• libro nadie se muere de esto - Fatima Casaseca

    https://gigalibros.com/nadie-se-muere-de-esto.html

    Dicen que para solucionar cualquier problema el primer paso es reconocer que lo tienes, y la verdad es que, visto asi, parece facil. Como si reconocer algo no fuese mas que un tramite, una diligencia anodina consistente en admitir aquello que ya se sabia pero que, por alguna razon estupida y caprichosa, uno se empena en negar de manera sistematica. Sencillisimo, vaya. Poco menos que un juego de ninos si no se pasase algo por alto. Algo importante, fundamental. Y es que, para reconocer, primero siempre hay que conocer; es decir, percatarse, notar o percibir, pues dificilmente puede admitirse algo que se ignora. Yo misma, por ejemplo, hasta hace poco ignoraba que era una cobarde. Que soy bastante soberbia si que lo intuia, mas que nada porque es casi lo unico que llevan reprochandome en serio mi padre y mis hermanas desde que tengo uso de razon. Pero ?cobarde yo? No lo habria imaginado jamas. Nunca. De hecho, llevo --o llevaba-- toda la vida considerandome osada y transgresora, diferente, mejor incluso, y pavoneandome por ello dia si, dia tambien, con unas infulas que ahora se me antojan de lo mas ridiculas y cuyo recuerdo aun me sonroja, provocandome dolorosas punzadas de verguenza. Un recuerdo no muy lejano, todo sea dicho, porque aunque esta historia comenzo meses atras, su absurdo desenlace se produjo hace apenas unas semanas. Una resolucion que por mucho que mi padre se empene en considerar necesaria y, por eso mismo, acertada, a mi solo me parece triste. Triste, cobarde e indecorosa. Y con el amargo regusto que le queda a una al descubrir que ha estado demasiado tiempo haciendo el gilipollas. Me llamo Elena Garcinuno, por cierto, y voy a cumplir treinta y cuatro anos. El ultimo sabado de enero, hace casi siete meses, llame a mi hermana pequena en estado de shock. Al principio, como viene siendo lo habitual en estos casos, Natalia se cabreo con Alberto. Aunque quizas <> no se ajuste del todo a la sarta de improperios que le dedico, que lo puso de vuelta y media. Es probable que aquel dia no jugase a favor de Alberto el hecho de que mi hermana no le ha tragado nunca y que los ultimos cinco anos, por educacion y porque me quiere, se ha limitado a dejarme caer, como si fuera una observacion objetiva y sin malicia, que es un blandengue y que no entiende que veo en el. Con lo macarra que es Natalia, todo un detalle por su parte. Asi que durante esa conversacion telefonica no desaprovecho la oportunidad y se desquito a gusto; y no se le paso por la cabeza concederle siquiera la presuncion de inocencia. De todas formas, como esto es a toro pasado y estoy intentando ser sincera y despiadada conmigo misma --y valiente, claro--, reconozco que llamando a Natalia sabia perfectamente donde me metia y que eso era justo lo que buscaba. Pero es que la situacion era de todo menos simple y lo que yo tenia esa manana era el orgullo dolorido y un ataque de colera monumental y descontrolado que me urgia canalizar antes de verle. Que estaba llorando a moco tendido, vamos. Mientras aporreaba la pantalla del telefono era consciente de que, si me lo hubiese encontrado dandose un revolcon con otra, o intentandolo, habria sido todo muchisimo mas facil. Sobre todo por lo espontaneo. Conociendome, seguro que le habria abofeteado, escupido e insultado, y que despues me habria escapado a gimotear y a seguir injuriandole en algun bar, alternando amigas y familia. Y copas, eso por supuesto, mogollon de copas. La cuestion --y aqui residia el problema fundamental, mi problema fundamental-- era que no le habia pillado, asi, con las manos en la masa como quien dice, sino un mensaje antiguo en su Facebook que, ademas de parecer una despedida, por lo menos temporal, resultaba bastante ambiguo. Eran apenas tres lineas, tal vez cuatro, y aunque no era sexualmente explicito en su contenido, el hecho de no conseguir ubicar a la remitente --una tal Pilimindrina-- en mi lista mental de legitimas amistades femeninas de Alberto, ni lograr identificarla por su foto de perfil --una figura sin contornos ni facciones, a lo lejos, frente a lo que me parecio el Coliseo romano-- disparo todas mis alarmas. Ella, Pilimindrina --apodo que me la sugeria traviesa e inocente al mismo tiempo, como pilindri o pelandrusquilla, una aleacion irresistible para cualquier ego masculino--, habia escrito, hacia mas o menos un ano, que le habia hecho muy feliz conocerle, que desde aquellos dias pasados juntos en Barcelona no habia podido dejar de pensar en el, en las circunstancias que les impedian mantener una relacion mas estrecha, y que esperaba con ilusion y expectativa que el destino volviera a ponerlo en su camino pronto. Bla, bla, bla. Un zorron en toda regla, conclui, pues si hablaba de circunstancias adversas es que sabia de mi existencia. Y se la sudaba. Lo peor, no obstante, era que Alberto, mi en teoria entregadisimo novio, le habia contestado unos dias despues en un tono similar: <>. Aun a riesgo de parecer una neurotica, confieso haberme aprendido la respuesta de memoria, emoticonos incluidos, pero es que tuve que repasarla varias veces para confirmar que de verdad ponia eso y no otra cosa, tal era mi desconcierto. Que vaya ingenua, se burlaba Natalia, como si no estuviese clarisimo lo que significaba. Menudo cabron, cabronazo, pedazo de cabron, repetia machacona. Peor que eso, decia, una mosquita muerta es lo que es. Y es que Alberto --Albertito, como lo apodo despectiva nada mas conocerle--, el novio ideal, guapo y pijo, la envidia de todas mis amigas, el mas estupendo, detallista y sacrificado, siempre respetando mis tiempos y sin presionarme, nunca me habia dado motivos para sospechar de el.

  • NADIE SE MUERE DE ESTO | FATIMA CASASECA - Casa del ...

    https://www.casadellibro.com/libro-nadie-se-muere-de-esto/9788466333658/3052220

    Sinopsis de NADIE SE MUERE DE ESTO ... La certeza de que su novio le es infiel conduce a Elena a una crisis que le hará replantearse su vida por completo, y ...

  • Nadie se muere de esto Versión Kindle - Amazon.es

    https://www.amazon.es/Nadie-muere-esto-F%C3%A1tima-Casaseca-ebook/dp/B01I24RS78

    Allí empezó a escribir el blog Una mamá española en Alemania por el que se dio a conocer y del que, en 2013, se publicó un libro homónimo con la recopilación de ...

  • Nadie se muere de esto (Best Seller) - Libros - Amazon.es

    https://www.amazon.es/Nadie-muere-esto-BEST-SELLER/dp/8466333657

    Nadie se muere de esto (Best Seller) : Casaseca, Fátima: Amazon.es: Libros.

  • Nadie se muere de esto | Penguin Libros

    https://www.penguinlibros.com/es/literatura-contemporanea/33621-libro-nadie-se-muere-de-esto-9788466333658

    Nadie se muere de esto. Fátima Casaseca · DEBOLSILLO , agosto 2016. La certeza de que su novio le es infiel conduce a Elena a una crisis que le hará ...

  • NADIE SE MUERE DE ESTO - FÁTIMA CASASECA

    https://www.delectoralector.com/nadie-se-muere-de-esto-fatima-casaseca/

    Tengo que decir que me enfrenté a este libro sin ninguna expectativa cosa que últimamente pocas veces pasa ya que siempre hemos leído opiniones previas que nos ...

  • NADIE SE MUERE DE ESTO - FATIMA CASASECA MUÑOZ

    https://www.agapea.com/Fatima-Casaseca-Munoz/Nadie-se-muere-de-esto-9788466333658-i.htm

    Comprar el libro Nadie se muere de esto de Fátima Casaseca Muñoz, Punto de Lectura (9788466333658) con ENVÍO GRATIS desde 18 € en nuestra librería online ...

  • Nadie se muere de esto - Fatima Casaseca -5% en libros - Fnac

    https://www.fnac.es/a1276133/Fatima-Casaseca-Nadie-se-muere-de-esto

    Nadie se muere de esto, libro o eBook de Fatima Casaseca. Editorial: Debolsillo. Los mejores precios en libros y eBooks.

  • Nadie se muere de esto - Anika Entre Libros

    http://www.anikaentrelibros.com/nadie-se-muere-de-esto

    Título Original: (Nadie se muere de esto, 2016) Autor: Fátima Casaseca Editorial: Debolsillo ... La lectura de este libro te hace preguntarte muchas cosas.

  • Reseña "Nadie se muere de esto" - Fátima Casaseca

    https://infoliteraria.com/nadie-se-muere-de-esto/resena

    Empecé a leer esta novela como una lectura corta ya que el libro tiene menos de 200 páginas. No tenía ninguna expectativa sobre si me iba a gustar este tipo ...

  • Nadie se muere de esto (Bolsillo) (Tapa blanda) - El Corte ...

    https://www.elcorteingles.es/libros/A19702340-nadie-se-muere-de-esto-bolsillo-tapa-blanda-9788466333658/

    Nadie se muere de esto (Bolsillo) (Tapa blanda)

  • Ganga bruta; El imperio del crimen, Alfredo De Braganza de Alfredo De Braganza

    https://gigalibros.com/ganga-bruta-el-imperio-del-crimen-alfredo-de-braganza.html

    Abu Salem, el ganster mas despiadado de Bombay durante los anos noventa del siglo XX, y su novia, la actriz de Bollywood Monica Bedi, acaban de ser detenidos en Lisboa.

  • Mil besos tuyos de Tillie Cole

    https://gigalibros.com/mil-besos-tuyos.html

    Poppy es una nina risuena y una prodigiosa violonchelista. Rune es misterioso y amante de la fotografia. Su hitoria juntos comenzo desde que eran muy pequenos, cuando se convirtieron en complices de aventuras, secretos y de un amor inquebrantable. Los anos han pasado y, tras la muerte de su abuela, Poppy tiene la mision de llenar un frasco con mil besos de la persona que haga a su corazon estallar de amor, y sabe que solo con Rune podra iniciar esa gran aventura.

  • Rodo & Mel (mon 8) de Cristo Alcala

    https://gigalibros.com/rodo-038-mel-mon-8.html

    Siempre la gente normal, se pregunta si hay vida despues de la muerte.
    Pero, yo no soy normal.
    No.
    Y por eso, yo me preguntaba.
    ?Si hay vida, despues de la vida?
    ?Dificil, de entender?
    Las entiendo y siento sus miradas raras.
    Pero, facil de explicar, en mi mundo paralelo.
    Si.
    Porque asi, soy yo y aunque ya me conocen, permitan que me presente para las que no.
    Soy el guapo.
    Simpatico.
    El de la sonrisa super encantadora.
    Rodrigo Montero.
    Rodo, para ustedes.
    Y sin olvidar, mejor amigo de mi jefe.
    Si, ese mismo y el que estan pensando.
    El rarito.
    Caprichoso.
    El de las anginas y que se desmaya de la emocion, porque es un blandito.
    Y se porta como crio de cinco casi siempre, si no se hace lo que el dice.
    Mi gran amigo Heronimo Mon.
    Pero, me estoy adelantando a esos hechos.
    Y rebobino a nuestros principios.
    Nuestra Amistad y a donde reitero, esa pregunta con la respuesta.
    ?Si hay vida, despues de la vida?
    Y yo les digo, que si.
    Porque, puede ocurrir en ustedes que hay un despues de su vida, cuando alguien que llega a ella.
    Una que, creian perfecta en su monotonia o no en su dia a dia.
    O tras recibir duros golpes en esta y a lo largo de ella como creer de esta, su enemiga.
    Aparece esa claridad, despejando tu camino.
    Mi caso.
    Comenzando como un dolor de trasero esa claridad.
    Pero, dandome cuenta que dicho dolor.
    Poco manejable, pelo revuelto tipo Bob Esponja y caracter de lo mil demonios.
    Te ensena.
    Que hay mas vida, despues de mi vida.
    Mi Mel.
    Nuestra historia..

  • Coraline de Neil Gaiman

    https://gigalibros.com/coraline.html

    Cuando Coraline atraviesa una de las puertas de la casa nueva de su familia, se encuentra que hay otra casa extranamente similar a la suya (aunque la nueva sea, definitivamente, mejor). Al principio, todo parece maravilloso: la comida es mas sabrosa que la de casa y el cajon de los juguetes esta repleto de angelitos de papel que vuelan solos y de calaveras de dinosaurios que parecen vivas y se arrastran haciendo castanetear los dientes. Pero resulta que hay otra madre que vive ahi, y otro padre, y quieren que Coraline se quede con ellos y se convierta en su pequena. Quieren cambiarla y no dejarla ir jamas. Coraline tendra que enfrentarse a ellos con todo su ingenio y las herramientas que encuentre, si es que ha de conseguir salvarse y volver a su vida normal.

  • Despojos de Rachel Cusk

    https://gigalibros.com/despojos.html

    Mi marido y yo nos separamos recientemente y, en cuestion de unas semanas, la vida que habiamos construido juntos se desarmo, como un puzle convertido en un monton de piezas con los bordes recortados. A veces, la matriz de un puzle no se detecta una vez montado --hay creadores de puzles magistrales que presumen de estas cosas--, pero, en general, se nota. La luz incide en las hendiduras de la superficie y unicamente vista de lejos la imagen parece completa. A mi hija pequena le gusta hacer puzles. A la mayor no: construye casas de carton, recintos en los que todo el mundo tiene que estar callado y quieto. En ambas actividades veo un intento de ejercer el control por distintas vias, pero tambien intuyo que demuestran que hay mas de un modo de ser paciente y que la intolerancia puede adoptar formas muy diversas. Mis hijas se toman quiza demasiado en serio estas diferencias de temperamento. A las dos les fastidia la tendencia contraria de la otra: de hecho, casi diria que dedicarse a actividades diferentes es para ellas una forma de discutir. Al fin y al cabo, discutir no es mas que la necesidad imperiosa de definirse a uno mismo. Y alguna vez me he preguntado si una de las dificultades de la vida familiar moderna, con su alegria continua, su optimismo totalmente infundado, su dependencia no de Dios o de la economia, sino del principio del amor, no reside quiza en la incapacidad de reconocer --y tomar precauciones para protegerse-- la necesidad humana de entrar en guerra. <> era una expresion que oia a todas horas esas primeras semanas: la gente la empleaba para describir mi situacion, como si en cierto modo representara un avance. Pero la verdad es que era una regresion: la vida habia metido la marcha atras. De repente no avanzabamos, sino que retrocediamos, volviamos al caos, a la historia y la prehistoria, a los comienzos de las cosas y al tiempo anterior a que esas cosas comenzaran. Un plato se cae al suelo: la nueva realidad es que esta roto. Tenia que acostumbrarme a la nueva realidad. Mis dos hijas tenian que acostumbrarse a la nueva realidad. Sin embargo, la nueva realidad, hasta donde yo era capaz de ver, sencillamente estaba rota. El plato habia existido y cumplido su funcion durante anos, pero hecho anicos --a menos que fuera posible pegarlo-- no servia de nada en absoluto. Mi marido creia que yo lo habia tratado monstruosamente. No habia quien le quitara esa idea de la cabeza: su mundo entero dependia de ella. Ese era su relato, y de un tiempo a esta parte he llegado a odiar los relatos. Si alguien me preguntara que desgracia me habia ocurrido, es posible que yo preguntara a mi vez si queria conocer el relato o la verdad. Diria, a modo de explicacion, que un importante voto de obediencia se habia roto. Explicaria que, cuando escribo mal una novela, termina colapsando, se viene abajo, se detiene y no se deja seguir escribiendo, y tengo que retroceder y buscar los defectos de su estructura. El problema reside normalmente en la relacion entre el relato y la verdad. El relato tiene que obedecer a la verdad para representarla, lo mismo que la ropa representa el cuerpo. Cuanto mejor sea al corte, mas agradable sera el resultado. Desnuda, la verdad puede ser vulnerable, desgarbada, horrorosa. Demasiado arreglada se Mi marido y yo nos separamos recientemente y, en cuestion de unas semanas, la vida que habiamos construido juntos se desarmo, como un puzle convertido en un monton de piezas con los A veces, la matriz de un puzle no se detecta una vez montado --hay creadores de puzles magistrales que presumen de estas cosas--, pero, en general, se nota. La luz incide en las hendiduras de la superficie y unicamente vista de lejos la imagen parece completa. A mi hija pequena le gusta hacer puzles. A la mayor no: construye casas de carton, recintos en los que todo el mundo tiene que estar callado y quieto. En ambas actividades veo un intento de ejercer el control por distintas vias, pero tambien intuyo que demuestran que hay mas de un modo de ser paciente y que la intolerancia puede adoptar formas muy diversas. Mis hijas se toman quiza demasiado en serio estas diferencias de temperamento. A las dos les fastidia la tendencia contraria de la otra: de hecho, casi diria que dedicarse a actividades diferentes es para ellas una forma de discutir. Al fin y al cabo, discutir no es mas que la necesidad imperiosa de definirse a uno mismo. Y alguna vez me he preguntado si una de las dificultades de la vida familiar moderna, con su alegria continua, su optimismo totalmente infundado, su dependencia no de Dios o de la economia, sino del principio del amor, no reside quiza en la incapacidad de reconocer --y tomar <> era una expresion que oia a todas horas esas primeras semanas: la gente la empleaba para describir mi situacion, como si en cierto modo representara un avance. Pero la verdad es que era una regresion: la vida habia metido la marcha atras. De repente no avanzabamos, sino que retrocediamos, volviamos al caos, a la historia y la prehistoria, a los comienzos de las cosas y al tiempo anterior a que esas cosas comenzaran. Un plato se cae al suelo: la nueva realidad es que esta roto. Tenia que acostumbrarme a la nueva realidad. Mis dos hijas tenian que acostumbrarse a la nueva realidad. Sin embargo, la nueva realidad, hasta donde yo era capaz de ver, sencillamente estaba rota. El plato habia existido y cumplido su funcion durante anos, pero hecho anicos --a menos que fuera posible pegarlo-- no servia de nada en Mi marido creia que yo lo habia tratado monstruosamente. No habia quien le quitara esa idea de la cabeza: su mundo entero dependia de ella. Ese era su relato, y de un tiempo a esta parte he llegado a odiar los relatos. Si alguien me preguntara que desgracia me habia ocurrido, es posible que yo preguntara a mi vez si queria conocer el relato o la verdad. Diria, a modo de explicacion, que un importante voto de obediencia se habia roto. Explicaria que, cuando escribo mal una novela, termina colapsando, se viene abajo, se detiene y no se deja seguir escribiendo, y tengo que retroceder y buscar los defectos de su estructura. El problema reside normalmente en la relacion entre el relato y la verdad. El relato tiene que obedecer a la verdad para representarla, lo mismo que la ropa representa el cuerpo. Cuanto mejor sea al corte, mas agradable sera el resultado. Desnuda, la verdad puede ser vulnerable, desgarbada, horrorosa. Demasiado arreglada se convierte en una mentira. Para mi, la dificultad de la vida ha consistido generalmente en el intento de reconciliar estas dos cosas, como los hijos de una pareja divorciada intentan reconciliar a sus padres. Mis hijas hacen eso: obligan a mi marido a que me coja de la mano cuando estamos juntos. Intentan que el relato vuelva a ser verdad, o que la verdad sea mentira. Yo no tengo ningun inconveniente en darle la mano, pero a el no le gusta. No son formas, y la forma es importante en los relatos. Todo lo que en nuestra vida comun era amorfo ahora me pertenece. Por eso no me altera, no me molesta darle la mano. Al cabo de un tiempo la vida dejo de ir hacia atras. Aun asi, habiamos retrocedido un buen trecho. En esas pocas semanas deshicimos todo lo que habia conducido al momento de la separacion; deshicimos el propio relato. Ya no quedaba nada por desmantelar, aparte de las ninas, y eso requeriria la intervencion de la ciencia. Pero estabamos en un tiempo anterior a la ciencia: habiamos vuelto mas o menos a la Gran Bretana del siglo vii, antes de que se hubiera constituido la nacion. Inglaterra era en aquella epoca un pais de compartimentos: recuerdo que, en el colegio, cuando miraba un mapa de la Heptarquia en la Alta Edad Media, me desconcertaba su falta de claridad y de poder centralizado, de un rey, una capital y una institucion. En vez de eso, solamente habia regiones --Mercia, Wessex--con nombres de resonancias femeninas, sumidas en incesantes batallas que se saldaban con pequenas y arduas perdidas y ganancias desprovistas de una fuerza motriz unificadora que, si me hubiera parado a pensarlo, podria haber identificado como masculina. Nuestra profesora de historia, la senora Lewis, era una mujer de envergadura y gracia, una especie de elefante-bailarina en quien los principios del volumen y la feminidad libraban una guerra sin cuartel. La Alta Edad Media era su especialidad: habia estudiado en Oxford y ahora daba clases en un mediocre colegio catolico para ninas, embutida en trajes de color beige hechos a medida --con zapatos de tacon a juego-- de los que daba la sensacion de que su imponente forma rosa podia surgir cualquier dia por sorpresa, como emerge una estatua de una sabana polvorienta. La otra cosa que sabiamos de ella, por su apellido, es que estaba casada. Pero no teniamos la menor idea de como relacionar estos dos aspectos diferentes de la senora Lewis. Daba mucha importancia a Offa de Mercia, en cuya vision de una Inglaterra unificada se detectaba la primera ofensiva de ambicion masculina, y cuya obra de ingenieria monumental, la muralla de Offa, nos sigue recordando que la division tambien es un aspecto de la unificacion, que un modo de definir lo que somos consiste en definir lo que no somos. Y lo cierto es que los historiadores nunca se han puesto de acuerdo en si la muralla se construyo para defenderse de los galeses o solo para delimitar la frontera. La senora Lewis tenia una actitud ambivalente sobre el poder de Offa: ese era el camino de la civilizacion, sin duda, pero a costa de una perdida de diversidad, del florecimiento sosegado que sigue su curso cuando las cosas no se construyen artificialmente y los objetivos no se fuerzan. A la senora Lewis le entusiasmaba el mundo primitivo de los sajones, donde los conceptos del poder aun no se habian reformulado; y, en cierto modo, la Edad Oscura era una version de <>, eran los trozos rotos del plato mas grande de todos los tiempos: el Imperio Romano. Unos lo llamaban oscuridad, los despojos de esa unidad megalomana dispuesta a conquistarlo todo, pero la senora Lewis, no. A ella le gustaba, le gustaban las ruinas abandonadas, le gustaban los monasterios donde se cultiva en silencio la creatividad, le gustaban los misticos y los visionarios, los primeros textos religiosos, le gustaban las mujeres que iban ganando importancia a lo largo de esos siglos amorfos y embrionarios, le convierte en una mentira. Para mi, la dificultad de la vida ha consistido generalmente en el intento de reconciliar estas dos cosas, como los hijos de una pareja divorciada intentan reconciliar a sus padres. Mis hijas hacen eso: obligan a mi marido a que me coja de la mano cuando estamos juntos. Intentan que el relato vuelva a ser verdad, o que la verdad sea mentira. Yo no tengo ningun inconveniente en darle la mano, pero a el no le gusta. No son formas, y la forma es importante en los relatos. Todo lo que en nuestra vida comun era amorfo ahora me pertenece. Por eso no me Al cabo de un tiempo la vida dejo de ir hacia atras. Aun asi, habiamos retrocedido un buen trecho. En esas pocas semanas deshicimos todo lo que habia conducido al momento de la separacion; deshicimos el propio relato. Ya no quedaba nada por desmantelar, aparte de las ninas, y eso requeriria la intervencion de la ciencia. Pero estabamos en un tiempo anterior a la ciencia: habiamos vuelto mas o menos a la Gran Bretana del siglo vii, antes de que se hubiera constituido la nacion. Inglaterra era en aquella epoca un pais de compartimentos: recuerdo que, en el colegio, cuando miraba un mapa de la Heptarquia en la Alta Edad Media, me desconcertaba su falta de claridad y de poder centralizado, de un rey, una capital y una institucion. En vez de eso, solamente habia regiones --Mercia, Wessex--con nombres de resonancias femeninas, sumidas en incesantes batallas que se saldaban con pequenas y arduas perdidas y ganancias desprovistas de una fuerza motriz unificadora que, si me hubiera parado a pensarlo, podria haber identificado como Nuestra profesora de historia, la senora Lewis, era una mujer de envergadura y gracia, una especie de elefante-bailarina en quien los principios del volumen y la feminidad libraban una guerra sin cuartel. La Alta Edad Media era su especialidad: habia estudiado en Oxford y ahora daba clases en un mediocre colegio catolico para ninas, embutida en trajes de color beige hechos a medida --con zapatos de tacon a juego-- de los que daba la sensacion de que su imponente forma rosa podia surgir cualquier dia por sorpresa, como emerge una estatua de una sabana polvorienta. La otra cosa que sabiamos de ella, por su apellido, es que estaba casada. Pero no teniamos la menor idea de como relacionar estos dos aspectos diferentes de la senora Lewis. Daba mucha importancia a Offa de Mercia, en cuya vision de una Inglaterra unificada se detectaba la primera ofensiva de ambicion masculina, y cuya obra de ingenieria monumental, la muralla de Offa, nos sigue recordando que la division tambien es un aspecto de la unificacion, que un modo de definir lo que somos consiste en definir lo que no somos. Y lo cierto es que los historiadores nunca se han puesto de acuerdo en si la muralla se construyo para defenderse de los galeses o solo para delimitar la frontera. La senora Lewis tenia una actitud ambivalente sobre el poder de Offa: ese era el camino de la civilizacion, sin duda, pero a costa de una perdida de diversidad, del florecimiento sosegado que sigue su curso cuando las cosas no se construyen artificialmente y los objetivos no se fuerzan. A la senora Lewis le entusiasmaba el mundo primitivo de los sajones, donde los conceptos del poder aun no se habian reformulado; y, en cierto modo, la Edad Oscura era una version de <>, eran los trozos rotos del plato mas grande de todos los tiempos: el Imperio Romano. Unos lo llamaban oscuridad, los despojos de esa unidad megalomana dispuesta a conquistarlo todo, pero la senora Lewis, no. A ella le gustaba, le gustaban las ruinas abandonadas, le gustaban los monasterios donde se cultiva en silencio la creatividad, le gustaban los misticos y los visionarios, los primeros textos religiosos, le gustaban las mujeres que iban ganando importancia a lo largo de esos siglos amorfos y embrionarios, le gustaban los cimientos --lo personal-- sobre los que ahora teniamos que dirimir las cuestiones de justicia y de creencias, a falta de esa gran civilizacion administradora. La cuestion era que esa oscuridad --llamenla como quieran--, esa oscuridad y esa desorganizacion no eran simple negacion o ausencia. Eran al mismo tiempo rastrojo y preludio. Los rastrojos son los tallos de la mies que quedan en la tierra despues de la siega, despojos sobre los que se siembra la nueva cosecha despues de la recoleccion. La civilizacion, el orden, el significado, las creencias no eran cumbres soleadas que pudieran conquistarse con una escalada constante. Se construian y caian, se reconstruian y volvian a caer, o se destruian. La oscuridad y la desorganizacion posteriores tenian su propia existencia, su propia integridad; estaban indisolublemente ligadas a la civilizacion, como lo esta el sueno a la actividad. En la vida compartimentada reside la posibilidad de unidad, lo mismo que la unidad lleva implicita la posibilidad de atomizacion. En opinion de la senora Lewis, mejor vivir una vida compartimentada y desorganizada, mejor sentir la oscura agitacion de la creatividad, que instalarse en una unidad civilizada y atormentada por el impulso de destruccion. Por la manana llevo a mis hijas al colegio y por la tarde vuelvo a recogerlas. Ordeno sus habitaciones, lavo la ropa y cocino. Pasamos la tarde casi siempre solas: las ayudo a hacer los deberes, les doy la cena y las acuesto. Cada pocos dias se van con su padre, y entonces la casa se queda vacia. Al principio me costaba sobrellevar esos intervalos. Ahora me parece ver en ellos cierta neutralidad, algo firme aunque vacio, algo ligeramente acusador a pesar de la vacuidad. Es como si estas horas solitarias, en las que por primera vez en muchos anos no se espera ni se necesita nada de mi, fueran mi botin de guerra, lo que he recibido a cambio de todo este conflicto. Las vivo una a una. Me las trago como la comida de los hospitales. Asi es como subsisto. Y tu te llamas feminista, me decia mi marido, con rabia, en las semanas de amargura brutal que siguieron a nuestra separacion. Creia que era el quien habia desempenado el papel de la mujer en nuestro matrimonio, y al parecer esperaba que yo lo defendiera de mi misma, del macho opresor. Creia que hacer la compra, cocinar y recoger a las ninas en el colegio eran tareas femeninas. Yo, en cambio, cuando mas asexuada me sentia era cuando hacia esas cosas. A mi mi madre no me parecia un modelo por su forma de cumplir con sus obligaciones maternales: al contrario, me parecia que esas tareas amenazaban su feminidad en lugar de subrayarla. Por aquel entonces viviamos en un pueblo de las llanuras de Suffolk; mi madre pasaba mucho tiempo hablando por telefono. Me hipnotizaba su tono de voz, como si hablara consigo misma. Sus frases me sonaban preparadas, su risa, ligeramente artificial. Sospechaba que impostaba la voz, como una actriz. ?Quien era la mujer que hablaba por telefono? Mi madre era alguien a quien yo solo conocia de puertas adentro; compartia su punto de vista, me parecia vivir envuelta en su aburrimiento, su placer o su irritacion. Vivia dentro de su personaje, perdida. ?Como podia saber quien era mi madre? ?Como podia verla? Su atencion era como la mirada de un ojo interior que nunca se fijaba en mi directamente, que extraia su conocimiento de mi intimo conocimiento de mi misma. Solo cuando la veia relacionandose con otras personas era capaz de mirarla objetivamente. A veces, mi madre invitaba a una amiga a comer y entonces, de pronto, ahi estaba la cara mi madre. De repente podia verla, podia compararla con su amiga y encontrarla mejor o peor, podia ver si la gustaban los cimientos --lo personal-- sobre los que ahora teniamos que dirimir las cuestiones de La cuestion era que esa oscuridad --llamenla como quieran--, esa oscuridad y esa desorganizacion no eran simple negacion o ausencia. Eran al mismo tiempo rastrojo y preludio. Los rastrojos son los tallos de la mies que quedan en la tierra despues de la siega, despojos sobre los que se siembra la nueva cosecha despues de la recoleccion. La civilizacion, el orden, el significado, las creencias no eran cumbres soleadas que pudieran conquistarse con una escalada constante. Se construian y caian, se reconstruian y volvian a caer, o se destruian. La oscuridad y la desorganizacion posteriores tenian su propia existencia, su propia integridad; estaban indisolublemente ligadas a la civilizacion, como lo esta el sueno a la actividad. En la vida compartimentada reside la posibilidad de unidad, lo mismo que la unidad lleva implicita la posibilidad de atomizacion. En opinion de la senora Lewis, mejor vivir una vida compartimentada y desorganizada, mejor sentir la oscura agitacion de la creatividad, que instalarse en una unidad Por la manana llevo a mis hijas al colegio y por la tarde vuelvo a recogerlas. Ordeno sus habitaciones, lavo la ropa y cocino. Pasamos la tarde casi siempre solas: las ayudo a hacer los deberes, les doy la cena y las acuesto. Cada pocos dias se van con su padre, y entonces la casa se queda vacia. Al principio me costaba sobrellevar esos intervalos. Ahora me parece ver en ellos cierta neutralidad, algo firme aunque vacio, algo ligeramente acusador a pesar de la vacuidad. Es como si estas horas solitarias, en las que por primera vez en muchos anos no se espera ni se necesita nada de mi, fueran mi botin de guerra, lo que he recibido a cambio de todo este conflicto. Y tu te llamas feminista, me decia mi marido, con rabia, en las semanas de amargura brutal que siguieron a nuestra separacion. Creia que era el quien habia desempenado el papel de la mujer en nuestro matrimonio, y al parecer esperaba que yo lo defendiera de mi misma, del macho opresor. Creia que hacer la compra, cocinar y recoger a las ninas en el colegio eran tareas femeninas. Yo, en cambio, cuando mas asexuada me sentia era cuando hacia esas cosas. A mi mi madre no me parecia un modelo por su forma de cumplir con sus obligaciones maternales: al contrario, me parecia que esas tareas amenazaban su feminidad en lugar de subrayarla. Por aquel entonces viviamos en un pueblo de las llanuras de Suffolk; mi madre pasaba mucho tiempo hablando por telefono. Me hipnotizaba su tono de voz, como si hablara consigo misma. Sus frases me sonaban preparadas, su risa, ligeramente artificial. Sospechaba que impostaba la voz, como una actriz. ?Quien era la mujer que hablaba por telefono? Mi madre era alguien a quien yo solo conocia de puertas adentro; compartia su punto de vista, me parecia vivir envuelta en su aburrimiento, su placer o su irritacion. Vivia dentro de su personaje, perdida. ?Como podia saber quien era mi madre? ?Como podia verla? Su atencion era como la mirada de un ojo interior que nunca se fijaba en mi directamente, que extraia su conocimiento de mi intimo conocimiento de mi Solo cuando la veia relacionandose con otras personas era capaz de mirarla objetivamente. A veces, mi madre invitaba a una amiga a comer y entonces, de pronto, ahi estaba la cara mi madre. De repente podia verla, podia compararla con su amiga y encontrarla mejor o peor, podia ver si la aceptaban, la envidiaban o la provocaban, saber cuales eran sus costumbres personales y su humor, distintos de los de su amiga. En esos momentos, su personaje, mi morada, me resultaba inaccesible; estaba oscuro, como una casa vacia. Si llamaba a esa puerta, me despachaban secamente, a veces de malos modos. Parecia como si alguien hubiera empaquetado y se hubiera llevado ese cuerpo, normalmente tan amplio, tan naturalmente ubicuo. Y, entonces, mi madre tambien se quedaba fuera, aislada, liberada temporalmente de la obligacion de ser quien era. En vez de eso, actuaba; era pura ficcion, bien o mal contada. Sus amigas, en general, tambien eran madres, mujeres con una geografia reconocible para mi: la sensacion de enigma oculto debajo de las mascaras del maquillaje y la conversacion, como el campo abierto que se extiende alrededor de una ciudad. Era imposible entrar en esos campos, aunque sabias que estaban ahi. Mi madre tenia una amiga, Sally, que no era como las demas. Entonces yo no entendia por que, pero ahora lo entiendo: Sally no tenia hijos. Era una mujer grande e ingeniosa, aunque tenia una cara triste. Se podia pasear por la tristeza de esa boca y esos ojos: estaba abierta a todo el mundo. Sally vino un dia que mi madre habia hecho un bizcocho de chocolate y quiso darle la receta. Sally dijo: <>. Yo no sabia que una mujer pudiera comerse un bizcocho entero. Me parecia una proeza, como el levantamiento de peso. Pero vi que a mi madre no le habia gustado la respuesta. Por alguna razon incomprensible, Sally habia estropeado el juego. Sin darse cuenta, habia abierto una grieta en la muralla de la feminidad y me habia dejado ver lo que habia al otro lado. De determinados acontecimientos de la vida no es posible tener un conocimiento previo: de la guerra, por ejemplo. El soldado que va a la guerra por primera vez no sabe como va a responder al enfrentarse con un enemigo armado. No conoce esa parte de si mismo. ?Es un asesino o un cobarde? Cuando llegue la hora respondera, pero no sabe de antemano cual sera su respuesta. Mi marido dijo que queria la mitad de todo, incluidas las ninas. Dije que no. ?Que quieres decir con eso?, pregunto. Esto fue por telefono. Yo estaba mirando el jardin por la ventana, un rectangulo entre otros rectangulos urbanos, con gatos merodeando por los limites. Nuestro jardin estaba abandonado ultimamente. Las malas hierbas ahogaban los arriates. El cesped habia crecido mucho, como el pelo. Pero, por mas que creciera el desorden, la cuadricula nunca se alteraria: los demas rectangulos conservarian su forma de todos modos. No puedes dividir a las personas por la mitad, dije. Tienen que pasar la mitad del tiempo conmigo, contesto. Son mis hijas, insisti. Son mias.

  • Al final mueren los dos de Adam Silvera

    https://gigalibros.com/al-final-mueren-los-dos.html

    ?Puede un solo dia albergar toda una vida?

  • De Vuelta Al Inicio de Dani Capdevila

    https://gigalibros.com/de-vuelta-al-inicio.html

    Pese a que ya habia estado buscando alguna vez por el despacho del papa, tal y como le ordenaron, Hugo aun no habia sido capaz de hallar ningun indicio de ese plan del que le hablaban sus superiores. La puerta se abrio. --?Ya esta todo dispuesto? --pregunto el papa. --Si, su santidad. Todo listo. --Entonces ha llegado el momento. Me puede gustar mas o menos, pero no queda otra alternativa. Al escuchar aquellas palabras, el cuerpo de Hugo se estremecio. Un hormigueo le subio por la columna vertebral. <>, pensaba mientras tragaba saliva para contestar. --Si usted lo estima preciso, seguro que es el deseo de Nuestro Senor. --Asi es, hijo mio. Asi es. --?Quiere cambiarse? --No hay tiempo --contesto el papa--. Lo hare en el aeropuerto. A traves de las amplias vidrieras de su despacho, contemplaba la plaza de San Pedro. Siempre le invadia la tristeza cuando, caida la noche, la veia vacia. El bullicio de la muchedumbre que habitualmente se formaba en ese lugar le reconfortaba. Le hacia sentir que su mision en la tierra tenia sentido, que todas las almas que se apinaban alli esperaban que la cumpliera. Acababa de celebrar una de las nuevas misas que habia instaurado. Quince feligreses eran elegidos al azar entre los millones de solicitudes que llegaban a traves de la pagina web del Vaticano. Los agraciados asistian a una misa privada celebrada por el mismo. Hugo le ayudo a ponerse el abrigo, que cubria por completo la sotana papal. Cogio un paraguas negro --pues amenazaba tormenta--, las llaves de un coche y espero. --Cuando usted quiera --dijo tras ver que el papa no se movia. Dando un profundo suspiro, el pontifice se acerco a la libreria donde tenia una de las colecciones mas valiosas del mundo y tiro de los Evangelios de Enrique el Leon hacia el. Detras de la gran mesa de roble negro, la pared giro para descubrir un pasillo oscuro en el que no se veia el final. --Vamos. Empezaron a caminar. Hugo acciono una palanca que habia justo en la entrada y la pared volvio a recuperar su posicion inicial. Unos focos halogenos se encendian y apagaban a su paso, iluminando el pasillo unicamente por el trecho que recorrian. Cada vez que entraba en ese pasadizo temia que fuera la ultima. Llevaba ya bastante tiempo trabajando como secretario papal y ya lo habia utilizado mas de veinte veces. Don Santiago le coloco en ese puesto tras convencer al nuevo papa de que era el candidato perfecto. Caminaron unos diez minutos hasta que se toparon con el muro de salida. A la derecha otra palanca y en el centro un pequeno agujero que hacia las veces de mirilla. Hugo observo a traves de ella. --Podemos continuar. No se ve a nadie. El pasaje llevaba al bano de discapacitados de un restaurante que estaba a unas cinco manzanas del palacio. --Nunca me ha terminado de parecer correcto que el representante de Dios en la tierra tenga que salir de su casa a hurtadillas. Creo que nunca me acostumbrare. --Es por su seguridad. --Lo se, hijo mio. Lo se. Hugo acciono la palanca y la pared giro. El santo padre encajo un sombrero negro en su cabeza pelada y se abrocho todos los botones del abrigo para que no se viera la sotana. Los dos salieron del servicio con la mayor naturalidad del mundo, como si lo hicieran todos los dias. Con un movimiento leve de cabeza, el secretario saludo al camarero que estaba en la barra del bar y este le correspondio con el mismo gesto. Siempre se preguntaba que favores recibiria el dueno del restaurante a cambio de no haber desvelado esa puerta oculta a nadie. Se marcharon por la puerta trasera, que les llevo a una calle llena de cubos de basura, donde iban a parar los desperdicios del restaurante. Al fondo, un Hummer negro con las lunas tintadas. El agua caia muy intensamente. Llevaba lloviendo un par de dias, pero ahora diluviaba con mucha fuerza. Los relampagos iluminaban el callejon. Hugo saco el mando del bolsillo y apunto al coche. Desplego su paraguas para que el papa no se mojara y abrio la puerta trasera del vehiculo con gesto servil, pero el santo padre le cedio el paso. Cogio el mando y el paraguas. Hugo lo miro con cara de extraneza y levanto los hombros en senal de aceptacion. Los ojos negros y profundos del papa lo observaban fijamente. Con un movimiento de sus pobladas cejas le indico que subiera al coche. Obedecio. <>, se dijo. Llegaron al aeropuerto de Roma-Fiumicino y aparcaron dentro del garaje privado, situado en las mismas pistas de aterrizaje. --No bajes del coche, tengo algo que contarte. Se sento junto al secretario en la parte de atras. <>. El papa comenzo a hacerle preguntas sobre religion y sobre Dios. Hasta que senalo al fondo del garaje. --Entonces, hijo mio, estas listo. ?Ves la caja que esta al lado de la mesa, alli al fondo? --Si. <>. Se giro para mirarla y de repente empezo a notar una presion en el cuello. Se estaba quedando sin oxigeno. Trato de liberarse. Noto un cordel, pero no lograba quitarselo. Cuanta mas fuerza hacia para soltarse mas presion notaba en la garganta. Desesperado, decidio hacerse el muerto. No tenia nada que perder, ni ninguna otra alternativa. Tomo el aire que pudo y poco a poco fue dejando caer su cuerpo, como si ya no tuviera vida. El papa siguio tirando del cordel pero cada vez con menos fuerza. Hugo no respiraba. Contaba con, al menos, un minuto de oxigeno en sus pulmones. <>. Tenia que quedarse totalmente quieto para intentar que el santo padre no se diera cuenta del engano. Era la unica forma de salvar su vida. Paso medio minuto y Hugo no se movia, se habia desplomado sobre el asiento. Noto como su agresor bajaba del coche, pero por precaucion siguio sin moverse. La puerta se volvio a abrir y sintio que le tapaba con una manta y lo empujaba para que cayera a la zona de los pies. Escucho la puerta del aparcamiento cerrarse de golpe. El papa, ahora vestido con unos vaqueros y una sudadera con capucha, subio a su avion, que le esperaba cerca. Con esa ropa tenia un aspecto aun mas juvenil del que aparentaba. Los cuarenta y dos anos que acababa de cumplir lo convertian en uno de los papas mas jovenes de la historia. Dentro del coche, el secretario dejo pasar un tiempo prudencial antes de volver a moverse. <>. Poco a poco fue incorporandose para asomar por la ventana. Estaba todo a oscuras. Tras volver a pensarlo se animo a bajar del coche. Saco el movil del bolsillo mientras pensaba en cuanta prisa debia de tener el papa. Ni siquiera le habia tomado el pulso para confirmar su muerte. Hizo una llamada. --?Don Santiago? --Si, dime. --Tenian razon. Ha intentado matarme. --Te lo dijimos. ?Donde estas? --En su garaje privado del aeropuerto. --Vale. Envio ahora mismo a alguien para que te saque de alli. Ten en cuenta que habra muchas camaras grabando, asi que intenta ser todo lo discreto que puedas. --No creo que tenga ningun problema --decia mientras abria la bolsa que habia en el maletero del coche--. Tengo su sotana y su sombrero. Creo que pasare por el perfectamente. --Mejor. --Por cierto, ?sabe donde estaba guardada la famosa caja que recibio el mes pasado desde Kufstein? --!No me lo puedo creer! --Si, voy a ver que es lo que hay dentro. Se acerco a la caja de carton y rompio el embalaje. --!Informa! --Efectivamente, no se lo va a creer. Le mando una foto al telefono para que lo vea usted mismo. Al recibirla, don Santiago abrio los ojos como si estuviera viendo un fantasma. Se trataba de una cruz de madera de tamano natural y estaba casi seguro de que era la misma que robaron del Museo Egipcio de El Cairo hacia un par de meses. Decian que esa era la cruz donde murio Cristo y que habia estado oculta hasta que una banda de criminales asalto un chale de las afueras de Berlin y, por casualidad, la encontraron alli. La habian intentado vender en el mercado negro a un coleccionista, pero un chivatazo puso a la policia en alerta y consiguieron recuperarla. --Van a ir a buscarte con una furgoneta. Cargad la caja y sacadla de alli. Luego ya veremos como procedemos. Tu, de momento, haz caso a la persona que mandemos a recogerte y estaras seguro. --Muy bien, don Santiago. Estare preparado. Hugo se puso la ropa papal, se ajusto el sombrero y siguio registrando el garaje por si encontraba algo interesante. Pasada media hora sono un claxon fuera. Dos horas mas tarde, el avion del papa aterrizaba en Madrid-Barajas. Alli le esperaba otro Hummer, esta vez blanco impoluto. --Su santidad --empezo a hablar el conductor sin mirar por el espejo--, me han pedido que le dijera que todo esta dispuesto, tal y como solicito. El senor Torres y el senor Ortega le estan esperando. <>, penso mientras miraba por la ventana. Tras mas de una hora y media por los atascos habituales de la capital, llegaron a un hotel. El coche bajo una rampa cercana, donde habia plazas de aparcamiento individuales y cerradas. Entraron en una de ellas y una persiana metalica bajo tras ellos. El chofer salio del coche y abrio la puerta trasera, echandose a un lado y bajando la mirada para no encontrarse con los ojos del pontifice. --Le voy a hacer una pregunta y espero que sea totalmente sincero, porque conozco la respuesta. ?Que piensa el mundo de los cristianos? --?Eh? --Trago saliva--. No... No lo se. --?Usted cree en Dios, nuestro senor todopoderoso? --suspiro. --Por supuesto. Acompana mis acciones y me guia en mi camino. --Asi es, hijo mio --contesto el santo padre mientras ponia su gran mano en su colleja--. Asi debe ser. El chofer se relajo. Se habia quitado un peso de encima porque sabia del caracter del nuevo papa. Miro como se encaminaba al ascensor que habia dentro del aparcamiento. El pontifice pulso el unico boton que habia en la cabina. Las puertas se cerraron y comenzo a subir. Cuando se abrieron vio una gran sala con tres sillones, una mesita perfectamente encuadrada entre ellos y una cristalera enorme desde la que se veia toda la ciudad. A su derecha, un mueble bar en el que estaban tomando una copa dos hombres, que dejaron los vasos para acercarse a recibirle. <>, penso. Primera Parte Capitulo 1 --Me gusta estar tan alto. Es como estar mas cerca de Dios. Si se afina el oido, incluso se le puede escuchar --decia el papa mientras miraba por la inmensa cristalera--, ?no creen? --Por eso mismo compre este edificio, su santidad. ?Sabe que en este momento esta en el lugar mas alto de Madrid? --se pavoneaba Ortega con aires de prepotencia. --La cercania a Dios no es suficiente para que nos ame, hijo mio. Usted puede creer que esta muy cerca de El y El, quiza, ni siquiera le mire. No tengo mucho tiempo. Quiero ver todos los detalles antes de proceder. Tengo asuntos que tratar en el Vaticano y cuanto mas rato estoy aqui, mas quedo al descubierto --dijo sin quitar los ojos de la panoramica que le ofrecia la ventana--. Contadme. Ortega se acerco al mueble bar para recoger su copa. Quito el tapon a la botella mas robusta y oliendolo le pregunto al santo padre: --?Querra probarlo, su santidad? --Le enseno la botella de Yamazaki, uno de los mejores wiskis del mundo. --Por lo que veo siguen siendo de gustos caros... No, prefiero un poco de vino. Se acomodo en el sillon mientras Ortega descorchaba una botella de Vega Sicilia que saco de la vinoteca y le sirvio una copa. El papa olio el caldo y lo cato. Una ligera sonrisa se dibujo en su cara. Ortega se sento en el sillon de la izquierda. Torres tambien recogio su copa y abrio un ordenador portatil junto a las bebidas. Con un mando a distancia oscurecio los cristales y desplego una pantalla que ocupaba toda la pared de la puerta por la que se entraba al atico. Apunto al techo y bajo un proyector. Dejo el mando en la mesa y tomo el control del portatil. Varias imagenes de una chica se veian a la derecha de la gran pantalla. --Tras varios meses buscando creemos que ella se ajusta perfectamente al perfil. Se llama Maria Jesus, tiene veintiun anos, es huerfana desde los dos y no tiene familia conocida. Ha vivido entre casas de acogida y conventos toda su vida y el ano pasado decidio independizarse. --Muy bien --asintio el papa. --Empezo a trabajar de cajera en un supermercado y a los seis meses la echaron. Vive alquilada en San Pablo, un barrio de Zaragoza --continuo Torres--. Ahora no tiene empleo. Se costea el alquiler trabajando para el dueno del edificio en la limpieza de las zonas comunes y como su asistenta durante cuatro horas al dia. --Pero no recibe ni un euro --anadio Ortega--. Todo es para pagar el alquiler. Yo creo que mantienen una relacion. Las fotos de la chica pelirroja iban pasando en el proyector. --Le gusta salir por las noches a ligarse a hombres mayores con el animo de que le inviten a cenar y asi llevarse algo de alimento a la boca. Su unica posesion material, aparte de la ropa, que sepamos, es un movil que robo hace un par de meses de la mesa de un restaurante. No puede llamar porque no tiene saldo, pero lo utiliza para buscar trabajo en Internet segun sus registros de navegacion. --Gracias a la red wifi de su vecino --volvio a matizar Ortega. --Exacto. No depende de nadie, ni nadie depende de ella. Entiendo que deberia ser muy facil. Se produjo un silencio. --Para ser sinceros, tras encontrarla no hemos buscado mas porque a nuestro entender es perfecta. ?Que opina? --le pregunto al santo padre, deteniendo el proyector. --Es una mujer muy bella, puede que demasiado. Eso nos puede ocasionar problemas. Pero su entorno y su pasado son los adecuados. --Eso pensamos. --?Y el hombre? --Ayer por la manana, el ordenador nos aviso de una alta nueva en la web Life, otra de las redes que vigilamos. El perfil se acercaba al que nos pidio --dijo Torres cambiando las diapositivas--. De momento no sabemos el nombre real. Se hace llamar <>, tiene veinticuatro anos y en el formulario de acceso dice que es de Barcelona, pero que ha vivido casi toda su vida en Argentina. Es de prever que aqui no tenga mucha familia. Habria que investigar mas. --Esta misma manana le hemos seguido. --Ortega se levanto del sillon y se sirvio otra copa antes de continuar la explicacion--. Hemos preguntando por los lugares que frecuenta y nos han dicho que trabaja media jornada repartiendo publicidad de una tienda de compraventa de oro por las Ramblas. --No consta en ningun registro que haya terminado los estudios basicos. Al parecer tiene alquilada una habitacion en un piso de inmigrantes. Torres dejo de hablar para mirar la cara del papa. Esperaba aprobacion, pero este permanecia absorto en la imagen de la pantalla. Parecia que no habia escuchado nada de lo que le habian estado contando. --Es atractivo --dijo al fin, levantandose del sillon--. No tiene cara de ser muy inteligente. Quiero saber si tiene algun familiar en Espana. Si no lo tuviera, activen el protocolo tres inmediatamente. Quiero el informe diario de como transcurre todo antes de las nueve de la noche. --Asi sera. --Regreso al Vaticano. Tengo otros asuntos importantes que he dejado sin terminar. Alzo la mano y ambos besaron el anillo papal con gesto de sometimiento. La pantalla se replego sobre el techo y el papa salio por la puerta sin despedirse. Abajo estaba esperando el chofer. Le abrio la puerta con la cabeza gacha y lo llevo de nuevo al aeropuerto. Ortega y Torres se miraban con cara de satisfaccion. Sabian que si el santo padre estaba contento su camino iba a ser mucho mas sencillo. Tenian la sensacion de que la reunion, pese a ser una de las mas cortas que habian tenido con el, fue tambien de las mas productivas. Ortega tenia multiples negocios por todo el mundo en los que su principal y practicamente unico cliente era la Iglesia catolica. Desde comedores sociales hasta empresas de reciclaje de ropa, pasando por los terrenos en los que se levantaban los nuevos templos o las empresas que los construian. El papa se puso en contacto con el directamente para encargarle un proyecto unico, y obviamente acepto. Por otro lado, era la primera vez que Torres trabajaba para el Vaticano. Esperaba que este trabajo fuera el mas importante de su vida pese a contar ya con innumerables exitos profesionales a sus espaldas. La envergadura de lo que tenian entre manos era tal que incluso se habia separado de su familia. Su mujer se habia tenido que ir a Alemania por motivos de trabajo llevandose a su hijo con ella, pero el decidio quedarse en Madrid para atender la peticion del Vaticano. Ortega le pidio, como favor personal, que trabajara en cuerpo y alma en este encargo y no dudo ni un segundo en dejarlo todo por su nuevo cliente. Su mujer no lo entendio. No le pudo dar ningun detalle de la peticion papal y, debido a que en tema de ambiciones eran iguales, hizo las maletas y se marcho. Torres sabia que cuando todo terminara su mujer lo comprenderia y volverian a estar juntos.

  • Inocente belleza de Clare Connelly

    https://gigalibros.com/inocente-belleza.html

  • Revelacion (Los Guardianes de la Lagrima 1) de Simone Lari

    https://gigalibros.com/revelacion-los-guardianes-de-la-lagrima-1.html

    Un pacto que no puede romperse. Una piedra che tiene que ser encontrada. Un equilibro que debe conservarse. La eliminacion de un vampiro Anciano y el regreso a Persepolis de un viejo cazador el dia en el que una fuerza desconocida sera revelada. Nina, Jude y Angelique se encontraran catapultadas en un mundo que no pensaban que pudiera ser real, un mundo habitado por vampiros y cazadores, enfrentados bajo la sombra de los Guardianes de la Lagrima.

  • Lobos de la Stasi de David Young

    https://gigalibros.com/lobos-de-la-stasi.html

  • Yo no soy de nadie de Tamara Marin

    https://gigalibros.com/yo-no-soy-de-nadie.html

    Alba ha tenido una infancia muy dura que le ha hecho no creer en el amor y no querer comprometerse con nadie, bajo ningun concepto. Ella no es de nadie. Tiene suficiente con su floristeria, sus amigas y algun ligue de vez en cuando.

  • Lilith y la Villa de los Marqueses, Jesus Sordo Medina de Jesus Sordo Medina

    https://gigalibros.com/lilith-y-la-villa-de-los-marqueses-jesus-sordo-medina.html

  • Obelo de

    https://gigalibros.com/obelo.html

    Mi mundo se puso de cabeza al morir mi madre, meses despues debia entregarle a mi editor mi proxima novela, no lograba crear dos frases sencillas. Un bloqueo creativo le llaman, yo lo titule: Perdi la paz interior.Buscando aquello que no encontraba y tratando de conectarme con mi madre, viaje a Escocia y descubri que es cierto que los ojos son la ventana del alma. Una mirada de color gris me inspiro a llenar paginas en blanco, solo que en el proceso me fui enamorando del dueno.

  • Dicen que cantaron canciones de Federico Garrido Villar

    https://gigalibros.com/dicen-que-cantaron-canciones.html

    Cuando abrio la puerta de la taberna, el oficial ya le esperaba sentado en el fondo, con los brazos cruzados y el rostro cenudo. Envuelto en una maltratada capa de lana, con la mano sobre la espada, Soronas cruzo ante la barra, saludo al tabernero con un ligero gesto, intercambio unas breves palabras con varios conocidos y se sento frente al oficial, quien le saludo de manera fria. --Un lugar muy agradable para cerrar un trato, ?no crees? --dijo, con media sonrisa. El tabernero, un hombre alto y desgarbado, se acerco, dejando dos jarras de cerveza sobre la mesa. El oficial rechazo la suya. --No, gracias. No suelo beber. El tabernero miro a Soronas y este se encogio de hombros. Cuando se quedaron de nuevo a solas, el oficial se inclino sobre la mesa y se atuso el espeso bigote. Era un hombre maduro, de facciones marcadas y ojos frios. --?Sabes quien soy? Soronas nego con la cabeza. --Soy el capitan Bundas Bland, segundo oficial de la Guardia Real. Soronas ni siquiera parpadeo. No parecia muy impresionado, a pesar de estar sentado frente a la mano derecha del comandante Gando y uno de los oficiales de mayor confianza del rey Peldas. --No es habitual que un oficial de mi rango se reuna en tugurios como este con la clase de gente que… bueno… alguien como tu… --Asesino, esa es la palabra que buscas --gruno Soronas. --Si, bueno, en ese aspecto eres la persona mas indicada, Soronas el Silencioso. Tu reputacion te precede. Mercenario, espadachin y asesino. Dicen que estuviste en la batalla de Cronton y que un dia tu tambien serviste a nuestro Rey. --Hace tiempo --mascullo Soronas. --Tambien dicen que mataste a Orfald el Fiero en los bosques de Astaria y fuiste el primero en coronar las murallas de Intis. Muchos te daban por muerto. Incluso el rey Peldas. --Estoy vivo --se limito a replicar Soronas, que hacia honor a su fama de hombre parco en palabras. --?Como te convertiste en… asesino a sueldo? ?Como pasaste de ser un respetado caballero, un gran capitan, a malvivir vendiendo tu espada por una bolsa de monedas? --No estoy aqui para hablar de mi --repuso Soronas con frialdad. Bebio un trago de cerveza y anadio:--. ?Que tengo que hacer, capitan? --Dentro de un rato, llegaran un joven y un hombre alto y fornido. Un noble de alta cuna y su escolta. Deberas acompanarlos por este apestoso barrio hasta el lupanar de Davay. Supongo que lo conoces. Soronas hizo un debil gesto con la cabeza. --Muy bien --dijo Bland, mesandose el bigote--. Indicales el camino y procura que nadie os moleste. Una vez en el burdel, acompanalos al interior y quedate ante la puerta de la habitacion que escoja el joven. No te muevas de ahi ni abras la boca, y luego traelos de vuelta, sin un rasguno. Ese es tu cometido. --Un trabajo sencillo --dijo Soronas. --Espero que lo sea --repuso Bland--. Por eso te he hecho llamar. Y por los viejos tiempos. Por la memoria de mi padre. Soronas no dijo nada. En otro tiempo, muchos anos atras, antes de que acabara en el peor barrio de Ulis trabajando como espadachin, matando o protegiendo a desconocidos por unas monedas, el capitan Urtas Bland habia sido su companero de armas, su colega, su amigo. En otro tiempo. Ahora era un hombre diferente. --Conoci a tu padre. Era un amigo fiel. --Lo se --dijo Bland, con voz queda--. Me hablo mucho de ti. El capitan Grey. Nunca imagine que fueras tu, Soronas el Silencioso. El mercenario le sostuvo la mirada, sin pronunciar palabra. --El capitan Grey murio hace mucho --susurro, al cabo de un rato. --Esta noche podras volver a servir al Rey --dijo Bland, con firmeza--. No de la manera en que lo hacias en el pasado, en el campo de batalla, junto a mi padre. Pero me encargare de que Su Majestad lo sepa. --No --dijo Soronas, con voz gelida--. Hare el trabajo, pero el Rey no sabra nada. Esa es mi unica condicion. --De acuerdo. Lo que tu prefieras. Aqui tienes una parte --le entrego una bolsa de monedas, que Soronas cogio en silencio--. Cien reales de plata. Otros cien cuando el joven noble este aqui de vuelta. Soronas apuro la jarra de cerveza y se puso en pie. --?A donde vas? No tardaran en llegar. --Esperare en la calle. Cuando abandono la taberna, apoyo la espalda contra la pared, junto a un perro famelico que mordisqueaba un hueso, y saco su pipa de madera tallada para fumar "hojahierba", una costumbre que los Enanos de Montenegro habian traido a Uliman. Acababa de dar las primeras chupadas, cuando vio aparecer entre el gentio a un joven embozado, de modales timidos, y un hombreton con cota de malla y espada al cinto. Soronas se acerco a la pareja y se coloco delante del gigante, quien le miro irritado. Tenia una cara que parecia cincelada en marmol y cuajada de cicatrices. --!Apartate, escoria! --escupio, levantando una mano. Antes de que llegara a rozarle, Soronas se aparto la capa, mostro una afilada daga, y entre dos parpadeos coloco el arma en la garganta del veterano. Su joven acompanante retrocedio, temeroso. En ese preciso instante, el capitan Bland llego a la carrera y miro la escena asustado. --Por todos los dioses, Grey. Guarda esa maldita daga. Con una sonrisa, Soronas volvio a esconder el arma bajo su ropa y dio una calada a la pipa. --Me llamo Soronas el Silencioso. --Mi senor --dijo Bland, dirigiendose al joven--. Este es el hombre que acabo de contratar. Os podeis fiar de el. Os conducira a salvo hasta la Casa de Davay y luego os traera de vuelta sin ningun percance. --?Este mendigo? --repuso el gigante, arrugando aun mas el ceno. A Soronas le recordaba un toro-- ?De que cloaca lo habeis sacado, capitan? --No es ningun pordiosero, os doy mi palabra. Es un gran luchador. En otra epoca sirvio en el ejercito. --Ya --mascullo el gigante. --Pronto se hara de noche --indico el joven, con voz aflautada--. Si es posible, querria estar cuanto antes en la Casa de Davay. --Claro que si, mi senor --dijo Bland, con aire solicito. Miro al gigante y anadio:--. Cuida de el, Hunk. Lo dejo en tus manos. --Teneis mi palabra de que no le ocurrira nada, capitan. Bland se volvio hacia Soronas y le escruto en silencio: --Recuerda el trato. Protege al chico y no hagas preguntas. A la vuelta, recibiras el resto del dinero. ?Esta claro? --Como una cancion de los Silfos. Con un gesto, sin dejar de inhalar el humo de "hojahierba", Soronas se alejo por la calle, seguido por Hunk y el joven noble, mientras Bland los contemplaba con los brazos en jarra. Fue un trayecto corto y sin incidentes, a pesar de que se encontraban en el peor barrio de Ulis, conocido como el Basurero de Atras. En las calles de tierra apisonada, cubiertas de charcos de orina e inmundicias, entre edificios de madera o de adobe, pululaban vagabundos, jaques, ladrones, rameras y buscavidas. A los mas afortunados les robaban las escasas monedas que llevaran encima y a los menos, les degollaban en una esquina y abandonaban su cadaver desnudo sobre la basura. Habia tugurios donde servian licores que dejaban ciego, casas de juego, burdeles, pensiones en las que se violaba, robaba y asesinaba a los incautos, patios invadidos por las malas hierbas y la basura, sotanos donde se vendian esclavos, carnicerias cuya mercancia era de todo menos comestible, templos dedicados a los Dioses Mayores en los que hacia anos no entraba un solo fiel, oscuros recintos destinados a la venta de venenos y drogas. Un mundo cruel y miserable, en el que Soronas sabia como moverse. Hunk lo pudo comprobar en cuanto se internaron en un laberinto de calles malolientes donde pendencieros armados con espadas se apartaban al ver a Soronas y muchas personas le miraban con una mezcla de miedo y recelo. --La gente aqui te respeta --comento Hunk.

  • Los que corren contra el viento de Maria Correa Luna

    https://gigalibros.com/los-que-corren-contra-el-viento.html

    Un hombre que lo tiene todo, una mujer que se sabe capaz de todo corren contra el viento.?Que es eso a lo que se enfrentan?Un viento quiere arrasarlos, impedirles avanzar hacia lo que buscan: el pasado los desafia, un misterio de ese pasado que se extiende sobre ellosy sobre el mundo.

  • La sospecha de Fiona Barton

    https://gigalibros.com/la-sospecha.html

    Cuando dos jovenes britanicas desaparecen en su ano sabatico en Tailandia, su caso pasa a copar el foco de la atencion mediatica internacional. La periodista Kate Waters esta lista para informar sobre la historia: como siempre, quiere ser la primera en conseguir la exclusiva y descubrir la verdad, y esta vez no sera una excepcion. Sin embargo, a medida que se van conociendo mas detalles de la investigacion, Kate no puede dejar de pensar en su propio hijo, a quien no ha visto en dos anos.

  • 7 Alas de Victor Diaz Sanchez

    https://gigalibros.com/7-alas.html

    ?Te imaginas un mundo en el que existen hadas y elfos que, unidos a los humanos, luchan codo con codo contra las huestes de orcos? Ese mundo existe y se llama Malphalis. En el se esta librando una guerra cruenta desde hace siglos, aunque a dia de hoy se siguen sin conocer muchos aspectos de los comienzos de esta.
    ?Y si existiera un modo de acabar con la guerra? ?De conseguir un periodo de paz que permita prosperar? El precio a pagar es la traicion hacia las hadas. Lo que las obligara a huir de ese mundo al que ya no pertenecen. ?Hay alguna posibilidad de restablecer la antigua alianza? Cuatro hadas regresaran a su antiguo mundo tras descubrir el deplorable estado en el que se encuentra despues de su marcha para intentar conseguirlo y de paso desvelar, poco a poco, todos los enigmas que se ocultan en la contienda.

  • Coleccion completa Max Cornell de Adrian Aragon

    https://gigalibros.com/coleccion-completa-max-cornell.html

    Libro 1: EMBOSCADA ~ (Max Cornell thriller de accion no 1)
    La vida del mercenario Maximilan Cornell da un giro radical cuando un desconocido deja un extrano mensaje en su puerta. Katty, la hija de quien habia sido su querido mentor, desaparece misteriosamente en la ciudad de Hong Kong. Max no tendra mas opcion que volver a la accion y trabajar duramente para sacar a la luz todo lo oculto detras de este hecho.

  • La dama de hielo. Los casos de Jennifer Palmer de Arthur R. Coleman

    https://gigalibros.com/la-dama-de-hielo-los-casos-de-jennifer-palmer.html

    Un trepidante thriller policiaco, una novela de intriga, sensualidad y sexo desde una optica nueva y fresca, un personaje diferente, pleno de originalidad y fuerza: Jennifer Palmer. El nuevo y mas sorprendente personaje de la novela criminal y erotica.
    Un novedoso enfoque de la literatura de asesinos en serie. Un autentico psicopata del crimen busca un adversario de su talla y reta a la criminologa Jennifer Palmer a traves de sus asesinatos: Los desafios del hombre. Es el kraken de los criminales. Un monstruo que sale de las profundidades cuando quiere y causa el terror en la ciudad de Nueva York.
    Un thriller excepcional narrado con gran maestria. ?Quien se esconde tras las siglas D.H. con que firma cada uno de sus estudiados y elaborados crimenes?
    Esta impactante novela nos lleva a las aventuras de una joven y bella criminologa y su agencia, Solution Channel, y de Mark Crowell, un apuesto y atletico inspector de la brigada contra el crimen de la ciudad de Nueva York, desde que se descubre el extrano y cruel asesinato de un conocido marchante de arte.
    Unos personajes en los que la sexualidad y la sensualidad estan en constante ebullicion. La apasionada belleza de la protagonista, su inteligencia y su espiritu independiente llevan al lector a descubrir nuevos limites en la forma de entender la vida, la sexualidad y el deseo de forma libre y sin barreras.
    Una trama asombrosa, con personajes, giros, asesinatos y posibles culpables con la gran incognita a desvelar que solo llega al final de un equivoco y apasionante recorrido en esta incomparable novela negra y erotica.

  • Todas las benditas decisiones (Everlasting Wound 2) de May Boeken

    https://gigalibros.com/todas-las-benditas-decisiones-everlasting-wound-2.html

    Despues de la ruptura con Gary, Rebeka se refugia en casa de su hermano en Hallerburg, Alemania, para reorientar su vida e intentar olvidar cuanto antes al rockero norirlandes. Se siente perdida, herida y cabreada. Lo echa mucho de menos, pero se niega a recular e intentar arreglar las cosas con el.
    A base de juergas en el Rocco’s -un peculiar bar ilegal-, los cuestionables consejos de su amiga Ana y una nueva amistad con su vecino Daniel -un especimen germano guapo a rabiar-, consigue recuperar el rumbo. Pero lo que tiene el amor es que viene sin avisar y a veces llega sin llamar.
    ?Su relacion con Daniel se convertira en amistad-algo-mas? ?O existiran las casualidades cosmicas y volvera a aparecer Gary en su vida?

  • Tan tuyo. Tan mio de Efren Reyero Fernandez

    https://gigalibros.com/tan-tuyo-tan-mio.html

    Cuando Efren me propuso que escribiera unas palabras para el prologo de su primer libro, Tan tuyo... tan mio, reconozco que tuve sentimientos encontrados. Sorpresa por pensar en mi para algo tan importante para el. Miedo a no estar a la altura. Y emocion por la responsabilidad que esto suponia. Cuando tuve el manuscrito en mis manos, me di cuenta de que no podia decirle que no. Entre estas paginas hay tanto encanto, tanto carino, tanta fuerza... Y es que es tan evidente que lo ha escrito con el alma, que se ha abierto completamente, dejandose llevar por las emociones... que, cuando lo leais, me entendereis. Ha demostrado ser un mago de las palabras, enlazandolas con total sentido y armonia y provocando sentimientos, recuerdos y algun que otro nudo en la garganta. Porque lo que cuenta es tan real, que a veces hasta duele leerlo. Estoy segura de que evocara en vosotros imagenes que creiais olvidadas, pero no lo estaban, sino que yacian escondidas esperando el momento para salir y mostrarse ante nosotros en forma de recuerdo. Efren tiene la capacidad de poner palabras a situaciones que vivimos y de que estas se cuelen directamente en el corazon. Tan tuyo...tan mio es un libro para leer una y mil veces, para detenerte en los textos y recordar, viajar, volar con ellos... Efren, gracias por dejarme ser participe de algo tan intimo, tan personal. Para mi es muy especial haber formado parte, a traves de estas palabras, de algo que se que sera muy grande. Porque tu lo eres. Y antes de terminar, me cino a una de las frases que encontrareis entre estas paginas, que dice asi: <>. Y estoy segura, amigo, de que a este libro lo van a pensar mucho, no a escoger. Maria Beatobe, escritora @mariabeatobe <>. E. R. F. Y por eso te digo: vuelve Y solo te digo vuelve. Porque se que te dije: <>, y que mis palabras fueron hirientes. Pero quiero que recuerdes que cuando se amo de verdad, no se puede olvidar de repente. Y es que me miento mas estando solo y liberado, que fingiendo no quererte cuando estoy contigo y encerrado... Por eso !vuelve! Y ahora que pienso Y ahora que pienso, mi corazon dice que siento, que es mi boca la que se queda sin tu aliento. Mis manos ya no te tocan por dentro y el olor desvanecido de tu cuerpo hace que mis ojos se inunden hasta mis huesos. Y dejemos los argumentos Y dejemos los argumentos porque no se quien mierda nos conto ese cuento ni quien nos comio la cabeza con sus tormentos, cuando todo lo nuestro se arregla con un beso. Amor en descuento Con tanto amor de descuento, el nuestro se nos va entre lamentos. Y dime donde quedaron nuestros suenos en los que nuestro mundo seria eterno. Y el tiempo Y que nos pasa con el tiempo. Creemos vivir en un templo donde nos instalamos en el pasado, como un barco en el puerto anclado. Sonamos con el futuro, como un nino grafiteando un muro, sin vivir nuestro presente, que es lo que tenemos realmente. Nos pasamos media vida intentando encontrar nuestra mitad, para pasar la otra media vida intentandola olvidar... El tiempo. Y ahora, quien me viste Y ahora quien me viste, si el alma te llevaste cuando te fuiste. Sentado en mi cama mirando donde te acostaste, porque lo unico que me queda es el perfume que dejaste. Gritando me encuentro, intentando callar el silencio que hay aqui dentro. Y ahora quien me viste, si el alma te llevaste cuando te fuiste. Porque ahora todos me aconsejan, pero no se dan cuenta de que de ti me alejan. Intentan hacerme salir y reir, pero olvidan que lo que necesito es ser feliz. Y ahora quien me viste, si el alma te llevaste cuando te fuiste. Fijate que sin ti muero de sed, pues tu eras la unica fuente que hidrataba mi ser. Yo, que era de no se, y tu de muchos por que... Ahora quien me viste, si el alma te llevaste cuando te fuiste. Y del dolor de verte con otro Y del dolor de verte con otro, a estar feliz por ver la sonrisa en tu rostro. Cuando pensaba que nada tenia sentido, llega mi amiga soledad y me dice en que te has convertido. Cuando me decias que no salieran nuestras palabras por la puerta, ahora me encuentro con que todas estan abiertas. Mi cabeza sentia que mi mundo se habia desmontado y mi corazon me muestra que, al irte, hasta los planetas se han alineado. Y es que, del dolor a la felicidad, solo estan tus ganas de ser y estar. Y ya nunca volvera Y ya nunca volvera un balon viejo con el que todos los ninos quieran jugar. Esas cuatro piedras rebuscadas para hacer las porterias donde el gol se marcaba. Esas chapas con las que jugar, aquellos bancos en los que saltar. Y ya nunca volveran esos vecinos que al romper sus ventanas gritaban, pero al rato te daban galletas porque te amaban. Alla donde las consolas eran las calles y de los videojuegos de la mente aun recuerdo detalles, donde los telefonos moviles eran las voces y nuestro internet eran los roces. Aquellos momentos donde, de ser mejores amigos, por una discusion pasabamos a ser enemigos. Y es que no pasaban ni cinco minutos cuando teniamos la necesidad de volver a estar juntos. Y ya nunca volvera... la infancia. Y tu, imaginate Tu imaginate que nunca se hiciera tarde, porque las agujas de mi reloj tu guardes. Tu imaginate que, al mirarte en el espejo, sea mi rostro el que veas en el reflejo. Tu imaginate que todo se detiene, pero no te preocupes porque a tu lado me tienes. Tu imaginate que un dia no nos vemos; tranquila, cierra los ojos y siente lo que nos queremos. Tu imaginate que no imaginamos mas, Vivamos y que los que imaginen sean los demas... P. D.: Tu imaginate que nos imaginamos lo que queremos imaginarnos. Y un dia despierto Y un dia despierto y ya no estas. Me faltaron <> y <> por dar. El recoger las sabanas juntos en la manana se quedo en un recuerdo que mi cama extrana. Y un dia te despiertas y ya no estan esos buenos dias ni a quien despertar, No hay ropa sucia por el suelo que recoger, se llevo el olor de tu cuerpo ese amanecer. Y un dia te despiertas y ya no estan las dos copas de vino frente al sofa. Las mantas ya no saben a quien calentar porque tu ausencia no han sabido aceptar. La vida da muchas vueltas La vida da muchas vueltas. Parece una caja de herramientas con muchas tuercas, todas chocando con el movimiento intentando encajar, y cuando se cierra la caja, no sabemos ni con quien dar. La vida da muchas vueltas. Un dia, encima de la ola te encuentras, te crees que de la ola no te bajaras jamas y al dia siguiente en la orilla te ves solo, sin mas. La vida da muchas vueltas. Al principio parece faltarte cielo en tu ala delta, viajas por el sin rumbo fijo, pero al final siempre vuelves al mismo prefijo. La vida da muchas vueltas. Por eso vive tu vida, goza de todas las vueltas y recuerda que: <>.

  • Infinito de Beatriz Gomez Lorenzo

    https://gigalibros.com/infinito.html

    Gines Martin, es un trabajador del departamento de tanatopraxia del Anatomico forense solitario y carente de relaciones que solo se permite el recuerdo de Susana cada 7 de noviembre. En esa fecha realiza un pequeno ritual para recordar a su amiga fallecida diez anos antes.

  • Yo, bufon del rey de Mahi Binebine

    https://gigalibros.com/yo-bufon-del-rey.html

    Novela finalista del Premio Renaudot

  • La espia que te amo de Elsa Tablac

    https://gigalibros.com/la-espia-que-te-amo.html

    Emma trabaja en una agencia de detectives. Y las cosas no le van nada mal, si no fuera por su desastrosa vida sentimental y en especial por ese cantamananas de Mateo, que no le trae mas que quebraderos de cabeza. Asi que lo mejor es, hasta que amaine el temporal, pasar de los hombres. Centrarse en el trabajo, el yoga, el gato, las amigas. Hasta que un buen dia cae en sus manos el misterioso caso de Lloyd Cooper, un guapisimo britanico que va y viene por la ciudad desde hace unos meses, con una turbia historia familiar a sus espaldas y al que Emma debera investigar.
    Hasta aqui todo bien.
    Siempre y cuando no te enamores del hombre al que has de seguir.
    Ni el de ti.

  • La ciudad infinita de Sergio C. Fanjul

    https://gigalibros.com/la-ciudad-infinita.html

  • El secreto de Copernico de Pablo Rola

    https://gigalibros.com/el-secreto-de-copernico.html

    ?Es posible que vivan resquicios de una desaparecida cultura ancestral? ?Puede desaparecer el libro mas importante de la Astronomia, de la mayor seguridad en Mexico?
    Ninguna de estas cuestiones poseia relevancia para el detective Cuevas, cuando una inquietante llamada perturbaba su cotidiano trabajo en Guadalajara.
    A miles de kilometros, alguien regresaba de una vida ya pasada, para sembrar el mismo caos que lo perturbo por anos, cuando solo podia sentir adoracion por la cultura que manchaba.
    Sin ser consciente de ello, un asustado astronomo se convertia en sus ojos para conseguir atrapar a tan oscuro enemigo.

  • El sur lo encontre en tus ojos de Cherry Chic

    https://gigalibros.com/el-sur-lo-encontre-en-tus-ojos.html

    Lola lleva toda la vida sonando con encontrar a alguien que comparta sus gustos por las maratones de series y peliculas desde el sofa. Alguien que adore comprar chorradas por internet, ir a la playa, aprovechar cualquier ocasion para comer y que se lleve bien con sus amigos y su familia, que lo son todo para ella. Pero, cuando ese alguien aparece, apenas cumple ninguno de los requisitos que Lola siempre ha deseado.

  • La silueta en la niebla de Jorge Galan

    https://gigalibros.com/la-silueta-en-la-niebla.html

    Esta novela, que es una mezcla entre el genero negro y la ciencia ficcion, cuenta la historia de Benjamin, un heroe atormentado, que posee el extrano talento de la telekinesia. Cuando sucede una desgracia apocaliptica en su pais natal, Benjamin, que ha vivido lejos desde que era casi un nino, regresa para buscar a su madre. Lo que encuentra es una sociedad que en nada se parece a lo que recuerda. Jaurias de perros salvajes que cazan en la oscuridad, un pueblo de asesinos que habitan en un cerro, una iglesia dominada por un hombre al que llaman el profeta, un fantasma que ronda por las casas abandonadas, todo bajo una lluvia que no se aleja nunca.

  • Si te gusta comer, aprende a adelgazar de Dr. Nicolas Romero

    https://gigalibros.com/si-te-gusta-comer-aprende-a-adelgazar.html

    En Si te gusta comer, aprende a adelgazar, el doctor Romero nos dara recomendaciones para tener un peso perfecto, pero, lo mas importante, sin dieta y sin estar obsesionados con la comida. Nos ensenara a tener una actitud nueva ante la comida, sin que el estres del dia a dia nos influya.