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Ana Martin Manas
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> es una palabra de solo seis letras, pero cabe tanto dentro de ella que, a veces, hasta asusta. Segun la RAE, significa experimentar sensaciones producidas por causas externas o internas. Cuando yo pienso en el verbo sentir me lo imagino como una uve enorme. Es estar en lo mas alto, caer de golpe hasta casi tocar el suelo para despues volver a resurgir y dejarte envolver por todas esas sensaciones que estallan en ti. Esta noche, la uve parece mas un guion plano, soso y sin subidas y bajadas excitantes. Unas horas antes... Abro la puerta de casa de un tiron y lo que me encuentro es a Marc con cara de perrito triste. --Siento llegar tarde. --La cosa no pinta bien esta noche, tenemos bajas, pasa. Y no se para que te disculpas, ya cuento con que vas a llegar tarde siempre. --Que poca fe tienes en mi --dice mientras pasa por mi lado y deja un beso en mi mejilla--. Bueno, me imagino que Sara y Evan no estan para fiestas, y Gabriel y Ada se quedan con el peque. ?Hugo y Carla? ?Edgar? --Espera, me acaba de llegar un mensaje de Carla. --Lo leo y suspiro haciendo pucheros--. Algo le ha sentado mal y dice que esta noche dormira abrazada a la taza del vater. --Mmm, pues Hugo estara cuidando de ella, me imagino. --Asi es... y Edgar me ha dicho que ya tenia plan. --Pues salimos tu y yo, anda que el problema... Antes de que se arrepienta, me pongo el abrigo --estamos en febrero y hace un frio que pela--, cojo mi bolso y lo arrastro hacia la calle. Llegamos a la discoteca, y no es que sea muy acogedora, pero la musica es buena y el ambiente tambien. Nadie lo puede negar, Marc es muy divertido y se anima a la primera de cambio. Siempre tiene una sonrisa plantada en la cara, es imposible que no te contagie su alegria vital. Ademas, el condenado baila muy bien. Suena una cancion de rock que le gusta y empieza a saltar fuera de si. Yo le sigo el rollo y nos ponemos a darlo todo hasta que nos dan casi las tres de la madrugada. Tras muchas risas y algo de alcohol, no se como, acabamos hablando de nuestras intimidades. Marc es asi, se puede hablar con el de cualquier cosa y sabes que no te va a juzgar. O, al menos, lo va a hacer como un amigo de verdad. --?Cuanto hace de la ultima vez? --?La ultima vez que me enrolle con un tio? --Miro al techo, pensativa--. Hara como un mes. ?Y tu, Marc? Que ya nos conocemos. --La semana pasada --dice orgulloso. --!Cabron! --Le doy un codazo de broma. --Los hay con suerte. --Me das un poco de envidia, pero es que solo me cruzo con capullos. Veo un tio que me parece guapo, me acerco, pero es que en cuanto abre la boca tengo que salir por patas. ?No puedo cruzarme con alguno decente de vez en cuando? A ver, tu eres normal. Si no me conocieras, ?nos iriamos a la cama esta noche? --Lo miro fijamente, el tira la cabeza hacia atras y suelta una carcajada. --Joder, vaya pregunta, Mir. ?En serio quieres que te conteste? --me dice cuando para de reir. --Va, no te cortes. ?Crees que estoy buena? --?Quieres la version <> o la version <>? --Quiero la version hombre adulto que sabe lo que quiere -- contesto seria, sin apartar mi mirada de la suya. --Que intensita estas hoy. --Se acerca a mi oido y, entonces, sigue hablando, tan cerca de mi oreja que puedo sentir como su aliento me acaricia--. Eres jodidamente sexi, tu cuerpo tiene unas curvas de infarto que cualquiera querria recorrer con su lengua y tu culo es perfecto. Si no fueras mi amiga, ahora mismo estaria suplicandote que me dejaras meterme entre tus piernas durante lo que queda de noche y, despues, una vez mas. Despacio, doy un paso atras. Se que mis ojos estan abiertos como platos mientras miro a Marc, que por una fraccion de segundo me observa serio, pero solo dura eso, ni un segundo, y entonces una sonrisa socarrona se extiende por su cara. A mi me entra la risa y ambos estallamos en carcajadas mientras nos doblamos por la mitad. Me acerco a el y le rodeo con un brazo la cintura para acercarlo y poder hablarle. --Eres un cabron. Me has puesto muy muy cachonda, ahora, si o si, voy a tener que buscarme un ligue para esta noche --le digo mientras el sigue riendo. Su brazo rodea mis hombros y me aprieta un poco para llamar mi atencion antes de hablar. --Creo que ya lo has encontrado. Lo miro confusa y el me senala con la cabeza hacia el otro lado de la pista. Me giro hacia alli y veo a un tipo que me mira sin disimular. --Lleva bastante rato observandote. --Oye, pues es bastante mono --le digo y me separo de el--. ?Que tal estoy? --Me aliso el vestido y doy una vuelta. Me mira durante unos segundos de arriba abajo con los ojos entrecerrados y la mano rascando su menton antes de contestar. --Explosiva. --!Genial! ?Sabias que me flipan las chupas de cuero? --Le guino un ojo y me doy la vuelta para ir a encontrarme con el bombon al otro lado de la pista. --Y no es por las motos, ?verdad? --grita Marc cuando me he alejado un par de pasos. --Es por Grease --le contesto por encima del hombro antes de seguir avanzando hacia mi objetivo. Al final, el tipo resulta ser un poco serio, pero besa bien. Bailamos algunas canciones, nos tomamos una copa hablando de todo y nada, cerca de la barra, y antes de darme cuenta, me esta preguntando si nos vamos a su casa. Acepto y le pido que me espere mientras aviso a mi amigo de que me voy. Cuando establezco contacto visual con Marc, veo que esta rodeado de mas gente. Desde lejos me pregunta con senas que tal ha ido. Le respondo con un gesto afirmativo y el sonrie. Entonces, hace otra senal empujando sus caderas hacia delante, para decirme si va a haber tema esta noche. <>, pienso, y asiento con mi cara mas perversa. Dejamos los gestitos y nos acercamos a un punto intermedio. --Enhorabuena, a ver si te da un buen meneo --me dice al encontrarnos. --Pinta bien, pero ya veremos. Oye, una cosa, cuando salgo con las chicas, siempre les envio la ubicacion cuando voy a casa de un tio. Mas que nada por si es un psicopata o un secuestrador, ?sabes? --Claro, pasamela cuando llegues alli. Cualquier cosa rara, me llamas. --Gracias, Marc. Lamento tener que dejarte, pero tu no estas del todo mal acompanado y yo necesito echar un polvo. --No te preocupes por mi, igual no eres la unica que se lo pasa bien esta noche. --!Suerte! --Le guino un ojo. --Ve, que tu amigo ya esta ahi, esperandote. --Hasta luego, bomberito --le digo mientras le doy un abrazo rapido. --Cuidate y pasalo bien. Nada mas entrar en casa del tipo, el coloca su mano en mi nuca y me atrae hacia su cuerpo. Nos besamos con ganas. Nuestras lenguas juegan entre si y sus manos empiezan a recorrer mi silueta para deshacerse de mi ropa. --Tranquilo, puedo hacerlo yo sola --le digo al ver que no acaba de acertar con la cremallera del vestido. Asiente y empieza a besarme el cuello mientras vamos dejando ropa tirada por el camino hasta que llegamos a su dormitorio. Me gusta como besa, asi que intuyo que lo que va a venir a continuacion solo puede ser bueno. Me acerco mas a el para sentir su cuerpo y dejo un reguero de mordisquitos en su cuello, provocandole un leve gemido de placer. Bajo mi mano hasta su entrepierna y puedo notar que lo acabo de poner a cien, porque, acto seguido, me empuja hacia la cama. Nos desprendemos de la ropa interior y veo que me mira avido. Yo sonrio, con la expectativa de que lo que puede venir a continuacion tiene que ver con su lengua, porque se coloca de rodillas sobre el colchon. Pero, claro, ya me extranaba a mi que todo fuera tan perfecto. Cuando me quiero dar cuenta, esta colocandose un preservativo. --Espera, ?no vas un poco rapido? --suelto sin pensarmelo dos veces. --?No quieres hacerlo? --Si, si quiero, pero... --?Entonces? <>. Pero eso, obviamente, no lo digo en voz alta. Me enderezo para besarlo de nuevo y es entonces cuando le cojo una de sus manos y la llevo hasta mi clitoris. El empieza a mover sus dedos, rapido y sin apenas mirarme. Por descontado, por mas que trato de concentrarme, no consigo sentir nada. O, al menos, nada agradable, porque mueve su mano como si estuviese completando una mision en algun videojuego; a la velocidad del rayo y, para mi desgracia, con nula destreza. <>. Decido que tengo que parar esto cuanto antes, asi que intento otra cosa que pueda excitarme. Coloco mi mano sobre la suya y empiezo a guiarlo sobre mi clitoris. Con la otra, agarro su pelo y lo acerco a mi cuello, indicandole lo que quiero que haga. Mi companero de cama, sin embargo, tiene bastante prisa y, en pocos minutos, se coloca sobre mi de nuevo y acopla sus caderas a las mias. Al principio no esta nada mal, se mueve decidido. Con cada uno de sus envites mi cuerpo se levanta un poco del colchon y una sensacion conocida empieza a serpentear por mi cuerpo. Me emociono y me dejo llevar. Pero la sensacion de <> se desinfla cada vez mas y, cuando me doy cuenta, oigo un grunido seco, y el tipo --Angel, ha dicho que se llama-- se desploma a mi lado. --Ha estado muy bien, Miranda --suelta con un hilo de voz tras un largo suspiro. <>. --Igual podriamos hacer otra cosa --propongo con mi mejor cara de nina buena--. Pero antes, voy un segundo al bano. El asiente y lo pierdo de vista por un momento cuando accedo al lavabo para asearme un poco. <>, pienso mientras vuelvo a la habitacion. Cuando me acerco a la cama, recibo mi respuesta en forma de sonoro ronquido. --!Joder! Pues vaya plan... --susurro. Seguramente, ahora mismo debo de tener cara de idiota mientras miro el techo de la habitacion de este tio. Estoy a punto de levantarme cuando pienso que primero echare una cabezadita; hace mucho frio en la calle y ahora mismo no me apetece salir. Pongo la alarma muy temprano en el movil y cierro los ojos mientras suspiro y espero a que me entre el sueno. Con lo bien que me hubiera ido un orgasmo para dormir a gusto. Cuando ya he dado como doscientas vueltas, intentando encontrar la posicion correcta para dormir, oigo unas voces amortiguadas. Debe de ser la companera de Angel, antes me ha explicado que compartia piso. Oigo que entra en la habitacion de al lado cerrando de un portazo y, despues, un golpe sordo y un jadeo. !Joder! Alguien la ha empotrado contra la puerta. Que suerte tienen algunas. Ella si ha sabido elegir. El rato pasa y un sinfin de gemidos, golpeteos de la cama contra la pared y demas sonidos llegan hasta mi. <>. No puedo dormir y, ademas, me estoy poniendo muy tontorrona mientras escucho a esos dos follar. ?Quedaria muy mal si pido unirme a la fiesta? Si, creo que si. Escondo la cabeza bajo la almohada e intento dormirme. *** La alarma del movil me despierta. La apago, echo una mirada rapida al lado y veo que Angel sigue dormido. Recojo mis bragas y mi sujetador y me los pongo antes de abandonar la habitacion. Cuando salgo, visualizo algunas de mis cosas en el suelo del comedor y avanzo hasta que... lo veo. Me refiero al hombre al que he escuchado darlo todo al otro lado de la pared. Esta de espaldas, en calzoncillos, y haciendo el desayuno en la cocina americana. Joder, te folla como Dios y despues te lleva el desayuno a la cama, eso si que es nivel para un ligue de una noche. --?Quieres un zumo? Estoy haciendo unas tostadas --pregunta sin darse la vuelta. Su voz suena ronca por el sueno o, mas bien, por la falta de el. Por mi mente pasan mil expresiones por minuto y ninguna de ellas es apta para menores de dieciocho. Este tio debe de ser deportista o algo, porque menuda espalda. Dios santo, madre del amor hermoso, virgen de las angustias, pecadores benditos. Fijo que tiene la uve de los oblicuos marcada. <>. Cojo uno de los vasos que hay preparados en la isla mientras, en mi cabeza, estoy imaginando como sera por delante. Entonces, se da la vuelta. Y eso que veo si que es una UVE de vertigo como Dios manda. Pero subo la mirada y... --!!Marc!! --Escupo el zumo de la impresion. Para ser mas exactos, lo escupo encima de su pecho. --!!Miranda!! ?Que cono haces aqui? --grita el, casi tan sorprendido como yo, mientras se seca con un trapo. --Podria decir lo mismo de ti. --?Deberia taparme? Ahora que se que es Marc, no se si es muy buena idea estar en ropa interior delante de el. Bah, demasiado tarde. En ese momento, el acaba de limpiarse el pecho y veo que me observa. Recorre mi cuerpo con la mirada. Empieza por la punta de los dedos de mis pies y sube muy lentamente, mucho, tanto que me pone un poco nerviosa y trago saliva con dificultad. Algo raro en mi, pero es que me esta dando un buen repaso. Cuando por fin nuestros ojos se encuentran, durante una decima de segundo, los suyos parecen nublados por algun motivo, pero rapidamente parpadea y habla de nuevo: --Madre mia, que casualidad encontrarnos aqui. Pero ?fue bien? Me enviaste un mensaje con la ubicacion y un triste ok y no sabia si tenia algo mas que descifrar de eso. No pense en abrir y mirar la ubicacion a no ser que me necesitaras, si no, hubiera sabido que estabas aqui. --Mejor no hablemos, Marc, tengo que salir de aqui antes de que se despierte ese tio. --Eso suena a polvo frustrado... --Estoy segura de que tu no puedes decir lo mismo, porque, joder, nene, cortate un pelin, que se habra enterado todo el vecindario de tus tres rounds sexuales. --Joder, Mir, ?me has escuchado? --Yo y estoy segura de que algunos mas --me burlo un poco y el bromea dandome un codazo--. !Mierda, mierda! --Digo en voz baja al ver que Angel sale de la habitacion. Paso al otro lado de la isla y me agacho para ocultarme de el. Marc esta justo delante de mi, tratando de disimular. --?Una tostada? --suelta Marc a modo de saludo para Angel. --No, gracias. Tengo que irme al hospital, me acaban de llamar para hacer una guardia. --Vaya, que te sea leve. --Si todavia esta aqui la pelirroja, dile que la llamare. --Vale. --La tengo loca. --?Tu no tenias prisa? --contesta Marc, que acaba de poner los ojos en blanco tras su comentario. --Venga, hasta luego. --Gilipollas --decimos Marc y yo al unisono cuando ya no puede oirnos. --Ya puedes salir --me dice Marc, cuando se oye la puerta de entrada cerrarse. --Yo solo te pido que la proxima vez procures no ponerme el paquete en toda la cara. --Solo estaba tratando de que no te viera. --!?Que cono estais haciendo?! ?En serio? ?Te lo haces conmigo y luego con ella en mi puta cara? --vocifera alguien por detras de Marc. --!No es lo que estas pensando! --se defiende el. --Si, claro, ?y me explicas que esta haciendo esta chica de rodillas a la altura de tu polla? !Capullo! --Calmate, es solo un malentendido --habla Marc en tono conciliador. --Y tu no puedes ser mas guarra, ?no? --Esta vez, la chica se dirige a mi--. ?Follaste anoche con mi companero de piso y ahora te quieres tirar a mi chico? --A cualquier cosa le llaman follar... Mira, guapa, yo me acuesto con quien me da la real gana --suelto al verme insultada. --?Por que le hablas asi? No te ha hecho nada, y no alucines, que no soy tu chico. Lo de anoche estuvo de puta madre, pero ya esta, creia que habia quedado claro --le dice Marc. --Pero ?como puedes...? !Largo de mi casa! !Fuera! Nos empuja de malas maneras y nos echa, literalmente, del piso. Marc coge al vuelo su ropa, que estaba apoyada en el brazo del sofa, y yo logro coger mi bolso antes de cruzar la puerta. --!Eh, eh! Pero dame el resto de mi ropa --grito, dando golpes en la puerta. --Por favor, Alejandra, te juro que has malinterpretado la situacion --vuelve a justificarse Marc, a ver si nos da la ropa que nos falta. --Ese vestido era mi favorito y el que mejor me quedaba. --Hago pucheros. --Doy fe de ello --dice en tono de broma Marc mientras se pone los pantalones. --!Marc! --Le suelto un manotazo. En el rellano del edificio y en bragas, lo miro sin saber muy bien si reirme o llorar. Cuando nuestras miradas se cruzan, estallamos en carcajadas porque la situacion no puede ser mas surrealista. --?Y ahora que hacemos? --?Pedimos un taxi? --sugiere. --Estoy en bragas y sujetador. --Toma, ponte mi camiseta. --?Y si llamamos a alguien de confianza y le pedimos que nos traiga algo de ropa? --propongo. --Buena idea, seguro que Evan estara despierto, suele salir a correr temprano. --Dale. Marc saca su movil del bolsillo del pantalon y empieza a llamar. --Tio, necesito que me hagas un favor. --... --Si, si, ya se que esto te recuerda a algo. Te debo una, pero, por favor, ven a buscar a este pobre infeliz. Te mando la ubicacion. Ah, y traete algo de ropa, por favor. Los pantalones mas pequenos que tengas y un par de sudaderas. --... --Mejor no hagas preguntas. *** Evan aparece en menos de quince minutos y, cuando nos ve juntos, medio en cueros, tiritando de frio y andando con el mayor de los sigilos, se descojona en nuestra cara. --Pero ?que...? Me teneis que explicar esto o sacare mis propias conclusiones y sera mucho peor --dice Evan--. Teneis ropa en el asiento de atras. --Gracias, Evan, Dios te lo pague con lo que sea que te haga feliz en esta vida --le digo mientras me contorsiono en el asiento de atras para ponerme los pantalones. --Pero ?me vais a contar que haceis en pelotas en la otra punta de Barcelona? --Pues no te lo vas a creer... --empieza a explicarle Marc.
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