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Una larga e intensa relacion habia dado como resultado que Scarlett finalmente se embarazara de su esposo Aukai, principe de la isla Eltah. Lo habia mantenido en secreto para esperar el momento adecuado y revelar la sorpresa. Lo habian estado intentando durante mucho tiempo, pero parecia que la naturaleza no estaba de acuerdo con proveer esta bendicion para la princesa Scarlett. Aunque hacia alarde de estar enamorada del principe Aukai, en el fondo, Scarlett vivia una completa farsa, ya que, no habia logrado realmente enamorarse y compenetrarse con el hombre con el que se habia casado a los 19 anos de edad, cuando habia llegado a la isla. En la necesidad de poder mantenerse estable en aquel lugar, habia podido mas el interes que otra cosa, ya que, el corazon de Scarlett siempre habia estado caracterizado por ser frio, calculador y muy conveniente. Tras la erupcion del volcan Awoke, la chica habia tenido que escapar, dejando atras a familiares y amigos, los cuales, habian muerto debido a la lava ardiente que habia cubierto gran parte de la isla Siham. El lugar que habia sido su hogar durante toda su vida, habia quedado reducido a escombros. Llamas y dolor era lo que habia quedado atras, mientras la chica habia escapado al mar. La corriente la habia llevado directamente hasta la isla central, Eltah, la mas grande de una cadena de 8 islas, las cuales forman un circulo perfecto con su centro alli. Scarlett era la princesa de aquella isla, y siempre se le habia hablado sobre su posible matrimonio con el principe de Eltah. Ante esta situacion, consideraba que no era correcto tener que contraer nupcias con un hombre que ni siquiera conocia, pero era su unica opcion. Cuando habia llegado a la isla siendo simplemente una jovencita moribunda, rapidamente la habian reconocido y la habian atendido como se merecia una princesa. Tan solo dos meses despues de su llegada a Eltah, ya el matrimonio estaba arreglado, ya que, el padre de Aukai estaba muy enfermo y requeria de alguien que se encargara de dirigir la isla de manera adecuada. Se llevaban labores de extraccion de diamantes y de oro, por lo que, era una familia adinerada, poderosa, una monarquia que mantenia el equilibrio en el resto de las islas. Cuando Siham fue devastada, habian propuesto la posibilidad de recuperarla, de realizar labores de limpieza, restructuracion, y convertirla en un lugar totalmente renacido de las cenizas. Pero la princesa Scarlett se habia negado rapidamente, ya que, decia que aquel lugar debia ser respetado, pues bajo los escombros solo habia muerte. No seria correcto convertir el lugar en un paraiso construido sobre los restos de aquellos que habian fallecido por la tragedia. Tampoco tenia demasiado sentido intentar construir en un lugar inestable, es decir, el volcan podria hacer erupcion en cualquier momento de una manera inesperada como lo habia hecho aquella vez. Los habia sorprendido a todos en medio de la madrugada, la tierra se estremecio, parecia que una gran explosion se genero en el centro de esta, mientras algunas de las viviendas en el poblado se derrumbaban ante el terremoto. Algunos apenas habian logrado salir de sus casas. Parecia que una gran roca habia mantenido al volcan silenciado, pues toda aquella energia finalmente habia sido liberada de forma repentina. La expulsion lanzo escombros por todos los alrededores, destruyendo algunas casas, las cuales recibieron el impacto directo de grandes rocas. Estas devastaron el lugar en unos pocos minutos. Habia sido la peor tragedia que se habia vivido jamas en aquellas islas, las cuales. Hubo pocos sobrevivientes que habian sido perdonados por el mar. Quiza, una de las mas afortunadas habia sido Scarlett, ya que, su futuro estaba asegurado al lado del principe de Eltah. Este, tampoco estaba demasiado de acuerdo en contraer nupcias con ella, pues siempre habia estado enamorado de una de las pobladoras de aquel lugar. Habia dejado aquel corazon roto para dirigir su atencion unica y exclusivamente a Scarlett, la cual, se convertiria en su princesa y futura reina. Esto significaba, que aquella relacion estaba levantada sobre las bases de la mentira y el engano, ninguno de los dos poseia un verdadero sentimiento hacia el otro, pero mantenian las apariencias para evitar un colapso de la monarquia. A los 19 anos de edad, cuando habia llegado a la isla, Scarlett no tenia la menor idea de lo que era el esfuerzo. Siempre habia sido tratada como una princesa en su tierra, por lo que, el ego, la arrogancia y la soberbia, eran tres elementos caracteristicos de su personalidad. Trataba a las personas con mucho desprecio, los hacia sentir humillados, menos importantes que ella si no tenian sangre real. Su personalidad era tan desagradable, que habia logrado reunir una gran cantidad de adversos en el pueblo. Las personas ya no la respetaban, y sentian un profundo rechazo cuando ella acompanaba al principe Aukai durante sus visitas a las calles de Eltah. Era evidente que nadie queria a Scarlett, y esto, profundizaba aun mas el rechazo que sentia al principio, el cual, estaba consciente de la belleza de su esposa, pero no tenia la mas minima conexion con su personalidad. A pesar de que era un principe guerrero, hijo de grandes peleadores, el corazon de Aukai siempre se habia caracterizado por la piedad, pero habia algo que no soportaba, y era la mentira. Era un poco ironico que tuviera que levantar una relacion amorosa precisamente sobre las bases del engano, pues este aspecto podia destruir por completo la vida de las personas. Podria perdonar cualquier cosa menos una mentira, y el mismo, estaba edificando un amor que tenia columnas muy fragiles. Habian pasado cuatro anos desde su llegada a la isla central de Eltah, alli, la princesa habia desarrollado una vida normal, tratando de salvar un matrimonio que podria asegurar su futuro. Las riquezas de la familia de Aukai, eran incalculables, habian logrado generar la extraccion de grandes toneladas de oro y diamante, siendo una de las islas mas poderosas de todo el planeta. Pero se habian mantenido cerrados al mundo, ya que, si se dedicaban de realizar actividades comerciales con otras tierras, posiblemente serian invadidos. La fuerza belica de Eltah, no podria contener el ataque de los habitantes de la tierra media, los cuales, utilizaban armas de fuego muy potentes, con las cuales, podrian exterminar a absolutamente a todos los habitantes de las 8 islas sagradas. Scarlett era una de las personas que constantemente trataba de cambiar esto, tratando de hacer entender a Aukai, que la unica manera de poder crecer economicamente, era vinculandose con otras civilizaciones. Este, se rehusaba tremendamente, ya que, ponia en practica los valores que fueron inculcados por su familia. Nunca podria poner en riesgo la vida de los habitantes utilizando como pretexto la intencion de evolucionar como civilizacion. Era feliz, mientras hubiera recursos naturales tan bondadosos como se los habian proporcionado los dioses, entonces no tendria problemas en seguir manteniendo las cosas en la bonanza caracteristica. Todos y absolutamente cada uno de los pobladores de Eltah, eran felices, nunca faltaba alimento en sus mesas, todos tenian trabajo, siempre habia algo que hacer, la miseria era inexistente en aquellas tierras. Desde siempre, el padre de Aukai, se habia preocupado porque todos en aquel lugar, pudiesen acceder a las riquezas de sus tierras, no habia egoismo, era una buena monarquia. Pero parecia que la codicia, la arrogancia y ego de Scarlett, tarde o temprano pondria en riesgo esta situacion de estabilidad, la cual, podria comprometer la vida de muchas personas. En la isla de Eltah, no habitaban demasiadas personas, eran al menos unos 2000 habitantes en total, ante lo que, era facil controlar las actividades en esta region. En el resto de las islas, las mas pequenas, apenas y alcanzaban poblaciones de 500 o 600 personas, ante lo que, la organizacion era mas simple. Habia cierto trafico de barcazas cargadas de alimento y gramos de oro que se trasladaban hacia algunas islas para tratar de potenciar su economia. Eltah funcionaba como una especie de atomo, con un gran nucleo lleno de riquezas y a su alrededor, las pequenas islas desarrollaban algunas actividades de artesania, elaboracion de armas y obtencion de recursos, que eran regresados como forma de pago para las contribuciones de la isla central. De las 8 islas, solo una habia caido, esta, era el lugar del gran volcan Awoke, un imponente monstruo natural, que simplemente estaba alli para recordarle a los hermanos del poder de la tierra podria acabar con ellos en el momento que lo deseara. Scarlett, no habia desarrollado aquella personalidad en vano, su propio padre, se habia dejado llevar por aquellos deseos de poder, y habia estado elaborando mas armamento, sentia la necesidad de poder reclamar el poder de la isla de Eltah, y de forma inesperada, aquel castigo, habia acabado por completo con sus planes, recursos y hasta con su propia vida. Habia una presencia espiritual muy fuerte en esta cadena de islas. Parecia estar protegida por los espiritus ancestrales, los cuales, canalizan todo su poder a traves de seres especiales, los cuales eran llamados sacerdotisas o hechiceros. Estos poderes, eran distribuidos en los diferentes elegidos de maneras distintas, asi que, habia adivinos, curanderos e inmortales. Se decia que solo debia haber un elegido por isla, por lo que, era muy extrano poder ver a uno de estos seres interactuando con otro de los sagrados. En el caso de la isla Eltah, habitaba una sacerdotisa adivina, la cual, era consultada con cierta frecuencia por algunos de los habitantes. Su corazon era oscuro, era malvada, pero la precision con la que podia narrar los eventos que sucederian, era impecable. Su nombre era Kainoa, era lujuriosa, con un terrible gusto por el sexo, el cual, la hacia esclava de sus propios deseos. Conquistaba a los hombres con sus atributos, ya que, era muy hermosa y exuberante. Kainoa se habia encontrado con Scarlett dias atras antes de los eventos que cambiaron para siempre la vida de la princesa. Si esta hubiese escuchado las advertencias de la sacerdotisa, quiza, las cosas hubiesen dado un giro inesperado a su favor, pero la incredulidad, escepticismo y personalidad arrogante de Scarlett, le habian hecho cerrar sus oidos ante cualquier advertencia. Mientras Scarlett caminaba por una de las calles de Eltah, llevando algunas frutas en sus manos, Kainoa se habia cruzado en su camino repentinamente. Le habia colocado la mano en su vientre, mientras sonreia de una manera agradable y pronuncio unas palabras que habian generado escalofrios en la princesa. -- Tres meses tiene el nino que llevas en tu interior. Cuidalo muy bien, o de lo contrario, tus suenos no se materializaran. -- Dijo la sacerdotisa. -- No te atrevas a tocarme nuevamente, bruja. Vuelve a la selva de donde nunca deberias salir. -- Dijo Scarlett mientras limpiaba sus ropas. -- Escucha lo que te digo, jovencita. Puede que creas que todos estamos a tus pies. Pero tu arrogancia, te llevara a la desgracia. -- Dijo la sacerdotisa. -- No perdere mi tiempo hablando con una bruja. Solo enganas a los inocentes manipulando sus esperanzas. -- Dijo Scarlett. La mujer, sonrio de una manera macabra, y se alejo de alli, cubriendo su cabeza con lo que parecia ser un manto de color marron, ya que, no solia revelar su presencia ante todos. La mayoria de los pobladores de Eltah, se acercaban a ella haciendo consultas, algo que era realmente extenuante, y no era un servicio gratuito. La personalidad de Kainoa tambien era codiciosa, necesitaba el dinero, y siempre habia estado detras de las riquezas de la familia real. Pero el propio padre de Aukai, la habia desterrado hacia la selva, ya que, enganaba de una manera descarada a las personas, aprovechandose de sus esperanzas. Scarlett sintio algo de miedo, pero no hizo demasiado esfuerzo por tomar en cuenta las palabras de la sacerdotisa. Continuo con sus actividades de manera natural, compro algunas verduras, hizo una revision de algunas frutas en el pueblo y volvio a su palacio. Su vida era tranquila, y aunque detestaba enormemente a los habitantes de Eltah, trataba de ser tan hipocrita como podia, ya que, su futuro dependia de respetar a los pobladores del pueblo que era dirigido por su esposo. El nino que llevaba en su vientre, era la unica esperanza de poder salvar a aquella relacion, pues, de lo contrario, estaria sumida en una depresion y tristeza. Si se dedicaba a su hijo, al menos tendria algo en que ocupar su mente y su tiempo. No tendria que soportar todo el tiempo a su esposo, por el cual, no sentia absolutamente nada sincero. Tres dias exactamente, habian pasado desde el dia en que Scarlett habia tenido aquel encuentro con la sacerdotisa Kainoa. Ella le habia hecho una advertencia muy clara acerca del peligro que podia correr si no cuidaba al nino que tenia en su vientre. Una de las actividades favoritas de Scarlett durante el atardecer, era ir a recoger flores y frutos frescos en la selva. Se acercaba solo hasta el bosque del perimetro, ya que, sabia que, en el interior de aquellos territorios, habitaban hombres malvados y agresivos, los cuales, se protegian con la naturaleza. Esta, no habia avisado a absolutamente a nadie que iria hasta alla sola, ya que, le gustaba su espacio, y detestaba tener que informar absolutamente todo lo que hacia a su esposo. Se habia escapado, necesitaba un tiempo libre, un momento a solas con sus pensamientos, ya que, constantemente estaba recibiendo instrucciones de Aukai, o rodeada de sirvientes.
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