tierra sobre la memoria
-
tierra sobre la memoria - Estela Melero Bermejo
https://gigalibros.com/tierra-sobre-la-memoria.htmlEn la posguerra espanola, en la humildad mas absoluta, surge el amor entre dos personas que no deben estar juntas por sus circunstancias personales. Son Irene y Arturo. Un hecho inesperado hace que se separen. Mientras sufren los abusos mas descabellados, trataran de volver a encontrarse. La fuerza de Irene, que se resiste a ser una mujer manipulada por los dictamenes de la sociedad, la hara salir adelante. Sus vidas y las de los personajes que les rodean, estaran marcadas por la ideologia politica que presentan ahora o que demostraron durante la guerra civil.
-
[PROMOCIᴏ́N] Tierra sobre la memoria.: Una historia...
https://www.amazon.es/Tierra-memoria-Estela-Melero-Bermejo-ebook/dp/B082LW812PMirar en el interior de este libro. [PROMOCIᴏ́N] Tierra sobre la memoria.: Una historia de amor en plena posguerra ...
-
Tierra sobre la memoria. : Melero Bermejo, Estela - Amazon
https://www.amazon.es/Tierra-memoria-Estela-Melero-Bermejo/dp/1077277555Tierra sobre la memoria. : Melero Bermejo, Estela: Amazon.es: Libros.
-
Tierra sobre la memoria. - Estela Melero Bermejo - Babelio
https://es.babelio.com/livres/Estela-Melero-Bermejo-Tierra-sobre-la-memoria/98909Críticas (20), citas (22) extractos de Tierra sobre la memoria. de Estela Melero Bermejo. ... Comprar este libro en papel, epub, pdf en ...
-
Tierra sobre la memoria. - Estela Melero Bermejo - Babelio
https://es.babelio.com/livres/Melero-Bermejo-Tierra-sobre-la-memoria/107008No soy yo de llorar con los libros pero me ha sobrecogido de tal manera que me quedé huérfana al terminarla, necesitada de consuelo. Estela, tienes un talento ...
-
Tierra sobre la memoria. by Estela Melero Bermejo - Goodreads
https://www.goodreads.com/book/show/52644277-tierra-sobre-la-memoria"Tierra sobre la memoria" es el primer libro de su autora y espero que no sea el último. Nos sitúa en un pequeño pueblo de la meseta castellano-manchega en el ...
-
Tierra sobre la memoria - Escritores.org
http://www.escritores.org/libros/index.php/item/tierra-sobre-la-memoriaNovedades editoriales, libros, Escritores, editorial, escritor, escribir, libro. ... Tierra sobre la memoria. Autor: Estela Melero Bermejo; Biografía Autor: ...
-
tierra sobre la memoria. - Ambra Llibres
https://www.ambrallibres.com/es/libro/tierra-sobre-la-memoria-_1087404TIERRA SOBRE LA MEMORIA., MELERO BERMEJO, ESTELA, 12,48€. ...
-
Tierra sobre la memoria. - Melero Bermejo, Estela - IberLibro ...
https://www.iberlibro.com/9781077277557/Tierra-memoria-Melero-Bermejo-Estela-1077277555/plpSi conoce el autor y el título del libro pero no lo encuentra en IberLibro, nosotros podemos buscarlo por usted e informarle por e-mail en cuanto el libro esté ...
-
Libro - Tierra Sobre La Memoria - Estela Melero Bermejo Pdf
https://articulo.mercadolibre.com.ve/MLV-553206743-libro-tierra-sobre-la-memoria-estela-melero-bermejo-pdf-_JMCompra online de manera segura con Compra Protegida © Libro - Tierra Sobre La Memoria - Estela Melero Bermejo Pdf.
-
La Casa de los Deseos de Rudyard Kipling
https://gigalibros.com/la-casa-de-los-deseos.htmlEn muchos de sus cuentos abordo lo sobrenatural, que siempre se revela gradualmente, a diferencia de los cuentos de Poe. En The Wish House una mujer refiere a otra mujer una historia magica y dolorosa; ambas son demasiado humildes para el asombro; aceptan lo increible con la misma resignacion con que aceptan los hechos cotidianos. En A Sahib's War, la fiebre y la presencia del opio hacen que lo sobrenatural sea mas verosimil. Sobre A Madonna of the Trenches, cuyo fondo es la guerra de 1914, cae la alta sombra del Canto V del Infierno. The Eye of Allah no es un relato fantastico, pero es un relato posible. De los cuentos que elegi para este volumen, quiza el que mas me conmueve es The Gardener. Una de sus peculiaridades es que en el ocurre un milagro; la protagonista lo ignora, pero el lector lo sabe. Todas las circunstancias son realistas, pero la historia referida no lo es. Jorge Luis Borges.
-
Rojo de Carlos Sisi
https://gigalibros.com/rojo.htmlEn una base militar en Nueva Jersey mantienen custodiada a una vampira terriblemente poderosa. Cuando esta escapa, desata el terror y el apocalipsis en forma de plaga vampirica. Los vampiros asaltan la cercana poblacion de Hillsdale. Alli se juntan varios supervivientes: Sonia, una policia; y Jimmy, un inteligente friki de Star Wars. Ambos acuden al campamento militar, pero lo encuentran abandonado.
-
Las 48 leyes del poder de Robert Greene
https://gigalibros.com/las-48-leyes-del-poder.htmlComo llegar a lo mas alto y quedarse alli…
-
Navidad accidentada de Brianne Miller
https://gigalibros.com/navidad-accidentada.htmlTras seis anos intentando conseguir su sueno en Nueva York, Zoe por fin podra volver a casa por Navidad. Lo que no esperaba es tener que lidiar con un vecino deliciosamente sexy, aunque odioso… y su enorme y desobediente perro, que la ha tomado con ella sin ninguna razon.
-
Max & Suhail de Tatiana M. Alonzo
https://gigalibros.com/max-038-suhail.htmlMax y Suhail se aman, pero el espera en un aeropuerto mientras ella esta a punto de casarse. Ambos tienen mucho que contar sobre los acontecimientos que los trajeron a este punto. Se conocen desde ninos, se enamoraron desde muy temprano, ?que paso a traves de los anos? ?Por que se separaron? Cada uno tiene su version.
-
Nuestras riquezas de Kaouther Adimi
https://gigalibros.com/nuestras-riquezas.htmlEn 1935, Edmond Charlot, un joven de veinte anos, regresa a Argel desde Paris con la idea de fundar una libreria y una editorial. Su minuscula libreria, que bautiza como Las Verdaderas Riquezas, se convierte en lugar de encuentro de aspirantes a escritores y de figuras como Antoine de Saint-Exupery y Andre Gide. Alli publica tambien el primer texto de un autor desconocido: Albert Camus. Pero Charlot ignora que dedicar la vida a los libros no le eximira de verse zarandeado por los infortunios de la historia: en visperas de la segunda guerra mundial, una revuelta esta a punto de estallar en Argelia.
-
Todo lo que sone de Alanna Ignacio
https://gigalibros.com/todo-lo-que-sone.htmlTodo lo que sone
-
Lucia (Serie Hermanas Egea 1) de Marilo Lafuente
https://gigalibros.com/lucia-serie-hermanas-egea-1.htmlLucia es una mujer alegre, guapa, presumida y tambien muy responsable. Estudio Direccion de empresas y dirige el negocio familiar: una fabrica de cafes, junto a sus hermanas y padres, donde ponen todas sus energias e ilusion.
Manuel, su novio, es un hombre serio, reflexivo e inteligente. Tambien estudio Direccion de Empresas, como Lucia y se convirtio en un agresivo directivo de una famosa multinacional.
Se conocieron en la universidad y lo suyo fue amor desde el primer tropezon. Durante los primeros anos, viven en Barcelona muy cerca de la playa y su convivencia es la de una pareja normal, con sus enfados y sus momentos de pasion. Pero siempre hay algo que enturbia ese amor y en este caso, el orgullo de ambos sera un mal ingrediente, ya que antes de dar su brazo a torcer, seran capaces de destrozar su vida.
Lucia; el primer volumen de la serie, Las Hermanas Egea, llega para demostrarte que a veces, lo que mas importa no es el orgullo, si no la persona que tienes al lado. ?Podran doblegar cada uno su caracter?
-
El arte de ser normal de Lisa Williamson
https://gigalibros.com/el-arte-de-ser-normal.htmlLos invitados a mi fiesta estan cantando el Cumpleanos feliz. No suena muy bien. Mi hermana pequena, Livvy, apenas canta. Con solo once anos ya ha decidido que las fiestas de cumpleanos familiares son tragicamente vergonzosas, y deja que mama y papa continuen con el resto de la cancion. La aguda voz soprano de mama choca con el desafinado bajo de papa. Suena tan mal que Phil, nuestro perro, sale de su cesta y se escabulle a mitad de la actuacion algo asqueado. No lo culpo; todo es algo deprimente. Hasta los globos azules que mi padre ha estado hinchando toda la manana se ven palidos y tristes, especialmente los que tienen escrito con rotulador negro: <>. Ni siquiera estoy seguro de que todo este espectaculo que se esta desarrollando delante de mi pueda clasificarse como una fiesta. --!Pide un deseo! --me dice mi madre. Tiene la tarta inclinada para que no me de cuenta de que esta algo torcida. Pone <> en letras de glaseado rojo como la sangre. El <
> de < > esta muy apretujado; seguramente se quedo sin espacio. Catorce velitas azules forman un circulo alrededor del borde de la tarta y gotean cera encima de la cobertura de crema. --!Date prisa! --me dice Livvy. Pero no dejare que me den prisa. Quiero hacer esta parte como toca. Me inclino hacia delante, me coloco el pelo detras de las orejas y cierro los ojos. Intento bloquear los chillidos de Livvy y las lisonjas de mi madre e ignorar a papa, que no deja de trastear con los ajustes de la camara, y de repente todos los sonidos parecen amortiguados y lejanos, como cuando sumerges la cabeza debajo del agua en la banera. Espero unos segundos antes de abrir los ojos y soplar todas las velas de un tiron. Todos aplauden. Mi padre abre un lanzador de confeti manual, pero ni siquiera se dispara, y cuando saca otro del paquete, mama ha abierto las cortinas y ha comenzado a quitar las velas de la tarta, y el momento ya ha pasado. --?Cual ha sido tu deseo? !Me apuesto lo que quieras a que ha sido algo estupido! --exclama Livvy de manera acusadora, enroscandose uno de sus rizos castanos con el dedo corazon. --No te lo puede decir, tontita, o no se cumplira --dice mama, llevandose la tarta a la cocina para cortarla. --Si --corroboro yo, sacandole la lengua a Livvy. Ella enseguida me saca la lengua a mi. --?Donde estan tus dos amigos? --me pregunta, poniendo enfasis en la palabra < >. --Ya te lo he dicho: Felix esta en Florida y Essie en el balneario Leamington. --Que lastima --dice Livvy con cero simpatia--. Papa, ?cuanta gente vino cuando celebre mis once anos? --Cuarenta y cinco. Todos con patines. Una absoluta carniceria --balbucea papa con tono serio, a la vez que saca la tarjeta de memoria de la camara y la introduce en la ranura de su portatil. En la primera foto que aparece en la pantalla salgo yo, sentado a la cabecera de la mesa con una chapa enorme que dice < > y un gorro puntiagudo de cartulina. Tengo los ojos semicerrados y la frente me brilla. --Papa --gimo--. ?Tienes que hacer eso ahora? --Solo corrijo los ojos rojos antes de enviarselas por correo electronico a tu abuela --dice, haciendo clic con el raton--. Esta destrozada por no haber podido venir. Eso no es verdad. La abuela juega al bridge todos los miercoles por la tarde y no se lo pierde por nadie, y menos por el nieto que menos le gusta. Livvy es su favorita. Pero bien pensado, Livvy es la favorita de todos. Mi madre tambien habia invitado a la tia Jane y al tio Trevor, y a mis primos Keira y Alfie. Pero esta manana Alfie desperto con unas manchas raras por todo el pecho que podrian ser de varicela, asi que tuvieron que disculparse, dejandonos a los cuatro solos para la < >. Mama regresa alsalon con la tarta cortada en porciones, y la pone sobre la mesa. --Mirad todas estas sobras --dice, frunciendo el ceno mientras inspecciona los montones de comida que hemos picoteado--. Vamos a tener suficientes hojaldres de salchicha y pasteles hasta Navidad. Solo espero tener suficiente film transparente para envolverlo todo. Genial. Una nevera llena de comida para recordarme lo increiblemente impopular que soy. Tras la tarta y la accion intensiva de envolver todo en papel film, vienen los regalos. De mama y papa recibo una nueva mochila para el instituto, el set de DVD de la serie completa de < > y un cheque regalo de 130 euros. Livvy me regala una caja de bombones Cadbury y una funda de color rojo brillante para mi iPhone. Luego todos nos sentamos en el sofa a ver una pelicula llamada Ponte en mi lugar. Trata de una madre y una hija que comen una galleta de la fortuna encantada y, entonces, intercambian sus cuerpos durante un dia. Por supuesto que todo el mundo aprende una valiosa leccion antes del inevitable final feliz, y por centesima vez este verano lamento mi incapacidad vital para seguir el argumento de una simpatica pelicula para adolescentes. Papa se queda dormido hacia la mitad de la pelicula y se pone a roncar con ganas. Esa noche no puedo dormir. Estoy despierto tanto tiempo que mis ojos se acostumbran a la oscuridad y puedo distinguir los bordes de los posteres en las paredes y la pequena sombra de un mosquito volando de aqui para alla por el techo. Tengo catorce anos y se me esta acabando el tiempo. 3 Es el ultimo viernes de las vacaciones de verano. El lunes vuelvo al colegio. He tenido catorce anos durante exactamente nueve dias. Estoy acostado en elsofa con las cortinas cerradas. Mama y papa estan en el trabajo. Livvy esta en casa de su mejor amiga, Cressy. Estoy viendo un episodio repetido de < > mientras un paquete de galletas de chocolate hace equilibrios sobre mi barriga. Tyra Banks acaba de decirle a Ashley que no sera la proxima top model de America. Ashley llora a lagrima viva y todas las demas chicas la abrazan, aunque han pasado todo el capitulo hablando de lo mucho que odiaban a Ashley y que querian que abandonara el programa. La casa de < > es de lo mas cruel. Las lagrimas de Ashley son interrumpidas por el sonido de una llave en la puerta de entrada. Me siento y con mucho cuidado pongo el paquete de galletas en la mesita de centro que hay a mi lado. --David, ya he llegado --grita mama. Ha regresado temprano de su reunion. Frunzo el ceno mientras oigo como se quita los zapatos y tira las llaves con gran estruendo en el platillo que hay cerca de la puerta. Rapidamente cojo la manta de ganchillo que tengo a los pies, la subo para taparme el cuerpo y me la meto debajo de la barbilla, poniendome en posicion justo antes de que mama entre en elsalon. Ella pone mala cara de inmediato. --?Que? --pregunto, mientras me limpio las migas de galletas de la boca. --A lo mejor te gustaria abrir las cortinas, David --me sugiere con las manos en las caderas. --Pero entonces no podre ver bien la pantalla. Ella me ignora y se dirige directamente hacia la ventana y abre las cortinas. La luz del sol de ultima hora de la tarde inunda la habitacion y hace que el aire se vea polvoriento. Yo me retuerzo en elsofa y me protejo los ojos. --Por Dios, David --dice mama--. No eres un vampiro. --Puede que lo sea --murmuro entre dientes. -
La tumba de Sarah (Tracy Crosswhite 1) de Robert Dugoni
https://gigalibros.com/la-tumba-de-sarah-tracy-crosswhite-1.htmlHace veinte anos que Sarah desaparecio. Desde entonces su hermana Tracy duda de que el violador que cumple condena por su asesinato, Edmund House, sea realmente el responsable de aquel crimen.
-
Cuando te falte mi piel de Mabel Diaz
https://gigalibros.com/cuando-te-falte-mi-piel.htmlUna joven universitaria aparece brutalmente asesinada en un piso de Barcelona. La inspectora Aroa Martinez sera la encargada de dirigir el caso mientras lucha contra los demonios de su oscuro pasado. Las investigaciones la llevaran a Delirium, propiedad del exitoso empresario Gabriel Serna, un hombre hecho a si mismo que no permitira que su imperio se desmorone por los secretos que puedan salir a la luz.
Breixo y Kenia llevan una doble vida como escorts. ?Pueden dos personas que se dedican al negocio del sexo enamorarse? Ella cree que no, pero el intentara hacerla cambiar de opinion.
Un homicidio, la prostitucion de lujo y una pasion salvaje se mezclan en este thriller erotico que te mantendra pegado a las paginas hasta que lo acabes. -
En la piel de Barbra (Mujeres heroinas 2) de Anna Anudi
https://gigalibros.com/en-la-piel-de-barbra-mujeres-heroinas-2.htmlY tu ?que harias por las personas que quieres?
-
Somos polvo de estrellas de Anissa B. Damom
https://gigalibros.com/somos-polvo-de-estrellas.html?Alguna vez has deseado retroceder en el tiempo?
Ojala fuese tan sencillo como cerrar los ojos con fuerza, desearlo con ganas y despertar tiempo atras, cuando te creias seguro de todas las cosas malas, pero sabemos que el tiempo es inalterable. No podemos evitar que ocurran desgracias, ni impedir que estas nos transformen en versiones de nosotros mismos a quienes no reconocemos.
Olivia, a sus dieciseis anos, acaba de descubrir que el mundo es un lugar en el que no estas a salvo, que el Destino te puede arrebatar la felicidad en un instante y que querer, incluso a uno mismo, implica tomar decisiones para las que no siempre estamos preparados.
<> habla sobre la perdida, la amistad, la familia y la lucha por los suenos apostando por la obligacion de volver a sonreir como unica forma de sobrevivir al dolor. -
Alex (Mayores 1) de Maria Jose Tafur Quinones
https://gigalibros.com/alex-mayores-1.htmlEmily Stone. Dieciseis anos y completamente diferente a cualquier otra adolescente de su edad. Es mas o menos alta, bonita y aun una nina pequena. Le gustan los libros y el cafe, pero dejar que su mejor amiga la convenza de pedir uno en una tarde especifica podria resultar poner todo su mundo al reves.
-
La red de Alice de Kate Quinn
https://gigalibros.com/la-red-de-alice.htmlLA NOVELA HISTORICA DEL ANO
-
En sus ojos de Ambar Mansilla
https://gigalibros.com/en-sus-ojos.html?Puede una persona que solo quiere morir salvar a otra que solo quiere vivir?
-
Vidas Robadas de Allison Leigh
https://gigalibros.com/vidas-robadas.html?Seria capaz de cerrar las heridas del pasado y formar una familia con aquella mujer?
El ayudante del sheriff, Sloan McCray, estaba intentando enmendar el pasado. Decian que era un heroe, pero era el quien tenia que vivir con las decisiones que habia tomado. Ademas, no estaba preparado para enamorarse, ni siquiera de la hermosa e inocente nueva vecina, cuya sola presencia era un alivio para su alma atormentada.
Abby Marcum no tenia la mas minima duda de que Sloan era su hombre. Aunque se habia mudado a Weaver, en Wyoming, para que su hermano pequeno viviera una vida mejor, veia que su porvenir estaba con Sloan. Solo le faltaba convencer a ese hombre, que se consideraba indigno del amor, de que tenia que pedirle la mano y el corazon… -
Eres mi mejor sueno de Clara Albori
https://gigalibros.com/eres-mi-mejor-sueno.html -
Cero negativo de Judith Galan
https://gigalibros.com/cero-negativo.htmlDespues de casi diez anos, Cat regresa a Sabadell, con un hermano adolescente del que tuvo que hacerse cargo y el temor a reencontrarse con su padre.
-
Cristiano y Leo de Jimmy Burns
https://gigalibros.com/cristiano-y-leo.html -
El desarrollo emocional de tu hijo de Rafael Guerrero
https://gigalibros.com/el-desarrollo-emocional-de-tu-hijo.htmloterapeutas por igual, el desarrollo fisico y mental de los ninos y ninas es el pilar del trabajo de crianza. No solo para que transcurran su infancia en el mayor bienestar posible, sino para que lleguen a ser adultos con las capacidades necesarias para adaptarse con exito a un mundo cada vez mas exigente. Para ello, es esencial que los ensenemos a desarrollar las capacidades emocionales esenciales: que los guiemos para que aprendan a frustrarse, esforzarse, aburrirse, entender sus emociones y gestionarlas; a valorar sus fortalezas y reconocer sus debilidades; a tener ilusiones, pasiones y metas; a sentirse seguros, quererse a si mismos y amar sanamente en las relaciones afectivas.
-
Mi autonomia de Nadia Colella
https://gigalibros.com/mi-autonomia.htmlE Capitulo 1 l humo de mi cigarrillo se formaba delante de mis ojos como una nube de tormenta a punto de estallar sobre mi. Me quede observando como el tiempo lo atravesaba, milimetro a milimetro, devorandolo como un virus que avanzaba a rapida velocidad hasta hacerlo desaparecer por completo. Y, de un momento a otro, ya no quedaba nada, salvo la mancha negra que estaba en el techo. Fije la mirada para intentar descifrar el posible origen de aquello y me pregunte si seria humedad o algo mas, pero no se me ocurrio nada. Me encogi de hombros y le di otra pitada a mi cigarrillo. Cansada de estar acostada, me puse de pie y senti como si hubiera pisado sobre hielo. Busque con la mirada mi calzado, pero no sabia donde lo habia dejado, asi que le di la bienvenida al frio y segui mi camino. La ventana del balcon estaba abierta y la brisa matutina envolvio mi cuerpo desnudo. Me acerque a la computadora y abri mi casilla de correo. Lo primero que vi era un mail del propietario del edificio con un asunto en mayusculas y mas de tres signos de admiracion: <
>. Ni siquiera lo lei; lo borre directamente. Lo peor de todo era que no habia mas correos nuevos. --!La puta madre! --grite. Tire el cigarrillo al piso y me sostuve la cabeza entre las manos. Respire profundo y me obligue a hacerlo mas de una vez. No iba a poder encontrar una solucion a mi problema si me dejaba llevar por las emociones. Tenia que serenarme y buscar alternativas. De pronto, senti una mano sobre mi hombro y me levante saltando de la silla. Tenia una media sonrisa que se esfumo en cuanto me observo con atencion. --Perdon, no queria... --No me asustes asi, Javier. --Jonathan. --Si, Jonathan --le respondi volviendo a mi habitacion. Me acerque al armario y abri mi segundo cajon. Alli se encontraba mi remera favorita, la que mi mejor amigo me habia comprado en Nueva York. Despues de ponermela, encontre mis pantuflas asomandose por debajo de la cama, del lado izquierdo. Me agache para juntarlas y volvi a salir hacia el living. --Gracias por la cena --le dije mientras ponia agua a hervir. Jonathan se acerco a mi lado y apoyo su cintura contra el borde de la mesada. Se cruzo de brazos y giro su cabeza para poder mirarme, pero yo me aparte de la cocina y busque en las alacenas mi taza. --Tomo lo que tomes vos --me dijo. Me rei. --Voy a desayunar sola. Gracias por todo, Jonathan. --Y busque el polvo para hacerme un capuchino. Por el rabillo del ojo pude ver como se apartaba de la mesada y se quedaba de pie observandome. Yo segui con mi tarea. Busque el azucar y me puse a revolver el contenido. Escuche su bufido y se dirigio hacia la habitacion con pasos pesados. Unos segundos despues, salio de mi departamento sin siquiera decirme adios. Yo tampoco lo salude. Cuando mi infusion estuvo lista, sali al balcon y me sente en la reposera. El cielo azul claro de Buenos Aires estaba impoluto. Me entretuve observando el horizonte mientras degustaba mi bebida. Intente que nada atosigara mis pensamientos. Necesitaba reconectarme, dejar a un lado todos los problemas y sentirme presente en el momento. Si en cada minuto que respiraba pensaba en mis problemas, era lo que iba a seguir atrayendo. Eso me habia ensenado mi mama y lo habia comprobado con el tiempo, asi que dejaria en blanco mi mente y respiraria. Pero el sonido de mi celular me hizo sobresaltar y por poco me hizo tirar lo que me quedaba del capuchino. Deje a un lado la taza y volvi al interior del departamento a buscar el aparato. Era una llamada entrante de Quimey. --!Hey! --le dije con una sonrisa y busque el reloj que estaba colgado sobre el escritorio de mi computadora--. ?Que haces levantado tan temprano? --Me estoy yendo a Ezeiza --me respondio riendose. Recien en ese momento me percate del sonido del exterior. No estaba solo. --?A Ezeiza? --le dije sentandome en una silla--. ?Tenias un viaje planeado y no me dijiste nada? --No, fue un viaje espontaneo. --Bajo la voz--. Me estoy yendo con Lucas. --Te escucho igual --dijo una voz lejana. --?Lucas? --pregunte asombrada--. ?Lucas, Lucas? ?El del bar de Palermo? --El mismo --me dijo volviendo a hablar normal--. Le salio un viaje de negocios y me invito a Londres. --Ah, pero... !que natural! --Y no pude evitar reirme--. Siempre te suceden cosas extraordinarias. --Las busco. No suceden de la nada. ?Y vos como estas? Trague saliva y, sin querer, mire la computadora. --Bien. --A mi no, Hunter --me dijo con su voz reprochadora--. Contame como estas. Mira que cancelo todo y voy para alla. --!No! --me apresure a decirle. Sabia que era capaz de hacerlo--. Estoy bien. El negocio no lo esta. --?Otra vez? Te dije que te paso plata si necesitas. --Y yo te dije que no hace falta. Que voy a encontrar una solucion. --Se que la vas a encontrar, pero, mientras tanto, puedo ayudarte. No seas cabeza dura. --No, te agradezco de verdad. --?Te volvio a contactar el dueno del edificio? --Si. Me dio un mes. --!Mia! --Me grito al oido y tuve que alejar el celular--. ?Por que no queres aceptar la plata? !Te pueden echar del departamento! --Porque no voy a tener como devolvertelo en el corto tiempo. --Quimey iba a quejarse, pero lo interrumpi antes de que lo intentara. --Y ya se que no te importa cuando te lo devuelva, pero a mi si me importa. Ya todos me ayudaron lo suficiente; no puedo seguir dependiendo de los demas para vivir mi vida. Tengo que encontrar las soluciones por mi cuenta. Y, si me llegan a echar, tendre que encontrar otro departamento que se adapte mejor a mi nueva realidad. Habia vivido en ese lugar casi cuatro anos. Me gustaba el balcon porque cada noche salia a respirar el aire de la ciudad y a disfrutar del murmullo bajo de una ciudad viva. Incluso cuando tenia compania. Me escabullia del dormitorio para estar un rato en paz. O la amplia cocina, que me permitia experimentar con la comida cada vez que tenia ganas. Aunque, realidad, mas la usaba Quimey cuando jugaba con las bebidas e inventaba tragos. Las dimensiones del living tambien me permitian alojar a toda mi familia y que pudieramos disfrutar de una buena pelicula o algun tentempie. Y, por supuesto, mi estudio fotografico. Habia usado una de las habitaciones de huespedes para mis utensilios de fotografias, los marcos que compraba, las imagenes que mandaba a imprimir... Era un departamento grande para mi sola, pero habia podido pagarlo. Aunque, si era sincera, el primer ano me habia ayudado mi familia, el segundo y el tercero habia tenido que ayudarme mas de una vez Quimey y el cuarto lo estaba soportando... Pero dia a dia las ventas caian. Habia estado enviando solicitudes para realizar muestras digitales en las paginas de las grandes galerias de arte, pero ninguna me habia respondido. Ni siquiera me habia llegado un pedido de compra. ?Que iba a hacer? Pensar en dejar la fotografia me oprimia la garganta, pero tenia un ultimatum del dueno del edificio. Solo treinta dias para que, finalmente, me echara. No me agradaba la idea de tener que mudarme a un lugar mucho mas chico. No me agradaba la idea de reconocer otro fracaso. --?Y si buscas un empleo de medio tiempo, aunque sea? Suspire. --Por el momento no quiero hacerlo. No querria tener que hacerlo nunca. Pero algo voy a encontrar. Lo se. --Sos una persona creativa. Abri tu mente y vas a ver que la solucion te llegara sin esfuerzo. Dicen que salir del lugar donde uno se encuentra estancado ayuda. ?Por que no vas a dar una vuelta con tu camara? --Es una buena idea. --Era verdad--. Subi muchas fotos a Instagram. !Que tengas un lindo viaje! --Gracias, mi amor. Y cualquier cosa... --Lo se. Te llamo. Te quiero. --Yo tambien. Entre a mi estudio y lo primero que vi sobre la mesa de vidrio fue mi camara fotografica. El peso que tenia sobre los hombros parecio desvanecerse por un instante. Por un escaso momento, el sentimiento de satisfaccion y calidez que me generaba ese aparato me recorrio por completo, como si en medio de una tormenta de nieve, encontraras una cabana con una chimenea encendida. Eso era la fotografia para mi. Mi refugio. Aun asi, no la habia tratado con el respeto que se merecia. No la habia cuidado lo suficiente y en ese momento estaba viendo las consecuencias. No podia volver a buscar un trabajo esclavo al que tuviera que dedicarle mas de ocho horas de mi vida. No podia volver a hacerlo. De solo pensarlo, me dolia la cabeza. Tenia que encontrar una solucion pronto. Asi que respire hondo y segui el consejo de mi amigo. Escogi Puerto Madero, cerca del Puente de la Mujer. No podria explicarte como funciona, pero la camara es como una extension de mi cuerpo que me pide que haga ciertas cosas. A veces, no se bien lo que hago, pero le hago caso a mi instinto. Confio en el y se que hacia alguna direccion intenta llevarme. Asi que, cuando mi camara me pidio que empezara a sacar fotografias a mi alrededor, no lo dude ni un segundo. Mi fuerte siempre fueron los paisajes. He tenido la suerte de poder recorrer el mundo, dado que mis padres lo viven recorriendo constantemente y tengo un hermano asentado en Alaska. Me resulto natural captar esos momentos maravillosos que nos regala la madre naturaleza. Sin embargo, en el ultimo tiempo me sentia presa de una rutina que no me gustaba. Asi que sacar fotos a extranos se sintio como una brisa fresca en pleno verano. Familias, grupos de amigos, parejas. Mi mente comenzo a expandirse y las historias se iban formando solas en mi cabeza. Un padre abrazaba a su esposa, quien sonreia contenta porque el acababa de decirle que finalmente podrian irse de vacaciones. Era alli cuando los hijos se sumaban al abrazo y, entre los cuatro, formaban una especie de fortaleza impenetrable. Despues habia dos amigas que reian a carcajadas porque una de ellas habia conseguido el trabajo que tanto anhelaba. Al lado de ellas, un hombre besaba a una mujer, susurrandole mentiras al oido. Ella sonreia sin saber el dolor que le esperaba. De a poco, fui captando distintas situaciones, momento a momento, formando una historia en imagenes. Y, entonces, un hombre me llamo la atencion. Mi instinto supero cualquier control que podria llegar a ejercer sobre este. Mi dedo no paraba de tocar el obturador. Una tras otra. Hasta mi corazon se habia acelerado de la emocion. Tenia el cabello oscuro, en abundante proporcion, y sin el minimo resguardo por acomodarlo. La barba era pareja en la altura de los cachetes, pero en el menton la tenia mas poblada y algunos de sus cabellos estaban tenidos de color ceniza. Sin darme cuenta, me acerque a el para poder verle mejor el rostro. Estaba vestido con un jean negro desgastado y de su cintura colgaba una cadena plateada sujetada a un cinturon con tachas. En la parte de arriba llevaba una camisa cuadrille de color negro y rojo. Y no podia obviar a la mujer que estaba con el. Su melena lacia y rubia bailaba con el viento. Ella sonrio con sus labios de rojo carmesi cuando el apoyo su cuerpo contra su espalda. Sus fuertes brazos la capturaron y le susurro algo al oido. Aparte la mirada incomoda, como si estuviera espiando algo secreto. Me aleje de alli y me acerque hacia la baranda que rodeaba el rio para poder mirar las imagenes en la camara. Tanto las que habia sacado al resto del mundo como las que le habia sacado a ese hombre me hacian sentir una chispa en el cuerpo. Sobre todo, las que aparecia el... Una tras otra, fui pasando todas las fotos que le habia sacado. No me di cuenta del tiempo que habia pasado observandolas hasta que escuche una voz. --?Salimos bien en las fotos? Cuando levante la mirada, me encontre con unos ojos azules y una melena oscura. Debajo de la camisa tenia una musculosa blanca que se le cenia al cuerpo. La sorpresa de su aparicion me hizo perder el control de mis extremidades. Nunca me saco la correa del cuello, por cualquier cosa que me suceda en las manos. Sin embargo, el paso por alto ese detalle. Y, asumiendo lo que podia pasar, estiro su mano para sostener mi camara de fotos y sacarla de la zona del agua. La capturo en el aire y la atrajo hacia su cuerpo, por lo que la correa en mi cuello me tiro contra el. Levante mis manos para frenar el choque y pude sentir la dureza de su pecho y su aliento contra mi coronilla. En ese momento, me senti como un pajaro al que le sacuden su jaula. -
Escuadron de Brandon Sanderson
https://gigalibros.com/escuadron.html -
Ecos de amor de Mimi Romanz
https://gigalibros.com/ecos-de-amor.htmlCuando Carla menos lo espera, su hermana le anunciara la sorpresa de su pronto matrimonio, y toda la estabilidad emocional que habia conseguido tras dejar atras el instituto en Cartes, se derrumbara al llegar a Madrid. El pasado volvera a su presente, y el perdon que guardaron sus labios por tantos anos por fin podra ser expresado. Sin embargo, conseguirlo sera mas dificil de lo que cree.
La medicina era la pasion de Julio, pero jamas creyo que la cardiologia iba a ser la especialidad que elegiria, aunque estaba convencido de que la decision de haber optado por esta se debia a la mujer que le habia destrozado el corazon en la adolescencia. Y el destino, como fiel seguidor en su vida, la volvera a poner en su camino.
Nada sera facil cuando Carla y Julio vuelvan a encontrarse. El rencor y los celos haran mella en el, mientras que el dolor anidara en el corazon de ella, haciendo que el perdon sea aun mas dificil de conseguir.
-
Un Vaquero Atormentado (Rancho Atkins 3) de Tess Curtis
https://gigalibros.com/un-vaquero-atormentado-rancho-atkins-3.htmlJack ha pasado la mitad de su vida sirviendo a su pais en el ejercito, hasta que decide dar un nuevo rumbo a su vida. El Rancho Atkins lo acoge como capataz, hallando la paz y la normalidad que su mente necesita, hasta que la decoradora Susan Donovan irrumpe en su vida.
-
La princesa y la muerte de Gonzalo Hidalgo Bayal
https://gigalibros.com/la-princesa-y-la-muerte.htmlSegun cuenta Gonzalo Hidalgo Bayal en el Epilogo, todo empezo como un delicioso reto que se propuso para caminar junto a su hija por la playa: <
>. Asi surgieron estas maravillosas veintiuna fabulas que el lector puede ahora disfrutar, como variaciones encantadoras sobre reyes y princesas, caballeros y pretendientes, dragones y muerte… Pero tambien sobre mucho mas, porque los temas y los personajes se fueron ampliando con toda naturalidad y las fabulas acabaron hablando < >.
-
Cuentos de buenas noches para ninas rebeldes de Elena Favilli , Francesca Cavallo
https://gigalibros.com/cuentos-de-buenas-noches-para-ninas-rebeldes.htmlHabia una vez una princesa… ?una princesa? !?Que?! Habia una vez nina que queria llegar hasta Marte. Erase una vez una mujer que se convirtio en una de las mejores tenistas del mundo y otra que descubrio como se da la metamorfosis de las mariposas.
-
La ciudad de los minotauros de Carol Zardetto
https://gigalibros.com/la-ciudad-de-los-minotauros.htmlNueva York es benevolente. Basta entregarse. Abandonarse sin Resistencia a su corriente de movimiento perpetuo. Dejarse complacer por su oferta desaforada. En medio de su fulgor intenso, dejo de parecerme a mi mismo y eso… es el mejor amulet contra la muerte>>.
-
Rosas para Emilia de Virginia Camacho
https://gigalibros.com/rosas-para-emilia.html?Como podrias amar al hombre que una vez destruyo tu vida? ?Como enamorarse de alguien que una vez llamaste monstruo? Emilia tiene mil razones para odiar a Ruben, y Ruben todas las razones para amarla. Uno de los dos tendra que ceder. Pero el camino es largo y lleno de curvas, lo que una vez fue el motivo de tus lagrimas, hoy podria ser la plenitud de tu felicidad. ?Quien sabe?
-
Noche secreta de Yvonne Lindsay
https://gigalibros.com/noche-secreta.htmlQUERIA MANTENERLA CALLADA...Y EN SU CAMA.
-
Lo imperdonable de Norma Lazo
https://gigalibros.com/lo-imperdonable.htmlEddie no era su nombre, Michael la llamaba asi. Tenian poco tiempo de conocerse y los unia una amistad profunda aunque prudente. Eran mayores y habian aprendido que los mejores amigos buscan la distancia adecuada. Al igual que puercoespines, ni tan lejos que de frio, ni tan cerca que espine. Al principio Eddie no hablaba de su vida o de su pasado. Habia callado sus dias salvajes sin destino, las playas banadas de abulia y desasosiego y las horas mirando nubes para adivinar formas de animales mitologicos. Tampoco le habia contado del malestar nacido por la incertidumbre que le provocaba su futuro. Malestar a veces alejado con algun libro robado y, en otras, provocando pleitos en la escuela. Eddie no se habia atrevido a hablar de ello hasta la noche en la que volvio su pasado. Entonces decidio contarle todo a Michael, aunque no supiera como. El destino de Eddie se sello treinta anos atras, mientras esperaba sentada en la barda del colegio a su mejor amigo, Ian, leyendo Mas que humano de Theodore Sturgeon, una novela de ciencia ficcion que tomo prestada de casa de Camilo Garcia Moreno, otro de sus amigos. Pero aquello era un eufemismo, Eddie solo regresaba los libros si alguien le reclamaba. Miro su reloj Swatch de caratula azul. Ian solia ser puntual y ahora llevaba retrasado veinte minutos. Eddie brinco desde la barda del colegio y se asomo por la calle en busca de su amigo. Entre los coches apelotados por el trafico avisto el Mustang color cobre y de llantas achaparradas rebasando impacientemente a los demas automovilistas. Eddie echo la novela de Sturgeon en la mochila y se preparo, como cada dia, para subir al auto. --?Aburrida? --le pregunto Ian desde la ventanilla mientras quitaba el seguro de la puerta del copiloto. Eddie afirmo con la cabeza y avento la mochila en la parte de atras. Reclino el respaldo hasta topar con el asiento trasero. --Nos esperan en la playa --le dijo Ian. Eddie tomo la cajetilla de Camel de la camisa de su amigo y encendio uno. El Mustang rozaba el suelo en cada vuelta. Ian era adicto a la velocidad, a los brincos sorpresivos provocados por los topes y a las miradas reprobatorias de los parroquianos quienes, al verlo venir a lo lejos, se replegaban contra la pared de las aceras. En la playa, recostados sobre el automovil de Ian, el grupo de amigos observaba a las gaviotas clavar sus picos en las crestas del oceano en busca de alimento. Las mas habiles pescaban a su presa en la primera zambullida, en tanto que las torpes levantaban el vuelo para intentarlo nuevamente hasta conseguirlo. Cuando Eddie se iba de pinta con sus amigos solian reunirse en las dunas El Infiernillo. Tomaban cerveza envueltos por las bocanadas de aliento salado y caluroso del verano mientras el mar marcaba su frontera de espuma con la que jugaban a salpicarse. Pudo ser un dia cualquiera, inutil y perezoso como el anterior, de no haber sido por la llegada abrupta de Alma Grande. --El menor de los Garcia Moreno se mato --dicho esto, Alma Grande desplomo su enorme cuerpo de ciento veinte kilos y metro noventa de estatura sobre la arena, cayo doblado sobre sus rodillas como los musulmanes en oracion. El menor de los Garcia Moreno se llamaba Mauro y tenia once anos; su hermano, Camilo, era parte del grupo de amigos. Mauro era un nino gordo y rubio, de rostro palido, marcado por las manchas de sol. No hablaba mucho y, taciturno y melancolico, pasaba la mayor parte del tiempo encerrado en su recamara escuchando discos. Fantaseaba con ser invisible y pasar inadvertido en el colegio para no dar explicaciones de su aislamiento. En la familia nadie entendia a ese ser silencioso que parecia vivir en otra dimension, distante, perdido en lo mas profundo de los caracoles, alli donde suena el mar pero no atropella con su vaiven violento. El unico que conseguia sacarlo del mutismo era Camilo. Si sus padres salian y el grupo de amigos se aduenaba de la casa, Mauro hacia lo imposible por pegarseles, aunque su hermano no lo permitia, pues todos bebian e incluso algunos ya fumaban marihuana. Penso que alejandolo lo mantendria a salvo. Eddie aun recordaba vividamente al giganton Alma Grande --quiza sea el recuerdo mas nitido de aquellos dias--, sumido en el llanto como un nino que acaba de descubrir la muerte. Alma Grande conto entre sollozos, recriminandose porque solian tratar al nino con indiferencia, que Mauro, a escondidas de su padre, el famoso abogado Raymundo Garcia Moreno, habia tomado la pistola de la biblioteca. A la familia le extrano la chamarra gruesa que llevaba Mauro en ese dia tan soleado, pero nadie le pregunto si no sentia calor. Tambien llevo a la escuela una caja con algunas de sus pertenencias mas preciadas: la coleccion de comics de Linterna verde, los munecos de accion de la Guerra de la Galaxias y sus discos de los Beatles. Les parecio raro su comportamiento, pero nadie imagino lo que vendria. En el colegio, Mauro las regalo todas a los companeros que nunca lo molestaron; la mayoria acostumbraba ponerle sobrenombres relacionados con su gordura, burlarse de su silencio, de la forma en que reprobaba cualquier materia y el estado de abulia perenne. En el salon de clases Mauro se planto al frente, al lado del profesor, y le pidio permiso para dirigirse al grupo. Sin decir palabra, extrajo la pistola oculta bajo su chamarra y se dio un balazo. Cuando Alma Grande termino su relato, el cielo azul se torno gris y brumoso, un temporal imprevisto se avecinaba. Asi era el clima en el puerto, impredecible y fiero como la vida. La ventisca proveniente del norte levanto las toallas de la arena, volaron los vasos de plastico y el liston morado con el que Gabriela habia amarrado su largo cabello negro mientras construia torres de arena. Las olas del mar empezaron a picarse y las pequenas crestas que las gaviotas penetraban se alzaron en violentos muros de agua. En medio de gritos, aturdidos por el tragico relato y el cambio repentino del clima, levantaron sus cosas para entrar al coche. Gabriela grito llamando la atencion de todos, luego senalo hacia la orilla de la playa donde descubrieron a lan desprendiendose del uniforme del colegio para caminar en traje de bano mar adentro, sin voltear, decidido y tambaleante por la fuerza de la corriente. Gabriela miro a los demas esperando respuesta y ante el desconcierto de todos se desprendio del uniforme y corrio tras de Ian. Alma Grande, los hermanos Caiman y Eddie hicieron lo propio, corriendo en traje de bano hacia el ir y venir de las olas que elevaban y descendian los cuerpos indefensos flotando de muertito a la deriva. Relampagos colericos enraizados ferreamente a las nubes parpadeaban semejando raigones viejos. Las olas empujaban al grupo de amigos con furia. Ian les grito que no nadaran y permitieran que estas los llevaran adonde quisieran. Fueron arrojados por remolinos de agua a las piedras y lanzados por el oleaje, salieron del mar con raspones y algunas espinas de erizo enterradas en los pies. Antes de subir al coche alcanzaron a ver una gran ola arrasando las torres de arena construidas por Gabriela. Era la ola mas grande que habian visto en meses. La masa de agua golpeo las torres y las deshizo en moronas de lodo y espuma, para luego retroceder con indiferencia de la misma forma en que la vida lo haria con ellos. 2. LA AMISTAD ENTRA POR LA LENGUA LA HISTORIA DE EDDIE Y MICHAEL PARKER Se conocieron la manana en la que Michael entrevistaba a aspirantes al puesto de traductor. La vio llegar desde el barandal de hierro forjado de su departamento. A juzgar por su apariencia, estaba nerviosa. Su cuerpo empequenecido, fragil, doblado por la pesadumbre de los secretos, se habia enjutado aun mas. Tenia el rostro limpio, sin maquillaje --nunca usaba maquillaje-, ni siquiera algun brillo tenue en los labios. Su ropa era insignificante, casi siempre arrugada y con ese olor a viejo que revelaba su paso por las tiendas de segunda mano. Eddie era una mujer de cuarenta y seis anos, sin pareja --jamas tuvo interes en tener una--, tampoco hijos. Delgada, de pomulos salidos y ojos profundos como pozos sin agua, ocultos detras de sus anteojos de poco aumento, y su cabello negro siempre revuelto, bucles crispados con los cuales luchaba para aparentar que se habia peinado. Desde el instante en el que se conocieron, a Michael le llamo la atencion ese rostro marcado por las ausencias que, si bien no matan, debilitan al cuerpo. Eddie, parada ahi con las palabras atrapadas en la garganta y la timidez exponiendola al cuchicheo de los vecinos, le causo pena. Entonces se adelanto para conducirla al interior de su departamento. Con manos temblorosas ella abrio su portafolios negro y maltratado por anos de uso y le entrego algunas de sus traducciones. Sin levantar la mirada de los papeles le dijo tener excelente redaccion y un ingles tan perfecto como el del mejor parlante no nativo. Eddie no miraba a Michael de frente pero lo escrutaba por el rabillo del ojo. Michael Parker era oriundo de Nueva York y tres anos mayor que Eddie, no obstante, parecia mas joven. Su rostro de nino contrastaba con su vestimenta de otra epoca: camisa blanca y sobria tipo mormon, pajarita azul cielo, chaleco tejido de rombos, pantalones sencillos, oscuros y lisos, sin ningun detalle memorable. Sus lentes de aumento tambien vintage, de pasta gruesa y moteada --simulando ser de carey- montada sobre el armazon dorado expuesto en la parte inferior. Michael odiaba lo moderno, con renuencia compro el celular que usaba como camara fotografica y una computadora para enviar sus textos a The Wall Street Journal y a algunos periodicos locales y del extranjero. El trabajo de su traductor seria transcribir todos sus manuscritos a la computadora y traducir algunos al espanol para despues enviarlos por correo electronico. Michael meso su cabello ralo y rojizo e inicio una conversacion en ingles. Despues de hablar de libros y peliculas con Eddie, quedo satisfecho con su soltura del idioma. --Se nota que viviste mucho tiempo en el extranjero --comento Michael, halagando su acento. --Jamas he salido del pais --respondio Eddie presurosamente. A Michael no le creo suspicacia que Eddie, con tan buena pronunciacion, jamas hubiera vivido en un pais anglosajon. Estaba convencido de los frutos de la tenacidad. --?Que es lo que mas te gusta hacer? --le pregunto. Ella respondio que le gustaban los trabajos solitarios como leer y arreglar cosas. Le seducian los escritores con vidas intensas y conmovedoras. Michael, hablantin y sociable por naturaleza, quiso saber mas de Eddie, por lo que le confeso que le apasionaba su trabajo y, al igual que ella, preferia a ese tipo de autores. La mayoria de sus traductoras fueron eficientes, pero carecian de ese rasgo en comun, aunque tampoco era requisito para ocupar la vacante. De hecho Michael no queria intimarlas mas de lo debido. Pensaba que, si contrataba a alguien con sus mismas aficiones terminaria escuchando una pila de opiniones en las que no estaba interesado. Aunque nunca lo menciono en los avisos de periodico, elegia a mujeres con gustos distintos a los suyos. Debido a su oficio, pasaba la mayor parte del tiempo asido a su asistente, que mejor si se trataba de alguien con poco que decir. Pese a ello, la inexplicable atraccion hacia Eddie lo obligo a pasar por alto sus propias reglas, accediendo incluso apagarle sin comprobantes fiscales. --Perdi mis documentos en la estacion de autobuses -le explico a Michael --, te prometo hacer pronto los tramites para tenerlos en orden. Nunca lo hizo. Eddie y Michael se hicieron amigos recatadamente sin confianzas vulgares o intrusiones incomodas. Ella no permitia gran acercamiento, rehusaba cualquier conversacion intima o ajena a sus obligaciones laborales. Eso lo intrigaba aun mas e inventaba pretextos para romper el hielo, asi que tras varios intentos consiguio que comieran juntos. Eddie accedio despues de pensarlo por unos segundos, como si se tratara de una decision trascendente, y el se avergonzo por haberla intimidado. Para evitar confusiones prefirio confesarle su orientacion sexual, no le atraian las mujeres. --Me asusta mi irresistible seduccion hacia el sexo opuesto --respondio Eddie. Ambos parecieron reirse de su aspecto descuidado y poco atractivo. Eddie comia despacio, dando bocados pequenos masticados por minutos. No habia perdido el aire provinciano. Parecia un personaje de Carson McCullers, de esos sofocados en lo profundo del sur americano. Aqui tambien hay otro sur, no menos brutal, ni menos desolador. --Desde nina quise irme del puerto --le confeso a Michael cubriendose la boca, todavia masticaba un pedazo de strudel de manzana, su postre favorito-, siempre hubo algo ominoso bajo la luz del sol. Lo unico que Eddie echaba de menos de su lugar de origen era el mar. Nadar sorteando las olas fue su pasatiempo favorito hasta que ella y sus amigos iniciaron el juego <
>. Se pautaba con el parte meteorologico, cuando el mal tiempo se avecinaba. Los siete adolescentes se cubrian de heridas causadas por piedras y corales, heridas que eran medallas de guerra; condecoraciones que alardeaban mas tarde chocando las botellas de cerveza. Superficialmente todo seguia normal entre ellos, sin embargo, algo iba cambiando. A Eddie le costaba verbalizarlo. Se trataba mas que de una sensacion, acaso de un mal presagio. La sospecha de no ser los mismos y de que, despues del suicidio de Mauro y la partida de los Garcia Moreno al extranjero, jamas volverian a serlo. El juego era cada vez mas salvaje. Durante una tormenta, con rafagas de viento de hasta ciento veinte kilometros por hora, Alma Grande se estrello contra los costales de cemento en la escollera. Sufrio una contusion. Entre todos lo sacaron del mar. Fue tan arduo como rescatar a una tonina varada en la playa. Entonces se dieron cuenta de que sus vidas pendian de la necesidad de ser afirmadas con fiereza. -
Un Rostro en la Multitud de Stephen King & Stewart O’nan
https://gigalibros.com/un-rostro-en-la-multitud.htmlDesde la muerte de su mujer, Dean Evers se pasa las tardes apoltronado en el sofa viendo partidos de beisbol. Durante una de estas tardes solitarias, mientras mira un partido de los Devil Rays contra los Mariners, la vision de una figura entre las gradas lo saca de su letargo. Dos filas detras de la multitud, en el asiento asignado a un invitado especial, alguien le mira fijamente desde el otro lado del televisor. Es el rostro de una persona de su pasado, de hace decadas, de alguien que no deberia estar en un partido de beisbol ni tampoco en ningun lugar de este planeta. Y asi empiezan a desfilar por la pantalla personas de su pasado. Hasta que un dia aparece la mas terrorifica de todas...
-
Un dia mas de Mitch Albom
https://gigalibros.com/un-dia-mas.html?Quien no ha sonado alguna vez con reunirse con sus seres queridos fallecidos aunque solo sea para pasar un dia mas juntos?Chick Benetto ha perdido todo en su vida y esta a punto de suicidarse. En ese momento, en la frontera entre la vida y el mas alla, se reencuentra con su madre, fallecida hace anos euros juntos pasan un dia, viajaran al pasado y Chick por fin tendra la oportunidad de comprender muchas cosas de su vida.
-
El amor es encontrar el momento de Romina Naranjo
https://gigalibros.com/el-amor-es-encontrar-el-momento.htmlCayetana, fotografa, sevillana y medio asiatica, es toda ella un puro caos, siempre en movimiento, en busca de su verdadero lugar en el mundo.
Cambio Sevilla por Madrid, donde vivio una temporada con Nina, su mejor amiga, y donde tuvo un. encuentro con el hermano de esta, Suso, del que se promete no querer saber nada nunca mas.
Suso es enfermero, ligon y encantador, y esta cansado de perseguir a Cayetana por algo que paso entre ellos, que comenzo bien pero acabo fatal.
Ahora Cayetana ha cambiado Madrid por Barcelona, y a Suso por otros, y todo va bien hasta que ambos reciben la noticia de la boda de Nina, donde tendran que volver a verse.
El enfermero bombon, la fotografa caotica y un millon de momentos de locura. No enamorarse sera la mision de ambos., si es que deciden aceptarla. -
Detras de un beso de Adriana Rubens
https://gigalibros.com/detras-de-un-beso.htmlDespues de Detras de la mascara y Detras de tu mirada, llega la esperada tercera entrega de la saga ambientada en el Londres de finales del siglo XIX.
-
Los herejes de Humphrey Slater
https://gigalibros.com/los-herejes.htmlAquella tarde del 17 de julio de 1936 en un cafe de Malaga, el coronel Cordova no pudo evitar echar un vistazo a los tres jovenes antropologos ingleses que, sentados en un rincon del local, charlaban animadamente sobre una novela acerca de la tragica suerte de tres ninos -Elizabeth, Paul y Simon, como se llaman tambien los tres jovenes- cuyos padres habian sido condenados a morir en la hoguera victimas de la cruzada que la Iglesia habia emprendido contra la herejia catara. (r)No te sientas tan segura de que los dias de la persecucion de la heterodoxia hayan quedado atras-, le previene Simon a Elizabeth bajo la atenta mirada del militar. Al dia siguiente, Espana entera revienta en una guerra fratricida y sin cuartel, convirtiendose en un lugar inhospito para la libertad de pensamiento y en un terreno abonado al odio y la intolerancia donde nada ni nadie estara a salvo de cruzadas, purgas, ejecuciones y traiciones, llamense brigadistas, anarquistas, republicanos, comunistas o militares.
-
El olor de la hierba despues de la lluvia de Patrick Jacquemin
https://gigalibros.com/el-olor-de-la-hierba-despues-de-la-lluvia.htmlUna novela inspiradora que invita a abrazar la naturaleza para conectar con nosotros mismos.
-
Sin ver atras de Carolina Mendez
https://gigalibros.com/sin-ver-atras.htmlKara tiene un pasado del que no se siente muy orgullosa. Hacer sentir miserables a las personas es algo de lo que esta profundamente arrepentida, pero la vida tiene maneras de hacerte pagar todo lo que haces, y Kara no es la excepcion a esta regla.
-
Inocencia Sensual de Carol Marinelli
https://gigalibros.com/inocencia-sensual.htmlEl implacable multimillonario Ethan Devereux sabia que la prensa seguia todos sus movimientos y, cuando descubrio que el resultado de la asombrosa noche que habia compartido con la actriz Merida Cartwright era un embarazo, decidio moverse a toda prisa para controlar el escandalo.
-
Protegida por el guerrero (Mackenzie 3) de Emma G. Fraser
https://gigalibros.com/protegida-por-el-guerrero-mackenzie-3.htmlLos pasos apresurados de Iona resonaban a lo largo del amplio y solitario pasillo. En su perfecto rostro ovalado y palido se dibujaba una expresion de enojo que le era imposible ocultar a pesar de que siempre habia sido una joven que habia aprendido a manejar muy bien sus emociones. Su melena lisa y rubia caia suelta por su espalda y ondeaba con fiereza a cada paso que daba. Sus ojos azules, normalmente huidizos, miraban fijamente al frente y estaban ligeramente entornados debido a la rabia que sentia en su interior, incluso parecia que gracias a ese sentimiento las pecas de sus mejillas se habian oscurecido. En sus voluptuosos labios mostraba un mohin que indicaba su oposicion a algo que roia su interior. Iona se habia visto obligada a vestirse con sus mejores vestidos durante los dias en los que los invitados a la boda de su hermano Math estuvieran pululando libremente por el castillo, y el que vestia sin duda destacaba su extrema belleza. De color azul palido y ribetes dorados, aquella prenda se ajustada a la perfeccion en su menuda y delgada figura, resaltando la sensualidad de sus pechos, que sobresalian entre la tela del escote que sin duda habia hecho que su padre pusiera el grito en el cielo. Pero poco le importo cuando a la hora del desayuno los ojos de su padre casi salieron de sus orbitas al verla aparecer. Estaba enfadada con la llegada de tantos invitados al castillo, pues eso suponia mucho trabajo, pero lo peor de todo no era eso, sino el hecho de que unos de ellos eran unos primos lejanos por parte de padre. El hijo de estos siempre la habia molestado desde pequena, y ahora no iba a ser menos. Sus ojos se entornaron mas al recordar a su primo lejano, pues el era uno de los motivos de su tremendo enfado. Apreto el paso a traves de los diferentes corredores del castillo. Adoraba su casa, pero cuando tenia prisa, lo odiaba, pues era un castillo cuyos pasillos eran casi laberinticos, oscuros y solitarios. Buscaba el salon donde sabia que encontraria a su madre junto a su tia, recien llegada del dia anterior para ayudar en lo que fuera necesario. Iona queria contarle algo en relacion a su primo lejano y a varios miembros de los clanes invitados a la boda. Sn duda, su padre habia decidido que fuera un enlace de alto copete en el que gastarian gran parte de lo recaudado hacia poco a lo largo de todas las tierras del clan Mackay. Por fin se casaba el hijo del laird, su primogenito, y desde hacia demasiados anos en el castillo no se celebraba una boda de esas caracteristicas, pues la boda de sus padres se habia festejado en el clan de su madre, los Gordon. Iona lanzo un resoplido cuando por fin diviso la puerta que buscaba. La joven levanto su mano y la abrio con fuerza para entrar como una exhalacion dentro del pequeno salon. Vio como su madre daba un respingo en su silla y se giraba hacia ella con el gesto ligeramente enfadado. Su tia, por el contrario, levanto la mirada de las flores con las que estaba adornando varios jarrones y le dedico una sincera sonrisa. --!Iona! --exclamo Neris, su madre--. ?Acaso no te he ensenado que hay que llamar a las puertas antes de entrar? El tono ligeramente enojado de su madre hizo que su enfado disminuyera en parte, pero tan solo se limito a decir un simple: --Lo siento, madre --susurro antes de cerrar la puerta tras ella. Neris suspiro y dejo las flores sobre la mesa para levantarse y girarse por completo hacia su hija. Despues dio un paso hacia ella y la tomo por los hombros: --?Que te ocurre? La mirada de indignacion volvio a aparecer en los ojos azules de la joven, que se entornaron de nuevo antes de lanzar un bufido poco femenino. --Se trata de Hamish --exclamo con cierto asco cuando pronuncio el nombre de su primo lejano. Su madre puso los ojos en blanco antes de preguntarle: --?Que pasa con el? Cada vez que os veis acabais enfrentandoos. --Y no es para menos, madre --se quejo Iona--. Lleva toda la manana intentando cortejarme. ?Se lo puede creer? Y no solo el. Varios guerreros de los otros clanes tambien se han acercado a mi con claras intenciones de cortejo. Y los que no se han acercado tienen cara de querer hacerlo, madre. La cara de asco que mostraba Iona ante un posible pretendiente casi hizo reir a Neris, pero logro contenerse a tiempo. Elevo su mano y toco con suavidad la mejilla de Iona. Una pequena sonrisa se dibujo en sus labios. Su hija se hacia mayor y sin lugar a dudas la belleza con la que resplandecia a diario no le pasaba desapercibida a ningun hombre, no solo a los recien llegados, sino tambien a varios guerreros del clan. --Ya tienes edad casadera, hija. Deberias planteartelo. Iona volvio a lanzar un bufido de repugnancia. --Madre, algunos de ellos no tienen la dentadura completa… Neris sonrio. --Solo digo que ahora tienes muchos pretendientes entre los que elegir --explico. Iona fruncio el ceno y tras un escalofrio al pensar en el mero hecho de casarse, nego rotundamente con la cabeza. --Calma, hija. No pasa nada porque hables con alguno de ellos y muestres cierto interes. Tu padre ha invitado a muchos guerreros de las Tierras Altas, entre ellos algunos lairds aun solteros, como Andy MacLeod, que es muy apuesto. Iona dio un paso atras y volvio a negar con la cabeza. --No quiero, madre. No imagino mi vida ligada a un hombre unicamente por su posicion o su dinero. Neris le dedico una mirada cargada de pesimismo. --Hija, vivimos en un mundo en el que tiene que ser asi. --Pues me niego, madre --respondio energicamente--. No podria vivir con un hombre que me inspira asco solo por un plato en la mesa. Y antes de darle tiempo a su madre para responder, Iona salio del salon de la misma forma que habia llegado, como una exhalacion. Neris suspiro largamente y con cierta tristeza antes de girarse hacia su hermana, que habia preferido mantenerse al margen de la discusion, y esta la miro con una expresion entre divertida y preocupada. --No recordaba que Iona tuviera tanto caracter --le dijo para intentar relajar el ambiente. --Y realmente no lo tiene, pero desde que le dijimos que habiamos invitado a Hamish esta malhumorada. --Deja que se relacione estos dias con los guerreros que han llegado. Seguro que alguno le hace borrar de su mente la idea que tiene del matrimonio. Neris asintio con seriedad y volvio a tomar entre sus manos las flores. Ese dia por la tarde era la boda de su hijo mayor, Math, y no podia albergar en sus pensamientos nada que no tuviera que ver con la felicidad que le producia esa union. Iona volvio sobre sus pasos a traves del laberintico pasillo. Durante unos instantes creyo que una conversacion con su madre para dejarle entrever su malestar con ciertos invitados llegaria a quitarle el sentimiento que le recorria el cuerpo. Penso que su madre le daria la razon respecto a lo que pensaba de su primo lejano, pero no fue asi, sino que el hecho de haber escuchado de su boca que le diera una oportunidad a alguno de los pretendientes habia provocado que su ira aumentara. Y en ese momento no deseaba ver a nadie mas hasta que llegara el momento para cambiarse de ropa para la boda. Sin embargo, cuando giro en una de las esquinas del pasillo y se choco contra el enorme pecho de un hombre torcio mas el gesto. --Lo siento --se disculpo cuando se vio impulsada hacia atras por aquella mole de hombre y estuvo a punto de caer al suelo. No obstante, unas manos fuertes la sujetaron antes de que perdiera el equilibrio y cuando levanto la cabeza para comprobar de quien se trataba, se quedo sin aliento por la intromision. --No pasa nada, prima. La voz masculina y pedante de su primo Hamish llego hasta sus oidos y necesito de toda su fuerza de voluntad para no soltar un improperio poco femenino delante de el. Se solto de sus manos con impetu, estiro la espalda cuanto pudo y lo miro con el mismo odio que una hora antes cuando lo vio por ultima vez. --?Acaso me estas siguiendo? --le pregunto de mala manera. Hamish sonrio de lado y se cruzo de brazos frente a ella al tiempo que tambien estiraba la espalda por completo, como habia hecho la joven. Iona trago saliva. Nunca habia estado tan cerca de el ni tan a solas con ningun otro hombre, por lo que se puso ligeramente nerviosa. Hamish era mas alto que ella, de complexion fuerte y no resaltaba precisamente por su belleza. Desde pequeno tenia la nariz torcida tras una pelea, una cicatriz le cruzaba la frente y cuando sonreia mostrando sus dientes, Iona tenia que hacer acopio de su fuerza de voluntad para no vomitar tras ver varias piezas negras. Eso sin contar que cada vez que hablaba escupia saliva por todas partes. --La verdad es que solo estaba dando una vuelta para matar el tiempo, pero ahora que el destino ha vuelto a ponerte en mi camino no estaria mal que salieramos a dar una vuelta por los alrededores del castillo. Iona levanto una ceja y apreto los punos con fuerza. --Vaya, primo --comenzo con ironia--, no sabia que ademas de pesado fueras tonto. Hamish enarco una ceja. --Esta lloviendo. Iona dio un paso hacia un lado e intento bordearlo para seguir con su camino, pues no podia aguantarlo por mas tiempo. Estaba de mal humor y no queria aguantar las impertinencias de nadie. Sin embargo, Hamish se movio y le corto el paso haciendo que la joven volviera a chocar contra el. --?Te he dicho alguna vez que me gustan las mujeres mordaces? Como tu… Iona estaba al borde de darle una sonora bofetada, pero sabia que si lo hacia podia aguar la boda de su hermano, por lo que se contuvo. --?Te he dicho que me gusta cualquier hombre menos tu? El guerrero lanzo una carcajada y estiro una mano para pasar un mechon de pelo tras la oreja de Iona, que estuvo a punto de caerse de espaldas cuando se echo hacia atras para no sentir su mano sobre ella. --Me encantas, Iona. En mi vida me haces mucha falta. --Pues no creo que tu vida haya sido un infierno hasta ahora. --Lo ha sido, de verdad. --Hizo una mueca teatral--. Me gustaria mucho poder cortejarte. La joven lanzo un bufido. --Y a mi que dejes de hacerlo. ?No entiendes que no me gustas? Hamish dio un paso hacia ella y la acorralo contra la pared. --?Y tu no sabes que cuanto mas te resistes mas me gustas? Nerviosa, Iona lo empujo lejos de ella, haciendo que el guerrero dejara escapar una sonora carcajada. La joven lo miro mal y antes de que tuviera tiempo para volver a la carga, retomo su camino. --!Seria un honor que me dedicaras un baile! --exclamo el joven parado en el sitio. Iona, sin mirar atras, le espeto: --!Antes prefiero comerme el estiercol de los cerdos! --Yo no me rindo, prima. --!Pues deberias! Y cuando giro en el pasillo para dirigirse a las escaleras, volvio a escuchar de nuevo la carcajada de Hamish. --Maldita sea… --gruno para si Iona antes de echar a correr por el pasillo. Faltaba menos de una hora para la boda cuando la doncella ato el ultimo cordon del vestido de Iona. Su madre habia insistido en que se pusiera esa prenda y no la que ella habia elegido, pues no queria destacar frente a las demas mujeres, al contrario, deseaba que las miradas no estuvieran puestas en ella. Pero su madre no pensaba lo mismo y le habia exigido, con sutileza, que se pusiera aquel vestido, y cuando al mirarse en el espejo descubrio que estaba mas bella que nunca, Iona torcio el gesto. Su madre le dejaba claro con esa prenda que deseaba que los pretendientes que sabia que tenia pusieran sus ojos sobre ella. --Estais preciosa, senorita. Ann, la sirvienta que la habia ayudado a vestirse, desconocia que ella no deseaba estar tan llamativa. Hubiera preferido ponerse los ropajes de la muchacha antes que aquel precioso atuendo. De azul celeste y ribetes bordados en diferentes colores, el vestido se adheria a la perfeccion a su figura, haciendo resaltar la curvatura de sus pechos con un escote pronunciado. Las mangas caian abiertas a su costado, mostrando parte de su antebrazo y la blancura de su piel. Sin lugar a dudas, era un vestido que dejaba poco a la imaginacion de los pretendientes, pues era mas que evidente que estaba confeccionado para atraer las miradas de los hombres y asi buscar un marido. Pero ella no lo deseaba. Iona miro de reojo a Ann y torcio el gesto. --Habria preferido ponerme el vestido marron. La doncella abrio desmesuradamente los ojos. --?El marron? Senorita, ese parece un saco. No resaltaria tanto vuestra belleza. Iona sonrio. --Eso es lo que quiero. --Por lo que he oido, teneis varios pretendientes entre los asistentes a la boda de vuestro hermano --le dijo mientras Iona se dirigia hacia la silla para preparar el peinado--. ?No estais contenta? Iona no pudo evitar lanzar una carcajada. --?Tu estarias contenta con alguien como Hamish detras de ti? --le pregunto enarcando una ceja. Ann sonrio levemente. --Bueno… la verdad es que muy apuesto no es, senorita. --Iona rio por lo bajo--. Pero me he cruzado con el laird MacLeod y es muy guapo.
-
INCRIMINADO de Nora K. Rose
https://gigalibros.com/incriminado.html?Preparados para leer una novela terriblemente romantica, llena de ternura, carino, emocion, amor y desamor, y. persecuciones policiales?
-
No es mio de Susi Fox
https://gigalibros.com/no-es-mio.html -
Piso para dos de Beth O'leary
https://gigalibros.com/piso-para-dos.htmlTiffy y Leon comparten piso.
Tiffy y Leon comparten cama.
Tiffy y Leon no se conocen. -
Circulos cerrados (Mistery Plus), Viveca Sten de Viveca Sten
https://gigalibros.com/circulos-cerrados-mistery-plus-viveca-sten.html -
Siempre sone contigo de Giselle Amoros
https://gigalibros.com/siempre-sone-contigo.htmlRoxanne se reencuentra con alguien del pasado, exactamente, de su ninez. Verlo de nuevo le despierta sentimientos que creia olvidados y se propone que esta vez no se le escapara, sera suyo. Pero la situacion se le va de las manos cuando descubre que el tiene planes para ella y no son los mismos con los que suena.
Biel, divorciado y padre de tres hijos, enterro el amor junto con su matrimonio. Ahora, la vida le juega una mala pasada y le surge un problema que debe solucionar con urgencia. Sus planes estan calculados al milimetro, pero la llegada de Roxanne hace que todo se tambalee.
Sabe que no puede ser para el, aun asi, ?por que no puede estar lejos de ella?
Descubre esta apasionada y romantica historia de la mano de Roxanne y Biel. -
Dia y noche de Linda O. Johnston
https://gigalibros.com/dia-y-noche.htmlLa reportera Cara Hamilton acababa de conseguir la historia de su vida. Pero lo que la ponia mas nerviosa era el insoportable… e increiblemente atractivo ayudante del sheriff.
-
Quedate siempre a mi lado de Victoria Magno
https://gigalibros.com/quedate-siempre-a-mi-lado.htmlUna historia romantica que sorprende, enamora y seduce.
-
El ritual de los muertos de Nagore Suarez
https://gigalibros.com/el-ritual-de-los-muertos.html--Ahi fuera yo soy bueno. ?Entiendes? Soy una buena persona, alguien cualquiera. Pero cuando entro en este cuarto, entonces dejo de ser yo. Entro en otro mundo. Aqui ya no soy el mismo. Aquellas palabras le provocaron nauseas. O quiza fuera la vision del cuerpo de Lucia, que yacia con el craneo aplastado a menos de un metro de ella. El pelo rubio tenido ahora se habia convertido en una marana rojiza, y el suelo de cemento estaba encharcado de sangre. Sentia que la cabeza le daba vueltas. ?Que habia tomado antes? No lo recordaba. Las ultimas horas se confundian entre ellas, se hacian indistinguibles. Solo podia pensar en el martillo impactando en la cabeza de su amiga, destrozando el hueso, liberando trozos de masa encefalica, despues de que hubiera intentado pelear, escapar. Ella no tenia fuerzas para tanto. Intuia que ella era el verdadero objetivo, pero Lucia se habia negado a despegarse de su lado. Por eso habia acabado alli, en aquel infierno. El aire estaba viciado, el olor a putrefaccion y el humo inundaban el ambiente. Un aroma dulzon y repulsivo que se le pegaba a la piel y le hacia aun mas dificil respirar. La estancia era un museo de los horrores: mirara a donde mirase tan solo veia muerte. La luz de las velas iluminaba el rostro del hombre que estaba frente a ella. Tenia los ojos brillantes, la frente cubierta de sudor y la camiseta llena de salpicaduras de sangre. Parecia estar casi en trance, en extasis. Intento soltarse las munecas sin exito, sentia el cuerpo paralizado por el panico. Sabia que era lo que venia despues. No habia escapatoria posible. La puerta y las ventanas estaban cerradas, nadie oiria sus gritos a traves de las paredes de piedra. Rezo, lloro y suplico, pero nada surtio efecto. --Algun dia Dios te castigara… --susurro mientras el la agarraba del pelo y sostenia su cabeza hacia atras. El cuchillo atraveso piel, musculo y cartilago, mientras ella, aun consciente, observaba la sangre abandonar su cuerpo. --Gracias a ti, no me castigara nadie --respondio el. 1 Animas Dicen que todas las leyendas esconden algo de realidad. Aquella tarde de principios de febrero, mientras la lluvia caia suavemente sobre las lapidas del cementerio, me vino a la mente una de las mas populares de Becquer, que habia leido varias veces en el instituto: <
>. Segun contaba, la Noche de Difuntos, templarios y nobles, muertos tiempo atras en una lucha inutil, se levantaban de sus tumbas y vagaban por el monte envueltos aun en los jirones de sus sudarios. Y entonces, doblaban solas las campanas de la capilla y el lugar se volvia intransitable para los humanos; cualquiera que pusiera un pie alli no regresaria a su casa con vida. Me pregunte cuantos curiosos se acercaban todavia en la noche del 1 de noviembre a aquel paraje, con la esperanza --y el temor-- de encontrarse con las animas de los muertos y quiza, quien sabe, con los mismisimos Beatriz y Alonso, los desdichados protagonistas de la historia del escritor romantico. No fue casualidad que me acordara en ese momento de Becquer y de su monte de las animas. Esa manana, cuando conducia por la autovia, habia pasado por Soria. No habia llegado a entrar en la ciudad, ya que mi camino se desviaba antes hacia la sierra de Cameros. Para llegar hasta el pueblo --sin pagar peaje-- hacia falta atravesar una estrecha carretera de doble sentido llena de curvas que discurria entre montanas rojizas dignas del lejano Oeste --buitres incluidos--, bosques ahora casi desnudos, un embalse y pequenos pueblos junto al rio Iregua. Era la primera vez que tomaba aquella ruta, y, como habia salido muy pronto de Madrid, habia aprovechado para hacer un par de paradas. Desayune un cafe y un cruasan de tamano considerable en un bar de Villanueva de Cameros, al lado de una pequena gasolinera y de una ermita escondida entre unos arboles, a la que se llegaba bajando unas escaleras. Mas tarde, pare a un lado de la carretera en una fuente de piedra llamada Los Eros, donde llene la botella de agua helada, saque a Dali a hacer pis y estuve a punto de pisar a unos agradables limacos, una especie de babosas negras gigantes, que se arrastraban placidamente cerca del pilon cubierto de verdin. En realidad, si hacia balance, aquella habia sido una manana bastante intensa. El dia anterior habia recibido una llamada de Paloma para contarme que el padre de Abel, despues de un par de meses luchando contra un repentino cancer de colon, habia fallecido. Asi que habia preparado mi habitual maleta llena de < > y habia partido en direccion al pueblo. No habia podido estar alli durante el tiempo en el que habia estado ingresado en el hospital y, justo por eso, no queria faltar a su funeral. --?Crees que queda mucho? --me susurro Paloma. A lo lejos se escuchaban las palabras del cura, amortiguadas por el sonido de la lluvia. Intente mover la mano con la que sujetaba el paraguas, pero hacia tanto frio que, aunque llevaba guantes, apenas sentia los dedos. Por lo visto, habia llegado una borrasca con nombre de senora, que amenazaba con equiparar las temperaturas de Navarra a las de Finlandia. --Espero que no --respondi yo en el mismo tono--. Me estoy congelando. Paloma saco un panuelo de papel usado del bolsillo para limpiarse la nariz. --?Estas segura de que vas a dormir en tu casa? Te vas a morir de frio. --Tranquila, Rogelio ha puesto la calefaccion esta manana, y encendere la chimenea del salon. --Entonces soy yo la que se va a dormir contigo…, no creo que aguante a mi hermana tanto tiempo --contesto bajando aun mas la voz. Mire hacia mi derecha. Pude ver a Irene, la hermana mayor de Paloma, junto a Carmen, su madre, a unos metros de nosotras. Por suerte, no parecia habernos oido. Las hermanas no podrian ser mas diferentes: mientras que Paloma habia heredado el pelo extremadamente rubio y la altura de su madre, Irene apenas rozaba el metro sesenta y tenia el pelo y los ojos castanos. Pero habia un rasgo que si compartian: la misma naricilla afilada de elfo. Segui recorriendo el cementerio con la mirada. Habia mucha gente reunida alli, medio pueblo habia acudido al entierro. El padre de Abel era toda una institucion --el dueno de las bodegas mas importantes de la zona-- y todo el mundo habia querido hacer acto de presencia. Busque entre la multitud alguna cara familiar, pero reconoci a pocos: el camarero de El Guacamayo, la panadera… Algunos me miraban con desconfianza o cuchicheaban entre ellos. El impacto de lo ocurrido el verano pasado aun no habia desaparecido, y eso que no conocian ni la mitad de la historia. --Esta alli --dijo Paloma senalando un punto a la izquierda, cerca de la puerta. --?Que? ?Quien? --pregunte desconcertada. --Gabriel Palacios. No disimules, estabas intentando localizarle. Mire fijamente al suelo. Paloma tenia razon, en el fondo tenia la esperanza de descubrirle entre la gente, aunque no sabia muy bien por que. --Mierda… No quiero que me vea. --Un poco tarde. Pero, tranquila, no creo que vaya a venir a saludarte. No podia contradecirla. De hecho, tal como habian acabado las cosas entre nosotros, lo mas probable era que Gabriel no fuera a saludarme en un tiempo. Y lo cierto era que me lo habia ganado a pulso. Habian pasado casi siete meses desde que volviera a la casa indiana de mi abuela con la intencion de pasar el verano y asistir a un festival de musica. Siete meses desde que aparecieran unos huesos en el jardin, que resultaron estar relacionados con mi madre y lo que ocurrio en el pueblo durante el verano de 1978, cuando ella aun era una adolescente. Desde entonces, las cosas habian cambiado mucho. Regrese a Madrid y, despues de pasar unas semanas en casa de mi madre, donde recibi mas cuidados --aunque quiza peor comida-- que en un hospital, volvi a mi microscopico apartamento en La Latina. Me acostumbre rapido a la rutina acelerada de la ciudad y, sin embargo, nada volvio a ser lo mismo. Y no por las pesadillas o las pastillas para calmar la ansiedad, que me ponia bajo la lengua cuando sentia que no podia respirar. Habia algo mas, algo que aun no conseguia identificar. Una sensacion de miedo y, a la vez, la necesidad de volver alli, al lugar donde empezo todo. Pero siempre ganaba el miedo. Habia pensado en ir de visita, claro. Varias veces, de hecho. Pero despues buscaba alguna excusa, algun plan que surgia el fin de semana o trabajo pendiente. Y, poco a poco, fui distanciandome de todo lo que tuviera que ver con el pueblo. Era mas comodo asi, aun no me sentia preparada. En Madrid todo parecia mas lejano, mas irreal… La casa, el verano, el festival… eran como un sueno, un escenario de una vida pasada. Al principio, hablaba con Gabriel casi a diario: mensajes, alguna llamada…, la promesa constante de que volveria pronto siempre flotaba entre nosotros. Y despues, poco a poco, deje de contestar. Las conversaciones se volvieron cada vez mas cortas, cada vez menos frecuentes, hasta que un dia: silencio. No hubo ninguna explicacion --ni el me la pidio--, ningun drama, ninguna discusion. Simplemente, igual de rapido que habia empezado todo, se termino. O, mejor dicho, lo termine. --Vamos, tenemos que ir a dar el pesame. Ya han acabado --me apremio Paloma, empujandome ligeramente por la espalda. La segui hacia la cola de gente que se acercaba a Abel y a su madre, intentando no sacarle un ojo a nadie con el paraguas. El cementerio no era muy grande: un rectangulo de muros de cemento rodeado por unos cipreses un tanto mustios. La pared del fondo estaba llena de nichos y el resto eran tumbas con lapidas de piedra, algunas de las cuales tenian fotos; otras, pequenas estatuas… Solo habia dos panteones modestos y, evidentemente, uno de ellos pertenecia a los Arbaiza. --Lo siento mucho --le susurre a Abel mientras le abrazaba cuando, por fin, llegamos hasta ellos. --No tenias que haber venido, esto esta muy lejos --respondio. --!No tiene nada mejor que hacer! Trabaja desde casa --intervino Paloma acercandose para abrazarle. Abel no pudo evitar sonreir por un momento. Paloma tenia ese don: su eterno buen humor era contagioso, hasta en situaciones como aquella. --Nos vemos antes de que me vaya, ?vale? --le dije a modo de despedida a Abel. El asintio antes de girarse para seguir atendiendo al resto de los familiares y amigos de su padre. La cola parecia interminable. --Lo tiene que estar pasando fatal. Perder a tu padre y ademas asi, en tan poco tiempo --le comente a Paloma mientras saliamos del cementerio. --Un cancer fulminante… Aunque Abel llevaba ya un tiempo raro, desde antes de lo de su padre. --?Que quieres decir? --pregunte extranada. Mi relacion con Abel no era tan estrecha como con Paloma. --No se… quiza me equivoque, pero no lo he visto mucho ultimamente. Hace ya un tiempo que ha empezado a frecuentar unas companias digamos… diferentes. --?Diferentes? ?A que te refieres? Paloma abrio la puerta de su Golf y cerro el paraguas. Practicamente habia dejado de llover. --?Por que no me invitas a un vino en esa mansion tuya y me ahorras tener que asfixiar a mi hermana con una almohada? --Me parece bien, no quiero mas muertes por hoy. Pero cuando lleguemos me sigues contando. Deje a Paloma para ir a mi coche, que estaba aparcado unos metros mas atras, en un camino de tierra. El cementerio estaba en las afueras del pueblo, rodeado de huertas y de algunos arboles que hacian compania a los cipreses. En ese momento vi a Gabriel, junto a la tapia, hablando con un matrimonio de unos sesenta anos que deduje serian sus padres. Desvie la mirada rapidamente, pero sabia que me habia visto. No me sentia capaz de acercarme, ni mucho menos de mirarle a los ojos. Quiza fuera mejor asi. Me sentia bastante avergonzada por como habia terminado mi relacion con el. Entre en el coche y, mientras me alejaba del cementerio, volvi a pensar en la leyenda de Becquer. En las animas que revivian en la Noche de Difuntos. ?Por que nos daban tanto miedo los muertos? ?Que era lo que nos asustaba tanto de los cementerios, lo que nos aterrorizaba cuando de ninos jugabamos a ver quien de nosotros conseguia acercarse mas a la puerta de entrada? ?Eran los difuntos o era, quiza, la posibilidad de unirnos a ellos bajo tierra? 2 Hogar Lo primero que hicimos al entrar en la casa --despues de rascarle las orejas a Dali-- fue encender la chimenea del salon. Rogelio habia puesto la calefaccion por la manana, pero calentar minimamente aquella mole requeria muchas mas horas. Ni Paloma ni yo teniamos mucha practica, asi que el proceso fue mas largo de lo esperado y estuvo a punto de costarle a mi amiga las pocas cejas que tenia. Cuando por fin conseguimos mantener un fuego decente, nos dejamos caer en el sofa lo mas juntas posible --como hacen los pinguinos emperador cuando hace frio--, nos tapamos las piernas con una manta de ganchillo y abrimos una botella de Baron de Ley que cogi del mueble de las bebidas. --Menos mal que no he tenido que bajar a la bodega --suspire aliviada. La bodega estaba en el sotano y era --obviamente-- el lugar mas frio y humedo de toda la mansion. En realidad, la Casa del Mexicano era mucho mas agradable en la epoca estival. Entonces se agradecia el frescor que proporcionaban los muros de mas de cien anos de antiguedad. --?Que sientes al estar otra vez aqui? --me pregunto Paloma mientras se llenaba la copa de vino. Me encogi de hombros. --No se. Por un lado, tengo la sensacion de que ha pasado mucho tiempo y, por otro… --Y por otro lado parece que todo pasara antes de ayer --dijo terminando mi frase. --Si, supongo que si --reconoci. --Pero te ha dado tiempo a cambiar de trabajo y hasta de novio --comento con una sonrisa que dejaba al descubierto sus dientecitos de vampiro. --Eso no es del todo verdad… --me defendi. Era cierto que a los dos meses de volver a Madrid --despues de mucho bucear en LinkedIn -- habia encontrado trabajo en una pequena revista digital de Lifestyle. Lo bueno era que trabajaba desde casa, por un sueldo precario pero aceptable. Lo malo, que el noventa y cinco por cierto de los articulos que escribia eran recopilaciones de consejos, curiosidades, recomendaciones de restaurantes, recetas o incluso contenido patrocinado por marcas. Cualquier cosa que fuera jugosa en las redes sociales y consiguiera atraer visitas a la pagina web de la revista. No obstante, teniendo en cuenta la situacion del mercado laboral para los jovenes, que incluia practicas apenas remuneradas que se extendian durante anos o trabajos de falsos autonomos, y a pesar de que aquel puesto estaba muy lejos de la idea que tenia cuando deje mi trabajo en la agencia de comunicacion, la verdad es que no podia quejarme… Respecto a lo del cambio de novio, Paloma estaba completamente equivocada. --?Asi que ahora me vas a decir que Oier y tu no estais juntos? --insistio. --Nos estamos conociendo --puntualice. --Pense que ya os conociais --sonrio. -
Edith (Las feas tambien los enamoran 3) de Elizabeth Urian
https://gigalibros.com/edith-las-feas-tambien-los-enamoran-3.htmlCamile, Deirdre, Edith, Leonor y ahora Phillipa son las protagonistas de la saga romantica ambientada en la epoca Victoriana <
>, cinco historias que demuestran que el amor se rige por su propia logica. -
Un cafe con sal de Megan Maxwell
https://gigalibros.com/un-cafe-con-sal.htmlLizzy es una joven moderna y extrovertida a la que le encanta salir con sus peculiares amigos. Aunque no es el trabajo de sus suenos, se gana la vida como camarera en el restaurante del hotel Villa Aguamarina de Madrid. Un dia, a la salida de una fiesta en la que ella ha servido el catering a los invitados, ve que un coche se acerca peligrosamente a un hombre que esta en la acera hablando por el movil. Lizzy no lo piensa dos veces y va en su ayuda. Sin saberlo, acaba de evitar el atropello de William, el hijo del dueno del hotel. Serio, clasico, reservado y algo mayor que ella, en un principio se enfada al verse rodando por los suelos, pero minutos despues se queda prendado con la muchacha que le ha salvado del accidente. A partir de ese instante, el destino, y mas concretamente William, haran todo lo posible para que algo magico suceda entre ellos. ?Estara Lizzy preparada para lo que le depara el futuro? Si crees en los flechazos y no quieres dejar de sonreir, no te puedes perder Un cafe con sal, un relato que te enamorara.
-
Juego de apariencias de Ingrid Desjours
https://gigalibros.com/juego-de-apariencias.html -
Elevacion de Stephen King
https://gigalibros.com/elevacion.htmlKing vuelve a Castle Rock con un mensaje para nuestros tiempos.