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Rosario Vila
Todo el mundo recibe las vacaciones dando saltos de alegria, pero yo habria deseado que fuera enero de nuevo en vez de agosto, me sentia como si fueran a extirparme las amigdalas y la vesicula en la misma operacion. De mano de un falso cirujano, un albanokosovar que escondia una red de trafico de organos en el sotano de una pescaderia. Llevaba semanas sonando con playa, mojitos y encontrarme la cama hecha cuando volviera de dar paseos por Puerto Banus, pero mi sueno se habia truncado de la manera mas tragica: ellos, la pareja mas insoportable que habia conocido jamas me habia despertado en lo mejor de mi perfecto sueno. Monica y Braulio se habian apuntado a nuestras vacaciones en Marbella y dudaba mucho que fuera a tener la paciencia suficiente para soportarlo. Se trataba de una semana entera, eso hacia un total de siete dias. Dios… Ciento sesenta y ocho horas… Diez mil chorrocientos minutos… ?Cuantos eran exactamente…? Mierda, no recordaba la tabla del seis. --Robusta y compacta, pero ligera y elegante. Esta maleta grita la palabra <
> --dijo Alvaro. Le dio un giro por el asa, mirando orgulloso como la maleta giraba en el suelo sobre sus ruedas. Aparque mis incomodos pensamientos por un momento y lo mire aturdida. --?Como dices? --le pregunte. --Esta maleta dice mucho de mi. ?No crees? Cerre los ojos y sacudi ligeramente la cabeza. --Eres unico para ver cosas fascinantes que el resto de la humanidad no ve --dije. Alvaro ladeo la cabeza con un gesto rapido y preciso, el flequillo se le fue de golpe hacia el lado izquierdo. --Por supuesto, carino. ?Acaso no te escogi a ti? No estaba segura de como tomarme ese comentario, Alvaro a veces decia cosas que me dejaban a cuadros y cuando se las cuestionaba siempre resultaba que no las habia entendido bien. Llevabamos dos anos juntos y todavia no habia sido capaz de entender la <> ironia de Alvaro. --?Como que <>? --le pregunte. --Oh, Estela… Era un halago. No hace falta que te pongas a la defensiva. --Me miro de medio lado y anadio--: Aunque supongo que ese no es el problema real, ?verdad? Lo que te pasa es que no quieres que Monica y Braulio pasen las vacaciones con nosotros. Y eso me duele, Estela, te recuerdo que Braulio es mi mejor amigo. --Se bajo las gafas de sol que tenia sujetas en la cabeza y levanto el brazo, estaba indicandole a Monica y Braulio nuestra localizacion. Suspire e hice de tripas corazon. ?Que otra cosa podia hacer? La repelente pareja ya estaba alli, no tenia manera de escapar. El tren salia en media hora y nada iba a evitar que Monica y Braulio se subieran a el. --Que hay, tio --saludo Braulio a Alvaro. Hizo un estupido movimiento de boxeador, como si fuera a pegarle un punetazo en el estomago. --!Hola, chicos! --nos saludo Monica con su chillona voz. --Que hay. --Me costo sonreir, pero hice un gran esfuerzo y lo logre. En el fondo me sentia mal, no tenia una razon de peso para que Monica me provocara tanto rechazo. En realidad no me habia hecho nada, era solo que su desmedida felicidad, su voz aguda y su chachara constante me saturaban. Monica me ponia la cabeza como un bombo, cuando pasaba un rato con ella perdia hasta el sentido de la orientacion. --Nuestro AVE sale de la via siete --dijo Alvaro. --Pues a que esperamos, muchachos. !Marbella nos espera! --dijo Braulio. Se froto las manos en plan <>. Nunca habia conocido a nadie mas engreido y tonto profundo que el. --Suerte que quedaban billetes en preferente, dos horas y media de viaje en turista pueden convertirse en una eternidad --dijo Alvaro. Tuve que darle la espalda para que no me viera levantar el labio. El punto esnob de Alvaro, que en circunstancias normales me rechinaba, se multiplicaba por diez cuando estaba con Braulio. Si, ya teniamos a Pocholo y Borjamari en accion. --?En turista? ?Por quien me tomas? Uno tiene su pedigri --contesto Braulio. No, no lo iba a soportar. Iba a darme una subida de tension. Rece para que hubiera una amenaza de bomba y tuvieramos que desalojar inmediatamente la estacion. --?Pedigri? Espero que te hayas vacunado del moquillo… --murmure. --Ja, ja, ja, ja. !Me caes genial! !Eres una cachonda! --exclamo Monica. Di un respingo, lo dije tan bajo que pense que nadie me iba a oir. --Disfrutareis juntas, teneis muchas cosas en comun --dijo Alvaro. ??De verdad?? ?Pero que mierda de concepto tenia Alvaro de mi? --!En marcha, muchachos! --dijo Braulio. Monica entrelazo su brazo con el mio, ladeo la cabeza sonriente y me pregunto: --?Preparada, senorita? Con la mirada perdida, respondi: --Claro… Si. Echamos a andar hacia el control de seguridad, yo iba arrastrando los pies. Parecia que Monica me llevara por el corredor de la muerte, iba directa a recibir la inyeccion letal. --Se lo que te pasa, tienes el sindrome premenstrual --me diagnostico--. Yo tenia unos cambios de humor terribles hace anos. Lo mismo lloraba, que reia, que me ponia morada de comer alcachofas enlatadas. Son muy sanas, ?sabes? Pero me iban fatal para los gases, las tuve que dejar. ?Has probado la copa menstrual? Abri la boca para contestar, pero, antes de que pudiera hacerlo, respondio: --Yo tampoco. Me da grima meterme eso ahi, tiene forma de pequeno desatascador. ?Y si al sacarmela me succiona el chichi? ?Y si al metermela coge aire y no me la puedo sacar? No, a mi me gustan los tampones. ?Quieres uno? Llevo una caja en el bolso. --No tengo la… --El sol del sur es abrasador --me corto--. ?Que factor de proteccion solar usas tu? Una vez me dormi en la playa y se me derritieron las pestanas postizas. No podia abrir los ojos. !Lo pase fatal! Tuve que ir gateando hasta la orilla para echarme agua. Ma-dre mi-a… La semana iba a ser mucho mas dura de lo que pensaba. --?Has merendado? Espero que nos den algo de picar en el tren, necesito comer cada dos horas por mis ardores de estomago --me informo--. ?Que es eso? !Hala, mira, un pelirrojo! Que monos son, ?verdad? Parecen de plastilina. Me puse a repasar la tabla del seis, necesitaba desconectar como fuera de la realidad. --Lo vamos a pasar genial. Siempre he querido tener una hermana. Me habria gustado dormir en camas gemelas, hacernos confidencias y organizar fiestas de pijamas. Oye, ?te hace? !Podriamos hacer una en el hotel! --!?Que?! --Si, ya sabes; compramos dulces, vemos una comedia romantica y hablamos hasta la madrugada de los chicos. Anda, animate. !Sera genial! --!Alvaro! !?Tienes mi billete?! --exclame asustada. Me pegue rapidamente a el. Mi billete lo llevaba yo, pero necesitaba escapar de aquella espeluznante proposicion. --Ja, ja, ja. Se me ha pegado un chicle en el dedo pequeno del pie. !Hazme una foto, Braulio! !La voy a subir a Instagram! Capitulo 2 A veces un mortal tiene que resignarse a su destino. Hace lo que tiene que hacer y eso es todo, no hay mas. Lo habia estado pensando en el tren y me habia dado cuenta de que seguir con aquella actitud tan negativa no me iba a beneficiar. Al contrario, me iba a hundir todavia mas. Necesitaba centrarme en lo positivo y disfrutar de mis cortas vacaciones. Me lo merecia. Trabajaba de auxiliar medico en una clinica estetica, donde me pasaba entre ocho y diez horas diarias escuchando problemas estupidos propios del primer mundo, cosas como <>, o <>. ?<>? ?Pero que mierda de necesidad era esa? No se, uno puede necesitar un credito de Cofidis o que le bajen una caja de un altillo porque pesa. Pero, ?unos oblicuos? Por favor… Que dos guantazos bien dados necesitaban algunos. Si, eso si que era una necesidad vital. Alvaro llamo a la puerta del cuarto de bano y me pregunto: --?Te queda mucho? --No, salgo enseguida. Hacia alrededor de una hora que habiamos llegado al hotel. No estaba nada mal, era moderno, tenia piscina y estaba en primera linea de playa. Acababa de presenciar desde la ventana un precioso atardecer anaranjado sobre el mar. Quiza eso tambien me ayudo a relativizar la situacion, me quede mirandolo maravillada. --Date prisa, por favor, tengo el muneco asomando. Me quede con las mejillas metidas para dentro y la brocha del colorete levantada a un lado de mi cara. --?Que quieres decir? --le pregunte. --El muneco, ya me entiendes… --Pego la boca a la ranura de la puerta y bajo la voz--. No puedo seguir conteniendolo en el casillero de salida. Estela, amenaza con salir de manera inminente… Gire los ojos hacia un lado de manera subita. --Estela, abre de una vez… !Abre o me cago! Abri la puerta rapidamente y Alvaro entro como un rayo. Cuando hui por la puerta ya estaba sentado en el vater con los pantalones bajados y en el ultimo segundo vi una escena que me perturbo: habia echado la cabeza hacia atras y parecia extasiado de placer, tenia la boca abierta y solo se le veia el blanco de los ojos. Me puse el brazo sobre la cara mientras corria por el corto pasillo de la habitacion y oi como un <> se sumergia con todo su descomunal peso en el agua. Me tape los oidos, pero ya era demasiado tarde. La situacion fue tan desagradable que sospeche que jamas podria borrarla de mi memoria. Me sente en la cama y me refregue los ojos para, al menos, intentar hacerla desaparecer de mi retina. Hasta ese momento jamas habia oido decir a Alvaro una sola palabra soez, ni tampoco le habia visto en una situacion tan poco sexi. Pero eran cosas que pasaban, me console pensando que la convivencia era asi. --Estas guapisima. !Pero guapa, guapa de verdad! --exclamo Monica. --Oh… Gracias. Senti una punzada de culpabilidad, su efusivo halago sono sincero y volvi a sentirme fatal por ser incapaz de soportarla. Si, era como tener un grillo bajo la ventana una noche de insomnio, en la que hace un calor asfixiante que no te permite cerrarla. O como un vecino que escucha regueton a todo trapo mientras intentas ver el final de una pelicula. Pero en el fondo me sabia mal tratarla de manera borde. --?El vestido es de raso? Uy, de verdad, pero que mono es.
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