• razones para odiar a bruno ballester - Alex Divaro , Fanny Ramirez

    https://gigalibros.com/razones-para-odiar-a-bruno-ballester.html

    Se suponia que seria una noche tranquila para Camila, dejaria la energia fluir, escucharia musica y escribiria un rato. En cambio termino inmiscuyendose con uno de los escritores mas vendidos del pais, al criticar las partes eroticas de sus novelas. Sin embargo, es esa ocurrencia la que logra sacar del tedio en el que se encontraba esa noche, a Bruno Ballester, que con alevosia se dispone a fastidiarla por tal osadia.

  • Razones para odiar a Bruno Ballester (Bilogía ... - Amazon

    https://www.amazon.es/Razones-odiar-Bruno-Ballester-Bilog%C3%ADa-ebook/dp/B08STSTFDW

    Mirar en el interior de este libro. Razones para odiar a Bruno Ballester (Bilogía Bruno Ballester 1) de [Alex Divaro ...

  • Más razones para odiar a Bruno Ballester (Bilogía ... - Amazon

    https://www.amazon.es/razones-odiar-Bruno-Ballester-Bilog%C3%ADa-ebook/dp/B08SV35HV7

    Lo mejor para Bruno sería ignorar a Camila, pero es incapaz de frenar sus impulsos. Se suponía que aquel viaje a la feria de libros sería como cualquier ...

  • Más razones para odiar a Bruno Ballester (Bilogía Bruno ...

    https://www.penguinlibros.com/es/literatura-contemporanea/231157-ebook-mas-razones-para-odiar-a-bruno-ballester-bilogia-bruno-ballester-2

    Se suponía que aquel viaje a la feria de libros sería como cualquier otro para Bruno. Miraría a lo lejos cómo los ejemplares de sus libros se venderían, ...

  • razones para odiar a bruno ballester (bilogía ... - Casa del Libro

    https://www.casadellibro.com/ebook-razones-para-odiar-a-bruno-ballester-bilogia-bruno-ballester-1-ebook/9788418399657/12141278

    El eBook RAZONES PARA ODIAR A BRUNO BALLESTER (BILOGÍA BRUNO BALLESTER 1) EBOOK del autor ALEX DIVARO en PDF al MEJOR PRECIO en Casa del Libro.

  • Razones para odiar a Bruno Ballester by Alex Divaro

    https://www.goodreads.com/es/book/show/57294448

    Sensual, atrevida y cotidiana, lidia con sentimientos profundos de inseguridad y ego que nos hace identificarnos de manera muy rápida. Decir que me gustó, es ...

  • Más razones para odiar a Bruno Ballester by Alex Divaro

    https://www.goodreads.com/book/show/57523442-m-s-razones-para-odiar-a-bruno-ballester

    Llegó un punto en la relación que todo era peleas, peleas con falta de comunicación y empatía hacia el otro pero al final los dos se dejaron llevar, dejaron ...

  • Razones para odiar a Bruno Ballester (Bilogía ... - Libelista

    https://www.libelista.com/razones-para-odiar-a-bruno-ballester-bilogia-bruno-ballester-1

    Odiar nunca fue tan excitante... Se suponía que sería una noche tranquila para Camila; que dejaría fluir la energía, escucharía música y escribiría un rato.

  • RAZONES PARA ODIAR A BRUNO ... - Popular Libros

    https://www.popularlibros.com/ebook/razones-para-odiar-a-bruno-ballester-bilogia-bruno-ballester-1_E0002732168

    RAZONES PARA ODIAR A BRUNO BALLESTER (BILOGÍA BRUNO BALLESTER 1) 1,89€ Ahora un 5% descuento. Descarga inmediata. Odiar nunca fue tan excitante.

  • RAZONES PARA ODIAR A BRUNO BALLESTER (BILOGÍA ...

    https://www.popularlibros.com/ebook/mas-razones-para-odiar-a-bruno-ballester-bilogia-bruno-ballester-2_E0002732218

    Sinopsis. Lo mejor para Bruno sería ignorar a Camila, pero es incapaz de frenar sus impulsos. Se suponía que aquel viaje a la feria de libros sería como ...

  • RAZONES PARA ODIAR A BRUNO BALLESTER (BILOGIA ...

    https://www.agapea.com/libros/Razones-para-odiar-a-Bruno-Ballester-Bilogia-Bruno-Ballester-1-Ebook--EB9788418399657-i.htm

    Comprar el libro Razones para odiar a Bruno Ballester (Bilogía Bruno Ballester 1) (Ebook) de Fanny Ramírez Alex Divaro, Selecta (EB9788418399657) con ENVÍO ...

  • Aventuras de Tres Rusos y Tres de Jules Verne

    https://gigalibros.com/aventuras-de-tres-rusos-y-tres.html

  • Santiago Abascal. Espana vertebrada de Fernando Sanchez Drago

    https://gigalibros.com/santiago-abascal-espana-vertebrada.html

  • Mi chica golosa de Ruben C. O

    https://gigalibros.com/mi-chica-golosa.html

    Mi pequeno mini Cooper del 2010 se veia realmente pequeno en la entrada de la casa de los Johnson's. Deteniendome por completo, exhale un suspiro de alivio. Lo habia logrado. Mi auto no se habia descompuesto (y eso si que era un logro). Mi auto era mi orgullo, junte dinero y cuando me gradue, mis padres me aportaron el resto, para mi pequeno auto usado, sin embargo, ya llevo tres anos con el y a estas alturas ya no me acompana como en un principio, y no es su culpa, simplemente ya esta viejo. Estaba juntando dinero para otro auto y esperaba poder salir a tiempo de la universidad para comenzar a ganar dinero en grande, bueno al menos para una vida tranquila con un auto decente. Aun asi, le daba las gracias a mi autito por haber resistido hasta aca, ya habia llegado a mi cita de trabajo y estaba justo a tiempo. Hace casi un ano que no era ninera en la casa de los Johnson's, y el dinero definitivamente seria util, ya en mi tercer ano de universidad costear los materiales y utiles se hacia un poco pesado para mi familia, y me hacia bien ahorrar para costear mis propias cosas. Pero mientras tomaba mi cartera del asiento de atras y me acomodaba para salir del auto, se me escapo otro suspiro porque probablemente el camino de entrada no era la palabra adecuada para describir el camino de ripio que debia seguir para llegar a la puerta principal. El sitio de los Johnson era hermoso y grande, tenian una gran rotonda circular, del tipo que se podria imaginar, un ejercito de caballos y carruajes tirando hacia arriba, con un mayordomo que responde a la puerta, con los labios rigidos y una bandeja de bebidas. Y ademas de la enorme mansion de piedra, habia un vasto jardin, ademas de una piscina infinita que se podia ver a la vuelta de la esquina, el agua tranquila y suave en la luz de invierno todo eso, antes de la puerta de la casa. Asi que si, los Johnson's vivian como reyes. Y a pesar de que tecnicamente eramos vecinos de la misma comunidad privada, mis padres estaban en la parte mas modesta, con casas medianas y patios pequenos, mientras que mis empleadores vivian en la colina en la extravagante seccion de millonarios. Pero eso no me importaba realmente, mi vida la estaba forjando recien, nada de lo que mis padres lograron es lo que marcaria mi futuro, sino que yo misma debia encontrar mi propio camino, asi que estaba aqui, por dos razones, por un trabajo que me diera dinero y tambien por la pequena Vania que era la cosa mas linda, una bola de entusiasmo con piernitas. Habia cuidado a Vania desde que era una recien nacida, sentia un carino especial por ella, este ultimo ano en la universidad me habia demandado mucho tiempo, y los Johnson's no habian solicitado mis servicios cuando yo estaba disponible, asi que ahora no podia esperar a verla otra vez, no podia imaginar cuanto habia crecido, y cuanta belleza habia ganado, ella era solo una bebita pero era encantadora, esos rizos color lino y sus redondos ojos azules de bebe que podrian derretir el corazon de cualquiera. Incluso cuando estaba en sus momentos de rabieta, la pequena rubia todavia era adorable, un pequeno torbellino de energia que podia hacer sonreir a cualquier adulto y suspirar con exasperacion a la vez. Asi que, apague el motor, arregle mis cosas por ultima vez y sali de mi automovil maltratado antes de subir con cuidado los infinitos escalones para tocar la puerta grande de entrada. Hace solo unos anos atras, habria subido los escalones de prisa, atletica y delgada como un latigo. Pero he cambiado en este ultimo tiempo, creo que mi desarrollo fue muy tardio, habia crecido en altura, pero mis senos y caderas eran casi inexistentes, sin embargo, despues de los dieciseis anos mi cuerpo comenzo una etapa distinta y donde solia ser larguirucha y delgada, fui formando curvas, mis senos y caderas tenian mas carne y ahora que soy una mujer adulta, el peso que he ganado me hace sentir mas pesada cuando se trata de ejercicios como este. No tenia como quejarme, no era gorda, solo era mas robusta de lo que estaba acostumbra a manejar, quizas muchas chicas deseaban un cuerpo delgado, pero ahora tenia lo mio, y me sentia a gusto con mi nueva version. Aunque cuando se trataba de escaleras habia demasiado rebote y carne que controlar, demasiado peso blando al que no estaba del todo acostumbrada. Asi que camine como una dama, moviendo las caderas, tratando de mantener las cosas en su lugar. Cuando por fin estuve arriba el silencio total me saludo despues de tocar el timbre. Raro, comunmente habia gente en la casa, personal de aseo, jardinero, o la senora Johnson ponia musica para pasearse por la casa. Despues de otro minuto, volvi a llamar al timbre. ?Tal vez estaban todos arriba y no podian oir? De pronto sonaron algunos ruidos, algunos baches, y finalmente se abrio la puerta, revelando al Sr. Johnson. Sonrei timidamente, tratando de no mostrar mi nerviosismo porque el Sr. Johnson siempre habia sido magnifico y esta vez no era una excepcion. El hombre no era viejo, pero era mayor que yo obviamente, era corpulento y misterioso, llenando la entrada, haciendome sentir positivamente pequena, del tamano de una taza de te. Por supuesto que siempre lo habia notado, pero verlo de nuevo solo confirmaba su esplendor, era realmente candente. Cabello color carbon y ojos azules tan intensos que me encendian con su mirada. Ademas, tenia un cuerpo para morirse, nada de cosas flacidas de papa cervecero. Los hombros anchos se estrechaban en una cintura fina, con piernas largas y poderosas vestidas con pantalones de tela. "Oh, hola Mai", retumbo. "Lo siento, estabamos un poco… !Vania, detente!" Grito hacia atras al oir un ruido. Y mientras estabamos alli, un estruendo sono en el piso de arriba como cuando cae algo al suelo, era un plastico, por el sonido podia imaginar a Vania sacando algo del mueble de los juguetes y sin querer boto algo mas, y el senor Johnson hizo una mueca con sus labios y cerro los ojos. "Entra, entra", dijo, exasperado, respiro profundamente y continuo "Ha sido un largo dia". Y a pesar de que mi corazon latia en su cercania, me obligue a sonreir y entre al vestibulo. Esto, definitivamente lo recordaba. El espacio era enorme, todos los pisos de marmol con una lampara de arana gigante colgando sobre nuestras cabezas. "?Donde esta Vania?", Le pregunte tentativamente, tratando de parecer indiferente. El Sr. Johnson suspiro profundamente. Ahora que lo podia ver con mas detencion, estaba mas viejo en sus facciones, habia corchetes alrededor de sus profundos ojos azules que no habian estado alli antes y sus lineas de risa eran un poco mas prominentes. Debe ser cansancio por su trabajo, sabia que trabajaba en algo relacionado con las finanzas, y muchas veces debia abordar aviones y hacer viajes tarde, y volver al siguiente dia para continuar con las cosas aqui. "Vania", grito de nuevo, con una mano en la barandilla. "Baja, por favor, tu persona favorita esta aqui". Y el sonido de unos pequenos pasos sono antes de que un pequeno bulto rubio se precipitara por las escaleras hacia mis brazos. "Mai, Mai", grito la nina de cinco anos. "!Estas aqui!" La nina era muy carinosa. A pesar de ser un dia regular y no un dia de fiesta, lucia un vestido de bailarina purpura, completo con un tutu rigido y una corona reluciente en la cabeza. Tan linda como siempre, y mas grande como lo pense. "Hola carino", dije alegremente. "Me gusta tu ropa. ?Estabas jugando a la princesa arriba?" Vania se echo hacia atras por un momento y vi que su cara regordeta estaba surcada de lagrimas y los ojos rojos por el llanto. "?Estas bien carino?", Le pregunte, esta vez con mas suavidad. "?Vino la malvada bruja?", asumi que por alguna razon habia estado llorando, verla hizo que se me apretara el estomago, no me gustaba ver llorar a los ninos. Ella asintio en silencio, sus ojos azules mirandome con ligeras manchas de chocolate alrededor de su boca. Pero eso estaba bien, los ninos se ensucian muy facilmente y podria arreglarse con un pano tibio, no habia problema. Pero habia algo diferente en el aspecto de Vania, que no era mi imaginacion. Al igual que su padre, parecia agotada, lo cual no estaba bien para una nina de cinco anos. Los ninos se cansan, claro, pero se duermen de inmediato y se despiertan completamente renovados, cada dia es un nuevo dia para ellos. Asi que me preocupe, aunque intente no mostrarlo. Murmurando de manera tranquila, dije, "Vania, te preparare la cena, te limpiare y luego nos prepararemos para ir a la cama ?de acuerdo?" Pero la pequena nina grito entonces, pateando y sacudiendo violentamente sus piernas contra mi. "Oof!" El aliento salio de mi estomago, sus zapatos de charol golpeando dolorosamente contra mis caderas. "!Ay!" Entonces, el Sr. Johnson intervino, sacando a su hija de mi cuerpo y apretandola contra su gran figura. "Lo siento, hemos estado teniendo problemas recientemente, ya sabes, con Romina mudandose y todo". Me detuve en seco antes de recuperarme e intentar parecer normal. ?La senora Johnson se habia mudado? ?Que? ?Cuando? ?Por que mis padres no me lo habian dicho? Y el Sr. Johnson asintio de nuevo, notando mi expresion de incertidumbre. "Romina se mudo hace un par de meses", dijo con voz ronca, "y ha sido duro para Vania. Ella no ha estado durmiendo bien, ha hecho berrinches por cualquier cosa, todo el dia. Entonces, si puedes manejarla esta noche, seria un milagro". Sonrei tentativamente. "Estoy segura de que estaremos bien", le dije de manera tranquilizadora mientras mi mente giraba en miles de pensamientos. "Quedese tranquilo Sr. Johnson, manejare de la mejor forma todo aqui. Y... lamento mucho lo que me comenta", Intente no ser grosera, ni inoportuna, pero en realidad sentia un pesar por lo que me dijo. Dios mio, la pobre pequena. Su madre se habia ido y ahora estaba respondiendo al cambio. Diablos, cualquier nino haria lo mismo, incluso si Romina Johnson apenas habia estado presente en la vida de su hija. La mayoria de los dias, por lo que pude ver cuando estuve aqui, la mujer no se levantaba antes del mediodia y habia dejado la mayor parte del cuidado de Vania a una ninera que hacia todo, la alimentaba, banaba y jugaba.

  • El dia que el cielo se caiga de Megan Maxwell

    https://gigalibros.com/el-dia-que-el-cielo-se-caiga.html

    Alba y Nacho se conocen desde que eran ninos. La conexion entre ellos es muy especial y aumenta con el paso de los anos, hasta que ella se casa y, obligada por su marido, se distancia de el. Nacho se marcha a Londres. Alli encontrara al amor de su vida, a quien luego perdera a causa de una desconocida enfermedad. Alba, que no sabe lo mal que lo esta pasando su amigo, acude a el tras su fracaso matrimonial. Su reencuentro crea una union irrompible, pero al cabo de poco tiempo ella descubre que Nacho tambien esta enfermo. En su afan por ayudarlo a luchar contra lo que parece inevitable, Alba conocera a Victor. Y lo que en un principio no son mas que encuentros fortuitos, se acaba convirtiendo en un amor incondicional que le permitira superar sus miedos e inseguridades. Esta novela hara que te cuestiones varias cosas: ?por que el destino es capaz de hacernos encontrar a nuestra media naranja en el peor momento de nuestra vida? ?Por que siempre decimos que se mueren los buenos y los malos se quedan aqui para fastidiarnos? Si quieres conocer el desenlace de esta tierna, emotiva y dura historia de amor y amistad, no te pierdas El dia que el cielo se caiga.

  • Nadie te oira gritar, Angela Marsons de Angela Marsons

    https://gigalibros.com/nadie-te-oira-gritar-angela-marsons.html

    Cada muerte tiene un secreto. Cada secreto, un principio.
    En la oscuridad de la noche cinco figuras se turnan para cavar una tumba, un hoyo pequeno en el que entierran los restos de una vida inocente. Nadie dice nada, les une un pacto de sangre que no romperan…
    Anos mas tarde, Teresa Wyatt es brutalmente asesinada en la banera de su casa, y tras ella se suceden mas muertes violentas. Todas las victimas tienen algo en comun, y la detective al frente del caso, Kim Stone, pronto se da cuenta de que la clave para detener al asesino que esta sembrando el panico en la ciudad es resolver un crimen del pasado.
    Esta claro que alguien esconde un secreto y esta dispuesto a todo para que no salga a la luz.

  • La tentacion de tu piel de Dina Reed

    https://gigalibros.com/la-tentacion-de-tu-piel.html

    Aunque Kelly habia escuchado perfectamente las palabras del senor Sullivan, replico pestaneando muy deprisa: --?Ha dicho las Bermudas? El senor Sullivan asintio, se ajusto las gafas de pasta de carey y respondio con su seriedad y rigor habitual: --Llevas cuatro anos trabajando muy duro en esta compania y te mereces con creces el ascenso. Kelly agradecio el halago de su jefe con una sonrisa, mientras solo podia pensar en que no queria dejar Nueva York. Porque ?que iba a hacer ella sin los atascos de las mananas, los paseos por Central Park o las cenitas de los sabados con sus amigos en el Soho? Ella era una chica de ciudad, que vivia feliz en su pequeno apartamento, y que estaba muy a gusto trabajando como adjunta de direccion en una multinacional de los seguros. No le pedia nada mas a la vida... Preferia quedarse como estaba. Tranquila. Segura. Comoda. Ademas, ?que pintaba ella en las Bermudas? Ella no era de playa, ni de sol, ni de diversion, ni de nada de nada. Por no hablar de lo mas importante: el reto que suponia asumir la direccion de unas oficinas. Y no era que no creyera en ella misma, ni que pensara que no estaba preparada para el puesto, pero es que la alta direccion implicaba tanta responsabilidad y tanta exigencia que le estaba entrando un agobio tremendo. Porque ella solo queria estar en paz... Por eso, trago saliva y, con un nudo en el estomago, le confeso a su jefe: --Le agradezco la confianza, senor Sullivan, pero... El senor Sullivan la noto tan preocupada que en seguida le aclaro: --Vamos a cuidar hasta el ultimo detalle para que te sientas como en casa. El presidente de la compania posee una mansion en Tucker's Town, una de las zonas mas exclusivas de Bermudas, y la pone a tu disposicion para que te alojes en ella. Por el alquiler de tu apartamento no te preocupes, la compania correra con los gastos. --?Pero cuanto tiempo estaria fuera? --El tiempo que aguantes... --?Que? --Tu prueba, de momento la compania te ira pagando el alquiler, hasta que des el si definitivo. Y en cuanto a tus honorarios, los triplicaremos. Asi que, echa un vistazo al contrato, y ya solo queda que firmes y que manana mismo vueles para ese paraiso, en el que estamos convencidos de que cosecharas grandes exitos. El senor Sullivan le paso el contrato, que Kelly ojeo abrumada por la rapidez con la que estaba transcurriendo todo. Por eso, tras leerlo no le quedo mas remedio que decir: --Senor Sullivan, es un honor que la compania haya pensado en mi para el puesto, la propuesta no puede ser mas generosa; pero necesito tiempo... Kelly le devolvio el contrato, que el senor Sullivan guardo en la carpeta de firmas, luego le clavo la mirada y le pregunto con el ceno fruncido: --?Tiempo para que? Las buenas oportunidades hay que cazarlas al vuelo y esta lo es, senorita Taylor. Confia en mi. --Por supuesto que confio en usted. Y le estare eternamente agradecida por creer en mi cuando no tenia mas credenciales que unos anos de trabajo a tiempo parcial en una hamburgueseria. El senor Sullivan, un hombre de sesenta anos, pelo canoso, mirada franca, porte distinguido, semblante recio y maneras decididas, nego con la cabeza y preciso: --Cuando vi que ademas de tener un expediente excelente en Yale, sabias lo que era el trabajo duro: supe que estaba ante la candidata ideal. Y no me equivoque. Como ahora tampoco me equivoco al aconsejarte que aceptes el puesto. Tu etapa en las oficinas de Nueva York ha llegado a su fin... Y tu lo sabes. Tu talento esta pidiendo a gritos nuevos retos y esta es una gran oportunidad para crecer y potenciar tu curriculum. Kelly sabia que el senor Sullivan tenia razon, su punto de vista era el mas sensato y racional, pero su orden de prioridades era otro y asi se lo hizo saber: --Ya se que las cosas mas emocionantes suceden fuera de la zona de confort, pero es que yo me siento muy a gusto aqui. Y puedo asegurarle que en este momento de mi vida antepongo mi tranquilidad a todo. El dinero no es algo que me mueva, soy una chica de gustos sencillos. No me atraen los lujos ni las sofisticaciones, nunca he tenido el sueno de vivir en una mansion, ni tampoco aspiro a puestos de alta direccion. Yo aspiro a una vida como la que tengo, con mi trabajo que me gusta, con mi coqueto apartamento, mi familia, mis amigos, mi ciudad, mis aficiones... No quiero irme de Nueva York, senor Sullivan, ni dejar estas oficinas donde he encontrado a buenos amigos, ni renunciar a los almuerzos con mi familia cada domingo. Usted no sabe como es la tarta de queso con arandanos de mi madre... El senor Sullivan, a pesar de que era un hombre muy serio, se echo a reir, porque con Kelly era dificil no hacerlo. Era un encanto de chica, a la que apreciaba tanto que queria lo mejor para ella, por eso insistio: --Nueva York y todas sus maravillas siempre van a estar, senorita Taylor. Ademas, no te estamos ofreciendo un puesto en la otra punta del mundo. Las Bermudas estan a hora y pico de avion... --Ya, pero... --Y te recuerdo que yo no me jubilo hasta dentro de cinco anos --dijo el senor Sullivan con ironia. Pero Kelly, que estaba muy nerviosa, se lo tomo al pie de la letra: --!Por Dios, senor Sullivan, yo no quiero su puesto! El senor Sullivan se revolvio en el asiento y exclamo batiendo las manos: --!Pues muy mal hecho! !Deberias aspirar a el, porque tienes talento y formacion de sobra para hacerlo! !Y hacerlo mejor que yo, ademas! Pero de momento, yo tengo que seguir dando guerra... Y tu curtirte bien en ese maldito paraiso para prepararte a conciencia para dar el gran salto. El senor Pinkerton, tu predecesor, ha estado tres anos en el puesto y solo habla maravillas. Ahora se nos casa y ha pedido el traslado a Londres, de donde es su prometida. Asi que deja de rezongar y firma de una vez. !Cree y confia! !No hay otra! --No creo que se trate de una cuestion de confianza, sino que para mi es muy importante la familia, los amigos, trabajar en algo que me gusta... Y asi me siento segura. Ahora tengo una paz y un equilibrio que no quiero perder, senor Sullivan. Las aventuras y los retos estan muy bien, pero no se si tanto como la seguridad de tenerlo todo bajo control. Y yo ahora mismo tengo el control de mi vida... El senor Sullivan nego con la cabeza, se llevo la mano a la barbilla y le hablo como si lo hiciera con su propia hija: --Nunca se tienen las cosas bajo control, es una falsa percepcion, es un engano de la mente. Porque la vida es impredecible, lo unico que tenemos seguro es el cambio y es que, aunque nos resistamos, no van a dejar de pasarnos cosas. Y unas seran buenas, otras no tanto... Pero que mas da. Lo importante es la actitud con la que afrontamos las cosas. Y ese es el reto y eso es lo apasionante: enfrentarse al caos, a la incertidumbre, a los miedos y descubrir que puedes con eso y con mucho mas. Asi que no te conformes, senorita Taylor, nunca te conformes... Entiendo que tienes apegos, afectos, rutinas y... los exquisitos postres de tu madre, pero el mundo no se acaba ahi. Hay tantas cosas bonitas esperandote ahi fuera que seria una autentica pena que te las perdieras. Aparte de que te recuerdo que estudiaste bien duro, que te endeudaste hasta las cejas para estudiar en la mejor universidad, para tener el mejor de los futuros, para aprender, para crecer, para dar lo maximo de ti. ?Me equivoco? A Kelly las palabras del senor Sullivan, un hombre al que admiraba y respetaba como nadie, le estaban calando tan hondo que reconocio: --Mi familia es humilde, usted lo sabe. Mi padre es conserje y mi madre es limpiadora en un colegio. Por circunstancias de la vida no pudieron estudiar, pero se han matado para que mi hermana Elsa y yo podamos hacerlo. Y les estamos muy agradecidas por habernos permitido la oportunidad de tener una vida mejor... Y si, estudie muy duro, para tener un buen futuro... Quiero desarrollarme, crecer, dar lo mejor de mi... Pero... Kelly se callo porque no iba a contarle que desde hacia tres anos, cuando John la dejo, su orden de prioridades habia cambiado y ya solo queria estar tranquila y vivir sin sobresaltos. Y le dio mucha rabia y mucha pena, tanta que sus ojos se humedecieron, su gesto se tenso y el senor Sullivan tuvo que decirle para que se serenara: --Mi abuela solia decirme: "no hay pero que valga". Y no conozco mayor verdad. Olvidate de ese pero, y centrate en lo que quieres... ?Quieres desarrollarte, crecer y darlo todo? Kelly asintio, mordiendose los labios para no romper a llorar como una boba... --Por supuesto que quiero, senor Sullivan... Pero.... Kelly se mordio los labios otra vez, al tiempo que sentia una frustracion tremenda por tener siempre esa jodida palabra en los labios. No obstante, el senor Sullivan no dijo nada, tan solo se limito a tenderle su estilografica y asegurarle convencido: --Yo tambien tuve una epoca en que no podia parar de decir: "pero". Menos mal que una mujer muy sabia hizo que abriera los ojos... --Su abuela. --Exacto. Mi abuela Alana... Yo tenia el corazon roto, un mal de amores, que me dejo tan destrozado que llegue a creer que nada tenia sentido... Kelly alucino porque en la vida habria pensado que un hombre tan racional, tan logico y tan sensato como el senor Sullivan, hubiera sufrido hasta ese punto por amor... --Lo siento mucho, porque se lo que duele... --Duele tanto que parece que te arrancan la vida. Y yo perdi todo, la esperanza, la ilusion, las ganas, todo... Y eso que apenas acababa de terminar la carrera y se suponia que tenia un brillante porvenir. Trabajaba en un prestigioso bufete de abogados en Chicago, lo tenia todo para ser feliz. Pero perdi la ilusion de tal modo que cuando me salio una oferta de trabajo formidable en Nueva York, estuve a punto de rechazarla si no llega a ser por mi abuela, una irlandesa corajuda y luchadora que me obligo a que dejara Chicago... Y gracias a ella, no solo creci profesionalmente, sino que a los tres meses conoci, a Jane, mi esposa, el verdadero amor de mi vida, y la madre de mis tres maravillosos hijos... Kelly al escuchar el relato sincero y sentido de su jefe, no pudo evitar que dos lagrimones enormes recorrieran su rostro y sin pensarlo mas, agarro la estilografica y musito: --Yo tambien tuve una abuela irlandesa que, seguro que desde el cielo ahora mismo, me esta gritando que no sea tonta, y que firme de una maldita vez. El senor Sullivan asintio, sonrio emocionado y replico con absoluta seguridad: --Asi es. Kelly respiro hondo, se retiro las lagrimas del rostro con el dorso de la mano, estampo su firma en el contrato y luego susurro: --A las abuelas siempre hay que hacerlas caso... --Siempre. Y no me cabe duda de que la tuya tiene que estar orgullosisima de ti... Kelly sonrio agradecida y solo pudo susurrar muy emocionada: --Ojala, senor Sullivan, ojala...

  • Aliados del amor (Libertinos Enamorados 1) de Vanny Ferrufino

    https://gigalibros.com/aliados-del-amor-libertinos-enamorados-1.html

    A sus veintitres anos de edad y en su quinta temporada, lo mas atractivo que Lisa Stanton, hija de los marqueses de Winchester tiene, es su dote.
    Una dote por la cual el empobrecido conde de Hamilton sera un excelente pretendiente. Pero el duque de Windsor, el hombre que rompio su compromiso anos atras, estara dispuesto a hacer todo lo posible con tal de atraparla.
    Y Jaden Browning, duque de Windsor, siempre consigue lo que quiere. En este caso, tener bajo su poder el corazon y el alma de Lisa Stanton.

  • La isla de los cien ojos de Mikel Santiago

    https://gigalibros.com/la-isla-de-los-cien-ojos.html

    La tormenta lo trajo. Lo arranco de donde nunca debio salir y lo dejo varado en nuestras playas. Ocurrio durante una terrible noche de viento y lluvia como no habiamos vivido en anos. Los rayos partieron dos arboles en Santry Hill y las olas embistieron el puerto con tal fuerza que destrozaron un par de chalupas. La tarde anterior, mientras oiamos los primeros y furiosos embistes del ciclon contra las ventanas del Bohars Head, el viejo Gallagher dijo que aquello era "viento del sur". Afirmo que debia ser la punta del algun tortuoso huracan procedente de Mejico. Dijo que pasaba uno cada cincuenta anos y que el recordaba uno de cuando era nino. "Se llevo varios tejados y una vaca del establo de Doyle" recordo "A Dios gracias que solo fue eso" Gallagher siguio profetizando mas desgracias y aconsejo a los hombres que metieran a su familia bajo la cama aquella noche. Dijo que tenia un "muy mal palpito" con aquel viento silbante y calido "que algo muy malo estaba a punto de ocurrir" Yo hubiera alzado mi voz para serenar los animos y explicar lo improbable de que un ciclon caribeno llegase siquiera a rozar la costa de Irlanda, pero me contuve. ?De que hubiera servido iniciar una discusion? Todos los datos cientificos que yo pudiera aportar sonarian, a oidos de aquellos lugarenos, igual de magicos que las palabras de Gallagher, de modo que al final todo se reducia a una cuestion de credito. ?Y quien era yo al lado del viejo Gallagher? Solo un medico recien llegado de la ciudad, que ademas era protestante, y que muchos opinaban que tenia rostro de nino (por mucho que yo quisiera aderezarlo con un varonil bigote) Con todo, la noche fue terrible, digna de una profecia como la de Gallagher. Jamas he oido el viento golpear de aquella manera, como un ejercito de fantasmas aullantes que hubiese desembarcado en la tierra. Las furiosas rafagas recorrian la calle moviendo letreros, agitando los arboles y derribando tiestos. Cualquier cosa que estuviera levemente mal atada, clavada o pegada aquella noche debio salir volando. Pase casi toda la noche en vela, asustado por los rayos y los golpes que el viento daba contra mis ventanas. Supuse que la campana de mi consulta no tardaria en sonar para requerirme en algun sitio, pero curiosamente, aquella noche nadie necesito de mi ayuda. Imagine (no sin una malvada sonrisa en los labios) que los habitantes de Dowan estarian bajo de sus camas rezando al Todopoderoso mientras que el viejo Gallagher dormia su borrachera sin enterarse de un pito. Al dia siguiente amanecio claro y tranquilo, como si nunca hubiera existido la tormenta. Kate, una muchacha pecosa y habladora que servia en mi casa, fue la primera en darme algunas noticias cuando llego aquella manana. Me dijo que habia visto algunos arboles humeando en Santry Hill y que en el puerto habia habido varios destrozos. – El barco de Donovan aparecio medio hundido. Al parecer uno de los botes debio golpearle el casco y abrirle un buen boquete. Y han desaparecido un par de barcas. Y se inundo la tienda de Nolan y ha echado a perder muchisimo genero. Y... La chica estaba tan excitada haciendo inventario de las desgracias que y ni siquiera se retiro para dejarme desayunar a solas. No me importo. Al fin y al cabo, en Dublin solia leer el periodico mientras desayunaba, y en Dowan, a falta de periodico, estaba bien tener a Kate. Despues del desayuno me dirigi a la consulta y lo dispuse todo para comenzar la jornada. En el mismo instante que termine de ordenar mi escritorio sono la primera campana de la manana. Oi a Kate correr a abrir y escuche como se desarrollaba una conversacion en el vestibulo. Despues aparecio Kate otra vez, con gesto de extraneza en el rostro. – Es John Mulvaney - anuncio - Trae un caballo para usted. Dice que ha ocurrido algo en Sandyford. – Hagale pasar - le dije John Mulvaney era un chico de doce anos que servia en la mansion de Sandyford, a unas diez millas del Dowan. Su padre era el zapatero del pueblo. Me habia pagado con un exquisito par de botines de cuero por un remedio para las jaquecas de su mujer. Kate acompano al muchacho hasta la consulta, que con gesto timido se quito la gorra y se aclaro la garganta para hablar. Dijo que traia recado del senor Coverdale de llevarme con el a Sandyrock. -?Algun accidente? - pregunte. El nego con la cabeza. – ?Algun enfermo entonces? El muchacho enrojecio y volvio a ladear la cabeza. – !John Mulvaney! - le recrimino Kate - ?Puedes hacer el favor de hablar por esa boca? ?Que es lo que ocurre? El doctor no tiene tiempo para perder. – Es algo que ha aparecido en la playa - respondio el chico, ya completamente ruborizado – ... el senor... quiere que lo vea usted. – ?Que algo ha aparecido...? – Si, senor, un bote. Lo trajo la tormenta. – ?Y para que me necesita alli? Seguramente sera uno de los que han desaparecido del puerto esta noche. – No lo creo senor - dijo John – Vera ... es mejor que venga y lo vea usted. Me quede en silencio mirando a John. Estaba como asustado, sumido en un inconfesable secreto, y decidi no hacerle mas preguntas. El senor Coverdale era un hacendado ingles dueno de practicamente toda la isla. Habiamos charlado en cierta ocasion, meses atras, durante una revision medica que me pago generosamente. No me parecio un hombre tendente a la exageracion ni a las bromas. Asi que decidi que aquel misterio debia tener cierto fundamento. Apure mi te y le pedi a Kate mi gaban. Tras preparar un maletin con equipo basico, sali con John a la calle, donde nos esperaban dos magnificos caballos. Tomamos el camino de Santry Hill, la colina mas alta de las tres que rodeaban el poblado de Dowan. Al llegar alli vimos los dos arboles que los rayos habian partido e incendiado esa noche. Aun humeaban. Desde alli se tenia una buena vista del pueblo. El puerto, tal y como habia dicho Kate, uno de los dos barcos pesqueros estaba escorado. Una cuadrilla de hombres se esforzaba por enderezarlo mientras otros achicaban el agua. Pense que aquello costaria una verdadera fortuna a la economia local. Cabalgamos por el camino que bordeaba los acantilados de Ben Guillian (Llamados asi en honor a un antiguo fantasma local que debio suicidarse alli) y llegamos a la "roca del aguila" desde donde se divisaba la mansion de Sandyrock. El cielo estaba claro, sin una brizna de viento, y el mar estaba radiante. En contraste con el azul, relucia la blanca fachada de la mansion, una elegante casa senorial de tres plantas rodeada de una brillante extension de hierba y pequenos jardines. La casa estaba construida sobre un saliente bajo el cual las olas se batian en espumosos ataques contra la roca negra. A cien yardas de ella, rendida a la fuerza de la naturaleza, se abria una cala de arena blanca. Sobre ella aviste un grupo de personas rodeando un negro objeto que yacia varado junto a la orilla. Arree mi caballo. Edward Coverdale tenia porte de artista mas que de aristocrata. Tendria unos cuarenta anos, o quizas mas, pero su rostro parecia resistir los efectos de la edad. Vestia de una forma un tanto bohemia -botines negros, pantalones estrechos y una amplia camisa blanca que se hinchaba como una vela al viento – , y llevaba el pelo largo, recogido en una coleta. Era el suyo un aspecto mas apropiado para un actor del west end londinense que para un distinguido terrateniente Irlandes, cosa que al parecer (segun sabia por los chismes de Kate) tambien irritaba a sus parentela, que lo habria enviado a administrar aquella remota hacienda para alejarlo de los "circulos" Dublineses. Tambien sabia que en el pueblo no le profesaban mucha simpatia. No debia de ser un terrateniente demasiado fiero – le bastaba con cobrar las rentas aunque llegasen con cierto retraso – pero sus dedicaciones artisticas (como la pintura o la literatura) y cierta aficion por el estudio de los vestigios celtas de Dowan habian ayudado a granjearle una fama oscura entre los supersticiosos parroquianos; Ademas, no faltaban las leyendas sobre pactos con el diablo y brujeria que los contadores de historias locales (encabezados por Gallagher) se habian encargado de inventar aprovechando sus poco habituales aficiones. – Temo haberle molestado en una manana especialmente agitada - me saludo nada mas desmontar- ?Como ha despertado el pueblo? ?Ha habido muchos destrozos? – Uno de los pesqueros resulto danado - respondi – , por lo demas todo parecen cosas menores. Tejas rotas y algun negocio inundado. Sobreviviremos. ?Y que hay de usted? – El viento casi se lleva uno de los establos esta noche. Tambien me rompio un par de ventanas. Y tambien trajo eso - dijo senalando a un bote que yacia varado a unas diez yardas de nosotros – Uno de los mozos lo encontro esta manana -continuo diciendo – La tormenta debio arrastrarlo hasta aqui desde alta mar. Y por lo que encontramos en su interior, supongo que llevaba vagando a la deriva bastante tiempo. ?Quiere echarle un vistazo? – Por supuesto - respondi. Coverdale saco entonces un foulard blanco que llevaba en una de sus mangas y me lo ofrecio – Sera mejor que se tape la nariz y boca. Extranado, pero sin hacer preguntas, tome el panuelo y arrancamos a caminar hacia el bote. Mientras lo haciamos me percate del sepulcral silencio que nos rodeaba. Habia alli un par de mozos ademas de John y todos permanecian en silencio, guardando una buena distancia respecto del bote. A medida que nos acercabamos comence a percibir un fuerte olor a descomposicion que fue haciendose mas fuerte a cada paso que dabamos. Tome el panuelo de Coverdale y me lo coloque a modo de mascara, debatiendome entre la curiosidad y el temor sobre el origen de semejante fetidez. El bote yacia varado, hundido en la arena que brillaba como un espejo. Una capa de costra se extendia por su casco, salpicado de grietas y suciedad. Lo primero que mis ojos distinguieron, aun en la distancia, fue una capa de algas oscuras que cubrian practicamente todo el interior de la lancha. Sobre ella se arremolinaba un enjambre de moscas enloquecidas. Pero habia algo mas alli, una forma acurrucada bajo de aquella carpa amarillenta y resquebrajada... No tarde en verlo. Y el espanto hizo que retrocediera inconscientemente. Debajo de la carpa, enredado entre aquellas algas putrefactas asomaba el horrible cadaver de un hombre. Era un muneco atroz. Como una marioneta hecha de tela de saco. No tenia ojos, tan solo dos cuencas vacias. Su boca, por la que entraban y salian aquellas laboriosas moscas en busca de alimento, era como una negra caverna sin fondo. El resto de su cuerpo, medio cubierto de harapos desgarrados por el sol y el salitre, mostraba una piel cauterizada, reseca y dura como jamas habia visto en ningun otro cadaver antes (ni siquiera en mis practicas de la universidad donde a veces los traficantes de cuerpos traian desechos de la peor clase)

  • Era el chico perfecto de Sophie Kiss

    https://gigalibros.com/era-el-chico-perfecto.html

    Albern aparece despues de varios dias sin estar con el gran amor de su vida Michelle, cuando estan juntos Albern le anuncia que viene un gran cambio para sus vidas, Michelle lo sabra de a poco. Albern se la llevara a experimentar nuevas experiencias, conocer a una persona muy especial y a no renunciar a su nuevo estilo de vida.

  • Viajera en el deseo 1 de Ana Allende

    https://gigalibros.com/viajera-en-el-deseo-1.html

    Hanna Moore es una chica sencilla y comun, pese a todas las virtudes que sus padres le ha podido dar economicamente, solo ha tenido un novio, nunca ha salido de su ciudad natal Salt Lake City, Utah y su vida es una simple rutina.

  • La cuarta victima de Mari Jungstedt

    https://gigalibros.com/la-cuarta-victima.html

    ?Que relacion hay entre un atraco a mano armada y un crimen nunca resuelto? Descubrelo en una nueva entrega de la serie de Gotland.

  • Un coctel delicioso y explosivo de Cora Reed

    https://gigalibros.com/un-coctel-delicioso-y-explosivo.html

    Candy es una joven llena de complejos y con poca suerte en el amor. Ademas, tiene la sensacion de vivir a la sombra de su deslumbrante hermana que, por supuesto, se quedo con el chico que a ella le despertaba un cosquilleo en la tripa. Sin embargo, cuando las dos deciden hacer un viaje hasta La Rioja para ir a ver a su madre y a su abuela, todo su mundo se convierte en un coctel delicioso y explosivo. Sobre todo, cuando sus ojos se cruzan con los de Kenzo, un hombre que parece dispuesto a lograr que Candy brille con luz propia.
    Pero ?que esta ocurriendo en su familia? ?Acaso su hermana ha perdido la cabeza del todo? ?Y es posible que la abuela se haya enamorado o siempre tuvo esa sonrisa en la cara?
    Una divertida y alocada comedia romantica y familiar.

  • La masajista y el hotel Red Pleasure de Amanda Seibiel

    https://gigalibros.com/la-masajista-y-el-hotel-red-pleasure.html

    La vida de Olga esta a punto de dar un giro bestial. Otro mas, despues de que su novio se largara con una companera de estudios de la universidad. Su amiga Mila le cuenta que ha descubierto un lugar casi prohibido en el que, al entrar en una habitacion y pulsar un boton rojo, tus fantasias sexuales se cumplen al instante. Lo llaman Hotel Red Pleasure.

  • Esposada al Rey de Laura Cruz

    https://gigalibros.com/esposada-al-rey.html

    Sylvia era una joven princesa.
    Inocente, atractiva y virgen.
    Aaron era todo lo contrario.
    Un rey maduro, firme...

  • Beautiful Bastard. Un tipo odioso (Beautiful 1) de Christina Lauren

    https://gigalibros.com/beautiful-bastard-un-tipo-odioso-beautiful-1.html

    Primera entrega de la saga <>.

  • El Roce del Amante de Sophie Kiss

    https://gigalibros.com/el-roce-del-amante.html

    Harta de su marido, ahora era su turno. Esta historia me la conto una amiga muy personal que tengo, lo ha mantenido en secreto todos estos anos. No sabia como habia conocido a su esposo que tambien es mi amigo. En una conversacion me conto como llegaron a estar juntos, eso me impacto. Mi amiga tuvo que pasar por muchos por muchos problemas antes de que el destino la juntara con su esposo. Era demasiado lo que le hizo su ex esposo, eligio dejar de ser una espectadora y de recibir humillaciones y tomar cartas en el asunto. A mi amiga no le gusta hablar sobre este tema pero creo que esta historia merece ser conocida.

  • Un amor en la conquista de Ivy Bass

    https://gigalibros.com/un-amor-en-la-conquista.html

    Un amor en la conquista, por Ivy Bass, es un romance historico que mezcla el realismo magico con la fantasia. Se desarrolla alrededor de 1808, en el territorio de las Provincias Unidas de la Nueva Granada.
    Patriotas y colonizadores, criollos y espanoles, todos enfrentados en uno de los momentos cruciales para la inestable independencia de la Nueva Granada alimentada por el fuego de los ejercitos confundidos.
    Un amor de raices enemigas, nace en el epicentro de la revolucion, alimentandose del miedo, la separacion y el duelo que sustentan los sentimientos de los corazones heridos. Un amor inevitable, y como no, si el amor es otro juego mas de la naturaleza y uno de sus favoritos. Cuanto lucharan mas alla de la muerte. Ni toda la sangre derramada seria parigual de la envergadura de tal amor. Un amor verdaderamente eterno.

  • El infierno en tu piel de Camucha Escobar

    https://gigalibros.com/el-infierno-en-tu-piel.html

    Magia negra. Un pueblo sembrado de cadaveres de mujeres con el corazon arrancado. Un hombre al que todos senalan. Odios politicos que enfrentan a vecinos, amigos y hermanos. La enfermedad endemica del miedo. Y un amor que arde al borde de los convencionalismos.

  • Con mis propias manos de Maurizio De Giovanni

    https://gigalibros.com/con-mis-propias-manos.html

  • El error de Clara Ulman de Cristina Higueras

    https://gigalibros.com/el-error-de-clara-ulman.html

    Cristina Higueras construye en esta novela un turbador thriller en el que su protagonista transgrede todas las normas para adaptar el mundo a sus principios.

  • Boabdil, Un hombre contra el destino de Antonio Soler

    https://gigalibros.com/boabdil-un-hombre-contra-el-destino.html

    En Un hombre contra el destino, Antonio Soler pone en juego su indiscutible talento para la narracion para contar la historia de dos personajes formidables: Boabdil, el ultimo rey nazari de Granada, encarnacion de un sino tragico, y Gonzalo Fernandez de Cordoba, el Gran Capitan, ejemplo de las virtudes guerreras. Estos dos hombres, obligados a enfrentarse aunque en otras circunstancias hubieran estado destinados a entenderse, simbolizan el final de una epoca apasionante que Soler recrea con destreza, conocimiento y nervio.

  • Los secretos del conde de Vanny Ferrufino

    https://gigalibros.com/los-secretos-del-conde.html

    Marcus Woodgate, conde de Hamilton, requiere de una esposa con urgencia; y no de una cualquiera, sino de una dama con una exquisita dote que le permita pagar las deudas que adquirio junto al condado de su difunto tio.

  • La casa de los amores imposibles de Cristina Lopez Barrio

    https://gigalibros.com/la-casa-de-los-amores-imposibles.html

    Una magica novela sobre las trampas del deseo, la tragedia del amor y los lazos indestructibles de la familia.

  • El sindrome de Lisboa de Eduardo Sanchez Rugeles

    https://gigalibros.com/el-sindrome-de-lisboa.html

    Un ano despues de la desaparicion de Lisboa, el mundo seguia en el mismo lugar. Los agoreros del desastre tuvieron que resignarse al paso de los dias, a la repeticion incesante de las horas, como si nada hubiera ocurrido, como si la perdida de mas de quinientas mil almas hubiera sido una experiencia fugaz y sin importancia. El Juicio Final, anunciado por profetas exaltados, quedo suspendido hasta nuevo aviso. La existencia mantuvo su rumbo errante a pesar de que, segun los expertos, el eje de rotacion del planeta sufrio un grave e imperceptible desplazamiento. Las mareas y los vientos adoptaron comportamientos erraticos, una masa de niebla se agolpo sobre los cielos lejanos del Caribe, pero el sol continuo su recorrido tranquilo y, pasados los meses de zozobra, los pueblos de la Tierra aprendieron a convivir con la memoria de la tragedia. Pero a pesar de que las vidas humanas siguieron adelante, existe un antes y un despues de Lisboa. Desde que estallo la desembocadura del Tajo, el tiempo transcurrido es una experiencia cotidiana de la inanidad y el vacio. La fatalidad que destruyo Portugal fue una bisagra en la trama del mundo, el punto de giro de un argumento macabro y absurdo, una prueba fehaciente de nuestro desamparo frente a los impredecibles designios de Dios, el Azar o la Nada. Un ano despues de la desaparicion de Lisboa, tres anos despues de la pandemia, me encuentro en el mismo lugar. Hace frio. Las moscas revuelan alrededor de las servilletas usadas, tiradas en el suelo. El televisor, anclado en la esquina de la barra, muestra imagenes intermitentes de un concierto benefico. No tenia conciencia de la efemeride, Gimenez fue el que se acordo: <>. Limpiaba los filtros de cerveza, parecia hablar para si mismo, disgustado por su buena fortuna. Las visiones me invadieron de lleno, como si se tratara de un acontecimiento reciente. Las lagrimas de Tatiana acapararon el recuerdo. El fin de Lisboa coincidio con nuestro hundimiento. Me distraigo con el concierto, reconozco a The Edge, el guitarrista de U2, envejecido y enlutado. <>, anuncia el cintillo del noticiero, sobre una marea de gente que conmemora el aniversario de la hecatombe. No se escucha nada. Gimenez mira la television a diario, pero nunca la oye. Me incorporo en la silla, inclino el cuerpo sobre la barra; el control remoto, envuelto en cinta plastica, descansa al lado de una pila de vasos. Subo el volumen, la cancion elegiaca se cuela entre el polvo. Una pelicula de grasa porcina cubre la pantalla, provocando el efecto de un filtro amarillo, de un Bono con hepatitis. Miro a mi alrededor, enfocando mi desconsuelo en las fotografias colgadas en la pared y en una estanteria sobre la que reposan algunas medallas de laton. El barullo de los mediodias fue silenciado por la carestia. Gimenez limpia los filtros de sifones estropeados, a la espera de clientes que no volveran, pero que, con sus idas y vueltas, alegrias y pesares, escribieron la historia privada de Bello Monte. Cierro los ojos. Recupero el abrazo de Tati. Los primeros rumores sobre lo que habia ocurrido al otro lado del mundo nos permitieron acercarnos. El miedo a lo desconocido develo la profundidad de nuestros lazos y, durante unas horas, mientras no supimos lo que estaba pasando, cuando solo sabiamos que en algun lugar lejano habia ocurrido lo impensable, nuestro amor arriesgo sus ultimos estertores. La informacion era imprecisa. Los medios, como era habitual, apostaron por la censura. Internet cayo, junto con todos los servicios de telefonia. La muerte de las redes sociales alento la desesperanza de aquellos que habian reemplazado los sinsabores de la realidad por una existencia virtual y alternativa. Solo se sabia que un terremoto o algo parecido habia devastado una parte de Europa y que, en cualquier momento, podia ocurrir una replica. El temor por la suerte de los seres amados poblo las iglesias de noveles feligreses, porque muchos de los hijos y hermanos de nuestros amigos, de nuestros vecinos, de nuestra urbanizacion, de nuestra ciudad, de nuestro pais, hacia tiempo que se habian mudado de continente, en busca de la serenidad perdida. Y en las calles, en las panaderias, en las colas de los automercados, empezo a circular la idea de que habia comenzado el fin del mundo. La peninsula iberica, comentaban los mas entusiastas, habia desaparecido. Al tercer dia, cuando la angustia le habia dado la palabra a los fanaticos, cuando la incertidumbre amenazaba con incendiar las embajadas, el Alto Mando Militar, en cadena de radio y television, informo lo que en el resto del planeta era un hecho confirmado y fehaciente. Me costo creerlo. Tati lloraba sobre mi hombro, repitiendo en voz baja: <>. Los estragos en la ciudad de Lisboa eran incuantificables. <>. Un ano despues, permanezco mirando el concierto en la barra de Gimenez, desganado e incredulo. Sin nada que hacer, sin nada que perder, con las emociones revueltas por las revelaciones de Moreira, el abandono de Tatiana y la marca indeleble de los ultimos duelos... los demasiados duelos. En Berlin, Lady Gaga interpreta una balada con arreglo de piano. La multitud, conmovida y drogada, la observa en silencio. Explosiones distantes. La batalla continua en la autopista Francisco Fajardo. Estelas de polvora acompanan la brisa. De vez en cuando se escucha algun disparo o el grito desesperado de una arenga libertaria, pronunciada por algun estudiante cautivo o moribundo. Los combates son parte del paisaje, pero no hay esperanza ni ambicion. Lo unico que queda es el hastio inagotable de nuestras vidas anuladas y los fuegos fatuos de la resistencia, condenados a desaparecer.

  • El secreto mejor guardado de Jackson de Towanda Richardson

    https://gigalibros.com/el-secreto-mejor-guardado-de-jackson.html

    Tiffany bajo del taxi con una mueca de fastidio. El calor de agosto en Kentucky deberia haberla hecho desistir de llevar aquella ropa, pero hacia anos que Tiffany se vestia cada manana por pura intuicion y que no le importaban ni las opiniones ajenas, ni la incomodidad ni la temperatura reinante en el ambiente. Claro que Tiffany no sabia que aquel dia, su primer dia de trabajo, iba a estar presidido por una ola de calor y por un taxista negligente que no habia revisado a tiempo el sistema de aire acondicionado del coche. Cuando ya estaba a punto de olvidarlo sobre la tapiceria del asiento trasero, tomo su maletin de cuero por el asa y lo transporto (casi casi lo arrastro) hasta la garita donde le habian comunicado que debia presentarse aquel diez de agosto, a las nueve en punto de la manana. La garita de acceso a la carcel de Westmoore Fields, el penal de maxima seguridad del estado. Tiffany habia acabado su carrera de Literatura Inglesa, con no poco esfuerzo, un par de meses antes. Los estudios nunca habian sido lo suyo, pero en su casa eran el peaje innegociable para que sus padres siguieran pasandole una asignacion mensual que le permitia hacer lo que a ella mas le gustaba: comprar. Libros y ropa, fundamentalmente, aunque no hacia ascos a perfumes, maquillajes, muebles y, en general, cualquier objeto disponible en alguna seccion de unos grandes almacenes. Se habia decidido por estudiar Literatura porque leer era una de las pocas actividades que la apasionaba. Desde nina, se habia refugiado en los libros de la sensacion de abandono que los continuos viajes de sus padres le provocaban. Su familia poseia empresas a lo largo y ancho del pais, y los senores Thownsend pasaban demasiado tiempo ocupandose de asistir en ellas a reuniones de los diferentes consejos de administracion, y demasiado poco pendientes de su unica hija. Tiffany habia crecido para ser guapa y casarse bien. Asi, literalmente, se lo habia dicho su padre al cumplir dieciseis anos, durante la gran fiesta de celebracion que habian dado en la mansion de la familia en Newport, que mas bien era la gran fiesta de presentacion de Tiffany en el mercado matrimonial de la costa este. Y, bueno, ella habia cumplido mas o menos bien en lo de ser guapa -la falsa modestia servia de poco cuando la genetica habia sido tan generosa-, pero podia considerarse un completo fracaso en lo del matrimonio. Acababa de cumplir veinticuatro anos y sus experiencias con los hombres se reducian a tres novios, hijos perfectos de los amigos perfectos de sus padres perfectos, a los que habia dejado antes de sentir la tentacion de tirarse por una ventana presa del aburrimiento que le provocaban. Eran buenos chicos, eso estaba fuera de toda duda, pero no eran para ella. Tiffany sonaba con un hombre de verdad, uno que hiciera que la piel le temblara desde el cuero cabelludo hasta las puntas de los dedos de los pies. Un hombre que la hiciera sentir mujer, hermosa, fascinante... sexual. De esa otra faceta, preferia no hablar. Habia probado lo del sexo esporadico durante su estancia en Yale, pero habia conseguido el mismo conteo de orgasmos que en toda la experiencia anterior con sus novios: cero. No se podia caer mas bajo. Cuando acabo la carrera, Tiffany tuvo que tomar una decision crucial. Sus padres se lo habian dejado muy claro: en el momento en que se licenciara, debia elegir entre ser mantenida por un marido o ser autosuficiente. Ellos le cortaban el grifo, indignados con que hubiera puesto mas empeno en acabar la carrera, cuando todos sabian que los estudios no eran lo suyo, que en buscar un buen partido que los hiciera abuelos, jugara al golf con su padre y le ofreciera un nivel de vida similar a aquel al que estaba acostumbrada desde la cuna. Contra todo pronostico, Tiffany dijo que trabajaria. Que le cortaran el grifo, que ella se buscaria la forma de salir adelante. Que no queria casarse todavia, entre otras cosas, porque aun no habia encontrado al hombre que hiciera que los pelos de la nuca se le erizaran solo con mirarla fijamente. Al fin y al cabo, solo tenia veinticuatro anos. No habia prisa en la busqueda. Tiffany podia parecer una valiente, pero lo cierto fue que temblo tanto cuando comunico a sus padres su decision que tuvo que agarrar su telefono ultimo modelo con las dos manos para evitar que se le cayera al suelo. Recordo entonces que, si se rompia en mil pedazos, seria ella quien tendria que pagar un sustituto, y que su nula experiencia laboral no le proporcionaria un trabajo en el que se pudiera permitir grandes alardes. Lo cierto es que Tiffany habia sido tan valiente porque pensaba que sus padres no aceptarian. Que su padre le daria una prorroga a su nina bonita o que su madre le suplicaria al cabeza de familia que no obligara a su hija a hacer algo tan indigno para una mujer como trabajar duro. Habia una manicura que conservar y el posible futuro de Tiffany tirando hamburguesas sobre la plancha de un McDonald's no era la mejor receta para ello. Pero sus padres se habian mantenido firmes en la promesa, y la siguiente vez que Tiffany acudio a su centro comercial favorito, la tarjeta de credito aparecio como denegada en la caja. Y entro en panico, claro. Le quedaban cuatrocientos veintisiete dolares en efectivo, de los quinientos que habia tenido la suerte de retirar unos dias antes, porque siempre le gustaba tener algo de dinero suelto en casa. Aquel dia, Tiffany salio corriendo de la residencia universitaria en la que vivia desde hacia seis anos y se encontro en su buzon la carta que le comunicaba que le quedaban dieciocho dias de estancia pagada. El once de agosto, como muy tarde, debia abandonar su habitacion o abonar ella misma los dos mil seiscientos dolares que costaba el alquiler cada mes. El motivo por el que habia abandonado su habitacion con prisas se incremento. Tenia que hablar con el profesor McMillan. El era el unico profesor de toda la facultad que siempre habia mostrado interes en que ella se aplicara en los estudios, y sabia que la ayudaria a orientar su vida laboral. Entro en su despacho tan despeinada que su madre se habria horrorizado ante la idea de que presentara ese aspecto delante de un profesor. Pero su madre no estaba alli, ni tampoco al otro lado de su cuenta corriente, asi que mostrar aspecto desesperado quiza incluso la ayudara. El profesor McMillan la miro de arriba abajo, probablemente poco acostumbrado a que Tiffany no mantuviera su fachada impecable y sus modales exquisitos, y le pregunto que hacia alli. Dos horas, unos tres litros de lagrimas y dos tazas de te verde despues, Tiffany salia del edificio de la facultad de Literatura con un trabajo bajo el brazo. Seria la profesora de alfabetizacion del modulo de presos de nivel uno de la carcel de maxima seguridad de Westmoore Fields. Que Dios la cogiera confesada. No es que aquel fuera el trabajo de sus suenos. Incluso la idea de servir cafes en Starbucks a todos aquellos companeros que, sin duda, a partir de ese momento la mirarian por encima del hombro le parecia mejor que entrar en una carcel a dar clase a unos tipos que, para empezar, le daban un miedo atroz. Pero el profesor habia conseguido convencerla apelando a su autoestima, que no era una maravilla precisamente, y al hecho de que el trabajo estaba bastante mejor pagado que cualquier otro que Tiffany pudiera conseguir con su expediente academico raspadito y su experiencia laboral, que se resumia en cero dias trabajados en toda su vida. Los mismos que orgasmos disfrutados, por cierto

  • Dialogos de Cortesanas Seguido de Manual de Urbanidad para Jovencitas de Pierre Louys

    https://gigalibros.com/dialogos-de-cortesanas-seguido-de-manual-de-urbanidad-para-jovencitas.html

    Dialogos de cortesanas y Manual de urbanidad para jovencitas suponen el mayor descubrimiento del deseo erotico femenino, hasta entonces mera comparsa del masculino, cuando no sometido a este: por vez primera mujeres y muchachas adolescentes tienen voz para expresar sin tapujos, con desverguenza incluso, sus propios y exclusivos deseos. Pierre Louys pinta en rapidas escenas el erotismo en su momento mas algido, sin arredrarse ante los terminos del amor que, empleados por todos, nunca figuran en los diccionarios.

  • El circulo de Gabriel de Aurora Pinto

    https://gigalibros.com/el-circulo-de-gabriel.html

    El veterano periodista Julian Mendez debe hacerse cargo de una tarea que considera irrelevante: un reportaje sobre un joven ingeniero que desaparece tras ingresar a una secta religiosa.
    A pesar de su desinteres inicial, Mendez emprendera una investigacion que lo llevara a conocer muy de cerca a la secta y a Gabriel, su misterioso lider. El reportero sospecha que algo turbio se encuentra detras de la organizacion y debera desentranar los juegos de poder ocultos tras el fanatismo religioso.
    ?Por que son asesinados aquellos a quienes Gabriel considera traidores? ?Que se esconde detras de los lavados de cerebro que aplica el Circulo de Gabriel a sus fieles? ?Podra el periodista luchar contra la fuerte personalidad de su carismatico lider y sobreponerse a sus propios demonios?

  • Asi es como la conoci de Luciana V. Suarez

    https://gigalibros.com/asi-es-como-la-conoci.html

  • Recoge la luz del sol con las manos de Toyo Shibata

    https://gigalibros.com/recoge-la-luz-del-sol-con-las-manos.html

    El sensacional exito llegado de Japon: 2 millones de ejemplares vendidos.

  • El secuestro de la justicia de Ignacio Escolar , Joaquim Bosch

    https://gigalibros.com/el-secuestro-de-la-justicia.html

    Joaquim Bosch (ex portavoz de Juezas y Jueces para la Democracia) e Ignacio Escolar (director de eldiario.es) han unido fuerzas para escribir un libro necesario, incisivo y pedagogico sobre la Justicia.

  • Tu (Fall Away de Penelope Douglas

    https://gigalibros.com/tu-fall-away.html

    ?Has estado alguna vez tan enfadado que eso de ponerte a golpear las cosas te relajaba? ?O tan ciego que te creias que eras mas cuando no lo eras? En los ultimos anos yo me he sentido asi. Viajando entre la furia y la indiferencia sin paradas intermedias.
    Hay quienes me odian por eso y a los demas les doy miedo por el mismo motivo. Ya nadie puede herirme, nada me importa, nadie me importa.
    Salvo Tatum.
    La quiero tanto que la odio. Hubo un tiempo en que eramos amigos, pero me di cuenta de que no podia confiar ni en ella ni en nadie.
    Asi que le hice dano. La aparte de mi.
    Pero sigo necesitandola. Cuando la veo me centro y lanzo todo el odio que siento sobre ella. Me gusta meterme con ella, retarla, acosarla. lo necesito como el comer, como el aire, como si eso fuera la ultima parte de mi que hace que siga sintiendome humano.
    Hasta que un dia se fue. Se fue a Francia durante un ano, y cuando volvio ya no era la misma.
    No, ahora, si le doy, me la devuelve.

  • No te lo vas a creer de Sophie Kinsella

    https://gigalibros.com/no-te-lo-vas-a-creer.html

    has tomado una copa de mas y hablas por los codos, sin parar, y cuando por fin levantas la vista, unos ojos oscuros y penetrantes te observan atonitos, fascinados y… !muy interesados! Despues de asistir en Glasgow a una desastrosa reunion de trabajo y de tomarse un par de vodkas, ?o fueron tres?, para levantar el animo e infundirse valor, Emma Corrigan se sube por fin al temible artefacto volador para regresar a Londres. El vuelo resulta especialmente movido; algunos pasajeros gritan, las azafatas se abrochan los cinturones con caras lividas, y Emma se agarra desesperadamente a los brazos de su asiento. Presa del panico, de su boca empiezan a brotar todos sus secretos, sus suenos mas ocultos y sus deseos mas inconfesables, que van a parar a oidos del silencioso pasajero que, inmutable, la escucha sentado a su lado. Emma no se deja nada: desde el dia en que perdio la virginidad hasta la nota de matematicas que falsifico en el curriculum, pasando por lo incomodo que le parece el tanga. Pero este mal trago no sera nada comparado con lo que le espera el lunes en la oficina, donde corre la voz de que el presidente de la megacorporacion americana para la que trabaja se encuentra de visita en la sede londinense. En medio del nerviosismo general, Emma decide acercarse a la maquina de cafe del pasillo y se cruza con la comitiva que acompana al gran jefe… Tierna y desternillante, la autora de Loca por las compras regresa con una nueva y divertida novela, y con una heroina que se hace querer.

  • Aroma de azafran de Almudena Navarro Cuartero

    https://gigalibros.com/aroma-de-azafran.html

    Aroma de azafran es una apasionante novela costumbrista con tintes de novela policiaca, ambientada en pequeno pueblo manchego a finales del siglo XIX.

  • Metamorfosis (Seres malditos 3) de Eba Martin Munoz

    https://gigalibros.com/metamorfosis-seres-malditos-3.html

    El Demonio Rojo, un vampiro empatico y atormentado, acaba de ser convertido por su maestro, lo que le lleva a perder a su “hermiga” Eva. En este tercer libro veremos ese duro proceso de transformacion (fisica, moral y social) mientras el resto de los personajes se va relacionando en asociaciones asombrosas e inesperadas. Emocion, misterio, dolor, suspense, humor y terror se aunaran en esta inquietante entrega de la saga para sorprenderte y emocionarte sin limites. Preparate para reir, llorar, horrorizarte, para SENTIR EN MAYUSCULAS con “Yo” y Eva, con Leo, las nigromantes Luna y Ianire, la muneca diabolica Paula, con el demonio Arioch y un largo elenco de personajes malditos conectados. Y, si ademas quieres tener un personaje en uno de sus libros, que te incluya en la seccion de dedicatorias, y recibir contenido exclusivo, regalos y sorpresas,

  • Ardiente pasion – Adrian Blake de Adrian Blake

    https://gigalibros.com/ardiente-pasion-8211-adrian-blake.html

    Leo Johnson es oficial de la brigada ciento dieciocho del cuerpo de bomberos de Nueva York. En una fiesta de disfraces de Carnaval, conoce a Taylor, una preciosa mujer disfrazada de conejita de Playboy con la que mantiene una torrida sesion de sexo.
    Todo se complica cuando descubre que ella es su nueva vecina de enfrente. El intentara seducirla, convencerla de tener una relacion con el, pero Taylor acaba de divorciarse y no cree en el amor. ?Conseguira Leo hacerla cambiar de opinion?

  • Por nuestro amor de Maria Isabel Salsench Olle

    https://gigalibros.com/por-nuestro-amor.html

    Es al separarse cuando uno comprende la fuerza con que se ama.

  • Mateo !Que te veo! de Marta Flores

    https://gigalibros.com/mateo-que-te-veo.html

    Mateo !Que te veo! Asi solia responder Carola a su atractivo vecino cada vez que intentaba acercarse a ella. Y es que, por mas irresistible que le resultara, le daba pavor la fama de mujeriego que le precedia.

  • Natalia sobre ruedas de Elsa Tablac

    https://gigalibros.com/natalia-sobre-ruedas.html

    Un "zangano con monopatin". Esa es la impresion que Natalia se lleva de Alvaro una manana que chocan en plena calle, mientras el da un salto con su tabla de skateboard.

  • El corazon del monstruo de Evelyn Romero

    https://gigalibros.com/el-corazon-del-monstruo.html

    Anos atras... Ingrese a mi casa de nuevo, limpie mis lagrimas para que mis padres no me vieran. --?Donde estabas?--escuche la voz de mi padre detras de mi, tuve que detenerme. --Estaba jugando papa--respondi dandome la vuelta, pero sin verlo a los ojos. El como adivinando que me habia pasado, me tomo de la barbilla, hizo que lo viera. --?Otra vez estabas llorando? Te he dicho que un hombre no llora, mucho menos si es por una tonteria--me regano fuertemente cambiando su expresion que me indicaba que estaba enojado. El era un hombre cruel y frio. Me daba miedo cada vez que me hablaba, mas cuando me castigaba sin tener algun motivo. --Es que, los otros ninos no quisieron jugar conmigo otra vez--le explique quizas para que me comprendiera, aunque sabia que no lo haria. --Debes acostumbrarte a esos rechazos y aceptar lo que eres: un monstruo--me recordo--. Sino fueras mi hijo ni siquiera yo me acercaria a una cosa como tu--dijo cruelmente--. Ahora vete a tu habitacion y no salgas de la casa de nuevo, tu lugar es estar encerrado--pronuncio esto ultimo con un tono malvado. No dije nada, solo me di vuelta y me aleje de el con un dolor en mi pecho. Llegue a mi habitacion y cerre la puerta, voltee hacia el espejo que estaba en una esquina me acerque a el para contemplarme una vez mas, mi cuerpo era como un nino normal de ocho anos, pero mi cara no era como de los otros, la mia estaba deforme de la parte derecha: habia nacido con una malformacion congenita, que provocaba que mi ojo se hundiera, y que la piel de mi mejilla pareciera que tuviera cicatrices gruesas y pronunciadas. Mi aspecto era asqueroso y es por esa razon que ningun nino queria jugar conmigo. Mi mama me saco de la escuela y desde entonces he tenido educacion en casa. Viviamos en la cuidad donde las personas caminaban de prisa como si no tuvieran tiempo para vivir. Mi padre estaba involucrado en los negocios de inversiones comerciales. Tome una manta y tape el espejo para no verme mas. Por el rechazo de los demas me he creido todas las horribles cosas que me han gritado, en ocasiones deseaba no vivir, pero pensaba en mi madre que ha sido el unico ser humano que me ha amado por lo que soy, ella se sintiera muy mal si tomara ese tipo de decision ?Como un nino de mi edad puede pensar en quitarse la vida te preguntaras? Pues deben estar en mis zapatos para comprenderme. Mi madre era todo lo contrario a mi padre: era dulce, comprensiva y siempre trataba de animarme cuando me sentia mal. En ese momento necesitaba de sus palabras y de su compania. Sali de mi habitacion, pero antes verifique que mi padre no se encontrara cerca, al parecer habia salido porque su auto no estaba. Eso me permitio caminar libremente por el pasillo hasta llegar a su habitacion. Toque la puerta suavemente. --?Pasa carino se que eres tu?--dijo mi madre dulcemente. Ingrese y cerre la puerta detras de mi. Me acerque a ella quien se encontraba recostada en la cama(apoyada en la cabecera de la misma) me sente en su cama y la mire a los ojos, los cuales estaban mas cansados y tristes que el dia anterior, su aspecto fisico cada dia iba empeorando al igual que su salud, tenia un panuelo en la cabeza de colores llamativos que tapaba su ya existente cabello: ella tenia cancer terminal y en cualquier momento iba a dejar este mundo. --Mi pequeno ?Estas bien?--me pregunto acariciando mi mejilla, ella era la unica que no le daba asco tocarme, le conte lo que me habia pasado y lo que mi padre me habia dicho. --No te pongas triste, carino. No importa lo que te digan siempre recuerda que tu vales mucho, y que eres hermoso por dentro y por fuera--me dijo para consolarme. Sonrei antes sus palabras. Ella era madre y su deber era ese precisamente, me veia con ojos de amor, tenia miedo de perderla y de quedarme solo con mi padre--. Quiero darte algo muy especial--pronuncio tomando una pequena caja de terciopelo negro que estaba sobre su mesa de noche--. Esto ha permanecido en mi familia durante generaciones, quiero que tu mi unico hijo lo conserves -- agrego dandome la caja, la tome y la abri: se trataba de un anillo con un hermoso diamante en el centro. --?Que es esto mama?--le pregunte para saber para que me serviria un anillo. --Es un anillo de compromiso, quiero que se lo des a la mujer que llegue amarte por lo que eres sin importar nada mas--me explico--. Se que eres muy joven para comprender esto, pero quise hacerlo ahora que todavia estoy a tu lado--me dijo recordandome su pronta partida. Sus palabras me entristecieron aun mas. No solo por perderla, sino tambien porque no creia que algun dia alguien mas podria amarme. --No quiero que te mueras mama--le dije sin poder evitar llorar. Ella al verme asi me abrazo y me acerco a su pecho donde pude escuchar su corazon. --Nunca me ire de tu lado siempre estare contigo. Sere como tu angel guardian y aunque no me puedas ver sabras de alguna u otra manera que estoy junto a ti--me dijo dulcemente. No dije nada, solo me quede ahi entre sus brazos, memorizando ese momento. Unos dias despues, mi madre murio. Eso me destruyo. Ahora me encontraba en su entierro, este seria el ultimo dia que podia verla y despedirme de ella, deje sus flores favoritas: las margaritas, sobre su tumba y me quede ahi de pie observando el lugar donde ahora descansaria. Minutos despues subi al auto con mi padre de regreso a la casa, el aparentaba estar tranquilo y sereno como siempre. No estaba seguro si algun dia amo a mi madre, siempre ha sido un hombre poco expresivo. --Tu maestro me ha dicho que eres muy bueno para las matematicas--dijo mi padre en un tono que me indicaba que algo traia en manos--. Ahora que tu madre no esta, podre desarrollar los planes que tengo y tu me ayudaras administrar mis nuevos negocios--dijo--. Si eres un monstruo por fuera, te convertiras en uno por dentro--anadio con una sonrisa de maldad. Sus palabras me dieron miedo, no sabia que clases de negocios se trataban o que planes tenia para mi, pero no quise saberlo en ese momento. No cuando habia perdido a mi madre, ahora si en ella a mi lado estaba a la merced del verdadero monstruo. Capitulo 2 Narra Vanessa. Escuchaba atenta las palabras de mi madre. No podia creer que me hubiese comprometido con Daniel Betson: un tipo sin escrupulos, mujeriego y cruel. Tenia mucho dinero y ademas era el hermano del presidente de la republica y por esas razones era un “gran partido” segun ella, quien se divertia con controlar mi vida a su antojo, pero esto ya no lo soportaba mas, y menos ahora por lo que acababa de decirme. ?Quien era mi madre? La alcaldesa de la cuidad, y una mujer corrupta como todos en este maldito pais. --Como mi unica hija mujer debes velar por el futuro de nuestra familia asi como lo ha hecho tu hermano--menciono recordandomelo, ambos eran ambiciosos, mi hermano se habia casado con una mujer de alto prestigio politico--.Mi cargo terminara en dos anos, mientras tanto tu matrimonio con Daniel nos abriria muchas puertas economicamente y politicamente hablando-- agrego tomando de su cafe. --!?No has pensado en mis sentimientos??Por que siempre me ves como una maldita venta ?! --le grite ya harta de sus injusticias y de su maltrato. --Dejate de dramas, todos en esta familia hemos hecho cosas que no nos orgullecen, pero que nos han servido para tener dinero y poder--contesto serenamente, como si nada--. Aunque tu no quieras te casaras con Daniel y punto--sentencio mirandome seriamente. --!No me voy a casar con el, primero muerta que ser la tercera esposa de ese hombre!--le volvi a gritar recordandole su otros matrimonio fallidos con otras mujeres de dudosa reputacion. En ese momento, con mi respuesta la expresion de mi madre cambio: se miraba furiosa, se puso de pie y me tomo fuertemente del cabello.

  • Maldito ex. diario de una ruptura de Isabella Marin

    https://gigalibros.com/maldito-ex-diario-de-una-ruptura.html

    Que tu novio corte contigo, cuando tu ya habias fichado el vestido de novia, es una desgracia.

  • Una historia de policias de Esteban Navarro

    https://gigalibros.com/una-historia-de-policias.html

    *Una historia de policias habla del origen de una mafia en la Policia Nacional.
    *Una historia real como la vida misma.
    *Lee el prologo antes.

  • El fino hilo de la mentira de Emma J. Care

    https://gigalibros.com/el-fino-hilo-de-la-mentira.html

  • El diario de Marian de Tommy Owens

    https://gigalibros.com/el-diario-de-marian.html

    Segunda mitad del siglo XVIII. Marian es una inocente muchacha de diecisiete anos perteneciente a una noble familia del sur de Espana. Ella se siente completamente dichosa estando junto a su madre, a la que idolatra, y a su buena amiga Margarita, a la que adora. Pero su mundo de felicidad se derrumba cuando su padre la fuerza a contraer matrimonio con un primo parisino muy rico y treinta anos mayor al que ni siquiera conoce, Donatien de Chatillon.

  • Nunca Hemos Sido Amigos de Irene Romo

    https://gigalibros.com/nunca-hemos-sido-amigos.html

    Emma es joven y sus unicos problemas son acudir a la universidad y. David. El apuesto ligon que quiere conquistarla a toda costa y, que para su sorpresa, esconde un gran corazon. Pero ella no tiene ojos para nadie mas que para Marcos.
    David se ha dado cuenta de que no tiene nada que hacer con Emma, pues ella vive una relacion clandestina con su vecino de arriba. Pero David se da cuenta de lo especial que es Emma y entre ellos nace una gran amistad, hasta que una noche que Emma necesita consuelo, ambos se dejan llevar mas alla de la amistad.
    ?Que pasara a partir de ahora?, ?que ocurrira con su amistad?, ?seran capaces de mostrar sus verdaderos sentimientos?

  • El chico del tapersex de Sara Lis

    https://gigalibros.com/el-chico-del-tapersex.html

    Julia y Oliver son una pareja joven, apasionada y natural como la vida misma, y tambien, dos personas con caracteres muy diferentes entre si que les hacen chocar en mas de una ocasion.

  • Llamame idiota (Cruel amor 2) de Flor M. Urdaneta

    https://gigalibros.com/llamame-idiota-cruel-amor-2.html

    <>. Axxel Wilson. ?Como paso esto? ?Como fue posible que el mujeriego, egoista, imbecil, y egocentrico de Axxel Wilson terminara con el corazon roto? Pues la respuesta es simple, fue un idiota. Aunque primero tienes que saber como conocio a... ?Que estoy diciendo? Mejor lee la historia y saca tus propias conclusiones. 5 ANOS Y UNOS MESES ANTES --!Eh, Axx! ?Vas a la fiesta de Mack? --grito Tyler desde el asiento de su Runner. --?Cuando he faltado a una, Ty? No puedo dejar solas a mis chicas.--respondio fanfarron. Axxel era eso que llaman un Don Juan, Playboy, mujeriego o como sea que quieras decirle; uno con grandes musculos y lindos ojos marrones. Bueno... mejor sigo. --Dile a Maison que no falte. Hay varias chicas que estan haciendo fila por el. --agrego su amigo. --Creo que ese bastardo esta liado con alguien. --le contesto. Tyler se partio de risa ante su absurda excusa; Maison Hudson nunca se perderia una fiesta de Mack, el era la version rubia de Axxel, un mujeriego con todas las letras y su mejor amigo. Axxel se alejo de el y camino hasta los vestidores del instituto para ponerse su uniforme, jugaba en el equipo de futbol y ese dia iniciaba la temporada de entrenamiento. --!Oye, idiota! ?Vas a ir a la fiesta de Mack? --le pregunto a Maison, mientras terminaban de vestirse. --No, imbecil. Recuerda que el sabado es mi cita con Rebeca. --!Mierda! ?Quien lo diria? El gran Maison Hudson enamorado; es una verdadera lastima. --!Callate, Axx! Ya te vere, tarde o temprano vas a caer. --lo sentencio y Axxel le respondio sacandole el dedo medio. Esos dos eran esa clase de amigos que se querian pero fingian no hacerlo. Y que Hayley, la hermana pequena de Axxel, estuviese dentro de la ecuacion, generaba un plus para su amistad. <>. & Las fiestas en casa de Mack solian ser concurridas. Chicas sexys, bebidas y estruendosa musica que dificultaba llevar cualquier tipo de conversacion. Aunque, nadie iba alli a conversar. Era una de esas casas privadas en la costa de Miami que ofrecia juerga y mucho alcohol. Sus pantalones gastados, una polo negra y llevar la billetera cargada de preservativos, era lo unico que Axxel necesitaba para ir a la fiesta de Mack, lugar que siempre le garantizaba chicas ardientes y mucho, pero mucho sexo. El no tenia preferencia con ninguna en particular, solo un fetiche con los <>, pero esa noche centro toda la atencion en Melanie, una rubia que siempre le habia gustado. <>. Desde que Melanie entro a la fiesta, con en esos pantalones ajustados, no podia quitarle un ojo de encima. Su unico pensamiento era tenerla entre sus piernas y no tenia intencion de seguir esperando para conquistarla. En el pasado, intentar ligar con ella no era una opcion, porque Maison estaba interesado en Melanie y no perderia su amistad <>, cosa que dejo de importar desde que su amigo se fijo en Rebeca. <>, se pregunto al ver que ella se marchaba. Camino entre sus estupidos companeros de juerga y empujo a unos cuantos para poder salir de la casa y seguirla. <>. Melanie se habia alejado de la casa de Mack para buscar un poco de paz entre tanto alboroto y fue a parar a la orilla de la playa. --Ya te vi. --murmuro, mientras se acercaba a la rubia mas sexy que habia conocido en su vida. ?Que hacia sola en la oscuridad? No le importaba mucho saber la razon, lo unico que queria era tenerla y hacerla gemir, pero de puro placer. --El cielo se va a quedar sin estrellas si las siguen dejando caer. --murmuro cerca del oido de Melanie y se quedo detras admirando su voluminosa retaguardia. <>, penso con petulancia. --!Wow! ?Eso es lo mejor que tienes?--se mofo ella y se dio la vuelta para volver a la fiesta. --Melanie, me rompes el corazon. --murmuro y se toco el pecho teatralizando dolor. <>. La rubia fingio restarle importancia cuando en realidad estaba muy nerviosa. Axxel le gustaba y mucho, pero caer rendida a sus pies, por un par de palabras tontas, no estaba en sus planes. No pretendia ser una mas del monton, planeaba conquistarlo. ?Como lo haria? Aun no estaba segura, pero el primer paso fue ir a la fiesta con aquellos pantalones ajustados para tratar de llamar su atencion y, al parecer, su pequeno plan estaba funcionando. --?No hay alguna chica esperando por ti arriba? --sugirio mientras seguia caminando. --Quizas mas de una pero pueden esperar. En este momento estoy tratando de descifrar el misterio que te envuelve ?Eres virgen todavia? Porque puedo ayudarte con eso.--le pregunto, haciendo que ella se detuviese. <>. --Eres un…olvidalo. --gruno y siguio caminando. Estaba conteniendo las ganas de gritarle a la cara todos los insultos que se le vinieron a la cabeza. Jamas se habia sentido tan avergonzada en la vida. <>. --Dilo, carino. Llamame idiota. --solto Axx ironico. --Si, eso eres !Un enorme idiota! --le grito a la cara y trato de girarse para dejarlo solo, pero Axxel la retuvo cogiendola por las caderas, la pego a su cuerpo para que sintiesesu excitada virilidad. --?A donde vas, fierecilla? -- pregunto el con un susurro. <>. Melanie retuvo un gemido al sentir aquel enorme paquete presionando su vientre y no lo podia creer, Axxel Wilson, el chico que la traia loca, estaba a segundos de besarla. Un calor intenso invadio la parte baja de su pelvis y lo empujo aterrada por lo que su cercania implicaba. <>. No podia entender su actitud ?Por que lo empujo? Nunca antes le habia pasado, era la primera chica que reaccionaba de esa manera y tambien la primera que le calentaba el miembro en segundos. Deseaba besarla y mucho mas que eso....queria llevarsela a la cama; o al asiento trasero de su auto, lo que fuera mas facil. --!Axxel! Te acaban de postular para ping-pong beso. Trae a tu chica --grito Mack desde el balcon. --Ni lo suenes. --advirtio Melanie levantando las manos al aire. --?Por que te sientes aludida? Tu no eres mi chica, pero si quieres puedes venir conmigo. --le sugirio, tentandola. <>. --No, gracias. --respondio, ocultando con su actitud la verguenza de haberse creido su chica. Huir era una opcion muy tentadora despues de aquella metida de pata. Estaba apenada y a la vez perturbada por experimentar aquel remolino de emociones que desperto Axxel en su cuerpo. Nunca antes habia deseado besar a nadie con tanta necesidad y desenfreno. Melanie entro de nuevo a la fiesta, seguida por el, quien seguia sin entender que habia pasado segundos antes. Para el era inaceptable que una chica lo rechazara dos veces una misma noche. <>, se impuso como un reto; uno que no pensaba perder. --Todos saben las reglas, quien deje caer la bola toma cinco cervezas y el ganador besa a la chica que este participando en el juego. --explico Tyler. --Deja de hablar tanta mierda, Ty.--ordeno Axx y saco a <>, que resulto ser una raqueta de ping-pong. Habian jugado cientos de veces, y el era uno de los mejores, pero era la primera vez que Mel seria el premio final y estaba mas que motivado a ganar. <>, juro en silencio y le guino el ojo a su premio. Ella sonrio, se acerco a Jackson Spencer --el contrincante de Axx-- y le susurro algo al oido. <>. Axxel inicio el juego y golpeo la bola sin problemas, determinado a ganarle a Jackson y ser el dueno de aquel premio tan codiciado, un beso de la rubia que le activo todos los sentidos minutos antes. <>, se quejo al no poder concentrarse en el juego sino en ella y lo cerca que estaba de Jack. --!Si! Te gane. Bebe toda la cerveza, idiota --se burlo su contrincante. --Imbecil. --murmuro Axxel y contuvo las ganas de golpearlo solo porque no queria iniciar una pelea con su princesa en medio. Se bebio los cinco vasos de cerveza como penitencia y tiro el ultimo al suelo enojado por haber perdido un sencillo juego de mesa. --Ahora si, nena. Dame mi beso --pidio Jack. <>. Melanie sonrio y se acerco con lentitud hacia el, sabia lo que hacia <>, prometio mientras se dejaba sostener por Jack. La distancia entre ellos era inexistente; estaban tan cerca que ni un papel pasaria entre los dos. Los nudillos de Axxel se pusieron blancos y ardia en celos al ver a ese par a punto de besarse. <>. --!Quiero la revancha! Si gano, ese beso sera mio. --propuso como ultima alternativa. <>. --No jodas, Axxel. Yo gane. --se quejo Jack y tomo a Melanie por las caderas. --Te dare dos billetes de los grandes por ese beso. --ofrecio. --Acepto. --respondio Jackson. <>. --!Son un par de idiotas! --grito Melanie y salio corriendo, decidida a no volver. La situacion se le escapo de las manos; habia hecho el ridiculo delante de todos y se sentia avergonzada por su reaccion de nina tonta. Se alejo lo suficiente de la casa y lloro tanto que las lagrimas le nublaron los ojos. --Genial, Mel. Tu primera vez en una fiesta y sales huyendo como una estupida. --se levanto de la arena, donde habia llorado por un buen rato y comenzo a caminar, pero no sabia hacia donde debia ir. <>. --No grites, dulzura. Disfrutaras esto, te lo prometo. --le ordeno una voz masculina. El hombre la tomo por la cintura con una mano y con la otra le cubrio la boca. Melanie no sabia quien podia ser, peroel hombre apestaba a basura. <>. El hombre la tenia inmovilizada y a su merced; podia hacer lo que quisiera con ella y no habia forma de evitarlo. Estaba aterrada y comenzo a llorar tan fuerte que su cuerpo se sacudia sin control. --!Sueltala ahora mismo, pedazo de mierda! --grito Axxel enojado. <>. La estuvo buscando por una hora y no pensaba rendirse hasta encontrarla. Por suerte llego justo a tiempo para salvarla de aquella basura humana. <>. --Ella esta conmigo ?Verdad, dulzura? --pregunto el sujeto muy cerca del rostro de Melanie. Ella no sabia que hacer, lo unico que queria era que ese hombre la dejase ir con su idiota amor. --!Sueltala ahora! --ordeno el, gritando mas fuerte. --Y si no lo hago ?Que haras, muchachito? --lo reto el aberrado sexual. <>. Aquel hombre, cuyas sucias manos tocaban a su princesa, colmo la paciencia de Axxel. No estaba dispuesto a seguir jugando su juego mientras ella temblaba y lloraba por su culpa. Corrio hacia ellos y golpeo el costado del sujeto liberando asi a Melanie. Siguio pegandole una y otra vez hasta que Mel grito que se detuviese. Axx se levanto del suelo y la vio temblando. Camino hasta ella y la abrazo para tratar de consolarla. ?Que habria pasado siel no hubiera aparecido? La sola idea le daba asco. --Ya te tengo, Mel. --susurro y le acaricio el cabello. Un dolor extrano le golpeo el pecho cuando la sostuvo; tenerla tan cerca lo hacia sentir debil. Era una mezcla de extasis yfelicidad; algo que jamas habia sentido con ninguna chica. <>. --Gracias, Axxel. Yo…no se de donde salio.--balbuceo con voz temblorosa. --!Chist! Tranquila. Estas a salvo conmigo.--aseguro sin dejar de acariciarla. --Quiero ir a casa. --pidio ella y el se alejo de su cuerpo lo suficiente para caminar hasta la casa de Mack. Antes de irse, Melanie subio a uno de los banos de la casa y se lavo el rostro hasta que se le puso rojo. Se miro al espejo y volvio a llorar sin parar; las lagrimas se convirtieron en quejidos y se deslizo hasta el suelo abrumada. --?Estas bien, Mel? --pregunto Axxel desde la puerta. --Si. Ya salgo. --respondio y se seco las lagrimas con el dorso de la mano antes de salir. <>. Subieron al Mustang GT de Axx y ella se resistia a mirarlo a la cara. Por alguna razon, se sentia avergonzada por lo que paso con aquel hombre. --Melanie ?Por que te fuiste? --ella fruncio los labios, sopeso sus opciones, que no eran muchas, y decidio decirle la verdad; no tenia nada que perder. --Odio que los chicos me traten como un objeto. Querias pagar por mi como si fuera una puta. --dijo enojada. --!Joder, Mel! No lo hice por eso... yo... Lo siento. --murmuro. --?Tu que? --pregunto ante el tono de duda que escucho en su voz

  • El destino de una dama de Trixie George

    https://gigalibros.com/el-destino-de-una-dama.html

    El destino de Charlotte Berkeley esta escrito desde su nacimiento. Como hija mayor del conde de Pinecrest se espera de ella que brille en sociedad, que lleve una vida ociosa y que encuentre un buen partido. El problema es que a ella no le interesan ninguna de esas cosas y ni siquiera le preocupa que la pillen en una situacion de lo mas comprometida con Benjamin Thomson, duque de Bainbridge; situacion que, por otra parte, ella misma se ha buscado.

  • Las autenticas vikingas no llevan casco de Helen Russell

    https://gigalibros.com/las-autenticas-vikingas-no-llevan-casco.html

    Esta divertida y luminosa novela despertara a la vikinga que llevas dentro: esa fabulosa guerrera capaz de superar las tormentas de la vida y vencer a los enemigos de la felicidad.

  • La tercera planta de Patricia Moreno Raya

    https://gigalibros.com/la-tercera-planta.html

    Cuando la autora del libro que te dispones a leer me encargo encabezar su relato, aparte de sentirme muy halagado, note que tendria que enfrentarme a algo desconocido: mi primer prologo. En realidad, casi tan desconocido como lo es para mi la persona que firma esta novela. O incluso tan desconocido como lo soy yo para ella. Y es que, el hecho de que jamas haya visto (creeme, es asi) a la inventora de esta historia y no sepa de ella mas que lo primordial, puede parecerte algo insignificante, irrelevante, pero espera, tiene su enjundia. Empece (y tu lo estas haciendo ahora) a leer un relato con ojos virgenes, sin tener demasiado claro que esperar de el, sin ni tan siquiera saber si me engancharia. Un reto, sin duda. Como lo fue, seguro, para la creadora del universo que te atrapara en las paginas consiguientes. Aunque la historia cuenta con unos escenarios cuidadosamente descritos, unos personajes confeccionados al detalle y un hilo conductor perfectamente tramado, tal vez lo que mas me haya impresionado sean las reflexiones intrinsecas en cada capitulo, ademas de los inesperados y a veces curiosos giros de guion. Espera, amigo lector. No adelantemos acontecimientos. ?No te estare contando demasiado? Seguro que no seria del agrado de alguien que estas a punto de conocer. Dejame que te avance, eso si, que estas a punto de adentrarte en una trama tan especial y elastica que bien podria convertirse en un caso de rabiosa actualidad o servir como argumento para una de esas viejas dramatizaciones radiofonicas. Una novela romantica, con tintes de traicion, con el casi siempre inevitable aderezo de los celos y servida con toques de una inusitada realidad. Lista para ser degustada como si se tratase de un dulce tiramisu banado con un cafe demasiado amargo. Como la vida misma, ?no? Llegados a este punto, ?no te apetece enfrentar un nuevo reto? ?Jugar a ponerte en la piel de los personajes? Pensar: "Yo tengo un amigo que se parece a… O que haria las veces de…". !Adelante! Si lo disfrutas una decima parte de lo que yo lo hice, te aseguro sin miedo a equivocarme que habra valido la pena. A Cesar Requesens Ahora que somos amigos y que hemos llegado a este punto, espero que te logres librar de este vago. Si no hay ninguna manera de hacerlo, matalo. Personalmente me agradaria que lo hicieras; es mas, te admiraria enormemente. Y si llegaras a necesitar ayuda, puedes contar conmigo. herMann hesse, Demian 27 de Mayo de 2016 Eran las dos de la tarde y el sol de Malaga calentaba mis manos sudorosas a la espera de utilizarlas para acabar con su vida. Habia llegado el momento. Los companeros de Victor comenzaron a salir de la Facultad de Medicina tras asistir a la primera sesion del curso de Nutricion en Pediatria. El saldria el ultimo como siempre; su parsimonia y perfeccionamiento en recoger sus apuntes, boligrafos y demas enseres le hacian ir con el tiempo justo. Atraveso la puerta diez minutos mas tarde. Con la garganta aspera y el corazon desbocado, me sentia incapaz de realizar mi trabajo. Le observe sabiendo que seria la ultima vez. Sus ojos almendrados enmarcados por unas cejas perfectas y su barba descuidada, pero estudiada hasta el ultimo milimetro, lo convertian en el hombre mas atractivo que jamas he conocido. El amor que siento por el me paralizo los pies y crei por un segundo que no podria hacerlo. Indecisa, introduje la mano en el bolso y acaricie suavemente la pistola que el mismo me habia regalado semanas atras… 1 Claudia observaba distraida como el camarero del bar de siempre tecleaba a toda prisa algo que probablemente podria esperar. El local, con las mesas llenas a cualquier hora del dia, causaba la sensacion de estar en la ciudad con mas movimiento del pais. Claudia analizaba la expresion de la cara del chico sentado en la mesa contigua: sostenia un libro, pero tenia la mirada perdida, probablemente buceaba entre sus miedos y olvidos, ya que sus ojos reflejaban arrepentimiento y frustracion. Mientras tanto, Helena, su mejor amiga, le hablaba acerca de los despidos que iban a producirse en su trabajo en las proximas semanas. --?Me estas escuchando? --Si, perdona. Estoy un poco distraida. ?Entonces van a echar al auxiliar? --!No! ?Ves como no me estas escuchando? Van a redu- cirle la jornada, pero hay rumores de que uno de los adjun- tos vamos a la calle. --Bueno, no te preocupes, no seras tu --respondio Claudia de mala gana. Estaba cansada de sus historias de siempre, las discusiones con sus companeros, el miedo a sus jefas y su desanimo de cada dia de ir a la farmacia. Habia perdido la ilusion por aquel trabajo por el que un dia sintio vocacion, pero que ahora le asqueaba y la hacia infeliz. Helena siguio hablando durante una hora mas y Claudia, ensimismada en sus pensamientos, dejo que el tiempo pasara. Acabaron el cafe y se despidieron con un beso en la mejilla, prometiendo verse de nuevo la tarde siguiente. Helena observo a su amiga marcharse. Envidiaba como el tiempo no pasaba por ella y las atentas miradas de los hombres a su paso. Envidiaba tambien la seguridad en si misma, su independencia. Una larga melena, de tirabuzones pelirrojos, caia por su espalda de una forma tan natural que tambien atraia la mirada de las mujeres. Cuando perdio de vista a Claudia, se dio media vuelta rumbo a casa con Victor, su marido. Claudia, ajena a las miradas, continuaba su camino. Paso junto a su antigua Facultad de Derecho y sintio nostalgia de aquellos anos en los que lo mas importante eran sus amigos, Helena y Victor, y en los que no era consciente de la velocidad del mundo. A pesar de aquellos dias que paso estudiando leyes y decretos, no se dedicaba a ninguna rama del derecho. Colaboraba en una revista semanal del diario regional de Granada para enmascarar su verdadera ocupacion. Habia heredado de su padre la serenidad, la sangre fria y la falta de empatia. Habia heredado tambien la fuerza y la pasion por lograr los objetivos impuestos. Desde hacia varios anos, especialmente desde que su padre faltaba, vendia la vida de otras personas. Aceptaba encargos en los que ella era la responsable de la ejecucion de una muerte deseada. Claudia vivia en el numero 9 de la calle Salamanca, un pasaje peatonal junto a plaza Bibarambla, estrecho y con poca luz, pero con mucha vida debido al elevado numero de granadinos y turistas que paseaban por sus adoquines, en un edificio que compro su padre y en el que ahora estaba sola. Tres plantas de las que apenas ocupaba la primera, y en la que tenia un pequeno despacho donde en ocasiones trabajaba. Viajaba con frecuencia por Espana, tanto por negocios como por placer. La ultima vez que tuvo un encargo como sicario fue en Madrid. Hacia ya tres meses de aquello y el dinero ahorrado empezaba a escasear. Desde entonces su telefono no sonaba. Cuando llego a casa se descalzo, encendio el ordenador y leyo las ultimas paginas de aquel cuaderno digital en el que relataba con detenimiento sus trabajos.

  • Salvaje (Doctora Klein 2) de Diana Scott

    https://gigalibros.com/salvaje-doctora-klein-2.html

    De la autora con mas de cien mil lectoras, llega la segunda parte de la Serie Doctora Klein.

  • G de guardaespaldas de Sue Grafton

    https://gigalibros.com/g-de-guardaespaldas.html

    La misma semana que Kinsey recupera su piso destrozado por una bomba y cumple 33 anos ocurren dos cosas que durante un tiempo van a trastornar su vida: viajando desierto a traves en su Volkswagen en busca de una anciana desaparecida, alguien desde una camioneta le vuela inesperadamente los neumaticos. Solo entonces Kinsey se convence de que un ex convicto, a quien ella habia contribuido a apresar, al salir en libertad ha ofrecido 1.500 miserables dolares por su cabeza. Aun consciente de lo poco que vale su vida, decide no obstante contratar a Robert Dietz, un guardaespaldas, muy duro, algo introvertido y misterioso, quien -vaivenes del oficio- acaba protegiendole algo mas que la cabeza. Entretanto, si fue cosa facil dar con la vieja bruja de Agnes Grey, bastante mas complicado sera descifrar los inconfesables misterios en los que va enredando cada vez mas a Kinsey Millhone. ?Adonde la conducira esta vez su insaciable necesidad de meterse en lios?

  • Construyendo un amor (Los alemanes 3) de Noni Garcia

    https://gigalibros.com/construyendo-un-amor-los-alemanes-3.html

    L legar hasta este hotel, en pleno centro de la ciudad, ha sido una locura total. Se que estamos en la principal fiesta de Cadiz, que los carnavales son algo mas sagrado que el Oktober Fest en Alemania, pero esto es muy pequeno para albergar a tanta gente. Bueno, lo importante es que Sabine y yo por fin hemos podido acceder al aparcamiento, dejar el coche en la plaza que teniamos reservada y subir hasta el salon donde se va a celebrar la gala de carnaval. Cuando mi amiga me comento que su novio la habia dejado y que tenia la reserva hecha, no me apetecio mucho asistir; estoy en un momento en que necesito mucha paz, tranquilidad, templar mis nervios y no tener que estar dando explicaciones a nadie, y aqui trabajan varios amigos de mis padres, entre ellos el director. Pero despues me convencio y decidimos disfrazarnos de forma que nadie nos reconociera: ella de Frankenstein, yo de zombi. He de decir que la maquilladora es increiblemente buena, tremendo susto me he llevado al mirarme al espejo cuando ha terminado. No parezco ni yo, asi que he decidido usar mi segundo nombre; asi nadie podra encontrarme, saber quien soy y atosigarme a preguntas. Esta noche sere Nicole, Maria se ha quedado en Zahara de los Atunes. Es alucinante la decoracion que han usado para la fiesta: las luces, los efectos, la musica y el ambiente son inmejorables. Hay mucha gente, pero no hasta el punto de no poder moverte, de ser asfixiante; todos tenemos suficiente espacio vital para no agobiarnos. Nos dirigimos a la barra y Sabine pide por las dos. Para ella, un refresco de naranja, ya que nunca bebe alcohol, y para mi un ron con cola. Lo remuevo mientras sigo deleitandome con todo lo que me rodea y avanzo hacia una de las cristaleras para mirar la calle. La gente tiene mucha imaginacion en esta tierra, se ven los disfraces mas inusuales, desde el tipico hombre vestido de mujer hasta un elaborado traje de superheroe. Me giro para buscar a Sabine, pero algo se interpone en mi camino y mi copa acaba estrellada en el suelo. Y si, es algo, porque no tengo muy claro de que va disfrazado este chico... o chica. No sabria decir. --Disculpe, marinera. !Jar! --se excusa con voz de pirata. --La culpa es mia, que no se por donde voy, todavia no he sorbido suficientes cerebros --le suelto en aleman al bicho mas chungo de Piratas del Caribe, que el muchacho ya podria haberse disfrazado de Jack Sparrow. Una sonora carcajada brota de su garganta y yo me quedo a cuadros. No se si se rie porque le hace gracia mi idioma, mi horripilante cara o porque habla aleman y ha entendido perfectamente lo que acabo de decir, y mucho me temo que ha sido por esto ultimo. <>. --Lo que menos esperaba encontrarme aqui, esta noche, es a una alemana con humor --me dice en un aleman, con tono de pirata nuevamente, tan perfecto que creo que ni yo soy capaz de conseguir, y eso que soy autoctona. --Pues ya ves, no todos los alemanes son unos estirados --le espeto ya en espanol. --?Y tiene nombre la alemana que hay debajo de ese horroroso zombi? --Yo sere una zombi horrorosa, pero tu no te quedas atras... Mi nombre es Nicole. --El mio es Jacobo --se presenta mientras me tiende la mano para que se la estreche, y yo hago lo propio. Me mira a los ojos, sonrie y tira de mi. Me pilla tan de sorpresa que me dejo arrastrar hasta no se donde, porque no tengo ni idea de adonde me lleva, hasta que para en seco en medio de la sala, coloca mi mano izquierda sobre sus biceps, agarra mi cintura con la mano del brazo que estoy tocando y entrelaza la otra con la que me queda libre. Entonces soy consciente de que suena Valio la pena de Marc Anthony. <>, sonrio para mi misma mientras lo pienso. Llevo anos dando clases de bailes latinos y flamenco, a ver que es capaz de hacer, tampoco quiero dejarlo en ridiculo. Empieza suave, sin dar mucha cana, pero cuando ve que le sigo el ritmo, va aumentandolo poco a poco. <>. Lo damos todo en la pista, incluso se forma un cerco a nuestro alrededor para que tengamos espacio suficiente para hacer todos los giros y movimientos. La cancion termina e intentamos recobrar el aliento mientras recibimos una gran ovacion de los que nos rodean. Yo, que queria pasar desapercibida, que nadie me reconociera, soy el centro de todas las miradas junto a este desconocido que estoy segura de que tampoco se llama Jacobo; es mucha casualidad que su nombre sea la traduccion del nombre del protagonista de la pelicula de la que va caracterizado. Aun cogidos de la mano, nos dirigimos a una de las barras que hay en el salon. Yo pido un ron con cola, el pide lo mismo, y brindamos por nada en concreto. --Bueno, voy a buscar a mi amiga, que la he dejado esperando su bebida... --Creo que tu amiga esta de lo mas entretenida con mi amigo. --!Madre mia! Nos habiais echado el ojo... Acabo de ser consciente de que el golpe que nos hemos dado, y que se ha saldado con mi copa en el suelo, no ha sido casual. --Realmente, mi amigo se fijo en tu amiga, yo solo tenia que entretenerte para que el le entrara... --Pues, hala, ya me has entretenido, vete a dar una vuelta, que no te necesito para disfrutar de la noche --le escupo sin miramientos. Reconozco que me ha sentado como una patada en el estomago que su unico proposito fuese alejarme de Sabine. --No me has dejado terminar de hablar. --No es necesario. --Nicole, escuchame, que ha sonado muy mal. El muy maldito tiene un tono de voz tan sensual, que escuchar mi nombre ha hecho que decida darle la oportunidad de terminar de hablar. La cuestion es que me suena de algo ese tono grave. --Si bien tus pintas no habrian hecho que me acercara a ti por decision propia, al igual que tu no te hubieras acercado a mi, que de hecho ese era el proposito de este disfraz, me alegra haber podido bailar contigo y estar ahora compartiendo una copa. --Tienes razon. Y mi intencion era la misma que la tuya, que nadie se acercara a mi, pasar desapercibida. Los dos nos echamos a reir, estamos en la misma situacion y, sin quererlo, nos hemos juntado. Cuando conseguimos controlar el ataque de risa, brindamos y damos un largo sorbo a la copa. Mucho me temo que los dos tenemos problemas del corazon, me lo cuenta su mirada triste, la que esta oculta bajo kilos de maquillaje. --Pues creo que nadie se nos iba a acercar con nuestras pintas, pero si queremos asegurarnos de que sea asi, deberiamos permanecer el resto de la noche juntos. Se que tiene toda la razon del mundo, pero me apetece picarlo un poquito, le vendra bien volver a reirse, puede que asi se difumine un poco la bruma de sus ojos. --!Que forma mas rara tienes de ligar, pirata! --Pero yo no estoy... --No puedo aguantarlo mas y me rio--. !Eres mala, zombi alemana! Suelta la copa, esto va a costarte otro baile. Y casi no tengo tiempo de hacer lo que me pide, tira de mi de nuevo hasta la pista, aunque esta vez la cancion es mas lenta y puedo disfrutar mas del contacto con sus musculados brazos, de su aroma a perfume caro, del intenso color marron de sus ojos... Es alto, fuerte y ahora mismo me un coraje tremendo no poder ver su rostro, estoy segura de que es un hombre muy guapo y, si no lo es, lo suple con la sensualidad de sus movimientos y con esa voz que juraria haber escuchado antes. Y asi pasamos la noche, bailando una cancion tras otra y bebiendo una nueva copa cada vez que parabamos para recobrar el aliento, cosa que pasaba demasiado a menudo debido a la intensidad con la que nos moviamos. --Nicole, ?has bebido demasiado? --La voz de Sabine nos interrumpio cuando estabamos brindando por los arboles del campo, ya que no nos quedaban mas motivos por los que hacerlo. --Creo que si, Sabine. Y no importa si hablas en aleman o en castellano, aqui el pirata chungo lo entiende perfectamente. --Hola... --Jacobo --se presenta, tendiendole la mano a mi amiga. --Pues nada, no te preocupes, nos volvemos... --!Anda ya, tonta! Tu termina la noche con Batman, que yo me vuelvo en un taxi. --?Estas loca? Va a salirte muy caro un taxi hasta Zahara. --?Y que mas da? --Como Batman se va a quedar contigo, yo pago el taxi hasta Chiclana y ella el resto del trayecto. Asi no le sale tan caro, ?os parece bien? --Vale, pero escribeme cuando llegues, ?de acuerdo? Sabine se despide de mi con un abrazo y repitiendome que le escriba cuando llegue a casa, aunque dudo mucho que ella vaya a estar pendiente del telefono en las proximas horas, ademas, sabe de sobra que yo nunca me acuerdo de avisarla cuando llego. Jacobo y yo apuramos la copa antes de salir de la sala. Una vez en la salida, pedimos al recepcionista que nos consiga un taxi y nos vamos a la puerta para esperarlo. Sigue sin soltarme la mano, a pesar de que ya no estamos arriba, de que no estamos bailando. Tiemblo porque hace frio, estamos en pleno mes de febrero y mi ropa no abriga mucho. Se da cuenta y me rodea con sus fuertes brazos. Levanto la cara para mirarlo, el baja la suya para sonreirme, y no necesitamos hablar. Los dos sabemos que ese taxi no llegara hasta Zahara, que se quedara en Chiclana. No tengo ni idea de quien es el hombre que se esconde bajo el disfraz, pero si se que me apetece pasar un buen rato de cama con el, por el simple hecho de haber convertido en estupenda una noche que se planteaba aburrida, por su conversacion, por su forma de bailar y porque me atrae, no hay mas. Unimos nuestros labios hasta que el contacto se ve interrumpido por la llegada del taxi. Nos subimos a el y Jacobo le da la indicacion: --Al hotel Riu Chiclana. <>, pienso mientras me abrocho el cinturon de seguridad. Buen botin tuvo que conseguir este piratilla para permitirse pasar una noche de sexo en uno de los hoteles mas caros de Chiclana. N os bajamos del taxi y tiro de su mano hacia el interior del hotel. Ahora creo que no ha sido muy buena idea traerla a mi lugar de trabajo, pero ya estamos aqui y esa habitacion siempre esta disponible para mi. Le pido que me espere en los butacones que hay frente a la recepcion, asi evitare que conozca mi verdadero nombre, que es lo menos oportuno en este momento. --Leo, dame la tarjeta de mi habitacion. --?Disculpe? --!Joder! Soy Roberto, que estoy disfrazado y borracho, no quiero llegar asi a casa porque puede que este por alli mi padre, quedo en venir en estos dias. --Porque me lo dices y he reconocido tu voz... Ni loco hubiera pensado que eras tu. Aqui la tienes, ?necesitas algo mas? --Si, que me subas una botella de ron, refrescos de cola y me des dos tarjetas mas, estoy esperando a un par de amigos, y por la manana tendran que salir. --?Un par de amigos o una zombi...? --No seas indiscreto, dame las tarjetas y que me suban lo que te he pedido. Leo desaparece detras de la recepcion y me dirijo hasta donde esta Nicole, que imagino que sera su nombre real, no creo que sea tan mentirosa como yo, que he usado uno que no tiene nada que ver con el mio... O si, porque asi era como queria mi madre que me llamara; menos mal que a mi padre se le ilumino la bombilla y termino por registrarme como Roberto. Le tiendo la mano para ayudarla a levantarse. Sinceramente, no se cual de los dos esta mas borracho, pero de lo que no pienso preocuparme en este momento es de eso. Necesito un respiro, desintoxicarme un poco de Carmela; muy a mi pesar, estoy muy colgado de ella, y ella ama a Sebastian, por mas que se niegue a reconocerlo. Casi acabamos en el suelo antes de llegar al ascensor. Debido a la gran cantidad de alcohol que hemos tomado, nuestro cuerpos son incapaces de andar al mismo ritmo y chocamos sin control. Una vez dentro, no duda ni un momento en lanzarse a devorar mi boca. Esta chica, que tengo la impresion de que es bastante mas joven que yo, es puro fuego, pura pasion, y voy a disfrutarlo sin pensar en nada mas, aunque... --Me encantaria ver tu rostro sin este espantoso maquillaje. --Es carnaval, y este espantoso maquillaje ha conseguido llevarte a la cama. --?Vas a seguir echandome en cara que no me fijara en ti, que yo fuera el compinche? --Hoy use este disfraz porque no queria ser yo, si me deshago de toda esta pintura, volvere a serlo. --?Yo tampoco puedo? --No lo compliques, me ire a Alemania el lunes. Dejemos que esto sea un bonito recuerdo de carnaval. --?Ni tan siquiera las lentillas? Me arden los ojos... --Pues sera de otra cosa, porque las lentillas las perdiste en el tercer cubata --se rie y me contagia la risa. Ahora recuerdo ese momento, me deshice de ellas en el bano, no las aguantaba mas. --Entonces bastara con un poco de colirio. Vuelvo a besarla hasta que se abre la puerta. Por el camino a la habitacion, cada uno empieza a desabrochar sus ropas, parece como si nos fuera a faltar tiempo. Entramos a empujones, cerramos de un portazo y comenzamos a tirar prendas por la habitacion, hasta que suena el toc toc de la puerta; seguro que son las bebidas. Le pido que se esconda bajo las sabanas, ya que solo le queda puesta la ropa interior. Despacho rapido al camarero y Nicole aparece de entre las sabanas muerta de la risa. Mas bien, sale volando de ellas su lenceria, lo que quiere decir que esta completamente desnuda, y yo no tardo ni treinta segundos en estar igual que la jovencita que me espera en la cama. Tiro del nordico y mi vista se deleita con su cuerpo desnudo. Me cuelo entre sus piernas, devoro con ansia sus labios, aunque no tardo mucho en abandonarlos y mordisquear su cuello, y, lejos de quejarse, se arquea y me regala varios suspiros de placer. Mi lengua se pasea libremente por su torso desnudo hasta llegar al pezon de uno de sus perfectos y redondos senos, juego con el hasta que se endurece y hago lo mismo con el otro. Continuo mi camino por su vientre plano adorando por unos sutiles abdominales y un pequeno lunar junto al ombligo con forma de corazon. Llego hasta su depilado pubis y mi sorpresa es mayuscula al descubrir tatuado en el una preciosa Campanilla.