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jasmine wylder libros descargar gratis - Jasmine Wylder
https://gigalibros.com/la-companera-del-oso.htmlSerena siempre habia pensado en su abuela como una mujer fuerte. Desde que tuvo uso de razon, habia estado alli. De pie, alta y orgullosa, liderando el clan como su matriarca. Serena nunca penso que veria el dia en que su abuela yaciera en cama, con un aspecto fragil y debil, con mantas a su alrededor, y una bandeja de comida intacta a su lado. La joven lucho para concentrarse en el libro que tenia en sus manos. Habian pasado varios meses desde que una bomba estallo en la oficina de la matriarca, y la hirio gravemente. Durante un tiempo, no se supo si se recuperaria, y aunque sobrevivio, no recupero la fuerza que la caracterizaba. Las arrugas de su cara se habian profundizado. Habia una tristeza en sus ojos que la hacia parecer vieja. Serena nunca antes la habia considerado una anciana. A pesar de sus canas, su abuela siempre habia sido joven en su mente, joven y hermosa. Ahora no era menos bella, pero su edad se notaba de verdad. Serena dejo de leer por un momento y busco un vaso de agua. --?Como te sientes, abuela? --Nunca se habia sentido bien llamandola "abuela" o algo menos formal--. Deberias comer algo. --Estoy bien, Serena. --La mirada severa que le dio a su nieta fue atenuada por el agotamiento de sus ojos--. Puede que no este sanando tan rapido como cuando era mas joven, pero eso no significa que esto vaya a dejar ningun dano permanente. No soy tan fuerte como antes…. Si tu madre estuviera viva, me habria retirado de este puesto hace anos. --Aun eres fuerte y… --Silencio, Serena. --Su abuela le quito el libro y lo cerro--. No te pedi que vinieras aqui para que leyeras para mi. Mis ojos funcionan bien. Tu y yo necesitamos tener una charla seria. El estomago de Serena se apreto. Ella sabia exactamente lo que esta seria charla implicaria. A los veintitres anos, terminaria siendo la matriarca mas joven que jamas haya tenido este clan. No deberia ser asi. Si su madre estuviera viva o si su madre hubiera tenido alguna hermana, entonces serian ellas las que relevarian a su abuela. Pero se habia ido, y con la matriarca actual en este estado…. Sus manos se tensaron en su regazo, pero se nego a decir nada que hiciera pensar a su abuela que no estaba a la altura de las circunstancias. Si, era joven, pero no estaba sola en esto. Los hermanos de su padre, su tia Natasha y su tio Clifford, estaban alli para ella, sin mencionar a los asesores de la matriarca. Tampoco era como si la estuvieran arrojando de cabeza a su rol sin precedentes. Serena se habia estado reuniendo con su abuela en sus oficinas desde que tenia la edad suficiente para sellar sobres y contestar telefonos. Los ultimos meses ella tambien habia estado actuando como matriarca. --El mes del Orgullo de los Shifters de este ano anduvo muy bien --dijo Serena, como si se tratara de una reunion informativa, en lugar de una transferencia de poder--. Tuvimos algunas amenazas, pero ningun incidente, salvo unos cuantos manifestantes. Sin embargo, perdieron impulso bastante rapido. Las cosas estan mejorando. Desde el incidente con el doctor Alava, la mayoria de los grupos antishifters se han retirado. Sin embargo, estamos viendo un resurgimiento de una faccion. Hay pruebas de que se estan levantando sobre los preceptos de Dwayne Sawyer y lo estan convirtiendo en un martir. --Serena. --Ella se quedo en silencio e inclino la cabeza. --Me estoy cansando demasiado para esto. --Su abuela le agarro la mano--. La lentitud de mi curacion es prueba de ello. Me ha estresado mucho. El clan no puede tener a una anciana enfermiza como matriarca. --No eres anciana ni una enferma, abuela. Estallo una bomba y te llevara tiempo recuperarte. Su abuela le dio una mirada severa, haciendola caer de nuevo en silencio. --No te hablo como tu abuela, Serena, sino como tu matriarca. Si Annamarie no nos hubiera sido arrebatada tan tragicamente, ahora seria quien desempenaria el rol. No es bueno que una persona este sentada en el poder tanto tiempo. Es hora de que una generacion mas joven se haga cargo de su propio futuro. Serena asintio, mordiendose el labio. No era como si temiera convertirse en matriarca. Era solo una gran responsabilidad, y ella esperaba poder obtener mas experiencias del mundo real antes de que el traspaso fuera necesario. A pesar de que se habia graduado de la escuela secundaria antes de tiempo y habia estado tomando cursos universitarios en linea de economia, ciencias politicas y derecho, todo era conocimiento teorico. No habia visto el mundo, no habia viajado a todos los lugares que queria ver. Lo mas lejos que habia estado fue para visitar a su clan hermano a unos cuantos condados mas alla. Y ahora, ?alguna vez podria irse? El deber de una matriarca era hacia su clan. Sus propios deseos ni siquiera llegaban en segundo lugar. Estaban al final de la lista. --Si Annamarie estuviera aqui… --La matriarca se callo. Serena no recordaba mucho de su madre o padre. Ambos habian sido asesinados cuando ella era pequena. No estaba segura de si los pocos recuerdos que tenia eran reales o si provenian de las historias que le habian contado y de las fotos que habia visto. Se levanto sola. --No esta, abuela. Y por mucho que ambas lo deseemos, no esta. Se que crees que es hora de que me convierta en matriarca… Pero no estoy lista. Todavia soy joven, sin experiencia. Estoy acostumbrada a seguir tu ejemplo, no a tomar decisiones que afecten al clan. No estoy lista. --Tienes que estarlo, Serena. Ya es hora. Ya no soy apta para liderar el clan, y si tu no estas a la altura de la tarea, ?quien lo estara?. --dijo la abuela y Serena bajo la mirada de nuevo. --Y eso significara tomar un companero. Eso era lo que mas temia Serena. No la idea de tener un companero, sino de tener un companero siendo tan joven. Nunca antes habia salido con alguien, y eso era lo que mas le pesaba. Por supuesto, ella habia estado enamorada antes, pero nunca actuo en consecuencia. Ni siquiera tuvo la experiencia de tener mariposas en su estomago mientras sostenia la mano de un chico. Pero una matriarca no podria serlo sin un companero. Era una tradicion antigua. Los lideres, ya sean matriarcas o alfas, tenian que tener companeros. Los hacia mas estables y les daba un control de su poder; el companero era alguien que podia templar los instintos. --Cuando Annamarie se caso con Jackson, rompio con la tradicion --continuo la matriarca--. Durante generaciones, nos hemos apareado con hombres de nuestro clan hermano. Nuestros lazos con el clan McCloud se han debilitado por esa accion. Se han necesitado todos estos anos para reparar ese dano. Se que querias una pareja que pudieras conocer y amar antes del matrimonio, pero eso no sucedera. --Tengo que casarme con el hombre que me gane en la competencia.... --La voz de Serena se sentia vacia, sin emocion. La matriarca apreto su mano. Su expresion era comprensiva, pero no habia nada que decir. Serena sabia por que. Esto era lo que mas rechazaba, pero era necesario. El suyo era un clan pequeno. No podian permitirse alienar a su clan hermano. Aunque tenian varias personas muy ricas en su clan, el apoyo ofrecido por las McCloud era necesario para desarrollar una infraestructura para el futuro. --Yo no era feliz cuando estuve en tu situacion --continuo la matriarca--. Tu abuelo era un hombre rudo. Cuando me case con el, pense que seria miserable para siempre. Pero llegamos a ser muy unidos, el y yo. Quizas no los verdaderos companeros de los que tanto oimos hablar, pero funciono. Igual que paso con mi madre, mi abuela y con todas las mujeres de nuestros antepasados. Cuando eres una matriarca… --El clan es lo primero --concluyo Serena. Sin pensarlo, la imagen de Tristen Cade floto en su mente. Alto, con musculos prominentes y ojos de halcon. Era del clan McCloud. Habia sido traido por el tio Clifford para proteger a su companera embarazada de una amenaza, y a sus futuros bebes. Sin embargo, Tristen habia permanecido cerca, incluso despues de que se elimino esa amenaza. Aunque Clifford y Tristen eran mejores amigos, Serena no habia tenido mucho que ver con el hasta hacia poco. Tristen era un Navy Seal y solo venia a visitar al clan de vez en cuando para ver a Clifford. Mayormente, habian pasado tiempo juntos cuando Clifford estaba estudiando para ser abogado y lo que ella recordaba de el, de cuando era nina, era a un hombre llamativo que apenas le prestaba atencion. ?Y ahora que habian pasado tanto tiempo juntos? Serena se dio cuenta de que le gustaba mucho. Era un poco embarazoso, pues ella no podia controlarse cuando estaba cerca de el y siempre trataba desesperadamente de impresionarlo, a pesar de saber que nada saldria de ello. Tristen era mucho mayor, y sabia que el no estaba interesado en ella de esa manera. ?Y si lo estuviera? ?Como reaccionaria su familia si saliera con un hombre mucho mayor? La companera de Clifford, Lori, incluso, le habia advertido que no se acercara a Tristen, alegando que los hombres que iban por mujeres de la mitad de su edad solo buscaban a alguien a quien controlar. Serena sabia que ese no seria el caso de Tristen, pero de nuevo, caia en la cuenta de que el no estaba interesado en ella. Punto final. No tenia sentido pensarlo. A menos que si estuviera interesado, pero, debido a la gran diferencia de edad y a situaciones personales, no actuara en consecuencia…. Serena se mordio el labio. Era posible que adquiriera algo de experiencia antes de tener que tomar una pareja que apenas conocia…. --Hare lo que tenga que hacer por el clan --dijo, volviendo a mirar a los ojos de su abuela--. Puedes contar conmigo. --Bien. Ya he empezado a hablar con el clan McCloud. Estan organizando los juegos para que tu companero se pruebe a si mismo. Despues de que tu y el se hayan comprometido --aqui la matriarca se detuvo y Serena asintio para mostrar que entendia lo que queria decir-- despues de eso, te entregare oficialmente el manto de la matriarca. Serena volvio a asentir con la cabeza. Un bulto se levanto en su garganta, pero enderezo sus hombros y respiro profundamente para tragar. Tenia que suceder. Ya fuera hoy o dentro de un ano o mas. Sucederia. No tenia sentido llorar por lo inevitable. No era como si fuera a estar atrapada con alguien cruel. Su pareja estaria obligada a protegerla. ?Y si terminara hiriendola? Bueno, entonces seria la prueba de que no eran verdaderos companeros despues de todo, seria enviado de vuelta a su clan avergonzado, y se seleccionaria a un nuevo companero para ella. Todo lo que tenia que hacer era hablar. --Esto ha sido mucho para procesar. --La matriarca le dio a su mano un apreton final y la dejo ir--. Tomate un tiempo para pensar, Serena. Tendremos que hacer un anuncio al clan muy pronto. Con un asentimiento mas, Serena casi sale huyendo de la habitacion. Asi que esto estaba p a s a nd o. ? Q ue d e b i a ha c e r a ho r a ? ? S o l o e s p e r a r ? O… o, q ui z a s, p o d r i a l a nz a r s e a una u l t i ma a c c i o n i mp ul s i v a… Capitulo DOS Era hora de ir a casa para Tristen. La amenaza contra Lori y Clifford habia terminado, y no tenia sentido que se quedara mas tiempo. De todos modos, necesitaba volver a su puesto militar. A pesar de que se le habia prometido el tiempo libre que necesitara, estaba ansioso por volver… aunque fuera el unico shifter de su equipo y los demas lo condenaran al ostracismo por ello. Mas de una vez, estuvo a punto de ser expulsado por la forma en que lo trataban. En su linea de trabajo, tenian que confiar y depender el uno del otro. A pesar de todo lo que habian pasado juntos, su equipo no confiaba en el. No podia confiar en ellos. Aqui, trabajando con Clifford, habia sido diferente. Se sentia como debia ser un equipo. Serena entro en la habitacion. Su pelo castano chocolate caia en suaves olas a su alrededor, y se mordia el labio mientras retorcia las manos. Tristen casi se congela al verla. Aunque era muy joven, siempre tuvo una manera de ser que la hacia parecer la persona mas madura de la habitacion. Esa vulnerabilidad inusitada le hizo querer abrazarla y asegurarle que todo saldria bien. Aparto la mirada rapidamente. Llevaba meses luchando contra esos pensamientos. Fue chocante lo mucho que sus puntos de vista sobre ella habian cambiado desde que el habia venido a ayudar a Clifford. No era la nina de ojos estrellados que habia conocido en el pasado. Era una mujer madura con la suficiente determinacion como para avergonzar a la suya. --Hola, Serena --le lanzo con una media sonrisa--. ?Esta todo bien? --Bueno… supongo. Solo venia a ver si Clifford habia hablado contigo para que te quedaras. Tristen agito la cabeza. --Ha estado ocupado con Lori y los gemelos. --Oh. Si, lo ha estado. ?Has oido que mi abuela me va a ceder el liderazgo del clan? En ese momento, Tristen asintio. Cuando lo oyo por primera vez, le parecio natural que fuera el momento. Mas tarde, la gente empezo a comentar sobre la edad de Serena, y eso le recordo una vez mas que ella era, de hecho, todavia una mujer joven. Sin embargo, no tenia dudas de que ella seria brillante en ello. Con su inteligencia y empuje, no habia nadie mas adecuado para esa tarea. --Yo… tengo que tener un companero pronto --dijo ella--. De tu clan de origen. Milly Terrance ha sido muy energica acerca de querer que las cosas cambien y creo que me desafiara a ser la matriarca del clan. Es una buena persona, pero demasiado impulsiva para ser una buena lider. Asi que necesito tener un companero lo antes posible. --Entonces, ?quieres que te presente a algunos de los jovenes de mi clan? --Tristen ignoro como su oso gruno cuando se puso a pensar en cualquiera de ellos con sus brazos alrededor de ella. No todos eran terriblemente inmaduros. Ademas, seria beneficioso para Serena conocer a alguien de su edad… ?Verdad? La cara de Serena se tino de rosa, y agito la cabeza. --Habra desafios y juegos en los que podran competir, y quienquiera que gane tendra derecho a ser mi companero. El companero de la matriarca tiene que protegerla, despues de todo, y nosotros tenemos que asegurarnos de que el mio este a la altura de las circunstancias. --No estoy seguro de lo que me estas pidiendo, entonces. --Tuvo una idea y su corazon se estrello contra sus costillas. Se enderezo. --?Puedo ser totalmente sincera contigo? --pregunto Serena. Era una mala idea. Solo terminaria con uno de ellos decepcionado. Pero el asintio de todos modos. --Siempre he sabido que este dia llegaria. Esperaba ser mayor. Creo firmemente que dos personas deben saber quienes son antes de establecerse juntas esperando el "para siempre". Tristen no pudo evitar sonreir. --?Estas diciendo que no sabes quien eres? --?Que? --La frente de Serena se arrugo--. No. Eso no es lo que estoy diciendo. Estoy diciendo que quisiera ser mayor para que mi pareja tambien lo fuera. No quiero tener que lidiar con un nino inmaduro que solo me quiera porque soy bonita. O, quizas peor, alguien del doble de mi edad que piense que sera capaz de enganarme y hacer lo que quiera con el clan. Ese no es su trabajo. Sere matriarca y no voy a tener un companero que intente controlarme. Tristen asintio con la cabeza, aunque todavia no sabia adonde iba con esto. Serena levanto un poco la barbilla y lo miro fijamente a los ojos. --Quiero que compitas en los juegos y que ganes para ser mi companero. Quizas deberia haberlo visto venir. Quizas deberia haber pensado que era obvio que ella se estaba dirigiendo a eso. Pero, en realidad, no se lo esperaba, al menos, no todo. Ciertamente, no la parte de la lucha. Abrio la boca y la volvio a cerrar. --Se que esto es una…. peticion extrana. Pero lo he pensado mucho. Tienes experiencia de tu lado, asi que serias mas apto para ganar. Me permitiria elegir a mi propia pareja, y hemos demostrado que nos llevamos bien. Incluso en situaciones en las que tu y yo hemos tenido desacuerdos con respecto a las medidas de seguridad, no has tratado de desautorizarme en absoluto. Tu… --Tengo el doble de tu edad. Serena trago fuertemente y asintio. --Pero no intentarias controlarme porque crees que soy una nina tonta. Eso era bastante cierto. Tristen se encogio de hombros, inseguro. --Bueno…. no puedo. --?Por que no? Tristen agito la cabeza. Dentro de unos anos, se arrepentiria de su eleccion si esto sucediera. --Debido a mis antecedentes militares. Mis lazos con los no shifters pueden influir en mi juicio. Hay requisitos que hay que aprobar antes de que entrar en la competencia. --Pero tu entrenamiento militar ayudaria a protegerme mejor que alguien al azar… --No puedo. Las manos de Serena comenzaron a retorcerse de nuevo y se mordio el labio una vez mas. --De acuerdo. Bueno, en ese caso, ?puedes… puedes ensenarme algo? Tristen no respondio, esperando a que ella continuara. Su oso lo empujo, tratando de avanzar, pero no se movio. --Me gustaria que me ensenaras… a ser seductora. Como estar con un hombre. --Su cara se puso completamente roja y sus anchos ojos de chocolate brillaron. Su mirada lo persiguio de una forma que hizo que su oso practicamente ronronease con deleite. Algo se apreto dentro de el. Serena se acerco un poco mas y se mojo los labios--. Se que tengo que tomar la pareja que sea elegida para mi, a menos que sea verdaderamente repulsiva, pero no significa que tenga que evitar los placeres fisicos antes, incluso antes de que nos encontremos. Nunca he tenido la oportunidad de estar con un hombre, y quiero…
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Rosalinda, la flor mas fea de Valeriam Emar
https://gigalibros.com/rosalinda-la-flor-mas-fea.htmlSU MENTE le pedia que se levantara del pupitre y les gritara a los bravucones de sus companeros del instituto que soltaran su mochila, pero su cuerpo tenia su propia ley y sus pies se habian anclado en el suelo. Y ella ahora tendria que ingeniarsela para bajar su bolso de la paleta del ventilador. Su madre supo decirle que ese era el precio que debia pagar por ser una nina aplicada e inteligente. Que le esperaba un futuro brillante y que esos ninos que se reian de ella terminarian siendo unos alcoholico y holgazanes. Similares a los tipos de hombres que a su madre le gustaba. Respiro hondo. Solo le faltaba un ano para salir a buscar ese futuro. Sabia que no era una adolescente normal de dieciseis anos, mientras que sus companeras salian de fiesta y presumian a los chicos, ella pasaba tiempo en el sotano de su casa haciendo experimentos cientificos. Una vez Violette tuvo que llamar a los bomberos cuando mezclo quimicos que no eran muy amigos y el sotano empezo a incendiarse. Para su desgracia, a su rareza tambien debia agregarle su fealdad. Tal vez si hubiera nacido con mas belleza, ella no hubiera sido el centro de las burlas y las bromas en los ultimos dos anos. Solo a los raros le robaran su ropa mientras se duchaba despues de las clases de gimnasia. Cerro los ojos y espero paciente a que tocaran la campana y que el profesor ingresara a la clase y acabara con las risas hacia ella. --?Quieres de vuelta tu mochila, Rosalinda? --le pregunto Thomas. Ella asintio con la cabeza. Thomas Mcbelle era el hijo de un importante abogado con aspiraciones a la politica, se habia oido que el senor Mcbelle iba a postularse a un cargo en las proximas elecciones. Thomas habia sido su companero de ciencia por un semestre, antes de que ella se transformara en el bicho raro. El no habia soportado la presion de sus amigos cuando lo veian a un lado de ella. En esa epoca habia conocido lo que era el amor adolescente. El habia acaparado todos sus pensamientos, hasta que se convirtio en el patan mimado que venia de una buena familia, que se sentia mejor humillando a las personas que no eran de su clase. Pero Violette, su madre, se habia equivocado con Thomas Mcbelle. El tambien tenia un futuro brillante. Thomas era guapo, inteligente y un buen deportista. --No te oi, Rosalinda ?quieres tu mochila si o no? Ella abrio los ojos. --Si, quiero que me devuelvan mi mochila, Thomas. <
>, susurro Alison entre risitas. Alison pertenecia a la misma casta que Thomas. < >. Bendecidos de belleza, popularidad y podian darse el lujo de viajar hacia donde quisieran y tener todo lo que deseaban. Thomas miro hacia el techo y levanto una mano hacia arriba. --Esta muy alto, no alcanzo --se mofo--. Pero si... enciende el ventilador Ben --se inclino hacia ella y agrego--: Asi la bajaremos mas rapido. --!No! --Chillo, levantandose del pupitre y se subio las gafas un poco mas por encima del tabique de la nariz--. No enciendas el ventilador, Ben. Tarde. Ben habia encendido el ventilador y su mochila volo por el aire y todas sus cosas se desparramaron. Dejaron de reirse cuando su profesor de literatura ingreso a la clase. Ella se agacho para recoger sus cosas y guardarla nuevamente en la mochila. --?De quien es esto? --pregunto su profesor. Alzo la vista y observo a su profesor ensenando una toallita femenina. Sus mejillas ardieron de verguenza. --Es de Rosalinda --respondio Alison. Su profesor la miro de golpe. --?Es tuya Rosalinda? --replico el. Ella asintio con la cabeza y todos comenzaron a reirse. Quiso que la tierra se abriera y la tragara. Miro a su alrededor y solo veia la pizarra que decia: < >. Los ojos se le llenaron de lagrimas y quiso desaparecer. Salio corriendo de la clase con un solo pensamiento: Thomas Mcbelle pagaria caro lo que le habia hecho. 1. DIVERTIRSE NO ES UN PUNTO APARTE Quince anos despues... OTRA VEZ su madre habia dejado puesta la llave en la cerradura. Eso significaba que estaba de visitas. Golpeo la puerta con el puno cerrado para que le abriera. Maldijo el momento en el que decidio darle un juego de llaves de su departamento. Fruncio el ceno cuando Violette Cooper le abrio. --?Llevas puesta mi bata, mama? Violette le sonrio por encima de la copa del martini. --Puse a lavar mi ropa y no tenia que ponerme --respondio--. Andaba cerca y no quise irme sin saludar a mi pequena galletita. Puso los ojos en blanco cuando su madre la abrazo. Violette se habia escapado de su casa cuando quedo embarazada siendo una adolescente y desde entonces, su vida habia sido toda una aventura. Eran ellas dos contra el mundo. Cuando cumplio once anos le imploro que se instalaran en un solo lugar, se habia cansado de mudarse de un lado a otro todo el tiempo. A pesar de que a Violette le gustaba divertirse y hacer largos viajes por la carretera, decidio complacer a su pequena galletita y se quedaron en Londres hasta que ella termino sus estudios, luego ingreso a la universidad y Violette siguio con sus aventuras. --?Planeas quedarte mucho tiempo? --le pregunto. Violette le desprendio el primer boton de la camisa. --Deberias ensenar mas piel, galletita. Ella resoplo. --Rosa, mama, deberias empezar a llamarme por mi nombre. Conto hasta tres cuando ingreso a la sala y observo el desastre que le habia dejado en las pocas horas que habia estado en su departamento. Siempre habia tenido que ocuparse de su madre y actuar como una persona adulta y responsable. Su estado emocional era muy cambiante, Violette podia pasar de la alegria, a la tristeza absoluta en cuestion de segundos y viceversa. Era una hermosa mujer que no aparentaba sus cuarenta y siete anos, nadie les creia cuando decian que eran madre e hija. Para su mala suerte, no habia sacado ningun rasgo de Violette, probablemente se parecia a su padre. --Relajate un poco, Rosa --le pidio con una sonrisa amplia--. Estoy preparando martini, ?quieres uno? Ella asintio con la cabeza. Dejo su bolso sobre el sofa y se sento en el taburete que estaba delante de la barra de la cocina. --?Mike tambien vino a la ciudad? --quiso saber. Mike era una de las tantas parejas que habia tenido Violette y el que mas le estaba durando. --No lo menciones, Rosa --repuso a secas--. Hemos terminado --concluyo, arrojando una aceituna en la copa. Habia creido que Mike seria el definitivo. Cada vez que los veia juntos, parecian estar completamente enamorados. Mike habia sido el unico hombre que habia logrado calmar las locuras de Violette. Tal vez ayudaba que ambos fueran tan diferentes. Mike era un respetado profesor de matematicas y su madre una belleza que lo hacia divertir. Bebio un sorbo de martini y dejo la copa sobre la barra. --Mike es un buen hombre, mama ?por que lo has dejado? Violette lleno su copa con la bebida y la miro como si la hubiera ofendido. --?Por que me haces responsable de la ruptura, galletita? --Porque no seria la primera vez que lo hicieras --replico. El labio inferior de Violette empezo a temblar. --Mike me esta enganando con una de sus alumnas --dijo, al borde del llanto--. ?Sabes que significa eso? Que no puedo competir con alguien mas joven. !Estoy vieja Rosa! Ella se levanto del taburete, rodeo la barra y abrazo a Violette. --No estas vieja, mama --mascullo--. Ya decia yo que eras mucha mujer para un enano, barrigon y pelado. Violette se sorbio la nariz con el dorso de la mano. --Siempre tuve debilidad por los feos... --Ni me lo digas, me veo en el espejo todas las mananas --se mofo. Violette ahueco una mano en su mejilla. --Pero tu no eres fea, galletita. Su madre se negaba aceptar que ella no habia heredado ningun gen suyo. Hubo un tiempo hasta que dudo ser hija de Violette. Pero desecho esa idea cuando se hizo un ADN como trabajo practico en la universidad y el resultado fue de noventa y nueve coma nueve por ciento de compatibilidad. --A veces no puedo creer que de mi haya salido una hija tan inteligente --continuo--. Eres mi orgullo, galletita, disfruto decirle a todo el mundo que tengo una hija cientifica que pronto eliminara las arrugas. Ella sacudio la cabeza y sonrio. El telefono de Violette empezo a vibrar y supo que era Mike por el modo como su rostro se transfiguro. --?No vas a atenderlo? --le pregunto. Violette apago el aparato y lo metio en el horno. --No --dijo--. Que llame a su alumna. Ella fruncio el ceno. --?Estas segura que Mike te engana? -
La Decada que nos dejo sin aliento de Juan Eslava Galan
https://gigalibros.com/la-decada-que-nos-dejo-sin-aliento.htmlLa decada que nos dejo sin aliento pertenece a la serie dedicada al siglo XX, de la que ya han aparecido tres volumenes que abarcan desde 1936 a 1959. Esta vez el tema son los anos comprendidos entre 1973 y 1982: comienza con el asesinato de Carrero Blanco y termina con Alfonso Guerra levantando la mano de Felipe Gonzalez en una ventana del hotel Palace de Madrid tras la victoria socialista en las elecciones. En ese decenio escaso, el pueblo espanol transita de la dictadura a la democracia tras navegar por los turbios anos de la Transicion. Es probablemente la etapa mas decisiva e interesante de nuestra historia contemporanea, llena de torpes improvisaciones y de pactos contra natura. Nuevamente los familiares personajes de la serie (Chato Puertas, don Proculo, la Uruguaya, etc.) nos llevaran de la mano a traves de esos anos en los que Espana experimenta una revolucion social y politica sin precedentes.
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Casi compatibles de Anna Garcia
https://gigalibros.com/casi-compatibles.htmlElliott y Rachel no son compatibles porque tienen un pasado muy diferente.
Elliott y Rachel no son compatibles porque viven en barrios totalmente distintos.
Elliott y Rachel no son compatibles porque tienen trabajos muy dispares.
Elliott y Rachel no son compatibles porque sus amigos no tienen nada en comun.
Elliott y Rachel no son compatibles porque sus hobbies no tienen nada que ver.
Elliott y Rachel no son compatibles porque tienen diferentes prioridades en la vida.
Elliott y Rachel si son compatibles porque los entrometidos de sus amigos asi lo deciden y porque, a veces, un 49% de compatibilidad es suficiente para darse cuenta de lo perfectos que son el uno para el otro.
Son. Casi compatibles.
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Lagrimas de angel (Serie Extrarradio, #1), Juani Hernandez de Juani Hernandez
https://gigalibros.com/lagrimas-de-angel-serie-extrarradio-1-juani-hernandez.html -
Una maldita historia de Bernard Minier
https://gigalibros.com/una-maldita-historia.htmlLluvia, viento huracanado y un ferri que, en mitad de una noche gelida en el oceano Pacifico, se bambolea a merced de las olas. Ajenos al temporal, dos adolescentes, Henry y Naomi, se pelean en cubierta. Al dia siguiente, el oleaje arrastra el cuerpo inerte de ella atrapado entre redes de pesca. Henry tiene dieciseis anos, y la burbuja sobreprotectora en la que ha crecido esta a punto de estallar, provocando un giro radical en su vida y en el lugar en el que reside desde siempre, Glass Island.
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Esclava de Fuego, Fantasia Erotica con la Princesa Virgen y el Senor de los Dragones de Sara Toledano
https://gigalibros.com/esclava-de-fuego-fantasia-erotica-con-la-princesa-virgen-y-el-senor-de-los-dragones.htmlLos lamentos del hombre retumbaron en el gran campo de batalla. Con una pierna fracturada y con su caballo mal herido a su lado, las suplicas fueron su unica alternativa. ?La razon? Estaba rodeada del olor de la muerte. De trozos de cuerpo, de sangre, de agonia. Era asi. Por donde se mirara. Apenas tuvo fuerza para moverse lo suficiente como para tratar de hablar con fuerza. Sobre el, estaban las patas de un enorme caballo negro. Con el resoplido en el hocico y con los globos oculares rojos de ira. La mirada fria de un par de ojos grises, le hizo sentir que cualquier cosa que le dijera, era inutil. El caballero era el senor de esas tierras y el desafio de invadirlas, requirio pagar el precio. La osadia era un descaro que no pudo pasar por debajo de la mesa. No ante El Padre. La tierra retumbo sobre el cuerpo del hombre porque el caballero de ojos frios, bajo de su fiel animal. Acaricio su cabeza por un rato, como ignorando la presencia de esa pobre alma que imploraba misericordia. -Por favor, mi senor. La gente habla que usted es poderoso, que usted es valiente y que sabe el valor de la vida. Usted debe de saberlo porque arriesga la suya cuando va en batalla. Senor... El Padre dio unos cuantos pasos hasta que su enorme sombra cubrio por completo la figura disminuida del hombre herido. -No todas las vidas tienen valor, mi senor. El no supo que decir ante semejante respuesta. En parte porque las palabras hicieron eco en su mete y retumbaron hasta en el ultimo rincon de su cuerpo. Sin embargo, tambien era porque la presencia de su interlocutor, le resultaba intimidante y mas aun cuando lo miro despojarse de su casco. Al hacerlo, los cabellos de un rojo encendido, se movieron con el viento, luciendo como unas largas e intensas llamadas. Su figura alta, altisima de mas de 2 metros, se impuso ante la planicie de lo que fue una vez un escenario de muerte y desesperacion. Dejo el casco en el lomo del caballo y se agacho para hablar con un poco mas de cercania. En esa posicion, el hombre pudo admirar con mas temor la contextura de El Padre. Piernas y muslos enormes, torso firme, brazos de hierro. Una espalda ancha y gruesa. Parecia mas una bestia que un hombre. -Por favor, senor. Me han hablado de su misericordia, de que es capaz de perdonar, que tiene buen corazon. El sonrio con ironia. -?En serio? ?Asi se refieren a mi? ?Como si fuera una buena persona? Vaya, eso si que es nuevo. -Se lo suplico, mi senor. Tengo esposa e hijas. Solo quiero regresar con ellas. El Padre extendio su mano cubierta del metal brillante de la armadura para acariciar el menton del moribundo. Contuvo unas palabras porque le parecio divertido verlo asi, humillado. -No hara falta, mi senor. Ellas lo estan esperando en el otro lado. Se coloco de pie con rapidez y antes de que el hombre pudiera exclamar palabra, el acero caliente de la espada del caballero, corto su cabeza limpiamente. El aire se cargo del olor metalico de la sangre. Al fondo, el sonido de las aves en el cielo. -Hoy fue un buen dia. A cientos kilometros de alli, un monarca de un reino prospero y libre, miro con preocupacion una correspondencia que se le entrego horas antes. En pocas palabras, una gran amenaza se acercaba a pasos agigantados. En vista de la situacion, se levanto de la silla y dio unos cuantos pasos por el estudio. El unico espacio en que se permitia estar lejos de la guardia real. La verdad, era que no sabia que hacer. Se llevo las manos en la cabeza y siguio preguntandose cual era la mejor solucion. Sin embargo, era algo dificil de decir. Temia por si mismo y por su gente. II -Mi senora, no puede permanecer demasiado tiempo aqui. Es peligroso para usted. -Venga, Eleonora. No pasa nada. He venido para aqui infinidad de veces. Aqui ya me conocen. -Por eso se lo digo. Aqui saben que usted es la princesa y podrian hacerle dano. -Confia un poco en la gente, Eleonora. No todos son tan malos como crees. Helena camino por la calles del bazar sin preocupacion alguna. Fue de aqui para alla, comprando, mirando y riendo. Era lo que mas le gustaba hacer durante los dias que tenia tiempo para bajar al pueblo. El conocer a la gente, el de saber como vivian. Desde nina siempre fue asi. Al principio, sus padres la sometieron a un regimen estricto de vigilancia debido a que se escapa demasiadas veces. Sin embargo, llego el punto en que se rindieron y optaron dejarla pasearse entre la gente como quisiera. Asi llego a volverse tan familiar como una mas del monton. Esa identidad de mujer comun y corriente le daba una agradable sensacion de que por lo menos algunas horas, podria pretender que era alguien mas. Por otro lado, hubo un hecho que no se dejaba escapar del ojo publico. Era innegable su belleza. Era alta, de tez blanca y ojos verdes. Su cabello, largo y dorado, siempre estaba arreglado con trenzas porque le gustaba la sensacion de libertad que le daba. La nariz recta y los labios finos, una cintura pequena y un andar dulce que la hacia ver como si flotara sobre el suelo. Su imagen era impactante para quien la viera. Su personalidad dulce tambien resaltaba por su caracter fuerte. No temia ser sincera ni decir las cosas de frente. Fue por ello que mas de una vez se metio en problemas con su padre. A pesar de eso, el rey la consideraba su mas preciado tesoro asi que trataba de cuidarla y protegerla tanto como podia. Mientras seguia hablando con su dama de compania, la guardia real se abrio paso en el medio del camino. La gente los miro pasar impresionada pero solo por unos segundos. Al poco tiempo, recobraron la cotidianeidad, sin embargo, Helena tuvo el presentimiento de que algo habia pasado. En contadas ocasiones, ellos actuaban con premura. Aquello era un mal augurio. -Mi senora, mejor vamonos. Ya se esta haciendo de noche y no es seguro. -Esta bien, esta bien. Recogio su cesto y se encaminaron al castillo. El paseo le resulto agradable y desde ese momento, comenzo a planificar el proximo dia. -Quizas una caminata, quizas una cabalgata por el bosque. Si, no es mala idea. - Se dijo a si misma mientras sonria para sus adentros. Al llegar al castillo, se encontro con lo mismo de siempre. Los sirvientes caminando de un lado para el otro, lo cual daban una sensacion de bullicio que le animaba. Asi no sentia que el gran castillo era un lugar vacio o triste. Subio las amplias escaleras y entro a su habitacion la cual ya estaba comenzando a oscurecerse. Dejo el cesto sobre la cama, busco varias velas y las encendio. Se sento y comenzo a revisar lo que tenia entre las cosas que habia comprado. Unas cuantas manzanas y un panuelo de seda. Toco la tela y cerro los ojos. Era tan suave, tan delicada que temio romperla. La doblo delicadamente y la coloco sobre una mesita de noche que tenia alli.
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Dime que no es un sueno de Anabel Botella
https://gigalibros.com/dime-que-no-es-un-sueno.htmlCuando el amor verdadero llega a tu vida ni la muerte podra arrebatartelo
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Un grito de honor de Morgan Rice
https://gigalibros.com/un-grito-de-honor.htmlEn UN GRITO DE HONOR (A CRY OF HONOR) – [Libro #4 de El Anillo del Hechicero – (The Sorcerer’s Ring), Thor ha regresado de Los Cien como un guerrero endurecido, y ahora debe aprender lo que significa la batalla por su patria, combatir por la vida y la muerte. Los McCloud han invadido el territorio de los MacGil – mas adentro que nunca en la historia del Anillo – y mientras Thor cabalga hacia una emboscada, caera sobre su cabeza repeler el ataque y salvar la Corte del Rey.
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Tu habla, que yo te leo de Jose Luis Martin Ovejero
https://gigalibros.com/tu-habla-que-yo-te-leo.html?Prefieres saber solo lo que te quieran contar
o conocer tambien lo que te cuenten sin querer? -
La peor pesadilla, Mark Edwards de Mark Edwards
https://gigalibros.com/la-peor-pesadilla-mark-edwards.htmlA Izzy, se lo llevaron de su casa.
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Matrimonio en guerra (Los Knightley 1) de Ruth M. Lerga
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Locamente atraido a ti de Dani Eliott
https://gigalibros.com/locamente-atraido-a-ti.html -
La edad de la luz de Whitney Scharer
https://gigalibros.com/la-edad-de-la-luz.htmlModelo de portada, musa de Man Ray y reportera grafica durante la segunda guerra mundial, Lee Miller fue una artista casi desconocida por el publico no iniciado. En esta novela intima y vibrante, Whitney Scharer recorre las multiples facetas de la vida de esta fotografa extraordinaria para otorgarle el merecido reconocimiento que su epoca le nego.
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El guardes silente (El librero de toledo 2) de Manuel Peitado
https://gigalibros.com/el-guardes-silente-el-librero-de-toledo-2.htmlHan pasado cinco anos desde que Domenico, nuestro joven protagonista,ingreso en un centro psiquiatrico para expiar sus culpas y cancelar su deuda con la sociedad. La Espana con la que amanecera, nada tiene que ver con aquella que dejo en 1.975. Su liberacion nos hara plenamente conscientes y participes de la inminente justicia, que irremisiblemente llegara a todos los que propiciaron muertes sin sentido, con un desproposito lleno de impiedad y locura. En esta segunda entrega, el protagonista no dudara en adentrarse en los ambientes mas sordidos de la epoca y nos hara vibrar, sufrir y disfrutar con sus andanzas que nos deja expectantes, esperando su destino que hacemos nuestro. Personaje querido y odiado que, gracias a su autor, sigue sin dejarnos indiferentes y que nos lleva de la mano hasta las profundidades de un final inesperado y, quizas, fatal. Domenico, hombre sadico y nino desvalido fuertemente influenciado por los conflictos de su entorno, emprendera una lucha encarnizada contra aquellos que creen que gozan de un poder omnimodo que les permite burlar las leyes y dar justicia a su capricho. Manuel Peiteado aborda asuntos tan delicados como la pederastia, la homofobia o mismamente el sado, que no dejara indiferente al lector. Novela trepidante que seduce y enamora por su ritmo, escrita sin artificios y en la que la intriga va in crescendo a lo largo de sus paginas.
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Yo no soy de nadie de Tamara Marin
https://gigalibros.com/yo-no-soy-de-nadie.htmlAlba ha tenido una infancia muy dura que le ha hecho no creer en el amor y no querer comprometerse con nadie, bajo ningun concepto. Ella no es de nadie. Tiene suficiente con su floristeria, sus amigas y algun ligue de vez en cuando.
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Caribes (Cienfuegos 2) de Alberto Vazquez-figueroa
https://gigalibros.com/caribes-cienfuegos-2.htmlSegunda entrega de esta celebre saga, Caribes continua las apasionantes aventuras de su protagonista, un joven canario en el Nuevo Mundo, un mundo hostil y desconocido.
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LA ELEGIDA. EL NUEVO MUNDO de Eva Olarra Diez
https://gigalibros.com/la-elegida-el-nuevo-mundo.htmlCuando en la tierra ya nada es lo que era y todo lo que conocimos ya no existe, se establece un nuevo orden con nuevas criaturas que hacen que la supervivencia sea un milagro. En la actualidad esta poblada por brujos, guerreros oscuros y otras criaturas sin alma.
En todo este caos Veronica, la elegida y Jayden, un guerrero oscuro tendran que descubrir la verdad y enfrentarse a su propio destino. -
El temblor del heroe de Alvaro Pombo
https://gigalibros.com/el-temblor-del-heroe.htmlRoman es un profesor universitario jubilado al que invade la nostalgia de los dias luminosos de la pedagogia en que fascinaba a sus alumnos despertandoles el amor por el saber y ayudandoles a alcanzar una vida mas noble y mas alta.
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Te encontrare en la oscuridad de Nathan Ripley
https://gigalibros.com/te-encontrare-en-la-oscuridad.htmlMartin Reese tiene un pasatiempo: los crimenes. Meticulosa y obsesivamente, se entrega desde hace anos a ese perturbador hobby a espaldas de su mujer y de su hija adolescente: tras obtener en el mercado negro los expedientes de los mas variados asesinos en serie, los utiliza para localizar y desenterrar los cuerpos de aquellas victimas que la policia nunca logro descubrir. Saca fotos, las guarda en su viejo portatil y solo entonces da un aviso anonimo a la comisaria sobre el hallazgo. Esta aficion es para el un servicio publico, una reparacion de danos alli donde los investigadores fracasaron.
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Juego de pasion de Nicola Marsh
https://gigalibros.com/juego-de-pasion.htmlLa remilgada y puritana Charlotte Baxter dejo salir su parte traviesa la noche que conocio a un hombre muy sexy. Estaba encantada. hasta que descubrio que el hombre misterioso era tambien su nuevo y exigente jefe. Con su carrera como prioridad principal en su vida, una aventura con Alex Bronson era algo prohibido. ?Por que, entonces, estaba dispuesta a arriesgarlo todo a cambio de otro encuentro ardiente?
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El buque del diablo de Ildefonso Arenas
https://gigalibros.com/el-buque-del-diablo.htmlEl Imperio otomano se alio con Alemania y Austria-Hungria en la Primera Guerra Mundial. Eso dio lugar, entre otras consecuencias catastroficas, a que la guerra durase dos anos mas de lo que habria debido, a las dos revoluciones rusas de 1917 y a la dictadura bolchevique, al genocidio del pueblo armenio, a quince millones de muertos y a la desmembracion del Imperio otomano, con el nacimiento en Oriente Medio de una miriada de nuevos estados cuya inestabilidad social, economica y politica sigue sin resolverse un siglo despues. Si en los albores de la I Guerra Mundial el crucero de batalla aleman SMS Goeben, aislado en medio del Mediterraneo, no hubiera esquivado a fuerza de audacia y astucia a las armadas francesa y britanica, para buscar refugio mas alla de los Dardanelos, nada de todo eso habria ocurrido. Esta es la historia no solo del Goeben, sino tambien del hombre que lo comandaba, la historia de un hombre que, actuando por su cuenta, bajo su propio criterio, cambio el destino del mundo.
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La sonata sin nombre de Beatriz O'shea
https://gigalibros.com/la-sonata-sin-nombre.htmlLa historia de amor imposible entre una joven de la alta sociedad y un violinista de origen rumano en el entorno de posguerra y espionaje del Madrid de los anos cincuenta.
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El caso Demichellis de Francisco Marin
https://gigalibros.com/el-caso-demichellis.htmlUn intenso thriller que se desarrolla en las calles y juzgados de Ibiza y que atrapara al lector desde las primeras paginas.
Eduardo Ribas es juzgado y condenado por el homicidio de una enfermera (Ana Lopez Demichellis). Ni Raul Ballesteros, un prestigioso abogado politicamente incorrecto, ni la hermana de la victima (Raquel), una bella y sensual joven, estan convencidos de la culpabilidad del hombre que acaba de ser condenado. Ambos deciden contratar a un extravagante detective pero dotado de grandes facultades deductivas para intentar esclarecer los hechos.
Una vez iniciada las investigaciones, la primera circunstancia que llama la atencion del detective (Alex Zarco) es el hecho de que el ultimo paciente de Ana, enfermera de la Unidad de Cuidados Intensivos, fue un hombre tiroteado.
Dos crimenes violentos en una isla tranquila como Ibiza en invierno parecen demasiada coincidencia. ?Tendran alguna relacion o sera pura casualidad? -
El purgador de pecados de Alfonso Sierra Garrido
https://gigalibros.com/el-purgador-de-pecados.html?Puede una persona que se dedica a matar a gente tener sentimientos? Martin llego a esta profesion de manera accidental y ahora mantiene una lucha interna para buscar sentido a su vida.
El purgador de pecados narra una historia llena de accion al lado de su protagonista, una novela sobrecogedora que discurre entre los bajos fondos de la sociedad y la alta burguesia, de los instintos mas primarios y salvajes a los sentimientos mas puros que puede tener el ser humano, de la ciudad al ambito rural de Espana. Un thriller desgarrador en el que Martin se tendra que enfrentar a la prueba mas dificil de su vida. -
Eres mio de Lina Perozo Altamar
https://gigalibros.com/eres-mio.htmlPandora Corneille, es una mujer aparentemente normal que llega hasta una afamada galeria de arte en la ciudad de Nueva York, para ocupar el puesto de restauradora. Con el fin de recuperar lo que considera suyo, sin importar el precio que debera pagar.
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Sonar en puntas de Laura Benito
https://gigalibros.com/sonar-en-puntas.htmlTodos corrian por los pasillos. Desde fuera se podian sentir los nervios a flor de piel que habia. Estabamos listos para esto. Ibamos a conseguirlo. Me dirigi a mi camerino. Sally ya me habia dejado todo listo. Mi traje. Mis puntas. Mis pasadores. Mi maquillaje. Pero me seguia faltando lo que yo mas necesitaba. Lo necesitaba para triunfar. Alguien toco mi puerta. -Senorita Price, primer acto en 40 minutos. Tenia 40 minutos, no se si para arreglarme o para convencerme de que podia hacerlo sin ello. Me coloque mi traje. Verdaderamente parecia un cisne. El maillot1 lleno de pedreria de diamantes, palabra de honor, unido directamente al tutu blanco nieve continuado con las preciosas piedras era impecable. El tul2 era un tono blanco roto para que quedase mas perfecto el contraste del cisne. Sally me habia colocado todo el maquillaje perfectamente ordenado, pieza por pieza. Me hice el mono trenzado y pegado en la parte baja de la cabeza, como tradicionalmente se hace. Me esparci por la cara la base liquida de polvos de talco para dar el tono de cisne. Todavia me acuerdo de aquel dia, el dia en el que vi la fotografia de mi abuela Mara situada en lo alto de su salon. * * * Tendria alrededor de siete u ocho anos. Yo estaba tranquilamente jugando y rondando por la casa de mis abuelos, cuando alce la cabeza para contemplar algo que habia visto por el rabillo del ojo. Ahi estaba, se trataba de una fotografia tomada en el ano 1972, como bien ponia en el pie de foto. Era una fotografia en blanco y negro, tomada en el momento justo en el que una bailarina realizaba una posicion intacta y hermosa. Llevaba un maquillaje de ojos muy extranos, con unos adornos en la cabeza que lo asemejaban a plumas negras. En los pies llevaba unas extranas zapatillas y se sostenia sobre ellas. Era lo mas parecido a un cisne, pero oscuro. En ese momento me quede inmovil alli de pie. Fue entonces cuando la abuela Mara entro, y al verme alli sorprendida, lanzo una sonrisa esplendida y se sento a mi lado, en el sillon donde ella solia coser. -Pequena Jackie, ?Sabes quien es esa joven bailarina? -No abuela. -Soy yo carino, en el mejor dia de mi vida, antes de tener a tu madre claro. – ?Eres tu abuela? ?Que estabas haciendo? ?Y sobre que te sostienes? Esos zapatos son un poco extranos. Mi abuela rio y juraria haber visto asomarse una lagrima, ?de felicidad? -Carino, se llaman puntas, las utilizan las bailarinas de danza clasica. – !Quiero unas! -No es tan sencillo de utilizar carino. Ese dia estaba representando al cisne negro. De la obra de El Lago De Los Cisnes. – ?Sigues bailando abuela? -Oh no, no carino, ya deje de hacerlo hace mucho, cuando tuve a tu madre. Pense que quizas ella seguiria mis pasos, pero tu mama era mas partidaria de otro estilo de baile moderno. -Abuela yo quiero ser como tu. Quiero ser una bailarina. -Mi pequena bailarina. Y se le cayo la lagrima. En ese momento lo supe. Volvi a mirar la fotografia y esta vez, la lagrima se me cayo a mi. No logre saber por que, pero lo que si sabia era que, si mi madre no lo habia hecho, seria yo quien lo haria. Yo seguiria los pasos de mi abuela. * * * Y ahora que habia llegado hasta aqui, no estaba. Lo que mas apoyo me daba, mi pilar, la razon por la que empece a bailar. La fotografia de mi abuela, no estaba. Acabe de arreglarme justo cuando escuche a Step gritar. -Cinco minutos para el primer acto pequenas cisnes. Me coloque mis puntas y cuando iba a salir, alguien volvio a llamar a mi puerta. Abri. Ahi estaba. Despues de todo, habia tenido el valor de venir. Pero, ?a que? No solo me habia destruido a mi, sino que, ?tambien queria destruir mi sueno? Fui a hablar, pero no me dejo. -No digas nada, tan solo cogelo. Con toda la rabia que habia salido de mi, no me habia fijado en lo que llevaba en la mano. Me lo entrego. -Como has… -Luego tendremos el tiempo suficiente para hablar Cisne, pero ahora, tienes un sueno que cumplir. Antes de poder responder a eso, me beso, y se marcho. Me quede ahi parada, mirando como se marchaba, vestido de traje, ?Por mi? No lo sabia, pero no era el momento. Era mi momento, e iba a salir ahi y cumplir mi sueno, por lo que he luchado y he sufrido para llegar a cumplirlo. Antes de irme mire lo que me habia entregado y le di un beso. La fotografia de mi abuela. Capitulo 1 Mi primer dia estaba cerca. Iba a ser en una semana, mi primer dia en la Universidad de bellas artes de Seattle. Era el cambio radical que necesitaba. Llevo toda mi vida viviendo en Nueva Jersey. Mis padres y mis hermanos no quieren que me marche, pero tengo que hacerlo para lograrlo. – ?Vendras a vernos cada fin de semana Jacqueline? -Ethan, sabes que no puedo. Seattle esta a 41 horas de aqui. Pero vendre siempre que pueda a veros. -Bueno… esta bien, no te olvides de mi Jackie. Deje de colocar lo que me faltaba, me gire hacia el y lo abrace con todas mis fuerzas. -Nunca me olvidaria de ti Ethan. Te quiero muchisimo, ?me has oido? -Yo tambien te quiero Jackie. En ese instante entro en la habitacion Maverick. – !Yo tambien quiero! Y se tiro encima nuestra como de costumbre. Iba a echar mucho de menos a mis hermanos. Me encanta estar con ellos, y ayudarles en sus peleas tontas. Ambos son gemelos. Tienen diez anos menos que yo, es decir, nueve. Los dos tienen una melena rubia un poco larga, pero sin llegar a los hombros ni mucho menos, y unos grandes ojos azules. Si, ellos se habian llevado la parte buena de la familia. Mi mama era rubia con ojos claros y mi papa moreno con ojos claros al igual. Y yo, era la replica exacta de mi abuela Mara. Pelo largo, liso y de un tono chocolate con mechas mas claras que me hice el verano pasado. Mis ojos eran de un tono caramelo y bastante grandes. No me quejo de nada la verdad, todo lo que he heredado de mi abuela, es una maravilla. Me dirigi abajo. Mi padre ya habia puesto en la entrada de casa todo el equipaje necesario. Las demas cosas necesarias para vivir, ya estaban en mi nuevo cuarto en la residencia de la universidad. Mis padres me dieron la opcion de alquilar a las afueras del campus un pequeno apartamento para mi sola. Pero lo cierto es que no me apetecia mucho. Tenia esa ilusion de sentirme una universitaria, y tener mi cuarto con alguna companera extrana como en todas las peliculas y libros que habia visto hasta ahora. Mi padre estaba sentado en la cocina junto a mi madre mirando fotos. Cuando me acerque pude ver que se trataban de mis primeros dias en ballet. En la academia de la senorita Hudson. Mi madre estaba llorando, la abrace por detras. -Parece que fue ayer cuando empezaste a bailar Jacqueline. -Lo se mama, a mi tambien me ocurre. -Jacqueline, ten mucho cuidado por favor. No hagas cosas de las que te puedas arrepentir, ni hagas tonterias, podrias lesionarte. -Esta bien papa. No os preocupeis por nada. Me despedi de todos. Nos dimos un gran abrazo y mi padre me llevo hasta la estacion de autobuses de Nueva jersey centro. Cuando me monte en el coche, me dio realmente pena dejar todo esto atras, todo esto con lo que yo habia comenzado, el lugar en el que di los primeros pasos de mi vida y el lugar en el que aprendi a bailar. Ahora yo, Jacqueline Price, iba a ser oficialmente una universitaria. Iba a dejar la pequena academia de la Senorita Hudson, por la gran Universidad, para conseguir mi sueno. Por mi abuela. En ese momento me acorde. -Papa, tengo que despedirme de la abuela, ve rapido. -Jacqueline no hay tiempo. -Papa, rapido, siempre hay tiempo para la abuela Mara. -Esta bien. No podia irme sin despedirme de ella. Estaba tan contenta de que su nieta siguiera sus pasos que cada vez que tenia una audicion, venia a verla, e incluso antes de acabar el acto, se levantaba y aplaudia como loca con sus lagrimas cayendo. Mi abuela era mi todo. La queria como a nada. Verdaderamente, no me iba a ir sin despedirme de ella. Porque gracias a ella, voy a donde voy. Mi padre aparco y antes incluso de parar, creo que yo ya estaba en la puerta de mi abuela. – !Carino! ?No tendrias que estar ya en la estacion? El autobus sale en 30 minutos.
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La tierra que pisamos de Jesus Carrasco Jaramillo
https://gigalibros.com/la-tierra-que-pisamos.htmlHoy me ha despertado un ruido en mitad de la noche. No un ronquido de Iosif, que, raro en el, a esa hora dormia a mi lado en silencio, medio hundido en la lana del colchon. He permanecido tumbada, con la mirada detenida en las vigas de haya que sustentan el techo, apretando fuertemente las sabanas en busca de una firmeza que el lino, tan sutil, me ha negado. Durante un buen rato me he quedado quieta, con los hombros contraidos y las manos cerradas. Queria volver a escuchar el ruido con nitidez para poder atribuirselo a alguno de nuestros animales y asi, tranquila, regresar al sueno. Pero, mas alla del aire agitando las ramas de la gran encina, no he percibido nada, y entonces, como por ensalmo, el viejo mito del intruso de ojos vaciados por la codicia se ha agarrado a mis tripas y ha empezado a devorarlas. Es agosto, las hojas de guillotina estan subidas hasta los topes y una brisa perfumada y calida mece los visillos. Los hace danzar de un modo tan hermoso que, en esta epoca, durante mis desvelos, me siento contra el cabecero y me quedo embelesada viendolos ondear cual delicados pendones. Aspiro las fragancias que el aire trae y que, por momentos, desplazan a los aromas estancados del cuarto. Llegan en oleadas, de la misma manera que el mar va depositando en la orilla los restos de un barco naufragado. En primavera el azahar de los naranjos florecidos lo ocupa todo, especialmente cuando cae la tarde. Dias antes de que eso suceda, el arbol siempre envia un mensajero. Jornadas todavia frescas en las que, repentinamente, un hilo fugaz avisa de que, en algun lugar de los contornos, la vida ha sido convocada a su renacimiento. Con los punos llenos de tela y los ojos cerrados, he tratado de concentrarme en la oscuridad exterior. Y asi, he imaginado que me asomaba al porche elevado sobre el fragante cesped que rodea la casa y, desde alli, he dirigido mi atencion hacia el frente, al lugar donde el predio se asoma al valle. A lo lejos titilan las farolas de gas del pueblo, encaramado como un galapago a las faldas del castillo. En mi mente desciendo los escalones de madera y camino unos pasos sobre la hierba humeda hasta la verja que domina el huerto de la terraza inferior. No oigo nada alli, ni siquiera el aspero roce de las hojas ya secas del maiz. Me giro hacia la casa para recorrer la parte trasera de la propiedad. En los tiestos sujetos a la balaustrada del porche crecen formas confusas. La campana de alarma cuelga del tejadillo sobre ellas y su cuerda casi las toca. A la izquierda del edificio se levanta la gran encina, un ser poderoso y rotundo, cuya copa invade parte del alero. Al otro lado, entre la vivienda y el camino, el pequeno establo con sus ventanucos enrejados y sus tejas alomadas. Dentro, ni siquiera se oye a la yegua rascar el suelo de pizarra con sus herraduras. Tampoco se oye a Kaiser, nuestro perro; era de suponer, porque es sin duda el animal mas indolente que se pueda imaginar. <
>. Y yo quiza sonrei por la ocurrencia y seguro que le di la razon para que se marchara pronto. Al parecer hay un lince, o un lobo, que lleva varias semanas merodeando por los alrededores del pueblo y que ha matado, dicen, a varias ocas y a algun cordero. Me lo conto el doctor Sneint en el dispensario de la guarnicion la ultima vez que fui al castillo en busca de las medicinas de Iosif. Mientras colocaba los frascos en mi alforja, el se levanto y, despues de repasar someramente los lomos de su biblioteca, extrajo un atlas de fauna iberica y me lo mostro. Del grabado me llamaron la atencion las patillas colgando a los lados de la boca y el aspecto puntiagudo de las orejas. < >. Tanto la idea de buscar los excrementos como la de abrirlos me resulto en aquel momento repugnante, pero luego, ya de vuelta a la casa, encontre las heces y no pude resistir la tentacion de revolver en ellas con un palo. Hacerlo no me resulto desagradable. Olian a conejo y, por su aspecto, se diria que esos animales solo se alimentan de pelo. Me he levantado y he prendido la lampara que tengo sobre la mesilla. Asomando el cuerpo sobre el alfeizar, he movido la luz a un lado y a otro en busca de signos del animal, pero enseguida me he dado cuenta de que la luna llena iluminaba mas que mi farol y he terminado por apagarlo. En cualquier caso, no he apreciado nada extrano. Quiza mi luz lo haya espantado. Los animales seguian tranquilos y yo he dejado que el aire templado que asciende por el valle me acaricie la cara. La luna llena tenia de un extrano amarillo las nubes detenidas sobre la llanura distante. He cerrado las contraventanas y me he vuelto a meter en la cama. Mientras regresaba el sueno, de nuevo mirando al techo, he reparado en que no hay hayedos en esta parte del pais. www.lectulandia.com – Pagina 7 2 Lo veo por primera vez con la manana bien entrada, mientras arreglo los geranios. Los pliegues de su chaqueta se cuelan por entre las lamas blancas de la verja que da al huerto, justo enfrente de mi. Iosif descansa en su mecedora a mi lado, aunque decir que descansa es, de algun modo, redundante, pues se pasa el dia recostado: en la cama, en el sillon del salon y, durante el buen tiempo, aqui, en el porche. Lo levanto cada manana, lo visto y lo siento donde corresponda segun la epoca del ano. Le agarro del codo y el, con pasitos cortos, se deja llevar de un lado para otro como un perrillo complaciente. La enfermedad lo ha reducido a una minima expresion de lo que fue. Un hombre que ha tenido a su mando divisiones, que ha dispuesto de las vidas de otros hombres, que ha asediado ciudades y pasado a cuchillo a enemigos y sediciosos. Me pregunto si sus viejos adversarios, aquellos a los que sometio hasta convertirlos en subditos de su majestad, conservaran la antigua furia con la que, sin duda, rindieron sus armas a este hombre a cuya sombra he vivido y cuya sombra es ahora todo lo que respiro. Su mente opera de manera discontinua y lo mismo pasa dos semanas callado, con la cabeza caida, incapaz siquiera de levantarse solo e incluso haciendose sus necesidades encima, que comienza a regir de manera repentina. En esos episodios, de duracion indefinida, se incorpora a la vida cotidiana tan plenamente que parece que nunca la hubiera abandonado. A veces regresa y se comporta igual que un paciente caprichoso. Si estamos en la cocina y me esta viendo cortar verduras, me exige que haga trozos grandes, y me explica, por enesima vez, que a el le gusta notar lo que esta comiendo. < >. En ocasiones, su cordura se remonta al pasado y se dirige a mi como si yo fuera parte de un recuerdo; me llama < > o < >, con tono marcial o almibarado, segun el caso. Y lo extrano es que nunca en la vida, ni cuando estabamos prometidos, me llamo asi, < >. Se diria que entre las grietas de su cerebro reverdecen viejos anhelos o el recuerdo de otra mujer a la que, sin duda, deseo durante sus largas ausencias; en la epoca en que las campanas se sucedian y parecia que el Imperio acabaria ocupando el globo entero. Por suerte, el que hace anos que no me visita es aquel hombre que hacia temblar los cimientos de mi mundo. El modo en que se enfurecia cuando el pequeno Thomas no declinaba correctamente, o cuando volvia manchado del jardin. Lo agarraba de la oreja, tiraba hacia arriba y casi levantaba al muchacho. Lo zarandeaba y no fueron pocas las veces en que recibio bofetones y golpes en los dedos con la regla de madera. Yo le suplicaba que lo dejara, que era solo un nino, y entonces el se volvia y me hundia con la turbidez de su mirada; la de quien ha bebido hasta hartarse la sangre bullente de los hombres. Una mirada cuyo recuerdo todavia me estremece y de la que aun quedan rastros en el fondo de sus ojos. www. lectulandia.com – Pagina 8 < >, me digo al ver los tallos agujereados. Son imposibles de exterminar y todos los anos tengo que arrancar muchas de mis plantas y quemarlas tras la casa, ya que es la unica manera de que la plaga no afecte a los ejemplares sanos. Las tomo por el tallo y las vuelco para sacarlas de los tiestos. La tierra oscura cae al suelo, siempre fresca y bien ligada, formando grumos esponjosos que yo me llevo a la nariz para embriagarme con sus aromas -
La joven esposa del multimillonario de Johnny Alexis
https://gigalibros.com/la-joven-esposa-del-multimillonario.htmlPunto de vista de Bianca Mi nombre es Bianca Donato. Tengo 18 anos y estoy en el ultimo ano de la escuela secundaria, aunque me graduare en dos meses, por lo que estoy muy feliz. Tengo un hermano y una hermana mayores que no viven conmigo ni con mis padres porque se casaron. Tambien tengo un sobrino de mi hermano al que adoro tanto. Tenemos una reunion familiar esta tarde. Estoy tan emocionada de ver a mis hermanos y a mi sobrino. Planeaba comprarle un regalo despues de la escuela. Es temprano en la manana y actualmente estoy escuchando una leccion de matematicas. Fui y sigo siendo una buena estudiante. Todavia estoy en el dilema de a que universidad quiero asistir porque hay muchas buenas universidades en EE. UU. Despues de que termino la leccion de matematicas, fui a mi segunda clase que tengo con mi amiga Mirian. Ella es realmente una buena persona y a veces es intimidada por eso. Y normalmente soy yo quien la ayuda a deshacerse de ellos. Tambien tengo dos amigas mas con las que salgo. Kenyerly siempre ha sido una burbujeante, mientras que Yeismar es mas sofisticada. Pero somos unas gran amigas junto con Mirian. Cuando sono la campana para el almuerzo, todos salieron corriendo hacia la cantina. Me encontre con las chicas y nos dirigimos hacia las mesas del almuerzo. Nos sentamos en nuestro lugar habitual y abrimos nuestro almuerzo. No nos gusta comer en la cantina, por temor a que nos envenenen los alimentos. "Bianca, ?tienes una reunion familiar hoy?", Le pregunto Kenyerly. "Si, estoy muy emocionada de ver a mi sobrino", chille. "Recuerdo cuando me enamore de tu hermano, fue tan humillante", se quejo Kenyerly. "Todavia no entiendo como te enamoraste de mi hermano cuando tenia 30 anos. Eso es como una diferencia de edad de doce anos ". La edad es solo un numero. Y tu hermano estaba caliente. Tal vez todavia este atractivo, pero no lo he visto en cinco anos ", explico Kenyerly. "Y tal vez tambien encuentres a alguien mayor, asi que no juzgues", intervino Mirian. Negue con la cabeza. "Yo creo que no. Prefiero chicos al menos tres anos mayores. "" Nunca se sabe ". Yeismar estuvo de acuerdo con Mirian. " Como sea, ayer hablamos sobre las peliculas. ?Cuando vamos a ir? " " Pasado manana. Es domingo, asi que estara bien " 'Genial' '. Terminamos el almuerzo a tiempo cuando la campana sono de nuevo. Fui a mi casillero para llevar mis libros para la siguiente clase. De camino al salon de clases, me tope accidentalmente con un hombre mientras hablaba con nuestro director. "Lo siento senor". Me disculpe. Me miro de arriba abajo y sus ojos se posaron en mis ojos. "No importa". Dijo rompiendo el concurso de miradas. Su voz era ronca y nada amistosa. Se dio la vuelta y continuo su charla con el director. Negue con la cabeza y entre al salon de clases. Mi profesor de ciencias ya estaba adentro, asi que me disculpe por llegar tarde y, afortunadamente, me dejo ir. *** Caminaba de regreso a casa y de camino compre un pequeno baul en una jugueteria para Thomas, mi sobrino. Tiene cuatro anos y esta loco por los baules y los coches. Tiene una coleccion completa de autos de alguna caricatura que ve y mi hermano se molesta bastante cuando alguien le compra un juguete nuevo porque ya tiene demasiados. Entre a la casa y fui a mi habitacion a cambiarme. Me di una ducha y me puse pantalones cortos y una camisa holgada. Escuche que la puerta se abria en la planta baja y los chillidos de Thomas. Me apresure a bajar para verlos ya en la sala de estar dejando sus cosas. Cuando Thomas me vio, corrio hacia mi y abrazo mis piernas. "Tia, te extrane". El sonrio mostrando sus dientes medio faltantes. Lo levante y lo sente en mi cadera. Yo tambien te extrane. Eres un nino grande ahora. " Le hice cosquillas en el estomago, lo que hizo que estallara en risas. Lo deje y fui a abrazar a mi hermano y a mi cunada. Ella es realmente una gran mujer y ama mucho a mi hermano. Le dijeron que ya no podia tener hijos y que tenian suerte de que Thomas naciera. Aceptaron ese hecho y estan agradecidos de tener a su hijo. Mi mama preparo el almuerzo y puso la mesa rapidamente. Thomas queria sentarse a mi lado y darle de comer. Creo que lo he echado a perder demasiado, pero es tan lindo. "?Como va la escuela, Bianca?", Me pregunto mi hermano. "todo marcha bien. Mi graduacion es en dos meses ". Me meti un trozo de papa en la boca. " ?Preguntaste acerca de las universidades? " " Bueno, todavia no lo se. Hay muchas universidades buenas y necesito ver en cual me aceptaran ", le explique. Mi mama de repente se aclaro la garganta. Gire mi cabeza hacia ella prestandole mi atencion. "En realidad, no necesitas esforzarte para ir a la universidad". "?Por que?" Frunci las cejas en confusion. "Porque no puedes ir a la universidad". "?Que?" Levante la voz. "No le levante la voz a su madre, senorita", dijo mi padre. "?Por que no voy a ir a la universidad?" "Porque te vas a casar". Capitulo 2 Punto de vista de William " Gracias Sr. Makled por ayudar a nuestra escuela. Estamos muy honrados y agradecidos ". Puse los ojos en blanco porque no podia verme por telefono. Hago esto solo porque mi prometida asiste a tu escuela. --No hay problema, senor Smith. Me alegro de poder ayudar ". Apague el telefono sin molestarme en decir adios. De todos modos, estaba haciendo ruido. Soy William Makled conocido como mil millones de habitantes de Nueva York. Tengo una hija que se llama Cristal y, lamentablemente, no tiene madre. Su madre biologica es una puta con la que me acoste una vez. Dejo a Sophia despues de dar a luz y le pague un dinero para que no la volviera a ver. Queria darle una madre a Cristal, asi que acepte un matrimonio arreglado. Conozco a los padres de mi prometida a traves de un amigo. Cuando vi su foto, la desee. Parecia alegre y amable y pense que seria la figura materna perfecta para Cristal. Cuando me encontre con la chica en una escuela, no esperaba que fuera mi prometida. Ella es realmente hermosa en realidad. Tambien me encanto su voz cuando se disculpo. No deberia sentirme atraido por una chica menor de 17 anos, pero algo dice que deberia cuidar de ella. Mi telefono sono y vi a la ninera de Cristal llamando. Cogi un telefono preocupado de que algo le pasara a Cristal. "?Hola senor?" " ?Hola Marisol?" "Cristal queria hablar con usted ". Ponla al telefono ". Escuche algunos pasos antes de que hablara la voz de Cristal. "!Hola papi!", Se rio. "!Hola princesa! ?Por que querias llamarme? ?Paso algo? " " No, esta bien. Te echo de menos. ?Cuando llegaras a casa? " Se que se ve triste por el sonido de su voz. "Tengo algo que terminar, luego llegare a casa y luego podremos jugar juntos, ?de acuerdo?" Pero debes ser una buena chica para Marisol. " " Esta bien. Te esperare. Te amo papa. Adios. " " Yo tambien te amo. Adios." Colgue el telefono y suspire. Siempre es asi. Realmente necesito casarme. Ya es grande y entiende todo menos la parte de su madre porque nunca le hable de esa puta. Volvi a trabajar en algunos papeles cuando recibi otra llamada telefonica. Frenare seriamente este telefono. Cogi el telefono ya molesto. "?Hola? " "Hola Sr. Makled. Llamo con respecto a Bianca ", dijo la voz del hombre por telefono. ?Quien es Bianca? Probablemente noto mi silencio cuando continuo. " Tu prometida. Soy su padre. " " Esta bien. ?Hay algun problema? " " Le contamos sobre su matrimonio y ella no esta muy contenta. Asi que pense que tal vez podriamos concertar una reunion. "" Si, claro. Dame un segundo." Revise mi horario para ver que el viernes por la tarde esta despejado. "?Entonces el viernes por la tarde esta bien? " "Si. Le informare al respecto. Adios " 'Adios' ". Ahora tengo que ocuparme de ella. Aprendera su lugar si tiene actitud. No soy la persona para castigar, pero si tengo que hacerlo, la castigare por ser una perra. Segui arreglando papeles y afortunadamente nadie volvio a llamar. Se estaba haciendo tarde y le prometi a Cristal que volveria a casa para jugar con ella. Termine los ultimos papeles y sali de mi oficina. Cuando llegue a casa, Cristal corrio hacia mi y me abrazo las piernas. Sonrei y la levante. "Hola princesa". "Hola papi". ?Vamos a jugar ahora? " " Si, lo estamos. Pero tengo que ir a cambiarme de ropa, ?vale? ?Me esperaras? "" Si. "Ella se rio. Bese su mejilla y la baje. Corrio a su cuarto de juegos de inmediato. Entre en mi habitacion y me puse un pantalon de chandal y una camiseta blanca. Estaba cansado pero no podia anular una promesa que le hice a Cristal, asi que corri a su habitacion. Estabamos jugando a la fiesta del te. A ella realmente le encantan las fiestas de te, incluso si no hay te. La amo mucho. Ella es lo mejor que me ha pasado en la vida. "?Has estado bien hoy con Marisol? " "Si. Ella me dio galletas como recompensa. " " ?En serio? Estoy feliz de escuchar eso. " " Papi, ?puedo preguntarte algo? " " Lo que quieras " " ?Cuando vendra mami? " Me acostumbre a esto, pero ahora tengo una respuesta diferente para ella. Ella estara feliz por esto. " Pronto traere a mama a casa. Puedes esperarla un poco mas, ?verdad? ", Grito y me abrazo." Puedo esperarla ". Ella se aparto y se sento frente a mi. "?Es bonita?" " Muy bonita". " No puedo esperar para jugar a las munecas con ella y hacer dibujos con ella". Sus ojos estaban muy abiertos y brillantes mientras hablaba de mi prometida. "?Le gusta hornear? " "Probablemente. Lo averiguaremos, pero ahora es hora de ir a la cama ". La levante y la puse en su cama de princesa. Empece a leerle una historia pero estaba en la segunda pagina. La cubri con su edredon rosa y la bese en la frente. Hoy ha sido un dia largo y solo queria dormir. Me alegre de que le gustara la idea de tener una madre. Solo es importante que ella sea feliz. Capitulo 3 Punto de vista de Bianca No puedo creer que MIS padres arreglaron un matrimonio para mi y con un hombre cuyo nombre no conozco. Esto es gracioso pero miserable al mismo tiempo. Y encima de todo, necesito conocerlo hoy. Solo espero que sea agradable, al menos. Deberia reunirme con el por mi cuenta porque mis padres dijeron que seria mejor si tenemos privacidad. Como, nada ayudara a esta situacion. Me vesti con un vestido negro con lunares blancos y me puse mis sandalias blancas. Si voy a encontrarme con mi "prometido", al menos voy a ser decente. No me gusta ponerme maquillaje, asi que solo me pongo rimel y brillo de labios. Guardo mi telefono y una billetera en mi bolso. Sali de la casa sin molestarme en despedirme de mis padres. El taxi llego justo a tiempo y me llevo al restaurante. Mi papa me dijo que dijera solo su apellido porque ya habia reservado la mesa. Le pregunte a la senora de la recepcion su apellido y ella me llevo a una mesa para dos. Esperaba que estuviera alli, pero no lo estaba.
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Rosa Cuchillo de Oscar Colchado Lucio
https://gigalibros.com/rosa-cuchillo.html“Es una de las mejores novelas que se ha escrito en el Peru sobre esa etapa terrible de la historia peruana.”
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Los Versos del Capitan de Pablo Neruda
https://gigalibros.com/los-versos-del-capitan.htmlCuando estos versos aparecieron, Pablo Neruda prefirio callar su nombre, pero muchos fueron los lectores que reconocieron en ellos la inconfundible voz del gran poeta latinoamericano, hombre de lucha y de pasion, en quien lo poetico y lo vital se suman armoniosamente. Solo a partir de la tercera edicion, el nombre de Neruda presidio estos poemas que funden el impulso revolucionario con el mas tierno y ardiente amor. Los versos del Capitan cuentan ya entre los mas famosos y leidos libros amorosos de nuestro tiempo.
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La forma de la oscuridad de Mirko Zilahy
https://gigalibros.com/la-forma-de-la-oscuridad.html -
Madona con abrigo de piel de Sabahattin Ali
https://gigalibros.com/madona-con-abrigo-de-piel.htmlRescatada del olvido a finales de los noventa, esta tercera novela de escritor turco Sabahattin Ali -fallecido de forma prematura en 1948- es uno de los acontecimientos editoriales mas llamativos de los ultimos tiempos. Traducida a una decena de idiomas y con ventas cercanas al millon de ejemplares, esta historia de amor desdichado entre un joven turco y una pintora alemana se ha convertido en un autentico fenomeno de culto en su pais, sobre todo entre la juventud, que con su lectura manifiesta la resistencia a la creciente erosion de los derechos civiles y reivindica una mayor apertura hacia Europa.
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La vida de la letra de Manuel Longares
https://gigalibros.com/la-vida-de-la-letra.htmlPor primera vez se reunen en un volumen con el titulode La vida de la letra las tres primeras obras de ManuelLongares, aparecidas entre 1979 y 1992. En este periodoel autor publico La novela del corse, Soldaditos de Paviay Operacion Primavera, que agrupo posteriormente bajoese titulo de <
>, que la presente edicionconserva. Estas obras de caracter experimental y degenero incierto en las que la narracion adopta formulasensayisticas o teatrales, constituyen un encendido homenajea la literatura, porque a diferencia de las ficciones, dondela imaginacion del autor se sirve de su experienciade la realidad para poner letra a la vida, en estas tres obrasse hace exactamente lo contrario, es decir, se da vidaa la letra. -
El desafio de Florencia de Alejandro Corral
https://gigalibros.com/el-desafio-de-florencia.htmlLa gran novela sobre la rivalidad entre Leonardo da Vinci y Miguel Angel Buonarroti.
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Temporal de Tomas Gonzalez
https://gigalibros.com/temporal.htmlMario y Javier salen de madrugada a pescar con su padre. Y desde las primeras lineas de esta novela con tintes de thriller psicologico es claro que la tormenta y el odio que sienten los hijos por el padre amenazaran a los tres personajes, hora tras hora de la travesia, con sumergirlos en la desgracia. No importa que tan abundante sea la pesca ni que tan imponentes sean las imagenes de la naturaleza que los rodea, pues las arremetidas del rencor nunca dejaran de sorprenderlos, y los hermanos se quedaran perplejos ante las ansias de acabar con el padre.
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Por encima de todo, Sophie Saint Rose de Sophie Saint Rose
https://gigalibros.com/por-encima-de-todo-sophie-saint-rose.htmlHope era feliz, hasta que Clay entro en su vida poniendosela patas arriba. La angustia de no saber que hacer, porque estaba a punto de perderlo todo, la estaba matando. Enamorarse de Clay era lo peor que podia ocurrirle en ese momento y debia decidir si seguir su vida o destrozar a las personas que la rodeaban por algo que no sabia si tendria futuro.
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Fuego Cruzado de Raul Garbantes
https://gigalibros.com/fuego-cruzado.html -
Los Plebeyos de Marta Lopetegui
https://gigalibros.com/los-plebeyos.htmlEl vuelo llegaba el lunes a las 6:40 AM. Estaba casi sin dormir. Su jefe no habia aceptado mandarle un remis. "Tenemos que ir nosotros", le dijo. "Nosotros", y lo mando a el. Habitualmente zafaba, pero esta vez estaba empezando a compensar unos dias que pediria para irse a Rosario. Necesitaba puntos a favor en ese juego de la oca que era su trabajo. Cartelito en mano, una hoja con el membrete de la compania y abajo escrito grande con marcador: "Manuel Cisneros Diaz". Cuando se abrio la puerta tuvo la misma sensacion de siempre: ?por que los viajeros se visten ridiculos cuando viajan?, ?que les cuesta averiguar que temperatura hara en destino? Habiendo tanta ropa neutra, zapatillas por ejemplo, ?por que algunos se empecinan en llegar a Buenos Aires a las siete de la manana de un dia de julio en ojotas? Iban saliendo algunos, que miraban con cara de naufragos a ver si alguien los habia ido a buscar. Dos mujeres medio grandes que se habian hecho intimas en la valla que separa a los viajeros de los buscadores de viajeros esperaban a los hijos que se volvian. Los dos se habian ido con la crisis de 2001 de aca y se volvian con la crisis de 2011 de alla. Parecian hermanas, seguramente si se hubieran encontrado antes habrian comparado las tenencias, los logros, los viajes, los poderes; ahora competian para ver cual de los dos hijos habia caido mas bajo. Hasta sospechaban las dos que habia cosas que no les habian dicho para que no se amargaran. Salio la tripulacion, impecables, hasta felices parecian. Por los altoparlantes las aerolineas avisaban que llegaban o que se iban. Aparecio por la puerta. Venia de traje, como recien banado y con calzoncillos limpios, bastante alto, pelado a proposito. Ni bien lo vio no tuvo dudas de que se depilaba todo. Sonrio y se dio cuenta de que era el porque haciendo como una pistola con la mano derecha disparo el indice y le dio al cartelito. Traia un juego de valijas, "maletas" les diria, buenas, caras pero no ostentosas. Como bolso de mano traia un morral de cuero negro como las valijas, que no le iba con el traje pero que tampoco chocaba. Buenos zapatos. Se paro un poco antes de encontrarse y saludarlo. A Manuel le sono su telefono. Una llamada de trabajo, dio instrucciones, espero una respuesta y corto, medio seco. Sonriendo, mientras le estiraba la mano, le dijo: --La diferencia horaria, estan casi cerrando. Cuando le fue a estrechar la mano se dio cuenta de que le tenia que dar un apreton y listo, si era medio fuerte mejor. Beso, en la oficina se daban beso todos con todos. Pero enseguida se dio cuenta de que el espanol era de los que besan a la madre y a las hermanas nada mas. ?A la novia? Hummm, no le parecio que fuera de los que tenian novia. Mucha facha pero algo olio que lo hacia dudar de que estuviera de novio. Linda voz tenia. Arranco diciendo: --Joder, que te he hecho madrugar. Por mi estaba bien que me mandaran un coche de una agencia vuestra, pero han insistido: que no, que ira por ti una de nuestras promesas, un joven muy emprendedor, asi en el viaje te va poniendo al corriente. ?Sera largo el viaje? Al hotel primero, por favor, que me tengo que duchar y hacer algunas llamadas. El carro cargado con las maletas choco con una azafata de Lufthansa, una alemanita preciosa, y Manuel se puso a gorjearle, que si estaba bien, que si le dolia algo, que como hacia para disculparse. A ella no le habia pasado nada, lo miro, entorno lo ojos, se ve que le gustaba el acento de Manuel, y espero a que avanzara. Nacho se corrio y lo dejo hacer. Hubo un revoleo de telefonos y se dieron cuenta de que paraban en el mismo hotel. En algo quedaron, pero quedaron en ingles y Nacho entendio lo que pudo. Tuvo otra vez la misma sensacion de sequedad vital. Le parecia que no corria liquido por sus venas, eso le pasaba cuando no dormia, cuando no dormia bien, cuando sentia que algo de todo el montaje fallaba mucho. El no queria estar ahi, no queria estar haciendo eso. Nacho sabia que era hora de arremangarse, de dejar de hacerse el distraido y de empezar a actuar y a la vez de dejar de actuar como un actor que se la pasa metiendo bocadillos. Ya no esperaba un protagonico, pero ser un actor de reparto, un extra con algunas lineas, ya lo tenia cansado. ?Como habia que hacer?, ?como era que se tomaba el toro por las astas y se dejaba de ver espaldas y mas espaldas, siempre por detras? Manuel le dijo: --Cada vez que vuelo mas de diez horas en lugar de jet lag tengo un subidon de adrenalina brutal. Llevame al hotel, una buena ducha, un desayuno bien proteico y arrancamos. ?Me llevaras a un buen lugar a tomar algo por la noche o eres de los que se cansan facilmente tu? -Mientras hablaba avanzaba hacia la salida, sin hacerse cargo de sus maletas, su abrigo, su carro y su lacayo. El viaje duro lo que dura un viaje Ezeiza-Recoleta a esa A las 7:22 pasaron por el peaje del aeropuerto y, como siempre, guardo el ticket. Despues no los cobraba, no tenia claro si debia pasar el gasto o si eso en realidad era un honor, poner el auto, poner el sueno, ponerse al servicio. Hasta unos meses atras se habia atrevido a pensar que sus suenos y el mismo tenian limites que no estaba dispuesto a negociar. Despues entendio que se negocia cuando hay otro negociando por la cosa, que hasta la negociacion con el mismo la habia ido perdiendo despacito. Llegaron al hotel, Manuel se bajo sin importarle donde dejaria Nacho el auto y las maletas. Retrocedio, se acerco bastante a la ventanilla y le dijo: --Me ducho y bajo, ?subes conmigo o me esperas a desayunar? Esperame aqui mejor, hare mas rapido si no me estoy chocando contigo mientras me cambio. Se veia que Manuel estaba acostumbrado a seducir a todos y a todo. Busco los tickets, estacionamiento, peaje, los puso juntos y se juramento que los cobraria o los cambiaria por algo, algo podia ser un dia mas en Rosario, con goce de sueldo. Ese viaje a Rosario era un algo para hacer de cuenta que tenia un proyecto. Faltaba convencerse a si mismo de que tenia sentido viajar, de que ya no era demasiado tarde. Lo unico que sabia era que tenia que ir en los proximos quince dias. Le habia hecho llegar las maletas y la notebook a la habitacion. Se quedo en el lobby del hotel, los diarios todavia eran los de ayer, los de ese dia los estaban mandando a las habitaciones y al salon donde se servia el desayuno. Se entretuvo mirando lo que les ofrecian a los turistas: dia de campo, las fotos mostraban un campo plano y muy verde con un asado al asador, gauchitas sirviendo empanadas y un gaucho con las patas chuecas por un malambo con boleadoras. El Tigre. Casas de cueros. El folleto del tango era la foto de una pareja enroscada de tal manera que parecia que era el hombre el que tenia un tajo hasta la ingle en el pantalon, los dos con los ojos cerrados, la mujer mordiendose un costado del labio como si fuera una propaganda de lubricante femenino. En fin. Si a Manuel le interesaba el tango lo llevaria a una tangueria en serio, Lo del Chino, La Viruta o La Catedral de Sarmiento y Medrano. Todos eran lugares para turistas, pero menos mentirosos. Nacho no sabia bailar tango, le parecia tierno cuando sus padres bailaban una o dos piezas casi al final de alguna fiesta familiar. Bailaban despues de aclarar que no eran de la epoca del tango, sino de la del rock and roll. Se abrio la puerta del ascensor y aparecio un nuevo Manuel. Cambiado, perfumado, hasta mas alto parecia. Nacho vio que lo buscaba y se le puso a tiro de ojo. Se sintio como con resaca, a el tambien le hubiera venido bien una ducha. Ropa como esa no tenia, ni zapatos, ni reloj. Su elegante sport acababa de pasar a ser sport a secas. Se ve que Manuel tuvo la misma sensacion, hizo un gesto con la cabeza y como le parecio poco agito tambien la mano y le dijo: --Venga, a desayunar asi te vas a descansar un rato. Seguro que lo iba a esperar dispuesto a primera hora de la tarde para almorzar, ya le habia dicho en el viaje que lo que mas le costaba era almorzar antes de las tres de la tarde, que es la hora en la que se almuerza durante la semana en Madrid. Los fines de semana le aclaro que, si almorzaba, no era antes de las cuatro. Nacho calculo que para esa hora iba a estar en forma nuevamente. ?Nuevamente? Capitulo 2 La mesa del desayuno era un vergel, un no va mas. Como hacia casi siempre que se le venia encima algo no habitual, Nacho le pego una recorrida visual de mayor a menor, de lo general a lo particular, diria la Tausend. La profesora de historia que tuvo en la secundaria les decia: "Escuchen con atencion, no pretendo que sepan historia, les quiero ensenar a vivir". Casi a final de tercero se revelo y les dio las pautas del materialismo dialectico. El ser determina la conciencia. Nacho supo bien por que justo ahi habia prestado tanta atencion, con el tiempo se dio cuenta de que habia sido endovenoso lo de la Tausend, con su metodo habia internalizado como analizar a una mujer, a un cliente y ahora inconscientemente, estaba sacandole la ficha a una mesa de desayuno de hotel... por favor, necesitaba unas vacaciones. Lo de Rosario no iban a ser vacaciones precisamente. En la mesa habia vajilla: tazas y platos, platos un poco mas grandes, vasitos para el jugo, copas para agua; tambien habia cubiertos que ya se veian pesados a la vista: cucharas, cucharitas de dos medidas, cuchillos y tenedores de dos medidas. Jarras de agua y jugos de tres colores distintos: color naranja, color frutilla y color citrico mas maracuya. Artefactos que no eran mas que grandes termos para servirse cafe, agua caliente, leche caliente. La leche fria estaba en una jarra. Despues venian la manteca en pancitos, los potecitos de queso crema, los dulces con cartelitos en ingles rayita frances rayita espanol, pero con solo verlos ya te dabas cuenta: manzana, naranja, frutilla, dulce de leche y uno que no se podia saber ni leyendo el cartelito de que era, tenia clavo de olor. Eso lo sabia. Tablas con jamones crudos y cocidos, fuet, mortadela con pistacho -eso a Nacho le dio risa-, quesos brie, gruyere y dos o tres variedades mas de las que seguro una era pategras o, como le dijeron siempre en su casa, queso Mar del Plata. Cereales de varios tipos y colores, sobre todo colores, habia aritos verdes, pegados a los yogures enteros y descremados, natural, vainilla y frutilla. En una mesa con ruedas habia unos baules con tapa con fuego abajo, como cuando se hace fondue. Uno tenia salchichas de carniceria con salsa; el otro, huevos revueltos; y el ultimo, verduras: distinguio zapallitos, cebollas, papas y esparragos pero verdes. Todo caliente. Al final, desde donde Nacho miraba, desde su punto de vista, la pasteleria, como diez cosas distintas, a esta altura ya estaba empachado. Y al final habia fraperas con champagne y copas flautas. Aca me quedaria a vivir, penso. Se entro a reir solo pensando que en ningun rincon de semejante mesa habia un mate, un triste mate. Los que desayunaban hacian muy poco ruido, si se reian era con sordina. El sonido, la intensidad del sonido, es una senal de elegancia. --Ignacio eras, ?no? -escucho que le decia el gallego, que se arrimaba a la mesa a elegir unas tostadas, huevos revueltos y frutillas. Nacho miro el plato, dulce con salado, puaj. --Todos me dicen Nacho, decime Nacho. Yo llevo los cafes, ?como lo queres vos? --Mucho cafe y apenas leche fria, luego cerrare con una lagrima o como le digan aqui. Se las arreglo bastante bien, mas que nada porque Manuel se habia instalado en una mesa cercana. Cuando llego con las tazas tuvo que hacer malabarismos porque en la mesa ya habia tazas vacias, la primera taza de cafe la servian unas ladies que estaban paraditas esperando la senal de veni y atendeme que les hacian los huespedes. Una de ellas se acerco y retiro las tazas vacias. Se miraron y Nacho casi que le vio un globito como en los comics arriba de la cabeza que decia: "Hola, ?que tal? Tranquilo que te doy una mano, soy de Berazategui, te tengo visto por Quilmes". Hubo contacto visual, que lindo, un contacto visual es todo. Estaba meta contactar cuando volvio Manuel con el plato cargado pero discreto. Tenia el saco puesto sobre los hombros, no habia metido los brazos por las mangas. Despues escucharia que no le decia "saco" sino "americana" o "chaqueta". Se veia que en los bolsillos tenia cosas importantes, estaba siempre pendiente de donde lo dejaba. Nacho se tomo el cafe solo, largo, que se habia traido para el. Mucho buffet, penso, pero el cafe estaba apenas mas que tibio. Se paro y fue a cargar un platito con dos medialunas y un cuadradito de tarta de ricota.
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Un jardin al norte de Boris Izaguirre
https://gigalibros.com/un-jardin-al-norte.htmlInglaterra (condado de Kent), albores del siglo XX, los padres de la pequena Rosalinda se separan y ella es enviada a un internado, Saint Mary Rose. Desde ese momento solo vera a su madre en los pocos dias de vacaciones. Su padre se ha instalado en la India, oficialmente como agregado comercial, aunque en realidad ejerce como espia.Cuando, en la adolescencia, Rosalinda se reencuentra con su progenitor, se enamora del halo de exotismo que este desprende y le acompana de vuelta al pais asiatico, donde se iniciara en el espionaje de la mano del superior de su padre, Mr. Higgs. En la India contraera matrimonio con un hombre mayor que ella, Mr. Peter Fox, que la deslumbra pero que la abandona al poco cuando su salud flaquea.De vuelta al Viejo Continente, es enviada a Alemania para recabar informacion sobre el nacionalsocialismo de Hitler. Alli, un hombre, tambien bastante mayor que ella, y en este caso espanol, Juan Luis Beigbeder,la vuelve a enamorar por su inteligencia, cultura y modales. Siempre en la encrucijada entre el amor y la obligacion hacia su pais, Rosalinda se traslada a Tanger, centro internacional de intrigas politicas y economicas de la epoca, donde el espionaje y la pasion hacia Juan Luis Beigbeder lucharan por ser lo mas importante en su vida en los confusos y dramaticos dias de la guerra civil espanola y en los anteriores a la Segunda Guerra Mundial.
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Los 80 anos de Sofia de Jaime Penafiel
https://gigalibros.com/los-80-anos-de-sofia.html -
Tu corazon te lo dira pronto de Olivia Saint
https://gigalibros.com/tu-corazon-te-lo-dira-pronto.html -
Contigo (Para siempre 3), Norah Carter de Monica Hoff , Norah Carter , Patrick Norton
https://gigalibros.com/contigo-para-siempre-3-norah-carter.htmlNatalia, desconsolada por el riesgo que corre la vida de Jose, tiene que enfrentarse a unos duros momentos que marcaran el rumbo de sus vidas.
?Que pasara finalmente? ?Les dara la vida una oportunidad mas? ?Quien sera esa persona que entrara de nuevo sus vidas?
Duros acontecimientos que marcaran para siempre la vida de nuestros protagonistas en este desenlace.
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Sobre los huesos de los muertos de Olga Tokarczuk
https://gigalibros.com/sobre-los-huesos-de-los-muertos.htmlOlga Tokarczuk, una de las voces mas vigorosas de la narrativa polaca contemporanea, despliega en este arrebatador thriller metafisico todas las contradicciones del alma humana.
Janina Duszejko es una ingeniera de caminos retirada que ensena ingles en la escuela rural de Kotlina Klodzka, una region montanosa del suroeste de Polonia. Cuando la rutina del pueblo se ve sacudida por una serie de asesinatos que tienen como victimas a varios cazadores furtivos, Janina, apasionada de la astrologia, defensora a ultranza de los animales y obsesionada por la obra del poeta William Blake, intentara resolver por su cuenta los misteriosos crimenes.
Bajo la forma de una novela policiaca y con un original subtexto ecologista, Tokarczuk retrata soberbiamente la sociedad local, cuestionando sin ambages tanto la falta de respeto por la naturaleza como el radicalismo ambientalista, en una de las obras mas poderosas y originales de la literatura europea actual. -
La oscura cara del exito de Aurora Fuertes
https://gigalibros.com/la-oscura-cara-del-exito.htmlLa vida para Natascha no es facil en su ciudad natal. Corren los anos 70 en una pequena poblacion de la Union Sovietica; y la imposibilidad de prosperar y alcanzar sus suenos, junto a la mala relacion mantenida con sus padres, le obligara a tomar la decision de abandonar su hogar. Con muchas ilusiones, escaso equipaje e incertidumbre por un futuro incierto, viajara a Moscu buscando alojamiento en casa de su amiga de la infancia, que la acogera sin dudarlo.
Pero en la capital, no todo sera facil; sentira como esos suenos, se desvaneceran en los diferentes empleos, a los que le tocara recurrir para subsistir. Lo que ella desconoce, es que esta situacion no sera por mucho tiempo. Jean, un atractivo y adinerado cazatalentos parisino, se fijara en ella. Fascinado por la joven, la ofrecera algo que ella no podra rechazar: conseguir lo que tanto desea.
Pronto su vida cambiara radicalmente. ?Sera entonces, Natascha, capaz de asimilar el giro inesperado que el destino le tenia reservado? ?Sera lo suficientemente astuta, para ver mas alla de las apariencias que de pronto la rodean? -
Solo una primavera 1 de Victoria Vilchez
https://gigalibros.com/solo-una-primavera-1.html--No siempre sera invierno --dijo Cam, haciendo malabarismos para mantener el movil contra la oreja. Lily estaba sobre su regazo comiendose otra galleta. Parecia que al final si que habia acertado con algunas de sus preferencias. Maverick, a su lado, se encontraba recostada sobre el. Cam no podia ser mas feliz; las tenia, a ambas, e iba a seguir compartiendo su vida con ellas. --Si, ya --replico Lea, al otro lado de la linea--, como que la primavera llega manana. Pero ?que se supone que significa eso? Cam sonrio. --Que las cosas empezaran a ir a mejor. Lea no estaba segura de que eso fuera a pasar en su caso, pero no queria atosigar a su primo con los detalles de su pesima vida social. El habia estado llamandola para interesarse por como iban las cosas en el instituto y, en una de esas llamadas, le habia confirmado lo que su tia ya le habia dicho: Cam era padre de una nina de seis anos, la misma que ambos habian visto patinando en el lago en Baker Hills durante las Navidades junto con su madre, Maverick Parker. No dejaba de sorprenderla que los tres hermanos Donaldson hubieran encontrado el amor en menos de un ano. Aria, en verano en Lostlake; Sean, durante el otono en la universidad; y Cam, en el invierno que llegaria a su fin manana, se habia reencontrado con la chica de la que se habia enamorado en la adolescencia y habia formado una familia. La Lea del pasado seguramente hubiera sentido una envidia malsana, pero ya no era esa chica. Ahora se alegraba por ellos. --?Vas a venir a hacernos una visita? Quiero conocer a Lily -- le dijo, rehuyendo el tema que sabia que preocupaba a Cam. --Bueno, la boda de Sean y Olivia sera en verano en Lostlake. Nos veremos alli seguro. --Cam echo un vistazo a Maverick, que le guino un ojo. Ya habian hablado del tema y ella estaba deseando conocer Lostlake--. Pero puede que podamos escaparnos antes. Cam se estaba aplicando incluso mas que de costumbre para sacar adelante las asignaturas que le restaban para graduarse. Sean ya habia firmado con los Rams para jugar con ellos la proxima temporada, y todos se quedarian a vivir en California. Incluso su madre se estaba planteando vender la empresa familiar y trasladarse para estar mas cerca de ellos, pero Baker Hills siempre seria un hogar al que los Donaldson no dudarian en regresar. Hablaron durante un rato mas y, cuando colgaron, Lea permanecio tumbada sobre la cama de su habitacion mirando el techo. Habia acabado un trabajo que tenia que entregar al dia siguiente y no tenia otros deberes pendientes, tampoco nada que hacer. Asi que cogio los libros que habia sacado de la biblioteca y se dijo que podria acercarse a devolverlos. Los dias transcurrian con demasiada pereza en Baker Hills, al menos para ella. Pero la llegada de la primavera anunciaba el principio de un final que estaba mas que deseosa de alcanzar. En unos pocos meses se graduaria en el instituto y se olvidaria por fin del infierno que le habian hecho vivir sus companeros despues de lo sucedido con aquella maldita fotografia. Empezaria de nuevo, muy lejos de ese pueblo, en la primera universidad que la admitiera; no le importaba donde. Se puso el abrigo y aviso a su madre de que iba a salir. No tardaria. Sus tardes habian estado mucho mas ocupadas cuando aun tenia amigas, si podia llamarlas asi. Ahora comprendia que la unica persona que se habia preocupado por ella era Aria. Su prima habia dado la cara en su nombre a pesar de que eso le habia costado su propia reputacion. Agradecio en silencio que la hubiera perdonado por todo lo que habia sucedido luego, no era como si realmente se lo mereciera. La biblioteca de Baker Hills no era gran cosa, pero Lea habia encontrado un refugio en ella. Ademas de los libros que empleaba para algunas de sus tareas del instituto, habia empezado a sacar tambien otros por puro entretenimiento. Devolvio los que llevaba y se deslizo entre las exiguas estanterias en busca de nuevas lecturas con las que pasar las horas muertas. Al final, encontro una trilogia completa de fantasia que llamo su atencion y decidio llevarsela. Al salir cargando con los tres tomos y su mochila, el aire fresco le arano la cara y tiro del faldon de su abrigo, que habia olvidado abrocharse. Mechones de pelo rubio se agitaron frente a sus ojos y maldijo por no ser capaz de retirarlos. Con suerte, la aceptarian en Berkeley como a Aria y no tendria que pasar otro invierno padeciendo el frio de Ohio. Sin ver demasiado bien por donde iba, metio el pie en un charco. No llovia en ese momento, pero en los dos ultimos dias no habia parado y habia agua por todas partes. El bajo del pantalon se le empapo al instante y estuvo a punto de resbalar y acabar con el culo metido tambien en el charco. Maldijo de nuevo, esta vez en voz alta y de una forma muy imaginativa. Escucho un silbido. --Vaya boca... Su humor empeoraba por momentos. Seguro que seria alguno de sus companeros de instituto, muy dispuesto a burlarse de sus miserias y recordarle lo explicita que habia sido la maldita fotografia. Resoplo y dejo de mirarse los pies. Al empezar a levantar la vista lo primero que vio fue unas botas negras de cordones y las ruedas de una moto. ?Que clase de loco conducia una moto con ese tiempo? Sus ojos continuaron ascendiendo, deslizandose por un pecho amplio y bien formado sobre el que el desconocido cruzaba los brazos, y luego... mas arriba... tropezo con unos labios curvados en una sonrisa socarrona y unos ojos verdes que brillaban divertidos. Los mechones de su pelo negro tambien se agitaban con el aire frio, aunque a el no parecia molestarle. Era guapo, mas que cualquier chico con el que Lea se hubiera tropezado jamas, o al menos eso le parecio a ella. La cuestion era que ese rostro le resultaba extranamente familiar... Sabia que lo habia visto antes, pero no recordaba donde. El chico debia de tener al menos un par de anos mas que ella, por lo que podria tratarse de algun companero que ya hubiera terminado sus estudios en el instituto y con el que se hubiera cruzado en algun momento por los pasillos. Baker Hills era un pueblo relativamente pequeno, pero no tanto como para que todos sus habitantes se conocieran. --Tus padres se horrorizarian si supieran las cosas que salen por esa boca --senalo, y Lea no pudo evitar ponerse a la defensiva. No le importaba si estaba bromeando, era mas que probable que supiera de ella y de lo sucedido el curso anterior y aquello solo fuera otra de tantas burlas. Empezaba a cansarse. --Nadie te ha preguntado --le espeto, resentida, y el alzo las manos en senal de rendicion. --Te recordaba mas amable, y tambien mas... pequena. Sus sospechas eran ciertas entonces, ya se conocian. Pero Lea estaba convencida de que no hubiera podido olvidar una cara como esa, por mucho que su propietario fuera un imbecil arrogante y engreido, especialmente si era asi; a su antigua yo le encantaban ese tipo de tios. <>, se reprocho, pero el chico continuaba observandola con un descaro irritante. Si lo sabia, si habia visto la fotografia que habia circulado por cada telefono movil de todos los alumnos del instituto, no cambiaria nada que se mostrara brusca con el; tal vez asi desistiera de su afan de humillarla. Se debatio durante unos segundos, pero al final gano la batalla la parte de ella que aun luchaba por mantener cierta dignidad. --Pues yo no te recuerdo en absoluto, asi que si no te importa... Comenzo a caminar por la acera. Volveria a su casa, al calor de su dormitorio, y se sumergiria en el primer volumen de la historia que acarreaba entre las manos. Evadirse con la lectura era, a buen seguro, la mejor forma de esperar a que llegara la primavera. Pero el dejo la moto atras y se apresuro a colocarse a su lado. --No he cambiado tanto --le dijo, mientras se adaptaba a su paso rapido. Sonreia. Lea lo sabia a pesar de no estar mirandolo, de alguna forma extrana y retorcida era consciente de ello. Apreto el paso. No estaba dispuesta a soportar mas burlas, ni una mas.
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Comandante (La Casa Blanca 2) de Katy Evans
https://gigalibros.com/comandante-la-casa-blanca-2.htmlLa pasion de Matt y Charlotte llega a la Casa Blanca
Nos enamoramos en la campana electoral.
Y eso solo fue el principio.
Ahora el es el presidente de Estados Unidos.
Y me desea. Desea mi cuerpo.
Mi corazon. Mi alma.
Y me quiere a su lado.
En la Casa Blanca. -
El verano en que todo cambio de Sarah Rusell
https://gigalibros.com/el-verano-en-que-todo-cambio.htmlSiempre que se le hace a un nino la pregunta de que quiere ser de mayor, contestan cosas como policia, astronauta, piloto de aviones, enfermera, abogada, veterinaria... Normalmente profesiones relacionadas con las que uno de sus padres, o ambos, desempenaban, incluso familias enteras durante generaciones. Lo mio era algo diferente a todo eso, diferente a lo que se dedicaban mis padres, ya que John, mi padre, era constructor, y Amelia, mi madre, la duena de un exclusivo gimnasio de lujo. Bueno, si lo veiamos desde la parte materna... mi sueno si que estaba relacionado con el deporte, pero nada que ver con ser monitora de zumba, aquagym o spinning, para nada. Mi sueno era, nada mas y nada menos, que ser surfista. En realidad, lo que queria era irme a hacer un curso intenso de surf durante dos meses al suroeste de Melbourne, donde vivia desde que naci. Y no era un sueno de esos en plan, capricho, para nada, que el curso lo daba uno de los mejores profesionales de ese deporte. Mis padres me habian prometido que, si acababa el segundo curso de la carrera de turismo que estaba estudiando, me pagarian el curso de surf y me dejarian ir. Tampoco es que estuviera muy lejos, solo me iba de casa dos meses y a cien kilometros, no a Groenlandia, pero bueno. Ahora, a mis veinte anitos, estaba deseando que me llevaran a ese lugar en el que podria subirme a una tabla y surcar las olas. Vale, eso con un poquito de paciencia que no iba a ser poner los pies en ella y sentirme como si fuera la reina del mambo, que yo surfear... no habia surfeado en mi vida. Cuando acabara la carrera queria recorrer el mundo, conocer todo aquello que me gustaba ver en revistas o fotos de Internet, aunque ya conocia Tailandia, Bali y Vietnam, pues mis padres eran muy aficionados tambien a viajar y me habian llevado a ver esos lugares. Bueno, esos viajes fueron antes de que naciera Ruby, mi hermanita pequena. Ese angelito llego a la familia de sorpresa, pero sorpresa total, que yo ya tenia quince anos y mis padres ni la esperaban ni la habian buscado, aunque fue lo mejor que nos paso a todos, las cosas como son. Era mi nina, mi pequena mini yo, y es que, a sus cinco anos, me imitaba en todo lo que podia. La tenia como a una hija, mi madre decia que solo me faltaba haberla parido, y asi era, porque no dejaba ni que le soplara el aire en un ojo. Vamos, bonita era yo para mi Ruby. La adoraba y, ademas, se parecia tanto a mi, que, si ibamos juntas por la calle, se quedaban mirandonos como si fueramos madre e hija. Las dos teniamos el cabello castano, como nuestro padre, y ojos marrones, como nuestra madre, una mezcla de ambos, que se notara que cada uno habia puesto su granito de arena a la hora de hacer a sus ninas. En mi vida tambien estaba Zara, mi mejor amiga, esa que, con mi edad, era como una hermana tanto para mi como para Ruby. Nuestras madres a veces decian que pareciamos siamesas, que nos costaba separarnos la una de la otra, y razon no les faltaba, desde luego, porque lo haciamos todo juntas, bueno, salvo algunas cosas, obviamente. Siempre estabamos estudiando juntas, nos ayudabamos en lo que no entendia la otra, apoyandonos en todo, consolandonos en los peores momentos de nuestra vida, siendo la una confidente de la otra, y viviamos entre su casa, con sus padres, y la mia con los mios. No habia fin de semana que no nos acogieran a las dos en casa de una, como si fueramos ambas hijas del matrimonio. Y eso era lo que me daba la vida, poder compartir con mi mejor amiga todo lo que me ocurria. Habia llegado el verano, el final del curso en el que me habia dejado la vista en los libros, las horas de sueno, los codos en la mesa y la mano entre apuntes y examenes. Pero, como todo en la vida, el esfuerzo siempre tiene su recompensa, y sabia que la mia estaba mucho mas cerca de lo que imaginaba. Desde luego, habia merecido la pena esas noches que me quedaba estudiando en casa sin salir al cine, a cenar o bailar. Esos fines de semana en casa de Zara, o en la mia, haciendo los examenes que ella me preparaba durante la semana para ver cuantas preguntas contestaba correctamente y la nota que podria sacar. Aprobe, por supuesto que acabe aprobando el curso y estaba mas que dispuesta a afrontar esos dos meses que tenia por delante para hacer aquello que tanto me apetecia y con lo que sonaba desde hacia tiempo. Queria subirme a una tabla de surf, dejar que el agua del mar me cubriera por completo mientras me sentia libre durante unos instantes. Surcar las olas y que aquella sensacion no se me olvidara jamas, vivir el momento, disfrutar de esa experiencia unica en la vida y, aunque no llegara a ser una profesional, saber que valia para eso, que podia ser capaz de mantenerme en pie en una de esas tablas que flotan en el mar y no tener miedo. Iba a echar de menos a mi hermanita, eso era lo que me habia frenado un poco y que, a veces, me replanteara el decirles a mis padres que no se preocuparan, que no iria al curso de surf, y es que desde que nacio Ruby, mis veranos eran para ella. Pero este era mi sueno, lo que me apetecia hacer ahora, siendo joven, valiente y con ese espiritu aventurero que mis padres no sabian de quien habia heredado. Habia trabajado duro para conseguirlo, me habia esforzado a maximo durante todo el ano, y aqui estaba mi recompensa, la que mis padres habian prometido darme por mis excelentes notas, y la aprovecharia. Subiria a una de esas tablas, dejando claro que nadie es quien para decirte lo que puedes o no hacer, lo que eres o no capaz de lograr, que, si tienes un sueno, debes luchar por alcanzarlo, sin que nada ni nadie te frene o te diga que no.
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Tony Vance (Amores Peligrosos 1) de Natalia Divan
https://gigalibros.com/tony-vance-amores-peligrosos-1.htmlMarina descubre a su novio siendole infiel con otra mujer y, para ahogar las penas, decide ir, con su mejor amiga, a la discoteca de moda de la ciudad. Alli conocera al misterioso Tony Vance, dueno del club, con quien surgira una quimica increible desde el primer momento. Pero el no es un hombre normal y corriente: sus ilicitos negocios pondran en mas de una situacion peligrosa a Marina, que temera por su propia vida.
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La princesa del East End (Secretos de alcoba 3) de Christine Cross
https://gigalibros.com/la-princesa-del-east-end-secretos-de-alcoba-3.htmlEl carruaje que traqueteaba por las calles londinenses a esas horas de la noche olia a dinero por los cuatro costados, lo mismo que el hombre que se sentaba a su lado. Rose se reclino contra el lujoso asiento acolchado, tapizado en seda adamascada, y permitio que sus labios se estiraran en una sonrisa satisfecha. Habia hecho bien en no hablar sobre el caballero con ninguna de las chicas del burdel o alguna de ellas se lo habria arrebatado. Solo Bertha, la pequena criada que limpiaba las habitaciones, conocia su existencia, aunque se habia encargado de dejarle claro lo que sucederia si se iba de la lengua. No tenia nada en contra de la pobre chica, ademas, era demasiado asustadiza y timida como para ir a contarle sobre sus asuntos a la madame; a la muchacha le convenia estar en buenos terminos con todas las chicas, pues su sueldo dependia de ellas. Habia sido mala suerte que la nina saliera a tirar la basura al callejon trasero del edificio justo cuando ella le ofrecia sus servicios al caballero, aunque le habia bastado una mirada de advertencia para que la criadita desapareciese a la carrera por la puerta de la cocina. Para una vez que tenia fortuna en la vida, no iba a desperdiciarla. El prostibulo que regentaba madame Beth en Haymarket era uno de los mas cotizados entre los nobles de la aristocracia, pero tambien uno de los mas estrictos en cuanto a sus reglas de gobierno. No se permitian las relaciones fuera del local, quiza por miedo a que alguna de las chicas emulara el ejemplo de Laura Bell, la joven cortesana irlandesa que habia conseguido casarse con el capitan August Frederick Thistlethwayte, de Grosvenor Square. La que habia sido conocida como <
> era en esos momentos la orgullosa senora de una finca en Ross-shire, Escocia. Rose echo un vistazo al semblante de su acompanante. Su perfil, elegante y masculino, oscilaba entre las luces y sombras que atravesaban la ventanilla del coche. Si jugaba bien sus cartas, ella, Rose O'Flaggerty, tambien obtendria lo mismo que su compatriota. El hombre era atractivo, de constitucion fuerte y movimientos mesurados. Sus ojos tenian un perpetuo halo de tristeza que le provocaba la acuciante necesidad de envolverlo en sus brazos, como si fuese un nino necesitado de consuelo, aunque lo cierto era que el le doblaba la edad. --?Se arrepiente, senorita O'Flaggerty? La voz calida y suave le produjo un estremecimiento. Le encantaba que la tratase con el respeto debido a una dama, hacia que se sintiese valorada como mujer. --En absoluto, milord. ?Como podria arrepentirme? --Su tono reflejo cierta incredulidad. No comprendia que el pudiera pensar que le costara dejar atras la vida que llevaba. Habia llegado a Londres desde Irlanda con dieciseis anos y habia comenzado trabajando como sirvienta por unos pocos chelines. A los diecisiete, el hambre y las circunstancias --una madre viuda y tres hermanos menores-- la habian obligado a prostituirse en las calles. Odiaba aquel negocio, se sentia como una mercancia usada, pero habia aprovechado bien su belleza juvenil para evitar que sus hermanas menores tuviesen tambien que prostituirse. Entrar en el negocio de madame Beth habia sido lo mejor que habia podido sucederle, tenia su habitacion propia y ganaba casi tres veces mas de lo que conseguia en la calle; poseia vestidos elegantes y podia comer un plato caliente cada dia. No, desde luego, no se arrepentia. En esos momentos tenia veinticinco anos y, aunque seguia siendo una mujer hermosa, los caballeros preferian a las muchachas mas jovenes, con lo que cada vez mermaban mas sus posibilidades de conseguir un buen sustento para el futuro. --Conocerlo ha sido lo mejor que me ha pasado --agrego Rose al ver que el no decia nada. --Me alegro mucho. --Tomo su mano con suavidad y se la apreto con delicadeza. Sintio la reconfortante calidez que emanaba del cuerpo masculino cuando se inclino hacia ella, y las notas especiadas de su aroma--. Es mi deseo hacerla feliz y que pueda vivir en paz. Rose parpadeo, un tanto sorprendida, ante aquella forma de expresarse. Con toda certeza, < > no era una palabra que habria incluido en su vocabulario y en su vida. Se removio inquieta sobre el asiento, con una sensacion extrana atenazandole las entranas; sin embargo, se esfumo apenas vio el estuche de terciopelo que el caballero puso ante sus ojos. --!Oh, es precioso! Paso los dedos con delicadeza sobre las piedras de rubi, talladas con una gran perfeccion, que descansaban sobre engarces de oro. Tenia un aire antiguo que atraia la atencion de un modo casi hipnotico. --Pertenecio a una reina. --La voz profunda no logro arrancar su mirada del brillo de los rubies--. Toda mujer deberia poder lucir una joya asi al menos una vez en la vida. Saco el collar del estuche y le hizo darse la vuelta para colocarselo. Rose se estremecio, aunque no supo si fue por el roce de las manos masculinas sobre la piel de su nuca o por el peso de la gargantilla. Noto un calorcillo en el pecho y la recorrio una pequena agitacion. --Milord, no se que decir. --Se giro de nuevo hacia el y esbozo una sonrisa seductora--. Muchas gracias por este precioso regalo. Yo… Se quedo en silencio cuando el coloco un dedo sobre sus labios para acallarla. Noto como lo deslizaba despacio por el carnoso labio inferior y deseo que la besara. No lo habia hecho despues del dia en que se conocieron en aquel oscuro callejon, al que ella salio para refrescarse del opresivo ambiente del burdel. En esa ocasion, la habia besado con fuerza, casi con desesperacion; pero, tras aquel dia, se habia comportado como un perfecto caballero, como si de verdad la cortejara. Y aunque le encantaba sentir aquella especie de veneracion con que el la trataba, en algunos momentos le hubiera gustado que pareciese un poco mas terrenal. --?Por que no brindamos por la nueva vida que le espera? --le dijo, sacando del bolsillo interior de su chaqueta una petaca de plata y ofreciendosela--. Sera una mucho mas feliz, sin carencias, sin dolor. ?Me cree, senorita O'Flaggerty? Rose asintio. --Le creo, milord. --Entonces, brindemos a nuestra salud. Acepto la petaca y dio un largo sorbo. El liquido le quemo la garganta y le calento las entranas. Aunque era algo mas fuerte de aquello a lo que estaba habituada, no se quejo. No pensaba morder la mano que le iba a dar de comer. A ella y a su familia. Aun no le habia hablado de sus hermanos ni le habia contado que les habia entregado a ellos el dinero que el le habia ofrecido con tanta generosidad. Maud habia crecido en los ultimos meses y necesitaba vestidos nuevos; a Sheila se le habia acabado el material para fabricar los bonitos sombreros que luego vendia a un elegante negocio de la calle Bond; y Michael habia requerido zapatos nuevos. Si el caballero cumplia su palabra, no les faltaria de nada a partir de aquel momento. --?Falta mucho para llegar? --pregunto. Sentia la lengua rasposa y dio otro pequeno trago, o tal vez lo hacia solo para animarse a hablar. Sabia que tenia que ser sincera con el y contarle de su familia, y aquel era un buen momento para hacerlo. --No demasiado --respondio, al tiempo que le quitaba la petaca de la mano temblorosa y volvia a guardarsela en el bolsillo--. En un par de minutos habremos llegado a nuestro destino. --Aun no me ha dicho adonde nos dirigimos. --?Eso importa? Mientras encuentre el camino, todo estara bien. Rose sacudio la cabeza en un intento por despejarse. Aquellas palabras le habian resultado incomprensibles, quiza porque habian llegado a ella distorsionadas. De hecho, la figura del hombre parecio desvanecerse por momentos, y extendio las manos hacia delante para aferrarse a ella mientras una sensacion extrana se apoderaba de su mente y de su cuerpo, una liviandad que la asusto. --?Que… camino? Yo… me siento… Cerro los ojos casi al mismo tiempo que notaba las manos de el acercandola a su cuerpo. Su calor y su esencia la envolvieron, y se dejo llevar por la niebla que inundaba sus sentidos. --Duerma, senorita O'Flaggerty. Pronto terminara todo y usted podra descansar en paz, como deseaba. El dolor le martilleaba en las sienes y detras de los parpados. Ademas, tenia frio; la superficie sobre la que se hallaba tumbada desprendia un helor que le calaba los huesos a traves de las capas de su vestido. Voces indistintas alcanzaron sus oidos, pero se encontraba demasiado aturdida para comprender los ricos tonos masculinos. Se pregunto si se habria quedado dormida en algun salon del burdel. Intento abrir los ojos y una luz brillante, como del sol, la deslumbro. ?Ya era de dia? Pero ella recordaba haber viajado de noche con el caballero. Parpadeo varias veces y trato de enfocar la mirada. No era el sol. La luz que la cegaba era el fuego ardiente de unas antorchas que iluminaban el recinto en el que se encontraba. Sombras oscuras danzaban sobre las paredes. Componian extranas figuras que provocaron que su corazon comenzase a latir apresurado. Una se cernio sobre ella y quiso gritar, pero tenia la garganta seca y cerrada. La respiracion acelerada provoco que le dolieran los pulmones y se acrecentase el mareo. --No tendria que haber despertado. --Reconocio la voz y casi sollozo por el alivio. Aunque no podia ver bien su rostro, sabia que se trataba del caballero--. Ahora todo sera peor. Rose no comprendio sus palabras por completo. Todavia sentia el cuerpo descompuesto y temblaba de frio. --Agua --le pidio, arrancando un quejido a su garganta. --Es mejor que no tome nada. Todo se acabara pronto, se lo prometo --le aseguro el. Su voz sonaba cargada de melancolia y tristeza, y la caricia suave que retrato su mejilla sabia a dolorosa despedida. Un estremecimiento involuntario la recorrio por entero. Intento incorporarse, a pesar del mareo, pero un fuerte tiron en las munecas se lo impidio. El panico comenzo a atenazarla, un terror irracional que se acrecento cuando el caballero se alejo y la luz de las antorchas le permitio ver las cadenas que sujetaban sus manos. Rose comenzo a gritar mientras tiraba con fuerza de sus ataduras en un vano intento por deshacerse del tintineante metal. --!Dejeme ir, milord, yo no he hecho nada! --La garganta le ardia, pero los ecos de su voz se perdian en la resonante boveda de piedra. Las lagrimas que arrasaban sus ojos le quemaban la piel--. !Soy una buena chica! Cerro los parpados, angustiada. ?Que iba a ser de su familia: de su madre, del pequeno Michael, de Maud y Sheila? ?Como podrian vivir sin su sustento? Una sombra la cubrio y abrio los ojos, sobresaltada. En ese momento, la luz se habia tornado mas intensa y pudo ver con claridad los de el. El caballero la miraba con una tristeza mas profunda de lo que nunca le habia visto. Pero, en esta ocasion, no sintio compasion, solo terror cuando un coro de voces masculinas entono un cantico en una lengua desconocida y extrana. Unos hombres vestidos con tunicas negras rodearon la piedra sobre la que se encontraba tumbada. --?Podra perdonarme, senorita O'Flaggerty? --La voz del caballero era un susurro dulce--. Ella es todo lo que amo y la necesito de vuelta conmigo. Usted tiene que morir para que ella viva, ?lo comprende? --!No! !No, no, por favor! --suplico entre sollozos--. No quiero… Enmudecio y sus ojos se dilataron por el terror cuando vio ondear sobre su cuerpo una daga de plata, empunada por el hombre que le habia prometido que la haria feliz. El grito agudo y horrorizado golpeo las paredes de piedra, pero sus oidos permanecieron sordos al eco de su propia voz y al borboteo de su sangre caliente al derramarse en el interior del caliz de plata. El caballero contemplo el bello rostro de la mujer, exangue y palido, y durante unos instantes experimento lastima por ella. < >. El pensamiento vago por su mente y lo ayudo a tranquilizarse. --Lo has hecho muy bien. --La felicitacion del Gran Maestro de la Orden lo saco de sus cavilaciones--. El primero es siempre el mas dificil, pero tu no has dudado. Estoy seguro de que conseguiras lo que te propones. El asintio. Volver a ver a su preciosa Alice, a su unico amor. Nunca habria nadie como ella; nunca podria amar a nadie mas. Si, lo conseguiria. El numero siete era el numero de la perfeccion, el que unia el numero tres del espiritu con el numero cuatro de la materia y devolvia la vida. Solo necesitaba seis victimas mas para realizar el ritual completo y poder traer a su esposa desde el abismo de la muerte -
El Husar de Arturo Perez-reverte
https://gigalibros.com/el-husar.htmlPrimera novela historica de Arturo Perez-Reverte, que nos traslada a tierras espanolas, mas concretamente en la Andalucia de 1808, donde un joven subteniente de Husares toma su primer mando en un cuerpo de elite: el 4.deg Regimiento de Husares. La valentia, los suenos de gloria, el honor y los temores seran puesto a prueba por un duro enemigo: la cruel realidad de la guerra. La novela trascurre durante las horas previas a la gran batalla donde nuestro protagonista se debe hacer un nombre en la historia. Perez-Reverte consigue involucrar al lector, una vez mas, en plena novela, llegando a ser un espectador de lujo en los acontecimientos, participando de las inquietudes y las acciones del joven Frederic Gluntz durante unas horas, las mas importantes en su joven vida. Perez-Reverte, a traves de esta novela, nos hace abandonar cualquier idea romantica y bella de la guerra.
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La pasion del duque de Emma G. Fraser
https://gigalibros.com/la-pasion-del-duque.htmlEwan Smith, duque de Norfolk, es un alto cargo del ejercito ingles, pero al ser traicionado por su mejor amigo, Malcolm, pierde su puesto, su titulo y casi toda su herencia. Tras jurar vengarse de el, anos despues se cruza en su camino Tyra Stone, una bella y rebelde joven que cabalga sola por el bosque y lo acusa de ser un ladron.
Cuando descubre que es la prometida del hombre que lo traiciono, Ewan la secuestra la noche de su fiesta de compromiso, pero su belleza y su caracter fuerte hacen que el joven tenga serios problemas para llevar a cabo su venganza, pues el fuego y la pasion que se desata entre ellos hara que surjan nuevas traiciones a las que ambos tendran que hacer frente y las cuales los pondran en peligro en mas de una ocasion. -
No se supone. Roberta de Claudia A. Perez R
https://gigalibros.com/no-se-supone-roberta.htmlEs una mujer madura, independiente, "responsable" y sus prioridades en la vida distan del "Se casaron, y vivieron felices para siempre". Ahora se permite hacer cosas que anos atras no haria ni de broma; como el sexo en la primera cita.
Claro que ha dejado de hacer otras; irse de parranda tres dias seguidos, ni de broma...
Le advirtieron que al llegar a los treintas, tendria que comenzar a usar cremas antiarrugas, su metabolismo se alentaria, la resaca duraria dos dias, y tendria que lidiar con el terrible “senora”, pero nadie le advirtio que un Pollito, le erizaria la piel...
Ella es Roberta, acompanala en esta divertida y "madura" historia.