loren gray edad
-
loren gray edad - Loren Gray
https://gigalibros.com/entre-flores-y-algo-mas.htmlMelisa jamas ha tenido una vida facil; sin embargo, el don que tiene con las flores ha conseguido que su esfuerzo valga la pena y la vida por fin empiece a sonreirle.
-
Loren Gray Beech Altura, Peso, Años, Novio, Familia ...
https://cuantomide.net/cuanto-mide/loren-gray-beech-altura-peso-anos-novio-familia-biografia/Loren Gray Beech Altura, Peso, Años, Novio, Familia, Biografía. 13 septiembre, 2021, 9:01 am 1.6k Views. Loren Gray Beech ...
-
The Ultimate Fan Book: Includes 50 TikTok superstars and ...
https://www.amazon.es/TikTok-Famous-Ultimate-Book-superstars/dp/1838610766What do Charli D'Amelio, Zach King, Loren Gray and Addison Rae all have in common? They're all TikTok Famous! TikTok Famous - The Ultimate Fan Book is an ...
-
Cuando menos lo esperaba Versión Kindle - Gray, Loren
https://www.amazon.es/Cuando-menos-esperaba-Loren-Gray-ebook/dp/B086Y9YJSMCuando menos lo esperaba eBook : Gray, Loren: Amazon.es: Libros. ... Mirar en el interior de este libro. ... Loren Gray (Autor) Formato: Versión Kindle ...
-
𝙲𝚑𝚒𝚌𝚊𝚜 𝚙𝚊𝚛𝚊 𝚆𝙰𝚃𝚃𝙿𝙰𝙳. - Loren Gray
https://www.wattpad.com/488321140-%F0%9D%99%B2%F0%9D%9A%91%F0%9D%9A%92%F0%9D%9A%8C%F0%9D%9A%8A%F0%9D%9A%9C-%F0%9D%9A%99%F0%9D%9A%8A%F0%9D%9A%9B%F0%9D%9A%8A-%F0%9D%9A%86%F0%9D%99%B0%F0%9D%9A%83%F0%9D%9A%83%F0%9D%99%BF%F0%9D%99%B0%F0%9D%99%B3-loren-gray%F0%9F%92%9ARead Loren Gray from the story 𝙲𝚑𝚒𝚌𝚊𝚜 𝚙𝚊𝚛𝚊 𝚆𝙰𝚃𝚃𝙿𝙰𝙳. by _hyungwonnie_ (𐐪𝚎𝚙𝚒𝚙𝚑𝚊𝚗𝚢𐑂) with 782 reads. tumblr, stories, girl.
-
Grey brown hair, Loren gray, Long wigs - Pinterest
https://www.pinterest.com/pin/637892734705022697/Nov 3, 2019 - 1.5m Likes, 10.4k Comments - loren gray (@loren) on Instagram: “blonde loren walked so brunette loren could run”
-
Loren Gray Haya Altura Peso Cuerpo Estadísticas
https://samkuusisto.com/es/female/4399-loren-gray-beech-height-weight-body-statistics.htmlLa selfie de Instagram de Loren Gray Beech publicada en abril de 2017 ... usaba demasiado maquillaje e hacía cosas que no eran apropiadas para su edad.
-
Cuando menos lo esperaba de Loren Gray
https://gigalibros.com/cuando-menos-lo-esperaba.htmlDenis solo queria hacer bien su trabajo, demostrarle a su padre que era un hijo digno y demostrarse a si mismo que era capaz…
-
Por la venganza y el honor (Escocia 3) de Isabella Abad
https://gigalibros.com/por-la-venganza-y-el-honor-escocia-3.htmlEste es el impactante final de la serie Escocia y corona las vidas de los personajes que conociste en las anteriores novelas, aunque profundiza en las de Brod y Megan, hijos de Glenn e Isobel.
Ha transcurrido una decada desde los sucesos del libro anterior. El clan Campbell crecio y se consolido con el liderazgo del gran laird Glenn y sus hermanos, Ewan y Lyle. Sin embargo, nubarrones de conflicto se asoman y amenazan con destruir la alianza construida.
Brod es el hijo mayor y futuro heredero del liderazgo, un joven que aspira a tener la misma solidez y respetabilidad que su padre Glenn. En busca de experiencia y alentado por el sufrimiento ajeno, viaja a Irlanda al lado de su impetuoso tio Lyle, dirigiendo una expedicion variopinta, en la que se colara su hermana Megan. Esquivando la prohibicion paterna y usando artimanas, esta dispuesta a demostrar que no es una fragil joven a quien casar, sino una guerrera. -
Al otro lado del espejo (Las investigaciones de Theo Cray 2) de Andrew Mayne
https://gigalibros.com/al-otro-lado-del-espejo-las-investigaciones-de-theo-cray-2.htmlEl profesor Theo Cray intenta rehacer su vida. Aunque gracias a el y a sus revolucionarios metodos cientificos se pudo atrapar a uno de los asesinos en serie mas sangrientos de la historia, el halo de sospecha en que se vio envuelto durante la captura ha acabado apartando al investigador del entorno universitario.
-
Asesino de brujas 3. Dioses y Monstruos de Shelby Mahurin
https://gigalibros.com/asesino-de-brujas-3-dioses-y-monstruos.htmlBelladona, eufrasia, baya de arrayan, colmillo de vibora y ojo de buho, pizca de flora, pellizco de animal, para vil posesion o proposito puro. Icor de un amigo, icor de un contrario, un alma negra como noche insondable, pues en la oscuridad se halla el almario do surcan las animas lo inescrutable. El hechizo es familiar; oh, si, muy familiar. Nuestro favorito. Ella nos deja leerlo a menudo. El grimorio. La pagina. El hechizo. Nuestros dedos repasan cada trazo de pluma, cada letra difuminada, y cosquillean con una promesa. La promesa de que jamas estaremos solos, y les creemos. Le creemos a ella. Porque no estamos solos, nunca estamos solos, y los ratones viven en nidos con cientos de otros ratones, con muchisimos ratones. Se refugian todos juntos para cuidar de sus crias, de sus hijos, y encuentran recovecos calientes y secos con mucha comida y magia. Encuentran rincones sin enfermedad, sin muerte. Nuestros dedos se enroscan en torno al pergamino y dejan nuevas huellas. Muerte. Muerte, muerte, muerte, nuestra amiga y enemiga, irremediablemente nos llega a todos. Excepto a mi. Los muertos han de olvidar. Cuidado con suenos que impidan dormir. Ahora desgarramos el papel, lo rompemos en pedazos. En trocitos minusculos. Se desperdigan como ceniza en la nieve. Como los recuerdos. Los ratones se refugian todos juntos, si; se mantienen a salvo y calientes los unos a los otros, pero cuando una cria de la camada enferma, los ratones se la comen. Oh, si. Se la zampan entera, enterita, para alimentar a la madre, al nido. El ultimo en nacer siempre esta enfermo. Siempre es pequeno. Devoraremos a la ratoncita enferma, y ella nos alimentara. Ella nos alimentara. Acecharemos a sus amigos, sus amigos (un grunido brota por mi garganta ante la palabra, ante la promesa vacia), y los alimentaremos hasta que esten gordos de afliccion y culpabilidad, de frustracion y miedo. Alla donde vayamos, ellos nos seguiran. Y entonces los devoraremos a ellos tambien. Y cuando devolvamos a la ratoncita enferma a su madre en Chateau le Blanc, cuando su cuerpo se marchite, cuando sangre, su alma se quedara con nosotros para siempre. Ella nos alimentara. Jamas estaremos solos. Capitulo 2 L'enchanteresse Reid La neblina se extendio por el cementerio. Las lapidas, viejas y agrietadas, con sus nombres borrados hace mucho por los elementos, alanceaban el cielo desde donde estabamos, sobre el borde del acantilado. Incluso el mar en lo bajo estaba silencioso. En esta inquietante luz previa al amanecer, por fin comprendi la expresion silencioso como una tumba. Coco se paso una mano por los ojos cansados antes de senalar hacia la iglesia mas alla de la neblina. Pequena. De madera. Parte del tejado se habia venido abajo. No se veia luz alguna a traves de las ventanas de la rectoria. --Parece abandonada. --?Y si no lo esta? --Beau resoplo mientras sacudia la cabeza, pero se paro con un bostezo--. Es una iglesia y nuestras caras estan pegadas por todo Belterra. Incluso un parroco rural nos reconocera. --Muy bien. --Su voz cansada llevaba menos mordiente de lo que seguramente pretendia--. Duerme fuera con el perro. Todos a la vez, nos giramos para mirar el espectral perro blanco que nos seguia. Habia aparecido a las afueras de Cesarine, justo antes de que decidieramos bordear la costa en lugar de ir por la carretera. Todos habiamos visto lo suficiente de La Foret des Yeux para una eternidad. Durante dias, el perro nos habia seguido, sin acercarse nunca tanto como para que lo tocaramos. Receloso, confuso, los matagots habian desaparecido poco despues de su aparicion. No habian vuelto. Tal vez el perro fuese un espiritu atormentado el mismo, un nuevo tipo de matagot. Tal vez fuese solo un mal presagio. Tal vez fuera por eso que Lou todavia no lo habia bautizado. La criatura nos miro, sus ojos eran un toque fantasmal sobre mi cara. Aprete la mano de Lou con mas fuerza. --Llevamos toda la noche andando. Nadie nos buscara dentro de una iglesia. Es tan buen sitio como cualquier otro para escondernos. Si no esta abandonada --segui hablando a pesar de que Beau habia empezado a interrumpir-- nos marcharemos antes de que nos vea nadie, ?de acuerdo? Lou le sonrio a Beau, con la boca muy abierta. Tan abierta que casi pude contar todos sus dientes. --?Tienes miedo? --Despues de los tuneles --le dijo, tras lanzarle una mirada dubitativa--, tu tambien deberias tenerlo. La sonrisa de Lou desaparecio, y se noto como Coco se ponia tensa y apartaba la mirada. La tension enderezo mi propia columna. Sin embargo, Lou no dijo nada mas; se limito a soltar mi mano y dirigirse hacia la puerta de la iglesia. Giro el picaporte. --Abierta. Sin decir una palabra, Coco y yo la seguimos a traves del umbral. Beau se reunio con nosotras en el vestibulo un momento despues, mientras estudiaba la sala en penumbra con una suspicacia clara. Una gruesa capa de polvo cubria los candelabros. La cera que habia goteado hasta el suelo de madera se habia endurecido entre las hojas muertas y demas restos. Nos llego una corriente de aire desde el santuario un poco mas alla. Sabia a salmuera. A descomposicion. --Joder, este lugar esta encantado --susurro Beau. --Ese lenguaje. --Frunci el ceno en su direccion y entre en el santuario. Se me comprimio el pecho al ver los bancos destartalados. Las paginas rotas de los himnarios amontonadas en un rincon para pudrirse--. Esto fue un lugar sagrado en el pasado. --No esta encantado. --La voz de Lou resono con eco en el silencio. Se detuvo detras de mi para levantar la vista hacia la vidriera. La cara suave de santa Magdalena le devolvio la mirada. Era la santa mas joven de Belterra; habia sido venerada por la iglesia por regalarle a un hombre un anillo bendecido, por el cual su negligente esposa habia vuelto a enamorarse de el y se habia negado a separarse de su lado, incluso cuando su marido se embarco en un peligroso viaje por el mar. Se habia adentrado detras de el en las olas y se habia ahogado. Solo las lagrimas de Magdalena pudieron resucitarla--. Los espiritus no pueden vivir en suelo consagrado. --?Como sabes eso? --pregunto Beau, con el ceno fruncido. --?Como es que no lo sabes tu? --replico Lou. --Deberiamos descansar. --Pase un brazo en torno a los hombros de Lou y la conduje hasta un banco cercano. Estaba mas palida de lo habitual, con oscuras sombras bajo los ojos y el pelo enredado y despeinado por el viento despues de varios dias de duro viaje. Mas de una vez, cuando ella creia que no la estaba mirando, habia visto convulsionarse todo su cuerpo, como si luchara contra alguna enfermedad. No me sorprenderia. Habia sufrido mucho. Todos lo habiamos hecho--. Los aldeanos se despertaran pronto. Investigaran cualquier ruido extrano. Coco se instalo sobre un banco, cerro los ojos y se echo la capucha de la capa por encima de la cabeza. Para no vernos. --Alguien deberia montar guardia. Aunque abri la boca para ofrecerme a hacerlo, Lou me interrumpio. --Lo hare yo. --No. --Negue con la cabeza, incapaz de recordar la ultima vez que Lou habia dormido. Notaba su piel fria y pegajosa contra la mia. Si de verdad estaba luchando contra alguna enfermedad, necesitaba descansar--. Duerme tu. Yo vigilo. Un sonido reverbero muy profundo en su cuello mientras ponia una mano sobre mi mejilla. Su pulgar rozo mis labios, se demoro ahi un poco. Igual que sus ojos. --Preferiria mil veces vigilarte a ti. ?Que veria en tus suenos, Chass? ?Que oiria en tus...? --Ire a ver si hay comida en la despensa --musito Beau. Paso por nuestro lado de mal modo y miro atras para lanzarle a Lou una mirada de asco. Mi estomago gruno mientras lo veia marchar. Trague saliva e ignore la punzada de hambre. La repentina y desagradable presion en mi pecho. Con suavidad, retire la mano de Lou de mi mejilla y me quite el abrigo para darselo a ella. --Vete a dormir, Lou. Te despertare al atardecer y podremos... --las palabras quemaron mi garganta--... podremos continuar. Hacia el Chateau. Hacia Morgane. Hacia una muerte segura. Lou habia dejado bien claro que iria al Chateau le Blanc, la acompanaramos o no. A pesar de mis protestas, a pesar de recordarle por que buscabamos aliados para empezar, por que los necesitabamos, Lou seguia afirmando que podia manejar a Morgane ella sola. Ya oisteis a Claud. Afirmaba que esta vez no dudaria. Ella ya no puede tocarme. Afirmaba que reduciria su hogar ancestral a cenizas, junto con toda su familia. Construiremos uno nuevo. ?Un nuevo que?, habia preguntado yo con recelo. Un nuevo todo. Jamas la habia visto actuar con una intensidad tan decidida. No. Obsesiva. La mayoria de los dias, un brillo feroz iluminaba sus ojos, una especie de hambre salvaje, pero en otros, no los tocaba ninguna luz en absoluto. Esos dias eran muchisimo peores. Se dedicaba a observar el mundo con una expresion aturdida, y se negaba a reconocerme a mi o a mis debiles intentos de consolarla. Habia solo una persona que podia hacer eso. Y el ya no estaba. Ahora tiro de mi para tumbarme a su lado, mientras me acariciaba el cuello casi sin pensar. Sus dedos frios hicieron que un escalofrio bajara correteando por mi columna y senti un repentino deseo de apartarme. Hice caso omiso. La sala se sumio en un silencio denso y pesado, excepto por los grunidos de mi estomago. El hambre era una companera constante esos dias; ya ni siquiera recordaba la ultima vez que habia comido hasta saciarme. ?Con Troupe de Fortune? ?En el Hueco? Al otro lado del pasillo, la respiracion de Coco se hizo poco a poco mas regular. Me concentre en el sonido, en las vigas del techo, mas que en la piel gelida de Lou o en el dolor en mi pecho. No obstante, pocos segundos despues, unos gritos brotaron de la despensa y la puerta del santuario se abrio de par en par. Beau salio disparado y paso como una exhalacion hasta mas alla del pulpito. --!Retirada! --Gesticulo como loco hacia la salida mientras yo me levantaba de un salto--. !Hora de irnos! Ahora mismo, ahora mismo, vamonos... --!Alto! --Un hombre encorvado con las vestiduras de un cura irrumpio en el santuario con un cucharon de madera en la mano. De el goteaba estofado amarillento. Como si Beau hubiese interrumpido su almuerzo de media manana. Los trocitos de verduras desperdigados por la barba canosa y descuidada que ocultaba la mayor parte de su cara confirmaron mis sospechas--. He dicho que vuelvas aqui... Freno en seco y derrapo hasta pararse cuando nos vio al resto. Por instinto, me gire para esconder la cara entre las sombras. Lou se echo la capucha por encima de su pelo blanco y Coco se puso en pie, preparada para salir corriendo. Pero ya era demasiado tarde. Una chispa de reconocimiento ilumino sus ojos oscuros. --Reid Diggory. --Me miro de arriba abajo, luego detras de mi--. Louise le Blanc. --Incapaz de reprimirse, Beau se aclaro la garganta desde el vestibulo y el cura lo miro unos instantes antes de soltar una risita burlona y sacudir la cabeza--. Si, tambien se quien eres tu, chico. Y tu -- anadio en direccion a Coco, cuya capucha todavia ocultaba su rostro entre las sombras. Como habia prometido, Jean Luc habia anadido su cartel de <
> al lado de los nuestros. Los ojos del cura se entornaron al percatarse de la daga que habia desenvainado--. Guarda eso antes de que te hagas dano. --Sentimos haber entrado aqui sin permiso. --Levante las manos en ademan de suplica, mientras fulminaba a Coco con la mirada a modo de advertencia. Sali al pasillo con disimulo, y empece a dirigirme poco a poco hacia la salida. Detras de mi, Lou hizo lo mismo--. No pretendiamos causar ningun dano. El cura solto un bufido desdenoso, pero bajo el cucharon. --Os habeis colado en mi casa. --Es una iglesia. --La apatia resto enfasis a la voz de Coco, que dejo caer la mano como si de repente no fuese capaz de soportar el peso de la daga--. No una residencia privada. Y la puerta no estaba cerrada con llave. --Tal vez para tentarnos --sugirio Lou con un placer inesperado. Con la cabeza ladeada, contemplo al cura fascinada--. Como una arana con su tela. El ceno del cura se fruncio ante el abrupto cambio de tema, al igual que el mio. La voz de Beau reflejo nuestra confusion. --?Que? --En las zonas mas oscuras del bosque --explico Lou, arqueando una ceja--, vive una arana que caza otras aranas. L'Enchanteresse, la llamamos. La hechicera. ?No es asi, Coco? --Coco no respondio, y Lou continuo hablando con decision--. L'Enchanteresse se cuela en las telaranas de sus enemigos, tironea de sus hebras de seda y les hace creer que han atrapado a una presa. Cuando las aranas llegan para darse el festin, la hechicera ataca, envenenandolos despacio con su veneno singular. Los saborea durante dias. De hecho, es una de las pocas criaturas del reino animal que disfruta infligiendo dolor. La miramos todos con cara de pasmo. Incluso Coco. --Eso es perturbador --comento Beau al cabo de unos instantes. --Es inteligente. --No. --Beau hizo una mueca, la cara contorsionada--. Es canibalismo. --Necesitabamos un sitio donde refugiarnos --intervine yo, con la voz un poco demasiado alta. Demasiado desesperada. El cura, que habia estado observando como renian con una expresion de desconcierto, se giro hacia mi--. No sabiamos que la iglesia estaba ocupada. Nos marcharemos de inmediato. El hombre continuo mirandonos en silencio, el labio un poco retraido. El oro broto ante mi en respuesta. Buscaba. Tanteaba. Protegia. Hice caso omiso de su pregunta silenciosa. No necesitaria magia ahi. El cura blandia solo una cuchara. Aunque hubiese llevado una espada, las arrugas de su cara indicaban que era mayor. Anoso. A pesar de su altura, el tiempo parecia haber marchitado su musculatura y haber dejado a un anciano enclenque y larguirucho a su paso. Podiamos escapar de el sin problema. Agarre la mano de Lou para estar preparados, lance un rapido vistazo a Coco y a Beau. Los dos asintieron una vez a modo de confirmacion. -
Destino, ?en que pensabas? de Sara De Dios Valdajos
https://gigalibros.com/destino-en-que-pensabas.htmlUn accidente puede cambiar tu vida, para bien o para mal.
-
Cadena de favores de Marisa Grey
https://gigalibros.com/cadena-de-favores.htmlEstado de Kansas, 1879 Si alguien necesitaba cualquier cosa, un retal para un vestido, un saco de harina o una pala, solo tenia que acercarse al almacen de Gertrud y Pete Schmidt. No habia nada que ellos no consiguieran en el condado de Ellsworth. Tal vez por eso el establecimiento era el corazon de aquella pequena poblacion de poco mas de cien habitantes, con calles polvorientas en verano y nevadas en invierno, que se convertian en un lodazal con las lluvias de primavera u otono. No habia otro almacen en cincuenta kilometros a la redonda, lo que obligaba a los rancheros y granjeros del condado a recurrir a la pareja para cualquier necesidad que se les presentara. Por esa misma razon no era de extranar que Gertrud llevara su negocio como una reina que impartiera justicia divina. Ni el mas audaz de la zona se atrevia a romper las normas de esa mujer de rostro enjuto. Su mirada de halcon era bien conocida, nada se le escapaba en su reino atestado de cachivaches y era capaz de averiguar si faltaba algo con una simple ojeada. Llevaba el cabello siempre tan tirante que muchos aseguraban que no tenia arrugas por ese sempiterno mono negro salpicado de canas. Sus ojos oscuros, pequenos y vivaces, se agitaban de un lado a otro sin perder de vista su mercancia, y cuando algo la molestaba, fruncia la boca de labios finos. Menuda y flaca hasta parecer un junco y pese a su escaso metro cincuenta de estatura Gertrud era capaz de hacer temblar al mas temido. Esa mujer rezumaba autoridad y no dudaba en usar su lengua viperina cuando alguien no acataba sus normas. Como era de esperar, alli estaba cuando Emily entro en el almacen acompanada de su hijo Cody. La recien llegada habria preferido con mucho encontrarse con Pete Schmidt, un hombre afable de rostro rubicundo y siempre sonriente. Inhalo lentamente para darse animos, porque ya sabia lo que estaba a punto de suceder: tendria que humillarse para conseguir los articulos de primera necesidad de la lista arrugada que aguardaba en su bolsillo. Echo un vistazo a la calle, donde la lluvia se cebaba engrosando los charcos que amenazaban con tragarse las ruedas de las carretas. La suya esperaba a pocos metros y Emily se compadecio de Sanson, su viejo caballo, un animal tranquilo que aguantaba con resignacion el tamborileo de la lluvia con los cascos hundidos en el barro. Era absurdo esperar a que Pete regresara de donde estuviera; si ella y Cody salian, se calarian hasta los huesos en un abrir y cerrar de ojos, y lo unico que conseguirian seria un buen catarro. Su orgullo tendria que sufrir las consecuencias del arisco caracter de Gertrud. Oteo el local desde la puerta y descubrio que en ese momento no habia mas clientes; al menos en eso tendria suerte: nadie seria testigo de su verguenza. --!Cierre la puerta! La voz de Gertrud restallo como un latigazo en el ambiente tranquilo del almacen. ?Como habia notado su presencia si no habia hecho ruido con la puerta, y Gertrud no habia levantado la mirada de su libro de cuentas? La mujer la estudio desde detras de sus gafas pequenas y redondas esbozando una sonrisa que provoco un escalofrio en Emily. --Senora Coleman, justo estaba pensando en usted hace un momento. De haber provenido de cualquier otra persona, esa frase habria sido una bienvenida. Viniendo de Gertrud, en cambio, era una clara alusion a lo que Emily le debia. El dedo indice de la mujer golpeaba ritmicamente el libro de cuentas, atrayendo la mirada de la recien llegada. Esta trago el nudo que llevaba anidado en la garganta desde que habia salido del rancho. No supo que contestar, de manera que avanzo hacia el mostrador y sus pasos resonaron sobre el suelo de madera, al ritmo de los fuertes latidos de su corazon. Estrecho la mano de Cody para infundirse valor y el nino le devolvio el apreton, consciente del mal trago que les esperaba. Llego al mostrador de madera con una vitrina de un extremo a otro dividida en compartimentos, donde se exponian articulos tan dispares como fruslerias de encaje y municiones de rifle. Emily se dispuso a hablar cuando Gertrud alzo una mano para atajarla. --Espere aqui, tengo que sacar una cosa al mostrador. Emily asintio agradecida por esos minutos de gracia. Madre e hijo intercambiaron una mirada. Cody le dedico una sonrisa vacilante ensenando el hueco que un incisivo de leche habia dejado la noche anterior al caerse mientras cenaba. Aquel gesto tan sincero e inocente le llego a Emily al alma, hasta el punto de que se agacho para besarle la coronilla al pequeno con toda la ternura de una madre. Atras oyo un ruido, pero no se dio la vuelta, porque en ese momento Gertrud regresaba con una bandeja de manzanas recubiertas de reluciente caramelo. Desprendian un olor dulzon que arranco a Cody un suspiro de deseo. Instintivamente el pequeno se puso de puntillas agarrando el filo del mostrador para ver de cerca esas delicias brillantes y sabrosas. Le encantaban, de hecho habria dado cualquier cosa por un bocado, pero en casa el azucar era un lujo que no se podian permitir, y mucho menos para un despilfarro como manzanas caramelizadas. Se paso la punta de la lengua por el labio inferior con los ojos fijos en la tentacion. --Aparta, nino --le ordeno Gertrud, y agito una mano delante de las narices de Cody, como si su simple presencia pudiera contaminar las manzanas--. Ya sabes que no puedes permitirte una. Emily apreto los labios, sintiendo el impulso de alargar la mano y agarrar uno de los palitos de madera clavados en las manzanas para darselo a su hijo. Reprimio el gesto, consciente de no poder pagar semejante capricho. Carraspeo tragandose la congoja y se saco la lista del bolsillo de su abrigo humedo. --Buenos dias, senora Schmidt. Necesitaria estos arti... La interrumpio el chasqueo de lengua de Gertrud, que la miraba con una condescendencia insultante. --Todavia nos debe los ultimos tres encargos, senora Coleman. Emily arrugo la lista en el puno. Gertrud ya le habia advertido anteriormente de que no le fiaria mas. Aun asi necesitaba aquellas cosas tan sencillas. --La ultima vez le dije que a finales de mes llevaremos el rebano a Dodge City. Cuando nos paguen, saldare mi deuda con ustedes. El senor Schmidt estuvo de acuerdo. --?Sigue con esa absurda idea? ?Llevara un rebano con un cojo, un gandul y un indio? --Yo tambien ire y ayudare --intervino Cody--. Tengo casi nueve anos y se montar a caballo y manejar el lazo. Gertrud ni siquiera se molesto en mirarlo, sino que clavo los ojos en la lista que Emily habia dejado sobre el mostrador. --Es una insensatez. Deberia ser mas responsable y vender la propiedad junto con el rebano a Cliff Crawford. Sabe que esta interesado en esas tierras desde que se establecio en el condado. Es una locura que una mujer lleve un rancho ella sola. --Mi marido volvera... --aseguro en voz baja Emily. Un nuevo chasqueo de lengua la interrumpio. --?Cuanto tiempo hace que el cabeza hueca de su marido se marcho a Oregon en busca de oro, senora Coleman? --Seis meses --murmuro, consciente de que Gertrud lo sabia a la perfeccion. --?Y cree que volvera? Su mirada inquisitiva encogio a Emily. Todos sabian que Gregory se habia marchado seis meses antes en busca de oro, dejando a su familia sola en un rancho aislado con tres personas para ayudar a su mujer. Pero nadie sabia cuando regresaria, ni siquiera su esposa. --Volvera --insistio Emily--. Y llevaremos el rebano a Dodge City --reafirmo, devolviendo la mirada a la mujer--. Por favor, necesitamos esos articulos. Gertrud apreto los labios y los surcos que iban de las aletas de la nariz a las comisuras de los labios se acentuaron. Leyo en silencio la lista. --Esto es pan para hoy y hambre para manana. ?Es consciente de los peligros a los que tendra que enfrentarse para llegar a Dodge City? Ademas, una vez alli ningun hombre querra hacer negocios con una mujer. --Gregory ya habia apalabrado la venta del ganado, el comprador nos espera a finales de mes. --Esta sera la ultima vez --sentencio Gertrud--. Tiene que pagarnos lo que nos debe, y si a final de mes no lo hace, hablare con el sheriff. Emily asintio, sintiendose como una nina a la que estuvieran dando una reprimenda. Se obligo a tragarse las palabras que pugnaban por escapar de sus labios, como que todos sabian que las basculas del almacen de Gertrud estaban manipuladas a favor de los Schmidt; lo que pesaba una libra para Gertrud, era algo menos en cualquier otra balanza. --Por supuesto --convino Emily a desgana--. A final de mes tendra el dinero que le debemos. Gertrud estudio la lista y arqueo las cejas. --?Huevos? ?Acaso sus gallinas ya no ponen? --Se murieron --informo Emily con una nueva oleada de verguenza. --Insensata --musito la otra. Gertrud la examino unos segundos en silencio hasta que algo capto su atencion justo detras de Emily. Entorno los ojos antes de volver a posar su mirada en Cody y su madre.
-
Como salvar a un baron de si mismo (Las Conspiradoras del Cortejo 1) de Eleanor Rigby
https://gigalibros.com/como-salvar-a-un-baron-de-si-mismo-las-conspiradoras-del-cortejo-1.html -
El paciente de Juan Gomez Jurado
https://gigalibros.com/el-paciente.htmlEl prestigioso neurocirujano David Evans se enfrenta a una terrible encrucijada: si su proximo paciente sale vivo de la mesa de operaciones, su pequena hija Julia morira a manos de un psicopata. Para el Dr. Evans se inicia una desesperada cuenta atras cuando descubre que el paciente que debe morir para que su hija viva no es otro que el presidente de Estados Unidos.
Con su habitual maestria en la literatura de intriga, Juan Gomez-Jurado atrapa irremediablemente al lector. Una novela apasionante y emotiva que se desarrolla en 63 freneticas horas, que no da respiro en su lectura y que plantea un dilema moral imposible que puede cambiar el curso de la Historia. -
El sol en la cabeza de Geovani Martins
https://gigalibros.com/el-sol-en-la-cabeza.htmlUn nuevo fenomeno llega de Brasil para conquistar Europa.
-
El peligro de amarte de Flor M. Urdaneta
https://gigalibros.com/el-peligro-de-amarte.htmlLlevaba una vida normal, rutinaria, transcurria entre atender a mi padre, trabajar en el taller y salir con mis amigas algunos fines de semana. Pero todo cambio cuando Noah aparecio delante de mi, con su metro ochenta y cinco de perfeccion, sus penetrantes ojos celestes y esa capacidad asombrosa de hacerme perder la cordura. Noah era la fruta prohibida del Eden, su tacto era adictivo, sus besos apasionados, y aunque intente alejarme, renunciar a lo que sentia cuando estaba con el, no pude; se metio bajo mi piel, tomo mi corazon y luego, cruelmente, me lo arrebato.
-
Hijos de un dios extrano de Pedro Pujante
https://gigalibros.com/hijos-de-un-dios-extrano.htmlAbandono el cine con la confirmada desesperacion de un domingo. Los domingos le parecian tristes como la misma vida. La vida es una semana tediosa, y un domingo inesperado resulta ser el ultimo de los domingos. Un fin al que no le sucedera un lunes de sol y nuevas cosas. Habia acudido solo a la sala a ver una pelicula bastante extrana en la que un hombre volvia de un viaje espacial y no reconocia a su esposa, ni a su perro, ni nada de su antigua vida. Al final se le reimplantaban recuerdos viejos y falsos y continuaba una vida vieja y falsa, un sucedaneo de la existencia que su otro yo habia logrado borrar. Tal vez hubiese sido mas feliz sin todos esos recuerdos antiguos. Tal vez los habia olvidado para defenderse de quien sabe. Y tal vez habia viajado al otro lado del Universo con la unica intencion de dejar atras un mundo grasiento como un trapo de cocina con el que no queria limpiarse mas las manos. Pero ahora le devolvian sus recuerdos, el trapo sucio y arrugado por el tiempo, y se manchaba las manos con la misma memoria grasienta y rancia. Alfredo no entendia bien la pelicula. Todos tenemos derecho a olvidar. Y entonces penso en Gema y sintio que su estomago se retorcia como un nido de serpientes en mitad del infierno. Olvidar era un tesoro y la memoria el dragon que lo custodiaba con su humeante aliento. La noche era azul y Alfredo sintio la soledad de un oceano en sus parpados. Casi podria llorar, se dijo como el que recita un viejo salmo en una lengua que nadie comprende. Ni siquiera el. Pero era domingo, estaba solo y habia caido la noche en la ciudad. Una noche sin estrellas pero azulada como el neon tacito de la modernidad. Una noche anacronica que no le correspondia, y Gema estaba ahi, en algun lugar de su corazon, pero todo era tan complicado. Si solo hubiese un destino, si la vida se compusiese de dias y noches, blanco y negro, todo o nada... Pero no. La vida no es una moneda, cara o cruz, y sin mas eleccion. Gema o Patricia. Elegir a una seria tan sencillo que asustaba. Pero la vida no es una vieja amiga con la que puedes apostarlo todo a una sucia moneda de 50 centimos al viento. No. La vida era una extrana partida de ajedrez en la que cada instante, cada movimiento multiplicaba los siguientes hasta el infinito. Podias saltar en ele como un centauro enfurecido o hacer un largo viaje imperial en cualquier direccion. Y siempre habria una opcion mucho mejor. Siempre te equivocas, siempre. Y nunca hay marcha atras. El tablero de la vida no es de madera, es de fracaso. Era domingo y todo era azul. Estaba solo y tal vez Patricia ya estuviese buscandolo, llamando a casa de Pierre o de algun companero de trabajo, pero quien sabe. Deseaba ser en esos momentos el perdido astronauta en su perdida nave espacial. Aislado de todo seria capaz de pensar con claridad. Y quiza volverse loco de una manera distinta. Su propia locura. No la locura que le imponia esta vida. ?Quien habia elegido esa vida para el? El no, de eso estaba seguro. Yo no, se decia. Otros, sus padres, sus profesores, luego Patricia, sus suegros, sus superiores, la rutina... El no existia del todo. Era una aparicion. Aparecia en fotos de familia, en una orla de la facultad de educacion del 86 y en las cartas de colores que le enviaban cada dia para reclamar el cobro de la luz, el agua, el gas, el destino... Aparecia en las bases de datos de los bancos o de trafico. Era un fantasma. Existia en el corazon improbable de sus dos hijas y en la memoria de aquella chica polaca que conocio en Bristol en su juventud. Pero ahora, aquella rubia sin nombre tambien era un fantasma que carecia de imagen, y la habia olvidado tristemente. Era, entonces, el recuerdo breve de un fantasma. O sea, nada. Y acaso unos cuantos numeros en un calendario, fechas, dias, minutos. En la nave perdida en el negro cosmos no oiria el ruido del trafico. Un trafico lento que moria al anochecer del domingo. No se sentiria como el hielo. Aunque no hacia frio, no lograba deshacerse de la sensacion gelida. La habia aprendido y ya nunca podria deshacerse de ella. Era Patricia. Y sus ojos azules, como la noche, le recorrian, y le insistian en que dejase de ser el mismo. Ser parte de ella, renunciar a Gema y a un sueno de miles de noches en el desierto o en la barra del bar de un lujoso barco hundido: bello, silencioso y tranquilo. Quien era el, salvo la sombra de otro que ya habia muerto. Encendio un cigarro y recordo que habia dejado de fumar hacia un mes o quiza un ano. El amargo sabor a humo y metal quemado le invadio la boca. Lo tiro al suelo y lo piso con la punta de su zapatilla. Dos hombres vestidos de amarillo cambiaban la cartelera del cine. Desatornillaban el cartel del hombre-sin-memoria-que-volvia-del-espacio para colocar el de una-mujer-rubia-pensativa-y-enamorada-en-una-bicicleta-roja y que era ESTRENO. La noche cedia al silencio. Camino junto al hotel. Era siempre el mismo hotel. Aquella tarde habia recorrido los pasillos alfombrados de la sexta planta, la llave de la habitacion era una tarjeta negra con el dibujo de un trebol blanco en el centro, la habitacion era calida y en la mesilla habia una rosa de plastico en un jarroncito de diseno. Siempre la misma habitacion y la falsa flor. Las cortinas a medio echar, la luz de la tarde se filtraba, la silueta desnuda de Gema dibujandose como en un sueno pero real. Ella miraba a traves de la ventana el trafico o las copas de los edificios. Parecian imagenes absurdas y asustadas. Elevadas arboledas de ladrillo. Elegantes rascacielos. Falsificaciones de bosques. Mentiras que se extendian a las habitaciones de los hoteles y a los corazones. No hablaban. Ella contemplaba, quiza, su propio reflejo en la ventana o nada. El pensaba e intuia con una extrana certeza que Gema era feliz y que por eso el tambien. Una forma de consolar su culpa y su miedo. Porque Gema era todo en ese momento pero Patricia estaba ahi. Siempre estaria ahi, y como no. La television estaba apagada y las sabanas limpias y planchadas aguardaban. Hicieron el amor despacio. Saboreando las palabras dulcemente y sin apremios. El, por unas horas, dejaba de ser un fantasma gris y se deslizaba a Gema, a su abrazo desigual pero certero, su caricia leve en los muslos y el sexo, como una fina cuerda que casi lastimaba su fragil amor, pero era tan tierna... Y Gema suplicaba otro beso, dientes y saliva, siempre el ultimo, reia, y en sus ojos brillaba otra realidad que nadie imaginaba. La lengua, otra vez risas y los pequenos pies de Gema como manos de bebe que se agitaban y reian en el aire. Profeta del pasado, asi cualquiera, bromeaba Alfredo cuando Gema le recordaba donde empezo todo, inventaba un recuerdo o lo coloreaba para cambiar de tema, y felicidad eterna solo el dia de hoy y ya es tarde, vistete. Los hoteles son lugares donde el tiempo se detiene. Pero es un tiempo falso y al abandonarlos se sabe de forma casi tragica. Al girar la llave en la cerradura de su casa sintio la soledad del hogar que se extendia desde el suelo como una nube de gas lacrimogeno. Todo lo inundaba, le quemaba los ojos, silencio y eternidad en los escalones de la entrada, los pasos resonaban como en un templo en el fin del mundo, la puerta cedia y ya estaba en el comedor, olia el vacio, y lo reconocia como si fuera ropa humeda o el perfume del primer amor. Las ninas estan acostadas. De donde vienes. La voz de Patricia era hueca, como una grabacion, como en otro idioma pero en castellano y lo entendia todo perfectamente. Alfredo miro a su alrededor, al suelo, el abismo de parquet y dejo el abrigo en el perchero. Al alzar la vista Patricia seguia escudrinandole. Era una mirada amigable y blanda, como un hermoso caballo de Troya que queria derrotar sus muros y quemarlo desde dentro. Luego, un silencio, una pausa que era mas terrible que la voz quieta de aquella sombra en el umbral de la puerta de la cocina. Fui al cine. Fui al cine, solo. Ah, que pelicula viste. No recuerdo el titulo. Era de un astronauta que queria olvidar su vida y empezar otra nueva pero no es tan facil...Y mientras hablaba, otra voz que no era la suya hablaba por el, pero lo conocia mejor que el mismo, y la pelicula no era la misma que el habia visto esa tarde, habia una leve variacion que mejoraba la original o que la ajustaba de algun modo y todo era real y terrible. No te conozco, dijo ella. Acostemonos, manana es lunes y ya es tarde. Y el silencio de la casa, hogar dulce hogar, se adhirio a la soledad como una masa pegajosa. Una mezcla explosiva y salvaje y muerta en la que las cosas perdian su forma y su color, y se diluian en una oscuridad triste y vacia como de cementerio al amanecer. En la fria cama, entre los suenos imposibles y el tic-tac del despertador, Alfredo roncaba en un silbido de flauta y abrazaba el cuerpo equivocado de Patricia. Deja de roncar, no puedo dormir... yo tambien te amo, Gema. Un codazo, Gema es mas que un nombre y tiron violento de las sabanas. Soy Patricia. Alfredo desperto sin entender, que ocurre, nada, vuelve a dormir. Despues amanecio. No habia tocado el cuerpo de Patricia en meses. El lunes era un suspiro sin aliento, un espejo que devolvia una imagen repetida y cansada. Pero glacial y distante. En la facultad Alfredo recordaba vivamente una frase: No te conozco. En la tenue luz de la cocina, en el umbral, la figura de Patricia, tan desigual como una alargada sombra china que lo escrutaba, no te conozco. Yo tampoco te conozco, nadie conoce a nadie. Tampoco conozco a Gema, y quien puede conocer a alguien. Si al menos supieramos en que consiste conocer a alguien. Nos reconocemos en las fotos y damos por supuesto que sabemos quienes somos. Son estupidos comportamientos que aprendemos de los espejos y de otras personas que se cruzan en nuestras vidas. Ilusiones. Gema, a ella no necesitaba conocerla. Para que. Solo ansiaba sus leves presencias, que se filtrase en su vida poco a poco y la cambiase. Como la erosion lenta de las rocas por las mareas. Corazones frios de granito. El tiempo y las olas todo lo pueden. Gema. Su pelo oscuro que le rozaba la cara al besarle. Si fuese menos real quiza habria intentado borrarla de un manotazo, como la hoja del mes de marzo se tira a la basura cuando llega abril. Pero abril nunca llega y siempre es invierno. Pasan los dias y las noches. En el despacho las oquedades de su vida adquieren otra forma. Los libros ordenados cuidadosamente en las estanterias, una foto del claustro, otra de Patricia y las ninas y su comodo sillon de piel azul. Papeles, informes, circulares sobre la nueva ley de educacion y boletines de calificaciones sin rellenar. Un cuarto vacio. La soledad toma la forma del lugar donde se siente. Y en medio del escritorio, junto al calendario escolar y un libro de poesia chilena, un telefono que empieza a sonar. Soy Gema, necesito abrazarte, el mismo hotel, en media hora. De camino al hotel la felicidad le llega en forma de eclipse. Gema-felicidad es un astro que se ha colocado delante de Patricia-antigua-y-triste. Pero, ?cuanto puede duran un eclipse? Los mas bellos son los mas breves, o tal vez no. Nadie lo puede saber. Cuanto dura el tiempo o donde esta la primavera cuando es invierno... De camino al hotel se encuentra con el cine cerrado. Un cartel de una chica montando en bicicleta ha sido cambiado por el de un perro con gafas de sol que sonrie y va a salvar el mundo. Junto al can, un comico que a Alfredo nunca le ha gustado hace una mueca. Tambien lleva gafas de sol, y Alfredo sabe que no ira a ver esa estupida pelicula. Compra flores y sube a la habitacion con prisa, como si fuese la primera vez. Como quien va a recoger un premio. Ella lo espera. Desnuda y calida como ese mes de abril que al fin llega y pronto se esfumara. Ella lo espera. Deja las flores, con una calma disimulada, en el pequeno jarron de diseno. La rosa de plastico ya esta muerta. Todo esta siempre muriendo y ambos lo saben. No hay mucha luz en la habitacion. Como si lloviese en la alcoba, se desviste con celeridad y se cuela bajo las sabanas, cubre el cuerpo desnudo de ella y se precipitan a hacer el amor. Un amor como de lobos, alaridos que parecen llantos, golpes, alientos extenuados. Comienzan a sudar pero no se detienen. Ambos estan muy excitados. Saben, aunque ninguno se atreve a admitirlo, que comparten mas que una cama de hotel. Comparten la soledad y un tedio de millones de anos. Los dos estan solos y es por eso que se saben complices. No necesitan articular palabras, frases que todo lo empanen. Sonrien al verse los rostros y son moderadamente felices. Los ojos tristes de Gema reflejan el gris que proviene de la ciudad. No conciertan otro encuentro. Saben que siempre es el ultimo. Siempre es la primera vez. Y en cualquier momento entrara la luz en sus alcobas y ya no sera ni abril, ni mayo, ni junio. Sera el fin del mundo y eso no tiene solucion, todos lo saben. Tu tambien, Gema. Sin terminar de vestirse Alfredo mira a la mujer que hay en la cama. Cruzan sus miradas y sin hablar ya saben lo que piensan. Son tantos anos ya. No debemos continuar con esto. No, tienes razon, es absurdo. Nos enganamos a nosotros mismos. Estan cansados y tambien lo saben. Y el cansancio, como la desidia, es real porque se reconoce. Patricia recoge su ropa. No mas juegos, solo tu y yo, sin fingir, quiero ser yo misma y no otro nombre falso en un hotel. Quiereme como soy o vete al infierno. Si, tienes razon. Patricia abandona la piel que nunca mas se pondra y que no es de ella. Esa misma noche en casa no hablan del asunto. No inventan mas nombres ni conciben futuras ilusiones. Nunca vuelven a mencionarlo y retornan al guion y a la rutina de ser ellos mismos. EXTRANOS EN LA NIEBLA 'What seest thou else In the dark backward and abysm of time?' W. Shakespeare Intentar contar esta historia es tan dificil como querer olvidarla. Todos nos hemos sentido alguna vez extraviados en el mundo. Como si la vida nos diese la espalda. O nosotros a ella, da lo mismo. Dar la espalda a la vida o que ella te la de a ti es igual de doloroso y patetico. Si, y cuando esto ocurre se comprende que el dolor es la forma que tiene la miseria de decirnos que es parte de nosotros mismos. Yo lo intuia levemente cuando era mas joven. Ayer, la semana pasada, hace mil anos. Ahora, lo he aprendido. Gracias a Elvira. No, no es reproche. Es la verdad. Donde quiera que estes ahora, se que lo comprendes. Tal vez ya lo sabias entonces. Pero ahora no importa. Nos conocimos a la salida de un teatro. La funcion era horrible y ha sido felizmente olvidada. Solo retengo imagenes dispersas. Hombres y mujeres en la oscuridad vestidos de un blanco inmaculado. Sombras y silencio. Como sucede con los recuerdos de nuestras vidas. Se reducen a instantaneas amontonadas y vagas que habitan el cuarto oscuro de nuestra memoria. Pero el cuarto es cada vez mas oscuro. Y las fotografias que se revelan en el mas pobres y absurdas. El tiempo es una tormenta que desordena todos los recuerdos. Elvira saliendo del teatro. Yo acercandome a su paraguas con la excusa de me das fuego, vaya noche que hace y esgrimiendo una mirada lo menos desafiante posible. Su jersey blanco de lana que resplandecia entre la abrumadora multitud. Su chaqueta de cuero chorreando las ultimas gotas de soledad. La muchedumbre devorada lentamente por la omnivora ciudad. Nosotros dos, al fin, solos frente a frente. El cafe en aquel remoto bar de la esquina. Junto a la ventana en una mesa pequena, compartiendo el dialogo de la lluvia con la noche, y cojo tu cucharilla porque la mia se habia caido al suelo, siempre tan torpe y oportuno. Si, tomare otro cafe, no tengo prisa, nadie me esta esperando. Imagenes que ahora vuelven de Elvira sonriendo, cediendo al acercamiento tacito pero demoledor. La actuacion no ha sido gran cosa, coincidimos ambos. Tu cara me es familiar, decias. Sabias que no me conocias pero tan familiar al fin y al cabo. Tus facciones, tu menton afilado, el pelo… No, no era gran cosa la funcion, pero mucho mejor que albergar la certeza de estar muriendo, de que nadie nos espera y saber que estamos solos. Ambos sabiamos que la vida no era mas que un triste vals con el demonio. Y la musica de fondo nos confirmaba que nos extinguiamos y nada se podia hacer al respecto. Al borde siempre de un precipicio que no tiene fin. Yo siempre he estado solo, le susurre al oido. Y sono falso de tan tierno. Ella esbozo una sonrisa y supe que ya no habia marcha atras. Elvira no habia aprendido a lidiar con su soledad. Diez anos viviendo con un asesino no dan para mucho, me dijo en cierta ocasion. Mataba por placer pero al final el tambien murio. Simulo pesar y supe que actuaba. Comprendi que el punal de su marido seguia trabajando despues de muerto. Elvira era su victima postuma. Trabajaba despacio pero era un gran homicida. Me conto que habia fallecido en la carcel. Sobredosis o suicidio. Me mentia. En el rostro de Elvira se apreciaban las cicatrices que deja el amor cuando se transforma en otra cosa. No mostraba liberacion. Si, era obsesivo pero lo ame. Ahora estoy aprendiendo a odiarlo. Es mas duro pero me sienta bien. Aquella noche nos acostamos por primera vez. Haciamos el amor como directores de orquesta enzarzados en una pelea. Enloquecidos vaivenes, sin la menor armonia pero sin detener la voragine de dos cuerpos desnudos y hambrientos de canciones y signos prohibidos. Nunca mas fuimos al teatro. Sabiamos, de algun modo, que era el recuerdo de un principio que no nos pertenecia. El pasado ya murio, le digo sin mucha elocuencia. Ella me mira y no responde. Ahora, al evocar aquel primer encuentro, comprendo que somos efigies ilogicas de lo que un dia fuimos. O sea, nada. Parecia tan casual... Los actores salen del teatro y siguen la actuacion bajo la lluvia. Se miden los gestos, ensayan un guion unico que jamas se repetira. Hoy es siempre el gran dia. El estreno. Ella me cuenta, yo hago que la creo. E invento un desenlace feliz. Le digo: Elvira, he aprendido que la vida, a pesar de lo que oigas decir por ahi, es extrana y ajena; aunque nos empenamos, como ninos caprichosos, en creer que no lo es para no volvernos mas locos aun. Pero si, la vida es un extrano paraiso al que no nos han invitado. ?Y entonces que hacemos aqui? Podriamos ser felices, ?no crees? No lo se, respondo mientras intento desviar la conversacion a otro terreno menos pantanoso.
-
Bailando con el demonio (Abrazando la oscuridad 1) de Alina Covalschi
https://gigalibros.com/bailando-con-el-demonio-abrazando-la-oscuridad-1.html -
Memorias de un primate de Robert Sapolsky
https://gigalibros.com/memorias-de-un-primate.htmlEn la tradicion de Jane Goodall y Dian Fossey, Robert Sapolsky, uno de los divulgadores cientificos mas reconocidos en la actualidad, cuenta la fascinante historia de como dejo las comodidades de la universidad para compartir durante mas de dos decadas su trabajo de campo con una tropa de traviesos babuinos en la sabana africana. Solo un joven idealista podia aterrizar en el corazon de Kenia esperando encontrar ahi una version animada de lo que habia visto y estudiado hasta entonces en el Museo de Ciencias Naturales de Nueva York.
-
Historia de un legajo de Enrique Garza Grau
https://gigalibros.com/historia-de-un-legajo.html -
Los planes del club Bilderberg para Espana de Cristina Martin Jimenez
https://gigalibros.com/los-planes-del-club-bilderberg-para-espana.html?Fue la Transicion tal como nos la contaron? ?Que papel desempeno en ella el Club Bilderberg, ese elitista y selecto grupo compuesto por algunas de las personalidades mas influyentes del mundo? ?Quien ha tomado realmente las decisiones politicas mas importantes y trascendentes en las ultimas cuatro decadas en Espana? ?Los Gobiernos elegidos democraticamente en las urnas o el Club?
Nadie hasta ahora se habia atrevido a investigar los vinculos que unen, desde hace mas de cuarenta anos, a Espana con el Club Bilderberg. Cristina Martin Jimenez, tras el exito de Perdidos y El Club Bilderberg. Los amos del mundo -libros que ya explicaban su funcionamiento y senalaban a algunos de los maximos responsables de este Club-, recurre a los documentos desclasificados por la Agencia de Seguridad Nacional y la CIA para demostrarnos y explicarnos una realidad diferente a la conocida hasta ahora. Seremos testigos, por ejemplo, de como Henry Kissinger y Giscard d’Estaing, destacados Bilderberg, actuaron activamente en nuestra politica o como la situacion geopolitica y geoestrategica de Espana ha hecho que nuestro pais siempre estuviese en el punto de mira de los mas poderosos. -
Te encontrare en la niebla de Alvaro De Mina
https://gigalibros.com/te-encontrare-en-la-niebla.htmlUna pareja rompe su relacion poco antes del Dia Sin Datos; un suceso caotico que marcara la historia de Espana dando paso a la segunda guerra civil. Ese dia, ella se encuentra en Pontevedra y el en Vigo. Separados en un pais dividido por la guerra, Alex tratara de encontrar a Sara y su perrita Keira por todos los medios.
-
Palabras que tu entenderas de Xavier Bosch
https://gigalibros.com/palabras-que-tu-entenderas.htmlMara Lincoln, aventurera incansable, organiza viajes exclusivos para sus clientes. Xavi Vera, arquitecto de exito, recibe el encargo de disenar la casa de su vida. Es nochevieja, y Mara y Xavi, que son pareja, se disponen a brindar por el nuevo ano en un hotel en los Alpes suizos junto a cuatro amigos. Los seis rien, juegan y son felices, pero nada es nunca lo que parece. El ano que estrenan puede cambiarlo todo.
-
Los nombres de las cosas que alli habia de Antonio Skarmeta
https://gigalibros.com/los-nombres-de-las-cosas-que-alli-habia.htmlLos mejores cuentos del autor del inolvidable El cartero de Neruda.
-
En tu mirada de Moruena Estringana
https://gigalibros.com/en-tu-mirada.html -
La Amante Contratada Del Jeque de Ella Brooke
https://gigalibros.com/la-amante-contratada-del-jeque.htmlLos ojos de Laine se redujeron a lineas delgadas y se fijaron sobre el trabajador temporal. Sus ojos se abrieron como platos. El reloj hizo tictac. Podia haber pasado una planta rodadora del desierto. Puso su bloc de notas en el escritorio de Laine y contesto el telefono. --Brandt Interiors -- medio canto --Jacob al telefono. ?Como puedo ayudarle? Laine sonrio victoriosa y miro hacia atras a la pantalla de su ordenador. Tenia mucho trabajo que completar en esta cuenta antes de irse a casa. Convencer a los Madison de que necesitaban rehacer su apartamento igual que todos sus banos, y que ella era la unica decoradora en el estado (y sobre todo la unica en Brandt Interiors) que debian incluso tener en cuenta habia retrasado su planificacion unos dias, pero valdria la pena. La comision en esta cuenta iba a ser astronomica. El senor Brandt tenia la tendencia de no hacer caso a su trabajo o dar los trabajos a los empleados mas mayores (y masculinos), pero en cuanto viera lo que habia hecho, convirtiendo una remodelacion de un bano en un proyecto completo de una vivienda, tendria que llamar su atencion. Un aumento y recibir clientes preferentes no podian tardar. Jacob intento darle el telefono, pero ella le corto haciendo un signo de negacion con un dedo. --Es tu hermana. Ella lo miro, tomo aire y volvio a su trabajo. --Ya te llamara --dijo Jacob. Parpadeo despues de recibir el mensaje y despues recupero su bloc de notas antes de volver a sus ocupaciones. Si Laine hubiera tenia un segundo para respirar, se habria sentido culpable por no atender a su hermanita Emma. Pero la ya bulliciosa carrera de actriz de Emma habia despegado el ultimo ano, y rara vez tenia tiempo para Laine y su padre. Sin duda Emma estaba entre tomas o sesiones de fotos o fabulosas comidas con gente hermosa. Tendria que esperar unas horas a que Laine se tomara un descanso. Laine habia sido contratada en Brandt Interiors directamente despues de graduarse en Parsons hacia cuatro anos. Desde entonces, su vida habia sido patrones, muestras y regateos con los proveedores. Era simplemente como le gustaba, aparte de tener que buscar reconocimiento entre asociados menos talentosos. Eso no le dejaba demasiado tiempo para esas raras criaturas conocidas como fines de semana y vacaciones. Laine solo sacaba tiempo para ir a visitar a su padre, que vivia solo al norte del estado. Laine lo llamaba casi todos los dias. Era casi tan bueno en la creacion de lazos sociales como Laine. Emma habia intentado jugar a casamentera para el mientras estaba en secundaria, pero no habia conseguido nada. Greg McConnell habia sido siempre un hombre de una sola mujer. --!Hiii-eee! Emma canto desde la puerta, golpeando sus nudillos hacia arriba y abajo del marco. Laine casi escupe su cafe. --?Em? ?Que estas haciendo aqui? ?No deberias estar en algun plato en algun lugar en Hollywood? --!Si respondieras a mis llamadas, sabrias que estamos filmando alguna escena aqui en Nueva York! Emma se coloco detras de la silla giratoria de Laine y desordeno su cabello cuidadosamente dispuesto. --!Tomate un descanso! ?Con que frecuencia ves a su hermanita? --Tal vez mas a menudo, si vinieras a casa por vacaciones --dijo Laine , girandose hacia su ordenador. --Me alegro de que estes en la ciudad. Acabo de recibir un sofa bastante decente… Emma se echo a reir. --Oh, no. Me quedo en un hotel, amorcito. --Laine resoplo. Emma se apoyo en el respaldo de la silla de Laine. --!Sal conmigo esta noche! Todo el reparto va a ir a esta fiesta increible. !Va a ser una locura! --?Que parte de <
> dice Laine McConnell para ti? Laine acabo de escribir un correo electronico a un distribuidor. --Yo me debo estrictamente a los negocios. Si tienes alguna funcion donde puedo tomar vino y cenar con algunos posibles clientes, llamame. Emma sacudio los hombros de Laine y se apoyo en el borde de su escritorio. --!Ten cuidado con esos papeles! --!Tienes que empezar a vivir tu vida, Lainey! Emma lanzo sus manos hacia delante. --Hay mucho mas ahi fuera que tu trabajo. --Me gusta el trabajo --argumento Laine. --No subes si no le echas horas. A ti te gusta tu trabajo. --Soy una actriz. Actuo por dinero. Emma, salto sobre el escritorio y cruzo sus piernas. --En serio. Ven conmigo. Te presentare a mis companeros de reparto atractivos. --Mmm. Deliciosos hombres bobos. ?Que mas podria pedir? Emma bajo bloqueando la pantalla de Laine. --!Dale una oportunidad a esos bobos! O por lo menos, baila con ellos y disfruta de unos de los mejores aperitivos y champan. Laine se sento nuevamente en su silla y miro a su hermosa hermana destellando la sonrisa que la habia hecho ganar tanto dinero desde su primer anuncio nacional vendiendo chicles. Emma podia ser exasperante. Cada movimiento tenia una inyeccion de gracia bien practicada. Laine todavia podia ver a Emma desfilando de nina con los zapatos de tacon de su madre. Laine, por el contrario, no habia ni nacido con gracia ni se habia sentido obligada a practicarla. Su estilo era el de una mujer de negocios elegante, con tacones altos pero con estilo, de los que rara vez se olvidaba en publico. Solo se podia imaginar a ella misma vestida al estilo de Emma entre todas las celebridades en esta fiesta. Se sentiria como una ciguena desfilando por ahi en un vestido de fulana. Sin embargo, era muy duro decirle a su hermanita que no. --?Que tengo que hacer para convencerte de que me dejes terminar mi trabajo? --pregunto. --Prometer dejarme vestirte y llevarte a esta fiesta. Al menos, unas dos horas. --Una hora. Me metes en tu mundo durante una hora, y entonces tienes que venir a casa conmigo y comer comida tailandesa y beber algo mientras diseno un nuevo patron de papel de parez en mi portatil. --Tu vida es un cadaver, Lainey. Emma se echo a reir. Apreto el hombro de Laine. --Te enviare mi numero de habitacion. --No puedo esperar. Laine se centro en su pantalla. Iba a tener que tener listas esos pedidos en la siguiente hora. Paso una mano por su cabello. Emma querria hacer algo ridiculo con eso, tambien. Laine tendria que evitar que le pusiera brillantina o que se lo tinera. Su pelo era castano oscuro, como el de su madre, aparte del mechon blanco que crecia desde el nacimiento de su pelo, habia estado alli desde que tenia doce. Lo dejaba caer sobre su frente, como siempre. Le ayudaba a cubrir la cicatriz. Laine murmuraba mientras corregia los codigos de color para las paletas de bano --He dejado de trabajar por ti por esta fiesta, hermana. Preferiria rellenar formularios de compras… *** Como Laine esperaba, Emma estaba esperandola en su apartamento con una pared llena de vestidos de noche escotados y una vestidora personal para pintarla y peinarla hasta que estuviera tan molesta que a pesar de sus inclinaciones naturales, le dijera a su hermana que la dejara en paz. Pero al final de todo, alli estaba parada Laine, en todo su esplendor con su metro ochenta con tacones de diez centimetros (habia perdido la batalla sobre eso, a pesar de su queja de que a los hombres no les gusta una mujer por encima de ellos), en un vestido suelto azul y purpura que parecia que alguien lo hubiera tejido de una pila de panuelos suaves. El dobladillo estaba un poco alto, y el corte resaltaba cada curva de la que ella podia presumir, pero Laine paso un mal rato quejandose sobre su aspecto. Sin duda nunca habia llevado antes nada tan sensual. --Hicieron este para mi coprotagonista en Magnifique. Emma toco el pelo de Laine con cuidado, para no perjudicar la obra de arte en que se habia convertido transformar su recogido diario. Habian dejado mechones alrededor de su cara junto con su mechon de pelo blanco, con todo el efecto suavizando el aspecto habitual de encargada de Laine. --?Magnifique? Laine se giro para mirar a Emma. --?Tu coprotagonista no era una drag queen? Emma sonrio y tomo el brazo de Laine mientras caminaban hacia el edificio donde se celebraba la fiesta. --Recuerda que es un Nihayat Alhaya --dijo Emma. --?Un que? --Ese es el disenador de tu vestido. La gente preguntara. Laine cerro sus ojos. Era poco probable que algun paparazzi tomara alguna foto de ella. No con Emma llamando su atencion. La fiesta tenia lugar tantas plantas arriba que Laine perdio la cuenta de cuantas habia pasado el ascensor. Era como si fueran para arriba al mismo cielo. Brevemente, se pregunto si llegaban tarde, ya que no habia nadie en el ascensor, aunque Emma parecia despreocupada. Solo saco su neceser y comprobo su maquillaje. Laine respiro profundamente varias veces y trato de ser paciente. Si solo fuera una situacion de negocios. Ella se podria desenvolver alli, en su mejor Ralph Lauren y un bonito panuelo, amaba los panuelos y un cuarto lleno de marcas. Laine nunca se iba de un evento sin conseguir por lo menos dos o tres clientes. --No pienses en todas las personas importantes en esta fiesta --se dijo a si misma. No pienses en todas las personas que quieren ver las estrellas, no a los decoradores de las estrellas. Llegaras a casa a las diez con comida para llevar y una pinta de helado con algun tipo de aderezo. Caramelo, dulce tal vez. Emma lanzo a Laine una sonrisa cuando el ascensor paro y se abrio camino en el vestibulo. La gente estaba parada en grupos dispersos, llevando copas de champan y tomando de vez en cuando algun pequeno bocado de las bandejas que pasaban alrededor de los camareros vestidos de blanco. Laine exploro la multitud y pillo una brocheta de gambas envuelta en bacon mientras el camarero pasaba. --?A donde, al Golden Globe? --pregunto. Emma tiro de Laine a lo largo del atico, que realmente era mas como un hangar de avion que como un apartamento. Solo habia algunos muebles dispersos; en cambio los televisores de pantalla plana montados en las paredes reproducian musica y representaban figuras amorfas bailando. No habia nadie bailando en la fiesta, pero las pantallas reflejaban la idea de movimiento. Parecia un desperdicio para Laine. Sin embargo, suponia que las personas estaban realmente ahi para ser vistas. Mientras Emma iba de persona en persona, Laine levantaba sus ojos de la gente hacia la estructura de techo abovedado y las obras de arte que colgaban de las paredes. Tomaba notas mentalmente. Evaluo las conversaciones a su alrededor de ella para cambiar el tema hacia el diseno, o al menos al arte. Ella miro hacia abajo al suelo de madera (madera dura, pero no de una calidad que perduraria mucho a un pesado desgaste). Una persona normal estaria buscando a sus actores y actrices favoritas entre la multitud, pero Laine no pasaba demasiado tiempo pensando en las peliculas que ponia de fondo mientras trabajaba por la noche. Despues de asomarse a los bordes de conversaciones durante lo que le parecio una eternidad, Laine se desvio de su hermana hacia una escultura extrana y alta de plata. No podia decir si se suponia que era alguien volando o algo mas atrevido. Laine se dio la vuelta de repente, al notar a alguien detras de ella. Sus ojos se encendieron inmediatamente ante una cabeza gruesa, exuberante de pelo negro. El hombre al que pertenecia el pelo se levanto en toda su altura imponente de dos metros, si no mas, y sonrio. Una sonrisa rapida, amplia y facil que se plasmaba en sus mejillas bronceadas banadas por el sol y aspiraba el aire de los pulmones de Laine e hizo que ella sintiera un hormigueo en su piel. --Me estas llevando a mi, creo --dijo el hombre. Capitulo Dos --Yo, ummm, ?que? --Laine se espanto ante el increiblemente apuesto hombre de pie ante ella. --?Su vestido? --anadio. Laine miro hacia abajo y paso sus manos por sus muslos. --Oh, es un Ni… Niya… --Nihayat Alhaya. Soy el propietario de la empresa. Conozco al artista que creo este. Aunque acortaron el dobladillo un poco. El levanto una ceja significativamente. --Bueno, creo que tengo que agradecerle por hacer algo bonito para nosotras las chicas altas. Hizo un gesto con una mano. --Le queda muy bien. Es como si Niha se lo hubiera hecho a medida. --Yo… Gracias. Ahora que ella estaba mirandolo mas de cerca, el era un poco una obra de arte por si mismo. Su mandibula era amplia y cincelada, y estaba alineada con una fina barba perfectamente recortada. Pero sus ojos fueron lo que la atrajo, De un calido, verde avellana, que parecian reirse de su asombro, y estaban enmarcados por dos cejas oscuras. --Perdoname. No me he presentado Soy Aziz bin Mohammad bin Ali al Amirmoez. Hizo una leve reverencia. --Oh. Laine asintio lentamente. --Yo soy Laine McConnell. Las cejas de Aziz se levantaron y sus ojos se ensancharon. El tomo su mano y la beso. --Es un placer. Cuando te he visto aqui con un vestido de Niha, no pude evitar venir a examinar tu belleza. Laine parpadeo. ?Hablaba en serio? --?Estabas examinando esta escultura? Aziz la miro y se puso junto a ella. --?Te gusta? Laine inclino la cabeza. --Para decir la verdad, no lo se. Definitivamente podria venderlo a un cliente como una pieza de la sala de estar, pero no me podria sentir bien acerca de ello. --Es sugerente. El punto mismo del arte. Aziz giro su mirada de la escultura para mirarla a ella una vez mas. --Como una hermosa mujer. Provoca. --Laine se echo a reir. Su voz era calida y cadenciosa, con acento pronunciado pero inteligible. Era reconfortante. Pero ella no podia creer que el creyera lo que estaba diciendo. Tenia la facilidad de un hombre que podia conseguir decenas de mujeres solo levantando el brazo. --Eres tan encantadora… dijo casi en un susurro cerca y levanto su mano hacia el pelo que caia sobre sus ojos. --Eres como una rosa que ha florecido en rojo y blanco. ?Las que llaman tigres? Laine se alejo. --Debo volver con mi hermana. --Deberias pasar la noche conmigo. Laine miro boquiabierta a su sonrisa y balbuceo. --Ah, me he expresado mal. Me refiero a que debes mantener mi compania en esta fiesta. Es un poco aburrida, ?no? Creo que piensas lo mismo, o no estarias observando esta escultura. El se acerco mas, lo que la hizo mirar hacia arriba y tragar saliva. --Dejame hacer que tu noche sea interesante. Dejame que te provoque, Laine. Laine vacilo. Aun podia sentir su presencia. Era como si el calor de su piel dorada se proyectara de el como otro ser que presionara aun mas en el espacio personal de ella. Normalmente, ella querria dar un paso atras de el, para mantener su espacio propio, pero al sentirle, casi se sentia poseida por el. El ya se habia declarado. Todo lo que ella tenia que hacer era aceptar. Pero eso era una tonteria, por supuesto. El era solo un hombre. Un hombre guapo sin paliativos y uno claramente acostumbrado a conseguir lo que se proponia con las mujeres. Daria igual que ella tercamente rechazara dicha peticion. --No se si la fiesta es aburrida, o yo soy demasiado aburrida para apreciar a todas las celebridades que hay aqui. Laine se giro y senalo a su hermana. --Es mi hermana pequena. Es la estrella de la familia. Ha sacado tres peliculas este ano. --Ah. Aziz asintio con la cabeza. --Los miembros de mi familia tambien tienen bastante exito, o la mayoria de ellos. Aziz entonces procedio a regalarle en gran detalle acerca de los logros de todos los miembros de su familia, que eran, por cierto, obscenamente ricos y poderosos. Lo que significa que el, tambien era obscenamente rico y poderoso. Un jeque. Laine intento evitar imaginarselo con un panuelo blanco sobre su cabeza mientras continuaba con las propiedades fisicas y empresariales que estaban bajo su propiedad. --?Que estas haciendo aqui? --pregunto Laine. -
Matrimonio pactado de Rosa Saenz
https://gigalibros.com/matrimonio-pactado.html -
A La Sombra Del Ombu, Santa Montefiore de Santa Montefiore
https://gigalibros.com/a-la-sombra-del-ombu-santa-montefiore.html -
Una vida en palabras de Paul Auster
https://gigalibros.com/una-vida-en-palabras.htmlUna vida en palabras es un dialogo entre Paul Auster y la profesora danesa I. B. Siegumfeldt acerca del oficio, el arte y la vida del escritor. Profundamente documentado, y dando un paso mas alla de la biografia, estas paginas estan plagadas de sorpresas y revelaciones que nunca han sido compartidas por el escritor, asi como ensenanzas que a menudo saltan del campo de la literatura para hablarnos de la vida misma. Las conversaciones entre ambos empezaron en 2011 y se han desarrollado a lo largo de cinco anos, cubriendo todas las obras narrativas del autor, asi como los temas y obsesiones que las atraviesan.
-
Panna cotta de Andrea Acosta
https://gigalibros.com/panna-cotta.htmlAndrea Bloom quiere conseguir su sueno: convertirse en chef profesional y abrir su propio restaurante. Un programa de television, Supreme chef, le dara la oportunidad de su vida: un curso de cocina en The Culinary Institute of America y la estancia durante un mes en la cocina de uno de los jueces del concurso. Prometida a Samuel y a punto de casarse con el, Andrea congela sus planes de boda y se marcha a Italia para cocinar al lado de uno de los mas grandes: Luca Graziani, el cocinero italiano superestrella de la television, juez del programa y propietario de varios restaurantes repartidos por el mundo. El sera el encargado de completar la formacion culinaria de Andrea durante ese mes. Petulante, engreido y despota, cocinar a su lado se convierte en un suplicio para ella y pronto surge la animadversion. Una antipatia mutua que marcara las vidas de ambos, una relacion tormentosa que se convertira en obsesion. Dicen que del amor al odio hay solo un paso y ocurre tambien en cocina que, a veces, de la combinacion de los ingredientes mas extranos se obtienen los mejores sabores, tan maravillosos que pueden poner en jaque corazones congelados, suenos y bodas. ?Volvera a ser Andrea la misma despues de esta experiencia?
-
El nombre de la rosa de Umberto Eco
https://gigalibros.com/el-nombre-de-la-rosa.html -
El Despertar de Monica Tinoco Vazquez
https://gigalibros.com/el-despertar.htmlEl mundo que conoce Sara, una joven incomprendida, condenada a vivir en un lugar llamado Eron, comenzara a cambiar al descubrir secretos escondidos en el que es su hogar.
-
La esencia de la lluvia de Carina Vernet
https://gigalibros.com/la-esencia-de-la-lluvia.htmlLa guerra de Cuba esta causando estragos en los negocios. Mientras desde el jardin de su recien estrenada mansion modernista Isidro rememora cuanto le ha costado llegar donde esta, su hija Carmeta ve trastabillar su mundo entregado a la astronomia: si su padre se arruina, se vera obligada a casarse.
-
Complice de Amor de Lily Cerda
https://gigalibros.com/complice-de-amor.htmlLa hija mayor de la familia Logan es una dama ya pasada de edad para contraer nupcias, aunque posee un corazon tierno y compasivo, por esta razon, recibe la herencia de un caballero que en verdad no era su padre, su forma de ser y el temor a Dios la llevan a conocer al Conde de su region, un anciano de corazon duro por el odio, el resentimiento y falto de compasion. El cual, la hace llamar a su presencia, para humillarla y burlarse de la senorita Zarina Logan por su creencia, pero este encuentro, hace que el anciano Conde se quede desconcertado con la joven dama, y ella poco a poco derrite la coraza del corazon de este, haciendole mas compasivo.
-
Suenos de trenes de Denis Johnson
https://gigalibros.com/suenos-de-trenes.htmlEn el verano de 1917 Robert Grainier participo en el intento de matar a un jornalero chino al que habian pillado robando, o al menos lo acusaban de haber robado, en los almacenes de la compania ferroviaria Spokane International, en el corredor septentrional de Idaho. Tres empleados del ferrocarril sujetaron bien fuerte al ladron y lo arrastraron por el largo terraplen que llevaba al puente que se estaba construyendo dieciseis metros por encima del rio Moyea. El chino emitia voluminosas rafagas de una rapida cantinela. Se bamboleaba y se retorcia como una comadreja metida en un saco, golpeando hacia atras con el puno que le quedaba libre al hombre que lo iba arrastrando por el cuello. Cuando el grupo paso frente a el, Grainier, viendolos en apuros, fue a prestarles su ayuda y se encontro a si mismo agarrando al culpable por un pie descalzo. El hombre que caminaba por delante de el, el senor Sears de la direccion de la Spokane International, llevaba agarrado casi inutilmente al prisionero por el sobaco y era el unico de todos, ademas del ininteligible chino, que iba hablando mientras todos se las veian y se las deseaban. --!Muchachos, no tengo ni punetera idea de como vamos a hacer esto! ?Acaso lo tenemos que llevar hasta alli?, tuvo ganas de preguntar Grainier, pero le parecio mejor guardarse el aliento para el forcejeo. A Sears se le escapo la risa, con la cara palida de fatiga y horror. Todos se desplomaron en el polvo, se levantaron y volvieron a caer, con el chino hablando en jerigonza y aterrandolos a los cuatro hasta el punto de que ya daba igual lo que hubieran tenido en mente inicialmente, ahora si que era hombre muerto. Ya no les quedaba mas opcion que tirarlo desde el puente de caballete. Alcanzaron al resto, una cuadrilla de una docena de hombres que estaban descansando al sol, apoyados en sus herramientas, secandose el sudor y contemplando el espectaculo. Grainier aferraba convulsamente el pie calloso del chino, asombrandose de si mismo, cuando el hombre que llevaba el otro pie lo solto, se sento jadeando en el suelo de tierra y recibio una patada en el ojo antes de que Grainier pudiera sujetar la pierna que ahora pataleaba libre. --Ha sido una broma. Una broma --dijo el hombre sentado en la tierra, y al aliado que tenia alli le dijo--: Venga ya, Jel Toomis, dejemoslo correr. --No lo puedo soltar --dijo aquel tal senor Toomis--. !Soy el que lo tiene agarrado del cuello! Y se rio mientras una rafaga de confusion le cruzaba el rostro. --!Yo lo tengo bien cogido! --dijo Grainier, agarrando con mas fuerza en sus brazos los dos pies del pequeno demonio--. !Lo tengo yo, al cabron, y yo me encargo! El grupo de verdugos llego a la mitad del ultimo tramo de puente completado, veinte metros por encima de los rapidos, y se puso al limite de sus fuerzas para tirar al chino al vacio. Pero el pudo con ellos, se dedico a aferrarse a sus brazos y piernas y a lloriquear en su jerigonza hasta que de pronto se solto y se agarro con un brazo a la viga que tenia debajo. Se quito de encima con facilidad a sus captores, que de todas maneras ya se estaban intentando deshacer de el, y salto al otro costado, suspendido sobre el abismo y descolgandose con una mano detras de la otra por la silueta esqueletica del tramo siguiente, pasando por encima del rio. El companero del senor Toomis corrio hasta alli, haciendo equilibrios sobre una viga y pisoteandole los dedos al tipo. El chino se fue descolgando de una viga a la siguiente, como si fuera un artista de circo, descendiendo por la estructura de barras entrecruzadas. Un par de trabajadores de la cuadrilla vitorearon su fuga, mientras que otros, aunque no tenian ni idea de por que lo estaban persiguiendo, gritaron que habia que detener al villano. El senor Sears se saco de la funda que llevaba al cinto un viejo y enorme revolver de polvora negra de cuatro balas y disparo las cuatro, sin resultado. Para entonces el chino ya se habia esfumado. En el camino de regreso a casa despues de aquel incidente, Grainier se desvio tres kilometros hasta la tienda que habia en el poblado ferroviario de Meadow Creek para comprarle una botella de zarzaparrilla Hood's a su mujer, Gladys, y a su hija pequena, Kate. La subida por la colina y a traves del bosque en direccion a su cabana lo dejo acalorado, y antes de recorrer el ultimo kilometro se detuvo a banarse en el rio, el Moyea, en una poza honda que habia rio arriba del poblado. Era sabado por la noche, y a modo de preparacion para la velada un grupo de trabajadores ferroviarios de Meadow Creek se habian congregado en la poza para banarse con la ropa puesta y secarse sentados en las rocas antes de que cayera la oscuridad en el canon. Los hombres dejaban a un lado los zapatos y las botas y se sumergian lentamente hasta los hombros, ahogando exclamaciones y salpicandose. Muchos de ellos ya daban sorbos de whisky de sus petacas mientras permanecian sentados temblando despues de sus abluciones. Aqui y alli asomaba de la superficie algun brazo que agarraba con la mano un sombrero maltrecho, senal de que alguien se estaba mojando la cabeza. Grainier no reconocio a nadie y se quedo solo a un lado, vigilando de cerca sus botas y su botella de zarzaparrilla. Mientras caminaba de regreso a casa bajo la oscuridad creciente, Grainier tuvo la sensacion de que se iba topando con el chino por todas partes. El chino en el camino. El chino en el bosque. El chino caminando con pasos suaves, con las manos colgandole de unos brazos que parecian sogas. El chino saliendo con movimientos danzarines del arroyo, como si fuera una arana. Le dio la Hood's a Gladys. Ella se incorporo hasta sentarse en la cama situada junto a la estufa donde estaba convaleciente de eczema y dando de mamar al bebe. Podria haber hecho acopio de fuerzas y haberse ocupado de la colada y de cortar las patatas y la trucha para la cena, pero siempre que a su mujer le dolia la cabeza o se le taponaba la nariz tenian la costumbre de dejarla que se tumbara con una botella o dos del dulce tonico de Hood's y se tomara un descanso de aquellas tareas. A la bebe de Grainier tambien se la veia afectada por el eczema. Tenia los ojos pegajosos de leganas y le colgaban burbujas de mucosidad de los orificios nasales mientras mamaba y roncaba pegada al pecho de su madre. Kate tenia cuatro meses y seguia siendo completamente calva. No parecia reconocer a su padre. Su ligera enfermedad no le doleria, siempre y cuando no le derivara en tos. Grainier se quedo de pie junto a la mesa de la unica habitacion de la cabana, preocupado. Estaba seguro de que el chino les habia lanzado una poderosa maldicion mientras ellos lo arrastraban, y que eso podia tener toda clase de consecuencias negativas. Aunque asombrado ahora por el frenesi de la tarde, y perplejo por su violencia y por como esta lo habia arrastrado como una semilla al viento, el joven Grainier seguia deseando no haberse refrenado y haber matado al chino antes de que este los maldijera. Se sento en el borde de la cama. --Gracias, Bob --le dijo su mujer. --?Te gusta tu zarzaparrilla? --Si, ya lo creo, Bob. --?Tu crees que la pequena Kate puede notar el sabor en tu teta? --Pues claro que si. Muchas noches oian el tren de la Spokane International que subia al norte, a su paso por Meadow Creek, tres kilometros valle abajo. Esta noche su silbido lejano desperto a Grainier, que se encontro solo en el camastro de paja. Gladys estaba levantada con Kate, sentada en el banco que habia junto a la estufa, desprendiendo restos frios de avena de los costados del cazo y dejando que el bebe chupara aquellas gachas de la punta de su dedo. --?Cuanto crees que sabe la nina, Gladys? ?Tanto como un cachorro, tu crees? --Los cachorros pueden vivir solos despues de que la perra los destete --dijo Gladys. Grainier espero a que ella le explicara que queria decir. Le pasaba a menudo que su mujer pensaba mas deprisa que el. --Una cria de hombre no puede hacer eso --le dijo ella--, irse a vivir por su cuenta cuando lo destetan. El cachorro sabe mas que el bebe hasta que el bebe aprende las palabras. Y me refiero a mas que unas cuantas. Un perro criado en casa tambien conoce unas cuantas palabras, tantas como un bebe. --?Cuantas palabras, Gladys? --Pues bueno --dijo ella--, sabe como se dicen las cosas que sabe hacer y las que tu le mandas que haga. --Dime algunas de esas palabras, Glad. Estaba oscuro y el queria seguir oyendo la voz de ella. --Pues <
> y < > y < > y < > y < >. El perro sabe como se dice todo lo que el sabe hacer. En la oscuridad sintio que la mirada de su hija se volvia hacia el como la de una bestia arrinconada. No era mas que un engano de su imaginacion, pero le derramo algo frio en el espinazo. Se estremecio y se tapo con la colcha hasta el cuello. Robert Grainier ya no olvidaria aquel momento exacto de aquella noche durante el resto de su vida. -
Lazos de hielo 1 de Maria C. Garcia
https://gigalibros.com/lazos-de-hielo-1.html?Podras controlar la pasion?
Nadia es una joven estudiante que acaba de terminar su carrera y busca su primera oportunidad laboral, pero todo su mundo cambiara cuando sea contratada en una de las empresas mas exitosas de la ciudad.
Marco es un abogado de exito que esconde algunos secretos, lo que le ha llevado convertirse en un hombre solitario. Sin embargo, en cuanto conoce a Nadia, su vida repleta de misterios empezara a conducirse por el deseo, algo muy peligroso en su mundo, sobre todo cuando una amenaza inesperada surja de entre las sombras sin que el sea consciente de ello… -
Desterrada del paraiso de Bella Frances
https://gigalibros.com/desterrada-del-paraiso.html!Seducida, despreciada y embarazada!
-
Yo tambien tengo mi Amor de Sophie Rose
https://gigalibros.com/yo-tambien-tengo-mi-amor.htmlPREPARATE PORQUE NUNCA SABES A DONDE NOS LLEVA EL DESTINO Y EL JUEGO DEL AMOR
-
Sin reglas de Isabel Arranz
https://gigalibros.com/sin-reglas.htmlLuz Pavones, una famosa presentadora de television, aparece brutalmente asesinada en su camerino del teatro donde representaba una exitosa obra. Lola Vergara es la inspectora jefa de la Brigada de Homicidios que esta al cargo de una investigacion con muchos sospechosos, dada la naturaleza desagradable, lenguaraz y soberbia de la victima. Ademas Lola vive una situacion familiar extenuante, una madre que pide constante atencion, un hijo adolescente y un marido con el que solo coincide en la cama (y durmiendo). Sin embargo, ella puede con eso y mas gracias a su valvula de escape: el humor y sus cuatro amigas. Pero. ?como sobrevivir cuando todo se complica y su vida privada salta por los aires?
-
Culpable (Trilogia Criminal 1) de Kris Buendia
https://gigalibros.com/culpable-trilogia-criminal-1.htmlNo se en que estaba pensando cuando decidi ir a esa cita. Me ha llevado seis anos haciendome la misma pregunta. ?En que estaba pensando? Pero nadie me iba a decir que la pena por homicidio en el estado de Nueva York es de veinticinco anos. Para una persona como yo sin antecedentes penales, puede ser rebajada a quince, lo que al final por buena conducta, un buen abogado y muchos sobornos al juez y fiscal, han sido seis anos. Hoy sere libre. Libre de un crimen que no cometi, y el cual se me fue condenada injustamente. De no haber estado encerrada en esta prision que se ha convertido en un martirio para mi, no hubiese trazado la mejor de las venganzas. Seis anos de mi vida. Seis anos perdiendo mi vida, la que ahora se encuentra en la nada. Siendo una mujer consumida por el resentimiento, venganza y dolor. Seis anos me tomo trazar la que ahora sera mi nueva vida. Estando encerrada con el tiempo se deja de sufrir, solo deja de importar porque se vuelve cotidiano. La venganza jamas sera cotidiana para mi. Debo vengar su muerte, la muerte de mi marido que fue arrebata frente a mi ese dia, esa ultima cita, donde cada noche puedo recordar el susurro, sentir su aliento en mi cuello y recordar pronunciando en mi mente y a veces en voz alta aquellas ultimas palabras: Te amo hasta los huesos. No solamente murio... fui inculpada por ello. Y esa es la condena que estoy pagado, hasta el dia de hoy. Todo el mundo tiene que conocer a la nueva Emily Thompson. Todos deben saber la verdad. Yo no lo mate... Yo no lo hice. Capitulo 1 Seis anos atras. Nunca imagine que, siendo tan joven, pudiera tener un matrimonio como el que tengo y muchas quisieran tener, no obstante, una carrera exitosa y una buena vida. A mis veinticinco anos y cinco anos de casada, las estadisticas apuntan que casarse joven es estancarse. A la mierda con eso, Harry y yo somos felices, aunque puede que el me gane con esa felicidad. El sexo es bueno, la comunicacion es excelente, pero me esta matando su ausencia. Por supuesto, uno que otro problema como cualquier pareja de casados, pero autenticos, siempre autenticos. Termine mi carrera universitaria de economia mientras Harry entraba en el mundo de los lobos como corredor de bolsa en Wall Street de Nueva York y luego su salto a CEO en su propia. Lo tenemos todo, menos los hijos, aunque esos vendran tarde o temprano, lo puedo sentir. Mientras Harry y yo haciamos el amor en la banera esta manana, atisbe esa mirada de cachorro de querer pedirlo. Un hijo. Desde luego que no. No me siento preparada. Soy hija unica de padre y madre, de hecho, me toco crecer sola desde temprana edad. A diferencia de mi hermana mayor Sidney, fruto de una aventura de mi padre mientras estaba casado con mi moribunda madre. Nunca habia sido tan unida a alguien despues de mi marido que con ella. Es mi mejor amiga. Y mi problema es ese, temor de formar mi propia familia despues de haber quedado huerfana tan joven y de haber tenido un padre infiel, mientras mi madre moria lenta y dolorosamente de cancer de hueso. Harry dice que debo superarlo. Bueno, Harry dice muchas cosas. Y yo por otro lado debo dolorosamente callarme otras. Pero, aunque Harry es el amor de mi vida y yo el suyo, estoy muy lejos de ser perfecta como el. ?Razones? Muchas, pero por los momentos solo puedo decir una. Una. Tengo un amante sin siquiera desearlo. Soy infiel, aunque no debo serlo. Pero lo soy, no estoy orgullosa de ello y todos los dias me prometo a mi misma y a Dios si existe, que voy a parar. Pero no es cierto. El no me deja hacerlo. Bien, te dire que al principio si me sentia mucho mas culpable por lo que hacia. Por lo que hago. Ahora ya no se si soy una victima o una marioneta. Hay culpabilidad cuando voy de regreso a casa, pues estoy un poco nerviosa, pero en cuanto veo que todo esta bien, que nada ha cambiado y que nadie se ha dado cuenta, me siento mejor y se me pasa todo el mal sentimiento de culpabilidad. Y todas las lagrimas valen la pena mientras Harry este a salvo. Y por supuesto Damien ya esta tramando la siguiente cita conmigo, ese es su nombre, Damien Walk, tambien economista, lo llamaria "jugador". Lo conoci hace muchos anos, antes de conocer a Harry, de hecho, me fui primero a la cama con Damien que con Harry. Damien era buen amante, no puedo compararlo con mi marido. Pues llenaba necesidades diferentes. Harry es romantico pero ausente, muy trabajador--demasiado diria yo-- y a veces un poco misterioso. Por otro lado, Damien es un espiritu libre, a diferencia de el y Harry es que Harry es celoso y sobreprotector, Damien no, a el no le importaria compartir a su mujer con otro hombre, en la misma cama. O con una mujer. Lo se yo, que conoci ese mundo. Pero no, a mi no me gusta compartir. Ahora bien, si pudiera describir y diferenciar sus fisicos, Harry es alto, cabello castano, mirada azul zafiro y cuerpo esculpido perfectamente al tacto de mi lengua. Damien es moreno, no tan alto como Harry, cabello negro como su sombra y ojos color miel. Son diferentes y ambos hombre me volvian loca. Si me preguntaran a cual de los dos amo. Harry Thompson. Mi esposo. Es por eso que la aventura acabara tarde o temprano. Mas temprano que tarde. Ya no existe peligro alguno. ?Las razones de por que lo hago? Creo que mas que nada es por sentirme deseada. Por supuesto me encanta el sexo con delirio y se a ciencia cierta que mi marido me desea. Disfruto mas el sexo con el. Pero a veces mi deseo se encuentra rechazado por su ausencia de largas horas de trabajo. ?Autentico? Si. ?Satisfecha? Su ausencia no me lo permite estarlo del todo. Y la mayor de las razones de por que lo hago es porque me encanta tener un hombre malo a mis pies. Cuando Harry se entere se que va a odiarme. Pero no tanto como yo. Es por eso que tengo que parar cuanto antes.
-
La sombra del pasado de Patricia Hortiguela
https://gigalibros.com/la-sombra-del-pasado.htmlCuando me levante esa manana no me imaginaba que iba a ser un dia tan extrano. Ahora me encontraba en un atasco sin saber bien a donde dirigirme. Solo buscaba huir rapidamente. Habia conseguido guardar algunas cosas en una pequena maleta, lo imprescindible. El atasco estaba consiguiendo ponerme muy nerviosa. Cuando estaba quieta, mi cabeza no paraba de dar vueltas y eso no era bueno, ya que podia arrepentirme y regresar. Habia decidido irme y no queria ni debia regresar. Esta ultima vez habia sido la gota que habia colmado el vaso. No iba a permitirle que volviera a tratarme asi, no me lo merecia. Deseaba escapar de ese circulo vicioso y malicioso en el que me encontraba. Los coches de delante no avanzaban debido a algun suceso que desde mi posicion no llegaba a distinguir. El tiempo iba empeorando, habia empezado a nevar con fuerza y si no nos moviamos pronto la carretera iba a estar intransitable. Ademas, los coches no paraban de tocar el claxon y eso me desquiciaba. Busque en la guantera, recordaba tener un mapa de carreteras. Despues de sacar los papeles del coche, un paquete de clinex y unos cedes antiguos encontre el libro de mapas. Hubiera preferido usar el GPS del movil, pero tenia poca bateria y queria mantenerla, por si acaso. Me costo un poco situarme en el mapa, indague hasta encontrar una carretera alternativa. Habia decidido ir hacia el norte porque siempre me habia gustado el mar y me parecia un buen lugar donde empezar de nuevo, ademas de que estaba lejos de mi anterior residencia. Solo queria alejarme de el todo lo que pudiera y lo mas rapidamente posible. Tuve que hacer unas cuantas maniobras y hasta cometer alguna infraccion para conseguir llegar a la carretera que queria. Se trataba de una carretera comarcal poco transitada y mal asfaltada, pero por lo menos me estaba moviendo de nuevo. Continue por ella atravesando pequenos pueblos cada vez mas aislados los unos de los otros. El paisaje era hermoso incluso cubierto por la nieve. No estaba muy acostumbrada a conducir con nieve. En Madrid, de donde era, el clima era muy bueno y pocas veces nevaba. Ojeaba de vez en cuando el mapa para orientarme un poco, pero no estaba muy segura de que fuera por buen camino. Me estaba dejando guiar por la carretera. Conduje por lo que parecia un puerto, tuve que reducir para subir lentamente. El tiempo iba empeorando. La carretera era cada vez mas empinada pero ya no podia hacer otra cosa, no habia sitio para dar la vuelta. Corone y empezo el descenso. El coche se aceleraba por su propio peso y tenia que frenar lentamente para evitar que me derrapara por la nieve cuajandose en el asfalto. Tuve miedo, debia ir con cuidado si no queria salirme y caer por el desfiladero. Iba concentrada en la carretera, en las curvas y en frenar el coche para no embalarme demasiado, cuando el sonido del movil me sobresalto. Por la melodia, sabia de sobra quien me llamaba; era el. Habia regresado a casa y se habia dado cuenta de que no estaba. Un gran miedo me invadio porque estaria furioso. El estomago se me encogio como otras muchas veces me habia sucedido cuando el se enfadaba conmigo. Con el tiempo habia empezado a conocerlo muy bien y cuando se enfurecia se volvia peligroso, irascible y violento. Cualquier cosa, por nimia que fuera, era suficiente para que saltara y empezara una discusion, en las cuales yo siempre salia perdiendo por mas que me disculpara. El movil no paraba de sonar, estaba empezando a dudar si cogerlo o no, pero no debia hacerlo porque el me convenceria para regresar y ya estaba harta de esa relacion tan danina. Subi la musica para asi dejar de escuchar el movil, pero era imposible; en cuanto acaba la melodia, volvia a empezar. Se notaba que estaba desesperado por hablar conmigo. Un sonido de mensaje me indico que habia dejado algo en el buzon de voz. Al rato, otro mensaje mas. Como pude, toque la tecla para oir los mensajes: <>. Otro mensaje: <>. Y luego, mas mensajes, cada uno mas subido de tono: <
>. Un escalofrio me sacudio el cuerpo. Si me cogia, me lo haria pagar; de eso estaba segura. Sabia que debia dejar de escuchar esos mensajes del buzon de voz, pero no podia. < >. Empezaron a temblarme las manos solo de imaginarme lo que me haria si volvia o si me encontraba. La sola idea me dejaba sin respiracion. Rompi a llorar de puro miedo. Las lagrimas me brotaban sin control. Me costaba ver bien la carretera entre la nieve y el llanto. Decidi dejar de oir sus mensajes o no conseguiria calmarme. Al dejar el movil, cogi sin querer una llamada suya. En cuanto me di cuenta de lo que habia hecho, empece a temblar, me faltaban las fuerzas. No era capaz de colgarle, por lo que le escuche decir a gritos: --?Por que te has ido? Mas te vale que vuelvas. ?Donde esta mi cena? Te voy a tener que dejar las cosas claras sobre quien manda en esta casa. ?Por que no me hablas, maldita estupida? --Yo... --fue lo unico que consegui que me saliera por la boca. Queria decirle tantas cosas, pero no me salia la voz como en las otras veces me habia sucedido cuando hablaba o intentaba hablar con el. El miedo me paralizaba. --Yo, yo... ?solo sabes decir eso? Si es que eres tan idiota que no vales para nada. Si no fuera por mi, nadie estaria contigo --ataco. Mi voz interior intentaba coger fuerzas y gritarle que no iba a regresar, que no queria volver a verlo y que me estaba yendo muy lejos de su lado, pero no salia nada de mi boca. --Mas te vale que estes viniendo para aca --amenazo. No respondi. --No encontraras a nadie que te soporte y menos que te quiera, asi que deja de hacer el idiota y vuelve a casa --ordeno. --No --consegui decir muy bajito. --?Acaso has dicho algo? Como tenga que ir a buscarte te rompere todos los huesos del cuerpo --amenazo. Su amenaza me hizo estremecer hasta el punto de que movi el volante sin querer y perdi el control del coche. Hice una maniobra un poco brusca al intentar recuperarlo y consegui lo opuesto, perdi la adherencia a la calzada y derrape. Perdi el control. El coche patinaba en la calzada llena de nieve y se embalaba sin poder impedirlo. Frene fuertemente en un intento por detenerlo, pero las ruedas resbalaron y provocaron que el coche se fuera de culo hacia la derecha. Di un volantazo en la otra direccion para evitar que se cruzara en la carretera. Comence a ir de un lado a otro sin conseguir controlarlo, ni parar. Una curva cerrada aparecio delante de mi y supe que no podria tomarla. Seguia deslizandome por la calzada sin adherencia y a bastante velocidad. Cuando llegue a la curva, intente girar dando otro volantazo, pero el coche torcio sin control, girandose y cambiando de sentido, ahora iba de culo descendiendo. Golpee el quitamiedos y despues cai marcha atras por la ladera. No podia ver por donde iba, solo notaba los golpes, los envites y el ruido de ramas chocando con la carroceria. Veia como la carretera por donde me habia caido se alejaba de mi y como los arboles me rodeaban en mi descontrolada caida. Estaba asustadisima, pense que me iba a matar. Que triste final para mi vida, era la unica idea que me surcaba la cabeza. Moriria en esa carretera y nadie me encontraria ni me echaria en falta. Cerre los ojos esperando el triste desenlace. No puedo asegurar cuanto tiempo estuve cayendo puesto que a mi me parecio una eternidad. Un fuerte golpe detuvo el coche, oi ruidos de cristales rotos y la carroceria abollandose. El cinturon me agarro fuertemente al asiento y salto el airbag que me golpeo duramente en la cara y los brazos. La luna del coche se desquebrajo y todo se volvio oscuridad. --Es la ultima vez que se repite esto, no te pueden volver a expulsar -- recrimino Joaquin. --No ha sido culpa mia, estaban pegando a Juan y yo solo lo defendi -- respondio Tomy, su sobrino. --Sabes que no me gusta que te metas en peleas, debias haber intentado ayudarle sin violencia. --Te prometo que para la proxima lo tendre en cuenta--respondio Tomy, sonriendo. --Alguien iba demasiado rapido en la curva --comento Joaquin al llegar a la curva de la carretera. Se veia que el quitamiedos habia sido arrancado. --Se habran llevado un gran susto --opino Tomy. --Parece que las marcas de las ruedas son recientes, voy a parar y asegurarme que no hay nadie herido. Tu quedate en el coche y ten el telefono a mano por si hay que llamar a emergencias --manifesto. --Pero puedo ayudarte --suplico Tomy. --Quedate en el coche y obedece --ordeno Joaquin. --Vale. Joaquin salio del coche y se acerco a la curva, tuvo que inclinarse bastante para ver bien por la linde. Le parecio distinguir un coche entre la maleza y los arboles. Rapidamente busco el mejor sitio por donde descender con cuidado, ya que la pendiente era pronunciada y resbaladiza debido a la nieve. Fue bajando hasta llegar a un abollado Opel Corsa negro. El coche estaba de morros, por lo que habia caido hacia atras. Joaquin penso que eso podia haber salvado a los ocupantes. La luna del coche estaba desquebrajada, asi que se acerco a la puerta del piloto para poder comprobar si habia alguien en el interior. Entonces vio a una chica que parecia estar inconsciente, golpeo el cristal para ver si reaccionaba, pero no hubo respuesta. Joaquin se imagino lo peor. Intento abrir la puerta, pero estaba atascada; por ahi era imposible. Se dirigio a la puerta del copiloto y esta si se abrio, aunque con dificultad. Echo un rapido vistazo al interior y pudo comprobar que dentro del vehiculo solo estaba la chica. Tenia que sacarla de alli. Antes de entrar en el coche, Joaquin comprobo que el vehiculo estaba atascado y que no iba a seguir descendiendo por la ladera porque un gran arbol lo habia detenido. Se acerco a la joven y la llamo suavemente para ver si se despertaba, pero no hubo respuesta. Se sento en el asiento del copiloto y reviso por encima sus heridas. Tenia un golpe en la cabeza por el que sangraba y algunos cortes superficiales, pero no parecia algo grave; seguramente gracias a que llevaba puesto el cinturon de seguridad. Se lo desabrocho y suavemente la saco del asiento colocandosela en su regazo. No pesaba gran cosa, asi que le fue facil moverla. Al tenerla tan cerca, aprovecho para observarla detenidamente. Tenia el cabello castano claro y por los hombros, unos labios carnosos y la tez con un color rosado. Era una joven hermosa, no le cabia duda de ello. Con la mano la limpio unos pequenos trozos de cristal que tenia en la cara y cuando lo estaba haciendo la joven abrio los ojos. Unos ojos verdes impresionantes lo miraron. Al ver a ese hombre tan cerca de mi me asuste, aunque al tiempo su dulce mirada me tranquilizo. No sabia muy bien por que, pero sentia que no iba a hacerme dano. Intente moverme y el dolor me paralizo. Entonces cai en la cuenta de que habia tenido un accidente y que ese hombre me estaba ayudando. --Por favor, no me lleves a un hospital --suplique. Si iba a uno mirarian mis contactos y lo llamarian a el. Entonces sabria donde encontrarme y nada habria valido la pena. --Tendria que ir a que le revisaran --opino el. --No hace falta --lloriquee. Creo que el percibio mi desesperacion y aunque yo sabia que no lo comprendia no insistio mas. --Esta bien, no iremos al hospital --acepto Joaquin. --Gracias --respondi aliviada. --Sera mejor que salgamos del coche --sugirio. La idea de salir del coche me parecio bien, todo dentro de el me recordaba al accidente. Lo unico bueno es que no me encontraba tan mal. Tenia el cuerpo dolorido, pero no tenia nada roto. Ademas, estando en los brazos de ese hombre incluso me sentia a gusto. Su cercania en vez de ponerme nerviosa me provocaba el efecto contrario. La verdad es que si hubiera podido me habria quedado asi un rato largo. Me imaginaba que esa satisfaccion tambien se debia a estar lejos de Mateo y de su asfixiante control; hacia mucho tiempo que no me sentia un poco libre. Joaquin salio con cuidado del coche conmigo en brazos. Una vez fuera, me dejo suavemente. Cuando pose los pies en el suelo perdi un poco el equilibrio, pero el me sujeto para que no me callera. Sus manos agarrandome fuertemente desprendian una seguridad que me hacian sentir muy rara y a la vez tranquila. No me sujetaban de forma posesiva ni intentaban hacerme dano; al contrario, lo hacian para ayudarme. Era tan diferente a la forma como me agarraba Mateo. --?Se encuentra bien? --me pregunto preocupado. Asenti con la cabeza. Vi entontes como estaba el coche o mejor dicho lo que quedaba de el. Estaba destrozado, parecia mentira que hubiera sobrevivido al accidente puesto que estaba irreconocible. La parte de atras estaba hundida y no se distinguian los asientos traseros porque habian desaparecido en un amasijo de hierros. Si en vez de caer hacia atras hubiera caido con el morro por delante, no lo estaria contando. Un horrible escalofrio me sacudio, podia haber muerto. Habia huido para vivir y casi me mato yo sola. La asimilacion de ese hecho me conmociono y explote. No pude aguantar mas toda la tension, el miedo y la adrenalina que tenia. Rompi a llorar como una nina y no podia parar, mi cuerpo se agitaba con cada lloro. Joaquin al verme tan desconsolada creo que hizo lo unico que se le ocurrio para calmarme. Me abrazo. Un abrazo fuerte e intenso hasta que mis lloros empezaron a menguar. Cuando me agarro senti toda su fuerza y su calor. Escuche el latido de su corazon y senti su suave respiracion que me acariciaba la cabeza. Ese dulce abrazo hizo que mi miedo desapareciera y poco a poco consegui calmarme. Una vez que me recompuse, el olor de su fragancia me penetro. Olia a hombre, junto a algo que parecia animal, pero lejos de desagradarme me encanto, era reconfortante y muy varonil. El calor que su cercania desprendia me hizo dejar de temblar, ya no tenia frio ni tampoco miedo, aunque debia tenerlo, no solo por el accidente sino porque era un desconocido el que me abrazaba, pero no lo tenia. Ese hombre me hacia sentir bien incluso despues de un accidente y no sabia como lo conseguia. Habia dejado de llorar y me sentia totalmente recompuesta. --Tio Joaquin, ?llamo a emergencias? --pregunto alguien desde arriba. Levante la mirada hacia donde venia la voz y pude ver lo lejos que se encontraba la carretera y por donde habia caido. Me estremeci solo al recordarlo y entonces el me apreto mas fuertemente para tranquilizarme y sirvio. --No hace falta Tomy, esta bien. Ahora subimos --respondio. Su voz era tan viril, lo mire a la cara. Entonces me di cuenta de lo guapo que era. Tenia el cabello corto y de color castano oscuro. Unos grandes ojos marrones y unas bonitas facciones, su nariz y sus labios tenian el tamano perfecto y eran muy masculinas. Como seguia abrazandome, pude comprobar que su cuerpo estaba musculado y que tenia un porte atletico; ademas, era mas alto que yo. Fui entonces consciente de la cercania de su cuerpo con el mio y empece a acalorarme solo de pensar en ello. No habia estado tan cerca de ningun hombre a excepcion de Mateo y el no me hacia sentir nada de eso. Jamas me habia agarrado con tanto carino. --?Cree que sera capaz de subir por la ladera? --pregunto mientras me separaba de su dulce abrazo. Sali de mi ensimismamiento y mire la cuesta; dije si con la cabeza. --De todas formas, la ayudare --manifesto. Me coloco la mano en la espalda y me empujo suavemente para que iniciara el ascenso. Poco a poco fuimos subiendo por la resbaladiza ladera. Era muy empinada y nos costaba ascender. Mis zapatillas casi sin suela no eran el mejor calzado para esa tarea y provocaban que me resbalara continuamente. Aunque el siempre me ayudaba para que no me cayera, sujetandome por la espalda. Nos agarrabamos a las ramas para ir subiendo. Nos toco un tramo que era muy empinado y complicado. El se adelanto y una vez que estuvo bien sujeto me dijo: --Agarrese a esas ramas e intente llegar hasta mi mano. Asenti y cogi las ramas que me indicaba. Con la otra mano agarre otra rama que estaba mas arriba y, al soltarme para intentar ascender, el pie derecho me resbalo y cai al suelo. Para frenar el golpe puse la mano derecha y me hice dano en la muneca. Ademas, por culpa de la acumulacion de la nieve descendi un buen trozo de ladera. --!Mierda! --blasfemo el. Me levante todo lo rapido que pude y me disculpe por la torpeza: --Lo siento mucho. Joaquin no pudo evitar que la joven se cayera, no pudo agarrarla desde su posicion y solo vio como se resbalaba. Bajo rapidamente hasta ella, que ya estaba levantandose del suelo. --?Esta bien? --pregunto preocupado. --Si, es que soy muy torpe, perdona --me justifique de nuevo. --No tiene por que disculparse, es culpa mia por no haberle ayudado mejor. Soy yo el que lo siente --se disculpo Joaquin. Me sorprendio su respuesta y no supe que contestar. Mateo jamas me habria dicho eso, me habria chillado e insultado por mi torpeza. Ese hombre a todas luces era muy diferente. --Deme la mano y no la soltare --prometio mirandome fijamente a los ojos. Yo lo mire atonita y supe que lo decia de verdad, la honestidad de sus ojos me lo dejaba claro. No lo dude ni un instante, podia fiarme de el. Asi que le di mi mano izquierda y me deje guiar, a sabiendas de que no me soltaria. Ya no hubo mas incidentes y subimos hasta la carretera. Al llegar arriba, vi a un muchacho joven que estaba al lado de un coche. --Dices que esta bien, pero tiene muy mal aspecto --opino al verme. --No seas desagradable, Tomas --contesto enfadado, al tiempo que me soltaba la mano y se dirigia a su coche--. Perdon --se disculpo mirandome. --Seguramente tengas razon y tenga una pinta horrible --dije para quitar miga al asunto. El joven asintio y me sonrio. Era un muchacho guapo tenia el pelo negro y la tez morena. Tendria unos 12 anos mas o menos y una mirada vivaz. Me revisaba de arriba a abajo inspeccionandome. Yo me mire y pude darme cuenta de por que me observaba asi: tenia la ropa manchada y empapada debido a la caida. Solo llevaba puesta una camisa de manga larga y unos vaqueros azules que dificilmente podrian verse con tanta suciedad y barro. Mis manos estaban sucias y me imaginaba que tambien tendria la cara igual. Debia de tener un aspecto espantoso. Me sacudi un poco la suciedad de la ropa y de las manos, pero fue inutil. Empece a sentir frio, habia anochecido y la nieve era ya muy compacta. No estaba segura de cuanto tiempo habia estado en el coche puesto que era de dia cuando estaba conduciendo, pero la verdad es que tampoco me importaba demasiado. --Juraria que llevaba una manta en el maletero --dijo el hombre. --Apuesto lo que quieras a que la usaste con algun animal --indico el muchacho. --!Mierda! Es cierto --respondio. Se quito su cazadora, se acerco a mi situandose delante y me la coloco en los hombros. Se aseguro de que no se me cayera y me dijo: --Asi entrara en calor. Su mirada era tan intensa y a la vez tan tranquila que me embelesaba. --Gracias, pero tu tendras frio --opine. --No se preocupe por mi, usted necesita entrar en calor mas que yo -- contesto. Le sonrei como agradecimiento. Que hombre tan detallista, pense. Mateo jamas hubiera hecho eso por mi. --Habra que llamar a la Guardia Civil -comento mientras buscaba el movil en sus pantalones vaqueros. --Preferiria que no --intervine. Me miro extranado y entrecerro los ojos frunciendo las cejas de una forma encantadora. --Es lo normal en estos casos, se da parte y si pueden sacaran el coche. --No me importa el coche. --Seguramente tampoco te iba a servir de mucho despues del accidente -- intervino el muchacho. El hombre me observada sorprendido por mi negativa de avisar a la Guardia Civil. La verdad es que no queria dar parte alguno, pero por como me miraba intuia que ese hombre no lo iba a dejar pasar. Lo que menos queria era que Mateo se enterara de mi accidente y de donde me encontraba porque me haria regresar. Un escalofrio de miedo me recorrio todo el cuerpo. Me abrigue mas con la cazadora que me habia prestado, intentando entrar en calor y que el miedo desapareciera. No queria volver a ver a Mateo, la sola idea me aterrorizaba. Cerre los ojos para coger fuerzas. Existia la posibilidad de que, como el coche era mio, igual no tendria por que enterarse de nada. Rogaba a Dios que asi fuera porque si el hombre insistia mucho o llamaba a la Guardia Civil, no me quedaria mas remedio que dar parte. --Podemos dejarlo para otro momento, no me veo con ganas --dije intentando que dejara el tema. --Esta bien --acepto. Le sonrei con gratitud. --?Quiere que la llevemos a algun sitio o que llamemos a alguien para que venga a buscarla? --me pregunto. --No, gracias --respondi. --Pero ?que va a hacer? No se puede quedar aqui. Y si no quiere que llamemos a alguien, diganos a donde acercarla -insistio. --Puede tutearme, me sentiria mejor --intente cambiar de tema. --Esta bien --contesto. --?A donde quieres que te llevemos? --volvio a formular la misma pregunta. --No iba a ningun sitio en concreto --respondi sinceramente. -
#Malos. ?De que lado estas?, Luis Avila de Luis Avila
https://gigalibros.com/malos-de-que-lado-estas-luis-avila.html -
El gigante rubio de Bela Marbel
https://gigalibros.com/el-gigante-rubio.htmlVuelve Bela Marbel y su serie <
>.
Si te quedaste con ganas de mas despues de Mi tierra eres tu, no te pierdas esta historia. -
Con sabor a Irlanda, Olivia Ardey de Olivia Ardey
https://gigalibros.com/con-sabor-a-irlanda-olivia-ardey.html -
Agentes de Dreamland de Caitlin R. Kiernan
https://gigalibros.com/agentes-de-dreamland.htmlEn una calurosa manana un agente especial del gobierno llega a Winslow, Arizona, y se reune con una mujer para intercambiar informacion sobre un suceso inexplicable que ha ocurrido unos dias antes.
En un rancho cerca del mar de Salton el lider de un culto ofrece a sus seguidores algo en lo que creer: el futuro se aproxima y ellos van a participar en su llegada.
Un dia despues de los acontecimientos en el rancho que inquietaron tanto al agente del gobierno como para buscar ayuda de “otras” fuentes, el Laboratorio de Fisica Aplicada de la Universidad Johns Hopkins pierde contacto subitamente con una sonda interplanetaria de la NASA, que ha encontrado algo extrano mas alla de la orbita de Pluton.
Y una mujer que flota fuera del tiempo busca en el futuro y en el pasado respuestas que puedan salvar a la humanidad. -
Mi ultima noche en Londres de Maria Gomez
https://gigalibros.com/mi-ultima-noche-en-londres.htmlEl dia que concluyeron mis vacaciones en Londres, llegue tarde al aeropuerto, me dejo el avion y no tengo suficiente dinero extra para comprar otro boleto.
-
Echadme a los lobos de Patrick Mcguinness
https://gigalibros.com/echadme-a-los-lobos.htmlEL PASADO ES UN LUGAR DONDE SIEMPRE ES AHORA. Un caustico y certero noir literario basado en un caso real. <
>. JONATHAN LEE < >. FRANCINE PROSE < >. JOHN BANVILLE Poco despues del anuncio del Brexit, aparece en el estuario del Tamesis el cuerpo sin vida de una joven. Casi de inmediato, su vecino ;solitario, elegante, profesor jubilado del Chapleton College; es detenido para su sorpresa como principal sospechoso y convertido por la prensa en un monstruo con el que ensanarse. Tampoco el circunspecto detective Ander Widdowson, encargado del interrogatorio, puede creer que algo asi le este sucediendo: el hombre sentado al otro lado de la mesa es alguien a quien conoce, alguien a quien no ha visto en casi treinta anos, desde que el mismo ocupaba como alumno uno de los viejos pupitres de Chapleton; Un presente saturado por la impiedad de los medios de comunicacion y un pasado anclado en el abusivo sistema escolar ingles de los anos ochenta; dos sombrios tiempos que Patrick McGuinness maneja y conecta con una precision heredada de los grandes maestros del genero en este lucido y reflexivo noir literario, basado en un caso real. -
Las espinas del amor (Penword 1) de Arlette Geneve
https://gigalibros.com/las-espinas-del-amor-penword-1.htmlJustin Clayton Penword es el heredero del ducado de Arun. Es un hombre temperamental al tomar decisiones, posesivo con sus amantes, y muy peligroso, pues puede hacer caer a un rival en el campo del honor… y a una mujer con un solo beso, pero Justin sera vencido por una gran belleza cuyo amor por la libertad, la independencia y la aventura rivaliza con el. Y por una pasion arrolladora que sumira a ambos en una voragine de placer, venganza, y amor.
-
!Tierra Tragame!, Martina Minkoff de Martina Minkoff
https://gigalibros.com/tierra-tragame-martina-minkoff.html -
El dilema de Elsa de Begona Gambin
https://gigalibros.com/el-dilema-de-elsa.htmlSi te atreves a conocer la historia de Elsa y Adam experimentaras una amalgama de sentimientos que no te dejaran impasible.
-
Alma viva: La guru del desamor de Ava Cleyton
https://gigalibros.com/alma-viva-la-guru-del-desamor.htmlLa nueva novela de Ava Cleyton que hara las delicias de los lectores.
-
Todos los pajaros cantan de Evie Wyld
https://gigalibros.com/todos-los-pajaros-cantan.htmlLos secretos del pasado nunca nos abandonan Jake es una mujer hurana que vive recluida en una vieja granja en una isla del Reino Unido junto a su perro collie y sus ovejas. Un dia, estas empiezan a aparecer muertas. Nadie sabe que esta pasando, aunque Jake esta convencida de que todo es obra de una bestia misteriosa que merodea por la isla. Poco a poco, el lector descubrira todos los secretos de Jake, que se ha refugiado en la isla para escapar de su turbulento pasado en Australia, donde dejo atras enemigos y fantasmas. El misterio y la naturaleza palpitan en esta tensa narracion sobre la busqueda de la redencion en una intriga magistralmente trabada. Evie Wyld es una de las mejores autoras jovenes segun la revista Granta.
-
El juego de la memoria de Felicia Yap
https://gigalibros.com/el-juego-de-la-memoria.htmlEn la realidad de El juego de la memoria existen dos tipos de personas: los Uno, que pueden recordar solo un dia, el de ayer euros y los Duo, que tambien recuerdan el dia de antes de ayer y que, por lo tanto, pertenecen a la clase privilegiada. Claire y Mark Evans forman un matrimonio mixto, algo poco comun. Claire, Uno, es ama de casa, y Mark, Duo, es un exitoso novelista que se prepara para lanzar su carrera politica. Aparentemente son el ejemplo perfecto de la politica de tolerancia e igualdad, hasta que en la orilla de un rio aparece el cuerpo de una mujer. A partir de entonces, el enigmatico detective Hans Richardson entra en sus vidas y empieza la investigacion en un mundo en el que la memoria es muy fragil.
-
Inmune al amor de R. Freire
https://gigalibros.com/inmune-al-amor.htmlHumanes se define a si misma como una depredadora sexual. Fria, directa, calculadora… esta vacunada contra el amor y es la que decide cuando y como, y tambien la que pone el punto final a cada relacion. Susana ni siquiera es lesbiana, aunque siempre ha querido probar…
Cuando se encuentran por casualidad, la mezcla resulta explosiva. ?Quien seducira a quien? ?Habra alguna victima? Si las dos estan de acuerdo en que solo se trata de una aventura, todo deberia resultar sencillo. ?O no?
"?De verdad he oido lo que creo? ?Es ella la que esta pretendiendo dejar claro que esto no puede convertirse en nada serio? Por favor, es el sueno de mi vida hecho realidad: una mujer preciosa que solo quiere meterse en la cama conmigo por placer, sin complicaciones posteriores ni engorrosas pretensiones de fidelidad o amor eterno. Me siento tan feliz al asimilar sus palabras que casi tengo que contenerme para no saltar de jubilo."
"?A que estamos jugando? ?Seguimos siendo simplemente dos mujeres que lo pasan bien juntas, o por el contrario empieza a surgir algo mas profundo?"
"En estos momentos, daria cualquier cosa por ser esa gotita de agua que ha caido sobre su hombro izquierdo para, desde alli, ir bajando despacio hasta los rinones, coger velocidad al alcanzar los gluteos y, finalmente, desaparecer extasiada en el fin del mundo que significa su entrepierna." -
La senora Fletcher de Tom Perrotta
https://gigalibros.com/la-senora-fletcher.htmlEve Fletcher es una mujer divorciada de poco mas de cuarenta anos que vive en una tranquila ciudad de Nueva Jersey. Ahora que su hijo se acaba de ir de casa para empezar la universidad piensa que ha llegado el momento de dedicarse un poco mas a si misma, de aprovechar todo el tiempo que tiene a su disposicion. Eve se apuntara a un curso universitario sobre <
>, donde conocera a gente de lo mas variopinta, se obligara a cultivar nuevas amistades, descubrira la pornografia en internet y las aplicaciones de citas, y hara cosas que meses atras le hubieran parecido inconcebibles. Mientras, Brendan, su hijo, se dara cuenta de que su idea de lo que seria la peripecia universitaria estaba completamente obsoleta y de que la vida en el campus esta muy lejos de los estereotipos que habia imaginado. En esta novela, Tom Perrotta -uno de los escritores norteamericanos con mas talento para captar la placida existencia suburbana- construye una divertidisima satira sobre la vida actual, un certero e ingenioso fresco sobre el sexo, el amor y la identidad en el siglo XXI. -
El triunfo de las tinieblas de Eric Giacometti
https://gigalibros.com/el-triunfo-de-las-tinieblas.htmlLos nazis recorren el mundo en busca de cuatro reliquias que convertiran el Tercer Reich en un poder milenario.
-
El secreto de Copernico de Pablo Rola
https://gigalibros.com/el-secreto-de-copernico.html?Es posible que vivan resquicios de una desaparecida cultura ancestral? ?Puede desaparecer el libro mas importante de la Astronomia, de la mayor seguridad en Mexico?
Ninguna de estas cuestiones poseia relevancia para el detective Cuevas, cuando una inquietante llamada perturbaba su cotidiano trabajo en Guadalajara.
A miles de kilometros, alguien regresaba de una vida ya pasada, para sembrar el mismo caos que lo perturbo por anos, cuando solo podia sentir adoracion por la cultura que manchaba.
Sin ser consciente de ello, un asustado astronomo se convertia en sus ojos para conseguir atrapar a tan oscuro enemigo. -
Siete susurros de Roser A. Ochoa , Yolanda Garcia
https://gigalibros.com/siete-susurros.htmlDesde el principio de los tiempos han existido romances que se hicieron eternos. Entre estas paginas encontraras siete efimeras historias de amor, cargadas de ternura, sensualidad, nostalgia, magia, alma…
-
Virgenes y verdugos de Tomas Barbulo
https://gigalibros.com/virgenes-y-verdugos.htmlLa trepidante aventura narrada en La Asamblea de los Muertos -primera entrega de esta original serie de Tomas Barbulo- supuso el nacimiento literario de Haibala Ahmed Yadali el Saharaui, un personaje llamado a dejar huella entre los miles de lectores que disfrutaron de la novela. En esta ocasion, el enigmatico y esquivo presunto ladron de joyas se encuentra en Raqa, Siria, detras de las fronteras virtuales del Estado Islamico, recaudando fondos para la yihad en un nuevo ejercicio de espionaje ideado para recabar informacion y pasarsela a Rusia con el objetivo de localizar a Abu Mohamed el Jordano, uno de los principales cabecillas de la organizacion fundamentalista.