• que leccion aprendio la joven pareja - S.S.G. Danvers

    https://gigalibros.com/la-joven-que-aprendio-a-kind-of-magic-2.html

    El viaje fue solo el principio.

  • UNA JOVEN PAREJA | MARCOS ORDOÑEZ | Casa del Libro

    https://www.casadellibro.com/libro-una-joven-pareja/9788417386849/12469171

    Así comienza Una joven pareja, la novela más reciente del escritor y periodista Marcos Ordóñez, una sencilla y emocionante historia de amor entre una joven ...

  • Marcos Ordóñez: «“Una joven pareja” es mi novela más feliz

    https://www.zendalibros.com/marcos-ordonez-una-joven-pareja-es-mi-novela-mas-feliz/

    17 sept 2021 — Y luego un libro muy, muy duro y muy verdadero, muy auténtico para mí: La lección de anatomía. Un libro muy bonito, me parece muy verdadero: es ...

  • Un regalo muy pesado - Cuentos infantiles

    https://cuentosparadormir.com/infantiles/cuento/un-regalo-muy-pesado

    La joven pareja comprendió que Erdamal estaba tan desanimada que ya no era capaz de admirar la belleza del cofre, y se lo quedaron encantados.

  • Una joven pareja: 42 (Ficción) Tapa blanda - Amazon.es

    https://www.amazon.es/Una-joven-pareja-42-Ficci%C3%B3n/dp/841738684X

    Una joven pareja: 42 (Ficción) : Ordóñez Divi, Marcos: Amazon.es: Libros.

  • Me enamoré de alguien que me doblaba la edad y esto es lo ...

    https://www.elconfidencial.com/alma-corazon-vida/2018-12-03/se-enamoro-alguien-mayor-doble-edad-aprendio-esto_1669746/

    3 dic 2018 — Estamos seguros de que alguna vez te has cruzado con una pareja por la ... Es lo que le pasó a Amanda McCoy, una joven a la que Cupido lanzó ...

  • La chica que viajo (A Kind of Magic 1) de S.s.g. Danvers

    https://gigalibros.com/la-chica-que-viajo-a-kind-of-magic-1.html

    gentes de nuestro mundo. Erase una princesa de cuento aficionada a Star Wars y El Senor de los Anillos. Erase un palacio lleno de secretos donde nada es lo que parece. Erase unos dioses que escribieron un destino y una chica que se rebelo contra el. Erase un tipo de magia, mucha magia. Erase una historia de amor que nunca olvidaras.

  • Rosa la Rebelde de Gema Perez

    https://gigalibros.com/rosa-la-rebelde.html

    Rosa era una princesa oscura.
    Encerrada en su torre.
    No para protegerla a ella.
    Sino a los demas.

  • Paul McCartney. La biografia de Philip Norman

    https://gigalibros.com/paul-mccartney-la-biografia.html

    La historia de Paul jamas contada fue confiada al cronista por antonomasia de la vida y obra de estos improbables semidioses; seres por los que nadie daba un duro en sus inicios, ni siquiera el que fuera su mentor, Tony Sheridan. Philip Norman ya nos deleito con su enciclopedica biografia del companero de andanzas de Paul, John Lennon, en un abrumador alarde de apabullante erudicion, solo apto para conversos, voyeurs insaciables y amantes de la obra ilustre del cuarteto de escarabajos. No menos ambiciosa es esta segunda entrega dedicada al que muchos consideran el rey sin corona de la banda.

  • Hasta que llegue el Caballero de Sue-ellen Welfonder

    https://gigalibros.com/hasta-que-llegue-el-caballero.html

    Lady Mariota MacNichol, acusada de haber asesinado al indigno hombre al que creia amar, se esconde en el deshabitado castillo de Cuidrach. Pero entonces, el nuevo lord de Cuidrach llega inesperadamente… Sir Kenneth MacKenzie es un feroz caballero bastante experimentado aunque su ultima conquista le dejo el corazon destrozado y el orgullo herido–. ?Cuanto tiempo transcurrira antes de que ambos compartan la cama? Y, lo mas importante, ?dejaran los fantasmas del pasado que puedan volver a creer en el amor?

  • Llama (Electrico 3) de E. L. Todd

    https://gigalibros.com/llama-electrico-3.html

    Tercer libro de la serie Electrico

  • Lunas y estrellas (El ultimo tatuaje 1) de Angels Alemany

    https://gigalibros.com/lunas-y-estrellas-el-ultimo-tatuaje-1.html

    El comandante acababa de dar el aviso por turbulencias y Julia sintio una presion de sobra conocida en el pecho. Esa sensacion de asfixia que padecia cada vez que tenia miedo. --?Turbulencias? --exclamo Julia, alterada. Y, sin pensar, agarro con fuerza la mano de Viktor y cerro los ojos, repitiendose en voz baja que no pasaria nada. Le sucedia siempre que se subia a un avion. A pesar de no tener miedo a volar, las turbulencias y aterrizajes violentos la aterraban. Llevaba casi un ano sin volver a casa y estaba nerviosa, ya que tenia una gran noticia que dar a sus amigas y a su familia. Pero ese vuelo se estaba haciendo especialmente largo. Era noviembre y habia tormentas en gran parte de Europa, asi que atravesar todo eso era sinonimo de turbulencias y de un viaje mas que movido. Viktor la miro alucinado. Su mente volvio al momento justo en que Julia le dijo en el aeropuerto que le daban miedo las turbulencias y recordo que no la quiso creer. Entendia que hubiera gente que tenia miedo a volar, a los accidentes aereos, pero no a que el avion se moviera un poco. Se quedo observandola como un imbecil y no pudo evitar dibujar una sonrisa dulzona. Le sorprendio que ella reaccionara agarrandole la mano, como si fuera un hermano, un novio, un amigo. Sentia sus dedos apretando con una fuerza que a el solo le provocaba cosquillas y sonrio al sentirse afortunado de estar en su vida y de ser su amigo. Alberto, que iba escuchando musica al otro lado de Viktor, fue testigo de la escena y le dio un codazo. Viktor se giro y contuvo la respiracion, preparandose para oir cualquier burla por parte de su companero, pero Alberto se limito a sonreirle y guinarle un ojo, como si se alegrara por el. Viktor se lo agradecio con la mirada, pues si hubiera hecho algun comentario, por bajito que lo hubiera dicho, Julia podria haberlo oido. Y eso hubiera creado una situacion incomoda y vergonzosa para ambos, completamente innecesaria. Quiza por eso Alberto no dijo nada, simplemente se limito a preocuparse por ella. --Julia, ?estas bien? --Se quito los cascos un momento y se inclino hacia delante para que ella lo viera. Julia abrio los ojos, cayendo en la cuenta de que las turbulencias todavia no habian empezado, y se sintio avergonzada al ver que tanto Viktor como Alberto la estaban mirando. Observo su mano y solto la de Viktor de sopeton, mas avergonzada aun. --!Perdon! --se disculpo ella por ese exceso de confianza, apartando la mirada de el. --Tranquila, para eso estamos aqui. --Viktor le sonrio con calidez, transmitiendole tranquilidad. Julia busco timidamente sus ojos de nuevo y asintio de manera muy sutil. Alberto se recosto en el asiento y se volvio a poner los cascos. En ese momento sonaba The Pretender, de Foo Fighters. Mucho mas interesante que las conversaciones de Julia, que le resultaban de lo mas tediosas. Y, aunque le podian las ganas de saber que harian y que se dirian ellos dos, decidio hacer lo correcto por una vez y no entrometerse. --Es que... me asusto enseguida... ?Quien diria que soy una islena y que he tenido que volar un monton de veces porque el avion es la unica manera de salir de ahi? --Puedes ir en barco --se burlo Viktor entre risas. --Como si pudieras ir en barco a muchos sitios --mascullo, cruzandose de brazos. --Oye, ?que me estabas diciendo? --pregunto el con tono sereno, intentando calmarla. --No lo se, se me ha olvidado ya --declaro Julia, dubitativa y todavia alterada. --Creo que me estabas hablando del tiempo que llevabas sin volver --insistio Viktor sin dejar de mirarla a los ojos. Necesitaba darle conversacion para distraerla de las posibles turbulencias. --!Ah, si! Hace casi un ano que no vuelvo. Vine el ano pasado en Navidad, pero, salvo los momentos que estuve con mis amigas, solo podia pensar en regresar a Estocolmo. --Puso los ojos en blanco. Viktor se sentia incapaz de entenderla. El era muy familiar y tenia muy buena relacion con sus padres y su hermano, y solo estaba deseando tener vacaciones para ir a verlos. Cuando alguien le contaba que no se llevaba bien con su familia, suponia que eran rencillas tontas y quejas exageradas. --?Por que dices eso? --pregunto, arrugando ligeramente el ceno. --Porque yo no tengo la relacion que tienes tu con tu familia. Con mi hermana si, ella es genial, nos llevamos muy bien y no se mete, pero mis padres... --levanto la mirada buscando la manera de decirlo-- siguen creyendo que cometi el error de mi vida dejando a Carlos y yendome a --hizo gestos de comillas-- <>, como dicen ellos, a buscarme un trabajo que podria haber tenido alli mismo. Siempre la misma historia. Cada vez que hablo con ellos acaban la conversacion igual. <> --repitio en tono de burla aquellas palabras que estaba tan harta de oir. --Suecia no esta en la otra parte del mundo --anadio Viktor como si fuera lo mas obvio del mundo. --Lo se. Para ellos todo lo que este lejos es la otra parte del mundo. Lo cual tiene sus ventajas, porque asi estoy lo suficientemente alejada como para que no vengan. --Julia cruzo los brazos de manera orgullosa. No le gustaba hablar de sus padres porque nunca tenia nada bueno que decir. --Pero volviste en Navidad --insistio el buscando una explicacion logica. --Ya, pero hacia poco que me habia ido y pensaba que seria normal que pensaran asi, que necesitaban tiempo y que ya se les pasaria. Ademas, me daban vacaciones y quedarme en Estocolmo, en Navidad, yo sola..., pues no me hacia mucha gracia. Asi que vine, vi a mi hermana y a mis amigas, descanse del mal tiempo, disfrute mis horas de sol y volvi a Estocolmo. Pero siguen igual, ?sabes? Igual. No se alegran de que este feliz, de que haya conocido a otro chico maravilloso..., nada. Asi que este ano la Navidad la pasare en Suecia con Marcus. Viktor no pudo evitar sentir una punzada al oir la manera en la que hablaba de Marcus. ?Chico maravilloso? A el no se lo parecia. Y, como venia siendo habitual, empezo a preguntarse si eran los celos los que le hacian pensar asi. --Hablas como si les cayera mejor ese tal Carlos que su propia hija. --Si, ?verdad? ?Por que les cae tan bien? ?Porque es abogado? ?Porque tiene su propio piso y estabilidad economica para los proximos cincuenta anos, como minimo? ?Eso es mas importante que yo? Viktor trataba de controlar la presion de su mandibula para aparentar indiferencia. Ese Carlos tenia pinta de ser otro pijo, y se preguntaba por que ella siempre acababa con esa clase de chicos siendo tan natural y sencilla. --Oye y... ?que paso con el? Con Carlos..., ?que paso? --Viktor titubeo un poco al preguntar. --?A que te refieres? ?A por que rompimos? --dijo ella frotandose las manos en el pantalon. Una turbulencia agito la aeronave y provoco una pequena sacudida en los asientos. Julia cerro los parpados, elevo la barbilla y todo su cuerpo se tenso al instante durante unos pocos segundos, hasta que noto que el avion dejo de moverse. En cuanto abrio los ojos, se encontro la mirada apreciativa de Viktor y sintio la caricia de sus dedos cuando tomaron su mano en un gesto casi sedante. --Tranquila. Estoy aqui. Me estabas contando que paso con Carlos. --Pues... --Julia titubeo y solto su mano de golpe para poder gesticular--. Pues que se fue rompiendo poco a poco. Llegaron la comodidad, la monotonia, las peleas tontas, el malestar... No fue culpa de uno u otro, sino de los dos. El llegaba tarde del trabajo y yo me quedaba dormida esperando; luego, el dia que podia y queria salir a algun lado, yo habia quedado con mis amigas y... parecia que no nos importara mucho, ?no? Era como..., bueno, que no llego de repente, fue un tiempo de estar pasandolo mal y ya me canse. Y, como no veia posible trabajar de lo mio, me informe de los programas de au pair, me subi en un avion y aterrice en Estocolmo unas semanas mas tarde. Eso a mis padres no les gusto, porque ya me habia independizado, me habian --volvio a hacer gestos de comillas-- <> y yo de un dia para otro me fui sin decir nada. --?No le dijiste nada a nadie? --pregunto el, completamente asombrado. --Se lo conte a mi hermana unos dias antes de irme y a Carlos le deje una nota. Mi hermana flipo, pero me prometio no decir nada a nuestros padres hasta que me hubiera marchado. Fue la mejor decision que tome en mi vida. Sinceramente, no se que seria de mi si siguiera viviendo alli. Me fui y mira... !me voy a casar! --Julia sonrio ampliamente, rezumando felicidad en cada milimetro de su rostro. --?Y tu dices que eres miedosa? !Hay que ser muy valiente para hacer eso! --Creo que si me lo hubiera pensado un poco no lo habria hecho. Pero... la verdad es que no habria aguantado mucho mas tiempo. Viktor y Julia siguieron conversando durante el resto del vuelo. Ella le explico lo maravillosa que era la isla donde nacio, todos los sitios a los que queria llevarlos; le hablo de sus amigas, de su infancia y de cualquier cosa que se le viniera a la mente. Como era de esperar, hubo turbulencias durante todo el trayecto, pero Viktor le estuvo dando conversacion para distraerla y que no pensara en ello. En el momento de aterrizar, Julia le agarro la mano a Viktor. No sabia si iba a ser una maniobra suave o violenta y necesitaba tranquilizarse. Cerro los ojos y empezo a respirar fuerte, como si estuviera llenando una bolsa de aire. Viktor la observo. Su mirada viajo por un mechon del largo y castano cabello de Julia, que le caia por encima del hombro. Siguio su camino por el brazo, hasta la mano. Llevaba las unas pintadas de color cereza y el anillo que le regalo Marcus. Sabia perfectamente que el jamas podria pagar un anillo asi y apreto su mandibula al recordar el momento en que Julia se lo conto. Viktor la habia ido a buscar para llevarla a su clase de baile. Abrio la puerta para que Julia entrara en el coche, pero ella no se movio. Se quedo alli de pie, dando saltos de alegria, con una de esas sonrisas imposibles de borrar. --!Mira! --Levanto la mano izquierda, donde lucia un brillantisimo anillo de compromiso en el dedo anular--. !Me caso! --?En serio? --pregunto el con una sonrisa forzada, aunque perfectamente disimulada. --!Siiiiii! !Todavia no me lo creo! No me lo esperaba para nada. --!Enhorabuena! --La abrazo cordialmente, llenando sus fosas nasales del dulce perfume que ella usaba, Classique, de Jean Paul Gaultier. La abrazo por educacion, pero la verdad era que asi le parecia mas facil disimular su desilusion

  • Ex luna de miel de Nina Klein

    https://gigalibros.com/ex-luna-de-miel.html

    Mi matrimonio habia durado exactamente cuatro dias. Bueno, cinco, si contaba el dia de la boda.
    Seguramente haya batido algun record.
    George, mi marido, me habia abandonado aquella misma manana para irse con una mujer que habia conocido durante nuestra luna de miel.
    Juro que no me lo estoy inventando. Parece increible, pero alli estaba, en un resort de cinco estrellas en Aruba, con once dias de luna de miel por delante. Sola.
    Rodeada de parejitas felices por todas partes.
    Asi que decidi emborracharme. ?Que otra maldita cosa podia hacer?

  • Para siempre es un comienzo de Patricia Morenz

    https://gigalibros.com/para-siempre-es-un-comienzo.html

  • Un amor inolvidable de Noelia Jimenez Sanguesa

    https://gigalibros.com/un-amor-inolvidable.html

    Por fin ha llegado el momento de irnos de vacaciones, llevo nueve meses esperando este dia y no puedo estar mas emocionada. Este ultimo ano en la Universidad ha sido realmente complicado y, aunque ya he cumplido una de mis metas, me ha costado sudor y lagrimas. Sobre todo lagrimas. Realmente llegue a pensar que no superaria los ultimos examenes y tendria que rendirme por primera vez en mi vida. Cuando decidi entrar en la carrera de criminologia, no pense que todo seria tan dificil y rebuscado. ?Y que iba a hacer? ?Dejar la carrera en el primer semestre y buscar otras opciones? Al fin y al cabo, es lo que siempre habia querido hacer. Asi que ahora, cuando por fin he terminado y puedo decir que soy licenciada en criminologia, voy a pasarme el verano tumbada a la bartola en una hamaca de la playa de Aiguablava, en Begur. Al terminar de hacer la maleta, recojo todas mis cosas. Pasar dos meses en la casa que mis padres tienen en ese precioso pueblo requiere que todo mi armario, a excepcion de la ropa de invierno, me acompane. Corro hacia la entrada realmente emocionada, sonando con los dos meses de relax que me esperan, pero el nerviosismo de mi madre me hace saber que algo esta tramando y se que me va a influir directamente. Ella es asi, hace sus planes y los demas tenemos que adaptarnos a ellos nos guste o no. --?Que has hecho esta vez? --pregunto mientras dejo que mi padre coja mi gran maleta y mi bolso de viaje para terminar de cargarlo todo y asi poder cerrar el maletero de una vez por todas. Se le ve tan ansioso como a mi por emprender el viaje que nos llevara a nuestro paradisiaco destino. --La tia Amanda me ha comentado que necesita camareras para su catering ya que se va a celebrar una gran boda con mas de mil asistentes uno de estos fines de semana. Tu prima se ha ofrecido a ayudarla y me ha preguntado si podrias echarle una mano tu tambien --dice mientras retuerce entre sus manos un panuelo. La miro molesta. Sabe cuanto odio estar rodeada de demasiada gente y que me cambien los planes que he ideado con mucha paciencia y ganas--. No sabia como decirle que no y... --?Es solo un fin de semana? --pregunto interrumpiendola, lo ultimo que quiero es que se sienta mal por ofrecerse a ayudar a su hermana. --Si, solo sera para los preparativos de la boda y la celebracion --dice mientras una gran sonrisa ilumina su rostro. Siempre intenta que me integre un poco mas. El problema es que no creo que me cueste integrarme, sencillamente no quiero hacerlo. Tengo mis amigos y, con ellos, tengo mas que suficiente. Nunca me ha gustado ser el centro de atencion y no se muy bien por que, pero siempre lo acabo siendo. Ademas, tenia planeado pasarme el dia entero en la playa con un libro en una mano y un mojito en la otra. Menos mal que sera solo un fin de semana. --Esta bien --contesto mientras aprieto su mano con carino, demostrandole que no me importa que me haya robado un par de dias de mi tan ansiado verano. --Gracias carino --dice y se gira hacia el interior del piso, cogiendo aire--. !Veronica! --grita a todo pulmon, hubiese sido conveniente haberme alejado un poco de ella--. Sal ya de una maldita vez y subete al coche. Veronica es mi hermana. Tiene dieciseis anos y esta en la edad del pavo real. Porque si, ella supera con creces a un pavo normal y corriente. Ha terminado la ESO y, aunque hemos tenido que pelear con ella y estar detras todo el dia para que estudiase e hiciese las tareas a tiempo, lo ha hecho con muy buenas notas. Es dificil aguantarla con la diferencia de edad, aunque no sea mucha puesto que yo tengo veintidos. A pesar de que sea la persona mas pesada del mundo y de que se pase el dia enganchada al movil hablando con su novio, si, tiene novio y aqui una servidora sigue a dos velas, la quiero con locura y no se que haria sin ella. Es verdad eso que dicen de que del amor al odio hay un paso. Nosotras nos pasamos el dia cruzando de un lado al otro. --!Ya voy hija mia!, hay que ver lo pesada que te pones cuando quieres --dice Vero sin levantar la vista del movil. --Cualquier dia, tendremos el gran privilegio de ver como te rompes los dientes contra una farola --dice mi madre mientras nos empuja levemente para que salgamos de casa y asi poder cerrar. Con una sonora carcajada por mi parte y el grito ahogado de mi hermana, las tres nos dirigimos al coche donde mi padre ya se ha preparado para conducir. Nos mira a las tres mientras subimos y niega levemente con la cabeza antes de poner el coche en marcha, no se como puede aguantarnos. Si yo fuese el, mas de una vez hubiese corrido hacia la libertad. El camino se hace ameno con las bromas de mi madre contra mi hermana, le encanta picarla y a mi que lo haga. Puedo reirme a su costa sin ser la responsable, por lo tanto, nunca salgo mal parada. El viaje no dura mas de hora y media, puesto que Begur no esta nada lejos de Barcelona. Esa es una de las razones por las que me gusta tanto pasar alli los veranos, no suelo tener problemas para ver a mis amistades mas cercanas y no me paso el tiempo metida en casa sin hacer nada. Quizas es algo contradictorio, pero no es lo mismo no querer llamar la atencion que no querer salir de casa. Soy un poco rara, pero tengo mis limites y no estoy preparada para rebasarlos. --Carino --me dice mi madre cuando hemos dejado todas las bolsas en el comedor de la casa--. ?Te importa acercarte a ver a tu tia Amanda? Asi podra explicarte todo el tema de la boda. --Claro, no hay problema mami --digo mientras le doy un beso en la mejilla, dispuesta a irme. Justo antes de salir por la puerta, me doy cuenta de la sonrisa que asoma entre sus labios al oirme llamarla de esa manera. Nunca he dejado de hacerlo, pero supongo que ver como poco a poco me voy alejando de ella le hace estar algo triste. He enviado mi curriculum y mi expediente academico a uno de los mejores centros de criminologia del pais y se encuentra en Madrid. Espero y deseo con todas mis fuerzas que me acepten y poder empezar a vivir la vida por la que tanto he peleado. Aunque me duela alejarme de mi madre, considero que es algo que tengo que hacer para seguir adelante. Por suerte, aun tiene a mi hermana para reir a su costa. En menos de diez minutos me encuentro frente a la puerta de mi tia ya que nuestras casas no estan muy alejadas. Al abrir, se echa sobre mis brazos y me llena la cara de besos. Supongo que un ano sin haber visto a su sobrina, le da derecho a ello. Desde que tengo uso de razon, mi tia Amanda ha sido como una segunda madre para mi. Aunque Carol, mi prima, es un ano mayor que yo, siempre hemos estado muy unidas y la mayor parte de los veranos, a excepcion de los que se iban fuera de vacaciones, los pasaba junto a ellas. Por detras, asoma Carol que viene a saludarme tambien con efusividad.

  • Los senores del Norte (III) de Bernard Cornwell

    https://gigalibros.com/los-senores-del-norte-iii.html

    “Los senores del norte” es una excelente recreacion de los tiempos oscuros en los que Inglaterra empezaba a tomar forma, del turbulento choque entre la cultura anglo-sajona y la danesa, entre el cristianismo y el paganismo, entre dos concepciones del mundo irreconciliables, en el que a Alfredo el Grande le correspondio un papel protagonista.
    El joven Uhtred, despues de haber ayudado a Alfredo el Grande a convertir Wessex en un reino sajon independiente, regresa al norte con el proposito de encontrar a su hermanastra. Pero por el camino hallara unas tierras envueltas en el caos y la guerra, y a un Guthred que ha pasado de ser un esclavo a pretendiente al trono.
    La fuerza narrativa, el rigor historico y la plasticidad de la recreacion de ambientes que caracterizan la obra de Cornwell vuelven a atrapar al lector desde las primeras paginas para proponerle un viaje a uno de los momentos mas turbulentos, desconocidos y emocionantes de la historia.
    Bernard Cornwell no es solo el autor de novela historica de mas exito en nuestros dias, sino uno de los escritores vivos de mayores ventas en todo el mundo. Escogido en el ano 2000 como uno de los 25 autores del siglo XX preferidos por los lectores britanicos, en la actualidad sus novelas han sido traducidas a veintitres lenguas y adaptadas al teatro y a la television. Se han calculado las ventas de Cornwell en todo el mundo en mas de 30 millones de ejemplares.
    “Los senores del Norte” lleva un paso mas alla el planteamiento de la serie, dedicada sobre todo a la presentacion de escenarios, personajes y conflictos politicos, y en esta novela la capacidad para narrar acciones belicas y describir sus consecuencias, uno de los signos de identidad de Cornwell, brilla a mayor altura, en unos escenarios devastados por la guerra perfectamente recreados.
    Disponible tambien en tapa dura en nuestra coleccion de Narrativas historicas.

  • El secreto de las golondrinas de Anonimo

    https://gigalibros.com/el-secreto-de-las-golondrinas.html

    Su mision: seducir a un hombre rico y con poder.

  • Lo que define a una llama de G. G. Velasco

    https://gigalibros.com/lo-que-define-a-una-llama.html

    Al tiempo que la isla de Noralbia se prepara para votar en el referendum del que depende su futuro politico, Miranda Cadalso, inspectora de policia marcada por la violencia domestica y por la desaparicion en extranas circunstancias de su hija, afronta el caso mas dificil de su carrera tras el hallazgo de un cadaver parcialmente calcinado en el casco historico de Puerto Corvino, la capital del pais.

  • Mister 7 (Titania amour), Nadia Noor de Nadia Noor

    https://gigalibros.com/mister-7-titania-amour-nadia-noor.html

    * Una novela que nace como un fanfic del famoso futbolista Cristiano Ronaldo.
    * Con un estilo agil y adictivo, Nadia Noor debuta en la romantica con una novela original que trata un tema muy de moda: la paternidad en solitario.
    * La tension entre los protagonistas y el carisma sexy de Cristian convierten esta historia en una novela llamada a despertar pasiones.

  • El lenguaje de las abejas (Grandes Novelas), Cristina Caboni de Cristina Caboni

    https://gigalibros.com/el-lenguaje-de-las-abejas-grandes-novelas-cristina-caboni.html

  • La esposa de Jamie West 2 de B Blair

    https://gigalibros.com/la-esposa-de-jamie-west-2.html

    Quedando solo cinco mujeres en la lucha por el corazon de Jamie West, Ariel decide participar en la competencia para conquistarla.

  • Una lista de deseos y treinta noches de invierno (Jacaranda 2) de Yanira Garcia

    https://gigalibros.com/una-lista-de-deseos-y-treinta-noches-de-invierno-jacaranda-2.html

    Puede que, de nuevo, no sea necesaria la carta de presentacion. No la mia, porque ya me conoceis, pero a el no. El, Ethan, el chico de la armadura de cristal, el chico serio que no sonrie con cualquier broma, el chico de la mandibula recta y las perfectas patillas, el chico frio, tan frio como el hielo. El chico que teme que le hagan dano, humano, sensato y parco en palabras. El chico de los secretos inconfesables y la magia sin trucos. El. Una vez mas, el. Lo que estoy segura de que si que debo contaros es que he regresado a Jacaranda de nuevo y no lo he hecho sola, tampoco en verano. La estacion ha cambiado, la temperatura tambien y las gotas de sudor han sido sustituidas por el vaho que se escapa cuando confiesas tus deseos, cuando escribes una lista que no esperabas escribir y cuando un mes cambia por completo el resto de tu existencia. Ethan llego a mi vida como el invierno llega tras el otono. Ponte unas botas de montana, una bufanda y un gorro de lana y deja que lo que hay dentro de estas paginas te cuente mi invierno, el invierno que cambio nuestras vidas.

  • Vida de este capitan de Alonso De Contreras

    https://gigalibros.com/vida-de-este-capitan.html

    Los mejores libros jamas escritos.

  • Sin ver atras de Carolina Mendez

    https://gigalibros.com/sin-ver-atras.html

    Kara tiene un pasado del que no se siente muy orgullosa. Hacer sentir miserables a las personas es algo de lo que esta profundamente arrepentida, pero la vida tiene maneras de hacerte pagar todo lo que haces, y Kara no es la excepcion a esta regla.

  • Cinco Panes De Cebada de Lucia Baquedano Azcona

    https://gigalibros.com/cinco-panes-de-cebada.html

    Muriel, una joven de veintiun anos, se dirige a su primer puesto como maestra, en un pueblo del Pirineo navarro. Pero adaptarse es de trabajo dificil porque la cultura de la gente de este pueblo es diferente de la suya. A Muriel le parece que el pueblo tiene una mentalidad muy cerrada. Muriel aspiraba a mas… Sin embargo, el carino de la gente y le hara cambiar de opinion y aparecera un nuevo objetivo que cumplir en su vida.

  • Las uvis de la ira de Enfermera Saturada

    https://gigalibros.com/las-uvis-de-la-ira.html

  • Persigueme de Tessa Bailey

    https://gigalibros.com/persigueme.html

    Bailey nos muestra una heroina apasionada e independiente que nos hara vibrar y emocionar a partes iguales. Una historia que nos sorprende por su dosis de humor y sus escenas ardientes. Emociones honestas y verdadera pasion.- Publishers Weekly. Roxy Cumberland se traslada a Nueva York con la intencion de lograr su sueno de ser actriz, pero nada es tan facil como parece Para colmo su cuenta bancaria disminuye dia a dia y ya no consigue ni llegar a fin de mes. Asi que ante su desesperacion por conseguir algo de dinero, decide apuntarse a un trabajo que consiste en cantar telegramas -la gente envia telegramas originales a alguien a modo de actuacion-. Su primer cliente es Louis McNally, un joven abogado al que su ligue de una noche le envia un telegrama cantado para reirse de su masculinidad. Por si el tema de la cancion no fuera suficientemente humillante, Roxy tiene que ir vestida de conejita, ?de verdad le esta pasando esto a ella? A pesar de una situacion tan comica, bromean y la tension sexual y la complicidad entre ellos es evidente Louis queda impresionado del audaz ingenio y la sensual voz de Roxy, y mas cuando ella toma la iniciativa para besarlo y dejarlo sin aliento. Desde ese momento, Louis estara perdido, y hara todo lo posible por saber mas de Roxy, simplemente la desea Pero Roxy es una mujer independiente, no esta dispuesta a tener una relacion con un hombre acostumbrado a conseguir todo lo que quiere ?Sera Roxy la excepcion? ?O podria ser Louis el hombre que necesita en su vida?

  • Decir no no basta de Naomi Klein

    https://gigalibros.com/decir-no-no-basta.html

  • La sabiduria de los psicopatas de Kevin Dutton

    https://gigalibros.com/la-sabiduria-de-los-psicopatas.html

    Y es que cuando hablamos de psicopatas nos vienen a la cabeza personajes, reales o ficticios, como Hannibal Lecter, el carnicero de Milwaukee o Dexter. Y, sin embargo, en este libro no solo se habla de ellos. En el salen otros nombres como los de Neil Armstrong, Bill Clinton, Vincent Van Gogh, John Stuart Mill o J. F. Kennedy.

  • Las edades de Lulu de Almudena Grandes

    https://gigalibros.com/las-edades-de-lulu.html

    Sumida todavia en los temores de una infancia carente de afecto, Lulu, una nina de quince anos, sucumbe a la atraccion que ejerce sobre ella un joven, amigo de la familia, a quien hasta entonces ella habia deseado vagamente. Despues de esta primera experiencia, Lulu, nina eterna, alimenta durante anos, en solitario, el fantasma de aquel hombre que acaba por aceptar el desafio de prolongar indefinidamente, en su peculiar relacion sexual, el juego amoroso de la ninez. Crea para ella un mundo aparte, un universo privado donde el tiempo pierde valor. Pero el sortilegio arriesgado de vivir fuera de la realidad se rompe bruscamente un dia, cuando Lulu, ya con treinta anos, se precipita, indefensa pero febrilmente, en el infierno de los deseos peligrosos.

  • !Matame, si puedes! de Sandra Estevez Calvar

    https://gigalibros.com/matame-si-puedes.html

    La jefa de policia Keira Morrison, una mujer con gran prestigio profesional, es emplazada para investigar la cronologia de un doble asesinato sin resolver en la ciudad londinense de Dartford. Los hechos habian sucedido diez anos atras. El vehiculo del matrimonio Evans salio de la carretera y habian fallecido los dos. Todo apuntaba a que habia sido un accidente fortuito pero el investigador Harry Atwater no lo creia asi, y cuando estaba dispuesto a desenmascarar a todos los implicados, con todo lo que eso conllevaba, sufrio un accidente muy parecido al de la pareja y el juez dio la orden de archivar el caso. De esa nueva y trepidante investigacion emergera un episodio del pasado en el que varias personas en busqueda de la verdad, se veran envueltas en una trama de celos y rabia.
    Un thriller que te hara pasar por distintos estados de animo.

  • La Indiana de Maria Teresa Alvarez

    https://gigalibros.com/la-indiana.html

    Maria Teresa Alvarez referente en la novela historica en Espana

    Una oscura noche de 1877, en el pueblo de Candas, Asturias, los ninos Marina y Silverio pierden a sus respectivos padres en la mar. El se pondra a faenar como pescador para mantener a su madre y sus hermanos. Ella, inteligente y despierta, continuara en la escuela y ayudara a su amigo a seguir educandose. Pero Marina tambien tendra que abandonar pronto los libros, su gran pasion, para trabajar en una fabrica de conservas.

  • Eres mi condena (Trilogia Sin mentiras 1), Monika Hoff, Norah Carter, Patrick Norton de Monica Hoff , Norah Carter , Patrick Norton

    https://gigalibros.com/eres-mi-condena-trilogia-sin-mentiras-1-monika-hoff-norah-carter-patrick-norton.html

  • IMPOSSIBLE LOVE de Priscila Serrano

    https://gigalibros.com/impossible-love.html

    El rumbo de la vida de Alexa cambio justo el dia en el que su madre decidio casarse con otro hombre. Nunca penso que aquel suceso, iba a afectarle como lo hizo y con tanta intensidad. Tanto como para no volver a ser la misma. Entonces llego el, un chico se cruzo en su camino en el momento mas oportuno, para salvarla.
    Cameron nunca creyo que pasar por su lado, siendo el el que no creia en el amor, caeria irremediablemente enamorado de ella en cuanto la vio. Que ella le haria sentir demasiado en tan poco tiempo.
    ?Que pasara cuando se den cuenta de que tienen en comun mucho mas de lo que creen?
    Lo que no se espera ninguno de los dos es que su pasado, esta ligado a sus vidas.

  • Mientras llueva de Teresa Viejo

    https://gigalibros.com/mientras-llueva.html

    <>: esa es la frase que retumba desde la cabeza al corazon de Alma Gamboa Monteserin, una mujer en fuga a la que nadie persigue. Es el invierno de 1946 y Alma viaja a la casa de sus antepasados donde, en vez de la paz que tanto necesita, le espera, ineludible, una revelacion trascendental.

  • Iron flowers de Tracy Banghart

    https://gigalibros.com/iron-flowers.html

    En un mundo de hombres en el que las mujeres no tienen ningun derecho, cada provincia del reino debe presentar a sus jovenes mas hermosas para que el principe heredero pueda elegir a su pareja. Asi es como dos hermanas, Nomi y Serina, terminan confinadas en dos habitats contrapuestos: la hermosa, fragil y debil en la inhospita prision de Mont Ruin y la chica resuelta, practica y luchadora entre las sedas y fiestas de palacio. Dos historias de superacion, supervivencia y amor entre hermanas… Porque, cuando la solucion no llega, solo queda cambiar las reglas: !Que empiece la revolucion!

  • Dios salve a Texas de Lawrence Wright

    https://gigalibros.com/dios-salve-a-texas.html

    La exploracion de uno de los estados mas controvertidos de Norteamerica desde la penetrante mirada y el humor de un nativo.

  • Amor irresistible (Love Me 3) de Elle Kennedy

    https://gigalibros.com/amor-irresistible-love-me-3.html

    Esta fiesta es un rollo. Deberia haberme quedado en casa, pero estos dias mi casa parece el set de un programa de las Kardashian. Gracias a mis tres companeras de piso, esta saturada de estrogenos. Por supuesto, tambien hay un monton de estrogenos aqui, en la residencia de las Zeta Beta Ni, pero son de esos a los que me puedo sentir atraido. Todas mis companeras tienen pareja, asi que no se me permite tocarlas. <>. Cierto. A causa mi autoimpuesta abstinencia, no tengo permitido tocar a nadie, y punto. Eso me hace plantearme la siguiente pregunta: si un arbol cae en el bosque y no te puedes acostar con nadie en una fiesta celebrada en la residencia de una sororidad, ?todavia se considera una fiesta? Rodeo con los dedos el vaso de plastico rojo que mi amigo y companero de equipo, Matt Anderson, me acaba de plantar en la mano. --Gracias --musito. Doy un trago y hago una mueca. Esta cerveza esta aguada, aunque puede que sea algo positivo. Un buen incentivo para no consumir mas de un vaso. El entrenamiento de manana no empieza hasta las diez, pero habia planeado llegar un par de horas antes a la pista de hielo para trabajar mis canonazos. Tras el desastroso final de la temporada pasada, prometi que haria del hockey mi maxima prioridad. El nuevo semestre empieza el lunes, nuestro primer partido es la semana que viene, y estoy motivado. Briar no llego al campeonato nacional el ano pasado, y fue por mi culpa. Esta temporada sera diferente. --?Que te parece esa chica? --Matt senala discretamente con la cabeza a una chica mona que lleva unos shorts y una camisola rosa palido. No lleva sujetador y se le marca el contorno de los pezones a traves de la tela sedosa. Se me hace la boca agua. ?He mencionado que es una fiesta de pijamas? Yip yip, hace casi cinco meses que no tengo sexo y estoy inaugurando mi tercer ano de carrera en una fiesta donde todas las mujeres apenas llevan ropa. Nunca me he jactado de ser muy listo. --Esta muy buena --le digo a Matt--. Venga, ve a ligartela. --Lo haria, pero... --Suelta un grunido de protesta--. Te esta mirando a ti. --Bueno, estoy fuera del mercado --contesto, y me encojo de hombros--. Eres libre de acercarte y decirselo. --Le doy un toquecito amistoso en el brazo--. Estoy seguro de que te considerara un premio de consolacion adecuado. --!Ja! Que te den. No soy el segundo plato de nadie. Si no se muere de ganas por enrollarse conmigo, prefiero encontrar a alguien que si. No tengo necesidad de competir por la atencion de una mujer. Este es uno de los motivos por los que Matt me cae bien: es competitivo sobre el hielo, pero fuera de la pista es bastante decente. Llevo jugando a hockey toda mi vida, y he tenido companeros que no se lo pensarian dos veces a la hora de robarle la chica a un amigo; o incluso peor, de enrollarse con ella a sus espaldas. He jugado con chicos que tratan a las fans del hockey como si fueran de usar y tirar, y que han compartido a chicas como si fueran caramelos. Chicos con ningun respeto y unos prejuicios terribles. Pero, en Briar, tengo la suerte de jugar con chicos decentes. Por supuesto, no hay ninguna plantilla que se libre de tener un capullo o dos, pero la mayor parte de mis companeros son buena gente. --Si, no creo que te resulte muy complicado --coincido--. La chica morena que esta a las dos en punto ya te esta haciendo de todo con la mirada. Abre mucho los ojos marrones cuando se fija en la chica con curvas que viste con un camison corto blanco. Ella se sonroja en cuanto sus miradas se cruzan, sonrie con timidez y alza el vaso en un brindis silencioso. Matt me abandona sin mirar atras, aunque no me extrana. El comedor esta lleno de chicas en lenceria y chicos en batines a lo Hugh Hefner. Yo no sabia que era un evento tematico, asi que llevo bermudas y una camiseta de tirantes, y voy bien. La mayoria de los tios que me rodean estan ridiculos con los atuendos que llevan. --?Te lo pasas bien? --La musica retumba, pero no esta lo bastante alta como para que no oiga a la chica a la que Matt miraba en un principio. --Si. Ha venido mucha gente. --Me encojo de hombros--. El DJ es bastante bueno. Se acerca, furtiva. --Soy Gina. --Hunter. --Se quien eres. --La simpatia irrumpe en su voz--. Estuve en el partido de la liga contra Harvard, cuando aquel capullo te rompio la muneca. Todavia no me creo que lo hiciera. Yo si. Me tire a su novia. Pero no se lo cuento. De todos modos, tampoco es que lo hiciera a proposito. No tenia ni idea de quien era esa chica cuando me acoste con ella. Aunque, al parecer, ella si que sabia quien era yo. Queria vengarse de su novio, pero yo no me entere hasta el momento en que este se lanzo sobre mi en medio del segundo partido mas importante de la temporada, el que determina quien va a la Frozen Four, el torneo mas importante de la temporada universitaria. La muneca rota fue el resultado de un placaje contra el hielo. El capullo de Harvard no pretendia rompermela, pero ocurrio, y de repente yo estaba fuera del partido. Igual que nuestro capitan, Nate Rhodes, al que echaron por intentar defenderme. Regreso de golpe al presente. --Fue una forma horrible de terminar la temporada --comento. Ella encuentra la manera de posar la mano en mi biceps derecho. Ultimamente, mis brazos estan mucho mas grandes, aunque este mal que yo lo diga. Cuando no practicas sexo, hacer ejercicio es imperativo para no perder la cabeza. --Lo siento --ronronea Gina. Desliza los dedos con suavidad por encima de mi piel descubierta, lo que me provoca unos pinchazos de calor por todo el brazo. Casi gimo en voz alta. Dios santo, estoy tan cachondo que, con solo una caricia en el brazo, una mujer me ha provocado una semiereccion. Se que deberia apartarle la mano, pero hace mucho tiempo que nadie me toca de forma no platonica. En casa, mis companeras de piso me toquetean a todas horas, pero ninguna de forma sexual. A Brenna le gusta darme cachetes o pellizcarme el trasero para burlarse de mi cada vez que pasa a mi lado por el pasillo, pero no me desea. Solo es una cabrona. --?Quieres que vayamos a un sitio mas tranquilo a hablar o algo? --sugiere Gina. He vivido el tiempo suficiente en este planeta como para ser capaz de descifrar el significado oculto de <> en el idioma de las chicas. 1) No vamos a hablar demasiado. 2) Vamos a pasar mucho tiempo haciendo <>. Gina no podria habermelo dejado mas claro, a menos que hubiera levantado un cartel que dijera: !ACUESTATE CONMIGO! Incluso se pasa la lengua por los labios cuando articula la pregunta. Se que deberia negarme, pero la idea de volver a casa ahora mismo y masturbarme en mi habitacion mientras mis companeras de piso se hacen una maraton de temporadas antiguas de The Hills no me atrae demasiado. Asi que anado: --Claro. Y sigo a Gina fuera de la habitacion. * * * Terminamos en un cuchitril en el que hay un sofa, un par de estanterias con libros y un escritorio contra la pared del fondo bajo una ventana. Esta sorprendentemente vacio. Los dioses de la fiesta se han apiadado de mi celibato y nos han proporcionado el tipo de privacidad peligrosa que deberia evitar a toda costa. En lugar de eso, me coloco en el sofa y dejo que Gina me bese el cuello. Su camisola de saten me roza el brazo y la sensacion de placer que me produce el mas minimo roce es casi pornografica. Todo me pone cachondo estos dias. El otro dia se me puso dura mientras veia un anuncio de Tupperware en YouTube porque la MILF que aparecia en el estaba pelando un platano. Entonces lo corto en pedacitos y puso los trozos de platano en un recipiente de plastico, y ni siquiera ese horrible simbolismo me disuadio de tocarme mientras pensaba en la Mujer del Platano. En un par de meses, empezare a penetrar las tartas de manzana que hace cada domingo mi companera Rupi. --Hueles muy bien. --Gina inhala profundamente, suelta el aire y su aliento calido me hace cosquillas en el cuello. Cierra la boca y, como una herradura ardiente, la posa en mi piel de nuevo. Me gusta tenerla sobre mi regazo. Sus muslos torneados atrapan los mios y siento su cuerpo caliente y voluptuoso cubierto por el saten. Tengo que parar esto. Me hice una promesa a mi mismo y al equipo, aunque nadie me lo haya pedido y todos piensen que estoy loco por insistir en no tener sexo. Matt declaro directamente que no creia que dejar de lado mis impulsos sexuales fuera a afectar en lo mas minimo a nuestros partidos de hockey. Pero yo creo que si, y para mi es una cuestion de principios. Los chicos me votaron para que fuera su capitan. Me tomo en serio la responsabilidad y, por experiencia personal, se que tiendo a dejar que las mujeres me enreden la cabeza. El ano pasado, ir de flor en flor me costo una muneca rota. No lo repetire. --Gina, yo... Me interrumpe cuando presiona sus labios contra los mios. De pronto, nos estamos besando y la cabeza me da vueltas. Sabe a cerveza y a chicle. Y el pelo, que le cae sobre un hombro en una cortina espesa de rizos rojos, huele a manzanas. Mmm... Me la quiero comer. Nuestras lenguas bailan y el beso se vuelve mas profundo y apasionado. La cabeza todavia me da vueltas y la lujuria y el descontento libran una batalla en mi interior. He perdido la capacidad de pensar con claridad. La tengo tan dura que me duele, y Gina solo lo empeora cada vez que se restriega contra mi entrepierna. Treinta segundos mas, me digo. Treinta segundos mas y paro esto antes de que vaya mas lejos. --Te deseo tanto... --Vuelve a posar los labios en mi cuello, y entonces, joder, desliza la mano entre los dos. Me agarra el pene por encima de los calzoncillos y casi gimo de placer. Hacia una eternidad que una mano que no fuera la mia me tocaba. El placer es vergonzosamente intenso. --Gina, no. --Gimo, y necesito hacer un gran esfuerzo para apartarle la mano. Mi pene protesta y deja caer liquido preseminal por el interior de mis boxers. Ella se sonroja y se le ponen los ojos vidriosos. --?Por que no? --Estoy... Me estoy tomando un descanso de todo eso. --?De que? --Del sexo. --?Como? --Intento vivir sin... --?Sin que? --Parece tan confusa como yo abatido. --Sin sexo --aclaro, taciturno--. Quiero decir que no tendre sexo durante un tiempo. Frunce el ceno. --Pero... ?por que no? --Es una larga historia. --Hago una pausa--. Bueno, en realidad, no lo es. Este ano quiero concentrarme en el hockey, y el sexo es una inmensa distraccion. Eso es todo. Permanece en silencio durante un largo segundo. Entonces, me toca la mejilla y me acaricia la barba incipiente sobre la mandibula con el pulgar. Se pasa la lengua por los labios, y yo casi me corro en los pantalones. --Si te preocupa que quiera tener algo mas contigo, relajate. Solo busco un rollo de una noche. Tengo muchisimo trabajo este semestre y no tengo tiempo para relaciones. --No tiene nada que ver con las relaciones --trato de explicar--. Es el sexo en general. Una vez empiezo, no quiero parar. Me distraigo y... Vuelve a interrumpirme. --Vale, sin sexo. Te la como. Casi me atraganto con mi propia lengua. --Gina... --No te preocupes, me tocare mientras lo hago. Las mamadas me ponen muy cachonda. Esto es una tortura. Pura tortura. Lo juro, si el ejercito necesita ideas para romper a alguien, dadle a un chaval universitario que tenga una ereccion, echadle a una tia buena sobre el regazo y haced que ella le diga lo mucho que quiere tener sexo sin compromiso y que le ofrezca mamadas porque la ponen <>. --Lo siento --gruno. Entonces, logro realizar una hazana todavia mas dificil: la aparto de mi regazo y me levanto--. Mi estado mental no es el mas apropiado para... nada de esto. Ella se queda sentada y echa la cabeza hacia atras para mirarme. Tiene los ojos abiertos de incredulidad y una pizca de... lo que podria ser compasion. Por el amor de Dios. Ahora se apiada de mi por mi celibato. --Lo siento --repito--. Y para que lo sepas, eres la chica mas atractiva de esta fiesta y mi decision no tiene nada que ver contigo. Me hice una promesa en abril y quiero mantenerla. Gina se muerde el labio inferior y, para mi sorpresa, veo un destello de admiracion en su rostro. --No voy a mentir --dice--, estoy un poco impresionada. No hay muchos tios capaces de mantenerse firmes a esa decision cuando se topan con mi cuerpazo. --No hay muchos hombres tan estupidos como yo. Sonriente, se levanta de un salto. --Bueno, supongo que nos veremos por ahi, Hunter. Me gustaria decirte que te esperare, pero esta chica tiene sus necesidades, y es evidente que no van acordes a las tuyas. Se rie, sale poco a poco del cuchitril y yo observo como balancea su atractivo trasero a cada paso. Me paso ambas manos por el pelo y suelto un gemido ahogado contra las palmas. No se si deberia estar orgulloso de mi mismo o patearme el culo por el ridiculo camino que he tomado. En gran medida, me ha ayudado a concentrarme en el hockey. Saco toda mi frustracion sexual sobre el hielo. Soy mas fuerte y rapido de lo que era la temporada pasada, y casi me deshago de la desesperacion en cada uno de los lanzamientos a porteria que hago. Las balas dan en el objetivo, casi a modo de homenaje a mi pene doliente. Un reconocimiento de que su sacrificio debe ser honrado. Solo es hasta el final de la temporada, me aseguro a mi mismo. Siete meses mas, que sumaran un ano entero de celibato en cuanto cruce la linea de meta. Y entonces me recompensare a mi mismo con un verano lleno de sexo. Un verano de sexo. Un verano de sexo sucio, decadente e interminable. Por favor. Estoy muy cansado de mi propia mano. Y no estoy ayudando a la causa con estupideces como abrirme a la tentacion con preciosas chicas de sororidades. Por primera vez en mucho tiempo, me muero de ganas por que empiecen las clases. Con suerte, tendre tanto trabajo este semestre que me ahogare en el. Deberes, tiempo extra sobre la pista de hielo, entrenamientos y partidos: es todo en lo que me permito concentrarme. Y, por descontado, no mas fiestas de sororidades. Evitar la tentacion es la unica manera de centrarme en el juego y mantener la polla en los pantalones.

  • Testimonio mortal de Anna Bagstam

    https://gigalibros.com/testimonio-mortal.html

    Situado a orillas del mar Baltico, Lerviken es el idilico pueblo pesquero en el que Harriet Vesterberg solia pasar los veranos de su infancia. Decadas mas tarde, Harriet abandona su trabajo como investigadora civil en Estocolmo y una relacion tormentosa, y regresa a Lerviken para trabajar con la policia local y estar cerca de su padre enfermo. Menos de veinticuatro horas despues, el cuerpo de Laura Andersson aparece brutalmente apunalado y con los parpados abiertos, pegados con cinta adhesiva. Empieza asi una frenetica carrera contrarreloj para encontrar a un asesino imparable. Cuando empieza a investigar por su cuenta, Harriet vera su vida amenazada a la vez que la red de mentiras que envuelve el caso se hace cada vez mas densa. ?Puede el asesino ser alguiena quien ella conoce?

  • Las intrigas de la fama 2 de Mercedes Franco

    https://gigalibros.com/las-intrigas-de-la-fama-2.html

    Carolina comienza su nueva carrera con exito, ya que ha logrado captar la atencion de todos los medios y tambien de Armando Lugo.

  • Perdido en las olas de Javier Romero

    https://gigalibros.com/perdido-en-las-olas.html

    Tristemente, la historia de Pau es muy comun en nuestros dias. Ninos que, un dia si y otro tambien, son el dano colateral de una violencia de genero grabada a fuego en nuestra sociedad y que se ha convertido en el pan nuestro de cada dia. Ninos que no creen en la fantasia y que ven como su infancia se trunca por un amor enfermizo y que, en la mayoria de las ocasiones, ni tan siquiera pueden disfrutar.

  • Hermosa Locura (Una amor para siempre 1) de Isabel Acuna

    https://gigalibros.com/hermosa-locura-una-amor-para-siempre-1.html

    Julia Lowell y Nick de la Cruz, jovenes y exitosos estudiantes de dos de las principales universidades de California, tenian un mundo de suenos por cumplir. Cuando el amor llega a sus vidas los sumerge en un apasionado romance. Un terrible malentendido se les cruza en el camino y los llevara por rumbos distintos. Siete anos despues, vuelven a encontrarse. Julia se desempena como jefe de recursos humanos de una importante empresa y Nick es un incipiente empresario en el mundo de la hoteleria. A pesar del tiempo transcurrido, la atraccion flota entre ellos una vez mas. Las cosas no son como antes, ella esta comprometida para casarse. Nick, hombre apasionado y acostumbrado a salirse con la suya, esta dispuesto a recuperar a Julia a cualquier precio. Forzados a compartir tiempo por asuntos laborales, tendran que enfrentar el pasado y el presente. A pesar de que ninguno de los dos ha olvidado su historia de amor, las dudas y el resentimiento no les haran las cosas faciles. ?Les brindara el amor una nueva oportunidad? De la autora de De vuelta a tu amor y Entre el valle y las sombras, llega esta nueva historia de pasiones, contradicciones, erotismo y mucho amor.

  • Las aventuras de Ulises de Giovanni Nucci

    https://gigalibros.com/las-aventuras-de-ulises.html

    ?Como se puede conseguir que todos los ninos conozcan un gran clasico como la Odisea? Giovanni Nucci lo logra de forma magistral. Es esta la historia de Ulises, un personaje conocidisimo. Es la historia del amor de Ulises y Penelope, del rapto de Helena, de la guerra de Troya, del famoso caballo, de Polifemo, de la maga Circe, de Nausicaa, de la larga espera de Penelope, que tejia y tejia, del perro Argo, el unico que reconoce a Ulises, su amo, de la competicion entre los pretendientes de Penelope, y de como, despues de tan largo viaje, Ulises pudo por fin descansar en las costas de Itaca, con la mirada perdida en el mar color vino

  • Oliver (Australia 3) de Emma Madden

    https://gigalibros.com/oliver-australia-3.html

    -!Vamos, Sean!, corre... Agarro a su sobrino en brazos y corrio con el hasta el final del jardin para marcar un Try. El pequenajo, que solo tenia un ano y medio, no solto el balon hasta llegar a la linea de goal, tal como le habia ensenado, y se tiro con el sobre el cesped muerto de la risa. -!Sean Campbell marca cinco puntos, senores! !Bravo! !Campbell!, !Campbell! -?Que haceis? -Sophie se les acerco entornando los ojos y el nino, al ver a su madre, corrio hacia ella para abrazarse a sus piernas-. ?Que haces con el tio Oliver, carino? -Estamos aprendiendo a jugar al rugby, ?verdad, Sean? El balon que le he traido es perfecto. -Es muy bonito -inspecciono el balon pequeno y blandito que le habian hecho por encargo y luego miro a su hijo-. Que suerte tienes de que el tio te ensene a jugar al rugby, mi vida, pero ahora vamos a entrar a comer, ?quieres? -!No! -Si, si, campeon, para jugar al rugby hay que comer mucho y bien, asi que, a comer con mama, luego seguimos jugando. ?De acuerdo? -Le revolvio el pelo rubio y el asintio-. Genial. -Nosotros comemos en media hora, Oliver ?Te apetece tomar algo mientras tanto? Tengo croquetas, tortilla de patatas, jamon serrano... -Quiero de todo, eres la mejor, Sophie... espera... -se detuvo al sentir vibrar el telefono movil en el bolsillo de los vaqueros y le hizo un gesto para que entrara en la casa-. Tengo que contestar, ahora voy. -Vale... vamos, mi vida, ?tienes hambre? -Hola -Respondio siguiendolos con los ojos y su amiga Tricia, que ademas de amiga era su jefa de prensa y su asistente personal, lo saludo en su tono habitual. -Hola, macho, ?donde te metes? -Estoy en Piper Point, en casa de mi hermano William para comer una paella en familia. -?Casera? -Por supuesto, es una de las especialidades de mi cunada, que es medio espanola, ?recuerdas? -?Estais todos? -Si te refieres a los tres hermanos, si. Sashi esta como nueva y ha venido con el bebe y con Alex, tambien con mi sobrino Jackson, que ha llegado de Escocia para conocer a su hermanito, aunque se vuelve en seguida a Edimburgo. ?Tu que te cuentas? -?Cuando nacio el bebe de Sashi? -Hace un mes, dio a luz en cuatro horas y ahora esta igual que antes. Un milagro de la naturaleza. -Que envidia, dicen que eso es genetico. -Eso dice mi madre, pero no tengo ni idea. En fin, ?que necesitas?, no puedo entretenerme. -Isabella vuelve a Sydney. -... -Guardo silencio y al no recibir respuesta Tricia siguio hablando. -Ha dejado su trabajo en Wellington y pasara unos dias aqui porque se marcha a vivir con su novio a Inglaterra, la buena noticia es que ha suspendido la boda. -Madre mia -Respiro hondo pasandose la mano por la cara, porque llevaba muchas semanas intentando pasar de su ex y de su nuevo novio, y trago saliva. -Se que quieres olvidarla, pero tambien se que te mueres de ganas por tener noticias suyas. Te conozco demasiado bien, Oli. -En serio, no puedo seguir hablando, me estan esperando para comer. -Creo que esto necesitabas saberlo. Adios y portate bien, capullo. Colgo, arrepintiendose de inmediato de haber cogido el telefono a Tricia, que era amiga suya desde el instituto, una tia leal y muy divertida, aunque en lo referente a Bella solia sacarlo bastante de quicio, y penso en ella, en Bella, en Isabella Howard, su novia de siempre, la mujer de su vida, esa que lo habia dejado despues de anos de rupturas, dramas y reconciliaciones, y un agujero en el centro del estomago lo paralizo. Respiro hondo intentando calmarse, levanto la cabeza y se encontro de frente con su hermano Alex, que salia a buscarlo con un botellin de cerveza en la mano. -Tio, dijimos que nada de moviles. -Si, lo siento, pero era importante, ahora lo apago. Gracias -cogio la cerveza y camino hacia la casa tratando de espantar el desconcierto-. ?Que tal el peque? -Durmiendo, gracias a Dios, ha tomado el pecho y se ha quedado frito, pero a saber. Duerme fatal. -Bueno, es lo habitual, ?no?, es un recien nacido. -Hay otros mas tranquilos, a este le gusta la juerga. ?Estas bien? -Lo detuvo antes de entrar en la casa y busco sus ojos. -Si, ?por que? -Hace media hora estabas fenomenal y ahora te has venido abajo. ?Quien te ha llamado?, ?que te ha dicho?, ?hay algun problema? -Isabella vuelve a Sydney. -?Y? -Ha dejado su trabajo y se marcha a vivir con su novio a Inglaterra. -?Te ha llamado ella? -No, me ha llamado Tricia, ya sabes que nos conoce a los dos. -Vale, pero crei que ese tema estaba zanjado y que tu... -Si, hermano, no te preocupes, no pasa nada. Ha sido el shock inicial, pero estoy bien. Vamos a comer, me muero de ganas de probar esa paella. 1 -?Sigues a gusto en los Sydney Roosters, Oliver?, las malas lenguas aseguran que tienes ofertas para marcharte a jugar al Reino Unido. ?Es eso cierto? -Si, siempre hay ofertas, pero no es mi intencion mudarme a vivir al Reino Unido, no soportaria el clima. Bromeo, guinandole un ojo a esa chica tan guapa, la periodista de Men’s Health Australia, que le estaba haciendo una entrevista mientras un fotografo, dos asistentes, un productor, un estilista, una peluquera, una maquilladora, su representante, su jefa de prensa, su madre y dos personas que no tenia ni idea de quienes eran, los observaban atentos, y suspiro. -Me han contado que tienes familia en Escocia, eso podria facilitar las cosas ?no? -Todos los australianos tenemos familia en alguna parte. -Ya, pero igual te apetece estrechar lazos con tu familia paterna. -!Stop! -Solto Tricia muy seria y miro a la periodista desde su metro ochenta de estatura haciendola parpadear asustada-. Nada de temas personales, Lucy, y mucho menos en esa linea, en el contrato habia quedado claro. ?Necesitas que te lo ensene? -?Que tiene de malo hablar de su familia paterna? -No habla de su vida personal. -No le estoy preguntando quien es su novia o si piensa casarse este ano, le estoy preguntando por su familia escocesa, la Wikipedia dice... -Genial, ?documentas las entrevistas en la Wikipedia?, que profesional. -No te pases, Tricia, le estamos haciendo un reportaje fotografico espectacular, hemos hecho todo lo que no habeis pedido, solo necesito que me conteste a temas que vayan mas alla del rugby o de su rutina de ejercicios, ?sabes? -Y yo te repito que no vayas por ese camino o esto se acaba aqui... -Basta -levanto la mano para aplacar a Tricia, que solo estaba defendiendo su filosofia con respecto a la prensa, pero que se estaba pasando cuatro pueblos, y le sonrio-. Esta bien, no pasa nada, le contestare a Lucy un par de cosas personales para que complete su reportaje. -Tu mismo -Bufo ella, se dio la vuelta y desaparecio cabreada. -Gracias. Lucy -miro a la periodista y le sonrio-. Supongo que ya sabes que conozco desde hace poco a mi familia paterna. Es verdad que tengo tios y primos en Edimburgo, y son encantadores, pero no pienso mudarme a jugar a Escocia, ni a ningun otro equipo del Reino Unido o de Europa, me quedo en los Sydney Roosters hasta que me quieran aqui. -?Es cierto que tienes dos hermanos en Australia? -Dos hermanos, dos cunadas y tres sobrinos. Todas personas anonimas a las que quiero, con las que paso mucho tiempo y de las que no voy a dar mas detalles para respetar su intimidad. -?Por que ahora usas el apellido Campbell?, durante anos solo fuiste Oliver Watson, es... -Mi apellido es compuesto, me llamo Watson-Campbell desde siempre, mis padres lo decidieron asi, sin embargo, cuando entre a jugar en la liga profesional me empezaron a llamar solo Watson y ahora, desde hace un tiempo, la prensa usa el apellido completo. No es algo que yo decida o imponga o... -?No es un homenaje a tu padre que salio a la luz tras anos de permanecer en el anonimato? -Acabo de decir que no es algo que yo haya decidido o haya impuesto -Respondio un poco aspero y ella sonrio. -Es muy curioso que muestres tanto celo en lo referente a tu entorno familiar paterno, porque siempre has sido muy abierto con tus fans, con la prensa... -Bueno, hay cosas que son sagradas y me gusta respetarlas. -Acabas de cumplir treinta y dos anos, ?has pensado en sentar la cabeza?, ?casarte y ser padre? -Me encantaria ser padre, no se si llegare a casarme, pero espero, algun dia, formar una gran familia. -?Que buscas en una mujer? -No se, aun no lo tengo claro -Volvio a bromear para quitar hierro a la situacion, y miro a su madre, que observaba la escena con el ceno fruncido. -?Que opinas de ser uno de los hombres mas deseados del pais y el australiano mas deseado del mundo? -?Quien dice eso? -Una encuesta de nuestra revista y de otros medios de comunicacion. -?En serio? -?No te condiciona tu aspecto fisico?, obviamente eres muy atractivo, no puedes negar el efecto que produces en las demas personas. -No se de que me hablas.

  • No soy yo, eres tu (Tal para cual 2) de Ebony Clark

    https://gigalibros.com/no-soy-yo-eres-tu-tal-para-cual-2.html

    Un ano antes… -Por favor, senora, deje de aporrear la puerta. Ya le he dicho que hay aire suficiente y que no le va a pasar nada. Estuve a punto de mandarle a la mierda y anadirle que no cogiera ningun atajo y disfrutara del paseo. ?Es que aquel imbecil se creia que estaba hablando con una histerica? Ya sabia que no iba a pasarme nada y que aquello de asfixiarse en el ascensor era una leyenda urbana, que venian con reserva de aire suficiente como para no agobiarme. Pero aquel no era el problema. El problema era que tenia una vista en media hora y no llegaria a tiempo a menos que aquel idiota hiciera algo rapido. Pegue la boca a la ranura entreabierta de la puerta del ascensor. -Mira, como te llames… Es la cuarta vez este ano que alguien se queda encerrado en el ascensor. Para mi, la segunda, por si te interesa. -A lo mejor es que no hacen buen uso. Apenas acerte a entender lo que decia aquel heroe de pacotilla. No estaba segura, pero haciendo buen uso de mi racionalidad profesional, me hice la sueca a su comentario. Ya le diria yo en cuanto saliera lo que pensaba de sus opiniones y en el punto exacto de su anatomia donde podia guardarselas. Fingi ser una dulce damisela en apuros, cosa que solia funcionar la mayoria de las veces. -Oye… Ya se que no voy a morir, no estoy sufriendo ningun ataque de histeria ni nada parecido. La cuestion es que tengo que estar en el juzgado en media hora. Asi que, si pudieras darte un poco de prisa, te lo agradeceria muchisimo… Y cuando digo muchisimo, no estoy hablando en sentido figurado, ?vale? No se si los de tu gremio aceptan propinas o no, pero llevo en el bolso un billete de cincuenta euros que esta deseando encontrar nuevo dueno. Silencio al otro lado. Vaya, quiza la oferta no fuera de su agrado. Podia ser que me considerase una ronosa por el importe de la propina ofrecida. Bueno, cincuenta euros no estaban nada mal, ?no? Escuche un golpe seco en la puerta y me aparte enseguida. Al otro lado, pude ver un unico ojo de un color azul intenso, asomando por la ranura. El bombero que atendia la emergencia desde el otro extremo de la puerta del ascensor debia ser el dueno de aquel ojo. Y seguramente de otras partes del cuerpo humano que yo no podia distinguir, porque estaba atrapada en el maldito ascensor y aquel pequeno detalle lo impedia. -Ensenemelo. ?Que? Sacudi la cabeza, creyendo que habia escuchado mal. -?Como dices? -pregunte con desconfianza. -Que me lo ensene -ordeno el con tono seco-. Su billete de cincuenta euros. -?En serio? ?Puedes acelerar mi rescate con la ayuda de una propinita? Claro, yo no podia ver que la cara del bombero ya habia cambiado a varios colores, mientras continuaba con mi absurdo y repugnante intento de extorsion que, por otro lado, iba a jurar sobre la Biblia no haber cometido si se daba la ocasion. -Pues claro, senora. Para eso estamos. Hum, no se por que, pero algo en su voz me decia que intentaba tomarme el pelo. De todas formas, estaba desesperada. Lucas me esperaba al otro lado, impaciente. Nuestra clienta era un miembro muy influyente de la comunidad nordica del sur de la isla. Lucas era un gran orador, pero yo tenia todos los documentos del caso en mi maletin, conmigo dentro del ascensor. Y nuestros jefes ya nos habian advertido: como no le sacaramos hasta el ultimo euro al marido de Greta, un rico empresario madrileno dueno de varias salas de fiesta, ya podiamos buscarnos otro trabajo. Sin pensarlo, extraje el billete de mi cartera y lo deslice hacia arriba y hacia abajo por la ranura de la puerta, como si fuera la sexy y seductora pierna de una stripper en un bar de carretera. -Vaya, pues era verdad. Parece autentico. Solte una palabrota al escucharle. -!Pues claro que es autentico! Pero ?que te has creido? -le grite, furiosa. -No se… Mi padre siempre decia que no me fiara de los abogados, que son unas ratas mentirosas… Pero no, oiga, parece que usted es de fiar. Y no tiene pinta de rata… Bueno, al menos desde esta distancia no, ?por que no se acerca un poco mas para que pueda verla mejor? -Me encantaria acercarme mas, senor No Estoy Haciendo Una Mierda Para Rescatar A Una Buena Ciudadana… !Pero estoy sudando como si esto fuera el horno donde el diablo cuece a sus pecadores! Y si me muevo, la cosa va a peor… -A lo mejor es que lleva demasiada ropa. ?Por que no se quita esa bonita chaqueta de Bimba y Lola? Le queda muy elegante, eso si… Pero ahi dentro debe de haber unos treinta y cinco grados. -?Me estas sugiriendo que me desnude? Ay, Dios, esto es la pera… -De pronto cai en su sorprendente dominio de la moda femenina y le pinche en un arrebato infantil-: A ver, ?como sabes que mi chaqueta es de Bimba y Lola, eres un disenador frustrado o que? -Que va. Es que le regale una igual a mi madre por su cumpleanos, solo eso. Mire con disimulo mi chaqueta de punto gris con los punos y cuellos ribeteados en negro. Combinada con mis vaqueros y mocasines, me parecia una excelente eleccion para llevar al juzgado; arreglada pero informal, como diria la madre de mi mejor amiga. Sin embargo, ahora que el agente de emergencias mencionaba el regalo de su madre, me hizo sentir mayor y poco atractiva. Seguro que lo noto, porque al segundo siguiente quiso arreglarlo… sin exito, claro. -Oiga, no se enfade… Le queda bastante bien, en serio… Se parece un poco a esa abogada de una serie de hace un millon de anos… ?como se llamaba? Tiene que acordarse, mas o menos es de su epoca, ?no? <>, grite mentalmente, furiosa porque el tio, no contento con meterse con mi ropa, ahora me llamaba carroza en la cara. -Si, lo que tu digas… -corte bruscamente. -?O era Remington Steel? -se pregunto el en voz alta, hablando consigo mismo al principio-: Ahora no lo tengo muy claro, pero usted debe tener mas o menos la edad de mi madre, ?a que si? Seguro que se acuerda. -No soy cinefila -menti. – ?No? Pues deberia… ?No ha visto Ben-Hur, la version original? Me golpee la frente con una sonora palmada. ?De verdad? ?De verdad me habia tocado el bombero humorista? Estaba a punto de darme un ataque, pero no de risa precisamente. Iba a gritarle a pleno pulmon que se dejara de hablarme de series y peliculas, que se estaba pasando y mucho al insinuar que yo tenia edad para haberlas visto en algun cine el dia de su estreno. Me detuve al instante. Ya veia por donde iba… Mi instinto me decia que solo pretendia, muy mal, todo fuera dicho de paso, entretenerme mientras me sacaban de alli. Debia ser el psicologo del grupo. O el chistoso, no estaba segura. -Pero ?que dices? Mira, ?vas a sacarme de aqui o no? -apremie. -Ya le dije antes que si, senora. -Si, ya se que lo dijiste… Pero tambien dijiste que tenias que esperar que tu companero encontrase no se que llave maestra… Y yo no tengo tiempo que perder. Conque, ?quieres o no quieres los cincuenta euros? Otro silencio. -No se… ?Es que le sobran o que? La pregunta me dejo perpleja. Seguro que el intentaba darme conversacion, tal y como le habian ensenado en sus cursos sobre como enfrentarse a situaciones limite. Pero no era mi caso. Mire el reloj de pulsera y se me acelero el corazon. -Pero ?que cono importa si me sobran o no, no te estoy diciendo que te los quiero dar? -casi le grite, tratando de no perder el control. -Es que quiero que quede bien claro que me los quiere regalar. Aprete los dientes. -!Pues claro que te los quiero regalar! Toma, hombre, cogelo ya… Y te compras la edicion Oro de coleccionista de Ben-Hur y unas palomitas a mi salud… !Pero sacame de aqui! -Lo deje caer por la ranura y senti como unos dedos recogian el billete al otro lado de la puerta. Despues, un sonido que recordaba al crujido del papel de cebolla junto a un telefono. Una emisora de radio. <>. No pude contenerme por mas tiempo. Aporree el ascensor con los punos, con el maletin y hasta con un par de patadas al estilo Bruce Lee que habia visto en alguna pelicula. -!Oye, que me estoy enterando de todo! -chille. --… Vale, lo intentare… No te prometo nada… Esta como una regadera, en serio… Es que la oyes hablar y parece la abogada corrupta de una pelicula de la Mafia, tio… Bueno, una mezcla de eso y un palo de fregona desmelenado… Date prisa, tio, da un poco de miedo…

  • Margaritas olvidadas (Corazones en Manhattan 6) de Camilla Mora

    https://gigalibros.com/margaritas-olvidadas-corazones-en-manhattan-6.html

    Sexta entrega de la serie de romance actual <> de Camilla Mora.

  • La senora Osmond de John Banville

    https://gigalibros.com/la-senora-osmond.html

    Tras ponerse en la piel de Chandler, Banville se disfraza de Henry James.

  • El claro mas oscuro (Tracy Crosswhite 3) de Robert Dugoni

    https://gigalibros.com/el-claro-mas-oscuro-tracy-crosswhite-3.html

    La inspectora Tracy Crosswhite tiene un don para los crimenes sin resolver… y cierta debilidad por ellos. Asi que cuando Jenny, su antigua companera de la academia de policia, le pide ayuda con un caso, Tracy acepta de inmediato: se trata de un oscuro episodio relacionado con el suicidio de una estudiante de instituto, ocurrido cuarenta anos atras en extranas circunstancias.

  • Mil maneras de hacer sonreir al Highlander de Martina Leiva

    https://gigalibros.com/mil-maneras-de-hacer-sonreir-al-highlander.html

    Es necesario partir de cero en un nuevo lugar para curar las heridas...

  • Almas Guerreras, Raquel Campos de Raquel Campo

    https://gigalibros.com/almas-guerreras-raquel-campos.html

  • Esperare de Antonio Mora Diaz

    https://gigalibros.com/esperare.html

    Maria es una joven malaguena, de clase obrera, de principios del Siglo XX. A pesar de las desgracias que durante sus primeros anos de vida castigan a su familia, ella no pierde su interes por el mundo que le rodea.
    Aunque los recursos familiares no le permiten estudiar para dedicarse a la docencia, ella encuentra un camino alternativo para conseguirlo.
    Un buen dia aparece el amor en su vida.
    Maria se enamora de Alfred Stern, un fugitivo que le corresponde. Todo parece ir perfectamente hasta que los acontecimientos historicos de su tiempo los arrastran como una bola de nieve cayendo por una pendiente.
    Esta es la historia de Maria y de Alfred, pero tambien es la historia de Josefina, de Juan, de Nuria, de Carmen, de Jose y de muchas otras personas, en su mayoria normales y corrientes, que tuvieron que ir adaptandose a un mundo duro y cambiante y en el que las guerras y los conflictos pasaron a ser parte del paisaje.

  • El aguijon de Silvia Soler

    https://gigalibros.com/el-aguijon.html

    Los Sureda-Faura son una familia formada por tres hermanos, Laura, Ignasi y Judit, y sus padres Helena y Sebastian. La familia vive en el pueblo, en la casa familiar de veraneo de los abuelos Faura. Sebastian es un reconocido dramaturgo que siempre ha antepuesto su carrera a su familia, incluso en los anos clave de la
    infancia de sus hijos, que lo necesitaron mas que nunca despues de la tragica e inesperada muerte de Helena por una picada de abeja.
    Pasan los anos, Sebastian muere y los tres hermanos se reunen. Hay que pensar que hacer con la casa familiar. La muerte del padre coincide con un momento en la vida de los tres hermanos que los lleva a decidir instalarse todos en la casa. Ignasi se ocupara de la reforma para poder venderla mejor, y mientras tanto Laura decide poner orden a la biblioteca familiar.

  • Estoy colada por mi insufrible de Elizabeth Betancourt

    https://gigalibros.com/estoy-colada-por-mi-insufrible.html

    La temperatura en Copenhague invitaba a salir y montar en bici, su actividad favorita. No habia nada mejor que el viento fresquillo que removia su melena de color platino haciendola sentirse tan libre como los pajaros a los que solia observar su padre en sus ratos libres, yendo sin pereza alguna hasta De Sondermarken. Un hermoso parque que enorgullecia a los copenhaguenses. Lo mejor de todo, paseando con su bicicleta era el poder ver a diferentes personas, cada una con su propio estilo, con gestos divertidos o preocupados que motivaban a Annelise a reflexionar sobre el mundo que la rodeaba, a preguntarse si en ese preciso momento alguien en la otra punta del planeta divagaba sobre las mismas cuestiones que ella. Resoplo por enesima vez, mirando el sol brillar desde la ventana de su habitacion. --?Sigues asi? --La voz de su madre la asusto y la joven dio un respingo, mirando por encima de su hombro para ver a su progenitora con una sonrisa nerviosa, plantada en el rellano de la puerta como una flor. --Estoy harta de estar metida aqui. No comprendo porque hacer una buena accion me provoca tanto dolor de cabeza. !No debia haber dicho nada! --Respondio Annelise a su madre, volviendo su cara otra vez hacia delante, concentrandose en los ninos que jugaban a la pelota en la calle. !Que envidia les tenia! --!No puedo creer lo que me estas diciendo, jovencita! !Retira eso de inmediato! Tu padre y yo te ensenamos una buena educacion basada en el respeto, la sinceridad y el amor. --Le echo la bronca la mujer. Annelise se dio la vuelta otra vez, mirando a su madre con lamento. No queria decir eso, por supuesto que no lamentaba haber ayudado a la policia para que pudieran meter tras las rejas a ese hijo de puta cuyo hobbie era violar a cualquier mujer que pudiera alcanzar, pero desde el momento en que juzgaron a Harald Adamsen con sentencia de diez anos de prision, su mundo habia cambiado por completo. --Mama, no queria decir eso, es que... Esa buena accion solo me esta llevando a la locura. -- Se explico Annelise, pero su progenitora seguia mirandola con ese ceno arrugado, ese brillo de decepcion en sus ojos hermosos de color violeta que ella habia heredado. --No es la buena accion la que te lleva hacia la locura, mas bien, el encierro, lo cual es totalmente comprensible. Tu padre y yo hemos pensado en eso y tenemos la solucion. -- Respondio Inga Dahl con un tono pausado, como si temiera la reaccion de su hija. --?Solucion? ?Que solucion? --Pregunto la joven mirando con ojos abiertos como platos. Las novedades no le gustaban nada, preferia centrarse en la comodidad de una rutina y no llevarse sorpresas. A Annelise le gustaba tenerlo todo controlado y mas que el encierro, lo que le provocaba horribles dolores de cabeza, era el hecho de no tener el control desde hacia ya tres meses. Para colmo, su familia se encerraba junto con ella y el estres aumentaba por momentos. --No te me vuelvas loca, hemos hablado con el agente Bodilsen y el cree que nuestra idea es fantastica. --?Por que no me lo habeis consultado a mi ? --Pregunto Annelise atonita. Su ojo derecho empezaba a parpadear haciendola parecer un robot, cuyo hardware esta estropeado. Un tic que la muchacha no podia controlar en momentos de nervios a flor de piel. --Cielo, no creo que ahora mismo tengas la capacidad para tomar decisiones... --Empezo Inga y su hija jadeo ofendidisima. --Dejame terminar, cielo. Veras que te gustara lo que tenemos pensado. Somos tus padres y nunca hariamos algo que no fuera beneficioso para ti y para tu vida. No hay nada mas importante para un padre que el mundo de su hijo sea perfecto, si pudieramos, probablemente la mayoria optariamos por encerrar a nuestros pequenos en una burbuja de color rosa para que siempre esten a salvo, pero el mundo no funciona asi, la realidad que nos rodea nos obliga tomar decisiones que pueden ser tristes, pero son las mejores para educar y ensenar a nuestros hijos como enfrentarse a las situaciones que nos depara este mundo. --Mama empiezas a asustarme... --Murmuro Annelise entrecerrando sus ojazos adornados por unas pestanas bien definidas. --Has estado arropada siempre por nosotros... La nina de nuestros ojos, nuestra unica hija que recibio todo nuestro amor, un carino y apoyo que siempre tendras, pero es hora... --?Me estas diciendo con palabras bonitas que me largue de casa? --Pregunto Annelise estupefacta. --No exactamente, cielo. --Dijo Inga, mirando a su hija como si esta fuera una bomba de relojeria. --Tienes veinticinco anos y nunca has estado fuera de esta ciudad, lejos de todo lo que conoces. Apenas conoces a gente y eso no es normal. Hemos pensado con tu padre, que podrias aprovechar esta situacion e irte a Espana, donde Lucia, mi mejor amiga. Tiene una granja de sandias, su casa es hermosa y la ciudad donde vive, te robara el corazon. Sera una nueva experiencia y ademas, estaras a salvo. Ningun Adamsen podra encontrarte alli. Annelise miraba a su madre, incredula. No podia creer lo que estaba oyendo. --Dime que estas bromeando. ?Enserio me estas diciendo que encima que estoy encarcelada aqui, metida entre estas cuatro paredes, ahora debo alejarme de mi entorno? ?Ir a un pais que no conozco y con personas que nunca he visto en la vida? --Oh, cielo, Lucia es encantadora. Tiene dos hijos y uno es de tu misma edad casi, son un pan de dios. Podrias tomarte esto como unas vacaciones. Ademas, ?sabias que muchas de las playas de Almeria son de origen volcanico y que tienen el observatorio astronomico mas grande del mundo? Annelise volteo los ojos y respondio. --Mama estoy segura de que es un sitio hermoso y bla, bla, bla, pero yo quiero estar en mi casa, en mi ciudad. No voy a ningun lado que os quede claro. No pienso huir de estos matones cuando no he hecho nada malo. La policia esta obligada a cuidarme como su testigo de proteccion que soy y no mandarme a kilometros de distancia lejos de mi casa. Estallo la joven y se acerco a su madre. Le sacaba tres cabezas, Inga se veia a su lado diminuta y eso que no era bajita, media metro sesentaisiete. --Iras. --Hablo Inga Dahl, empleando ese tono que usaba tan pocas veces que se podia contar con los dedos de las manos, pero que no admitia discusiones. Su mirada era de fiera, tan iracunda que Annelise sintio que su aliento se detenia. --Mama... --Hizo un intento de protestar, pero fue callada en el instante y es que su dulce y carinosa madre, cuando deseaba podia intimidar mucho. --Eres una egoista Annelise. --Afirmo la mujer con una voz que indicaba reproche y su hija la miro estupefacta. Parecia que pronto se iba a echar a llorar, pero la situacion en la que estaban exigia decisiones radicales. Era hora de que Annelise creciera y se hiciera cargo de algunas cosas, empezando por probar cierta independencia que sus padres le habian negado, sin darse cuenta en que ese exceso de apoyo podria dificultar el futuro a su querida hija. --?Por que dices eso? --Pregunto la joven con voz tremula. Inga suspiro, dandose cuenta hasta que punto sensible era su nina. Aquello era horrible, el mundo se la iba a comer si seguia asi. Su esposo y ella nunca antes se habian planteado ese dilema, pero convivir tanto tiempo con su hija, pasar tantas horas juntos, les habia hecho darse cuenta de algunas cosas. --No te importamos. Estando aqui nos pones en peligro. El padre de Harald Adamsen fue pillado antes de ayer a unos kilometros de nuestra residencia. ?Coincidencia? No lo creo y el senor Bodilsen, tampoco. Es increible que con tal de sentirte a salvo, estes de acuerdo en arriesgar la vida de tu padre y la mia. Provocarnos ese dolor de cabeza constante, ese temor insoportable de que te maten, te danen y de paso a tu padre y a mi. Contesto la mujer que conocia bien a su hija y sabia que podia ser de todo menos egoista. Ese era el ultimo "As" que se sacaba de la manga. !Debia alejarla de Copenhague! !No, debia alejarla de Dinamarca! Si para ello se veia en la obligacion de tratarla con frialdad y de culparla por esa situacion, Inga estaba dispuesta. !Mas valia un hijo enfadado y triste que uno bajo tierra! --!Mama, no me puedo creer lo que estoy escuchando! !Jamas en la vida se me ocurriria poneros en peligro! --Exclamo su nina mientras lloraba sin siquiera percatarse de eso. --!Pues no demuestras eso, Annelise! Si realmente te importara y supieras la magnitud de lo que esta pasando, estarias de acuerdo en irte a Almeria donde Lucia. Eso calmaria el ambiente, los Adamsen se olvidarian un poco del asunto al darse cuenta de que no estas aqui y de paso conocerias un nuevo pais, nuevas personas, una nueva cultura. Dijo Inga gritando. Annelise se quedo sin habla. Lamentaba tanto haber vivido aquel maldito lunes… --Pero, si algun Adamsen os ataca en mi ausencia, me pesara en la conciencia el no haber estado aqui, junto a vosotros y ademas... ?Que pasara con mi trabajo? --Pregunto la joven cuando recupero el habla. --Su principal objetivo eres tu. A nosotros no se nos acercaran si no te ven por aqui y ademas, el agente Bodilsen estara protegiendonos a pesar de tu ausencia. En cuanto a tu trabajo como profesora de guarderia, siento decirtelo cielo, pero ya lo has perdido... No creo que te vuelvan a contratar. Los padres estarian en contra porque inconscientemente pensarian que sus hijos estan en peligro contigo. Si te vas a Espana igual hasta encuentras un trabajo, no como profesora, pero bueno, hay muchas variedades de empleos, asi pruebas cosas nuevas, carino. Annelise resoplo. Estaba claro que a sus padres se les habia metido la mosca en la cabeza de enviarla donde la tal Lucia. ?Que podia hacer? Nunca se habia alejado de los suyos por mucho tiempo... Aquello iba a ser dificil, pero pensar que les ponia en peligro con su presencia alli, la animaba a tomar esa resolucion tan drastica. --Bien, pero prometeme que me llamareis todos los dias, sin falta. Dijo finalmente la joven. Su madre podia apreciar el miedo en sus ojos y se le partia el corazon, pero una madre debia hacer lo mejor para su hijo e Inga no era muchas cosas, como: Buena deportista, buena en dibujo e inclusive la cocina se le daba de pena, pero si era una buena madre, capaz de parar la rotacion de la tierra, bajar la luna y cualquier barbaridad que se le pudiera ocurrir a uno, con tal de hacer feliz a su nina.

  • Extrana Obsesion, Cathryn de Bourgh de Cathryn De Bourgh

    https://gigalibros.com/extrana-obsesion-cathryn-de-bourgh.html

  • La respuesta del universo de Felix Toran

    https://gigalibros.com/la-respuesta-del-universo.html

    ?Sabe usted que puede convertirse en todo lo que desea, creando de forma deliberada la vida de sus suenos? ?Y sabe que tambien puede experimentar todo ello por si mismo a traves de sencillos ejercicios, incluso utilizando su ordenador? Todo esto es posible gracias al conocimiento de una ley universal: la Ley de la Atraccion, que nos descubre como los pensamientos se convierten en hechos, lo cual significa que la mayor parte del tiempo nos convertimos en aquello en que pensamos.

  • La estrategia del Diablo de Armando Cuevas Calderon

    https://gigalibros.com/la-estrategia-del-diablo.html

    El robo de un objeto legendario, un extrano asesinato, un misterioso experto en antiguedades y una policia de homicidios atormentada por su pasado se entremezclaran en este perturbador thriller policiaco.
    Enfrentada a una investigacion repleta de mitos y secretos, la inspectora Elena Valdeon debera sumergirse en el oscuro mundo de las sectas satanicas, y seguir las pistas dejadas por un crimen atroz cometido hace casi dos mil anos, si desea resolver el caso mas inquietante y peligroso de toda su carrera.

  • Por ultima vez: ?Venganza o Justicia? de Isela Reyes

    https://gigalibros.com/por-ultima-vez-venganza-o-justicia.html

    Si supieras que tu tiempo esta contado, ?Que harias? ?Despedirte de tus seres amados? O ?Cobrar venganza de aquellos que te lastimaron?

  • Las falsas verdades. Origen de Gemma Garcia Veiga

    https://gigalibros.com/las-falsas-verdades-origen.html

    <>. Ni el Cielo es lo que parece ni el Infierno un agujero inmundo de deshechos humanos. Drako no quiere mentiras que consuelen sino la verdad, aunque duela. Cuando Iris entra en su vida descubre que toda su existencia fue manipulada y esta dispuesto a llegar al fondo del asunto, aunque en tal empresa pierda por segunda vez la vida.

  • Vecinos de Danielle Steel

    https://gigalibros.com/vecinos.html

    Dentro de la impresionante mansion de piedra hacia calor incluso en el sotano, donde Debbie Speck se afanaba en la amplia y eficiente cocina guardando la compra que su marido, Jack, acababa de traer. El hombre sudaba copiosamente. Tenia algo mas de cuarenta anos, y un poco de sobrepeso. El pelo oscuro le empezaba a clarear y siempre olia a la locion para el afeitado con la que trataba de disimular el olor al whisky barato que bebia por las noches y que guardaba en su habitacion. Al dia siguiente, cuando hacia algun esfuerzo, exudaba el alcohol por los poros. Debbie solia unirsele para tomar una copa o dos. Ella preferia el gin-tonic o el vodka, que mantenia frio en la nevera del apartamento del sotano, al que su senora, Meredith White, nunca bajaba. Respetaba su privacidad, algo que les parecia perfecto a los dos. Debbie tambien era un tanto corpulenta y se tenia ella misma de rubio. Jack y Debbie llevaban quince anos trabajando como interinos cuidando de la casa de Meredith White, celebre estrella de cine que habia escogido una vida de reclusion. Cuando les contrato todavia estaba en activo, rodando una pelicula tras otra, a menudo fuera de la ciudad, y su marido, el actor y productor Scott Price, hacia lo mismo. En ocasiones pasaban meses separados trabajando en rodajes distintos. Era el empleo ideal para Jack y Debbie: una inmensa y lujosa mansion cuyos senores estaban fuera casi todo el tiempo y, cuando se encontraban en casa, siempre se hallaban muy ocupados. No tenian tiempo para controlarlos estrechamente y confiaban en ellos. Cuando entraron a trabajar eran jovenes, apenas tenian veintinueve anos, pero ya conocian las ventajas y los beneficios ocultos que conllevaba ese tipo de empleo. Era como recoger fruta madura de los arboles. Las tiendas en las que compraban o los trabajadores a los que contrataban les ofrecian sustanciosas comisiones o les proporcionaban servicios que a ellos les salian gratis pero que sus jefes pagaban sin saberlo, ya que los proveedores poco honrados inflaban las facturas de manera considerable. Y habia mucha gente que se apuntaba al juego. A los pocos meses, ya habian establecido toda una red de fructiferas relaciones comerciales. Era una practica habitual, y ellos no tenian ningun reparo en aprovecharse de sus senores. Ya lo habian hecho antes. Seleccionaban a la gente para la que trabajaban en funcion de lo ocupados, distraidos o ausentes que estaban. Cuando les contrato, Meredith era una de las actrices mejor pagadas de la industria del cine y fue muy generosa con ellos. Al principio, de vez en cuando hacian de chofer para su hijo Justin, de trece anos, pero siempre habia tutores para supervisarlo, y tambien un joven universitario que se alojaba en la mansion y lo llevaba a la escuela cuando ambos padres se encontraban fuera rodando. Pero cuando estaban en casa, se encargaban de hacerlo ellos mismos. Tenian tambien una hija, Kendall, que a los dieciocho anos se habia marchado a la universidad en Nueva York y ya no habia vuelto a vivir en San Francisco. Cuando Jack y Debbie entraron a trabajar, Kendall tenia ya veinticinco anos, se habia casado y era madre de una nina, Julia, y solo regresaba por Navidad. Y Meredith y Scott estaban tan atareados con sus carreras que casi nunca disponian de tiempo libre y no podian ir a verlas tanto como querrian. Era el trabajo ideal para Jack y Debbie. Tenian su propio apartamento dentro de la residencia, que contaba con una entrada independiente y estaba amueblado con muy buen gusto. La mansion, la mas grande de todo San Francisco, se encontraba en Pacific Heights, el mejor barrio residencial de la ciudad. Trabajar para dos grandes estrellas de cine no solo les conferia prestigio, sino que tambien resultaba muy provechoso para ambos. Meredith y Scott se habian trasladado cuando Justin nacio y Kendall tenia ya doce anos. No querian criar a otro hijo en Los Angeles, les habia explicado Meredith. San Francisco era una ciudad mas pequena y conservadora, con un ambiente mas saludable, excelentes escuelas para los ninos y buen tiempo todo el ano. El terreno en el que se alzaba la mansion les proporcionaba el espacio y la privacidad que necesitaban, sobre todo gracias al altisimo seto que mandaron plantar cuando se mudaron. Con el tiempo, Debbie y Jack habian sacado grandes beneficios de las ventajas que conllevaba su empleo. Despues de muchos anos de comisiones bajo mano, habian logrado un importante colchon economico. Tambien se habian hecho con algunos tesoros procedentes de la casa principal, en especial dos pequenas pinturas francesas muy valiosas que desde hacia mas de una decada estaban colgadas en su dormitorio. Meredith nunca habia reparado en su desaparicion. A Debbie le gustaban tanto que habia decidido <> en sus aposentos. Meredith tenia ademas una cuenta bancaria destinada al pago de los gastos de la casa. Unos anos antes, Debbie se habia ofrecido a encargarse del pago de esas facturas para aliviarla de ese tedio. Y de vez en cuando desviaba pequenas cantidades a su propia cuenta, tan exiguas que ni siquiera el contable de Meredith las habia cuestionado. Debbie y Jack eran unos ladrones muy astutos. Pero tambien sabian que debian permanecer muy atentos a las necesidades de sus senores, y catorce anos atras se mostraron de lo mas compasivos y afectuosos cuando la vida de Meredith se derrumbo por completo. Solo un ano despues de que entraran a trabajar en la casa, el mundo dorado de la actriz se desmorono de repente, dejando solamente cenizas a sus pies. Y eso hizo que Meredith se volviera todavia menos cautelosa con las cuentas y pudieran enganarla con mayor facilidad. Catorce anos antes, Scott mantuvo un romance muy sonado con una joven actriz italiana con la que habia rodado una pelicula. Ella tenia veintisiete anos, y el, a sus cincuenta y cinco, le doblaba con creces la edad. Cuando Jack y Debbie entraron a trabajar en la casa, el matrimonio parecia muy solido y estable, algo poco habitual en el mundo del espectaculo. Por lo que observaron, estaban enamorados y sentian devocion por sus hijos. Pero entonces Scott se marcho a rodar a Bangkok y, cuando volvio, el matrimonio ya estaba hecho pedazos. En cuanto llego a casa, dejo a Meredith por Silvana Rossi y se fue a vivir con ella a Nueva York. Meredith se sintio profundamente herida por la traicion, pero mantuvo el tipo ante sus hijos. A los encargados de la casa les sorprendio que nunca hablara mal a Justin de su padre, pero Debbie la encontro mas de una vez llorando a solas en su habitacion y la consolo abrazandola con carino. Humillada por las noticias sobre la nueva pareja que aparecian en los tabloides, Meredith corto de raiz todo tipo de vida social. Apenas salia de casa y centro toda su atencion en Justin. Lo llevaba a la escuela y a los entrenamientos, pasaba tiempo con el y cenaban juntos todas las noches. Debbie la oyo rechazar una pelicula que le habian ofrecido. Meredith queria quedarse en casa con su hijo hasta que amainara la tormenta provocada por el escandalo de la separacion. Justin estaba muy afectado y viajo en varias ocasiones a Nueva York para visitar a su padre. Cuando volvia, siempre decia lo mucho que odiaba a su futura madrastra. Scott planeaba casarse con ella en cuanto consiguiera el divorcio. A los catorce anos, Justin habia llamado <> a Silvana cuando hablaba en confianza con Jack, que a su vez se lo habia contado a Debbie. El chico le habia confesado que a su hermana, a la que Jack y Debbie apenas conocian, tampoco le gustaba aquella mujer. Meredith nunca hablaba de Silvana con Debbie. Era una mujer muy digna, discreta y respetuosa, aunque no cabia duda de que debia odiar a la joven estrella italiana. Y Scott estaba empecinado en conseguir el divorcio cuanto antes. Su matrimonio, aparentemente feliz, habia saltado por los aires. Meredith aparco su impresionante carrera para pasar mas tiempo con su hijo, y aunque por entonces aun no la conocia mucho, Debbie la admiro por ello. Jack y Debbie no tenian hijos. Tiempo atras habian trabajado en Palm Springs para una pareja de ancianos, que murieron con escasos meses de diferencia. Se habian conocido en un programa de rehabilitacion en San Diego dos anos antes de conseguir ese empleo. Aunque ambos habian crecido en el sur de California, no habian coincidido hasta entonces. A Jack lo habian arrestado varias veces por delitos menores, sobre todo fraude con tarjetas de credito para costear su drogadiccion. Debbie habia sido acusada de hurto menor, sustraccion de tarjetas y posesion de marihuana con fines de trafico. El juez les habia enviado al mismo programa de rehabilitacion. Ambos tenian veintidos anos y pasaron seis meses alli. Durante ese tiempo urdieron un plan para trabajar juntos, lo cual acabo convirtiendose en amor, o auno sus ambiciones en un proyecto de vida comun. Se casaron porque asi podrian conseguir mejores empleos, como encargados en casas de familias ricas. Jack habia sugerido que trabajar para los ricos podria ser muy lucrativo y una buena oportunidad para maquinar planes mas ambiciosos para el futuro. Debbie se mostro bastante reacia, pues no queria ser una criada, limpiar lavabos ni llevar uniforme, pero Jack la convencio diciendole que podrian hacer lo que quisieran. Contratarian a otra gente para que se ocupara del mantenimiento y el trabajo sucio, mientras ellos se llevaban la mejor parte. Incluso podrian afanar dinero o algunos objetos valiosos mientras sus jefes estaban fuera, culpando a otros de los robos, al tiempo que ganaban un buen sueldo y vivian a sus anchas en casa ajena. Jack logro que el plan sonara tan atractivo que, cuando salieron de rehabilitacion, decidieron llevarlo a la practica. Fueron a una respetable agencia de empleo en Los Angeles. Presentaron referencias escritas por el mismo Jack en un papel de correspondencia tambien falsificado, y que supuestamente habian sido escritas por una pareja mayor que habia fallecido sin dejar herederos que pudieran confirmar su historia. La agencia ni siquiera se molesto en comprobar las referencias ni tampoco sus antecedentes penales, algo que solo hacia si lo solicitaba el cliente. Les despidieron de su primer empleo por incompetencia general, por no tener ni idea de lo que hacian. Pronto aprendieron lo que se esperaba de ellos, y entonces entraron a trabajar para la pareja de ancianos de Palm Springs, la que acabo muriendo de verdad. Eran tan mayores que apenas prestaban atencion a lo que hacian sus empleados. Los hijos de la pareja se mostraron agradecidos de que sus padres estuvieran tan bien cuidados por gente afectuosa y responsable, y la pareja incluso les dejo una pequena suma al morir. Mas adelante, cuando entraron a trabajar para Scott y Meredith en San Francisco, sus referencias eran autenticas. Los actores estaban buscando a alguien para ocuparse de su casa a traves de una agencia de confianza de Los Angeles. Jack y Debbie no tenian ninguna prisa, pues podian ir tirando con el dinero que les habia dejado la pareja de ancianos. Sin embargo, cuando les ofrecieron trabajar para Scott y Meredith, no pudieron resistirse. Supondria un gran avance en su carrera, y para entonces ya sabian lo que se esperaba de ellos, lo serviciales y obsequiosos que debian mostrarse para adaptarse sin problemas a la vida de sus senores. A Scott no le gusto mucho la pareja. Le dijo a Meredith que creia que eran demasiado serviles, pero al final sus recelos no importaron, ya que al cabo de un ano se fue a rodar a Bangkok y, a su regreso, se marcho para siempre. Meredith no mostro tantos reparos a la hora de confiar en ellos. Tras quince anos trabajando para la actriz, esta habia llegado a depender por completo de ellos para protegerla del mundo exterior y atender todas sus necesidades, que eran minimas. No era una persona exigente, y se pasaba la mayor parte del tiempo leyendo en el estudio que habia junto a su dormitorio o sentada en el jardin. Ya no recibia a nadie en casa. Durante los ultimos catorce anos, se habia retirado del mundo y preferia llevar una vida mas tranquila que la que habia llevado como estrella de cine. Sin embargo, el mundo no se habia olvidado de ella, y su reclusion voluntaria la habia convertido en una leyenda. Seis meses despues de que Scott se marchara a Nueva York con Silvana, y de que solicitara el divorcio para poder casarse con ella, Justin fue a visitarles a la casa que la pareja habia alquilado en Maine durante el mes de agosto. Kendall, su marido y su hija Julia tambien irian a pasar las dos ultimas semanas alli. A Kendall, como a Justin, no le gustaba nada Silvana, pero adoraba a su padre y a su hermano pequeno. No estaba feliz por la separacion, pero se sentia mas unida a Scott que a Meredith y se alegraba de que su padre viviera cerca de ella. Kendall estaba casada con un prospero banquero de inversiones y disfrutaban de una vida magnifica en Nueva York. En la casa de Maine habia una lancha motora que Scott estaba deseando usar, y tambien un pequeno velero que sabia que a Justin le encantaria, ya que los dos ultimos veranos habia ido a un campamento nautico en el estado de Washington. Con solo catorce anos, era un entusiasta de la navegacion. Meredith habia advertido a Scott de que no queria que su hijo saliera a navegar solo en las aguas desconocidas e impredecibles de la costa de Maine. Scott la tranquilizo diciendole que siempre le acompanaria, aunque anadio que Justin era mejor patron que muchos hombres que le doblaban la edad. Era un deporte que le fascinaba y siempre decia que de mayor se compraria un velero y navegaria por todo el mundo. Acordaron que Justin pasaria el mes de agosto con su padre, asi que el muchacho lo estaba deseando. El divorcio tambien le habia afectado mucho y echaba de menos a su padre. Le encantaba la idea de pasar un mes entero con el, y tambien compartir un par de semanas con su hermana mayor, a la que idolatraba, pese a la presencia de Silvana. Decia que era muy tonta y que siempre se estaba enroscando alrededor del cuerpo de su padre como si fuera una serpiente, lo cual le hacia sentir verguenza. Justin hacia todo lo posible por ignorarla. Y como el ingles de Silvana no era muy bueno, tenia una excusa para no hablar con ella. Diez dias despues de que Justin llegara a Maine, Scott se desperto una soleada manana de domingo con una resaca espantosa. La noche anterior habian ido a una fiesta en casa de unos nuevos amigos que habian hecho por la zona. Tenia un terrible dolor de cabeza y no queria levantarse de la cama, asi que dio permiso a Justin para que saliera a navegar solo en el pequeno velero. Era poco mas que un bote, y el chico le prometio que no se alejaria de la orilla y que volveria para la hora del almuerzo. Una hora despues se desato una fuerte tempestad y el oceano se encabrito inesperadamente. El velero de Justin se alejo de la costa mas de lo previsto, arrastrado por las corrientes y zarandeado por las enormes olas. Cuando Scott se desperto a mediodia, al ver el fuerte oleaje que se habia levantado y descubrir que Justin aun no habia regresado, llamo a la Guardia Costera. Bajo al muelle con un nudo en el estomago que se iba haciendo cada vez mas grande: su hijo seguia sin aparecer y era demasiado peligroso salir con la lancha motora para intentar buscarlo. Por la tarde, la Guardia Costera encontro el bote volcado. No habia ni rastro de Justin. Dos dias despues, su cuerpo aparecio varado en la playa de una de las islitas cercanas. Para entonces Kendall ya habia volado a Maine para esperar noticias junto a su padre, mientras que Meredith se habia quedado en San Francisco, sentada junto al telefono, rezando. Sus peores temores se hicieron realidad. Scott la habia llamado llorando el dia que desaparecio, y tambien cuando encontraron su cuerpo. Kendall estaba destrozada cuando hablo con su madre. Todos lo estaban. Scott se veia totalmente desolado cuando Kendall y el volaron a San Francisco con el cuerpo de Justin para el funeral que Meredith habia preparado para su hijo. Kendall estuvo en todo momento pendiente de su padre, pues sabia lo culpable que se sentia. Creia que su madre era mas fuerte y que podria sobrellevarlo mejor. Catorce anos mas tarde, aquellos borrosos recuerdos seguian atormentandolos a todos. Despues de la tragedia, Meredith apenas habia vuelto a hablar con Scott. Kendall sentia mucha lastima por su padre y eso la unio mas a el. Tras la muerte de Justin, fue a visitar diligentemente a su madre una o dos veces al ano, pero la culpaba por lo dura que se habia mostrado con Scott, algo que habia acabado pasandole una terrible factura: el sentimiento de culpa estuvo a punto de destruirle. Durante un par de anos, Scott se sumio en una espiral de drogas y alcohol de la que solo logro salir gracias a la ayuda de Kendall y de Silvana. Meredith le habia echado toda la culpa de la muerte de Justin, algo que a Kendall le parecia cruel. Habia sido un accidente. El no lo habia matado. Sin embargo, habia actuado de forma estupida y negligente, y habia faltado a la promesa que le hizo a Meredith, y como resultado Justin habia muerto. Ella no tardo en firmar los papeles del divorcio. Scott y Silvana se casaron finalmente. En aquellos momentos la necesitaba mas que nunca. Y dos anos despues de la muerte de Justin, de nuevo sobrio, retomo su carrera. En esos momentos, con sesenta y nueve anos, apenas actuaba y se dedicaba sobre todo a dirigir y a producir, con mas exito que antes si cabia. La incipiente carrera de Silvana fracaso de manera estrepitosa y cayo en el olvido antes incluso de que Scott volviera a trabajar. Ya tenia cuarenta y un anos, y llevaba la vida de la esposa de una celebridad de Hollywood, lo cual ya le iba bien. Ya no quedaba rastro de su belleza, habia ganado peso y se habia convertido en una persona cargante, sin talento ni personalidad. Era una de esas mujeres que habian sido deslumbrantes en su juventud y que se esforzaban por continuar pareciendolo a golpe de botox y bisturi, aunque lo unico que conseguian era resultar vulgares. Pero despues de trece anos de matrimonio continuaban juntos, y ella estaba encantada con su papel de esposa de un actor y productor famoso. Seguian viviendo en Nueva York, donde Scott podia pasar mas tiempo con su hija y con su nieta. Meredith dudaba de que le fuera fiel a Silvana, aunque lo que hiciera con su vida le traia sin cuidado. Kendall habia crecido y Justin ya no estaba, de modo que no tenian razon alguna para hablarse. No habian vuelto a verse desde el funeral de Justin, un recuerdo que resultaba desgarrador para todos. Scott nunca se habia perdonado por su muerte y no habia tenido mas hijos con Silvana. Ella tampoco queria tenerlos. Era veintiocho anos mas joven que el y se contentaba con seguir siendo su nina. Continuaba comportandose como si fuera su munequita, aunque ya no lo pareciera en absoluto. Kendall nunca habia perdonado a su madre por lo dura que habia sido con su padre a causa del accidente, y rara vez iba a visitarla a San Francisco, algo que a Meredith le causaba una enorme afliccion. La deprimia ver la casa donde ella y su hermano habian crecido. Su madre mantenia la habitacion de Justin intacta, como si fuera un santuario, y ella misma se habia recluido y vivia como un espectro. Los dos encargados de la casa, Jack y Debbie, le producian escalofrios. Se comportaban como si fueran los duenos del lugar, algo de lo que su madre ni siquiera parecia darse cuenta. Y, como resultado de su distanciamiento con Kendall, Meredith habia llegado a tratar a Debbie casi como a una hija. Solo era cuatro anos mayor que Kendall, y Meredith podria haber sido perfectamente su madre. Ademas, vivian en la misma casa y se veian a diario. La exitosa carrera cinematografica de Meredith llego a su fin cuando Justin murio. Tras su muerte se paso dos anos encerrada en la mansion, llorando la perdida de su hijo. Le costo otros tres anos volver a sentirse remotamente ella misma. Tuvo pesadillas durante anos, hasta que por fin, de forma lenta y dolorosa, llego a aceptarlo. Para entonces, rodar peliculas ya no le interesaba. Ella y Scott habian invertido su dinero de forma inteligente. Meredith no tenia grandes gastos y no necesitaba trabajar. Intentar recuperar su categoria de estrella le parecia una farsa absurda despues de la perdida de su hijo, asi que, sin siquiera pretenderlo, se recluyo en la mansion. Se pasaba dias sin hablar con nadie, salvo unas pocas palabras con sus empleados, quienes de manera eficiente, tal como ella les habia ordenado, mantenian el mundo exterior a raya. Ellos la protegian de una vida publica de la que ya no queria formar parte. Durante aquellos cinco primeros anos tras la muerte de Justin, Meredith permanecio ajena por completo a cuanto la rodeaba. No se dio cuenta de que habian desaparecido cuadros de las paredes del salon, ya que rara vez entraba en la estancia y no prestaba atencion a lo que contenia. Cuando Debbie le conto que una sirvienta a la que habia contratado habia robado algunos abrigos de pieles, ella no le dio ninguna importancia y dejo que la despidiera. No se imaginaba volviendo a lucir nada tan glamuroso. En esa etapa de su vida se vestia con vaqueros, y con parkas viejas cuando hacia frio, y se limitaba a sentarse en el jardin. Llevaba zapatillas deportivas o botas de jardineria. Cuando salia a dar sus largos paseos, nadie la reconocia. La gente de la zona solo sabia que la legendaria actriz vivia en aquella mansion. Sabia lo que le habia sucedido y que casi nunca salia de su propiedad. Era una de aquellas tragedias que ocurren en la vida y de la que algunas personas jamas se recuperan. Al parecer, Meredith era una de ellas. Su carrera cinematografica habia llegado a un abrupto final cuando tenia cuarenta y nueve anos. Y, con ella, el resto de su vida. Meredith dejo de ver a todas sus amistades. No le quedaba mas familia que Kendall, que vivia a cinco mil kilometros con su marido y su hija, tenia su propia vida y casi nunca iba a San Francisco. Kendall habia permanecido unida a su padre y la habia excluido a ella de su vida. La traicion de su marido, la muerte de su hijo y el hecho de que su hija se pusiera de parte de su padre y la abandonara habian sido unos mazazos terribles que habian sumido a Meredith en la soledad. Catorce anos despues de la muerte de Justin, a la edad de sesenta y tres, Meredith llevaba una vida tranquila. Durante todo ese tiempo se habia negado a recibir a su agente, que habia fallecido antes de que llegaran a hablar siquiera. No tenia el menor interes en retomar su carrera o volver a convertirse en la gran estrella que habia sido. Ya no se sentia atormentada por la perdida de su hijo. Habia aprendido a vivir con ello, a aceptarlo, y creia firmemente que volveria a encontrarse con el algun dia. Tampoco viajaba. No le gustaba salir de San Francisco, preferia quedarse en la casa donde Justin habia vivido toda su corta vida. Su habitacion, en la planta superior, permanecia intacta. Ya apenas entraba, salvo para buscar una fotografia o algun objeto suyo. Se conformaba con saber que estaba alli y que seguia igual que cuando el vivia. Nada habia cambiado en la casa desde hacia catorce anos. Eso le hacia sentir que, despues de la muerte de Justin, el tiempo se habia detenido. Pero los anos siguieron pasando… Jack y Debbie se habian convertido en los guardianes de Meredith, su escudo contra las miradas indiscretas del mundo exterior, y se aprovechaban de la situacion a su antojo sin que ella cuestionara ni reparara siquiera en lo que hacian. Habian dejado que el seto creciera aun mas para que nadie viera lo que se ocultaba tras aquellos muros. Durante los primeros cinco anos, Meredith habia sufrido una depresion enfermiza. Para entonces su vida podria definirse como apacible, era una mujer con un pasado conocido y una historia tragica, que se conformaba con pasear por el jardin o, en los dias tempestuosos, conducir hasta la playa para plantarse frente al mar y dejar que el viento le azotara la cara. No sentia necesidad de compania ni le apetecia volver a ver a sus viejas amistades. Sus vidas eran muy diferentes de la suya. Meredith habia visto algunas de las peliculas que Scott habia dirigido ultimamente. Le sorprendio lo buenas que eran y la alivio que el no saliera en ellas. No tenia ganas de volver a verle la cara. Hacia tiempo que todas sus fotografias habian desaparecido de la casa. En cambio, habia retratos de Justin por todas partes, en todas las etapas de su corta vida, y tambien de Kendall, aunque bastantes menos. Debbie hablaba a Meredith de su hijo en tono reverente y supo convertirse en alguien esencial a la hora de reconfortarla. Sabia que le apetecia comer y cuando y como le gustaba que le sirvieran. Sabia el tipo de libros que le gustaba leer y se encargaba de conseguirselos. Le dio a conocer algunas series nuevas de television y las veian juntas. Debbie se convirtio en una especie de filtro para ella, evitandole todo aquello con lo que no queria lidiar y haciendole la vida mas facil. Por su parte, Jack la tranquilizaba diciendole que el la mantenia a salvo, y ella le creia. El mundo exterior se le antojaba extrano y peligroso, y, casi sin darse cuenta, Meredith se volvio dependiente de la pareja. Ellos le facilitaban la existencia, y ella les estaba agradecida por ello. No la habian abandonado, como habian hecho Scott y Kendall. Incluso habian colocado una malla tupida entre los barrotes de la verja principal para que los curiosos no pudieran atisbar en el interior de la propiedad. Meredith era una especie de leyenda en el vecindario, la famosa estrella de cine cuyo hijo habia muerto y que se habia retirado del mundo.