• un lugar en el mapa - Shaun Prescott

    https://gigalibros.com/un-lugar-en-el-mapa.html

    Shaun Prescott es uno de los autores revelacion de la nueva literatura australiana: un relato alegorico y mordaz sobre la desaparicion de los pueblos.

  • UN LUGAR EN EL MAPA | SHAUN PRESCOTT | Casa del Libro

    https://www.casadellibro.com/libro-un-lugar-en-el-mapa/9788439736905/11212633

    Sinopsis de UN LUGAR EN EL MAPA. Shaun Prescott es uno de los autores revelaci#n de la nueva literatura australiana: un relato aleg#rico y mordaz sobre la ...

  • Un lugar en el mapa Versión Kindle - Amazon.es

    https://www.amazon.es/lugar-en-el-mapa-ebook/dp/B0849PPXCG

    Esta novela gira en torno a uno de esos lugares anónimos y a un escritor sin nombre que acaba de mudarse allí para terminar un libro sobre las poblaciones ...

  • UN LUGAR EN EL MAPA - LAIE

    https://www.laie.es/llibre/un-lugar-en-el-mapa/9788439736905/923131

    Esta novela gira en torno a uno de esos lugares anónimos y a un escritor sin nombre que acaba de mudarse allí para terminar un libro sobre las poblaciones ...

  • Un lugar en el mapa | Prescott, Shaun | 978-84-397-3690-5

    https://www.pasajeslibros.com/libros/un-lugar-en-el-mapa/9788439736905/

    Lugar de edición Barcelona, España Fecha de edición marzo 2020 · Edición nº 1. Idioma español. EAN 9788439736905 272 páginas. Libro encuadernado en tapa ...

  • Un lugar en el mapa - Shaun Prescott -5% en libros | FNAC

    https://www.fnac.es/a7214427/Shaun-Prescott-Un-lugar-en-el-mapa

    Un lugar en el mapa, libro o eBook de Shaun Prescott. Editorial: Literatura rh. Los mejores precios en libros y eBooks.

  • un lugar en el mapa - Librería Sinopsis

    https://www.libreriasinopsis.com/libro/un-lugar-en-el-mapa_339049

    UN LUGAR EN EL MAPA, PRESCOTT, SHAUN, 20,10€. ... escritor sin nombre que acaba de mudarse allà para terminar un libro sobre las poblaciones que han perdido ...

  • UN LUGAR EN EL MAPA - SHAUN PRESCOTT - Agapea

    https://www.agapea.com/Shaun-Prescott/Un-lugar-en-el-mapa-9788439736905-i.htm

    5 mar 2020 — Comprar el libro Un lugar en el mapa de Shaun Prescott, Literatura Random House (9788439736905) con ENVÍO GRATIS desde 18 € en nuestra ...

  • UN LUGAR EN EL MAPA. PRESCOTT, SHAUN ...

    https://www.altair.es/es/libro/un-lugar-en-el-mapa_177301

    UN LUGAR EN EL MAPA, PRESCOTT, SHAUN, 20,90€. ... escritor sin nombre que acaba de mudarse allí para terminar un libro sobre las poblaciones que han perdido ...

  • un lugar en el mapa - Librería Jarcha.

    https://www.libreriajarcha.es/libro/un-lugar-en-el-mapa_314589

    UN LUGAR EN EL MAPA, PRESCOTT, SHAUN, 20,90€. ... escritor sin nombre que acaba de mudarse allí para terminar un libro sobre las poblaciones que han perdido ...

  • Un lugar en el mapa - Libro Mundo

    https://libromundo.es/un-lugar-en-el-mapa/

    16 may 2021 — “El libro Un lugar en el mapa de la editorial LITERATURA RANDOM HOUSE con ISBN 978-84-397-3690-5 ( EAN 9788439736905 ) fue publicado por ...

  • Lady Johanna de Sophie Saint Rose

    https://gigalibros.com/lady-johanna.html

    Johanna, sentada ante su tocador, se miro al espejo. No se podia creer lo que habia cambiado su vida en dos meses. De ser una de las herederas mas perseguidas de Londres y ser agasajada por innumerables pretendientes, ahora se encontraba casada con un bruto escoces que no tenia ningun tacto y que la trataba como si fuera un estorbo. Le odiaba. Le odiaba tanto que ni siquiera soportaba su presencia. Y eso le habia quedado claro a su reciente esposo, ya que no le dirigia la palabra desde que se habian mudado a la nueva casa, que su suegro les habia regalado en Mayfair, cerca de Hyde Park. De hecho, casi no le veia. Por la manana se levantaba muy temprano para no coincidir con el y cuando no estaba cabalgando en el parque, se iba de visitas con su madre y con su amiga Liss, la duquesa de Stradford. En los unicos momentos que no podia ignorar del todo su horrible presencia, era en las cenas o en los bailes a los que tenian que acudir, donde su indiferencia a su apuesto marido, fomentaba los rumores de que su matrimonio no era tan dichoso como el de su querida amiga. Se miro su espeso cabello negro, que caia por su espalda hasta las caderas. Cansada despues de acudir a otro aburrido baile esa misma noche, cogio el cepillo y se lo paso por el cabello en su rutina antes de acostarse, como su madre le habia inculcado desde pequena. Apreto los labios al ver que sus ojos color miel parecian apagados y sin brillo. Incluso tenia ojeras. Eso tambien se lo debia a su horrible marido, porque desde que le habia conocido, no habia vuelto a dormir bien ni una sola noche, cuando ella siempre habia dormido como un tronco. Maldijo su caracter impulsivo que la habia metido en ese lio. Tenia que haberle hecho caso a sus padres y casarse con alguno de los amigos de su padre en Boston. Se lo habian aconsejado mil veces, pero al ver que su unica hija no se decidia, la habian obligado a ir a Londres pues a su madre le habia hecho ilusion que su hija se convirtiera en Lady. --Mi hija debe ser condesa o duquesa --decia Rose Sherman a su marido, que harto de escucharla, le dio la razon preparando su viaje a Europa en uno de sus barcos. Eran ricos, muy ricos y en cuanto llegaron a Londres les abrieron las puertas de las casas mas importantes. En una de las fiestas, que habian celebrado en la opulenta casa que su padre habia comprado, habia conocido a Liss. Sonrio pensando en su amiga. Liss era soltera el dia que la conocio, pero no tardo en casarse con uno de los solteros mas cotizados de Londres, el Duque de Stradford. Gracias a ellos, conocio a su suegro el Marques de Wildburg y en una aventura maravillosa fueron todos a Escocia para buscar a su primogenito, acompanados de la dama de compania de Liss, Susan Gibson, que hacia de su carabina en las posadas donde descansaban, compartiendo su habitacion. Fue una sorpresa para Johanna, que cuando llegaron a una de esas posadas a descansar a pocas millas de su destino, conociera a un atractivo escoces que le robo el aliento en cuanto sus ojos cayeron en el. Era tan apuesto y descarado, que le robo el corazon. ?Que podia hacer ella para conseguir su atencion y de paso casarse con el? Hacer que la sorprendieran en su lecho. No fue dificil. El escoces le abrio la puerta en cuanto llamo y con una sonrisa la miro de arriba abajo, repasando su recatado camison blanco. Johanna en su afan por conquistarlo, sonrio y le dijo con voz ronca mirando sus preciosos ojos verdes --Milord, ?os gustaria pasar la noche conmigo? Intrigado se hizo a un lado y Johanna entro en la habitacion lentamente sin dejar de mirarle a los ojos. James cerro la puerta sin dejar de mirarle y dijo con voz ronca --Desnudate. Johanna se sonrojo recordando con que descaro se habia levantado el camison quedandose en cueros. Habia tirado el camison al suelo al lado de la cama y puso las manos en jarras mientras el la miraba sin mover el gesto. --Ahora te toca a ti. James elevo las manos agarrando su camisa por la espalda y se la saco rapidamente. Todavia recordada como su corazon latia alocado en su pecho al ver su maravilloso torso. Estaba tan absorta en ese musculoso pecho y en el vello rubio que tenia entre sus pectorales, que ni se fijo en como se quitaba los pantalones, quedandose desnudo ante ella. Cuando dio un paso hacia Johanna, el movimiento entre sus piernas la hizo mirar hacia abajo, tragando saliva al ver su sexo erecto. No era una mojigata, sabia lo que era el sexo por sus correrias por los muelles de Boston, pero ver aquel miembro en todo su esplendor, casi la mareo de deseo. El le levanto la barbilla para que lo mirara, provocando que su roce le erizara la piel y separo sus labios deseosa de sentirle, dandose cuenta que le sacaba la cabeza. James se agacho lentamente, pero Johanna reacciono y carraspeo antes de que besara sus labios. --?Te gustan los juegos? --?Juegos? --Confundido se aparto mirandola con el ceno fruncido. -- ?Que hablas de juegos, mujer? --Me gustaria atarte a la cama. James se echo a reir y miro a su alrededor. --?Y con que pensabas hacerlo? --Con las cuerdas que he dejado al lado de la puerta. ?Las recoges? Su escoces divertido abrio la puerta, echandose a reir al verlas en el suelo donde ella habia dicho. Las cogio y volvio con ella, que se habia sonrojado de gusto mirandole el trasero. --Y eso que aparentas ser una doncella. La vida no deja de darme sorpresas. --Tumbate, amor. --dijo ella pensado que debia darse prisa para que todo estuviera preparado cuando su amiga la buscara. James aparto las sabanas y se tumbo boca arriba separando las piernas. -- Soy muy fuerte, preciosa. Deberas emplearte a fondo. --Tranquilo --dijo maliciosa--. Te aseguro que la pasion no hara que te sueltes. Eso te lo garantizo. El se la comio con la mirada y Johanna se acerco a la mano que tenia mas cercana. --?Y que piensas hacerme? --Algo que te encantara. No seas impaciente --dijo concentrada en el nudo marinero que le habia ensenado Robert en el puerto de Boston cuando era nina--. Vas a quedar muy contento e impresionado. --Eso ha sonado prometedor. Espero que uses la boca. Tienes unos labios muy apetitosos. Le miro sorprendida, porque nadie se lo habia dicho nunca. --?Eso crees? --Estoy deseando probarlos. Ven aqui. No podia distraerse. Liss o su dama de compania Susan llegarian en cualquier momento, asi que en cuanto aseguro el nudo, rodeo la cama para atar su otra muneca. James tiro de su agarre e hizo una mueca-- ?Me ensenaras como lo has hecho? --Te ensenare lo que tu quieras --dijo terminado el segundo nudo--. Tendremos tiempo para eso y para mucho mas. James se echo a reir divertido y levanto la cabeza para ver como ataba su tobillo. --Interesante tecnica. Sonrio aliviada porque ya era suyo y se acerco al otro tobillo. --?Sabes, carino? Me has impresionado. --Me pasa mucho. Johanna se echo a reir asintiendo. --Tan apuesto, tan varonil... me has alterado el corazon. --El sonrio jactancioso y Johanna termino el nudo acariciando su pierna lentamente hasta llegar a su rodilla. --Me has impresionado tanto, mi amor, que he decidido que nos casemos. James perdio todo el color de la cara al ver que cubria su enorme cuerpo con una sabana y se sentaba a su lado cubriendose tambien. --No tiene gracia. --Tiro de sus ligaduras con fuerza y Johanna se echo a reir. --!Sueltame, muchacha! --Me llamo Johanna. --le aparto un mechon rubio de la frente antes arrancar un pedazo de sabana. Ella puso cara de pena. --Carino, se que esto no te va a gustar tanto, pero... El abrio la boca para gritarle cuando ella le amordazo. --Lo hago por tu bien. Tampoco te gustaria que nos vieran en esta situacion todos los de la posada. --Sonrio encantada antes de besar su frente. James se movio con fuerza haciendo temblar la cama y Johanna dio un golpe en la pared provocando que su presa abriera los ojos como platos antes de volver a tirar de las cuerdas intentando liberarse. --No sufras, manana todo estara arreglado y empezaremos nuestra maravillosa vida juntos. --Ella estaba inmensamente feliz sabiendo que estaba en lo cierto. Ese hombre debia ser suyo si o si. Despues de todos los peleles que habia conocido en Londres, no se le escapaba. El resultado fue el que Johanna preveia. Susan, que era la encargada de su proteccion durante el viaje, al darse cuenta que no estaba en la cama, comenzo a buscarla y cuando la escucho pasar ante la puerta dijo simplemente --!Estoy aqui! La cara de Susan cuando abrio la puerta y la vio, fue de risa, pero los gritos de la mujer no se los esperaba, pues aparecio el Duque, el Marques de Wildburg y su amiga Liss, que protesto porque tendria que casarse con un escoces. Evidentemente tenian que casarse, pero su escoces se resistia diciendo que no habia hecho nada y no tenia por que. El duque, el conde y el sacerdote le convencieron para que cediera. Y se habia encontrado casada con su gigante, que estaba realmente de mal humor. No, no estaba de mal humor, estaba furioso. Durante unos dias la trato realmente mal y de manera humillante. La dejaba en ridiculo cada vez que podia e incluso la hizo dormir en el suelo alegando que las perras dormian alli. El enamoramiento de Johanna se fue apagando poco a poco, pero el problema real estaba aun por llegar porque su escoces resulto ser el hijo del Conde de Wildburg. El se negaba a aceptar la realidad y Johanna le presiono para que reclamara lo que le correspondia, provocando que su marido dijera las palabras que mas dano le habian hecho.

  • A la caza de una exclusiva (Cazadoras 4) de Alexia Mars

    https://gigalibros.com/a-la-caza-de-una-exclusiva-cazadoras-4.html

  • Con aroma a madera de Luz Barreras

    https://gigalibros.com/con-aroma-a-madera.html

    Una historia que nos recuerda que cada dia tiene mil cuatrocientos cuarenta minutos para vivirlos, que las cosas sencillas de la vida pueden obrar magia y que hay muchos caminos para llegar al hogar.

  • El unicornio de Iris Murdoch

    https://gigalibros.com/el-unicornio.html

    Una historia que combina con magistral eficacia la intensidad de la novela gotica y la fascinacion del cuento de hadas. Una novela impresionante en la que Iris Murdoch explora las fantasias e indecisiones que gobiernan a todos aquellos que han sido condenados a una entrega apasionada, aunque sin esperanza.
    Cuando Marian Taylor acepta un empleo de institutriz en el castillo de Gaze y llega a ese remoto lugar situado en medio de un paisaje terriblemente hermoso y desolado, no imagina que alli encontrara un mundo en que el misterio y lo sobrenatural parecen precipitar una atmosfera de catastrofe que envuelve la extrana mansion, y nimba con una luz de irrealidad las figuras del drama que en ella se esta representando. Hannah, una criatura pura y fascinante, es el personaje principal de ese pequeno circulo de familiares y sirvientes que se mueven en torno a ella como guiados hacia un desenlace imprevisible. Pero Marian no puede saber si ese divino ser es en realidad una victima inocente o si estara expiando algun antiguo crimen.

  • Chantaje de Selva Palacios

    https://gigalibros.com/chantaje.html

    El repiqueteo de sus tacones altos contra el pulido suelo de marmol dejaba claro que se trataba de una mujer muy segura de si misma. Si se hubiese inclinado, habria podido contemplar su hermoso rostro reflejado a sus pies. Varios hombres giraron sus cabezas para seguir observandola mientras se alejaba con parsimonia de ellos. Sus andares eran insinuantes, casi hipnoticos. Sus largas piernas quedaban ocultas a la altura de la rodilla bajo un ajustado vestido azul que hacia destacar sus bien proporcionadas curvas. Se detuvo frente al ascensor y con el dedo indice pulso el boton de llamada. Sus unas estaban cubiertas por un par de capas de laca color rojo brillante. Estiro la mano y comprobo que su manicura seguia intacta, como si ninguna otra preocupacion nublara su mente. Dejo el puno reposando sobre su diminuta cintura y descanso su peso sobre una sola pierna. Al hacerlo, la curva de su trasero se acentuo, haciendolo parecer mas voluminoso. Un pitido advirtio de que las puertas del ascensor se abririan. Se introdujo en la cabina y se echo un pulso frente al espejo. Sus ojos eran grandes, verdes, ribeteados por un halo avellana en el limite de su iris. Su cabello color castano se deslizaba en suaves ondas sobre sus hombros. Le llegaba hasta mitad de la espalda. Sus labios eran carnosos, cargados de voluptuosidad. Los llevaba pintados de rojo e hizo un breve sonido al apretarlos entre si. Sonrio y alzo una ceja, senal de que le gustaba lo que veia. Justo entonces, las puertas del ascensor se volvieron a abrir, diez pisos mas arriba. Unos pasos mas y estaria en su despacho. Ayudandose de una llave electronica, abrio la puerta. Al lado de esta, un letrero. En blanco sobre negro, podia leerse: "Estefania Madariaga. CFO". Por supuesto, CFO eran siglas en ingles, idioma que dominaba a la perfeccion. Chief Financial Officer. Aquel era el cargo que ocupaba desde hacia tres meses. Habia sido un ascenso fugaz en su meteorica carrera. Lo habia sudado, habia peleado como una condenada jabata, dejandose la piel, trabajando mas de diez horas diarias durante los ultimos seis anos. El esfuerzo habia dado sus frutos y, habiendo demostrado que estaba mas que cualificada para ese puesto, se gano una promocion sin duda merecida. La noticia habia levantado unas cuantas ampollas entre companeros mas veteranos, haciendo ruido como un enjambre encolerizado de abejas asesinas durante semanas por los pasillos de la oficina. Sin embargo, aquel no era su problema. Ella estaba muy por encima de todo eso. Estefania era la mas joven en ocupar un cargo directivo en toda la compania, y la primera mujer CFO en la historia de la empresa. Un hito que nadie habia podido replicar en ninguna de las treinta delegaciones que se repartian por todo el mundo. Se atuso el pelo antes de poner sus preciosas posaderas en su silla ergonomica de diseno. Era la directora financiera de aquella corporacion. El titulo de su cargo en castellano tenia mucho menos glamour. Y, si habia algo que le sobraba a Estefania, eso era precisamente glamour. --?Tienes un minuto? Mas bien tenia un suspiro, y se lo dedico por entero a la persona que demandaba su atencion. El semblante de Estefania cambio como por arte de magia. Una sonrisa estudiada aparecio en su cara, mostrando unos dientes perfectamente alineados y muy blancos. --Claro. Su voz era algo mas grave de lo que uno se esperaria en una mujer tan femenina como ella. Sin embargo, le sentaba bien. En las reuniones dificiles, cuando debia imponerse ante hombres que le sacaban veinte anos, sabia modularla, explotar su partido. Como al resto de las armas que reunia. Lo importante era salirse con la suya, y con frecuencia lo lograba. Le gustaba ganar. Su secretaria traspaso el umbral de la puerta cargando unos folios y empezo a vomitar una retahila de informacion inconexa a la que Estefania no presto excesiva atencion. Se perdio en sus propias ensonaciones, todavia tratando de asimilar que era ella la que ocupaba ese cargo. Sus anhelos, sus metas, se habian materializado en aquella realidad que aun le resultaba inexplicablemente ajena. Y es que Estefania era una mujer que se habia hecho a si misma... o casi. Licenciada en una de las mejores universidades, beca Erasmus incluida, habia realizado un master y un MBA en prestigiosas escuelas de negocios de Londres y Nueva York respectivamente. Desde nina ya tenia claro que queria llegar alto, ser la mejor. Tenia a quien parecerse. Apreto los dientes, contrariada. Aunque le doliera admitirlo, jamas habria podido costearse ella sola la matricula ni los gastos derivados de su exclusiva formacion academica. Todo eso se lo debia a el. Estaria agradecida de por vida con aquel hombre por haberle permitido desarrollar su potencial. Sin embargo, su radio de influencia era todavia mas amplio. En el fondo de su alma, Estefania sabia que el habia tenido mucho que ver con el hecho de que ella ocupase esa confortable silla. --Entonces, ?te parece bien que adelantemos la reunion al martes? Estefania parpadeo varias veces seguidas. Tres capas de rimel alargaban sus pestanas hasta hacerlas kilometricas. Enmarcaban su mirada gatuna de un modo que pocos hombres podian resistirlo. --No --respondio, sin alterarse un apice--. Aprovechemos que esta aqui el senor Cortes hoy para atajar el asunto de una vez por todas. Comprueba cuando quedan libres para convocarlos a todos a continuacion. Con un gesto algo altivo, le hizo entender a su secretaria que podia retirarse. Ella asi lo hizo, cerrando la puerta al salir. Estefania echo una ojeada a la pantalla de su portatil ultimo modelo. En su bandeja de entrada habia por lo menos medio centenar de correos por leer. Ya lo haria mas tarde. Se levanto de la silla y paseo por el despacho. El frufru de sus muslos al caminar en contacto con el tejido de su falda se hizo tremendamente audible en el silencio reinante. Dejo que sus rojas unas se deslizasen lentamente por la blanca pared. Aquello era suyo. Sus dominios. Se dio media vuelta y contemplo el paisaje que se extendia ante sus pies. Las oficinas de su empresa se situaban en el decimo piso de una de las torres acristaladas mas llamativas de la ciudad financiera de la capital. Desde tan arriba, los coches parecian de juguete, las personas, insignificantes peones viviendo anodinas existencias. Estefania casi sintio lastima por todas ellas. Sin embargo, una punzada le atraveso el corazon al acordarse de su hermano, Diego. Cerro los ojos para tratar de borrar el recuerdo de su marchito cuerpo en la cama de aquella fria clinica. Era muy injusto que el destino se cebara de aquel modo con el. Lo peor de todo, sin duda, residia en que su mente estaba lucida todo el tiempo, haciendo a Diego plenamente consciente de que su carne se consumia. La enfermedad, ese monstruo impio, era degenerativa; lenta pero inexorablemente la luz de Diego se apagaba. Estefania apreto los punos. El tratamiento que conferia cierta calidad de vida a su hermano era mas que caro, prohibitivo. La mitad de su generoso suelo iba destinado a pagar las facturas que mes a mes volvian a estar ahi, como una pesadilla recurrente, recordandole la suerte que su hermano habia corrido. --Estefania, ya esta hecho. En hora y media, sala doscientos tres. Lo tienes en tu agenda. Ella dio media vuelta, dejando las espectaculares vistas de la ciudad detras para que la ciudad disfrutara de unas magnificas vistas de su trasero. Sonrio sin mostrar los dientes, contrariada por el hecho de que su secretaria la hubiese pillado con la guardia baja. Al volver a quedarse sola, paseo su mirada por el despacho, maravillandose otra vez por lo espacioso que era, por lo pulcramente que estaba decorado. Todo era blanco: el suelo, su gigantesco escritorio, sus archivadores, el sofa de dos plazas situado al lado de la puerta, su silla de diseno, incluso el enorme cuadro que colgaba de las niveas paredes derrochaba pulcritud. Un vago esbozo llamado arte moderno: tres tristes circulos marrones en un oceano de lienzo sin tocar. Habia costado miles de euros a la empresa, pero era lo que ella deseaba, y sus deseos eran ordenes. Contemplo el reloj que adornaba su minuscula muneca. Tomo su telefono movil y encargo una ensalada a su restaurante favorito a traves de una aplicacion. En menos de quince minutos ya la habia terminado, y pudo centrarse en preparar la reunion, que se avecinaba larga. Estefania no se equivoco: la reunion fue larga, justo como imaginaba que la tendria el senor Cortes. Lo contemplo sin reservas a traves de sus largas pestanas, sabiendo que la atencion estaba puesta en la persona que exponia las conclusiones de un reporte trimestral ante una selecta audiencia de la que ella tenia el deber de formar parte. Leonardo Cortes era un habitual en las juntas. A pesar de que llevaban viendose seis anos en reuniones, eventos y conferencias, Estefania se dio cuenta de que apenas sabia nada sobre el. --?Podriamos ir al grano? No tengo todo el dia... Su voz era grave, autoritaria, no dejaba espacio a la replica. Leonardo ni siquiera estaba mirando al aludido, sino a su carisimo reloj. Suspiro tenuemente y manipulo uno de los gemelos de oro y zafiro que adornaban el puno de su camisa. Entonces, alzo la vista y la miro. Bueno, no la miro. Para ser exactos, clavo sus ojos azules sobre Estefania y le sostuvo la mirada como si estuviese de caza. Ella trago saliva, pero no se amilano. Leonardo entreabrio sus labios, una boca fina pero apetitosa por la que Estefania se sintio tentada, pero se abstuvo de contemplarla. No pensaba perder aquel absurdo juego. Ella nunca perdia. Leonardo curvo las comisuras de sus labios hacia arriba. Se paso la mano por la mandibula, como si estuviese repasando su afeitado y se inclino lentamente hacia delante, hasta que su espalda dejo de tocar el respaldo de la silla. Estefania pudo sentir que su respiracion se agitaba, muy a su pesar. Comenzo a respirar por la boca, y la sintio seca. Una voz la llamo por su nombre por tercera vez. Con ello se rompio el juego de miradas que se traian los dos. Estefania pestaneo varias veces y sonrio a los presentes. Recupero la compostura en un visto y no visto. Se levanto de la silla, estiro la tela del vestido hacia abajo y camino con seguridad hasta situarse al lado del proyector. Comenzo a exponer su parte hablando de cifras, porcentajes, indicadores. Sus bonitos ojos verdes hicieron un barrido por toda la sala. Tenia la atencion de todos aquellos hombres. Sin embargo, no transcurrio mucho tiempo hasta que enfoco sus pensamientos unicamente en el senor Cortes, que habia girado su silla en un angulo de noventa grados y se habia cruzado de brazos para escucharla. Su semblante era inexpresivo al tiempo que repasaba sin perder detalle el cuerpo de Estefania embutido en aquel vestido azul. Bueno, no solo eso: ella descubrio en sus ojos algo que ya habia detectado en los de otros hombres: deseo. Si, eso era. La estaba desnudando con la mirada. Trago saliva y se quedo en blanco. Apenas fueron unos segundos, pero eso basto para que el senor Cortes sonriera satisfecho, mostrando una hilera de dientes perfectos, dignos de anuncio televisivo. Ella se paso una mano por el pelo. Para poder terminar su exposicion y salir impune, tuvo que esforzarse. Regreso a su sitio y mantuvo su atencion en el proyector. Sabia que Leonardo seguia mirandola: por el rabillo del ojo se hacia eco de su escrutinio. Estefania se pregunto que mosca le habria picado a aquel hombre. Le hacia sentir incomoda, incluso... insegura. Apreto los dientes y se encontro deseando que terminara aquella reunion cuanto antes. Sin embargo, aun faltaba para eso. Leonardo se levanto de la silla y, en lugar de estar de pie, quieto, se dispuso a caminar por toda la sala, atrayendo, irremediablemente, la atencion de Estefania por enesima vez. El senor Cortes exponia su discurso con una seguridad y un aplomo que ella, en secreto, admiro. Haciendo uso de pocas palabras, esbozaba ordenes, deseos, de manera extraordinariamente directa. Leonardo era socio minoritario de la compania, pero ella sabia que aspiraba a mas. Siempre queria mas. Desde que lo conocia, Estefania habia seguido de cerca sus movimientos, siendo testigo indirecto de sus progresos, de sus avances. Sabia que, de seguir por aquel camino, pronto se haria fuerte entre los miembros del consejo de administracion, lo que potencialmente convertiria al senor Cortes en su jefe. La mera idea estallando en su cabeza fue suficiente como para que un escalofrio le recorriera la espalda.

  • Las hijas de otros hombres de Richard Stern

    https://gigalibros.com/las-hijas-de-otros-hombres.html

    <>. Estamos en verano, a finales de la decada de 1960. Las calles de Cambridge, Massachusetts, estan llenas de hippies de pelo largo y coloridas prendas, pero el doctor Robert Merriwether, que ensena en Harvard y lleva mucho tiempo casado, no repara lo mas minimo en toda esa vida bullendo a su alrededor. Cultivado, reflexivo, animal de costumbres… Merriwether es todo menos un hombre impulsivo. Por eso es tan extrano, tan deslumbrante e inesperado, que mientras su esposa Sarah esta de vacaciones conozca a Cynthia Ryder, y que en poco tiempo profesor y alumna empiecen un intenso romance.
    La novela de Richard Stern -discreto clasico moderno de la literatura norteamericana- es un elegante examen de la pasion amorosa, de su epicentro y sus replicas, de sus devastadoras consecuencias. <>, piensa el doctor Merriwether. <

  • Bajo Llave de Aina Castillo

    https://gigalibros.com/bajo-llave.html

    Amor Siniestro: Romance Oscuro y J*dido
    Megan esta loca de atar.
    Una joya en bruto. Caos puro.
    Sexy. Psicopata. Manipuladora.
    Obtiene lo que quiere, cuando quiere.

  • Melancolia de izquierda de Enzo Traverso

    https://gigalibros.com/melancolia-de-izquierda.html

    Con el derrumbe del comunismo en 1989 las utopias del siglo xx desaparecieron y dejaron lugar a un presente cargado de memoria pero incapaz de proyectarse en el porvenir. Este nuevo vinculo entre historia y memoria permite redescubrir una tradicion oculta, una vision melancolica de la izquierda que atraviesa la historia revolucionaria. A partir de un archivo vasto y heterogeneo de teoria, testimonios e imagenes, Enzo Traverso explora esta constelacion melancolica desde perspectivas diversas: el analisis de una cultura izquierdista de la derrota, la descripcion de una concepcion marxista de la memoria, la construccion de una vision del duelo, y la investigacion de la tension entre el extasis y la pena que da forma a la bohemia revolucionaria.

  • El legado de Damian, Chris de Witt [PDF] de Chris De Witt

    https://gigalibros.com/el-legado-de-damian-chris-de-witt-pdf.html

    Damian Di Monaco, de setecientos anos, es un implacable guerrero de la casta de los Silverwalkers de la Estirpe de Plata. Tiene a su cargo hallar un simbolo, indispensable para la evolucion de la estirpe, que esta en poder de una guardiana, Maia Serrano.

  • La maldicion de Anne (Las hermanas Moore 1) de Dama Beltran

    https://gigalibros.com/la-maldicion-de-anne-las-hermanas-moore-1.html

    Desde que nacio, Anne es la portadora de una maldicion.
    Su bisabuela Jovenka maldijo a sus padres cuando estos se negaron a renunciar a su amor.
    Dos prometidos, los dos muertos. Asi ocurrira cada vez que intente casarse. La unica forma de romper el hechizo es encontrar a un hombre con sangre zingara, pero Anne ha decidido rechazar esa idea y solo quiere desarrollar su don y vivir de el.
    Por ese motivo anhela ir a Paris, lugar donde cree que encontrara su ansiada libertad.
    Sin embargo, la unica persona que ha encontrado su padre para embarcarla lo antes posible se niega a hacerlo y le propone un trato a cambio.
    Sin posibilidad de negarse, Anne acepta y todo su mundo cambia de una suave brisa a un devastador tornado.
    Logan Bennett, vizconde de Devon, hace que las emociones que enterro en el pasado aparezcan desde el primer momento en el que cruzan sus miradas.

  • El silencio de Clara Lyndon de Elene Lizarralde

    https://gigalibros.com/el-silencio-de-clara-lyndon.html

    Su talento la hizo duena de su vida.

  • La candidata perfecta Andrea Munoz Majarrez de Andrea Munoz Majarrez

    https://gigalibros.com/la-candidata-perfecta-andrea-munoz-majarrez.html

    Una apasionante y romantica historia ambientada en la epoca victoriana que apasionara a los lectores de mano de Andrea Munoz Majarrez.

  • Salud a ciencia cierta de Miguel Angel Martinez-gonzalez

    https://gigalibros.com/salud-a-ciencia-cierta.html

    Tras haber estudiado a una poblacion de mas de 20.000 personas durante una decada, el mayor estudio continuado hecho nunca sobre salud publica en Espana, el Dr. Martinez-Gonzalez presenta en un lenguaje claro y ameno lo que la medicina sabe hoy en dia sobre algunos de los problemas que mas preocupan a los ciudadanos: el control de peso, la dieta ideal, el colesterol, la actividad fisica, la tension arterial, los controles de salud, el consumo de alcohol, la adiccion al tabaco, el estres y hasta la felicidad.

  • Esposa A La Fuerza (Damas Victorianas 2) de Camila Winter

    https://gigalibros.com/esposa-a-la-fuerza-damas-victorianas-2.html

    En el salon de la mansion de los Kellington, el joven sir miro impaciente a su alrededor en busca de su hermana. de pronto la vio sentada en el comedor especial bebiendo sorbos de te mientras miraba a su alrededor tensa. Conocia bien a su hermana menor, con sus impecables bucles rubios sobre la sien la frente alta y los labios cubiertos con ese polvillo que conseguia de forma clandestina. --Amber, debo hablar contigo. Ella lo miro molesta y alerta con sus grandes ojos verdes de gata. La crispaba que se metiera en sus asuntos. --Supongo que me retaras por haber invitado a Lawrence. Su hermano quedo desconcertado. --?Lo habeis invitado a tomar el te hoy? Lo ignoraba. Amber se sonrojo sintiendose horriblemente humillada. --Vamos, no me mireis asi, nuestro padre jamas dara su aprobacion y lo sabes. --Eso no es asunto vuestro. Y si de eso quieres hablarme pues no quiero escucharte, Thomas. Todavia no me ha pedido matrimonio para que debas preocuparte. --No, no era de eso que queria hablarte Amber, sientate, lo que quiero decirte es muy serio. Ella obedecio algo intrigada. --?Que sucede, Thomas? --Clarence Bootmey, ?lo recuerdas? Mi amigo que vive en Londres y es abogado. --Si, lo recuerdo. ?Que hay con el? --El otro dia lo vio cuando fui a Londres por unas diligencias para nuestro padre. Me dijo que vio a tu marido en un club muy exclusivo, Amber. Ella se puso palida. --Eso no puede ser... Mi esposo murio, Thomas. El la miro incredulo. --Pero lo vieron, Amber...Dijeron que estaba alli con otro hombre y tenia ese extrano anillo en su dedo menique. --Debieron confundirlo con alguien, mi esposo murio hace mas de un ano. Amber palidecio y toda su coqueteria se esfumo al pensar en Wilfredo Strozzi, su marido italiano. --Debe ser un error, realmente, ?quereis matarme del susto? --pregunto con un hilo de voz. Para todos era la senorita Kellington, soltera y casadera y era mejor que lo creyeran pues su matrimonio fue producto de un capricho de juventud, un capricho que pago muy caro al poco tiempo de casada al comprender que su marido no era ese principe azul que se habia imaginado... Su hermano Thomas la miro alarmado, con fijeza, como si no le creyera. --?Acaso crees que he mentido? Mi marido murio en el extranjero durante un viaje, ?debo contaros esa historia de nuevo? --Lo se, pero una vez dijisteis que vuestro esposo era un hombre muy malo, Amber, y me pregunto si acaso no te cansaste de su maldad y lo abandonaste. --Claro que no, Thomas, nunca habria hecho eso. Era mi esposo y lo amaba--su voz se quebro, pero no mentia. --Tu sabes que me enfrente a mis padres por amor a ese hombre, que estuve bajo su hechizo durante mucho tiempo y nunca habria podido abandonarlo. ?Como puedes decir eso? --Y supongo que lo habras lamentado. Amber asintio en silencio. --?Y si no murio? ?Si es el Amber? --Eso es imposible... Debio ser alguien parecido, no comprendo por que toda esta conversacion. De estar vivo me habria buscado mucho tiempo atras. Es absurdo, Thomas. Solo debe ser alguien que se le parece. --A lo mejor el conde italiano no sabe que estamos aqui, tal vez este tras de ti. --Eso es imposible Thomas... Mi esposo murio en Italia. -?En Italia? Pense que habia sufrido un ataque mientras dormia. Ella lo miro inquieta. -Fue a curarse de esa enfermedad de los huesos y tambien a visitar a unos parientes, pero el viaje fue mucho para el... dijeron que tuvo un ataque y murio. Yo estuve alli cuando lo trajeron en un ataud y lo enterraron. --Nunca hablaste de ello, fue todo tan misterioso que... Ella lo miro con tristeza. --A veces es mejor callar. He querido enterrar todo lo que paso, dejarlo atras y tengo una oportunidad ahora. Si Lawrence me pide matrimonio, me casare con el, Thomas. Lo hare. Su hermano se puso muy serio. --Amber, sir Lawrence no es un candidato aceptable, es un joven de noble caracter es verdad, pero pasaras estrecheces en un futuro. Solo tiene una propiedad y dicen que esta en ruinas. --No me importa. Mi vida se arruino por haber sido joven e impetuosa pero ahora todo sera distinto, Thomas. Realmente quiero casarme con Lawrence y dejar atras tantos recuerdos tristes. --?Lo quieres o lo necesitas? Amber se sonrojo. --?Como te atreves? Me case por amor y mi matrimonio fue un error, ahora tal vez funcione si escojo a un hombre bueno, Thomas, un hombre bueno que me ama y es un autentico caballero y de eso seguramente no tendreis ni sombra de duda. --Eso es verdad. Pero os recuerdo que tendreis que esperar a que se decida a hablaros y si no lo hace esta conversacion sera una anecdota y nada mas. Ademas, estais pasando por alto algo muy importante: nuestro padre no ha autorizado esa amistad y sospecho que no sabe nada al respecto. La joven trago saliva y su abundante busto subio y bajo al instante poniendose mas colorada que antes. Sabia que su hermano tenia razon. ?Que ganaba convenciendo a su hermano si el caballero del que se habia enamorado locamente no le hablaba, no le exponia sus sentimientos? Se habia alejado de ella de forma inexplicable aumentando sus dudas y desazon. Pero en su corazon no habia dudas, y sufria al pensar que su pretendiente, el unico que habia despertado y curado su corazon malherido la rechazaba, se alejaba de ella sin motivo aparente. Tal vez el tambien temia ser rechazado. --Solo os quise avisar, Amber--dijo su hermano y se alejo. Ella lo miro llena de malos presagios. "Esto no puede ser, mi esposo murio..." Sintio su corazon latir acelerado mientras viajaba al pasado. Tantos recuerdos, tristes, dolorosos, pero algunos habian sido felices... En el pasado ella habia tenido otros pretendientes, pero los alejo a todos, con sutileza, hasta que aparecio ese caballero que le doblaba la edad y que le atrajo como un iman. El conde italiano. Wilfredo Strozzi. Fue tan extrano, nunca antes se habia sentido asi, fue como un embrujo, algo que no pudo controlar. Algo tan fuerte y maligno... Y el era un hombre guapo y fascinante, un italiano, habia algo maligno y sensual que no habia visto jamas en otro hombre, la forma en que la miraba... Sus padres se opusieron a esa amistad desde el principio, porque el le doblaba la edad y nadie sabia nada de el. El conde Wilfredo Strozzi era un completo misterio, como si hubiera salido de la nada. Solo mencionaron la mansion de Creeping hall, cerca de las colinas blancas de Lancashire, pues a pesar de ser italiano se habia establecido en ese lugar helado con su familia, un lugar siniestro como pocos, pero entonces ella no lo sabia ni lo imaginaba pues su enamorado lo pinto como un perfecto paraiso. Fue muy elocuente y seductor. Logro convencer a todos y sin embargo su padre desconfiaba de que su fortuna fuera solida. Pensaba que no era mas que un seductor y un caza fortunas. El conde italiano se ofendio cuando comprendio la indirecta de su padre. Se ofendio y se marcho y ella lo vio irse con el corazon partido. --Ya tendras mejores pretendientes, hija mia, no os quedeis afligida--le dijo su pobre madre al verla tan triste los dias siguientes. Sabia que le gustaba ese caballero, todos lo notaban. Amber se quedo tan afectada. Tan desolada. Sin imaginar que para el solo habia sido un juego, que le habia robado el corazon y la atormentaba fingiendo que no le importaba, asi fue siempre, ahora lo sabia... Durante meses no volvio a saber de el y todos decian que se habia marchado a Lancashire y sin embargo ella estaba cada vez mas enamorada y esperanzada en su regreso. Un dia llego una carta, la primera carta de amor que ella escondio de su familia. Le explicaba por que habia tenido que marcharse y por que no podia visitarla todavia. Asuntos urgentes le requerian en Creeping hall de Lancashire. Amber sintio el corazon palpitar acelerado mientras leia esas lineas que danzaban ante sus ojos "no tema senorita, no me he olvidado de usted, ?como podria hacerlo?" y con solo esa frase que le daba a entender que ella le importaba y tenia esperanzas... Queria convertirse en su esposa un dia, no sonaba con otra cosa. Y aguardo dia tras dia su regreso mientras le respondia una carta amable y contenida, pues no era de buen gusto confesar a un caballero que lo extranaba y anoraba su regreso, aunque lo sintiera hasta el fondo del corazon, no lo diria. Una dama jamas daba a entender en palabras ni por carta sus verdaderos sentimientos, aunque muriera por saber cuando podria verle de nuevo tampoco lo pregunto por supuesto. Y asi espero y espero como Penelope, sintiendo que moria de desesperacion aguardando su regreso, aguardando impaciente, noticias suyas. Solo un mensaje, una carta... Le daba rabia pensar en lo tonta que habia sido. Durante meses la torturo, le escribio carta inventando excusas hasta que un buen dia fue a verla en secreto y le confeso la verdad, que su familia le habia prohibido seguir con su amistad y mucho menos cortejarla. No habia esperanzas, no habia futuro para el, ni para ambos. Amber creyo en sus palabras y sin poder contenerse se enojo con sus padres y luego lloro. Se desespero. --No tema senorita Amber. Encontrare la forma, se lo juro... si acaso me acepta... si hay alguna esperanza para mi... Le declaro su amor esa noche y ella se dejo llevar por esa pasion que la consumia a fuego lento. Y el se marcho, dijo que regresaria a verla pronto, no dijo cuando... Hasta que un dia magico le dijo que la amaba y que la convertiria en su esposa. Estaba tan locamente enamorada y tan ciega que no desconfio en ningun momento de que la amaba y acepto convertirse en su esposa. Su corazon y su alma entera no queria otra cosa. --Pero vuestros padres no me aceptaran, mi hermosa damisela. Me han prohibido veros, jamas aceptaran lo nuestro--le dijo el. Amber lloro, era tan joven y estaba tan enamorada, llevaba tanto sufriendo ese amor atormentado y cuando le propuso huir y casarse en el extranjero acepto encantada. Parecia la unica solucion. Fugarse y escapar. Era tan romantico... Entonces se fugaron y cometio la imprudencia de entregarse a el en esa posada del camino. Todos creian que estaban casados. pero no lo estaban y de pronto sintio que la piel le ardia y moriria si no dejaba que la desnudara y le hiciera el amor... Trago saliva al recordar esa noche que no debio ser pues luego comprendio su imprudencia y sintio terror, terror de que luego de ser su amante no quisiera casarse con ella. Amber lloro cuando enredados en la cama sintio el dolor de haber perdido la virginidad, cuando la hizo suya por primera vez y sus quejidos se unieron a sus gemidos de placer mientras su mirada oscura se volvia maligna y un beso salvaje sofocaba sus sollozos. No fue lo que esperaba y se sintio perdida. Sin saber por que solo queria escapar de esa cama y que dejara de hacerla suya. No estaba lista para eso, pero luego comprendio que estaba atrapada. Acababa de convertirse en su mujer, su amante, y habia perdido su virtud, ahora ningun caballero la querria de esposa y lo sabia y sintio una horrible angustia preguntandose que habia hecho. ?Se casaria o con ella o la regresaria a su casa abandonandola a su suerte? Estaba demasiado asustada para preguntarselo. Al dia siguiente desperto sintiendo que todo habia sido un sueno y se vio desnuda frente al inmenso espejo, desnuda y sola en esa habitacion y aterrada quiso abandonar la cama y lo hizo vistiendose con prisa. Tenia que buscar a Wilfredo, hablar con el... Temblo al recordar lo que habia hecho y se arrepintio amargamente pensando que habia caido en la trampa de un seductor, sus padres tenian razon, el no era ese caballero que pensaba. Entonces vio la cama manchada de sangre y se estremecio. Sabia lo que significaba, una dama sangraba al perder su virginidad y sin eso no podria casarse. Ningun caballero la querria. --Has despertado preciosa... te traje el desayuno--dijo el entrando en la habitacion. Amber sintio algo muy extrano entonces, habia pensado que amaba a ese hombre, pero ahora no queria que volviera a tocarla, que la lastimara ni... todo habia cambiado, no estaba lista para ser suya, para ser su esposa. Queria escapar, pero solo pudo quedarse donde estaba y desayunar y saber que haria el. --No temas preciosa, luego sera mejor, no sentiras dolor sino placer... un placer con el que jamas has sonado--dijo entonces su amante leyendo sus pensamientos. --No... no quiero que vuelva a pasar. --dijo ella con voz apagada y lloro confundida y atormentada. Le costaba mucho entender lo que habia pasado y no comprendia su terror en esos momentos y un rechazo absoluto a la intimidad y a seguir adelante con su aventura, solo se lamentaba por lo que habia hecho. Su amante la miro con intensidad y de pronto tuvo la sensacion de que podia leer sus pensamientos. --Estas confundida y te sientes mal por lo que paso, pero no temas, luego sera diferente, te despertare al amor y la lujuria, preciosa. Ahora te he convertido en mia, pero quiero que seas mi esposa y cumplire mi palabra. Amber lo miro confundida y el le dio un beso ardiente. --No temas preciosa, vistete, tenemos un largo viaje hasta la capilla mas proxima. No querras volver a tu hogar sin tu virginidad y con mi semilla en ti. Podrias estar encinta ahora... Ella trago saliva y lo miro. Tenia razon y luego, el la ayudo a vestirse, a cubrirse con la capa y le dio un beso ardiente. Se moria por hacerla suya y la abrazo y lentamente la fue llevando para convencerla de hacerlo otra vez... Amber se sintio mareada y gimio cuando le tuvo en su interior, jamas habria imaginado que seria asi, nadie la habia preparado para su noche de bodas y a punto habia estado de escapar. Pero ahora ya era tarde y su amante tuvo razon, luego fue distinto y ese dia la hizo suya un monton de veces y le gusto... a pesar de su ignorancia, del miedo que sentia comenzo a sentir que le gustaba ser suya y luego con el tiempo, se cumplieron sus vaticinios y el supo llevarla por los caminos de la pasion y la lujuria. Pero al menos cumplio su promesa y la convirtio en su esposa dias despues en una parroquia medio vacia del camino. La mansion de Creeping hall aguardaba, un lugar siniestro y oscuro con una familia italiana que no hablaba del todo ingles y que conversaban en su lengua materna todo el tiempo. Se sintio abrumada y perdida, se sintio como una visita en su propio hogar. Su esposo intento integrarla, pero sus parientes la miraron torvo desde el principio. Eran gente extrana, antipatica o de modales distintos. Tuvo que aprender su lengua pues no hablaban una palabra de ingles lo que la extrano bastante pues se suponia que vivian en Lancashire desde hacia anos. La soledad del lugar, aislado y siempre helado aun en verano termino de arruinar sus nervios. Echaba de menos su hogar, y descubrio que la comida italiana la disgustaba y tantas otras cosas... Desde el principio todo estuvo mal y en la convivencia se alejaron. Y descubrio que ese principe azul era un hombre taciturno y reservado al que apenas conocia. Todas sus cartas de amor, la exquisita poesia que le recito una vez no eran mas que una parte pequena de su personalidad. Era un completo extrano y un misterio. Lamento amargamente haber sido tan impulsiva pero ya era tarde. Era su esposa y le pertenecia. Todo era tan nuevo para ella y tan incierto... Excepto al caer la noche. En sus brazos Amber los caminos del placer, lentamente se estaba haciendo adicta a esos encuentros ardientes. El era todo cuanto tenia en esos momentos, su familia jamas le perdono esa boda precipitada y se fueron de Derbyshire para no soportar la verguenza de explicar la fuga romantica de su insensata hija. "No sufras, Amber, soy todo lo que tienes ahora, soy tu esposo y pronto tendremos muchos ninos. Ven aqui..." Le decia siempre su esposo y al mirarla de esa forma, sin ocultar su deseo se humedecia y sabia que la encerraria en sus aposentos para hacerle el amor. Lentamente fue llevandola por los caminos de la pasion hasta que esta se convirtio en una absoluta y desesperada lujuria.

  • ?Sabes quien es? de Karin Slaughter

    https://gigalibros.com/sabes-quien-es.html

    Andrea Cooper sabe todo de su madre Laura. Sabe que ha pasado toda su vida en la pequena ciudad costera de Belle Isle; sabe que jamas le ha guardado un secreto. Porque todos sabemos todo de nuestras madres, ?no?

  • El lince y el clavel (Destinos en la tormenta 2) de Zahara C. Ordonez

    https://gigalibros.com/el-lince-y-el-clavel-destinos-en-la-tormenta-2.html

    Galicia, marzo de 1846 De todas las cosas que pense que tendria que hacer en la vida, ver casarse a la mujer que amaba no era una de ellas. Dicen que el ser humano ha sido creado para ser resiliente y soportar los envites del destino, por duros que estos sean, pero estoy seguro de que cuando dicen eso olvidan los que te da el amor. El amor golpea casi tan fuerte como la muerte. De hecho, si hiciera caso a algunos poetas, ambos vendrian de la mano. En el pulso que el amor y yo habiamos jugado, sali perdiendo. Herido de gravedad, me habia retirado. Lo habia hecho porque amar es desear la felicidad del otro, y su felicidad no estaba conmigo. He oido que el tiempo cura las heridas; sin embargo, lo que no me dijeron es que, cuando algo duele, el tiempo cobra proporciones de infinito. Querria decir que el dolor habia quedado atras; hablar de el en pasado; decir que el corazon ya no me quemaba cuando pensaba en ella; que su nombre se habia diluido en mi memoria como gotas de lluvia en un charco. Querria decir que ya no la amaba. Que no me importaba que sus labios besasen los de otro. Podria decirlo, pero mentiria. Mentiria del mismo modo que le habia mentido a ella al decirle que entendia que lo amase a el; que sin ella en mis brazos iba a poder seguir respirando. Mentiria del mismo modo que menti al tenerla de nuevo frente a mi, mientras ella me miraba con esa sonrisa que era para mi el mismo cielo, y pronunciaba un <> con sus labios de miel. Esos labios en los que habia imaginado mis besos. Besos que habian emprendido el vuelo para no regresar jamas. <>, quise responder. <>. Quiza debi decirle eso la ultima vez que nos vimos, mas elegi su felicidad por encima de la mia y ya no habia marcha atras. Ahora tenia que seguir mintiendo. --Si, Victoria. Estoy bien. --Sonrei, aunque por dentro me estuviera quebrando. Aunque mi corazon no fuera ya mas que un cristal roto en cientos de esquirlas--. ?Y tu? ?Como estas? Ella se acerco despacio a mi. En aquel jardin prenado de hortensias y altos arboles de hojas verdes, con su blanco vestido de novia, se me antojo una de esas ninfas de los cuentos que mi madre me solia narrar cuando era pequeno. --Bien. Estoy bien --dijo, y extendio sus manos para coger las mias--. ?Por que no estas en el banquete con el resto? Victoria y Elias habian querido casarse en aquel lugar del fin del mundo, y despues de una sencilla ceremonia en la iglesia, nos habian hospedado en un pazo senorial propiedad de unos amigos de los Vergara, donde habian celebrado un banquete en los jardines. Aunque el dia habia amanecido gris, la lluvia habia dado algo de tregua y el sol hizo acto de presencia, jugando a esconderse entre los nubarrones que surcaban el cielo. Sus formas se pintaban sobre la hierba, y sobre la bella e imponente construccion de granito que se alzaba entre ellos y que imitaba a los viejos castillos de epoca medieval, con tres torres cuadradas y almenadas de distintas alturas. En contraste con su aspecto fortificado, las ventanas estaban formadas por una triple arcada apoyada en columnas esbeltas con capiteles corintios y adornadas con hermosas vidrieras emplomadas. La hiedra trepaba por la fachada dibujando caprichosas formas y dandole verdor a la piedra. --Solo estaba paseando --me excuse, tomando sus manos, tan calidas como las recordaba--. Necesitaba un poco de aire. Me miro con gesto comprensivo. --?Demasiada gente? --Demasiada gente y... Agache la vista y la clave en el suelo. No quise terminar la frase para no molestarla, pero la verdad es que me sentia como un bicho raro rodeado de tanto senoritingo. A pesar de lo precipitado de la boda, a esta habia acudido lo mejor de la sociedad de varias capitales espanolas y tambien del extranjero. Gente que tenia una decena de apellidos, algunos impronunciables, asi como todos los socios comerciales de Rafael, el hermano de Victoria. Me sentia perdido entre conversaciones que no comprendia y todas se me antojaban terriblemente insustanciales. Ni siquiera la compania de Lily y Bernardo, que a ratos hablaban conmigo, a ratos con el resto de comensales de nuestra mesa, me hizo menos dificil el trago. Si mi madre o mi hermana hubieran estado alli, al menos habria tenido a alguien con quien hablar, pero mi madre no queria dejar la venta sola, y Gabriela aun no se encontraba con animos como para emprender aventura alguna y menos aun si esta tenia que ver con el enlace de Elias. Aunque se habian separado de forma amistosa y de mutuo acuerdo, los sentimientos pueden ser traicioneros. Y yo… yo debi quedarme en Madrid estudiando, y no acudir a esa boda que me rompia en mil pedazos. Sin embargo, tras mas de cuatro meses sin ver a Victoria, las ganas de estar con ella pudieron mas que cualquier otro juicio emitido por mi razon, esa que parecia abandonarme cada vez que me hallaba frente a ella. Que estupido habia sido al decir que si cuando recibi la carta en la que me invitaba al enlace. Yo ya no sabia si la estupidez me era inherente o el amor me habia vuelto imbecil, pero acepte estar alli y ahora tenia que tragar saliva, aunque tuviera la garganta llena de sangre por las palabras que querria decirle y que iban alli a morir sin llegar jamas a mis labios. --Ya se que no estas comodo --dijo ella con voz triste--. Quiza no debi pedirte que vinieras. Levante la vista, negue con la cabeza y me force a sonreir. --De verdad. No te preocupes por mi. Hoy es tu gran dia. --Alce una de mis manos y la apoye en su mejilla. Victoria dibujo en sus labios una sonrisa que acelero mi corazon. --Gracias --dijo posando su mano sobre la mia--. Al menos espero que estes disfrutando de la comida. Teniendo en cuenta mis tribulaciones, todas aquellas exquisiteces me supieron amargas, pero fingi una vez mas que no era asi. --Si, y ojala supiera pronunciar el nombre de los platos. La mitad estan en frances. Victoria se echo a reir. Retiro su mano y senti aquel vacio de forma intensa. Como si me hubieran quitado la piel. Aleje yo tambien la mia de su rostro y la baje, apretando el puno despues. No sabia si para atesorar el tacto que aun me quedaba de ella, o para acallar mis anhelos con la fuerza. --?Como van tus estudios? --pregunto--. Espero que el teatro no te este alejando mucho de tus obligaciones. --No son como me los imaginaba. Yo solo quiero estudiar Medicina y estoy haciendo de todo menos eso. Todavia quedan algunos anos hasta que pueda ir a la facultad mayor. --Podria ayudarte. Mi hermano conoce a gente que... La interrumpi. --No quiero que uses tus influencias para situarme en un lugar al que puedo llegar por mi mismo. Bastante es que he aceptado tu ayuda economica. Casi cada dia me recuerdan que es el hombre quien ha de proveer a la mujer, y no al reves. --La gente siempre murmura mas de lo que debe. No les eches cuentas. Solo soy una amiga ayudando a un amigo. <>. Esa palabra casi me dolia. Estar plantado en esa frontera me quemaba los pies. --Conseguire que te adelanten el examen de bachiller para que puedas ir cuanto antes a la facultad. --Y da igual lo mucho que intente impedirtelo, ?verdad? --Exactamente. --Sonrio de nuevo. --Esta bien. Me rindo. Contigo siempre me toca rendirme y aceptar lo que tu decidas. --No pude evitar que mi tono de voz revelase las verdades que guardaba mi corazon. Ella, sabedora de mis secretos, me miro atribulada. Habia en sus ojos un perdon que supe leer, pero que no me consolaba. --Nicolas, dijiste que... --Se lo que dije --la interrumpi. No pude mas y hable, ignorando lo que aconsejaba la prudencia--. Se que te tuve en mis brazos y que no rechiste cuando me hablaste de tus sentimientos por el; que te escribi diciendo que todo estaba bien, que la herida de mi corazon casi se habia cerrado. Se que te dije que me alegraba de que fuerais a casaros. ?Y sabes lo que se tambien? Que te he querido como nunca quise a nadie. Que aun lo hago. Por eso siempre tienes las de ganar, Victoria. Por eso siempre dire que si a cuanto me pidas. Ella tomo aire y despues lo solto despacio. Tuve la impresion de que se encontraba mal. De que la intensidad de mis palabras la habia herido. Y me senti terrible, pues lo ultimo que queria era hacerle dano. Victoria aferro mi antebrazo por unos segundos para no ceder al mareo que lei en la palidez que embargo su rostro de forma repentina. --?Estas bien? --pregunte preocupado. Ella nego con la cabeza y volvio a tomar aire. La agarre atrayendola hacia mi pecho y cobijandola en el. --Debe de ser agotamiento. No es que Malaga este a la vuelta de la esquina y un viaje tan largo cansaria a cualquiera --le dije--. Ademas, seguro que has hecho mas de lo que debias para que todo saliera hoy a la perfeccion. --No es eso... --murmuro ella. Temi que algo la estuviera enfermando y la tome por los hombros, apartandola un poco de mi y mirandola con gesto serio. Alzo la vista y me perdi en sus ojos negros hasta que hablo. --Espero un hijo de Elias. --?Que...? --La voz me salio entrecortada--. ?Como...? Ella se ruborizo y agacho la mirada. --Creo que sabes bien como se hacen los hijos, Nicolas. No le pidas a una dama que te lo explique. --Yo... --La capacidad de unir las palabras para formar una frase parecia haberme abandonado--. ?Cuando? Os acabais de casar. Victoria no despego los ojos del suelo. --?Hace cuanto tiempo lo sabes? --insisti. --Poco despues de regresar a Malaga. No me costo demasiado atar cabos. La noche que Elias paso en la venta; el dia que los encontre juntos en el campo con las ropas deslavazadas... --?Quieres decir que llevas un hijo de cuatro meses en tu vientre? Un <> salio con miedo de los labios de Victoria, sin mirarme aun. --Por eso habeis celebrado la boda tan aprisa --murmure. Mientras yo me moria de amor por ella, ella se arrojaba a los brazos de el, sin condiciones. La mire con una mezcla de sorpresa y enfado. --Que idiota he sido. Pense que en algun momento habia tenido posibilidades contigo. Que una parte de tu corazon estaba conmigo. --Y lo estaba --dijo, y me miro. Su rostro seguia algo palido y se turbo todavia mas al ver un reproche en el mio.--?Como puedes decir eso cuando no dudaste en entregar tu cuerpo a el? --No me lo preguntes, Nicolas. Yo... Es complicado de explicar. --No es complicado, Victoria. Di la verdad: es imposible. No se puede explicar aquello que jamas ha existido. Nunca sentiste nada por mi y fui un idiota por llegar a pensar que habia algo de amor en ti. No habia nada. --Me aparte de ella y eche a caminar alejandome unos pasos, hasta que me detuve, dandole la espalda. Un nudo se formo en mi garganta y me quebro la voz al decir las siguientes palabras--. Solo compasion por el solitario chico de la venta. --No digas eso. --La oi murmurar. Su voz tambien salio tremula--. Te quise. Y te quiero. --Pero no lo suficiente. Nunca sere lo suficiente para nadie. --Habia pretendido que aquello se quedase en un mero pensamiento, pero salio de mis labios sin que yo pudiera evitarlo. Victoria llego hasta mi espalda y me abrazo con fuerza. Senti sus brazos en torno a mi; sus manos aferrandose a mi vientre. Las observe en silencio. El pecho me dolia. --No digas eso --repitio--. No lo digas, por favor. Tu eres mas de lo que nadie podria desear. --No para ti. --Pero algun dia lo seras para alguien, Nicolas. Estoy segura. El nudo de mi garganta se torno de roca. Ya casi no podia ni respirar. Me solte de su abrazo y eche a andar de nuevo. --Necesito pasear un rato. --Por favor, no quiero despedirme asi de ti. No quiero que haya cuitas entre nosotros. Me detuve, armandome de valor para mirarla. Cuando mis ojos se encontraron con los suyos, me debati entre ser comprensivo con ella o seguir soltando lo que llevaba dentro. Una vez mas, termine por diluir mi frustracion en el oceano de su mirada. --No es una despedida, Victoria. --Trate de sonreir--. Ojala fuera capaz de decirte <> para siempre, aunque me temo que eso es algo que nunca pasara. De alguna forma me siento unido a ti, a pesar de que tu... Ella miro al suelo de nuevo y se mordio el labio inferior, sin duda atribulada. --Lo siento --murmuro. --?Por que ibas a sentirlo? Solo has hecho lo que tu corazon te ha pedido que hagas. --Camine de nuevo hacia ella, hasta que estuvimos frente a frente, apenas separados por un palmo--. Yo debi de haber hecho lo mismo. Pelear por ti hasta que no me quedaran fuerzas. Pero quise respetar tus deseos. Ponerlos por encima de los mios. ?Puedo decir lo mismo de el? --No la emprendas con Elias. Nunca ha hecho nada que yo no quisiera. --El perfecto y valiente Elias Marin. Solo siento dolor cuando pienso en el y en ti --dije aquello y le pedi a mis lagrimas que no asomasen a mis ojos. No queria que ella me viera llorar. --Nicolas... --Pronuncio mi nombre con carino--. Algun dia dejaras de amarme y el dolor se ira. --?Algun dia? ?Y por que no hoy? No quiero amarte mas, pero no se como hacerlo. No se dejar de amarte, como tampoco se odiarte, aunque ganas no me faltan. No se que quiero cuando se trata de ti. Me estoy volviendo loco. Estar en Madrid, lejos de ti, es lo mejor que me ha pasado; a pesar de que en los primeros dias me faltaba el aire por tu ausencia. Ahora mismo echaria a andar hacia alli y no pararia hasta llegar. Lo que sea con tal de alejarme de tu vera. Contraviniendo mis palabras, mis pies dieron un paso mas hacia ella. Mire sus labios otra vez; hogar donde habrian ido a parar todos mis besos. Hogar en el que mi corazon, desoyendo al dolor y las circunstancias, habria dejado un beso en aquel instante. Incline la cabeza despacio hacia ella, sin poder controlarme. Sin ser capaz de decirme a mi mismo lo inconveniente de aquello. Victoria no se movio mientras me miraba con un sentimiento que vi en sus ojos y que me revelo que ella tambien anhelaba aquel beso. Quiza no por las mismas razones que yo. Quiza solo para darme un regalo de despedida. Para, en aquel momento amargo, decirme <> de forma dulce. A punto estaban mis labios y los suyos de encontrarse cuando ambos fuimos conscientes de que aquello torceria mas las cosas entre nosotros. Puede que me regalase un beso, pero su amor no era para mi. Puede que yo tomase aquel beso, pero seria abrir mas la herida de mi corazon. Por eso, en el ultimo instante, ella giro el rostro despacio y yo ladee el mio. Mis labios encontraron el unico hogar que hallarian en el rostro de Victoria: su mejilla. Un beso entre amigos. Un beso entre dos almas afines que una vez se encontraron y que estarian destinadas a no separarse jamas, mas sin entrelazarse nunca del todo. Ella siempre seria mia. Yo siempre seria suyo. Pero nuestro amor no habia sido escrito con el fuego de Venus, ni nuestras almas hechas de identica materia. Ella era de Elias. Y yo... yo no era de nadie. Y en medio de aquel instante, una voz irrumpio entre nosotros, pronunciando su nombre. --Victoria. Mire tras ella y vi a su hermano, que la llamaba haciendole senas para que fuera junto a el. Ella giro la cabeza por un instante y asintio, para despues volver a fijar sus ojos en mi. Fue a decir algo, pero callo. Quiza porque ya nos lo habiamos dicho todo. Quiza porque quedaba todo por decir. En cualquier caso, beso mi mejilla y se fue en pos de Rafael. La vi alejarse como quien contempla un barco adentrandose en el mar, sabiendo que en algun momento la linea del horizonte se lo tragara y este desaparecera para siempre; como si nunca hubiera estado; como si su surco sobre las olas jamas hubiera existido. Cuando la perdi de vista, todas las lagrimas que habia aguantado surgieron de mis ojos de forma incontrolada. Aprete los parpados sintiendo como estas recorrian mis mejillas. El corazon y la garganta me quemaban y solo tuve ganas de echar a correr. Ojala hubiera tenido conmigo a Canela para montar en ella y perderme entre los familiares caminos de mi ninez, a tantas leguas de donde me encontraba. Ojala hubiera tenido tambien a mi Luna, para acompanarme en los paseos; para verla correr y sentir su alegria cuando lo hacia. Y, a falta de mi yegua, decidi usar mis piernas y correr a toda prisa hasta perderme en aquellos frondosos jardines.

  • La tristeza del Baron (Caballeros 3) de Dama Beltran

    https://gigalibros.com/la-tristeza-del-baron-caballeros-3.html

    Dicen que el enamoramiento juvenil nunca se olvida, tal vez porque es lo suficientemente puro y real.
    Despues de anos buscando a Anais Price, sonando con tenerla de nuevo a su lado, Federith Cooper ha de casarse con lady Caroline, puesto que lleva en sus entranas al hijo de ambos, o eso piensa el. Pero su vida matrimonial es un infierno; su esposa rechaza su presencia, su ternura e incluso siente repulsion por el, el hombre mas educado y respetuoso de Londres.
    Federith intenta asimilar la vida que le ha tocado, aunque…?durante cuanto tiempo podra mantener ese comportamiento frio y aristocratico que sus padres le inculcaron desde nino, cuando el amor de su vida reaparezca anos despues?
    Un verdadero amor no desaparece con el tiempo, y la promesa que hizo de protegerla, cuidarla y amarla, tampoco.

  • Mauks. Una bicicleta para dos de Gema Samaro

    https://gigalibros.com/mauks-una-bicicleta-para-dos.html

    Bruno es un atractivo empresario y un novio desastroso que no tiene mejor ocurrencia para retener a su novia que regalarle una bicicleta holandesa y rosa.
    Pero el regalo no llega por culpa de Macarena, la duena de la tienda, una chica de armas tomar que esta loca por quitarse de encima a un cliente tan terco y arrogante como Bruno.
    Desesperado y harto, Bruno le pide a su hermano Guido que es un genio, porque trabaja como tal en el musical de Aladino, que llame a la tienda para presionar mas a la duena. Sin embargo, quien responde a la llamada es Rocio, la dulce hermana de Macarena, quien se enamora perdidamente de la voz de Guido y viceversa.

  • Me entregue a ti (Por amor 4) de Maria Beatobe

    https://gigalibros.com/me-entregue-a-ti-por-amor-4.html

    Cuando al darme la vuelta vi a Mora pense que me moria. Las piernas me empezaron a temblar y por un momento crei que me iba a desmayar. Esa sonrisa de autosuficiencia todavia me revolvio mas el estomago. ?Realmente pensaba que iba a atenderle despues de lo que me hizo? ?El muy cabron todavia tenia ganas de seguir jodiendome la vida? No debia de estar bien de la cabeza, porque nadie en su sano juicio podria ser tan cruel con otra persona. Me quede paralizada mientras le miraba fijamente presa del panico. ?Que cojones estaba haciendo alli? ?Sabia que trabajaba en esa tienda o habia sido una casualidad? No se por que, pero algo me decia que no habia sido una mera coincidencia. --?No me vas a saludar? --me reto. A mi no me salian ni las palabras. Bastante que aun las piernas me sostenian. Mi cuerpo no era capaz de reaccionar ante su cruel visita. En mi cabeza empezaron a arremolinarse un monton de imagenes horribles de aquella noche, y ahora todavia me entumecia mas mientras Mora me sonreia cinicamente, acompanado de su amigo Rafa. Oi como Gael salia del despacho y se ponia a mi lado. --Buenas tardes --saludo dirigiendose a ellos. --Buenas tardes, jefe --respondio Mora. Ante mi pasividad, Gael se dio la vuelta para mirarme. Y por como lo hizo me di cuenta de que mi cara no debia de tener buen aspecto. --Naira, ?estas bien? Evidentemente, no lo estaba. Pero no podia decirle <>. En ese momento, empece a notar unos sudores frios que me subian desde la punta de los pies hasta la coronilla. Mi respiracion empezo a acelerarse y mi pulso tambien. Intente mantener la compostura, pero comence a sentir una presion y un mareo horrible en la cabeza y, por instinto, me agarre al hombro de Gael mientras me ponia la otra mano en la frente y cerraba los ojos. --Naira, ?que pasa? --volvio a insistir. --Creo que necesito sentarme un momento. Solo sera un segundo. Lo peor de todo era que Mora seguia de pie frente a mi, sin dejar a un lado esa mueca de superioridad, con las manos en los bolsillos y una malefica media sonrisa. Que asco senti. Me hubiera encantado poder abalanzarme sobre el y pegarle hasta perder todas las fuerzas. Descargar toda mi rabia como si fuera un saco de boxeo. Jamas habia experimentado esa sensacion en mi cuerpo, incapaz de moverlo ni controlarlo. La tension me tenia totalmente agarrotada. Gael me acerco con rapidez un taburete que teniamos tras el mostrador y lo coloco a mi lado. --Ven, sientate. Y eso hice. Di dos pasos hacia atras y me deje caer en el asiento mientras Gael me sostenia. --Vaya... Parece que la dependienta no se encuentra muy bien --dijo Mora con sorna. Vi como Gael alzaba la vista para mirarle y juraria que no lo hizo de buenas maneras. --Pues no. Pero no se preocupe, porque puedo atenderles yo --dijo incorporandose. --Fijate que queriamos que fuera ella la que nos atendiera. ?Verdad, Rafa? --Verdad, verdad --se burlo el poniendo la mano sobre el hombro de su amigo. --Es evidente que ella no lo va a hacer, asi que si os sirvo yo..., bien, si no... --Espera, Gael, yo les atendere --me apresure a decir. Enseguida me puso la mano en el hombro para evitar que me levantara. Gael no solamente habia cambiado el tono de voz, que era cada vez mas desafiante, sino que fui consciente de que estaba perdiendo los papeles cuando dejo de tratarlos de usted y paso a tutearles. En su trabajo era extremadamente perfeccionista y jamas le faltaban las buenas formas, pero ahora todo eso estaba desapareciendo ante la actitud retadora de Mora y su amigo. --No --dijo rotundo--, no vas a atenderles. Lo voy a hacer yo -- respondio sin dejar de mirarles. --Lo cierto es que poco favor te hace tener esta dependienta, que a la minima esta por los suelos --increpo Mora sin dejar de sonreir. En ese instante vi que Gael cogia aire y se acercaba a ellos con gesto provocador. Eso no pintaba nada bien. Y yo me encontraba tan mal que no estaba para ponerme a mediar en una pelea. --Mira, chico... --comenzo. --Mora, me llamo Mora --respondio altivo. --No me importa como te llames, no te lo he preguntado. Para empezar, ya decidire yo si ella es buena o no; tu opinion me importa realmente poco. Y segundo, creo que en esta tienda no hay nada para vosotros. Mora sonrio con suficiencia, puso los ojos en blanco y luego miro hacia otro lado. Hasta que volvio a encararse. --?Nos estas echando? --No queria decirlo asi, pero si. Sera lo mejor. --Eso no dice nada bueno de tu tienda. --Gente como tu, sinceramente, me da lo mismo lo que piense. Los dos idiotas se miraron alzando las cejas y, al volverse hacia Gael, Mora fijo su mirada en mi. --Bueno, Naira, pues ya nos veremos, ?no? ?No le has contado a tu jefecillo que tu y yo pasamos muy buenos ratos juntos? Le asesine con la mirada. Y a Gael no le paso desapercibido mi gesto. Ese tio definitivamente era un gilipollas desalmado. Me tenia cogida por el trabajo de mi padre, porque si no... ya habria hablado mas de la cuenta. --Buenas tardes --dijo Gael extendiendo el brazo hacia la salida e indicandoles que abandonaran el local. --Nos vamos, pero que sepas que la ropa de tu tienda es una mierda de pijos. La verdad es que tampoco pensabamos comprar nada, ?verdad, Rafa? Solo veniamos a ver a la dependienta, que esta para hacerle un favor, aunque ella no se deje. Y ambos chocaron las manos y empezaron a carcajearse. Gael dio un paso adelante con decision, hasta que le cogi la mano para detenerle. Pasaron unos segundos que a mi se me hicieron eternos. El cruce de miradas brutal entre Mora y Gael hizo que se me encogiera el estomago. Se estaban perforando el uno al otro solo con los pensamientos que cruzaban por sus cabezas. --He dicho que adios --dijo Gael asertivo, sin cambiar un apice su expresion. Oi un <> que susurro Mora antes de darse la vuelta para irse de la tienda. Segun salieron, Gael cerro con pestillo, se acerco hasta mi y se puso de rodillas para quedar a mi altura. --?Estas bien? --Si, lo siento... No se que me ha pasado. --Naira, ?de que los conoces? --Iban a mi instituto. --Lo que tengo claro es que algo te ha pasado con ellos, Naira, porque te has quedado bloqueada. --?A mi? No... Me habra sentado algo mal; no te preocupes, Gael. --He visto como le mirabas. --?A quien? --Al chico que estaba delante. Al tal Mora. Que no se de que, pero su cara me suena de algo. !Mierda! Espero que no se acuerde de que cuando le vio estaba conmigo el dia de la fiesta. Nos cruzamos cuando Hugo y el volvian de comprar y yo estaba en la puerta con Mora y con mis amigas. Por favor, que no lo recuerde; si no, si que ya me vengo abajo. --No, de verdad, Gael. Esta todo bien. Y me levante para ir al bano y poder volver a respirar. Porque desde que el impresentable de Mora habia entrado, yo habia dejado de hacerlo inconscientemente. 58 El resto de la tarde lo pasamos casi sin hablar. Yo me dedique a atender a la gente que entraba mientras el hacia numeros y llamadas desde el mostrador. No habia ido al despacho en ningun momento y por un instante llegue a pensar que no lo habia hecho porque no queria dejarme sola en la tienda por si Mora y Rafa volvian. Aunque apenas hablamos (lo hicimos unicamente por temas de la tienda), si que nos miramos... y muchas veces. Me sentia tan mal por no contarle lo que habia pasado entre Mora y yo que no era capaz ni de sostenerle la mirada. A la hora de cerrar entre a cambiarme al despacho mientras el bajaba la persiana, como todos los dias. Aun me temblaba algo el pulso despues de haberme reencontrado con Mora, con el chico que me habia dejado una huella imborrable en el corazon para siempre, y no precisamente por algo bueno. Estaba en sujetador colocandome la camiseta cuando Gael entro en el despacho sin llamar. Por inercia, me tape el pecho con ella y le mire sorprendida. Pero el prosiguio sin inmutarse y cerro la puerta despacio tras el. Yo trague saliva y espere para descubrir cuales eran sus intenciones. Se acerco poco a poco hacia mi sin dejar de mirarme. Yo solamente llevaba puesta una faldita plisada estampada, mientras el sujetador asomaba ligeramente a traves de la camiseta con la que intentaba taparme. En decimas de segundo lo tenia pegado a mi. Me puso las manos en la cintura y me dio un suave beso en el cuello, que recibi con los ojos cerrados. --?Estas mejor? --susurro. --Si. --?Por que te fuiste asi esta manana? Me he vuelto loco al no encontrarte en mi cama cuando me he despertado. Continuaba besandome y eso hacia que me resultara bastante dificil concentrarme en una respuesta medianamente decente. --Lo siento. Me asuste. Dejo de regalarme caricias en el cuello para pasar a mirarme mientras apoyaba suavemente su frente en la mia. --No tengas miedo, Naira. ?Que es lo que te asusta? --susurro. --No es facil, Gael. --Confia en mi, por favor. Dime todo lo que sientes. Necesito saber a que atenerme. --Me da terror lo que estoy empezando a sentir por ti. Al tenerle tan cerca y notar como sus manos me rozaban el vientre, conteste sin pensar. En ningun caso queria ser tan explicita en mi respuesta, pero es que mi corazon deseaba gritar a los cuatro vientos que el me hacia sentir cosas que no habia sentido antes por nadie. Me moria por abrazarle y entregarme a el en cuerpo y alma, pero eso suponia tener que soltar la camiseta y que me viera en sujetador. Vale que el ya me habia visto en ropa interior de cintura para arriba, pero seguia siendo vergonzosa, que le ibamos a hacer, y la verguenza no desaparecia de un dia para otro. Ademas, para que nos ibamos a enganar: no era uno de mis mejores sujetadores; si lo hubiera sabido, habria elegido el que me compre en La Perla no hacia mucho tiempo.

  • Devuelveme la sonrisa de Marcos A. C

    https://gigalibros.com/devuelveme-la-sonrisa.html

    Poco podia imaginarse mi padre que, el dia que naci hacia ya cuarenta anos, iba a tener que hacerse cargo de mi el solo. A sus treinta y cinco anos, el gran Arturo Duarte, dueno de diversos edificios de viviendas, asi como de oficinas, se convertia en padre por primera vez, y se quedaba viudo de la unica mujer a la que habia amado de verdad. Mi madre, Christina, murio aquella noche en el parto. Hubo complicaciones y se le fue la vida, mientras me la daba a mi. Tenia treinta anos, toda la vida por delante y, segun me contaba mi padre, la ilusion de mi llegada y verme crecer. No pudo ser, ni siquiera supo que habia tenido un nino. Cuando le dijeron que podian decirle el sexo del bebe, ella se negaba a saberlo, queria que fuera sorpresa. Ni un nombre tenian pensado para mi, o para una nina, asi que hasta eso tuvo que elegirlo mi padre. Segun me dijo, me llamo Chris, ese diminutivo del nombre de mi madre, porque al mirarme a los ojos, le recordaba a ella. Me saco adelante completamente solo, y es que, tanto los padres de el, como los de mi madre, murieron anos antes de que ellos se conocieran. Y nunca se caso, tuvo algunas novias, amigas y ligues, pero jamas volvio a tener una pareja estable con la que querer compartir su vida. Decia que con mi madre murio el amor para el. Poco a poco, fue vendiendo algunos de los edificios que tenia, de modo que se hizo con un buen dinero que invirtio en construir un edificio de apartamentos a pie de playa, que alquilaba, y con esas rentas viviamos los dos. Hasta que me dejo solo cuando yo tenia treinta y cinco anos, creo que ese fue plazo de tiempo que quiso quedarse a mi lado y ver que me convertia en un hombre de provecho, antes de reencontrarse con mi madre. Se le fue la vida una noche mientras dormia, su corazon dejo de latir y ni siquiera pude despedirme. Aquella noche, tras una cena en la que reimos y volvio a contarme como conocio a mi madre y el flechazo que sintio al verla, nos dimos las buenas noches como siempre, sin saber que no habria un nuevo amanecer para el. En herencia me dejo el edificio y la casa en la que viviamos, por lo que yo seguia manteniendome de esas rentas que generaban mensualmente los apartamentos. Y, como lo fuera mi padre, soy soltero por eleccion, no quiero atarme a nadie, no quiero enamorarme, eso no va conmigo. Soy hombre de una sola mujer cuando mantengo uno de esos lios de amigos con derecho a roce, pero cuando se acaba, se acaba. No hay promesas, no hay palabras que las lleven a creer que habra un felices para siempre, una bonita casa con jardin donde construiremos un parque para nuestros dos o tres hijos. Desde el primer momento todas saben que nunca las llevare al altar, que no pondre un anillo en su mano y me arrodillare para pedirle que se case conmigo. Voy directo a lo que quiero, dar y recibir placer, tener una noche de sexo de esas memorables, tal vez dos, quizas una semana o un mes, pero nada mas. No hay amor, y nunca lo habra. Diran que soy frio, sin sentimientos, que juego con las mujeres, pero no, no es asi. Voy de frente, dejo claro lo que quiero y cuando lo quiero. Todas saben que cuando estan conmigo, hay fecha de caducidad, no miento, no las hago creer que seran las princesas de un cuento y se convertiran en mi reina. Mi padre decia que algun dia apareceria la mujer que conseguiria romper el muro que yo mismo habia construido alrededor de mi corazon, que pondria mi mundo y mi vida patas arriba y ni siquiera me daria cuenta de que estaba enamorado, hasta que la dejara marchar. El creia que, al haber perdido a mi madre y verlo a el, pasar el resto de su vida solo y sin enamorarse, era el motivo por el que yo no queria tener una pareja estable. Yo reia al escucharlo decirme que no es que no quisiera enamorarme, encontrar esa mujer que me hiciera gritar al mundo que la amaba, sino que tenia miedo a hacerlo y perderla tan pronto como el perdio a mi madre. No era asi, no tenia miedo a nada, aunque hay algo que si debo reconocer, y es que, siempre habia temido que, si algun dia esa mujer que decia mi padre, llegara para cruzarse en mi camino se quedara embarazada, me mortificaria que pudiera dejarnos a los dos durante el parto. Fueron muchas las veces que le pregunte a mi padre si yo tenia algo mal y por eso mi madre murio la noche de mi nacimiento, tal vez era algo que yo llevara en la sangre y no fuera compatible con ella, que se yo, no era medico a los diez ni a los doce anos, y creia que, si tenia descendencia, podria heredar ese mismo mal y perder a su madre, a mi esposa. Desvarios de un nino que vivia con el recuerdo de la mujer mas buena, bonita y carinosa del mundo, de ver esas fotos que se habia ido haciendo cada semana durante los nueve meses de embarazo. Un viaje, eso necesitaba en el momento en el que me encontraba, en el quinto aniversario de la muerte de mi padre, tan solo dos meses despues de celebrar mi cuarenta cumpleanos. Esa fecha deberia ser feliz, para cualquier nino lo era, igual que para muchos adultos, pero no para mi, porque el que debia ser el dia mas feliz de la vida de mi madre, se convirtio en el peor de la vida de mi padre y, por ende, de la mia. Dejaba la ciudad por un tiempo, esa en la que habia nacido, en la que creci y me hice el hombre del que, estaba seguro, mi madre estaria orgullosa. Lo dejaba para respirar otro ambiente, conocer otra ciudad, y, quien sabia, si en aquel destino acabaria encontrando algo de compania. Capitulo 1 --Hola, disculpe... --sonrei senalando el asiento de ventanilla que me pertenecia. --Hola, claro --me devolvio la sonrisa y se levanto. apartandose para dejarme paso. --Estos aviones cada vez dejan menos espacios, me llamo Chris. --Si --sonreia --. Soy Lara. --Casi pierdo el avion, vaya caravana habia en la autovia hacia el aeropuerto. --Ni idea, llegue hace tres horas. --Chica precavida. --Bastante, ya perdi una vez un vuelo y no me pasa mas. --?Vas a Roma por trabajo? --No, voy a pasar unos dias, realmente iba a venir con mi amiga, pero le fallecio un familiar en Paris y tuvo que cambiar el rumbo. --Vaya, asi que te vas a perder por la ciudad italiana sola. --Si, tengo muchas ganas de conocer Roma. --Es preciosa, no es la primera vez que vengo y se que repetire muchas veces. --?Vienes por trabajo? --No, vengo a desconectar un poco, me hacia falta perderme por el mundo. --El trabajo... --No, bueno, muchas historias, el trabajo es lo que menos lata me da y lo que menos hago. --?Lo que menos haces? --Vivo de la renta de un edificio a pie de playa que herede de mi padre. --Joder, ?y necesitas desconectar de vivir de la renta? --se echo a reir. --Hace cinco anos que murio mi padre y la verdad que me afecta mucho esta clase de aniversarios. --Lo siento... --Tranquila, unas pizzas, unos paseos y todo se sobrellevara. --Claro, dicen que Roma tiene magia. --Y sin truco, es una ciudad que es para dejarse llevar. --Lo primero que hare sera tirar unas monedas en la Fontana di Trevi, quiero ver si es verdad que se cumplen los deseos. --Lo unico que es verdad es que pierdes el dinero que tiras. --Bueno, tampoco me voy a arruinar, no es que tenga un edificio en alquiler, pero al menos trabajo tengo.

  • Chocolate para Julen de Roni Green

    https://gigalibros.com/chocolate-para-julen.html

    Ser el pequeno de ocho hermanos no es algo facil, sobre todo en una familia como la suya. Las expectativas son demasiado altas y cuando caes el golpe puede ser muy duro. Aun teniendo el apoyo y el carino de la familia la verdad no siempre es facil de llevar adelante.
    Julen Arraiza es un joven escritor de novela negra que ha conseguido un exito arrollador con su primer trabajo publicado. Conociendo el mundo editorial como lo hace, sabe que lo mas dificil aun esta por llegar. Su meta es publicar con la editorial mas grande y prestigiosa del pais, la editorial Arraiza, y demostrar a todos que no es un exito efimero del mundo editorial. Pero su padre, Sebastian Arraiza, tiene una serie de condiciones que debera aceptar si quiere conseguir su objetivo.
    Sergio Cano ha sido la Nemesis de Julen desde que ambos eran apenas unos adolescentes. Sus vidas han corrido paralelas a traves de los anos, sus intereses cruzandose en varias ocasiones, haciendo que las chispas saltaran entre ellos y no de buena manera. Ahora Julen debe aceptar a Sergio como su editor por imposicion expresa de su padre, si quiere publicar con la editorial Arraiza.
    El tiempo pondra a cada uno en su lugar y la relacion de Sergio y Julen ira cambiando y transformandose para dar lugar a algo que, ni uno ni otro, hubiera esperado.
    Aunque segun Sergio la esperanza es lo ultimo que se pierde.

  • La Octava Condicion (Ordinales 2) de Phavy Prieto

    https://gigalibros.com/la-octava-condicion-ordinales-2.html

    Segunda obra literaria de la Saga Ordinales.

  • Una lista de deseos para Santa Claus de Mariah C

    https://gigalibros.com/una-lista-de-deseos-para-santa-claus.html

    La Navidad es sin duda la epoca mas feliz del ano, un periodo de alegria, ilusion y esperanza. Aunque no para Yarek que cree que el gordinflon de las barbas blancas y las ropas ribeteadas de armino que todos los anos lo visitaba para Navidad ha dejado de existir.
    Un denso manto blanco cubre Chicago. La noche de Navidad esta cercana.
    ?Crees en la magia y en como lo imposible se hace realidad?
    Escribe una lista de deseos, pide con el corazon, cierra los ojos, y dejate llevar.

  • Me entregue a ti (Por amor 4), Maria Beatobe de Maria Beatobe

    https://gigalibros.com/me-entregue-a-ti-por-amor-4-maria-beatobe.html

    Volver a encontrarse con Mora hace que Naira se desestabilice y que Gael empiece a desconfiar sobre la relacion que une a su novia con aquel desconocido. Pero eso no afectara a la gran celebracion que Gael le ha preparado a Naira por el primer mes juntos. Sera dificil que ambos la olviden.

  • Perfecto para mi de Meagan Mckinney

    https://gigalibros.com/perfecto-para-mi.html

    La nueva enfermera Rebecca O'Reilly habia transportado la imaginacion del Dr. John Saville a territorios inexplorados. Evidentemente, aquella gata salvaje habia sufrido heridas en el amor y protegia su maltrecho corazon con una lengua viperina. John sospechaba que su actitud descarada y arrogante escondia, al mismo tiempo, la inocencia y un deseo atrevido de experimentar el sexo.

  • El paraguas balcanico de Enrique Criado

    https://gigalibros.com/el-paraguas-balcanico.html

    La vivencias de un diplomatico en los Balcanes.

  • Mariela de Yolanda Guerrero

    https://gigalibros.com/mariela.html

    Esta historia apasionada, epica e inolvidable nos habla de como la vida y el amor se abren paso incluso en la oscuridad de la mayor de las tragedias.

  • Frecuencia modulada, Gonzalo Castro de Gonzalo Castro

    https://gigalibros.com/frecuencia-modulada-gonzalo-castro.html

    A veces la amistad con un amigo se convierte en fascinacion por su novia. Quiza esto no deba resultar tan extrano: los mismos rasgos que hicieron que nos acercaramos a esa persona aparecen potenciados en alguien del sexo opuesto que lo acompana y tambien disfruta de nuestra presencia. El problema con esa situacion es que nos lleva a decidir por la lealtad o por lo que dicen nuestros sentimientos.

  • En la casa del guarda de Julie Klassen

    https://gigalibros.com/en-la-casa-del-guarda.html

    ?Por que habria una dama de esconderse en una casa llena de secretos?
    La senorita Mariah Aubrey desaparece tras un escandalo y se esconde en la casa abandonada de un guarda, en los confines de la hacienda de un pariente. Para ganarse la vida y pagar a su leal sirvienta, Mariah se dedica a lo unico que sabe hacer: escribir novelas.
    El capitan Matthew Bryant, que acaba de volver de la guerra rico y condecorado, alquila una enorme hacienda a un noble empobrecido, decidido a demostrarle a la bella mujer a la que un dia amo y lo rechazo que se equivocaba, y de que manera.
    Al visitar la propiedad, descubre la vieja casa de un guarda y le sorprende encontrar en ella a una joven de cuya identidad no sabe nada, ni tampoco de su pasado. Sin embargo, cuanto mas sabe de ella mas se da cuenta que debe alejarse de alli. Enamorarse de una mujer a la que ha rechazado la buena sociedad no serviria mas que para arruinar sus planes. Ademas, la propia casa alberga sus secretos. ?Podran Mariah y el capitan Bryant descubrirlos antes de que el astuto heredero de la propiedad los entierre para siempre?

  • El inquilino de la Alhambra de Roberto Wolfgang Conde Schuh

    https://gigalibros.com/el-inquilino-de-la-alhambra.html

    Abdel, hijo de Hassan, medico que durante anos ha cuidado de la salud de Mohamed (sultan de Granada) y famoso por curar lo que a otros les era imposible, tiene que salir huyendo repentinamente de la ciudad para proteger a su familia.

  • El infierno de Ian (Saga Security Ward 6) de N. Q. Palm

    https://gigalibros.com/el-infierno-de-ian-saga-security-ward-6.html

    Las cosas no podian ir peor para Ian Porter. Despues de buscar a Isabella y de encontrarla, todo se viene abajo. El destino les ha jugado una mala pasada.
    Ha estado ausente de su equipo por no poder concentrarse, algo que el capitan de su unidad, Slade Ward, exige al maximo. Hasta que despues de incorporarse a una mision de riesgo descubre que la vida le tiene reservadas algunas sorpresas. En Europa, vivira en sus propias carnes lo que han sufrido otras victimas. La impotencia y la rabia terminan por consumirlo.
    ?Puede una operacion en Budapest convertirse en el peor de los escenarios? ?Puede el amor superar una mala decision?

  • Sincronicidad de Carl Gustav Jung

    https://gigalibros.com/sincronicidad.html

    Carl Jung define la <> como <>. Lo que distingue una sincronicidad de sucesos sincronicos normales es la existencia de un significado subjetivo comun que inevitablemente interpreta el sujeto que la experimenta. Se trata de una teoria que descarta el principio de causa-efecto del paradigma moderno y, al mismo tiempo, es una teoria antimaterialista, puesto que se centra en una experiencia subjetiva que engloba alineamientos supuestamente <> de sucesos.
    Durante su vida, Jung vivio constantes sincronicidades tanto personalmente como en la vida de pacientes de psicoanalisis. En un determinado caso, una paciente excesivamente <> sonaba constantemente con un escarabajo dorado. Jung no podia avanzar en el psicoanalisis con ella debido a la resistencia de un modo de pensar demasiado cerrado. Sin embargo, un dia, tras relatarle la paciente otro sueno, sono un golpe en la ventana, Jung la abrio y en la habitacion entro precisamente un escarabajo verde dorado que se poso sobre la mesa. La mente de la paciente no volvio a oponer resistencia al psicoanalisis.
    Las sincronicidades suelen suceder con mayor profusion en periodos de transformacion: nacimientos, muertes, enamoramiento, psicoterapia, obra creadora intensa, cambio de profesion... En palabras de David Peat, <energia mental se propagase hacia afuera en el mundo fisico>>.

  • Jamas te olvidare (Generacion 2) – Elisabeth M.S de Elisabeth M

    https://gigalibros.com/jamas-te-olvidare-generacion-2-8211-elisabeth-m-s.html

    SEGUNDA ENTREGA DE LA TRILOGIA GENERACION SINOPSIS: Minerva es una guerrera del rock. Conocida por su caracter fuerte, extrovertido y poco corriente. Al superar una de las etapas mas complicadas en su vida toma la decision de terminar con su pareja. No podia seguir manteniendo una relacion de excesos, toxica y carente de amor. Dominik es un tecnico de sonido notable. Un tipo tranquilo, sensato y enamoradizo. Cuando ve a Minerva por primera vez en el escenario queda hechizado. Su embrujo le conduce a perseguirla para conseguir fundirse en el calor de sus brazos. ?Lograra Dominik seducirla? ?Podra Minerva volver a enamorarse?

  • Persuasion (Placeres prohibidos 2) de Adrian Blake

    https://gigalibros.com/persuasion-placeres-prohibidos-2.html

    Pidio veinticuatro horas… pero ahora Derek necesita mas.
    Gabrielle intenta olvidarle, pero volveran a encontrarse.
    Ella quiere experimentar. El esta dispuesto a intentarlo
    ?Sera Derek capaz de superar las duras pruebas que debera superar para estar con ella?

  • La mecedora. Lo que no sabes te salvara de Anna Hernandez

    https://gigalibros.com/la-mecedora-lo-que-no-sabes-te-salvara.html

    Un asesino invisible. Dos policias. Un angustioso triangulo del que no pueden escapar. La cuenta atras empieza con un secuestro. La tragedia se esconde en una casa perdida en los bosques suecos de Kalvtrask.
    La vida de Nils Akerman, inspector de policia en Ostersund, Suecia, queda en suspenso el dia que desaparece su hijo Axel, de tres anos. El pequeno estaba a cargo de Elena Rius, una inspectora de policia espanola, amiga de la familia, que pasaba sus vacaciones con ellos. Mykola Solonenko no sabe quien es, pero debe raptarla para llevarse al nino.

  • En el frio invierno de Olivia Chloe

    https://gigalibros.com/en-el-frio-invierno.html

    Esas Navidades iban a ser muy diferentes para Sonia. Sus padres ya no estaban y la soledad seria su companera.

  • Amor entre acertijos (Club del Crimen 1) de B. Amann

    https://gigalibros.com/amor-entre-acertijos-club-del-crimen-1.html

    “?Y que queriais que hiciera, dejar que ella se sintiera un desecho al que nadie quiere, ni querra jamas?”…
    Si la ira o el dolor tuvieran rostro, en ese momento se reflejarian en el suyo. Escuchar esas palabras de los mismos labios que la noche anterior habian besado cada trocito de su piel la destrozo ?El mismo hombre que la habia amado sin cortapisas y al que habia esperado toda su vida??Su John?
    Lo odiaba.
    La Meredith que lo habia amado desde ninos murio en ese mismo instante. Si todo lo que Meredith creyo amor tan solo fue un medio empleado por John para lograr apartarla de su amado club del crimen, acababa de conseguir todo lo contrario.
    ?Creia que una noche de amor le habia dado el derecho sobre su mas preciada posesion, su libertad? En tal caso se habia equivocado…
    Descubriria quien estaba detras de la muerte de Abrahams, asi como tras el secuestro de los muchachos, aunque le fuera la vida en ello…
    El amor no estaba hecho para rellenitas y bajitas. El amor no era para ella...
    Era hora de dejar de sonar, ?o no?

  • Vino y Miel de Myriam Chirousse

    https://gigalibros.com/vino-y-miel.html

  • Baile en El Aire (La isla de las Tres Hermanas 1), Nora Roberts de Nora Roberts

    https://gigalibros.com/baile-en-el-aire-la-isla-de-las-tres-hermanas-1-nora-roberts.html

  • Viaje de Omar de Adrian Savino

    https://gigalibros.com/viaje-de-omar.html

    --Ana Levstein--

  • El Novio de mi Hermana de Nahomy Rodriguez

    https://gigalibros.com/el-novio-de-mi-hermana.html

    Anne Salvyn se ha graduado de abogada, poniendo en pausa su sueno de ser fotografa para continuar con el legado familiar. Y viendose envuelta en la desmedida manipulacion de su familia, encontrara apoyo y comprension en quien menos lo espera, Nataniel Rousse, el novio de su hermana.
    Ese apuesto hombre que suele mirarla en secreto y en silencio cuando nadie los ve. El que, asqueado de ser tan correcto, y cansado de vivir en una mentira, despertara en ella la chispa de una indebida pasion contra la que no podran batallar.
    Una apasionada historia de amor, que rompera las barreras de lo debido y se colara en tu corazon para enfrentar el miedo a ser feliz.

  • Motera Adolescente de Marta Escudero

    https://gigalibros.com/motera-adolescente.html

    Clara no sabia lo que queria.
    Su vida era un pozo sin fondo.
    Enterrada entre libros.
    Sin amigos. Deprimida.

  • Erase una vez… Las villanas de Eva M. Soler , Idoia Amo

    https://gigalibros.com/erase-una-vez-8230-las-villanas.html

    En todo grupo de amigas existe esa que se alegra de que las cosas te salgan mal. Esa incapaz de disimular su sonrisa cuando apareces con unos kilos de mas. Esa que se regocija cuando te despiden de tu ultimo trabajo. Esa que sonrie cuando tu corte de pelo se descontrola y acabas pareciendo un crestado chino. Esa cuyos piropos son, en realidad, insultos. “Me encanta tu maquillaje, disimula tu enorme nariz”.
    Una invitacion de boda pone patas arriba el mundo de Audrey y Briana, dos chicas adineradas acostumbradas a tenerlo todo. Audrey tiene una cuenta pendiente con el novio y no dudara en planear la manera de estropear la celebracion con la ayuda de Briana, aunque arrastren al resto de sus amigas durante el proceso.
    Erase una vez un plan maquiavelico y una venganza salpicada de romance. Una historia donde, ni los buenos son tan buenos, ni las villanas tan villanas.

  • Tablero mortal de Javier Marin Mercader

    https://gigalibros.com/tablero-mortal.html

    Con sus ultimos pasos dejo atras el sinuoso camino que lo llevo a lo mas alto de la colina, se detuvo con cara de satisfaccion y contemplo el mar de luces a lo lejos bajo sus pies. Era media noche, una fria brisa traia un leve olor a tierra mojada y todo lo que veia era el manto azulado de una ciudad que no dormia, miles de pequenos focos de distintos colores le daban la bienvenida. Habia pasado mucho tiempo fuera, su instruccion fue dura y sacrificada. Era la hora: estaba escrito. Mirando aun esos destellos como pequenas luciernagas frente a el, su cara mostro una casi imperceptible sonrisa. La situacion lo excitaba. La adrenalina le corria veloz por las venas. Su cabeza era un torbellino de sentimientos. Por el, por su sufrimiento, por lo que dejo atras. Ahora estaba preparado. Devolveria todo el dano que habia sufrido alli. Abrio los brazos y, mirando al cielo, rio, esta vez a carcajadas. Cuando se relajo lo sintio. Todo esta a punto de empezar. PRIMERA PARTE 1 COMIENZO A las 21:30 aun estaba en su oficina, situada en el edificio mas alto de la ciudad: la Torre de Cristal era una construccion de treinta y cinco pisos, acristalada en todo su contorno. Las mejores empresas contaban con sus oficinas alli. Una de ellas, Longoria & Becker Asociados, mantenia una gran actividad durante casi las 24 horas del dia, abogados de plantilla, becarios, secretariado, etcetera. Su plantilla ascendia a veintidos personas que representaban a los mas renombrados personajes de la sociedad, desde banqueros y deportistas hasta grandes magnates de negocios. Andres Longoria era uno de sus fundadores. Bajo la luz de su lujosa lampara de escritorio aporreaba su portatil, nervioso... Este caso lo estaba sacando de sus casillas. Alicia Faith, la nueva bomba musical, numero uno en todas las cadenas musicales del pais, estaba metida en un lio importante de drogas, que de momento se habia conseguido ocultar a la prensa, pero ?hasta cuando? La defensa que preparaba no tenia ni pies ni cabeza, no sabia por donde cogerla y estaba empezando a perder los nervios. Dejo el portatil bruscamente y se levanto de su acolchado sillon de cuero. Se acerco al mueble bar y se puso una relajante copa de whisky, hecho mas habitual que de costumbre en estos ultimos dias; camino despacio hacia la cristalera desde donde se veia toda la ciudad, le encantaba esa panoramica, sentia que todo lo que habia alli abajo estaba muy cerca de su mano..., le hacia sentir fuerte y lo ayudaba a pensar. --!Maldita ninata de mierda drogadicta! Estaba acostumbrado a lidiar con ese tipo de gente, pero siempre se sumia en ese estado de nervios cuando sabia lo que se avecinaba, la prensa, internet, television, publicidad. Lo mejor de estos casos era lo que despues le reportaban; mas dinero, mas clientes importantes y su nombre en todos los noticiarios. Apuro su copa echando la cabeza hacia atras con un gesto mas que exagerado y se dispuso a llenarla de nuevo. Mientras lo hacia, penso en lo que le esperaba al salir del despacho. Antes de volver a casa pasaria a ver a Jenny, no habia mejor forma de calmar los nervios y dejar de pensar en toda la gentuza que tenia que ver y con la que tenia que lidiar a diario. Otra vez con su copa llena, volvio a la cristalera y contemplo de nuevo lo que tenia a sus pies, cientos de coches moviendose sin parar, peatones andando deprisa para resguardarse del frio. Le encantaba esa ciudad. De repente oyo un susurro a su espalda. Se dio la vuelta y la piel se le puso de gallina; no habia nadie, pero el escalofrio aun le duraba. --!Me voy a volver loco, joder! En cuanto giro la cabeza para volver a concentrarse en el paisaje y su copa, algo lo agarro por el cuello. La copa se estrello contra el parque y en el reflejo del cristal pudo ver una sombra que empunaba un objeto plateado. A la vez que sus ojos siguieron el destello de la fina hoja bajar hasta su cuello, una voz le susurro: --Chsss, todo ha terminado. Con la misma rapidez que aparecio, la cuchilla lo rasgo de lado a lado. Los ojos de Andres se le salian de las orbitas, su ultima vision fue la de la bonita cristalera que se llenaba de sangre, su sangre. Despues todo fue tranquilidad. 2 CAFE Marco Duarte entro a la comisaria a primera hora. Esa manana habia decidido ir dando un largo paseo por la ciudad desde su casa. Pocas cosas superaban un rato a solas con sus cascos puestos, escuchando a sus grupos preferidos mientras se encaminaba al trabajo. Le toco a su reproductor decidir que oir, la voz de Kutxi Romero y Marea fue un buen chute para empezar la jornada. Solo se dio cuenta de que cantaba un poco mas alto de lo que debia al ver los rostros de la gente que bajaba las escaleras de la comisaria mirarlo extranados. Amanecio, la vi irse sonriendo con lo puesto por la puerta del balcon, el pelo al viento diciendome adios, porque decidio que ya estaba hasta las tetas de poetas de bragueta y revolcon, de trovadores de contenedor... !como yo! [*] Le encantaba esa cancion y no sabia como hacer para no tararearla. Sobre todo, una manana como esa, que estaba de muy buen humor. Su ritual era siempre el mismo desde hacia ya casi cinco anos: saludar a Jose, el policia que custodiaba la entrada al edificio desde tiempos inmemorables, subir a la primera planta, donde se encontraba la seccion de Homicidios, y cruzar todo el pasillo para llegar a la maquina de cafe. Alli se tomaba, de un trago, el segundo del dia. A partir de ese momento ya empezaba a ver las cosas de otra manera. Parecia que esa semana iba a ser tranquila; falta hacia despues de su ultimo caso, todo el equipo habia quedado exhausto tras conseguir meter entre rejas a los hermanos Flores (robo a mano armada y tres asesinatos en la huida). Despues de casi un mes de busqueda dieron con ellos y el juez hizo su trabajo. --!Buenos dias, Marco! --dijo una voz a su espalda--. ?Una noche larga? Dejame adivinar, ?Extremoduro?, ?Marea? O quizas vienes mas tranquilo... ?Ivan? Marco se dio la vuelta, tranquilo, mientras se quitaba los cascos de las orejas, y vio a su companera apoyada en la puerta con los brazos cruzados sobre el estomago, sosteniendo una cantidad ingente de carpetas marrones atestadas de folios. Alejandra Verdu llevaba siendo su companera tres anos y en ese tiempo habian compartido ratos de todo tipo; se apreciaban mutuamente y se conocian como si llevaran juntos desde el colegio. Casi 1,80 de pura fibra, pelirroja de pelo largo, habitualmente recogido en una cola alta, que acentuaba sus facciones finas y delicadas. Sus pecas en lo alto de los pomulos le daban un aire travieso que, mezclado con esos ojos verdes, hacia de la inspectora todo un monumento, provocando que todas las cabezas se volvieran para verla por donde quiera que pasaba. Ella lo sabia, claro, y se lo tomaba bastante bien; incluso lo disfrutaba y solia tener un comentario ironico para casi todas las situaciones de ese tipo que se le presentaban. Asi era ella: dura pero risuena, siempre con la sonrisa en la boca. --Esta manana he dejado que me llevara la Marea, ?y tu? ?A que viene esa cara de felicidad? --Marco le sonrio guinandole un ojo. --Bueno, nueva semana y aun no tenemos ningun caso que empezar a investigar, digamos que disfruto de estos momentos antes de que se acaben. ?Te apetece un poco de papeleo? --le dijo senalando las carpetas que llevaba en el regazo.

  • Atrapada en el espejo de Gemma Lienas

    https://gigalibros.com/atrapada-en-el-espejo.html

    Laura Bellido es una joven arquitecta con estudio propio, un marido atractivo y simpatico y un hijo de seis anos. No tiene problemas economicos, ni de ningun otro tipo y parece una mujer feliz. Nada hace pensar que una noche, despues de una cena romantica para celebrar los exitos laborales de su marido, Laura acabara desnucada por las curvas de Garraf. Cuando Gina, su amiga intima que vive en el extranjero, recibe la noticia de su muerte, tiene el presentimiento de que hay algo que se le escapa. Esta intuicion inicial va tomando forma cuando se instala en Barcelona y profundiza en la vida, aparentemente estable, de su amiga. A partir de las conversaciones con la gente mas cercana a Laura, Gina empieza a encajar las piezas del cristal donde se esconde la verdadera historia de Laura.Gemma Lienas, con la habilidad narrativa que le caracteriza, construye una novela de gran tension psicologica que cautivara al lector desde las primeras paginas. De una profundidad conmovedora y llena de detalles reveladores sobre las relaciones de poder entre las personas, Atrapada en el espejo es una novela coral que se adentra en la complejidad de las contradicciones humanas.

  • Ilusiones prestadas de Clara R. Sierra

    https://gigalibros.com/ilusiones-prestadas.html

    Estoy empezando a pensar que los libros tienen vida propia y eligen cuando quieren ser publicados. A pesar de tener varios proyectos empezados, un dia me desperte con la idea fija de que era el momento de publicar una recopilacion de todas las colaboraciones que hice y aqui estan. Han sido seis anos en los que escribia para otros. Mis ideas, ilusiones, eran prestadas para Fan Pages, grupos de Facebook, antologias beneficas o no y programas de radio. Creo que para todos los que empezamos en este mundillo es un verdadero honor ver nuestro texto publicado y mas si es para una buena accion. Puede sonar un topico, pero es cierto, recibes mucho mas de lo que das. Cada texto que creas es un aprendizaje que no te ensena ningun curso de escritura y he participado en varios. La razon es que uno de los mejores ejercicios para aprender a escribir, es hacerlo y cada vez que tienes el reto de plasmar un relato de la nada: de eso trata. Recuerdo la primera vez que escribi un relato para ser publicado en la antologia benefica La vida es bella. Pensaba, ?como me dejan publicar con ellas? La mayoria eran ya escritoras con varias novelas a sus espaldas y a partir de ahi salieron muchas otras. Cuando comentaban en el grupo el proceso de subir el libro en la plataforma Amazon, juro que lo veia como cuando el hombre pisaba la luna. Lo vivi como si fuese irreal. A mi no me podia pasar eso... y me paso. Cuando por fin vi mis letras en papel fue como; lo he conseguido. Debo decir que soy muy critica conmigo misma y me senti orgullosa de mi trabajo. Ya se que es mejorable, de eso se trata de progresar, pero senti que tenia calidad suficiente como para si lo viese en una libreria pudiese tener un nivel bueno. Tambien parecia que al escuchar que me leian en la radio, no era mi texto o me diese tanta verguenza... No se, cada vez que escribes no puedes evitar mostrar alguna parte intima de ti que quiza no mostrarias de otra forma. Esa es la magia de la literatura. Fue maravilloso documentarme para los relatos. En La victoria del corazon fue como visitar el norte de Francia en plena primera guerra mundial y en Inseparables a Roma y mirar por sus calles. Es uno de los regalos que tuve, aprendi a localizar lugares donde luego poder crear novelas. Tambien los personajes se quedan un poco en ti y los sientes un poco como amigos imaginarios. No pienses mal. Son <> porque pasas mucho tiempo pensando en ellos y darles vida, <> porque son producto de tu mente. Alguno se merece un poco mas de mi... No descarto la idea de que varios de estos relatos se conviertan un dia en novelas, ya que creo que pueden aportar bastante si se escarba un poco mas en ellos y en sus historias. Conforme pasaba el tiempo me costaba mas recortar el texto, los personajes pedian mas presencia y eso es genial cuando no quieres parar de darle al teclado. Sin duda, ha sido una experiencia unica. Cada vez que me invitaban a colaborar paraba el blog y todo para disfrutar escribiendo. Hubiese querido incluso participar en mas, pero a veces no daba abasto. Tambien hay algun relato que no puedo publicar aqui porque cedi los derechos, pero os invito a que tambien les echeis un vistazo. Se llama Pisadas que dejan huellas y es a favor de x. Tambien hay otra colaboracion que no he publicado porque aun no salio a la luz. De corazon puedo decir que si alguna de estas letras sirvio para que una asociacion tuviese beneficios, me doy por satisfecha. Me consta que en alguna si, asi que meta conseguida. Ahora toca que estos diecinueve textos se unan para formar mi propio libro. He tenido la suerte de que he escrito desde erotica (suave), romantica, algo de misterio...etc. Aqui teneis una miscelanea bastante interesante que espero que disfrutes, tanto como yo al escribirla. Todo ese esfuerzo unido para que puedas leer algunas pinceladas de mis letras. El ascensor La amaba en el secreto del silencio, solo se permitia acariciar su cuerpo con torpes miradas y olia su esencia cuando sus cuerpos se aproximaban para hablar en el trabajo. Cada dia se acicalaba para ella, para la que parecia que no existia. El fin de semana era una tortura para el, pensando en que haria… Y se tenia que obligar a liberar su mente con fiestas, deporte y otras mujeres que no significaban nada para el. Hasta que un dia ordinario, de un mes cualquiera, subieron juntos en el ascensor hacia la oficina. Un clack paro en seco la cabina. Quedando atrapados. El penso que era el paraiso y la miro. Estaba poniendose blanca e hiperventilaba. Le pregunto si estaba bien, una pregunta estupida. Sabia todo lo que en la oficina se hablaba de ella y padecia claustrofobia. Se acerco a ella, en un gesto amable le dijo que no tuviese miedo y le desabrocho los primeros botones de la camisa. Le regalo una timida sonrisa. Entonces bajo la cremallera de su falda y no tuvo que hacer mas. Su boca busco la suya y el no pudo menos que corresponder su beso. Durante un segundo la miro, pensando si aquello era real o una de las fantasias con las que cada noche se dormia. Sus ojos destilaban deseo, fuese lo que fuese llegaria hasta el final. Suspiro, alzandola en brazos sin dejar de besarla. Ella rodeo con sus piernas su cuerpo, mientras el no dejaba de devorarla primero la boca, bajo por el cuello, descubrio su pecho y lo gozo. Ella jadeante bajo sus pantalones y lo acaricio. El se tuvo que contener para no explotar de pasion. Desgarro su ropa interior. Y empezo el vaiven que busca el placer de la carne. Ella le susurraba al oido todo lo que habia anhelado y le revolvia el pelo. Juntos llegaron donde explotaron sus sentidos. Se besaron despacio y dulcemente para despedir los cuerpos. Oyeron voces desde fuera. Apenas habian pasado unos minutos que cambiaron sus vidas. Ella le descubrio y el la conquisto para siempre. Gracias a la invitacion de Eva Siempre Sola publique este relato en la Fan Page de Facebook: Relatos llenos de amor, siendo el post elegido como publicacion destacada llegando a obtener mas de 500 likes, en el ano 2014. El dia menos esperado Ana no era igual que el resto de las mujeres. Vivia entregada a su trabajo y aunque rondaba los 40 no le atraian los convencionalismos. No estaba dentro de sus planes la idea de casarse, ni formar su propia familia. Se le volaban los dias delante del portatil. Tan solo le acompanaban los recuerdos de un ayer, ya muy lejano en el tiempo, cuando de adolescente se enamoro por primera y unica vez. Si una de sus amigas le rompia su rutina y la invitaba a cenar. Se imaginaba como seria su vida en pareja con el. Cuando un nino se acercaba jugando a ella. Miraba con curiosidad su cara, elucubrando como seria un hijo con el. En casa los dias que recibia el frustrante sermon de que sus padres eran mayores y querian verla casada antes de morir. Solo pensaba en como se llevarian con el. Era todo su mundo y su mundo nada era, mas que ilusiones vanas. Antes de dormir recordaba el brillo de sus ojos al mirarla, los reflejos cobrizos de su pelo al sol, de sus manos suaves cuando se entrelazaban con las suyas y esos besos que le hacian perder la nocion del tiempo. Hasta que el dia menos esperado al regresar de su trabajo, vio a lo lejos un extrano que no dejaba de mirarla. Al principio no le hizo caso, pero luego pudo mas la curiosidad y al llegar a su encuentro… Alli estaba el que ocupaba todos sus suenos, dormida y despierta. La miraba dulce y timidamente, esbozando una sonrisa. Se paro en seco pensando que era una ensonacion. Lo miro absorta. El brillo de sus ojos se habia apagado, los reflejos cobrizos de su pelo se volvieron canos y ralos, las manos se hallaban endurecidas por los anos y su boca ya no le parecio apetecible.

  • Con solo una caricia de Eva Gil Soriano

    https://gigalibros.com/con-solo-una-caricia.html

    ?Podra Valerio conquistar el amor de una seria ejecutiva como Noelia?

  • La buena nutricion de Victoria Lozada

    https://gigalibros.com/la-buena-nutricion.html

    “Ya no se puede comer nada”; “Todo lo bueno engorda”; “?Por que los nutricionistas no se ponen de acuerdo?”; “?Por que se contradicen los estudios cientificos?”.
    Estas son algunas de las inquietudes que nos surgen cuando hacemos la compra. Cada dia, tareas como ir al super, distinguir la informacion importante de un etiquetado o diferenciar entre procesados “buenos” o “malos” se han convertido en labores complejas y dispendiosas.
    En La buena nutricion, la nutricionista Victoria Lozada nos demuestra que llevar un estilo de vida sano es posible, y que es mucho mas simple de lo que parece. Hay vida mas alla del recuento de calorias y de comer lechuga todo el dia. Este libro nos ayudara a hacer frente a la publicidad enganosa, a repensar la lista de la compra y a mantener una alimentacion positiva y coherente.
    Una obra que nos acerca de forma sencilla y accesible a una nutricion saludable, consciente e informada.

  • Ultima oportunidad de Ivory Angers

    https://gigalibros.com/ultima-oportunidad.html

    Ano 2326
    Iris Keller tiene una ultima mision antes de cogerse unas merecidas vacaciones: acabar con el peligro que supone una maquina capaz de manipular el tiempo. Pero durante el reconocimiento previo, el complejo sufre un accidente haciendo que ella, junto con su companero John y su sobrina Faith, terminen en la Escocia del siglo XIV.

  • Las vencedoras de Laetitia Colombani

    https://gigalibros.com/las-vencedoras.html

    Un himno a la solidaridad y a la esperanza donde Colombani da voz a las vencedoras anonimas de la historia.

  • Viejo canibal de Daniel P. Espinosa

    https://gigalibros.com/viejo-canibal.html

    Un thriller de terror sobre canibales y asesinos de ninos en la Nueva York de 1936. Finalista del PREMIO TRISTANA.

  • La mansion (Serie Ira dei) de Mariano Gambin

    https://gigalibros.com/la-mansion-serie-ira-dei.html

    Desde hace mas de cien anos, un misterio habita en la mansion de los Fitz-Stuart en La Laguna. Tras un incendio devastador, una nueva construccion se superpuso a la antigua, pero no desterro la huella inquietante de quienes vivieron en ella, que vuelve con mas fuerza que nunca.
    El inspector Galan investiga las circunstancias que rodean la muerte del ultimo propietario, en apariencia natural. Sin embargo, no tarda en descubrir que en torno a el surgen una serie de interrogantes misteriosos que indican que las cosas no son como parecian en un inicio.
    Luis Ariosto acompana a su tia Enriqueta a la lectura de un testamento envenenado. Los herederos deben enfrentarse a un reto complicado de solventar, un quebradero de cabeza con nombre de vino a partir de una variedad muy especial de uva canaria.
    La periodista Sandra Clavijo y la arqueologa Marta Herrero se ven inmersas en la busqueda de unas joyas desaparecidas a finales del siglo XIX que las lleva de un enigma a otro, en una espiral que les conduce a un secreto oculto en lo mas profundo de la vieja ciudad.