• libro el azul del cielo - Georges Bataille

    https://gigalibros.com/el-azul-del-cielo.html

    A pesar de la luminosidad del titulo, esta obra se inspira en la transgresion de una moral prudente, en una busqueda peligrosa: el aprendizaje de la muerte, la profundidad <> de ese cielo azul que nos atrae y repele al mismo tiempo. Londres, Paris, Barcelona, dibujan una topografia de la perdicion, un marco en el cual Troppmann, a traves de borracheras, noches en blanco y extranas celebraciones, se va acercando hacia esa nueva forma de pureza, la comunion con la muerte gracias al descubrimiento iluminador de lo sordido.

  • El azul del cielo - Georges Bataille | PlanetadeLibros

    https://www.planetadelibros.com/libro-el-azul-del-cielo/90285

    1 may 2004 — No dejes escapar ninguna de nuestras novedades más picantes. Te fundirás de placer... Cargando... Otros libros de ...

  • EL AZUL DEL CIELO | GEORGES BATAILLE | Casa del Libro

    https://www.casadellibro.com/libro-el-azul-del-cielo/9788483109595/964139

    El libro EL AZUL DEL CIELO de GEORGES BATAILLE en Casa del Libro: ¡descubre las mejores ofertas y envíos gratis!

  • El azul del cielo (FÁBULA) : Bataille, Georges - Amazon

    https://www.amazon.es/El-azul-del-cielo-F%C3%81BULA/dp/848310959X

    El azul del cielo (FÁBULA) : Bataille, Georges: Amazon.es: Salud y cuidado personal. ... por Megan Maxwell Libro de bolsillo. 7,55 €. En stock.

  • El azul del cielo (La Sonrisa Vertical) Tapa blanda - Amazon.es

    https://www.amazon.es/El-azul-del-cielo/dp/8472233472

    El azul del cielo (La Sonrisa Vertical) : Bataille, Georges: Amazon.es: Libros.

  • El azul del cielo - Libro de Georges Bataille - Lecturalia

    https://www.lecturalia.com/libro/17656/el-azul-del-cielo

    Bataille escribió El azul del cielo en 1935, pero, según nos confiesa en el prefacio, se desentendió de ella durante largo tiempo.

  • EL AZUL DEL CIELO - GEORGES BATAILLE - 9788483109595

    https://www.agapea.com/libros/El-azul-del-cielo-9788483109595-i.htm

    Comprar el libro El azul del cielo de Georges Bataille, Tusquets Editores (9788483109595) con ENVÍO GRATIS desde 18 € en nuestra librería online Agapea.com; ...

  • EL AZUL DEL CIELO. BATAILLE, GEORGES. Comprar libro

    https://www.popularlibros.com/libro/el-azul-del-cielo_83155

    EL AZUL DEL CIELO 7,55€ Ahora un 5% descuento. Envío gratis. Tras la publicación, en La sonrisa vertical, de tres títulos de Georges Bataille, ahora le toca ...

  • el azul del cielo - Margen Libros.

    https://www.margenlibros.com/libro/el-azul-del-cielo_9703

    Bataille escribió El azul del cielo en 1935, pero, según nos confiesa en el prefacio, se desentendió de ella durante largo tiempo.

  • azul cielo de bataille georges - IberLibro.com

    https://www.iberlibro.com/buscar-libro/titulo/azul-cielo/autor/bataille-georges/

    EL AZUL DEL CIELO de GEORGES BATAILLE y una gran selección de libros, arte y artículos de colección disponible en Iberlibro.com.

  • El azul del cielo - Libros De Mario

    https://www.librosdemario.com/el-azul-del-cielo-leer-online-gratis

    Leer Libro Completo: El azul del cielo de Georges Bataille | NOVELA ONLINE GRATIS.

  • Historia del Ojo de Georges Bataille

    https://gigalibros.com/historia-del-ojo.html

    Puede decirse sin temor que Historia del ojo es la obra maestra de la literatura erotica. En ella confluyen, por un lado, la mejor prosa en clave surrealista de este gran novelista, ensayista y poeta frances y, por otro, la esencia de su obsesiva preocupacion por el sexo, la muerte y la fe --su fe -- que configura, en realidad, gran parte de su obra. Partiendo de un proceso creativo muy querido de los surrealistas, relaciona, en una trama anecdotica, de hecho, muy simple, las imagenes que de un modo inconsciente y automatico evocan el ojo, el huevo, el sol, los genitales del toro, con toda su carga de connotaciones atavicas, y nos las <> en su contenido erotico mas revulsivo. El personaje de la joven Simone, que transgrede en todos sus actos cualquier norma de comportamiento sexual admitido, moral y conscientemente, es la encarnacion, por una parte, del Deseo inconsciente y, por otra, del Pecado, de lo Prohibido y por ende del Placer, que a su vez, por ser fruto del mal, no es mas que portador del maximo castigo: la muerte. Asi pues, el goce en su plenitud sabe siempre a muerte...

  • El Ladron de Meriendas de Andrea Camilleri

    https://gigalibros.com/el-ladron-de-meriendas.html

    El comisario Salvo Montalbano debe investigar el asesinato de un comerciante jubilado, cuya amante, una joven tunecina desaparecida tras el crimen, es objeto de todas las sospechas. Sin embargo, las pesquisas guian a Montalbano hacia el turbio mundo de los servicios secretos y su sucia guerra contra el terrorismo internacional. La razon de Estado se ve sometida a su implacable instinto de justicia, <> segun uno de los agentes secretos. Al mismo tiempo, la trama nos reserva sorpresas inusitadas, como un Montalbano profundamente conmovido por el destino del hijo de la joven acusada hasta el punto de proponerle matrimonio a su tan paciente como lejana companera Livia. Como todas las obras de Camilleri que tanto disfrutan sus cientos de miles de lectores en todo el mundo, El ladron de meriendas es un ironico pero tierno recorrido por la cara mas humana del homo sapiens, con personajes cuyo realismo surge precisamente de la penetrante y compasiva mirada de don Salvo. El duro universo de la inmigracion ilegal, de los barrios populares mediterraneos, de los frios burocratas al servicio del Estado, o el de la solidaridad femenina aparecen plasmados con pasmosa nitidez en cada una de las escenas de la novela, convirtiendonos inevitablemente en testigos y complices no solo de la intriga sino tambien de un entorno que acaba siendonos sorprendentemente familiar.

  • Los hijos de la luz de Miquel Angel Lopezosa Criado

    https://gigalibros.com/los-hijos-de-la-luz.html

    Gabriel ha recuperado sus recuerdos y ya conoce su verdad, pero todavia le queda dar un ultimo paso para completarse como ser, un paso que debe dar solo antes de que sea abierta la puerta de puertas. Por otro lado, Alexa, Hugo y Angelus tienen la mision de reunificar a los reinos aliados, que se hallan mas alla de la barrera ultradimensional, para pedirles que cumplan el juramento que hicieron a los dioses de acudir a la guerra contra el Caos.

  • Y donde tu seas, yo sere (Samsari 2) de Mia Martin

    https://gigalibros.com/y-donde-tu-seas-yo-sere-samsari-2.html

    Segunda entrega de la trilogia <>, iniciada con Di mi nombre.

  • Maldito diluvio, Miss Smile de Miss Smile

    https://gigalibros.com/maldito-diluvio-miss-smile.html

  • Infiltrado en el KKKlan de Ron Stallworth

    https://gigalibros.com/infiltrado-en-el-kkklan.html

    En 1978, cuando Ron Stallworth -el primer detective negro en la historia del Departamento de Policia de Colorado Springs- encontro un anuncio clasificado en el periodico local pidiendo a todos los interesados en unirse al Ku Klux Klan que se pusieran en contacto a traves de un apartado de correos, hizo su trabajo y respondio con interes, usando su nombre real, pero haciendose pasar por un hombre blanco.

  • Amores altamente peligrosos de Walter Riso

    https://gigalibros.com/amores-altamente-peligrosos.html

    ?Por que fallamos tanto en el amor? ?Por que tanta gente elige a la persona equivocada o se enfrasca en relaciones tan peligrosas como irracionales? ?Por que nos resignamos a relaciones dolorosas? Creemos que el amor es infalible y olvidamos algo elemental para la supervivencia amorosa: no todas las propuestas afectivas son convenientes para nuestro bienestar.

  • La nueva educacion, Cesar Bona de Cesar Bona

    https://gigalibros.com/la-nueva-educacion-cesar-bona.html

    La nueva educacion es el testimonio sincero y valioso de un maestro de hoy.

  • El sentido del rumor de Marc Argemi

    https://gigalibros.com/el-sentido-del-rumor.html

    Las redes sociales son el habitat que estaba esperando el rumor para recuperar su hegemonia en el competitivo mundo de la informacion. Datos sin contrastar, fotografias manipuladas, afirmaciones fuera de contexto o simples y llanas mentiras se mezclan con estadisticas oficiales, mensajes institucionales, declaraciones de famosos, comentarios de sesudos expertos y la produccion informativa de los principales medios de comunicacion.

  • La musica del silencio de Jane Hawking

    https://gigalibros.com/la-musica-del-silencio.html

    Por la autora de Hacia el infinito -la historia de su matrimonio con Stephen Hawking que inspiro la pelicula ganadora de un Oscar La teoria del todo-:
    una novela sobre la naturaleza humana y el control del propio destino.

  • Invisibles de Graziella Moreno

    https://gigalibros.com/invisibles.html

    Barcelona. La noche del 25 de octubre de 1992, la vida de Miguel Montero, un chico de doce anos, cambiara para siempre. Veintiseis anos despues, las heridas siguen abiertas porque el pasado nos convierte en lo que somos. Barcelona.

  • Las chicas desaparecidas de Paris de Pam Jenoff

    https://gigalibros.com/las-chicas-desaparecidas-de-paris.html

    De la autora best seller de El vagon de los huerfanos llega una nueva novela basada en hechos reales de la Segunda Guerra Mundial
    Las chicas perdidas de Paris es una emotiva historia de amistad y traicion durante la Segunda Guerra Mundial, inspirada en hechos reales, de la autora best seller internacional Pam Jenoff.
    1940: Con el mundo en guerra, Eleanor Trigg lidera un misterioso grupo de agentes secretas femeninas en Londres. Doce de estas mujeres son enviadas para ayudar a la Resistencia francesa.
    Nunca regresaron a casa.
    1946: Al pasar por la Estacion Central, en Nueva York, Grace Healey encuentra una maleta abandonada escondida debajo de un banco. La maleta contiene una docena de fotografias, cada una de una mujer diferente.
    En busca de las mujeres reales de las fotos, Grace se siente cada vez mas atraida por su misterioso destino. Y a medida que profundiza en los secretos del pasado, descubre una historia de amistad, valentia impensable y, en ultima instancia, de la mas despreciable de las traiciones.

  • Hijo del pasado de Blanca Miosi

    https://gigalibros.com/hijo-del-pasado.html

    Blanca Miosi, una de las autoras mas sobresalientes del mundo literario latinoamericano nos trae esta vez un personaje vivido, con un pasado de luces y sombras.

  • Estrella nos cuenta de Melania Virues Morilla

    https://gigalibros.com/estrella-nos-cuenta.html

    Descubre junto a Mery, como Estrella conocio al amor de su vida. Su locura caracteristica fue aun mayor cuando era una adolescente. Conocera a un chico que le dara estabilidad y a otro que se la quitara por completo. Una historia de amor de gran intensidad. ?Estabilidad o descontrol? ?Cual sera su decision? Capitulos especiales narrados por Mery o Jay. Precuela/Secuela de NO SOY UN EXPERIMENTO.

  • Bienvenida al club Cabronas sin Fronteras de Megan Maxwell

    https://gigalibros.com/bienvenida-al-club-cabronas-sin-fronteras.html

    Amar y ser amada es lo que toda mujer. desea.
    Lo que toda mujer. ansia.
    Y con lo que toda mujer. suena.
    Pero ?que pasa cuando el sueno se desvanece, eres consciente de que tu vida es pura mentira y encima vas rayando los techos alli por donde pasas?
    Te pongo en situacion.
    Silvia, Rosa y Elisa no han tenido demasiada suerte en el amor. Por diferentes circunstancias, las tres han acabado rompiendo sus supuestamente felices vidas matrimoniales y han adoptado el estado civil de solteras o divorciadas. Y tambien esta Venecia. Soltera y sin hijos, tanto la vida de sus amigas como su ultimo fracaso amoroso le hacen ver que el amor, ademas de caduco, es una mierda.
    Tras una noche de juerga y borrachera en un karaoke, donde conocen las historias de otras mujeres, tienen varias cosas claras:
    1. El amor es para los incautos.
    2. Se acabo ser una princesa para empezar a ser una guerrera.
    3. Corazon blindado y cabeza fria (y si es en <>., mejor).
    4. Crearan un club privado llamado. Cabronas sin fronteras.
    Si quieres reirte y ver como las mujeres somos capaces de dar un giro a nuestras vidas, no puedes quedarte sin leer Bienvenida al club. Cabronas sin fronteras.

  • Codigo terrorista de Alfredo De Braganza

    https://gigalibros.com/codigo-terrorista.html

    Caminaban cogidos del brazo, bromeando, observando los escaparates. De vez en cuando se paraban y se hacian fotos. Parecian una pareja feliz. Eran dos jovenes espanoles inocentes y enamorados. Sin embargo, eran terroristas y estaban a punto de cometer una masacre. Los dias anteriores habian estado dando largos paseos por la zona. Solian sentarse en las cafeterias, en los bares y en las terrazas de los restaurantes. Estaban atentos para no perderse detalle alguno. Observaban a los peatones, el trafico y, sobre todo, las medidas de seguridad. Centrica y bulliciosa, la Puerta del Sol es una de las plazas mas famosas de Madrid, ademas de punto de encuentro de turistas. Alli esta ubicado el reloj de la Casa de Correos, conocido en toda Espana por ser el lugar desde donde se emiten las campanadas de fin de ano. Tambien se encuentra en ella la estatua del Oso y el Madrono, simbolo de la ciudad, y el Kilometro Cero, donde comienzan las carreteras radiales espanolas. Compradores y curiosos circulaban con rapidez en el frio de la tarde y los bares y cafeterias empezaban a llenarse. La pareja giro a la izquierda, continuo unas cuantas manzanas mas adelante y decidieron entrar en una cafeteria antes de su bautismo yihadista. Se sentaron uno frente a otro, dejando sus pesadas y anchas mochilas a sus pies. Ella pidio un cafe con leche con rosquillas Alcala, un hojaldre banado en yema y con azucar glas. El solo quiso un cafe negro. El camarero de la pasteleria La Mallorquina se fue tras tomar nota. El local estaba lleno de clientes. Desde el ancho ventanal podian ver el ajetreo del exterior. Los cafes llegaron junto con un plato lleno de rosquillas amarillas. El puso cara de asco. --No se como puedes comer algo tan cargado de azucar. Es repugnante. --Vamos, es Navidad --respondio ella con tono de sarcasmo y encogiendose de hombros--. ?Donde esta tu espiritu navideno? El sonrio ampliamente y solto una carcajada aspera. --Llevas razon. Ademas, despues de cumplir nuestro objetivo las cosas solo podran mejorar. En el local se escuchaban distintos idiomas y diferentes acentos espanoles de los clientes. El miraba hacia el exterior. La calle estaba mas concurrida que otros dias. Aquel sabado por la tarde los madrilenos habian salido a pasear y hacer compras. Vio a un grupo de jovenes fumando y tomando bebidas energeticas. Una chica con ropa ajustada beso a su joven acompanante. No llegarian a los veinte anos. Luego, dos chicas se besaron. Un vagabundo enfundado en un grueso abrigo se sento en una esquina con un perro que llevaba atado con una cuerda. El resoplo audiblemente e hizo un gesto hacia su companera. Ambos observaron aquella variopinta muchedumbre desde el cristal. --Infieles --dijo ella con voz firme--. Arderan en el infierno dentro de unos minutos. --Son los padres quienes han dejado a sus hijos caer en ese mundo depravado. --No. Es el sistema politico el culpable de precipitar una degeneracion moral tan rapida en la sociedad --replico ella. --Eso. Ella le sonrio, satisfecha de la reaccion a su reprobacion. --?Sabes cuantas prostitutas trabajan en las calles de Madrid durante las navidades? --No, pero me lo imagino. --?Que te imaginas? El quedo un tanto cohibido. --Pues que pueden ser muchas. Ella perdio su mirada en los viandantes. --Beben alcohol, se prostituyen, se drogan… recibiran su merecido. --Inshallah --anadio el en voz baja--. Pero nuestro objetivo no son ellos, querida. --?Que mierda estas diciendo? --le espeto entre dientes, mostrando su enfado. El se repantingo en su asiento, temeroso de una reaccion violenta. Sintio la necesidad de pedirle disculpas. En alguna ocasion hasta le habia abofeteado. Ella no se sentia mal al humillarlo incluso en publico. --Quiero decir que nuestra mision es provocar el caos, el desorden, la incertidumbre en esta sociedad capitalista. Mas apaciguada, hizo un gesto afirmativo con la cabeza. El le respondio con una sonrisa. --?Estas contenta de matar? --pregunto sin percatarse de que elevaba la voz debido al entusiasmo. --Calla --le interrumpio ella--. Habla mas bajo. El miro alrededor, al concurrido local. Hizo un barrido visual. No vio a nadie sospechoso. Se encogio de hombros, pero asintio con la cabeza. Debia ser mas prudente. Un hombre vestido de Papa Noel caminaba por la acera agitando una ruidosa campana al son de una cancion navidena, mientras que con la otra mano sostenia un gorro rojo para recolectar limosna de los peatones. --Venga, por favor, vamonos --dijo, mostrandose inquieto y agarrando el asa de la pesada mochila que tenia a sus pies--. Quiero que esto termine cuanto antes. --Espera. !Feliz Navidad! --dijo ella mientras se inclinaba sobre la mesa. Se besaron apasionadamente. Sus corazones empezaron a palpitar en el pecho. La adrenalina inundaba el torrente sanguineo. Era una sensacion de la que los dos disfrutaban. Entonces ocurrio lo imprevisto. 2 Aquella manana temprano, mientras sorbia su segundo cafe en la cafeteria del Cervantes, Laura Garcia veia las noticias en television de lo sucedido en la tarde del sabado anterior. Su pelo, largo hasta los hombros, estaba recogido en cola de caballo. Tenia el rostro joven, aunque ya rondaba los cuarenta anos. Vestia con pantalon fino de algodon azul oscuro, camisa blanca y una chaqueta a juego. A primera vista podia parecer una modelo sacada de un catalogo de ropa o la ejecutiva de una multinacional. Sin embargo, la labor que desempenada a diario distaba mucho de ese tipo de sectores profesionales. En el Cervantes, Laura Garcia tenia que competir con hombres muy bien preparados, tanto a nivel fisico como psicologico, y su desempeno se valoraba con los mismos patrones que los de sus companeros varones. No habia distincion. El Cervantes era una organizacion secreta dedicada principalmente a la lucha contra el terrorismo: preveian atentados, realizaban informes de inteligencia, hacian seguimientos a sospechosos, hackeaban todo tipo de productos electronicos y espiaban a criminales, terroristas, politicos, periodistas, diplomaticos y figuras prominentes de paises extranjeros. No tenian limite. Era un grupo reducido de personas de ingenio y aguda inteligencia. Pero tambien eran verdugos, pues se encargaban de despachar los asuntos relacionados con el terrorismo que nadie se atrevia o queria asumir. El trabajo era de veinticuatro horas al dia los siete dias de la semana. Aunque de manera individualizada libraban un dia a la semana, ese dia tenian que estar atentos a cualquier llamada de emergencia. Las vacaciones, que solian ser una vez al mes, consistian en enviar al operativo a lugares remotos durante una semana como maximo, donde hubiera una inestabilidad social o politica, o a paises conflictivos vecinos del destino, como Mali, Egipto, Libia, Israel, Argentina, Republicana Dominicana, Corea del Sur, Indonesia… Eran viajes costeados con todo tipo de lujos y privilegios y tarjetas de credito sin limite. Del agente se esperaba un detallado informe de inteligencia. Durante esas estancias se realizaban contactos con otras redes de similares e incluso se captaban colaboradores locales para el posterior flujo de informacion privilegiada, como politicos, empresarios o personas con influencia en el pais. En el pasado, los islamistas habian cometido un devastador atentado en Madrid, causando mas de doscientos muertos y cientos de heridos: fue la gota que colmo el vaso y que dio pie a la creacion del Cervantes ante la ineptitud del Gobierno y la burocracia politica, que no sabian, o mas bien no se atrevian, a tomar medidas contra la amenaza del islamismo radical. Con la conformidad y decision final del rey de Espana, se creo en secreto la organizacion

  • La Absolucion de Olivier (Bilogia Senor Brooks 2) de Andrea Adrich

    https://gigalibros.com/la-absolucion-de-olivier-bilogia-senor-brooks-2.html

    Dolida y decepcionada, Noah esta dispuesta a alejarse de Olivier, asi le cueste la vida. Ha descubierto su parte mas oscura y es consciente de que es un hombre que no conviene tener cerca. En su vida y en su futuro no encaja una persona como el.
    Pero el caprichoso destino tiene otros planes para ellos. Un acontecimiento inesperado que les obligara a replantearse todo, incluida su relacion, y que dejara al descubierto la verdadera cara del despota y frio Olivier Brooks.

  • El esplendor de las raices de Robin Benway

    https://gigalibros.com/el-esplendor-de-las-raices.html

  • La obsesion de Maddy Clare de Simone St. James

    https://gigalibros.com/la-obsesion-de-maddy-clare.html

    Una mujer que odiaba a los hombres en vida... y que siguio haciendolo despues de muerta. Pero ?por que? ?Podra desvelarse el secreto tantos anos despues?

  • Una historia de Espana de Arturo Perez Reverte

    https://gigalibros.com/una-historia-de-espana.html

  • Un mundo sin ti de Bel Diciembre

    https://gigalibros.com/un-mundo-sin-ti.html

    Vuelve Bel Diciembre con una novela romantica llena sensibilidad, ternura y sentimientos a flor de piel.

  • Indestructible de Rosa Alcantara Menendez

    https://gigalibros.com/indestructible.html

    <>

  • Liberada (Trilogia Criminal 2), Kris Buendia de Kris Buendia

    https://gigalibros.com/liberada-trilogia-criminal-2-kris-buendia.html

    Emily Thompson esta libre y busca vengar la muerte de su esposo. Las cartas que dejo Harry revelan algo mas que secretos y tendra que recuperar el imperio que perdio, aunque su nuevo socio, Blake Storm haga que se olvide por un momento de su venganza.

  • La posada Jamaica de Daphne Du Maurier

    https://gigalibros.com/la-posada-jamaica.html

    Daphne du Maurier explicaba en una nota preliminar a La posada Jamaica (1936) que la posada a la que alude el titulo aun seguia en pie y que la novela era el producto de sus fantasias sobre como habria sido ciento veinte anos antes. Un carruaje que atraviesa los paramos de Cornualles es zarandeado por la tormenta y en el una joven huerfana, Mary Yellan, se dirige al encuentro del unico familiar que le queda, su tia Patience, que junto con su marido regenta una lobrega posada de mala fama… a la cual el cochero apenas se atreve a acercarse. Las tormentas, los paramos desolados, los bandidos y dos mujeres atrapadas en un universo sin ley, saturado de violencia, componen la atmosfera de esta excelente novela, un autentico clasico moderno que mezcla la fascinacion por la oscuridad con una critica vehemente de la brutalidad domestica. Fue llevada al cine por Alfred Hitchcock en 1939.

  • Todo contigo (Spanish Edition) de Dina Reed

    https://gigalibros.com/todo-contigo-spanish-edition.html

    Cuando Gary llego a casa despues de una dura jornada se encontro con que su abuela Dorothy dormitaba frente a la television, mientras Sandy su cuidadora estaba con la cabeza metida en un libro. Genial, penso en cuanto la vio. Luego, carraspeo un poco y le dijo mientras se desanudaba un poco la corbata, que ya le sobraba porque detestaba llevar traje. --Se supone que te he contratado para que cuides de mi abuela, no para que la dejes sentada frente al televisor y tu te pases el dia leyendo... Ya esta aqui el tocapelotas de Gary Scott, penso Sandy en cuanto le vio aparecer, todo lo que tenia de sexy y de arrebatador, lo tenia de exasperante, luego esbozo una sonrisa y replico: --Hemos salido a hacer unas compras, despues hemos paseado otro poco mas por el jardin, hemos almorzado y tu abuela se ha sentado a ver una pelicula. Yo tengo un examen esta tarde y he aprovechado para repasar un poco. ?Tienes algun problema con eso? Sandy estudiaba Enfermeria por las tardes y por las mananas de siete a cuatro de la tarde se dedicaba a atender a Dorothy, a la que hacia algo mas de un mes que habian operado de la cadera. --Te recuerdo que te pago para que cuides a mi abuela, no para que estudies --respondio Gary, tajante, con los ojos azules echando chispas. Gary era un tipo atractivo, moreno, alto, fuerte, de intensos ojos azules y un halo de virilidad que dejaba sin aliento. Pero Sandy no pensaba dejarse intimidar ni por la presencia imponente de su jefe, ni mucho menos por su caracter tremendo. Por eso, le recordo alzando la barbilla y sin perder la calma: --En ningun momento he descuidado a tu abuela, hemos hecho todo lo que estaba programado para el dia de hoy y justo en este ratito que se ha quedado dormida viendo la pelicula, he aprovechado para repasar un poco. Gary miro a esa chica que no podia ser mas insolente, apreto fuerte los punos y, tras morderse los labios, farfullo: --Estas agotando mi paciencia... Dorothy abrio los ojos en ese momento y murmuro a su nieto en un tono que sonaba a reganina: --?Quieres dejar a mi Sandy tranquila? Esta tarde tiene un examen muy importante... --Que estudie en su casa, abuela. Esto no es una biblioteca, aqui viene a trabajar... --dijo clavando la mirada a Sandy. Y ella por supuesto que ni se arredro, es mas lejos de esquivar la mirada azul de su jefe, la sostuvo con la conviccion que le daba saber que estaba haciendo lo correcto. --Y trabajar es lo que hago, por si no se te has dado cuenta.... --le recordo por si acaso lo habia olvidado. Gary penso que de lo que se habia dado cuenta era de que no estaba dispuesto a soportar ni una impertinencia mas de chica, pero cuando estaba a punto de ordenarle que no volviera mas por alli, su abuela comento: --Llevamos todo el dia de aqui para alla, he hecho mis ejercicios y ahora estoy viendo una pelicula. Asi que dejanos un poquito en paz, carino --replico la abuela, estirando los brazos hacia Gary--. Anda ven, dame un beso... Gary se sintio como si tuviera tres anos, pero no podia dejar a su abuela con el beso colgado. Era el ser que mas queria del mundo y la unica familia que tenia. Su madre murio cuando apenas tenia cinco anos y su padre fallecio unos anos despues, cuando Gary acababa de cumplir dieciocho anos y su mundo se vino abajo definitivamente... A partir de entonces, tuvo que trabajar muy duro para salir adelante y vaya si lo logro... Pasar de un apartamento ruinoso al maravilloso rancho de mas noventa hectareas en San Diego que habia comprado hacia un ano daba fe de ello. Y todo habia sido a base de teson, esfuerzo, dedicacion y tal vez una pizca de suerte, solo un poco porque Gary estaba convencido de que hasta la suerte habia que trabajarsela. Y si algo tenia claro era que su abuela se merecia lo mejor y estaba dispuesto a todo para darselo, por eso no iba a tolerar ni por un instante mas que Sandy Peters no cumpliera con su cometido. Asi que ansioso por terminar cuanto antes con la discusion, beso a su abuela en la mejilla, y despues farfullo cabreado: --He tenido un dia horrible, lo que menos quiero al llegar a casa es tener mas problemas. Desde que Sandy trabaja para nosotros, no hay dia que no tengamos lios y mas lios... Voy a volver a llamar a la senora Smith... --?Que? --replico Dorothy alarmada con la sola idea de que esa senora volviera a su casa--. !Ni se te ocurra! !Pero si esta mucho peor que yo, tiene mas goteras que una casa vieja y con ella me aburro como una ostra! !Ni pienses en echar a Sandy o te las veras conmigo, jovencito! --le advirtio Dorothy a su nieto, apuntandole con el dedo indice. Sandy no pudo evitar esbozar un sonrisita y Gary la miro echando humo hasta por las orejas y con unas ganas tremendas de ponerla de patitas en la calle. Ganas que reprimio porque no podia contradecir a su abuela, la queria y la respetaba demasiado como para contravenir sus ordenes y deseos. Bien era verdad que la senora Smith estaba llena de achaques y que raro el dia que no la habia pillado dormitando en el sofa, pero el desparpajo de Sandy le tenia completamente desquiciado. Reconocia que era bonita, que tenia un pelo precioso castano con destellos cobrizos cuando se ponia al sol, que tenia unos ojos que brillaban con fuerza, que su boca era carnosa y en forma de corazon, que tenia unos pechos redondos y altos y un culo respingon, y que caminaba de una forma tan sugerente que era imposible que los ojos no se le fueran detras de ella, pero el tenia como norma no tener nada con su personal, y mucho menos iba a ser tan incauto como para enredarse con alguien tan desquiciante como Sandy Peters. En que hora la contrataria, penso. Pero ya poco se podia hacer mas que esperar a que cometiera una mas gorda y su abuela, que era terca como una mula, se convenciera de que habia que despedirla. Asi que sin mas tiempo que perder, dijo loco por salir de alli y dejar de ver la sonrisita triunfante de la senorita Peters: --Me voy a comer a algo que vengo hambriento... --?Te preparo alguna cosa? --pregunto la abuela, aferrada a su muleta y dispuesta a levantarse. --Abuela, por favor, ?cuantas veces tengo que repetirte que tenemos cocinera y cuatro doncellas? Para algo me parto el lomo cada dia... Gary dio un manotazo al aire y se marcho a la cocina grunendo... --No le tengas en cuenta nada --comento Dorothy--, ya sabes lo que dicen: perro ladrador, poco mordedor. --Me detesta --concluyo Sandy encogiendose de hombros. --No, lo unico que sucede es que Gary solo me tiene a mi y esta obsesionado con tenerme entre algodones. Pero yo no voy a quedarme aqui de por vida y deberia empezar a tomarse en serio lo de crear su propia familia... Sandy penso que quien iba a soportar a un ser tan ogro y tan antipatico, pero no le dijo nada a Dorothy, pues adoraba a su nieto... --Tu estas genial, Dorothy. Tienes que dar mucha guerra todavia... --Pienso aguantar todo lo que pueda, muchachita. No pienso irme de aqui sin luchar hasta el final, pero no soy eterna y no me gusta nada que Gary este solo. --Es un joven muy atractivo, seguro que no le faltan mujeres... Dorothy cogio la mano de Sandy y, mirandola con ternura, le confeso: --Pero ninguna que merezca la pena, ademas yo creo que todavia tiene a Kim en la cabeza... Y ayer me entere de que acaba de divorciarse... Esa chica es un peligro y no me gustaria para nada que regresara a la vida de mi nieto. Sandy no queria parecer entrometida ni chismosa, pero de repente esa Kim le desperto una curiosidad tremenda y replico en voz baja... --?Kim? Nunca me has hablado de ella... Sandy llevaba algo mas de ocho meses al cuidado de Dorothy y se habian hecho muchas confidencias, pero esto era algo completamente nuevo... Dorothy respiro hondo y con una sonrisa cargada de ternura y complicidad, respondio: --Es una historia muy larga, tesoro. Mejor repasa para tu examen y ya te lo contare otro dia... Capitulo 2 El examen de Sandy salio de maravilla y lo celebro al dia siguiente, tomandose un helado con Dorothy, en Niederfrank's Ice Cream. --No le digas a Gary que hemos estado aqui, dice que todavia no estoy para subirme a un automovil --comento Dorothy, sentadas en una de las mesitas de la heladeria. Sandy habia conducido uno de los utilitarios de Gary hasta la heladeria favorita de Dorothy, una emblematica en la ciudad, donde preparaban unos deliciosos helados de menta roja, su favorito. --Es una locura, Dorothy... Pero cualquiera te dice que no --comento Sandy tras probar el exquisito helado de frutas del bosque, fabricado a la antigua usanza, en la parte de atras de la tienda. Todo natural. --Estoy cada dia mejor y tampoco nos hemos ido a ochocientos kilometros. !La heladeria esta aqui al lado! --?Te duele la cadera? --Tengo molestias, pero es normal. Tu tranquila, querida, que todo esta bien. !Necesitaba tomarme uno de estos! Este local me trae recuerdos muy bonitos, aqui venia con mis padres, luego con Becky, la mama de Gary, y finalmente con Michael, antes de que nos marcharamos de San Diego... -- confeso tras lanzar un suspirito. --?Michael? --pregunto Sandy, arqueando una ceja, porque jamas le habia hablado de ningun Michael. --Es otra larga historia... --musito Dorothy dejando la mirada perdida. --Soy toda oidos. Ademas me tienes que contar lo de Kim... --le recordo Sandy, que tenia mucha curiosidad con esa historia. --De alguna manera esta todo relacionado. ?Pero de verdad que te interesa? No quiero ser la clasica vieja que cuenta sus batallitas y aburre hasta a las ovejas--quiso saber Dorothy, tras dar otra probadita a su helado de menta roja. --Por favor, Dorothy... !Tu eres una mujer fascinante! !Contigo es imposible aburrirse! --Gracias, tesoro. Pero esta historia no es para nada divertida, al contrario... Veras --dijo revolviendose un poco en la silla--, el padre de Gary era camionero, trabajaba para un empresa llevando mercancias hasta Alaska, se pasaba el dia en la carretera, asi que cuando mi hija murio, me fui a vivir con ellos para cuidar de Gary. Yo tambien estaba sola, mi marido habia muerto hacia unos anos y me venia bien estar con ellos. Charles, el padre de Gary, siempre fue un hombre dificil, tenia un caracter complicado, pero mi hija le llevaba muy bien. Era su luz. Se que fueron muy felices, pero cuando fallecio, Charles se quedo muy tocado. Su caracter se retorcio por completo y nunca mas fue feliz... Trabajaba duro, muy duro, para no pensar, pero traia poco dinero a casa porque comenzo a jugar. --Oh, Dorothy, lo siento tanto... --susurro Sandy apenada. --Fue un mazazo muy grande lo de mi hija, una chica tan bonita y llena de vida, se nos fue de repente… Fue una enfermedad fulminante y Charles no se repuso... Su via de escape fue el juego, pero tambien su perdicion. Nos llevo a la ruina mas absoluta y tuvimos que vender la casa... Sandy trago saliva porque aquello era demasiado doloroso... --No sabia nada, Dorothy, esto que me cuentas es tan duro... Dorothy tomo la mano de la chica y le dijo para reconfortarla: --Tranquila que lo importante es que ahora estamos bien. !Demasiado bien! !Gary ha comprado un rancho tan grande que me da hasta vertigo! --exclamo con una sonrisa enorme. --Es que lo de Gary es alucinante, tiene muchisimo merito todo lo que ha logrado... Sandy conocia por lo que habia leido de el en Internet y sobre todo por lo que su abuela le habia contado, lo que habia supuesto para el montar un imperio del transporte de mercancias en apenas diez anos. Y ademas partiendo de la nada... --Y sin ayuda de nadie, tan solo esfuerzo, trabajo y talento. Mi nieto es muy listo y tambien orgulloso. El se prometio a si mismo que jamas nadie volveria a rebajarle y mira si lo consiguio. --?Rebajarle? --Si, querida --asintio Dorothy, mientras hundia la cucharita en el helado --. Cuando nos quedamos en la calle, sin nada, pasaron cosas muy feas. En las situaciones dificiles es cuando te das cuenta de quienes son tus amigos y la verdad es que nosotros aprendimos que eran muy pocos. Entre ellos el coronel Thompson, Michael para los amigos... --Michael... --Si --asintio Dorothy esbozando una sonrisa carinosa--. El tiene una fundacion para personas sin recursos a la que tuvimos que recurrir para no morirnos de hambre. Y no solo nos ayudo, sino que nos ofrecio gratis un apartamento hasta que pudimos salir adelante.

  • Tiempos dificiles (Scarlet Falls 1) de Melinda Leigh

    https://gigalibros.com/tiempos-dificiles-scarlet-falls-1.html

  • Manto del Firmamento (Los Devonshire 4) de Maria Isabel Salsench Olle

    https://gigalibros.com/manto-del-firmamento-los-devonshire-4.html

    Georgiana o, como la llamaban, Gigi era una Cavendish. Y, como tal, poseia una belleza extraordinaria asi como una personalidad singular y, en ocasiones, controvertida.
    Poseedora de una inteligencia que asustaba a los hombres del 1845 e interesada en estudiar medicina en una sociedad que se lo prohibia , finalmente, encuentra su alma gemela en Thomas Peyton.

  • Mantendre las luces encendidas para ti de Cherry Chic

    https://gigalibros.com/mantendre-las-luces-encendidas-para-ti.html

  • El regimen anti de Alain Andreu

    https://gigalibros.com/el-regimen-anti.html

    ?Quieres acabar con el dolor articular, la presion arterial alta, la fatiga diaria?

    ?Existe una solucion natural a las tipicas enfermedades de la tercera edad?

    La respuesta a estas preguntas la descubrira en esta guia.

  • Circulos cerrados (Mistery Plus), Viveca Sten de Viveca Sten

    https://gigalibros.com/circulos-cerrados-mistery-plus-viveca-sten.html

  • Descubriendo a Valentina de Mara Macbel

    https://gigalibros.com/descubriendo-a-valentina.html

  • Sin lluvia no hay arcoiris de Eva M. Soler, Idoia Amo

    https://gigalibros.com/sin-lluvia-no-hay-arcoiris.html

    La puerta golpeo la pared al abrirse con brusquedad, pero a ninguno de los dos le importo, ocupados como estaban en besarse apasionadamente. Patrick la cerro con el pie, mientras guiaba a Brooke hacia el interior sujetandola por la cintura. La chica llevo las manos a sus hombros para bajarle la chaqueta y quitarsela, dejandola caer al suelo. Empezo a desatar sus botones, mientras Patrick se arrancaba la corbata y la tiraba a un lado. Cogio a Brooke y la sento sobre una de las encimeras de la cocina, deslizando las manos por su espalda mientras buscaba una cremallera o unos botones, o lo que fuera que mantenia el maldito vestido en su sitio. Ella tambien tenia problemas con su camisa, porque Patrick noto un tiron y escucho el sonido de varios botones caer al suelo. Se aparto unos segundos para deshacerse de la prenda, y sus miradas se cruzaron en la penumbra de la cocina, donde tantas veces se habian peleado por un trozo de encimera, un cuchillo o una cazuela en particular. Brooke se humedecio los labios y palpo los musculos de su pecho. Sabia que Patrick utilizaba el gimnasio y la piscina del hotel, porque ella tambien y pronto habia aprendido sus horarios para no coincidir, aunque no imaginaba que le diera tan buen uso. Alargo las manos hacia el cinturon del pantalon y Patrick volvio a besarla, cogiendola por la nuca para sostener su cabeza mientras introducia su lengua hasta tocar la suya, de una forma que la hizo gemir contra su boca. Con la otra mano volvio a recorrer el vestido, sin exito, y dejo aquellos labios con un juramento. --?Como demonios te quito esto? --gruno. --Es complicado, olvidate. Se llevo las manos al cuello, y desato el nudo que ataba el vestido por arriba. Al comprarlo, le habia encantado el estilo pin up que tenia, atado arriba y con vuelo por debajo; incluso tenia un ligero cancan de encaje para darle volumen. De saber lo que iba a pasar, habria buscado algo mas sencillo: se ataba con una cremallera lateral, ademas del nudo, y no tenia paciencia en aquel momento para pegarse con ella. Y por lo que veia, Patrick tampoco, porque cogio las tiras de tela y las bajo, dejando sus pechos al descubierto. Brooke agradecio que hubiera poca luz, porque enrojecio al ver como la miraba. El vestido tenia la espalda muy baja; por eso se habia decidido a no llevar sujetador, algo que no era habitual en ella. Patrick estaba alucinado, jamas hubiera imaginado que Brooke no llevara nada debajo de aquel vestido, y eso que se habia pasado buena parte de la noche con los ojos en ese escote como un idiota. Durante un segundo se pregunto si haria lo mismo en dias de trabajo... No, seguro que no, o se habria dado cuenta. Claro que nunca le habia mirado el escote hasta entonces, y el uniforme de trabajo tampoco tenia: pantalon y camisa con cierre de botones lateral, todo en blanco. Fruncio el ceno al darse cuenta, pero desecho el pensamiento al instante; no era momento de pensar en nada. Inclino la cabeza para bajar los labios hasta uno de los pezones, lamiendolo con ansiedad. Brooke le acaricio el pelo, suspirando. Echo la cabeza hacia atras mientras el la sujetaba por la espalda, reclinandola poco a poco sobre la mesa a la vez que pasaba sus labios al otro pezon. Cuando la tuvo tumbada, tuvo que pelearse con el vestido y el cancan para poder acceder a sus piernas. La acaricio desde el tobillo hasta los muslos, pensando en lo sexi que estaba con aquellos zapatos peep-toe y ese look tan anos treinta. Bajo la cabeza para besar la parte interna de los muslos, metiendo la mano hasta alcanzar la ropa interior y asi quitarsela, tirandola tambien al suelo. Se coloco sus piernas en los hombros para de ese modo poder acariciar con los labios y la lengua entre ellas. Brooke se sujeto como pudo a la encimera, a punto de dar un bote al sentir lo que hacia. Su mente estaba nublada, apenas era capaz de pensar, solo de dejarse llevar mientras notaba como su cuerpo le pedia cada vez mas. Se retorcio bajo el, bajando las manos para cogerle por el pelo instandole a subir, pero Patrick no se movio, sino que la llevo al limite... y cuando paro, durante unos segundos tuvo deseos de matarlo, hasta que escucho el sonido de la cremallera de su pantalon. Lo miro al ver que se quedaba quieto de pronto y se dio cuenta de lo que estaba pensando. --En mi bolso --se apresuro a decir--. El pack de regalo. Patrick respiro aliviado; si hubieran tenido que parar en ese momento, le habria dado algo. Se agacho para recoger el bolso de Brooke del suelo, metio la mano sin apenas mirar y saco el paquetito de plastico. Ella se agito, impaciente, mientras Patrick rasgaba el envoltorio. Una vez listo, la acaricio con los dedos, comprobando que estaba preparada para el, y la sujeto por las caderas para penetrarla de un solo movimiento que casi hizo gritar a ambos. Brooke se arqueo sobre la encimera, perdiendo de nuevo la conciencia. Pensaba que no podia ir a mejor, hasta que Patrick empezo a moverse contra ella, con una mano en la cintura y la otra en una de sus piernas, que aun tenia sobre los hombros de el. Patrick apreto los dientes, intentando concentrarse, pero aquello era demasiado agradable, demasiado intenso como para poder mantener la cordura. La forma en que ella se movia contra el, como respondia a sus caricias y gemia, lo volvia loco. Miro su rostro; con los ojos verdes entrecerrados, los labios humedos por sus besos... Era una vision de los mas seductora. La necesitaba mas cerca, asi que le coloco las piernas en su cintura y la elevo para sentarla, besandola de nuevo. Brooke le rodeo el cuello con los brazos, pegandose a su cuerpo. El roce de su piel desnuda la enardecio aun mas y Patrick acelero sus movimientos, clavando los dedos en sus caderas sin poder evitarlo. A ella no le importo, estaba igual que el: al borde de estallar. Patrick beso su cuello, rozandolo con los dientes. --!Patrick! Brooke no pudo evitar gritar su nombre, estremeciendose de pies a cabeza, y aquello termino con el poco control que a el le quedaba. La estrecho contra si y se tenso al notar como su cuerpo se liberaba y lo dejaba exhausto. Se quedaron abrazados mientras recuperaban la respiracion. Brooke tenia los dedos enredados en su pelo y le acariciaba los mechones rubios de forma distraida. Aun debia asimilar lo que acababa de pasar, nunca habia sentido nada tan fuerte ni intenso, ni siquiera estaba segura de que sus piernas la sujetaran si se apoyaba en el suelo. Y no queria soltarle; si lo miraba... si hablaban se romperia el momento, y queria alargar esa sensacion lo mas posible. Pero poco despues, Patrick se movio. Se quedo quieta mientras el la besaba y se quedaron mirandose como si nunca se hubieran visto antes. Patrick delineo su rostro con un dedo, desde las cejas bajando por la nariz, hasta rozar sus labios. --Te he dejado sin maquillaje --murmuro. Ella sonrio y le toco la mejilla, que comenzaba a estar aspera por la barba incipiente. --Creo que todo mi pintalabios lo tienes tu. Patrick la cogio por la barbilla, dandole un beso. --Brooke... --susurro. Y entonces se encendio una luz en al otro lado de la puerta, que tenia dos ojos de buey en la parte superior. Patrick reacciono con rapidez, bajandola de la encimera mientras se subia los pantalones velozmente. Se agacharon para ocultarse detras de la encimera, parapetandose con los muebles. Brooke miro de reojo a Patrick, que estaba con la vista fija en los ojos de buey. Y entonces fue consciente de que su vestido estaba arrugado a la altura de su cintura, la parte superior seguia desatada... se apresuro a cubrirse rehaciendo el lazo del cuello, mientras alisaba a duras penas la falda. Su mirada se desvio hacia el suelo, donde su ropa interior yacia junto a la corbata de el. La vision la hizo enrojecer y alargo la mano para coger ambas prendas. Tambien cogio su camisa y chaqueta, y le rozo el hombro desnudo para llamar su atencion. Patrick la miro y recupero sus prendas sin decir nada. Se quedo con ellas en la mano, volviendo la atencion al exterior. Una sombra paso cerca de la puerta, pero siguio su camino y poco despues las luces se apagaron de nuevo. Los dos se incorporaron evitando mirarse. Brooke termino de vestirse, mientras el se abotonaba la camisa en la medida de lo posible y se la metia por dentro del pantalon. Se coloco la corbata alrededor del cuello e hizo un gesto hacia la puerta, con la chaqueta en la mano. --Quiza no debamos regresar juntos --comento. Brooke afirmo con la cabeza, apartando la vista de su pecho. ?Sabia el lo atractivo que estaba con aquel aspecto desenfadado? El pelo rubio revuelto, la corbata sin atar y un par de botones desabrochados... Le daban ganas de volver a arrancarle la camisa. Pero parecia que el habia recuperado el sentido mas rapido que ella, porque levanto una ceja de forma interrogativa. --?Quieres que salga yo primero? --pregunto Patrick, al ver que la chica no se movia. --No, ya voy. Se quedo unos segundos mas indecisa. ?Que se suponia que decia una en aquellas circunstancias? <> <> --Feliz Ano Nuevo, Patrick. El parecio sorprendido por aquella frase, pero inclino la cabeza con media sonrisa y le contesto igual: --Feliz Ano Nuevo, Brooke. Brooke penso que aquella debia haber sido la frase mas estupida del universo... En fin, era lo unico que se le habia ocurrido y, al fin y al cabo, era Ano Nuevo, ?no? !Si todo habia comenzado por culpa de la cuenta atras dichosa de Nochevieja! Ni siquiera habia visto a quien tenia a su lado en la fiesta de empleados en ese momento, hasta que la gente empezo a besarse como era costumbre y, al girarse, se lo encontro a el. Y algo habia pasado, porque en lugar de darse la vuelta y marcharse cada uno por su lado como solian hacer, inexplicablemente se habian acercado para besarse. Y lo que habia comenzado como un beso casto en los labios fue a mas y, antes de darse cuenta, estaban en la cocina. Se metio en el primer cuarto de bano femenino que vio para intentar recuperar la compostura. ?Pero que demonios le habia pasado? !Si Patrick era su enemigo numero uno! Llevaban meses compartiendo cocina, sin llevarse bien ni un solo dia. Cada uno tenia una forma de cocinar, de organizarse... !de todo! Ya desde el primer dia chocaron y nunca habian compartido un solo momento de ocio fuera de la cocina. ?Seria por eso? ?Habia bajado la guardia porque estaban en un ambiente relajado? Maldita fiesta de fin de ano... Se miro en el espejo, y se asusto al ver el estado en que estaba su pelo, por no hablar del maquillaje inexistente, ni de las zonas rojas en su cuello, alli donde Patrick... Sacudio la cabeza para no pensar en eso. Se peino con los dedos lo mejor que pudo y recompuso su maquillaje con el pulso algo tembloroso. Cuando estuvo satisfecha con el resultado, observo su reflejo, sin poder reprimir una expresion preocupada. ?Que iba a pasar cuando volvieran al trabajo? Patrick espero un par de minutos en la cocina, sin dejar de dar vueltas junto a la encimera donde... reprimio una maldicion y coloco bien un par de espumaderas que ellos habian movido sin querer antes de salir y meterse en el primer cuarto de bano que vio. Se miro en el espejo, apoyando las manos en el lavabo. ?Pero que demonios le habia pasado? !Si Brooke era su enemigo numero uno! Llevaban meses compartiendo cocina, sin llevarse bien ni un solo dia. Cada uno tenia una forma de cocinar, de organizarse... !de todo! Ya desde el primer dia chocaron, y no habian compartido nunca un solo momento de ocio fuera de la cocina. ?Seria por eso? ?Habia bajado la guardia porque estaban en un ambiente relajado? Maldita fiesta de fin de ano... Aunque tampoco podia echar la culpa al alcohol, ya que solo se habia tomado un par de copas de champan. Ni siquiera se habia fijado en ella hasta que se deslizo a su lado bailando y tuvo que mirar dos veces para reconocerla. Entonces observo que llevaba su cabello moreno diferente, suelto con ondas, peinado de una forma que, junto con el vestido, le recordo a las chicas de los calendarios pin up. Ya no habia podido evitar seguir observandola hasta encontrarse a su lado cuando habia comenzado la cuenta atras. Y cuando ella se giro, esos labios pintados de rojo pasion lo atrajeron como si de un iman se tratara. El mismo rojo que ahora estaba esparcido por toda su cara, asi que se echo agua fria para quitarselo y de paso rebajar el calor que empezaba a sentir al pensar en ella. Saco un panuelo del bolsillo del pantalon y se seco el rostro, eliminando todos los restos del pintalabios. Termino de abotonarse la camisa e hizo un nudo perfecto en la corbata. Se echo un poco de agua en el pelo para alisarselo y, tras ponerse la chaqueta, se examino en el espejo. Asi no se le veia la parte de la camisa sin botones, su pelo volvia a estar arreglado... En la cocina siempre estaba impecable con su uniforme blanco; ponerse un traje para fin de ano le habia parecido adecuado, aunque ahora le diera demasiado calor. En fin, todo en orden, asi que quiza deberia volver a la fiesta. Si no fuera por la expresion preocupada que tenia en la cara, nadie diria que habia ocurrido nada. Pero claro, ?que iba a pasar cuando volvieran al trabajo? De vuelta en la fiesta, Brooke fue a la mesa donde habia botellas y vasos para que cada uno se sirviera. Se lleno un vaso de champan, se lo tomo de un trago y volvio a llenarlo. --!Eh, garganta profunda! ?Piensas acabar con todas las bebidas? Levanto la vista para encontrarse a Denise, la subdirectora del hotel y su mejor amiga alli. Habian congeniado desde el principio y con ella pasaba su tiempo libre cuando coincidian ambas. Asi como Brooke vestia con el uniforme de la cocina a diario y pocas veces se arreglaba como esa noche, Denise era todo lo contrario: siempre iba perfecta, con tacones y el pelo rubio perfectamente alisado, con una media melena y flequillo que enmarcaban su rostro angelical. Su puesto tenia mucho que ver en su estilo, obvio, aunque tambien formaba parte de su personalidad. --Es mi intencion --le contesto. --?Estas bien? Pareces acalorada. ?Has bailado mucho o que? --No, no es eso. --?La gente te agobia? No lo entiendo, ya deberias estar acostumbrada. Hizo un gesto que abarcaba al nutrido grupo que se habia juntado alli, practicamente todo el personal del hotel que vivia en los apartamentos para trabajadores. Como era una noche especial, se habia contratado personal externo para entretener a los clientes esa noche y la empresa habia dado libre a todos los departamentos. Denise habia tenido mucho que ver en eso, ya que era la primera vez que se lograba algo asi. Llevaba un ano y medio alli, unos meses mas que Brooke, y uno de sus objetivos era mejorar las condiciones laborables. Los empleados solo libraban un dia a la semana, por ejemplo, otro tema que tenia pendiente. El Paradise Lanikai Beach era un enorme complejo hotelero a pie de playa en la isla principal de Hawai, Oahu. Tenia dos bloques principales, cada uno con su correspondiente piscina, unidos por varios puentes de madera con antorchas decorativas que encendian por la noche. En el centro habia un escenario donde se hacian actuaciones en ocasiones especiales o se colocaba alguna orquesta itinerante. Detras de todo ello, separado por vallas de bambu, se encontraban los apartamentos de los empleados. Todos tenian un bungalow de una habitacion, con una pequena cocina unida a un salon, y en el centro de los edificios habia una piscina, con vestuario y gimnasio propio. Como tenian poco tiempo libre, la piscina no solia estar muy masificada. Ademas, el personal rotaba con bastante frecuencia y muchos preferian pasar ese tiempo descubriendo la isla y sus playas. El motivo del cambio de personal era, por un lado, que no todos se acostumbraban a trabajar en una isla, y, por el otro, que formaba parte del programa de intercambio de la cadena para que los empleados adquirieran experiencia en diferentes localizaciones y tipos de hotel. Era normal que los que empezaban se inscribieran en ese programa, daba muchas oportunidades para recorrer mundo, lo que era otro punto a su favor. --Mejor te lo cuento --solto. Brooke cogio a una sorprendida Denise del brazo y la alejo de la musica y la gente, detras de una palmera. --?Que me he perdido? --pregunto Denise, sin entender nada. --Me acabo de acostar con Patrick --espeto su amiga. Denise se quedo con la boca abierta. Decir que se habia quedado alucinada era poco, estaba a punto de pellizcarse por si sonaba, porque aquello no podia ser verdad. Tenia que haber oido mal. --Repite eso --pidio. --Digo que me acabo de acostar con el. Despues de la cuenta atras, hemos ido a la cocina y... En fin, eso. Denise abrio de nuevo la boca. La cerro, volvio a abrirla y parpadeo varias veces. --Espera a ver si me he enterado bien --dijo--. ?Me estas diciendo que Patrick y tu habeis echado un polvo en la cocina? ?Tu y el mismo Patrick que odias desde el dia uno que entraste en este hotel, el mismo Patrick al que, y te recuerdo tus palabras exactas, llamaste <>? ?El mismo Patrick que te quita tu sarten favorita y tu a el su cuchillo de cortar preferido? --Denise... Pero su amiga estaba lanzada, con aquel brillo que se le ponia en los ojos azules cuando algo le resultaba divertido y sorprendente al mismo tiempo. --?El mismo Patrick que, dijiste, era un imbecil estirado que solo sabia mirarse el ombligo y que metiste en la lista de <> sobre el personal del hotel que hicimos en la fiesta de despedida de Karen? --A ver, Denise, !que si! --?Y en que momento ha salido de la lista? Porque cuando todas estuvimos de acuerdo en que el chico esta muy bien, tu solo le sacaste defectos. A saber... --empezo a enumerar con los dedos--: va siempre repeinado, no sonrie nunca (algo que, debo decir, es falso), el uniforme de cocinero le queda fatal, tiene cara de aleman... lo cual sigo sin entender por que es malo, !si encima su madre es alemana! --Pues porque... porque si. Y ademas es un borde... --Contigo. Porque tu tambien lo eres con el. Pero no te me disperses, por favor. ?Como fue? --No lo se. --?Estabas borracha y no te acuerdas? Porque te veo muy lucida ahora mismo. --No, ?a que te refieres?

  • Los secretos del faro de Santa Montefiore

    https://gigalibros.com/los-secretos-del-faro.html

    <> Country Wives <> Amazon Misterio y romance en un paisaje idilico Ellen Trawton esta a punto de casarse con un hombre al que no ama, su trabajo la deprime y su madre se entromete en todos los aspectos de su vida. Cuando un dia descubre un punado de cartas dirigidas a su madre por una tia Peg, cuya existencia hasta entonces desconocia, decide huir. ?Que mejor lugar para romper todo contacto con el pasado que el imponente paisaje de Connemara? Pero tras la salvaje belleza de ese perdido rincon de Irlanda se oculta un misterio que parece imposible de desentranar.

  • El secreto del faro de Jean E. Pendziwol

    https://gigalibros.com/el-secreto-del-faro.html

    Cuando vives en una isla, nada puede ser secreto.

  • Memoria de la nieve de Julio Llamazares

    https://gigalibros.com/memoria-de-la-nieve.html

    <>.

  • Tuya Incondicional 4 de April Russel

    https://gigalibros.com/tuya-incondicional-4.html

    Unidos en matrimonio. Por fin Megan y Mikhail han logrado sobrepasar las diferencias e intrigas que se le cruzaron en el camino. Todo pareciera que todo comienza a tomar sentido en la vida de ambos, pero aun esta ese misterio, ese temor, ese secreto que oculta Mikhail en su interior. un secreto que puede poner en riesgo la estabilidad de su matrimonio con Megan. La falta de amor propio, la desconfianza hacia todos y el miedo a ser abandonado por Megan dominan a Mikhail. Estara en Megan decidir si vivir sin saber que es eso que tanto atormenta a Mikhail o enfrentarse a sus demonios y ayudarlo a liberarse y salir de su propio infierno. El amor incondicional y la compasion tendran que acompanar a Megan, un accidente inevitable, que marcara la vida de ambos pone a prueba ese amor que juraron tenerse. El amor y el pasado se enfrentan en una guerra donde la lucha por la libertad es el unico objetivo.

  • Pelea de gallos de Maria Fernanda Ampuero

    https://gigalibros.com/pelea-de-gallos.html

    Pelea de gallos narra desde diferentes voces el hogar, ese espacio que construye -o destruye- a las personas, aborda los vinculos familiares y sus codigos secretos, las relaciones de poder, el afecto, los silencios, la solidaridad, el abuso… Es decir, todos los horrores y maravillas que se encierran entre las cuatro paredes de una casa: el espanto y la gloria de nuestras vidas cotidianas.

  • Adicto a ti de Mabel Diaz

    https://gigalibros.com/adicto-a-ti.html

    Javier es policia en Sevilla. Lleva una vida tranquila y ordenada. Con todas las situaciones bajo control. Cuando Paula, una veterinaria madrilena, impulsiva y rebelde, irrumpe en la vida de Javier durante unos carnavales, este vera como su apacible mundo se desmorona. Intentara alejarla de el, a pesar de lo mucho que la desea.
    Paula no cesara en su empeno por conquistar a ese hombre, volviendole adicto a ella. Sabe que el sexo explosivo que tiene con el policia es una tentacion demasiado grande para el y jugara todas sus cartas para conseguirle.

  • Te elegi eternamente (Por amor 10) de Maria Beatobe

    https://gigalibros.com/te-elegi-eternamente-por-amor-10.html

    A Naira y Gael se les ha complicado el fin de semana, debido a la inesperada noticia que reciben a su vuelta. Y es que, para Naira, las cosas perfectas siempre acababan estropeandose por algun motivo.

  • La formula del amor de Rafael Belda Ros

    https://gigalibros.com/la-formula-del-amor.html

    ?Y si tu vida sentimental no tuviera sentido? Tal vez, tendrias que empezar a escribir las paginas en blanco de tu vida para descubrir hacia donde serias capaz de llegar. Descubriras lo que en realidad esconde la formula del amor.

  • Dominada de Sheila Maldonado

    https://gigalibros.com/dominada.html

    Frederick Valverde, escritor y musico, atormentado por un pasado siniestro, busca en el sexo la liberacion de sus penas. Se sumerge en ambientes lascivos liberando sus propios demonios. Se encuentra en uno de sus conciertos con una mujer muy especial que se convierte en su musa, pero que sin pretenderlo, la arrastra a sus infiernos. En Venecia la adiestra para que sea su esclava y ella accede a ser su mejor discipula

  • Quedate (Quedate 1) de Lina Perozo Altamar

    https://gigalibros.com/quedate-quedate-1.html

    Quedate: Volumen 1
    Nos cuenta los primeros anos de vida de Victoria Anderson, una tierna nina de ojos verdes y cabellos dorado. Es la unica hija del matrimonio de Stephen Anderson, heredero de una de las familias mas poderosas de Escocia, radicada en Estados Unidos, con Virginia Hoffman, una campesina de Illinois.
    Victoria tendra que enfrentarse a grandes desafios, como: la muerte de su madre, vivir por un tiempo alejada de su padre y, luego, abandonar su vida apacible en el campo, para iniciar una nueva, bajo el seno de su familia, los Anderson. Y cuando por fin es realmente feliz, una tragedia trastocara su mundo, llenando su corazon de tristeza, confusion y culpa.
    En un viaje hacia Europa, conocera al atractivo y misterioso Terrence Danchester, hijo mayor del duque de Oxford, quien de inmediato despertara el interes de Victoria. Juntos, formaran una entranable amistad, que los llevara a descubrir la magia del primer amor, durante un inolvidable verano en Escocia.
    Este es el primer libro de la serie <> escrita por las hermanas Lily y Lina Perozo, que inicio en junio de dos mil nueve, y consiguio cautivar el corazon de cientos de lectoras en todo el mundo.

  • En el fondo me tienes de Anny Peterson

    https://gigalibros.com/en-el-fondo-me-tienes.html

    Emma viajara a Australia siguiendo una pista hasta la Escuela de buceo Blue Days, alli conocera a Jon y a Dani, dos instructores con manias muy variopintas y divertidas. Iker es un fugitivo de su vida, como Emma, con el que pronto traba amistad porque comparten albergue y secretos a pie de playa muy cerca del centro de buceo. Ambos se daran cuenta de que, si quieren cambiar sus vidas, lo mejor es saltar juntos con Jon y Dani para descubrir lo que les depara la vida y el mar.

  • Entre leyendas de Lourdes Tello

    https://gigalibros.com/entre-leyendas.html

    Gloria esta a punto de cambiar su vida cuando vuelve a encontrarse con Raul, su amor del instituto. Ella, la siempre timida y sensata Gloria, esta inmersa en la duda de lo que podria suceder si se entregara al deseo que lleva ocultando tantos anos. Mientras, su extrovertida amiga Clara la anima a que se deje llevar por la nueva vida que las espera. Hasta que David, un guapo y extrovertido companero aparece para tratar de ponerla sus dias patas arriba.

  • Melocotones de vina de Lola Lopez De Lacalle

    https://gigalibros.com/melocotones-de-vina.html

    En la inmediata postguerra, Pilar y Paulina, dos sencillas vecinas de un pueblo de la Rioja Alavesa, temerosas de Dios, que nunca se han saltado una misa en una fiesta de guardar, comparten un terrible secreto. Viuda una con dos hijos, despues de que su marido fuese cuneteado por los falangistas, y madre de doce criaturas la otra, tejeran una urdimbre de lealtad para protegerse a si mismas y a sus familias, incluso mas alla de la muerte.

  • Culpa mia de Mercedes Ron

    https://gigalibros.com/culpa-mia.html

    Mientras subia y bajaba la ventanilla del nuevo coche de mi madre, no podia dejar de pensar en lo que me depararia el siguiente e infernal ano que tenia por delante. Aun no dejaba de preguntarme como es que habiamos acabado asi, yendonos de nuestra casa, de nuestro hogar para cruzar todo el pais hasta California. Habian pasado tres meses desde que habia recibido la fatal noticia, la misma que cambiaria mi vida por completo, la misma que me hacia querer llorar por las noches, la misma que conseguia que suplicara y despotricara como una nina de once anos en vez de diecisiete. ?Pero que podia hacer? No era mayor de edad, aun faltaban once meses, tres semanas y dos dias para cumplir los dieciocho y poder largarme a la universidad; lejos de unos padres que solo pensaban en si mismos, lejos de aquellos desconocidos con los que me iba tocar vivir porque si, de ahora en adelante iba a tener que compartir mi vida con dos personas completamente desconocidas y para colmo, dos tios. -?Puedes dejar de hacer eso? Me estas poniendo nerviosa-dijo mi madre, al mismo tiempo que colocaba las llaves en el contacto y ponia en marcha el coche. -A mi me ponen nerviosa muchas cosas que haces, y me tengo que aguantar-le dije de malas maneras. El sonoro suspiro que vino en respuesta se habia convertido en algo tan rutinario que ni siquiera me sorprendio. Pero ?Como podia obligarme? ?Acaso es que no le importaban mis sentimientos? Claro que si, me habia respondido mi madre mientras nos alejabamos de mi querido pueblo de Toronto en Canada. Todavia no me podia creer que no fuesemos a vivir solas nunca mas; era extrano. Ya habian pasado siete anos desde que mis padres se habian separado; y no de forma convencional ni agradable: habia sido un divorcio de lo mas traumatico, pero al fin y al cabo lo habia superado… o por lo menos seguia intentandolo; y vivir sola con mi madre me insuflaba una tranquilidad que seria destrozada nada mas llegar a la que seria mi nueva casa. Yo era una persona que le costaba muchisimo adaptarse a los cambios, me aterrorizaba estar con extranos; no era timida pero si muy reservada con mi vida privada y eso de tener que compartir mis veinticuatro horas del dia con dos personas que apenas conocia me creaba una ansiedad que me hacia tener ganas de salir del coche y vomitar. -Aun no puedo comprender por que no me dejas vivir en casa-le dije intentado poder convencerla en lo que seria por lo menos la decima vez desde que habiamos salido de casa ayer por la manana.-No soy una nina, se cuidarme, ademas el ano que viene estare en la universidad y al fin y al cabo estare viviendo sola… es lo mismo-dije intentado hacerla entrar en razon y sabiendo que yo estaba completamente en lo cierto. -No voy a perderme tu ultimo ano de instituto, y voy a disfrutar de mi hija antes de que te vayas a estudiar; Noah ya te lo he dicho mil veces, quiero que formes parte de esta nueva familia, eres mi hija, por Dios santo, ?enserio crees que te voy a dejar vivir en otro pais sin ningun adulto y a tanta distancia de donde yo estoy?-me contesto sin apartar la mirada de la carretera y haciendo aspavientos con su mano derecha. Mi madre no comprendia lo duro que era todo eso para mi. Ella comenzaba su nueva vida con un marido nuevo que supuestamente la queria pero ?y yo? -Tu no lo entiendes, mama, ?no te has parado a pensar que este tambien es mi ultimo ano de instituto? ?Que tengo alli a todas mis amigas, mi trabajo, mi equipo…? !Toda mi vida, mama!-le grite intentando contener las lagrimas que estaban a punto de derramarse por mis mejillas. Aquella situacion estaba pudiendo conmigo, eso estaba clarisimo. Yo nunca y repito, nunca, lloraba delante de nadie. Llorar es para debiles, para aquellos que no saben controlar lo que sienten, o en mi caso para aquellos que han llorado tanto a lo largo de su vida que han decidido no derramar ni una sola lagrima mas. Aquellos pensamientos me hicieron recordar el inicio de toda aquella locura y al igual que siempre lo hacia, mi cabeza no dejaba de arrepentirse de no haber acompanado a mi madre a aquel maldito crucero por las islas del Caribe. Porque habia sido alli, en un barco en medio de la nada donde habia conocido al increible y enigmatico William Leister. Si pudiera volver atras en el tiempo no dudaria ni un instante en decirle que si a mi madre cuando se presento a mediados de abril con dos billetes para irnos de vacaciones. Habia sido un regalo de su mejor amiga Alicia, la pobre habia sufrido un accidente con el coche y se habia roto la pierna derecha, un brazo y dos costillas. Como es obvio no podia irse con su marido a la islas Fidji, y por ese motivo se lo regalo a mi madre. Pero vamos a ver… ?mediados de Abril? Por aquellas fechas yo estaba con los examenes finales y metida de lleno en los partidos de voley. Mi equipo habia quedado primero despues de estar en segundo lugar desde que yo tenia uso de razon, habia sido una de las alegrias mas grandes de mi vida; pero ahora viendo las consecuencias de no haber asistido a aquel viaje, devolveria el trofeo, dejaria el equipo y no me hubiese importado suspender literatura y espanol, con tal de evitar que aquel matrimonio se realizara. !Casarse en un barco! !Mi madre estaba completamente loca! Ademas se casaron sin decirme absolutamente nada, me entere en cuanto llego, y encima me lo dijo tan tranquila como si casarse con un millonario en medio del oceano fuera lo mas normal del mundo… Toda esta situacion era de lo mas surrealista, me iba de mi pequeno apartamento en uno de los lugares mas frios de Canada para mudarme a una mansion en California, EEUU. Ni siquiera era mi pais, aunque mi madre habia nacido en Texas y mi padre en Colorado. Pero aun asi me gustaba Canada, yo habia nacido alli, era cuanto conocia… -Noah sabes que quiero lo mejor para ti-me dijo mi madre haciendome regresar a la realidad.- Sabes por lo que he pasado, por lo que hemos pasado; y por fin he encontrado un buen hombre que me quiere y me respeta y no me sentia tan feliz desde hace muchisimo tiempo… le necesito y se que vas a llegar a quererle, ademas puede ofrecerte un futuro que yo nunca podria ni haber imaginado darte. -Mi instituto en Toronto era muy bueno-dije suspirando al mismo tiempo que pensaba en lo feliz que estaba mi madre. Hacia muchisimos anos que no la veia tan contenta, tan ilusionada. Era otra persona, y me alegraba por ella pero yo no sabia si iba a poder adaptarme a un cambio tan radical en mi vida. -Uno de los mejores institutos…publicos, Noah.-me aclaro mi madre-Ahora vas a poder asistir a uno de los mejores del pais, y vas a poder optar a las mejores universidades… -Es que yo no quiero ir a una universidad de esas, mama, ni tampoco quiero que un desconocido me la pague-dije sintiendo un escalofrio al pensar en que dentro de un mes empezaria en un instituto pijo lleno de ninos ricos. -No es un desconocido, es mi marido, asi que ve haciendote a la idea-agrego en un tono mas cortante.

  • Noches de tormenta de Nicholas Sparks

    https://gigalibros.com/noches-de-tormenta.html

    Adrienne Willis es una mujer cuya vida esta sumergida en el caos, por lo que decide pasar unos dias en la pequena localidad costera de Rodanthe, en Carolina del Norte, con el motivo de hacerse cargo del hotel de su amiga Jean durante un fin de semana. Adrienne espera encontrar la tranquilidad que tanto anhela para poder reflexionar y resolver los conflictos presentes en su vida: su marido que le ha sido infiel quiere volver a casa y su hija Amanda cuestiona absolutamente todas sus decisiones. Al mismo tiempo que Adrienne se instala en Rodanthe se pronostica la llegada de una gran y peligrosa tormenta. El Dr. Paul Flanner llega justo antes de que la tormenta haga su aparicion, pero el doctor no se alojara en el hotel por vacaciones, sino para enfrentarse a su conciencia. Cuando la tormenta llega, Adrienne y Paul quedaran incomunicados en el hotel durante el fin de semana, un fin de semana magico en el que encontraran consuelo y que no solo cambiara sus vidas, sino que les marcara para siempre.

  • La biblia de los Caidos. Tomo 1 del Testamento de Gris de Fernando Trujillo Sanz

    https://gigalibros.com/la-biblia-de-los-caidos-tomo-1-del-testamento-de-gris.html

    Bruno movia la cabeza y olfateaba, mientras arrugaba la nariz involuntariamente. Un olor agresivo y penetrante, capaz de asfixiar a un hombreadulto, seextendia por todalaestancia. Suspiro con resignacion. --!Tenemos unaemergencia, nena! --grito. --Tetocaati--contesto Tamaraentrando en elsalon. Tamara llevaba la cena sobre una bandeja roja con el estampado de Mickey Mouse. Esquivo al pequeno David, que gateaba en la alfombraentreelarsenal dejuguetes ymetralla de piezas descolocadasalos queapenas prestabaatencion, y sesento en elsofa. --?Como es posible que no te molesteeste pestazo? --Se acostumbra una --dijo ella. Cambio de canalcon el mando a distancia--. Cuanto mas tardes peor sera. Yno te libraras esta vez. Empieza miseriefavorita. --Esta bien. Alla voy --dijo Bruno recabando fuerzas--. Ven aqui, pequeno marrano. --Cogio al bebe por las axilas y le alzo hasta que sus ojos quedaron ala mismaaltura. El olor leenvolvio deinmediato--. ?Quien eselmocoso mascochino detodos? --Le dio una vueltaen el aire--.?Yquien eselmas guapo? Apreto sus labioscon suavidad sobre elcuello de su hijo y soplo. El bebe le devolvio una sonrisa deliciosa. Bruno no tenia claro siera por eltacto delos labios y elcalor desu aliento, o porelsonido que producia, pero la pedorretafuncionaba. Al nino leencantaba y aelselecaiala babaal verlesonreir. Pero nisiquieralasonrisa desu hijo detrece meses leayudabaasoportarel olor. --No me dejais ver latele --protesto Tamara--. Echaosa un lado. --Vamosa dejara mama que veasu serieromantica --dijo Bruno haciendo una muecaal bebe--, quesi no, yasabescomo se pone. Llevaba al nino boca abajo como siestuviera volando. Silbaba, imitando sinmucho exito elsonido del viento. El bebe sonreia, agitaba los brazos y pataleaba. Bruno se detuvo en la puerta delsalon. --Ylos panalesestan... --En elsegundo cajon delacomoda --recito Tamarasin despegar los ojos dela pantalla. --Yalo sabia. Por fin se quedo sola. Unos minutos de paz. Elcapitulo de hoy era apasionante. La protagonista acababa de descubrir que su marido la enganaba con la nueva y joven abogada que habia contratado la firma en la que trabajaba, bastante tipico, pero igualmente emocionante. Tamara queria vercualibaaser su reaccion. Esperaba quele mandaraalinfierno y se quedaracon todo. !Porcerdo! Si no... La television se apago en ese momento. Tamara bufo. Se levanto para ver si se habia soltado elcable. El televisor volvio a encenderse, aunque no mostraba ningunaimagen, solo una nube de puntos negros y blancos y elsonido delaestatica. Se volvio aapagar. Elcableestaba bien, no se habiasoltado. Tamaraapreto elmando a distancia varias veces, pulso los botones delatelevisionmanualmente. Nada. Solo restaba unacosa por hacer. --!Bruno!?Has terminado decambiaral nino?!Latelese ha vuelto aestropear! No obtuvo respuesta. Cruzo el pasillo andando deprisa, no queria perderse el resto del episodio. La puerta de la habitacion del bebe estabacerrada, pero lellegabala voz desumarido hablando con el pequeno. Por lo visto, leestabarelatando una peleaentre Spiderman y otro superheroe queella no conocia. Seguramente poreso no le habia oido cuando lellamo. --Echa un vistazo alatele,anda. Yo me ocupo de... Lafrase murio en su bocacon un gorgoteo.Alabrir la puerta, habiaentrado de nuevo en elsalon, no en la habitacion del bebe. Aquello no teniasentido. Miro asu alrededor, toco loscojines delsofa, elespejo quecolgaba dela pared, latelevision quecontinuabaapagada. Todo era real, solido,como debiaser.?Seestaria volviendo loca? Debia de haberse desorientado dealguna manera. Volvio a salir al pasillo. Esta vez avanzo despacio, asegurandose de que no se giraba sin darse cuenta, lo que le hizo sentirse estupida. Entonces reparo en que ya no escuchabaa Bruno nial bebe y seleacelero elcorazon. --!Bruno!?Dondeestas?!Bruno! La puerta dela habitacion del pequeno David seabrio. Bruno salio al pasillo como unaexhalacion. --?Que pasa? --dijo muy preocupado--. Me hasasustado. ATamaraletemblaban las manos. --Yo... No lo se... Me he mareado... Ellaabrazo. --?Teencuentras mal??Tellevo almedico? --No,estoy bien. Hasido algo momentaneo, no me hagascaso. No seatreviaacontarlelo quecreia haber vivido. Yno mereciala pena, pronto lo olvidariaellatambien. No era mas que una bobada. --!Dios mio! El nino.?Le has dejado solo? --Tranquila. Estaen lacuna.Yale habiacambiado. Estabamosa punto de derrotaralmalvado Doctor Octopus. Vamosa porel pequeno Spiderm... Lacunaestaba vacia. --Dijiste queestabaen lacuna. Por Dios no pongasesacara. !Meestasasustando!?Dondeesta David? --!Estabaen lacuna! !Lo juro! --!Pues ya no esta! Ambos temblaban y gritaban. Sus respiracionesestaban casitan aceleradascomo suscorazones. --Tiene queestar poraqui--dijo Bruno al borde dela histeria. Tamara ya estaba abriendo el armario. Gritaba el nombre de su hijo sin cesar, arrojaba la ropa y los juguetes a un lado, sin contemplaciones. --!Malditasea!?Como es posible? --Tiene que haber salido mientras hablabamosen el pasillo --dijo Bruno. --Pero si no anda, solo gatea. No puedesalir delacuna. !Es solo un bebe! Bruno vio un fuego en los ojos desumujer que nunca habia visto antes. --Telo juro por lo mas sagrado. Le deje dentro delacuna. --Registremos lacasa --rugio Tamarasaliendo dela habitacion. No descansaria hastarepasar hastael ultimo centimetro delacasa. Entro en la habitacion de matrimonio, queerala mascercana. David no estaba debajo delacama, nien losarmarios, ni detras dela puerta, nientrelasalmohadas, ni... La desesperacion se estaba apoderando de ella. Tenia miedo. Un miedo tan intenso que le dolia. Un miedo que la estaba haciendo enloquecer. Por sumente desfilo todaclase deimagenesaterradoras. Lesiones de bebes, secuestros y cosas mucho peores. --!Tamara! !Ven, deprisa! La voz de Bruno provenia delsalon. --?Le hasencontrado? --pregunto casisin respiracion trasabrir de un portazo--.?Dondeestaba?!Dime quele hasencontrado! Pero sabia que no. --Mas o menos --balbuceo el. No fue lo extrano de esa respuesta lo que paralizo completamente a Tamara. Fue la expresion de sumarido, el tono de voztan irreal que habiaempleado. --?Como que mas o menos? Bruno levanto un pie y lo mantuvo en elaire unos segundos. Luego lo poso un poco a la derecha, lo volvio a levantar. Despues dio un pequeno salto a un lado,con lacara palida de miedo. Miro alsuelo con unaexpresion indescriptible y levanto la vista de nuevo. --E-Estaahi...,aqui..., no esta. --Bruno, meestas preocupando de verdad.?Que demonios...? --!No! !Para! !No te muevas! --Tamarase quedo quietasin entender una palabra--. !Retrocede o le pisaras! Sumarido habia perdido completamenteeljuicio. Teniaelrostro desencajado, su voz vibraba y seentrecortaba,confundialas palabras. --Bruno no se quete pasa, pero tienes quecalmarte. Tenemos que buscara David. --M-Mira. Era obvio que Bruno no eracapaz de hablar. Senalo con el dedo. Ella miro, y cuando lo vio, secayo alsuelo. En laimagen delespejo estaba David, su hijo detrece meses, gateando, justo entreellos dos. Tamara miro alsuelo y no vio nada. Volvio a mirarelespejo. Alliestaba. Erael, su pequeno, pareciaasustado pero no lloraba. --!Cielo santo!?Queesesto? Paso la mano por el lugar que ocupaba su hijo en la imagen delespejo. No noto absolutamente nada. Ahora todo daba vueltas. Estaba perdiendo larazon, lo sabia, no podriasoportarlo. Solo quedo unaideaen su cabeza. --Tengo que sacarle de ahi --dijo mientras se levantaba. Bruno estaba completamente petrificado contemplando la imagen de espejo--. !Ya voy, David,cielo! !Mama vaa buscarte! Solo pudo dar un paso. Elespejo revento en pedazos mucho antes de que lo alcanzara. Los fragmentos volaron, se esparcieron por elsuelo, rebotaron contra las paredes y elsuelo. Tamarase desmayo.

  • El futuro es ahora de Jaron Lanier

    https://gigalibros.com/el-futuro-es-ahora.html

    El padre de la realidad virtual nos explica sus infinitas posibilidades a traves de su experiencia con la tecnologia.

  • Dulce chico indecente (Wild Seasons 1) de Christina Lauren

    https://gigalibros.com/dulce-chico-indecente-wild-seasons-1.html

  • Cuando Sonries de Erica Vera

    https://gigalibros.com/cuando-sonries.html

    Buenos Aires. 2016. —Uh. Me olvide de contarte. Hoy te llamo tu madrina —dijo Jimena mientras terminaba de secar el plato que le alcanzaba Damaris—. Atendi porque no dejaba de sonar y pense que era importante, perdon. —Esta bien. Vi la llamada. Me escribio tambien. —?Y? —Nada. No le he dicho nada. —!?Por que?! Deberian saber lo que paso. —No. Y no me vas a convencer. —Creo que deberias contarles, Dami. —Le acaricio la mano en el intercambio de vajilla y le sonrio con dulzura. Aun pese a los dias que habian pasado y los antiinflamatorios que habia tomado, seguia llevando la marca de la mano de su marido en el rostro. —No creo que sea buena idea. Podria llegar a provocar una tragedia. No. —No estas sola, amiga. —Lo se. !Gracias! —Entonces… —Entonces… cuando me recupere, analizare que hacer. Yo no quiero volver y ser una carga para nadie, Jimena. No quiero que se compadezcan de mi. Ya tu sabes. —Si… pero alla esta tu mama, tu familia. Creo que… —Lo se. No creas que no pienso en ellos. —?Y entonces? —Entonces, nada. Por ahora no pienso volver y es decision tomada. —Te vas a arrepentir y lo sabes. Jimena y Damaris se acostaron a dormir sin hablar demasiado. La noche caia sobre el departamento que compartian en la capital portena desde hacia unas semanas. Sin embargo, una de las dos no podia conciliar el sueno. Como cada vez que hablaban sobre su tierra, todo volvia a comenzar. Los recuerdos regresaban como disparos que dolian como el primer dia. Todo lo que habia vivido en Republica Dominicana afectaba sus dias en el presente y estaba segura de que afectarian su futuro para siempre. Se acaricio la cicatriz del labio que, de a poco, iba sanando y se rebullo en la cama. Al cabo de unos minutos de pestanear en la negrura de la habitacion, se sento y tomo el celular para releer el mensaje de su madrina Margarita: Margarita: Mi nina, la casa no es la misma sin usted. Su madre la extrana, la necesita… igual o mas que yo. Vengase, aunque sea de visita. ?Estaba bien lo que hacia? ?Era correcto condenar a toda su familia por culpa de los recuerdos? ?Debia alejarse de sus seres queridos para olvidar? Cerro los mensajes y googleo el precio de los pasajes. Conocia de memoria los montos exactos y cada tanto controlaba si habia habido alguna variacion. Sabia, tambien, cuando y en que fecha serian mas economicos. Enseguida ingreso un dia cualquiera de agosto y encontro lo que ya sospechaba. Caro, muy caro. Aunque quisiera volver, no podria. Jimena desayunaba sobre la pequena mesita de la cocina: dos tostadas y un cafe con leche. Damaris se levanto cuando escucho la puerta cerrarse. No deseaba cruzarse con la mirada punzante de su amiga; sabia que podia ser insistente cuando queria. Desde que ella habia llegado con las marcas de su marido en el rostro, Jimena intentaba convencerla de que se marchara a su tierra, aunque mas no fuese de vacaciones. Insistia en que debia alejarse de Tom, de sus malos tratos y del infierno en que se habia convertido su matrimonio. Con las pantuflas puestas y la bata suelta en el cuerpo, camino hasta la cocina y puso la pava. Sonrio. Jimena, siendo argentina, no tomaba mate. Ella, dominicana, amaba con pasion aquel <> del que se enamoro apenas llego. Coloco la yerba en el recipiente, lo giro dejando la boca sobre su palma, y lo batio unos segundos. Le agrego un poco de azucar e inserto la bombilla tal y como habia aprendido a hacer. Se sento con los pies estirados y contemplo el edificio que le tapaba el sol. Odiaba vivir rodeada de cemento y ruido. Si algo extranaba de su pueblo era el silencio y la naturaleza. Ultimamente, los dias se hacian cada vez mas pesados porque las imagenes de su casa, del mar y de su familia la sorprendian a cada momento. Jimena tenia razon. Debia volver. Debia llenarse el alma de carino, de abrazos y sobre todo de amor… del bueno, del sano. La tarde la encontro en la misma posicion y la sorprendio el horario. Debia alistarse para ir a trabajar. Habia aprendido a viajar en subte y a hacer las combinaciones necesarias para ahorrarse dinero y tiempo. Al principio le habia costado; todo era nuevo para ella. Sin embargo, su curiosidad y, mas que nada, la necesidad la instaron a moverse por la ciudad como si fuera una portena mas. —Hola, ?Como estan? —saludo con una sonrisa enorme; la misma que siempre llevaba clavada en el rostro. A nadie se le ocurriria pensar que sufria, que su alma dolia y mucho. Eran pocos los que sabian la verdad y la razon sobre su labio partido y el moreton que su nariz aun cargaba. —!Damaris! !Por fin! —Walter se acerco y la abrazo con fuerza—. No se te ocurra dejarme otra vez con estas bichas. ?Que te paso en la boca? —Nada… Estoy bien. —Pero mira como tenes… —No es nada, Walter. Dejalo. Cuentame… ?Que te han hecho? —Lo abrazo para alejarlo del escrutinio y asi entraron a la cocina del restaurante donde trabajaban. —?Que hiciste? ?Donde fuiste? —A ningun lado, carino. Descanse mucho. —Damaris habia tenido que pedir unos dias obligada. No queria presentarse a trabajar en el estado en que la habia dejado Tom despues de la ultima pelea. Una semana para curarse las heridas de la piel. Las del alma… llevarian mucho mas, si es que algun dia sanaban—. Salimos con Jime a comer y a tomar algun trago por ahi, pero nada mas. —Una semana de vacaciones y… ?vos te quedas durmiendo en tu casa? —Creeme que lo necesitaba. —!Que bien mentia! !Cuanto habia aprendido de el! Walter y Damaris saludaron a los cocineros y al resto del staf de Pentos, el famosisimo restaurante de Puerto Madero. Gisela y Pia sonrieron con picardia cuando la vieron llegar. —Pero miren quien volvio… —comento Gisela cruzandose en el camino de Damaris. —No empecemos, Gisela. —Se interpuso Walter. —Si, mejor. No vale la pena. ?Vamos, Pia? Las dos se alejaron del pasillo, dejando una estela de veneno en el aire. —No les hagas caso. —Es que no las entiendo. ?Cual es su problema? —No les des bola. Vamos. Victoria ya debe haber llegado. Victoria era prima de Jimena. Asi fue que Damaris habia conseguido aquel puesto de trabajo aun siendo indocumentada. Aquel era un gran favor que le debia a su amiga y a Victoria tambien. Porque arriesgarse a perder el restaurante era una gran posibilidad. Los controles en Capital Federal eran exhaustivos, y cada vez que alguien con traje y corbata entraba preguntando por la duena, Damaris temblaba. —Ay, pero !que bonita! —Victoria la abrazo y, de a poco, recupero la calma que Pia y Gisela le habian arrebatado con sus gestos. Su jefa, al igual que Jimena, si sabia que habia ocurrido. Habia tenido que contarle para poder pedirle los dias necesarios. —Gracias. ?Como estas tu? ?Como ha estado todo por aqui? —le pregunto. —Igual. Ninguna novedad. Con Walter te extranamos mucho, Dami. —Pues veran, yo no puedo decir lo mismo —bromeo—. Disfrute mucho mis dias en casa. —Me alegro —respondio Victoria con la voz apagada, sabiendo que aquello era todo un montaje—. ?Estan listos para abrir? —!Claro! La noche estuvo bastante tranquila. El frio del invierno amedrentaba a la gente y, aunque el lugar estaba casi lleno, la jornada paso sin grandes sobresaltos. Pia y Gisela no tuvieron tiempo de molestar a Damaris porque su sector fue el mas concurrido. Ella, en cambio, agradecio volver al trabajo en una noche como aquella. —Dami, anda a comer. Pia se queda en tu lugar. Despues cambian. —Que la cubra Walter que tiene dos mesas —protesto la joven. —Vas vos, nena —le dijo Victoria con la peor cara. —Anda, corazon —animo a Damaris que se habia quedado dura en la puerta de la cocina. —Puedo comer mas tarde, no hay problema. —No. Vas a ir ahora que no hay muchos clientes. Devoro el plato de ravioles que Justino, el cocinero, habia preparado para ella y salio apresurada para volver a su puesto. Le sonrio a Walter mientras avanzaba hacia su sector y, cuando giro por el costado de la barra, se detuvo en seco. Sentado en una mesa un hombre de cabello corto, con una sonrisa igual a la de… !No! No diria su nombre. No lo habia pronunciado desde la ultima vez que se vieron. Pestaneo. Pestaneo. Pestaneo. !A Dios gracias! Era muy parecido, si, pero no era el. Capitulo 2 Un pasado que se fue Hay un delicado equilibrio entre honrar el pasado y perderse en el. Eckhart Tolle Jimena, como siempre, roncaba. Damaris abrio con mucho cuidado la puerta de su cuarto y la cerro lentamente para que el ruido de las bisagras no despertase a su amiga. Se quito la ropa, se puso el pijama y se sento en la cama con el espejito y las toallitas desmaquillantes entre las piernas. Habia utilizado bastante base para enmascarar el moreton que le habia quedado en la nariz. Mientras la pintura desaparecia de su rostro, sus ojos vagaban por los rasgos que aun conservaba de aquella nina que se habia criado en una tierra completamente diferente a la que pisaba en este momento. Damaris. Damaris Juarez Penaloza. Su madre, al igual que muchas otras, habia bautizado a su primera hija de aquella manera porque era comun unir los nombres de sus padres para formar el de los hijos. Su padre se llamaba Dalmiro y ella Marisa. Habia nacido en Abreu, un pueblito remoto en la provincia de Maria Trinidad Sanchez, al noreste de la Republica Dominicana, donde el verde enarbola la ciudad y el azul del mar son parte del paisaje cotidiano; donde las casas se banan en flores y la paz anida en el corazon de sus habitantes. Suspiro y cerro los ojos. Se echo hacia atras, dejandose envolver por las imagenes de su vida, de su pasado. La casa de Damaris esta —porque aun sigue ahi— ubicada a un paso de la carretera que une Rio San Juan (Norte) con Cabrera-Nagua (Sur) en el corazon de Abreu, dentro de un extenso solar[1] repleto de arboles de aguacate[2], chinola[3] y guandules[4]. En el centro, una vivienda de concreto con los pisos pulidos de rojo carmesi no la diferencian del resto que tienen las mismas caracteristicas. Comoda. Con tres habitaciones amplias, frescas y una galeria ancha desde donde se puede observar el pueblo en todo su esplendor. Detras de la propiedad se extiende un manto verde que finaliza con una caida libre de rocas afiladas y puntiagudas, donde el mar arremete sin descanso los dias tormentosos. Desde muy pequena fue servicial, amable, pero con mucho caracter. Se acostumbro a ayudar a su familia en cualquier tipo de quehacer domestico y nunca, jamas, tuvo una objecion sobre el destino que le toco en suerte. Ademas, cargaba con la gran responsabilidad de cuidar de sus tres hermanos mas pequenos desde que tuvo memoria. El espejo le devolvia una imagen triste que nada tenia que ver con esa muchachita que reia feliz los dias de sol, que corria por el campo con las manos repletas de limoncillos[5]. Se acaricio el rostro y sus dedos siguieron hasta la cabeza. Su cabello siempre perfecto parecia ser lo unico que no habia cambiado a lo largo de los anos. Su pelo negro seguia lacio, suave, sedoso, y aun caia sobre sus hombros, como una lluvia azabache. Al enredar los dedos entre los mechones, el cuero cabelludo se quejo; en Buenos Aires jamas se soltaba el pelo. La cola que, apretada, llevaba siempre como un estandarte, guardaba dentro recuerdos de su pasado. Tener el cabello atado significaba mantener su historia atada tambien; firme, contenida. Por la noche, cuando era el momento de liberar su pelo, se dejaba llevar por todo lo que su imagen le devolvia y liberaba tambien la melancolia, el miedo, la tristeza que cargaba con ella. No se dejo ganar por la angustia que le provocaba sentir los recuerdos y continuo con la inspeccion del rostro que le devolvia el espejo. Su cuerpo, el que habia comenzado a florecer con apenas once anos, tampoco era el mismo. Y sus ojos… Sus ojos verdes, que siempre llamaban la atencion de quien la mirase, habian perdido tiempo atras su brillo esmeralda. Ya no arrancaban los mas intensos suspiros y, en cambio, solo inspiraban lastima. Lastima y preocupacion. Esa noche, como nunca antes le habia pasado, deseo encontrarse en los brazos de su mama y llorar para sacar fuera todo el dolor que cargaba dentro. Las lagrimas se fueron formando con lentitud en su garganta. Porque la angustia suele nacer alli; justo entre las cuerdas vocales y el plexo solar. Luego, se propaga hacia arriba y llega con fuerza a los ojos que ya no tienen manera de aguantar el dolor que quema en el pecho. Como cada vez que pensaba en su madre, las penurias vividas a su lado y los problemas atravesados cobraban fuerza, y las cicatrices de lo vivido picaban, ardian, molestaban. Y no solo las que cargaba su cuerpo, sino tambien su alma. Marisa, su madre, habia aceptado trabajar en el Hotel de La Catalina, poco despues de que su esposo Dalmiro abandonara la casa. El altercado habia sucedido cuando Damaris era apenas una nina y su hermano Miguel acababa de nacer. Una madrugada lluviosa, el hombre habia regresado a dormir pasado de copas. Irreconocible y enojado ante la indiferencia de su esposa, le confeso que se habia acostado con Joanne, una extranjera para la cual trabajaba haciendo jardineria en una de las villas de Orchid Bay. Loco y aturdido por el ron, le grito a su mujer que no volveria porque se mudaria con su amante al dia siguiente. Y cuando todos pensaron que Marisa se tenderia a llorar y lo perdonaria, ella tomo las cosas de Dalmiro y las arrojo, una a una, fuera de la casa. No le importo su estado ni el que diran. El griterio se esparcio como la polvora y alerto a los vecinos que no se perderian otro espectaculo, igual o mejor, al que estaban acostumbrados. De a poco, fueron apareciendo detras de las ventanas, para disfrutar del show de los Penaloza. —!Se me larga de aqui! ?oyo? —le grito desencajada desde la puerta. —Pero claro que me largo, cono. !Vieja loca! —respondio el, balanceandose de aca para alla con las pocas cosas que sus manos pudieron juntar. Despues de anos y anos de infamias, golpes y sobre todo verguenzas, Marisa por fin habia logrado defenderse y poner punto final. La mujer, con casi treinta y seis anos y en la flor de su vida, comenzo a trabajar en el hotel por recomendacion de dona Margarita, su mejor amiga y madrina de Damaris. A partir de aquel momento, su mente se expandio hacia otros horizontes. Su actitud cambio completamente; era otra persona. Entendio que su independencia economica y la ayuda de su hija mayor era todo lo que necesitaba para salir adelante. No paso mucho tiempo hasta que Dalmiro se arrepintiera y regresara pidiendo disculpas. Luego de rogar, en vano, el perdon de Marisa, se mudo a Gaspar Hernandez con su familia y jamas nadie volvio a saber de el. Los anos pasaron. La vida y la rutina se acomodo: Damaris, cuidando a sus hermanos y yendo del liceo[6] a la casa. Las vacaciones con los amigos y los primos en El Breton. Las risas, las tardes largas y los bailes bajo la lluvia. Hasta que una manana soleada, uno de sus hermanos amanecio volando de fiebre y ella, luego de dejar a los dos mas chicos en lo de dona Margarita, se monto a una guagua[7] y se dirigio al hospital de Cabrera. Braulin estuvo internado mas de un mes sin que ningun medico supiese que lo afectaba. El dia en que el doctor Suarez Alcequiez les informo que estaba casi seguro de que el nino sufria de malaria y que, segun sus calculos, el cuadro estaba demasiado avanzado, las mujeres creyeron morir. Les dijo que, la unica y ultima esperanza, era que el nino fuese trasladado al hospital General de Nagua donde contaban con mas recursos. Y asi, los planes cambiaron y ya nada fue igual. —?Que haremos ahora? —sollozaban madre e hija, mientras aguardaban los partes medicos sentadas en un banco de madera de la sala de espera. El doctor aclaro que, a pesar de sus esfuerzos, traer la medicina que Braulin necesitaba se estaba complicando cada vez mas. No solo por razones economicas, sino tambien burocraticas; demasiados papeles y dinero. No habia otra manera: Braulin seria traslado inmediatamente a Nagua. Al cuadro complicado se le sumo una deshidratacion importante y una insuficiencia renal. Marisa no tuvo mas opcion que pedir permiso en el hotel para ausentarse y acompanar a su hijo. Hasta el momento Damaris, en complicidad con las enfermeras y doctores, cuidaba a su hermano desde muy temprano para luego cambiar el turno con su madre, quien se quedaba por las noches. Era mas que obvio que en Nagua no tendria los mismos privilegios y que dicho viaje requeriria de la presencia de Marisa constantemente. El gerente general del hotel le dejo bien en claro cual era la situacion. No habia mucho que pensar; no trabajaba, no cobraba. Fue asi que Marisa, lejos de abandonar a su hijo, partio hacia Nagua esperando y rogandole a Dios que al regresar contara con aquel puesto laboral. Damaris quedaba a cargo de Juan y Miguel, abandonaba el liceo y comenzaba a trabajar algunas horas en un salon de belleza en La Catalina. Se dedicaba a su casa y a sus hermanos mientras que su mama acompanaba a Braulin. Pero… la vida volvio a poner a prueba a la familia. Un mediodia caluroso, pesado y fatigoso, el tio Rosario Penaloza se apeo rapidamente de la pasola[8] y le trajo la noticia mas triste. Braulin no habia sobrevivido. Su madre acababa de llamarlo por telefono y le habia pedido que Damaris hablara con el pastor Lucero para acordar los detalles de su velatorio. La muchacha dejo a los pequenos solos en la casa, corrio en busca del religioso y se ocupo del sepelio de su hermano. ?Estaba preparada para aquello? Por supuesto que no. Damaris poco recordaba de su padre. Tenia presente algunos momentos que habian pasado juntos, pero no mucho mas. Ni siquiera habian quedado las fotos. Ningun recuerdo de el y de su paso por sus vidas quedaba en la casa de la familia. Sonrio avergonzada mientras se quitaba el labial de la boca. Casualmente, o no, habia encontrado un companero igual o peor que su padre. Quizas, como dicen, la manzana no se cae muy lejos del arbol. Sin embargo, con el pequeno Braulin era diferente. De el si tenia muchos recuerdos, fotos, sonidos, aromas. Braulin era dos anos mas chico que ella y con quien habia compartido no solo la habitacion, sino muchisimas aventuras durante los primeros anos de infancia. Si cerraba los ojos y volaba hacia la playa, podia verlo saltar las olas del mar con una sonrisa gigante en el rostro. Con los ojos iguales a los de su hermana; de un verde esmeralda magico y particular iluminando sus gestos.

  • Los caidos de Carlos Manuel Alvarez

    https://gigalibros.com/los-caidos.html

    En Los caidos, novela ambientada en la Cuba contemporanea, asistimos al desmoronamiento de una familia cuyos miembros, sin saber realmente como, han acabado convirtiendose en adversarios que comparten el territorio del hogar. Mariana sufre ataques epilepticos y ya no es el elemento aglutinador del hogar. Diego, el hijo menor, esta a punto de terminar el servicio militar, alimentando su resentimiento contra la mentira de su epoca, Armando debe lidiar con sus inamovibles convicciones socialistas, las pequenas corruptelas de sus empleados y el hecho de que su hija mayor, Maria, haya abandonado los estudios en busca de unas condiciones de vida dignas. Compuesta a cuatro voces con una naturalidad solo al alcance de los grandes narradores, Carlos Manuel Alvarez se confirma entre ellos.

  • La catedratica de Maria Lopez Villarquide

    https://gigalibros.com/la-catedratica.html

    Esta es la apasionante e ignorada historia de Luisa de Medrano, la primera mujer que fue catedratica, nada menos que en el siglo XVI y en la Universidad de Salamanca, el centro del saber mas prestigioso del
    mundo hispano. Todo en la vida de Luisa fue extraordinario: hija de aristocratas, enseguida llamo la atencion de la reina Isabel la Catolica, quien la reclamo a su lado para que se educara en la corte con sus hijas Juana y Catalina y quien, a la vista de sus dotes, favorecio que fuera la primera mujer admitida en Salamanca. En estos tiempos en los que tanto se habla de empoderamiento femenino, el ejemplo de la tenaz Luisa Medrano merece el reconocimiento que se le ha negado durante cinco siglos.