libro un episodio nacional
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libro un episodio nacional - Carlos Mayoral
https://gigalibros.com/un-episodio-nacional.htmlEl conocido periodista cultural Carlos Mayoral, especialista en la literatura decimononica espanola, recupera en su primera novela un episodio poco conocido de nuestro pasado literario: los amores secretos entre dos de las principales figuras de nuestra narrativa, Benito Perez Galdos y Emilia Pardo Bazan.
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UN EPISODIO NACIONAL | CARLOS MAYORAL - Casa del ...
https://www.casadellibro.com/libro-un-episodio-nacional/9788467055030/903043926 mar 2019 — El libro UN EPISODIO NACIONAL de CARLOS MAYORAL en Casa del Libro: ¡descubre las mejores ofertas y envíos gratis!
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Un episodio nacional - Carlos Mayoral | PlanetadeLibros
https://www.planetadelibros.com/libro-un-episodio-nacional/28959026 mar 2019 — Apúntate y descubre cada mes todas las novedades de narrativa literaria. Cargando... Otros libros de Novela literaria.
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Un episodio nacional (ESPASA NARRATIVA) : Mayoral, Carlos
https://www.amazon.es/episodio-nacional-ESPASA-NARRATIVA/dp/8467055030Un episodio nacional (ESPASA NARRATIVA) : Mayoral, Carlos: Amazon.es: Libros.
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UN EPISODIO NACIONAL - MAYORAL CARLOS
http://quelibroleo.com/un-episodio-nacionalEs un libro excelente, perfectamente documentado . Merece la pena su lectura. ... Este es el argumento de “Un episodio nacional” de Carlos Mayoral.
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Un episodio nacional - Carlos Mayoral -5% en libros | FNAC
https://www.fnac.es/a6486850/Carlos-Mayoral-Un-episodio-nacionalUn episodio nacional, libro o eBook de Carlos Mayoral. Editorial: Espasa. Los mejores precios en libros y eBooks.
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“Un episodio nacional”, de Carlos Mayoral | Todoliteratura
https://www.todoliteratura.es/noticia/51470/criticas/un-episodio-nacional-de-carlos-mayoral.html9 ago 2019 — La novela es, ante todo un homenaje a Pérez Galdós y a la novela del siglo XIX. Por las páginas del libro pululan tanto el escritor canario ...
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UN EPISODIO NACIONAL (CARLOS MAYORAL) - El Búho ...
http://www.elbuhoentrelibros.com/2019/04/un-episodio-nacional-carlos-mayoral.htmlReseña con opinión y argumento de Un episodio nacional, novela de Carlos Mayoral. ... Pedro (El Búho entre libros) en 6:00:00. Compartir ...
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Un episodio nacional - Libro de Carlos Mayoral - Lecturalia
https://www.lecturalia.com/libro/99150/un-episodio-nacionalPardo Bazán y Galdós: una pasión desconocida en un Madrid turbulento. El conocido periodista cultural Carlos Mayoral, especialista en la literatura ...
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Episodios nacionales - Wikipedia, la enciclopedia libre
https://es.wikipedia.org/wiki/Episodios_nacionalesLos Episodios nacionales son una colección de cuarenta y seis novelas históricas escritas ... Crear un libro · Descargar como PDF · Versión para imprimir ...
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EPISODIO NACIONAL, UN. PÉREZ GALDÓS INVESTIGA ...
https://www.llardelllibre.cat/es/libro/episodio-nacional-un_918016EPISODIO NACIONAL, UN. ... recupera en su primera novela un episodio poco conocido de nuestro pasado literario: los amores ... Otros libros del autor.
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El vuelo de Lena de Sara Ballarin
https://gigalibros.com/el-vuelo-de-lena.html?Se puede avanzar hacia el futuro con las cicatrices del pasado? Lena esta a punto de descubrirlo. ?Quieres leer su historia?
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STORM. Si te descuidas te robara el corazon de Rose Gate
https://gigalibros.com/storm-si-te-descuidas-te-robara-el-corazon.htmlNadie dijo que fuera una buena persona ni pretendo serlo.
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Retaguardia roja de Fernando Del Rey
https://gigalibros.com/retaguardia-roja.htmlDesde una perspectiva centrada en los ciudadanos de a pie, a los que se les pone rostro y voz, Retaguardia roja indaga en las logicas subyacentes a la violencia que se desplego de forma brutal contra los adversarios politicos en la zona republicana durante la guerra civil espanola (1936-1939). En contraposicion con las modas y los estudios mayoritarios al uso, que han tendido a priorizar la historia de las ciudades y la poblacion urbana pese al perfil abrumadoramente agrario que presentaba la sociedad de entonces, la mirada se ha focalizado aqui en el mundo rural, escenario privilegiado para calibrar el significado y el alcance politico de los conflictos y contradicciones que recorrieron la Espana de los anos treinta.
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Historias asombrosas de la segunda guerra mundial de Jesus Hernandez
https://gigalibros.com/historias-asombrosas-de-la-segunda-guerra-mundial.htmlEl conflicto mas salvaje de la historia de la humanidad esta, no obstante, plagado de
historias y anecdotas tremendamente sorprendentes y llenas de humanidad. -
Descendiente de las tinieblas 3 de Tamara Kruger
https://gigalibros.com/descendiente-de-las-tinieblas-3.htmlLa lucha por liberar a Badru de la oscuridad continua y Eleonor llegara al lugar en donde inicio todo. El Valle Oscuro. En este reino ademas de convivir y conocer las costumbres de sus habitantes tambien seguira descubriendo su tirania y el despojo de emociones de la vinculacion.
Las visiones que fueron entregas y que revelaron como terminar con el encantamiento que une a hombres y lobos se convertira en la clave para que no pierda la esperanza. Lamentablemente el sombrio enlace sera mas poderoso de lo que pudo imaginar y la arrastrara a liderar una batalla entre la razon y las tinieblas.
Un nuevo desafio la inducira a buscar su real naturaleza mientras que esta vez la destruccion del enlace la enfrentara a uno de sus mayores miedos. -
Un mundo lleno de futuro de Leila Guerriero
https://gigalibros.com/un-mundo-lleno-de-futuro.html"Hay aqui diez historias relacionadas con, entre otras cosas, la innovacion, la educacion, la ciencia y la tecnologia en America Latina, contadas por algunos de los mejores periodistas de la region con el pulso narrativo de las grandes cronicas; historias de gente que lo pasa bien, mal y peor, intentando curar lo que parece incurable, llevar agua donde no la hay, educacion donde tampoco, haciendo brotar tecnologia en sitios impensados. Historias que hablan de las cosas extraordinarias que le pasan a la gente comun y de las cosas comunes que hace la gente extraordinaria (...)
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Consejos de Amor de Elizabeth Harbison
https://gigalibros.com/consejos-de-amor.html-Nuestra invitada de hoy es Leticia Bancroft, autora del controvertido libro: Como seducir al hombre de tus suenos. Leticia, hablame de la acogida que ha tenido tu libro. -Hara que las mujeres retrocedan cincuenta anos -le dijo Bonnie Vaness a la television, secandose la nariz con un panuelo de papel-. Obviamente, tendra una gran acogida -aparto la manta, buscando el mando a distancia de la television, pero solo encontro panuelos de papel. Todos los anos, en noviembre, pillaba un resfriado monumental. Habia gastado cuatro cajas de panuelos en los ultimos tres dias. -En mi opinion -dijo Leticia-, la reaccion al libro ha sido fantastica. Pero vamos a pedir a algunas de las mujeres del publico que hablen de el. El publico irrumpio en un aplauso. Bonnie maldijo entre dientes y aparto los cojines, buscando el mando. -La verdad, no crei que fuera a funcionar -decia en ese momento una mujer con un aspecto muy normal. Parecia avergonzada de hablar ante un microfono. Bonnie dejo de buscar el mando y miro la pantalla. -Cuando oi hablar del libro, me ofendi. Pense que haria que las mujeres retrocedieran cincuenta anos... -!Exacto! -grito Bonnie. -... pero, por otra parte, ser yo misma tampoco me estaba llevando a ningun sitio. Asi que decidi leer el libro de Leticia. Me disfrace y fui a comprarlo a una libreria de otro pueblo -el publico solto una carcajada. Bonnie estornudo. -Mi historial sentimental era pesimo. Muchos novios y muchas rupturas. Llegue a pensar que no encontraria al tipo de hombre que queria, y tendria que conformarme con menos. Pero lo encontre. Y el ni siquiera se fijaba en mi. Bonnie se irguio en el sofa. Esa mujer podria ser ella. Un monton de novios desastrosos y horribles rupturas, miedo a tener que conformarse o quedarse sola. Despues, eso era lo peor, habia encontrado al hombre de sus suenos y el ni siquiera sabia que existia. -Pero este libro... -hizo una pausa y siguio emocionada-. Este libro me dio ideas para atraer su atencion. Tecnicas practicas, no un monton de filosofia. Casi sin darme cuenta, el hombre que no me habia mirado durante seis meses, me pidio que saliera con el. -Cuentales lo demas -intervino Leticia con entusiasmo. Miro al publico-. !Os va a encantar! -!Nos casamos la semana que viene! -la mujer mostro la mano izquierda, y un bonito anillo de diamantes. El publico grito entusiasmado e irrumpio en un largo aplauso. Bonnie apunto el nombre del libro. 1 Los hombres son criaturas muy visuales. Descubre sus colores favoritos y utilizalos. Se sentira comodo y tranquilo en tu presencia, sin saber por que. Ese es el primer paso de nuestro Plan de Seduccion. Recuerda, el color tiene mucha fuerza; vistete con sus colores favoritos y evita los que no le gusten. Una asociacion desagradable con el color de tu ropa puede llevarlo a evitarte, en vez de adorarte. Como seducir al hombre de tus suenos, Leticia Bancroft. -?Vas a entrar en el ejercito, o algo asi? Bonnie Vaness, que cerraba la puerta de su apartamento, se volvio y miro con impaciencia a Dalton Price, el encargado del edificio. -?Que quieres decir? -Ese traje que llevas. Es la tercera cosa verde y fea que te pones esta semana. Bonnie toco automaticamente el nuevo traje verde oliva que habia comprado en una boutique de Quince Street. Le habia costado media semana de sueldo. -La verdad es que serias buen soldado -siguio el-. Con un genio como el tuyo... -Callate, Dalton. -Eh, solo digo... -el se rio. -Se lo que dices. Que tengo un aspecto horrible. Gracias. -?Yo he dicho eso? -Dalton encogio los hombros-. No, senorita. No eres tu, es el traje. Pense que te gustaria oir una opinion objetiva, antes de salir al mundo vestida asi. Ella no lo miro. No queria que se diera cuenta de que le estaba poniendo los nervios de punta. Dalton Price llevaba poniendola nerviosa desde segundo de primaria, cuando iban juntos al colegio, en Tappen, Nueva Jersey. El la oyo llamar <
> a la profesora, accidentalmente. La atormento durante anos por eso, y por todos los errores que tuve la desgracia de cometer en su presencia. -?No tienes nada mejor que hacer que criticar mi ropa? -pregunto ella, consciente de que quiza Dalton tenia razon. Cuando se probo el traje, se habia dicho que el tinte verdoso que veia en su rostro se debia a la luz de los fluorescentes; pero empezaba a pensar que era el reflejo de la tela verde oliva. -?No tienes algun lavabo atascado que arreglar? -le pregunto. No queria que Dalton notara sus dudas. En el fondo, sentia curiosidad por el trabajo de Dalton. Diez anos antes, Dalton se habia marchado a una universidad del oeste. En el pueblo se rumoreaba que habia tenido mucho exito, que se habia hecho asesor financiero y se habia casado con una actriz. Pero Dalton habia regresado cuatro meses antes, divorciado y con una nina casi adolescente. Lo mas extrano era que no trabajaba como asesor financiero, sino como encargado de un edificio, antiguo y agradable, pero nada lujoso. Bonnie se preguntaba si realmente habia tenido exito o si los rumores eran fantasias de su madre. Al principio habia sido cordial con el, pero a los dos dias de llegar, Dalton empezo a tratarla con la impertinencia de antano, y ella hizo lo propio. Algunas cosas no cambiaban nunca. El clavo en ella sus ojos azules. Unos ojos que, como sabia bien, conseguian que las mujeres se derritieran a sus pies. A ella la irritaban. -Arreglo todo lo que necesita ser arreglado -dijo el, contestando a la pregunta. -?Si? -ella guardo las llaves en el bolso-. Entonces arregla mi ducha. Lleva goteando desde que Carter era presidente. -?Que Carter? -pregunto el. Bonnie lo miro boquiabierta, justo cuando Dalton esbozaba una sonrisa ironica-. Chica, siempre picas, es increible. -De eso nada, solo... -se detuvo. Era verdad. El le tomaba el pelo una y otra vez, siempre con exito. -?No tienes que ir al autobus? -pregunto el, interrumpiendo sus pensamientos. -!Uy! Si -la presencia de Dalton la desconcertaba-. Paula esta esperando abajo. Me matara si perdemos el autobus por perder el tiempo discutiendo contigo. -Estare aqui cuando vuelvas -sonrio y saco una llave inglesa del bolsillo-. Puedes gritarme despues. Entretanto, voy a arreglar el grifo de la senora Neuhouse. -?Y mi ducha...? -Esta en la lista -dijo el por encima del hombro, alejandose. -Me gustaria ver esa lista. -Pasa por mi casa esta noche. Te la ensenare. La guardo debajo de la almohada. -Limitate a arreglar la ducha, ?vale? -a ella le costaba creer que conquistase a las mujeres con frases tan manidas. Bonnie suponia que se fijaban en su atractivo fisico y no se preocupaban de mas. Eran idiotas. -!Papa! -una chica de pelo rubio dorado doblo la esquina corriendo-. !Espera! !Papa! Era Elissa, su hija de nueve anos. Bonnie no pudo evitar detenerse a observarlos juntos. La nina le gusto desde el momento en que la vio, pero tambien la cautivaba la relacion entre padre e hija. El padre de Bonnie habia muerto en un accidente de trafico cuando ella era muy pequena, y no tenia recuerdos de el. Dalton Price tenia muchos fallos, pero Bonnie admiraba su actitud paternal. -Pense que la senora Malone ya te habia llevado al colegio -dijo el, con una ternura que siempre emocionaba a Bonnie. Nelly Malone era una anciana que vivia en el edificio. Era casi como una abuela para Elissa y le encantaba pasar tiempo con ella. -He vuelto a olvidarme el dinero de la comida -dijo Elissa. -Ah, bueno -se metio la mano en el bolsillo y saco un billete de dolar-. ?Basta con esto? -Papi, solo la comida cuesta un dolar sesenta, ya lo sabes. Y el postre es aparte -movio la cabeza, pero sonrio-. Deberias abrir una cuenta en el colegio, igual que hacen casi todos los ninos. -No tienes por que empezar a vivir a credito tan joven -saco otros dos dolares, se los dio y le revolvio el pelo-. Ahi tienes, nena. Comprate un helado de postre. -!Bien! !Gracias! -rodeo su cuello con los brazos, le dio un beso y despues bajo corriendo las escaleras. -
El Club de las 5 de la manana de Robin Sharma
https://gigalibros.com/el-club-de-las-5-de-la-manana.html<
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Paulo Coelho -
Las cuatro torres de Leandro Perez
https://gigalibros.com/las-cuatro-torres.html?Quien es Juan Torca? ?Un mercenario, un detective, un asesino? Al desembarcar en Madrid, Torca es un naufrago que vive en un hotel de Gran Via y corre por el Retiro. Todo cambiara cuando se reuna con su compadre, Javier Marse, en una de las Cuatro Torres. Y cuando se crucen en su camino Nerea, una joven recepcionista del hotel, y Adriana, la mujer de Marse.
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Atraccion Mortal de Wendy Hernandez
https://gigalibros.com/atraccion-mortal.htmlMax Wilson ingreso a la universidad Varsity y su llegada desperto inmediatamente la intriga de las jovenes estudiantes. La belleza masculina que posee provoco que las chicas a su alrededor se derritieran con tan solo verlo. El problema era que tenia una actitud fria y cortante hacia los demas.
Ninguna chica, ni siquiera las populares, ha llamado su atencion. Su relacion con sus companeros de clase es distante y eso se debe a lo que oculta. No habla con nadie a excepcion de su companero de deportes, Jordan. Han transcurrido varios dias de su llegada y lo que ha ganado en ese tiempo ha sido miedo y pavor por parte de los estudiantes. -
Vindolanda de Adrian Goldsworthy
https://gigalibros.com/vindolanda.htmlAno 98 d. C.
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Voces en las sombras de Luis Zaragoza
https://gigalibros.com/voces-en-las-sombras.htmlEn este libro hay ocho decadas de revoluciones y contrarrevoluciones, de luchas por la independencia, de guerras civiles, de resistencias a dictaduras. En este libro hay ocho decadas de mensajes cruzados, de verdades ocultas y de mentiras evidentes, de informaciones sin censura y de manipulaciones descaradas. En este libro hay ocho decadas de intuiciones geniales, de operaciones tan costosas como inutiles, de gritos desesperados y de discursos monotonos, de rabia y de ironia, de esperanza, de triunfos y decepciones… En este libro hay ocho decadas de radio.
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Ciencia, anticiencia y sus alrededores de Fedro Carlos Guillen
https://gigalibros.com/ciencia-anticiencia-y-sus-alrededores.htmlEl conocimiento cientifico no es un tesoro reservado a personas con inteligencias superiores, sino algo a lo que cualquiera con sentido comun puede acceder.
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La batalla por el paraiso de Naomi Klein
https://gigalibros.com/la-batalla-por-el-paraiso.htmlEntre los escombros del huracan Maria, los puertorriquenos y los <
> multimillonarios estan atrapados en una batalla campal para decidir como reconstruir la isla. En esta vital y asombrosa investigacion, Naomi Klein revela como las fuerzas de las politicas del shock y del capitalismo del desastre buscan minar la vision radical y resiliente de una recuperacion justa. -
Codigo terrorista de Alfredo De Braganza
https://gigalibros.com/codigo-terrorista.htmlCaminaban cogidos del brazo, bromeando, observando los escaparates. De vez en cuando se paraban y se hacian fotos. Parecian una pareja feliz. Eran dos jovenes espanoles inocentes y enamorados. Sin embargo, eran terroristas y estaban a punto de cometer una masacre. Los dias anteriores habian estado dando largos paseos por la zona. Solian sentarse en las cafeterias, en los bares y en las terrazas de los restaurantes. Estaban atentos para no perderse detalle alguno. Observaban a los peatones, el trafico y, sobre todo, las medidas de seguridad. Centrica y bulliciosa, la Puerta del Sol es una de las plazas mas famosas de Madrid, ademas de punto de encuentro de turistas. Alli esta ubicado el reloj de la Casa de Correos, conocido en toda Espana por ser el lugar desde donde se emiten las campanadas de fin de ano. Tambien se encuentra en ella la estatua del Oso y el Madrono, simbolo de la ciudad, y el Kilometro Cero, donde comienzan las carreteras radiales espanolas. Compradores y curiosos circulaban con rapidez en el frio de la tarde y los bares y cafeterias empezaban a llenarse. La pareja giro a la izquierda, continuo unas cuantas manzanas mas adelante y decidieron entrar en una cafeteria antes de su bautismo yihadista. Se sentaron uno frente a otro, dejando sus pesadas y anchas mochilas a sus pies. Ella pidio un cafe con leche con rosquillas Alcala, un hojaldre banado en yema y con azucar glas. El solo quiso un cafe negro. El camarero de la pasteleria La Mallorquina se fue tras tomar nota. El local estaba lleno de clientes. Desde el ancho ventanal podian ver el ajetreo del exterior. Los cafes llegaron junto con un plato lleno de rosquillas amarillas. El puso cara de asco. --No se como puedes comer algo tan cargado de azucar. Es repugnante. --Vamos, es Navidad --respondio ella con tono de sarcasmo y encogiendose de hombros--. ?Donde esta tu espiritu navideno? El sonrio ampliamente y solto una carcajada aspera. --Llevas razon. Ademas, despues de cumplir nuestro objetivo las cosas solo podran mejorar. En el local se escuchaban distintos idiomas y diferentes acentos espanoles de los clientes. El miraba hacia el exterior. La calle estaba mas concurrida que otros dias. Aquel sabado por la tarde los madrilenos habian salido a pasear y hacer compras. Vio a un grupo de jovenes fumando y tomando bebidas energeticas. Una chica con ropa ajustada beso a su joven acompanante. No llegarian a los veinte anos. Luego, dos chicas se besaron. Un vagabundo enfundado en un grueso abrigo se sento en una esquina con un perro que llevaba atado con una cuerda. El resoplo audiblemente e hizo un gesto hacia su companera. Ambos observaron aquella variopinta muchedumbre desde el cristal. --Infieles --dijo ella con voz firme--. Arderan en el infierno dentro de unos minutos. --Son los padres quienes han dejado a sus hijos caer en ese mundo depravado. --No. Es el sistema politico el culpable de precipitar una degeneracion moral tan rapida en la sociedad --replico ella. --Eso. Ella le sonrio, satisfecha de la reaccion a su reprobacion. --?Sabes cuantas prostitutas trabajan en las calles de Madrid durante las navidades? --No, pero me lo imagino. --?Que te imaginas? El quedo un tanto cohibido. --Pues que pueden ser muchas. Ella perdio su mirada en los viandantes. --Beben alcohol, se prostituyen, se drogan… recibiran su merecido. --Inshallah --anadio el en voz baja--. Pero nuestro objetivo no son ellos, querida. --?Que mierda estas diciendo? --le espeto entre dientes, mostrando su enfado. El se repantingo en su asiento, temeroso de una reaccion violenta. Sintio la necesidad de pedirle disculpas. En alguna ocasion hasta le habia abofeteado. Ella no se sentia mal al humillarlo incluso en publico. --Quiero decir que nuestra mision es provocar el caos, el desorden, la incertidumbre en esta sociedad capitalista. Mas apaciguada, hizo un gesto afirmativo con la cabeza. El le respondio con una sonrisa. --?Estas contenta de matar? --pregunto sin percatarse de que elevaba la voz debido al entusiasmo. --Calla --le interrumpio ella--. Habla mas bajo. El miro alrededor, al concurrido local. Hizo un barrido visual. No vio a nadie sospechoso. Se encogio de hombros, pero asintio con la cabeza. Debia ser mas prudente. Un hombre vestido de Papa Noel caminaba por la acera agitando una ruidosa campana al son de una cancion navidena, mientras que con la otra mano sostenia un gorro rojo para recolectar limosna de los peatones. --Venga, por favor, vamonos --dijo, mostrandose inquieto y agarrando el asa de la pesada mochila que tenia a sus pies--. Quiero que esto termine cuanto antes. --Espera. !Feliz Navidad! --dijo ella mientras se inclinaba sobre la mesa. Se besaron apasionadamente. Sus corazones empezaron a palpitar en el pecho. La adrenalina inundaba el torrente sanguineo. Era una sensacion de la que los dos disfrutaban. Entonces ocurrio lo imprevisto. 2 Aquella manana temprano, mientras sorbia su segundo cafe en la cafeteria del Cervantes, Laura Garcia veia las noticias en television de lo sucedido en la tarde del sabado anterior. Su pelo, largo hasta los hombros, estaba recogido en cola de caballo. Tenia el rostro joven, aunque ya rondaba los cuarenta anos. Vestia con pantalon fino de algodon azul oscuro, camisa blanca y una chaqueta a juego. A primera vista podia parecer una modelo sacada de un catalogo de ropa o la ejecutiva de una multinacional. Sin embargo, la labor que desempenada a diario distaba mucho de ese tipo de sectores profesionales. En el Cervantes, Laura Garcia tenia que competir con hombres muy bien preparados, tanto a nivel fisico como psicologico, y su desempeno se valoraba con los mismos patrones que los de sus companeros varones. No habia distincion. El Cervantes era una organizacion secreta dedicada principalmente a la lucha contra el terrorismo: preveian atentados, realizaban informes de inteligencia, hacian seguimientos a sospechosos, hackeaban todo tipo de productos electronicos y espiaban a criminales, terroristas, politicos, periodistas, diplomaticos y figuras prominentes de paises extranjeros. No tenian limite. Era un grupo reducido de personas de ingenio y aguda inteligencia. Pero tambien eran verdugos, pues se encargaban de despachar los asuntos relacionados con el terrorismo que nadie se atrevia o queria asumir. El trabajo era de veinticuatro horas al dia los siete dias de la semana. Aunque de manera individualizada libraban un dia a la semana, ese dia tenian que estar atentos a cualquier llamada de emergencia. Las vacaciones, que solian ser una vez al mes, consistian en enviar al operativo a lugares remotos durante una semana como maximo, donde hubiera una inestabilidad social o politica, o a paises conflictivos vecinos del destino, como Mali, Egipto, Libia, Israel, Argentina, Republicana Dominicana, Corea del Sur, Indonesia… Eran viajes costeados con todo tipo de lujos y privilegios y tarjetas de credito sin limite. Del agente se esperaba un detallado informe de inteligencia. Durante esas estancias se realizaban contactos con otras redes de similares e incluso se captaban colaboradores locales para el posterior flujo de informacion privilegiada, como politicos, empresarios o personas con influencia en el pais. En el pasado, los islamistas habian cometido un devastador atentado en Madrid, causando mas de doscientos muertos y cientos de heridos: fue la gota que colmo el vaso y que dio pie a la creacion del Cervantes ante la ineptitud del Gobierno y la burocracia politica, que no sabian, o mas bien no se atrevian, a tomar medidas contra la amenaza del islamismo radical. Con la conformidad y decision final del rey de Espana, se creo en secreto la organizacion
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Necios y mortales de Bernard Cornwell
https://gigalibros.com/necios-y-mortales.htmlLondres, siglo XVI.
En el corazon de la Inglaterra isabelina, el joven Richard Shakespeare suena con una brillante carrera en los teatros londinenses, dominados por su hermano mayor, William. Aunque este le da trabajo en su compania, los papeles son minimos, y Richard esta sin un centimo y tiene que buscarse la vida para sobrevivir. La gratitud que siempre ha sentido hacia William comienza a resquebrajarse, y llega a plantearse robar los manuscritos de su hermano y venderlos a teatros rivales. -
Despegando por amor (Los alemanes 2) de Noni Garcia
https://gigalibros.com/despegando-por-amor-los-alemanes-2.htmlEn la vida de Carmela no hay tiempo ni espacio para volver a enamorarse. Ser madre soltera de un nino, casa y familia, que siempre han sido lo primero para ella, ocupan toda su vida. No se niega a tener algun que otro escarceo, aunque no entra en sus planes tener algo mas.
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Descubierta de Trixie Jones
https://gigalibros.com/descubierta.htmlSabia que algun dia alguien descubriria mi perfil erotico en la pagina de los chats. Ese dia ha llegado y lo habia esperado. Lo que nunca imagine fue que me descubra un companero de trabajo: Chris. Nuestros cubiculos quedan enfrentados. Solo nos vemos a la entrada y a la salida, a veces en el estacionamiento, otras en el ascensor. Nunca nos hemos dirigido la palabra. Ahora el estaba aqui, de pie frente a mi cubiculo, mostrandome las capturas de pantalla de mi show de anoche. --?Alguien mas sabe de esto, Pam? Nunca me habia fijado en el hasta ese momento, mientras me extendia el telefono que me muestra de forma inconfundible, semi desnuda, lamiendo mi dildo de vidrio, coqueteando a la web cam. Su sonrisa tambien era inconfundible. Vendria a sacar provecho. --No, claro que no, nadie sabe. No pude evitar sonrojarme ante Chris. Nunca le habia prestado atencion. Somos companeros en este aburrido call center, donde los operarios jamas cruzamos palabra. Yo hago este trabajo como cortina ante mi familia para ocultar mi verdadera fuente de ingresos: soy modelo en las web cam eroticas. Tambien hago videos a pedido. Vendo rifas en las que sorteo sets de fotos profesionales de alto contenido sexual. Pero nunca, nunca me he acostado con nadie por dinero. --Mmm... entiendo Sweet Lust. --Shhh... --trate de silenciarlo-- por favor. Sweet Lust es el nick name bajo el cual escondo mi identidad. Pero eso es lo unico que escondo. En la imagen que me mostraba Chris, mi rostro se distingue frontalmente, estoy identificada, expuesta. --Si eres un buen amigo, sabras guardarme el secreto. --?Amigo? Si nunca me has contestado un saludo Pam. Tuve que preguntarle a otros tu nombre para estar seguro, porque tu y yo no somos amigos. --?Preguntarle a otros? ?A quienes? --A los otros companeros: Adam, Luke, Hugh. ?Acaso sabes mi nombre, "Sweetie"? Chris con su actitud hostil me dio a entender que pensaba mas que sacar provecho, senti que querria desquitarse de mi por no haber sido amigable en el trabajo. Pero !como podria socializar a la hora del cafe! Yo paso agotada todo el dia. Mi verdadero trabajo comienza a las 11 de la noche, cuando encerrada en mi dormitorio, monto mis shows frente a la camara. Me quedo a veces hasta las 5 de la manana, conversando, riendo, masturbandome y conversando mas. Por eso siempre actuaba de forma antisocial en el call center. Por el sueno acumulado. --?Les mostraste esta captura de pantalla Chris? --Ah, veo que si sabes mi nombre "Sweetheart". --Chris, por favor. Si quieres, a la hora de la salida te cuento mas. Pero no muestres eso por favor. --Bueno Pam, luego me cuentas mas. Sin decir mas, Chris guarda el telefono en su bolsillo y se sienta frente a mi, en su cubiculo. Su mirada incomoda empezaba a desnudarme. Se que estaba adivinando mis pezones bajo mi sueter. Volvi a enrojecer. Me sentia en sus manos. A la hora del cafe, como nunca, me acerque a Chris, quien compartia con Adam, Luke y Hugh. Senti que los cuatro me miraron con lujuria, a pesar de mi aspecto descuidado. Chris se arrima un poco dejando un espacio para que me siente yo con ellos: --!Companera, que milagro que nos viene a brindar su "dulce" compania! Senti el doble sentido que Chris impartia a sus palabras y gestos. Mi nerviosismo crecia. ?Sabrian ya mis otros companeros a lo que me dedico por las noches? --Tome asiento --dijo Luke con galanteria. Los otros parecieron no tomar mucha atencion de mi presencia. Entonces entendi que mi paranoia me empezaba a traicionar. Yo interprete sus miradas como lascivas, cuando ni siquiera se daban cuenta de que yo estaba ahi. Pero no todos actuaban indiferentes. Chris se acerco a mi cuello y me dijo en voz muy baja: --Mas tarde me cuentas mas, dulzura. Tensos minutos pasaron. Al fijarme en las miradas que se intercambiaban Luke y Chris empece a sospechar que Chris le habia mostrado ya la captura a Luke. Y si tiene esa captura, puede que tenga mas. Recuerdo que anoche jugue un poco con ese dildo en el chat publico ya que uno de los habituales dejo una generosa propina, seguida de una inusual propina de diez mil tokens por un espectador anonimo. Me levante de la mesa con la sensacion de que mis recuerdos se podian ver reflejados en mis ojos. --?Ya te vas Pam? --dijo Chris, con esa sonrisa picara de medio lado que empezaba a fastidiarme y al mismo tiempo... a excitarme. --No te vayas Pam, --interrumpe Luke, tomandome suavemente del antebrazo. Su contacto inesperado me sorprendio... y tambien me excito. --Tengo que llenar el reporte del dia. Nos vemos luego chicos. Sali de ahi casi corriendo, con la mirada incisiva de Chris clavada en mis gluteos, pude sentir sus ojos hasta el final. Empece entonces a considerar retirarme de este trabajo que no necesito. Poder al fin descansar durante el dia, y mentirle a mi madre que me despidieron y que con la liquidacion podre pagarme vacaciones. Estaba decidido. Me ire de ahi. Voy a renunciar. Al dirigirme a la oficina de mi jefe para comunicarle mi decision, Chris me intercepto. --?Donde vas tan apurada sweetie? --Chris, no se que pretendes llamandome asi. Estoy muy nerviosa, me tienes muy tensa, dejame en paz. --Este no es un buen lugar para hablar. ?Por que mejor no me dejas que te lleve esta noche a tu casa y ahi hablamos? --Yo tambien tengo carro. --Lo se, nos estacionamos juntos tambien, aunque en el estacionamiento tampoco me has contestado el saludo. --Dejate de resentimientos Chris. No puedo trabajar en un ambiente tan tenso. Voy a renunciar. Chris saca el telefono y me muestra mas captures, de otros dias. Videos. !Ahora si que me senti acosada! --No renuncies. No hagas que le muestre esto a nadie. Mientras hablaba, seguia mostrando escenas candentes protagonizadas por mi. Al reconocer una imagen mas antigua, tome fuerzas y le arranque el telefono de su poder. Chris sonreia triunfante al notar que me di cuenta de que me ha venido siguiendo el rastro desde hace tiempo.
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Matar a un ruisenor de Harper Lee
https://gigalibros.com/matar-a-un-ruisenor.htmlCuando tenia casi trece anos, mi hermano Jem sufrio una grave fractura en el brazo a la altura del codo. Cuando sano y por fin se disiparon sus temores de que nunca podria volver a jugar al futbol americano, en raras ocasiones volvia a acordarse de aquella lesion. El brazo izquierdo le quedo algo mas corto que el derecho; cuando estaba de pie o andaba, el dorso de la mano formaba casi un angulo recto con su cuerpo, y el pulgar estaba paralelo a sus muslos. A el no podria haberle importado menos, con tal de poder pasar y chutar. Cuando transcurrieron anos suficientes para poder verlos en retrospectiva, a veces hablabamos de los acontecimientos que condujeron a su accidente. Yo sostengo que los Ewell fueron quienes lo comenzaron todo, pero Jem, que era cuatro anos mayor que yo, decia que eso habia empezado mucho antes. Dijo que comenzo el verano en que Dill vino a vernos, cuando nos hizo concebir por primera vez la idea de hacer salir a Boo Radley. Yo decia que si el queria tener una amplia perspectiva de lo sucedido, en realidad comenzo con Andrew Jackson. Si el general Jackson no hubiera perseguido a los indios creek arroyo arriba, Simon Finch nunca habria llegado hasta Alabama, y ?donde estariamos nosotros si no lo hubiera hecho? Eramos demasiado mayores como para zanjar la discusion con una pelea, de modo que consultamos a Atticus. Nuestro padre dijo que los dos teniamos razon. Al ser del Sur, era un motivo de verguenza para algunos miembros de la familia que no tuvieramos constancia de que alguno de nuestros antepasados hubiera peleado en la batalla de Hastings. Tan solo teniamos a Simon Finch, un boticario de Cornualles cuya piedad solo se veia superada por su tacaneria. En Inglaterra, a Simon le irritaba la persecucion de aquellos que se autodenominaban metodistas a manos de sus hermanos mas liberales, y ya que Simon se consideraba metodista, cruzo el Atlantico hasta Filadelfia, de ahi a Jamaica, y desde alli a Mobile subiendo hasta Saint Stephens. Teniendo en cuenta las estrictas normas de John Wesley sobre no enriquecerse en los negocios aprovechandose de los demas, Simon se dedico a la practica de la medicina logrando un gran exito; pero en esta empresa era infeliz, pues habia sido tentado a hacer lo que el sabia que no era para la gloria de Dios, como llevar oro y ropas costosas. De modo que Simon, habiendo olvidado lo que su maestro habia dicho sobre la posesion de bienes humanos, compro tres esclavos y con su ayuda establecio una hacienda a las orillas del rio Alabama, a unos sesenta y cinco kilometros mas arriba de Saint Stephens. Regreso a Saint Stephens solamente una vez, para encontrar esposa, y con ella establecio una descendencia con muchas hijas. Simon vivio hasta una edad impresionante y murio rico. Era costumbre de los hombres de la familia quedarse en la hacienda de Simon, Finch's Landing, y ganarse la vida con el algodon. El lugar se sostenia a si mismo. Modesto en comparacion con los imperios que lo rodeaban, Landing producia sin embargo todo lo necesario para la vida excepto hielo, harina de trigo y prendas de vestir, que proporcionaban las embarcaciones fluviales de Mobile. Simon habria considerado con impotente rabia los problemas entre el Norte y el Sur, ya que arrebataron a sus descendientes todo a excepcion de su tierra; sin embargo, la tradicion de vivir en esa hacienda siguio inalterable hasta bien entrado el siglo XX, cuando mi padre, Atticus Finch, fue a Montgomery para aprender Derecho, y su hermano menor fue a Boston para estudiar Medicina. Su hermana Alexandra fue la Finch que se quedo en Landing: se caso con un hombre taciturno que pasaba la mayor parte de su tiempo tumbado en una hamaca al lado del rio preguntandose si sus redes de pesca estarian llenas. Cuando mi padre fue admitido en la abogacia, regreso a Maycomb y comenzo a ejercer. Maycomb, a unos treinta kilometros al este de Finch's Landing, era la capital del condado de Maycomb. La oficina de Atticus en el edificio del juzgado contenia poco mas que una percha para sombreros, una escupidera, un tablero de damas y un impecable Codigo de Alabama. Sus dos primeros clientes fueron las dos ultimas personas a las que ahorcaron en la carcel del condado de Maycomb. Atticus los habia instado a que aceptaran la generosidad del Estado, que les permitiria declararse culpables de homicidio en segundo grado y asi evitar la pena capital, pero ellos eran Haverford, un apellido que en el condado de Maycomb es sinonimo de burro testarudo. Los Haverford habian liquidado al principal herrero de Maycomb por un malentendido que surgio por la supuesta <
> de una yegua, fueron lo bastante imprudentes para hacerlo en presencia de tres testigos e insistieron en que < > era una defensa lo bastante buena para cualquiera. Persistieron en declararse no culpables de homicidio en primer grado, de modo que no hubo mucho que Atticus pudiera hacer por sus clientes, a excepcion de estar presente en su partida, una ocasion que fue probablemente el comienzo de la profunda antipatia de mi padre hacia la practica del Derecho Penal. Durante sus cinco primeros anos en Maycomb, Atticus practico mas que cualquier otra cosa la Economia; y durante varios anos desde entonces invirtio sus ganancias en la educacion de su hermano. John Hale Finch era diez anos menor que mi padre, y decidio estudiar Medicina en un momento en que no valia la pena cultivar algodon; pero despues de tener a Jack encauzado, Atticus comenzo a obtener ingresos razonables practicando la abogacia. Le gustaba Maycomb, habia nacido y se habia criado alli; conocia a su gente, ellos le conocian, y debido a los negocios de Simon Finch, Atticus estaba emparentado por sangre o matrimonio con casi todas las familias de la ciudad. Maycomb era una vieja poblacion, pero ademas era una vieja poblacion cansada cuando yo la conoci. En el tiempo lluvioso las calles se convertian en un barrizal rojizo; crecia hierba en las aceras, y el edificio del juzgado parecia combarse sobre la plaza. En cierto modo, hacia mas calor entonces: un perro negro sufria los dias de verano; las flacas mulas enganchadas a los carros espantaban moscas bajo la sofocante sombra de las encinas que habia en la plaza. A las nueve de la manana, los cuellos rigidos de los hombres se veian languidos. Las damas se banaban antes de la tarde, despues de su siesta de las tres, y al atardecer estaban como blandos pastelitos cubiertos de sudor y dulce talco. La gente se movia despacio entonces. Cruzaban la plaza a paso lento, entrando y saliendo de las tiendas que la rodeaban, y se tomaban su tiempo para todo. Un dia tenia veinticuatro horas, pero parecia mas largo. No habia ninguna prisa, ya que no habia ningun lugar adonde ir, nada que comprar y nada de dinero con el cual comprar, nada que ver fuera de los limites del condado de Maycomb. Pero era una epoca de vago optimismo para algunas personas: al condado de Maycomb se le habia dicho recientemente que no tenia nada que temer, solamente a si mismo. Viviamos en la principal calle residencial de la ciudad: Atticus, Jem y yo, ademas de Calpurnia, nuestra cocinera. Jem y yo estabamos contentos con nuestro padre: jugaba con nosotros, nos leia y nos trataba con cortesia. Calpurnia era otra cosa. Toda angulos y huesos, era miope, tambien bizca, y sus manos eran tan anchas como un travesano de cama, y dos veces mas duras. Siempre me estaba ordenando que saliera de la cocina, preguntandome por que no podia comportarme tan bien como Jem aunque sabia que el era mayor, y me llamaba para volver a casa cuando yo no estaba lista para regresar. Nuestras batallas eran epicas y con un final sin variacion. Calpurnia ganaba siempre, principalmente porque Atticus siempre se ponia de su lado. Ella habia estado con nosotros desde que nacio Jem, y yo habia sentido la tirania de su presencia desde que podia recordar. Nuestra madre murio cuando yo tenia dos anos, de modo que nunca senti su ausencia. Ella era una Graham de Montgomery; Atticus la conocio cuando fue elegido por primera vez para la legislatura estatal. Para entonces, el era de mediana edad y ella quince anos mas joven. Jem fue el resultado de su primer ano de matrimonio. Cuatro anos despues naci yo, y dos anos despues nuestra madre murio de un ataque repentino al corazon. Decian que era cosa de familia. Yo no la extranaba, pero creo que Jem si. El la recordaba claramente, y algunas veces en mitad de un juego daba un largo suspiro, y despues se marchaba y jugaba el solo detras de la cochera. Cuando se ponia asi, yo sabia que era mejor no molestarle. Cuando yo tenia casi seis anos y Jem se acercaba a los diez, nuestras fronteras en el verano (al alcance de la voz de Calpurnia) eran la casa de la senora Henry Lafayette Dubose, dos puertas al norte de la nuestra, y la Mansion Radley, a tres puertas al sur. Nunca sentimos la tentacion de traspasarlas. La Mansion Radley estaba habitada por una entidad desconocida, cuya mera descripcion era suficiente para hacer que nos portaramos bien durante dias. La senora Dubose era el mismo demonio. Ese fue el verano en que vino Dill. Una manana temprano, cuando estabamos comenzando nuestros juegos en el patio trasero, Jem y yo oimos algo en la puerta contigua, en el parterre de coles de la senorita Rachel Haverford. Fuimos hasta la malla de alambre para ver si habia un perrito, pues la perra terrier de la senorita Rachel estaba prenada, pero en cambio encontramos a alguien sentado que nos miraba. Sentado, no era mucho mas alto que las coles. Nos quedamos mirando fijamente hasta que el hablo: --Hola. --Hola, tu --contesto Jem amablemente. --Soy Charles Baker Harris --dijo el--. Se leer. --?Y que? --pregunte yo. --Solo pense que os gustaria saber que se leer. Si teneis algo que necesiteis leer, yo puedo hacerlo... --?Cuantos anos tienes? --pregunto Jem--. ?Cuatro y medio? --Voy para siete. --Entonces no es nada --dijo Jem, senalandome con el pulgar --. Aqui Scout lee desde que nacio, y ni siquiera ha comenzado aun la escuela. Pareces muy canijo para tener casi siete anos. --Soy pequeno pero mayor --afirmo el. Jem se aparto el cabello para mirarlo mejor. --?Por que no vienes aqui, Charles Baker Harris? --dijo--. Senor, vaya nombre. --No es mas curioso que el tuyo. Tia Rachel dice que te llamas Jeremy Atticus Finch. Jem fruncio la frente. --Soy lo bastante alto para estar en consonancia con mi nombre --dijo--. Tu nombre no es mas largo que tu. Apuesto a que es un palmo mas largo. --La gente me llama Dill --dijo Dill, intentando pasar por debajo de la valla. --Te ira mejor si pasas por encima en lugar de por debajo -- observe yo--. ?De donde vienes? Dill era de Meridian, Mississippi, e iba a pasar el verano con su tia, la senorita Rachel, y desde entonces pasaria todos los veranos en Maycomb. Su familia era del condado de Maycomb originariamente. Su madre trabajaba para un fotografo en Meridian, habia presentado una fotografia de el a un concurso de ninos guapos, y gano cinco dolares. Le dio el dinero a Dill, quien lo empleo en ir veinte veces al cine. --Aqui no hay exposiciones de fotografia, excepto a veces las de Jesus en el juzgado --dijo Jem--. ?Viste alguna pelicula buena? Dill habia visto Dracula, una revelacion que movio a Jem a mirarle con cierto respeto. --Cuentanosla --le pidio. Dill era un chico muy curioso. Llevaba pantalones cortos azules de lino que se abotonaban a la camisa, su cabello era blanco como la nieve y lo llevaba pegado a la cabeza como si fuera un plumon de pato; era un ano mayor que yo, pero yo le sobrepasaba en altura. Mientras nos relataba la vieja historia, sus ojos azules se iluminaban y se oscurecian; su risa era repentina y feliz, y solia tirarse de un mechon de cabello que caia sobre su frente. Cuando Dill hubo reducido al polvo a Dracula, y Jem dijo que la pelicula parecia mejor que el libro, le pregunte a Dill donde estaba su padre. --No has dicho nada de el. --No tengo ningun padre. --?Esta muerto? --No... --Entonces, si no esta muerto, si lo tienes, ?verdad? Dill se sonrojo y Jem me dijo que me callase, una senal segura de que Dill habia sido estudiado y hallado aceptable. A partir de entonces el verano paso con una diversion constante. La diversion constante era: hacer mejoras a nuestra casa del arbol que descansaba entre dos cinamomos gigantes en el patio trasero, alborotar, recorrer nuestra lista de obras de teatro basadas en las de Oliver Optic, Victor Appleton y Edgar Rice Burroughs. En este asunto teniamos la fortuna de tener a Dill. El representaba los papeles que anteriormente me daban a mi. El mono en Tarzan, el senor Crabtree en The Rover Boys, el senor Damon en Tom Swift. De ese modo llegamos a conocer a Dill como un merlin de bolsillo, cuya cabeza estaba llena de planes excentricos, anhelos extranos y fantasias raras. Pero a finales de agosto nuestro repertorio era aburrido, por haberlo representado incontables veces, y fue entonces cuando Dill nos dio la idea de hacer salir a Boo Radley. La Mansion Radley fascinaba a Dill. A pesar de nuestras advertencias y explicaciones, le atraia como la luna atrae al agua, aunque no mas cerca de la farola de la esquina, a una distancia segura de la puerta de los Radley. Ahi se quedaba, rodeando el grueso poste con un brazo, mirando fijamente y haciendose preguntas. La Mansion Radley hacia una curva cerrada mas alla de nuestra casa. Andando hacia el sur, se pasaba por delante de su porche; la acera daba un giro y estaba en paralelo con la finca. La casa era baja, en otra epoca era blanca y con un ancho porche y persianas verdes, pero hacia mucho tiempo que se habia oscurecido hasta llegar al tono de pizarra gris que la rodeaba. Unas tablas descompuestas por la lluvia caian sobre los aleros del barandal; unos robles mantenian alejados los rayos de sol. Los restos de una cerca guardaban el patio frontal, un patio < > que nunca se barria, donde crecian en abundancia hierbajos y flores silvestres. Dentro de la casa vivia un fantasma maligno. La gente decia que existia, pero Jem y yo nunca lo habiamos visto. La gente decia que salia de noche, cuando se ponia la luna, y miraba por las ventanas. Cuando las azaleas de la gente se helaban en una noche fria, era porque el habia soplado sobre ellas. Cualquier pequeno delito cometido en Maycomb era obra del fantasma. En una ocasion, la ciudad estaba aterrorizada por una serie de macabros acontecimientos nocturnos: encontraban mutilados pollos y animales domesticos; aunque el culpable era Addie el Loco, quien finalmente termino ahogandose en el remolino de aguas de Barker, todos seguian mirando la Mansion Radley, sin estar dispuestos a descartar sus sospechas iniciales. Un negro no pasaria al lado de la Mansion Radley de noche; cruzaria a la acera contraria e iria silbando mientras caminaba. Los terrenos escolares de Maycomb lindaban con la parte trasera del terreno de los Radley; desde el gallinero de los Radley, altos arboles de pacanas dejaban caer su fruto al patio de la escuela, pero los ninos no tocaban ninguna de aquellas nueces: las pacanas de los Radley mataban. Una bola de beisbol que cayera en el patio de los Radley era una bola perdida, y no se hacian preguntas. La desgracia de aquella casa comenzo muchos anos antes de que Jem y yo nacieramos. Los Radley, bien recibidos en cualquier parte de la ciudad, se encerraban en su casa, una predileccion imperdonable en Maycomb. Ellos no iban a la iglesia, que era el entretenimiento principal de Maycomb, sino que rendian culto en su casa; la senora Radley en raras ocasiones llegaba a cruzar la calle para tomar un cafe a media manana con sus vecinas, y sin duda nunca se unio a ningun circulo misionero. La senora Radley caminaba hasta la ciudad a las once y media cada manana y regresaba prontamente a las doce, a veces llevando una bolsa de papel marron que los vecinos suponian que contenia las provisiones de la familia. Yo nunca supe como el viejo senor Radley se ganaba la vida, Jem decia que < >, un termino educado para decir que no hacia nada, pero el senor Radley y su esposa habian vivido alli con sus dos hijos durante tanto tiempo como cualquiera podia recordar. Las persianas y las puertas de la casa de los Radley estaban cerradas los domingos, otra cosa ajena a las costumbres de Maycomb: puertas cerradas significaba solamente enfermedad y tiempo frio. De entre todos los dias, el domingo era dia para las visitas formales por la tarde: las senoras llevaban corse, los hombres llevaban abrigos, los ninos llevaban zapatos. Pero subir los peldanos de la Mansion Radley y decir < > una tarde de domingo era algo que sus vecinos no hacian nunca. La casa de los Radley no tenia puertas de tela metalica. Una vez le pregunte a Atticus si alguna vez tuvo alguna; Atticus dijo que si, pero antes de que yo naciera. Segun la leyenda del barrio, cuando el joven Radley estaba en la adolescencia hizo amistad con algunos de los Cunningham, de Old Sarum, una tribu enorme y confusa que estaba domiciliada en la parte norte del condado, y formaron lo mas parecido a una pandilla que se viera jamas en Maycomb. Hacian muy poca cosa, pero lo bastante para que hablaran de ello por la ciudad y los amonestaran publicamente desde tres pulpitos: merodeaban por la barberia; subian en el autobus hasta Abbottsville los domingos e iban al cine: asistian a bailes en los lugares de juego en el condado al lado del rio: la posada Dew-Drop y Campamento Pesquero: probaban el whisky de contrabando. Nadie en Maycomb tenia las agallas para decirle al senor Radley que su muchacho andaba con malas companias. -
La chica y la bestia (Chicas Magazine 3) de Olivia Kiss
https://gigalibros.com/la-chica-y-la-bestia-chicas-magazine-3.htmlTodo el mundo teme a Dominic Miller, el director de la revista mas vendida de Nueva York, al que sus trabajadores apodan como "la Bestia". Es hermetico, imperturbable y su mirada fria y gris es capaz de conseguir cualquier reto que se proponga.
Solo Ava Bell, su nueva y eficiente secretaria, parece ser capaz de seguirle el ritmo. Sin embargo, cuando Dominic le pide que se haga pasar por su novia para cerrar un trato con unos importantes inversores, hasta ella empieza a tener dudas. El problema es que Ava esconde secretos y, para conseguir huir de un pasado que la atormenta, necesita ese trabajo, especialmente cuando Dominic le promete un aumento de sueldo si acepta el trato.
Pero ?es realmente su jefe tan insensible como aparenta? ?Y seran capaces de fingir que son novios sin terminar salpicados por su propia farsa?
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Pagar por los pecados de Carolina Ortigosa
https://gigalibros.com/pagar-por-los-pecados.htmlEva Abrams es una joven estudiante que vive en un barrio tranquilo de Wisconsin, y toda su existencia esta condicionada por las creencias de su religiosa familia.
Aunque a pesar de todo, su fe no es lo que se dice... ciega.
Hasta ahora, casi lo unico que le ha importado es sacar buenas notas y marcharse a la universidad, lejos de un padre controlador con poca tolerancia hacia el fracaso.
Eva hace lo posible por estar a la altura, sin embargo, cuando descubre que esos principios se incumplen a la ligera, todo cambia. Si antes las cosas eran dificiles, se volveran imposibles en su hogar; y, fuera de el, tambien hay peligros acechando. Sera toda una sorpresa para Eva descubrir lo que ocultan en su interior personas muy cercanas.
Se dice que las tragedias nunca vienen solas, y parece que un pecado trae consigo otro. -
Memorias del corazon (Secretos del alma 3) de Victoria Magno
https://gigalibros.com/memorias-del-corazon-secretos-del-alma-3.htmlLa esperada tercera entrega de la serie <
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En tu corazon de Telma Rouse
https://gigalibros.com/en-tu-corazon.htmlDespues de la decision de Fernando, de mudarse hacia otra ciudad, la doctora Lucy tiene que viajar frecuentemente para poder estar con el. Ahogada por la rutina que le ocasiona la relacion a distancia, inicia una amistad con Roberto, otro joven doctor que trabaja junto a ella en el area pediatrica del hospital.
Los amigos se convierten en confidentes hasta que la atraccion y la cercania los lleva a compartir algunos momentos que, entre besos y caricias, hacen que Lucy se sienta confundida hacia el amor de Fernando.
Tras pasar algunos episodios de indecision, se debatira entre dos amores, en el que el secreto llegara hasta Fernando y la relacion estara a punto de terminar. Todo dependera de la madurez de Lucy en asumir su culpa ante el sufrimiento que esta le causara a Fernando.
El erotismo y las fantasias sexuales, hacen de esta historia, un complemento para vivir la realidad de cada uno de los protagonistas, donde todos tienen algo en comun, su profesion. Pero, el destino sera el encargado de poner cada uno en su lugar.
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La llegada del Tercer Reich de Richard J. Evans
https://gigalibros.com/la-llegada-del-tercer-reich.html -
Simplemente Sara (Sara Summers 4) de Susanna Herrero
https://gigalibros.com/simplemente-sara-sara-summers-4.htmlSara ya tiene veinticuatro anos. Y tanto sus saltos, como sus caidas y sus decisiones la han llevado a ser lo que es: simplemente Sara.
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Un crimen imperfecto de Sandra Garcia
https://gigalibros.com/un-crimen-imperfecto.htmlTodo empezo un dia cualquiera. A partir de ese dia todo cambio. Una conversacion que no debio de ser escuchada marca el principio. Santiago intentara descubrir que secretos esconde Ramon Benitez y sobrevivir al mismo tiempo. Encontrara a alguien muy valioso que le hara llegar hasta quien necesita salvar. Traiciones, secretos y nuevos descubrimientos haran que la vida de Santi de un completo giro.
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Mi vida en tus manos de Rose B. Loren
https://gigalibros.com/mi-vida-en-tus-manos.htmlZoe es una joven doctorada en educacion infantil, con un pasado que le ha marcado para siempre; su madre los abandono a ella y a su padre cuando era tan solo una nina, y este fallecio en un accidente aereo siendo una adolescente. Procedente de una familia acomodada, sus abuelos fueron los responsables de procurarle una buena formacion en los mejores colegios y universidades. Con un gran corazon, rechazo un puesto en la universidad para dedicar su tiempo a ser maestra en un orfanato de Cardiff. Pero toda su vida se ve truncada justo cuando esta apunto de recibir una suma importante de dinero proveniente de la herencia de sus abuelos. Un cambio que la pondra en una situacion extrema y que necesitara de la ayuda de Owen, un subinspector de policia que le tendera una mano cuando mas lo necesita. Situaciones al limite y decisiones desesperadas que haran que todo gire alrededor de una sola idea, recuperar la vida que le ha sido arrebatada. ?Recuperara Zoe su verdadera vida? ?Quien esta detras de toda esta trama? Descubrelo en Mi vida en tus manos.
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Desde el alma de Javier Romero
https://gigalibros.com/desde-el-alma.htmlDesde el alma no es solo una historia de esperanza, amor y lucha. Son varias historias cogidas de la mano y que nos muestran una realidad diferente que se aleja de la maldad que en nuestros dias parece querer aduenarse del mundo.
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Hijo de Dracula de
https://gigalibros.com/hijo-de-dracula.htmlDracula es uno de los vampiros mas famosos gracias a la extensa serie de libros, programas de television y peliculas que cuentan sus aventuras. No obstante, el dia de hoy nos enfocaremos a comentar como es que ocurrio la muerte de su hijo. En una provincia de lo que hoy es conocido como Rumania, se encontraba el castillo del conde. Este era custodiado por su vastago, quien dicho sea de paso vivia encerrado en una mazmorra oscura, pues sentia muchisimo miedo por la luz del sol, las estacas y las balas de plata. Para aquellos que lo desconozcan, precisamente el conde Dracula sucumbio a causa de que un humano le enterrara una filosa estaca en el corazon. Volviendo a esta leyenda en particular, uno de los fieles sirvientes el muchacho le aconsejo que llamara a un hechicero, para que pudiera salir de su encierro autoimpuesto. - Si, quizas tengas razon. Un encantador que domine la magia negra, me podra dar una pocion para que pueda salir a la calle y todos los que deseen hacerme dano, queden alejados de mi. El nigromante llego y de una bolsa de cuero viejo saco una botella de vidrio opaco y le dijo al joven vampiro:
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Reptilians de Daniel Arriondo
https://gigalibros.com/reptilians.htmlAlex Baker es un estudiante de preparatoria que se reencuentra inesperadamente con la chica de sus suenos luego de un largo tiempo y, aunque esta perdidamente enamorado de ella, un oscuro secreto le impide quedarse a su lado. De la noche a la manana pierde su casa, su trabajo de medio tiempo y la esperanza de ver mejor a su hermano menor, quien padece leucemia.
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Martina mezclada, no enredada. (Martina sin alcohol 2) de Olga Salar
https://gigalibros.com/martina-mezclada-no-enredada-martina-sin-alcohol-2.htmlMartina Vega esta de vuelta. Su vida ha cambiado y ya no esta agitada, ni revuelta, sino mezclada, no enredada. El amor es lo que tiene, nos transforma sin que nos demos cuenta. ?Pero que quereis que os diga que no sepais todos ya? Las mezclas, a veces, ofrecen los mejores sabores. ?Quieres averiguar que tipo de coctel sera este? ?Dulce? ?Amargo o quizas picante?
En Martina mezclada, no revuelta, tienes la respuesta. -
Insufrible amor de Sophie Saint Rose
https://gigalibros.com/insufrible-amor.htmlMarion necesita un trabajo nuevo pero antes de volver a servir hamburguesas y aguantar a los clientes prefiere la tranquilidad de limpiar una casa. La tranquilidad y Jack Spencer no tienen nada que ver.
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Las travesuras del destino de Diana Maria Parada Gomez
https://gigalibros.com/las-travesuras-del-destino.htmlOh noo ?quien llama a esta hora un sabado? !POR DIOS! ?Pero donde diablos esta ese telefono? !Joder! Que manera de arruinarme el dia, el mes, el ano !Para ya de sonar! Fue la manera como sali esa manana de la cama, refunfunando y odiando a quien sea que me haya despertado. Dando tropiezos, mas dormida que despierta, consegui divisar el telefono, caido al pie de mi comoda, frente a mi cama !Ahi estas! dije, como si se tratara de una conversacion con aquel aparato negro. --Hola. --Dije, Sin ninguna intencion de parecer amable. --!Buenos dias hija! Siento despertarte, espere que fueran las 11 para no molestarte tan pronto !Lo siento! Era mi madre, la pobre que conoce de sobra mi mal genio, mis manias y sobre todo como odio que me arruinen el sueno... claro habia conseguido que se sintiera mal por haberme llamado. --No pasa nada madre, buenos dias. Pense que era mas pronto. --Dije incredula mirando el reloj de pared, no eran las 11, en realidad faltaban 10 minutos para las 12. Es casi medio dia, no pense que hubiera dormido tanto--. !Que bueno que me has llamado! ?Como estas madre? --Bien carino, esta semana he ido a mis controles medicos y las analiticas han salido muy bien. ?Como estas tu? No hemos hablado en dias, supongo que estaras ocupada. --Lo siento madre. Tienes razon, he estado ocupada. Pero justo hoy tenia pensado ir a verte. --?!De verdad!? --Pregunto con una emocion que no era fingida y que yo no comprendia muy bien. Solo habian pasado 8 dias desde la ultima vez que nos vimos. !Cosas de madres! Pense. --Si madre, claro que es verdad. Pero soy un desastre y si no me llamas, hubiera despertado manana. --Que bueno que quieras venir, Laura esta aqui con tu sobrino y Sonia ha llamado a tu padre y a tus primas para que vengan. Haremos una comida. --Halaaa ?Teniais una comida y me avisais de ultima? --Dije en tono de nina mal criada como siempre. --No hija, por favor. Todo ha sido improvisado ?como crees? --Vale, no pasa nada. Me ducho, desayuno y en un par de horas estoy alli. --?Un par de horas? --Esta bien, dame una hora y llego, pero ya no me entretengas que tardo mas. --Vale, nos vemos luego, un beso. Y date prisa, --dijo casi gritando. Seguro pensando que cerraria la llamada y no la escucharia. Efectivamente en media hora estaba lista, pero claro, sin maquilarme ni desayunar y con la suerte que un dia antes habia ido a la peluqueria despues del trabajo. Llame a la empresa de taxis y en 3 minutos tenia el servicio en la puerta de casa, cogi dos barritas de cereal cuando pase corriendo por la cocina y me asegure a guardar el estuche de maquillajes en el bolso que llevaba. Durante el trayecto en el taxi, me maquille. Las barritas ni intente sacarlas, lo primero que vieron mis ojos fue un cartel colgado del asiento delantero que decia <
> No pude evitar reirme de mi misma. Que comienzo de dia, pense en voz alta. De mi casa a casa de mi madre, solo hay 15 minutos en coche, en menos de una hora estaba ahi. Contrario a lo que pense no fui la ultima en llegar. Besos y abrazos a todos. La casa de mi madre era una fiesta, toda la familia, algunos amigos, musica. No entendia el motivo pero tampoco me resultaba algo extrano. Su casa nunca estaba en silencio ni sola. --!Muero de hambre! --Dije una vez termine con los saludos --?Has tomado cafe? --Pregunto mi madre --No madre, creo que aun voy dormida. Nos sentamos en el pequeno comedor de la cocina. Laura hablaba desde su movil con alguien a quien le encargaba comida y mientras, tachaba cosas en un cuaderno, Sonia, seguia invitando a mas gente y mi madre a su vez ponia magdalena en la mesa. Desayunar a esa hora no es habitual, pero lo que no haga una madre por sus hijos... Yo devoraba magdalenas como si no hubiera un manana, hasta que ellas por fin acabaron con sus llamadas y fue entonces cuando supe el motivo de la reunion. --Tu sobrino va a ser padre, dijo Laura de manera muy serena. ?!Que dices!? Dije casi gritando, todas estaban a la expectativa de mi reaccion. Yo no podia estar mas feliz. Pasada la euforia, le pregunte mas tranquila y con un tono de voz muy bajito, como si tuvieramos en frente a los protagonistas de la noticia. --Pero Manu solo lleva un par de meses con esa chica ?Como es posible que tan pronto...? --Mi hermana entendiendo mi confusion, me explico. Es su anterior novia la que esta embarazada de 3 meses y fue su familia quien la obligo a contarselo a Manu, ya que ella al ver lo rapido que le habia conseguido reemplazo, entendio que el le habia sido infiel y no queria hacerlo participe de su estado. Senti mucha pena de la chica, nunca llegue a conocerla personalmente, pero suponia que no debia ser facil ser madre soltera y menos siendo tan joven. La tarde transcurrio entre risas, musica y comida. Los ultimos en llegar fueron mis primas y mi padre, quien a pesar de llevar muchisimos anos separado de mi madre, mantenia con ella una buena relacion, no dejan de tener contacto y mucho menos con nosotras. Laura preparo una deliciosa paella, a mi me apetecia una gran fuente de ensalada y Sonia, ofrecia cosas para picar mientras poniamos la mesa. La tarde no podia ir mejor. Me vino a la mente el recuerdo de mi mal humor por la llamada de mi madre y me alegre mucho de que lo hubiera hecho. Estar con mi familia era de las pocas cosas que me hacian sentir plenamente feliz. Es una familia de locos, pero locos a los que amo con locura. A medida que entraba la noche todos iban marchando, el primero mi padre, que tenia otro compromiso, poco a poco los demas, hasta que Laura decidio tambien irse, ante el insistente llamado de Xavi, yo en cambio decidi pasar la noche en la que por muchos anos fue mi casa, algo que a mi madre la puso muy contenta. Sonia y yo recogimos el desorden y nos fuimos a dormir, estabamos muy cansadas y el vino me tenia un poco tonta. Al otro dia me desperto un aroma de cafe recien hecho, lo primero que senti al abrir los ojos fue un terrible dolor de cabeza, estaba claro que habia bebido mucho. Me di una ducha, afortunadamente siempre dejo un cambio de ropa en casa para estos casos. Tome un paracetamol y me reuni en la cocina con mi madre, Sonia y la pequena Helena. Hablamos de todo un poco, la noticia del nuevo bebe que venia en camino nos tenia pletoricos. Mi madre seria bisabuela, algo que ella admitia, nunca haber pensado. Despues del desayuno volvi a la cama, no sin antes decirles que las invitaba a comer y que llamaran a Laura para que estuviera con nosotras. -
El retorno (Titan 1), Jennifer L. Armentrout de Jennifer L. Armentrout
https://gigalibros.com/el-retorno-titan-1-jennifer-l-armentrout.html -
Radiografia de chica con tatuaje de Jordi Sierra I Fabra
https://gigalibros.com/radiografia-de-chica-con-tatuaje.htmlUna noche de pasion finaliza con un crimen. El principal sospechoso niega los hechos pero todas las pruebas lo condenan. Un caso cerrado para todo el mundo menos para la novia del acusado, que se siente responsable porque aquella noche fatidica no estaba con el. Carla cree que hay piezas que no encajan. Mientras todo a su alrededor parece desmoronarse, ella iniciara una investigacion para descubrir el verdadero rostro del asesino.
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En suenos fue de Una Fingal
https://gigalibros.com/en-suenos-fue.html -
Un dia de invierno de Paula Gallego
https://gigalibros.com/un-dia-de-invierno.htmlDinamarca,1940.
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Dias de lluvia de Angeles Ibirika
https://gigalibros.com/dias-de-lluvia.htmlTras la muerte de su mujer, Kaiet decide regresar, junto a su pequeno hijo, a la casa de su padre en Bermeo, despues de diecisiete anos de ausencia. Desde el primer instante se siente extrano, en un lugar al que ya no pertenece. Pero si su futuro se le presenta oscuro, retomar el pasado que dejo a medias tampoco le sera facil. Debera resolver todo lo que quedo pendiente con su precipitada marcha, explicar muchos de sus actos, enfrentarse a sus dudas, sus temores y sus prejuicios. y perdonar. Aunque lo que no imagina es que durante ese proceso se reencontrara con la dulce Maddi y que junto a ella la vida tratara de darle una segunda oportunidad. ?La dejara escapar de nuevo?
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Sombras nuevas, Alba Duro de Alba Duro
https://gigalibros.com/sombras-nuevas-alba-duro.htmlPatricia lleva anos viviendo en Los Angeles, donde trabaja como escritora erotica en espanol. Su dia a dia consiste en apagar cigarrillos en el cenicero, escribir a oscuras en su ordenador y contestar emails de fans. Sin embargo, todo llega cuando recibe un email de Arturo, uno de sus lectores.
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Elena sabe de Claudia Pineiro
https://gigalibros.com/elena-sabe.htmlSe trata de levantar el pie derecho, apenas unos centimetros del suelo, moverlo en el aire hacia adelante, tanto como para que sobrepase al pie izquierdo, y a esa distancia, la que sea, mucha o poca, hacerlo bajar. Apenas de eso se trata, piensa Elena. Pero ella piensa, y aunque su cerebro ordena movimiento, el pie derecho no se mueve. No se eleva. No avanza en el aire. No vuelve a bajar. No se mueve, no se eleva, no avanza en el aire, no vuelve a bajar. Eso apenas. Pero no lo hace. Entonces Elena se sienta y espera. En la cocina de su casa. Tiene que tomar el tren que sale para la Capital a las diez de la manana; el siguiente, el de las once, ya no le sirve porque la pastilla la tomo a las nueve, entonces piensa, y sabe, que tiene que tomar el de las diez, poco despues de que la medicacion logre que su cuerpo cumpla con la orden de su cerebro. Pronto. El de las once no, porque entonces el efecto de la medicacion habra declinado hasta desaparecer y ella estara igual que ahora, pero sin esperanza de que la levodopa actue. Levodopa se llama eso que tiene que circular por su cuerpo una vez disuelta la pastilla; conoce el nombre desde hace un tiempo. Levodopa. Asi le dijeron, y ella misma lo anoto en un papel porque sabia que no iba a entender la letra del medico. Que la levodopa circule por su cuerpo, sabe. Eso es lo que espera, sentada, en la cocina de su casa. Esperar es todo lo que puede hacer por el momento. Cuenta calles en el aire. Recita nombres de calles de memoria. De atras para adelante y de adelante para atras. Lupo, Moreno, 25 de Mayo, Mitre, Roca. Roca, Mitre, 25 de Mayo, Moreno, Lupo. Levodopa. Solo la separan cinco cuadras de la estacion, no es tanto, piensa, y recita, y sigue esperando. Cinco. Calles que todavia no puede andar con sus pasos esforzados aunque si repetir sus nombres en silencio. Hoy no quiere encontrarse con nadie. Nadie que le pregunte por su salud ni que le de el pesame tardio por la muerte de su hija. Cada dia se le aparece alguna persona que no pudo velarla o no pudo estar en el entierro. O no se atrevio. O no quiso. Cuando alguien muere como murio Rita, todos se sienten invitados a su funeral. Por eso las diez no es una buena hora, piensa, porque para llegar a la estacion tiene que pasar por delante del banco y hoy se pagan las jubilaciones, entonces es muy probable que se cruce con algun vecino. Con varios vecinos. Aunque el banco abra recien a las diez, cuando su tren este entrando en la estacion y ella con el boleto en la mano se acerque al borde del anden para tomarlo, antes de eso, Elena sabe, ya va a encontrar jubilados haciendo la cola como si tuvieran miedo de que la plata alcanzara solo para pagarle a los que primero llegan. Solo podria evitar el frente del banco dando una vuelta manzana que su Parkinson no le perdonaria. Ese es el nombre. Elena sabe desde hace un tiempo que ya no es ella la que manda sobre algunas partes de su cuerpo, los pies por ejemplo. Manda el. O ella, y se pregunta si al Parkinson habria que tratarlo de el o de ella, porque aunque el nombre propio le suena masculino no deja de ser una enfermedad, y una enfermedad es femenina. Como lo es una desgracia. O una condena. Entonces decide que lo va a llamar Ella, porque cuando la piensa, piensa <
>. Y puta es ella, no el. Con perdon de la palabra, dice. Ella. El doctor Benegas se lo explico varias veces pero Elena todavia no termina de entender; si entiende lo que tiene porque lo lleva en el cuerpo, pero no algunas de las palabras que usa el medico. La primera vez estaba Rita presente. Rita, que hoy esta muerta. Les dijo que el Parkinson es una degeneracion de las celulas del sistema nervioso. Y a las dos les cayo mal la palabra. Degeneracion. A ella y a su hija. El doctor Benegas seguramente se dio cuenta, porque enseguida trato de explicarles. Y dijo, una enfermedad del sistema nervioso central que degenera, o hace mutar, o cambia, o modifica de manera tal algunas celulas nerviosas que dejan de producir dopamina. Y Elena se entero entonces de que cuando su cerebro ordena movimiento, la orden solo puede llegar a sus pies si la dopamina la lleva. Como un chasqui, penso aquel dia. Entonces el Parkinson es Ella, y la dopamina el chasqui. Y el cerebro nada, piensa, porque sus pies no lo escuchan. Como un rey derrocado que no se da cuenta de que ya no gobierna. Como el emperador sin traje del cuento que le contaba a Rita cuando era chica. Rey derrocado, emperador sin traje. Y ahora esta Ella, no Elena sino su enfermedad, el chasqui y el rey derrocado. Elena repite sus nombres como antes repitio los de las calles que la separan de la estacion; esos nombres comparten su espera. De atras para adelante y de adelante para atras. Emperador sin traje no le gusta porque si no lleva traje esta desnudo. Prefiere rey derrocado. Espera, repite, combina de a pares: Ella y el chasqui, el chasqui y el rey, el rey y Ella. Prueba otra vez, pero los pies siguen ajenos, ni siquiera desobedientes, sordos. Pies sordos. A Elena le encantaria gritarles, pies muevanse de una vez por todas, hasta carajo les gritaria, muevanse de una vez por todas, carajo, pero sabe que seria en vano, porque sus pies no escucharian tampoco su voz. Por eso no grita, espera. Repite palabras. Calles, reyes, otra vez calles. Incluye palabras nuevas en su rezo: dopamina, levodopa. Intuye que la dopa de dopamina, y la dopa de levodopa, deben ser la misma cosa, pero solo intuye, no tiene certeza, repite, juega, deja que su lengua se trabe, espera, y no le importa, solo le importa que el tiempo pase, que esa pastilla se disuelva, circule por su cuerpo hasta sus pies y estos se enteren, por fin, de que tienen que ponerse en marcha. Esta nerviosa, lo cual no es bueno, porque cuando se pone nerviosa la medicacion tarda mas en actuar. Pero no puede evitarlo. Hoy va a jugarse la ultima carta para tratar de averiguar quien mato a su hija, hablar con la unica persona del mundo a la que cree que puede convencer de que la ayude. A cambio de una deuda lejana en el tiempo, casi olvidada. Va intentar cobrar esa deuda, aunque Rita, si estuviera, no estaria de acuerdo, la vida no es un trueque, mama, hay cosas que se hacen porque si, porque Dios manda. No va a ser facil, pero lo va a intentar. Isabel se llama la mujer a la que busca. No esta segura de si se acordara de ella. Cree que no. De Rita si, le manda una postal cada fin de ano. Tal vez no sepa de su muerte. Si nadie le dijo, si no leyo el unico aviso funebre que pusieron recien dos dias despues del entierro en nombre del colegio parroquial donde trabajaba Rita, el cuerpo directivo y docente, alumnos y padres acompanan a Elena en este momento tan dificil, si ella no la encuentra al fin de ese dia, seguramente este diciembre esa mujer que Elena hoy busca enviara una postal dirigida a un muerto, deseandole feliz Navidad y un prospero Ano Nuevo. De Rita se acuerda, pero de ella, de Elena, Elena piensa, seguramente no. Y si se acordara no la reconoceria, asi doblada, con ese cuerpo viejo que no se corresponde con los anos que tiene. Sera su tarea, le va a explicar quien es y por que esta alli, frente a ella, cuando la enfrente. Le va a contar de Rita. Y de su muerte. Aunque sea le dira lo poco que entiende en medio de todo lo que le contaron. Elena sabe donde encontrar a Isabel, pero no como llegar. Alli donde ella misma la llevo hace veinte anos, siguiendo a Rita. Si la suerte esta de su lado, si Isabel no se mudo, si no murio como murio su hija, alli la encontrara, en una vieja casa en Belgrano, con puerta de madera pesada y herrajes de bronce, justo al lado de unos consultorios medicos. No se acuerda del nombre de la calle, si se acordara al menos de la pregunta que le hizo entonces su hija, ?vos escuchaste alguna vez una calle que se llame Soldado de la Independencia, mama?, entonces sabria. Pronto va a saber, porque si se acuerda de que es a una o dos cuadras de la avenida que corre bordeando Buenos Aires desde Retiro hasta la General Paz, cerca de una plazoleta, y de las vias de un tren. No vieron el tren, pero escucharon su marcha y Rita pregunto, ?que ramal es?, pero Isabel no contesto, porque lloraba. Para saber como volver a viajar, esta segunda vez, casi veinte anos despues, Elena fue a la remiseria de la esquina de su casa, la que pusieron hace unos anos en el local donde antes habia estado la panaderia en la que Elena compro para su familia el pan de cada dia desde que llego al barrio, recien casada, hasta que desaparecio el pan y aparecieron los autos de alquiler. El chofer no sabia, soy nuevo, se disculpo y le pregunto al dueno. Repitio las palabras de Elena, dijo, la avenida que bordea Buenos Aires, de Retiro a la General Paz, cerca de una via, y el dueno le contesto, Libertador, y Elena que si, que se llamaba Libertador, ahora que se lo dice se acuerda, y que tenia que ir hasta Belgrano, hasta una plazoleta. Olleros, dijo otro chofer que acababa de llegar de un viaje, eso ya no estoy segura, dijo Elena, Olleros, repitio el hombre con seguridad, pero ella no se acordaba del nombre de la calle, si de la puerta de madera, y de los herrajes de bronce, de Isabel, y de su marido, poco de su marido. ?La llevamos?, le preguntaron y Elena dijo que no, que era mucho viaje, mucho gasto, que iba a ir en tren y en todo caso, si ya no podia consigo misma y su cuerpo no se animaba al subte, tomaria un taxi en Constitucion, le hacemos precio, propuso el dueno, no, gracias, contesto ella, le podemos fiar, insistio, en tren, dijo Elena, no me gustan las deudas, y no dio lugar a otra insistencia, subte cerca no la deja ninguno, senora, el de Carranza, pero de ahi tiene como diez cuadras, le dijeron, si toma taxi tenga cuidado de que no la paseen, digale al taxista que vaya derecho por 9 de Julio hasta Libertador y de ahi otra vez todo derecho hasta Olleros, bueno, no, corrigio el chofer que sabia, porque Libertador se convierte en Figueroa Alcorta, antes de llegar al Planetario se va a tener que fijar que doble a la izquierda, hasta el Monumento a los Espanoles, y que retorne Libertador, o en el Hipodromo de Palermo, aclaro el dueno, pero no deje que la paseen, ?en serio no quiere que la llevemos? Elena se fue sin responder, porque la misma pregunta ya la habia contestado antes y demasiado esfuerzo era para ella todo como para contestar dos veces lo mismo. Constitucion, 9 de Julio, Libertador, Figueroa Alcorta, Planetario, Monumento a los Espanoles, Libertador, Olleros, una puerta de madera, herrajes de bronce, una puerta, Olleros, Libertador, 9 de Julio, Constitucion. De atras para adelante, de adelante para atras. No recuerda en que lugar del rezo tiene que meter el Hipodromo. Espera, piensa, cuenta otra vez las calles. Las cinco que la separan de la estacion y las otras, las que no conoce, o no se acuerda, aquellas hacia donde va para cobrar una deuda en la que cree a fuerza de necesidad. Rey sin corona. Ella. Desde su posicion, sentada, trata de levantar el pie derecho en el aire, y el pie ahora se da por enterado y se eleva. Entonces esta lista, sabe. Apoya la palma de cada una de sus manos sobre sus muslos sentados, junta los dos pies para que sus piernas queden en un angulo de noventa grados a la altura de la rodilla, luego cruza la mano derecha al hombro izquierdo y la mano izquierda al hombro derecho, empieza a balancearse en la silla y, con el impulso, se levanta. Asi la hace levantar el doctor Benegas cuando la revisa, y ella sabe que es mas dificil de esa manera pero lo intenta cada vez que puede, practica, porque quiere estar entrenada para la proxima visita. Quiere impresionar al doctor Benegas, mostrarle que puede, a pesar de las cosas que le dijo la ultima vez que la vio, quince dias antes de que Rita apareciera muerta. Parada frente a la silla que acaba de dejar levanta el pie derecho, lo eleva en el aire, apenas unos centimetros, lo mueve hacia adelante hasta que sobrepasa el pie izquierdo lo suficiente como para que ese movimiento signifique un paso, entonces lo baja, y ahora es el turno del pie izquierdo que debe hacer lo mismo, exactamente lo mismo. Elevarse. Avanzar en el aire. Bajar. Elevarse, avanzar en el aire, bajar. De eso se trata. Apenas de eso. De caminar, para llegar a tomar el tren de las diez -
La casa de los amores imposibles de Cristina Lopez Barrio
https://gigalibros.com/la-casa-de-los-amores-imposibles.htmlUna magica novela sobre las trampas del deseo, la tragedia del amor y los lazos indestructibles de la familia.
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Espadas de deseo (Templarios 2) de Kaera Nox
https://gigalibros.com/espadas-de-deseo-templarios-2.htmlEste libro, para mi, ha sido especialmente dificil de escribir. No por la trama (que tambien), sino porque la vida a veces se empena en ponerte la zancadilla una y otra vez. Lo cierto es que Espadas de Deseo deberia haber visto la luz hace mucho, mas de un ano, de hecho. Pero, como suele decirse: <
>. Se que no ha sido un ano facil para casi nadie, la COVID-19 se ha encargado de hacernos ver que nunca se puede dar nada por supuesto. Pero para mi ha sido la gota. Mi ano ya se habia torcido mucho antes. Esperaba que despues de un ultimo trimestre del 2019 nefasto, el 2020 me trajera algo mejor. Se me olvidaba que las cosas siempre pueden ir a peor. Perder a mi padre de una forma tan inesperada por culpa del maldito virus sin poder acompanarlo ni despedirnos de el ha sido duro, mucho. Pero el me enseno que la vida sigue, aunque duela, y que hay que seguir luchando. ?Por que os cuento todo esto? Por dos razones. La primera, porque quiero pediros disculpas por la espera. Se que sois muchos los que esperabais con ganas esta segunda entrega de templarios y lamento que se haya alargado tanto. De verdad. La segunda es daros las gracias. Por seguir ahi, por vuestra comprension, por el apoyo y por no dejar de leerme. GRACIAS, de corazon, porque sin vosotros probablemente me habria resultado aun mas dificil sentarme a escribir para terminar esta historia. Y sin mas, os dejo con ellos. Con mis templarios. Esos a los que llevais tanto esperando. Espero que disfruteis de la historia de Jacques y Eva tanto como de la anterior y hare lo posible porque la espera para el siguiente no sea demasiado larga. Deseo Oculto Jacques bajo de un salto del helicoptero. Podia sentir la sangre palpitando en sus venas al ritmo de las aspas. El estres y la emocion de la lucha aun bullian en su interior como si no hubiera dejado todavia el campo de batalla. Y todo por su culpa. Podia llamarlo cabreo o quizas fuera preocupacion, pero la imagen de Dalman, con una herida en su costado de la que manaba sangre a borbotones, rechazando su ayuda y desapareciendo del lugar acompanado de Barthelemy no le ayudaba precisamente a calmarse. Aquello ya habia ido demasiado lejos. --Bajad al salon, curare vuestras heridas por orden de gravedad --gruno sin mirar a ninguno de sus companeros. Engullo la distancia que lo separaba de la puerta de acceso a la mansion en rapidas zancadas, mientras en su cabeza iba construyendose el enorme rapapolvo que planeaba soltarle al joven. El era su superior, el segundo al mando y, como tal, sus ordenes debian ser obedecidas. Vale que quizas la relacion que mantenia con Dalman no era la mas... ?que? ?Cordial?, ?sana? Bufo ante sus propios pensamientos mientras bajaba las escaleras metalicas que le llevarian al tercer piso de la mansion. Ni siquiera sabia que era el para Dalman. Probablemente no le consideraba un amigo, de hecho, estaba seguro de eso. Despues de todo, el se habia encargado de mantener las distancias entre ambos. Rechazo cada contacto, cada intento de aproximacion, cada instante de cercania con el joven y ahora, todas esas decisiones habian vuelto para morderle el trasero. Era cierto que durante el viaje la mayoria de sus heridas habian comenzado a sanar a un ritmo bastante rapido y suponia que con la de Dalman habria pasado lo mismo, pero estaba sangrando tanto... !Joder! El recuerdo de cada una de las veces que habia intentado ayudarle cuando estaba herido volvio a su mente. Aquello no era nuevo. Tal vez ahora curasen mas rapido y fueran mas fuertes y resistentes, pero, ahora que lo pensaba, ni siquiera cuando fue herido en batalla luchando contra los infieles permitio que nadie le atendiera. Ese pensamiento le calmo durante dos segundos completos, hasta que recordo que un par de dias atras habia necesitado ayuda y no habia acudido a el. Su hermano de armas, su superior. Prefirio ir en busca de Aby, una mujer, alguien a quien acababa de conocer, antes que a el. !Que era medico, joder! --!Te he dicho que te sientes y te estes quieto de una puta vez! El exabrupto que llego a sus oidos en cuanto puso un pie en el salon lo saco de golpe de sus pensamientos. Chloe manoteaba sobre el pecho de Bart intentando retirarle la camiseta, mientras el templario se resistia como podia. --!Que me quites las manos de encima, bruja! !No permitire que uses ninguno de tus hechizos sobre mi! --?Hechizos? !Pero seras alcornoque! --Chloe bufo audiblemente y clavo el dedo indice en el pecho de Bart--. Te lo voy a repetir una vez mas, capullo: Soy medico y necesito ver la herida de tu pecho para valorarla y saber si necesita puntos. Te aseguro que si no fuera por eso no te tocaria ni con un palo, pedazo de gilipollas. La ultima afirmacion debio aturdir un poco a Bart, porque la chica empujo una vez mas y el templario cayo sentado en el sofa a su espalda. --Ahora, quitate la camiseta de una puta vez. --?Que esta pasando aqui? --La voz de Philippe hizo que tanto Chloe como Bart se giraran hacia ellos arruinando su diversion. --!Jacques! !Bien! Dile a esta loca que me quite las manos de encima. No necesito que nadie me revise ninguna herida. --Vamos, hermano, no me diras que no eres capaz de librarte de una pequena mujer tu solo. --Philippe no pudo evitar bromear al ver el rostro enfadado de su hermano mayor. --No dano a mujeres --respondio sin apartar la vista de la chica frente a el--, por mucho que lo esten pidiendo a gritos. --!Solo intento ayudarte, maldito capullo! Asi que soy lo bastante buena para salvarle la vida a Dalman, pero no para curarte un aranazo a ti, ?no? --Chloe fulminaba a Bart con la mirada. Sus ojos destilaban furia. Hacia menos de una hora que habia tenido que curar una herida mortal del pecho de Dalman con un botiquin basico y el muy capullo seguia sin fiarse de ella. Mantuvo los brazos cruzados en su pecho y su pie golpeo repetidamente contra el suelo de marmol del salon--. !Eres un jodido cabron! ?Salvarle la vida a Dalman? ?Su vida habia corrido peligro? Jacques decidio que necesitaba algunas explicaciones. Urgentemente. --Explicate. --Clavo sus ojos en los de la rubia con un rictus serio--. ?Que le has hecho a Dalman? --?Que que le he...? !Salvarle la vida! ?Te parece poco? --Chloe se obligo a respirar hondo y calmarse. Aquellos hombres eran imposibles--. Aqui el capullo mayor del reino --explico senalando a Bart que la miraba atonito-- y Dalman aparecieron en el museo. El listo este empezo a insultarme que, si fuera vosotros, en mi opinion profesional, lo enviaria a un curso de control de la ira o a uno de "Como no ser un capullo en tres pasos". Aunque no se si con tres pasos tendra suficiente... --Me encanta esta chica --dijo Rodrigo entre risas ganandose la mirada furiosa de Philippe y Bart--. ?Que? Verla poner a Bart en su sitio es lo mas divertido que he visto en semanas. --Al grano, Chloe, por favor. ?Dalman? --pregunto Jacques intentando mantener la calma, mientras apretaba los punos y se recordaba a si mismo que a Guillaume no le gustaria que danase a la mejor amiga de Aby. --Si dejais de interrumpirme... --Si, la chica estaba tentando su suerte--. Como iba diciendo, este me distrajo y cuando me di cuenta, Dalman estaba a punto de desmayarse. Tenia una herida muy fea en el costado derecho, debajo del pecho. Insisti en llamar a una ambulancia, pero aqui los dos zoquetes se negaron a ello. Asi que le atendi con el botiquin que guardo en el despacho. Limpie la herida, era profunda, pero no parecia haber afectado a ningun organo interno, asi que la cosi y le puse un vendaje. Volvi a insistir en que fueran a un hospital. Tengo la carrera de medicina, pero no rayos x en los ojos --anadio mirando de nuevo a Bart con furia--. El caso es que Dalman parecio estabilizarse, no tiene fiebre y sus constantes son buenas, asi que lo dejamos durmiendo en su habitacion. --?Eres medico? --Jacques la miro incredulo--. Pense que trabajabas con Aby. --Tambien tengo la carrera de Historia --repuso con un encogimiento de hombros--. Y ahora... ?alguien va a decirme de que guerra habeis salido? Por la cantidad de sangre que estais dejando en el suelo cualquiera diria que os habeis peleado con una manada de osos salvajes. Jacques siguio la mirada de Chloe, que recorria uno a uno a sus ensangrentados companeros, y se percato de que ya era hora de ponerse en marcha. Pero antes... --Quiero un informe completo del estado de Dalman, puedes echarme una mano mientras me lo das --exigio al tiempo que ayudaba a Prax a sentarse. --Vaya, no se si darte las gracias por darme permiso o mandarte a la mierda --repuso la chica entre dientes antes de acercarse al sofa en el que estaban dejando al herido. El brazo derecho de Prax colgaba peligrosamente de su hombro. Habia recibido un buen tajo que a punto estuvo de amputarle el miembro y, aunque durante el viaje empezo a curarse, su aspecto aun era preocupante. --Deberiamos llevarlo a un hospital --insistio Chloe mientras ayudaba a Jacques a retirar trozos de tela y limpiar la zona. --Nada de hospitales --gruno Prax. --Ya lo has oido --anadio Jacques--. Ayuda o apartate, tu decides. --Hombres --bufo resignada antes de empezar a preparar lo necesario para volver a unirle el brazo. Si se pensaban que iban a conseguir amilanarla iban listos. Su padre era el rey de los hombres prepotentes, mandones y egocentricos y no habia podido con ella. El hombre que consiguiera hacer que Chloe Favre diera un paso atras aun no habia nacido. La adrenalina comenzaba a abandonar su cuerpo dando paso al cansancio. La mayoria de las heridas ya estaban curadas. Chloe se habia encargado de ellas una vez que Prax estuvo lo bastante estable como para que Jacques pudiera hacerse cargo solo. Bart habia continuado negandose a permitir que la chica le atendiera, insistiendo en que podia esperar a que el terminara. Al menos hasta que Rodrigo, con una sonrisa picara, se bajo los pantalones dejando a la vista una herida cerca de su ingle y se ofrecio voluntario para recibir las atenciones de la < >. Sus palabras. El grunido de Barthelemy resono en el salon y mas de uno, incluido Jacques, tuvo que esforzarse en reprimir la carcajada. Rodrigo ni siquiera intento disimularla y dejo que Martha, el ama de llaves, se encargara de su herida sin parar de reirse mientras Chloe, por fin, atendia la que Bart tenia en su pecho. Eran como ninos. Y cuanto los habia echado de menos sin siquiera saberlo. Acababa de terminar de coser un tajo bastante feo en el otro brazo de Prax, cuando las puertas que daban al jardin se abrieron de golpe. Un hombre de aspecto femenino cruzo a traves de ellas y corrio hacia Rodrigo, que acababa de volver de ducharse, lanzandose a sus brazos. El templario lo miro sorprendido y solto la toalla con la que se estaba secando el pelo, justo a tiempo para agarrar al chico cuando este salto en el aire y envolvio las piernas alrededor de sus caderas. --!Hola, amor! ?Me echabas de menos? --exclamo con voz chillona, mientras se aferraba a su cuerpo con brazos y piernas. --?Que haces aqui, Ben? --Rodrigo intento deshacerse del apretado agarre del chico sin mucho exito--. Pense que te habia dejado claro que no queria volver a verte. --!Oh, vamos, amor! !Se que no hablabas en serio! El chico ataco la boca de Rodrigo ignorando los intentos de este de alejarlo de su cuerpo y, en aquel momento, viendo como su companero era devorado con pasion por los labios de otro hombre, los pensamientos de Jacques vagaron hacia Dalman. ?Como se sentiria su boca? ?A que sabrian sus besos? No era un mojigato. Estaban en el siglo XXI. Las relaciones entre personas del mismo sexo ya no eran un tabu. Nunca debieron serlo. ?Cual era el problema? Tal vez el hecho de que nunca, jamas, en sus mas de setecientos anos de vida se habia sentido atraido por otro hombre. Salvo por el. Dalman. ?Y que mas daba? Habian pasado mas de siete siglos y aquel muchacho seguia hechizandolo del mismo modo que lo hacia cuando se conocieron. Le atraia irremediablemente, como un canto de sirena. Entonces tenia sentido que mantuvieran las distancias. Eran otros tiempos, otra epoca, su vida estaba dedicada a la fe. Tenian voto de pobreza, obediencia y castidad y, por si eso no fuera suficiente, la sodomia era causa de excomunion. Habia nacido para ser templario. Le educaron y criaron para ello. Su unico objetivo en la vida, la razon de su existencia, el destino hacia el que se encaminaron cada uno de sus pasos desde su nacimiento. Era todo lo que tenia, todo lo que conocia, todo lo que alguna vez habia querido. Hasta que llego Dalman. Pero en los siglos en los que habia estado vagando, sin memoria, sin recuerdos, olvido todo lo que se suponia que debio ser y, con la mente abierta y una eternidad por delante, descubrio, conocio, aprendio y vivio lo suficiente como para ser capaz de poner las cosas en perspectiva. Entonces... ?por que habia seguido apartandolo cuando se volvieron a encontrar? La respuesta era tan simple como patetica. Miedo. Uno que no iba a permitir que siguiera interponiendose. Como un automata, abandono la habitacion y subio las escaleras. Ni siquiera habia podido ir a verlo desde que habian llegado. Tuvo que resistir sus ganas de saber en que estado se encontraba y conformarse con recibir un informe detallado por parte de Chloe. Fue una sorpresa descubrir que tenia conocimientos medicos y tambien un alivio que hubiera estado alli para encargarse de Dalman. Aunque, una vez mas, algo parecido a los celos o, tal vez, a una envidia malsana, asomo a su mente. De nuevo, habia preferido ser atendido por una mujer extrana, una desconocida, antes de permitir que fuera Jacques quien pusiera sus manos sobre el. Llamo a la puerta sin obtener respuesta. La preocupacion por si su estado habia empeorado se mezclo con la rabia que bullia en su interior por sentirse rechazado; ambas hicieron que entrara en la habitacion y el sonido del agua lo llevo hasta el bano. Nada lo habia preparado para lo que encontro alli. -
La cuna de los dioses, Thomas Quinn Miller de Thomas Quinn Miller
https://gigalibros.com/la-cuna-de-los-dioses-thomas-quinn-miller.htmlEn el mundo de Allwyn, los seres humanos estan casi extintos.
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Hasta que puedas quererte solo de Pablo Ramos
https://gigalibros.com/hasta-que-puedas-quererte-solo.htmlEn noviembre de 1997, bajo el agobio de un domingo caluroso, llegue por primera vez a un grupo de Narcoticos Anonimos. Mi mujer de entonces me acompano casi de la mano hasta la parroquia La Consolata, en La Paternal, y se volvio enseguida para cuidar a nuestro hijo, que habia quedado durmiendo en el departamento, a dos cuadras de alli. Me dio un beso y me deseo buena suerte. Yo me quede en la recepcion, sin entrar del todo al pasillo lateral que conducia a los salones donde se juntaban distintos grupos. No habia ningun cartel y por nada del mundo me habria animado a preguntar. ?Que preguntar: "?Aca reciben drogadictos?"? Ni loco, pense, antes me muero. Para distraerme me puse a mirar la cartelera de actividades de la parroquia, no queria volver temprano a casa y decepcionar nuevamente a mi mujer. Ella estaba contenta, habia averiguado todo y le habian dicho que los grupos de Narcoticos Anonimos eran el mejor lugar para dejar la cocaina. Yo la consumia junto con whisky desde los dieciocho anos, y ya para ese entonces tenia treinta y uno. Estaba cansado, el consumo me habia arrastrado por todos los lugares habidos y por haber, desde hospitales hasta la carcel. Mas de una vez habia estado a punto de perder la vida. Habia perdido trabajos, amigos, matrimonios... Ya casi nadie confiaba en mi y mucho menos me tomaba en serio. Leia los dias de catecismo, las misas a pedido, los horarios de secretaria, y me olvidaba, como me pasa siempre, de que era lo que habia ido a hacer a ese lugar. Recuerdo esa sensacion, ese vacio particular, ese estar a la deriva. De golpe una persona, un hombre de algo mas de cincuenta anos, tostado de lampara, con unas cadenas y unas pulseras enormes de oro enchapado, salio de uno de los salones y al verme se me vino al humo. Me saludo y me pregunto si venia para los grupos. --?Que grupos? --le conteste. --Los de catecismo no, flaco --me dijo el hombre, y largo una carcajada que retumbo en el cuarto de hospital que era y sigue siendo el anexo de esa parroquia. Me rei tambien. El tipo me paso el brazo por los hombros, me condujo a la reunion y me presento como "el recien llegado". No recuerdo su nombre, no recuerdo su voz, ni si era alto, se me hace que si, o si era gordo o flaco. Solo el bronceado y el oro falsos, el tono de las palabras que dijo para compartir su experiencia conmigo en el ritual comun de bienvenida que se les da a todos los que llegan a esa confraternidad por primera vez. Entre y me quede. Junte casi un ano limpio antes de mi primera recaida. Junte casi seis meses limpios antes de la segunda. Y despues necesite de una internacion para poder parar. Junte ocho meses y dieciseis dias en esa internacion, y desde entonces es que no puedo juntar mas de seis o siete semanas sin volver a consumir, sobre todo alcohol. Pero muchas veces volvi a los grupos y cada vez fui recibido sin juicio, con un calmo silencio al contar el dolor absurdo de tropezar siempre con la misma piedra. Los companeros me recordaron que yo me debia respeto, y cuando, avergonzado, contaba mis recaidas, las palabras eran casi siempre las mismas. Que estamos enfermos. Que nos descuidamos un poco y estamos otra vez en el horno. Que esto es solo un dia a la vez. Asi me alentaban a empezar de nuevo. Casi siempre un adicto, un alcoholico, sabe exactamente por que vuelve a consumir. Hasta se podria decir que, en silencio, su mente lo planea y va concediendo terreno a una idea que en principio es un germen, algo pequeno y a priori inofensivo, pero que esta destinado a crecer como una planta, una planta carnivora. Es una idea simple, instalada en la tierra fertil de una mente obsesiva, la mente de un adicto: "Esta vez va a ser distinto". Y la idea crece, logica y coherente. Porque es logico y coherente pensar asi, ya que si otro puede, ?por que no voy a poder yo? Y entonces la planta despliega sus tallos y nace una ilusion: "Todo esta bajo control". Y ese control ilusorio, o esa ilusion de control, despliega tambien sus tallos y sus hojas y se expande hacia todos los aspectos de nuestra vida con una energia ingobernable y letal. Mas o menos rapido segun las personas, segun las circunstancias, pero igual de feroz al final del trayecto: todos los adictos sabemos como empezamos, ninguno de nosotros sabe como ni cuando va a terminar. De esas personas va a hablar este libro, de personas que, como yo, luchan dia a dia para seguir adelante. De los que amanecen agradeciendo sencillamente por el hecho de estar limpios, abstinentes, porque no consumir por veinticuatro horas significa veinticuatro horas de milagros ininterrumpidos. Un adicto que no consume es un numero contra todos los pronosticos, algo fuera de lo normal, una balsa que se mantiene a flote pese a que todo propicia el hundimiento. De aquellas personas y de otras que la enfermedad devasto o que sencillamente quedaron en el camino. De muchos que son mi vida o que pasaron por ella, que supieron mirarme cuando nadie lo hacia. Se me ocurre que algunos de estos retratos, de estas cronicas, podrian tener algun valor para un lector en especial: el lector que se identifique de alguna manera con este sufrimiento. Escribir es, entre otras cosas, civilizar el dolor. Y yo, que alguna vez me senti un deficiente moral, un ser perverso que sufria y hacia sufrir a los demas, un dia escuche con alivio la palabra "enfermedad". Que tenia una enfermedad es lo que escuche; y que la enfermedad podia tratarse, y que el consumo compulsivo podia parar. Jamas habia pensado, hasta ese dia, que la palabra "enfermedad" podia hacerme suspirar de alivio. Y escuche, durante horas y en silencio, a esos companeros que hablaban de tres, cuatro, cinco, diez, quince anos sin drogas ni alcohol. ?Anos sin drogas ni alcohol? La vida sin drogas ni alcohol es imposible, aburrida, sin sentido, mejor morir, mejor seguir igual, mejor sufrir que disfrutar de la vida sin drogas ni alcohol. ?Como es eso? ?Mejor sufrir que disfrutar de la vida sin drogas ni alcohol? Asi de grande es el problema, asi de sutil la locura, asi de oscura la condicion del alma, asi de incurable la enfermedad que doblega al adicto.
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Cuando nadie me ve de Noe Casado
https://gigalibros.com/cuando-nadie-me-ve.html?Cuantas peliculas habeis visto en las que la protagonista es una chica modesta con mala suerte en los asuntos del corazon? ?Y en cuantas ella tiene un amigo gay que siempre la ayuda? ?En cuantas le rompen el corazon hasta que aparece el hombre ideal? ?No estais cansadas de los mismos argumentos?
Pues bien, yo soy una de esas chicas modestas que no tienen suerte con los hombres.
Tampoco busco demasiado, y como vivo en una ciudad pequena, la oferta es mas bien limitada. Me llevo algun que otro berrinche amoroso, aunque intento no amargarme. La desilusion me dura veinticuatro horas como mucho, porque para quitarme las penas ya tengo a Tito, mi companero de piso, un treintanero canon, divertido y heterosexual por los cuatro costados con el que, ademas, de vez en cuando mantengo alguna que otra charla trascendental. A Tito lo quiero a rabiar, y todos piensan que somos la pareja perfecta; no lo niego. Sin embargo, no solo no somos pareja, sino que hay mas… mucho mas… Si quieres conocer todos los detalles, no puedes perderte esta comedia erotico-romantica llena de entresijos, errores, tension sexual y erotismo -
El espiritu de mis padres sigue subiendo en la lluvia de Patricio Pron
https://gigalibros.com/el-espiritu-de-mis-padres-sigue-subiendo-en-la-lluvia.htmlUna novela sobre la responsabilidad de padres y abuelos en los hechos tragicos de la historia reciente. Una historia universal que afecta a todos aquellos que han vivido y muerto por defender una idea.
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Suspiros en tiempos de antano de Delyi Gianni Amore
https://gigalibros.com/suspiros-en-tiempos-de-antano.htmlEn la vieja Espana arraigada a infructuosas normas morales y decencias banales,
surge con impetu un triangulo amoroso, la lucha por conseguir a su unico amor es despiadada
a la vez que erorita y povorosa.
La hija de un importante terrateniente se enamora apasionadamente de un humilde trabajador,
cuando decide desnudar sus sentimientos descubre que su primo hermano esta enamorado de la misma
persona, situacion que su familia no puede consentir. Amor separado cuya llama arde deseosa e inquebrantable
en el tiempo, esperando al efimero hilo del destino para volver a unirse y destruir uno de los vertices de dicho triangulo.
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Como restos de marea de Alvaro Abanda
https://gigalibros.com/como-restos-de-marea.htmlEspana, Mexico y Guatemala, son los escenarios de este relato de amor, erotismo y lucha entre dos mujeres que, desafiando las rigidas normas imperantes en la epoca, viviran su pasion tras veinte anos de ausencia, despues de un primer encuentro casual en plena posguerra espanola y siendo ninas de muy distinta clase social; la una, hija de un ministro del dictador Franco, la otra, de un idealista republicano perdedor en la contienda civil.
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Cuentos de hadas de Angela Carter de Angela Carter
https://gigalibros.com/cuentos-de-hadas-de-angela-carter.htmlHubo un tiempo no muy lejano en que los cuentos de hadas no estaban destinados a los ninos. Los relatos incluidos en este mitico volumen, recogidos por Angela Carter para la editorial Virago, donde durante anos han sido uno de sus longsellers, tampoco son para ninos. En ellos encontramos sangre, humor, sexo y muerte. No hay princesas nonas ni hadas maravillosas, sino jovenes astutas, ancianas taimadas, chicas malas, hechiceras, parteras vengativas, mozas ladronas, novias rastreras, madres, hijas y hermanas raras. Solo una escritora tan radical como Angela Carter podria haber sido capaz de recopilar esta antologia de relatos, todos protagonizados por mujeres, una celebracion del universo femenino a traves de los tiempos, ilustrado con los grabados originales de la edicion inglesa. Por fin en castellano la mitica coleccion de cuentos maravillosos que Angela Carter recopilo para Virago Press y que se convirtio en un autentico longseller.
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Los Wadlow II: ?Atraccion, amor… o gratitud? de Marisa Maverick
https://gigalibros.com/los-wadlow-ii-atraccion-amor-8230-o-gratitud.htmlSegunda entrega de la Saga Los Wadlow. En la primera, “?Azar, destino… o premeditacion?” conocimos la historia de Adam y Kathy, con final cerrado dicho libro. Aqui sabremos que ha sido de la vida de Johan, hermano de Adam, historia tambien con final cerrado. SINOPSIS Traicionado y manipulado. Insultado y despreciado en su hombria. Johan Wadlow, educado en los principios de amor a la familia, respeto a la ley y fidelidad a la pareja, vio que todo ello era despiadadamente pisoteado. Sus suenos fueron arrollados por una avaricia sin fin. El amor que entrego, azotado por el latigo de la oculta lujuria de ella. Y su personalidad, simplemente, anulada por un espejismo. Con el corazon sangrando, ?es posible superar tanta humillacion y digerir que solo has sido un titere en las codiciosas manos de la persona que amabas? Tal vez no acerto en sus decisiones... Quizas cuando quiso dar un paso al frente ya era tarde, paralizado por el temor a las consecuencias. Por todo ello, hoy es un hombre destruido que sobrevive con la esperanza puesta en un futuro mas amable. Sin embargo, un acto de total generosidad convulsionara su vida y le traera... ?Satisfacer una mera atraccion? ?Un amor... sincero? ?O gratitud como moneda de pago?… Que los hados le sean propicios y escuchen su anhelo lanzado al viento: Ven a mi... Norbert, su padre, tal vez tenga la respuesta al citar: <
> Conoce el pasado de Johan en Los Wadlow I ?Azar, destino... o premeditacion?, y descubre los hechos que hicieron que su corazon dejara de sentir.
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Pasion sublime (Sombras 2) de Kristel Ralston
https://gigalibros.com/pasion-sublime-sombras-2.htmlUniversidad de Yale. New Haven, Connecticut, Estados Unidos. Anos atras. --Solo unas copas mas, y nos largamos --dijo Dereck a su grupo de amigos y companeros de clase, mientras trataba a duras penas de mantenerse en pie. No recordaba cuantas botellas de cerveza habia bebido esa noche. Estaban celebrando el Ano Nuevo en el piso que pertenecia a la hermandad para mujeres Alpha Phi. Desde el dia en que recibio la carta de aceptacion de la Universidad de Yale, su cuadriculado y sencillo mundo cambio por completo. Paso de ser un adolescente que preferia aleccionar a su hermano mayor por insolencias y rebeldias, a un muchacho que disfrutaba la adrenalina de crear caos o pretender que tenia la capacidad de salir ileso de cualquier situacion. Dereck era habil con las palabras, y su exito en clases lo demostraba, pero su cerebro tenia tambien gran habilidad numerica. Sin embargo, fue su ego, en esos anos de estudio para ser abogado, que lo llevo a creer que poseia la destreza infalible de adquirir deudas de juego demasiado elevadas, y poder pagarlas sin mayores complicaciones. Gran error, porque ahora estaba buscando la forma de solucionar el embrollo en el que se habia metido. Para iniciarse en las mesas de Poker clandestinas, puesto que su billetera era ajustada, el hizo un prestamo bastante cuantioso. Sus ganancias durante las primeras rondas fueron impresionantes, y luego lo empezaron a ser tambien sus perdidas. El autocontrol volo por los aires, porque lo que habia enganchado a Dereck a las mesas de juego eran la euforia y la emocion de ganar. Esa satisfaccion que se volvia mortalmente seductora cuando se llevaba una buena racha. Ahora, el tenia que pagar casi ochenta mil dolares para sacarse de encima a los prestamistas o iba a terminar molido a golpes, mas pronto que tarde, en algun sitio de la ciudad. El dinero prestado, y tambien el ganado, habia sido repartido entre paseos con sus amigotes de Yale, fiestas, bebidas y un automovil. Si tenia dinero, ?por que no disfrutarlo un poco? El mayor de los Toussaint, Ryder, estaba tratando de resolver su propia vida incursionando en Wall Street, y Dereck jamas iria a contarle sus problemas. No tenia complejo de hermano menor en apuros. --Oye, Toussaint, no seas aguafiestas --replico Justin Nader, el mejor amigo y compinche de juergas--. Por cierto, ?cuando piensas acercarte a la hija de el Senador? Estas perdiendo el tiempo mirandola a la distancia. La musica estaba sonando, y las conversaciones en voz alta parecian el unico modo de hacerse escuchar. Si habia alcohol y buen ambiente, pues nadie se quejaba del alboroto o de los usuales adornos que caian al piso haciendose trizas o las constantes idas y venidas de parejas (no necesariamente monogamas) que subian al primer piso para aprovechar las habitaciones de la residencia Alpha Phi. --No es una conversacion banal --contesto, mientras apoyaba el hombro contra el marco de la puerta. Se llevo la botella de cerveza a la boca y la termino en pocos tragos. Miro alrededor para cerciorarse de que nadie hubiera escuchado la pregunta del imprudente de Justin--, y sera mejor que se lo recuerdes a tu bocaza, porque tengo mucho en juego. --Se que hay mucho sobre la mesa, si --replico Justin, consciente de que habia sido el, el artifice para que Dereck conociera las partidas de Poker ilegal en la ciudad. --Ademas, como bien dices, ya se en donde esta ella. Apenas termine esta cerveza, me acercare para hacerle conversacion. Mi proxima movida sera encontrarmela "de casualidad" en el edificio de la facultad y de ahi surgira algo. --Tienes solo un par de semanas para pagar ese dinero --dijo Justin en tono quedo. Con su cabello rubisimo y ojos celestes tenia un parecido al actor Devon Sawa en sus epocas juveniles. Solia ser el que propiciaba las juergas en la facultad. --No necesitas repetir lo obvio --replico Dereck con fastidio. El Senador era el apodo del hombre que estaba detras de la operacion de prestamos y cobranzas en los sitios que se organizaban las partidas de Poker, no solo para estudiantes, sino para el que le diese la gana de entrar a la mesa, y tuviera reputacion de no hacer trampas. Su hija, Tanya, iba dos anos detras de Dereck en la carrera, y este ultimo necesitaba ganar la voluntad de la muchacha para acceder a una reunion privada con el Senador y solicitar un plazo para el pago de la deuda. Dereck llevaba algunos dias tratando de hallar la forma de aproximarse a Tanya sin parecer subitamente interesado, y no era en vano que estuviera en esa fiesta de la hermandad Alpha Phi. ?Sabria la chica, lo que hacia su padre para ganarse la vida? Aquello era un misterio para Dereck. --Vaya, vaya, tus planes van a mejorar o cambiar, porque la chica que te interesa parece haber decidido ejercer sus tareas de anfitriona y viene hacia aqui --replico Justin de forma subita. --Supongo que el universo conspira a mi favor --dijo Dereck con una mueca. --Creo que la hemos pasado mejor aqui, que si hubiesemos ido a la fiesta de los idiotas de nuestra fraternidad --dijo Justin dandole una palmada en el hombro. --A ver que tal nos va --farfullo Dereck. No era la situacion ideal, porque no le gustaba utilizar a otras personas, pero en esta ocasion parecia ser la unica salida para negociar su deuda sin intermediarios. No se podia llegar a el Senador sin sus esbirros como mediadores, lo que implicaba que un par de matones se encargaran de dar una paliza al deudor. Dereck no tenia interes en perder clases, y llevar varias semanas cabestrillos o muletas. La informacion de que el Senador tenia una hija en la facultad de leyes de Yale, la encontro Justin. Su mejor amigo era un genio informatico y podia conseguir datos encriptados de la dark web sin problema. A juicio de Dereck era lo minimo que podia hacer, despues de haber sido el culpable de llevarlo a las mesas de juego. Dereck, con sus resplandecientes ojos azul claro y el espeso cabello negro, era el equivalente a un joven veinteanero con apostura, seguridad innata y sentido aventurero. Despues de su duro inicio en la vida, lo que menos le apetecia era regresar a ese estado de carencias. Estaba dispuesto a todo con tal de salir de ese embrollo. --Esta es la primera ocasion que te veo en la casa Alpha Phi --comento la suave voz de Tanya, mirando a Dereck, y refiriendose a la preciosa propiedad en la que residian las chicas de la hermandad--. Lo digo, porque soy la encargada de llevar la lista de invitados. No sabia que eras amigo de mis companeras. El se rio, y cruzo los brazos, haciendo que sus musculos resaltaran sobre la camisa azul marino. Todas las chaquetas estaban guardadas en el ropero, y el interior estaba perfectamente adecuado con la calefaccion. La madrugada tenia como componente principal una fuerte nevada. El frio exterior garantizaba que la fiesta iba a extenderse hasta las primeras horas de la madrugada, pues nadie queria salir en plena oscuridad a tratar de encender automoviles o pagar un taxi. --?Feliz Ano Nuevo? Creo que es una frase propia de este dia --replico con una media sonrisa. Viendola mas de cerca Tanya no la clase de mujer que deslumbraba, pero si provocaba ganas de pasar un buen rato a su lado. Llevaba un vestido rojo ajustado a unas curvas modestas, y el cabello negro azabache le caia en cascadas por la espalda. --Oh, es cierto --replico ella--, !feliz ano nuevo! --Se acerco y le dio un abrazo--. Como lo he hecho todo del reves, pues ahora toca presentarme --extendio la mano pequena y de unas pintadas de rosado--, soy Tanya Hatty. --Dereck Toussaint --dijo el estrechandole la mano con firmeza--, y creo que te he visto en la facultad de leyes. Ella asintio. --Si, quiza por eso te me hacias algo conocido --replico--. ?Te dieron un tour por la casa? --pregunto en tono de flirteo. Aquella era una invitacion abierta a que la acompanara a su habitacion, y pretendia dejarlo muy claro. --No sabia que era una de las posibilidades --contesto el de buen humor. --He notado que me has estado observando esta noche, asi que decidi cortar el tema visual y acercarme. Despues de todo soy una de las anfitrionas de la fiesta. Dereck esbozo una sonrisa cinica. --Jamas me atreveria a contradecir a una dama --dijo haciendole un guino --, en especial una tan guapa. Tanya se rio. Su tono era suave, pero su risa, chillona. A Dereck le fastidio, pero sabia que ella era un medio para un fin que, a diferencia de otros casos, podia salvarle el pellejo. Ya habia aprendido su leccion, y si lograba salir de este embrollo financiero no volveria a pisar una jodida sala de Poker, legal o no. --Entonces, ?vamos a hacer ese tour por la propiedad? --pregunto ella. Dereck preferia conquistar a ser conquistado, y no tenia que ver con los consabidos tintes machistas, sino porque era su naturaleza. No en vano intentar ganar casos legales era su mayor interes. Le gustaba encontrar las causas, recoger testimonios, investigar, defender, conquistar y ganar. Estaba en sus venas. Que Tanya se sintiera atraido por el y hubiera tomado la iniciativa, le haria el camino mas facil cuando le planteara la posibilidad de una reunion con el Senador, y cuyo nombre legal era Charlie Hatty. Imaginaba que la muchacha creia la fachada de Charlie ante la sociedad, en la que se presentaba como un agente deportivo. --Te hago una contrapropuesta --le dijo en tono encantador--. ?Que te parece si mejor, en la tarde cuando estemos repuestos de la fiesta, te invito un cafe? Le parecia una pesima estrategia acostarse con ella, y luego perderla de vista. Queria acercarse a Tanya hasta ganarse su confianza, y despues conseguir su objetivo. --Ah, me gusta la idea --sonrio con coqueteria. --Eso no implica que deje de interesarme conocer tu habitacion mas adelante, y quiza en un escenario menos congestionado --replico Dereck, porque no queria que ella pensara que estaba rechazandola. Herir el ego de una mujer que tomaba la iniciativa era un suicidio estrategico, y el no tenia espacio para equivocaciones. --Quiza --replico Tanya. --Dame tu numero telefonico. --Ella asintio y asi lo hizo--. Ya me marcho. --?A las dos de la madrugada y en plena fiesta? --pregunto ella. --Aunque hace un frio de mierda afuera, prefiero irme ahora con mis amigos, porque tenemos el automovil disponible, y uno de nosotros, que no soy yo, no esta pasado de tragos. -- Se inclino hasta dejar su boca cerca de la oreja de Tanya, y agrego--: Nos vemos manana. Te escribire. --Asi lo espero --murmuro ella. Cuando sintio el temblor que recorrio a la muchacha, Dereck sonrio para sus adentros. Conquistar a una mujer se le daba muy bien, y el siempre se salia con la suya. No recordaba una ocasion en que hubiera recibido un "no" como respuesta. Horas mas tarde, cuando Dereck tenia suficiente cafeina en el cuerpo para revivir, vio a Justin entrar en la sala del apartamento que compartian a pocos minutos del campus. Ambos eran companeros de fraternidad, pero habian optado por vivir fuera de ella. Pertenecian a Alpha Delta Phi. --Tengo una buena y una mala noticia --anuncio Justin. Llevaba en la mano una bolsa de una conocida cafeteria de la ciudad, y de la que era propietario. El y su familia tenian importantes negocios de comida repartidos en la costa este del pais. A veces, Dereck no entendia la tendencia de su mejor amigo de meterse en lios ridiculos. Dereck aparto la mirada del ordenador. Su hermano mayor acababa de enviarle un correo electronico con una propuesta para que se uniera al equipo legal de la compania apenas se graduara en Yale. Le estaba ofreciendo un cargo en el que podia practicar todo lo aprendido y desenvolverse en el ambiente corporativo vinculado al manejo de fondos de inversion. No solo eso, sino que iba de la mano de una paga estupenda. Claro, para graduarse todavia le quedaban algunos meses por delante. --Dime la buena primero --replico Dereck, apoyando la espalda en el respaldo de la silla giratoria, y cruzandose de brazos. Justin se rio, porque sabia que su amigo podia ser cinico, pero intentaba a toda costa de buscar el lado positivo de las desgracias. --He encontrado otra forma de salir del territorio de el Senador, y pagar tu deuda --dijo sacando un cruasan y llevandose medio trozo de una sola vez a la boca. Mastico un poco, y luego agrego--: Aunque requiere una estrategia similar. --?A que te refieres? --Ya que no aceptas que te haga yo un prestamo... --No quiero deberte nada, idiota, conozco que pretenderas que sea tu adepto seguidor en tus chorradas, asi que no --interrumpio Dereck, y Justin se carcajeo. --En todo caso --se encogio de hombros--, yo conozco a un abogado muy importante que necesita alguien a punto de graduarse para hacer practicas en su firma legal. El es amigo de mi familia, y gracias a quien obtuve la carta de recomendacion que me hacia falta para entrar en Yale. Si le refiero tu nombre te va a dar la oportunidad de trabajar en su oficina. --?Y por que no tomas tu esa oportunidad? --pregunto Dereck. --Porque no me interesa el derecho corporativo, sino el derecho penal, ya lo sabes --replico limpiandose la boca con el dorso de la mano. --No se en que me beneficia pedir un trabajo si el total del dinero no me lo van a pagar como si fuese una bonificacion. ?Eres idiota o que te pasa? Justin agarro la cafetera, y se sirvio en una taza un poco de cafe. --Este abogado, Byron Ashford, tiene una debilidad. --Dereck odiaba cuando Justin empezaba con sus frases a medio decir como si fuese un jodido escritor de thrillers--. Se trata de su unica hija. --A veces no se por que te considero mi amigo, Justin, de verdad. ?Que crees que es una ruleta rusa o tienes complejo de guionista barato? Justin se rio y se sento en la silla frente a la de Dereck. --El asunto es que tu ya conoces a la hija del amigo de mi familia, porque curso las primeras materias de leyes con nosotros, pero luego se retiro. Y ese fue un duro golpe para Byron. Nada le gustaria mas que convencerla de regresar a la carrera o al menos que trabaje con el en la firma legal. Dereck estaba empezando a perder la paciencia. --Termina de desarrollar la "buena noticia" --dijo Dereck con tedio. --Bien, bien, a lo que iba. Da la casualidad que la hija de Byron trabaja en Meets & Coffee, mi cafeteria en el centro de la ciudad, y hoy revise los turnos de los camareros, y ella esta en la lista supliendo a una de sus amigas que llamo a excusarse. --?Y? --Si logras convencer a Cassidy Ashford de trabajar en las oficinas de su padre, Byron te abrira las posibilidades que quieras en su compania. Y eso incluye hacer un anticipo salarial. El dinero le sobra, pero su hija es lo mas preciado. Quedara muy agradecido al notar que tu influencia en ella, como amigo, consigue lo que todos estos anos el no ha podido. Los hombres como Byron, dedicados a la familia, tienen un punto debil, y consiste en que su descendencia aprecie el legado que pretenden dejar, mas no evadirlo como Cassidy. --Tengo solo cinco semanas para pagar ochenta mil dolares. ?Como cojones piensas que voy a convencer a una mujer adulta de hacer algo que no le interesa, y por lo que renuncio a toda una jodida carrera en Yale? Esta idea tuya, exactamente como la de Tanya, es igual de estupida. A veces no se por que mierda te escucho. --Ejem --dijo carraspeando--, esa es la buena noticia. Ademas, no tiene que regresar a la carrera de leyes, sino aportar con sus conocimientos en la firma legal. A Byron le dara igual lo que haga con tal de que deje de trabajar en mi cafeteria. --Despidela. Justin se echo a reir. --Cassidy y yo somos amigos, por supuesto, asi que jamas le haria algo asi. --?Por que no la convences tu si sabes que te ganarias la voluntad, por ti mismo y no por influencia de tu familia, con el abogado ese? --Porque no me interesa el derecho corporativo, ?estas sordo, Toussaint? Dereck lo miro con fastidio. Necesitaba encontrar un modo de conseguir ese dinero sin comprometer su lealtad con sus amigos. Muchas amistades se perdian por cuentas mal hechas o faltas de pago. --Iluminame, Justin, ?cual es la mala noticia?
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El pequeno libro de la superacion personal de Josef Ajram
https://gigalibros.com/el-pequeno-libro-de-la-superacion-personal.htmlUna recopilacion de frases, citas y maximas escritas tanto por personas anonimas como grandes pensadores en las que el atleta de pruebas extremas, empresario y coach personal Josef Ajram ha encontrado fuerza y motivacion para conseguir sus retos y objetivos. En cada pagina habra una frase, una ilustracion y una explicacion de Josef.