• donde todo es corazon - Arelys Y. Guerra

    https://gigalibros.com/donde-todo-es-corazon.html

    Nora Miller regresa a casa, vuelve a sus raices llevando consigo un pasado de sombras y dolor. No sabe lo preciosa que es porque se empena en esconderse detras del mostrador de una cafeteria. No imagina que su belleza causa estragos en las calles de New York.

  • Donde todo es corazón Versión Kindle - Amazon.es

    https://www.amazon.es/Donde-todo-coraz%C3%B3n-Arelys-Guerra-ebook/dp/B078HXQJQK

    Mirar en el interior de este libro. Donde todo es corazón de [Arelys Y. Guerra, Romantic Ediciones] ...

  • DONDE TODO ES CORAZON | ARELYS Y. GUERRA

    https://www.casadellibro.com/libro-donde-todo-es-corazon/9788417474157/7567123

    18 oct 2018 — El libro DONDE TODO ES CORAZON de ARELYS Y. GUERRA en Casa del Libro: ¡descubre las mejores ofertas y envíos gratis!

  • Donde todo es corazón - Arelys Y. Guerra - El Rincón de la ...

    https://www.rnovelaromantica.com/autores/item/donde-todo-es-corazon-arelys-y-guerra

    En esta web hay 15174 fichas de libros, 1659 autores, 1496 artículos y 7064 críticas. Blog colaborador.

  • DONDE TODO ES CORAZON (Libro en papel)

    https://www.popularlibros.com/libro/donde-todo-es-corazon_914797

    DONDE TODO ES CORAZON 16,10€ Ahora un 5% descuento. Envío gratis. Nora Miller regresa a casa, vuelve a sus raíces llevando consigo un pasado de sombras y ...

  • DONDE TODO ES CORAZON - LIBRERÍA CANAIMA

    https://www.libreriacanaima.com/libro/donde-todo-es-corazon_555639

    DONDE TODO ES CORAZON, GUERRA, ARELYS Y., 16,30€. Nora Miller regresa a casa, ... Sinopsis; Comentarios ( Sé el primero en comentar este libro ).

  • DONDE TODO ES CORAZON - ARELYS Y. GUERRA - Agapea

    https://www.agapea.com/Arelys-Y-Guerra/Donde-todo-es-corazon-9788417474157-i.htm

    Comprar el libro Donde todo es corazón de Arelys Y. Guerra, Romantic Ediciones CB (9788417474157) con ENVÍO GRATIS desde 18 € en nuestra librería online ...

  • Donde todo es corazon - Los Pequeños Seres

    https://www.lospequenosseres.com/es/libro/donde-todo-es-corazon_B770030012

    Librería en El Rastro de Madrid con mucho encanto. Ofrecemos libros nuevos y de segunda mano, muebles, objetos con alma y una nutrida agenda cultural.

  • Donde todo es corazón - Romantic Ediciones

    https://romantic-ediciones.com/producto/donde-todo-es-corazon/

    Donde todo es corazón ... Nora Miller regresa a casa, vuelve a sus raíces llevando consigo un pasado de sombras y dolor. No sabe lo preciosa que es porque se ...

  • Donde Todo Es Corazón de Arelys Y. Guerra 978-84-17474 ...

    https://www.todostuslibros.com/libros/donde-todo-es-corazon_978-84-17474-15-7

    27 sept 2018 — Sinopsis de: "Donde todo es corazón". Nora Miller regresa a casa, vuelve a sus raíces llevando consigo un pasado de sombras y dolor.

  • donde todo es corazón - Librería Sinopsis

    https://www.libreriasinopsis.com/libro/donde-todo-es-corazon_314587

    DONDE TODO ES CORAZÓN, GUERRA, ARELYS Y., 16,30€. Nora Miller regresa a casa, vuelve a sus raíces llevando consigo un pasado de sombras y dolor.

  • O calle para siempre de J. M. Guelbenzu

    https://gigalibros.com/o-calle-para-siempre.html

    Un mensaje anonimo enviado al parroco que ha de oficiar una boda de postin y el asesinato de un chantajista de medio pelo en mitad de la ceremonia, involucrara a la juez Mariana de Marco y a su pareja, el periodista Javier Goitia, que asistian como invitados. Mariana esta convencida de que alguien de una de las familias de los contrayentes trato de impedir la boda, y que otro de los asistentes fue el asesino del maleante contratado para sabotearla.

  • Me he despertado pensando en ti de Elisabet Masip

    https://gigalibros.com/me-he-despertado-pensando-en-ti.html

    Martina, Daniela, Carlota y Nora son cuatro jovenes, amigas desde la infancia, que empiezan un nuevo y esperado momento en sus vidas: su etapa universitaria. Mientras Martina y Daniela dejaran el pueblo y se instalaran en la ciudad compartiendo piso con el hermano de Nora y con un companero inesperado y muy atractivo (con todo lo que implica empezar a compartir piso con gente joven... !risas y fiestas aseguradas!); Carlota y Nora han decidido mudarse a la capital, viviendo este nuevo periodo en una residencia de estudiantes (rodeadas de chicos guapos, jovenes y que duermen a escasos metros de ellas), en la que tendran que hacer frente a un oscuro suceso que no las dejara indiferentes y que las mantendra en vilo hasta conseguir hacer justicia, ya que encontrar todas las piezas del puzle para solucionar el caso no sera nada sencillo.

  • La final de nuestras vidas de Andres Burgo

    https://gigalibros.com/la-final-de-nuestras-vidas.html

    La final de nuestras vidas es un libro a la altura de lo que hubo en juego entre los dos equipos mas grandes de la Argentina durante la edicion 2018 de la Copa Libertadores de America. Y su autor, un experto en escribir sobre encrucijadas deportivas que marcaron a fuego la historia del futbol argentino: ya lo habia hecho en Ser de River en las buenas y en las malas y en El partido, Argentina-Inglaterra 1986, dos de sus exitosos libros. Con talento, oficio y sentimiento, Andres Burgo le da forma en estas paginas a una historia inolvidable sobre los partidos que ya nadie nunca podra olvidar.

  • Dulce atraccion (Dulce Londres 2) de Eva Benavidez

    https://gigalibros.com/dulce-atraccion-dulce-londres-2.html

    La segunda entrega de la romantica serie <>.

  • Amor en llamas de Lorena Fuentes

    https://gigalibros.com/amor-en-llamas.html

    Graduarse de la universidad a los veintidos anos y, al mismo tiempo, recibir su sentencia de divorcio con el hombre a quien amaba y que era el padre del nino que llevaba en su vientre, no fue una situacion facil para Amelia.
    Pero tiempo despues de aquella mala experiencia y de llevar una vida tranquila trabajando en el Call Center del 911, surge entre ella y un bombero, al que conoce solo por telefono, una conexion que no logra entender.
    Inexplicablemente, la voz de Vaquero logra brindarle seguridad y tranquilidad, pero el vinculo que mantiene con Derek, su exesposo, comienza a complicar su existencia.
    Lorena Fuentes nos trae una novela de autoconocimiento en la que Amelia comprendera en que consiste la felicidad y lo que significa realmente ser consumida por las llamas del amor, no sin antes ser traicionada.

  • El Club de la Elite de Esteban Navarro

    https://gigalibros.com/el-club-de-la-elite.html

    Pau no podia apartar los ojos de la pantalla de su movil. Y mientras que con la mano izquierda sostenia el volante del Nissan Micra, con la derecha aguantaba el telefono con pericia. En una rampa del barrio de Salamanca, en la calle Jorge Juan, tuvo que cambiar de velocidad con gran dificultad, sin soltar el movil de la mano. Con el vaiven se le cayo el telefono en el asiento del copiloto y, al agacharse para recogerlo, sus ojos se clavaron en el letrero que indicaba el nombre de la calle. --Calle de Claudio Coello --leyo en voz alta. En ese momento le parecio un mal presagio pasar por alli, por esa calle. Aunque era lo suficientemente joven, tan solo tenia dieciocho anos, como para no haber vivido epocas oscuras de Espana, si que conocia que en esa calle asesinaron al entonces vicepresidente del Gobierno de Franco: el almirante Carrero Blanco. Al llegar a la calle Principe de Vergara, viro situandose bien pegado al carril de la izquierda. En cuanto le fuera posible detendria el coche para poder llamar a Luis Miguel. O Luismi, como lo conocian todos sus amigos. Tenia que contactar con el. Habia de contactar con el. Era una necesidad imperante que su amigo descolgara. Luismi le habia estado enviando numerosos mensajes de WhatsApp durante toda esa manana y el no le habia respondido porque estuvo ocupado instalando el sistema operativo en el ordenador de un conocido. Eso es lo que tenia ser estudiante de Ingenieria en Computacion e Informatica: que todas tus amistades quieren que les repares los fallos de su ordenador. <>, le habia escrito. No habia duda de que esos mensajes los habia anotado Luismi, de forma atribulada, seguramente mientras conducia. Pau detuvo el Nissan en un hueco que hallo en una zona de carga y descarga frente a un supermercado. Soporto con estoicismo el bocinazo del taxista que llevaba pegado detras. Esos dias los taxistas andaban a la grena con los de Uber y se palpaba en el ambiente el malestar que habia entre los dos colectivos. Agarro con fuerza el telefono movil con la mano izquierda y con un dedo de la mano derecha busco a Luismi en la agenda. No disponia de tiempo para dejar que <> se encargara de hacerlo por el. En la pantalla vio la fotografia de su amigo. Sonriente, como siempre lo conocio. Le caia el pelo lacio alrededor de las orejas. Su tez agitanada, que recordaba a un Joaquin Cortes en sus anos mozos, ensombrecia la pantalla del movil y Pau penso en que le preocuparia a su amigo para que le hubiera enviado tantos mensajes. El logotipo de un telefono de color verde se encendia y se apagaba, indicando que la llamada estaba en curso. --Vamos, vamos --chillo--. Coge el telefono de una puta vez. Un mendigo se acerco hasta la ventanilla del Nissan. Era el orgulloso poseedor de un enorme bigote que se esparcio por el cristal como si fuese una medusa dentro de una pecera. El hombre mostro un paquete de panuelos de papel, mientras que sus ojos desvariaron por los tatuajes de los brazos de Pau. --La voluntad --dijo. Pau cogio un punado de monedas de la bandeja que tenia al lado del freno de mano y, sin contarlas, se las entrego al mendigo por el minusculo hueco que quedo al bajar la ventanilla. Una bofetada del calor de julio paso al interior del Micra, como si en ese instante se hubiese abierto la tapa del infierno. El hombre, de ropajes sucios y harapientos, pero de tez lampina y mirada limpia, cogio las monedas con una mano enguantada. --Gracias, senor --dijo con un acento indeterminado, que tanto podia ser rumano como ruso. La llamada realizada a Luismi se corto cuando paso el suficiente tiempo sin que su interlocutor descolgara. Pau no creyo necesario llamar de nuevo. Cuando Luismi viera la llamada la devolveria, sin duda. Siguio conduciendo por la calle Principe de Vergara hasta que hallo un hueco al lado de unos contenedores de basura. Orillo el coche. Alli podia pensar sin que nadie lo molestara, se dijo. Todo comenzo cuando Luismi le conto que estaba trabajando en la investigacion de un club de lectura muy elitista. Luis Miguel Artapalo, al igual que Sonia, era un detective privado que trabajaba sin oficina. Fue policia local del ayuntamiento de Madrid durante diez anos, pero hacia dos que lo habian echado, nunca supo por que. Tampoco se lo pregunto, pero sabia que hay que hacerla muy gorda para que te echen de la policia. Desde entonces se habia dedicado a la investigacion con desigual exito. El abanico de posibilidades de los detectives era muy reducido y el margen de ganancia nulo. Era complicado, por no decir imposible, que un detective que trabajara por su cuenta pudiera hacerse rico. A Luismi lo habia contratado la mujer de un escritor para que investigara a un extrano club de lectura. Eran un grupo de notables que se reunian en un chale de la urbanizacion Caraquiz, en Uceda, un pequeno municipio de la provincia de Guadalajara. Luismi le habia dicho que, una vez al mes, se juntaban en la casa de un conocido alcalde de Matasena varias personalidades de la region. <>, le habia preguntado Pau. Su amigo lo nego de forma tajante. Aquellas reuniones no tenian nada que ver con el club Bilderberg. Los congregados eran: un alcalde, un presidente de una Diputacion, un fiscal, un juez, un comisario de la Policia Nacional y un mando de la Guardia Civil. --?Y para que se reunen? --se intereso Pau. --Dicen que para hablar de literatura --respondio su amigo--. Ellos dicen que es un club de lectura de novela negra --explico con voz cavernosa. Pau siempre quiso saber, desde que lo conocio, la cantidad de cigarrillos negros que habria fumado para tener semejante voz--. Escogen una novela y se reunen en una tertulia privada donde comentan que les ha parecido. Pau basculo la barbilla sin percibir nada extrano en ese club. Luismi, que mientras hablaba removia en el aire sus enormes manos, insistio en lo extrano que era que un grupo de notables se reuniera cada mes con el pretexto de comentar una novela. --?Extrano? ?Que hay de extrano? --habia preguntado Pau. --Esos hombres se reunen cada mes en el chale de Caraquiz --explico su amigo--. Al finalizar la reunion deciden el titulo y el autor de la novela que han de leer para el siguiente encuentro. Pero hace un mes, en la primera reunion literaria desde que se sepa, la del 31 de mayo, ocurrio algo por lo que me han contratado. --Pau contuvo la respiracion esperando a que Luismi se explicara--. El autor de la novela que comentaron en aquella reunion fallecio en un accidente de trafico una semana despues de que se reunieran los notables, cuando conducia su Chrysler 300. --?Casual? --consulto Pau. --Es posible. El autor era vecino de un pueblo que hay entre Pinto y Valdemoro. Se llamaba Cesario Pidal y su novela tenia un titulo tan poco sugerente como repelente: Todos los idiotas. --Pero si entre Pinto y Valdemoro no hay nada --objeto el joven agente. --!?Como que no hay nada?! --protesto colerico Luismi--. Esta Matasena. --Matasena es un municipio de apenas cuatrocientos habitantes, enclavado entre las poblaciones de Pinto y Valdemoro--. Pero la coincidencia es que el alcalde de ese municipio es uno de los notables del club de lectura, ademas de propietario del chale de Caraquiz donde se reunen. En esa conversacion fue cuando Pau se entero de que la esposa del escritor fallecido habia contratado a Luismi, que ademas era amigo personal de Pau y habia tenido una relacion intensa con Sonia Ruiz, su companera de aventuras y pesquisas. La senora Pidal lo contrato para que investigara la muerte de su marido, porque no se creia que hubiera fallecido en un accidente. La guardia civil, que son los que habian llevado la investigacion, determino que su esposo habia muerto en un accidente de trafico en el tramo entre Pinto y Valdemoro, pero ella no se lo crecia. Asi que no le quedo mas remedio que contratar los servicios de un detective privado para que indagara. Luismi y Pau habian quedado unos dias despues de que iniciara la investigacion, para tomar una cerveza en una terraza del Retiro. Pau temio que le solicitara ayuda. Los detectives privados necesitaban de la estrecha colaboracion de la policia para avanzar en sus investigaciones. Un detective privado sin contactos dentro de la policia o del CNI es como una pistola sin municion: no sirve para nada. Luismi le manifesto su preocupacion a hurgar en ese club.

  • Solo Para Mi de Bj James

    https://gigalibros.com/solo-para-mi.html

    Ni mas ni menos que cinco mujeres solteras se presentaron para responder al anuncio que Macon habia puesto para buscar esposa. Y, en opinion de Harper Moody, todas ellas sobraban; de hecho ella ya habia rechazado a escondidas a muchas otras mujeres. Para colmo de males, Macon insistio en que alojara a todas las candidatas hasta que el tomara una decision. Claro que aquella era la oportunidad perfecta para que Harper se deshiciera de todas ellas y consiguiera recuperar el amor de Macon, un amor que queria para ella sola y para siempre…

  • Barridos por el salitre de Lena Moreno

    https://gigalibros.com/barridos-por-el-salitre.html

    La primera vez que Daniel vio a Monica no sonaron campanas, no se detuvo la tierra y, por supuesto, no se le paro el corazon. Daniel habia sido contratado como monitor de tenis en un club, en el que solian pasar los calurosos dias de verano muchas familias de clase media-alta. Su tia le habia conseguido el trabajo, no pensaba darle ni un duro ese verano, ya que habia suspendido tres asignaturas para Septiembre. No le consentiria que ese ano no terminase el instituto, ya habia repetido curso en dos ocasiones, no estaba dispuesta a darle mas oportunidades, lo tenia claro, debia trabajar. Aun asi, no estaba tan mal, solo tenia que darles clase a unos ninos, que carecian de talento alguno para el tenis, pero desde luego, no seria el, quien se lo descubriera a sus padres. De hecho, podia ser peor. El ano anterior habia estado vendimiando y eso si que no se lo recomendaba a nadie. Ademas, su jefe era un tio bastante legal y le permitia utilizar la piscina y otras instalaciones del recinto, cuando acababa su jornada. Eran las ocho de la tarde y habia terminado con el grupo de ninos de cinco anos, que ese dia estaban especialmente revoltosos. Gracias al cielo, no los veria hasta el dia siguiente. Tenia muchas ganas de llegar a casa, su estomago grunia de hambre y esa noche su abuela le habia prometido hacer canelones para cenar, su comida favorita. Pero hacia tanto calor que no podia dejar pasar la oportunidad de darse un bano antes. Se encamino a la piscina con sus cosas, desde las pistas de tenis, por un sendero rodeado de cesped. Dejo todo bajo un arbol y se tiro de cabeza al agua, sin pensarselo mucho. Resultaba agradable zambullirse en el agua fresca, tras las altas temperaturas que habia padecido durante todo el dia. Al salir del agua, una chica castana, con el pelo muy corto, lo abordo. --!Hola!, soy Eva --le solto la muchacha sin darle tiempo a tomar aire. --Hola --respondio Daniel, intentando salir de su asombro. --Soy la hermana de Nico, le das clase de tenis por las mananas. Dice que aprende muchisimo contigo. -- !Ah! Si, Nico es muy buen chico. --Menudo calor hace hoy, ?No? --Si, la verdad es que si. -- ?Es el primer ano que das clases de tenis aqui? --insistio Eva, buscando tema de conversacion. --Si, no he sido antes monitor. --Pues se te da genial --comento zalamera--. Supongo que no conoceras a nadie por aqui. Yo vengo todos los dias con mis amigas y siempre nos ponemos alli -- explico, senalando un sauce, donde se encontraban dos chicas que miraban boquiabiertas la escena--. Si algun dia te apetece sentarte con nosotras, seras bienvenido. Ahora, nos vamos a tomar algo por aqui cerca, ?Te apetece venir con nosotras? --No, no, gracias. No puedo, me estan esperando en casa. --titubeo el muchacho un poco cohibido. Daniel no tenia ninguna intencion de irse a tomar nada aquella tarde, y menos aun con aquellas tres, que parecia que se estaban riendo de el. --Vale, pues otro dia, el verano el muy largo. Eva le dio dos besos y regreso con una sonrisa triunfal junto a sus amigas. Daniel no espero a secarse para ir a coger su moto y marcharse a su casa. Saludo a las dos amigas de Eva, que estaban sobre unas toallas, cuando paso a su altura con un gesto, recogio rapidamente sus cosas y desaparecio. --No me puedo creer el morro que tienes tia --sentencio Monica tan pronto como Eva se hubo sentado, y las tres chicas estallaron en risas. --Ya, !Menuda cara ha puesto, pobrecillo, se ha largado como una exhalacion! --exclamo Eva, sin poder parar de reir. --Ese ya no nos saluda en todo el verano Eva, !Que manera de espantarlo! -- tercio Lucia. --Hijas, es que esto es el toston de todos los anos. Para una vez que hay un buenorro por aqui, nos tenemos que hacer amigas suyas, ?No? --explico Eva, poniendose un poco mas seria--. A ver... Siempre estamos con los mismos chicos de siempre. En invierno, con los del instituto, que, con todos mis respetos, son unos pardillos. Bueno, todos menos tu Juan, Lucia, que ya sabemos que es un portento de la naturaleza y, ademas, como ya es universitario no cuenta --preciso guinandole un ojo a Lucia--. Pero vamos, que todos los demas son un autentico conazo. Asi que chatas, o nos espabilamos un poco este verano o, como dice mi abuela, nos quedamos para vestir santos. --No creo que estemos tan mal como para tener que ir por ahi abordando a todos los que se banen en la piscina, !Que verguenza! --se quejo Monica riendo. --Todos no, solo a los que sean guapos --contesto Eva, mientras le lanzaba un gesto de complicidad--. Y, ademas, tu no hables que tienes mucho que callar. ?Como te hago yo entender, que lo de Rafa, es un amor imposible y que hay mas peces en el mar? --No me hables --se lamento la muchacha mirando al horizonte--. La verdad es que esta muy bien el monitor de tenis... --admitio Monica, intentando desviar de ella la atencion. --Pues que quereis que os diga, a mi me da mal rollo, me recuerda a los ninos del maiz con esos ojos, da miedo --apunto Lucia. --Tiene unos ojos increibles, super verdes, cuando hablaba con el me he perdido en ellos --explico Eva teatralmente, mientras se ponia la mano en la frente--. Casi me desmayo. Las tres pasaron el resto de la tarde pensando en el viernes por la noche. Tenian previsto celebrar el cumpleanos de Lucia e iban a hacerlo por todo lo alto. Habian planeado hacer botellon en la playa. Delante de las discotecas de la curva, la zona en la que se congregaban la mayor parte de sitios de marcha de la ciudad. Ultimamente, las tres amigas salian con los hermanos gemelos de Monica, que, a su vez, eran amigos de Juan, el novio de Lucia. Cosa que a ninguno de sus hermanos le acababa de convencer. Pero, poco a poco, las amigas de su hermana, de ser unas mocosas, habian pasado a convertirse en unas chicas bastante aceptables. Harian el sacrificio. Por ultimo, estaba Rafa, amor platonico de Monica. Los siete jovenes estaban pasando un verano sin mas preocupaciones que broncearse y buscar sitios para salir de fiesta. Todo un lujo, que terminaria con el verano, por lo que todos tenian claro que lo principal era disfrutar el momento. Daniel llego al pasaje, donde se encontraba el piso en el que vivia con sus abuelos y su tia Carmen. Aparco la moto en la acera y entro en el. Vivian en pleno centro de la ciudad. El pasaje habia sido construido en 1925, y no habia perdido un apice de su magnificencia y encanto. De estilo modernista, estaba cubierto por un magnifico tragaluz de cristal con arcos de hierro. La parte inferior estaba destinada a locales comerciales, separados por unas impresionantes columnas renacentistas, con adornos modernistas y neobarrocos historicistas. Mientras que las tres plantas superiores alojaban viviendas. El conjunto arquitectonico estaba considerado como una de las construcciones mas emblematicas de la ciudad. Los turistas que lo visitaban siempre se maravillaban de los herrajes de los balcones y las puertas. A esto se sumaba que, segun pasaba el dia y variaba la luz, el pasaje tambien cambiaba su aspecto, por lo que Daniel estaba acostumbrado a encontrar gente admirada, ante la puerta de su casa, mirando los techos, las esculturas y el tragaluz, que era una obra de arte. Entro en la cocina y vio como su abuela metia la bandeja de canelones en el horno. Le dio un beso en la frente y dejo sus cosas en una silla. --!Pero que bien huele! --exclamo Daniel, exhalando el delicioso aroma. --Pensaba que llegarias mas tarde, ?Tienes hambre? --le pregunto su abuela secandose las manos en el delantal. --Un hambre atroz. --?Como te ha ido hoy? --se intereso la mujer. --Bien, no me puedo quejar. --Tu tia esta a punto de llegar. Ve a tu habitacion, y abre los libros mientras termino la cena, que se va a llevar una alegria si te ve estudiando un poco, para variar -- le dijo la mujer con un tono de reproche, pero con los ojos inundados de amor. --Vale, abuela --respondio el muchacho cansinamente. Llego a su cuarto por el estrecho pasillo. La casa era de techos altos, sus estancias bastante amplias y casi todas daban al pasaje. Daniel abrio la puerta de su habitacion y el caos se hizo patente ante sus ojos. Era muy desordenado y, aunque su abuela se afanaba en tenerlo todo perfecto, habia desistido con su nieto, ahora, cerraba la puerta y fingia que su cuarto no existia. Daniel escondio la ropa que habia tirada por todas partes debajo de la cama y se sento en el escritorio, con los apuntes dispersos. A los cinco minutos, llego su tia y se asomo a su habitacion, lo saludo y le dijo que no queria interrumpirlo, que siguiese estudiando, ya le avisaria cuando la cena estuviera lista. Le quedaban solo dos asignaturas para obtener el titulo de BUP. No sabia que haria luego, pero lo que si tenia claro es que no queria seguir estudiando, aunque su tia se pusiera como una fiera. Los libros le aburrian, le gustaba hacer cosas mas practicas, trabajar con las manos se le daba bien, encerrarse a estudiar le costaba un esfuerzo titanico, que normalmente solo le reportaba frustracion. Daniel habia vivido desde que tenia uso de razon con sus abuelos y su tia. A su madre la habia visto tan solo en tres ocasiones, a lo largo de toda su vida, en las que acudio a sus abuelos para pedirles dinero. Segun habia escuchado, espiando las conversaciones entre su abuela y su tia, su madre se quedo embarazada con dieciocho anos y se fugo con un comercial unos diez anos mayor que ella. Dos anos despues de que naciera Daniel, se rompio la relacion y cada uno tomo su camino. Su madre queria empezar una nueva vida en la capital y Daniel no encajaba en sus planes, por lo que lo dejo con sus abuelos, que, una vez pasada la sorpresa inicial, lo trataron y quisieron como a un hijo. En todos esos anos, su tia, que tenia tan solo diecisiete anos cuando Daniel empezo a vivir en la casa, habia adoptado el rol de madre y se habia hecho cargo de todas sus necesidades. Carmen era una mujer seria y discreta, trabajaba en un banco donde antes lo habia hecho su padre y, pese a la gran competencia, habia logrado ir ascendiendo, ahora era la directora de una sucursal. No le gustaba mucho salir, le encantaba quedarse en casa leyendo o escuchando opera, una de sus pasiones. De vez en cuando, salia a tomar cafe con sus amigas, con las que, poco a poco, habia ido perdiendo el contacto, la mayoria se habian casado y ya eran madres. Cada vez, tenia menos cosas en comun con ellas y la relacion se iba enfriando, pero Carmen era feliz, cuidaba de su pequena familia y habia visto crecer a Daniel. No queria nada mas. Monica llego a su casa temprano, sus padres habian ido a hacer la compra y sus hermanos, los gemelos, estaban tirados en el salon viendo la tele. Hizo ademan de saludarlos, pero ellos, como casi siempre, la ignoraron. Subio a su cuarto y se puso sus zapatillas de correr, bajo las escaleras y salio por la puerta. Vivian en un chalet adosado a las afueras. Era un lugar bastante tranquilo, al pie de la montana, donde terminaba la ciudad. Calento los gemelos, despues los brazos rapidamente y echo a correr calle arriba, hasta el lugar donde la ciudad desaparecia y era sustituida por una pequena carretera, que conducia al santuario ubicado en el interior de un parque natural de gran belleza. Era su lugar favorito en el mundo, y siempre que podia subia a ver alli atardecer. Se trataba de un emplazamiento unico, que ofrecia unas vistas increibles, un espacio al margen de todo lo demas. Eran cuatro kilometros de subida, por lo que al final del camino, siempre tenia que parar y seguir andando. Las sensaciones que le ofrecia correr, constituian una adiccion para ella. Se sentia libre y su mente se despejaba de cualquier preocupacion. Paso las zonas habilitadas para barbacoas, la fuente, los columpios y, al dejar atras la ultima curva, se alzo ante ella el santuario. No era una persona especialmente devota. De hecho, desde que tomara la Comunion, no habia vuelto a pisar una iglesia, pero aquel lugar la sobrecogia, al tiempo que le reportaba una inmensa paz. Se sento en la roca en la que siempre lo hacia, y contemplo el espectaculo fascinada. El sol, se fue poniendo y las luces comenzaron a iluminar la ciudad, con el mar al fondo. Como de costumbre, se habia quedado embobada, absorta en sus propios pensamientos... Miro el reloj y se dio cuenta de lo tarde que era, debia darse prisa en llegar a casa o su madre se enfadaria con ella. La bajada era mucho mejor que la subida, aunque a veces tenia la sensacion de que perdia el control, y le costaba coordinar los pies en algunos tramos, donde la pendiente era mas pronunciada. Cuando llego, vio a sus padres aparcando ante su casa, bajando la compra semanal del coche. --Hola ?Os ayudo? --pregunto, tratando de recuperar el aliento, desde la puerta de la casa. --Si, carino, gracias. Dile a tus hermanos que vengan tambien a echar una mano --le dijo su madre dandole un beso--. Si me haces el favor, coloca tu las cosas, tu padre y yo llegamos tarde al cine; y sube a ducharte, estas sudando. Monica grito a sus hermanos a modo de llamada, y comenzo a meter algunas cosas en el frigorifico. --No hay problema, pero que Luis y Fernando se hagan su propia cena, se piensan que soy su criada --protesto. --No te preocupes, teneis una bandeja de lasana en el horno, solo teneis que calentarla --le contesto su madre risuena--. Nos vamos, que tu padre esta nervioso por la pelicula. --?Bruce Willis? --Si, esta vez contra un asteroide. En ese momento, entraron en la cocina su padre y sus hermanos, con las ultimas bolsas de la compra. --Hola cielo --le dijo el hombre a Monica--. Vamonos carino --apremio a su mujer--. Que no llegamos. --No sufras papa, para Bruce, un asteroide no es nada --bromeo Monica. --Tienes razon --le dijo alborotandole el pelo a su hija--. Pero me gustaria no llegar tarde para comprobarlo. Una vez sus padres se hubieron marchado, Monica continuo ordenando alimentos y encendio el horno mientras sus hermanos se escabullian. --!Oye... Haced el favor de poner por lo menos la mesa, o tiro la lasana a la basura! --vocifero. --Bueno, tampoco hay que ser tan drasticos, yo te ayudo --se ofrecio su hermano Luis, regresando a la cocina y dandole un capon. --!Ay, ya te vale! --le gruno Monica, frotandose la cabeza--. !Que dano!, !Toma, coloca tu la leche!, que eres mas alto. --De acuerdo, enana. --Mas te vale larguirucho, o cuando venga mama le contare lo temprano que llegaste el sabado. --Yo que tu mantendria la bocaza cerrada o el viernes os quedais sin chicos guapos, para el botellon del cumpleanos de Lucia. --Creo que lo superariamos, ninguno sois Leonardo Dicaprio, precisamente. --Ya le gustaria a ese taponcillo ser la mitad de guapo que yo --se burlo su hermano ironicamente. --Mira que eres payaso Luis --replico Monica riendose--. Anda, haz el favor de ayudarme, que me tengo que duchar. --No hace falta que lo digas, menuda peste guapa --exagero Luis entre carcajadas, mientras se tapaba la nariz-- .Ve, que ya acabo yo con esto y, cuando termines, preguntale al rey Fernando que si puede levantarse del sofa y honrarnos con su presencia durante la cena. --Trato hecho --asintio Monica sonriendo, mientras subia las escaleras. Durante la ducha, Monica penso en sus hermanos, siempre hacian todo juntos, era como si solo los hubiesen separado los diez minutos que se llevaron al nacer. Ese ano, habian empezado la universidad, y era la primera vez que no iban a la misma clase. Fernando estudiaba Magisterio de Educacion Fisica; y Luis habia optado por Derecho. Tenian suerte, ya que sus facultades estaban una frente a la otra y, de momento, ese ano los dos tenian un horario similar. Al comienzo del curso, se notaba que les faltaba algo cuando estaban separados, se ponian nerviosos, como desubicados, pero poco a poco cada uno empezaba a tomar su propio camino, aunque en cuanto entraban en casa, se buscaban el uno al otro, como un perro a su amo. Aquel ano tambien se cortaron el pelo de forma diferente. Fernando se lo habia dejado crecer y se habia puesto un pendiente en la oreja, cosa que no entusiasmaba a su padre y era motivo recurrente de discusion entre ellos, pero hizo que fuese mas facil distinguirlos, para sus nuevos amigos universitarios. Aunque fisicamente habian sido identicos hasta ahora, no podian tener un caracter mas diferente. Fernando era muy independiente, pasaba de todo y, cuando te hacia caso, era como si te estuviese haciendo un favor. Los dos se metian todo el dia con Monica, pero con Luis mantenia una relacion mas estrecha, se preocupaba por sus cosas y hablaba con ella a menudo. Monica busco un pijama, se seco el pelo con una toalla y se peino. Cuando paso por el salon, le dijo a Fernando que la cena estaba lista y se encamino a la cocina, donde comprobo que Luis tenia la situacion bajo control. Todo estaba en su sitio y la mesa estaba dispuesta para los tres. Rapidamente tomaron asiento y se dispusieron a dar buena cuenta de la lasana, que era el plato estrella de su madre

  • El Leon de Piares de Angel Zuare

    https://gigalibros.com/el-leon-de-piares.html

    La isla continental de Handor guarda leyendas, cronicas e historias que han cautivado la imaginacion de quienes las han escuchado en las voces de los juglares o de sus padres; en las platicas de sobremesa en tabernas o palacios, o leido en gruesos volumenes y pergaminos, registrados por maestros escribanos. Son historias de intriga en la ciudad de Thunderstone, capital de la Coalicion de Naciones, o cronicas de arriesgados viajes realizados por las caravanas que cruzan los desiertos de Narur. Handor es tierra de magia, presente en sus lugares sagrados o misticos y manifestada a traves de sus escolares u hombres de fe, ya sea para entretener a la nobleza y al pueblo o para entender y controlar las fuerzas de la realidad misma.
    Handor ha visto correr sangre.

  • Juego terminado de Conchi Aragon

    https://gigalibros.com/juego-terminado.html

    <<--?Sabes que es la Ballena Azul?
    --Un juego formado por cincuenta retos en el que cada participante tiene que superar cada uno de ellos. El juego concluye cuando el jugador se suicida>>.

  • De Enfermeras Y Pacientes de Magela Gracia

    https://gigalibros.com/de-enfermeras-y-pacientes.html

    ?Te han dicho alguna vez que reir es bueno para la salud?
    ?Te han dicho alguna vez que llorar cura?
    ?Te ha intentado llevar a la cama alguien alegando que el sexo le sienta fantasticamente bien a tu organismo?
    ?Y te lo has creido?
    !Pues es verdad! Porque sentir y explotar nos descarga, que a veces llevamos demasiado a nuestras espaldas. Si reir quita las arrugas, llorar aleja las penas y el sexo alarga la vida. ?por que no llorar, reir y follar?
    Este libro te lo pone facil, porque sentir es lo mas importante. Tres curas para todos los males que se te puedan presentar en la vida.
    Y te lo receta una enfermera.
    No siempre son los medicos los que tienen cura para todo.

  • Ojos azules de Arturo Perez-reverte

    https://gigalibros.com/ojos-azules.html

    Tendemos acaso a imaginar la <> (30 de junio al 1 de julio de 1520) bajo las especies de un vasto mural epico, en el que los soldados de Cortes luchan, matan y mueren en una lluviosa penumbra azteca; pero acerquemonos mas, no al friso monumental, sino al individuo concreto, como el que late en el codice de Guatemala en el que Bernal Diaz del Castillo refirio su alucinada y luminosa peripecia mexicana: nos encontraremos en el territorio en el que habita el narrador de Ojos azules. Miniatura magistral de la escritura de Perez-Reverte, Ojos azules me trae a la memoria cierta frase de Emerson que solia recordar Borges: comprendiendo un momento de la vida de un hombre, podremos comprender toda su vida. Del mismo modo, quien lee Ojos azules no solo percibe la vida entera del soldado que la protagoniza, sino el alcance y significacion del extenso episodio epico en el que se inserta, y, en otro sentido, la dimension de toda la numerosa, variada y rica trayectoria narrativa de Arturo Perez-Reverte, cuyas virtudes compendia especularmente y espectacularmente en un admirable microcosmos. Atras quedo, desde el principio, y no precisamente por falta de conocimientos y herramientas, la tentacion del mimetismo arcaizante en el lenguaje, la tentacion de la arqueologia expresiva; atras quedo igualmente la tentacion o posibilidad optativa de dar al habla una patina que ilusoriamente sugiriera la apariencia de lo antiguo; todo eso esta ya en lo narrado y no es preciso que redundantemente aluda a ello el registro verbal empleado, salvo en aquello que no permita otra resolucion. Mas lo que importa es, por el contrario, subrayar, no la lejania temporal, sino la proximidad vivencial del relato. Este soldado es casi el soldado de cualquier guerra, a condicion de no ser un recluta: podria ser un romano como los que aparecen en las paginas de Amiano Marcelino, o ciertos combatientes contemporaneos. El coloquialismo de su diccion no se encamina a atenuar el tono epico de lo relatado, sino, por el contrario, a realzarlo; precisamente porque esta voz nos resulta tan cercana quedamos mas sobrecogidos por lo que nos cuenta. ?Que nos cuenta, por cierto? No meramente una historia de coraje, ganancia o perdida; no meramente (y todo ello seria ya mucho) la confrontacion o careo entre dos mundos: son, por el contrario, las ultimas palabras que acierta a pensar el soldado las que nos dan la clave de boveda de este excepcional edificio narrativo. El tema final de Ojos azules, implicito ya en su titulo (que es a la vez el sintagma que cierra la narracion), no es otro que el mestizaje. A su luz, la a un tiempo sombria y fulgurante <> revela, tras el aspero chasquido de herrajes, su condicion de encrucijada: nada sera en adelante lo que fue, ni para los mexicanos ni para los que aportaron a la costa azteca desde el reino de Castilla. Nada sera para ningun lector lo mismo: con el soldado en plena lucha --propiamente, en agonia en el sentido etimologico del termino-- hemos asistido al transito y fusion entre dos colectividades y dos momentos de la Historia. Unas dotes de narrador verdaderamente extraordinarias y una infrecuentisima capacidad de sintesis eran precisas para ello: la pieza que el lector tiene en sus manos las acredita, una vez mas, con creces. PERE GIMFERRER Barcelona, 6-XI-2008 Ojos azules Llovia a cantaros. Llovia, penso el soldado, como si el dios Tlaloc o la puta que lo pario hubieran roto las compuertas del cielo. Llovia mientras resonaban afuera los tambores, y los capitanes iban llegando cubiertos de hierro, sombrios, con las gotas de agua corriendoles por los morriones y la cara y las cicatrices y las barbas. Llovia sobre Tenochtitlan, cubriendo la capital azteca de una noche humeda; lagrimas siniestras que repiqueteaban en los charcos del patio del templo mayor, y disolvian en regueros pardos las manchas de sangre de la ultima matanza, la de centenares de indios mexicanos, cuando en plena fiesta el capitan Alvarado mando cerrar las puertas y los hizo degollar, ris, ras, visto y no visto, hombres, mujeres y ninos, por aquello de que al que madruga Dios lo ayuda, y mas vale adelantarse que llegar tarde. Los he cogido en el introito, dijo luego Alvarado, cuando Cortes fue a echarle la bronca. Se me fue la mano, jefe, se disculpaba, hurano. Pero por lo bajini se reia, el animal. Los he cogido en el introito. Bum, bum, bum, bum. Apoyado en el porton, bajo la lluvia, el soldado de ojos azules reprimio un escalofrio mientras se ajustaba el peto y cenia la espada. A su alrededor los companeros se miraban unos a otros, inquietos. Al otro lado de los muros del palacio, afuera, los tambores llevaban sonando una eternidad. Bum, bum, bum, bum. Habia toneladas de oro, pero ahora Moctezuma estaba muerto y se acababan las provisiones y todo se habia ido al carajo. Bum, bum, bum, bum. Tambien habia miles y miles de mexicanos en la ciudad, alrededor, cubriendo las terrazas, llenando las piraguas de guerra en los canales y la calzada entre los puentes cortados. Mexicanos sedientos de venganza. Bum, bum, bum. Asi todo el dia y toda la noche, mientras en lo alto de los templos los sacerdotes alzaban los brazos al cielo y preparaban los sacrificios. Bum, bum, bum, bum. Aquello sonaba adentro, precisamente en el corazon, que los mas cenizos ya imaginaban fuera del cuerpo, ensangrentado, abierto el pecho por el cuchillo de obsidiana. Bum, bum, bum. Menudo plan, penso el soldado mirando las caras mortalmente palidas de los otros. Venir desde Caceres y Tordesillas y Luarca y Sangonera, que estan lejos de cojones, para terminar abierto como un gorrino, con las asaduras hechas brochetas en lo alto de un templo, aqui donde Cristo dio las tres voces. Bum, bum, bum. Y ademas, de tanto oirlos, aquellos tambores habian adquirido un lenguaje propio. Si uno prestaba atencion podia oir que decian: teules malditos, perros, vais a morir todos hasta el ultimo, y pagareis el deshonor de nuestros idolos, y vuestra sangre correra por las aras y los escalones de los templos. Bum, bum, bum. Eso decian aquella noche, penso estremeciendose, los jodidos tambores de Tenochtitlan.

  • Te necesito esta noche de Sarah Wall

    https://gigalibros.com/te-necesito-esta-noche.html

    Carlos y yo eramos felices. ?Que nos habia pasado? Nuestro amor era indestructible, o al menos eso pensaba yo. Soy una persona que cuando ama lo hace sin condiciones. Me entrego totalmente. Apenas habia tenido un par de novietes antes que el y ninguno me calo tan hondo como Carlos. Siempre tuvo un problema y es que le encantaba flirtear, ser el centro de atencion, aunque para el fuera algo innato y sin intencion; sin quererlo, mas de una vez tuve que sacar a relucir mi mala leche en algun local, por alguna moscona/buscona que revoloteaba alrededor. Odiaba entrar en un restaurante y que automaticamente todas las mujeres se quedaran boquiabiertas al verlo, sin disimulo; posiblemente todas deseando tirarselo sin ningun tipo de miramiento. El no le daba importancia, es mas, le gustaba gustar... estoy casi segura de que me ha sido fiel, excepto el ultimo ano. Recuerdo muy al principio de nuestra relacion cuando eramos unos salvajes. Teniamos las hormonas mas que revolucionadas, no parabamos de hacer el amor. Nuestro sexo era apasionado y brutal; ahora hace mas de cinco meses que no nos tocamos y apenas hablamos... ni siquiera hemos discutido. Simplemente la llama se esta apagando y parece que los dos estamos soplando con fuerza para que eso ocurra. Nuestro amor languidece, noto que muere y cada manana me pregunto ?que nos ha pasado? Mi madre le ama, mi hermana lo admira y mi padre lo tolera. A Juan, mi padre, se que nunca le acabo de gustar la reputacion de Carlos. Antes de casarnos, sutilmente me pregunto si estaba segura de lo que hacia. Ha sido la unica vez que me he enfadado con el; un hombre que jamas se habia inmiscuido en mis relaciones, de repente me advertia. Carlos entre sus clases y sus conferencias no para por casa. Yo, entre mis guardias y mis consultas estoy tan cansada que intento evitar todo contacto y noto que el tambien lo hace. Pero la pregunta es... ?cuando fue que todo esto se hizo tan grande que ya no lo podemos parar? Hemos tenido horarios dificiles, si, pero siempre encontrabamos un hueco para nosotros. Y nunca habiamos estado mas de una semana sin hacerlo, !NUNCA! Soy enfermera jefe en la planta de cardiologia infantil del Hospital Central, aunque mi padre y mi madre, especialmente ella, querian que fuera neurologa como papa; estoy acostumbrada a la presion y desgraciadamente a perder pacientes, aunque a esto dificilmente te acostumbras; el corazon es lo que tiene: Se intenta todo, se hace lo mejor que se puede y mas. Y aunque estas cerca de tus pacientes las veinticuatro horas, aun asi, muchas veces los pierdes. Aunque te preparen para ello nunca acabas de estarlo y menos en una planta infantil. Siento como si estuviera perdiendo parte de mi vida. !No puedo luchar mas! y se que Carlos tampoco ha colaborado demasiado los ultimos meses. ?Que nos ha ocurrido? ?Que ha sido del chico apasionado, dulce aunque con genio, detallista y siempre optimista que habitaba en el? Es su mismo cuerpo, pero su corazon piensa de distinta manera. Ya no le inspiro los mismos sentimientos de antes y quiero saber el motivo. Carlos y yo nos conocimos en una fiesta organizada por mis padres donde se encontraba lo mas selecto de la ciudad. Es una fiesta que mis padres organizan todos los veranos en nuestra casa en la zona alta de Barcelona. Solo teniamos dieciocho y veinte anos respectivamente; en aquel momento nos gustamos, eso era mas que evidente... el no dejaba de mirarme y yo no dejaba de mirarlo... Ese cuerpo deportista, ese cabello ondulado y oscuro, esa piel morena y esos ojos color miel, indefinidos entre el verde y el castano... ?Como no mirarle? si es que estaba para mojar pan y lo que fuera necesario mojar... Yo estaba en plena selectividad para poder cursar la carrera de enfermeria, mi autentica vocacion, en contra de la opinion de mi familia que me atosigaba para que siguiera los pasos de papa en medicina. Mi madre no dejaba de repetir que, al ser una chica con el expediente academico tan brillante, podia aspirar a <>. Mi vocacion era enfermeria y eso es lo que hice. <> Fue lo que dijo mi madre con los ojos como platos. <>... Mi madre es buena mujer, pero quiza demasiado entrometida e interesada. No me gusta escoger a las personas solo por el maravilloso futuro que me puedan ofrecer... pero es mi madre, no la cambiare. Carlos se marcho al otro lado del charco, pero seguia sabiendo de el por los amigos comunes. No me gusto nada oir que una tal Charlotte le tenia mas que pillado. No era mio, lo se, pero lo deseaba y a veces incluso fantaseaba con lo que podriamos ser... !A imaginacion no me gana nadie! Ambos tuvimos nuestros rollitos y romances; el mas que yo... por supuesto, el era el <> de EE.UU. Que si Charlotte, que si Kayla, Hayley... un sinfin de chicas pasaron por su cama... y los rollos de Carlos salian en mas de una charla. Al cabo de unos pocos anos la foto habia cambiado. Yo ya estaba trabajando en el Hospital Central y Carlos lo hacia en una importante financiera americana, aunque lo que realmente le gustaba era la docencia. Volvio a Barcelona y empezo a dar clases en una reconocida Universidad consiguiendo un alto cargo en ella. Intente averiguar cuando volvia a Barcelona y consegui saberlo, pero no disponia de sus datos de contacto y, pese a que pregunte a varios amigos comunes siempre con disimulo y excusas, un dia casualmente lo vi aparecer por la cocteleria Jims's. No era una habitual del Jims's, pero justo aquel dia habia quedado con Anna, una de mis mejores amigas. Anna todavia no habia llegado --suele llegar la ultima a todos los eventos, es algo que la caracteriza-- y alli estaba yo, esperando como una boba. Parecia que iba buscando rollo. Ya llevaba dos copas cuando el entro por la puerta. Carlos estaba mas guapo que nunca con su polo blanco y sus tejanos... esa barbita de dos dias... informal pero irresistible. Siempre ha tenido estilo. Sus brazos aun estaban mas fornidos pero sin llegar a estar hinchados, culito irresistible... Aunque le conoci de inmediato, me hice un poco la dura para mantenerle atento y que no viera como mis babas asomaban por mi boca sin remedio, como pasaba con todas. De hecho, cuando me dio los dos besos de cortesia en la mejilla, mas que cerca de la comisura, diria yo, mi cuerpo sufrio una descarga electrica indescriptible y me ruborice, estoy segura. Pero siempre se le puede echar la culpa a dos Manhattans que me habia cascado esperando a Anna. Tras nuestra cordial conversacion y con la excusa de ir al bano, llame a mi amiga Anna para cancelar nuestros planes y quede en que ya le contaria el porque. Empezamos a hablar de los viejos tiempos. El plan se desarrollo a la perfeccion y cenamos en Chez Pierre. Para ser nuestra primera cita e improvisada no estuvo nada mal. Tras la cena le sugeri que me dejara en casa y, como excusa, le dije que tenia turno de manana. Era mentira, no queria caer a cuatro patas de buena a primeras, que es lo que hubiera pasado. No queria que pensara que yo era como las demas, una <>; yo queria estar con el para siempre y no que a los dos dias se cansara de mi. Quise mantenerle en vilo... crear un poco de intriga para llamar su atencion, pero claro, tambien podia salir rana la jugada y no volverle a ver el pelo. Al dia siguiente volvimos a vernos y desde entonces, siempre juntos. Hasta ahora, que nuestros caminos parece que se separan.

  • Nieves y bestia de Gema Perez

    https://gigalibros.com/nieves-y-bestia.html

    Erik era un gran y temible lobo feroz.
    Pero tambien era el principe del reino.
    Cambiaformas y heredero del trono.
    Licantropo y futuro rey.

  • Palidez y otros relatos de Rafa Ron

    https://gigalibros.com/palidez-y-otros-relatos.html

    Erotismo, sadismo, dolor y placer se entrelazan en los relatos de Rafa Ron, que abren la puerta a un mundo en el que nada es lo que parece y en el que lo que es puede resultar demasiado incomodo.

  • Los patitos feos y los cisnes negros de Jordi Grane

    https://gigalibros.com/los-patitos-feos-y-los-cisnes-negros.html

    Diez anos despues de La resiliencia, Jordi Grane y Anna Fores exploran nuevamente este termino a la luz de los mas recientes estudios en neurociencia. En Los patitos feos y los cisnes negros, los
    autores analizan la resiliencia concebida como un desafio vital repleto de fragilidad, belleza, altibajos y plenitud.
    Basandose en la ciencia, la etica e incluso la espiritualidad, esta obra invita al lector a trabajar su capacidad de adaptacion e ir siempre un paso mas alla.

  • Te amare toda la vida de Susana Oro

    https://gigalibros.com/te-amare-toda-la-vida.html

    Cuando Sami Ferguson se enamoro era demasiado joven. A pesar de su corta edad ella estaba segura que seria para toda la vida. Lo que no se imagino fue lo doloroso e injusto que podia ser el amor, ni las dificultades que tendria que soportar porque los dos eran de clases sociales diferentes. Sami era la hija de Rosi, la empleada domestica de la familia Arias, y Magda Arias no iba a permitir que su hijo Alvaro perdiera la cabeza y el brillante futuro que tenia por delante por culpa de sus ridiculos sentimientos por la hija de su sirvienta.
    Alvaro Arias se enamoro de Sami cuando ella era demasiado ingenua e inocente. El sabia que tendria que esperar que ella creciera para concretar ese amor que les llego demasiado pronto.
    Cinco anos despues los dos se reencuentran, y Alvaro esta convencido que ese es su momento con Sami. Pero nada salio como el se lo habia imaginado.
    Odios, culpas, resentimientos del pasado y celos seran los obstaculos que se interpondran en la vida de los dos.
    ?Podran Sami y Alvaro sortear tantos escollos, olvidar las culpas y perdonar los errores? ?Podra el amor superar tantas pruebas?

  • El orgullo de Mr. Darcy de Laura Barcali

    https://gigalibros.com/el-orgullo-de-mr-darcy.html

    Es una verdad universalmente aceptada que todo soltero en posesion de una gran fortuna necesita una esposa. Y eso es lo que penso Fitzwilliam Darcy, con profundo desagrado, cuando su amigo Charles Bingley le informo de que estaba interesado en la finca Netherfield Park, cerca de Meryton, tras haber acudido el pasado lunes a visitarla. --?Cuando tienes pensado instalarte? --pregunto Darcy. --Para San Miguel. Mandare algunos criados para que preparen la propiedad --dijo con el enorme entusiasmo que le caracterizaba--. Es un condado encantador para pasar esta epoca del ano. Te encantara, estoy seguro --anadio. --?Te encantara? No pretenderas que te acompane. Tengo mucho que hacer en Pemberley -- contesto con la mala cara habitual ante algo que no entraba en sus planes. --Darcy, amigo, piensa en los bailes... --Yo no bailo y bien lo sabes --lo corto. --En las encantadoras damas del lugar, los largos paseos a caballo, !y la caza! --Querido amigo, si hay damas casaderas, que las habra, mucho me temo que las presas de caza seremos nosotros. --Darcy, siempre mal pensando de todo el mundo. !Seguro que son todos muy amables! En cuanto a bailar, iremos a las fiestas o incluso podria hacer una en Netherfield. Conseguire que bailes. Darcy no pudo rechazar la invitacion de su amigo, pero no pensaba bailar con las damas del condado. No necesitaba una esposa. II Aquella manana, tan solo dos dias despues de haberse instalado Bingley en Netherfield, un vecino del lugar, el senor Bennet, le presento sus respetos. Le parecio al joven un hombre interesante, culto y con muy buen sentido del humor. --Senor Bingley, mi esposa, la senora Bennet, y yo esperamos que este a gusto en Netherfield y sus alrededores --dijo. --Estoy encantado, senor Bennet. Y, digame, ?tiene usted familia en la zona? --!Oh, ya lo creo! Cinco hijas, la mayoria cabezas de chorlito. Casaderas. Al joven le parecio que el senor Bennet era muy divertido. --Es de suponer, senor Bingley, que nos veremos en bailes y reuniones. --!Desde luego! Me encanta bailar. Ya he sido informado por sir William del proximo baile. --Esperamos poder disfrutar de su presencia mucho antes. --Sera un honor y un placer hacerles una visita a ustedes y a sus hijas. --Deseo de corazon recibir su visita en nuestra humilde casa y que no salga corriendo al ver a mi progenie. Bingley rio de buena gana ante las ocurrencias de tan peculiar hombre. --Le he traido este libro de mi Biblioteca personal, espero que lo disfrute. --!Gracias, senor Bennet! Tendre que devolverselo en breve. --Asi lo espero. Un placer tenerlo aqui. --Gracias --contesto Bingley con solemnidad. Tras la marcha del hombre, el joven Bingley se dispuso a escribir una carta a su amigo Darcy. Querido amigo, En solo dos dias que llevo aqui ya he conocido gente maravillosa. Todos han sido muy amables conmigo. En quince dias se celebra el primer baile. Te espero para el acontecimiento. Tambien hay jovenes casaderas con las que podras bailar, y por lo visto muy hermosas. Sinceramente tuyo, Charles Bingley Cuando Darcy recibio la misiva no penso tan bien de la amabilidad de los lugarenos. Cuando tu renta es de cinco mil libras anuales todos se vuelven muy amables, las hijas extremadamente casaderas y predispuestas a bailar hasta desfallecer. Iria a Netherfield, tal como le prometio, pero para cuidar y proteger a su amigo. III A los pocos dias, el senor Bingley devolvio la visita al senor Bennet, pasando diez minutos con el en la biblioteca. La ilusion de ver a las que decian que eran las mas hermosas senoritas del lugar se desvanecio. Sin embargo, esa misma noche, recibio una invitacion a cenar, junto con otra que requeria su presencia en Londres, por lo que tendria que posponer la cena en casa de los Bennet. Ya en la capital, la carta de su hermana Caroline cobro mas sentido. --Pasaremos contigo la temporada en Netherfield Louisa, el Sr. Hurst y yo. --Os encantara. Solo he recibido amabilidad y muchas invitaciones. Son una gente maravillosa. --No me fio de esos pueblerinos y sus hijas casaderas. --!Caroline! --la reprendio Bingley. --Yo tambien os acompanare --confirmo Darcy, muy a su pesar. Pero salvar a su amigo de un mal matrimonio era prioridad para el. Y asi termino toda discusion. Dias despues, ya en el salon de baile de Meryton, la presencia de distinguidos personajes de la capital llamo la atencion de los presentes. El grupo lo componian cinco personas: Bingley, sus dos hermanas, el marido de una de ellas y un distinguido caballero: Darcy. Todos le admiraron al enterarse de que disponia de una renta de nada mas y nada menos que diez mil libras anuales y diversas tierras. Pero ser sabedor de todo esto le incomodo y fue mas grosero de lo habitual en publico. Sus modales eran indignantes, siendo considerado un antipatico y un desagradable. Se nego a bailar, a excepcion de un baile con cada una de las hermanas de Bingley, y a conversar con los presentes mas de un minuto. Bingley lo reprendio rapidamente; --Podrias ser mas simpatico. Esta gente es muy amable. !Y haz el favor de bailar con alguna dama del lugar! --Ya he bailado con tus hermanas, he cumplido y no necesito mas. --Eso no cuenta --contesto Bingley--. Vamos, Darcy, tengo que conseguir que bailes. No soporto verte ahi solo y aburrido. --Lo prefiero. --Seria mejor que te unieras a los demas. --No pienso hacerlo, detesto bailar, y en una reunion como esta me resultaria insoportable. No hay ninguna mujer en toda la sala con la que consideraria bailar. --Me horrorizaria ser tan quisquilloso como tu --exclamo Bingley--. Hay muchachas encantadoras, algunas extraordinariamente hermosas. --Me temo que tu ya estas bailando con la unica joven agraciada de esta... reunion. --Y miro a la mayor de los Bennet. --!Oh, si! Es la mujer mas bella que he visto en mi vida. Pero mira, justo detras de ti esta sentada su hermana. Es bonita, !y seguro que simpatica! --exclamo con su habitual entusiasmo --. Le pedire a mi pareja de baile que te la presente. --?A quien te refieres? --Darcy se dio la vuelta y miro a Elizabeth Bennet, la segunda hija de los Bennet, que le miraba a su vez, asi que tuvo que apartar rapidamente la mirada, con toda la frialdad que le caracterizaba. --Digamos que es pasable, pero no lo suficientemente hermosa como para tentarme. Y ya ves que esta ahi sola, desdenada por el resto de caballeros. Vuelve con tu pareja y disfruta de la velada, no pierdas mas el tiempo conmigo. --Esta bien. --Y se alejo, deseando volver con Jane. Darcy miro de reojo a Elizabeth y vio en esta una sonrisa desdenosa, entre divertida y burlona, pues habia escuchado toda la conversacion de los dos caballeros. A Darcy le sento bastante mal y le puso de peor humor si cabia. Bingley, ajeno a los sentimientos de su amigo, bailo de nuevo con la hermosa Jane, obnubilado ante su presencia dulce y amable. Tambien lo hizo con Elizabeth bajo la mirada fria de Darcy, que seguia de pie como un palo, mientras se daba cuenta de que ella cuchicheaba con otras personas, probablemente sobre el y su desprecio anterior a bailar con ella. Tal vez se habia ido de la lengua demasiado rapido y, queriendo desdenar, habia sido desdenado con mayor rapidez aun. IV Cuando Darcy y Bingley volvieron a Netherfield y se quedaron a solas, el segundo le comento al primero lo mucho que adoraba a Jane. --Es justo como debe ser una joven: sensata, afable, dulce... !y es realmente hermosa! --En eso tienes razon, es una joven muy hermosa. Lastima de su familia --comento con desagrado. --?Por que dices eso? Son todos encantadores. Y Elizabeth no es como piensas. --No pienso nada de ella. Tienes una gran tendencia a que te guste la gente, y lo sabes --lo reprendio Darcy--. Nunca ves defectos en nadie. Para ti todo el mundo es bueno y un dia te llevaras una sorpresa. --Oh, vamos, Darcy. Somos amigos, por supuesto que veo todo lo bueno de las personas, aunque estos crean que tengo amigos maleducados. Podrias haber sido mucho mas amable. Al final siempre tengo que defenderte. --Y que esperabas. Solo buscan nuestro dinero. --Darcy, tienes demasiados prejuicios. --Y tu eres demasiado displicente. Entre Darcy y Bingley existia una fuerte amistad, pese a la disparidad de caracteres. Eran como hermanos. Para Bingley, que hacia poco habia alcanzado la mayoria de edad*, y tras la muerte de su padre, encontro en Darcy el apoyo masculino que necesitaba. Confiaba en el y su buen juicio ante las cosas de la vida y los negocios. Darcy era brillante e inteligente, pero altanero, reservado y exigente. Bingley, sin ser menos inteligente, era todo lo contrario: caia bien siempre. Darcy, en cambio, se las arreglaba para hacer todo tipo de desaires. --En cualquier caso, Darcy, no puedes negar que Jane en particular es una muchacha adorable. --No lo niego --contesto. --Mis hermanas no ven inconveniente en que trate mas con ella. --Cierto. --Asi que eso hare --concluyo con una gran sonrisa en la boca.

  • La chica de los deportes (Chicas Magazine 2) de Olivia Kiss

    https://gigalibros.com/la-chica-de-los-deportes-chicas-magazine-2.html

    Zoe Matson siempre ha sonado con trabajar en la seccion de deportes de la revista Golden Miller y, ahora que por fin lo ha conseguido tras anos de esfuerzo, no puede ser mas feliz.
    Pero eso esta a punto de cambiar, porque cuando le piden que acompane al equipo de hockey de los New York Rangers, no puede negarse. Lo que no esperaba era que Jaxon Baker, el capitan del equipo, fuese tan insufrible. Desde el primer instante, saltan chispas entre ellos. Zoe sabe que le quedan unas largas y duras semanas por delante de trabajo. Y Jaxon sabe que las mujeres como Zoe estan destinadas a convertirse en una complicacion y no esta dispuesto a bajar la guardia cuando ella esta cerca.
    Pero ?como resistirse a la innegable atraccion que sienten?

  • Nunca te fies de una Mosquita Muerta de Lara Blanc

    https://gigalibros.com/nunca-te-fies-de-una-mosquita-muerta.html

    Aqui estoy, sentada en una sala de espera para realizar una entrevista. Unos meses atras, mi vida ha vuelto a encauzarse. No puedo estar mas feliz. Tengo un proyecto de negocio, al que he ido dedicando muchos ratos fuera del horario laboral y que comienza a despegar. Tambien tengo pareja, por fin tengo una relacion sana y equilibrada llena de planes. Estoy tranquila, confio en mi y creo que he llegado a un punto de mi vida en el que me veo capaz de hacer cualquier cosa, sin miedo y sin inseguridades. No he pensado mucho en lo que ponerme. Llevo unos vaqueros claros y un jersey rojo, pero he querido pintarme los labios con el carmin de Oli, que solo uso para las ocasiones especiales, porque esta, en cierta manera, lo es. Aunque no tengo un discurso preparado y no se lo que voy a decir. Lo que me salga, sin filtro... Pero espero decirlo bien. --Puedes pasar --me dice una chica jovencita, con un vestido bien cenido y unos tacones altos. Sonrio y pienso que hay cosas que nunca cambian. Entro a la sala que conozco bien. Una mesa redonda blanca con varias sillas del mismo color y un ventanal que no deja pasar mucha luz, quiza sea por la malla metalica que la cubre. Esta sentada a la mesa una chica joven, diez anos menor que yo, calculo a ojo. Es delgada, morena, con ojos oscuros y muy bonita. Vuelvo a sonreir, el casting de belleza aqui es importante. --Me llamo Monica y esta es la primera entrevista que realizo de este tipo --me dice con una sonrisa timida. --Yo soy Eva, pero eso ya lo sabes, y tambien es mi primera vez --contesto mientras me siento. Se mueve inquieta en la silla y se retira un mechon de pelo tras la oreja. Observa los papeles que tiene delante y coge aire. --Creo que la pregunta mas obvia es por que quieres dejar la empresa --me dice algo nerviosa, se ha debido de saltar el protocolo. Es el momento de hablar o callar para siempre. Por un momento, me acuerdo del Calvo Cabron y una carcajada se me escapa. --Esta empresa es un desastre --le digo en un tono relajado--. Es caotica. Un dia dicen una cosa y manana dicen otra. Lo que hoy esta bien, manana no... Han conseguido que este hasta las mismas tetas de trabajar aqui. --Noto como sus ojos se agrandan, no se esperaba que fuera a decirle algo asi, pero me divierte su reaccion--. Quiero irme porque llevo cinco anos comiendo mierda, con unos jefes que no han sabido valorarme y que, en muchas ocasiones, me han tratado fatal. --No veo en tu expediente ninguna queja por tu parte --me interrumpe. --?Cuanto tiempo llevas trabajando aqui? --Dos meses y medio. --Monica, todas las personas que se han quejado a Recursos Humanos estos ultimos anos han sido despedidas, por eso no tienes ninguna queja en mi expediente. En esta compania, como en muchas otras, los Recursos Humanos tienen de <> solo el nombre. --Ella carraspea y se aleja de la mesa, creo que estoy dandole una mala impresion, pero se que, si se queda el tiempo suficiente aqui, se acordara de mis palabras--. Lo que si veras en mi expediente son varias faltas. --Ella asiente--. ?Sabes de que son? --Incumplimiento de horario --dice ella casi en un susurro. Si, la tengo acojonada. Pobre. --Por llegar quince minutos tarde. Lo que no se si tendras ahi son mis correos al respecto. Los dias anteriores a cada una de esas faltas habia salido de aqui, como pronto, a las nueve de la noche. --Ella me mira incredula y yo saco los papeles de mi bolso--. Estos son los fichajes. Observa mis papeles y, despues, los suyos. Me vuelve a mirar y se que empieza a creer lo que le estoy contando. --Esto no esta bien --musita. --Esta no es una empresa para quedarse, Monica, es un sitio del que huir lo antes posible. Yo me he quedado demasiado tiempo aqui, pero me voy porque merezco mas cosas... Merezco que me traten bien, que me valoren, que me paguen un buen salario... Y se que, si hubiera sido un hombre, no habria tenido ninguno de estos problemas. --Parece que lo tienes muy claro. --Asi es. --Sonrio para que vea que no soy una loca, solo una mujer harta--. No se si te estoy poniendo en un compromiso por decirte todo esto. ?Tienes que transcribirlo? --Ella asiente de nuevo--. Bueno, si esto te causa problemas, tal vez te haga ver el tipo de empresa en la que trabajas. No le ha hecho mucha gracia mi comentario. Quiere terminar cuanto antes y saca el papel de baja voluntaria para que lo firme. Lo firmo y me dan ganas de escribir debajo <>, pero no lo hago. Creo que es suficiente con haberselo dicho a la cara a mi ultimo jefe. Me levanto, me despido y me voy, abandonando el edificio del mal… Por fin. Pero, mientras me dirijo al coche, me empapa un mar de recuerdos. La risa de Oli, los refranes de Carmen, las tonterias de Julio, Martina y sus venganzas, los vaivenes con Hugo... No todo ha sido malo, tambien se quedan aqui muchos momentos buenos, aunque es hora de dejarlo atras y cerrar una etapa. Al fin y al cabo, todos ellos ya se han ido, me toca a mi dar el paso. Me meto en el coche con un nudo en la garganta. Parece que fue ayer cuando Hugo y yo nos escondiamos en los banos. !Cuantas vueltas dimos y que estupidos...! Por no hablar, por no ser lo suficientemente valientes como para decir lo que pensabamos. Suspiro y pienso que de todo se aprende, aunque sea a hostias. Llamo a Martina antes de arrancar, se que esta esperando que lo haga y no me perdonara si no es la primera en saberlo. --Soy libre --digo tras un largo suspiro. --!Siii! --grita ella, consiguiendo que despegue el movil del oido--. !Ya era hora! !Que les jodan! --Emite ruidos indescifrables mientras yo sonrio--. !Tenemos que celebrarlo! ?Como te sientes? --Bien... Rara... --Hago una pausa porque no se como explicarlo--. Me he acordado de muchas cosas, ?sabes? --Ya... Son muchos recuerdos. Las dos nos quedamos en silencio, pero se que esta al otro lado del telefono sonriendo como lo estoy haciendo yo. --Estas pensando en [email protected] [email protected] La Rubia responde con una carcajada. --Efectivamente. 2. Empecemos por el Principio Junio 2012 Un mes. Habia pasado un maldito mes desde el ultimo mensaje de Hugo: <>. ?Cuanto tiempo mas podia necesitar? Treinta dias. Setecientas veinte horas. Cuarenta y tres mil doscientos minutos. Toda una punetera eternidad… El habia dejado de comer con nosotras, ya no se apuntaba a las cervezas poligoneras y evitaba todo contacto, pero, por alguna extrana razon, yo seguia pensando que todo podia solucionarse. Estaba convencida de que el dia de la <> estaba cada vez mas cerca. Yo podria explicarle todas mis dudas, el malentendido del polvo inexistente con Martina, mis miedos... Y el lo entenderia, volveriamos a estar juntos y le pondriamos un nombre a lo nuestro. !Ingenua! Suspire mientras visualizaba los arrumacos de la reconciliacion y Martina me dio una patada por debajo de la mesa. Nos habian convocado a todos los compradores en la sala de juntas y llevabamos diez largos minutos de espera sentados alrededor de aquella mesa gigantesca. El silencio era incomodo, las sonrisas forzadas y el jefe de Recursos Humanos, el Imberbe, nos observaba a todos desde su posicion presidencial. Era logico que se me fuera la pinza en tales circunstancias. Era la segunda vez que estaba alli, pero seguia impresionandome el espacio. Me hacia sentir incomoda, pequena. El gran ventanal, la mesa de cristal rectangular, las sillas blancas mullidas de ejecutivo, los cuadros con frases motivadoras... Roberto abrio la puerta de sopeton. Tras la salida de Daniel, el jefe de Diseno se habia hecho cargo del departamento de Compras de forma temporal. Aunque lo de hacerse cargo era realmente una forma de hablar, no le veiamos el pelo y este jefe si que tenia cabellera, no como el Calvo Cabron. Aun no le habia puesto mote y eso me incordiaba. Habia intentado llamarle el monologuista porque hablaba el solo sin parar, pero no podia decirlo muchas veces seguidas sin que se me trabara la lengua. El monologuista, el monologuista, el monologuista... Es dificil. Me sentia optimista, pensaba que la peor etapa en la empresa habia pasado, era imposible que hubiera algo peor que trabajar con el Calvo Cabron. Sin embargo, todavia me quedaba mucho por ver de la locura de Shoes and Bags. No puedo decir que no tuviera datos suficientes para hacerme una idea general de donde estaba. Habia comprobado que el trabajo y el salario no tenian una correspondencia real, no habia mujeres en puestos de direccion y el plan de crecimiento que nos habian presentado era puro humo. Deberian haber sido senales suficientes como para llegar a la conclusion de que no era una empresa ejemplar, pero yo estaba a otras cosas: sacar la faena, mantener el trabajo, la guerra con el Calvo, descubrir que le ocurria a Martina, Hugo... --Ya estamos todos --dijo el Imberbe con su voz de adolescente. A veces, venia al trabajo con una mochila al hombro y juro que parecia que se acababa de bajar del autobus escolar. Me parecia algo espectacular que aquel senor con una pinta tan juvenil fuera el jefe de Recursos Humanos de una compania como aquella--. Como sabeis, la empresa esta modificando su estructura. --Nos miro a todos como un orador acostumbrado a hablar en publico, dedicando unos segundos a cada uno de nosotros para hacernos sentir importantes--. El departamento de Diseno ha sido el pionero en realizar los cambios necesarios para acometer nuestro plan de crecimiento y, como Roberto ya tiene experiencia en dicha gestion, Compras sera el siguiente departamento en amoldarse a las nuevas necesidades de la empresa. <> No podia evitarlo. Cuando empezaban con aquellas charlas, mi cabeza volaba a otros temas. Daban muchas vueltas. Observe a la Oscura, sentada frente a nosotras. Sonreia con su cara de belleza infantil al jefe de Recursos Humanos, le faltaba ponerse a darle palmas. Llevabamos semanas haciendo apuestas acerca de si seguia viendose con el Calvo Cabron o habia pasado de el en cuanto dejo de ser su jefe. <>. --Sera algo progresivo, pero no queremos que se alargue demasiado en el tiempo. --Echo un breve vistazo a Roberto, apoyado junto a la puerta, que asintio en silencio--. Os dividiremos en cuatro equipos, acordes con las cuatro lineas de coleccion de la empresa. Intente concentrarme en lo que decia el Imberbe, pero, en cambio, me quede mirando la camiseta que llevaba. Era graciosa, tenia un dibujo de E.T con su dedo hacia arriba y era lo que le faltaba para parecer aun mas crio. <> --Diseno, Compras y Comercial comenzaran a trabajar juntos en pocas semanas bajo la misma area. De esta forma, Roberto dejara de ser vuestro jefe directo y lo seran los nuevos responsables de las lineas. Al oir hablar del departamento Comercial, fue inevitable volver a pensar en Hugo. Le echaba muchisimo de menos. Putos miedos. Me habian jugado una mala pasada. Queria dejar de ser la cobardica, aunque aun me quedaba batalla y lo sabia... Todos miraron a Roberto y yo les imite sin saber por que lo hacian. Llevaba unas pintas muy raras. La camiseta gris tenia bolitas del uso, los pantalones le iban pequenos y el pelo siempre lo tenia alborotado. <>. --Dentro de un par de semanas abandonare la empresa --dijo nuestro jefe--. Me embarco en un nuevo proyecto, pero quiero dejarlo todo lo mejor organizado posible. <>. Olivia nos habia adelantado esta parte. Segun sus fuentes, que parecia que no las iba a revelar jamas, a Roberto le habian invitado a irse. No debian de estar contentos con su trabajo, aunque era bastante absurdo despedirlo despues de darle mas responsabilidad. --... junto con Eva llevaran la linea vestida y casual. <>. Mire a Martina con disimulo y levante las cejas preguntandole <>. Ella cerro los ojos unas milesimas de segundo, enviandome el mensaje mental de <>. <>. --... y Clara llevara la linea infantil. ?Teneis alguna pregunta? <>. Todos dijimos que no, pero me apuesto un dedo de la mano a que no fui la unica que no presto la suficiente atencion. Cuando salimos de la sala de juntas, mire suplicante a Martina para que me contara que habia pasado alli dentro. --Nos dividen en grupos, pero tu y yo estamos juntas --dijo ella soltando una carcajada. --?Y que mas? --pregunte mientras caminabamos de vuelta al departamento. --Nos van a mover. --Traspasamos la puerta de la seccion en ese mismo instante--. No han dicho donde nos llevan, pero estaremos con el equipo comercial y con Diseno. Todos juntos. <> --?Y con quien nos toca? --En Diseno con el equipo de Lucas y Alexandra. Y en Comercial, creo que con Charly. --La mire preguntando por el sin decir su nombre mientras mi corazon saltaba en el pecho, alentado por la esperanza--. Vamos a trabajar con Hugo -- respondio ella en voz baja como si leyera mi mente. Todos mis huesitos se rieron a la vez y note como se formaba una gran sonrisa en mi cara. <>. <>. <>. 3. No Estaba Muerto, Estaba de Parranda Martina queria sacarle el jugo a lo de estar soltera, Julio disfrutaba como si estuviera de vacaciones y a Oli le faltaba tiempo para apuntarse a todos los planes que inventaban estos dos. Yo les odiaba en secreto por toda la pasta que se evaporaba de mi cuenta, aunque la verdad es que me venia bien para entretenerme y no martirizarme con el tema de Hugo. Ese sabado nos ibamos de cena y quedamos en el centro para tomar una cerveza. Las primeras en llegar fuimos Oli, Martina y yo, despues aparecieron Marco y Julio y, finalmente, llego Carmen. Olivia habia adoptado a Carmen desde el mismo momento en el que se incorporo a la empresa. Empezo a comer con nosotras, despues se unio a las cervezas y aquel dia fue el primero que salio con nuestro grupo. Llego la ultima, pero con energia. Llevaba puesto un top azul de corte desigual, con un solo hombro al aire, una falda vaquera y unas sandalias rojas de tacon. Carmen siempre llevaba tacon y sus andares eran los mismos. Tenia una forma de caminar curiosa porque lo hacia rapido, como si llegara tarde a todas partes. Bajita, voluptuosa, con grandes pechos, que entonces trataba de tapar, y unas piernas impresionantes. Solia cambiar con frecuencia el color de su pelo, que entonces llevaba a lo garcon con el flequillo a un lado, y, cuando la conocimos, era castano con reflejos rojizos. Sus ojos verdes, de tonalidad oscura, desaparecian en una linea horizontal cuando sonreia y Carmen sonreia mucho, siempre de verdad porque no sabia mentir. --Ya estoy aqui --nos dijo a modo de saludo, plantandose delante de nuestra mesa. Lo que no sabiamos entonces era que Carmen habia llegado para quedarse, que iba a ser una mas en nuestro grupo y que anos despues nos costaria identificar las anecdotas en las que ella aun no estaba. La mente tiene esas cosas, cuando una persona es importante en tu vida parece que te haya acompanado en cada uno de tus momentos importantes. Justo antes de aparecer, el Cesar estaba contandonos que tal le habia ido en su ultima entrevista de trabajo. Julio, tras ser despedido por hacer una mamada a su novio en plena empresa, llevaba un par de meses en el paro. Despues de los besos de rigor, el continuo su historia como si no hubiera habido ninguna interrupcion. --No me gusto nada la propuesta. El salario seria entero a comision, sin un sueldo base. Quieren que me haga autonomo y eso no lo veo. Seria, basicamente, trabajar por mi cuenta. --Si trabajas por tu cuenta, nunca te saldran las cuentas --respondio Carmen con un guino. --Eso he pensado yo, pero sin la rima. --Julio sonrio burlon--. Por cierto, me gusta tu pelo. Pero no te lo digo para ligar contigo, soy gay y este es mi novio. --Uuuh... !Miralo!--canto Olivia--. Ya se presenta como gay y deja claro que tiene novio. Asi, en una frase. <> --Le encanta decir que tiene novio --Puse los ojos en blanco--. No te ofendas, Marco, pero esta muy cansino con eso de que tiene pareja. El Decolorado hizo un gesto, quitandole importancia. <>. --Lo dice todo el tiempo y le odiamos por ello. --Martina hizo una mueca y se recogio su pelo rubio tras la oreja --. Ahora todas sus amigas estan solteras y el esta con un hombre al que no podemos criticar porque es muy mono. --La Rubia lanzo un beso al aire a Marco y este se lo devolvio. Tenia razon, como casi siempre. Odiabamos a Julio por tener pareja. Era un amor-odio, no un odio de verdad, pero es que el Cesar era un plasta. Remarcaba esa palabra recreandose en ella en cualquier frase. <>, <>, <>, <>... Daban ganas de ahogarlo. No nos entretuvimos demasiado alli, teniamos una reserva en un restaurante italiano que le habian recomendado a Olivia y no queriamos perder la mesa. El sitio era coqueto, las paredes blancas estaban repletas de carteles de peliculas italianas de los anos sesenta, las mesas eran redondas con manteles a cuadros y el toque romantico lo ponian las velas y todas las parejitas que teniamos a nuestro alrededor prometiendose amor eterno. Ideal para ir creando ambiente en una salida de fiesta. Al menos, las pizzas estaban ricas y el vino fresquito... Pero, con el alcohol, la lengua empezo a soltarse… --Entonces, ?las tres estais solteras? --pregunto Carmen.

  • Contra todo pronostico de Y. Arcenegui

    https://gigalibros.com/contra-todo-pronostico.html

  • El deshielo de Lize Spit

    https://gigalibros.com/el-deshielo.html

    En 1988 nacieron tres ninos en la pequena ciudad de Bovenmeer: Laurens, Pim y Eva. Durante la infancia, y debido a la dificil situacion familiar que vivia, la nina se volco en su amistad con sus companeros. Al llegar a la adolescencia, y azuzados por una incipiente curiosidad sexual, los chicos iniciaron un escabroso juego que tendria graves consecuencias para ellos. Transcurridos trece anos de ese ultimo verano juntos en que todo se desboco, Eva regresa a Bovenmeer dispuesta a ajustar cuentas con el pasado.

  • El ultimo gran unicornio de Clara Tahoces

    https://gigalibros.com/el-ultimo-gran-unicornio.html

    Un cuento que narra el despertar de un unicornio en un mundo totalmente desconocido. Toma la decision de buscar a su madre recorriendo un camino real y, al mismo tiempo, de superacion y autoconimiento. En su viaje encuentra personajes que le regalan pildoras informativas que le ayudaran a seguir adelante, cambiar estereotipos, afrontar acontecimientos, cometer errores y aprender de ellos, transformar sus sentimientos negativos en perdon... en definitiva, a madurar. Al final aprendera, que el camino, la vida, es tan importante como la meta.

  • Sinfonia para mis heridas de Patricia Alejandra Coria

    https://gigalibros.com/sinfonia-para-mis-heridas.html

    Buenos Aires, diciembre de 1983 Sin siquiera imaginar que ese dia su vida comenzaria a dar un giro inesperado, Mariana disfrutaba su primera jornada de soledad en el amplio piso que compartia con sus padres, quienes habian partido rumbo a Europa a celebrar un nuevo aniversario de casados. Habia hecho planes para disfrutar ella tambien de esas semanas que quedaban por delante: horas frente a su piano, sin las inoportunas interrupciones de su madre; algunas salidas con su grupo de amigos y companeros del Conservatorio de Musica, y esa tan postergada tarde de peliculas y pochoclos con Paula, su amiga del alma, para la que, bien sabia, tendria que negociar con Leandro. No seria tarea facil; su novio era demandante y celoso del poco tiempo que su trabajo le dejaba libre para compartir con Mariana. Recostada en el sillon, bebiendo un licuado de frutillas, anana y un toque de jengibre que Rosalia -quien trabajaba en la casa desde que ella era muy pequena- le habia preparado antes de retirarse, observaba desde el inmenso ventanal del living el embotellamiento de transito que, al caer la tarde, obstruia la avenida las Heras. Buenos Aires hervia en ese dia humedo de finales de primavera. Sin advertirlo, fue cayendo en un sopor que la sumio en un sueno profundo y tranquilo. El sonido del telefono la desperto de repente, confundida al ver el departamento a oscuras; habia perdido la nocion del tiempo. Se levanto trastabillando, imaginando que seria Paula para ultimar los detalles de la cena programada para el dia siguiente. -Hola… -dijo aun medio dormida, sin disimular el bostezo. No era necesario guardar tantas normas de cortesia con su amiga y confidente. -Buenas noches. ?Hablo con Mariana Urrutia? -La voz masculina se oia nerviosa y lejana. -Si, soy yo, ?quien habla? -pregunto restregando sus ojos para salir de la modorra de esa tardia siesta. -Mi nombre es Javier. Necesito hablar con vos, se que te sonara extrano porque no nos conocemos; aunque hace algun tiempo que yo supe de vos y decidi buscarte. No quiero asustarte, pero necesito verte, contarte cosas que nos involucran a los dos. -Creo que te equivocaste de numero. -Estaba a punto de cortar cuando oyo del otro lado del telefono el grito que intuyo desesperado. -!Por Dios, no cortes, Mariana! Debemos hablar urgente, antes de que sea tarde. Ya voy a explicarte todo y vas a poder comprobar que no te estoy mintiendo. -!Deja de hablar pavadas! No se quien sos ni me interesa. No vuelvas a molestarme. Luego de cortar la comunicacion, un repentino desasosiego la dejo como ausente, con el tubo aun en su oreja y enrollando, nerviosa, el cable en uno de sus dedos. Finalmente, desconecto el telefono, temblando de miedo. Encendio las luces, comprobo que la puerta estuviera cerrada con llave y trabo todas las ventanas. Intento serenarse preparando el jacuzzi para darse un bano con sales relajantes; ese llamado inoportuno le habia cambiado el humor. Una sensacion de extrano temor le oprimia el pecho, aguijoneando su mente con recuerdos y dudas que nunca habia querido enfrentar. Cerro sus ojos, se hizo un bollito en su cama, como cuando de pequena una tormenta la asustaba. No queria pensar, ansiaba dormir, dormir profundamente. El ruido en la cerradura de la puerta de entrada interrumpio el sueno profundo en el que finalmente habia caido, luego de una noche inquieta, en la cual ni la lectura ni las palabras cruzadas que tanto la hacian aislar del mundo habian logrado aquietar sus pensamientos. Se asomo al pasillo y comprobo que era Rosalia, quien traia un paquete de su confiteria preferida; seguramente le habria comprado medialunas para el desayuno. <>, penso imaginando la mirada de su madre, quien, tan obsesiva como era con su figura, vivia controlando la dieta de su hija. Corrio a arreglarse, recordando que no habia preparado su ropa como hacia habitualmente para no salir a las apuradas por las mananas. Odiaba esos descuidos que le alteraban sus rutinas tan estructuradas. El espejo del bano le reflejo a una Mariana ojerosa y palida. Sus ojos color miel, de mirada vivaz y chispeante, habian perdido brillo; su largo cabello, que lucia siempre impecable, era un revoltijo de hebras castanas. Era evidente que la noche anterior habia hecho estragos en su animo y aspecto. Al verse asi, se reprocho haber sucumbido a tanta ansiedad por un llamado que nada le habia revelado, que seguramente no tenia nada para revelar. No iba a ser presa facil de alguna broma de mal gusto o una de esas trampas mediante las cuales intentaban sacar informacion para luego planificar un robo. Al entrar a la cocina, encontro a Rosalia aguardandola con un humeante tazon de cafe con leche, jugo de naranjas recien exprimidas y las medialunas aun tibias. Marianita, como ella le decia, era un poco su nina. A la noble mujer, la vida le habia negado la posibilidad de convertirse en madre, y se habia prendado de Mariana desde el dia en que su patrona volvio de la clinica con su tesoro en brazos. -!Buen dia, Rosa! !No podes con tu genio!, ya comenzaste a malcriarme nuevamente -la saludo con una amplia sonrisa y un sonoro beso. -!Buen dia, mi chiquita! Estas preciosa, pero tenes una carita que no se en que festichola habras andado anoche. Cuidate, Marianita; ya se que sos grande y no te gustan los sermones, pero estas aca solita y no quiero que te pase nada malo -le aconsejo acariciando el cabello suave y brillante que tantas veces le habia cepillado de pequena. -Quedate tranquila, sabes que yo me cuido. Estuve preparando una clase hasta muy tarde y practicando con el piano; me acoste a la madrugada -mintio apurando su taza y devorando una medialuna mientras se colgaba la cartera al hombro. Ya estaba algo retrasada. El sol de principio de diciembre anticipaba un verano de fuego. Mariana habia anhelado durante todo el ano esos dias largos de calor, luminosos, intensos, alegres y coloridos, en los que el aire olia a jazmines y frutas frescas. Con su animo mas recuperado, camino luciendo ese hermoso vestido blanco de bambula y puntillas que su madre le habia comprado, con sus zapatos turquesa, cartera al tono y un perfume a flores silvestres que le daba aun mas frescura a su juventud. Una vez mas, al cruzar la Plaza Houssay, miro la fachada de la Facultad de Ciencias Economicas con ese orgullo y emocion que sentia por su padre, que habia egresado de alli hacia ya unas cuantas decadas. Penso en cuanto lo extranaba, a pesar de que hacia casi nada que se habian ido. Acelero el paso hasta llegar al Conservatorio. Seria un dia largo, pero la entusiasmaba la cena que aun restaba terminar de organizar con Paula y, si Leandro tuviera un ratito libre, quizas podrian almorzar juntos. No parecian quedar rastros de la ansiedad que tanto la habia inquietado. …Un dia, un dulce dia, con manso sufrimiento te romperas cargada como una rama al viento y sera el regocijo de besarte las manos, y de hallar en el hijo tu misma frente simple, tu boca, tu mirada y un poco de mis ojos, un poco… !casi nada!… Jose Pedroni Capitulo 2 Mendoza y Buenos Aires, anos 1935 a 1950 Desde el patio repleto de plantas y una parra que en breve deberia ser podada, se podia sentir el delicioso aroma proveniente de la cocina. Mercedes se ufanaba en la preparacion de los dulces, que luego almacenaria en grandes tinajas de vidrio, para ir consumiendo a lo largo del ano. Mientras la carne de los membrillos hervia, formando abundante espuma en una gran cacerola de bronce, filtraba el jugo de los corazones de los frutos con un lienzo blanco destinado exclusivamente para la preparacion de la jalea. Debia estar sumamente atenta hasta llegar al punto de coccion de la mermelada, para separar la porcion que deberia seguir un rato mas al fuego para lograr convertirse en un dulce compacto, luego de ser enfriado en un molde. Entretanto, sobre la larga mesa de madera, descansaba una olla humeante con la mermelada de uvas recien cocinada. -Por hoy es suficiente -exclamo Mercedes secandose la frente perlada de sudor luego de pasar tantas horas entre las hornallas. Su inmensa panza le dificultaba cada vez mas hacer las tareas habituales, pero no estaba dispuesta a renunciar al goce de la preparacion de sus famosos dulces. -Ya te he dicho una y mil veces que no debias enredarte con la cocina. !Tenes que descansar, mujer! -protesto Carmen, su hermana, que habia venido desde San Juan a cuidarla en los ultimos meses de embarazo. -No me retes mas, sabes cuanto me aburro tirada todo el dia como si estuviera enferma. Bastante que me aguante no haber podido ir a la procesion de la Virgen de la Carrodilla en esta ultima Vendimia -se quejo con su ceno fruncido y removiendo con furia la larga cuchara de madera. -Mejor ni hablar del tema, que me volviste bien loca desde que llegue. Entende que, estando gruesa, tenes que cuidarte. El medico ya te dijo que debes descansar mas horas, y supongo que no querras volver a pasar otra vez por el mismo sufrimiento. -Carmen intentaba hacerla entrar en razones y que se fuera, de una vez por todas, a la cama. -Ya, ya. Tenes razon, voy a recostarme hasta la hora de la cena. -Se resigno quitandose el delantal con pechera manchado de jalea y frutas, que destacaba aun mas el avance de su estado. Varias semanas pasaron hasta esa tarde fresca de principios de junio en que Mercedes comenzo a sentir fuertes puntadas en su vientre. Ya no sentia el mismo animo y valentia de los dias anteriores. Los fantasmas de su embarazo anterior regresaban con fuerza a llenarla de temor. Aquella vez, todo habia sido diferente, apenas habian transcurrido cuatro meses cuando una hemorragia la desperto de su siesta, sumiendola en la mas profunda tristeza al ver su ilusion hecha pedazos. Ahora estaba ya en su noveno mes y, a pesar de que no habia cumplido al pie de la letra las indicaciones de un mayor reposo, tal como le habia indicado su medico, todo se desarrollaba normalmente. Las contracciones eran cada vez mas seguidas y prolongadas. -Creo que esta llegando la hora, Carmen. Por favor, anda a buscar a dona Genoveva -le pidio agitada. Su rostro habia empalidecido de repente. -Acostate y trata de estar tranquila. Corro a buscarla, pero antes le aviso a Aurora para que no te quedes sola. -Su hermana largo la costura que tenia entre manos y, acomodandose el cabello con sus dedos, fue hasta la casa vecina, donde vivia la amiga de Mercedes.

  • La guerra civil contada a los jovenes de Arturo Perez Reverte

    https://gigalibros.com/la-guerra-civil-contada-a-los-jovenes.html

    La Guerra Civil espanola contada de forma escueta, objetiva y rigurosa, sin cliches partidarios ni etiquetas faciles, en textos de Arturo Perez-Reverte e ilustrada de forma esplendida por Fernando Vicente.

  • Amigos y nada mas (Serie Amigos 5) de Ana Alvarez

    https://gigalibros.com/amigos-y-nada-mas-serie-amigos-5.html

    ?Quien es la misteriosa mujer que ha conseguido que Javier olvide a su amor de siempre?

  • Un amor de Alejandro Palomas

    https://gigalibros.com/un-amor.html

    En el reducido universo familiar de Amalia y sus tres hijos, Silvia, Emma y Fer, el engranaje se mueve al ritmo desacompasado de las emociones. Es una familia tipica, y sobre todo, muy real. Un cosmos cocido al fuego lento de varias entregas que han atado a miles de lectores. Pero llega un dia cumbre en sus vidas. Emma se va a casar y todos se sumergen en las tareas y los remolinos de organizar la mejor boda. La noche previa a la ceremonia, una llamada rompe la armonia familiar. Silvia, Emma, Fer y otros parientes se conjuran para poder celebrar a la vez el aniversario de Amalia, que coincide inevitablemente con la fecha de la boda. 24 horas de aceleron emocional que pondran a prueba a todos y cada uno y al mismo engranaje familiar.
    Un nuevo ejercicio de virtuosismo emocional. Una literatura que llega por el plexo y se inocua directamente a los sentimientos. Alejandro Palomas extiende su ya variada paleta de colores para dotar a sus personajes de los matices, sesgos y rasgos que los acercan a los lectores y estos los reconocemos como a propios en sus particulares universos familiares.

  • Aventuras, venturas y desventuras de un cazador a rabo de Miguel Delibes

    https://gigalibros.com/aventuras-venturas-y-desventuras-de-un-cazador-a-rabo.html

    Amante de la naturaleza y del deporte cinegetico, Miguel Delibes escibio, ademas de las novelas que le dieron justa fama internacional, numerosos libros sobre caza, como Diario de un cazador o Con la escopeta al hombro, y llego a decir de si mismo que el no era un escritor que cazaba, sino un cazador que escribia. En este volumen, escrito a modo de agenda, Delibes retrato una serie de experiencias personales de caza realizadas a lo largo de tres anos, entre 1971 y 1974, por las tierras de Castilla la Vieja.

  • Sombras rusas de Liliana Villanueva

    https://gigalibros.com/sombras-rusas.html

    Los pasos retumban sobre la madera, alguien sube, de dos en dos, los escalones de la empinada escalera. El unico que sube asi, corriendo, apurado, como si la velocidad con la que viaja cada dia en bicicleta de vuelta del trabajo lo empujara acelerando su llegada a casa, es Jan. La llave gira en la cerradura, la puerta de entrada se abre y se cierra de un portazo. Dos, tres, cuatro pasos rapidos. Y antes de verlo aparecer en el marco de la puerta, alcanzo a divisar un movimiento, como en esas fotografias antiguas de tiempo de exposicion largo, cuando alguien se mueve y el negativo registra una sombra transparente que dura solo un instante, un fantasma que se queda suspendido en el aire. Lo veo, aun fuera de foco, pero no lo veo entero, solo veo su cara iluminada por la luz amarilla de la cocina contra el fondo oscuro del pasillo; veo su cara aislada y con expresion de asombro, como si su cara hubiera llegado antes que su cuerpo, sola. Como un patinador sobre una pista de hielo o como los chicos que no saben frenar su cuerpo a tiempo, Jan apoya una mano en el marco de la puerta para no caerse. Ahora veo la otra mano, de la que cuelga la cartera de cuero negra como un pendulo. Es raro que la lleve encima, contra su habito tan establecido de dejarla olvidada hasta la manana siguiente sobre la mesita de marmol bajo el espejo de la entrada, como si ahi adentro se conservara el tiempo, todas esas horas que el pasa en la agencia de noticias que le roba la vida y gran parte de sus ganas. Cada dia le pregunto que paso en el mundo y el, cansado, abrumado por tantas noticias que pasan por su pantalla como las interminables aguas de un rio, me contesta: --No se. Todo. Nada. Tampoco colgo su campera en los ganchos del pasillo, sigue vestido de calle, abrigado contra los frios de octubre: las medias de lana sobre el jean para que el pantalon no moleste al pedalear, la campera con el cierre y los botones de gancho totalmente cerrados, la bufanda verde de lana suave hecha un nudo alrededor del cuello. Veo cada una de sus partes: su cara, sus manos, los jeans, la campera, las veo de forma aislada, como si llegaran de a poco en un tiempo diferente, mas lento que el habitual. La imagen de Jan tarda en revelarse en la oscuridad liquida del pasillo. Y es recien cuando entra a la cocina cuando lo veo entero, de una pieza. Me mira sin decirme nada, me mira sin verme. Se que tiene algo que contarme, una noticia importante. Lo conozco, conozco esa forma del asombro que se le mete en el cuerpo y que le saca el habla. No quiero apurarlo, le doy tiempo, a el le gustan las ceremonias. Jan recuerda los sucesos trascendentes de su vida desde chiquito, como cuando a los cuatro anos llego corriendo hasta la cocina, donde su madre preparaba el almuerzo frente a la ventana empanada. Llego corriendo y seguramente se habra sostenido contra la mesada de la cocina para frenar el impulso de su cuerpo, mientras afuera, en el jardin, nevaba y el viento del Norte hacia temblar los vidrios de la ventana. La cocina era un lugar protegido, caliente, familiar. Un nido. Jan se subio al ultimo cajon de la cajonera, le dio un tiron a la pollera de su madre y le dijo: --Mama, queria decirte que estoy muy contento con mi vida hasta ahora. Lo dijo muy seriamente, con conviccion, despues de haberlo pensado mucho. El recuerda ese momento cuando fue consciente de su vida y de su lugar en el mundo. Esa primera frase es la mas importante, la que lo define, de alguna manera. Veo la imagen de ese chico de cachetes llenos, colorados, como si la hubiera vivido, aunque yo en esa epoca ni siquiera habia nacido. El recuerda ese momento y muchos otros mas. Me encanta que me cuente y me repita esas historias que ya son mias. Jan relaciona lo que ocurrio en el mundo con los sucesos de su vida. Como cuando recien nos conocimos y fue a visitarme a la Argentina. Viviamos separados: Jan en Hamburgo, yo en Buenos Aires. Ahorro durante medio ano, paso hambre hasta que pudo comprar el pasaje de avion mas barato. Se escapo por un mes, falto a las clases de abogacia, no le conto nada a nadie. Una manana de abril de 1986 sono el telefono y atendi. Era Hilge, una de sus hermanas. Con voz muy preocupada me pregunto por el, si sabia donde estaba. Me explico que lo estaban buscando por todos lados: una nube toxica se acercaba desde Ucrania y Bielorrusia hasta el Norte de Alemania, donde vive la familia. Le pase enseguida el tubo a Jan, imaginando la sorpresa y el alivio de su hermana, que no penso que el estuviera ahi, tan lejos. Asi nos enteramos de que habia explotado una central atomica en un lugar llamado Chernobil. Tres anos mas tarde, yo estaba trabajando en un estudio de arquitectura en Berlin cuando Jan me llamo por telefono. Era tarde y lo primero que me dijo, con un tono vertiginoso de voz: "Cayo el muro". Y despues me pidio: --?Podrias ir por mi a la Puerta de Brandemburgo? Observa bien todo lo que pasa y despues contame. !Como me gustaria estar ahora en Berlin! El 25 de diciembre de 1991, Jan estaba de guardia en la agencia cuando llego un cable urgente de ITARTASS. Despues de que el 8 del mismo mes Gorbachov habia firmado el Tratado de Belavesha, que reemplazaba a la URSS por una Union de Comunidades Independientes, en la noche de navidad la Union Sovietica dejo de existir formalmente: soldados del Ejercito Rojo habian bajado la bandera sovietica de las torres del Kremlin y la reemplazaron por otra de la Federacion Rusa, un simple cambio de banderas que Jan tradujo al lenguaje periodistico como *****NOTICIA URGENTE*****, en mayusculas y con todas las estrellitas posibles, un texto corto que anunciaba el fin de una era. La mesa de la cocina de nuestro departamento de Hamburgo esta llena con mis libros y apuntes. Como cada dia desde que me mude de Berlin estoy leyendo y tomando notas, tratando de encontrar un orden en mi tesis. Dejo la birome sobre el cuaderno y apoyo la espalda contra la pared dura y repentinamente fria. Espanto una sombra que pasa por mi cabeza y espero lo que tenga para decirme. Jan respira hondo, me mira a los ojos y, con una mezcla de fascinacion y algo parecido al miedo, me dice: --Me ofrecieron el puesto en Moscu. Lo primero que siento es alivio: no tuvo un accidente con la bicicleta, sus padres, sus tres hermanas y sus siete sobrinos estan sanos y siguen vivos, no exploto ninguna central nuclear, su mama puede seguir cocinando ricas salsas de champinones que crecen salvaje en el jardin. Jan tampoco se enamoro de la secretaria, que podria ser su madre, por suerte en Alemania no hay golpes de Estado, ni estallan nuevas guerras, ni Berlin fue ocupada por los rusos. Aqui todo es mas o menos calculable, como las estaciones, como el otono en la ventana. Jan y yo nos miramos directamente a los ojos, en silencio. MOSCU. Asi como hace unos instantes sus pasos retumbaban en la escalera, la palabra MOSCU retumba ahora en mi cabeza. Escucho el eco que llega, desde algun cuarto oscuro de mi conciencia, hasta el lugar en mi cerebro que recibe la informacion, la traduce y la procesa. MOSCU, el eco es un golpe de martillo, fuerte y repetido, la palabra, nueva, queda en el vacio como si nunca antes la hubiera escuchado. Suena diferente. Suena fuerte. Jan se sienta, mas bien se deja caer en la silla. Me mira desde el otro lado de la mesa y en su mirada tambien hay un vacio. Es un vacio que depende de mi llenar. Hace ya nueve anos que vivo en Alemania. Desde el principio sabiamos que por su trabajo en algun momento hariamos las valijas y seguiriamos viaje. Pero ?Moscu? En nuestros planes estaban Madrid, Londres, Paris y Tel Aviv. Buenos Aires todavia no: el puesto de corresponsal acaba de ocuparse y no estara libre hasta dentro de tres o cuatro anos. Jan espera una respuesta. Desde que llego no abri la boca. Todo ocurre en mi cabeza, donde todavia escucho el eco de MOSCU. La palabra suena indefinida, desconocida, peligrosa, fuerte. Me gusta que suene asi. Y es por eso que digo: --No digas que no. --No hay que decidirlo ahora -me dice Jan-. Tenemos dos semanas para dar una respuesta. Claro que cuanto antes tomemos la decision, mejor. Jan me propuso hacer un viaje a Moscu, para ver si nos gustaba. No nos gusto. Y sin embargo, aceptamos. MOSCU ES OTRO MUNDO Igor maneja malhumorado por una avenida llena de autos. Hace giros nerviosos, toca bocina y se queja del transito de Moscu. Pero el es parte de ese transito. Algunos conductores lo miran con fastidio, otros le contestan con mas bocinazos o con gestos poco amistosos de las manos. La mayoria lo ignora, aunque sus miradas dicen todo. Hace frio, la nieve que alguna vez fue blanca ahora es una sopa espesa y gris oscura arrollada por las ruedas de los autos. Los camiones avanzan por la derecha y por la izquierda e impiden ver hacia adelante. Los vehiculos se salpican entre si, sin piedad ni benevolencia. Bajo los paraguas, los valientes peatones que intentan cruzar la avenida de diez carriles se cuidan para no mojarse con el aguanieve escupida por el transito y no ensuciarse con el caldo helado de la calle. No parece tarea facil ser peaton en Moscu, ni conductor, ni ruso en general. Me digo a mi misma que debo evitar mi tendencia a llegar a conclusiones precipitadas o desarrollar teorias disparatadas y me detengo en los detalles. Los carteles de transito estan escritos en cirilico y eso produce un primer extranamiento. Todo es extrano sin llegar a ser exotico. Se ven pocos carteles de propaganda en esta ciudad gris, fria y humeda. Acostumbrada desde chica a la presencia permanente de publicidad, a los avisos de Coca Cola y a guiarme por los carteles de los negocios, a primera vista Moscu se me aparece muda. Cuando viajo a la URSS, Garcia Marquez escribio una cronica titulada: "22.400.000 kilometros cuadrados y ni un aviso de Coca-Cola". Pero esto ya no es la Union Sovietica, el pais esta empezando a cambiar de forma definitiva y los carteles de propaganda -termino que en ruso esta asociado a la propaganda politica- seran suplantados por las publicidades de los objetos de consumo mas insolitos. Pero en este primer viaje todavia estoy en blanco, no se nada de lo que me espera, ni siquiera se si esta visita sera la ultima, o la definitiva. Estoy encandilada en una ciudad que no se muestra, me gusta la diferencia y observo cosas que normalmente no llamarian mi atencion: como esta vestida la gente, edificios grises, detalles de autos y camiones, ruidos y olores. El auto vibra, hace ruidos mecanicos y aunque las ventanas estan completamente cerradas se escucha el traqueteo, el zumbido y el arrastre de las ruedas de los otros autos sobre el asfalto cubierto de aguanieve. Como en un campo donde nunca va a crecer nada, las ruedas van arando surcos en la masa helada. Es tan profunda la huella que dejan los autos que Igor se ve obligado a mantenerse en su carril para evitar volcar el auto entre los montones de hielo acumulado. Habituada al transito silencioso de Alemania, viajar en auto en Moscu es como meterse en una maquina industrial de gran tamano, en algo que parece funcionar automaticamente por alguna orden superior sin que uno pueda decidir o hacer nada, salvo dejarse llevar y entregarse. Jan esta fascinado: le encantan los autos viejos, raros. Mira hacia todos lados y le pregunta a Igor el nombre de los modelos de autos y camiones, cuadrados y remachados, como recauchutados con restos de laton de tanques o aviones de guerra, sin publicidad alguna, salvo algunos inquietantes numeros sopleteados sobre el metal que no explican mucho. --Ese es un GAZ -dice Igor-. Fabrica de automoviles Gorki. El camion que nos paso es un KAMAZ, la fabrica de camiones mas grande del mundo, ubicada a 900 kilometros al Este de Moscu, en los margenes del rio Kama. Ahi va un KrAZ, de Krasnoyarsk. El Lada lo conocen, ?verdad? Y ahi adelante, el negro, es un Volga. Tambien son producidos en Gorki. Los Aparatchniks -Igor levanta la cabeza haciendo una venia- viajan en Volgas negros. Pero ya se estan haciendo de autos importados de Alemania. !Oh! Miren esa limusina que adelanta por el carril del medio. Es un Ziv, copia del Lincoln norteamericano. Antes lo usaban miembros del Politburo, los nachalstvo. Aunque ahora, nunca se sabe, seguramente es un nuevo rico. Y ese inutil que no acelera ahi adelante es un Moskvitch. !Imbecil! ?Que esperas? ?La carroza de la princesita del otono? --!Increible! -dice Jan-. Son de coleccion. !Tantas marcas que no tengo!

  • Encuentrame en Moonlight de Jenn Bennett

    https://gigalibros.com/encuentrame-en-moonlight.html

    Birdie Lindberg, aficionada a los libros de misterio, tiene una imaginacion desbordante.
    Sus abuelos la criaron en soledad y la educaron en su casa, por lo que ha cultivado una inusual vida de fantasia en la que ella adopta el papel de una detective heroica y cada extrano se convierte en un sospechoso.
    Pero su mundo solitario se expande cuando consigue un trabajo de verano, en el turno de noche de un historico hotel de Seattle.

  • Deseos del corazon de Stefania Gil

    https://gigalibros.com/deseos-del-corazon.html

    La vida le otorga una segunda oportunidad a Ellie Griffin; una chica sonadora, que decidio creer en las promesas de amor del hombre equivocado. Y esta segunda oportunidad, la obliga a tener una cercania con el Dr. Sean Norton; un hombre que no le atrae en lo absoluto y que ha intentado conquistarla sin exito alguno.
    Ellie sabe reconocer que Sean es perseverante, pero ella no esta interesada. Tiene una gran herida por sanar y no le apetece enredar mas las cosas.
    Sin embargo, Sean, que jamas se dara por vencido, idea un plan maestro para mantenerse junto a Ellie y ensenarle como es el amor real y como se merece ella ser amada.
    ?Lograra Ellie abrir los ojos y darse cuenta de que Sean es ese hombre <> que siempre sono? ?Conseguira descifrar cuales son los verdaderos deseos que alberga su corazon?

  • Cafe con leche y extra de azucar de Tatjana Frigar

    https://gigalibros.com/cafe-con-leche-y-extra-de-azucar.html

    Voy a salir de la oficina y hace un dia de playa irresistible. ?Te recojo? -Claro, princess, te espero en el portal. Maria bajaba las escaleras de la oficina en direccion a su coche. Tenia un cabriolet rosa chicle al mas puro estilo Barbie en Beverly Hills. Le encantaba poder disfrutar de los dias de buen tiempo llevandolo descapotado por las calles que rodeaban la playa. Sentir el viento en su piel blanca mientras ondeaba su melena rubia (de bote, pero rubia). Tuvo dudas el dia que se tino, pero su peluquera encontro un tono que, de verdad, parecia natural. Y Maria quedo encantada con ello, tanto que ya hacia mas de cinco anos que lo llevaba, y sin ninguna intencion de cambiarlo. Arranco su coche y, mientras lo descapotaba, salio su jefe por la misma puerta que segundos antes habia pasado ella. ?Como conseguia coincidir siempre con ella? ?Tenia una camara que apuntaba su mesa? ?Olia su perfume avanzar por el pasillo? ?O es que, simplemente, la estaba vigilando durante toda la jornada? -!Maria! No sabia que ya habias salido -se apresuro a decir Carlos con un semblante que no mostraba ningun tipo de expresion. -Vaya, si, que casualidad. Ya me iba, tengo prisa. Adios, Carlos. -Adios, Maria. Disfruta del sol. No tardo en encender la musica a todo volumen y salir de alli sin que nadie mas le hiciera perder el tiempo. Piso el acelerador mientras pensaba que Alicia ya debia estar esperandola en el portal, pasando un calor de mil demonios y preparando un sermon de los suyos para reprocharle que siempre llegara tarde. Habia recibido la llamada de un cliente que habia esperado toda la manana y que no recibio hasta el ultimo momento; asi que no le quedo mas remedio que atenderlo. -Ya era hora de que llegaras. Hace 30 minutos que me has dicho que ya salias de la oficina y trabajas a diez. Siempre me haces lo mismo. Tienes que aprender a llegar a los sitios a la hora, Maria, no puedes andar siempre con el cohete en el culo, haciendo esperar a la gente. !Que mi paciencia no es ilimitable! Mientras tanto, Maria sonreia escuchando <>. Ya conocia cada una de sus palabras, no era la primera vez que le echaba ese mismo sermon. Si, eran completamente distintas. Alicia era correcta, premeditada, calculadora… Maria, en cambio, era transparente, impulsiva y se dejaba llevar. -Vaaale, vale, ya me callo -contesto al fin resignada-. Hija, es que hace un calor insoportable y ya no sabia donde meterme. No hay ni un trozo de sombra en toda la calle y ya sabes como huele mi portal; no me quedo ahi dentro ni cinco minutos, vaya a ser que me desmaye y acabe en el hospital con un brazo o una pierna rotos. El conserje es un guarro. Deberiamos ponernos de acuerdo todos los vecinos y echarlo. -Relajate, va -la animo sonriendo-. Vamos a disfrutar de nuestro primer dia de playa este verano y alli se te pasaran todos los males. Y, por cierto, ?no te dije yo que no te pusieras esas pintas para ir a la playa conmigo? -la reprendio Maria mientras se reia a carcajadas repasandola de arriba abajo. Alicia era una morena despampanante, extremadamente proporcionada (debia ser hija del diablo, no habia otra explicacion). Ya nacio con la piel bronceada y no tenia ni un resquicio de celulitis. Su melena larga, oscura y ondeada caia sobre sus hombros. Se habia puesto un bikini verde esmeralda que aun resaltaba mas el tono chocolate de su piel. Cubierto con una camiseta blanca de tirantes adornada con una pluma plateada dibujada por encima de la cintura. Ella decia que era un vestido; pero, no nos enganemos, un vestido que apenas tapaba el culo no se podia llamar vestido. Se habia puesto unas chancletas de playa Adidas que a Maria no le gustaban nada. Ella era fiel a su estilo, y ni caso de la moda. Pero la guinda del atuendo era esa maldita pamela que se ponia para refugiarse del sol. Color canela y con una cinta que la rodeaba terminando en un lazo. De color verde esmeralda tambien, claro, conjuntada con su bikini. A ver, ?quien os pensais que es ella? Siempre tan puesta y perfecta. Llegaron a la playa en tan solo diez minutos mas y tras encontrar donde aparcar, que eso ya fueron otros quince minutos, cerraron la capota y se bajaron con una sonrisa a disfrutar de su tarde de playa. Todavia estaban a finales de mayo, pero el sol era abrasador. A esas horas del mediodia podia parecer mediados de agosto. Daba gusto esa epoca del ano, las temperaturas eran ideales, calurosas de dia y fresquitas de noche. Y lo mejor de todo es que todavia no habia muchos turistas, practicamente solo habia gente del pueblo disfrutando de los placeres de su entorno. Buscaron el sitio ideal donde dejar las toallas, bien cerca del agua, mientras Maria se sentia observada y sabia perfectamente por que. -?Alicia, ves como nos mira la gente? Esa maldita gorra tuya le quita el sol a media playa -dijo mirando a su amiga con reproche. -Lo que mira la gente es su propia envidia, princess. Somos las diosas de la playa y por ello nos miran. Mi pamela -dijo remarcando cada una de las silabas-, que asi es como se llama, no tiene nada que ver. -Por supuesto que tiene que ver, y mucho. Y esta claro que miran a la diosa morena, pero no solo por su cuerpo de infarto, ricura. ?Ves a la senora del bikini negro que tenemos a unos quince metros? No le da el sol, y es por culpa de tu sombrerito. -Las dos se unieron en unas sonoras carcajadas que si que hicieron que las mirara todo el mundo, pero eso ya no les importo. Estaba claro que no le gustaba ser el centro de atencion, pero sabia de sobra que salir a la calle con su amiga significaba eso. Era consciente de que lo unico que tenia ella que no pasaba desapercibido era su coche, pues no habia otro igual a kilometros. Pero lo que no tenia claro era en que pensaba el dia que decidio comprarselo, aunque hay que decir que cada vez que lo miraba se convencia de que eso tenia que ser amor. Cuando ya llevaban un rato al sol, sintiendo como los rayos entraban por cada uno de los poros de su piel, Maria decidio ir a pegarse un bano, estaba empapada en sudor y ya no aguantaba mas. Le gustaba pensar que asi era como se activaba la melanina de su piel, pero sabia que su tono no le permitia abusar, o acabaria roja como un tomate. Su amiga ya la habia embadurnado con proteccion solar alta, pero ya estaba escarmentada de veranos anteriores y no iba a tentar a la suerte. No quedaba nada sexy ponerse una camiseta palabra de honor con toda la piel roja y las marcas del bikini en blanco; ni tampoco era plato de buen gusto no pegar ojo en toda la noche porque te duele y no sabes como ponerte, o pasarte el dia concentrada en no rascarte porque te vas a hacer una carniceria. Alicia no tenia ese problema, ni siquiera se ponia crema; un poco de aceite de proteccion quince, para que no se dijera que no se ponia nada. Ademas, le daba un tono brillante que a ella le encanta. Con un ratito de sol conseguia un tono tostado que era la envidia de todas aquellas que en abril empiezan a hacer sesiones de solarium para estar estupendas en junio. Para que ella se cansara de hacer la lagartija y decidiera banarse, el calendario tenia que chillar que era quince de agosto, con repiqueteo de tambores y campanillas, aliarse con el sol y que este sacara su furia mas intensa en rayos de fuego. Y la mala suerte es que ese dia ni siquiera iban a la playa porque la piel de Maria no podia aguantarlo. Tomaduras de pelo de la vida. Cuando sintio el agua del mar rozar los dedos de sus pies un escalofrio recorrio todo su cuerpo. El cambio de temperatura era algo agradable en esas fechas. Sentir el sol ardiente sobre su cabeza y el frescor del agua bajo sus pies era algo revitalizante. Cerro los ojos, suspiro y relajo todos los musculos que durante la semana iban acumulando tension. Y, sin dejar de mirarse los pies, empezo a caminar adentrandose en la playa, sintiendo las olas chocar contra sus piernas y colarse resbalando como si no fueran impedimento suficiente. Cuando ya se habia mojado por encima de las rodillas, levanto los brazos, los junto y de un salto que le permitio arquear su cuerpo en media luna se sumergio tan al fondo como podian aguantar sus pulmones. Estuvo nadando un rato, haciendo grandes brazadas para llegar hasta las boyas, volver y repetir. Disfrutando de las vibraciones que su nado provocaba alrededor de su cuerpo. Se habia puesto las gafas y se sumergio para admirar los peces que buscaban algo de comer por debajo de la arena. Cuando se canso, volvio a la toalla y salpico con un poco de agua de su pelo a la morena que tomaba el sol casi sin respirar. Le provoco un chillido agudo que arranco sonrisas a mas de un individuo de los alrededores. Se rio y se tumbo de nuevo a su lado. -Como me gustaria poderme pasar el dia aqui. -Y a mi; ?por que no hemos nacido ricas? -pregunto Alicia casi para ella misma. -Pues, la verdad, ricas tampoco haria falta. Yo me conformo con poco. Podriamos trabajar en invierno y tener todo el verano de vacaciones para disfrutar de la playita, ?no? -?Y eso es pedir poco? -rio-. A ver, princess, por pedir…, !yo no quiero trabajar! -exclamo su amiga haciendo reir a ambas-. Cuentame como te va en el trabajo, tienes que ponerme al dia. -Pues nada de nuevo, solo llevo un par de meses. Me siento muy bien con el equipo, que ya sabes que eso es importante para mi. Por ahora, poco mas puedo decir. -?Y que tal con el jefe? -Pues igual que lo ultimo que te conte, siento que me observa mas de la cuenta, pero supongo que, como soy la ultima que se ha incorporado, le toca echarme el ojo y hacer de jefe. No se, he escuchado comentarios por la oficina y la verdad es que no hablan muy bien de el. Dicen que es un tipo muy desagradable. -Andate con ojo, ese tipo tiene pinta de creerse que el personal de su oficina tambien es suyo -le advirtio. Cuando el sol empezo a dejar de calentar con fuerza, recogieron sus toallas y se fueron a casa de Maria. Se pegaron una ducha refrescante y se pusieron ropa comoda. Esa noche era noche de chicas. Llamaron al restaurante chino que habia a tan solo dos manzanas y le pidieron sus platos favoritos para cenar: rollitos de primavera, fideos Singapur, arroz tres delicias, pollo picante y ternera con salsa de ostras. Se acomodaron en el sofa y empezaron a hablar de sus historias mientras esperaban el capricho de la noche. Este no tardo en llegar. Sono el timbre del portal y Maria abrio sin preguntar, solo miro por la camara y ya vio quien era. -Buenas noches, senorita -dijo el joven. -Buenas noches, Yin -contesto Maria con total confianza. -Su pedido. Espero que lo disfruten. -Seguro que si, siempre nos haces disfrutar -le solto picara, haciendo que el pobre muchacho se sonrojara. Cerro la puerta, lo dispuso todo sobre la mesa que su amiga ya habia preparado en milesimas de segundo y se sentaron a disfrutar de su cena como dos osas hambrientas que acaban de despertar de la hibernacion. -Pobre Yin, seguro que se muere por tus huesos. -Alicia, no empieces a decir tonterias o no te dejo nada de cena -rio. Pusieron un nuevo capitulo de la serie que estaban viendo juntas, una de chicas, amores y esas cursiladas que Alicia no podia ver con su novio y solo veian cuando estaban juntas. Las noches de chicas eran para hacer todas esas cosas que no se podian hacer cuando estaban con los chicos, como criticar. Terminaron de cenar y disfrutando de la temperatura agradable de la noche se prepararon unos cocteles de frutas mientras terminaban, emocionadas, el ultimo capitulo, donde la protagonista, al fin, conseguia casarse con su amado. Lloraron lo que no esta escrito. ?Entendeis por que no podian ver esas series con los chicos? Perderian la fama de chicas fuertes. CAPITULO 2 Carlos llevaba dirigiendo la asesoria seis anos, el tiempo que hacia que se habia puesto en marcha la empresa. Era el director principal, aunque el que habia dado el pistoletazo de salida habia sido uno de sus mejores amigos. Este solo habia planteado la idea y puesto la parte economica necesaria, del resto siempre se habia encargado Carlos. El llevaba unos meses en paro, lo que habia hecho tambalear su matrimonio. Los problemas economicos habian sido motivo de muchas discusiones y no tenia claro hasta donde aguantarian esa situacion. Por suerte, cuando su amigo le dio esa opcion, no se lo penso dos veces, estaba suficientemente capacitado para dirigir una asesoria y a todo el equipo necesario. Era una buena oportunidad y la emprendio con mucha ilusion. En ese tiempo, la empresa habia funcionado con mucho exito y no habia parado de crecer, lo que le proporcionaba un buen sueldo y, asi, el fin de las discusiones con su mujer. No formaban un matrimonio sumamente unido, pero fuera de las discusiones economicas, que ya habian terminado, tenian una buena relacion. Carlos siempre la definia como <>. Su amigo ya habia recuperado la inversion inicial y, aunque colaboraba en las decisiones importantes de la empresa, le dejaba a Carlos todo lo demas. Practicamente ni aparecia por alli. El tenia su empresa de seguridad desde joven y seguia en ello (que bastante trabajo le daba ya). La asesoria para el nunca fue ni una gran ilusion ni un gran problema. Tenia un beneficio extra del que no se tenia que preocupar y encima le habia podido acomodar la vida a su amigo despues de pasar por un tiempo complicado. De las contrataciones de personal se encargaba Carlos, unica y exclusivamente. Acertando y fallando. Porque no siempre las contrataciones salian bien. En ocasiones empezaba a trabajar alguien nuevo en la oficina y ni superaba el periodo de prueba. Habia gente que no entregaba lo suficiente como para que pudiera formar parte de su equipo. Queria personas entregadas e ilusionadas con su trabajo, que fueran felices a ejercer su jornada y que dieran el cien por cien. Ir a trabajar no tenia que ser un suplicio. El departamento laboral siempre habia sido uno de sus mayores dolores de cabeza. No habia parado de crecer y solo Marta seguia desde que empezaron. El resto de departamentos tenia practicamente la misma plantilla desde los inicios. Marta empezo sola, pero al poco contrataron a una ayudante en practicas, que cuando las hubo terminado se fue a otra asesoria donde le pagaban mas. Cogieron a otro ayudante y volvio a suceder lo mismo. Carlos estaba un poco desesperado con la situacion y Marta no dejaba de presionarlo con que ella sola no podia con todo el trabajo y los estudiantes en practicas no eran la mejor opcion para darle el suficiente apoyo. No pretendia hacerle caso, seguramente los ayudantes plegaban por su culpa, y asi se lo hizo saber. Marta se estaba planteando hacer ella lo mismo e irse de alli. No se sentia valorada. Pero, cuando iba a presentar su carta de dimision, este cedio a sus peticiones y contrato a una chica joven que ya habia terminado su carrera. Resulto ser una buena profesional y una gran decision. Cuando comunico que estaba embarazada fue una alegria para todo el personal de la oficina, menos para Carlos, al que le cayo una nueva preocupacion sobre los hombros: otra vez tenia que contratar a alguien; porque despues de la baja de maternidad, seguramente le tocaria despedirla. No iba a aceptar peticiones horarias ni historias maternales. A su oficina se venia a trabajar y, como ya he dicho antes, a dar el cien por cien. Tocaba volver a empezar con las entrevistas. Y asi llego Angel. El pelirrojo empezo con muchas dudas por parte de su jefe, no tenia claro que este chico tuviera las aptitudes que el deseaba, pero aun asi decidio darle una oportunidad. No habia sido su primera opcion, pero esta en el ultimo momento le fallo, asi que tuvo que escoger al segundo candidato. A Marta le habia gustado mucho cuando lo vio caminar por los pasillos hacia el despacho el dia de la entrevista. Le mando una sonrisa que le parecio sincera y su mirada le dijo algo; algo como que este chico podria ser un buen candidato. Pero ella no tenia opcion de escoger, ella solo estaba alli para sacar faena y no dar problemas. Tuvo suerte y acabo siendo el elegido. Habia resultado ser un muchacho agradable y trabajador que se llevaba bien con todo el personal de la asesoria. Nunca habia escuchado la minima disputa a su alrededor. Desprendia simpatia por donde pasaba. Asi que, pasados un par de meses y visto que el trabajo no paraba de aumentar, Carlos decidio que se lo quedaria, independientemente de que estaba pendiente la vuelta de Monica. Finalizada la maternidad, Monica comunico que no iba a volver por el momento. Sus mellizos la demandaban veinticuatro horas al dia y ella no queria prescindir de la compania de sus pequenos. Era una madre sumamente feliz. Carlos intento que presentara una baja voluntaria en la empresa, y se lo maquillo como que se preocupaba de que pudiera ejercer de madre con total libertad, aunque lo que queria era quitarsela de encima. Monica no queria dejar del todo su vida laboral y, aunque todavia no era momento de volver, encontro otras opciones. Asi que pidio una excedencia de un ano, con la puerta abierta a alargarla otro ano mas. A pesar de no haber conseguido lo que queria, eso le dio un suspiro. Mientras durara la excedencia no le suponia ningun gasto y asi, cuando volviera, quizas lo hacia al cien por cien y no tenia que echarla. Pero, por otro lado, tenia que contratar a una tercera persona para el departamento. Empezo con las entrevistas y, para variar, el mercado no estaba boyante. Hasta que entrevisto a una chica de veintipocos, con una melena rubia lisa que le llegaba hasta el pecho. Llevaba un vestido de algodon fino, gris perla, con manga tres cuartos que acababa en sus rodillas. Las medias del tono de su piel casi no se apreciaban. Llevaba una americana negra arremangada a la altura del vestido, dejando ver sus delicadas munecas; en una de ellas llevaba una pulsera muy sutil, plateada, que tenia unas letras escritas, pero Carlos no las alcanzo a leer. Bordaba el look con unos stilettos negros, que tenian los laterales de encaje; la hicieron entrar triunfal a la entrevista. -Buenos dias. Adelante. Soy Carlos. Director de la asesoria. -Le indico sentarse en la silla del despacho que quedaba libre para todo aquel que lo visitara. Rodeo la mesa respirando profundamente para concentrarse y ocupo su lugar. -Encantada, Carlos. Mi nombre es Maria y es un placer que conteis conmigo como candidata – sonrio de la forma mas tierna y agradable. Esas sonrisas que solo ella era capaz de transmitir sin darse cuenta.

  • El hombre triste del puerto de Sabrina Blanco Lavado

    https://gigalibros.com/el-hombre-triste-del-puerto.html

    ?Quien seria ese hombre que espiaba su casa cada atardecer y cada amanecer, semana tras semana, dia tras dia sin descanso? Virginia no lograba comprenderlo.
    Ezequiel Chauntel, herido y traicionado por este mundo en el que perdio a su esposa Luna, y a su hija tragicamente odia a todos aquellos que han vivido o viven en su casa, encantada como si la hubiera sacado de los fondos de los mares.

  • Yo el asesino de Diego Uribe

    https://gigalibros.com/yo-el-asesino.html

    D esperto a sus tres hijos de madrugada, entre los ruidos del motor de un viejo Renault Cuatro blanco que los esperaba con un conductor en la puerta de la casa. Iban a emprender un largo viaje que les cambiaria la vida, si conseguian llegar a su destino. Los ninos lloraban, no querian ponerse las ropas que les daba su madre: unos harapos malolientes y remendados que habian resistido varias generaciones. No sabian que pasaba, todavia eran unos crios. Una vez estaban preparados para subirse al coche, ella aprovecho para meterse en un cuarto pequeno y se corto la preciosa melena negra que la acompano durante anos. No queria que supieran que era una mujer y, si lo descubrian, queria estar lo menos atractiva posible. El padre introdujo las maletas raidas en el maletero y en la bandeja superior. Solo cabian cinco personas en el coche, pero, como los hijos era menores, el conductor, un hombre con semblante serio y de poco hablar, lo acepto. Ademas, recibio el dinero por adelantado, a traves de la mafia local; su parte de los veinte mil euros que dejaron las arcas de la familia en la miseria. La madre intento ocupar el asiento del copiloto, pero, ante sus gritos e insultos, lo intercambio con su esposo. Sentados, lloraban y miraban atras, en un intento de despedirse de la tierra que los vio crecer y nacer. La amargura los embargaba, pero tambien tenian un hilo de esperanza: podia ser el principio de una nueva vida, que no daba para mas en su pais natal. Se despidieron con la mano de la ultima calle de Tadouart, tomaron la Route Ancient hacia Tiznit y la N1 en direccion a Agadir, el destino final para el taxi, pero no para ellos, que debian tomar un autobus en direccion a Tanger. Pasaron la noche entre los murmullos y gimoteos de los menores, que ignoraban su suerte. Al llegar los primeros claros del dia, hicieron una parada, bebieron agua de una botella y comieron unos dulces tipicos de su pueblo. Durante el dia, abandonaron la carretera principal, que estaba en buen estado, y viajaron por la secundaria, de tierra y piedras que provocaban que el coche botara, haciendo imposible el descanso. Habia demasiados controles de policia y mafias dispuestas a robar o lo que hiciera falta para arruinarles el trayecto. Despues de horas metidos en el vehiculo, se encontraban cerca del transbordo. No lloraban, pasaron de un estado de expectacion ante lo que su nueva vida pudiera traerles. Llegaron a Agadir en las primeras horas de la noche, cuando era mas facil pasar desapercibidos. Tenian que dirigirse a una parte de la ciudad donde una multitud esperaba impaciente a que abrieran las puertas de un autobus ilegal. El numero de personas doblaba la capacidad del vehiculo. Las mafias que controlaban la operacion bendecian la circunstancia: cuanta mas demanda, mas beneficios. El Renault Cuatro aparco a unos metros del autobus, y el conductor les senalo que se bajaran y esperaran junto a los otros viajeros. La familia recogio sus pertenencias y se encamino hacia el grupo, donde todos competian por conseguir un hueco junto a la escalera de acceso. Tras varios minutos de gritos y peleas, dos encapuchados con chilabas aparecieron por sorpresa. El que parecia el cabecilla saco una pistola y todos callaron rapido. Se dirigio al asiento del chofer, abrio la puerta y se subio. El otro hombre hablo a la multitud y les explico en varios idiomas que la tarifa habia subido como resultado de los gastos de gasolina y adecuamiento del autobus. Los pasajeros se lo tomaron mal, hasta el punto de acorralarlo, pero el saco una pistola de un bolsillo de la chilaba y disparo al que tenia enfrente, que murio en el acto. El mensaje llego claro a los presentes, que cesaron su motin y obedecieron las ordenes. No todos llevaban dinero, algunos pagaron por anticipado y no les quedaba nada. Solo los que tenian algo reservado para gastos inesperados pudieron acceder al vehiculo. La madre, ante la desesperacion de su esposo, que lloraba pensando que se quedarian sin sitio, saco un pequeno monedero y, a escondidas, le deposito en la mano lo que ahorro durante anos sin que el lo supiera. Cuando les llego el turno de entrar en el autobus, uno de los encargados les dijo que era raro ver a dos hombres con tres ninos pequenos. El padre no dijo nada, el malvado sabia lo que ocurria. Agarro a la madre del brazo, le quito la capucha y le estrujo los pechos con rabia. Las voces de los demas viajeros, que apenas veian lo que pasaba y que apremiaban al conductor por la demora en subir, hicieron menor el sufrimiento de la mujer. El trayecto entre Marrakech y Casablanca se paso deprisa, hasta que un grupo de policias marroquies les dio el alto en las proximidades de Rabat. Uno de ellos se subio al vehiculo y, empunando una metralleta, recorrio los asientos recolectando dinero. Apenas tuvo que hablar, todos sabian lo que queria: no era la primera vez que pasaban por la experiencia. El intercambio se llevo a cabo como un tramite burocratico. Una vez la policia acumulo lo que creia justo para dejarlos seguir adelante, se marcharon. Llegaron a Tanger y, tras varias paradas, se dirigieron por la avenida Mohammed IV hacia la playa Real, cerca del puerto. Era una cala pequena y de dificil acceso, donde montarian su cuartel general hasta el momento de marchar hacia El Hoceima, ultima parada antes de partir hacia Espana. Las embarcaciones derruidas servirian de vivienda improvisada para enfrentar al frio de la noche. Dias despues, dos hombres, un espanol y un marroqui, aparecieron en un coche militar con un bote en la parte superior. El marroqui seria el encargado de llevarlos en patera hacia una playa senalada junto a El Hoceima; desde alli viajarian hacia las costas de Almeria, su destino final. El espanol pidio cien euros a cada familia si querian subirse a la barca. Un chico le dijo en un ingles basico que era injusto, que no estaba dentro del trato que hicieron. El marroqui se aproximo por detras y lo golpeo con una tabla que recogio del suelo. La sangre manaba veloz y relucia en la cabeza sin pelo del africano, que cayo al suelo al instante. El espanol aprovecho ese momento para darle una patada en la cabeza que lo dejo inconsciente. --?Alguien tiene alguna pregunta? Nadie se atrevio a responder. Sacaron el dinero, se ayudaron entre si y pagaron. Cinco horas de viaje y ya estaban en la ultima ciudad de Marruecos que pisarian antes de partir y que, con toda probabilidad, algunos jamas volverian a ver. Una cala desierta los habia recibido y los despediria a medianoche, cuando las patrulleras espanolas hicieran los cambios de guardia. El momento esperado llego con la senal de una linterna al piloto desde un monte cercano. Con dificultad, unos cuantos chicos empujaron la barca, que se dirigio mar adentro, y se subieron deprisa. Las olas eran gigantes en ese momento, pero no tenian mas remedio que intentarlo. Tras algunos virajes, el copiloto se hizo con el mando de la patera, que comenzo a recibir agua a traves de varias grietas entre las tablas, alli donde la masilla habia cedido. Despues de unas horas con poco espacio, los cuerpos de los viajeros empezaron a resentirse. El unico que tenia anchura era el piloto, que sudaba tratando de gobernar la barca en mitad del temporal. El chico que recibio la paliza por quejarse grito en frances que iban a morir todos, que el reguero de agua seria cada vez mas grande a medida que el tiempo pasara y se ahogarian en mitad del oceano. El piloto le pidio a gritos que se calmara. Les aseguro que no era su primer viaje entre los dos continentes y, si todos colaboraban, llegarian a las costas de Almeria. La mitad del trayecto paso y la barca resistia a duras penas. Alguien alerto de una luz tenue a unos cincuenta metros. Los pasajeros entraron en panico al pensar en la posibilidad de que fuera una patrullera espanola. El piloto los tranquilizo avisando de que sus luces eran mas potentes. Cuando estaban a unos metros, un golpe seco en el casco de la embarcacion provoco la histeria de nuevo. Una persona saco una linterna diminuta, alumbro al mar y descubrio los cuerpos flotantes de dos personas que se habian ahogado. Un candil reposaba en la proa de una patera medio hundida, con un nino de corta edad muerto entre las tablas del suelo. Liderados por el mismo joven, los pasajeros se amotinaron y a punto estuvieron de volcar la barca. El piloto, encolerizado, dejo su asiento y saco un cuchillo. --!Salta o te mato! --No se nadar. --!Hazlo! El chico se arrojo al mar entre sollozos y ante la cara de miedo de los pasajeros, que poco tardaron en obedecer. El resto del trayecto fue tranquilo, las olas amainaron y la actitud desafiante de algunos desaparecio ante la inminente llegada a las costas espanolas. Con la primera luz del alba, la patera toco suelo espanol. Un grito alerto de la aparicion de un coche de la Guardia Civil a unos metros de la playa. Los mas jovenes saltaron de la patera y corrieron en direccion contraria, pues sabian que si se dispersaban las posibilidades de no ser atrapados eran altas. El resto hinco la rodilla en la arena y desistieron. Esperaron a los agentes entre lagrimas y desconsuelo. Tanto dinero y penuria para que los devolviesen a su tierra. Pero a veces la suerte ayuda a la buena gente, y un abogado almeriense consiguio el resto: utilizo a los menores como excusa para solicitarles asilo, que fue aprobado por el juez de guardia. Seis meses despues, dejaron la casa de alojamiento de inmigrantes, en los suburbios de Almeria, y se mudaron a una propia. Era pequena y vieja, pero suya. Lo habian conseguido. 1 Iniciacion E spero en la puerta del cine Imperial para ver una pelicula. El dia ha sido raro, desde temprano he tenido sensaciones extranas. Un hormigueo me recorre el cuerpo y el corazon me palpita acelerado. Las manos me tiemblan y las piernas no pueden sostenerme. Mis pensamientos se mezclan y no consigo razonar con claridad. Miro en todas las direcciones, quizas me observan. Debo comportarme con normalidad. Me doy la vuelta y doy la espalda a los que vienen al cine por la Puerta de Purchena. La hora de entrar llega; tengo que tranquilizarme, mi nerviosismo podria llamar la atencion. Tres chicas jovenes pasan junto a mi; puedo oler sus fragancias. Una pareja mayor las sigue, comentando las buenas criticas que la pelicula ha tenido en los medios de comunicacion. Voy a entrar detras cuando una joven de pelo castano largo se adelanta, rozandome el hombro; me golpea con el bolso y se disculpa. No respiro bien. Comienzo a perder el control. La sigo hasta la sala tres y no me importa que pelicula vine a ver. Se sienta sola en la tercera fila, a la izquierda. Yo lo hago tres detras. Puedo verla a la perfeccion. Se acaricia el pelo y mueve la cabeza como una diosa. Paso la pelicula entera admirandola. Quiero volver a casa, pero no soy capaz. Algo me empuja a seguir alli. Es ella, es mi madre: su pelo, su figura, sus labios. <>. Un espectador cambia de sitio y se sienta junto a ella. Entablan conversacion, y eso no me gusta. Espero un instante; si intenta algo, tendre que intervenir. Se acerca despacio a su cara, pero ella lo rechaza con la mano. Hace un gesto para avisar al revisor y el entrometido desaparece. Siempre hay que tener cuidado cuando se va sola. La pelicula termina y la chica se queda a ver los creditos del final. Los espectadores se marchan, pero no se de que hablan, no preste atencion a la pelicula. Quedan cinco personas en la sala, ademas de nosotros. No se que hacer. <>.

  • Alto! ese novio es mio de Vanessa Lorrenz

    https://gigalibros.com/alto-ese-novio-es-mio.html

    ?Quien dice que el amor todo lo puede? Pues dejenme decirles algo, eso es una total y completa mentira, porque lo digo, !porque lo se!, en menos de lo que pensaba conoci el verdadero amor, ese que te lleva a las estrellas y te vuelve a bajar, ese amor del que hablan todas las canciones de amor. Ese en el que los poetas ponen sus bases para sus creaciones. Si alguien le hubiera dicho a Jeime que el amor la destruiria, se habria reido en la cara de esa persona. Ella vivio siempre rodeada de amor, sus padres eran un matrimonio estable al igual que sus abuelos y sus tios, todo era amor a su alrededor, por eso cuando termino sus estudios monto una pequena empresa de planner wedding o lo que es lo mismo una planificadora de bodas. Pero no crean que es sencillo, porque estar detras de la novia, las veinticuatro horas del dia, escogiendo vajilla, adornos, el vestido, es mas de lo que cualquiera podia aguantar. Por eso ahora estaba tratando de calmar los nervios de una novia histerica, sin que lo lograra. --Jeime dime que todo esta bien, llegaron mis tulipanes holandeses, dimelo, porque si no me muero. Ella suspiro cansada, esas nuevas ricas que creen que todo es muy importante, que si las flores, que la verdad es que ella las consiguio en nada de tiempo, pero bueno una planificadora de bodas, es la perfecta dama de honor detras de la dama de honor oficial, asi que le tocaba aguantar todos esos numeritos, mientras las verdaderas damas de honor se ligaban a los padrinos del novio. --Si Caroline llegaron todas las flores, la tarta es del disenador que querias, con el estrambotico sabor que elegiste, el servicio de catering es el que me pediste, todo esta tal como ordenaste--la tomo de los hombros para que enfocara su mirada en ella y dejara de morderse las unas--Es tu gran dia Caroline, disfruta del momento, tienes a un hombre grandioso que te esta esperando en el altar, asi que no lo hagas esperar. Esperaba que la sonrisa resplandeciente que tenia en el rostro calmara un poco los nervios de la novia, pero lamentablemente no fue asi, cuando ella vio que las lagrimas comenzaban a brillar en los ojos de Caroline, sintio que lo peor se avecinaba. -- ?Crees que estoy haciendo lo correcto? !He! Por dios esa mujer estaba loca, tenia un hombre guapo que la estaba esperando en el altar, para unir su vida en sagrado matrimonio, y ella solo se preguntaba si estaria haciendo lo correcto, pero en que mundo vivia esa mujer. --Claro que estas haciendo lo correcto, Caroline es con lo que siempre has sonado, tu gran dia, el hombre que siempre sonaste esta ahi afuera esperando por ti. --Pero estoy confundida, no estoy segura de amarlo, ?Como sabes cuando de verdad amas a una persona? !No puede ser! !O dios mio! Esto era lo peor que le puede pasar a una planificadora de bodas, que la novia quisiera salir corriendo en el ultimo momento. --Caroline, eso es algo que solo tu sabes, tu corazon lo sabe, amar a un apersona es encontrar la mitad que te falta en la presencia de la persona amada, es saber que recorrerias el mundo entero con tal de estar a su lado, sabras que estas con la persona correcta el dia que sientas que tu hogar no es otro mas que entre sus brazos. La novia comenzo a estallar en llanto y ella no pudo hacer nada, estaba a punto de pegarle una bofetada para que reaccionara, cuando la puerta de la pequena habitacion destinada para la novia se abrio sobresaltandolas. --Caroline no cometas esa locura, por favor te lo suplico. Un hombre de unos treinta y cinco anos, vestido con un traje de firma que en ese momento estaba desabotonado, llevaba la corbata floja, su cabello negro revuelto como si se hubiera pasado las manos varias veces desesperadamente. Ahora extendia una mano en direccion de la novia que estaba palida como una vela observando al hombre. --Jack ?Que estas haciendo aqui? Bien ahora Jeime sabia que se llamaba Jack, el intruso que queria impedir la boda, !la boda! Por dios ahora le tocaba a ella impedir que la novia se fugara. -- ?Como me preguntas eso? ?Crees que voy a dejar que te cases con ese estupido? --Sabias lo que habia Jack jamas te engane, no entiendo a que viene todo esto. --Solo respondeme una sola cosa, y dependiendo de tu respuesta me ire y no volveras a verme nunca en tu vida. --No lo hagas mas dificil, Jack por favor, no hagas que este momento sea aun mas horrible--dijo Caroline llorando a lagrima viva, Jeime puedo ver que se amaban con locura y no sabia la causa de porque no estaban juntos. -- ?Crees que vas a tener lo que tienes conmigo a su lado? Vio como Caroline le dio la espalda al pobre hombre que parecia desesperado, !Es que era estupida!, no se habia dado cuenta de que las lagrimas se le saltaron cuando vio como Jack daba la media vuelta con los hombros caidos, derrotado estaba a punto de salir por la puerta cuando ella sintio que tenia que hacer algo para impedir que eso terminara asi. --Caroline, eres estupida, vas a dejar ir al hombre que amas. Ambas miraron a la puerta cuando se escucho un sonoro portazo. --Se ha ido-- Caroline se tumbo de rodillas llorando desconsolada, la levanto de los hombros de mala manera, como vio que no reaccionaba le dio una bofetada, esperando que eso la sacara de su estado de nerviosismo. --Estupida ve detras de el, antes de que sea demasiado tarde, es que no lo amas, que esperas para ser feliz. --La boda--dijo aun llorando --Deja de pensar en eso, yo me ocupo del asunto, ahora ve por el. Cuando vio como la mujer salia corriendo, recogiendo entre sus manos la cola de su vestido, suspiro de alivio ahora quedaba lo mas dificil, como decirle a los invitados y principalmente al novio, que la boda se cancelaba.

  • Un ano para maravillarse de Clemency Burton-hill

    https://gigalibros.com/un-ano-para-maravillarse.html

    Este libro que en poco menos de un ano se ha convertido en un clasico en el Reino Unido, es un original texto que busca compartir con todo el mundo las maravillas de la musica clasica. La autora selecciona una pieza musical para cada dia del ano con una breve explicacion del compositor, su contexto y las razones por las cuales la ha escogido.
    Una forma inigualable de acercarse, entender, apreciar y maravillarse con la gran variedad de musica clasica existente.
    Seleccionada con mimo e investigada con rigor, este es un libro tanto para amantes de la musica clasica como para quienes quieren conocer de que se trata y nunca nadie los ha guiado hacia ella.
    El unico requisito para maravillarse con este libro es tener tanto los oidos como la mente abiertos.

  • Luchando por tu amor de Oliver Cruz

    https://gigalibros.com/luchando-por-tu-amor.html

    En el momento menos esperado, cuando Sandra descubre que lo que siente por su mejor amigo es algo mas, la vida la pondra a prueba. La lucha por el corazon del chico al que ama no sera facil, pero Sandra tampoco se rendira facilmente. ?Lograra la felicidad junto a el?

  • 4 3 2 1 de Paul Auster

    https://gigalibros.com/4-3-2-1.html

  • Solo una caricia de Maya Banks

    https://gigalibros.com/solo-una-caricia.html

    Educada desde jovencita en una secta religiosa, Jenna no ha tenido contacto con el mundo exterior, lo unico que tiene son vagos retazos de recuerdos que parecen pertenecer a otra vida. Recuerdos a los que se agarra cuando los lideres de la secta descubren sus poderes sanadores. y la castigan. Anos de cautividad y sometimiento a las estrictas ordenes de la secta han convertido a Jenna en una mujer timida y docil. o eso es lo que todos creen. En realidad, esta esperando el mejor momento para escapar.

  • Las mentiras que nos unen de Kwame Anthony Appiah

    https://gigalibros.com/las-mentiras-que-nos-unen.html

    Genero, religion, raza, nacionalidad, clase y cultura. Estos conceptos nos definen y moldean nuestro mundo polarizado. Sin embargo, las identidades colectivas que generan estan plagadas de contradicciones y falsedades. Al explorar su naturaleza y su historia -desde las enganosas ideas sobre la raza del XIX hasta los debates contemporaneos sobre <>- Kwame Anthony Appiah se deshace de los mitos mas venenosos y desmonta con lucidez nuestras ideas preconcebidas sobre como funcionan estas identidades.

  • Lady Anne de Lydia C. Ramirez

    https://gigalibros.com/lady-anne.html

    En el Londres del siglo XIX, lady Anne Phillips, ha conseguido dejar atras su tortuoso pasado y desea decidir su propio destino. Ha visto sufrir a sus hermanas por amor y no ansia pasar por lo mismo. Todo dara un giro inesperado cuando un americano muy rico llamado Alexander Richmond altere todos sus planes y suenos. ?Sera Anne capaz de aceptar su destino? ?O debera revelarse contra el? “Era una especie de batalla en la que no habia un vencedor, sino un par de tontos”

  • Por ti, por mi, por ellos…, Freya Asgard de Freya Asgard

    https://gigalibros.com/por-ti-por-mi-por-ellos-8230-freya-asgard.html

    ?Que pasa cuando un policia es obligado a quitarle los hijos a una mujer acusada de maltrato por su propio esposo? ?Que pasara si este policia se da cuenta que fue enganado y que todo fue una trampa? ?Que pasara si este policia se percata que esa situacion no fue mas que la punta del iceberg de corrupcion en su tan querida Institucion? ?Que posibilidades hay de que, huyendo de la justicia, se encuentre de nuevo con la mujer a la que tanto dano le hizo?
    Esto es lo que le ocurre a Camilo Espinoza. Despues de tres anos, sin querer, llega a refugiarse a la casa de Paola Donoso, acusada por su violento y poderoso marido de maltrato a sus hijos y la que habia escapado de el.
    Rolando Meneses, amigo y companero de Camilo, trabaja para Bernardo Echeverria, el ex esposo de Paola, que la reconoce como la mujer de su jefe, por lo que Camilo y Paola deciden huir juntos, pues saben que el la delatara.
    De aqui en adelante, todo se torna confuso. Por una parte, Camilo debe seguir reuniendo las pruebas en torno a la corrupcion y a los oficiales vendidos a empresarios y politicos; y solo entonces se da cuenta que no solo existe corrupcion, tambien trata de blancas, trafico de drogas y otras situaciones que el ni siquiera imagina. Toda una telarana que no solo implica a su Institucion o a su pais, es una red de varios anos y que abarca mas lugares de los que se imaginan.
    Una historia donde el amor, la familia y la justicia son puestos en jaque por hombres sin escrupulos, cuya unica motivacion es el dinero y el poder.

  • El optimismo de la voluntad de Jorge Herralde

    https://gigalibros.com/el-optimismo-de-la-voluntad.html

    Durante cuarenta anos nos dice Juan Villoro en el prologo Herralde ha dirigido su editorial, Anagrama, con el intrepido placer de quien organiza una fiesta en una pais con toque de queda. Y sobre los preparativos y los invitados de este convite nos habla su organizador en El optimismo de la voluntad: un collage de homenajes a autores y editores “Sergio Pitol, Carlos Monsivais, Ricardo Piglia, Roberto Bolano, Mario Muchnik, Arnaldo Orfila, entre otros”, ademas de notas sobre la experiencia de editar en el contexto latinoamericano. Como recuento historico la obra es imprescindible y como lectura es uno de los libros mas memorables que se hayan escrito sobre el tema.

  • Lo que no se dice de Viviana Rivero

    https://gigalibros.com/lo-que-no-se-dice.html

    “La miro. Era real como el pan. Otros perfumes femeninos habian pasado ante el pero este lo embriagaba, lo penetraba en cada poro, lo heria y lo desarmaba. Ella le quitaba la soledad, las ausencias. La queria toda y para toda la vida.” Joven, linda y exitosa, Elena Wilson Garrott viaja a la Patagonia para encargarse de la herencia de su madre. Lo que comienza como un simple tramite terminara provocando un cambio radical en su vida. Uno tras otro, desenterrara secretos del pasado familiar que ni siquiera sospechaba que existieran. Y conocera a Omar, el hombre al que la ligan lazos profundos e invisibles. Dos historias, una actual y otra antigua, se entrecruzan en esa tierra inmensa barrida por el viento. Una tierra que lo da todo pero que a la vez lo exige todo. Asi fue con los antepasados de Elena, inmigrantes boer de fines del siglo XIX que llegaron a colonizar el desierto. El “efecto mariposa”, un acto leve de consecuencias impredecibles, ha dejado su marca en todas las generaciones Wilson Garrott, hasta llegar a la propia Elena. Si quiere aprovechar su oportunidad de ser feliz, debera vencer los prejuicios que le fueron legados con el apellido y las tierras. La inmigracion sudafricana a la Argentina, la Patagonia rebelde, la Segunda Guerra Mundial y una trama a puro vertigo de amores e intrigas convergen en esta novela. Viviana Rivero, autora de Secreto bien guardado e Y ellos se fueron, vuelve a crear una historia de realismo romantico donde alternan la ternura y la crudeza. Una historia que hara vibrar cada fibra del alma.

  • Con R de Rock de Judith Romero Baeza

    https://gigalibros.com/con-r-de-rock.html

  • Los viejos amigos (Volumen independiente), Silvia Soler de Silvia Soler

    https://gigalibros.com/los-viejos-amigos-volumen-independiente-silvia-soler.html

  • Historias para sonar de Maika Sanchez

    https://gigalibros.com/historias-para-sonar.html

    Era una noche fria y me movia inquieta por el salon de mi casa, estaba nerviosa, asustada, cansada, triste... Todos los sentimientos que podiamos experimentar una persona humana, los tenia yo en este instante, como si de un coctel molotov se tratara. Era fuerte para muchos, pero en realidad ahora mismo solo era una mujer vulnerable, desvalida por todos los sentimientos que tenia hacia el. <>. Yo que siempre habia sido fuerte, de las mujeres que no perdian las bragas por ningun hombre, de las que sabian darse su lugar. Pero todo habia cambiado en mi vida al conocer a Cristian, mi mundo se habia vuelto del reves, todas las personas que me conocian intimamente me decian: <>. Pero, ?que mas podia hacer si lo amaba con locura? No concebia mi vida, si mi chico no estaba en ella. Y ahora lo estaba esperando como una tonta enamorada, mientras mi marido estaba con la otra en los Goya, fingiendo algo que no eran, mientras yo su verdadera mujer me quedaba en casa esperando a que el llegara. <>, me repetia a mi misma una y otra vez. En ese momento se escucho un sonido de llaves al otro lado de la puerta, lo que hizo que mi cuerpo se congelara. Un escalofrio recorrio todo mi ser, poniendome mas nerviosa de lo que ya estaba, Cristian habia llegado y no sabia que hacer, no sabia como recibirle, si con un beso, un abrazo, un no puedo aguantar mas, o con un se acabo. Otra vez mi cabeza y mi corazon volvian a tener una lucha interna, que se estaba llevando a cabo desde hacia ya dos anos y medio. Todo comenzo en el verano del 2012. Yo triunfaba en las pasarelas de toda Espana y tambien estaba rodando "Deseos Cumplidos", la nueva serie que preparaba Telecinco, cadena con la que iba a hacer mi primera aparicion televisiva. La verdad que no me podia quejar, todo me iba muy bien profesionalmente, y emocionalmente me iba mucho mejor, porque mantenia una relacion desde hacia ya casi un ano con el actor por el que todas las chicas suspiraban, Cristian Rodriguez, al que conoci en la "Fashion Week" de Madrid, donde yo desfilaba, aunque era una relacion secreta, ya que para todos solo eramos buenos amigos, aunque yo ya me estaba cansando de esta situacion, ya que queria dar un paso mas en nuestra relacion. Queria gritar a los 4 vientos que estaba locamente enamorada de Cristian, que eramos novios y que eramos muy felices, no podia guardar mas esta confidencia que me estaba matando, necesitaba decirla. Asi que prepare una preciosa velada para convencer al amor de mi vida.

  • Esta princesa ya no quiere tanto cuento de Anabel Garcia

    https://gigalibros.com/esta-princesa-ya-no-quiere-tanto-cuento.html

    La vida parece divertirse poniendome en situaciones limite de las que no se como salir. Pero esta vez se trata de un gran dilema, pues mi camino se ha bifurcado de repente y me lo juego todo a cara o cruz.

  • El septimo nino de Erik Valeur

    https://gigalibros.com/el-septimo-nino.html

    En el orfanato de Kongslund, al norte de Copenhague, no todo es lo que parece. Lo sabe bien Magna, que dirige el centro con mano dura desde hace mas de cuarenta anos. Hay cosas que no deben salir a la luz, y muchos haran lo posible para intentar ocultarlas. Poco antes del sesenta cumpleanos de Magna, seis personas que pasaron sus primeros anos de vida alli durante los sesenta reciben una carta anonima identica que hace referencia a un gran secreto relacionado con las mas altas esferas de poder del pais.

  • Companias silenciosas de Laura Purcell

    https://gigalibros.com/companias-silenciosas.html

    UNA HISTORIA DE FANTASMAS VICTORIANA QUE EVOCA UN MIEDO INQUIETANTE QUE ATRAVIESA LA CONCIENCIA
    DE LA MANERA MAS INESPERADA,
    AL IGUAL QUE LOS ACOMPANANTES SILENCIOSOS
    Ambientada en una mansion rural en ruinas, Companias silenciosas es una turbadora historia gotica de fantasmas que provoca escalo- frios.
    Elsie, recien casada y tambien recien enviudada, es enviada a vivir su embarazo en la deteriorada casa de campo de su difunto esposo. Rodeada de sus nuevos y resentidos sirvientes y de aldeanos hos- tiles, Elsie solo cuenta con la incomoda compania de la prima de su marido.
    En su nuevo hogar, en una habitacion que durante un breve instante aparecera abierta, encuentra un diario de doscientos anos, con la inquietante historia de la madre de una nina muda y de su poco natu- ral concepcion. Y de unas figuras de madera pintada con un pare- cido sorprendente a los personajes de esta novela que lo dejara sin aliento

  • R_185. Proyecto Mouna de Luis Enrique Duenas Gutierrez

    https://gigalibros.com/r-185-proyecto-mouna.html

    Abri los ojos lentamente y sobre mi solo pude distinguir, palpan-do, lo que me parecio una tapa de madera. No sabia donde estaba ni menos aun como habia llegado a aquel lugar. Lo que si sabia es que no podia moverme por la falta de espacio. Intente llegar al bolsillo del pantalon; alli guardaba un mechero con el que poder alumbrar y asi poder ver realmente donde me encontraba. Tras un gran esfuerzo, consegui llegar al bolsillo y sacar el mechero. Lo encendi. Entonces pude ver que estaba en una caja, tenia forma rectangular y era de madera. !Dios mio! Estaba encerrado en lo que probablemente seria una especie de ataud, pero lo peor no era eso, lo peor era el no saber como habia llegado a aquella situacion. En esos momentos de incertidumbre, por mi cabeza pasaban infinidad de preguntas y ninguna de ellas tenia respuesta. ?Que hacia alli?, ?como habia llegado?, ?estaba bajo tierra o en la superficie? Nada de aquello era logico. Mi nerviosismo iba en aumento. Por un momento pense que todo era un sueno, cerre fuerte los ojos para intentar despertar, pero fue inutil. Mi corazon dio un vuelco; notaba mi sangre recorriendo con fuerza todo mi cuerpo, provocandome un escalofrio que me sacudio toda la columna vertebral como si de un rayo se tratara. Por unos segundos crei desfallecer, pero recupere la conciencia, porque si eso me sucedia seria mi final y no me iba a rendir tan facilmente. Intente recordar que habia sucedido a lo largo del dia para asi poder entender que me habia arrastrado hasta aquella situacion. A las 5:00 de la manana, como todos los dias, me levante, me di una ducha y desayune. Despues cogi el coche y me dirigi al trabajo; el resto del dia transcurrio con toda normalidad, sin nada que mereciera la pena destacar. Sobre las 14:00 h. fui a comer al restaurante habitual y mientras comia me puse a leer como de costumbre las noticias y tampoco sucedio nada raro. !Un momento! Si, algo paso fuera de lo comun. Una chica morena, con los ojos verde esmeralda, se acerco a mi mesa y me dio un sobre. Susurrandome en voz baja dijo. --Hola Michael no tenemos mucho tiempo. --Perdone senorita, creo que se confunde, mi nombre es Richard --conteste algo desconcertado. La chica me sonrio, se levanto, y se fue por donde habia venido como si el mismisimo diablo la persiguiera. La verdad es que me resulto un poco raro, pero continue leyendo las noticias y comiendo sin darle mayor importancia a lo ocurrido. Termine y regrese a la oficina, donde pase toda la tarde revisando y archivando antiguos expedientes. A las 19:00 h. sali de la oficina y como todos los dias me dirigi al gimnasio. De camino y estando parado en un semaforo, me parecio volver a ver a aquella chica morena. Por su atractivo se hacia dificil poder olvidarla. Crei verla pasar por delante de mi coche y mirarme… pero, como siempre, yo estaba inmerso en mis pensamientos. Me sobresalto el sonido de un claxon que me hizo regresar de golpe a la realidad y continue mi camino girando hacia la derecha en direccion al gimnasio. Pero ahora que lo pienso bien, no recuerdo si finalmente llegue a mi destino. Tras haber hecho memoria de todo lo acontecido ese dia, regrese a la realidad. La pregunta de si estaba enterrado machacaba mi cabeza. Al pensarlo senti un frio helador que, sacudido mi cuerpo, haciendome ser consciente de lo delicado de mi situacion, ?cuanto aire me quedaria aqui dentro? Intentaba pensar, pero no podia. Rapidamente trate de moverme para dar una patada a la tapa y salir de alli lo antes posible, pero esto hizo que cayera en mi cara lo que parecia arena. Fue cuando mis perores sospechas se confirmaron, estaba enterrado. Hice un segundo intento de escapar. Di un punetazo a la tapa, pero eso tambien fue en vano. Recorde amargamente que pretendia repetir aquella escena de Kill Bill que tanto me gustaba y tanto me agobiaba a la vez cada vez que la veia. Mi corazon se acelero y comenzo a bombear sangre como si fuera su ultimo latido. Ya no podia controlar mi respiracion. Intente relajarme para poder pensar; si no conseguia controlar aquella terrible angustia pronto me quedaria sin aire. A duras penas logre relajarme; mi ritmo cardiaco disminuyo un poco y entonces recorde (era increible que no me hubiera dado cuenta antes) que tenia el movil en el bolsillo. Estire la mano para cogerlo del pantalon, pero alli no estaba; a tientas palpe los bolsillos traseros. Era raro que estuviera alli, ya que nunca lo guardaba atras, pero debia comprobarlo. Lo unico que encontre fue una carta… ?Una carta? !La de la chica! Ni recordaba que me la habia dado. Con gran dificultad pude leer lo que ponia ayudado de la poca luz que me proporcionaba el mechero. En la carta solo habia una simple nota que rezaba: <> Al acercar el mechero para poder descifrar el final de la nota debido a mi nerviosismo, queme el maldito papel y no pude averiguar lo que esa misteriosa mujer me queria decir. Perdi el conocimiento por unos instantes. Tenia que priorizar y no encender mas el mechero para no consumir aire. Sabia que cuanto mas tiempo pasara, menos aire llegaria a mi cerebro y mas me costaria pensar la manera de escapar de aquel infierno. No se me ocurria nada para salir de alli. Si rompia la tapa provocaria que la arena me cayera encima, y moriria igualmente. Estaba resignado; salir era imposible. Ya notaba como apenas quedaba aire, no podia respirar bien, me empezaba a sofocar y cada vez se me hacia mas y mas dificil mantener los ojos abiertos. No tenia fuerzas ni para rezar (nunca habia sido creyente, pero en esos momentos queria creer que existia algo o que alguien milagrosamente me podria ayudar). Mis ojos se fueron cerrando con una lentitud pasmosa, y al contrario de lo que la gente pueda pensar, he de decir que tu vida no pasa por delante cuando estas a punto de morir. Lo que se te viene a la cabeza, es todo aquello que no has podido hacer y que siempre quisiste hacer. Ya no podia mover ni un musculo de mi cuerpo; de hecho, ni si quiera los sentia. Es impresionante como el cuerpo prioriza en los casos extremos y otorga el poco aire que entra a intentar salvar los organos mas necesarios. Me fui sumiendo en un profundo sueno y fue en ese preciso momento cuando me di cuenta de que llegaba el punto y final a mis dias. Cerre los ojos y todo se convirtio en oscuridad. Ni un pensamiento corrio ya por mi cabeza. Solo senti paz. Capitulo 1 Abri los ojos con mucha dificultad. El sol me cegaba, me costo ver que me encontraba en una habitacion con paredes blancas inmaculadas. Podia oir un pitido constante que parecia provenir del lado derecho de mi cama. Al intentar girarme comprobe, que estaba atado de pies y manos a ella. Entonces, una pregunta surgio en mi cabeza; ?donde estaba? A simple vista parecia la habitacion de un hospital, pero eso era lo que menos me importaba. Lo mejor era que estaba vivo y que podia respirar ese aire que hasta donde recordaba tanto queria y necesitaba. Solo tenia que esperar a que alguien viniera y me diera una explicacion de lo que habia sucedido. Aguarde un rato, pero debido al cansancio y al agotamiento, me inundo un profundo sueno. En este estado, crei ver como en mi habitacion entraban dos individuos que por su atuendo parecian personal sanitario. Trate de hablar con uno de ellos, pero de mi boca no salia ni una sola palabra. Al percatarse de que intentaba decirle algo y para calmarme me dijo. --Tranquilo, relajese, esta en buenas manos. Me inyecto algun tipo de medicamento y volvi a caer en un profundo sueno. No sabria decir el tiempo que estuve asi, pero me desperte con las fuerzas renovadas (o eso me parecia a mi) ya que, al intentar moverme, note un dolor intenso que recorria todo mi cuerpo. Esto me hizo pensar que quiza no era tan buena idea moverse, aunque tenia que incorporarme si queria conseguir informacion de lo que habia sucedido. Me di cuenta de que ya no estaba atado a la cama, asi que haciendo un gran esfuerzo consegui levantarme y quedarme sentado en el borde, teniendo una mejor perspectiva de la habitacion donde me encontraba. No era muy grande. No tenia mucho mobiliario. Tan solo habia una mesilla al lado derecho de la cama, y un pequeno armario para dejar la ropa. En la habitacion habia dos puertas, una de ellas seria seguramente la del bano y la otra la que creia me sacaria de alli, siendo un poco optimista. A mi izquierda habia un ventanal por el cual se filtraba la luz del exterior. Como pude me baje de la cama. Aun me dolia todo el cuerpo, senti un repentino mareo que por segundos me dejo inmovil y apoyado en la cama. Una vez se me paso me dirigi hacia la ventana. Queria ver el exterior. Vi un patio trasero y a lo lejos un frondoso bosque. Ya estaba anocheciendo. Aquel paisaje me recordo a los dias que pasaba con mi padre en una cabana a las afueras de Kenora, donde los dos juntos pasabamos las tardes pescando. No se podia ver mucho mas, pero por lo menos pude comprobar que aquel hospital debia estar en algun lugar a las afueras de la ciudad, pero... ?de que ciudad? Me arrastre como pude hacia el armario para comprobar si alli se encontraba mi ropa, intente abrirlo, pero estaba cerrado, volvi hacia la cama y me sente resignado en ella. Pude ver un cable que colgaba desde la cama, lo segui con la mirada y comprobe que se trataba del pulsador de emergencia que tienen todas las habitaciones de hospital. Me estire para cogerlo con un gran esfuerzo lo pulse varias veces seguidas, esperando sentado en la cama a que alguien apareciera. Pero alli no se presento nadie. Decidi levantarme y salir de aquella habitacion, antes de abri la puerta me pare a escuchar, y tras comprobar que no se oia nada decidi abrirla. Temia que al igual que el armario, tambien estuviera cerrada. Con la mano temblorosa gire suavemente el pomo, sono un chasquido y la puerta cedio. Tire de ella lentamente y una rafaga de aire con un fuerte olor a desinfectante se colo en la habitacion. Dude unos segundos si salir o regresar a la cama, pero la curiosidad me pudo y sin mas titubeos cruce el umbral de la puerta. Me encontre un pasillo que parecio interminable. A ambos lados habia multitud de puertas. Desde mi situacion pude apreciar al lado izquierdo, en el cruce de los dos pasillos, algo parecido a un control de enfermeria; y me dirigi a el. Me encontraba un poco mejor. Aunque todavia estaba debil, fui apoyandome en la pared hasta llegar alli. Mire a mi alrededor, pero no habia nadie. Desde el otro lado del mostrador observe una puerta de cristal biselado, en la que habia un cartel que indicaba: <>. Pase dentro y golpee suavemente la puerta, esperando contestacion. No obtuve resultado. Comprobe si la puerta estaba abierta. Agarre el pomo con firmeza y lo gire. Oi los engranajes de la cerradura y la puerta se abrio. Ante mi, una pequena sala con un solo sofa y una mesa, nada mas. Se encontraba en perfectas condiciones. Aquella habitacion no se habia utilizado nunca, o eso parecia. Di media vuelta para retomar el camino por donde habia venido y entonces lo vi. Estaba quieto, impecable, esperando a que alguien lo utilizara; era blanco, por su aspecto al igual que el sofa y la pequena mesa parecia como si nunca nadie lo hubiera utilizado, asi que cogi el impoluto telefono y lo descolgue. Me lo acerque para comprobar si daba tono y, entonces mis sospechas se confirmaron, aquel telefono no daba senal alguna. Aquel hospital estaba muerto. Colgue, y sali de detras del mostrador y segui por el pasillo de la derecha a ver si por fin encontraba algo o a alguien en aquel siniestro lugar. Conforme transcurria el tiempo cada vez estaba mas convencido de que en aquel hospital solo estaba yo. No se oia nada, ni se veia un alma, pero yo seguia andando, y buscando a alguien… o simplemente una salida. Me pare frente a algunas habitaciones. Abria las puertas, pero todas estaban vacias, algunas puertas ni si quiera se abrian, como si escondieran algo o a alguien en su interior y otras en cambio si. En las que estaban cerradas no puedo asegurar si habia alguna persona en su interior, pero no parecian ocupadas. Aquellas que si consegui abrir tenian un mobiliario identico compuesto por una cama, una mesa y poco mas; estaban todas inmaculadas y parecia que nunca se hubieran usado. Tras un rato andando sin rumbo, pude ver a lo lejos unos ascensores. Encamine mis pasos hacia ellos. Antes de llegar escuche un ruido, me pare y observe a mi alrededor, pero no habia nadie (debia ser producto de mi imaginacion). Ya estando frente a los ascensores, pulse varias veces para llamarlos, pero no respondieron (debian estar fuera de servicio). Justo cuando mas convencido estaba que en aquel lugar estaba yo solo, fue cuando a lo lejos empece a oir unos pasos. Me detuve entre dos pasillos mirando a ambos lados, intentando averiguar de donde provenian. El eco no me dejaba distinguir bien. !No podia ser!, mis ojos me enganaban, lo que estaba viendo no era real, alli estaba… aunque solo la habia visto una vez en aquel bar la reconoci perfectamente. Tenia un atractivo fuera de lo comun, y eso, la hacia dificil de olvidar. La mezcla exotica que proporcionaba su piel canela, su pelo negro azabache y unos ojos de color verde intenso hacian de ella una mujer inalcanzable para cualquier hombre

  • Esos dias azules de Nieves Herrero

    https://gigalibros.com/esos-dias-azules.html

    Esta novela es una de las mas conmovedoras historias de amor que jamas se han escrito. El relato de una pasion imposible y secreta que permanecera para siempre en el alma de los lectores.