaleaban con fuerza. Arianne no se habia percatado que la persona que la sostenia era un militar, pero le agradecio infinitamente el apoyo. Alzo los ojos y los fijo en el menton cuadrado, firme. Siguio subiendo hasta llegar a unos ojos que le sostenian la mirada con verdadero interes, y ya no pudo apartar la mirada azul de la castana. El tenia una tonalidad suave, como el color de la miel templada. Sintio un escalofrio en la nuca, y un latigazo de interes en las entranas, que la sorprendio. Era el hombre mas apuesto y atractivo que habia visto nunca. -? Can I help you? -La voz, candente y profunda, le produjo un sobresalto en el pecho que la dejo vacilante, y sin capacidad de reaccion. Los fuertes brazos seguian sujetandola por los hombros e impedian que las personas que vitoreaban la empujaran en una direccion o en otra, pero ella no era consciente de ello, seguia con las pupilas fijas en el atractivo rostro masculino. En su altura y fuerte constitucion. Debia rondar el metro noventa, y el espeso cabello se le ensortijaba a la altura de la nuca. Sintio el impulso de enterrar los dedos para comprobar la textura. Advirtio que era americano, la bandera bordada en su hombro lo indicaba. Las trece barras horizontales, siete de ellas rojas y seis blancas, y un rectangulo azul en el canton con cincuenta estrellas blancas, resultaba inconfundible, y ella conocia la historia porque la habia estudiado en la universidad. Las barras representan a las trece colonias originales que se independizaron de Gran Bretana, y las estrellas representaba a los estados que formaban la Union... Arianne parpadeo. El vestia camisa y pantalon caqui, pero no llevaba la chaqueta del uniforme. Esa tarde en Paris hacia demasiado calor. El rubio cabello lo llevaba elegantemente peinado hacia atras, y libre de la gorra reglamentaria. Le parecio un hombre tremendamente varonil. !Seductor! Un suspiro profundo salio del interior de su garganta sin que pudiese evitarlo, y al percatarse, enrojecio hasta la raiz del cabello. -? Monsieur...? -formulo la inacabada pregunta en frances, y con un timbre de alarma en su voz aterciopelada, pero el hombre no le contesto de inmediato. Seguia con las pupilas brillantes clavadas en ella, y sin soltarla. -?Necesita mi ayuda? -Robert habia pronunciado las palabras en un correcto frances aunque con marcado acento. Los ojos de Arianne se entrecerraron atonitos-. Si me lo permite, la ayudare a salir del encierro donde se encuentra metida. Ella asintio de forma muy leve con la cabeza, porque si no se escabullia pronto de alli, iba a terminar desmayada por la falta de aire.
-
La ley del espejo de Yoshinori Noguchi
https://gigalibros.com/la-ley-del-espejo.htmlA partir de una historia sencilla y emotiva, Yoshinori Noguchi (Hiroshima, 1963), reconocido experto en coaching y asesoramiento psicologico, nos situa delante de un espejo para mirar hacia nuestro interior. A Eiko le preocupa que los companeros de colegio de su hijo Yuta lo maltraten, y se siente impotente y sola ante un problema que no sabe como resolver. Sin embargo, el enigmatico Yaguchi le facilita un metodo sorprendente gracias al cual vivira la situacion mas dificil de todas: enfrentarse a sus fantasmas y seguir adelante con espiritu nuevo. En el ano 2010, los lectores de Espana y America Latina descubrieron este relato de Yoshinori Noguchi y las reflexiones que lo acompanan. Esta ensenanza, a medio camino entre el coaching y las constelaciones familiares, nos acerca a una filosofia oriental renovada y nos propone pautas claras y efectivas para resolver de raiz los problemas de la vida.
-
Su Amante Misteriosa (Los Hermanos Thorpe 3), Elizabeth Lennox de Elizabeth Lennox
https://gigalibros.com/su-amante-misteriosa-los-hermanos-thorpe-3-elizabeth-lennox.html -
Sin limites de Lori Foster
https://gigalibros.com/sin-limites.html -
Los fabulosos Frank de Michael Frank
https://gigalibros.com/los-fabulosos-frank.html<
>, oye casualmente Michael Frank que su tia le dice a su madre cuando el es un nino de ocho anos. < > Con estas palabras oidas sin querer entramos en el fascinante mundo de los Frank. Los tios de Michael, Hankie Frank Jr e Irving Ravetch, son unos glamourosos guionistas de Hollywood sin hijos y estan doblemente emparentados: Hankie es hermana del padre de Michael, e Irving, el hermano de su madre. Las dos familias viven a poca distancia la una de la otra en el barrio de Laurel Canyon, situado en Los Angeles. La tia Hankie, con su excentrica personalidad, logra que todos los miembros de la familia se sometan a sus designios. Mujer de talento, temperamental y generosa en sus afectos, aleja a Michael de sus padres y de sus hermanos menores y pasa a ocuparse de su educacion: le indica lo que debe leer (Proust si, Zola no), que pintores debe admirar (Matisse si, Pollock no) y hasta que estilos arquitectonicos debe preferir. La tia educa la mente y la mirada de Michael hasta que esa mirada empieza a ver por si misma. ” Los fabulosos Frank ” conectara con cualquier lector que haya luchado para encontrar una voz independiente en medio de las turbulencias de la vida familiar. -
Dos veces Carmen, Catalina Conde de Catalina Conde
https://gigalibros.com/dos-veces-carmen-catalina-conde.html -
Los nombres de las cosas que alli habia de Antonio Skarmeta
https://gigalibros.com/los-nombres-de-las-cosas-que-alli-habia.htmlLos mejores cuentos del autor del inolvidable El cartero de Neruda.
-
Grandes estrategias de John Lewis Gaddis
https://gigalibros.com/grandes-estrategias.htmlUna clase magistral sobre el arte del liderazgo por el mayor experto mundial en pensamiento estrategico.
-
Companias silenciosas de Laura Purcell
https://gigalibros.com/companias-silenciosas.htmlUNA HISTORIA DE FANTASMAS VICTORIANA QUE EVOCA UN MIEDO INQUIETANTE QUE ATRAVIESA LA CONCIENCIA
DE LA MANERA MAS INESPERADA,
AL IGUAL QUE LOS ACOMPANANTES SILENCIOSOS
Ambientada en una mansion rural en ruinas, Companias silenciosas es una turbadora historia gotica de fantasmas que provoca escalo- frios.
Elsie, recien casada y tambien recien enviudada, es enviada a vivir su embarazo en la deteriorada casa de campo de su difunto esposo. Rodeada de sus nuevos y resentidos sirvientes y de aldeanos hos- tiles, Elsie solo cuenta con la incomoda compania de la prima de su marido.
En su nuevo hogar, en una habitacion que durante un breve instante aparecera abierta, encuentra un diario de doscientos anos, con la inquietante historia de la madre de una nina muda y de su poco natu- ral concepcion. Y de unas figuras de madera pintada con un pare- cido sorprendente a los personajes de esta novela que lo dejara sin aliento -
Tu eres el universo de Deepak Chopra
https://gigalibros.com/tu-eres-el-universo.htmlDesbordando el modelo tradicional cientifico, Chopra y Kafatos muestran que todos somos cocreadores de la realidad y que la consciencia es un campo de posibilidades infinitas.
-
Con olor a tinta corriente de Magdalena Zapata
https://gigalibros.com/con-olor-a-tinta-corriente.htmlCon olor a tinta corriente, retrata los abandonos mas profundos, los amores desviados, la forma mas cotidiana en que los seres humanos se dejan llevar por lo primitivo de sus sentimientos. Por los deseos irrefrenables, el olor de la tinta corriente y lo mejor, por una maravillosa piel sin estrenar.
-
Adolescentes de Eva Bach Cobacho
https://gigalibros.com/adolescentes.htmlUna herramienta animica y eficaz para los padres y madres de adolescentes. A veces son una maravilla y otras veces “vaya maravilla”. Partiendo de una serie de enunciados muy sugerentes y de su propio testimonio, la autora -pedagoga y madre- va desgranando ideas claras, valientes y con corazon, que son de gran ayuda y suponen un extraordinario reconstituyente animico para padres y madres de adolescentes. La adolescencia de los hijos es ingrata y encantadora a la vez, pero la mayoria de padres y madres la sufrimos mas que la gozamos. A menudo nos asaltan las dudas, los miedos, las dificultades para dialogar con ellos de un modo cercano, para marcarles unas normas claras, para conseguir que nos respeten y nos hagan caso… Tambien perdemos con facilidad los papeles o llegamos al limite de nuestra paciencia y nos dan ganas de tirar la toalla. Todo esto es muy normal y ocurre en las mejores familias. Sin embargo, si logramos conjugar la autoridad que como padres y adultos nos corresponde, con la ternura que hace falta para alcanzar sus corazones, vamos a sobrellevar y a vivir mucho mejor la adolescencia de nuestros hijos.
-
Un extrano en casa de Shari Lapena
https://gigalibros.com/un-extrano-en-casa.htmlDe la autora del thriller revelacion de 2017 La pareja de al lado, llega una nueva y adictiva novela repleta de giros y secretos.
-
Viaje al fin del oceano de Karina Luz
https://gigalibros.com/viaje-al-fin-del-oceano.html?Alguna vez te has enamorado del mar? Viaje al fin del oceano es un canto a la belleza de los suenos imposibles haciendose posibles, a ese amor entre seres afines y al mismo tiempo opuestos, que encontraran el amor verdadero mientras libran infinitas batallas de supervivencia en un realidad paralela, junto a Dioses, reinas, corceles alados y criaturas monstruosas. Hulsh es una joven nomada que dejo su tragico pasado atras; quedara embelesada con la luz azul inmarcesible y esplendorosa, que terminara por transportarla a otro mundo, mas maravilloso, mas real. Alli conocera al oceano en persona, conocera la poesia y luchara por descifrar un poema misterioso que encierra la clave de su destino.
-
Alto! ese novio es mio de Vanessa Lorrenz
https://gigalibros.com/alto-ese-novio-es-mio.html?Quien dice que el amor todo lo puede? Pues dejenme decirles algo, eso es una total y completa mentira, porque lo digo, !porque lo se!, en menos de lo que pensaba conoci el verdadero amor, ese que te lleva a las estrellas y te vuelve a bajar, ese amor del que hablan todas las canciones de amor. Ese en el que los poetas ponen sus bases para sus creaciones. Si alguien le hubiera dicho a Jeime que el amor la destruiria, se habria reido en la cara de esa persona. Ella vivio siempre rodeada de amor, sus padres eran un matrimonio estable al igual que sus abuelos y sus tios, todo era amor a su alrededor, por eso cuando termino sus estudios monto una pequena empresa de planner wedding o lo que es lo mismo una planificadora de bodas. Pero no crean que es sencillo, porque estar detras de la novia, las veinticuatro horas del dia, escogiendo vajilla, adornos, el vestido, es mas de lo que cualquiera podia aguantar. Por eso ahora estaba tratando de calmar los nervios de una novia histerica, sin que lo lograra. --Jeime dime que todo esta bien, llegaron mis tulipanes holandeses, dimelo, porque si no me muero. Ella suspiro cansada, esas nuevas ricas que creen que todo es muy importante, que si las flores, que la verdad es que ella las consiguio en nada de tiempo, pero bueno una planificadora de bodas, es la perfecta dama de honor detras de la dama de honor oficial, asi que le tocaba aguantar todos esos numeritos, mientras las verdaderas damas de honor se ligaban a los padrinos del novio. --Si Caroline llegaron todas las flores, la tarta es del disenador que querias, con el estrambotico sabor que elegiste, el servicio de catering es el que me pediste, todo esta tal como ordenaste--la tomo de los hombros para que enfocara su mirada en ella y dejara de morderse las unas--Es tu gran dia Caroline, disfruta del momento, tienes a un hombre grandioso que te esta esperando en el altar, asi que no lo hagas esperar. Esperaba que la sonrisa resplandeciente que tenia en el rostro calmara un poco los nervios de la novia, pero lamentablemente no fue asi, cuando ella vio que las lagrimas comenzaban a brillar en los ojos de Caroline, sintio que lo peor se avecinaba. -- ?Crees que estoy haciendo lo correcto? !He! Por dios esa mujer estaba loca, tenia un hombre guapo que la estaba esperando en el altar, para unir su vida en sagrado matrimonio, y ella solo se preguntaba si estaria haciendo lo correcto, pero en que mundo vivia esa mujer. --Claro que estas haciendo lo correcto, Caroline es con lo que siempre has sonado, tu gran dia, el hombre que siempre sonaste esta ahi afuera esperando por ti. --Pero estoy confundida, no estoy segura de amarlo, ?Como sabes cuando de verdad amas a una persona? !No puede ser! !O dios mio! Esto era lo peor que le puede pasar a una planificadora de bodas, que la novia quisiera salir corriendo en el ultimo momento. --Caroline, eso es algo que solo tu sabes, tu corazon lo sabe, amar a un apersona es encontrar la mitad que te falta en la presencia de la persona amada, es saber que recorrerias el mundo entero con tal de estar a su lado, sabras que estas con la persona correcta el dia que sientas que tu hogar no es otro mas que entre sus brazos. La novia comenzo a estallar en llanto y ella no pudo hacer nada, estaba a punto de pegarle una bofetada para que reaccionara, cuando la puerta de la pequena habitacion destinada para la novia se abrio sobresaltandolas. --Caroline no cometas esa locura, por favor te lo suplico. Un hombre de unos treinta y cinco anos, vestido con un traje de firma que en ese momento estaba desabotonado, llevaba la corbata floja, su cabello negro revuelto como si se hubiera pasado las manos varias veces desesperadamente. Ahora extendia una mano en direccion de la novia que estaba palida como una vela observando al hombre. --Jack ?Que estas haciendo aqui? Bien ahora Jeime sabia que se llamaba Jack, el intruso que queria impedir la boda, !la boda! Por dios ahora le tocaba a ella impedir que la novia se fugara. -- ?Como me preguntas eso? ?Crees que voy a dejar que te cases con ese estupido? --Sabias lo que habia Jack jamas te engane, no entiendo a que viene todo esto. --Solo respondeme una sola cosa, y dependiendo de tu respuesta me ire y no volveras a verme nunca en tu vida. --No lo hagas mas dificil, Jack por favor, no hagas que este momento sea aun mas horrible--dijo Caroline llorando a lagrima viva, Jeime puedo ver que se amaban con locura y no sabia la causa de porque no estaban juntos. -- ?Crees que vas a tener lo que tienes conmigo a su lado? Vio como Caroline le dio la espalda al pobre hombre que parecia desesperado, !Es que era estupida!, no se habia dado cuenta de que las lagrimas se le saltaron cuando vio como Jack daba la media vuelta con los hombros caidos, derrotado estaba a punto de salir por la puerta cuando ella sintio que tenia que hacer algo para impedir que eso terminara asi. --Caroline, eres estupida, vas a dejar ir al hombre que amas. Ambas miraron a la puerta cuando se escucho un sonoro portazo. --Se ha ido-- Caroline se tumbo de rodillas llorando desconsolada, la levanto de los hombros de mala manera, como vio que no reaccionaba le dio una bofetada, esperando que eso la sacara de su estado de nerviosismo. --Estupida ve detras de el, antes de que sea demasiado tarde, es que no lo amas, que esperas para ser feliz. --La boda--dijo aun llorando --Deja de pensar en eso, yo me ocupo del asunto, ahora ve por el. Cuando vio como la mujer salia corriendo, recogiendo entre sus manos la cola de su vestido, suspiro de alivio ahora quedaba lo mas dificil, como decirle a los invitados y principalmente al novio, que la boda se cancelaba.
-
El honor de la familia de Hannah Howe
https://gigalibros.com/el-honor-de-la-familia.htmlCuando el mayor mafioso del pais te hace una oferta que no puedes rechazar, ?que deberias hacer? En mi caso, decidi aceptar la oferta que me hizo el Sr. Vincent Vanzetti. Vanzetti me contrato para encontrar a su hija desaparecida, Vittoria, enfrentandome a la amenaza de represalias si fracasaba en mi tarea. Mientras buscaba a Vittoria, tuve que tratar con otros miembros del clan Vanzetti: Sherri, la segunda mujer de Vanzetti, de la misma edad que Vittoria, Sherri era una <
>, una estrella del porno cuya ambicion era aparecer en un reality de television; Catrin, la exmujer de Vanzetti, dura como el granito, el poder detras de su imperio criminal; y V. J. Parks, el novio de Vittoria, boxeador, un joven en plenitud entrenandose para intentar conseguir un titulo mundial. -
Lluvia fina de Luis Landero
https://gigalibros.com/lluvia-fina.htmlTras mucho tiempo sin apenas verse ni tratarse, Gabriel decide llamar a sus hermanas y reunir a toda la familia para celebrar el 80 cumpleanos de la madre y tratar asi de reparar los viejos rencores que cada cual guarda en su corazon, y que los han distanciado durante tantos anos. Aurora, dulce y ecuanime, la confidente de todos y la unica que sabe hasta que punto los demonios del pasado siguen tan vivos como siempre, trata de disuadirlo, porque teme que el intento de reconciliacion agrave fatalmente los conflictos hasta ahora reprimidos.
-
Los amantes de San Telmo de Graciela Ramos
https://gigalibros.com/los-amantes-de-san-telmo.htmlUna intensa historia de amor entre tres personajes inolvidables que cruzan tres culturas (la de los inmigrantes italianos en Argentina, la cultura criolla de Buenos Aires y la indigena de los indios expulsados por el General Roca) con los acontecimientos historicos del siglo XIX.
-
No lo llames amor, Noelia Amarillo de Noelia Amarillo
https://gigalibros.com/no-lo-llames-amor-noelia-amarillo.htmlLa convivencia no es facil en una comunidad de vecinos. En la mia hay malentendidos, vecinos cotillas, ninos ruidosos, ancianas de rigidas tradiciones, mujeres de disipadas costumbres (por lo visto, una de esas soy yo), divorciadas rompepelotas, apuestos metrosexuales y, aunque te cueste creerlo, hasta un par de personas que estan en sus cabales. Bueno, mas o menos…
-
metamorfosis de Pilar Parralejo
https://gigalibros.com/metamorfosis.htmlEstaba realmente cansada. Habia tenido un dia agotador en el hospital, habia tenido que soportar el volumen estridente del pub en el que habia pasado las dos ultimas horas con los chicos y ahora, por si fuera poco, tenia que volver a presenciar el numerito que Dawson y su nueva amiguita estaban dandole en el asiento trasero de su coche. No es que quisiera mirar o estar pendiente de lo que hacian o dejaban de hacer, pero lejos de ser silenciosos, esa desconocida hacia gemidos exagerados cada vez que Dawson le metia las manos debajo de la ropa, o cada vez que le mordia en el cuello, y por mucho que se esforzase en ignorarlos, llamaban su atencion, aunque mirase un solo segundo y devolviera la vista a la carretera nuevamente. No le importaba hacerlo una o mil veces por el, no por nada era su mejor amigo, pero odiaba tener que llevar a las ligues de Dawson a sus casas teniendo que ser testigo de lo que hacian en el trayecto. Por suerte, esa vez solo habia tenido que presenciar manoseos varios, lenguas de ida y vuelta y sonrisas juguetonas. Pero la pelirroja no vivia muy lejos del local en el que habian pasado las dos ultimas horas, y terminaron de besarse en el portal. Y lo mas importante, fuera de su coche, algo que agradecia enormemente. Dawson volvio a subirse un par de minutos despues, ajustandose la camisa, con la enorme marca de un chupeton en el cuello y el labio inferior hinchado (probablemente por las succiones de ese pulpo con minifalda al que acababan de dejar atras). --No vuelvas a pedirme que te lleve, Dawson. Yo no tengo un Love Hotel en el asiento trasero, ni llevo un servicio… --…de taxis. Ya lo se. Me lo dices siempre. --Y siempre cedo. Pero un dia dejare de hacerlo. Me da igual lo que hagas, con quien lo hagas o las veces que lo hagas, pero no en mi coche. --Sentencio--. Dawson, hace dos dias el marido de tu hermana penso que las bragas de encaje rojo que habia en el asiento trasero eran mias. Yo ni siquiera sabia que se las habias quitado a una de tus chicas y las habiais dejado ahi. Casi me muero de la verguenza, ?sabes? Dawson no pudo contenerse y estallo en risas. Adoraba verla enfadada. Adoraba las caras que ponia o la forma en la que le reganaba, pero lo mejor era ver como poco a poco volvia a ser la de siempre. Y, escasos minutos mas tarde, el enfado de Brooke habia desaparecido. Detuvo el coche frente un edificio de enormes puertas de cristal ahumado y Dawson se aflojo el cinturon de seguridad. --?Vendras al club manana? --No lo se… --encogio los hombros y nego con la cabeza mientras doblaba, hacia abajo, la comisura de los labios en una expresion de duda. --Tienes que venir. Ya sabes que eres mi talisman. --Declaro antes de besar su mejilla. Brooke sintio como se le encogia el estomago. --Ya veremos. Depende de mi enfado. --Yo se que no estas enfadada conmigo. Sonrio antes de acercarse para darle un segundo beso. Pero Brooke le detuvo, poniendo una mano en su boca antes de que tocase su piel. --Antes de tocarme lavate los dientes. Esa tia fumaba como un carretero y su aliento seguro que olia peor que un cenicero. En realidad solo la habia visto fumar un cigarrillo desde que Dawson la hizo ir hasta su mesa, y ademas se lo habia ofrecido TJ. Y tampoco habia estado tan cerca como para respirar su aliento. --Olia a su pintalabios y sabia a fresa. Pero no trates de dar la vuelta a lo que te he dicho. No me importa cuando termines. Quiero verte en el club. --Ire, ?de acuerdo? ?Cuando no he ido? --Esa es mi chica. Buenas noches, carino. --Buenas noches, idiota. Despues de una sonrisa, Dawson bajo del coche y, tan pronto como cerro la puerta, Brooke resoplo mientras arrancaba el motor. Estaba realmente cansada y no veia el momento de llegar a casa y meterse en la cama. Cerca del mostrador de recepcion estaba Jay, su vecino de al lado, un famosisimo actor negro de talla mundial que parecia estar escondiendose en su edificio mientras tomaba un descanso. Le saludo cortesmente y camino hacia su piso. --Al fin en casa. --Suspiro aliviada, dejando las llaves sobre la mesa y dirigiendose a su habitacion. Por fin podria darse su ansiada ducha y aun mejor, podria tomar su merecido descanso. Capitulo 2 Lo prometido es deuda Eran mas de las once de la noche, y el salon del club de striptease masculino, Olimpvs, estaba a oscuras. El perfume femenino flotaba en el ambiente, mezclandose con el humo de tabaco y con la excitacion de ver a la estrella de la noche bailar para ellas. De pronto, una tenue luz anaranjada ilumino el escenario, y todas las mujeres empezaron a gritar cuando, el adonis de cuerpo esculpido, se situo bajo esta, cubierto con una bata de saten con capucha de color cava que, refulgia como el oro bajo aquella bombilla. Segundos mas tarde empezo la musica, y Dawson procedio, desnudandose lentamente y de forma sensual, al ritmo de los acordes. Sus movimientos eran de lo mas provocativos, y las expresiones de su cara hacian que todas deseasen tocarle. Movia las caderas hacia adelante y hacia atras, haciendo brillar su piel, quitandose una prenda, otra y otra, y otra mas. Las mujeres de las primeras filas se empujaban las unas a las otras para estar lo mas cerca posible del dios del erotismo. Estiraban los brazos para llegar a el, para dejar billetes en el elastico de su ropa interior, o simplemente para acariciar su piel. El se mordia el labio inferior, sonreia o guinaba un ojo de vez en cuando. Brooke no quiso mirar el espectaculo, de hecho nunca lo habia hecho. Cuando su mejor amigo salio a escena, ella se giro y se apalanco en el sofa del salon. --Exhibicionista… --murmuro graciosa al escuchar a las mujeres chillar aun mas escandalosamente. Cerro los ojos y apoyo la cabeza en el respaldo con una sonrisa dibujada en el rostro. --Hay que admitir que no por nada es el mejor. Randy se dejo caer a su lado, haciendola botar en su asiento. Brooke abrio los ojos para mirarle, pero se cubrio la cara con las manos, fingiendo estar, completamente avergonzada, al darse cuenta de que solo llevaba un diminuto y cenidisimo tanga de cuero rojo con cremallera que cubria lo minimo. --Randy, por favor, !tapate! --Oh, vamos, pequena… --decia el, levantandose con una expresion simpatica mientras sujetaba sus munecas, le apartaba las manos de la cara y movia las caderas de lado a lado frente a ella. Los chicos se sentian a gusto en su presencia. A tal punto que, a veces, incluso le preguntaban como les quedaba el traje de la actuacion o le pedian que les ayudase a untarse el cuerpo con pinturas, aceites o autobronceadores. Y, al contrario que otras mujeres, ella no se sentia incomoda al verlos paseando por ahi, medio desnudos, o saber que hacian cuando se metian con chicas en la que llamaron <
>. Brooke habia estado desde la adolescencia con esos chicos y se sentia < > mas del grupo. La actuacion de Dawson termino unos minutos despues. Al volver al saloncito tenia la piel brillante, llena de perlas de sudor y respiraba pesadamente. Gary, el dueno del local, sabia que era el mejor, y siempre se encargaba de sacar a la estrella de la noche en los momentos clave, sobre todo cuando habia clientas VIP, por lo que, esa noche iba a ser agotadora. --Estoy molido… --se quejo. Brooke se levanto, cubrio sus hombros con una toalla y se puso de puntillas para darle un beso en la mejilla. --Pues descansa un rato. Yo me voy. Manana no trabajo y quiero aprovechar para dormir hasta el mediodia, que luego tenemos la fiesta de tu hermana y quiero estar descansada. --Quedate un rato mas… Despues podemos ir a tomar algo. --Si, eso, Brookie. Quedate. Luego te llevamos a casa. --Querras decir que os llevare a casa --dijo empezando a alejarse de ellos. Antes de llegar a la puerta se dio la vuelta. Se echo a reir al ver la estampa del salon: tres chicos, practicamente desnudos, suplicandole con la mirada que no se fuera. --Esta bien. Pero esta vez me llevais vosotros. --Advirtio, senalandoles con el dedo--. Estoy agotada del hospital y no me apetece tener que conducir tarde de camino a casa… --!Hecho! Las botellas de cerveza se acumulaban, vacias, a un lado de la mesa, junto a los vasos de tequila que habian ido bebiendo. TJ, Randy y Axel daban cabezadas en los asientos de cuero negro mientras Brooke y Dawson se miraban fijamente y en silencio, llevandose a los labios, un chupito tras otro. --Te apuesto cien dolares a que no puedes aguantar mi ritmo. --Cien… ?Crees que aun soy una ninita? !Que sean doscientos! --reto ella, levantando la mano con otro vasito. Dawson sonrio con autosuficiencia. Ella no solia tolerar demasiado bien el alcohol y si con lo que habian bebido, tres de sus amigos ya estaban K.O., daba por sentado de que ella no podria con un solo trago mas. Perdio, como era evidente. Despues del primer sorbo tuvo que parar. Se apoyo en las piernas de Axel, completamente mareada, y cerro los ojos, balbuceando algo como que no se relajase demasiado porque estaba a punto de ganar, lo que, por supuesto, habia estado lejos de pasar. --Eres una floja, carino. El camarero ya los conocia de otras veces y supo que no conducirian en ese estado, asi que llamo a un conductor sustituto para evitar que tuvieran un accidente. Este no tardo demasiado en llegar, algo que el stripper tambien agradecio, dada la cantidad de alcohol que habia consumido. Al llegar al apartamento de Brooke, Dawson la llevaba en brazos. Ya era casi una costumbre llegar juntos al piso de uno o del otro. Cuando bebian mas de la cuenta siempre era ella la que les acompanaba a casa, y la que peleaba con ellos hasta poderlos dejar en sus camas. Pero ahora era el turno de Brooke ser cuidada por sus amigos, o al menos por uno de ellos. Dawson la llevo al dormitorio y la dejo caer, sin tacto alguno, contra el colchon, pero ella ni se inmuto, solo se acomodo sobre las sabanas y siguio durmiendo. --Eres un desastre --rio. Le quito el calzado y los calcetines, la arropo y le dio un beso en la mejilla antes de tumbarse a su lado en la cama. Como siempre que se hacia tarde, tambien esa noche dormirian juntos. Tenia trece anos cuando sus padres murieron, el padre por una infeccion de oido y la madre por culpa del alcohol, con una horrible depresion por verse sin el amor de su vida. Brooke se quedo completamente sola ya que, ni sus tios ni sus abuelos quisieron hacerse cargo de una adolescente. Pero los Holden no iban a dejarla desamparada, era la mejor amiga de Lara y bastante mal lo habia pasado durante todo un ano como para que ellos tambien le dieran la espalda. Pero por mas que tratasen de convencerla, Brooke se nego en redondo a mudarse con ellos. Ella estaba bien aun sin sus padres, sabia cuidar de si misma y queria seguir viviendo donde lo habia hecho desde que nacio. Durante un tiempo fueron a asegurarse de que no le faltaba de nada, pero Brooke era realmente madura para su edad y no requeria demasiadas atenciones, todo lo contrario que Dawson y Lara, que siempre peleaban, que siempre tenian caprichos nuevos o que siempre tenian con lo que darles quebraderos de cabeza. Un par de anos despues Lara estaba empenada en mudarse a Miami con sus tios y, a pesar de que Brooke se quedaba sola, se nego a ir con ella sin importar lo mucho que le insistiese, de manera que, cuando esta se marcho volvio a quedarse sola. Fue entonces cuando Dawson decidio pegarse a ella como una lapa y no dejarla sola ni a sol ni a sombra. Dondequiera que fuera, Brooke debia ir con el, y dondequiera que fuera ella, el iba detras. Y asi fue como termino por ser un miembro mas de su pandilla de locos y la inseparable mejor amiga de Dawson. Pasaban de las once de la manana cuando Dawson se dio cuenta de que habian llegado tan borrachos como para acostarse sin siquiera ponerse un pijama. Brooke tenia la cara pegada a la almohada y la boca entreabierta en una expresion tan adorable como graciosa. Se agacho a su lado y le aparto el pelo de la cara. --Si te dijera que duermes asi no me creerias --dijo sacando el movil para hacerle una foto. Luego le dio un beso en la frente y salio de la habitacion. A parte del genero y el oficio, la unica diferencia resenable que habia entre ella y los chicos era su obsesion por la puntualidad, lo en serio que se tomaba el llegar a tiempo a los sitios, asi que se le ocurrio algo con lo que molestarla. Hacia poco que su hermana habia vuelto a Los Angeles. Y menos aun que ella y su recien estrenado marido se habian enterado de que, en pocos meses, serian padres, asi que habian estado organizando una pequena fiesta de celebracion a la que, evidentemente, todos estaban invitados. Esa fiesta empezaria a la una, y para ello faltaban solo dos horas. Con todo el cuidado que pudo bajo las persianas para dejar el dormitorio completamente a oscuras, la cubrio con la suave sabana para que estuviera aun mas comoda y puso su movil en silencio para que nada la despertase. --Que tengas un feliz descanso… --sonrio travieso, cerrando la puerta del apartamento sin hacer el menor ruido. Eran mas de las tres cuando un enorme estruendo la desperto de un sobresalto. Se sento en la cama de un brinco, y sin entender lo que estaba pasando miro a su alrededor completamente desubicada. Brooke nunca bajaba las persianas del dormitorio, le gustaba enterarse de cuando era de dia y de cuando no. De nuevo los golpes que la habian despertado volvieron a sonar, pero esta vez si pudo saber de donde venian. No comprobo la hora, pero supo, por la iluminacion de su apartamento que habia amanecido, !y hacia mucho! Corrio a la puerta sin mirarse a un espejo antes de abrir y se encontro de frente a Dawson. --Vaya, ya era hora --le dijo apoyado en el marco de la puerta--. Llevamos esperandote desde hace al menos dos horas. --?Dos…? --Brooke levanto la mano para ver la hora en su reloj de muneca y lo miro con espanto--. Esto es cosa tuya, ?verdad? --senalo hacia el interior de su apartamento. --El sonrio maliciosamente en respuesta--. Voy a matarte, Dawson. No sabes cuanto te odio --mascullo entre dientes. Iba vestida con la ropa del dia anterior, asi que no era necesario perder mas tiempo en cambiarse. Estiro el brazo para coger las llaves del apartamento y empujo a Dawson para salir. Al entrar en el deportivo del stripper bajo la visera para mirarse e hizo una mueca de desagrado al comprobar la palidez gris verdosa de su cara. Ademas, tenia los parpados hinchados, la mejilla derecha llena de marcas de las arrugas de las sabanas y para colmo, sin peinar. < >, penso Brooke con disgusto mirando a su amigo. En su cara no habia el menor rastro de la noche anterior. Sus ojos castanos no estaban turbios, sino relucientes de malvado humor. Su pelo oscuro y su brillante sonrisa podrian lucir, en la marquesina de cualquier anuncio de cosmeticos, en el sitio mas vistoso de la ciudad. En realidad, tenia el aspecto de haber pasado una velada tranquila y renovadora, quizas con un relajante bano de espuma y aromaterapia, o un libro entre las manos, pero nada parecido a como habia sido en realidad esa noche. --?Te gusto? Antes de que ella pudiera articular palabra en respuesta se detuvieron en un semaforo y Dawson fijo su atencion en una rubia con minifalda que cruzaba, contorneandose provocativamente, al saberse observada por los conductores de aquellos coches que esperaban su turno para retomar la marcha. Brooke nego al ver a su amigo babear por aquella mujer, pero hundio la cabeza entre los hombros cuando Dawson toco el claxon para llamar su atencion. El ruido resono en su cabeza como si la hubiera tenido hueca y, llevandose las manos a las sienes se quejo. --!Auch! ?Podrias comportarte como una persona normal y no como un animal en celo? Siento que la cabeza fuera a reventarme. --Vaya, vaya, vaya --dijo Dawson mirandola a los ojos y acercandose a ella para darle un beso en la mejilla--, ?asi que tenemos resaca? Esa pregunta y el tono gracioso con el que lo habia dicho, le hicieron pensar en las intenciones que tenia Dawson cuando le invito a quedarse con ellos: !Seguro que habia apostado con ella con la certeza de que perderia y sabiendo que su aspecto resultaria ser, con diferencia, el mas impresentable de aquella fiesta! --Callate, ?quieres? Estoy asi por culpa tuya --dijo Brooke, apartandolo con fuerza para que volviera a su asiento--. ?Puedo saber por que demonios os empenasteis en que saliera con vosotros a tomar algo? Era para esto, ?no? ?Estas satisfecho? --?Acaso tenias otros planes? Que habrias hecho hasta irte a dormir, ?buscar que ponerte de entre todas las prendas horribles que tienes en el armario? ?Ver una pelicula infumable en alguno de los canales de cable que nadie ve? --Rio Dawson--. Si lo miras desde este otro punto de vista, en lugar de haber estado sola y aburrida… lo pasaste con todos nosotros. Tampoco es tan malo, ?no? Brooke sabia que Dawson tenia toda la razon. --Ya… Asi que pensaste que la mejor manera de ayudar a la pobre Brooke para que no se aburriera era… !Claro! Llevarla a beber un tequila tras otro, hasta que muriera de coma etilico. --Oh si… Lo que mas me importaba en el mundo era, meterte una cantidad indecente de alcohol en el cuerpo, para que perdieras el norte, y asi poder arrastrarte a casa y acostarme contigo --se burlo Dawson con una sonrisa. --Vale. Supongamos que soy estupida y creo en tu benevolencia… --El alzo una ceja mientras retomaba la marcha--. Pero resulta que las persianas de mi habitacion estaban abajo, y yo nunca las bajo… ?La apuesta incluia hacerme dormir creyendo que aun era de noche para llegar tarde a la fiesta de tu hermana? Dawson contuvo la risa al ver la expresion seria que trataba de poner Brooke, pero tan pronto como sus ojos se encontraron ambos estallaron en risas. --?Te has enfadado? --?A ti que te parece? --Oh, vamos, carino. Solo queria gastarte una broma. --Callate --murmuro ella poniendose verde de repente y torciendo el gesto en una mueca de asco--. Callate o acabare vomitando los veinte litros de cerveza y tequila de anoche encima tuyo para que te veas tan horrible como yo. Se llevo las manos a las sienes, masajeandolas en circulos, mientras Dawson conducia en silencio hasta la casa de su hermana. Pero lo peor estaba por llegar: la fiesta. Gente, ruidos, musica a toda voz y mas alcohol. -
Una semana de placer de Jc Harroway
https://gigalibros.com/una-semana-de-placer.htmlActual. Atrevida. Independiente.
-
En defensa de la felicidad de Matthieu Ricard
https://gigalibros.com/en-defensa-de-la-felicidad.htmlTras el exito de El monje y el filosofo, un autentico tratado de la felicidad, a la vez que una valiosa y convincente guia para nuestros individualismos carentes de puntos de referencia. Todos aspiramos a la felicidad, pero ?como encontrarla, conservarla e incluso definirla? A esta cuestion filosofica por excelencia, tratada por el pensamiento occidental con una mezcla de pesimismo y burla, Matthieu Ricard aporta la respuesta del budismo, una respuesta exigente pero tranquilizadora, optimista y accesible a todos. Dejar de buscar a toda costa la felicidad fuera de nosotros, aprender a mirar en nuestro interior pero a mirarnos un poco menos a nosotros mismos, familiarizarnos con una vision a la vez mas meditativa y mas altruista del mundo… Con el bagaje de su doble cultura, de su experiencia como monje, de su relacion con los mas grandes sabios, de su conocimiento de los textos sagrados asi como del sufrimiento de los hombres, el embajador mas popular y reconocido del budismo en Francia nos propone una reflexion apasionante sobre el camino de la autentica felicidad y los medios para alcanzarla.
-
Bajo la red de Iris Murdoch
https://gigalibros.com/bajo-la-red.htmlJake Donaghue, un escritor y traductor intelectual y bohemio, deambula por un Londres inacabable intentando mejorar su situacion tanto emocional como economica. Su novia, que se ha enamorado de un corredor de apuestas, le pide que se vaya de la casa que han compartido hasta ese momento. Donaghue se ve obligado a buscar un nuevo lugar en el que vivir, y recala en el hogar de una antigua novia, la cantante Anna Quentin. Es entonces cuando el destino lo lleva hacia un viejo conocido, Hugo Bellfounder, un abstruso filosofo con el que Jake tuvo ciertos desencuentros en el pasado. Iluminado, pero victima de una continua desazon vital, Jake Donaghue no abandona su idea de convertirse en un verdadero escritor mientras el mundo parece derrumbarse a su paso.
-
Bajo tus alas (Perdida en el aire 1) de Carmen Fernandez Etreros
https://gigalibros.com/bajo-tus-alas-perdida-en-el-aire-1.htmlRosas amarillas Viernes 27 de abril, a las ocho de la tarde Me llamo Monica. Mido 1.74 cm. Cumplo cuarenta anos el seis de mayo Los ojos verdes. Enormes, segun dicen algunos. El cabello pelirrojo y rizado. Desde hace tres anos me tengo que tenir el por unas incomodas canas que crecen sobre mi frente todos los meses. En el nacimiento del pelo. Justamente alli. Menudas canas cabronas. Todos los meses. Como la mala hierba. Sin olvidarse ninguno de salir. Y eso que mi abuela decia que en mi familia "las mujeres no teniamos canas". Y mi abuela salvo en ese comentario, he de reconocer que no se equivoco nunca. Lo cierto tambien es que mi abuela nunca se tuvo que tenir el pelo. Me encantan las botas altas de cuero. Marrones, negras, blancas, amarillas, azules… De tacon alto, con plataforma, con tachuelas, con flecos...Tengo alrededor de 20 pares. Las saco todos los dias, las limpio y las coloco de nuevo en mi zapatero de IKEA muy rectitas en sus rieles metalicos. Tengo de todas las marcas Mustang, Diesel, Kling, Pedro Miralles hasta unas Gaspar Yurkievich. Con tacon recto, con plataforma, planas, con tacon de aguja... En la compania me llamaban la "pretty woman de altos vuelos" (con bastante recochineo por cierto). Yo me hacia la sueca con esto y con otras muchas cosas. Siempre se me ha dado bien hacerme la sueca, aunque no tengo que ver con tan curioso pais, pasar de todo, darme la vuelta y seguir caminando hacia delante con mi melena pelirroja mientras todos me miran las piernas de abajo a arriba. En ese momento el mundo parece que durante unos minutos se detiene (sensacion explicada por un turista aleman en un mal castellano un dia de verano en el pasillo de la terminal 4, la famosa T4 de Barajas, cuando choco inevitablemente su maleta con la mia) y los afectados solo ven pasar mis piernas sin cuerpo por la T4. He de reconocer que esa noche no lo pude evitar y la pase retozando con el turista aleman afectado en una cama King size del hotel de Nueva York despues de pasarle mi numero de movil en pleno vuelo, en un papelito blanco bajo la bandeja de plastico. El aleman era un soso, pero yo soy asi, creo que hay que probar las cosas para saber si me gustan o no, si vale la pena o no lanzarse a piscina. Pero la mayoria de las veces como me decia mi abuela "te estrellas Monica, te estrellas". Hoy es viernes y yo deberia estar en el avion. Como todos los viernes, como cada dos viernes, mejor dicho. Pateando el pasillo del avion, dando la bienvenida a los pasajeros, soltando como una escopeta por el microfono sin casi tomar aire: "En nombre de Compania, el comandante Perez y toda la tripulacion, les damos la bienvenida a bordo de este vuelo con destino a Nueva York, cuya duracion estimada es de 8 horas, 30 minutos. Por motivos de seguridad, y para evitar interferencias con los sistemas del avion, los dispositivos electronicos portatiles no podran utilizarse durante las fases de despegue y aterrizaje. Los telefonos moviles deberan permanecer desconectados desde el cierre de puertas hasta su apertura en el aeropuerto de destino. Por favor, comprueben que su mesa esta plegada, el respaldo de su asiento totalmente vertical y su cinturon de seguridad abrochado. Les recordamos que no esta permitido fumar a bordo". Pero no, no estoy en el avion. Y hoy no voy a pronunciar esas magicas palabras. Aunque parezca increible no estoy en el avion. Estoy sentada en el sofa de mi casa y mi vida comienza a estrellarse sin remedio. Porque yo deberia estar haciendo la ruta Madrid-Nueva York-Philadelpia-Washington-Nueva York-Madrid. La mejor de todas. Siete dias por las mejores ciudades. Un lujo para cualquier azafata de la compania. Todo el mundo se pelea por esa ruta. Y el lunes deberia pasarme todo el dia buscando chollos de botas altas de marca en el Soho y por la noche cenando en un japones, el Sushisamba Park con Alfredo. El martes tambien dia de compras, comida con Alfredo Perez, el comandante, en Baboo mi italiano favorito en Nueva York y toda tarde con mi comandante, liados, enrollados metiditos en la cama del hotel tomando champan cada hora. Pero no estoy haciendo la ruta Madrid-Philadelpia-Washington-Nueva York-Madrid. No estoy en el avion como todos los viernes sino que estoy aqui en el sofa de mi casa en camison. Tirada todo lo larga que soy en ese sofa que tanto me costo elegir porque no me llegaba a convencer la tela de cuadros. Al final lo compre aunque no estaba convencida y a los dos meses lo tuve que tapizar con otra tela floreada comprada en NY, porque en la original se le cayo a Alfredo una taza de cafe Voluto sin leche enterita. Pero eso ya es otra vida, otra historia, el pasado... Ayer me despidieron de mi compania. Un ERE de esos dijeron, y Luego anadieron "nosotros te estamos muy agradecidos por estos anos que has prestado a la compania y por todo tu trabajo e ilusion y bla, bla, bla, bla... pero la crisis economica, las circunstancias nos obligan a reestructurarnos, a reducir gastos y personal...". No me entere de nada. Diez minutos en los que el director de Recursos Humanos no paro de hablar y yo no me entere de nada. Lo unico que me quedo claro es que me mandan al paro, dos anos, y con una buena indemnizacion por los veinte anos trabajados. Tuve la sensacion de que encima les tenia que dar las gracias porque me estaban haciendo un favor y ademas que pensaban que me iban a arreglar la vida con la indemnizacion. Que si mi labor habia sido impecable, que si las cosas han venido asi, que si la crisis financiera internacional esta afectando a todas las companias, que algunos vuelos salen con menos combustible para ahorrar, que si han intentado mantenerme en mi puesto mas meses pero que les ha resultado imposible, que si mi edad, mi alto sueldo, mis condiciones laborales... Vamos que era imposible. Yo que lo habia dado todo por la compania, que vivia orgullosa de pertenecer a ella, de estar en el equipo, de estar a bordo. Pues nada ahora tambien me estaba estrellando con ellos, con mi compania. Como decia mi abuela: "Monica te estrellas". Lo peor que la noticia de mi despido me la dio Carlos el Director de Recursos Humanos, un tipo bajito con gafas y un ridiculo bigotillo que se parecia al escritor espanol que salia en la contraportada de un libro que habia estado leyendo en el hotel de Washington un dia de lluvia y con el que me enrolle una noche despues de tomarnos cuatro mojitos seguidos tras la fiesta de Navidad de la compania. Como todos sabeis las fiestas de Navidad son asi, uno comienza a comer y a beber, y acaba bebiendo con los jefazos caipirinas y mojitos y a la manana siguiente se despierta sin poder remediarlo con el feo del director de personal con su ridiculo bigotillo roncando en tu cama, la mano posada en donde acaba tu espalda y entonces no sabes si preparar un zumo de naranja y un buen desayuno con cafe capuccino, croissants a la plancha con mantequilla y mermelada de naranja amarga o irte a trabajar que es viernes y te puede despedir por no estar ocupando tu puesto cuando se despierte. De repente se me hizo un nudo en la garganta y parecia que me faltaba el aire y que todo daba vueltas en la habitacion. Ya no habria fiestas de Navidad, ni cocktails de empresa, ni turistas alemanes que me mirasen las piernas mientras camino por la terminal 4 mientras que parecia que se paraba el mundo, ni directores de Recursos humanos a los que tener la duda de si preparar un zumo de naranja natural mananero... Agarre mi cajita cuadrada de klinex naranjas con olor a lavanda silvestre, saque cuatro y me sone estruendosamente. Tambien me arrastre hasta el congelador y cogi un buen tanque de helado de trufa con virutas de chocolate negro belga y me dispuse a afrontar la peor tarde de viernes de mi vida viendo sin parar Pretty woman. La empezaria y la acabaria mil veces si hacia falta, hasta el amanecer, hasta que sonase el telefono, hasta que explotase mi tripa con tanto helado de trufa con virutas de chocolate negro belga... Estaba dispuesta a todo. Pero en el momento en que Richard Gere le intentaba pillar la mano con el estuche del collar a Julia, (uno de los momentos que mas me gusta), mi movil hizo un sonidito extrano y decidi mirar su pantalla. Cuatro alertas: 1. Facebook me recordaba que tenia 116 mensajes, mi desconsiderada compania de telefono movil decidia mandar la factura de este mes (que falta de tacto: me acababa de quedar en paro...), mi hermana me mandaba un Whatsapp de 31 lineas para saber como estaba despues de mi tragico despido (no te preocupes tia, todo tiene solucion tia, mira como ando yo tia, como ya te conte tia, ves tia, todas tenemos problemas tia, sabes tia...). Deje de leerlo a la cuarta linea porque me agobiaba. Y tambien tenia una peticion de amistad en Facebook: Diego Fonseca. Diego Fonseca. Diego Fonseca, ?de que conocia yo ese nombre y apellido? No me sonaba que fuese de la compania, no me sonaba de los companeros del colegio, no me sonaba de la academia de idiomas, no me sonaba de ningun rollo pasajero... No me sonaba. Simplemente no me sonaba. Diego Fonseca no me sonaba. Pero mi aburrimiento de este aciago viernes llegaba a tal punto que le acepte y consciente rapidamente de mi craso error y mi constante falta de meditacion e imprudencia en mis ultimas decisiones, entre en su perfil a buscar Informacion. Lo primero era saber quien era este Diego Fonseca. Ya habia tenido bastante con aquel desconocido que lleno la cabina del avion con rosas amarillas, (mis preferidas por cierto). Y con una rodilla apoyada en el suelo del pasillo me pidio matrimonio en cuatro idiomas (aleman, ingles, frances y japones) para diversion y regocijo de mis companeras que casi se hacen pis en la moqueta con el espectaculo. Tambien con aquel loco paranoico, un turista aleman, que amenazo con volar la terminal 4 de Barajas ya hace unos anos a voz en grito con un megafono, al ver que despues de una noche romantica de sexo descontrolado no le cogia el telefono la manana siguiente y que seguramente ya no me acordaba de su nombre. Uno de mis grandes defectos, debo confesar, es que a mi la resaca no me deja pensar en el futuro, en esas circunstancias que pueden ocurrir el dia despues, programar estas posibles incidencias, pensar posibles planes de evacuacion, ponerme a tiempo el chaleco salvavidas..., y me encontre con un marron tremendo sin saber que decir al guapisimo sobrecargo que caminaba conmigo cuando empezo a chillar como un loco el turista alem
-
Me cago en Godard de Pedro Vallin
https://gigalibros.com/me-cago-en-godard.html?Te sientes culpable cuando te gusta una pelicula de masas? ?Te autoflagelas viendo cine de autor? No te preocupes, Pedro Vallin quiere curarte. Criticos culturales de plumas avinagradas han sentenciado durante decadas que el cine de Hollywood oculta un maligno instrumento de adoctrinamiento colectivo. Una perversion subliminal que aliena a las masas y les inocula la ideologia dominante. Semejante vision del cine comercial supone que la gente es imbecil. Que se la traga siempre. Entre cuencos de palomitas. Y encima, riendose. Pedro Vallin ha escrito un ensayo heretico que defiende que no, que ni los superheroes yanquis defienden la propiedad privada ni el cine de autor europeo transmite valores progresistas. Y que puestos a generalizar ocurre lo contrario: que el cine made in Hollywood es emancipador y que las producciones europeas acusan un sesgo burgues, ensimismado y autoindulgente. !Me cago en Godard! es un libro irreverente y con clara vocacion de incordio. Su autor no se caga solo en Jean-Luc, sino que tambien lo hace en el elitismo condescendiente del establishment cinematografico europeo, en los dogmas que identifican las peliculas estadounidenses con la derecha y en el mal llamado “placer culpable”. Porque es absurdo sentirse un aliado del imperialismo por disfrutar de una pelicula palomitera (o sentirse mejor persona por dormirse frente a una mala pelicula indie).
-
Mentira – Premio Edebe Juvenil 2015 (Periscopio), Care Santos de Care Santos
https://gigalibros.com/mentira-8211-premio-edebe-juvenil-2015-periscopio-care-santos.html -
Cuando todo esta perdido (Canada 6) de Mariah Evans
https://gigalibros.com/cuando-todo-esta-perdido-canada-6.htmlTienes en tus manos la ultima novela de la serie Canada: Cuando todo esta perdido.
-
Por la fuerza de Pilar Parralejo
https://gigalibros.com/por-la-fuerza.htmlDespues de ser raptada por el mismo tipo que provoca su despido, y despues de ser “extorsionada” por su padre, se encuentra a si misma casada con Ayron: un autentico desconocido, alguien que tiene todo lo que una mujer podria desear en un hombre, todo salvo la odiosa familia a la que pertenece, gente con un ego desmesurado que esta dispuesta a cualquier bajeza para intentar separarlos.
-
Un hombre soltero de Christopher Isherwood
https://gigalibros.com/un-hombre-soltero.htmlEl despertar comienza al decir <
> y < >. Lo que ha despertado permanece tumbado durante un rato mirando fijamente al techo y escudrinando en su interior hasta que reconoce el < >, y de ahi deduce < >, < >. Despues viene el < >, que aunque funesto resulta al menos tranquilizador, pues en ese < >, en esa manana, es donde esperaba encontrarse; como se suele decir, < >. Pero < > no senala el mero momento presente, < > es tambien un cruel recordatorio: un dia mas que ayer, un ano mas que el ano pasado. Cada < > se etiqueta con su fecha y vuelve obsoletos todos los < > que lo preceden, hasta que, tarde o temprano, quiza, quiza no, con toda certeza llegue. El miedo atenaza el nervio vago. Un miedo enfermizo a lo que espera, en algun lugar, ahi fuera, justo enfrente. Pero, entretanto, la corteza cerebral ha ocupado su lugar en la sala de mando con rigurosa disciplina y ha ido comprobando, uno a uno, el funcionamiento de los controles: las piernas se estiran, la zona lumbar se arquea, los dedos se tensan y luego se relajan. Solo entonces el sistema de intercomunicacion central emite la primera orden del dia: !ARRIBA! El cuerpo se levanta obediente de la cama--estremeciendose por las punzadas que la artritis le provoca en los pulgares y la rodilla izquierda, medio mareado por un piloro espasmodico--y, desnudo, se dirige arrastrando los pies al cuarto de bano, donde vacia la vejiga y se pesa. !Todavia algo mas de sesenta y ocho kilos, a pesar de todos los esfuerzos en el gimnasio! Luego al espejo. Lo que ve, mas que un rostro, es la encarnacion de un conflicto. Lo que se ha hecho a si mismo en sus cincuenta y ocho anos de vida, el desastre en que ha logrado convertirse; lo revelan su mirada apagada e inquieta, su nariz tosca, las comisuras de los labios caidas que dibujan una mueca como si sus propias toxinas hubieran alcanzado el maximo de amargura, las mejillas desprendidas del anclaje de los musculos, el cuello flacido colgando en pequenos pliegues. Tiene el lamentable aspecto de un nadador o un corredor extenuado, y sin embargo ni se plantea detenerse. La criatura que contemplamos seguira luchando hasta caer. No porque sea heroica, sino porque no concibe otra alternativa. Con la mirada clavada en el espejo, ve los multiples rostros que alberga el suyo--el rostro de un nino, el de un muchacho, el de un hombre joven, el de uno no tan joven--, todos aun presentes, conservados como fosiles en capas superpuestas y, al igual que los fosiles, muertos. El mensaje de todos ellos a la criatura muerta en vida es: ?ves?, nosotros estamos muertos, ?por que tener miedo? La criatura les responde: Pero eso fue algo progresivo, natural. Yo tengo miedo de que me metan prisa. Continua mirando fijamente. Entreabre los labios. Comienza a respirar por la boca hasta que la corteza cerebral le ordena con impaciencia que se lave, se afeite, se peine. Debe cubrir su cuerpo desnudo. Debe vestirse porque se dispone a salir a la calle, al mundo en que viven los demas, y deben poder identificarlo. Su comportamiento ha de resultarles aceptable. Obedientemente se lava, se afeita y se peina; acepta sus responsabilidades para con los demas. Le complace incluso ocupar un lugar entre ellos. Sabe lo que se espera de el. Conoce su nombre. Le llaman George. Una vez vestido se ha convertido en el. Ya casi es George, aunque no el George que los demas esperan y estan dispuestos a reconocer. Las personas que le telefonean a esta hora de la manana quedarian asombradas, tal vez incluso alarmadas, si se dieran cuenta de que estan hablando con algo no del todo humano. Aunque, claro esta, nunca se percataran de ello: imita a la perfeccion la voz del George al que ellos conocen. La propia Charlotte cae en el engano. Solo en un par de ocasiones ha notado algo extrano y ha preguntado: < >. Atraviesa la habitacion delantera, que llama < >, y baja por la escalera, empinada y estrecha, cuyos escalones giran formando un angulo recto. Se pueden tocar ambas barandillas con los codos y uno debe agachar la cabeza, aunque solo mida, como George, un metro ochenta. Es una casa pequena y bien aprovechada. A menudo se siente protegido por su tamano reducido. Apenas hay espacio para sentirse solo. Y sin embargo... Imaginemos a dos personas que viven juntas, dia tras dia, ano tras ano, en este espacio pequeno, cocinando codo con codo en la misma cocina diminuta, rozandose en la angosta escalera, afeitandose frente al mismo espejito: siempre topando, empujandose, chocando sin querer o a proposito, sensual, agresiva, torpe o impacientemente, con rabia o con amor. Imaginemos la estela, profunda e invisible a un tiempo, que han debido dejar tras de si. La entrada de la cocina es demasiado estrecha. Dos personas apresuradas, cargadas de platos servidos, tienden a tropezarse en un lugar asi. Y alli, al pie de la escalera, es donde casi cada manana George tiene la sensacion de encontrarse de pronto ante una abrupta grieta abierta de manera brutal. Como si el camino hubiera desaparecido bajo un derrumbamiento. Alli se detiene en seco y el recuerdo vuelve con la nauseabunda frescura de la primera vez: Jim esta muerto. Esta muerto. Se queda muy quieto, en silencio, emitiendo a lo sumo un breve grunido, a la espera de que el espasmo remita. Luego entra en la cocina. Estos ataques matutinos son demasiado dolorosos para considerarlos solo desde una perspectiva sentimental. Una vez pasados, se siente aliviado. Nada mas. Como si de un molesto calambre se tratara. Hoy hay mas hormigas: avanzan en fila india por el suelo, trepan al fregadero y amenazan con entrar en el armario donde guarda la mermelada y la miel. Pertinaz, las aniquila con insecticida, y mientras lo hace cobra conciencia de si mismo. Un ser viejo, obstinado y malevolo imponiendo su voluntad sobre unos insectos tan ejemplares y dignos de admiracion. La vida destruyendo la vida ante un publico compuesto de objetos--ollas y sartenes, cuchillos y tenedores, latas y botellas-- que no forman parte del reino de la evolucion. ?Por que? ?Por que? ?Es acaso una especie de enemigo cosmico, un architirano que intenta negar nuestra existencia enfrentandonos a nuestros aliados naturales, victimas como nosotros de su tirania? Pero para cuando George ha terminado de pensar todo esto, las hormigas ya estan muertas, las ha recogido con un trapo humedo y las ha arrojado al fregadero. Se prepara unos huevos escalfados con beicon, tostadas y cafe, y se los toma sentado a la mesa de la cocina. Y mientras lo hace en su cabeza suena una y otra vez la cancion infantil que su ninera le enseno en Inglaterra, hace ya tantos anos: < >. (Aun la recuerda nitidamente, tenia el cabello cano y unos ojos brillantes de ratoncillo, era pequena y regordeta; entraba en el cuarto de los ninos con la bandeja del desayuno, jadeante aun tras subir tantas escaleras. Solia protestar por lo empinadas que eran y las llamaba < >, una de las frases magicas de su ninez). < >. !Ay, la ternura desgarradoramente efimera de los placeres infantiles! El senorito George saborea los huevos. La ninera lo observa y sonrie complacida porque todo esta en orden en su pequeno, adorable y condenado mundo. Desayunar con Jim solia ser uno de los momentos mas especiales del dia. Era entonces, mientras bebian la segunda o tercera taza de cafe, cuando mantenian las mejores conversaciones. Hablaban de cuanto se les ocurria, incluso de la muerte, por supuesto, y de si habia algo despues, y en ese caso, que era exactamente lo que pervivia. Hablaban incluso de las ventajas y las desventajas de una muerte instantanea o de saber que uno va a morir. Pero, por mucho que se esfuerce, George no logra recordar que opinaba Jim al respecto. Es dificil tomarse en serio estas cuestiones. Suenan muy academicas. Supongamos por un momento que los muertos vuelven a visitar a los vivos. Que algo a lo que podriamos llamar Jim regresara para ver como se las arregla George. ?Mereceria en realidad la pena? ?No seria, en el mejor de los casos, comparable a la breve visita de un observador extranjero, a quien se permite echar un vistazo desde el vasto ambito de su libertad para ver de lejos, a traves de un cristal, la figura solitaria sentada a una mesita en una habitacion estrecha, comiendo triste y desganadamente sus huevos escalfados, un prisionero de por vida? La sala de estar es oscura y de techo bajo; estanterias repletas de libros recubren la pared frente a las ventanas. Los libros no han hecho a George mas noble, mas sabio ni mejor persona. Simplemente le gusta escuchar sus voces, una u otra segun su estado de animo. Abusa de ellos sin reparo--pese a que en publico los menciona con reverencia--para conciliar el sueno, para olvidar el movimiento de las agujas del reloj, para aliviar los espasmos piloricos, para que lo rescaten de la melancolia con sus chismes, para activar los reflejos condicionados del colon. Toma uno, y Ruskin le dice: ... cuando ibais a la escuela os gustaban las pistolas de juguete, y los rifles; en cuanto a los canones Armstrong, no son mas que versiones mejoradas de ellos. Pero lo peor es que lo que para vosotros, de ninos, era un juego, era otra cosa muy distinta para los gorriones; y lo que hoy tomais como un juego, tampoco lo es para los pajarillos de la nacion. Y en cuanto al aguila negra, si no me equivoco, no pareceis muy dispuestos a disparar contra ella. Que insoportable el viejo Ruskin, siempre en posesion de la verdad, tan chiflado, malhumorado y patilludo, sermoneando a los ingleses: hoy es el companero perfecto para pasar cinco minutos en el retrete. George comienza a notar aquella agradable premura en el vientre y, libro en mano, sube a paso ligero la escalera camino del bano. -
Dejaria todo por ti de Alison Mingot
https://gigalibros.com/dejaria-todo-por-ti.html -
Todos los caminos de Romina Naranjo
https://gigalibros.com/todos-los-caminos.html--Vamos a ver, Leroy… --Sorbi fuerte por la nariz, mientras apoyaba los antebrazos en la mesa y cogia aire. Perder los nervios nunca era una buena opcion, pero era viernes, la tarde se me estaba haciendo interminable y, encima, aquel moquillo persistente, fruto de un catarro mal curado que ya parecia haberse alquilado un pisito con vistas en mi cuerpo, no remitia. No tenia yo el dia muy paciente--. Cuando te digo, <
>, no me refiero a que bajes la voz. Puedo oirte. Estamos solos en esta clase. Por mucho que susurres… te oigo. El crio, haciendo un mohin, toqueteo el lapiz, volviendo una atencion que yo ya sabia voluble a su hoja de calculo. --Es que asi no me sale, seno. Me mordi el interior del moflete, pero no… no dejaria que me ablandara otra vez. Llevabamos una semana con aquello. Empezaba a estar harta. Tanto como el, seguro. --Leroy, saberse las tablas sumando los resultados no es saberse las tablas. Saberlas es… memoria. --Me incorpore. !Ay, mi cuello! !Ay, las lumbares…! Dichosa profesion. --La profesora del cole nos deja copiarlas en un folio para el examen. Enarque la ceja. --?Ah si? ?Y en el instituto vas a hacer lo mismo? ?O cuando toque dividir por cuatro cifras? Eso es perder el tiempo y creeme, chaval…, tiempo es lo que te va a faltar para la cantidad de cosas que te quedan por delante. --?Roma? Aparte la vista de la cara de susto de Leroy. Gire medio cuerpo hasta enfocar la puerta de la clase, donde mi jefa se habia acodado. Puro estilismo, aquella mujer bien podria acabar de bajarse de una pasarela de modas, en vez de ser la directora del centro de refuerzo educativo donde ambas trabajabamos. Roma, supongo que lo habeis adivinado por el contexto, soy yo. Me presento. Metro sesenta, melena castana cogida en un mono, cara pecosa, gafas de pasta que en ese momento se me resbalaban por la nariz y rictus de mala leche. Vamos, que daba el perfil de profesora a la perfeccion. --Tienes una llamada. --Mi jefa sonrio hacia la mesa--. ?Como va eso hoy, Leroy? ?Se porta Roma bien contigo? Si se pasa mucho dimelo y la despido, ?vale? El chiquillo sonrio, echandome una miradita que me parecio entender como < >, pero que probablemente querria decir otra cosa. --Te doy los cinco minutos que tarde para repasar las tablas, luego toca preguntarlas. -- Levante el dedo antes de que me interrumpiera--. Salteadas. Tire de la cinturilla de mis vaqueros y sali del aula. Recorri el pasillo bien iluminado que separaba los demas despachos del mio y cruce a la derecha para llegar al office. Dado que habia una politica de prohibicion ante el uso excesivo del telefono movil, no era nuevo que recibiera mis llamadas en el mismo centro, aunque claro esta… tampoco era algo que se pudiera dilatar en el tiempo. No era plan de limarme las unas mientras me ponia en conferencia con quien fuera que estuviera al otro lado de la linea en tanto dejaba desatendidos a los ninos. --?Hola? --Oi un suspiro. Puse los ojos en blanco--. Aina… estoy trabajando. --?Y crees que te llamaria si no fuera superurgente? Bueno… todavia no sabeis mucho de ella, pero debeis estar prevenidos; lo que mi mejor amiga conocia como urgencias variaba desde < >, lo cual te hacia soltarlo todo y echar a correr, o… << Fulanito de tal ha subido un storie y yo no quiero que vea que lo he mirado, entra tu>>. Vamos, que el abanico era amplio y aterrador. --Te escucho. --Consulte mi reloj de Mickey Mouse. Segun sus bracitos enguantados… eran las el puto tiempo no pasa y cuarto--. Te doy dos minutos. Tengo a Leroy multiplicando. --?Leroy? ?En serio se llama asi o es uno de tus nombres en clave para no revelar las vidas emocionantisimas de tus alumnos? --Es su nombre. --Y probablemente elspoiler de su futuro laboral como no se aprendiera la tabla del ocho. Sin acritud ninguna, palabra--. Escupe, Aina. --Requiero del codigo de mejores amigas. --Resople. Aquello tenia mala pinta… llamadme suspicaz--. Me han organizado una cita a ciegas esta noche. Te necesito de reten. ?Lo veis? Si es que lo sabia… --Ni de cona. ?La familia bien? Pues, me vuelvo al trabajo. --!Roma, tia, he mentado el codigo! --El codigo no son mas que unas directrices. Fue el turno de Aina de resoplar. --Vale, capitan Jack Sparrow, ?podemos ponernos serios? Es mi primera cita en meses. Desde… ya sabes. Y encima, !a ciegas! ?De verdad quieres que me presente completamente sola y desamparada ante un desconocido? ?Quieres salir manana en las noticias diciendo que fuiste la ultima persona que hablo conmigo? --Dios… pero mira que eres dramatica… --Pero la capulla habia ganado. Las dos lo sabiamos--. Y, para empezar, ?que cono haces saliendo con alguien a quien no conoces? --Es el amigo de un conocido mio, ya sabes. De mis tiempos mozos cuando ligaba chateando por foros. Empezo a hablar a toda velocidad. Ese era uno de los dones de Aina, situaba a personas y sucesos en el tiempo con una facilidad tan brutal que parecia que llevaba la escala espaciotemporal metida en el bolsillo. Del susodicho no sabia mucho mas de lo que ya me habia comentado, amigo de un amigo, lo cual bastaba, a medias, para saber que podria sentarse frente a el con una cerveza y no temer mas que a una aburrida conversacion. No obstante, y como mejores amigas, los anos nos habian dado muchos aprendizajes, entre los cuales destacaba la depurada tecnica de sacar a la otra de una mala cita sin hacerla quedar mal. --Voy. --Asumi, oyendo como gritaba al otro lado del telefono--. Me doy una vuelta cinco minutos, te echo un vistazo y si no has activado la senal, me piro y te dejo a lo tuyo. ?Conforme? --!Conforme! Ah por cierto… arreglate un poco, que no se note que vas solo de reten. Aquello ya me olio a chamusquina, aunque ni por asomo vi venir el tremendo incendio forestal que se aproximaba. --Aina, escuchame bien, si por cualquier circunstancia tienes ni siquiera la mas minima intencion de liarme con el amigo de tu cita, es un no. Never. Estas avisada. Sus carcajadas me sacaron de contexto. --?Estas pirada? !Que va, Roma! !Ese tio no es para ti! Tras un par de frases relativas a la hora y sitio de quedada, colgue. Mientras volvia a la clase, note un molesto picorcillo a la altura de la nuca que no se me iba por mas que lo rascara. Una especie de… aviso. Rollo alerta. Como la ventana emergente del Avast Antivirus que se presenta en el escritorio del ordenador cuando menos te lo esperas --casi siempre de noche y cuando llevas los auriculares puestos--, y te quita un par de anos de vida. Yo no me asuste entonces. El miedito real, vendria mas tarde. --!Bueno, Leroy, vamos a ver que tal vas! Los ojillos azules del crio me miraron con culpabilidad. Tarde un segundo en descubrir que, en vez de aprovechar el tiempo para estudiar la tabla como yo le habia pedido, se habia dedicado a copiarla en su goma. A tamano microscopico. Cogi aire. Me repeti que hacer llorar a los ninos cuando eras profesora de apoyo no estaba bien. --No pasa nada. --Y me obligue a sonreir, mientras volvia a tirar del moquillo que no paraba de caerseme--. !Empezamos desde el principio! Y nosotros, seguimos adelante. 2 La primera vez que vi al Sueco no fue la primera vez. Bueno… fue la primera vez despues de la primera y la segunda, que tambien pueden calificarse como desastrosas y lo bastante traumaticas como para que esta primera tercera vez acabara como acabo; igualito que el rosario de la aurora. Ahora os lo explico. Antes de darnos un chapuzon en la triste piscina de los recuerdos pasados --importante para la trama, lo juro solemnemente--, unas pocas pinceladas del ahora. Sali del centro de estudios cabizbaja, congestionada y arrebujada en mi bufanda kilometrica de Desigual, comprada por Ali Express. La verdad es que haciamos una pareja increible, porque en ese momento, con una jornada dura a las espaldas y la sensacion de que en vez de avanzar daba dos pasos para adelante y tres pasos para atras --sin la media vuelta, pero siempre, siempre, volviendo a empezar--, me sentia como una imitacion barata. De profesora. De ser humano. Asi… en general. Despues del episodio del telefono y en la hora siguiente a la de Leroy, me habia tocado lidiar con un par de esos padres… tocapelotas. Que ojo, igual es mas profesional y elegante llamarles algo tipo rara avis o cualquier cosa semejante, por aquello de la tremenda implicacion que demostraban en la escolarizacion de sus hijos. Hasta rayar lo insano. Estaban quienes solo querian de los chiquillos que cumplieran. Deberes hechos y asignaturas llevadas mas o menos al dia. Los que lidiaban con algun handicap, y no tenian las expectativas altas mas alla de una adaptacion saludable en el centro reglado y aprendizajes significativos, y luego… luego estaban los demas. Los que promulgaban eso de, como yo pago este servicio extra requiero de ustedes que vivan por y para hacer magia con una hora de terapia enfocada en el retraso madurativo. Vamos, que si el nino tenia un nivel de lectura de primaria, pero estaba en edad de cursar la ESO, yo tenia que agitar mi varita, aunque el primer instinto fuera metersela a papa por el culo. Cogi aire y respire hondo al salir del metro en Opera y eche a caminar hacia Plaza de Callao. Tenia la tremenda suerte de contar con un coqueto pisito de renta antigua situado en el edificio colindante con el de El Corte Ingles. Un lujo para muchos, principalmente turistas que venian a Madrid de paso; por lo bien situado, lo centrico de su ubicacion y lo cosmopolita de todo cuanto lo rodeaba. Para mi, que tenia que ir al curro todos los dias y llegar con tiempo, que volvia cansada y arrastrandome los findes cuando doblaba turnos en la pizzeria donde me sacaba un sobresueldo, las aglomeraciones, retrasos, colas interminables, codazos, tropiezos, estrenos de cine, luces, voces y algarabia general… eran mas una molestia que algo que tomar como positivo. Mi alma viejoven, supongo, que a veces se imponia a la edad que me marcaba el DNI. Pase por la chocolateria San Gines para darme un capricho antes de subir a casa… y me lo comi por el camino porque recorde que mi plan de pasar el resto del dia con ropa de indigente y abrazada a mi gato se habia ido al garete por culpa de Aina. --Dichosas mejores amigas… hay que joderse. --Tire de la portezuela metalica haciendo fuerza con el hombro, mientras me relamia los restos dulces que se me habian impregnado a las comisuras--. Aprende a decir no, Roma. Es muy facil. Son solo dos letras. Si podias pronunciar esternocleidomastoideo con seis anos, ?que puto problema tienes con negarte a las cosas? Subi las escaleras pisando fuerte, pero no como Alejandro Sanz, sino en plan… mosqueada con la vida. No me apetecia salir. No tenia ganas de ducharme, peinarme y revolver en el armario algo para ponerme. No queria bajar otra vez las escaleras. Queria prepararme estrategias de defensa para el lunes, cuando seguramente mi jefa me llamaria a su oficina para que le contara mi parte de version en la movida con los padres de los alumnos. < >, diria. < >. !Como si fueran culpa mia los suspensos en asignaturas que no estaba impartiendo, cojon! Gire la llave y, de inmediato, los maullidos me recibieron al otro lado. Sonrei. Al cruzar el umbral, Cax Teller, mi gato rubio de ojos azules, llamado asi en honor al protagonista de series como Hijos de la Anarquia y fantasias sexuales recurrentes de Roma. Me incline para acariciar su pelaje calentito. --Las cosas que hacemos por l