jamas nadie como tu
-
jamas nadie como tu - Lorena Doncel
https://gigalibros.com/jamas-nadie-como-tu.html?Os imaginais como sobrevive una chica humilde, cajera de un supermercado para ayudar a que su familia coma lentejas tres veces por semana, a la que llaman <
>, instalada en una enorme casa y rodeada de criados? ?No? Yo tampoco. -
Jamás nadie como tú Versión Kindle - Libros - Amazon.es
https://www.amazon.es/Jam%C3%A1s-nadie-como-Lorena-Doncel-ebook/dp/B075GTRKGGJamás nadie como tú eBook : Doncel, Lorena: Amazon.es: Tienda Kindle. ... Descubre más libros del autor, mira autores similares, lee blogs de autores y más.
-
Reseña: Jamás nadie como tú de Lorena Doncel - MI ...
https://mipequenorinconblogs.blogspot.com/2020/04/resena-jamas-nadie-como-tu-de-lorena.html22 abr 2020 — ... necesitaba seguir leyendo sus novelas, así que hoy toca reseña de uno de sus libros. Se trata de "Jamás nadie como tú" de Lorena Doncel.
-
Jamás nadie como tú - Libros De Mario
https://www.librosdemario.com/jamas-nadie-como-tu-leer-online-gratisLeer Libro Completo: Jamás nadie como tú de Lorena Doncel | NOVELA ONLINE GRATIS.
-
Jamás nadie como tú - Lorena Doncel - El Olimpo Entre Libros
https://olimpoentrelibros.blogspot.com/2020/01/jamas-nadie-como-tu-lorena-doncel.html9 ene 2020 — Jamás nadie como tú, está narrado casi en su totalidad por nuestra protagonista, a quién conoceremos como Sofía. Ella es una chica de 19 ...
-
Jamás nadie como tú by Lorena Doncel - Goodreads
https://www.goodreads.com/es/book/show/36209448Jamás nadie como tú book. Read 7 reviews from the world's largest community for readers. ¿Os imagináis cómo sobrevive una chica humilde, cajera de un sup...
-
Leer Jamás nadie como tú – Lorena Doncel (Online)
https://librosonlineparaleer.net/leer-jamas-nadie-como-tu-lorena-doncel-online/2 oct 2017 — Lee online la novela romántica “Jamás nadie como tú” de Lorena Doncel. ... Descarga aquí libros originales y apoya a los autores.
-
jamás nadie como tú (ebook) - Casa del Libro
https://www.casadellibro.com/ebook-jamas-nadie-como-tu-ebook/cdlap00011601/9191493Tagus lectura digital. Diseñados para mejorar la calidad de la lectura, la luz frontal mejora el rango y alcanza más intensidad para hacer más placenteras ...
-
Jamás Nadie Como Tú De Lorena Doncel Pdf - Mercado Libre ...
https://articulo.mercadolibre.com.ve/MLV-540296590-libro-jamas-nadie-como-tu-de-lorena-doncel-pdf-_JM- Libro en PDF. ... VENTAJAS DE COMPRAR LIBROS EN FORMATO DIGITAL: ... Cuesta solo una fracción del valor del libro en físico. ... Puedes Guardar varias copias de tus ...
-
JA Redmerski - Nadie como tú - Planeta de Libros
https://www.planetadelibros.com/libro-nadie-como-tu/19604628 abr 2015 — Con dos personajes maravilloso, de esos que no olvidaras jamas. 100% recomendado. ¡Por favor, publicar su continuación! Carolina Vega - ...
-
Margaritas para Lucia, Lorena Doncel de Lorena Doncel
https://gigalibros.com/margaritas-para-lucia-lorena-doncel.html -
Polvos de fuego de Roberto Casin
https://gigalibros.com/polvos-de-fuego.htmlUn enigma de siglos. Suenos indescifrables. Una avioneta que se estrella cargada de droga en una playa. Asesinatos, misterio e intriga en un pequeno pueblo que vive hermeticamente atado a su pasado. Una historia de pasiones, amor y venganza con un inesperado desenlace y en la que lo magico se funde con lo real. Todo de la mano de personajes fascinantes: el intrepido patriarca don Anselmo Montero, el vehemente cura Aristeo, el pintoresco cuatrero Indalecio o la ingeniosa prostituta Mariangelica.
-
No me quieras 1 de Raquel R. Gallagher
https://gigalibros.com/no-me-quieras-1.html?Que sucede cuando tu peor enemigo duerme cada dia a tu lado y en tu misma cama? Clara Balboa es una universitaria de diecinueve anos atrapada en una relacion monstruosa. Alex, su novio, es un chico guapisimo, con un cuerpo de infarto y la apariencia de un actor de Hollywood. Pero tanta perfeccion no es mas que fachada, una bajo la que se esconde un monstruo despiadado, controlador y egoista que disfruta convirtiendo la vida de Clara en un infierno. Para ella no hay escapatoria. No hay forma humana de escapar de ese infierno. O eso pensaba hasta que Hugo aparecio en su vida para proporcionarle un halo de esperanza y mostrarle una cara del amor que hasta el momento desconocia.
-
Memorias de un primate de Robert Sapolsky
https://gigalibros.com/memorias-de-un-primate.htmlEn la tradicion de Jane Goodall y Dian Fossey, Robert Sapolsky, uno de los divulgadores cientificos mas reconocidos en la actualidad, cuenta la fascinante historia de como dejo las comodidades de la universidad para compartir durante mas de dos decadas su trabajo de campo con una tropa de traviesos babuinos en la sabana africana. Solo un joven idealista podia aterrizar en el corazon de Kenia esperando encontrar ahi una version animada de lo que habia visto y estudiado hasta entonces en el Museo de Ciencias Naturales de Nueva York.
-
Corona de Flores de Cesar Altolaguirre Vazquez
https://gigalibros.com/corona-de-flores.htmlHector, un joven aprendiz de panadero, escucha una confesion que hace tambalear los cimientos de su vida. Se obliga a iniciar un viaje a lo desconocido para recuperar a sus hermanas antes de que la proxima luna nueva cruce el cielo. Pero, ?hasta donde estara dispuesto a llegar para salvarlas a ellas y el mundo que conoce? ?En quien podra confiar en un camino repleto de peligros? ?Quien controla los hilos que mueven su tierra, la politica o la religion? Decidete a acompanarle mientras a su alrededor, sin que el lo sepa, se desata una lucha por el poder que puede destruir el Imperio o hacerlo mas fuerte.
-
Rosas amarillas para conquistar a la senorita Remington de Ana F. Malory
https://gigalibros.com/rosas-amarillas-para-conquistar-a-la-senorita-remington.htmlLancaster, Reino Unido, 1840 Demasiado excitada como para permanecer sentada, la joven senorita Elizabeth Grant caminaba de un lado a otro del dormitorio deteniendose de tanto en tanto frente al espejo del tocador. Estudiaba con atencion la imagen que este le devolvia, sonreia satisfecha y reanudaba el paseillo ante la divertida mirada de su prima Anna. --No comprendo como puedes estar tan tranquila --manifesto la muchacha, revisando por enesima vez su aspecto, atusandose los rizos que le enmarcaban el rostro y ahuecando el abullonado de las mangas de su vestido antes de girarse hacia su prima con una deslumbrante sonrisa en los labios--. ?No estas emocionada? Yo siento que podria estallar de un momento a otro, tan alborotada estoy --concluyo con una risita de puro jubilo. --Es comprensible, estas a punto de asistir a tu primer baile --senalo Anna, coreando la risa de Beth al ver que sus palabras no hacian mas que avivar el entusiasmo de la mas joven, y contagiandose del mismo. A fin de cuentas, esa tambien seria su primera temporada, aunque su edad distara mucho de ser la de una debutante. La inesperada muerte de sus padres tres anos atras la habia mantenido largo tiempo sumida en el dolor, la tristeza y el duelo, alejada de los salones y reuniones. Detalle este que, dado su caracter extrovertido, y a decir de su tia un tanto levantisco, le traia sin cuidado. Intentaria disfrutar de las fiestas y el baile como cualquier otra joven, sin importarle que el resto de la sociedad la considerara, a sus veintiun anos, poco menos que una solterona. A lo largo de aquella semana su tia Clarissa la habia abrumado con interminables sermones sobre como tenia que comportarse en el baile de presentacion de Beth. Ante todo, debia evitar ponerse en evidencia, pensando siempre en su futuro y en el de su prima que, con seguridad, esa misma temporada lograria prometerse con algun respetable y, por supuesto, adinerado caballero. --Con suerte, siempre y cuando tu conducta sea intachable, tu tambien encontraras esposo. Estas habian sido sus palabras la noche anterior. Palabras que en ese instante resonaban en su cabeza casi como una amenaza. <>. Ni mucho menos estaba en contra del matrimonio, pero tampoco lo consideraba una obligacion. Si algun dia se casaba lo haria por amor y no porque el caballero fuera adecuado, acaudalado y socialmente conveniente. Tampoco porque la sociedad asi lo dictara. --No tienes de que preocuparte. --Tranquilizo a Beth con una calida sonrisa, olvidandose de las monsergas de su tia y de un futuro que, por el momento, no le inquietaba lo mas minimo--. Causaras sensacion. Estas preciosa. --Eres muy amable, Anna, y me encantaria poder decir que tambien tu luces estupenda, pero... las dos sabemos que ese vestido rosa que mama ha escogido para ti no es precisamente favorecedor --apostillo con un mohin de disculpa. Anna se acerco al espejo, contemplo su imagen y dejo escapar un suspiro de resignacion. --Tu madre queria asegurarse de que esta noche fueras tu la que brillara, y para ello me ha convertido en una col rosa --senalo con gesto comico--. Creo que, de haber podido, habria hecho lo mismo con el resto de invitadas --anadio, muy seria. Su expresion solemne no logro enganar a Beth y un segundo despues ambas estallaban en carcajadas. --Llevas razon, pero no lo ha hecho con maldad, aunque he de reconocer que se le ha ido un poco la mano. Continuaban riendo cuando la puerta del dormitorio se abrio sin previo aviso. --?Que escandalo es este? --pregunto Clarissa, horrorizada. --Ha sido culpa mia, le contaba a Beth... --Dios bendito --la interrumpio con apurados movimientos de las manos--, a este paso terminare de los nervios --dijo mas para si que para las muchachas, que la observaban con fingida seriedad. Tomo aire y lo expulso despacio antes de volver a hablar--. Los invitados comienzan a llegar y debemos recibirlos como corresponde. Sabeis lo que debeis hacer, ?verdad? --pregunto al tiempo que las hacia abandonar la estancia y, saliendo tras ellas, acomodaba los volantes del vestido de su hija--. Anna… --?Si, tia? --Espero que recuerdes todo cuanto te he dicho estos ultimos dias. --Por supuesto que lo recuerdo, tia. --Clarissa, satisfecha, se les adelanto, dedicandoles una ultima mirada antes de comenzar a bajar las escaleras--. ?Como olvidarlo si ha pasado toda una semana martirizandome con ello? --susurro en cuanto la mujer les dio la espalda. --?Has dicho algo? --inquirio aquella, deteniendose para mirarla por encima del hombro. --!Oh! Nada importante, tia. --Beth a duras penas podia contener la risa--. Que puede estar tranquila, no se me ha olvidado ni una sola palabra de cuantas me ha dicho. --Confio en que asi sea, querida. --Respiro despacio y bajo a reunirse con su esposo, que ya recibia a los primeros invitados. *** Clarissa se sentia exultante; todos elogiaban su fiesta y comentaban lo encantadora que era su hija Elizabeth. Prueba de ello era que su carne de baile se habia completado en un abrir y cerrar de ojos, y varios caballeros, los menos avispados, habian perdido la oportunidad de disfrutar de su compania durante la danza. Anna tambien habia bailado, aunque preferia permanecer en un segundo plano. No resultaba agradable exhibirse con aquel horrible vestido lleno de lazos, sin mencionar que la mayoria de caballeros alli presentes solo tenian ojos para las mas jovenes de la reunion. Hacia un buen rato que observaba a las parejas moverse en el centro del salon, cuando diviso entre el gentio al senor Taylor. Recordo entonces que el nombre del caballero figuraba dos veces en su carne; por lo tanto, la buscaba. Habia bailado con el al inicio de la velada y sabia que sus pies no soportarian un nuevo encuentro con los desmanados zapatos del joven. Sin rastro de remordimiento, huyo, mezclandose entre los invitados que bordeaban la pista de baile, hasta despistarlo. Terminar junto a una de las puertas que daban al jardin le sirvio para escabullirse fuera y librarse asi de la tortura que supondria bailar con el. El aire fresco de la noche la hizo estremecer, pero preferia pasar frio a volver a la atestada sala donde, con total seguridad, el senor Taylor continuaria buscandola, al menos durante unos minutos. Con pasos distraidos y sin apenas ser consciente de ello, tomo el camino que conducia a los rosales. Era su lugar favorito del jardin, porque le gustaban las rosas, en especial las amarillas. Eran flores hermosas y delicadas, pero a la vez temibles, con sus grandes y afiladas espinas; le fascinaban. Le recordaban un poco a si misma: de apariencia fragil y fuerte caracter. Quizas por eso la cautivaban. Durante la caminata se cruzo con varias parejas, unas paseaban sin mas para descansar del barullo del salon, otras buscaban rincones un poco mas discretos, con seguridad para decirse palabras de amor e, incluso, besarse con pasion, penso, suspirando. Se pregunto si alguna vez hallaria un hombre que se fijara en ella. Cierto que habia despertado el interes de varios caballeros, pero, a su modo de ver, eran demasiado jovenes o demasiado mayores. Tal vez su aspecto menudo, carente de sugerentes curvas, su cabello anaranjado, herencia de su padre, y sus ojos tremendamente verdes, no fueran del agrado de los hombres que ella consideraba interesantes.
-
Ayudame a recordar (Amores inesperados 3) de Tamara Bueno
https://gigalibros.com/ayudame-a-recordar-amores-inesperados-3.htmlPerdida y encuentro.
Duelo y comienzo... o ?tal vez es al contrario?
Spencer y Gabriela. Dos mundos, dos ajenos que se hallan el uno al otro en un momento... complicado. -
Alex, la indomita sobrina del conde de Nieves Hidalgo
https://gigalibros.com/alex-la-indomita-sobrina-del-conde.htmlLondres. 1819 El intenso olor penetraba por los resquicios de la ventana que aun no se habia reparado, desgajada por un rayo que se habia colado por ella y recorrido la galeria de lado a lado dos noches antes. Por mas que intento sujetar los tablones que, de momento, cubrian los desperfectos, las intensas rafagas de viento los soltaban una y otra vez. Era como si el cielo hubiera querido castigar Londres durante los ultimos quince dias: las calles se encontraban casi intransitables y el Tamesis, utilizado como alcantarilla de la ciudad, se habia desbordado en diversos puntos, provocando que la pestilencia se extendiese por toda la urbe. Jerome Graham recoloco el tablon y maldijo en voz alta, en un tono tan subido que su reverberacion le sobrecogio. Se cerro cuanto pudo el cuello de su levita de pano grueso y se dispuso a acabar la ronda. No le gustaba aquel trabajo, pero daba gracias por tenerlo; al menos, podia llevar un plato de comida caliente a su casa, lo que ya era mucho despues de haberse pasado meses buscando ocupacion. Alli se estaba caliente y la tarea no era fatigosa. Sin embargo, tener que deambular solo durante las grises tardes por las distintas salas, una vez cerradas a los visitantes, lo ponia nervioso. La enorme mansion del siglo XVI en el barrio de Bloomsbury habia sido adquirida por el Gobierno a cambio de veinte mil libras, para convertirla en el museo que habia abierto al publico sesenta anos antes, justo el 15 de enero de 1759. El funcionario que lo contrato le aseguro que era una suerte servir de celador en un lugar repleto de cultura y obras de arte, pero a el le importaban poco los libros, manuscritos o cuadros, asi como las antiguedades egipcias, griegas, o de donde procedieran. Lo unico que le movia a hacer sus solitarias rondas, provisto del candil de aceite, era el digno jornal que permitia comer y vestirse a su familia. Por el, hubiera vuelto a los muelles; entre el barullo de los estibadores no tenia que estar constantemente mirando a su espalda. Alli, por el contrario, el silencio del museo lo impresionaba de tal manera que en cada rincon creia ver figuras que se movian, y con los susurros del aire por cualquier corriente el vello se le ponia de punta. Sobre todo, aquella tarde. Juraria que habia escuchado pasos en la sala donde se exponian los restos egipcios, pero se convencio de que su imaginacion, siempre propensa al recelo, le jugaba una mala pasada. ?Quien iba a colarse en el museo para robar? Todo cuanto se exponia en vitrinas o sobre pedestales era mas viejo que Matusalen y la mitad estaba roto. Incluso aquella piedra, que habian traido de lejos y que todo el mundo iba a admirar, no era mas que un trozo de basalto lleno de garabatos que ni el mas listo podia entender. Desde luego, si el fuera un ladron, la casa Montagu seria el ultimo lugar al que entraria a desvalijar. Con andar cansino atraveso la sala en la que se custodiaban los famosos manuscritos de sir Hans Sloane, aquel medico y naturalista que dejo en testamento su herencia al Gobierno britanico, paso despues por otra anexa que contenia cientos de volumenes antiguos, y se dirigio hacia la zona del museo en la que se encontraban los restos del antiguo Egipto. Esas salas en concreto eran en las que con mas recelo hacia su ronda. Cada vez que entraba en ellas tenia la sensacion de que alguien tiraba de su desgastada levita. Procuraba inspeccionarlas lo antes posible, sin detenerse a mirar los ojos vacios de las estatuas o los cuerpos envueltos en putrefactas vendas que descansaban en las vitrinas. Comprobado que todo estaba en orden, tomo el camino de las escaleras que bajaban a los sotanos. Alli habia multitud de cajas sin abrir, cuadros envueltos en papel aceitado y hasta un feretro de solo Dios sabia la epoca. Su rutinario trabajo pasaba por confirmar que todo estuviera tranquilo y si, por casualidad, se hubiera colado alguna rata en el recinto, acabar con ella. Alzando el farol por encima de su cabeza recorrio el lugar, miro a un lado y otro, reviso los rincones donde dias antes viese algun roedor muerto y regreso hacia las escaleras. Dio un vistazo al reloj de bolsillo, unica herencia de su padre, y comprobo que en una hora mas acabaria su turno. Peter Sunset lo reemplazaria para hacer el de la noche. Ascendia ya cuando creyo oir un crujido. Se volvio, levanto el candil y sus ojos atisbaron el lugar. El sonido se repitio. Ya no le cupo duda de que algun infecto bichejo estaba haciendo de las suyas. Renegando entre dientes desanduvo el camino y se armo con la porra que siempre colgaba de su cadera. --Ven aqui, precioso --dijo a la oscuridad--. Ven con papa. El silencio lo envolvio como un mal presagio, pero siguio su avance tratando de ubicar al animalejo. Algo se movio detras de una pila de cajas y Jerome mostro su dentadura mellada forzando una sonrisa, seguro de haber localizado al intruso. Avanzo con cautela dispuesto a aporrearlo, rodeo el feretro de madera pintada y... Antes de que pudiera saber lo que estaba sucediendo, un objeto contundente choco contra su craneo obligandole a sumirse en la inconsciencia. La figura embozada que lo habia dejado fuera de combate paso por encima del cuerpo, escondio la pequena estatua que acababa de sustraer bajo los pliegues de su capa y desaparecio en la oscuridad. Capitulo 1 Londres. 1819 Regresar a Londres habia sido, sin duda alguna, una de las peores decisiones de su vida. Lejos de Inglaterra, abstraida por la voragine que suponia cada hallazgo, el recuerdo doloroso de su desden se habia mitigado, aunque, no por ello, estaba olvidado. Si algo tenia era buena memoria y jamas se lo perdonaria. La aficion de su madre por la cultura egipcia arrastro a su padre, anos atras, a abandonar su trabajo como profesor en Eton para sumarse al equipo arqueologico de Giovanni Battista Belzoni. Ella, por tanto, se habia criado a caballo entre Londres y la tierra de los faraones, llegando a convertirse en una aplicada colaboradora. Como cualquier joven, a veces echaba de menos acudir a las fiestas londinenses, aunque en Egipto no faltaron las veladas en algun hotel o en la mansion de un millonario excentrico deseoso de agasajarlos. Ella procuraba alejarse de toda la parafernalia que, por costumbre, seguian manteniendo sus padres: acicalarse para las cenas, aunque estuvieran rodeados de dunas y polvo. Lo veia una estupidez suprema, a la que la mayoria de las veces tenia que plegarse para no enfadarlos. Como el esnobismo de Belzoni de tener que utilizar a un capataz de intermediario cuando queria preguntarle algo a uno de los egipcios que achicaban tierra. En mas de una ocasion se lo dejo ver porque para ella cualquier hombre era igual a otro, pero el italiano solo sonreia, se encogia de hombros y la dejaba con la palabra en la boca. Lo que si echaba de menos cuando no estaba en Londres eran las partidas de ajedrez con su tio, reir con las bromas de su primo Jason y ponerle al dia de sus secretos a Nicole, su esposa. No era un bicho raro, como solia decir de ella la condesa viuda en tono jocoso, a la que, a pesar de no ser su abuela, tenia como tal. Pero si era cierto que ciertas costumbres de la aristocracia no iban con ella. Se encontraba mucho mas a gusto enfrentandose a la amplitud de los espacios abiertos y recibiendo el sol en el rostro, que poniendo buena cara a personas que no le interesaban. Era la vida que deseaba y que le agradaba. Por desgracia, a pesar de la distancia y el tiempo transcurrido, seguia sin poder evitar que un hombre le quitase el sueno. Uno a quien, parecia haber quedado claro, ella no le interesaba en absoluto. El trabajo en las excavaciones apenas le habia dejado tiempo para pensar en otra cosa que no fuera extraer de las arenas del desierto los vestigios de una civilizacion milenaria. Pero la actualidad mandaba y hubieron de regresar a Londres para poner al dia las inversiones de su padre en la industria textil, interesarse por una fundacion en la que colaboraba y estar presentes en la celebracion en honor del heredero de Jason y Nicole, vizcondes de Wickford: Cayden Lionel Rowland. [1] Sabia que pisar Creston House implicaba volver a enfrentarse a la espiral de emociones que para ella suponia la presencia de Daniel Bridge. Creyo poder controlarlas, que iba a ser capaz de dominar los latidos de su corazon cuando volviera a verlo, mostrarse distante con el. !Que ilusa! Apenas pisar el salon donde todos se encontraban reunidos, aquel estupido organo enamoradizo comenzo a dar saltos en su pecho. Porque el estaba alli, como bien suponia. Daniel Bridge no solo era el medico de la familia Rowland, sino amigo personal de Jason desde que le salvara la vida durante la guerra, y se contaba con el para cualquier acontecimiento; incluso disponia de una habitacion permanente reservada para su uso en Creston House. Ahogo un suspiro porque, si cabia, lo encontro mas guapo aun que cuando se marcho a Africa por ultima vez. Relego el momento de saludarlo tanto como pudo, dedicandose a repartir sonrisas y abrazos a los demas, consciente de la presencia de Daniel en la sala y de su inevitable reencuentro. Alto, ancho de hombros, luciendo ese cabello rubio que ella sono tantas veces con despeinar y aquellos ojos azules que, mal que le pesara, habian invadido sus noches, era imposible obviarlo. Su boca la llamaba como un canto de sirenas y no pudo sino recordar aquella primera vez en que, como despedida, antes de que partieran de Inglaterra, la habia besado. Para ella habia supuesto un vuelo hasta las nubes, materializar un anhelo tanto tiempo deseado que quiso repetir. Asi se lo pidio, como una boba, con los ojos colmados de ilusion juvenil. Como respuesta, Daniel la habia apartado de el, dejandola con una sensacion de frustracion que se prolongo hasta el ridiculo por haberse manifestado tan entregada. Claro que peor fue a su regreso, en aquel maldito baile de mascaras en el que el se presento disfrazado de Lucifer, todo vestido de rojo, por completo irreconocible, y la abordo cuando buscaba un momento de paz en los jardines. Habia tomado su mano para llevarla hacia la espesura, la habia besado y luego, cuando ella se encontraba en el septimo cielo, la habia dejado aturdida con una frase que arruino sus expectativas: --Sigues besando como una nina. Evocar el modo en que se burlo de ella hizo que se la llevaran los demonios de nuevo. No lo habia olvidado, era imposible dejar de lado su desprecio. Se le avinagro el gesto. Y justo entonces, a su espalda, escucho su voz. --Hola, Alex. Se volvio esbozando una sonrisa forzada. Aunque consiguio mantenerla asi, fria y desangelada, dandole a entender que se la dedicaba por puro compromiso, empezo a escuchar en su interior el retumbar de unos latidos que la delataban. Tan fuertes eran que temio que Daniel pudiera escucharlos, asi que se ladeo un poco para aceptar la copa de champan que le ofrecia uno de los criados, tratando de darse tiempo y calmarse un poco. --?Como te va, Bridge? --pregunto de modo escueto, rehusando mirarlo a la cara. Daniel se mordio los labios para contener una sonrisa por su saludo tan banal. Alexandra no habia cambiado en nada, seguia siendo aquella muchacha discola, empecinada y tozuda. Bueno, si que notaba un cambio en ella: estaba preciosa, mucho mas bonita. Con razon habia acaparado su atencion desde el mismo momento en que hizo acto de presencia: su cabello rubio claro recogido en bucles, sus ojos vivaces e inteligentes, casi plateados, su estrechisima cintura... Y !condenada fuese!, con un escote que magnificaba sus atributos mas de lo que el hubiera querido y que le provoco un tiron en la ingle.
-
La verguenza de Annie Ernaux
https://gigalibros.com/la-verguenza.htmlEn 1952, cuando Annie Ernaux tenia doce anos, su padre quiso matar a su madre un domingo de junio, a primera hora de la tarde. Anos despues, esa escena se le presenta a la autora tan diafanamente cruel como el dia en que la vivio. Como en tantas otras familias, sus padres, que se odian entre si, adoran en cambio a la nina, por lo que, mientras pasan los dias y el olvido invade el hogar, el recuerdo de aquel domingo parece convertirse en un mal sueno. Sin embargo esa escena cambio para siempre a la autora: aquella nina y su familia <
>, y todo habia pasado a ser vergonzoso. Annie Ernaux recorre desde los codigos de conducta y las normas sociales que imperaban en su entorno, hasta las noticias del momento, las expresiones mas usadas o el temor que infundian las grandes ciudades, para calibrar con exactitud hasta que punto lo ocurrido la hicieron sentirse indigna. -
La Justicia del Visir de Christian Jacq
https://gigalibros.com/la-justicia-del-visir.htmlLa hora de la confrontacion definitiva ha llegado. Pazair, ahora visir de Egipto, y su esposa Neferet, nombrada medico principal del reino, se enfrentan con el ministro de Economia, quien se erige en portavoz de los conjurados que se han aduenado del testamento de los dioses y que estan a punto de derrocar a Ramses el Grande. El alto funcionario, que se hacia pasar por amigo de Pazair, ha tejido una urdimbre tan espesa que la situacion es desesperada; el y sus complices han desorganizado la economia y se proponen destruir los valores que han presidido el nacimiento de la civilizacion egipcia. Aunque los aliados escasean, el visir y su esposa, decididos a luchar hasta el final, tratan de identificar al asesino de su maestro espiritual, quien ha cometido el error de cruzarse en el camino de los facinerosos. ?Donde esta el hermano de sangre, Suti, que ha logrado escapar de su prision nubia? ?Conseguira el misterioso <
> eliminar a Pazair? ?Quien es el alma verdadera del complot que se oculta en las tinieblas? ?Quien, valiendose de la traicion, el crimen o la ley, saldra vencedor de ese cruento combate del que depende la supervivencia de Egipto? La justicia del visir es el ultimo volumen de la trilogia El juez de Egipto, que junto con los dos primeros titulos, La piramide asesinada y La ley del desierto, forma esta trilogia que ha superado todas las previsiones de exito y se ha convertido en un indiscutible bestseller. -
Mariposa de piedra (Bdb) de Concha Alvarez
https://gigalibros.com/mariposa-de-piedra-bdb.htmlSerie Mariposas negras, libro 1o
El dia que la madre de Sara muere en un accidente de trafico, la joven descubrira que su mundo ha dejado de ser perfecto. Cuando su obsesion por dibujar tumbas se convierte en algo mucho peor, Sara comprendera que vive una pesadilla. Su mente jugara con ella hasta hacerla creer que sus suenos pueden transformarse en realidad. Una realidad tan enloquecedora como enamorarse de un angel de piedra; la escultura mas antigua del cementerio de Pravia.
-
Nicolas Bradley y la mujer de blanco de Monica Bohorquez
https://gigalibros.com/nicolas-bradley-y-la-mujer-de-blanco.htmlTras el regreso de la familia Bradley a Londres, despues de dieciocho anos, unas apariciones extranas comenzaron a tomar protagonismo. Nicolas sentia leves escalofrios que le recorian el cuerpo junto a un dulce y agradable olor a rosas cada vez que caminaba por la mansion.
-
Por ti pagaria las consecuencias de Laura Kaestner
https://gigalibros.com/por-ti-pagaria-las-consecuencias.htmlDixie Cabbot y Ahmed Tarik se criaron juntos en la campina francesa, cobijados por un parentesco lejano, rodeados de caballos y tradiciones vitivinicolas, y compartieron su primer despertar en el amor, seguros de que estarian juntos para siempre. Sin embargo, el destino les jugo una mala pasada: reclamos familiares, amores escondidos, reproches maritales y un adulterio fueron causantes de su separacion. Veinte anos despues vuelven a encontrarse en las mismas tierras y esta vez el destino les dara la posibilidad de una revancha, de demostrarse que, a pesar del tiempo, todo sigue intacto en el mismo lugar.
-
Como Animales de Jorge Borges
https://gigalibros.com/como-animales.htmlTodo comenzo por accidente.
Un retiro a la casa de las montanas.
10 personas, en mi casa.
Alcohol, cartas, dardos, alcohol. -
El error de Clara Ulman de Cristina Higueras
https://gigalibros.com/el-error-de-clara-ulman.htmlCristina Higueras construye en esta novela un turbador thriller en el que su protagonista transgrede todas las normas para adaptar el mundo a sus principios.
-
Odio, amistad, noviazgo, amor, matrimonio de Alice Munro
https://gigalibros.com/odio-amistad-noviazgo-amor-matrimonio.htmlEn los nueve relatos recogidos en este libro, la literatura se vuelve itinerante como la memoria misma, y crea personajes tan contradictorios como cualquier persona de carne y hueso.
-
El hombre Z de Pedro Suarez Ochoa
https://gigalibros.com/el-hombre-z.htmlUna ciudad en Venezuela se paralizo por un extrano evento ocurrido en 1998. Algunos hablaban del advenimiento de la era zombi, pero 21 anos despues se conocio la verdad.
-
Solo una semana de Andrea Laurence
https://gigalibros.com/solo-una-semana.html?Podria una semana de pasion convertirse en algo mas?
-
Tubing de K.a. Mckeagney
https://gigalibros.com/tubing.html
?Que pasaria si las miradas matasen? -
Enamorarme la primera vez, fue mi error, Indhira Jacobo de Indhira Jacobo
https://gigalibros.com/enamorarme-la-primera-vez-fue-mi-error-indhira-jacobo.htmlDeslenguada, impertinente y maleducada. Asi es como David Wyatt ve a Eve Montes, la chica que sin proponerselo entro en su tranquilo y ordenado mundo para ponerlo patas arriba. Pero lo que el no sabe es que detras de todo ese caracter existe una mujer fragil y luchadora.
-
Dulce enemistad de Eva Benavidez
https://gigalibros.com/dulce-enemistad.htmlSus pasos urgentes resonaban en las frias baldosas; habia perdido su sombrero hacia rato. El sudor resbalaba por la frente y por el cuello mientras corria intentando sortear desperdicios, animales famelicos y bultos humanos, los cuales habitaban los apestosos callejones. Desesperado, doblo en una esquina; su pie piso algo viscoso y por poco cae de bruces. Sin importar el dolor, siguio avanzando. En el fondo sabia que era inutil escapar; no importaba cuanto corriera o donde se escondiera: lo encontraria. Y cuando eso ocurriera… El terror lo invadio; tropezo y cayo con un golpe seco. Jadeando, intento levantarse, pero las piernas no le respondian. Lagrimas de impotencia y de terror nublaron su vista; no podia mas, no podia seguir. De repente, un escalofrio le subio por la espalda y los vellos de la nuca se le erizaron. Lentamente, giro su cabeza; entonces, lo vio. A solo unos pasos estaba su verdugo. Las piernas, separadas e inmoviles. Las sombras lo envolvian y el silencio lo rodeaba. No escuchaba murmullos provenientes de las tabernas ni de los antros; ni tampoco ladridos de perros furiosos. Extranamente, oia un llanto desesperado; cayo en cuenta de que era el suyo. Sin decir palabra, el hombre comenzo a acercarse. A cada paso, el sentia su corazon estallando dentro de su pecho. Nunca penso que su vida acabaria asi: muriendo en un callejon lleno de mugre y hedor. El desconocido siguio avanzando; la luz de la luna ilumino su rostro por un instante. Lo miraban unos ojos oscuros y frios que no habia visto antes. No reflejaban nada: ninguna emocion ni atisbo de pensamiento; ni siquiera parecia estar agitado por la carrera. Lo asombro descubrir que su perseguidor aparentaba al menos ser un caballero, pero uno como jamas habia visto, uno sin alma. Un demonio. La sangre se le congelo en las venas; el caballero levanto su mano derecha y apunto su arma hacia el. Quiso gritar, pero su boca no emitio sonido. Intento levantarse, tal vez podria convencerlo de alguna manera. Frenetico, metio las manos en los bolsillos. El tenia mucho dinero, seguramente podria… La fuerte explosion resono en las paredes y, un segundo despues, cayo en la oscuridad. Capitulo 1 Raiz de todos los males es el amor al dinero. 1deg Timoteo 6:10 No mires su apariencia; pues el simple hombre mira lo que esta delante de sus ojos, pero Dios mira el corazon. 1deg Samuel 17:6 Nicholas Bladeston, noveno duque de Stanton, dejo suavemente el periodico sobre la mesa de desayuno, pensativo. Hace un tiempo, su naturaleza curiosa habia captado una serie de hechos: asesinatos de hombres pertenecientes al mundo elegante, precisamente. Las victimas fueron halladas en diferentes callejones de los peores bajos fondos de Londres. Pero lo mas curioso era que todos habian muerto de una misma manera: de un unico y certero disparo. Las autoridades, al parecer, pensaban que existian indicios suficientes para creer que se trataban de hechos aislados. Pero el no estaba de acuerdo; demasiadas coincidencias y muchos abismos en las investigaciones de cada hecho alimentaban sus dudas. Sin contar que ninguno de los muertos frecuentaba los lugares donde habian sido hallados sus cuerpos; no habia testigos ni mas pistas, todo era muy turbio y el estaba seguro de que las autoridades callaban algo. Como los asesinatos continuaban, Nicholas decidio ponerse en contacto con una persona de confianza del rey y averiguar si sus sospechas eran certeras. Lo que descubrio lo dejo de una pieza. No solo era atinada su conjetura de la conexion entre las muertes, sino que todas las victimas estaban, de alguna manera, involucradas en el contrabando que acaecia entre Francia e Inglaterra. El mismo incluia tanto armas como mercancias y el negocio mas peligroso: la venta de informacion. Por lo que, de inmediato, concerto una cita con el ministro de guerra; antes habia trabajado para el pasando informacion y datos utiles. El ministro le confio que estaban tras una pista de espionaje y posible traicion al rey Jorge. Ademas, al parecer, alguien se habia percatado de esto y el cabecilla de la organizacion intentaba cubrir su rastro eliminando sus miembros mas expuestos. La seguridad britanica tenia la certeza de que el asesino y posible traidor era un noble; alguien ubicado en el corazon de la nobleza, con las mejores conexiones, lo que le permitia ir siempre un paso adelante. Por esto, se le encomendo ponerse a disposicion de la corona y usar el acceso y los beneficios que su titulo de duque le otorgaban para intentar desenmascarar al traidor y descubrir sus planes. La puerta del comedor se abrio y aparecieron su madre --la duquesa-- y su hermana menor. No parecian tener secuelas de haber regresado a altas horas de la noche, luego de haber asistido a otro interminable baile. Su hermana, que acababa de ser presentada en sociedad y que --por lo que habia escuchado-- ya causaba sensacion entre la poblacion masculina, lo miro y arqueo una dorada ceja. --?Jugando al detective otra vez, hermanito? --La risa le bailaba en los ojos. --Buenos dias, madre --dijo Nicholas poniendose de pie--. Estas radiante como siempre, hermana --dijo, haciendo una inclinacion con la cabeza. Su hermana le saco la lengua juguetonamente y luego tomo un plato para ella y para su madre. Con una sonrisa, Nicholas volvio a sentarse. <
>, penso mientras la observaba servirse. Seguramente las viejas matronas de la alta sociedad se escandalizarian de que personas de su rango se sirvieran la comida sin llamar a los lacayos. Pero desde que tenia memoria era asi. Su padre, el antiguo duque, no les habia dado una educacion muy ortodoxa. A duque le gustaba desayunar en familia y que se sirvieran ellos mismos. Incluso les enseno a montar sin silla. El mismo se ocupo de ensenarles a escribir, leer, pescar, nadar y hasta manejar un carruaje. Su prematura muerte los habia destrozado. Su ausencia todavia le dolia. Sacudio la cabeza; deberia aprender de su madre, que lo recordaba con alegria y risa. Ella le toco el brazo, como sacandolo de sus melancolicos pensamientos. --Hijo, ?estas bien? Llevo horas hablandote y tu solo me miras como un pez moribundo. --< >, penso Nick. --Lo siento, siempre me agrado la vida marina, ya sabes --dijo sonriendo. La risa de Clarissa resono en la habitacion; su madre la fulmino con la mirada y luego le pellizco el brazo. Su sonrisa se transformo en una mueca dolorida. Se quejo en voz alta y murmuro: --Perdona, madre, ?decias? --Te contaba del gran baile que se celebrara esta noche. Sera el acontecimiento de la temporada; todo aquel que se considera alguien asistira. Nicholas sabia a donde queria llegar. A sus veintiocho anos ya era experto en eludir tediosas fiestas, donde estaria rodeado de virgenes ruborizadas, debutantes vestidas de blanco y, lo peor, madres y damas de compania avidas de cazar un titulo. Eso sin contar a los caballeros deseosos de congraciarse con el, con obvias intenciones de acceder a su abultado bolsillo. La sola vision lo aterraba; podia pasar del gran acontecimiento. Miro a su madre, que lo observaba expectante, mientras su hermana parecia adivinar sus pensamientos. --Por supuesto, madre, que puedes asistir. Si quieres algun accesorio para tu vestuario, no tienes mas que decir… --Ella lo interrumpio con un ademan. --!Oh, por favor! ?Olvidas que te di la vida? --dijo con un gesto dramatico --. ?Que yo misma teji tus primeros pantaloncitos? --Nick no pudo evitar ruborizarse, sabiendo que eso divertia mucho a Clarissa. Su madre continuo: --Se que intentas eludirme otra vez, pero !no lo lograras, Nicholas! Nick conocia esa mirada. Honoria habia activado su lado casamentero. Suspiro presintiendo la derrota. --Madre, esta noche tengo planes, y esos si que no puedo eludirlos -
Dime la verdad de Tess Gerritsen
https://gigalibros.com/dime-la-verdad.htmlDos homicidios sin aparente relacion tienen mas en comun que el simple hecho de que los investiguen la inspectora de Boston Jane Rizzoli y la forense Maura Isles. En ambos casos, los cadaveres presentan heridas espantosas, pero se desconoce la causa real de la muerte. Un doble desafio que se presenta en un momento inoportuno para ambas. Mientras Jane se esfuerza por salvar a su madre de un matrimonio fracasado que amenaza con enterrarla, Maura se enfrenta a la muerte inminente de la suya, la infame asesina en serie Amalthea Lank. Esta, aun siendo victima de un cancer terminal, todavia disfruta manipulando a su hija y le facilita una pista criptica sobre los dos extranos asesinatos que Maura y Jane intentan resolver.
-
Al pie de la montana de Romina Naranjo
https://gigalibros.com/al-pie-de-la-montana.htmlRomina Naranjo, con su voz fresca y original, nos regala una novela inolvidable, al mas puro estilo del Western clasico. Personajes maravillosos: Una chica luchadora que se rebela contra los malos tratos y un hombre Malboro que encarna al tipo duro, valiente y de fuertes principios. Un romance sensual, lleno de tension, que atrapa desde el primer encuentro. En el ano 1922, con la Ley Seca imperando en todo el territorio de Virginia, Bree Caser abandona su vida en Kentucky para seguir los pasos que la llevaran al infierno mas aterrador. La bestia que dormia en las profundidades del hombre en quien confio ha despertado al llegar a las montanas. Huir es la unica solucion posible. Escapar de las garras salvajes de un maltratador para caer bajo el embrujo de los Apalaches.
-
Afterburn de Sylvia Day
https://gigalibros.com/afterburn.htmlDarme cuenta de que seguia colada por Jax fue un mal trago. Solo habia formado parte de mi vida cinco semanas, hacia dos anos. Pero ahora habia vuelto. Se habia entrometido en un acuerdo de negocios que me habia costado mucho conseguir. Y, Dios mio, estaba guapisimo. Sus ojos eran de un marron tan oscuro que parecian casi negros. Rodeados por densas pestanas, eran de una intensidad implacable. ?De veras me habian parecido alguna vez dulces y tiernos? Jackson Rutledge no tenia nada de tierno. Era un hombre experimentado y cruel, hecho de una pasta muy dura. En ese momento comprendi cuanto deseaba desvelar el misterio de Jax. Tanto que no me importaba lo que fuera a costarme.
-
Todas somos Blancanieves de Mercedes Silvestre Segovia
https://gigalibros.com/todas-somos-blancanieves.htmlTodas las noches terminan con un bello amanecer, disfrutarlo depende de ti.
-
PROMESAS DE AMOR CUMPLIDAS de Claudia Velasco
https://gigalibros.com/promesas-de-amor-cumplidas.htmlPROMESAS DE AMOR CUMPLIDAS, segundo libro de la Saga Lancaster, cumple diez anos y lo celebramos con una nueva edicion revisada y actualizada.
“Despues del exito de El medallon de los Lancaster, primer libro de la serie Lancaster, Claudia Velasco vuelve a unir los destinos de los Forterque-Hamilton y los Lancaster y nos entrega el segundo libro de la saga, Promesas de amor cumplidas, donde conoceremos una nueva y apasionante historia de amor y donde nos reencontramos con Elizabeth y William Forterque-Hamilton, los grandes protagonistas de esta Saga en la que un apasionante viaje en el tiempo nos lleva a la Inglaterra de Enrique VIII.
Filadelfia, 1920. Madeleine McDonaldson, hija de una acaudalada familia, suena con poder cambiar su destino, esta en contra de las costumbres de su tiempo y se resiste a contraer matrimonio con el hombre que su madre ha elegido para ella. Todos en su familia la ven apenas como a una muchacha confundida por su juventud y cegada por las nuevas ideas que se propagan en la epoca. Cuando la fecha de la boda se vuelve inminente, Madeleine ve como ultimo e improbable recurso para escapar un medallon que ha estado en su familia durante generaciones y del que, dicen, contiene el secreto para viajar en el tiempo.
Condado de Berkshire, 1537, mientras William Forterque-Hamilton, el respetado duque de Forterque, pena por la ausencia de su esposa Elizabeth, su hermano James, un oficial del ejercito de su Majestad britanica, temido y respetado, se ve sorprendido por la aparicion en sus tierras de una joven misteriosa, que no solo llegara a su condado con las pruebas de un complot para asesinarlo, sino que tambien desatara a su alrededor una gran aventura que los llevara a conocer el amor y una enorme pasion que transformara sus vidas para siempre. -
Todos los cuentos de Carmen Martin Gaite
https://gigalibros.com/todos-los-cuentos.htmlEsta edicion de los CUENTOS COMPLETOS de CARMEN MARTIN GAITE no sigue criterios cronologicos, sino que se ordena en torno a los temas habituales de la autora: el desgaste de la cotidianidad y la rutina, la oposicion entre pueblo y ciudad, las primeras decepciones infantiles, la incomunicacion, el desacuerdo entre lo que se hace y lo que se suena, el miedo a la libertad. <<,Todos ellos senala la autora en el prefacio a esta edicion pertenecen a campos muy proximos y remiten, en definitiva, al eterno problema del sufrimiento humano, despedazado y perdido en el seno de una sociedad que le es hostil y en la que, por otra parte, se ve obligado a insertarse.>>, El universo femenino asume el protagonismo de ese malestar indefinible y profundo que crean la carencia de amor y la busqueda de la identidad.
-
No soy un angel de Sandra Somera
https://gigalibros.com/no-soy-un-angel.htmlUn ardiente encuentro en una fiesta de mascaras. Un secreto revelado. Un desengano. Traicion y venganza.
-
El ladron de niebla de Lavinia Petti
https://gigalibros.com/el-ladron-de-niebla.htmlCONOCE AL LADRON DE NIEBLA. ALGUIEN QUE PERSIGUE LAS ESPERANZAS Y LOS AMORES OLVIDADOS, ALGUIEN QUE ROBARA TUS SUENOS.
Antonio M. Fonte es un escritor de exito. Pero eso no significa nada para el, que vive alejado de todo y que, mas alla de su agente literario, no se relaciona con nadie. Sin embargo, un dia algo le obliga a salir de su aislamiento: es una carta, fechada quince anos atras, escrita a un antiguo amor, en la que se habla de un hombre que acaba de ser asesinado. Comienza asi una intrepida busqueda por Napoles, que llevara a Antonio a caminar por entornos extranos tras los pasos de un personaje enigmatico. Un ladron de niebla que colecciona todo aquello que los hombres pierden, desde llaves, gafas y libros hasta recuerdos de amores juveniles, esperanzas o suenos olvidados. Lavinia Petti sabe evocar, con la magia de los grandes escritores, el recuerdo persistente de un mundo que quizas no ha existido nunca. -
El sindrome de Wendy, Lucy Morton de Lucy Morton
https://gigalibros.com/el-sindrome-de-wendy-lucy-morton.html -
Vidas contrastadas, Leah Dempster de Leah Dempster
https://gigalibros.com/vidas-contrastadas-leah-dempster.htmlElla le ofrecio mas de lo que estaba esperando.
-
Todo lo que puedas desear de Jackie Collins
https://gigalibros.com/todo-lo-que-puedas-desear.htmlLa bella y atractiva Cameron Paradise ha decidido abandonar su casa en Hawai y a su marido Gregg, un maltratador, para comenzar una nueva vida en Los Angeles. Alta, rubia y con un cuerpo de escandalo, no tardara mucho en encontrar empleo como entrenadora personal, su gran vocacion, en uno de los centros deportivos mas inn de Los Angeles. Pronto, su trabajo le permitira entablar amistad con los hombres mas influyentes de la zona, que, rendidos ante su personalidad y atractivo, no dudaran en proponerle algo mas. Pero en la mente de Cameron solo hay cabida para su sueno: abrir su propio gimnasio y convertirlo en el mejor y mas exclusivo de Hollywood. Sin embargo, sus planes se veran truncados cuando conozca a Ryan Lambert, un fascinante director de cine independiente casado con Mandy, hija del magnate de Hollywood J. Hamilton Heckerling. Sin darse cuenta, Cameron se vera inmersa en una espiral de sexo e intrigas que la conduciran a una sordida historia con letales consecuencias…
-
Apegos feroces de Vivian Gornick
https://gigalibros.com/apegos-feroces.html… Contenido ….
-
El pacto. Un amor prohibido de Martina Bell
https://gigalibros.com/el-pacto-un-amor-prohibido.htmlTras su ruptura amorosa, Alba conoce a Paul en la redaccion de la revista donde trabaja.
-
Aquellos labios que no bese de Joan Bekker
https://gigalibros.com/aquellos-labios-que-no-bese.htmlHay gente que no consigues olvidar jamas…
-
Todas las cosas que nunca sabre de Noelle Stephanie
https://gigalibros.com/todas-las-cosas-que-nunca-sabre.html?Que pasaria si tu hermanastro apareciera un tu vida queriendo recuperar el tiempo perdido?
?Y si te propusiera coger un avion a Londres e irte con el? ?Aceptarias?
Ariadna Gomez lo tenia muy claro, si queria se libre tenia que dejar de vivir con sus padres. Y el unico que podia salvarla era su hermanastro Charlie.
Los desacuerdos, las discusiones y las continuas plegarias a la libertad hicieron que la chica tomara una decision rotunda al decidir marcharse con Charlie. Sin embargo, nada seria tan facil como planeaba. -
Todo lo que se sobre el amor de Dolly Alderton
https://gigalibros.com/todo-lo-que-se-sobre-el-amor.htmlTan salvajemente divertido y conmovedor como la vida de cualquier veinteanero que crece navegando entre desenganos amorosos y relaciones desastrosas.
La periodista Dolly Alderton se propuso dar cuenta de sus locos veinte anos en este divertido libro trufado de amores y desamores, relaciones intensas por Messenger que fracasan en el cara a cara, trabajos precarios y amigos que siempre estan ahi. Un novio que acaba saliendo del armario, borracheras que te llevan a cruzar el pais en taxis que no puedes pagar, chicos sin redes sociales que se creen Sartre., escenas todas ellas de nuestra lucha por entender que el amor mas intenso e importante es el que sentimos por nuestros amigos y nosotros mismos. -
!Tu te lo buscaste! 2, Emma Green de Emma M. Green
https://gigalibros.com/tu-te-lo-buscaste-2-emma-green.html -
Una mentira al dia (Unidos por el amor 5) de Fernanda Suarez
https://gigalibros.com/una-mentira-al-dia-unidos-por-el-amor-5.html!Vuelve la serie romantica de regencia <
>! -
Sentada al borde de la cama de Roberto Sanchez
https://gigalibros.com/sentada-al-borde-de-la-cama.htmlNo lo podia entender. No me cabia en la cabeza que hubieras dejado tu vida en mis manos. Y menos que lo hubieras escrito en ese papel del demonio. Era imposible que supieras nada cuando lo firmaste. Al dia siguiente se cumplia el plazo, Marta. Se habia empezado a descubrir toda la verdad sobre ti, sobre mi. Quedaban veinticuatro horas para que me dieras alguna senal y tomara una decision. Si hubieras podido oirme, habria bastado ese tiempo para ponerte al dia de lo que ocurrio desde que entraste en ese sueno profundo, en ese silencio que te estaba matando a ti y que nos habia condenado a las dos. Me costo reconocerte. Quizas porque entre deslumbrada. Llegue con los ojos llorosos, como se me ponen cada ano por esas fechas cuando empieza la primavera lanosa de Madrid. Vi el numero en la puerta: 227. Como para no creer en las casualidades. El veintidos, Marta, el de la suerte. Y el veintisiete, el que nos salvo una vez; tu numero fetiche. Entre mi conjuntivitis y la media luz, no me habia fijado, pero aquella habitacion tenia hechuras de una suite de hotel a la que hubieran ido vaciando poco a poco; ahora un cuadro, mas tarde un aplique, manana una alfombra, hasta que la dejaron unicamente con lo puesto, en los huesos. Como estabas tu. Pero una suite, al fin y al cabo. Llevabas un ano ajena a todo, dormida, inmovil, en mitad de aquel vacio, en una cama pequena, diminuta, amarrada a la vida por un lio de cables y tubos. Olia a clavo y a zotal. A consulta de dentista. Tambien habia algo tuyo en el ambiente. Me transporto a mil momentos, aunque se me agolpaban todos y ninguno era capaz de colocarse en su sitio. Lo intento ahora al escribirlo. Observe un frasco medio abierto de tu perfume de toda la vida sobre el estante inferior, junto a un liquido desinfectante y tu reloj de pulsera que seguia parado. A saber desde cuando. Por la hora podria ser desde el instante fatal. Me costo reaccionar. Me debati entre dar aquel paso o salir huyendo. Cuando estaba a punto de sentarme junto a ti, volvi una vez mas hacia la puerta para preguntar cuanto tiempo podia quedarme. Desee que me dijeran, marchese, vayase cuando quiera. En cambio, me respondieron que estuviera tranquila, que me tomase mi tiempo: <
>. Me temblaba todo. Queria que despertaras. Lo deseaba, y sin embargo te hablaba en susurros, como cuando me colaba a hurtadillas en tu habitacion a la hora de la siesta. Pero no vi tus zapatillas ni a un lado ni otro de la cama, ni tuve que apartar tus trapitos que habrian estado hechos un higo, tal cual hubieran caido en aquel galan que era otro esqueleto, o revueltos de cualquier manera sobre la butaca en la que deje el bolso. Un sillon abatible para las visitas. Me hubiera quedado a dormir alli mas de una noche, pero sabes que no podia correr ese riesgo. Llevaba los documentos que habia leido millones de veces. Los entendia menos que los valores de las dos pantallas que te custodiaban. Respecto a estas, supuse que todo estaria bien mientras fueran marcando una misma cadencia, mientras no saltara la alarma y se llenara todo aquello de enfermeras. Imagino que tambien de policias. Me fio de ti. De lo que escribiste. Por muy sospechoso que resultara que antes del accidente hubieras sido capaz de dejar las instrucciones sobre tu legado dispuestas con tanta precision. Si descartamos la brujeria, no se me ocurre ninguna otra posibilidad. He barajado muchas hipotesis, pero no dejan de ser conjeturas. Ninguna de ellas esta exenta de cierta dosis de conspiranoia. Y no faltan razones para alimentarlas: desde tu posible conexion con las tramas corruptas del excomisario Bermejo, a tu peligrosa cercania con el ministro del que fuiste companera de pupitre. No habia aparecido todavia el tipo del tatuaje, el que conducia el Tiguan de color negro. No habia sido capaz de encontrarlo. Tampoco quedaba rastro del dinero. Cada manana, cuando me despertaba, lo unico que sabia es que era martes, o lunes, o jueves ...y que me llamaba Alicia. Poco mas. Me sorprendia alli, donde fuera, boca abajo, restregandome con una almohada desconocida, intentando recordar donde habia dormido. Hundia bien la nariz y aspiraba con fuerza. Nunca me resultaba familiar la funda aspera de turno que habrian lavado mil veces, aunque no recientemente. Digo mil porque es cuando empiezan a brotarle esas pequenas borlitas con las que me aranaba las mejillas. Era la casa de un hombre. Otro mas. Un tipo que ni siquiera habia tenido el detalle de colocar unas sabanas limpias. Aquellas desprendian un olor espeso, con una solera que no se consigue facilmente. Mira que hay que vestir una cama durante muchos dias seguidos y que no le hayan concedido ni unos minutos diarios de ventilacion para llegar a acumular ese buque al que me refiero. !Que asco, por Dios! Bueno, esas no serian precisamente las blasfemias que saldrian de mi boca unas horas antes, cuando las hubiera mordido con todas mis fuerzas, cuando estuviera poniendo de mi parte para aumentar el pozo sin fondo de germenes que acumulaba. Soy asi de generosa cuando me lo estan dando todo, ya lo sabes. A ese tipo tambien le habria dicho que me llamaba Alicia. Una de todas esas Alicias en las que me habia convertido durante ese ano. Todas las que habian estado buscando a nuestro hombre. He perdido la cuenta de las mentiras a las que he tenido que recurrir para llegar a saber la verdad, Marta. En ninguna de esas citas habia sido quien soy para quienes creen conocerme: la mujer que acaba de cumplir los cuarenta --cuarenta y pocos--, la profesional de exito, la de la envidiable solvencia economica para los tiempos que corren; esa tipa con una formacion solida, leida, cultivada, intelectualmente inquieta, con ciertas necesidades culturales. Y sin abuela que estoy. Eso es. Empece sin una idea sobre lo que podia ocurrirme. Sin prejuicios. Total, era una mujer soltera, sin obligaciones ni ataduras sentimentales; que seguia sin conocer lo que es tener una relacion estable; que sabia que a su edad eso no es muy normal; que no esta bien visto socialmente; que levanta sospechas. Todavia hoy en dia. Sobre todo, en una mujer. Das pie a que te tachen de rarita, a que les des mala espina y quieran salir huyendo. <>, se pregunta el personal. Sabes que no soy de esas que tienen aversion a las de su especie. En todo caso soy algo timida. Me obsesiono por el que van a pensar de mi si hago esto o si digo aquello otro. Quizas sea esa la coraza con la que me protejo de mis inseguridades y mis complejos y la que acaba dando una idea bastante distorsionada de mi; de una persona altiva o distante. Eso recuerdo que me dijiste nada mas conocernos, Marta. O Dolly, porque en la Facultad de Derecho todos te llamaban asi. ?De donde te venia? De muneca, explicabas; que asi te habian bautizado en el instituto de Connecticut donde cursaste el equivalente al COU espanol. Claro que, con el tiempo, cualquiera que llegara a conocerte sabia que era mucho mas cauto poner en cuarentena todas las anecdotas con las que tu misma, cuando no tus hagiografos, contribuyeron a alargar la sombra de tu carisma hasta convertirte en una leyenda. Habia que ir con sumo cuidado al aproximarse a tu perfil, no fuera a ser que acabara contaminado por alguno de esos bulos prenados de intencion. Tambien me dedique a eso: a indagar. Porque siempre habia dado por bueno lo que me contaste sobre tu pasado. ?Por que tendria que dudar? Supuse que el hecho de ser una profesional del engano no obliga a ser una mentirosa compulsiva con la gente que quieres. Hemos sido amigas y me has querido, ?verdad, Marta? A grandes rasgos, si una se pone a bucear en tu biografia, parece que no existe ninguna duda de que Marta Suarez Enjuanes nacio en Elche, en 1976. Hija de Margarita, aparadora de calzado de profesion, y de un viajante de comercio al que nunca llegaste a conocer. O sea, a efectos de inventario, toda la vida has llevado a cuestas el sambenito que se le pone en los pueblos a las hijas de madres solteras. Porque poco o muy poquito se sabia de quien te habia dado el Suarez del primer apellido. Nunca te contaron ni tan siquiera que tipo de estampados, de telas o de pulimentos llevaba ese vendedor en su cartera. El tal Suarez dejo de dar senales de vida despues de recibir la noticia de que de su ultima visita no habia fructificado unicamente un pedido millonario de los que solia facturar a Calzados Anton. Ahi entrariamos en el capitulo de las especulaciones. Ninguna probada. Aunque me contaste, con cierta guasa, que habia dos teorias que corrian como la polvora y con mejor suerte que el resto: las dos tenian en comun tu parecido con el propio patron de la marca, con Amadeo Anton, una retirada que iba algo mas alla de la casualidad. Mas adelante descubriste que tambien teniais maneras de proceder muy similares. Eso mismo, tal cual me lo confiaste, lo pude corroborar sobre el terreno. Alli volvi a oir la hipotesis que sostiene que nunca hubo un Suarez como tal, sino que tu serias la consecuencia de la furtiva relacion de tu madre, Margarita, con el patriarca de la empresa. Una relacion consentida por su mujer. ?Consentida? ?Por que? Al parecer, a cambio de que Amadeo Anton no le pusiera a ella cortapisas a sus pulsiones amatorias, que iban en direccion contraria, ya me entiendes. Las verdaderas preferencias sexuales de la senora eran conocidas, pero tanto los padres de uno como de otra no las tuvieron en cuenta. Es mas, las pisotearon cuando arreglaron la boda entre ellos. Lo hicieron con noble intencion de salvar su alma. Tambien para que no se diluyera la sociedad patrimonial que sumarian entre las dos familias. Pero, chica, sigue teniendo peso y hace furor entre el chafardeo la otra escuela, la que argumenta realmente eras nieta de Amadeo Anton, nada de hija. Porque este, en uno de sus escarceos extramaritales, dejo embarazada a una alemana que, camino de Denia para embarcar hacia las islas y perder sus rumbos en las playas ibicencas, recalo en Elche sin saber muy bien ni como ni por que. E igual que aquel destino no entraba en sus planes, tampoco le encajaba en su futuro idealizado lo de cargar con la criatura del bombo que se llevaba de recuerdo. A Anton no le resulto dificil convencerla de que volara ligera y que dejara a su cargo al bebe; tu madre, a la postre. Puso en el empeno una dosis de afilada labia, incluida una sutil insinuacion que quizas a alguien muy quisquilloso le podria haber sonado como un principio de extorsion. Tambien puso en la mochila de la alemana un argumento muy atractivo: un rulo de billetes de mil pesetas. Asi se las gastaba el abuelo. -
Una ciudad inventada de Gonzalo Wandosell Fernandez De Bobadilla
https://gigalibros.com/una-ciudad-inventada.htmlUNA CIUDAD INVENTADA es un libro magistralmente escrito, repleto de emociones, vivencias de una mujer fuerte, dura, que lucha por abrirse camino en una Espana del siglo XIX muy critica y dificil para el genero femenino.
-
Flores de invierno de Patricia A. Miller
https://gigalibros.com/flores-de-invierno.htmlKatherina y Scott solo tienen en comun una cosa: la reforma de los majestuosos jardines de Lambert Resort.
Ella es la gerente del hotel de lujo; el el paisajista contratado.
Ella es metodica y fria; el un seductor que siempre llega tarde.
Ella adora el orden y la limpieza; el... el no tiene orden ni en su vida. De la limpieza, mejor no hablamos. -
La otra orilla del abismo [LGBTI] de Sofia Olguin
https://gigalibros.com/la-otra-orilla-del-abismo-lgbti.htmlUNA NOVELA DE FANTASIA URBANA LLENA DE MAGIA Y MISTERIO
-
Cuanto cuesta que me cuentes de Karina Graciela Salazar
https://gigalibros.com/cuanto-cuesta-que-me-cuentes.htmlCuentos de aqui y de alla. Relatos humoristicos y serios. Leyenda urbanas. Fabulas historicas.
-
Paradiso Blu: El misterio de Caramelle Dolci de Andrea Leal
https://gigalibros.com/paradiso-blu-el-misterio-de-caramelle-dolci.htmlParadiso Blu: El misterio de Caramelle Dolci. Parte II.
-
El te de Proust de Norman Manea
https://gigalibros.com/el-te-de-proust.htmlEl universo del campo de concentracion visto a traves de la atonita mirada de un nino, la guerra vivida por adolescentes, el arduo o imposible retorno a lo cotidiano en la Rumania de la posguerra y de la dictadura, las heridas incurables impresas para siempre en la memoria: ese es el horizonte existencial de estos relatos de Norman Manea.
-
Posesion agradecida de Jorge Borges
https://gigalibros.com/posesion-agradecida.html?Que quiere un hombre que lo tiene todo?
Dinero, fama, mujeres.
Salud, un cuerpo de infarto.
El poder corrompe. Demanda excesos. -
Abrazame otra vez de Valentin Alvarez Tremino
https://gigalibros.com/abrazame-otra-vez.htmlBarcelona dos anos despues... Mirala, ahi esta Cristina con su sonrisa, puedo estar el resto de mi vida contemplandola, y es lo unico que tengo en mi agenda para el resto de mi vida. Lleva puestos los auriculares de su iPod, seguro que esta escuchando alguna cancion de Cristian Castro, el cantante que mas nos gusta a ambos, hasta en eso coincidimos. Esta sentada en el suelo utilizando el viejo roble de respaldo, junto a ella el pequeno Alex medio dormido en sus brazos, nos tiene ocupados las veinticuatro horas del dia, pero si hubieran veinticinco seguira valiendo la pena. Sabes a veces me sigo preguntando si todo esto es real o tan solo estoy sumergido en un sueno eterno, y me digo a mi mismo " si estas sonando no te despiertes...", aun tengo fijado en mi memoria aquel dia en el karaoke como si fuera ayer, la sigo viendo darse la vuelta en el escenario y mi corazon ponerse a latir tan fuerte que creia que se saldria de mi pecho. Pero entonces la abrazo y toda las dudas se disipan como una nube de humo arrastrada por una corriente de aire llamada amor. Es real, Cristina y yo estamos juntos, hemos podido con todo a pesar de que el tiempo quiso borrar de nuestra memoria aquel amor de juventud, o mas bien de ninez porque cuando nos conocimos ni siquiera eramos todavia adolescentes sino tan solo unos ninos de doce anos, y no sabiamos que era eso llamado amor. Sin querer un recuerdo emerge de mi memoria, llevandome al dia que hable con ella por primera vez, bueno hablar lo que se dice hablar no se puede llamar, quiza mas bien que asenti mientras ella hablaba y sus ojos me embrujaban. Estamos en clase de manuales de sexto de E. G. B. y la profesora Maria Jose ha mandado a toda la clase hacer un collage, para ello utilizaremos recortes de viejas revistas que nos habia mandado traer el dia anterior. Y como de costumbre no nos ponemos de acuerdo para hacer las parejas para realizarlo asi que se enfada y coge la lista de clase, poniendose a emparejarnos a su voluntad. Va nombrado a companeros, hasta que dice "Alex con Cristina", en ese momento se me para el corazon, tan solo es un segundo pero para mi parece una eternidad, entonces la veo levantarse y venir hacia mi para sentarse a mi lado, yo me pongo colorado y agacho la cabeza al tiempo que alargo mi brazo para coger la barra de pegamento y justo ella hace lo mismo por lo que nuestras manos chocan, soltando un chispazo que hace que los dos la retiremos enseguida. --Perdon Alex cogela, tu estabas primero --me dice Cristina, con esa sonrisa suya tan maravillosa que veo por primera vez. --No, empieza tu por favor --consigo atisbar a decir medio tartamudeando. --Vale, gracias compi --me contesta guinando un ojo. Si, creo que justo ahi, tras ese calambrazo de nuestras manos empezo todo, nuestras almas quedaron unidas. De repente la voz de Cristina me trae de vuelta al presente. --!Alex! --Dime carino, ?que ocurre? --Esta empezando a refrescar, sera mejor que regresemos a casa, no quiero que el peque coja frio. --Tienes razon, voy a ir poniendo el coche en marcha. Llevamos unos kilometros recorridos con el coche, el peque se ha quedado frito en el asiento de detras de nuestro Chevrolet Aveo, no falla un buen paseo por el campo y suelta toda la adrenalina de hiperactividad, para pasar a ser un angelito adorable. Nosotros tambien nos estamos relajando escuchando la melodia “para Elisa” de Beethoven durante el trayecto. Sin embargo algo me dice que Cristina no lo esta haciendo como es habitual en ella, la veo fija centrada mirando la pantalla de su smartphone, y tecleando en una conversacion con alguien. Normalmente no le prestaria atencion a esto pero la conozco demasiado como para saber que ese ceno fruncido al tiempo que mordisquea sus unas, mientras habla con alguien por WhatsApp significa que se esta enterando de algo que no le hace mucha gracia, mas bien ninguna . --?Que es lo que te esta preocupando y cuando piensas contarmelo? --le digo al tiempo que toco su hombro para hacerla desconectar un segundo de la pantalla de su smartphone. --?Que? No, nada en absoluto --responde aturullada, ya que no creia que estaba fijandome en lo que hacia. --Venga ?en serio? ?Vas a hacerme que te haga mi super interrogatorio ultra tres mil ? --No, de verdad es solo un cotilleo, a ti estas cosas te aburren --contesta intentando dar por zanjado el tema. --Vale lo que usted quiera senorita, yo ya le adverti --le digo con una sonrisa picarona . Disminuyo la velocidad de nuestro coche y consigo dejarlo estacionado en un arcen de la carretera. Me desabrocho el cinturon de seguridad e inicio mi super interrogatorio...que no es otro que hacerle cosquillas en su barriga, no ha fallado nunca, tiene una probabilidad de exito del cien por cien con ella. --Jajaja...!!No!!!!Para por favor!! Que cabroncete que eres, sabes que eso es mi kryptonita --dice sacandome la lengua de forma burlona. --Vale pero ya sabes dime lo que esta rondando por esa cabecita o seguire con mi interrogatorio exhaustivo --le digo al tiempo que le guino mi ojo derecho. --Veras me han contado algo que me ha dejado un poco trastocada… --Pero… ?Es bueno o es malo? --pregunto intrigado. --Digamos que no se puede catalogar ni como bueno ni malo… simplemente es algo que ha ocurrido con un sitio especial para nosotros, pero que no supone nada malo para ti o para mi… Su respuesta enigmatica me deja todavia mas interesado en saber que ha ocurrido. --Ahora por favor, sin andarte mas por las ramas dime de que te has enterado --le digo mientras comienzo de nuevo a proceder con las cosquillas. --Jajaja… no, no sigas que ya no me hago la interesante, te lo cuento… veras me estaba mensajeando con Susana y me conto algo que no tenia ni idea de que estaba pasando. Resulta que nuestro cole al que fuimos juntos, “La academia Altabix ” por diversos motivos pero va a cerrar definitivamente sus puertas… --en ese preciso momento la interrumpo sin dejarla acabar de explicarse . --!?Como que cierra?! Eso no puede ser… --Me temo que si… --Pero con tantos anos de clases a sus espaldas ?por que ahora? ?Que ocurrio? --No me lo supo explicar muy bien pero algo de que “alguien” se quedo con los dineros de los cheque comedor, vamos cosas de estafas o algo asi. --!?Que?! No me lo puedo creer… --Pues me temo que debemos hacernos a la idea de que el lugar donde nos conocimos dejara de existir como tal muy pronto… sin embargo hay una segunda parte de la noticia. --?Hay mas? No se si quiero escucharlo --digo algo apesadumbrado. --Esta es la parte buena te gustara seguro --me contesta con una sonrisa. --A ver sueltalo ya de golpe sin tapujos, no quiero ni pensar que mas puede ser… --De acuerdo no lo dilatare mas… pues resulta que como ya no habra mas cursos escolares y que este sera el ultimo, van a organizar una fiesta de despedida del colegio, en la cual quieren que este todo el que haya estudiado alli e incluido todos los profesores que impartieron clase tambien. Me quedo unos instantes procesando esa informacion tan…tan estupenda que leches, eso es maravilloso, pero intento que no se me note euforico. --Oh vaya, no esta mal la idea… --Venga no me enganas con esa cara insipida que intentas poner para ocultar lo que de verdad sientes ?a que si??Tengo o no tengo razon pillin? Durante unos segundos intento disimular pero al final la sonrisa me vence. --Jajaja… como me conoces nina, pues si, es una idea que me encanta porque eso significa que podremos volver a ver a los compis de nuestro cole… ?Por que supongo que iremos verdad? --Bueno invitados estamos, de hecho lo esta todo el mundo que estudio alli. Dios ?cuanto tiempo hace que no nos reunimos? --Supongo que esa pregunta debe ser una broma o bien que intentas pillarme ?Verdad? Porque hace exactamente cinco anos de la ultima reunion, lo se porque justamente fue hace cinco anos en esa reunion que tu organizaste, que me “devolviste” a la vida, cinco anos que te di nuestro primer beso bajo las estrellas de esa vieja casa del arbol que construyo mi abuelo, cinco anos que tu y yo nos amamos por primera vez… Ella se me queda mirando con ojos vidriosos y solo me dice una cosa … --Besame tonto, o tengo que hacerlo yo. Y nos quedamos, aparcados en ese arcen de la carretera besandonos como si dos adolescentes tuvieran su primera cita en un viejo Chevrolet.
-
Hinun de Christian Martins
https://gigalibros.com/hinun.htmlDenahi y Magena son mas felices que nunca. Han comenzado una nueva vida en la reserva y la suerte parece sonreirles.
?Dejaran “Los Calaveras” que la chica apache continue con su vida y pueda formar su familia junto al rey de la tribu?
Mas erotica, mas intensa y mas peligrosa.
Descubre esta tercera y ultima parte de la trilogia. -
El secreto de Blackstone House de S.f. Tale
https://gigalibros.com/el-secreto-de-blackstone-house.htmlUna historia de amor y secretos en plena campina inglesa.
-
Olvidar el amor de Belinda Valle
https://gigalibros.com/olvidar-el-amor.htmlEl dolor de la separacion es para Belinda una tortura. ?Quien tuvo la culpa? Eso no importa y en realidad sirve para hacer mas dano.
Un diario para olvidar el amor e intentar volver a tocar a la guitarra canciones con esperanza. Porque todos somos esclavos de nuestras decisiones, y tras ellas el arrepentimiento no es siempre suficiente. -
El gran nido (Los Irwin 3) de Noa Pascual
https://gigalibros.com/el-gran-nido-los-irwin-3.htmlA los que disfrutaron con “Dance Therapy” y “Desafios por amor”, llega el desenlace mas esperado. Conocer a los Irwin ha sido un viaje por el carrusel de sus vidas; donde las emociones, el amor y el desamor han iluminado el camino de todos ellos. ?Estaran preparados para afrontar lo que el destino les depare? El gran nido, una dinastia intensa y seductora desde el principio que no dejara indiferente a sus lectores. TGL
-
El pecado de la condesa de Malibran de Alfonso Vazquez Herrera
https://gigalibros.com/el-pecado-de-la-condesa-de-malibran.htmlAlla por el principio de los 80’s, en una epoca donde no habia telefonia celular, ni Internet, el sistema de comunicaciones mas rapido y efectivo era el telefono y el correo ordinario el mas lento pero funcional, y cuando las estadisticas de poblacion indicaban que habia 7 mujeres por cada hombre en el mundo, se desarrolla esta historia llena de mitos y antiguas leyendas populares, todas del area conurbada con el historico puerto de Veracruz en Mexico, la historia pretende ser de terror paranormal, pero tiene su toque de comicidad, donde 3 chicas estudiantes de la preparatoria que vivian en una pension para senoritas, por accidente liberan el maligno espiritu de la condesa de Malibran, una de las leyendas populares mas antiguas de Veracruz, quien llena de furia, pugna por llevarselas al infierno de donde la habian despertado, para poder volverse a dormir y dejar de sufrir por el perdon que nadie sabe en que consiste, pero la poderosa Condesa tiene un punto debil, un enemigo acerrimo, al cual no puede vencer y ni siquiera puede pelear con el, el conde de Malibran, que regresa por ella cada vez que lo invocan para asesinarla, como la asesino en vida, y entre los gritos desesperados de perdon de la maligna Condesa que huye para escapar de su verdugo, y los gritos clamando venganza del conde de Malibran, se desarrolla esta historia que amenaza con terminar en un apocalipsis, pero no un apocalipsis zombie, ni nuclear, ni por la caida de un cuerpo celeste, ni mucho menos biblico, sino un apocalipsis provocado por el pecado de la condesa de la Malibran, que al final de toda la historia nos demuestra que todo esta bien asi como esta, en perfecto balance, porque si tan solo llegara a faltar tan siquiera uno de los pecados mas comunes, seria el fin de la humanidad y de la sociedad como la conocemos.