• libro el dia que amanecio sin colores - Jean-Gabriel Causse

    https://gigalibros.com/el-dia-que-amanecio-sin-colores.html

    Una novela luminosa que dara color a tu vida.

  • EL DIA QUE AMANECIO SIN COLORES - Casa del Libro

    https://www.casadellibro.com/libro-el-dia-que-amanecio-sin-colores/9788425357251/9069188

    El libro EL DIA QUE AMANECIO SIN COLORES de JEAN-GABRIEL CAUSSE en Casa del Libro: ¡descubre las mejores ofertas y envíos gratis!

  • EL DÍA QUE AMANECIÓ SIN COLORES - Casa del Libro

    https://www.casadellibro.com/libro-el-dia-que-amanecio-sin-colores/9788466350440/11222752

    El libro EL DÍA QUE AMANECIÓ SIN COLORES de JEAN-GABRIEL CAUSSE en Casa del Libro: ¡descubre las mejores ofertas y envíos gratis!

  • El día que amaneció sin colores Versión Kindle - Amazon.es

    https://www.amazon.es/d%C3%ADa-que-amaneci%C3%B3-sin-colores-ebook/dp/B07MJD53BD

    El día que amaneció sin colores Versión Kindle · Una novela luminosa que dará color a tu vida. · Una novela que es como un arcoíris: unos personajes carismáticos, ...

  • Reseña: El día que amaneció sin colores ​- Jean-Gabriel ...

    http://elcaosliterario.blogspot.com/2019/04/resena-el-dia-que-amanecio-sin-colores.html

    4 abr 2019 — "El día que amaneció sin colores" es un libro de Jean-Gabriel Causse, un publicista y diseñador especializado en los colores.

  • el día que amaneció sin colores - Margen Libros.

    https://www.margenlibros.com/libro/el-dia-que-amanecio-sin-colores_443270

    EL DÍA QUE AMANECIÓ SIN COLORES, JEAN-GABRIEL CAUSSE, 17,90€. Una novela luminosa que dará color a tu vida. Una novela que es como un arcoíris: unos persona ...

  • Reseña: El Día Que Amaneció Sin Colores - Jean-Gabriel ...

    http://gozardelavida.blogspot.com/2019/03/resena-el-dia-que-amanecio-sin-colores.html

    17 mar 2019 — El libro está ambientado principalmente en París aunque tiene algún que otro escenario como Nueva York y ambas ciudades están muy bien ...

  • El día que amaneció sin colores - Jean-Gabriel Causse

    https://es.babelio.com/livres/Causse-El-dia-que-amanecio-sin-colores/84681

    Críticas (2), citas extractos de El día que amaneció sin colores de Jean-Gabriel Causse. ... Comprar este libro en papel, epub, pdf en ...

  • EL DIA QUE AMANECIO SIN COLORES | Diego Marín

    https://www.diegomarin.com/9788466350440-el-dia-que-amanecio-sin-colores.html

    UNA NOVELA LUMINOSA QUE DARA COLOR A TU VIDA. UNA NOVELA QUE ES COMO UN ARCOIRIS: UNOS PERSONAJES CARISMATICOS UNA PREMISA ORIGINAL MAGIA INTRIGA Y APRENDIZAJE ...

  • El Dia Que Amanecio Sin Colores por CAUSSE JEAN GABRIEL

    https://www.cuspide.com/9789502812519/El+Dia+Que+Amanecio+Sin+Colores

    Su comentario será moderado antes de su publicación. Este espacio le permite compartir su opinión sobre el libro con otros lectores, evite comentarios que no ...

  • El Día Que Amaneció Sin Colores (ebook) - Agapea

    https://www.agapea.com/Jean-Gabriel-Causse/El-dia-que-amanecio-sin-colores-Ebook--EB9788425357541-i.htm

    Comprar el libro El día que amaneció sin colores (Ebook) de Jean-Gabriel Causse, GRIJALBO (EB9788425357541) con ENVÍO GRATIS desde 18 € en nuestra librería ...

  • Piscis se lleva a tauro al agua (Signos de amor 4. 5 de Anyta Sunday

    https://gigalibros.com/piscis-se-lleva-a-tauro-al-agua-signos-de-amor-4-5.html

    Z Piscis se lleva a tauro al agua ane cedio el paso a Beckett para que entrara en la cabana que habia alquilado. Dejo caer su mochila maltrecha y sus sacos de dormir y cerro con prisa la puerta para que el frio de la noche no se colara dentro. Encendieron las luces, pero Zane estaba demasiado distraido como para fijarse en nada que no fuera quitarle la ropa a Beckett y llevarlo a la mullida alfombra que habia frente al sofa de piel. --Desvistete tu tambien --le pidio Beckett, tiritando. Sin mas preambulo, Zane se quito las botas y el resto de su ropa y lanzo todo al suelo, junto a las prendas empapadas de Beckett. Echo entonces un vistazo a la habitacion y vio una especie de manta decorativa colgada en la pared. --?Crees que descolgar eso es buena idea? --le pregunto Beckett, sus dientes castaneteando. --Es una manta, Becky, y tu estas tiritando. --Ya, pero prefiero cogerme un resfriado a que cometas un delito. Zane se rio ante la actitud superprecavida de Beckett. --Es solo una manta colgada en la pared. --Pero es una cabana antigua, en medio de una reserva natural neozelandesa. Seguro que todos los muebles que hay aqui contienen un pedacito de historia. --Pues vamos a darle mas historia aun --dijo Zane, guinandole el ojo mientras terminaba de descolgar la gruesa manta de lana--. Una historia con final feliz; de como esta fue la manta que salvo a mi novio --?prometido?-- de morir de hipertermia. Beckett nego con la cabeza y dijo: --Hipo. Nada mas decirlo, otro temblor le recorrio el cuerpo y Zane lo cubrio con la manta. --?Que tipo de tapiz sera este? --Del tipo calentito --contesto Zane, percatandose de que el tapiz en cuestion tenia una etiqueta colgando sobre el hombro de Beckett. Se acerco a leer lo que ponia y se quedo de piedra. Beckett giro la cara para mirarlo, sus preciosos ojos azules haciendo que a Zane le diera un vuelco el corazon, igual que la primera vez que lo vio, y cada vez desde entonces. --?Que pasa? --le pregunto. Zane le dedico una sonrisa timida y beso con suavidad sus labios helados. --Si me arrestan, habra merecido la pena. Porque sin toda esta tela mullidita cubriendote, te pondrias enfermo y, a diferencia de mi, tu no tienes sangre kiwi y no puedes andar por ahi desnudo sin sentir ni pizca de frio. Beckett lo miro con incredulidad, pero apreciando la vista de su cuerpo desnudo. --?Y por que iban a arrestarte? --Pues porque segun esta etiqueta es una manta muy antigua. Tiene unas decadas. Una docena de decadas, para ser exactos. Vamos, que esta manta tendria que estar en un punetero museo. Beckett gimoteo y se empezo a desprender de ella. Zane la cogio por el borde antes de que cayera y volvio a envolverle los hombros con ella. --Mejor en ti que en el museo. Zane se acuclillo al lado de Beckett y estudio los rojos y blancos de la manta. --Mmm... Beckett se las apano para alzarle una ceja entre escalofrio y escalofrio. --Mmm, ?que? --El estampado --dijo Zane--. Es un anzuelo gigante. --Miro a su novio tauro y sintio mariposas en el estomago una vez mas. Beckett Fisher, alias <> en ingles, habia sabido tirar la cana y pescar a Zane Penn, que no queria librarse de ese anzuelo jamas--. Hay algo especial en este momento, ?no lo sientes? Es como si estuvieramos destinados a vivirlo. --Eso que sientes --susurro Beckett--, se llama entumecimiento. Zane se rio, pasandose la mano por su pelo empapado. --Siento lo del puente. Beckett abrio un poco la manta y envolvio a Zane con ella, acercandose a el hasta que sus costados quedaron pegados, el brazo y la cadera helados de Beckett, rozando la piel calida de Zane, a quien se le ocurrio una idea estupenda para mantener caliente a su hombre: se deslizo un poco por la alfombra hasta ponerse delante de el, de espaldas, cubriendole la parte delantera con su cuerpo y su calor, mientras el tapiz le tapaba la espalda a modo de manto. Tiro de los brazos de Beckett hasta rodearse el pecho con ellos. Beckett temblo y le dejo un suave beso en el hombro. --Se suponia que tenia que ser romantico --anadio Zane, suspirando. --Y no hay nada mas romantico que besarse en la oscuridad de la noche, en un puente giratorio a punto de derrumbarse sobre un arroyo de agua sucia. --Habia luna llena. Y creia que te estaba gustando. Zane noto la risa de Beckett como una caricia contra su omoplato. --Y me estaba gustando hasta que... --?Nos caimos al agua? --No, antes de eso, cuando... --?Cuando sin querer le di una patada a nuestra mochila y se cayo al arroyo? --Antes de eso. Beckett apoyo la frente contra su espalda y Zane deseo poder traspasarle todo el calor de su cuerpo. --?Antes de eso? --Zane le froto los muslos, que habia colocado alrededor de los suyos, intentando que entrara en calor--. Antes de eso todo era ardiente y supersexi. --Hmm. No se si yo usaria la palabra <> para describir el momento. Oh. Zane, muerto de verguenza, bajo la mirada hacia sus pies, que sobresalian desde debajo de la manta-tapiz. Beckett apoyo la frente en su nuca y dijo: --Te has quedado muy callado. Zane se encogio de hombros. Intento reirse, pero sono mas asustado que otra cosa. --Asi que..., ?no te estaba gustando? ?No... hmm, querias hacer eso conmigo? Los brazos de Beckett se tensaron a su alrededor, y lo agarro fuerte de los hombros, soltando la manta que los cubria y haciendo que esta se resbalara y cayera hasta sus cinturas. --Date la vuelta, Zane. Zane lo hizo, poniendose de rodillas y manteniendo la vista baja, fija en el suave pero duro pecho de Beckett. Un dedo bajo la barbilla le hizo levantar la cara y la mirada. Beckett estudio su expresion con ojos cautelosos, tiernos, curiosos y llenos de deseo. --Me niego a que tu primera vez sea en la oscuridad de la noche, en un puente giratorio a punto de derrumbarse sobre un arroyo de agua sucia --le dijo. Zane intento apartar la mirada, pero Beckett no le solto la barbilla, acercandose a el hasta que sus labios estuvieron casi pegados --. Pero no dudes que me apetece. Me apetece mucho. Zane temblo, pero no tuvo nada que ver con el frio. --Ahora estoy nerviosisimo e hipoexcitado. Beckett sonrio contra su boca y Zane se aparto un poco para poder admirar su expresion, la alegria en su rostro, el brillo en sus ojos y esa sonrisa que curvaba sus labios de la forma mas sensual. Zane no pudo evitar atraerlo a un beso lento y ardiente. Beckett se aparto, riendose entre dientes. --Pero no esta noche. --Pero es una manera maravillosa de mantenernos calientes. --Que romantico --dijo Beckett con sarcasmo. Zane estuvo de acuerdo: --Es verdad. Mi primera vez deberia estar llena de romanticismo. Asi que seguire buscando la situacion perfecta hasta que las ganas te puedan, te abrumen y no tengas mas remedio que perforarme... --Eso no significa lo que crees que significa. --?Percutir...? --Ay, por Dios. --?Propulsarte en mi interior? !Oye! ?A donde vas? --A propulsarme al agua desde un puente. Tirarme una vez no ha sido suficiente. --!HABEIS VUELTO! --GRITO DARLA EN CUANTO EL TAXI LOS DEJO FRENTE A LA CASA DE BECKETT. Zane dejo su maleta en el suelo, corrio por el camino de entrada de su vecina y sumergio a la vieja alcahueta en un abrazo enorme, levantandola del suelo y todo. --Ahora me acuerdo de por que te he echado tanto de menos --le dijo ella al oido--. Y, si no es mucho pedir, ?podrias venir el martes, a eso de las cinco de la tarde, cargarme sobre el hombro y darme unos azotes en el culo? Beckett tosio a su espalda y Zane dejo a Darla en el suelo, sonriendo: --?Que pasa el martes a las cinco? --Bueno, pues que he conocido a un hombre en la biblioteca y va a pasarse por casa a recoger una de mis antiguedades, una silla de epoca. --Tu no tienes ninguna silla de epoca. --Pero eso el no lo sabe y, a lo mejor, ya que esta, termina quedandose con alguna otra antiguedad --dijo Darla. Zane se rio. --Yo te azoto cuando quieras. --Es como estar en clase --dijo Beckett--. Soy ese profesor al que nadie presta atencion.

  • Quiero volver a verte de Angela Drei

    https://gigalibros.com/quiero-volver-a-verte.html

    Una historia de amor bajo el cielo de Londres.

  • La Chica Del Retrato de M. Dolores Vazquez

    https://gigalibros.com/la-chica-del-retrato.html

    Zigor Arbelaez paseaba por la playa cabizbajo y pensativo, habia sufrido un reves el cual le estaba costando asimilar. Zigor era profesor de un instituto en San Sebastian, tenia treinta y siete anos, soltero y sin compromiso, (tuvo varias relaciones sin exito), era moreno y muy bien parecido, por lo que algunas alumnas suyas sonaban con tener "algo" con el. Para el, su profesion era su vida, habia puesto todo su empeno en formar a esos jovenes y no entraba en sus planes tener ningun affaire con ninguna jovencita alocada y mucho menos de la clase. Aquella jovencita alumna suya, llevaba meses provocandolo con insinuaciones que el evadia como podia, hasta que un dia ella se excedio en su proposito y el, la tuvo que frenar dejandole claro que no pensaba liarse con ninguna alumna, que pusiera mas atencion a sus estudios y se olvidase de el. Al dia siguiente la alumna no fue a clase, ni al otro tampoco y asi una semana, tras la cual se persono acusandolo de propasarse con ella, e informando que le habia puesto una denuncia. Zigor no podia dar credito a sus oidos, sus companeros lo avalaban. La chica se mantenia firme en su proposito y finalmente todo termino en el juzgado. Logro salir airoso del caso por falta de pruebas, y porque absolutamente nadie, respaldo aquella infamia. Pero la falta de confianza de los familiares de las demas alumnas, hicieron que dimitiera de su puesto y del centro, ya no se sentia bien moralmente alli. Y alli estaba, paseando toda su rabia y su impotencia por la playa de la Concha. Todo habia acabado si, pero estaba sin trabajo y con su nombre manchado. Caminaba descalzo, sus pies se hundian en la arena casi con rabia, de pronto… algo piso sin darse cuenta, se agacho y debajo de su pie habia un retrato de dos personas, un chico y una chica. El retrato estaba roto por la mitad, cogio la mitad de la chica y se quedo impresionado con su belleza. Instintivamente y sin saber el por que, guardo el retrato en su bolsillo y continuo su paseo volviendo a retomar sus pensamientos. Estaba muy deprimido, sentia rabia, impotencia y deseos de... estrangular a aquella alocada inconsciente alumna. Apenas tendria unos dieciocho anos y ya tenia toda la astucia de una mujer madura. En sus dos relaciones anteriores Zigor no tuvo mucha suerte, pues fue victima de la infidelidad en las dos ocasiones. -"Decididamente las mujeres son el demonio" --penso a la vez que daba una patada a la arena con rabia. Aquella noche cayo rendido en la cama, rendido psiquicamente de pensar y dar vueltas a su cabeza. De pronto, recordo el retrato que encontro en la playa, se levanto y lo cogio del bolsillo de su pantalon y se volvio a acostar con el en la mano. Contra mas lo miraba mas maravillado se iba quedando con la belleza de aquella chica, ?seria una ruptura sentimental la que llevo a esa chica a romper aquel retrato?, ?seria el chico quien lo habia roto? Con el retrato en su mano se quedo dormido por fin. Pasaron dos meses y Zigor no encontraba trabajo, su gran amigo Arnaldo, (tambien profesor del mismo centro), intentaba animarlo continuamente invitandolo a salir de copas o a alguna discoteca. --No tengo muchas ganas de salir Arnaldo, --respondia a su amigo ante su insistencia-- ademas, mis reservas no son muchas, no debo gastar mientras no encuentre trabajo. --Dejame invitarte, !venga hombre! Nos reuniremos alli con los demas amigos y pasaremos un buen rato. --Mira que eres plasta Arnaldo, no puedo contigo. Bueno, saldre un rato esta noche, pero pagare lo mio, mientras pueda yo pago. Fueron a una discoteca donde estaban el resto de la pandilla de amigos, Zigor se sentia amigo de todos para salir, para la diversion... pero amigo de verdad, era el entranable Arnaldo, en el siempre tuvo el apoyo oportuno en los momentos oportunos. La noche fue amena, tomaron algunas copas, Zigor alguna mas que de costumbre y se unieron unas chicas amigas de algunos del grupo, Zigor pasaba de ellas, no tenia ganas de nada, de hecho, estaba deseando de volver a su casa. Unas risas desde el otro extremo del local llamaron la atencion de Zigor, era un grupo de chicas que celebraban algo. De pronto a Zigor le cambio el semblante, entre aquel grupo le parecio ver una cara conocida, dijo que iba al bano y se acerco con precaucion a aquel grupo. !Entre aquellas mujeres vio a la chica del retrato! Zigor estaba emocionado y no sabia el por que, de pronto y justo cuando se iba a acercar a ella con la escusa de darle su retrato, la chica en cuestion cogia su bolso y se despedia de las demas. --Bueno amigas, estaremos en contacto, os ire llamando. Zigor se apresuro a seguirla con al mayor disimulo, y vio como entraba en su coche, rapido paro un taxi y pidio que le siguiera. Llegaron al destino la chica aparco y se adentro en un edificio. --Bueno, pues ya se donde vive, --pensaba para si Zigor--vendre por la manana y hare guardia hasta que la vea salir. Se volvio a la discoteca pensando por el camino la excusa que les iba a dar a sus amigos por aquella escapada repentina, a su amigo Arnaldo le contaria la verdad en cuanto tuviera ocasion, con el no tenia secretos. Aquella noche se acosto con el retrato en la mano cual un adolescente ante su primer Amor. --Mi diosa, --le hablaba al retrato--manana te esperare en tu puerta y por fin te conocere. A la manana siguiente, con mucha prisa salio pronto para ir a la puerta de "su diosa" alli estuvo hasta las tres de la tarde pero la chica no salio. --No importa, --se conformo--se que vives aqui y si hoy no pude verte, manana te vere. Pasaron dos semanas en las que Zigor fue a la puerta de su diosa todos los dias, manana y tarde y nunca la vio salir, ese dia se decidio a preguntar por ella y lo hizo en el primer piso. Le abrio una senora mayor. --Disculpe, esta chica vive en este edificio ?verdad? La mujer miro el retrato y se apresuro a decir: --Si, esta chica vive en el segundo B. pero no esta, se fue hace hace poco a vivir a Francia, concretamente a Bayona. Zigor desconcertado pregunto --?Le dejo alguna direccion? --No no, no se donde se aloja, ?es usted familiar? --Soy... primo suyo, --se apresuro a mentir con la esperanza de que la mujer supiera la direccion-- he llegado hoy a San Sebastian y le queria dar una sorpresa. --Pues lo siento mucho, yo no le puedo ayudar porque no se donde se aloja en Bayona. Ella es enfermera y supongo que se habra ido a trabajar a algun hospital de alli. Ella hablaba poco, -- continuaba la mujer-- estaba casi todo el dia trabajando. Y solo se que estaba embarazada y no estaba pasando por un buen momento. Zigor quedo muy sorprendido, le dio las gracias a la buena mujer y se fue muy desilusionado. ?tendria que ver esa decision de irse con una mala experiencia sentimental?, ?tendria su estado que ver con la misma experiencia? Ahora comprendia la despedida de ella con las amigas, "estaremos en contacto, os ire llamando" claro, era una reunion de despedida. Para Zigor ya no habia marcha atras, se le estaba pasando por la cabeza irse a buscar trabajo a Bayona, ?que tenia que perder?, al fin y al cabo, Bayona era la capital del Pais vasco Frances, no se iba a sentir forastero alli. El dominaba perfectamente el frances y ademas, en Bayona tambien se hablaba el eusquera, le daba igual un lugar u otro. Aquella imagen se le habia convertido en una obsesion, y ahora, al conocer algo de ella sentia un gran interes por conocer mas de ella y por ayudarla. Llego a casa y al poco rato su amigo Arnaldo le llama por telefono. --?Que me cuentas Arnaldo? --Estuve en tu casa y no estabas, estoy aqui al lado en la cafeteria, ?donde estas? --Acabo de llegar a casa espera, bajo a la cafeteria y hablamos que tengo algo que decirte. Zigor no podia ocultarle por mas tiempo esa historia a su amigo, habia estado a punto de contarsela en varias ocasiones, pero penso que seria algo pasajero que olvidaria y no fue asi. Vio a su amigo Arnaldo sentado en la terraza de la cafeteria, !su gran amigo! Le echaria mucho de menos si se marchaba, !vaya que si! Pero estaba decidido. --Hola, ya estoy aqui. --Me tienes intrigado, ?que me tienes que contar?, ?encontraste trabajo? --No amigo, que va... es otra cosa que no te vas a creer. --!Hum! !Venga suelta ya! --Bien, pues el dia del juicio, cuando nos despedimos, no me apetecia meterme en casa y me fui a dar un paseo por la playa y al ir descalzo pise algo que resulto ser un retrato roto por la mitad, eran de una pareja. --Mi intriga va en aumento Zigor... --Lo entiendo.... Pero quiero comenzar por el principio. Como te decia, Cogi ese retrato y quede embrujado con la belleza de la chica, me lo guarde en el bolsillo y desde entonces me duermo con el en la mano. --Jajaja, !pero Zigor! ?Que cuento de princesas me estas contando?, Jajaja, !que tienes ya treinta y siete anos! --Esperaba tus risas y no me molestan amigo, porque hasta yo mismo no termino de despertar de este sueno, cuando te cuente el resto ya... quiza te rias con mas ganas. Arnaldo se puso serio al ver a su amigo tan seguro de si mismo. --Pero... ?de verdad va en serio la cosa? --Muy de verdad amigo. Bien, hace dos semanas, cuando me convenciste para ir a la discoteca, la vi y la reconoci en un grupo de chicas que estaban en el rincon de enfrente, me acerque y justo en ese momento ella cogia su bolso y salio, la segui y vi que subio a su coche, yo cogi un taxi para averiguar donde vivia... --?Esa era la "indisposicion" que te tuvo tanto rato en los banos? Zigor asintio sonriendo y continuo contandole la historia hasta el final, anadiendo su decision de irse a buscar trabajo en Bayona. --Vamos a ver... --Arnaldo estaba confundido--?me estas diciendo que te vas a Bayona a buscar trabajo porque te has enamorado de un retrato que te has encontrado? --Bueno, crei que me entenderias, no hablemos mas del asunto, me voy a casa ya nos veremos antes de irme, --Zigor esta vez parecia ofendido. --!No por favor! No te enfades hombre. Sientate te lo ruego y disculpame, es que el tema... !si es extrano! Pero no te preocupes que intentare comprenderte. --Siempre me comprendiste y me apoyaste en todo, de otro modo no te lo habria contado. --Si claro, pero reconoceras que siempre te pasaron cosas mas... normales, jeje. --Pues si, lo reconozco. Pero te aseguro que me he enamorado y la quiero conocer, puede que sea curiosidad no se... simplemente necesito conocerla, quiza la historia termine antes de comenzar, quiza termine cuando nos conozcamos, por su parte o por la mia, pero siento necesidad de intentarlo y como no encuentro trabajo aqui... quiza en Bayona lo encuentre, no estoy arriesgando nada. --!Claro que estas arriesgando! ?Y yo que? Me dejas tirado, a tu mejor amigo lo dejas tirado por un retrato.... Jajaja, --Arnaldo bromeaba-- es broma hombre, si esa es tu decision yo te deseo la mayor de las suertes, aunque te echare mucho en falta. Zigor se levanto de la silla y dio una palmada en el hombro a su amigo. --Gracias, en el fondo sabia que comprenderias, vamos que me tengo que organizar para el viaje. --Pero... ?te vas ya? --Cuanto antes, necesito Buscar trabajo. --A ver Zigor ?te has parado a pensar que es casi imposible, que encuentres a una persona de la que ni siquiera sabes su nombre en una ciudad de setenta y cuatro mil habitantes?, ?como lo vas a hacer? --Tienes razon, se que no va a ser facil, pero no desistire hasta encontrarla. Se que es enfermera y ahi ya tengo un paso dado, pues buscare en los hospitales que seguro trabajara en alguno, en Bayona no habra muchos hospitales… --Decididamente... te deseo mucha suerte amigo mio, la vas a necesitar. --Gracias de nuevo amigo, me voy, estaremos en contacto. Una semana despues, Zigor partia rumbo a Bayona, estaba a una escasa hora de San Sebastian, iba esperanzado con encontrar un trabajo porque ya lo estaba necesitando y tambien confiaba en encontrar a su diosa. No era ya un nino sonador y sabia que no seria facil, pero algo en su interior le decia que su diosa era su destino y la tenia que encontrar. Capitulo II Bayona (Francia), dos semanas despues... Zigor habia alquilado un pisito pequeno, se dedico a buscar trabajo primero porque realmente lo estaba necesitando, sus reservas economicas ya no eran muchas. No queria desfallecer, lo mas prioritario era encontrar trabajo y despues buscaria a su diosa en los hospitales de Bayona. Aquella tarde tenia su tercera entrevista para un instituto y esta vez salio contento, pues por fin lo aceptaron. Ya tenia trabajo. Aquella noche hablo por telefono con su amigo Arnaldo para contarle la nueva noticia. --!Hola amigo!, ?que me cuentas de nuevo? --Hola Arnaldo, te cuento que por fin tengo trabajo en un instituto, comienzo manana. --Muy buena noticia, ahora te dibujas una verruga en la nariz para no tener problemas Jajaja. --!Muy gracioso tu!, no me lo recuerdes, Jajaja. --Bueno dime, ?que tal va... la diosa? --De momento solo me he dedicado a buscar trabajo que era mas urgente y ahora ya dedicare todas mis horas libres a ella. ?Y a ti como te va? --Bien, sigo en el instituto y nadie hablo nada de ti, no lo hubiese permitido. Los compis te echan de menos te mandan abrazos. --Dales los mios de mi parte tambien. !Oye, de mi diosa nada eh! Eso es entre tu y yo. --Tranquilo amigo, tu secreto esta a salvo conmigo. Si necesitas algo hasta que cobres... lo que sea me lo pides !eh! --Se agradece Arnaldo, creo que llegare jeje. --Ya te ire llamando a ver como te va en el nuevo trabajo y a ver lo que averiguas, ahora nos vamos un ratito a tomar algo. --!Que bueno amigo, yo aqui me siento un poco solo, a ver si en el nuevo trabajo hago alguna Amistad. Un abrazo. Se quedo pensativo y nostalgico, echaba de menos los ratos con la pandilla y sobre todo, echaba mucho de menos los ratos con su amigo Arnaldo. Cogio el retrato de su diosa y se tumbo en la cama a observarla. --Mi diosa… ?donde estas? Tu eres mi destino y yo el tuyo, estoy seguro. Manana cuando salga del trabajo comenzare a preguntar en los tres hospitales que hay en Bayona, con solo tres sera facil encontrarte. Capitulo III Mientras tanto.... Nuestra diosa era real y se llamaba Enara, treinta anos, morena, cabello largo y ondulado, una verdadera belleza. En el hospital general de Bayona comenzaba su turno de noche. Estaba embarazada de cuatro meses, de un padre irresponsable y egoista. Se enamoro de el cuatro anos atras y al comunicarle su embarazo se desentendio de ella y de su hijo. No tenia familia, solo una tia alli en Bayona, la cual siempre fue como su madre. Tambien tenia a su buena amiga Leyre, que al igual que Zigor, tuvo que dejar en San Sebastian, su lugar de nacimiento. Su vida se habia complicado mucho, se sentia muy sola y dolida, su unica fuerza para continuar y luchar era el hijo que llevaba en su vientre. Su tia era muy buena con ella, tenia casa gratis y el carino de ella y eso le ayudaba mucho en esta nueva etapa de su vida. En sus tres meses en la clinica, habia hecho buena Amistad con la companera de admision, Shantal, se complementaban muy bien, le recordaba a su gran amiga Leyre de San Sebastian. A los pocos dias de llegar a la clinica le dio un desmayo tipico de su embarazo y Shantal la atendio con mucho carino, le pregunto por su salud y le tuvo que decir el estado en que se encontraba. No lo habia dicho en el centro al solicitar el trabajo por temor a que no se lo dieran, por lo que hasta el momento solo lo sabia Shantal, cosa que ya podria ocultar por muy poco tiempo. Estuvieron hablando un buen rato del tema y se creo una buena quimica entre ellas. (Enara se defendia muy bien con el idioma y en cualquier caso en Bayona tambien se hablaba el eusquera). Shantal le habia preguntado si en el caso de que el padre de su hijo se arrepintiera si lo aceptaria, a lo que Enara le respondio con toda seguridad: --En absoluto Shantal, jamas aceptare a un padre para mi hijo por obligacion, el tuvo su primera reaccion y para mi, esa es la valida. No olvidare sus palabras: "esta noticia me parte por el medio, no entraba en mis planes complicarme ahora la vida, seria mejor que no lo tuvieras" Shantal le habia respondido: --Pero pudo ser una reaccion momentanea y quiza despues recapacite... --No, para mi no sirve eso, cuando se recibe la noticia de que vas a ser padre o madre, se debe sentir felicidad, de no ser asi en el primer momento, ya no vale para mi, no lo aceptaria. No quiero volver a verlo en mi vida, por eso me fui de san Sebastian, para no tener que encontrarmelo nunca mas, mi hijo tiene a su madre y no le va a faltar de nada y tambien tengo a mi tia. A Shantal le quedo muy clara su postura y ya no habia vuelto a hablarle mas del tema, cosa que Enara agradecio. A la manana siguiente cuando Shantal llego, Enara ya se preparaba para salir, debia entrar de nuevo a la tarde. --Buenos dias Enara, ?que tal fue la noche? --Bastante tranquila, Buenos dias Shantal, han dormido todos y no hubo ningun sobresalto. Voy a descansar un poco que entro de nuevo a las cuatro. --Deberias decir ya a la directora lo de tu embarazo, si esperas mas creo que sera peor. --Pues si, tienes razon, tengo tanto temor a que me despidan... --No mujer, mientras estes activa y te encuentres bien, tu rendimiento es el mismo de todas las demas. --Ya veremos cuando esto vaya creciendo… esta misma tarde intentare hablar con ella. hasta luego. --Que descanses Enara. Al tiempo de salir Enara, un coche aparcaba en el parking del hospital, (era Zigor que habia aprovechado que hasta las diez no entraba a clases), Enara paso por delante para ir a por su coche que estaba unos metros mas adelante, mientras Zigor cerraba la puerta del suyo y se dispuso a cruzar el patio para entrar, evidentemente la tuvo a dos pasos de el, pero no la vio. Zigor entro en el hospital y Shantal, al ser la encargada del mostrador de admision lo recibio. --Buenos dias, vengo buscando a esta chica, es enfermera ?Trabaja aqui? Shantal miro el retrato de su amiga y tuvo la conviccion de que seria el padre de su hijo. Recordo las palabras de su amiga: "No quiero volver a verlo en mi vida, por eso me fui de San Sebastian, para no encontrarmelo nunca mas" y decidio lo que creyo conveniente para su amiga. --Lo siento mucho caballero, no la conozco. --Disculpeme entonces, muchas gracias. --De nada, buenos dias. Shantal quedo pensando: "Los mejores siempre son los peores... que pena que tenga tan pocos sentimientos porque esta... como un tren." y ?como habra conseguido encontrarla? Bueno, no se lo dire a Enara, en su estado creo que es mejor que no pase malos ratos. Enara llego a casa de su tia la cual la esperaba con un buen desayuno que le habia preparado. --Buenos dias tia, ?ya estas levantada? --Yo madrugo mucho tesoro, a mi edad ya las sabanas no se nos pegan jeje. Mira, te prepare un desayuno con hidratos, lacteos y vitamina C que debes alimentar bien a ese mocosillo, o mocosilla. --Pero tia, que no debo engordar mucho, eso de comer por dos era antes, Jajaja. --Vienes de trabajar toda la noche y debes alimentarte bien, cuando des a luz recuperaras tu figura. Enara le dio un beso a su tia y se sento a la mesa a desayunar con ella. --Te lo agradezco mucho tia, pero tomare el zumo y la leche con cereal nada mas, los dulces no. --Bueno pues como tu quieras no te quiero agobiar hija, y ?como fue la noche?, deberias informar ya de tu estado a ver si asi te libran de los turnos de noche. --Lo hare pronto tia, pero no busco privilegios que con solo unos meses que llevo no creo que me los concedan. Enara termino su desayuno y se fue a descansar, mientras Mariana (que asi se llamaba su tia), se dispuso a arreglar la casa. Mariana era hermana de la madre de Enara, era viuda y no tenia hijos, su marido y ella marcharon a Bayona debido al traslado del trabajo de el, al poco tiempo su esposo fallecio en un accidente laboral. Siempre estaban en contacto y cuando Mariana se quedo viuda, Enara pasaba muchas temporadas con ella en Bayona, siempre que su trabajo en el hospital de Donostia se lo permitia. Despues murieron primero su cunado y despues su hermana relativamente jovenes y Mariana se sintio mas protectora de su querida sobrina Enara. Enara se echo en la cama y como siempre, le costaba dormirse, pues su cabeza comenzaba a girar y girar sin conseguir relajarla. Pensaba en Aitor, el padre de su hijo, durante anos le habia dado todo su Amor, se habia entregado a el sin reservas presa de ese Amor el cual consideraba correspondido, vivio con gran ilusion la noticia de su embarazo y le cayo como una jarra de agua fria su actitud al darle la noticia. Le habia hecho mucho dano, mucho, no queria volver a verlo nunca mas, queria centrarse en su trabajo y en su hijo... costaria pero no pensaba dejarse vencer. Se quedo dormida al fin.

  • !Hector, Victor no, Hector! – Judith Galan de Judith Galan

    https://gigalibros.com/hector-victor-no-hector-8211-judith-galan.html

    Hector, dos anos despues de su divorcio, cree estar viviendo una vida perfecta: abogado de exito, apartamento de lujo, fiestas nocturnas, whisky y sexo, mucho sexo.
    Naira, despistada e incapaz de recordar los nombres, esta pasando por un momento algo complicado, pero el amor de su marido y su profesion como periodista colman su vida de felicidad.
    ?Puede una historia de amor empezar sin un flechazo? ?Y si cambiamos el orden de la formula amor-matrimonio-hijos? ?Conseguira Naira recordar el nombre de Hector? ?Conseguira Hector volver a ser el muchacho humilde que era antes de su divorcio?
    Dos anos de castigo y un hermoso pueblo son las claves de esta divertida e insolita historia de amor.

  • POR FIN EN MARSHINGTON ABBEY (Hawthorne House 1) de Kristi Ann Hunter

    https://gigalibros.com/por-fin-en-marshington-abbey-hawthorne-house-1.html

    Una mujer entre dos hombres, unas cartas y un misterio a la mejor primera novela por resolver.
    Lady Miranda Hawthorne es una dama en todo lo que hace, aunque preferiria no tener que estar siempre pendiente de los convencionalismos. Se desahoga desde nina vertiendo sus sentimientos mas profundos en una serie de cartas dirigidas a un viejo amigo de su hermano, el duque de Marshington, aunque nunca ha pensado enviarlas.
    Cuando Marlow -el extrano y nuevo ayuda de camara de su hermano- descubre por casualidad una de las cartas y la envia a su destinatario, Miranda se siente morir. Y lo ultimo que espera es que el duque conteste a su misiva con otra en la que inicia un cortejo por correspondencia, lo que la lleva a descubrir que siente algo por dos hombres: uno al que nunca ha visto pero cuyas palabras resuenan profundamente en su corazon y otro, Marlow, cuyo comportamiento se hace cada vez mas y mas sospechoso y parece estar involucrado en una trama de espionaje. ?Acertara Miranda en su eleccion?

  • Todo lo peor de Cesar Perez Gellida

    https://gigalibros.com/todo-lo-peor.html

    Una novela fria como el acero, despiadada como el cruel asesino que la habita.

  • El pais de los vientos frios de Yolanda Revuelta

    https://gigalibros.com/el-pais-de-los-vientos-frios.html

    El monje se acerco a su pollino y le ofrecio una brizna de hierba que crecia en la inmensa pradera de verdes intensos tras una primavera lluviosa. El animal, encantado, la atrapo entre los dientes y comenzo a mascarla despacio, sin prisa alguna, mientras oteaba de forma desinteresada el horizonte. El religioso, que en ese momento se encontraba con los brazos alrededor de una conocida planta de uso medicinal, lo imito, se irguio intentando obviar el dolor de lumbares que en ese instante le traspasaba la espalda como un aguijonazo y alzo mas la cabeza, centrando su mirada en la grandiosa masa de agua que se abria ante sus ojos. El mar parecia una balsa, solo unas pequenas olas se atrevian a romper en los salientes de las rocas, la calma era absoluta. El dolor parecio desvanecerse y no pudo evitar soltar un suspiro de alivio. Esa calma no hacia presagiar lo que iba a ocurrir unos minutos despues. Observo la grandeza del mar y dio gracias al Senor por tan maravilloso regalo, coloco su mano derecha sobre las cejas y centro toda su atencion en un pequeno punto que destacaba a lo lejos. Entrecerro mas los ojos hasta que pudo identificar aquel objeto flotante que se movia con suma rapidez, surcando el oceano a una velocidad pasmosa. Su intuicion le indicaba que esa extrana embarcacion de una inmensa vela rectangular desplegada y con un mascaron de proa que simulaba la cabeza de una bestia inmunda, no podia traer nada bueno. Parecia mas bien una obra del diablo que cualquier otra cosa. Desvio su atencion al monasterio, que se alzaba hieratico y majestuoso frente al mar; su mirada, sin poder evitarlo, volvio de nuevo a la nave. El viento azoto con fuerza su habito, de tono oscuro y raido por el paso del tiempo; sin embargo, el parecio no notarlo. Despues de aquella misteriosa embarcacion, aparecieron otras que parecian seguir el surco que dejaba la primera. Abrio una mano despacio, hipnotizado por aquellas extranas naves que iban aumentando de tamano a medida que se acercaban a tierra y tiro las plantas medicinales sobre la verde hierba, a la vez que en su mente se formaba una idea desoladora. El pollino movio de forma incesante sus enormes orejas, como si pudiese percibir la intranquilidad del hombre que se hallaba a su lado, rebuzno con poderio para hacerse oir y obtener otro bocado extra pero, para su sorpresa, esta vez no dio resultado. El monje, sin perder detalle de lo que acontecia, se temio lo peor. Las embarcaciones se dirigian a tierra firme y alli no habia nada mas que el monasterio. Con una rapidez que le sorprendio incluso a el mismo, monto a su pollino, tiro de la cuerda que hacia las veces de bocado, e hizo apretar el paso a su montura; como respuesta, el animal de carga rebuzno con mas brio, pero no desobedecio las ordenes y comenzo su andadura con paso energico. Si la situacion hubiera sido otra, hasta podria haberse definido como divertida. Los misteriosos barcos se abrian paso entre las aguas a gran velocidad, su tamano aumentaba a medida que se iba acercando a la playa y, si de lejos le parecio que eran misteriosos y sombrios, a distancia corta no pudo menos que definirlos como tenebrosos. Espoleo con el talon el flanco de su rucio para que aumentase su paso, este obedecio a la orden en el acto y se puso, no sin esfuerzo, a la par de la primera embarcacion. Sin duda era una competicion desmedida, pero el monje, atemorizado por las circunstancias, no penso ni por un momento en su montura. La embarcacion, como era de suponer, les adelanto. Por primera vez, se dejaron oir los gritos de los hombres que la manejaban; solo se escucho un rugido que no tenia traduccion alguna y, al mismo tiempo, comprensible a todas las razas que poblaban la tierra. Eran gritos de guerra. El viento del norte cortaba su piel como el filo de un cuchillo, pero lo ignoro y apreto con mas fuerza los lomos de su pequena montura. Las campanas del monasterio comenzaron a escucharse a un ritmo alarmante. El tintineo era cada vez mas fuerte e insistente. Era el toque de alarma, de lo desconocido. Sus hermanos ya habian advertido el peligro, pero no por eso disminuyo la marcha. Necesitaba llegar cuanto antes y estar asi junto a los suyos. El repiqueteo se entremezclaba con el ruido que hacian los remos al tocar el agua. Era atrayente como el canto de una sirena, pero igual de peligroso. El barco llego a la orilla, y el y su montura, extenuada por el recorrido, se acercaron hasta el monasterio. Desmonto y observo como aquellos hombres pisaban tierra. Su aspecto era dificil de definir, pero llego a la conclusion de que solo podia describirlos como sucios y salvajes. Uno de ellos le llamo la atencion, quizas fuese el de mas edad; era alto, de torso robusto, de melena rubia y barba trenzada. Hablaban una lengua desconocida, sin embargo lo que mas le impacto fueron las armas que portaban sus manos: hachas, escudos de madera y espadas. No venian en son de paz. La puerta del monasterio se abrio de repente. --!Hermano Gilbert!--exclamo al verlo uno de los monjes sobre el estridente redoble de las campanas --. ?Quienes son? Su respuesta quedo suspendida en el aire al escuchar los aullidos de guerra que venian desde la playa. Como caido del cielo, llego el caos. El averno. Horas despues, herido de gravedad, con una mano ensangrentada en el abdomen intentando que sus intestinos se mantuvieran en su sitio, obtuvo la respuesta. Dejo caer la cabeza a un lado hasta tocar el frio suelo de piedra y tosio con fuerza, ya que el denso humo taponaba sus vias respiratorias y respiraba con dificultad. El monasterio ardia envuelto en llamas, profanado y ultrajado. Aquellas bestias eran la personificacion del demonio. Habian asesinado, saqueado y no habian dejado nada de valor en el monasterio; solo unas miseras vidas que se iban apagando poco a poco. El dolor se volvio insoportable a la vez que la hemorragia se escapaba con mas fuerza entre sus dedos. Le quedaba un hilo de vida y lo sabia. Se encomendo al Senor y le pidio que lo sacase de aquel infierno y lo llevase al paraiso; pero esa vez, Dios parecio desatender la suplica.

  • La joya de Meggernie, Kate Danon de Kate Danon

    https://gigalibros.com/la-joya-de-meggernie-kate-danon.html

  • Clarent House (Los Huntington 2) de Charlotte Bennet

    https://gigalibros.com/clarent-house-los-huntington-2.html

    Sintiendose nuevamente enganado y defraudado por su hermano Fred, el duque de Clarent inicia una busqueda para encontrarlo antes de que Fitzwilliams, con el que tiene mas de un desencuentro, lo haga. En dicha busqueda Graig se adentra en los ambientes mas peligrosos y turbios de la ciudad. Ahi se topa con gente de dudosa reputacion, y sin escrupulos, que se atreven a chantajearle ya que poseen informacion comprometida sobre Fred.
    Por otro lado, las constantes ausencias del duque abren un nuevo frente en su relacion con Victoria que, a duras penas, intenta sobrellevar el distanciamiento que existe entre ambos. Para ello cuenta con la comprension de su suegra, Eleanor, y el amor incondicional de su madre, Melisa, a la que perdona finalmente. Sin embargo, un repentino contratiempo hace que Victoria se plantee seriamente su matrimonio con Graig.
    El destino vuelve a poner a prueba la fortaleza de uno de los hombres mas poderosos e influyentes de Inglaterra. Pero ?lograra este encontrar a su hermano? ?Solucionara sus problemas, finalmente?

  • Por cada pecado hay un pecador (Pecado 2) de Katy Evans

    https://gigalibros.com/por-cada-pecado-hay-un-pecador-pecado-2.html

    Jugue con su fuego... y me quemo para siempre Para mi, Malcolm era un encargo mas. Debia desvelar su verdadera identidad, sus secretos mas oscuros, pero el corazon se impuso a la razon y, pronto, cai en el pecado. Malcolm es como una droga para mi, y yo soy adicta a el. Ahora que la verdad ha salido a la luz, ?volvera el hombre mas codiciado de Chicago a confiar en mi? Descubre el desenlace de la apasionada historia de amor de Malcolm y Rachel

  • Munequita mia de Mariel Ruggieri

    https://gigalibros.com/munequita-mia.html

    -?Confias en mi, Marcela?
    -Si.
    -Entonces quiero que te quites toda la ropa. Yo te mirare mientras lo haces.
    Pestanee confundida. ?Como me pedia eso? Le habia contado el origen de mi trauma y apuntaba directamente alli.
    -Por que?-pregunte con los ojos llenos de lagrimas.
    -Porque quiero que de tu mente desaparezca el sentimiento de verguenza y humillacion asociado a tu desnudez. Quiero que cada vez que recuerdes el estar asi de expuesta, pienses en mi. Quiero que te excite mostrarmelo todo por tu propia voluntad, que pierdas el pudor, la cordura, y los limites. Quiero que lejos de sentirte vulnerable te sientas poderosa, porque con ese cuerpo que tienes puedes hacer que cualquiera caiga de rodillas a tus pies.

  • Dos almas y un secreto de Myriam Gonzalez Britos

    https://gigalibros.com/dos-almas-y-un-secreto.html

    <>, dijo Selma Lagerlof. Quiza tenia razon. Quiza. El dolor enaltecia o desmoronaba por completo a un ser humano. Mutaba los colores de su esencia y transformaba su espiritu para siempre. Todos tenemos un secreto inconfesable en esta vida. Creo que incluso el propio hijo de Dios lo tuvo en su tiempo. Nadie estaba exento de el. Nadie. Yo, al igual que cualquier otro ser humano comun y corriente, lo tenia, pero muy bien guardado, bajo siete llaves. Nadie me comprendia, ni siquiera yo mismo. --Juegas con la vida y algun dia ella te hara una trampa mortal --me dijo mi padre el ultimo dia que lo vi en esta vida. El cabron habia reaccionado del mismo modo, tiempo atras, cuando le conte, llorando, que la ninera abusaba de mi todas las noches. En aquel entonces, tenia apenas seis anos. Me senti solo desde que naci, solo y abandonado por aquellos seres humanos que supuestamente deberian haber velado por mi y por mi dicha en esta vida. Jamas recibi apoyo. Jamas recibi carino. Jamas recibi un abrazo. Jamas supe lo que era ser querido. Jamas recibi un beso de buenas noches. La frialdad de mis progenitores congelo mi alma y mi corazon, y me convirtio en un hombre vacio y superficial, incapaz de sentir algo remotamente humano por cualquier otro ser vivo. Ellos murieron cuando yo habia cumplido veinte anos y, la verdad, no los echaba en falta. ?Se podria extranar lo que nunca se tuvo? Creo que no. Tras la tragica muerte de ambos en un accidente de avion --mientras retornaban de una fiesta al que acudieron como pareja tras anos de haberse separado--, comence una larga y peligrosa trayectoria de fiestas, drogas, mujeres y sexo. Mucho sexo. Perdi el control y termine esclavo de aquella vida desordenada e inmoral. El placer en mi vida era tan esencial como respirar, a veces, llegaba a pensar que podria prescindir del aire, pero no del placer. No me consideraba un sadomasoquista, ni sexopata, ni depravado sexual. Simplemente era un amante de la carne femenina. Amaba el gozo que provocaba en otra mujer y, ante todo, el dolor que pudiera causar al mismo tiempo. En todas mis parejas sexuales veia al monstruo que destruyo mi infancia. Castigarlas era como castigar al verdugo de mi historia. Mi terapeuta me decia que debia enterrar el pasado, pero ?como hacerlo? No tenia idea. El dolor que aquella mujer horrible de casi cincuenta anos causo en mi y en mi inocencia, seguia latente a pesar del tiempo y su muerte. Habia danos realmente irreparables. X Ray Dog – the vision Me conocian como Matthew Caffrey, el millonario excentrico y sin pudores. Hijo de un ingles petulante y una alemana frivola, que nunca me quisieron en sus vidas. Naci y creci en tierras germanas. Tenia treinta y cinco anos, una carrera prestigiosa, belleza, dinero y muchas mujeres. Mi vida era perfecta. El sueno de cualquier hombre; sin embargo, era un ser muy infeliz. Me sentia vacio. Sin alegria. Sin esperanzas. Sin fe. Sin metas. Sin suenos. Llevaba anos luchando contra la depresion, consecuencia de los abusos que habia padecido cuando era un candido y ufano nino. Mi mente y mi corazon no conseguian desconectarse de aquella tragica epoca, a pesar de los tratamientos y el tiempo. Me mire curioso, a traves del ornamental espejo del lavabo. Tenia todo para ser feliz, pero no lo era. El dinero compraba todo, menos la felicidad. No era un eufemismo, al menos no, en mi caso.--Necesito unos analgesicos --sisee al sentir una fuerte punzada de dolor en la cabeza. Baje la cabeza y entrecerre los ojos de golpe. De pronto, la voz ponzonosa de mi nana irrumpio mi mente como un frio y distante eco de terror: <>, repetia aquella horrible mujer de pelo rubio y rostro surcado de arrugas. Identica a las brujas malvadas de los cuentos de hadas que me solia contar tras su ritual diario de abuso. <>, dije al abrir mis ojos. Me preguntaba como hubiera sido yo, sin aquellos abusos inhumanos. ?Hubiera sido un hombre distinto? ?Feliz? ?Alegre? ?Normal? La voz de mi amigo, Albert Smith, me arranco de golpe de mi trance melancolico. --?Matt? !Ven hombre! --exclamo y decidi bajar. Descendi la suntuosa escalera de mi mansion, enfrascado en mis pensamientos mas oscuros y sombrios. --!Matt! --grito impaciente, pero no le respondi. Me arregle el sueter negro de algodon que llevaba puesto. Hice una mueca de dolor al sentir una fuerte punzada en la cabeza. --Buen dia, Matt. Mi amigo, me saludo desde la puerta ventana acristalada que llevaba al jardin colgante de Babilonia, como el solia llamarlo. Pedi unos analgesicos al mayordomo de turno, la cabeza me estaba por estallar, la noche anterior habia bebido demas. --Buen dia --le dije con una mueca de dolor estampada en la cara. Sexo, alcohol, sexo, drogas y mas sexo. Con diversas mujeres, que hoy mal recordaba sus nombres. Asi era mi vida, llena de diversiones mundanas, pero carentes de sentimientos. Nunca supe lo que era amar. Nunca supe lo que era la empatia. Nunca supe lo que era la compasion. Nunca supe, porque nunca lo senti o lo practique. Mi pasado anulo cualquier vestigio de humanidad dentro de mi. Aquellos que debian cuidarme, no lo hicieron, y creci solo, en un mundo tan hipocrita, en donde lo unico que importaban eran las apariencias. Aprendi a aparentar. A sonreir cuando en verdad queria llorar. A gritar en silencio. A rezar sin fe. A esperar sin esperanzas. Nadie acudio a mi cuando aullaba de dolor, pidiendo ayuda a las frias y duras paredes de aquel cuarto suntuoso, repleto de juguetes y muebles caros. Mis padres siempre estaban viajando y, aunque gritara por auxilio, ellos eran sordos ante mi dolor. <>, me decia mi padre antes de meterme al oscuro y frio sotano, donde me dejaba trancado por horas e incluso dias. Comia cada vez que la nana Miranda me traia algo. Su generosidad siempre tenia segundas intenciones. --Matt --decia mientras descendia las escaleras. Yo empezaba a temblar y llorar. Me arrodillaba cerca de la cama y rezaba, como mi amigo Peter me habia aconsejado. Pero, su Dios siempre estaba ocupado para oir mis suplicas. La nana me miraba con avidez, como un leon miraria a su presa tras dias sin haber probado bocado. --Eres tan hermoso, Matt --susurraba y se quitaba las ropas. Lloraba a lagrima viva, pero a ella no le importaba mi pena sino su pretension corrompida. --Si te comportas bien con tu nana, comeras estas deliciosas galletas de chocolate --me decia, con aquella expresion ladina que tanto odiaba y temia. Tenia hambre y sed. Tenia que obedecer. Lo hacia. Y tras ello, lloraba hasta cansarme y quedarme dormido sobre aquella vieja cama medieval de madera. Se preguntaran que pasaba con mi madre ?no? Ella era tan fria e inhumana como mi padre. Me habia llevado en su vientre por nueve meses, pero, tras mi nacimiento, no recordaba que haya estado ni nueve dias seguidos a mi lado. Viajaba mucho con mi padre y, algunas veces, con sus tantos amantes. Fui un accidente. Un infortunio. Una pausa. Un tiempo perdido. Un grave error. Gritaba cada vez que discutia con mi padre, mientras yo, escabullido detras del sofa, los escuchaba llorando. En aquel tiempo era un humano normal, y sentia cosas, cosas que hoy ya no. No eran efectos de mi actual vida, sino del calvario que habia padecido en pasado. --Eres un nino problematico --gritaba mi madre, cada vez que me encontraba llorando en mi cuarto. Era un nino triste y solitario, que lloraba cada vez que el corazon me lo pedia. --La nana, me obliga a hacer... --Ella siempre me interrumpia. --!Iras a un internado en Suiza! --Mama... --Alli aprenderas a ser un buen nino --zanjaba, sin escucharme ni compadecerme. La ira envolvio mi corazon, al evocarla. Hay mujeres que no merecian concebir, la mia era una. I grieve – Peter Gabriel De un momento a otro, comprendi que queria cosas diferentes, sentir aquello que alguna vez senti: emociones humanas que se habian suprimido dentro de mi por las terribles experiencias vividas en mi maldita infancia. --!?Que quieres que, Matt?! --dijo Albert, con cara de asombro al escuchar mi deseo. Lo mire con atencion, como si le acabara de salir otra cabeza. --Ya sabes que soy algo extravagante con respecto al sexo. Albert asintio sin abandonar su mueca entre divertida e ironica. --He participado de tus deliciosas y pecaminosas fiestas, amigo --dijo suavizando un poco su expresion. Bascule nervioso y con cara de pocos amigos, todo mi peso en la pierna derecha. --Hemos hecho de todo a lo largo de estos anos, Albert --musite pensativo, mientras contemplaba la exultante piscina de mi mansion--. Todo lo que Dios repudia. Albert rio de buena gana.

  • Adorable perdicion (Adorable 1) de Gabriela Cano

    https://gigalibros.com/adorable-perdicion-adorable-1.html

    Primera y apasionante entrega de la trilogia <> de Gabriela Cano en la que conoceremos la romantica historia de Heather y Kilian.

  • Diario de una Fatgirl de Melanie Alexander

    https://gigalibros.com/diario-de-una-fatgirl.html

    Mi nombre es Elisabeth Ortega, soy fotografa profesional y gorda de nacimiento.

  • El que faltaba, Mayte Pascual de Mayte Pascual

    https://gigalibros.com/el-que-faltaba-mayte-pascual.html

    <>.

  • Nunca fui Primera Dama de Wendy Guerra

    https://gigalibros.com/nunca-fui-primera-dama.html

    Celia Sanchez, Albis Torres y Nadia Guerra, los tres personajes femeninos en que se centra la novela, no solo pertenecen a esa estirpe de protagonistas que se instalan para siempre en la memoria del lector, sino que, ademas, trenzan con sus peripecias existenciales la historia, con minuscula, de la vida cubana desde el triunfo de la Revolucion hasta hoy.

  • Afortunada de Monica Garcia

    https://gigalibros.com/afortunada.html

    Lucia es una chica con un pasado complicado, Daniela es una chica con una vida sin preocupaciones hasta que la enfermedad de su madre lo cambio todo, Lucia y Daniela afrontaran juntas la enfermedad de Pilar que no se sabe a ciencia cierta como evolucionara. Una historia de superacion, reflexion y autoayuda. La historia contiene relatos reales mezclados con ficcion para ayudar al lector a seguir la vida de Lucia.

  • La ciudad oculta (Los casos de Marina Altamirano 2) de Mar P. Zabala

    https://gigalibros.com/la-ciudad-oculta-los-casos-de-marina-altamirano-2.html

  • Nombre en clave: Romeo de Kelly Dreams

    https://gigalibros.com/nombre-en-clave-romeo.html

    Novela corta / Comedia romantica /
    Esta es una novela de corta dimension, una lectura para pasar el rato sin mayores pretensiones.
    Si estas buscando un joya literaria, te recomiendo que te des un paseo por los clasicos ^^
    ………………………………………………………………………
    Un jefe dispuesto a probar suerte.
    Una repartidora de correo con una profunda vena ironica.
    Un perro mucho mas adorable que su chalado dueno.
    Una absurda proposicion que la sacara de quicio.
    Un hombre que no sabe cuando rendirse.
    Su nombre en clave es:
    ROMEO

  • Cienfuegos (Cienfuegos 1) de Alberto Vazquez-figueroa

    https://gigalibros.com/cienfuegos-cienfuegos-1.html

    El comienzo de una trepidante aventura: las andanzas de Cienfuegos, un cabrero de la isla de La Gomera, embarcado por error en una de las naves en las que Cristobal Colon se dirigia al Nuevo Mundo.

  • El precio del silencio de Juan Infante

    https://gigalibros.com/el-precio-del-silencio.html

    Han transcurrido tres anos desde el secuestro de Lucia, la hija de Gorostiola, y hoy nos toca despedirlo. El gran capo ha muerto, nos ha dejado de una manera vulgar, de un infarto.
    Se va uno de los nuestros y eso siempre duele.
    Tomas Garrincha vive muy tranquilo desde entonces, pero su vida volvera a complicarse. Una vez mas, debera ejercer de "detective" y acercarse al mundo del delito, que no hace tanto que abandono.
    Lucia necesita su ayuda. Amenazas graves
    la acechan y Garrincha se vera arrastrado con ella, es el Precio del Silencio.
    Los inspectores de la Ertzaintza, Sara Cohen y Miguel Fabretti volveran a intervenir en un caso que esta vez no quieren que se les escape.
    Una novela intensa, con un Garrincha genial, que nos mantiene en suspense y emocion hasta el final.

  • Sadie de Courtney Summers

    https://gigalibros.com/sadie.html

    Por la autora de Sere fragil (segunda finalista en el X Premio Internacional para Jovenes Jordi Sierra i Fabra), una fascinante novela ambientada en una carcel y protagonizada por dos jovenes: una voluntaria y una presa.

  • Una mascara imperfecta de Nina Andrassy

    https://gigalibros.com/una-mascara-imperfecta.html

    Disfrazar sus emociones era su arte y forma de vida.
    Alejandro Forrester era un bastardo que habia tenido que adaptarse a llevar una vida de la que siempre habia renegado. Forzado por su padre, desde muy joven debio enfrentar las decepciones y las burlas de las que fue objeto, por eso su compromiso con la descarada Berenice Valencia era un triunfo y un medio para conseguir un fin, aunque significara sacrificar a la mujer que queria.
    La sumision y la obediencia siempre habian regido su vida.
    Sofia Valencia era la hija perfecta con los padres perfectos y el novio perfecto de cara al mundo, pero en su corazon siempre estaria a la sombra del hombre al que en realidad amaba y que nunca tendria. Despreciada por su padre y obligada a aceptar un compromiso que no la hacia feliz, ademas debia ser testigo de como Alejandro, su gran amor, y su hermana planeaban su boda.
    Pero aunque el verdadero amor tarda en llegar, cuando se encuentra no hay poder humano que pueda contra el.

  • Rebeca debe morir (Las doce puertas 6) de Vicente Raga

    https://gigalibros.com/rebeca-debe-morir-las-doce-puertas-6.html

    Dos historias narradas en paralelo. La primera trascurre en los principios del tribunal de la inquisicion de Valencia, donde es protagonista destacado el humanista Luis Vives, la inquisicion y sus secretos. Todos los personajes existieron en su epoca y todos los hechos narrados se corresponden con la realidad historica. La segunda historia es protagonizada por un grupo de amigos en la actualidad, que descubren que el misterio que creian resuelto, en realidad no ha hecho mas que comenzar.
    El lector va cambiando de historia cada 4 o 5 paginas. Personajes diferentes y relatos diferentes separados por quinientos anos. Parecen dos novelas en una. El lector se pregunta, ?y esto a que viene? ?Por que estoy leyendo dos narraciones sin aparente conexion?

  • El cuaderno de Noah de Nicholas Sparks

    https://gigalibros.com/el-cuaderno-de-noah.html

    Un hombre tiene un cuaderno, traido y llevado mil veces, en su regazo. Una mujer escucha lo que el le lee aunque no acaba de entender. El cuaderno de Noah cuenta la historia de Noah, un sureno que vuelve a casa despues de la Segunda Guerra Mundial. Noah intenta que la plantacion de la que procede vuelva a su antigua gloria, pero las imagenes de la joven que conocio hace catorce anos no paran de perseguirle. No ha conseguido olvidar el verano que pasaron juntos. Es entonces cuando vuelve a dar con ella. Allie esta comprometida pero la pasion que sintio por Noah no ha disminuido ni un apice. Los obstaculos que impidieron su relacion continuan existiendo y Allie se ve obligada a enfrentarse a sus suenos con su boda a tan solo unas semanas de suceder.

  • Beauty Too (2a parte), Susana Rubio Girona de Susana Rubio Girona

    https://gigalibros.com/beauty-too-2a-parte-susana-rubio-girona.html

  • El lenguaje oculto de las olas de Johan Varo

    https://gigalibros.com/el-lenguaje-oculto-de-las-olas.html

    UNA NOVELA DESCRITA CON EXQUISITEZ, UTILIZADA COMO VINCULO
    DE LA LIBERTAD DE PENSAMIENTO, DE REPRESENTACION DE LAS COSAS
    MAS BELLAS Y MUESTRARIO DE LA COMPLEJIDAD CULTURAL Y
    COSTUMBRISTA DEL SIGLO XXI.
    Al borde de la muerte, asi comienza esta inocente y atrevida historia que rompera con todos los estereotipos.
    La vida de Jack Tylor no ha sido facil, desde su adolescencia tuvo que asumir demasiadas responsabilidades. Tras la tragica muerte de su padre, Jack decide dejar su pequeno pueblo y comenzar una nueva aventura en la capital, embarcandose asi en un escalofriante viaje por su mundo interior que le llevara a descubrirse a si mismo. Nuestro protagonista se adentrara en una voragine pasional aun desconocida para el, donde la intensidad del deseo le obligara a sopesar el valor de la ambigua amistad existente con el atractivo, interesante y enigmatico Alberto Di Vaio, en la que los sentimientos se hallan separados por una efimera linea. Y cuando por fin las aguas parecian haberse calmado, un inesperado suceso volvera a sorprender a Jack como nunca imagino.
    <>

  • Momentos de vida de Virginia Woolf

    https://gigalibros.com/momentos-de-vida.html

    Este conjunto de escritos autobiograficos de Virginia Woolf reune textos ineditos seleccionados en los archivos Woolf de la Biblioteca Britanica y la Biblioteca de la Universidad de Sussex. Los <>, como se les llama, pertenecieron a Leonard Woolf. Cuando este consiguio convencer a Quentin Bell de que escribiera la biografia autorizada de Virginia Woolf, puso a su disposicion esos papeles, y el profesor Bell cito breves parrafos de los mismos en la biografia. Despues de la muerte de Leonard Woolf, los papeles pasaron a la Universidad de Sussex, gracias a la generosidad de la albacea testamentaria, la senora Trekkie Parsons. La decision de publicar unos textos que hubieran sido extensivamente revisados por Virginia Woolf, y la mayoria de los cuales --a diferencia de los ensayos publicados con caracter postumo por Leonard Woolf-- no fueron escritos con la intencion de darlos a la luz publica, no fue tomada sin una cuidadosa consideracion previa. El innegable interes y valor de estas memorias alejaron cualquier duda sobre la pertinencia de su publicacion. Poner al alcance de un amplio publico un material que con tanta claridad revela la vision y la sensibilidad de una escritora cuya contribucion a la historia de la literatura inglesa tuvo un caracter tan profundamente individual, seria necesariamente un tributo a su memoria. Estas memorias constituyen una aportacion unica a la documentacion de su vida y su arte. Virginia Woolf solia escribir uno o mas borradores de sus obras y, luego, los pasaba a maquina, efectuando con ello diversas revisiones totales, en ocasiones hasta ocho o nueve. Los textos de esta compilacion se encuentran en diversas fases de revision --en su mayoria estan escritos a mano, solo parte de uno esta escrita a maquina-- pero, con la sola excepcion del primer texto, los escritos llevan la marca de <>, pese a que los tres ultimos apartados fueron leidos por Virginia Woolf a aquellos para quienes los escribio. Estas obras estan sembradas de correcciones, adiciones y tachaduras, y en el caso antes indicado del manuscrito hay parrafos enteros revisados, intercalados en el texto. En la presente edicion no se ha pretendido dar constancia de estas revisiones y variaciones. Hacerlo habria comportado dificultar la lectura a la mayoria de los lectores. Quienes esten seriamente interesados en estudiar este aspecto de las memorias de Virginia Woolf encontraran el material a su disposicion en la Biblioteca de la Universidad de Sussex y en la Biblioteca Britanica. Sin embargo, en ningun caso se ha permitido que el deseo de ofrecer un texto de facil lectura prevaleciera sobre una finalidad de primordial importancia, como es la de seguir fielmente las ultimas intenciones de Virginia Woolf en lo tocante a estos textos, en la medida en que estas intenciones se conocen o pueden deducirse razonablemente o, en caso contrario, dar los motivos por los que no se hace o indicar la existencia de dudas cuando las hay. Esperamos que este <> no constituya un desagradable obstaculo para su lectura --para reducir al minimo este peligro hemos utilizado el recurso de poner notas en cada texto--; sin embargo, que este <> sea visible tiene la ventaja de recordar al lector que Virginia Woolf no habia preparado estos textos para su publicacion, de ahi que no deban ser juzgados con el mismo criterio que se podria aplicar a las obras que publico en vida. Debido a que los textos seleccionados se encontraban en diferentes etapas de revision, en algunas ocasiones ha sido preciso adaptar la practica editorial a la naturaleza de ciertos problemas. En esos casos se ha hecho mencion de ello en la correspondiente nota previa. Con esta salvedad, se han seguido con caracter uniforme los siguientes criterios editoriales. Las tachaduras efectuadas por Virginia Woolf no han sido incluidas, salvo cuando lo suprimido era imprescindible para comprender el sentido del parrafo y la autora no lo sustituyo. En estos casos, las palabras eliminadas se han puesto entre corchetes angulares. Las tachaduras parciales, que no son raras, han sido subsanadas, sin hacer advertencia alguna al respecto. En los raros casos en que la autora anadio una palabra o una frase pero dejo sin suprimir lo necesario para dar cabida al anadido, tambien se ha subsanado el olvido, sin advertencia alguna. Por ejemplo, en <>, la primera version de un parrafo dice: <>. Luego Virginia Woolf anadio las palabras <> junto a <>, pero olvido tachar <>. Las tachaduras que tienen interes por si mismas se han hecho constar. Algunas tachaduras de Virginia Woolf eran incompletas, y lo mismo ocurria con sus anadidos y correcciones. Cuando ha sido imposible incorporarlas al texto, sin causar grave perjuicio al sentido de la frase, estas correcciones y anadiduras han sido omitidas, aunque ello se hace constar en la correspondiente nota. En los casos en que anadio una palabra o una frase de tal manera que se advierte con claridad que lo consideraba una alternativa, se ha seguido la segunda version, salvo cuando la primera era claramente preferible. En muy pocas ocasiones estas expresiones alternativas producen efectos de importancia en el texto. Sin embargo, han sido consignadas cuando tienen interes, o cuando no se puede saber con certeza que expresion habria preferido Virginia Woolf. En sus primeros borradores, las costumbres de la autora en lo tocante a puntuacion, ortografia y empleo de mayusculas eran muy variables y, ademas, utilizaba a menudo abreviaturas que jamas aparecieron en sus obras publicadas. A veces, evidentes negligencias, unidas a errores mecanograficos o correcciones efectuadas con premura, dieron lugar a textos con numerosas incorrecciones. En otras ocasiones, salta a la vista la esmerada atencion que prestaba a estos aspectos y que es un rasgo caracteristico de su obra publicada. Virginia Woolf solia pasar su obra a su marido, Leonard, para que revisara estos detalles, y este ultimo, al publicar las obras postumas de Virginia, no dudo, tal como dice en su prefacio a The Death of the Moth,1 en <> los ensayos y corregir <>. A pesar de que las libertades plenamente justificables que Leonard Woolf podia tomarse no lo serian en el caso de cualquier otra persona, no cabe duda de que su criterio puede, por lo menos, servir de orientacion con respecto a la clase de correcciones que se han efectuado en el presente texto; por eso parece evidente que, en estas memorias --a diferencia de su diario o de sus cartas--, Virginia Woolf habria adaptado la puntuacion, la ortografia y el empleo de mayusculas a los usos generales, salvo en los casos de especifica matizacion, si hubiera decidido publicarlas. En consecuencia, aqui la puntuacion ha sido modificada de manera que fuera acorde con la costumbre seguida por Virginia Woolf en su obra publicada. Cuando era oportuno se han anadido guiones, cursiva, interrogantes, puntos y aparte o la estructura propia del dialogo. El signo & ha sido sustituido por la usual copulativa y se han suprimido las abreviaturas y los numeros en los casos en que era su costumbre hacerlo asi. Con la salvedad de estos ejemplos, que dificilmente cabe discutir, la puntuacion solo ha sido alterada con el fin de evitar ambiguedades, corregir evidentes olvidos, o hacer que concuerde con la formula establecida en una frase o en un parrafo, momentaneamente olvidada por la autora. En absoluto se ha pretendido armonizar, en cualquier otro aspecto, la caracteristica y altamente expresiva puntuacion de Virginia Woolf con los usos generales. Por ejemplo, cuando utiliza un signo de exclamacion en mitad de una frase, el signo se mantiene, si es acorde con el sentido del parrafo. Todos los errores mecanograficos han sido corregidos. La ortografia y el uso de mayusculas se han conformado con la costumbre comun, salvo en los casos en que comportan un matiz expresivo. El sentido de una frase o su estructura gramatical han exigido, en alguna ocasion, la anadidura de una palabra, que ha sido puesta entre parentesis. Sin embargo, como hemos dicho, la aparicion de mas de una palabra entre parentesis, sin una nota al respecto, indica que se trata de palabras tachadas por Virginia Woolf. Todas las frases dudosas y palabras ilegibles han sido objeto de la correspondiente nota, salvo en los raros casos en que se daba una alternativa legible y aceptable. Las notas que preceden a cada uno de los escritos contienen una breve exposicion del tema del texto memorialista, a fin de evitar engorrosas notas. Contienen, asimismo, la fecha y las circunstancias del escrito y una descripcion del texto mecanografiado o manuscrito en el que se ha basado el texto publicado, asi como una referencia a los problemas insolitos que pueda plantear. En las notas, recogidas al final del libro, se han utilizado las iniciales <> y <> para hacer referencia a Virginia Woolf y a Leonard Woolf, respectivamente, en aras de la brevedad. Las hojas manuscritas o mecanografiadas (ms. y mc.) quedan identificadas por su referencia catalografica, como, por ejemplo, <>; sin embargo, despues de la primera mencion se omiten las iniciales <> (Monks House), ya que todos los papeles proceden de la misma coleccion. La biografia en dos volumenes, obra de Quentin Bell,2 se cita simplemente con las iniciales <>, seguidas del correspondiente numero del volumen y de la pagina. Las cartas, en la edicion critica de Nigel Nicolson, se mencionan como Letters, con indicacion del volumen en el que se encuentran. No hemos intentado identificar a las personas que se mencionan en estas memorias. Es decir, cuando la persona era de importancia menor o pasajera para Virginia Woolf, o solamente importante en cuanto encarnacion de un tipo, y asi se advierte claramente por el contexto, no se ha procedido, por lo general, a su identificacion. Quienes esten interesados en estos detalles tienen a su disposicion la biografia escrita por Quentin Bell, que se puede complementar con los seis volumenes de la correspondencia, Letters, ya mencionados, y los cinco volumenes que componen el Diary of Virginia Woolf, editado por Olivier Bell en colaboracion con Andrew McNeillie, cuya traduccion al castellano, en tres volumenes, se titula Diario intimo. El periodo que abarcan estas memorias, en general, y <>, en particular, ha sido ampliamente estudiado.

  • Nunca crei ser tan feliz de Sophie Saint Rose

    https://gigalibros.com/nunca-crei-ser-tan-feliz.html

    Jessica Foeller guarda un secreto desde hace anos, que si fuera revelado terminaria con la excelente reputacion de los Halleran. Pero una promesa la ata de pies y manos, asi que tiene que reprimir su odio por la familia mas rica del pueblo. Cuando Everett Halleran pone sus ojos en ella no se lo puede creer, porque apenas se habian dirigido la palabra en su vida. Pero lo que mas le preocupa, es que no sabe si podra resistirse mucho tiempo porque cada vez que la aborda es mas dificil negarse a sus deseos. ?Podria llegar a olvidar el dano que habian provocado a su familia? ?Podrian llegar a amarse?

  • El sexto sentido (Ordinales 4) de Phavy Prieto

    https://gigalibros.com/el-sexto-sentido-ordinales-4.html

    Cuarta obra de la Saga Ordinales.

  • Un dia. Una comida de Yoshinori Nagumo

    https://gigalibros.com/un-dia-una-comida.html

    Estos dias ha llegado a mis manos el presente libro, Un dia. Una comida, el cual me pongo a leer como si fuera a tomar una sola comida al dia, en la que lo mas importante es disfrutar, comer a gusto y digerirla lo mejor posible. Lo mismo me ocurre conforme voy leyendo el libro, que plantea una propuesta inusual en un mundo donde tenemos acceso a la comida a todas horas. Las razones que nos pueden llevar a poner en practica lo recomendado en este libro pueden ir desde disfrutar de esa comida diaria hasta mantener y mejorar nuestra salud, o bien disfrutar simplemente de su lectura. El libro explica de forma sencilla las investigaciones de los ultimos anos que demuestran la fuerza curativa del ayuno y describe los mecanismos fisiologicos que se ponen en marcha con las dietas restrictivas, que pueden alargar la vida y mejorar la salud de sus practicantes. Asimismo, pone de manifiesto la importancia que tiene mentalizarse de los beneficios del ayuno y comprender su proceso, asi como seguir una rutina y mantener la disciplina a lo largo del tiempo. El doctor Nagumo aboga por una comida diaria casi vegetariana. Yo, personalmente, sigo una dieta totalmente vegetariana1 y, por ello, tambien apoyo la propuesta del autor. El hecho de que el libro este escrito en primera persona transmite la confianza de que es posible poner en practica el metodo, y el entusiasmo que genera su practica ayuda asimismo a dejar a un lado los miedos y los prejuicios que a veces se publicitan en torno al ayuno en los medios de comunicacion. Habra quien piense que hay que tener moral para comer solo una vez al dia y se preguntara si existe alguna razon para hacerlo. Es verdad que para ayunar hay que tener un punto de valentia, de animo, para imponerle al cuerpo la decision de no comer a pesar de tener comida delante. Espero que este libro sirva de hilo conductor para conocer bien el ayuno y anime al lector a disfrutar con la practica, porque una vez aplicada la tecnica, ganara en un saber y una confianza internos que solo poseen quienes han vivido la experiencia. Desde la oportunidad que me brindan de prologarlo, mi propuesta al lector que tenga mas curiosidad por el tema es invitarle a leer la gran cantidad de literatura disponible que profundiza en los efectos favorables del ayuno intermitente.2, 3 Mientras cursaba la carrera de Medicina, cuando preguntaba por el ayuno como terapia, me encontraba que los profesores sabian mucho sobre su fisiologia, pero apenas lo habian puesto en practica. Respaldados por datos medicos, yo y otros companeros empezamos a organizar cursos de introduccion practica al ayuno, y asi formamos varios grupos de practicantes. De la experiencia de estos encuentros nacio un libro de introduccion al ayuno,4 que creo que puede ser de gran ayuda para las personas interesadas en el tema. El ayuno voluntario basado en la restriccion de la ingesta de alimentos solidos se practica en todo el mundo, por motivos tradicionales, culturales o religiosos. En las ultimas decadas, el ayuno modificado ha ganado popularidad como metodo de cuidado personal para la prevencion y promocion de la salud, en particular para iniciar un estilo de vida saludable.5 Existen muchos ejemplos de ayuno o restriccion calorica, que, por supuesto, son siempre voluntarios y cuentan con la participacion activa del paciente: * Ayunos de tradiciones religiosas, como la judia, la cristiana, la budista o la musulmana; en este ultimo caso se practica el Ramadan, que puede categorizarse como un periodo corto de ayuno intermitente, un ayuno diurno durante 29 dias. El metodo Un dia. Una comida se basaria en un ayuno intermitente parecido al del Ramadan durante 50 dias. * El metodo de ayuno de Buchinger, que consiste en la ingesta limitada de vegetales o zumos de frutas, asi como de pequenas cantidades de caldo de verduras, siendo el consumo de energia nutricional total de 200 a 400 kcal/dia. Otros componentes del metodo de Buchinger son la practica de ejercicio fisico, las tecnicas mente-cuerpo, la aplicacion definida de enemas y la ingesta de sales de laxantes. Otros metodos estandarizados de ayuno serian los siguientes: * Una dieta muy baja en calorias, con una ingesta calorica de 600 a 800 kcal/dia, consistente en comidas liquidas formuladas con suplementos de proteina (estos no los recomiendo). * La restriccion calorica, basada en la reduccion de la ingesta calorica diaria en un 30 a 40 por ciento. * El ayuno intermitente, en el que se pasan cinco dias comiendo y dos ayunando con restriccion calorica, es una propuesta de imitacion fisiologica del ayuno planteada por Longo y aplicada a sus estudios de investigacion. * El ayuno total, es decir, dieta cero (agua, te o infusiones). Cada dia aparecen mas estudios sobre la eficacia del ayuno en el tratamiento de las enfermedades reumaticas, los sindromes de dolor cronico, la hipertension, el sindrome metabolico o la artritis reumatoide, en la desaceleracion o prevencion de la mayoria de las enfermedades inflamatorias y degenerativas cronicas, durante la quimioterapia del cancer, en problemas asociados con el envejecimiento, asi como en la prevencion y el tratamiento de otras enfermedades cronicas.6, 7, 8, 9, 10, 11 Como dice Thierry de Lestrade, tanto en su video con Sylvie Gilman como en su libro novelado, el ayuno se nos vuelve a mostrar como un metodo terapeutico cada dia mas consolidado.12 Desde estas lineas invito y animo al lector a poner en practica estas restricciones caloricas desde la conviccion de que se trata de una costumbre muy saludable. DOCTOR PABLO SAZ PEIRO Doctor en Medicina y Cirugia por la Universidad de Zaragoza y docente del Departamento de Microbiologia, Medicina Preventiva y Salud Publica de la Universidad de Zaragoza 11 de junio de 2016 Prologo Existe un gen que se activa cuando pasamos hambre Estudios recientes demuestran que al tener hambre se activa una funcion importante y positiva para el cuerpo humano. <> Seguro que la mayoria de los lectores piensan de este modo. Pero puedo hacer frente a este escepticismo como medico y desde mi propia experiencia. La idea de que cuantos mas nutrientes aportemos al cuerpo mas sano estara esta obsoleta. Y aun diria mas: cuando nos suena el estomago a causa del hambre, se desencadena una serie de reacciones que tienen un efecto rejuvenecedor. Yo empece con este estilo de vida que he llamado Un dia, una comida hara quince anos, cuando tenia unos cuarenta y cinco. El comienzo de todo esto tiene un detonante concreto: el miedo a morir. En aquel entonces mi padre aun ejercia como medico y, yo vivia tranquilamente dedicado a la investigacion y a la cirugia de cancer de mama en un hospital universitario. Pero cuando cumpli treinta y cinco anos, mi padre se desplomo a causa de un infarto de miocardio. Sobrevivio, aunque despues de eso, no pudo seguir ejerciendo y se tuvo que jubilar. Yo deje la investigacion en la universidad, volvi a casa de mis padres y herede la clinica de mi padre. A diferencia de la tranquila vida de investigador que llevaba en la universidad, debia dirigir a personas y escuchar las quejas de los pacientes. Ademas, tenia que devolver el prestamo que habia pedido mi padre. Debido al estres, empece a comer y a beber de forma descontrolada, y gane peso en un abrir y cerrar de ojos. Llegue a pesar casi ochenta kilos, veinte kilos mas de lo que peso actualmente. Fue el resultado de haber aportado nutrientes en exceso a mi cuerpo. Entonces ya sufria un estrenimiento muy persistente y empezo a pasarme algo preocupante de verdad. Al hacer fuerza en el bano, empece a padecer arritmias. Pensaras: <>. En realidad, tienen una relacion muy estrecha. Si hacemos fuerza por el estrenimiento, nos sube la sangre a la cabeza. Entonces, el sensor de presion de la carotida reacciona y ralentiza las pulsaciones para reducir la presion sanguinea. A esto se le denomina <>. Como resultado, empece a tener arritmias con mucha frecuencia. En los peores casos, se prolongaban durante todo un dia. A causa de esta afeccion, sentia dolor en el pecho, me bajaba la presion sanguinea e incluso llegue a sentir que perdia el conocimiento en el bano. Sin embargo, lo verdaderamente preocupante era que la circulacion de la sangre interna del corazon pudiese empeorar a causa de la arritmia y se formase un coagulo. Si esto ocurre y el coagulo se desplaza al cerebro, podemos sufrir una trombosis cerebral; si el coagulo se mueve hasta al pulmon, una trombosis pulmonar. Es decir, que podia morirme en el bano sin que nadie se enterara. Esta situacion me tenia aterrado. Debido a ese miedo, empece a probar diversas tecnicas o metodos para mejorar mi salud. Me apunte al gimnasio y empece a hacer natacion, use las maquinas y durante una temporada me emplee a fondo con todo tipo de ejercicios fisicos. Pense en adelgazar haciendo deporte. Por desgracia, el deporte hacia que me entrara mas hambre, y, en consecuencia, volvia a aumentar de peso. Las dietas me aburrian, me daba pereza contar calorias y no aguantaba con ninguna. Despues de darle muchas vueltas, decidi dejar de comer carne y centrar mi dieta en las verduras. Gracias a eso, deje de sufrir estrenimiento en un abrir y cerrar de ojos. De vez en cuando me entraban ganas de comer carne, pero a la manana siguiente de haberla comido, volvia a tener estrenimiento. Como lo pasaba mal, deje de comer carne definitivamente por miedo a recaer. (Mas adelante aclarare que, en la actualidad, como carne sin productos quimicos.) Es curioso: a las personas que han dejado de fumar, al poco tiempo les molesta mucho el olor del tabaco. En mi caso, al poco tiempo de dejar de comer carne, si iba a un restaurante de lujo y me servian un buen filete, me sentia como si masticase papel reciclado, me entraba angustia y lo rechazaba. Como anecdota, debo decir que desde que deje de comer carne se ha desvanecido mi olor corporal. Las personas a las que les gusta mucho la carne, o aquellas que tienen sindrome metabolico, tienen un alto contenido de grasa en la piel, y si esta grasa se oxida, despide un olor muy caracteristico. Es un olor generado por el nonenal, y es el que percibimos como desagradable. Para mi es practicamente historia. Ademas, al reducir la cantidad de comida a <> (ichiju issai, una comida tradicional japonesa a la que siempre acompana el cuenco de arroz), empece a bajar de peso rapidamente. Fisicamente tambien me sentia mucho mejor. Desde el punto de vista nutricional, comprendi que el cuerpo se vuelve mas activo al metabolizar los nutrientes completos que se encuentran en esas comidas que a primera vista parecen sosas. El problema es que preparar todos los dias una comida de estas caracteristicas supone mucho trabajo. Ademas, en mi caso, por las mananas o a mediodia, en muchas ocasiones no tengo sensacion de hambre. Por otro lado, si salgo con companeros por la noche, me toca comer cosas muy variadas. Y por muy bueno que sea un habito, si requiere mucho esfuerzo, se termina abandonando. Todo esto es lo que, despues de darle muchas vueltas y meditar, me llevo al plan de Un dia, una comida. Desde entonces, en diez anos, mi estado de salud ha ido mejorando paulatinamente, y mantengo un peso de 62 kg. Tengo la piel mucho mas tersa, y he rejuvenecido tanto que en el chequeo medico completo me han dicho que la edad de mis arterias es de veintiseis anos. Pero en mi fuero interno seguia haciendome algunas preguntas: <>. Lo que ha despejado esa duda es el descubrimiento reciente del gen rejuvenecedor. A traves de una serie de experimentos con animales, se ha demostrado que reducir la alimentacion a una cuarta parte alarga la esperanza de vida 1,5 veces. Y eso no es lo unico. Tambien se ha comprobado que, reduciendo la cantidad de comida que ingerimos, conseguimos una expresion mas viva, un cabello mas suave, y un aspecto mas juvenil y saludable. La salud interior, pues, se refleja en el exterior con un aspecto mas lozano y armonioso. Si los intestinos trabajan activamente y la circulacion sanguinea es buena, la piel esta radiante, y la figura, estilizada. Dicho de otra manera, si por dentro no estamos sanos, por muchos productos cosmeticos que utilicemos, por muchas operaciones de estetica que nos hagamos, no conseguiremos tener un aspecto verdaderamente saludable. El aspecto es uno de los indicadores de la salud mas faciles de interpretar. Podemos pensar que estamos sanos, aunque solo sea porque aun no hemos tenido ninguna enfermedad grave o porque los resultados de las analiticas estan dentro de los parametros normales. Pero todos solemos tener alguna queja que nos impide estar orgullosos de como tenemos la piel o de como es nuestra figura. Si tenemos un aspecto apagado y cetrino, es porque tenemos grasa visceral y estamos a las puertas de padecer el sindrome metabolico. Lo que significa que, si no combatimos el sindrome metabolico, no podremos gozar de buena salud ni tener un aspecto mas juvenil y saludable. Estar sanos, tener la piel radiante y lucir una figura estilizada: ese es el objetivo del metodo Un dia, una comida

  • La ciudad de las sombras de Victoria Alvarez

    https://gigalibros.com/la-ciudad-de-las-sombras.html

    En 1923, Helena Lennox tiene diecisiete anos y un unico deseo: sustituir las calles de Londres por una vida de aventuras y excavaciones en tierras lejanas. En consecuencia, cuando sus padres se marchan a la India para investigar la desaparicion de unos arqueologos, ella decide acompanarlos. unos dias despues y a escondidas. Son muchas las leyendas que circulan en torno a la ciudad fantasma de Bhangarh, pero Helena nunca ha creido en las supersticiones. No obstante, el principe Arshad de Jaipur (si, ese que odia a los ingleses) le insiste en que se equivoca: Bhangarh esta maldita y al anochecer, cuando el palacio real se tine de oscuridad, todo el que se adentra en sus muros desaparece sin dejar ni rastro. En su recorrido por la exotica India de los anos veinte, Helena se ve envuelta en una investigacion en la que solo una verdad parece salir constantemente a la luz: nadie regresa de la ciudad de las sombras.

  • Como ser mujer de Caitlin Moran

    https://gigalibros.com/como-ser-mujer.html

    No hubo nunca mejor epoca que esta para ser mujer: tenemos el voto y la pildora, y desde 1727 ya no nos envian a la hoguera por brujas. Pero, ?como ser mujer? Esa es precisamente la gran, eterna pregunta a la que Caitlin Moran se propone responder en una obra que aborda a calzon quitado ?a veces literalmente?, con inteligencia, desverguenza e ironia y tambien una salvaje franqueza, los principales aspectos de la condicion femenina. Mezcla de libro de memorias y de divertida vociferacion, apoyandose siempre en sus experiencias como mujer, feminista e hija de una familia numerosa y proletaria, Caitlin Moran se describe con una sinceridad y una audacia militantes, y habla con absoluta sinceridad de su relacion con su cuerpo.

  • Adios, tristeza: 18 pasos para recuperar la alegria de Cristina Soria

    https://gigalibros.com/adios-tristeza-18-pasos-para-recuperar-la-alegria.html

    La vida, a veces, nos provoca sufrimiento, y son esos momentos de sufrimiento los que nos pueden hacer mas fuertes o adentrarnos en la mas absoluta tristeza. Este libro quiere ayudarnos a salir de ese circulo negro.

  • Un Sheriff De Alabama de Erina Alcala

    https://gigalibros.com/un-sheriff-de-alabama.html

    Rosa Vera habia nacido hacia veintinueve anos en Martos, un pueblo de la provincia de Jaen, situado en Andalucia, en el sur de Espana. Ahora habia vuelto a su tierra que la vio nacer, y no precisamente para felices reencuentros. Era hija y nieta unica. Sus abuelos y sus padres habian sido ricos terratenientes de la zona. Poseedores de una de las mas extensas tierras de olivos de la provincia de Jaen y, por consiguiente, de infinidad de fabricas de aceite de oliva, repartidas por los pueblos de dicha provincia y tambien de parte de la provincia de Cordoba. Para desgracia de Rosa, a los catorce anos se habia quedado huerfana. Sus padres murieron una noche lluviosa de invierno, en un accidente de coche, cuando se desplazaban de un pueblo cercano hacia su casa, a solo cinco kilometros de distancia: TorreDonjimeno. Ese era uno de los muchos pueblos donde tenian una fabrica de aceite de oliva. Una de un total de mas de cien fabricas. La fortuna de sus padres la habian generado por ellos mismos, y no eran menos ricos que los abuelos. Y estos, cuando murio su unico hijo, el padre de Rosa, eran los unicos familiares de la pequena, asi que se hicieron cargo de ella. Le dieron siempre lo mejor. Rosa estudio bachiller en Martos, un pueblo de casas blancas de veinte mil habitantes a unos doce kilometros de la capital de la provincia, Jaen. Cuando quiso ir a la Universidad a estudiar medicina, sus abuelos, al igual que lo hubiesen querido sus padres, la enviaron a estudiar a una universidad de EE. UU. En parte, porque daba prestigio y porque la carrera de medicina era lo que Rosa habia querido estudiar desde siempre. La admitieron en la Columbia University de Manhattan. Alli permanecio, desde los diecisiete anos, edad en que termino el instituto, hasta los veinticinco. De la universidad salio con un doctorado en cirugia y su titulo de medicina. Era buena, por lo que en poco tiempo empezo su trabajo en el Presbyterian Lower Manhattan Hospital. Alli permanecio especializandose durante cuatro anos. Llego a ser, en esos anos, una cirujana de reconocido prestigio, a pesar de su edad. Era, sin duda, de las mejores que tenia el hospital. Ademas, Rosa caia bien. Siempre estaba dispuesta a hacer horas extras y guardias. En el transcurso de los anos, solicito la Green Card, que le otorgaria la nacionalidad americana. Y le fue concedida. Tenia doble nacionalidad y hablaba tres idiomas, frances, ingles y castellano, por supuesto. Mientras vivio en EE. UU., habia vuelto al pueblo, cada dos anos, a ver a sus abuelos. Utilizaba sus vacaciones para ello. El trabajo en el hospital era tan estresante, que las utilizaba para ir a ver a sus abuelos, que ya eran mayores y la unica familia que tenia en el mundo. Se querian mucho, y no era para menos. La habian criado de pequena y eran su unica familia. Rosa recordaria con carino esas vacaciones. Ahora hacia un ano que su abuela habia fallecido. Evidentemente fue a su entierro y sintio una pena infinita por su abuelo, que se quedaba solo despues de perder a su esposa por un ictus, del cual no consiguio sobreponerse del todo, y cuando sufrio el segundo, le fue imposible superarlo. Ahora estaba de nuevo en el pueblo, porque el que habia muerto era el abuelo. Ya no le quedaba a nadie en esta vida. Habia pedido veinte dias de vacaciones en el hospital, y utilizo tres con solo hacer la maleta, sacar los vuelos y llegar al pueblo. Un periplo amargo con el unico objetivo de despedirse del que ya no estaba. No se atrevio a ir a casa del abuelo para pasar la noche. Rosa se habia quedado en el hotel del pueblo. Ya tendria tiempo de recoger las llaves cuando fuera de dia. Miro por la ventana la noche estrellada que abrazaba al pueblo que la vio nacer. Parecia mentira que, aunque estuviera lejos, siempre llevaba un pedazo de esas calles en su corazon. A la manana siguiente a su llegada, se dirigio a la oficina del abogado justo despues de desayunar. El era el albacea de sus abuelos, como lo fue de sus padres. El abogado, Juan Medina, era un hombre alto, de mediana edad, algo calvo por la coronilla, muy serio y educado. Era el hijo de los abogados que toda la vida tuvieron sus familiares y que mantenia el bufete de su antecesor. Nada mas verla entrar en su despacho la invito a sentarse. --Sientese, senorita Vera. --Y ella se sento. --Como sabra, mi padre y yo, por ende, somos los albaceas de sus padres y de sus abuelos. Como mi padre murio, no le queda mas remedio que tratar conmigo de todos sus asuntos legales.--Bien, muchas gracias, senor Medina, siento lo de su padre. --Gracias. Y yo, lo de su abuelo. Mientras ponia encima de la mesa una carpeta negra algo gruesa, con el nombre de Familiares Vera, ella observaba sus movimientos metodicos y tranquilos. --Como sabra, su abuelo fue enterrado ayer junto a su abuela. Era lo que solicito, su ultima voluntad y su deseo. No se pudo esperar a que llegase. Nos hicimos cargo de todo. --Lo se. Y se lo agradezco. He venido lo antes posible, pero estoy lejos. Aunque pasare mas tarde por el cementerio. O estos dias que permanecere aqui. --Bueno, si esta lista, empiezo. Aqui tengo todas sus propiedades. Paso a enumerarselas: cincuenta fabricas de aceite (sus abuelos vendieron la otra mitad de las fabricas, antes de morir su abuela), diez mil fanegas de olivos, tres cortijos, mas la propiedad de sus abuelos que es la casa del pueblo, mas el dinero que tenian en el banco. --?Todo eso tenian mis familiares? Sabia que eran ricos, pero esto es una barbaridad. --Si, senorita. Eso hace un total aproximadamente de ciento cincuenta y tres millones de euros aproximadamente. Evaluandolo por encima, claro. --El abogado la miro con una sonrisa blanca por primera vez. Rosa se quedo en blanco. Ella, de sus abuelos habia recibido lo suficiente para estudiar, sin que le sobrara el dinero. No habian sido tacanos con ella mientras estudiaba, pero en modo alguno dadivosos. Y luego al acabar la carrera y empezar a trabajar, no recibio un euro. Ganaba mas de doce mil euros mensuales en el hospital y desde luego, no los necesitaba economicamente. Ella habia conseguido ahorrar con sus guardias y recibiendo un buen sueldo de cirujana en esos casi cuatro anos, unos doscientos cincuenta mil dolares y algo mas, porque vivia bien. Tenia alquilado un apartamento pequeno, pero caro en Manhattan y le gustaba vivir bien, ropa cara, maquillaje y perfume. Ir de vez en cuando a darse masajes, mas bien por necesidad y cuando podia ir al gimnasio a desentumecer los musculos. Salir a tomar unas copas algunos fines de semana o comer en algun restaurante. El resto lo hacia en casa. Tampoco eran demasiados lujos si se lo podia permitir con su sueldo. Lo que nunca penso es que sus padres y sus abuelos tuvieran tal cantidad de propiedades. Ella, nunca pregunto y ellos nunca le dijeron nada. El abogado, la saco de sus pensamientos. --?Como? --dijo ella sin haberlo escuchado--, perdone, me habia perdido. --Le decia, senorita Vera, que su abuelo ya tenia compradores para todas sus propiedades. El senor Vera, sabia que usted no iba a volver aqui, que se quedaria en Estados Unidos. Y habia conseguido hablar con algunos futuros compradores para sus propiedades. Y asi usted recibir el dinero en metalico. --Si, alli tengo mi trabajo y mi vida. No voy a vivir aqui, ni a volver a Espana. Ya no tengo a nadie. Mi intencion es vivir en Estados Unidos. --Entonces, ?que piensa hacer? --Creo que lo que tenia mi abuelo pensado. Vender todas las propiedades. ?En cuanto tiempo cree que podria venderlos? Tengo apenas quince dias para cerrar esos asuntos. ?Lo podria conseguir en ese tiempo? --No es mucho tiempo, pero lo podemos intentar, ya que tenemos a los compradores adjudicados a cada propiedad. Eso si, puede llevarse los objetos personales de la casa, si quiere. Y quedarse en ella hasta que terminemos todo el asunto. --Me llevare las fotografias, el resto no. Y si es necesario, me quedaria a vivir en el hotel en que me aloje anoche durante ese tiempo. Si los compradores quieren entrar antes, claro. --No sera necesario. Esperaran. Tras una breve pausa. --Bien. Hoy mismo me pondre en contacto y resolvemos esto lo antes posible. Mi bufete trabajara incansable en este asunto para que pueda irse con sus propiedades vendidas. La llamare para firmar todos los documentos. Mis ayudantes trabajaran estos dias para usted, antes de que regrese. Le advierto, que hay que descontar lo de Hacienda y nuestra minuta. --No se preocupe, lo entiendo. Es lo normal. --Hacienda se lleva un buen pico. --?Cuanto? --pregunto ella, porque no sabia lo que en Espana se cobraba por la venta o compra de propiedades. No estaba al tanto, pero miraria en internet por la tarde. No por desconfianza. Sus abuelos y sus padres habian confiado en ese bufete toda la vida y ella confiaba tambien. Tenian un gran prestigio, no solo en Martos, sino en los alrededores. --Un veinte por ciento. --Habra que pagarlo antes de irme. Quiero dejar pagado todo, para que no se me reclame nada una vez este fuera del pais. No quiero problemas con Hacienda, si ustedes pueden encargarse tambien de ello, se lo agradeceria. Y en todo caso, les voy a dejar mi tarjeta y mi telefono por si fuese necesario. Y yo, tambien los llamare. --Perfecto. Pues en eso quedamos. Le avisaremos para las firmas y necesitaremos un numero de cuenta para el ingreso antes de que venga de nuevo. --Y ella, se lo dio--. Aqui tiene las llaves de la casa de sus abuelos. --Estupendo. Espero su llamada. Gracias, senor Medina --dijo, levantandose y saludando al abogado que tambien se levanto y la acompano a la puerta. --A ustedes, por confiar en nosotros. Se despidio del abogado y cuando salio a la calle, al centro de la ciudad, casi le da un ataque de ansiedad. Sabia que sus abuelos eran ricos, pero eso era una barbaridad. Con esos pensamientos en la cabeza, lo primero que hizo fue ir a un bar y tomarse un par de cervezas y un par de tapas e irse al hotel donde se habia quedado la noche anterior, pagar la cuenta y subir a casa de los abuelos, en la parte alta del pueblo. La casa era maravillosa, una gran casona andaluza, estilo antiguo con un gran patio de flores. Ella recordaba haber estado alli cuando era nina jugando y de adolescente durante el instituto. Dormiria en su antigua habitacion; donde se quedaba cuando iba a ver a sus abuelos desde Nueva York. Se hizo un cafe y se tumbo en el sofa. Habia dormido poco desde que el vuelo desde Nueva York la dejara en Madrid, y de ahi el Ave hasta Cordoba y otro tren a Jaen y tomo un taxi hasta Martos. Ya estaba cansada y no iba a tomar el autobus. Tendria que hacer lo mismo a la vuelta. Se quedo dormida hasta el dia siguiente. Nunca habia dormido tanto. Ni habia tanto silencio en la casa. Abrio su maleta y se ducho, se cambio de ropa y salio a desayunar. Se dio una vuelta por el pueblo y se compro un libro para esos dias de espera, el periodico y una revista del corazon. Era 25 de marzo y el tiempo aun era frio en ese tiempo, a pesar de estar ya en primavera. Despues de cinco dias, se puso algo nerviosa al ver que el abogado no la habia llamado, pero decidio esperar. Recorrio el pueblo de parte a parte, e incluso un dia subio a la Pena, al cementerio, con flores para sus abuelos y sus padres. Al siguiente dia de espera, fue a ver el Castillo de Jaen y paso la manana en la capital, donde comio y paseo. Volvio por la tarde despues de tomar el cafe. Al sexto dia, la llamo el abogado. Deberia pasar manana por la tarde para firmar los documentos. Ella estuvo de acuerdo. !Que eficiencia! CAPITULO 2 <>, penso Rosa. Habia firmado los documentos y el abogado vendio las propiedades. Tal como le habia indicado, tambien pago a Hacienda, para que no tuviera que preocuparse de nada. Le paso su numero de cuenta donde le hicieron una transferencia. Cuando Rosa salio del despacho, despues de entradas y salidas, tenia en su haber: ciento veinte millones de euros que cambio a dolares. Casi ciento cuarenta millones de dolares, mas lo que tenia ahorrado, daban un total de ciento cuarenta millones doscientos cincuenta mil dolares. Una fortuna millonaria. A eso habia que anadirle el dinero que llevaba encima para el viaje, que era la ultima nomina. Con ella saco los pasajes, pago el hotel y lo que se gasto alli. Toda una locura. Tendria que invertir en algo, quizas en propiedades. Pero todo eso lo haria cuando llegara a Estados Unidos. Tres dias despues, volaba a Nueva York. Solo se llevo una maleta y una bolsa de fotografias de sus seres queridos, una cuenta abultada y una ansiedad latente por volver al hospital. Esos dias, en el pueblo le hicieron querer recobrar una paz que no habia conseguido desde que termino el instituto. La Gran Manzana podia ser estresante. Su trabajo en el hospital mucho mas y su vida emocional cero. Su vida sexual y romantica, menos que cero. Suspiro mientras miraba por la ventanilla del avion. Con el dinero que tenia, incluso podia dejar de trabajar, pero eso no era lo que queria. Se habia pasado anos estudiando para trabajar y le gustaba ser doctora y tambien cirujana. Pero desde que habia pasado esos dias en el pueblo le rondaba una idea en la cabeza: dejar Nueva York. Si, no era necesario dejar de ser doctora, pero podia abandonar Nueva York, el bullicio y el estres e irse a un lugar mas tranquilo. No sabia donde, ni cuando, pero tal vez... lo antes posible. Un hospital pequeno, puede que no de un pueblo, se conformaba con una pequena ciudad... El lugar no era tan importante. Ese cambio era algo que necesitaba en esos momentos. Siendo cirujana y medica, dos ramas en las que era buena, no le faltaria trabajo. Tenia veintinueve anos y necesitaba un cambio en su vida. El haber pasado por el pueblo le habia hecho pensar en su estilo de vida. Al final era de pueblo, no de ciudad. Le gustaba la gente mas que la soledad de un apartamento en un lugar de millones de personas que ni se saludaban. Por no pensar en que en ese ambiente no se sentia comoda, le costaba hacer amigos con la gente de la urbe, siempre recelosa. En cuanto a los hombres... No tenia suerte, aunque Rosa era una chica guapa de uno sesenta centimetros. Morena, con el pelo largo ondulado y ojos verdes claros como el agua de un lago transparente, que cuando te miraban siempre se veian risuenos. Su nariz respingona estaba salpicada de pecas. Llevaba las unas cortas y sin pintar, todo a causa de su profesion. Tenia un buen cuerpo y los pechos generosos, sin llegar a ser demasiado exagerados. El gimnasio hacia su efecto. Era una mujer feliz por naturaleza. Y no solo estaba por su alegria, sino tambien por sus andares seguros. Atraia a los hombres, pero era quizas demasiado distante, independiente e ironica y cuando ligaban con ella, desconfiada. Se creia la mitad de la mitad de lo que los hombres le contaban. Y no se cortaba un pelo al hablar o decir lo que tuviese que decir. No habia tenido novios al uso. Nunca. Pero se habia acostado por necesidad con algunos hombres. Cuando habia salido sola algun fin de semana a tomar una copa a algun lugar de moda y le habia gustado un hombre se acostaba con el, pero nada mas. No daba nunca su telefono, quizas porque no le habia interesado ninguno. ?Que le gustaria encontrar a su media naranja?, claro, pero eso era dificilisimo. Y su reloj biologico iba a darle cualquier dia un disgusto. Pero ella sabia que era una chica familiar, que en un futuro no muy lejano querria hijos y un marido y ese ultimo era el que tenia que encontrar. Un hombre con quien formar una familia. Suspiro de nuevo. Seguro que en la Gran Manzana no habria un hombre para ella.

  • El ano perfecto (Manhattan Beach 2) de Raquel Villaamil

    https://gigalibros.com/el-ano-perfecto-manhattan-beach-2.html

    Si tras leer “Manhattan Beach” ardes en deseos de seguir las aventuras romanticas de Miriam Sanabria en Hollywood, estas de enhorabuena. La segunda parte de la trilogia tiene mas emocion y tension que nunca. Te identificaras tanto con la protagonista de “El ano perfecto” que te sentiras como en un viaje a California.

  • La CancioN Del Lobo. Wolfsong de T. J. Klune

    https://gigalibros.com/la-cancion-del-lobo-wolfsong.html

    Suspiro por lo bajo de forma brusca y le tomo un momento voltearse en mi direccion. -?Cuando llegaste a casa? -Hace un rato -me dio una comezon que no se sintio nada bien. Papi echo un vistazo al reloj viejo sobre la pared. La cobertura plastica del frente estaba agrietada. -Es mas tarde de lo que pensaba -sacudio la cabeza-. Mira, Ox... Parecia nervioso. Confundido. Mi padre era muchas cosas: un alcoholico, rapido para enfadarse y atacar con palabras o punos, un dulce demonio con una risa que retumbaba como esa vieja Harley Davison que habiamos MOTAS DE POLVO/ FRIO Y METAL enia doce anos cuando papi puso una maleta al lado de la puerta. T-?Para que es eso? -le pregunte desde la cocina. reparado el verano anterior. Pero jamas se lo veia nervioso, jamas parecia confundido. No como lo estaba ahora mismo. Presenti algo terrible. -Se que no eres el muchacho mas listo del mundo -me dijo mientras ojeaba su maleta. Era cierto, no habia sido provisto de una gran inteligencia. Mi mama una vez dijo que yo estaba bien. Mi papa pensaba que era lento. Mama le respondio que no se trataba de una carrera. Papa ya habia bebido demasiado whisky y comenzo a gritar y romper cosas. No la golpeo. No aquella noche, de hecho. Mama lloro mucho, pero el no la golpeo, yo mismo lo verifique. Cuando comenzo a roncar en su vieja silla, me escurri a mi habitacion y me oculte bajo mis mantas. -Lo se, senor -replique. Me miro de nuevo y jurare hasta el dia en que me muera que vi amor en sus ojos. -Mas tonto que un buey -dijo. No se oia malicioso viniendo de el. Tan solo lo era. Me encogi de hombros. Esa no era la primera vez que me lo decia, incluso cuando mama le habia pedido que dejara de hacerlo. Estaba bien, era mi papa, sabia mas que cualquier otra persona. -La gente hara que tu vida sea una mierda. -Soy mas grande que la mayoria -afirme, como si eso significara algo. Y lo era, las personas me temian, aunque no queria que asi fuera. Era grande, como mi papa. El era un hombre de gran tamano con un temperamento inestable gracias a la bebida. -La gente no te comprendera. -?Eh? -No te entenderan. -No necesito que lo hagan -en verdad queria que lo hicieran, pero podia comprender por que no lo harian. -Debo irme. -?A donde? -Lejos. Mira... -?Lo sabe mama? -Claro... Tal vez. Sabia que sucederia, probablemente lo sabe desde hace tiempo -rio, pero no se oyo como si encontrara gracioso lo que acababa de decir. -?Cuando regresaras? -di un paso hacia el. -Ox, la gente sera mala. Solo ignoralos y manten tu cabeza baja. -La gente no es mala, no siempre -no conocia a demasiadas personas. De hecho, no tenia amigos. Pero la gente que si conocia no siempre era mala. Simplemente la mayoria no sabia que hacer conmigo. Eso no estaba mal, yo tampoco sabia que hacer conmigo. -No me veras por un tiempo -agrego-. Tal vez por mucho... -?Que hay del taller? -le pregunte. Papi trabajaba en lo de Gordo. Siempre olia a metal y grasa cuando regresaba a casa, y sus dedos estaban ennegrecidos. Tenia camisas con su nombre bordado con puntadas de rojo, azul y blanco: Curtis. Siempre pense que esa era una de las cosas mas maravillosas. La marca de un gran hombre, tener tu nombre grabado en una camisa. En ocasiones me permitia acompanarlo. Me enseno a como cambiar el aceite cuando tenia tres, como cambiar un neumatico a la edad de cuatro y como reconstruir el motor de una Chevy Bel Air Coupe de 1957 cuando tenia nueve anos. Esos dias llegaba a casa oliendo a grasa, aceite y metal, y sonaba que tenia una camisa con mi nombre bordado. Diria Oxnard o tal vez solamente Ox. -A Gordo no le importara -dijo mi padre. Se sentia como una mentira. A Gordo le importaba todo. Era algo malhumorado, pero una vez me dijo que cuando fuera lo suficien temente mayor, podria pedirle empleo. "Los tipos como nosotros deben mantenerse juntos", me dijo. No supe que quiso decir, pero me basto el hecho de que pensara en mi. -Oh -fue todo lo que pude decirle a mi padre. -No me arrepiento de haberte tenido -dijo-. Pero me arrepiento de todo lo demas. -?Esto se trata de...? No sabia de que se trataba. -Me arrepiento de estar aqui -continuo-. No puedo tolerarlo. -Bueno, eso esta bien -respondi-. Podemos solucionarlo. Quizas podriamos irnos a algun otro lugar. -No hay solucion, Ox. -?Cargaste tu telefono? -le pregunte porque jamas recordaba hacerlo-. No olvides cargarlo para que pueda llamarte. Hay cosas de Algebra que aun no entiendo. La senora Howse me dijo que podia pedirte ayuda. Aunque sabia que mi padre no entenderia los problemas numericos mas que yo. La llamaban Prealgebra. Eso me asustaba porque si ya era dificil siendo pre, ?que pasaria una vez que solo fuera Algebra, sin el pre incluido? -Maldita sea, ?acaso no lo entiendes? -grito. Conocia ese gesto, era su expresion de enfado. Estaba colerico. -No -le respondi, porque no lo entendia. Intente no encogerme por el miedo. -Ox, no habra ayuda para Algebra, ni llamadas por telefono. No hagas que me arrepienta de ti tambien. -Oh... -Ahora tienes que ser un hombre, por eso intento explicarte todo esto. La mierda te va a llegar, solo deberas sacudirtela y seguir adelante -tenia los punos apretados a los costados. No sabia por que. -Puedo ser un hombre -le asegure porque tal vez eso lo haria sentir mejor. -Lo se -respondio. Sonrei, pero aparto la mirada. -Debo irme -concluyo al fin. -?Cuando vas a regresar? -pregunte. Dio un paso vacilante en direccion a la puerta, con la respiracion repiqueteando en su pecho. Tomo su maleta y se marcho. Pude oirlo arrancar su vieja camioneta afuera, el motor tardo en encenderse. Se oia como si necesitara una nueva correa de distribucion. Tendria que re - cordarselo mas tarde. -?Ox? -pregunto. Se veia muy cansada-. ?Que sucede? -Hola, mama. -?Por que estas llorando? -No estoy llorando -y no lo hacia porque ahora era un hombre. -?Que sucedio? -acaricio mi rostro. Sus manos olian a sal, patatas fritas y cafe mientras frotaba sus pulgares sobre mis mejillas mojadas. Baje la cabeza para mirarla. Siempre habia sido pequena y yo, en algun momento del ano pasado, habia crecido mucho. Ojala recordara ese dia, debio haber sido monumental. -Cuidare de ti -le prometi-. Ni siquiera debes preocuparte. -Siempre lo haces -su mirada se suavizo. Pude ver las lineas alrededor de sus ojos, el cansado conjunto de su mandibula-. Pero... -se detuvo. Tomo aire-. ?El se marcho? -pregunto y su voz se oyo tan pequena. -Eso creo -enrosque su cabello con mi dedo. Oscuro, como el mio, como el de papa. Eramos todos oscuros. -?Que te dijo? -me pregunto. -Ahora soy un hombre -repeti. Eso era todo lo que necesitaba oir. Mama se partio de la risa. Mama llego tarde a casa esa noche, luego de trabajar doble turno en el restaurante. Me encontro en la cocina, de pie en el mismo lugar en donde estaba cuando mi papa atraveso la puerta. Las cosas eran diferentes ahora. Tampoco se llevo fotografias. Solo un poco de ropa, su afeitadora, su camioneta y algunas de sus herramientas. Si no lo hubiera conocido mejor, hubiera pensado que jamas estuvo aqui. Sono un par de veces hasta que un mensaje dijo que el telefono ya no estaba en servicio. La manana siguiente tuve que disculparme con mama, habia colgado con tanta fuerza que quebre la base del telefono. Ella dijo que estaba bien, y no volvimos a mencionarlo nunca mas. -Mantenlas limpias y Dios te libre si las encuentro tiradas afuera. Se oxidaran y te dare una paliza. Esta mierda no es para jugar, ?entiendes? -me dijo. -Si -respondi y las toque con reverencia porque eran un regalo. No podia encontrar las palabras para decir lo completo que se sentia mi corazon. Papa no se llevo el dinero cuando nos dejo. Al menos no todo. Aunque tampoco habia demasiado, a decir verdad. Lo llame en el medio de la noche, cuatro dias despues. enia seis cuando mi papi me compro mi propio set de herramientas. No de las que eran para ninos. Nada de colores brillantes ni plastico, eran de metal frio y reales. T Un par de semanas tras su partida, me hallaba de pie en la habitacion de ellos (de ella). Mama estaba en el restaurante otra vez, en un nuevo turno. Sus tobillos estarian adoloridos cuando llegara a casa. La luz del sol se vertia a traves de una de las ventanas sobre la pared del fondo y atrapaba las pequenas particulas de polvo. Olia a el dentro de la habitacion. A ella. A ambos, a una mezcla de los dos. Pasaria mucho tiempo hasta que el se desvaneciera. Pero al final lo haria. Abri la puerta del armario y uno de los lados estaba casi vacio, aunque quedaban algunas cosas. Las pequenas partes de una vida que ya no era vivida. Como su ropa de trabajo, cuatro camisas que colgaban al final del armario. Lo de Gordo, en cursiva. Todas decian Curtis. Curtis, Curtis, Curtis. Toque cada una de ellas con la punta de mis dedos. Quite la ultima de su gancho, la deslice por mis hombros. Era pesada y olia a hombre, sudor y trabajo. -Okey, Ox -me dije-. Tu puedes hacerlo. Entonces comence a abotonarla. Mis dedos se trababan sobre sus botones, muy grandes y redondos. Era torpe e ingenuo, solo manos y piernas, sin encanto y soso. Era demasiado grande. Acabe con el ultimo boton y cerre mis ojos, respire profundo. Recorde como lucia mama esa manana: las lineas moradas debajo de sus ojos, sus hombros caidos. -Se bueno, Ox, mantente lejos de los problemas -me habia dicho, como si los problemas fueran la unica cosa que yo conociera. Como si me metiera en problemas a menudo. Abri los ojos y me enfrente al espejo que colgaba en la puerta del armario. La camisa era demasiado grande o yo era demasiado pequeno. No estaba seguro de ninguna de las dos cosas. Me veia como un nino disfrazado, como si fingiera ser alguien mas. -Soy un hombre -dije con voz baja luego de fruncir el ceno al ver mi reflejo. >>Soy un hombre -no creia en mis palabras. >>Soy un hombre -repeti con una mueca de dolor. Al final me quite la camisa de mi padre, la devolvi al armario y cerre las puertas. A mis espaldas, las motas de polvo siguieron flotando en la luz solar que desaparecia.

  • Reinos de Sangre de Oscar Eimil

    https://gigalibros.com/reinos-de-sangre.html

    Idus de noviembre del ano del Senor de 1065. Una gran nevada cae sobre el campamento. Fernando, rey de Galicia, de Leon y de Castilla, moribundo, viejo y decrepito, viaja de regreso a casa con sus mesnadas tras su ultima batalla. Torturado por su conciencia, se pregunta por que, habiendo podido dejar a su primogenito un unico reino que, fuerte, extendiera su poder por toda la Hispania cristiana, decidio repartir en vida Castilla, Leon y Navarra entre sus tres hijos varones que, a esta hora, preparan sus huestes y afilan sus espadas para la guerra fratricida que se avecina para despues de su muerte.
    Supremacia y poder, intriga y ambicion, lealtad, traicion, guerra, amor y muerte. Ocurrio hace mil anos, cuando judios, moros y cristianos campaban a sus anchas por estos pagos. Una historia verdadera por cuyas paginas entran y salen reyes y nobles, caballeros y prelados, mancebas y juglares, guerreros, monjes y abades, y que discurre fiel a los terribles acontecimientos historicos que sucedieron poco despues del final del primer milenio en lo que, cuatro siglos mas tarde, seria Espana.

  • Amor de niebla y destino de Natalia Sanchez Diana

    https://gigalibros.com/amor-de-niebla-y-destino.html

    Lucian Monroe se ha pasado la vida luchando por mejorar los derechos de los trabajadores en los molinos de Manchester pero una fatidica noche, un acontecimiento violento le obliga a huir.Desde que perdio a su esposa, no ha vuelto a tocar a una mujer porque se hizo una promesa.
    Todo se tambalea cuando coincide con Catalina Wright, a la que han enviado lejos para casarla con algun aristocrata que quede prendado de su cautivadora belleza y de la riqueza de su hermano.
    Pero lo que quiere Catalina es encontrar su lugar en el mundo y descubrir la pasion.
    Lo que empieza con un favor inocente, se complica cuando ambos descubren el deseo y el pasado reclama su venganza.
    Rebelate contra las normas.
    Lucha, camarada.
    Y enamorate.

  • Al infinito de Rita Black

    https://gigalibros.com/al-infinito.html

  • Vienen por ti de Andrea Larrabe

    https://gigalibros.com/vienen-por-ti.html

    La primera novela de romance paranormal adolescente escrita por la periodista Andrea Larrabe.

  • Trazos del corazon de Jezz Burning

    https://gigalibros.com/trazos-del-corazon.html

    En Trazos del corazon encontraras seis historias de amor: historias de leyendas, de misterios, de excarcelacion, de deseos, de anhelos, de superacion. Seis relatos muy distintos entre si pero con un nexo comun: el amor.
    Ven a conocer a Rodrigo e Ines y un amor inconfeso, maldito y eterno; a Zucca y Nala, su tierna historia te conmovera; a Juana y Gregory cumpliendo sus deseos mas intimos; a Gabrielle y John, quienes deberan vencer a los miedos y la maldad mas terrible, la que anida en el interior de cada uno; a Carla y Alberto, y su ansiado reencuentro; y a Mina y Adrian, quienes buscaran una segunda oportunidad para ella, aunque les cueste la vida.

  • Cancion dulce de Leila Slimani

    https://gigalibros.com/cancion-dulce.html

    Myriam, madre de dos ninos, decide reemprender su actividad laboral en un bufete de abogados a pesar de las reticencias de su marido. Tras un minucioso proceso de seleccion para encontrar una ninera, se deciden por Louise, que rapidamente conquista el corazon de los ninos y se convierte en una figura imprescindible en el hogar. Pero poco a poco la trampa de la interdependencia va a convertirse en un drama. Con un estilo directo, incisivo y tenebroso en ocasiones, Leila Slimani despliega un inquietante thriller donde, a traves de los personajes, se nos revelan los problemas de la sociedad actual, con su concepcion del amor y de la educacion, del sometimiento y del dinero, de los prejuicios de clase y culturales. “Cancion dulce” gano el Premio Goncourt 2016.

  • El corazon de una Campbell de Edith Stewart

    https://gigalibros.com/el-corazon-de-una-campbell.html

    Colin McGregor ha conseguido salir con vida del paramo de Culloden, no sin gran esfuerzo. Herido, busca refugio en una cuadra donde sus fuerzas le abandonan y cae desmayado.
    Brenna Campbell, duena y senora del castillo de Cawdor, no puede creer que el herido en sus cuadras sea un McGregor. Sabe que si los ingleses lo descubren alli, el clan sera acusado de traicion a la corona. Pero ese no es su unico problema, Brenna tiene que lidiar con las atenciones del capitan Fullarton quien pretende cortejarla. Pero ella jamas se casara con un sassenach, asi que esta dispuesta a pedirle a Colin McGregor, una vez repuesto de sus heridas, que se haga pasar por su prometido para alejar al baron ingles.
    Lo que comienza como una farsa ante los ojos de todos, pronto dara paso a la pasion mas abrasadora.

  • Rompete, corazon de Cristina Lopez Barrio

    https://gigalibros.com/rompete-corazon.html

    Blanca Oliveira pronto se arrepentira de haber regresado al caseron familiar del monte Abantos donde hace trece anos desaparecio su hija Alba sin dejar rastro. A los pocos meses de instalarse alli con Ricardo, su nuevo marido, y las dos hijas que le quedan, desaparece otra de ellas. La historia se repite: la edad de las ninas, el inspector de policia encargado de resolver el caso, la unica pista, una cinta roja hallada en el jardin, la muerte de un caballo, el cuento de hadas relacionado con la historia de la familia que pesa sobre cada uno de sus miembros como una maldicion.

  • Fantasias cumplidas de Gema Perez

    https://gigalibros.com/fantasias-cumplidas.html

    La Hechicera Fugitiva:
    Marian, una hechicera del vasto reino de Irulia, ha visto como sus tierras han sido arrasadas por los barbaros. Ahora no tiene mas remedio que huir de aquel infierno, rezando para encontrar tierras mas prosperas que acojan con buenos ojos a una bruja.
    Cuando llega a las tierras de Riedan su historia ya la ha precedido. No hay muchas brujas vivas, y estan en alta demanda... ya sea para matarlas o para atesorarlas. Por supuesto, Alcid Bronn, el gobernador local, tiene planes para ella...
    Ayudandola, y brindandole un sitio a su lado en la sala del trono, juntos estaran dispuestos a sentar en su reino las bases para que nunca mas deban preocuparse por los barbaros.

  • Por la fuerza (Parte 2 de 2) de Pilar Parralejo

    https://gigalibros.com/por-la-fuerza-parte-2-de-2.html

    Continuacion de Por la fuerza.

  • Para enamorarte de mi (Sin Mirar Atras 2), Daniela Alessandra de Daniela Alessandra

    https://gigalibros.com/para-enamorarte-de-mi-sin-mirar-atras-2-daniela-alessandra.html

    Basta un minuto para pasar de tener una vida perfecta a quedarte sin Vida. Basta un solo error para que todo por lo que has luchado se vaya a la mierda. Nada habia importado hasta el momento en que Mary dejo de ser la mejor amiga de mi hermanita y se convirtio en el Gran amor de mi vida. Ese amor que le da un sentido a tu vida, que te llena y te mantiene fuerte, ese amor que te hace sentir completo y feliz. ese amor que he perdido y me ha dejado destrozado.

  • Castidad (Guardianes de Sangre 2) de Stefania Gil

    https://gigalibros.com/castidad-guardianes-de-sangre-2.html

    El primer libro de Guardianes de Sangre esta incluido aqui. Empezaras leyendo Redencion, la historia de Lorcan Farkas y del origen de Los Guardianes de Sangre.
    Luego, podras leer Castidad, la historia de Garret Farkas quien pierde a Diana en manos de la Inquisicion hace varios siglos, y desde entonces, hizo un voto de castidad en su honor porque no concebia la posibilidad de encontrar el amor y la pasion en otra mujer que no fuese ella.
    Pero un dia Felicity Smith con su dulzura y simpatia lo llevo a romper con cualquier promesa que le hubiera hecho a Diana para honrarla.
    Para Felicity la vida no ha sido facil y los ultimos eventos acontecidos en los que se siente acosada por la bestia que desea cazarla y matarla, han hecho que la compania de Garret Farkas se convierta en algo mas que un simple carino entre amigos.
    ?Conseguira Felicity recuperar su vida tal como la conocia? ?Aceptara a Garret cuando descubra su verdadera naturaleza?

  • Alguien esta mintiendo de Karen M. Mcmanus

    https://gigalibros.com/alguien-esta-mintiendo.html

    Todo el mundo tiene secretos, ?verdad? Pero, ?que serian capaces de hacer para protegerlos?

  • Llamada Nocturna de Lara Arbi

    https://gigalibros.com/llamada-nocturna.html

    Saltillo, Coahuila. Febrero de 2020 3: 10 am El tono particular del celular de Sara, la hizo despertar de su profundo y reparador sueno. Casi lamentaba no haberlo apagado. Pero siempre existia la posibilidad de una llamada emergente de parte de alguien de su familia o de alguna amistad que requiriera de ayuda. Por eso, lo dejaba encendido. Siempre. Ella saco la mano de debajo de su gruesa y abrigadora frazada y sintio el frio apoderandose de su brazo. No era invierno, era que acostumbraba dormir con la refrigeracion al maximo, durante los meses calurosos. Definitivamente aquella era una llamada inesperada y eso de despertar de pronto, hacia que su pulso estuviera erratico y desatinado, asi que el celular termino resbalandosele de su mano. --!Auch...! --exclamo molesta, su voz se escucho ronca. Por suerte la alfombra frente al buro amortiguo el golpe y el celular sobrevivio al accidente, pero moverse para tomarlo casi le cuesta irse de cabeza al suelo. "!?A quien se le ocurre llamar a esta hora?!" rezongo en pensamientos. "!Ah! Si es otra vez el Joel, que necesita raite porque anda bien borracho, !lo va a lamentar!" Juro Sara, sin ver quien llamaba. --Diga --respondio Sara con voz aguardentosa y los ojos cerrados, pero nadie le respondio. Habian cortado. Tenia tanto sueno que no se preocupo en ver quien habia llamado, suponia que si era un conocido, le volveria a marcar, y si no lo era, le enojaria mucho enterarse de que se habia esforzado para descubrir que era un numero no identificado. Se lanzo sobre su almohada sin soltar el telefono, se arropo y cerro los ojos dejandose llevar por el sopor. En pocos segundos estuvo de nuevo sumergida en la agradable inconsciencia del sueno. Las imagenes empezaron a brotar en su mente, recreando realidades no existentes. Un encuentro con amigas en una reunion de cumpleanos. Habia muchas risas, buen ambiente, y repentinamente; todo desaparecio, de nuevo gracias a los tonos de su celular. Moverse hizo percibirlo en su mano y se agradecio a si misma por no haberlo soltado. En ese momento no recordo el detalle de que una llamada inesperada la habia despertado minutos antes, asi que respondio sin revisar quien marcaba. --Diga --balbuceo, completamente adormilada, y escucho una voz de alguien que no reconocio. --!Hola, hola! ?Como estas, amiga? Que placer escucharte. --?Que si como estoy? --respondio con cierta ironia--. !Pues estoy dormida! !Son las tres de la manana! ?Por que no esperaste a que amaneciera para llamar? --Oye; perdona la hora. Es que acabo de llegar. No te hubiera molestado de no ser porque necesitaba asegurarme de que te vere --dijo el tipo. Su voz era agradable, pero percibia un dejo de preocupacion en ella--. Si no hay inconveniente, voy alla en taxi, pero necesito que me digas tu direccion para que el taxista llegue sin problema, y la hora a la que pudieras recibirme, por favor. --?Quien habla? --pregunto sin abrir los ojos. --!Ja! ?Como que, quien? !Pues yo!, crei que me habias reconocido. Oye, luego hablamos de esos detalles, ahorita urge que me digas tu direccion. Tengo que arreglar mi estancia. Me estan esperando. Ella checo el numero entrante y se dio cuenta de que si era un numero que tenia en su agenda, y estaba a nombre de un amigo que hacia muchisimo tiempo no contactaba. --?Eres Alejandro Medina? --?Y quien mas te iba a estar hablando a estas horas, sino un viejo conocido? El suyo era un numero que se empolvaba en la agenda de Sara. Hacia tanto que ese amigo no le llamaba, que muchas veces estuvo tentada en eliminarlo de su agenda para que no le ocupara espacio. Alejandro Medina habia sido un buen companero de la preparatoria. El, se habia ido a estudiar la carrera profesional a la ciudad de Mexico, y desde entonces le habia perdido la huella. Habian pasado ya varios anos, considerando que ambos habian terminado ya su carrera profesional, y tenian al menos dos anos trabajando en lo suyo. Ella se sento en su cama, acomodando la almohada como respaldo y continuo la conversacion. --Ah. Perdona. No te reconoci la voz. Es que ya traes el tonito de "chilango". ?Ya tienes en que anotar? --le pregunto ella, pensando en aclarar condiciones. --Si, claro. Dime. Y fastidiada por estar despierta cuando debia estar durmiendo, termino diciendole su direccion con santo y sena, asi como los horarios en los que la podria encontrar, pues ella trabajaba. --Quisiera saludarte, pero si tienes que ir a trabajar, pues... lo mejor sera que nos veamos en algun restaurante, a la hora de la comida, o tu di a que hora y donde, ?no? --Bueno. Apunta: manana a la 1:30 en el restaurante "Delicias". Esta por la calle Venustiano Carranza, una cuadra despues del cruce con la Avenida Universitaria. Yendo de norte a sur. Esta muy visible. No te vas a perder. !Ey! Pero, hace tanto que no nos vemos que no te voy a reconocer. Y tampoco creo que tu lo hagas. He cambiado. ?Como te ubico? --Bueno. Veamos; llevare camisa azul lisa, y una cachucha beisbolera de color blanco. Llevo cabello un poco largo. Pero poquito. Tu, ?que llevaras puesto? --Mi uniforme de la empresa. Es color verde tierno, con blusa rosada. Lleva saquito del mismo color. Trabajo en con un licenciado. Muy estricto, por cierto. Apunta esto; yo traigo el cabello hasta el hombro, color cobrizo. Ya no soy rubia, ?recuerdas? --!Oh! Claro, como lo iba a olvidar. Bueno, te dejo dormir un poco mas y nos vemos en las "Delicias" a la hora de la comida. Hasta luego, linda. !Oye! ?No se molestara tu marido o tu novio, si sabe que saliste a comer conmigo? --Por supuesto que no. Primero porque, que yo recuerde, no estas tan lindo --bromeo ella--, y segundo, porque no me he casado todavia, ni tengo novio formal. !Nadie se enojara contigo! --Perfecto --lo dijo con tono de complacencia regularmente disimulado--. Entonces nos vemos en las "Delicias". --Hasta luego --dijo ella y en cuanto termino la comunicacion se recosto de nuevo, sin soltar su celular. Entonces recordo un detalle. "Hasta luego... !?linda?! Ay, Alejandro. Si que te has achilangado", penso sonriendo. Su voz y sus maneras eran diferentes a las que recordaba, pero era logico; habian pasado varios anos sin verse y suponia que al terminar sus estudios, el se habia quedado a vivir en la capital. Antes de quedarse dormida le vino a la mente otro detalle: "?Como que me recordaba rubia, si yo me teni el cabello hasta el segundo semestre de la profesional? El ya se habia ido a la capital", le dio vueltas al dilema por unos segundos, pero tenia sueno y termino concluyendo: "Lo dijo por no quedar mal. Despues de todo yo le estaba aclarando que llevaba el cabello tenido de rubio". No lo analizo demasiado. Tenia mucho sueno y necesito poco tiempo para volver a quedar profundamente dormida. *** Desperto al siguiente dia dando un salto, porque la sorprendio la alarma de su despertador. No recordaba el incidente de la llamada. Tenia prisa por alistarse y preparar un buen desayuno. Eso era fundamental para que, ella se sintiera bien durante la jornada de trabajo. Una hora despues, salio de su departamento, entro a su auto y hasta que cerro la puerta, recordo lo de la llamada nocturna. La curiosidad la acoso y se las arreglo para sacar su celular del bolso, mientras maniobraba el volante para enfilar rumbo a su trabajo. "Era el. Alejandro. Ademas me lo aclaro. No estoy segura de que sea el que recuerdo. Hace mucho que no lo veo. Bueno, ya lo vere a la hora de la comida" --despues de unos minutos de ir conduciendo, penso--. "?Que querra? !Ah!, me late que me quiere engatusar con algun negocio. Sucede tanto. Los embaucan a ellos, y ahi los traen, apurados consiguiendo gente que le entre a tal o cual estupido negocio de ventas" --viro a la izquierda--. "Lo que no sabe este cuate, es que no soy de las que se deja controlar. Soy de las que habla claro y directo. Lo saludare por los viejos tiempos, pero en cuanto empiece con sus cosas... !A volar, chiquitito!" Olvido el asunto en cuanto se ocupo de su trabajo, y lo recordo solamente a la hora de la salida, en el momento en que tomo su bolso y lo colgo al hombro. Estaba por ver a ese companero que hacia tiempo se habia ido a la capital. Se preguntaba, como se veia el ahora. A que se dedicaba, y sobre todo, que queria. Tenia muy en cuenta que una de las opciones de los estudiantes universitarios para apoyar el pago de sus estudios, era vender algo; sobre todo seguros. Ella consideraba a los vendedores de seguros como una plaga. Una vez mas se puso a planear los argumentos que usaria para no permitirle que la engatusara con algun plan suyo que trajera. Era verano. Al salir a la calle sintio que el calor le lastimaba la cara. Hubiera deseado irse directamente a casa a acostarse y disfrutar del descanso, viendo un programa de television o durmiendo, en medio de un ambiente refrigerado, y no tener que enfrentar una situacion que podia llegar a ser molesta. Pero no podia dejar de lado el compromiso que se habia creado con el tal Alejandro. Para desvanecer el sentimiento de molestia se concentro en los recuerdos de sus anos de bachillerato. No habian sido tan buenos. Habia pasado momentos amargos, dias pesados por el estudio, por los dichosos examenes que solian ponerles, y todas esas cosas relacionadas con, tener que aprobar para pasar el semestre. Pero Alejandro, si era un buen recuerdo. Estaba consciente de que con el tiempo la gente suele cambiar. Ella misma habia cambiado. Debia considerar que ahora Alejandro trajera, no muy buenas manas. Pero ya iba en camino a cumplir con esa cita y sucediera lo que sucediera, pronto estaria de regreso en casa. Se prometio que regresaria sintiendose tranquila, sin haberse dejado colgar obligaciones que no deseaba. "!Por nada del mundo debo dejarme embaucar con un negocio suyo, o lo que sea. Si se enoja, !pues que se enoje! Si. Es que, tratar de mantener a la gente contenta, muchas veces implica meterse uno en un berenjenal. ?Pero, y por que? No soy Hermanita de la caridad. Pero sobre todo, quiero vivir tranquila. Por Dios que si". Suspiro cuando penso esto y el semaforo se puso en rojo. Trato de no exasperarse. Recordaba que todo pasa, y pronto ese asunto estaria concluido. Normalmente no era tan hurana para relacionarse, pero la manera en que se dieron las cosas; esa llamada a las tres de la madrugada, el colgarle un compromiso que le conflictuaba un poco la existencia en un dia en el que deseaba estar tranquila, todo eso le hacia sentir cierto rechazo hacia ese encuentro. El semaforo cambio a verde y ella avanzo a la velocidad a la que iban el resto de los autos, unas cuadras mas adelante dio vuelta a la derecha. Ya estaba sobre la calle Carranza. Avanzo un poco mas y encontro la Avenida Universitaria. Sabia que a la derecha encontraria el acceso al restaurante. Afortunadamente habia lugares disponibles para estacionar su auto dejandolo bien protegido y sombreado con amplios tejados. Vio la hora en su celular y sonrio; estaba a tiempo. No encontraria a un Alejandro fingiendo que no estaba malhumorado por su tardanza. Se arreglo un poco el cabello y su maquillaje, y metio una pastilla de menta a la boca para refrescar su aliento, entonces salio del auto. Era un lugar de sobra conocido por ella. Habia estado muchas veces ahi, sola o acompanada, asi que sabia a donde dirigirse con confianza. Una vez adentro, se dedico a localizar a alguien con las caracteristicas que le describio su amigo; camisa azul corte formal, cachucha beisbolera de color blanco, cabello un poco largo. No estaba a la vista. Se sintio desconcertada por eso. Vio la hora y se dio cuenta de que habian pasado solamente diez minutos de la hora de la cita. Supuso que por haber estado fuera de su tierra tanto tiempo, podia haberse desubicado. En ese momento se acerco a ella uno de los jovenes meseros. --?En que puedo servirle, senorita? Ella se alegro de recibir ayuda. --Ah, si. Busco a un hombre que viste camisa azul y trae cachucha blanca. Tendra unos, treinta anos. ?Ha visto a alguien asi? El joven penso en ello por unos segundos y respondio: --La verdad no. No he visto a nadie vistiendo asi. Tal vez decidio quitarse la cachucha, pero aun asi no recuerdo haber visto a alguien de camisa azul, solo. Esperando a alguien --Sara se sintio incomoda por la situacion--. Pero dejeme dar una vuelta por el restaurante a ver si lo localizo. ?Cual es el nombre del senor? --Alejandro Medina. Gracias por su ayuda. Mire; me sentare por mientras, en esa mesa -- dijo, senalando una mesa situada en un rincon. --Bien, ahora vuelvo --dijo el joven amablemente. Sara se sento en la mesa desocupada y se sintio bien. Fue cuando comprendio que podia haber un monton de razones por las que Alejandro no estuviera ahi a tiempo. Si el joven mesero no lo localizaba, lo esperaria. Y hasta se previno pensando en que si no llegaba, ella no le daria otra cita. "!Que se vaya al cuerno, si no viene!" Entonces rio para si misma pensando en que se estaba defendiendo de algo que todavia no sucedia. Unos minutos despues vio que el mesero estaba de regreso. Pronto sabria si Alejandro, estaba o no estaba en ese lugar. "Pues, si esta aqui, que poco caballero. El deberia venir a mi encuentro", penso, una vez mas a la defensiva. Pero no habia llegado. --Mire, ya di la vuelta por el local y por los reservados y... no, el senor no ha llegado. ?Va a esperarlo? Tal vez no tarde. --Si, lo esperare. ?Donde puedo sentarme? --Ahi, donde esta. Si se siente comoda. --Si, estoy comoda --la razon era que no estaba muy a la vista, por eso de que no llegara Alejandro--. Estoy en buen punto para detectarlo en el momento en que entre por esa puerta -- aclaro ella. --Bien, ?desea tomar algo, mientras espera? Ella penso en una bebida suave para bajar la tension que le causaba ese trance. --Una cerveza, por favor. Cuando le sirvieron su bebida, Sara empezo a sentirse mas relajada y dispuesta a esperar a su amigo. La limitante era que solamente tenia una hora para comer y despues debia regresar a su trabajo. "Es el colmo. Le llamare a ver que pasa". --"?Alejandro?… !Oye!, ?que pasa que no llegas? !Se me esta haciendo tarde! --le dijo Sara, y no reprimio su molestia. --!Hijole! Sarita, lo siento. Es que me perdi. Pense que iba a ser facil y no. Lo siento. !Dame un minuto mas!, ?ok? --Pero un minuto nada mas. !Tengo que volver al trabajo! Sin embargo, los minutos pasaron sin que Alejandro apareciera y cuando se dio cuenta de que solo restaban veinte minutos de descanso, decidio comer algo para regresar al trabajo. Llamo al mesero y le pidio algo de carne y verduras y un refresco, aclarandole que solo podia quedarse ya menos de veinte minutos. "Como me esta haciendo pesado el dia, este amiguito. Primero, me llama a una hora inadecuada, me cita porque el quiere y por lo visto va a aparecer cuando el lo decida. !Pues, no! No se haran las cosas como el quiera, ?es que, piensa que porque viene de la capital va a obligarlo a uno a hacer lo que el quiera? !Para nada! Ya no soy tan docil como lo era en la prepa". Faltando diez minutos para su hora de entrar al trabajo, ella pago la cuenta y sintiendose indignada, salio hacia su auto. Apenas tendria tiempo de llegar a las oficinas donde trabajaba. No le perdonaria que le descontaran parte de su sueldo gracias a su irresponsabilidad. Al abrir la puerta del restaurante, sintio de inmediato el golpe del aire calido del exterior que se percibia mas al haber estado en un ambiente refrigerado. Con paso apresurado se dirigio a su auto, y justo cuando abrio la puerta escucho una voz a sus espaldas. --!Oh!, !Sara! --dijo. Cuando ella volteo a ver quien le hablaba, se encontro con un tipo que realmente no conocia, pero llevaba una cachucha blanca y camisa azul. Era Alejandro Medina. Ella se quedo estatica, pensando en que, no era asi como recordaba que era Alejandro. En todo caso, los anos lo habian transfigurado. "Pero me ha demostrado que es Alejandro. Incluso su numero de celular es el que tengo en la agenda". --?E-estas suficientemente molesta como para no darme un abrazo de bienvenida? --dijo el recien llegado, con expresion apesadumbrada. Ella no se atrevio a mostrarse violentamente enojada. Su sentido de cortesia supero a su enojo y con toda calma respondio: --Es muy tarde, Alejandro. Tengo que irme a mi trabajo. Creo que dejaremos nuestra cita para otro dia, ?de acuerdo? El se agito, mostrandose apenado y entonces le dijo: --Tienes razon. Lo siento mucho. Te he estado causando muchos trastornos desde que llegue. !No tengo derecho a perturbar tu vida! Sin embargo no quisiera irme sin que platicaramos. Mira, tengo una idea para lograrlo sin causarte mas dolores de cabeza. --?Cual es esa idea? --respondio ella, con gesto cansado. --Me ire contigo para ver donde esta tu lugar de trabajo, pero no, no te preocupes, no entrare. Me quedare en algun lugar cercano a esperar tu hora de salida. Asi, no habra mas contratiempos, por lo que sea. Tu no tienes por que batallar con mi desubicacion. !Es que ya ni me acuerdo, de las calles de mi ciudad, caray! Ella vio la hora. Le quedaban cinco minutos para llegar a su trabajo, y eso la hizo responder: --Pues, vamos. Y, estoy de acuerdo en que me esperes en algun lugar cercano. Lo siento, no te puedo pasar a las oficinas. Tengo un jefe muy intransigente. --No, no. Claro que no haria eso. Se hara como tu dices. !Vamos! Y con toda presteza, el fue a la puerta del copiloto obligando con eso a Sara a entrar para abrirle la puerta y apurar las cosas. Pero ella aceptaba el trance porque la hora le preocupaba. Ella actuaba con rapidez. Estaba seria, la verdad era que estaba molesta. Sin embargo lo haria por los buenos tiempos y solamente por esta ocasion. !Nunca mas! Encendio el auto y se apuro a salir rumbo a su trabajo. Alejandro iba en silencio, Su rostro no mostraba preocupacion, cosa que estaba causando mayor indignacion en Sara. Ademas se sentia un poco intrigada. El Alejandro que recordaba no era asi. Claro que habian pasado ya algunos anos por ellos y el tiempo cambia la fisonomia, muchas veces hasta el punto de volverlos irreconocibles. Pero... "Que distinto es. No hay nada en el, que me recuerde al Alejandro de la preparatoria". El Alejandro que observaba era un hombre de mediana edad, alto, de complexion recia. No podia decirse que era del todo, bien parecido. Varonil, si. Pero habia una actitud en el que le provocaba ansiedad, y hasta algo de temor. Habia algo en todo lo que estaba sucediendo desde que le llamara por la noche, que le estaba provocando un sentimiento extrano. Tenia la sensacion de que poco a poco estaba quedando mas atrapada en una situacion anomala, a la que no se decidia a ponerle fin, por no ser descortes con un viejo amigo. "!Vamos, vamos! !Somos viejos conocidos! Fuimos companeros de la preparatoria, no tengo por que sentirme atemorizada", argumento para quitarse de encima esa extrana sensacion que la embargaba. "Aun cuando el haya cambiado y se haya vuelto un tipo amanado por los anos que ha vivido en la capital. Claro, debe de haber pasado muy malos momentos, pero no creo que sea tan tonto de arriesgarse a venir a su tierra a cometer una tontera. Menos contra mi, que fuimos amigos"

  • Especial luna de miel de Rebeca Montes

    https://gigalibros.com/especial-luna-de-miel.html

    Aquel no era su primer viaje en avion. Ni siquiera se podria decir que fuese su primer viaje con el. Pero mientras caminaba apresurado entre el gentio del aeropuerto, su maleta rodando detras, no pudo evitar sonreir, feliz. En aquel rincon del mundo que se asemejaba mas a una burbuja turistica, los idiomas que se escuchaban por todas partes variaban de un espanol que Keith entendia solo a medias y un ingles fluido. Las personas apresuradas a su lado tambien parecian proceder de los mas variados destinos, a juzgar por retazos de conversaciones que el no llego a comprender. --?Donde vamos ahora? --pregunto mientras se detenia y se colocaba junto al que, desde hacia mas de un ano, era su marido. --Tenemos que buscar la empresa donde reservamos el coche. No fue dificil encontrar la hilera de cristaleras con decenas de anuncios sobre el renting y los precios. Chris ignoro a todos aquellos que intentaron llamar su atencion desde las puertas para entrar en la indicada. Alli, un joven de tez morena y bonitos ojos oscuros los atendio en un ingles perfecto, les hizo rellenar un monton de papeles y los acompano afuera, hacia un aparcamiento donde un reluciente coche azul los esperaba. --Es automatico, como lo pidieron. Y podra devolverse en nuestra empresa del aeropuerto del Chetumal en la fecha acordada. Disfruten de su viaje. El calor nada mas salir le hizo transpirar en apenas cinco minutos. No estaba acostumbrado a esa humedad sofocante que a las once de la manana parecia succionarlo todo. Se habia banado en repelente para protegerse de los mosquitos, y su piel se veia aun mas palida por el exceso de crema protectora para el sol. Chris habia tenido el tino de ignorar el inmenso sombrero que compro en el aeropuerto de Nueva York para cubrirse tanto la cabeza como los hombros. Ya sabian los problemas que tenia con las quemaduras. Keith habia debatido largo y tendido con su esposo sobre el destino de su viaje. Iban a ser diez dias y queria pasarlos lo mas relajados posible. La suma de mar y naturaleza seria un conjunto perfecto para que ambos pudieran deshacerse de algo del estres propio de los ultimos meses. El plan, en un principio, no era ir a Cancun, sino a un lugar mas pequeno y, supuestamente, menos concurrido en aquellas fechas: Tulum. Segun las fotos, aquel pueblecito turistico tenia uno de los yacimientos mayas mas importantes pegado a la playa. Una playa caribena, para mas enfasis. Desde alli se podian visitar, ademas, un monton de lugares que en imagenes parecian paraisos perdidos en medio de selvas hermosas. --?Quieres comer algo antes de partir o cuando lleguemos al hotel? Chris, con unas bermudas oscuras y una camiseta de algodon amplia, no habia conseguido en absoluto aquello que busco: el pasar desapercibido. Sus cabellos rubios, sus ojos castanos y aquel rostro atractivo no hacian sino atraer miradas de forma constante. Llevaba ademas aquel aura de seguridad que uno inmediatamente vinculaba con el dinero. Era algo que para aquellas alturas se pegaba de forma innata a su esposo. Por suerte, al final decidio no ir con aquellas chancletas horribles y se pudo unas zapatillas deportivas. --Cuando lleguemos. Sera junto la hora de comer, ?verdad? No deberiamos tardar ni dos horas, se supone. --Entonces solo compraremos agua para el camino y listo. Fue Chris quien se acerco hasta un puesto junto a la salida donde vendian botellas de todo tipo. Tras comprar un par de ellas, metio las maletas en el maletero mientras Keith configuraba el GPS del coche. Era una carretera recta, por lo que no deberian tener problemas. El aire acondicionado pronto se hizo necesario y Keith no dejo de mirar por su ventanilla, inmerso en un paisaje donde solo se veia verde y mas verde. De vez en cuando pasaban algun pueblo pequeno, que usualmente detenia el recorrido de los coches con altos resaltos en la carretera. Llegaron a Tulum antes de las dos. El pueblo era diminuto. Apenas unas calles que se extendian alrededor de la avenida principal. Pero por insistencia de Chris, que no creia que fuese necesario quedarse en un hotel alli, ambos tenian una bonita habitacion en el paseo de la playa, donde los hoteles mas caros se apinaban con sus rincones al mar privados y sus suites de lujo. Nada mas llegar, un chico uniformado los recibio, los dejo aparcar en un lugar privado y los condujo hasta la recepcion. Desde ella se veia una piscina larga que terminaba en una especie de cristalera con vistas al mar. Mas alla, una especie de terraza restaurante con bancos acolchados y toldos oscuros. Pero la mayor sorpresa fue cuando ese mismo muchacho los guio a traves de un camino de tierra y madera hasta dar con una cabana de dos pisos oculta entre arboles. Era como una casita encantada en medio del bosque, y justo frente a la playa. --Esto no es lo que reservamos --murmuro confundido. Christopher se volvio hacia el, atrayendole de la cintura mientras sus labios se posaban sobre los de Keith en un breve y sonoro beso. --?Sorpresa? Pense que te gustaria. !Y como no! Una hamaca grande pendia de dos arboles robustos, un porche de suelo de madera tenia unos sillones grandes y seguramente comodos. La puerta era de cristal, pero unas telas blancas cubrian en interior. El trabajador abrio la puerta y Keith, simplemente, sintio ganas de llorar. Verdaderamente parecia algo salido de un cuento. Con decorados rusticos y cuidados, telas claras y diafanas, sillones llenos de cojines. Era amplio y abierto, ofreciendo las vistas al mar. Era perfecto. --Gracias --susurro. El chico salio de la casa tras entregarle Chris la propina. Keith no sabia que queria hacer mas, abrazar a aquella persona insufrible por momentos o correr hacia el mar para lanzarse de cabeza a las cristalinas aguas. Gano el, como siempre, y cuando casi salto sobre ese cuerpo alto y hermoso, Chris le agarro para ayudarle a colocar las piernas alrededor de su cintura. --Me encanta --susurro mientras dejaba un rastro de besos por aquella piel que empezaba a dejar notar la barba del dia. Le encantaba sentir la aspereza contra el, sentirle a el apretado contra su cuerpo. Chris lo cargo por la casa, seguramente buscando la habitacion, y Keith se encontro pronto tendido en suaves y frescas sabanas. La cama tenia una tela fina que colgaba del techo y Keith, mientras elevaba el trasero para dejar a Chris sacar su ropa interior, penso que los mosquinos se quedarian fuera aquella noche. Le escucho grunir algo mientras se deshacia de su propia ropa, alli frente a el. Y Keith, durante unos instantes, penso que quizas deberia apuntarse a un gimnasio. Su cuerpo delgado no era propenso a conseguir grasa de mas, pero comparado con aquel cuerpo moldeado y marcado, parecia bastante simple. --Estas pensando demasiado, Keith --dijo Chris--. Tendre que esforzarme mas. --No hace falta, esposo. Solo me recreaba con esos abdominales tuyos. Quizas me apunte a tu gimnasio. --No duraras ni dos semanas. --Eso no es... Pero aquella boca le silencio con un beso, y Keith gimio mientras le sentia tumbarse junto a el, acariciando su abdomen y bajando la mano hasta encontrar su miembro, ya mas que despierto. --Esposo, aun tengo la camiseta. Fuera. El sonrio, esa sonrisa ladina que tan bien se le daba, y se separo un momento para sacarla. Con el tiempo, Keith habia descubierto que su marido tenia una suerte de fetiche con las bocas. Le gustaba besar. Podian tirarse mucho tiempo acostados en la cama, despues del sexo, mientras que aquellos labios finos volvian una y otra vez sobre los suyos. Le besaba durante el sexo. Y a veces cuando estaban solos. Chris no era persona de muestras publicas de afecto. Keith pronto aprendio aquello tambien, pero no importaba. Porque mientras aquellos dedos se enredaban en su cabello y tironeaban de el, colocando las piernas de Keith sobre sus hombros y abriendole a su ereccion, lo unico que tenia claro era que lo amaba. --Voy --susurro Chris contra su oreja mientras se introducia en el, y Keith le dejo hueco cuando empezo a mordisquearle la oreja, empezando un lento vaiven que pronto encontro aquello que buscaba. Fue rapido al final, ambos buscando el placer en brazos del contrario. Fue hermoso por ser quien era, si. Y tambien por estar donde estaban. Tiempo despues, y limpios de los estragos del sexo, ambos salieron en busca de comida, demasiado hambrientos como para pensar si quiera en ir a banarse un rato. El comedor era enorme y bonito, como con grandes ventanales que rodeaban todo permitiendo las vistas y manteniendo fuera los mosquitos. --Cuidado con el picante. No querras pasarte el resto de los dias malo del estomago --dijo Chris una vez los sentaron a la mesa y tomaron el menu. --Me gusta el picante --respondio mientras revisaba los pescados frescos del dia. --El picante de casa no es nada comparado con este. Aquella parte de Keith que habia ganado confianza en si mismo y que queria libertad de elegir, casi le hizo ir a por cualquier platillo tipico mexicano con su buena racion de chile. Por suerte, su parte racional era mas inteligente que eso, y finalmente pidio consejo al camarero en cuanto a los pescados. Chris opto por carne y ambos comieron frente a las aguas azules mientras el aire acondicionado refrescaba sus pieles. Fue a media comida que lo noto. Las miradas. Uno pensaria que con el tiempo se habria acostumbrado, pero de hecho no era asi. Y las mujeres que se comian al rubio con la mirada, muchas de ellas medio vestidas en sus ropas de bano y con algun pareo, eran siempre un recordatorio contante de lo diferentes que eran ellos. Miro su plato, subitamente enfadado, y tomo toda su copa de vino de un trago, casi ahogandose al instante. --?Que demonios estas haciendo? No tienes ningun aguante con el alcohol. Para su disgusto, Keith chasqueo la lengua, mirando a su esposo con el ceno fruncido. Sabia que no debia parecer muy amenazador, pero Chris alzo una de sus cejas mientras preguntaba: --?Que pasa? --Nada. Nada --repitio con mas enfasis.