• libro contigo siempre - Katherinne Alvarez

    https://gigalibros.com/contigo-siempre-amores-que-curan-1.html

    Huerfana y a sus quince anos; fue entregada, por su tio, a un hombre miserable, el cual la trato como a una cualquiera, sometiendola y obligandola a hacer cosas de las cuales, muchas, nunca las diria. Sin embargo, un dia, cuando estaba a punto de brindar de nuevo sus servicios, un percance le dio su pase de salida, la tan ansiada libertad que una vez se le arrebato. Pero no solo eso sera lo que encontrara, ya que, en el afan por conservar su libertad y hallar la paz que tanto necesita, el destino la conducira hasta un paraje escondido, en donde --y cuando menos lo espera--, el amor tocara a la puerta de su tan lastimado corazon. El mismo amor que traera consigo la viva promesa de ayudarla a salir del infierno en donde, por tanto tiempo, vivio. No obstante, ?estara dispuesta a abrirle su corazon?, ?podra el amor curar todo el dolor?

  • CONTIGO, SIEMPRE | SARAH DESSEN | Casa del Libro

    https://www.casadellibro.com/libro-contigo-siempre/9788420453705/11925099

    Sinopsis de CONTIGO, SIEMPRE ... De la autora bestseller del New York Times, una preciosa novela sobre una que decide creer, pese a todo, en el amor. Louna es ...

  • Contigo, siempre (Sin límites) Tapa blanda - Libros - Amazon.es

    https://www.amazon.es/Contigo-siempre-l%C3%ADmites-Sarah-Dessen/dp/8420453706

    Contigo, siempre (Sin límites) : Dessen, Sarah, Simo Perales, Victoria: Amazon.es: Libros.

  • Contigo, siempre | Penguin Libros ES

    https://www.penguinlibros.com/es/novela-romantica-juvenil/7241-libro-contigo-siempre-9788420453705

    De la autora bestseller del New York Times, una preciosa novela sobre una que decide creer, pese a todo, en el amor.

  • Reseña | Contigo, siempre, Sarah Dessen - Promesas de Amor

    http://florecilladecereza.blogspot.com/2021/02/resena-contigo-siempre-sarah-dessen.html

    24 feb 2021 — En esta ocasión ha sido el turno de Contigo, siempre, un libro lleno de amor, pena y dolor, pero con un punto de esperanza que nos lo hará ...

  • Contigo, siempre - Libro de Sarah Dessen - Lecturalia

    https://www.lecturalia.com/libro/104088/contigo-siempre

    Louna es hija de una reconocida organizadora de bodas, y ha visto celebraciones de todo tipo: en la playa, en mansiones, en hoteles, en clubs de campo.

  • Contigo, siempre - Sarah Dessen - Babelio

    https://es.babelio.com/livres/Dessen-Contigo-siempre/117332

    Críticas (3), citas (6) extractos de Contigo, siempre de Sarah Dessen. ... Contigo, siempre par Dessen ... Comprar este libro en papel, epub, pdf en ...

  • CONTIGO SIEMPRE - DESSEN SARAH

    http://quelibroleo.com/contigo-siempre

    ¿Estará Louna preparada para volver a creer en el amor? Edad recomendada: a partir de 12 años. Información del libro. Género ...

  • Contigo, siempre, Sarah Dessen - El blog de Sara Lectora

    https://www.elblogdesaralectora.com/2021/02/contigo-siempre-sarah-dessen.html

    15 feb 2021 — Las portadas de sus últimos libros en el sello Alfaguara son muy bonitas, coloridas, divertidas, y eso esperaba encontrarme entre sus ...

  • contigo, siempre - dessen, sarah - Librería Luces

    https://www.librerialuces.com/es/libro/contigo-siempre_641971

    CONTIGO, SIEMPRE · Artículos relacionados · Otros libros del autor · Boletín de Novedades · Contacto · Páginas legales · Atención al cliente · ¿Que son las Cookies?

  • CONTIGO, SIEMPRE - SARAH DESSEN - 9788420453705

    https://www.agapea.com/Sarah-Dessen/Contigo-siempre-9788420453705-i.htm

    Comprar el libro Contigo, siempre de Sarah Dessen, ALFAGUARA EDITORIAL (9788420453705) con ENVÍO GRATIS desde 18 € en nuestra librería online Agapea.com; ...

  • Ahora que te vas de Eva Blanch

    https://gigalibros.com/ahora-que-te-vas.html

    A lo largo de un dia, dos mujeres -Ruth y Andrea- conversan y repasan la vida de la primera, mientras Andrea se enfrenta a unos sentimientos que luchaba por olvidar. El titulo hace referencia por un lado al viaje fugaz que hace la protagonista y por otro lado alude a su menstruacion, pues es el elemento que la autora ha elegido para vertebrar la narracion. A traves de distintos episodios relacionados con su regla, Ruth reflexiona acerca de las diferentes fases de su vida y como han influido en su cuerpo. No es una novela de formacion pero si de primeras veces, pues en ella se narran muchas de las primeras experiencias vitales de la protagonista.

  • La musica del viento de Jordi Sierra I Fabra

    https://gigalibros.com/la-musica-del-viento.html

    Un periodista encuentra en una alfombra traida de la India un mensaje del nino que la ha tejido. Es una peticion de socorro, un grito desesperado, y no puede permanecer ajeno a el. Aunque millones de ninos son explotados en el mundo, el mensaje tiene un nombre, Iqbal, y una procedencia: la ciudad de Madurai.

  • En tan solo un instante (Serendipity 3) de Moruena Estringana

    https://gigalibros.com/en-tan-solo-un-instante-serendipity-3.html

  • Tras el desvario del amor (Sexo, amor y rock ‘n’ roll 2) de J. A. Silva

    https://gigalibros.com/tras-el-desvario-del-amor-sexo-amor-y-rock-8216-n-8217-roll-2.html

    La vida de Leo es una autentica tortura ahora que no esta Liliana. Al enterarse de que ha sido enganada, la chica se va, sin darle la oportunidad a Leo de explicar lo ocurrido.
    Ni siquiera el puede recordar lo sucedido. En su mente todo esta confuso, nada tiene sentido y se encierra en la soledad por el dolor que siente al haber perdido a su amada.
    Liliana, en busca de cobijo, vuelve a la ciudad con sus padres. Alli descubre que nada es como antes y su vida comienza a ir de mal en peor.
    Los dos mundos que antes unio el destino se separan como si de un juego de ninos se tratase. Y aunque la llama intenta apagarse, no hay retorno a la conciencia tras el desvario del amor.

  • Lady Sarah (Lady`s 2) de Jane Mackenna

    https://gigalibros.com/lady-sarah-lady-s-2.html

    Desde que Sarah conocio a James el cunado de su hermana Brianna, se enamoro perdidamente, pero su amor no era correspondido, por lo que al ver su amor despreciado, toma una decision drastica matando asi cualquier posibilidad.
    James por su parte conoce a Helen McBree de quien se enamora, luego de pensar que no volveria a amar a otra mujer que no fuera Brianna, su cunada.
    Sin pensarlo demasiado se casa con ella y asi comienza lo que el piensa sera un amor de esos que duran para siempre, conoce la felicidad y en vispera de su primer hijo, la vida le arrebata a la mujer que ama, sumiendolo en la pena y el dolor.
    Pero los caminos de James y Sarah se volveran a cruzar cuando ella decida tras la muerte de su esposo, dedicar su vida a Dios.
    James ira por ella en un intento por resarcir el dano ocasionado en el pasado.
    ?Lo hara por sentimiento de culpa? ?Podra salvar a Sarah de otra errada decision? Ambos descubriran que hay que perderse para encontrarse.

  • Belleza y venganza (Rosa blanca 2) de Laura A. Lopez

    https://gigalibros.com/belleza-y-venganza-rosa-blanca-2.html

  • Las tres Marias de Karen Maiotto Vega

    https://gigalibros.com/las-tres-marias.html

    .Tres mujeres.
    Tres vidas que el destino decidio a cruzar.
    Tres mundos tan distintos como complejos donde abunda en cada uno de ellos diferentes motivos de lucha constante.
    Ellas no pueden consigo mismas pero siempre estan para ayudar a la otra.

  • Nueva York de un plumazo de Mateo Sancho

    https://gigalibros.com/nueva-york-de-un-plumazo.html

    Una novela de auto ficcion marica. Un viaje de migracion de cama en cama.

  • Calavera de azucar de Rocio Verdejo

    https://gigalibros.com/calavera-de-azucar.html

    Si Victoria pudiese clasificar los dias mas importantes a lo largo de toda su vida, este, definitivamente seria uno de los mas especiales. La oportunidad que habia estado esperando, por lo que siempre habia estado trabajando, finalmente, se presentaba de una manera casi tangible frente a ella. Todo el esfuerzo que habia realizado, todas las noches de estudio, practica y la disciplina, estaban a punto de dar resultados. Victoria Alba es una chica de 22 anos de edad, profesora de violin en una academia de Ciudad de Mexico, una de las mas importantes, y la cual acumula el mayor talento juvenil de todo el pais. Su compromiso con ellos, ha sido arduo, caracterizado por el sudor y las lagrimas, entregando cada dia para desarrollar el mayor talento y destrezas de sus estudiantes, los cuales, la miran y la respetan a pesar de su corta edad. Victoria habia destacado como una violinista virtuosa desde pequena, con tan solo 16 anos de edad, ya estaba interpretando algunas de las obras mas intimidantes para aquellos que tenian anos de estudio, asi que, simplemente era un talento que venia en su sangre, por lo que, se habia convertido en el orgullo de sus padres y un ejemplo a seguir para cada uno de sus alumnos. Sobre ella se habian escrito muchos reportajes, se habia invitado a Victoria a muchos programas de television y radio, ya que, era una verdadera estrella de la musica clasica, y sus dedos parecian volar como colibries sobre el diapason de su violin Stradivarius. Su desempeno como profesora, la habia hecho ganar un reconocimiento tremendo entre los grandes maestros del pais y el mundo, por lo que, el nombre de Victoria Alba comenzo a hacerse cada vez mas habitual entre los conocedores de la musica. Esta siempre habia tenido la conviccion de que tarde o temprano perteneceria a la filarmonica de Berlin, era su sueno, interpretar con los musicos mas destacados e imponente es del mundo, los cuales parecian converger todos de manera innegable en esta agrupacion musical que interpretaban las piezas mas importantes de la historia. Parecia que Ciudad de Mexico se estaba haciendo pequena para Victoria Alba, quien, ante la posibilidad de irse a Alemania, Tendria que dejar atras todo lo que habia construido con tanto esfuerzo. Esto era lo que generaba la duda en el corazon de la chica, la cual, no queria abandonar a sus estudiantes, los cuales, realmente la necesitaban, pues nadie podia proveerles tanta dedicacion y entrega como lo hacia ella. Parecia que toda su vida habia estado basada en la duda, y ni siquiera habia tenido tiempo para el amor, ya que, Victoria se habia dedicado unica y exclusivamente a desarrollarse profesionalmente como una de las mejores ejecutantes del violin. A sus 22 anos, habia superado a muchos, pero aun consideraba que le quedaba un camino muy largo por recorrer, y una pareja simplemente la retrasaria. Sabia que esto implicaba salidas, citas, reuniones familiares, o un posible compromiso, y esta, no estaba dispuesta a sacrificar una sola hora libre de su tiempo para algo de distraccion, para ella, la disciplina era lo mas importante. Pocos, a los 22 anos de edad tenian un futuro tan prometedor en el mundo de la musica clasica, ya que, no era un mercado tan comercial, pero cuando se lograba un posicionamiento adecuado, basicamente, la vida estaba resuelta. No iba a tener el exito y la fama, los lujos y los excesos que un rapero o un cantante de reggaeton, pero tendria la vida que siempre habia deseado acompanada de los musicos mas virtuosos del planeta, y esto, era algo que no podia compararse con la banalidad y simplicidad de la cultura pop moderna. No tenia nada que ver con sus amistades, Victoria tenia una personalidad Bohemia, adoraba leer libros, pasar tiempo en la biblioteca, ir al parque a disfrutar de leer sus novelas favoritas. Escucha musica clasica antes de ir a dormir y ejecutar el violin durante mas de ocho horas al dia, ya que, esta seria la unica forma de alcanzar el nivel de perfeccion que ella estaba buscando. Parece que era una bendicion, ya que, escuchar aquellas notas perfectamente ejecutadas por las manos de aquella revelacion musical, era simplemente glorioso. Las pocas amigas que tenia, eran del mismo circulo de musica clasica, pero definitivamente, la mas importante de ellas era Paulina, la cual, era una chelista de la orquesta sinfonica de Mexico, la cual, habia desarrollado una amistad tan cercana con victoria que practicamente eran hermanas. Paulina Alonso, fue el nombre que vio victoria en su telefono movil mientras arregla su cabello para dar los ultimos ajustes antes de salir. Esta, ignoro la llamada para terminar de perfeccionar su peinado, tenia que ser la noche perfecta, ya que, de lo contrario, cualquier error podria significar el fracaso de su vida. Solo unas semanas atras, Victoria habia recibido una oferta para viajar a Berlin y ser parte de la filarmonica de Berlin, alli, seria parte del conjunto de violines principales, y esta, seria la noche donde mostraria a los directivos de aquella organizacion, cual era su nivel tecnico. Esta noche, tendria la posibilidad de interpretar a Tchaikovsky, Uno de sus compositores favoritos, pero uno de los mas desafiantes para ejecutar, ya que, el nivel tecnico iba a un punto en el cual, ella se sentia muy presionada. Cualquier minimo error podria estropear por completo una pieza perfecta. Pero no hay nadie mejor preparado que Victoria Alba para poder interpretar una de estas piezas, por lo que, hace sus ultimos calentamientos para estar lista para la noche. Justo despues de arreglar su cabello y tomar su violin de 1690 una vez mas, el telefono movil de Victoria comenzo a sonar nuevamente. Parecia que Paulina Alonso, estaba muy interesada en hablar con ella, asi que, finalmente decidio presionar el boton verde y contestar. --?Por que siempre es tan complicado comunicarse contigo, Victoria? Siempre tienes que estar atenta al telefono, nunca sabes cuando sera una emergencia. --Dijo Paulina un poco alterada. --Lo siento, tenia los auriculares, no me di cuenta. ?Que ocurre? ?Ya estas lista para la gran noche? --Si, precisamente te estaba llamando para preguntarte en donde nos encontraremos. Habra muchas personas importantes en ese lugar y no queria llegar sola. ?Te parece si nos vemos en el cafe de Frank a las 7:00 PM? --Si, asi tendremos tiempo de repasar algunas de las partituras. A las 7:00 estare alli. --Siempre estas pensando en estudiar, hablaba de tomarnos un cafe y relajarnos antes de la ejecucion final. ?Ya decidiste si te iras a Berlin o no? --Esta noche todo se definira, Paulina. No quiero pensar demasiado en ello, ya que, si lo logro, estare dejando atras todo lo que he conseguido con esfuerzo, pero si fracaso, me perseguira ese fantasma durante el resto de mi vida. --Respondio victoria de una forma bastante consternada. --OK, disculpame por abordar el tema. Creo que no es momento para conversar sobre eso. Te veo en un rato. La llamada termino, eran aproximadamente las 6:00 de la tarde, por lo que, Victoria tendria tiempo para hacer una breve revision de algunos de los temas mas complicados que interpretaria aquella noche. Tomo su estuche negro, lo abrio con mucho cuidado, ya que, recien habia reemplazado los broches de seguridad. Al abrirlo, alli estaba su mejor amigo, un violin Stradivarius hecho a mano de los anos 1600, el cual, la habia acompanado desde que era una nina, ya que, su abuelo, un influyente politico de la ciudad, lo habia conseguido gracias a sus contactos en Europa. Desde el momento en que habia recibido este violin, todos los espiritus de los ancestros que habian pasado por aquel instrumento historico, parecian haberse canalizado a traves de las manos de Victoria Alba, ya que, desde que comenzo a practicar, nunca mas se habia detenido. Era una pasion fogosa, indetenible, la cual, la hacia sentir viva, sin ningun tipo de miedos, cuando tenia el instrumento, simplemente se transformaba. La vida de esta chica de 22 anos de edad, giraba en torno a la musica, al violin, a las notas estructuradas en una arquitectura temporal perfectamente armada, la cual, llegaba directamente hasta el punto mas profundo de las emociones de un ser humano. La musica era capaz de hacer llorar a las personas, alegrarles, llevarlas a traves de una montana rusa de sensaciones y pensamientos, y todo esto, era capaz de canalizarlo Victoria Alba a traves de sus ejecuciones. Siempre la disciplina, el trabajo duro y la perfeccion eran parte de su ejecucion. Habia tocado muchas veces en el auditorio nacional de Ciudad de Mexico, pero esta era la primera vez que sentia tantos nervios al presentarse alli. Habia muchas personas de la industria musical que se darian cita, politicos, miembros del gabinete de Ciudad de Mexico, asi que, era un concierto importante, pero ninguno era mas importante que otro, todos debian ser perfectos. La entusiasmada chica, llena de suenos, repleta de ilusiones e infestada de expectativas, separa frente al espejo para hacer los ultimos retoques a su maquillaje. Es perfeccionista, meticulosa, obsesiva, todo debe estar en su lugar en el momento exacto, nada debe lucir en exceso, exagerado, no debe verse simple o tratando de llamar demasiado la atencion, todo debe tener el perfecto equilibrio, como en la musica. Para esta ocasion, Victoria ha decidido recoger su cabello en un mono muy ajustado, el cual, deja ver perfectamente su rostro y no representara un problema al momento de ejecutar. Esta, ha maquillado sus ojos de forma bastante notable, ha resaltado sus pestanas, ha delineado el contorno de sus parpados, haciendo un maquillaje degradado oscuro con tonalidades moradas y negro. Esta, ha pintado sus labios en un rojo bastante provocativo, ya que, los mismos son carnosos, suaves, seductores, y este, suele ser un gancho directo a la mandibula de cualquier hombre que se acerque a ella, ya que, solo ver su perfecto rostro bien perfilado, quedan atontados, sabe muy bien como conseguir las cosas con mucho esfuerzo y disciplina, y finalmente, esta apunto de tocar las nubes por primera vez. Ya esta en la hora limite, y si quiere llegar puntual como generalmente lo hace en cada cita, necesita salir en ese preciso instante. Ya no hay tiempo para hacer arreglos, la perfeccion sobre la perfeccion, simplemente puede generar el caos absoluto, asi que, toma su bolso, verifica que tiene su movil, su monedero, y sus llaves. Adicionalmente, no puede olvidar el artefacto mas importante, el violin, el cual, introduce con mucho cuidado en un estuche elaborado con el mejor terciopelo azul en su interior. Lo asegura, cierra sus ojos, y trata de conectar su energia con aquel instrumento, ya que, es a traves de el que podra conseguir el futuro con el que siempre habia sonado. Introduce las llaves en la cerradura de su puerta, gira el picaporte y finalmente da los primeros pasos hacia un mundo que le esta esperando para devorarlo. Se siente llena de vida, viva, cargada de una energia inquebrantable que absolutamente nadie puede modificar. Nada puede salir mal, su corazon late con fuerza, siente esa sensacion de plenitud en su pecho, ya que, es una noche con la que habia sonado muchas veces. Ve el reloj, y son aproximadamente las 6:45 de la tarde, por lo que, debe darse prisa para llegar al cafe donde se encontraria con Paulina. Esta, suele ser muy ansiosa tambien, asi que, no le gusta esperar. Victoria vivia en un edificio de cuatro niveles, una cadena de bloques donde alquilaba temporalmente. Caminar a traves de aqui es largo pasillo con iluminacion blanca y barandillas de color marron, siempre era un reto para ella, ya que, trataba de hacer el menor ruido posible para no alertar a una de sus vecinas mas cercanas. Teresa Ramirez, vivia en el 3-A, y era una de esas personas que, por su imprudencia, habia terminado alejando a todos, inclusive a sus familiares. La sexagenaria, solo queria un poco de amistad, pero sus comentarios, siempre resultaban siendo incomodos, ante lo que, Victoria hacia lo imposible por tratar de evadir los encuentros con esta anciana mujer. Camina despacio hasta las escaleras, pero puede escuchar, finalmente, como la puerta del departamento de Teresa, se abre abruptamente, alertando a Victoria de que no ha logrado con exito salir sin la interrupcion habitual. --!Victoria, que bella estas! ?Esta noche tienes concierto? --Pregunto Teresa apoyada en un baston. --Hola, Teresa. Si, como veras, tengo concierto. --Respondio Victoria de una forma ironica, mientras mostraba con sus ojos el violin en su mano. --Esta noche seguramente lo haras espectacular como siempre. Oh, por cierto, queria pedirte un favor, Victoria. Claro, si no es de mucha molestia. Los ojos de Victoria de manera inconsciente e involuntaria, voltearon hacia arriba de una manera molesta, ya que, siempre habia algo con Teresa. No podia dejarla ir sin pedirle algun favor, solicitarle algun consejo, preguntarle algo totalmente innecesario. La necesidad de contacto social de aquella mujer de 71 anos de edad, siempre era una molestia para ella. --Dime, Teresa. ?En que puedo ayudarte esta vez? --Dijo la chica, mientras ponia el violin en el suelo y caminaba hacia el departamento de la anciana. --Te dare un poco de dinero para que, por favor, me compres unos analgesicos. El dolor de mi pierna ya es insoportable y ya no tengo la fortaleza para ir hasta la farmacia yo misma. Se que puedes comprarlo cuando vengas de regreso, no los necesito con urgencia. La mujer le dio un fajo de billetes a la chica, y esta, supo instantaneamente que era demasiado dinero para unos simples analgesicos, ante lo que, Victoria reacciono inmediatamente. --Es mucho dinero, Teresa. Solo necesito esto… Ten cuidado con el dinero, o alguien va a robarte de una manera descarada en algun momento. --Dijo Victoria, mientras separaba el dinero y regresaba una gran porcion a la anciana. --Por eso es que solo confio en ti, Victoria. Eres una chica honesta y muy amable. Gracias y disculpa la molestia. Espero que te vaya excelente esta noche. La sonrisa de aquella mujer, era muy tierna, le recordaba inclusive a la de su propia abuela, y esto, la habia retrasado algunos minutos, por lo que, Victoria cayo en cuenta rapidamente de que el tiempo no iba esperar por ella, asi que, decidio correr directamente hacia las escaleras. Se inclino para tomar su estuche y bajo rapidamente hasta llegar a la planta baja. Tuvo problemas para abrir la puerta principal, su llave, siempre generaba problemas en el momento menos indicado. Despues de una breve lucha con la puerta principal, y algun par de patadas para que esta cediera finalmente, la chica logro salir. Corre rapidamente hacia su coche, el cual, se encuentra aparcado en un estacionamiento abierto, donde se encuentran el resto de los vehiculos de los que habitan en aquel lugar. Se trata de un grupo de edificios, los cuales forman una especie de semicirculo, rodeando el estacionamiento en donde se encuentra a la intemperie todos los vehiculos. Esta, coloca el estuche en el suelo, busca las llaves en su bolso, finalmente, extrae el manojo de llaves de su coche, abre rapidamente, deja caer el estuche en el asiento del acompanante, posteriormente su bolso, y entra al vehiculo. Respira profundamente como si se tratara de algo completamente imposible de lograr en cada ocasion que sale. Teresa suele retrasarla con mucha frecuencia, y nunca puede salir silenciosamente o con tranquilidad, ya que, los retrasos siempre forman parte de la ecuacion. Pero este es un dia especial, asi que, la chica respira profundamente, ajusta el espejo y ve que su maquillaje aun este intacto. Trata de cerrar la puerta, pero en ese momento, Victoria descubrio que el miedo que estaba experimentando, podria transformarse en panico, ya que, se desarrollo una escena para la que nadie esta preparado. Cuando la puerta golpeo contra el vehiculo para cerrarse, algo interrumpio, ya esta, al darse vuelta, la imagen que observo, la dejo petrificada. Era un hombre corpulento, de casi 2 metros de altura, llevaba una chaqueta negra, pantalon del mismo color y botas rusticas. En sus manos, lleva guantes, parece que no quiere dejar huellas, pero lo mas espeluznante, era que no pudo ver su rostro, ya que, este lo habia cubierto con una pantimedia. --!Dame el dinero y sal del coche ahora mismo, perra! --Dijo el hombre, mientras desenfundaba un arma con un canon tan grande e intimidante, que la chica casi sufre un ataque cardiaco en el momento.

  • Elena sabe de Claudia Pineiro

    https://gigalibros.com/elena-sabe.html

    Se trata de levantar el pie derecho, apenas unos centimetros del suelo, moverlo en el aire hacia adelante, tanto como para que sobrepase al pie izquierdo, y a esa distancia, la que sea, mucha o poca, hacerlo bajar. Apenas de eso se trata, piensa Elena. Pero ella piensa, y aunque su cerebro ordena movimiento, el pie derecho no se mueve. No se eleva. No avanza en el aire. No vuelve a bajar. No se mueve, no se eleva, no avanza en el aire, no vuelve a bajar. Eso apenas. Pero no lo hace. Entonces Elena se sienta y espera. En la cocina de su casa. Tiene que tomar el tren que sale para la Capital a las diez de la manana; el siguiente, el de las once, ya no le sirve porque la pastilla la tomo a las nueve, entonces piensa, y sabe, que tiene que tomar el de las diez, poco despues de que la medicacion logre que su cuerpo cumpla con la orden de su cerebro. Pronto. El de las once no, porque entonces el efecto de la medicacion habra declinado hasta desaparecer y ella estara igual que ahora, pero sin esperanza de que la levodopa actue. Levodopa se llama eso que tiene que circular por su cuerpo una vez disuelta la pastilla; conoce el nombre desde hace un tiempo. Levodopa. Asi le dijeron, y ella misma lo anoto en un papel porque sabia que no iba a entender la letra del medico. Que la levodopa circule por su cuerpo, sabe. Eso es lo que espera, sentada, en la cocina de su casa. Esperar es todo lo que puede hacer por el momento. Cuenta calles en el aire. Recita nombres de calles de memoria. De atras para adelante y de adelante para atras. Lupo, Moreno, 25 de Mayo, Mitre, Roca. Roca, Mitre, 25 de Mayo, Moreno, Lupo. Levodopa. Solo la separan cinco cuadras de la estacion, no es tanto, piensa, y recita, y sigue esperando. Cinco. Calles que todavia no puede andar con sus pasos esforzados aunque si repetir sus nombres en silencio. Hoy no quiere encontrarse con nadie. Nadie que le pregunte por su salud ni que le de el pesame tardio por la muerte de su hija. Cada dia se le aparece alguna persona que no pudo velarla o no pudo estar en el entierro. O no se atrevio. O no quiso. Cuando alguien muere como murio Rita, todos se sienten invitados a su funeral. Por eso las diez no es una buena hora, piensa, porque para llegar a la estacion tiene que pasar por delante del banco y hoy se pagan las jubilaciones, entonces es muy probable que se cruce con algun vecino. Con varios vecinos. Aunque el banco abra recien a las diez, cuando su tren este entrando en la estacion y ella con el boleto en la mano se acerque al borde del anden para tomarlo, antes de eso, Elena sabe, ya va a encontrar jubilados haciendo la cola como si tuvieran miedo de que la plata alcanzara solo para pagarle a los que primero llegan. Solo podria evitar el frente del banco dando una vuelta manzana que su Parkinson no le perdonaria. Ese es el nombre. Elena sabe desde hace un tiempo que ya no es ella la que manda sobre algunas partes de su cuerpo, los pies por ejemplo. Manda el. O ella, y se pregunta si al Parkinson habria que tratarlo de el o de ella, porque aunque el nombre propio le suena masculino no deja de ser una enfermedad, y una enfermedad es femenina. Como lo es una desgracia. O una condena. Entonces decide que lo va a llamar Ella, porque cuando la piensa, piensa <>. Y puta es ella, no el. Con perdon de la palabra, dice. Ella. El doctor Benegas se lo explico varias veces pero Elena todavia no termina de entender; si entiende lo que tiene porque lo lleva en el cuerpo, pero no algunas de las palabras que usa el medico. La primera vez estaba Rita presente. Rita, que hoy esta muerta. Les dijo que el Parkinson es una degeneracion de las celulas del sistema nervioso. Y a las dos les cayo mal la palabra. Degeneracion. A ella y a su hija. El doctor Benegas seguramente se dio cuenta, porque enseguida trato de explicarles. Y dijo, una enfermedad del sistema nervioso central que degenera, o hace mutar, o cambia, o modifica de manera tal algunas celulas nerviosas que dejan de producir dopamina. Y Elena se entero entonces de que cuando su cerebro ordena movimiento, la orden solo puede llegar a sus pies si la dopamina la lleva. Como un chasqui, penso aquel dia. Entonces el Parkinson es Ella, y la dopamina el chasqui. Y el cerebro nada, piensa, porque sus pies no lo escuchan. Como un rey derrocado que no se da cuenta de que ya no gobierna. Como el emperador sin traje del cuento que le contaba a Rita cuando era chica. Rey derrocado, emperador sin traje. Y ahora esta Ella, no Elena sino su enfermedad, el chasqui y el rey derrocado. Elena repite sus nombres como antes repitio los de las calles que la separan de la estacion; esos nombres comparten su espera. De atras para adelante y de adelante para atras. Emperador sin traje no le gusta porque si no lleva traje esta desnudo. Prefiere rey derrocado. Espera, repite, combina de a pares: Ella y el chasqui, el chasqui y el rey, el rey y Ella. Prueba otra vez, pero los pies siguen ajenos, ni siquiera desobedientes, sordos. Pies sordos. A Elena le encantaria gritarles, pies muevanse de una vez por todas, hasta carajo les gritaria, muevanse de una vez por todas, carajo, pero sabe que seria en vano, porque sus pies no escucharian tampoco su voz. Por eso no grita, espera. Repite palabras. Calles, reyes, otra vez calles. Incluye palabras nuevas en su rezo: dopamina, levodopa. Intuye que la dopa de dopamina, y la dopa de levodopa, deben ser la misma cosa, pero solo intuye, no tiene certeza, repite, juega, deja que su lengua se trabe, espera, y no le importa, solo le importa que el tiempo pase, que esa pastilla se disuelva, circule por su cuerpo hasta sus pies y estos se enteren, por fin, de que tienen que ponerse en marcha. Esta nerviosa, lo cual no es bueno, porque cuando se pone nerviosa la medicacion tarda mas en actuar. Pero no puede evitarlo. Hoy va a jugarse la ultima carta para tratar de averiguar quien mato a su hija, hablar con la unica persona del mundo a la que cree que puede convencer de que la ayude. A cambio de una deuda lejana en el tiempo, casi olvidada. Va intentar cobrar esa deuda, aunque Rita, si estuviera, no estaria de acuerdo, la vida no es un trueque, mama, hay cosas que se hacen porque si, porque Dios manda. No va a ser facil, pero lo va a intentar. Isabel se llama la mujer a la que busca. No esta segura de si se acordara de ella. Cree que no. De Rita si, le manda una postal cada fin de ano. Tal vez no sepa de su muerte. Si nadie le dijo, si no leyo el unico aviso funebre que pusieron recien dos dias despues del entierro en nombre del colegio parroquial donde trabajaba Rita, el cuerpo directivo y docente, alumnos y padres acompanan a Elena en este momento tan dificil, si ella no la encuentra al fin de ese dia, seguramente este diciembre esa mujer que Elena hoy busca enviara una postal dirigida a un muerto, deseandole feliz Navidad y un prospero Ano Nuevo. De Rita se acuerda, pero de ella, de Elena, Elena piensa, seguramente no. Y si se acordara no la reconoceria, asi doblada, con ese cuerpo viejo que no se corresponde con los anos que tiene. Sera su tarea, le va a explicar quien es y por que esta alli, frente a ella, cuando la enfrente. Le va a contar de Rita. Y de su muerte. Aunque sea le dira lo poco que entiende en medio de todo lo que le contaron. Elena sabe donde encontrar a Isabel, pero no como llegar. Alli donde ella misma la llevo hace veinte anos, siguiendo a Rita. Si la suerte esta de su lado, si Isabel no se mudo, si no murio como murio su hija, alli la encontrara, en una vieja casa en Belgrano, con puerta de madera pesada y herrajes de bronce, justo al lado de unos consultorios medicos. No se acuerda del nombre de la calle, si se acordara al menos de la pregunta que le hizo entonces su hija, ?vos escuchaste alguna vez una calle que se llame Soldado de la Independencia, mama?, entonces sabria. Pronto va a saber, porque si se acuerda de que es a una o dos cuadras de la avenida que corre bordeando Buenos Aires desde Retiro hasta la General Paz, cerca de una plazoleta, y de las vias de un tren. No vieron el tren, pero escucharon su marcha y Rita pregunto, ?que ramal es?, pero Isabel no contesto, porque lloraba. Para saber como volver a viajar, esta segunda vez, casi veinte anos despues, Elena fue a la remiseria de la esquina de su casa, la que pusieron hace unos anos en el local donde antes habia estado la panaderia en la que Elena compro para su familia el pan de cada dia desde que llego al barrio, recien casada, hasta que desaparecio el pan y aparecieron los autos de alquiler. El chofer no sabia, soy nuevo, se disculpo y le pregunto al dueno. Repitio las palabras de Elena, dijo, la avenida que bordea Buenos Aires, de Retiro a la General Paz, cerca de una via, y el dueno le contesto, Libertador, y Elena que si, que se llamaba Libertador, ahora que se lo dice se acuerda, y que tenia que ir hasta Belgrano, hasta una plazoleta. Olleros, dijo otro chofer que acababa de llegar de un viaje, eso ya no estoy segura, dijo Elena, Olleros, repitio el hombre con seguridad, pero ella no se acordaba del nombre de la calle, si de la puerta de madera, y de los herrajes de bronce, de Isabel, y de su marido, poco de su marido. ?La llevamos?, le preguntaron y Elena dijo que no, que era mucho viaje, mucho gasto, que iba a ir en tren y en todo caso, si ya no podia consigo misma y su cuerpo no se animaba al subte, tomaria un taxi en Constitucion, le hacemos precio, propuso el dueno, no, gracias, contesto ella, le podemos fiar, insistio, en tren, dijo Elena, no me gustan las deudas, y no dio lugar a otra insistencia, subte cerca no la deja ninguno, senora, el de Carranza, pero de ahi tiene como diez cuadras, le dijeron, si toma taxi tenga cuidado de que no la paseen, digale al taxista que vaya derecho por 9 de Julio hasta Libertador y de ahi otra vez todo derecho hasta Olleros, bueno, no, corrigio el chofer que sabia, porque Libertador se convierte en Figueroa Alcorta, antes de llegar al Planetario se va a tener que fijar que doble a la izquierda, hasta el Monumento a los Espanoles, y que retorne Libertador, o en el Hipodromo de Palermo, aclaro el dueno, pero no deje que la paseen, ?en serio no quiere que la llevemos? Elena se fue sin responder, porque la misma pregunta ya la habia contestado antes y demasiado esfuerzo era para ella todo como para contestar dos veces lo mismo. Constitucion, 9 de Julio, Libertador, Figueroa Alcorta, Planetario, Monumento a los Espanoles, Libertador, Olleros, una puerta de madera, herrajes de bronce, una puerta, Olleros, Libertador, 9 de Julio, Constitucion. De atras para adelante, de adelante para atras. No recuerda en que lugar del rezo tiene que meter el Hipodromo. Espera, piensa, cuenta otra vez las calles. Las cinco que la separan de la estacion y las otras, las que no conoce, o no se acuerda, aquellas hacia donde va para cobrar una deuda en la que cree a fuerza de necesidad. Rey sin corona. Ella. Desde su posicion, sentada, trata de levantar el pie derecho en el aire, y el pie ahora se da por enterado y se eleva. Entonces esta lista, sabe. Apoya la palma de cada una de sus manos sobre sus muslos sentados, junta los dos pies para que sus piernas queden en un angulo de noventa grados a la altura de la rodilla, luego cruza la mano derecha al hombro izquierdo y la mano izquierda al hombro derecho, empieza a balancearse en la silla y, con el impulso, se levanta. Asi la hace levantar el doctor Benegas cuando la revisa, y ella sabe que es mas dificil de esa manera pero lo intenta cada vez que puede, practica, porque quiere estar entrenada para la proxima visita. Quiere impresionar al doctor Benegas, mostrarle que puede, a pesar de las cosas que le dijo la ultima vez que la vio, quince dias antes de que Rita apareciera muerta. Parada frente a la silla que acaba de dejar levanta el pie derecho, lo eleva en el aire, apenas unos centimetros, lo mueve hacia adelante hasta que sobrepasa el pie izquierdo lo suficiente como para que ese movimiento signifique un paso, entonces lo baja, y ahora es el turno del pie izquierdo que debe hacer lo mismo, exactamente lo mismo. Elevarse. Avanzar en el aire. Bajar. Elevarse, avanzar en el aire, bajar. De eso se trata. Apenas de eso. De caminar, para llegar a tomar el tren de las diez

  • Tres Maneras De Volcar Un Barco de Chris Stewart

    https://gigalibros.com/tres-maneras-de-volcar-un-barco.html

    En esta ocasion, Stewart comparte con el lector una de las experiencias mas insolitas de una vida ya de por si asombrosa. Todo comienza de forma fortuita cuando una amiga le ofrece un trabajo tentador: ser el patron de un velero para navegar en las islas griegas. La propuesta parece un sueno hecho realidad, si no fuera por un pequeno inconveniente: Chris no ha navegado en su vida, ni sabe por donde empezar. Con abundantes dosis de ingenio e hilarante autocritica, Chris narra su iniciacion a la vela, desde un neblinoso puerto de la costa inglesa hasta su particular odisea por aguas mediterraneas rumbo a la isla de Spetses. Y como guinda, una inolvidable peripecia a traves del Atlantico Norte por la ruta del legendario explorador escandinavo Leif Eriksson. El fino humor de Stewart, su facilidad para la anecdota, su tendencia a actuar movido por cierta vision idealista de la realidad, dan forma a un original y atractivo relato del mundo, el de un hombre amable que, desvinculado desde hace anos de la servitud de los bienes materiales, sabe disfrutar como nadie de los pequenos y grandes.

  • La quema de Cibola (The Expanse 4) de James S. A. Corey

    https://gigalibros.com/la-quema-de-cibola-the-expanse-4.html

    La novela en la que se basa la cuarta temporada de la serie de TV The Expanse.

  • Hija de la luna de Sophie Saint Rose

    https://gigalibros.com/hija-de-la-luna.html

    Greer lleva toda su vida esperando que las puertas del convento se abran y que los McMurray vayan a buscarla al fin. Su padre la habia dejado alli cuando apenas tenia dos anos y su gran ilusion era regresar al clan para conocerle. Ser hija del Laird era una responsabilidad y la madre superiora le habia ensenado bien. Estaba preparada o eso creia ella porque cuando Angus McMurray, el futuro Laird fue a buscarla, empezo a sentir cosas por el que la tomaron por sorpresa.

  • Aunque Siga Siendo Su Hermano…, Magela Gracia de Magela Gracia

    https://gigalibros.com/aunque-siga-siendo-su-hermano-8230-magela-gracia.html

    Antes me desagradaban los viernes; ahora cualquier dia era malo. Desde que Victor ya no vivia con nosotros -conmigo- los lunes se parecian a los sabados. La unica diferencia en mi vida era que tenia muy presente el sabor de los labios de aquel hombre y que por su cobardia no habia vuelto a probarlos.
    El miedo a que nuestros padres se enteraran de lo nuestro lo habia llevado a pedirle a su mejor amigo que me sedujera…
    ?Que podia pasar si llegaban a conocer lo que habia pasado mientras ellos trabajaban?
    Por eso, cuando por fin Victor no pudo controlarse y me acorralo en el bano, entre sus besos se le escaparon estas palabras:
    – Tus padres van a matarme…
    Y a mi, que en ese momento solo me importaba el rumbo que habian tomado sus manos, le respondi:
    – Para eso tienen que enterarse…
    Porque, a pesar de todo, aun seguia siendo su hermano…

  • Duelo de voluntades de Olga Salar

    https://gigalibros.com/duelo-de-voluntades.html

    Cuando el sentido del honor de un caballero se interpone al amor, cada batalla librada es decisiva.

  • La vida da muchas vueltas de Laura Martinez

    https://gigalibros.com/la-vida-da-muchas-vueltas.html

    ?Que pasa cuando el chico mas popular del instituto te propone un trato?
    Puede pasar cualquier cosa…

  • Las manos van al pan de Meg Ferrero

    https://gigalibros.com/las-manos-van-al-pan.html

    --!Perdon! --se disculpo la camarera por el leve empujon propinado sin intencion y paso de largo con prisas, sin esperar a ver si su justificacion era aceptada. !Joder! Menuda educacion. Vale que el estuviera acostumbrado a otro tipo de lugares para comer, pero esto era el colmo. La chica, que habia pasado a su lado dejando un aroma intenso a curcuma, a canela y pudiera ser que tambien a curry, le habia lanzado, de manera literal, el plato a la mesa. Lo curioso habia sido el modo de hacerlo. Habia girado de tal manera la muneca que un plato asi lanzado, sin ese giro, hubiese acabado encima del comensal, pero ella lo habia dejado con maestria justo en su sitio, aunque con un estrepitoso repiqueteo, mientras el plato terminaba de asentarse en la mesa. Quiza fue ese gesto el que lo dejo tan descolocado que ni siquiera fue capaz de decirle a la camarera lo que pensaba de su escasa educacion. Y, encima, el empujon en el hombro. Aunque tenia que aceptar que eso no le habia molestado tanto como le gustaria reconocer. !Menuda cadera! Se giro de forma casi imperceptible para no ser descubierto en su curiosa inspeccion visual. Si, aquella mujer que contoneaba su generoso trasero de forma casi infantil era justo el tipo de muchacha por el que el, en cualquier otro momento de su vida, se hubiese sentido atraido. !Mentira! Se sentia profundamente atraido. Tanto, que su miembro viril comenzo a cobrar vida propia. !Habia que joderse! ?Cuanto tiempo llevaba sin estar con una mujer? Tampoco tanto como para ponerse asi. !Mierda! En otro momento no hubiese dudado en lanzarse al ataque, insinuarse con un despliegue indecente de todos sus encantos, que eran muchos, y conseguir su numero y una cita. Una cita que, estaba seguro, ambos tardarian en olvidar. Y eso con solo ver su silueta de espaldas. Su larga melena rubia ondulada, brillante y sedosa que, hubiese jurado, llevaba recien lavada con un algun champu de rosas, otro olor que lo seducia, llamaba de manera poderosa su atencion. Su ancha y fuerte silueta lo cautivo como hacia tiempo no le sucedia. Siguio mirando un instante mas, tan solo un segundo en el que se permitio volver a ser el mismo de siempre, el hombre que el creia ser, pero desistio al momento ya que la camarera no parecia que se fuese a volver para que el pudiese apreciar su rostro. No queria parecer un imbecil embelesado por una mujer delante del resto de los comensales, que no tardarian en seguir la direccion de su pose y su curiosa mirada. Ataco sin demasiado interes el rapido bocadillo que habia pedido y... sin previo aviso, el cumulo de sensaciones del sabor de aquel mordisco lo dejo sin respiracion. Paro incluso de masticar, con todo el bocado aprisionado en el interior de la boca, para no perderse ni uno solo de los diferentes sabores y aromas que llegaban a sus fosas nasales a traves de su cavidad bucal. !No podia ser! Pero si el habia ido a un bar "de mala muerte" en busca de alimento, mas que comida, en una rapida escapada desde el hospital. ?Quien se iba a imaginar que en un restaurante de menu del dia iba a encontrarse con semejante delicatessen? !Y encima en un bocadillo! Comenzo a masticar, ahora mas relajado, con todos sus sentidos puestos en el interior de su boca. Hasta se permitio el lujo de cerrar los ojos y dejarse atrapar por el instante. !Estaba exquisito! Tenia que apuntar todos los sabores, olores y sensaciones que el bocadillo le estaba haciendo experimentar. Saco de su pequena mochila, con rapidez, una ajada libreta de cuero sujeta por una goma y con innumerables papeles con notas dentro. Incluso se excito con el sonido del "click" de su boligrafo favorito, que era el que siempre daba el escopetazo de salida para alguna de sus creaciones, para algo que el adoraba hacer, para escribir. Y eso mismo fue lo que se dedico a hacer: escribir. Mordia, masticaba con cara de placer, tragaba y escribia. !Echaba de menos su trabajo! En cuanto volviera, esa seria su primera critica. La revista gastronomica para la que trabajaba le habia dado un largo permiso, pero el echaba en falta escribir y conquistar a la gente con sus palabras y piniones. Si, el era un critico gastronomico relativamente famoso. Trabajaba en la revista Tapas, nam,nam magazine, una revista mensual del grupo editorial de revistas como Esquire, Forbes o L'Of iciel. La definian como una revista de estilo de vida y gastronomia dirigida principalmente a foodies y urbanitas adictos a la cocina, de unos treinta y cinco anos y de clase media-alta o alta. !Adoraba su trabajo! Dejo un instante el boli sobre la mesa para atacar los ultimos bocados de su comida y giro la muneca para comprobar la hora. !Joder! Tenia que irse. Se limpio de manera descuidada y recogio todas sus cosas. La sonrisa en la cara, al salir del establecimiento, le recordo por un instante que estaba vivo y le devolvio las fuerzas que necesitaba para continuar. Volvio a girarse para buscar con la mirada a la camarera que le habia dejado, o practicamente arrojado, el plato con aquel bocadillo sobre la mesa. Tan solo pudo apreciar en la distancia su perfil, estaba claro que era lo mas que iba a conseguir evaluar de ella. Tenia que irse, pero ahora sabia donde habia una camarera con rostro desconocido que lo habia embaucado con sus curvas y su olor, y donde podia comerse un bocadillo de cinco estrellas de manera rapida y por unos pocos euros. ?Recordaba la felicidad? Si, ahora si, aunque fuese efimera y en forma de una desconocida con un bocadillo. No era un hombre muy exigente, ?no? Capitulo 2 El hospital estaba casi en frente del restaurante, asi que no tardo mucho tiempo en llegar. Lo dificil era encontrar la habitacion de su hermano. Los hospitales de la capital eran inmensos y, cuando comenzabas a recorrer los pasillos, era como ir de compras a Ikea: entrabas, pero no sabias por donde ibas ni cuando llegarias al lugar deseado. Se ponia malo con todo el trafico de gente de esos lugares, que parecian ponerse de acuerdo en ir en el sentido contrario a su marcha e impedirle llegar a su destino. --!Ya he vuelto! --dijo Carlos entrando a la vieja habitacion donde, por suerte, solo habia otro paciente con un familiar. --!Buenas! --saludo al resto de la gente. --Buenas tardes --contestaron, educados, los demas. --?Por que comes tan rapido? --comento molesto su hermano--. Ya sabemos que me voy a morir, pero no va a ser precisamente ahora, no tienes que ir con prisas a los sitios y volver como si te fuera la vida en ello. Carlos se quedo sin respiracion. ?Por que tenia que morirse? La vida no podia ser una puta mierda tan grande. Su padre acababa de morir de cancer y hacia un ano que lo habian hecho su madre y sus otros hermanos por el mismo problema. ?Seria algo genetico? !Joder! No se podia creer que su hermano lo banalizase de aquella manera. Ademas, todavia no estaba diagnosticado. Aunque todo apuntase a ello, lo habian ingresado para hacerle pruebas y descartar un tumor cerebral. Carlos era el hermano menor de una familia de cuatro hermanos. Habia nacido cuando su madre tenia cuarenta y seis anos, y en aquella epoca a eso se le llamaba "hijo de madre aneja", vamos, que fue el "goma rota" de turno, el error, un fallo de calculo por asi decirlo, ya que sus hermanos ya tenian mas de veinte anos cuando el nacio. Su infancia habia sido muy feliz, de eso no tenia ninguna queja. No habia tenido hermanos, eso si, habia tenido cinco padres. Un poco malcriado si que habia salido, si. Lo unico malo de toda esa infancia llena de dicha, en la que el habia sido el "juguetito" de la familia, era que todos habian sido muy mayores para el y la desgracia se cernio sobre sus vidas cuando el cancer los envolvio como un manto gris del que no se puede salir. No podia quejarse de sus padres, habian vivido muy bien y muchos anos hasta que murieron, pero no podia decir lo mismo de sus hermanos, y menos de Alfredo, el que ahora estaba tumbado en aquella triste cama de hospital. Apenas pasaba los sesenta y no parecia tener muchas esperanzas de un buen pronostico. Habia sufrido demasiado las demas perdidas de su familia y ese era su ultimo familiar cercano vivo. Bueno, estaban sus sobrinos y sus cunadas, pero las muertes de sus hermanos tambien los habian distanciado, amen de la diferencia de edad. --!Quiero estar aqui! ?Vale? --contraataco molesto--. ?Ha pasado el medico? --Pero si hoy no nos va a decir nada definitivo --amonesto con rapidez Alfredo. --Eso no lo sabemos. !Mierda! Esta espera me esta matando... --!No, chaval, me esta matando a mi! --se carcajeo su hermano. --No tiene ni puta gracia --protesto enfadado Carlos. --Si que la tiene, al menos reconocemelo. Alfredo siempre habia sido el mas simpatico de sus hermanos. No es que los demas hubiesen sido malhumorados, pero este era con el que mas afinidad habia tenido, quiza porque era el menor de los tres y el de una edad mas cercana a la suya. Era muy amable y campechano, afectuoso y muy sociable, risueno y siempre bromeaba, aun en las peores circunstancias. Los dos habian sufrido juntos las muertes de sus familiares y Alfredo era el que siempre habia tirado de el. La enfermera que entro en la habitacion interrumpio su conversacion. Hora de las constantes. Era una vieja estirada con la que Carlos no podia, le superaba que "una sota" como ella estuviese en una planta como la de oncologia. ?Se podia ser mas antipatica y desagradable? Lo malo, o lo bueno, segun se viese, de haber pasado tanto tiempo en esa planta era que ya se conocia a todo el mundo. --?Pueden salir los familiares? Ni un triste "por favor" o "?les importaria?". No. Esta entraba y pontificaba. Carlos no la podia ver ni en pintura. Salio de bastante mal humor de la habitacion y se planto en la entrada a esperar. Cuando "su majestad, la reina de Saba", salio de la habitacion sin decir ni una sola palabra, Carlos volvio a entrar y se sento en el incomodo ?sofa?, ?sillon?, ?silla? !?Como demonios se le podia llamar a aquello?! Desde luego, era de todo, menos comodo. Dejo que su hermano durmiera un rato la siesta mientras el aprovechaba para escribir sobre "su bocadillo". Aunque, junto con todo el despliegue de sabores y olores que el bocata le rememoro, se mezclo el deseo por la empleada de generosas caderas. !Joder! Otra vez su miembro viril lo importunaba con sus demandas cuando estaban fuera de lugar. Llego la noche y con ella el cambio de turno. Por fin se iba a ir la petarda de la enfermera de la tarde. La suerte que habian tenido era que tanto su hermano como su companero de habitacion estaban solamente para hacerse pruebas y lo cierto es que las enfermeras no tenian que entrar mucho, ya que los pacientes no precisaban medicacion. Comprobaban constantes y poco mas. El problema real que se le presento a Carlos fue su sorpresa cuando la enfermera del turno de noche entro para preguntar a los pacientes como estaban. Y esta, ?de donde cono habia salido? !Pero si el se conocia a todos los trabajadores de ese hospital! Que tia mas buenorra. !Vaya por Dios, esta no tenia que estar entrando y saliendo! --?Todo bien? --pregunto con voz dulce, mientras se sentaba y acomodaba de manera informal sobre la cama de su hermano y procedia a tomarle la tension de forma manual. !Pero si todas usaban el tensiometro automatico! Vale, no importaba, se supone que de esta manera era una tension mucho mas fiable y exacta, y el podria mientras devorarla con la mirada a sus anchas. Si, tambien se consideraba un experto erudito en el arte de la enfermeria y la medicina debido a todo el tiempo vivido en los hospitales. --Perfecto --contesto Alfredo ante su espectacular sonrisa. Carlos no pudo ni contestar, aunque la pregunta, entendia, no iba dirigida a el. Rubia, con el pelo mas que estirado en una altisima coleta y fuertota, como a el mas le gustaban. Esas mujeres con curvas en las que te puedes perder explorando... !Joder, que tetas! Queria hundir la cara ahi hasta perderse por completo. Y esas caderas anchas, esos muslos fuertes, pero prietos. !Dios! ?Estaria mal si le pedia el telefono? No era una nina, tampoco es que se fuera a asustar, ?no? Calculaba unos treinta y pocos, no veia anillo por sus dedos, aunque eso, en una enfermera, no era indicio de nada. Las buenas enfermeras no llevaban anillos ni las unas pintadas porque era antihigienico y porque se tenian que lavar las manos de forma continua. Si, Carlos sabia mucho de enfermeras, y en el mas amplio sentido de la palabra, ya que habia terminado liandose con alguna que otra. Y esta era una de las buenas. Sus perfectas unas limpias y bien recortadas junto con su accion de tomar la tension manual se lo decia a gritos. !Joder! ?Como iba a saber si estaba casada? Bueno, !a las trincheras! --!Hombre, enfermera nueva! --comento con un enorme despliegue de encanto. !Cono! Menuda mirada de reproche recibio a cambio. Fue entonces cuando se dio cuenta de que, si hablaba, no le dejaria oir la tension. Sus mejillas enrojecieron. ?Alguna vez le habia pasado? !Joder! No recordaba nunca antes un bochorno igual. La enfermera termino y le dirigio una mirada algo sorprendida. --Nueva... en esta planta. --Y volvio a dirigirle la mirada a Alfredo. -- Me llamo Lucia, he visto que estareis por aqui esta semana mientras te hacen pruebas --afirmo con una dulce sonrisa, que hizo que Carlos se removiera incomodo en esa mierda de silla-sillon-sofa--. No te preocupes, ya veras como no es nada y en una semanita estas de nuevo en tu casa. Tomate estos dias como un descanso merecido del trabajo, te relajas, lo disfrutas y ya veras que feliz. --Feliz, lo que se dice feliz... --contesto Alfredo embobado--, no lo se. Y dime tu como se descansa en una cama con estas sabanas que parecen esparto y con esta maravillosa comida que ofreceis. La carcajada de la enfermera dejo pasmados y boquiabiertos a los dos hermanos. ?Se podia ser mas preciosa y espontanea? --!Es cuestion de actitud! --afirmo guinando un ojo, como si le acabase de revelar el misterio del Santo Grial. Y se fue. Se fue sin que ninguno pudiese articular ni una palabra mas. Alfredo miro a su hermano automaticamente y comenzo a descojonarse. --Esta es de las que a ti te gustan, ?eh? Imaginate que de esta mierda conseguimos que por fin sientes la cabeza... Carlos lo miro molesto. --?Pero que sentar ni que sentar la cabeza? A mi dejame de tonterias. --Y bajando la voz, para que no lo oyesen los del al lado le dijo--: !Pero no jodas que no tiene el polvo del siglo! --Vaya que si lo tiene --contesto su hermano entre risas, mientras el otro paciente, espectador de la situacion, se quedaba con dos palmos de narices y sin la tension tomada.

  • Una vida mas contigo de Maryah Well

    https://gigalibros.com/una-vida-mas-contigo.html

    M Capitulo 1 3 de mayo de 1871. Amaretia, Yndral. irena estaba sentada en el salon de la casa de su yerno, el baron de Yndral, que se la habia dejado para que Leon, su hijo menor, encontrara a una futura esposa. El muchacho ya habia cumplido treinta anos y debia dejar de holgazanear en el galeon para ocupar el lugar que le correspondia como conde de Draulen, por lo que habia decidido que irian a otras tierras a probar suerte con las damas casaderas del pais. Llevaban dos dias en la casa y habian asistido a un baile cada noche, pero su hijo no parecia poner de su parte para cortejar a ninguna de esas muchachas. Y no es que no fueran bonitas, que lo eran, sino que, segun el, era como si tuvieran la cabeza hueca. Pues, no podia ponerse muy quisquilloso, ademas, debia tener en cuenta su nueva condicion que tampoco podia dejarsela ver a cualquiera. --Hijo, ?por que no dejas de lado la inteligencia de las damas y te decides por una? Como sigas rechazandolas vamos a tener que ir a otro pais y no soy tan joven como para aguantar tantos viajes --le dijo la mujer bordando sentada en el sofa tapizado con una hermosa tela amarillo palido. El aludido estaba de pie, mirando por la ventana, a la espalda de su madre, y resoplo molesto. --Mama, no puedo obviar esa falta de inteligencia. Me gustaria hablar y mantener una buena conversacion con mi esposa o me aburrire soberanamente --contesto Leon con su voz grave, aunque conciliadora, observando el jardin que se extendia por sus ojos, iluminado por los rayos del sol del crepusculo anaranjado. --De acuerdo. Tienes razon. Es que estoy cansada de tanto baile y de aguantar a las otras madres. Son insufribles. --Te propongo un trato --el chico se sento al lado de ella--. Si en dos semanas no encuentro a ninguna dama que merezca mi atencion, nos iremos a otro pais y sera el ultimo por esta temporada. ?Te parece bien? --Si no queda mas remedio --suspiro la mujer con resignacion. --Tengo el presentimiento de que encontrare una esposa esta semana. Vamos, ve a prepararte para el baile de esta noche. No quiero llegar tarde. Mirena dejo el bordado en el asiento que habia estado ocupando y subio las escaleras del vestibulo para llegar a su habitacion y prepararse para otra larga noche. Leon se irguio en toda su altura para volver a la ventana y observar el jardin. Los jardineros hacian un trabajo espectacular con aquel laberinto de setos bajos en medio de la estancia rodeada de hermosas rosas rojas y blancas. Esa era la flor favorita del padre de Daven, su cunado y dueno de la casa, y los empleados las cuidaban con esmero para honrar la memoria del difunto. Su madre bajo las escaleras media hora despues, le ofrecio su brazo y la guio hasta el carruaje que los llevaria al baile de los senores Mansfield Danielle salio del carruaje en cuanto este paro enfrente de la casa de su hermano mayor, el baron de Yndral, subio los escalones de la escalera de tres en tres y entro en su habitacion para cambiarse el vestido en unos pocos segundos. Bajo para regresar al interior del carro, encontrandose con Grissom, el mayordomo, que la miraba con asombro. Lo saludo levemente, se marcho sin escuchar lo que el hombre parecia tener que decirle y se dispuso a asistir al primer baile del que habia recibido la invitacion aquella temporada. El senor y la senora Mansfield eran unos encantadores ancianos, amigos de la familia desde que su padre ocupo el lugar de baron con la muerte de su abuelo y no podia dejarlos plantados por nada del mundo. El carruaje se detuvo, el cochero abrio la puerta y la ayudo a bajar. Danielle observo la enorme mansion de los anfitriones y sus comisuras se elevaron para formar una gran sonrisa. Estaba impaciente por verlos y abrazarlos. Eran como sus abuelos y ellos la consideraban su nieta. Entro en el salon de baile y busco con la mirada a los anfitriones. Ambos estaban hablando con otra pareja. La chica se acerco a ellos con una gran sonrisa de oreja a oreja, tapo los ojos de la mujer al llegar hasta ella y pregunto: --?Quien soy? La mujer rio y contesto: --La joven mas hermosa del baile y mi nieta mas querida. La aludida quito las manos de los ojos de la senora Mansfield y la pareja la abrazo con fuerza, riendo de felicidad por verla en su casa. --Creiamos que no vendrias --apunto el hombre emocionado. --Nunca me perderia un baile de mis abuelos. ?Que podeis contarme de los hombres interesados en el matrimonio de esta temporada? ?Hay alguno que valga la pena, abuela? -- pregunto mirando a su alrededor. --Pues, en mi opinion, solo hay uno lo bastante inteligente y apuesto que merezca tu tiempo y el placer de tu compania --respondio la mujer buscando con la mirada al susodicho. --?De verdad? Cada vez me lo ponen mas dificil. ?Quien es el afortunado? --El conde de Draulen. Los ojos verdes y castanos de Danielle se clavaron en el rostro de la anciana, abiertos de par en par por la sorpresa. "?Leon esta aqui?", se pregunto desconcertada. --Mira, alli esta su madre. Ven que os presento --la senora Mansfield cogio la mano de la muchacha para guiarla hacia la mujer, pero la joven la detuvo. --No te molestes, abuela. La conozco. Ire yo sola. Tu sigue hablando con tus invitados. --?Estas segura? --la chica asintio dedicandole una sonrisa--. De acuerdo. Pasatelo bien, querida nieta. --Lo hare. La joven le dejo un beso en la mejilla a la pareja y se encamino hacia la suegra de sus hermanos con una renovada ilusion. Mirena se rio con poco entusiasmo de algo que habia dicho una de las madres con las que estaba sentada en el borde de la pista de baile y escondio una mueca de desagrado detras del vaso de limonada. "Por los dioses, que mujeres mas insufribles", penso al escuchar la misma conversacion que habia tenido con la misma mujer la noche anterior, en el baile de los Smithson. --Buenas noches, senoras. Espero que lo esten pasando de fabula --las saludo Danielle quedandose de pie, en toda su altura, delante de la madre de sus cunadas. La mujer alzo el rostro y se le ilumino al verla. Se levanto de un salto de la silla y la abrazo con fuerza. --Gracias a los dioses --susurro al oido de la joven--. Sacame de aqui, por favor. --Senora Stainfield, ?le apeteceria dar un paseo conmigo? --Por supuesto, senorita Harrelson. Disculpenme, senoras --ambas hicieron una leve reverencia con la cabeza y se marcharon lo mas rapido que pudieron--. ?Que haces aqui? Estas preciosa vestida asi --la halago dirigiendose hacia la mesa de la comida. --Llevo anos asistiendo a este baile. El senor y la senora Mansfield son buenos amigos de la familia, tanto que los llamo abuelos. Y ya que vengo, aprovecho para buscar un marido. ?Y vosotros que haceis aqui? ?Donde esta Leon? --Pues por la misma razon que tu. Mi hijo busca esposa. Hace un momento estaba bailando, pero ya no lo veo. Tal vez este dando un paseo con alguna chica casadera por el jardin. --Caray. Si que hace tiempo que no nos vemos. ?Donde os estais quedando? --Daven nos ha dejado vuestra casa. Supongo que tendremos que irnos para que tu te instales en ella. --Oh, no. No te preocupes. Hay sitio suficiente para todos. --?Quieres que busquemos a mi hijo? Me vendria bien tomar algo de aire fresco --le propuso Mirena abanicandose con la mano. --Claro, vamos. ?Y que tal va la busqueda de futura condesa? --Lento. Me parece que mi hijo tiene unas expectativas demasiado altas para su futura esposa y ninguna llega a rozar ese limite. --Bueno, de pequeno ya era bastante exigente, creo recordar. No me extrana que busque la perfeccion personificada en esa femina. --Lo se. Debi avisarle de que la perfeccion no existe --dijo la mujer con culpabilidad. --En realidad no hay ninguna buena definicion para la perfeccion. A veces, simplemente crees que alguien es perfecto por lo que te hace sentir tal como eres, sin cambios --filosofo Danielle con la vista un poco perdida en los terrenos que se extendian delante de ella. --Es posible que tengas razon. Giraron al llegar a una esquina de la mansion de piedra grisacea y la mujer chasqueo la lengua. --?Donde se habra metido este chico? --pregunto con fastidio. --Tal vez haya encontrado a la condesa perfecta y este cortejandola. --Pues seria un gran alivio. Estoy cansada de aburrirme. La chica se rio por el comentario y entraron por la puerta trasera del salon de baile. --?Quieres que nos marchemos? --le inquirio. --No quisiera privarte de tu proposito. Llamare al carruaje y os esperare en la comodidad de mi habitacion. --No voy a dejar que te vayas sola. Y mi proposito puede esperar al siguiente baile. Le dire a los senores Mansfield que informen al conde de tu salida y que regrese cuando quiera. Iremos en mi carruaje. --?De verdad que no te importa? --Para nada. Prefiero tu compania a la de cualquiera de estos pomposos. --Pensando asi no encontraras marido --le dijo Mirena sonriendo divertida. La muchacha se rio dejandola en la entrada hasta que regresara de informar a los anfitriones, subieron al carruaje y se marcharon hacia el silencio y la comodidad de sus habitaciones. Un estruendoso ruido de una silla cayendo al suelo de baldosas desperto a Danielle con un sobresalto. Se incorporo en la cama y agudizo el oido para escuchar dos voces masculinas provenientes del vestibulo. --?Se encuentra bien, senor? --pregunto Grissom al recien llegado. --Perfectamente, gracias. Que nadie me moleste hasta la hora de la cena --contesto una voz grave que la chica no habia escuchado nunca. --Por supuesto, senor. Que descanse. La joven escucho unos pasos que subian las escaleras y se acercaban por el pasillo, hasta la habitacion contigua a la suya. Se levanto de la cama en silencio, pego la oreja a la pared y escucho los pasos del hombre hasta que cayo encima del colchon. No sabia con certeza quien era, pero tenia la vaga sospecha de que se trataba de Leon, el hermano pequeno de sus cunadas y conde de Draulen desde los diez anos, cuando su padre murio en un intento por recuperar a su familia y maltratarla de nuevo. El titulo le habia llegado con bastantes deudas por la aficion desmesurada del antiguo conde de gastar dinero en las timbas de juego clandestinas, sin embargo, ahora estaba libre de cargas y en pleno auge de bienes. Daven, el capitan y hermano de Danielle, habia subsanado las deudas, todas y cada una de ellas, para que el nuevo conde y su madre pudieran empezar de cero. Y eso hicieron despues de viajar, en el barco de la familia, durante todo el verano, hasta que el nino tuvo que regresar para ir a la escuela. En su ausencia academica, Mirena se habia hecho cargo de todo lo que conllevaba el titulo. Despues de veinte anos, el pequeno habia crecido y era logico que estuviera buscando esposa. Lo que no llegaba a comprender la chica era el porque habia decidido ir hasta Yndral para llevar a cabo la tarea. ?Es que en Draulen ya no habia damas casaderas? El sonido de unos ronquidos, aunque parecian mas bien grunidos, traspasaron la solida pared hasta el oido de la chica. Se encamino hacia la cama, se tumbo y cerro los ojos cuando los rayos del sol empezaban a iluminar la estancia.

  • El bosque de tu nombre de Karina Pacheco

    https://gigalibros.com/el-bosque-de-tu-nombre.html

    En medio de una crisis personal, Ariel, medico ancado en Londres, relee uno de sus antiguos cuadernos infantiles. Entre dibujos y garabatos, descubre un texto inquietante: su padre, un exiliado guatemalteco que acaba de morir, conesa su participacion en un ajuste de cuentas sucedido cuatro decadas atras, por el asesinato de una mujer de la que nunca oyo hablar.

  • 17 mujeres Premios Nobel de ciencia de Helene Merle-beral

    https://gigalibros.com/17-mujeres-premios-nobel-de-ciencia.html

    Hasta el momento, solo los trabajos cientificos de 17 mujeres han sido galardonados con el Premio Nobel. Marie Curie fue la primera, en 1903 y 1911, seguida de su hija Irene Joliot-Curie en 1935, pero otras permanecen en la sombra. Son conocidas las biologas Francoise Barre-Sinoussi, premiada en 2008, Barbara McClintock (1983) y Rita Levi-Montalcini (1986), pero ?quien ha oido hablar de Linda Buck, Ada Yonath, Elizabeth Blackburn o Tu Youyou?
    Este libro presenta las trayectorias, a menudo sorprendentes, de estas mujeres que alcanzaron la excelencia en un medio que fue y sigue siendo en gran medida masculino. ?De donde surge su curiosidad? ?Como conciliaron la investigacion con la vida familiar? ?Como las acogio el mundo cientifico?
    Esta brillante serie de biografias muestra la diversidad de sus origenes sociales y sus caracteristicas particulares, con una feroz independencia de espiritu y una perseverancia a toda prueba como puntos comunes. El cuadro cientifico no es menos variado, desde el nucleo atomico hasta los ribosomas y los genes saltarines, aunque solo existen tres mujeres Premios Nobel en el ambito de la fisica. Este libro es una oportunidad para reflexionar sobre la importancia cultural y social del genero en la investigacion cientifica. La vieja maxima de “La mente no tiene sexo” no deja de verificarse.

  • Espana en el corazon de Adam Hochschild

    https://gigalibros.com/espana-en-el-corazon.html

    ?Que motiva a alguien para luchar por un pais que no es el suyo? Desde los primeros compases de la Guerra Civil espanola, esta se convirtio en una cuestion internacional. Hitler y Mussolini enviaron aviones y tropas a los generales golpistas. Millones de personas en todo el mundo sintieron que el fascismo que asolaba Europa debia ser detenido en Espana. Mas de 35.000 voluntarios de decenas de paises ayudaron a defender la republica espanola. Hochschild, el aclamado autor de “El fantasma del rey Leopoldo”, evoca este periodo tumultuoso a traves de las vidas de los estadounidenses involucrados en la guerra, entre los que se encontraban intelectuales de la talla de Hemingway.

  • Por nuestro bien de Sophie Saint Rose

    https://gigalibros.com/por-nuestro-bien.html

    Karen acaba de perder a su abuela y empaquetando sus cosas se lleva la sorpresa de su vida, porque descubre que durante anos oculto un secreto familiar que era para dejarla de piedra. Su curiosidad la lleva a Inglaterra y conocer a Colton fue otra sorpresa mas. No solo porque era el hombre que mas le habia alterado el corazon en su vida sino porque se sintio unida a el. Aunque sospechaba que se hacia el tonto y que sabia mucho mas de lo que le decia, esa atraccion la volvia loca. ?Tanto como para olvidar la razon por la que ha ido hasta alli?

  • La pluma dorada de Sonia Galdos

    https://gigalibros.com/la-pluma-dorada.html

    Primavera de 1916. El vapor Principe de Asturias, en el que viaja el padre de Aurea Nebreda, nunca llegara a Buenos Aires. A sus trece anos, Aurea tendra que dejar Madrid para residir en Burgos con un tio paterno y su familia, de la que jamas ha oido hablar y a laque molesta su educacion liberal, su afan de estudiar y su pasion por escribir, cuando su objetivo en la vida deberia ser lograr unbuen matrimonio. Culpan de su desobediencia al linaje de su madre, Teresa Garay, cuya desaparicion, anos atras, esta rodeada de misterio, y de la que nadie parece dispuesto a hablar. Pero ni siquiera su familia puede oponerse al progreso que las mujeres impulsanen Espana en los anos veinte. A veces abiertamente, a veces a escondidas, Aurea intentara seguir adelante con sus estudios y su escritura. Hasta que llega a su vida un amor inesperado que desafiara las estrictas reglas de la sociedad. Entonces, descubrira que todos los esfuerzos realizados no han sido nada comparados con lo que tendra que hacer para defender su derecho a la libertad sin traicionar su propio corazon.

  • No me debes nada de Conti Constanzo

    https://gigalibros.com/no-me-debes-nada.html

    Cuando Antonia recibe una llamada desde una clinica de Buenos Aires, lo deja todo para ir al lado de su hermana. En el aeropuerto conoce a Jose Ignacio, un hombre que tiene la virtud de sacarla de quicio, pero que a su vez le atrae profundamente.

  • Juegos prohibidos 5, Emma M. Green de Emma M. Green

    https://gigalibros.com/juegos-prohibidos-5-emma-m-green.html

  • Retrato de mi madre con perros de Daniel Rodriguez Barron

    https://gigalibros.com/retrato-de-mi-madre-con-perros.html

    Los cuerpos se acumulan en la calle, afuera de los cines, restaurantes y comercios. El mundo como lo conocemos llega a su fin. La peste trae consigo a los drones y a la Gran Inteligencia, que controla todo, alimentandose de millones de entradas diarias que los ciudadanos estan obligados a publicar en la red. Solo hay dos prohibiciones: no salir de la ciudad y nunca hablar de los muertos.

  • El Acuerdo del Matrimonio (Juegos del Multimillonario 1) de Sandra Edwards

    https://gigalibros.com/el-acuerdo-del-matrimonio-juegos-del-multimillonario-1.html

    Camille Chandler es una periodista sensacionalista cuya carrera va por buen camino, hasta que su jefe vea un anuncio curioso en el L.A. Trades.

  • El ano del verano que nunca llego de William Ospina

    https://gigalibros.com/el-ano-del-verano-que-nunca-llego.html

  • Las defensas, Gabi Martinez de Gabi Martinez

    https://gigalibros.com/las-defensas-gabi-martinez.html

    Ante un ataque de locura violenta, un competente neurologo es ingresado en un psiquiatrico. Solo el sabe que su diagnostico es erroneo. Pero aun no es capaz de imaginar que la misma enfermedad autoinmune a la que ha dedicado obsesivamente su vida lo acecha. Su increible lucha contra la enfermedad y el estres corre pareja a la de la historia de este pais desde la Transicion y a la de uno de los pilares de la democracia espanola, un sistema sanitario herido hoy por la jerarquia y por una corrupcion que castiga o expulsa a quien disiente.

  • Secretos del corazon (Corazones prohibidos 1), Norah Jones de Norah Jones

    https://gigalibros.com/secretos-del-corazon-corazones-prohibidos-1-norah-jones.html

  • La isla de las mujeres de Laura Perez Caballero

    https://gigalibros.com/la-isla-de-las-mujeres.html

    Un brujo, un Emperador, cientos de mujeres confinadas en una isla desierta y una muchacha misteriosa que llevara a cabo una ingeniosa y deseada venganza.
    Fantasia mezclada con brujeria, con supersticiones, con ambicion y con venganza.

  • Las madres secretas de Monica Crespo

    https://gigalibros.com/las-madres-secretas.html

    Una pareja inicia un proceso de maternidad subrogada; una madre se enfrenta a la naturaleza predadora de su hija; una escritora huye para escribir; una mujer ave y la prohibicion de volar; una pareja en la que el se queda embarazado... Las madres secretas explora las aristas y los espacios marginales de la maternidad, las fragiles relaciones de pareja, las relaciones entre madres e hijos, las contradicciones ante el deseo de ser madre o no, la construccion cultural de este fenomeno biologico, la tension entre la creacion artistica y la maternidad. Los personajes de estos relatos muestran este complejo equilibrio a traves de sus conflictos. La autora, con una intensa voz narrativa, rompe los topicos y las imagenes idealizadas de la maternidad. Historias realistas y fantasticas que ofrecen una reinterpretacion de la familia y la maternidad, que puede ser tan natural como perversa.

  • Construyendo un destino (Corazones rotos 1) de Catherine Brook

    https://gigalibros.com/construyendo-un-destino-corazones-rotos-1.html

    Una comedia romantica de mano de Catherine Brook en la que se pondran a prueba amor y confianza.

  • Prohibido Entrar: Una historia de amor (Una Propuesta casi Indecente 2) – Mia del Valle de Mia Del Valle

    https://gigalibros.com/prohibido-entrar-una-historia-de-amor-una-propuesta-casi-indecente-2-8211-mia-del-valle.html

    En Colonia del Sacramento, con su coche roto y hospedado en un hotel de mala muerte, Manuel Cortes estaba seguro que su suerte no podia ser peor. Incluso llego a pensar que las fuerzas de la naturaleza estaban en su contra, sin saber que el destino le tenia preparada una grata sorpresa… Sofia Castellano una hermosa y simpatica morena, tambien atraida por una serie de eventos desafortunados, seria vecina de hotel.
    Las casualidades continuaron en Montevideo, cuando ambos se enteraron que la joven seria la nueva psicologa de Recursos Humanos en la empresa Betner & Asociados de la que Manuel es vicepresidente. Finalmente se darian cuenta que las casualidades no existen, y que en el mapa de la vida, todo tiene su inicio y final. Juntos descubriran que el amor todo lo puede,. aun en contra de su voluntad.

  • Las respuestas de Catherine Lacey

    https://gigalibros.com/las-respuestas.html

    Por la autora de Nunca falta nadie, uno de los mejores libros del ano segun The New Yorker yVanity Fair.

  • Contigo es todo de Carmina D.

    https://gigalibros.com/contigo-es-todo.html

    Odiaba esto. No habia nada peor que hubiera experimentado en toda mi vida que tener que visitar a mi hermano en el hospital. Ni siquiera sabia -nadie sabia- si Julian iba a salir adelante o no. Cada vez que venia aqui, era un gran signo de interrogacion sin respuesta aparente. Y aun con todo eso, amaba a mi hermano. Creia en el y queria que mejorara. Asi que segui viniendo a verlo, a pesar de que estar aqui era muy dificil, por no decir otra cosa. La vista del vestibulo del hospital se cernia sobre mi mientras la gente iba y venia, algunos en camillas y otros en sillas de ruedas. Julian no merecia este destino, no merecia tener que estar aqui. Mi hermano era grande, ruidoso y carinoso, era de los que hacia una broma de todo, su alegria llenaba los espacios, nada lo perturbaba, nada lo sacaba de su centro. No pertenecia a un lugar como este, sin importar cuan amables fueran las enfermeras o cuan vanguardista fuera la tecnologia. No deberia estar quieto, con tubos entrando y saliendo de el, luchando por su vida. Este no debia ser su destino. Pero lo era, y ese era un golpe demasiado duro para mi. Me trague mi depresion y reuni todo el coraje que pude, pero aun asi arrastre los pies cuando entre al hospital y volvi a subir a su habitacion por lo que me parecio la milesima vez. El ascensor hubiera sido mas facil, pero necesitaba mantenerme en movimiento hasta que lo viera. Los ascensores estaban empezando a sentirse un poco claustrofobicos. Llegue a su habitacion y atravese la puerta con determinacion y una actitud fabricada para disimular mi verdadero estado. --Julian, no creerias esta nueva…-- Su cama estaba vacia. Oh, Dios, ?que habia pasado? --!Enfermera, enfermera!-- Corri a la pequena estacion de enfermeras a unos pasos de la puerta de Julian. --?Que le paso a mi hermano? ?Por que no esta en su habitacion? --Oh, Mila, calmate--, dijo una de las mujeres, levantandose de su escritorio y abrazando mis hombros. Su tono y la forma en que me dio palmaditas en la espalda como si fuera una nina me hizo saber que todos aqui estaban hartos de la frecuencia con la que me asustaba y sobre reaccionaba. Pero no era algo que podia evitar, se me conocia por decir lo que pensaba y por estar un poco nerviosa e hiperactiva sin importar la ocasion, y ?quien podria culparme por estar preocupada en una situacion asi? Me alegre de que las enfermeras fueran amables, pero empezaba a darme cuenta de que les estaba poniendo los nervios de punta. --Esta bien--, continuo la enfermera. --Acaba de ser trasladado a otra habitacion del hospital. Respire un tembloroso suspiro de alivio y me limpie los ojos. Me llevo a otra estacion en un costado. Mientras yo me quedaba parada esperando, haciendo todo lo que podia para ser paciente -lo cual ciertamente no era mi fuerte-, ella hojeo algunos papeles y se puso a hacer clic en su computadora. Mila, deja de ser debil. Tienes que ser fuerte. Si algo hubiera pasado, habrian llamado a la familia. Respira. Julian estara bien. Luego podras reganarlo de nuevo por su molesta tendencia a dejar la tapa del inodoro levantada. -Me dije mentalmente para tratar de calmarme. Esto no era justo. Julian era un buen tipo, y un hermano increible aun que dejara el bano hecho un desastre. --Aqui vamos, esta en el ala norte del hospital, en la habitacion 24B. Te llevare alli. Puede ser confuso tratar de llegar a esa ala del hospital. Vamos carino. Ella me sonrio, su humanidad la hizo ver suave-o tal vez estaba feliz de deshacerse de mi- pero, de cualquier manera, yo estaba agradecida. Le devolvi la sonrisa. --Gracias. En el camino, la enfermera empezo a hablar de su familia. Supongo que fue para calmar mis nervios. Cada palabra que decia me entraba por un oido y salia por el otro. Trate de prestar atencion mientras ella me contaba algo sobre sus planes para el fin de semana, incluyendo una barbacoa familiar, y luego me pregunto cuales eran mis planes. Tuve una vision de tunel, pensando que estaria aqui todo el fin de semana, por supuesto. Todo lo que me importaba era mi hermano. Ya era bastante dificil que mama y papa estuvieran demasiado ocupados para venir a verlo. Pero si tuviera que cuidar de el yo sola, lo haria. El Senor sabia que me cuidaba con suficiente frecuencia, era un hermano muy protector conmigo. Y siempre necesitaba de el para sentirme mas segura de mis acciones, asi que, era habitual vernos juntos o que yo le pidiera consejos, sobre todo. --Bien, estamos en el ala norte, y su habitacion esta al final del pasillo. Avance rapido siguiendo la direccion que me indico, contando las habitaciones a medida que pasaba por cada puerta. Alli. Lo encontre. Le hice senas a la enfermera y ella se despidio con su mano antes de girarse para volver a su puesto. Tal vez nunca se habia enfadado conmigo, y todo estaba en mi cabeza. Parecia que me estaba volviendo loca debido a la ansiedad ultimamente. Tire de la puerta y entre. --!Julian! Ahi estas. No respondio. Sabia que estaba en coma, pero cada vez que hablaba con el, sentia que era mas cercana la esperanza de que se despertara y me contestara. Despierta, por favor, despierta pronto. Le limpie el pelo de la frente a un lado. Los moretones estaban bajando, y parecia tranquilo. Dijeron que no tenia ningun dolor, y me aferre a esa tranquilidad. Moriria si supiera que estaba sufriendo. Me acomode en la silla junto a su cama, poniendome comoda para una larga visita. --Asi que, queria que supieras que estoy probando algunos trucos con los tragos en la barra-- dije, tomando su mano. --Es en un club de striptease raro, pero no soy una de las chicas que baila. Lo juro. Su mano estaba caliente, un buen recordatorio de que estaba vivo y que aun podia volver a mi. --No gano dinero como ellas, pero la paga es decente y las propinas tambien. Pero tuve que dejar la universidad. El dinero ha estado un poco escaso en la casa. Pero volvere, ?de acuerdo? Asi que no me grites por abandonar. Es solo temporal. Le frote la mano y mire los monitores y las maquinas que estaban conectadas a el. --Estamos demandando a la persona que te choco--, continue, --pero los tribunales se estan tomando su tiempo. Hacemos todo lo que podemos. Pero estaras bien. Y si ganamos tal vez tengamos una casa mas grande y tu tengas tu propio bano para estropear todo lo que quieras-- Sonrei. ?A quien estaba enganando? No habia forma de que pudiera sentarme aqui y fingir que era la Srta. Risitas. Tenia un corazon, y estaba siendo apunalado repetidamente. Ojala hubiera podido evitar que saliera esa noche. ?Pero como iba a saber que lo iban a chocar? Comence a tararear y luego a cantar una cancion. --Don't worry, be happy... La cancion era tanto para mi como para el. Necesitaba recordarme a mi misma que preocuparse no servia de nada. Pero mientras continuaba cantando, no pude evitar sonreir nuevamente. Era raro tratar de no reirme en una habitacion de hospital, en una de mis horas mas oscuras. Sin embargo, tambien era gracioso que yo estuviera cantando, porque Julian siempre se burlaba de que yo no tenia oido para la musica. Cuando eramos pequenos me gritaba: <>, y yo seguia adelante, solo para seguir molestandolo, que era mi trabajo como su hermana. Era un juego que haciamos a veces, en largos viajes en coche cuando estabamos aburridos, o mientras pescabamos en el arroyo. Me decia que dejara de cantar porque ahuyentaba a los peces, decia que tendria que alejarse de mi porque mi voz era muy mala y le daria dolor de cabeza. O le diria a mama y papa que me echaran del auto por someter a todos a mi horrible voz. Aunque era una broma exagerada y desproporcionada, sabia que tenia razon, que no podia cantar para salvar mi vida. Pero ahora esperaba poder cantar para salvar la suya. Sabia lo ridiculo que sonaba, pero tenia que concentrarme en algo para no volverme loca. De repente, hubo algunos golpes suaves en la puerta. Me relampaguee -otra frase que Julian me decia que hacia mientras cantaba- y me di la vuelta para ver a un hombre de mediana edad con un traje de tres piezas entrando. --Tu debes ser uno de los Foster. Esta relacionada con Julian Foster, ?correcto? ?Como estas?--, pregunto. --Si, soy Mila. Su hermana. Y supongo que estoy bien.-- Mire hacia atras a Julian y a su gran cantidad de maquinas, queriendo preguntarle al tipo como pensaba que yo estaba, pero no dije nada. A veces se necesitaba todo lo que tengo para contener mis comentarios sarcasticos. --Lo siento, acabamos de mudarnos a esta ala--, le dije. --?Quien eres tu?. --Soy de la administracion del hospital--, hablo bruscamente. --Srta. Foster. Me gustaria que me diera mas informacion sobre el seguro de su hermano, si es que sabe. --Ya tienen su informacion-- Me puse un poco nerviosa --Lo se--, dijo, frunciendo el ceno, --pero ese seguro nos ha llamado recientemente, para decirnos que ya no podia cubrir sus necesidades medicas. Salte de mi silla. --!Eso es imposible! !Todavia esta en el seguro de nuestros padres! ?Que hay del hombre que lo choco? Tambien lo trajeron aqui, ?verdad? ?Por que no le preguntas a el?. El hombre reviso su portapapeles. --Lo siento, Srta. Foster. Pero el fallecio esta manana. No podia comprender porque estaba pasando todo esto, mi corazon comenzo a latir fuertemente en mi pecho, queria gritar y llorar, pero en el fondo de mi sabia que este no era el lugar para actuar de esa forma, y tampoco frente a mi hermano. Tenia que salir de aqui. --Permiso-- dije, mientras intentaba dar cabida al mar de emociones que tenia en mi pecho. El otro conductor habia muerto y yo lamentaba eso, por su familia, pero mi hermano estaba donde estaba por su culpa y eso no era todo, ahora resulta que el seguro no cubriria. Pase al lado del hombre y camine tan rapido como pude por el pasillo. ?Por que tuvo que pasar toda esta mala mierda? Este era mi hermano, un hombre bueno con todo el mundo y todo lo que le importaba al hospital era el maldito dinero. Me tope con gente, tropece con la pierna de una persona, pero no importaba el obstaculo que se interpusiera en mi camino para frenarme, tenia que salir de este hospital. No podia sentarme alli con Julian sabiendo que el pensaria que era una cuenta mas que teniamos que pagar. Que frivolo era todo cuando su vida estaba en juego y todo se resumia a la cantidad de dinero que podiamos conseguir. Por primera vez desde el accidente, esperaba que no pudiera oir lo que sucedia a su alrededor. No queria que se enterara de que no habia dinero para ayudarle a mejorar, porque entonces podria darse por vencido. Capitulo 2 Mila Cuando llegue a la parada del autobus, me puse a llorar. Saque mi telefono celular y a traves de mi vision borrosa, presione el boton de marcacion rapida para mi padre. --Hola, carino. ?Como estas?--, pregunto el. --!Papa! El hospital dijo que el seguro ya no cubre lo de Julian. Dijeron que el seguro lo dejo. Y el tipo que lo choco esta muerto. Suspiro, dejando un momento de silencio entre nosotros antes de responder. --Mila, querida, ya lo sabia. Estamos tratando de llegar a un acuerdo, tu madre y yo. Mi agarre alrededor del telefono se intensifico. --?Que? ?Lo sabias y no me lo dijiste?-- Mi voz temblo. --Lo visito todos los malditos dias. ?Soy la unica persona que viene a verlo y no me lo dijiste? --Mila, por favor--, dijo cansado. --Tu sabes... Colgue. Odiaba cuando mi padre tenia ese tono condescendiente, y sabia que no valia la pena pelear con el. Me dolio que no confiara en mi para informarme sobre las cosas importantes que pasaban, pero ya habia aprendido que no podia hacer nada al respecto. El autobus llego y abrio sus puertas. Lo mire en blanco. Todavia no podia superar toda la informacion, habia estado protegida por Julian y ahora estaba sin el, mis padres no me incluian en esto y mi hermano necesitaba dinero, necesitaba tener todas las condiciones para vencer a la muerte. Dios, todo esto era demasiado. Era una mujer adulta, pero siempre al alero de la proteccion de mi hermano. Nunca tuve la necesidad de enfrentar las cosas, de ser fuerte o de tener que solucionar algo tan grande. Me arrastre en el autobus y pase mi tarjeta de transferencia por la maquina. Mi cuerpo se sentia sin vida. Mi familia se habia desmoronado despues del incidente del coche, y estaba empezando a pensar que no iba a volver a se la misma nunca. En lugar de regresar a casa, me detuve en los servicios sociales locales y obtuve un monton de papeles que contenian informacion de lugares que ayudaban con las facturas medicas. Una breve resena, sin embargo, no hizo sino aumentar la tristeza y la perdicion ante mis ya terribles noticias. Medicaid no iba a cubrirlo, no podiamos permitirnos una nueva poliza privada, y las iglesias que estaban en la lista solo ofrecian atencion medica de hasta cien dolares. Tire los papeles y opte por ir caminando al trabajo para despejar mi mente. Todo va a estar bien. Julian podria despertarse y salir de esto. Siempre ha sido un bastardo con suerte. Realmente necesita hacer una de sus acrobacias mas grandes de la vida ahora. Estaba recordando cuando eramos pequenos y Julian me llevo a dar un paseo en la ATV de nuestro primo. Iba demasiado rapido y se estrello contra una valla. Ambos salimos volando del vehiculo, pero Julian permanecio ileso, mientras que yo termine en el hospital con un brazo roto. En ese momento, yo habia estado enojada con el por ponerme en peligro sin experimentar ninguna consecuencia. Siempre pense que nunca aprenderia. Pero ahora, mirando hacia atras, no puedo evitar sonreir un poco por su suerte, y espero que continue ahora en su edad adulta, cuando mas lo necesita. Diez minutos mas tarde habia llegado finalmente a mi trabajo, lo que me dio un poco de consuelo. Al menos tenia algo mas en lo que concentrarme. Tan pronto como entre en el bar, mi jefe me miro, levantando una ceja. --Bueno, hola, Mila. Llegas media hora antes. ?Puedo ayudarte en algo?. --Hola Sr. Eliott. Solo queria venir temprano--, le dije. --No tengo nada mas que hacer. --Hmm, bueno, esta bien. Sabes que no pago horas extras. Senalo con su cigarro, y unas cenizas cayeron al bar. Mi jefe era un tipo duro, por asi decirlo, al que le gustaba declarar con orgullo que se habia registrado en la ciudad con su bar de puros para obtener una licencia especial, para que nadie pudiera decirle que no podia fumar su cigarro en su propio establecimiento. Una tonteria que solo para el parecia importante. Agite la cabeza y busque un trapo para limpiar las cenizas. --Si, lo se. Trabaje en el bar, limpiando botellas y vasos de chupitos. Al Sr. Eliott no parecia importarle, siempre y cuando yo no fichara todavia. Una vez que mi turno comenzo oficialmente, comence a preguntar a los clientes que les gustaria beber. Al final de la tarde me acomode mientras caminaba de un lado a otro, sirviendo cerveza, mezclando cocteles y tratando de conversar un poco con los clientes. Era dificil en un lugar como este, donde el tipo de charla que querian hacer incluia las palabras: <<Muestrame tus tetas>>. Por mas que lo intente, no podia olvidar la situacion de mi hermano. La cara pacifica de Julian en mi mente me destrozo. ?Cuanto tiempo pasara hasta que lo saquen de la maquina? ?Podrian hacer eso? ?Era legal? No podia ver en que se diferenciaria esto de un asesinato si mi hermano moria por falta de dinero. Mientras mi mente se perdia en un monton de interrogantes, una de las bailarinas se sento en la mesa del bar y saco un fajo de billetes. Comenzo a contarlo, y no pude evitar mirarlo como si fuera un faro de luz. Sabia que ganaban dinero. Pero automaticamente lo asocie con la cantidad de dinero suficiente para pagar las cuentas medicas. --Karen--, le pregunte, dandole un trago de tequila, que sabia que era su favorito. --?Es eso lo que puede hacer una bailarina en una semana? Ella empujo sus labios a un lado, pensando, y lanzo su trago por la garganta. --En realidad no. Quizas si eres nueva. Hice esto anoche, estaba demasiado ocupada para contarlo. El Sr. E. saca doscientos por noche y nosotros nos quedamos con el resto. Se me salieron los ojos de las orbitas. --Espera, ?el se lleva doscientos y todavia te queda todo eso?. Ella se rio. --Si. Asi no tenemos que preocuparnos por un porcentaje. Mis ojos se detuvieron en el dinero por un segundo. Sacrificio. Fue lo primero que pense. Habia que hacer un sacrificio. Ahora, lo que pasaba por mi mente era una solucion a todos mis miedos. Yo sabia que tenia que hacer algo y justo ahora esta en mi mesa la respuesta. Al menos esta era la unica solucion rapida que tenia en mis manos. Sin pensarlo mas y convencida por la cantidad de dinero que vi en las manos de Karen. Le di un ultimo trago a cuenta de la casa y fui a la oficina del Sr. Eliott. --Oiga, ?jefe?-- Le pregunte, espiando con mi cabeza en su oficina. --Adelante, Mila. Entre y me sente frente a su pequeno escritorio. --?Que pasa?--, pregunto. --Sabia que algo te pasaba hoy. --Quiero ser bailarina-- solte. Lo dije con prisas, antes de que pudiera cambiar de opinion. --?Quieres bailar para mi?-- Sonrio y se volvio a meter el cigarro en la boca. --Ya era hora de que me lo pidieras. ?Quieres saber cuantos hombres han preguntado si ibas a salir de detras de esa barra y subirte a un poste? --Tal vez prefiera no saberlo… Pero me encantaria empezar cuanto antes. Esta noche si usted quiere. Se levanto e hizo un gesto para que lo siguiera. Me llevo a otra parte del edificio en la que nunca habia estado antes; era el area de las bailarinas. Habia armarios y mucho espacio en el mostrador con espejos en la parte superior, con el maquillaje derramandose sobre todas las superficies. Los diminutos y brillantes pedazos de ropa que llevaban estaban colgados en bastidores, asi como colgados en las sillas. Los que ya habian usado en el escenario habian sido claramente arrojados a favor de un nuevo atuendo, y llenaron el piso, junto a toneladas de tacones altos. Quiero enfatizar, tacones muy altos. --Vistete con la menor ropa posible, puedes usar cualquier cosa aqui. Ya que eres nueva, me quedare con el 15% hasta que des un paso adelante y mejores. Me agarre a mi camisa. --Gracias, Sr. Eliott. Realmente aprecio esto. Asintio con la cabeza. --Dime, siempre has sido la dulce chica de modales suaves aqui, la chica a un costado y todo eso, ?que te hace querer hacer esto? --Bueno, el seguro medico para mantener a mi hermano en el respirador dejo de cubrirlo, asi que…. --Ya veo-- Agito la cabeza, su cigarro se tambaleo de un lado a otro. -- Malditos hijos de puta codiciosos. Les gusta recaudar dinero, pero no quieren pagarlo. Mi abuelo fallecio asi--, me dio una palmadita en el hombro. -- Estaras bien. Sal y baila un poco. Eso te ayudara a alegrar tu estado de animo y a llenar tu cuenta bancaria. Y la suya tambien. --Gracias, Sr. Eliott. Se fue a su oficina y yo me quede quieta en medio de la habitacion como un poste fuera de lugar. --Esto es muy poco--, murmure para mi misma, recogiendo una tanga. Pero no era diferente a un traje de bano, ?verdad? Bien, sigue diciendote eso…. --Hola, ?que haces aqui atras?-- pregunto Karen, apareciendo detras de mi. --Ahora soy bailarina--, dije, encogiendome un poco de hombros. --?En serio? ?El Sr. E. te dejo entrar, asi como asi? Vaya, que rapido. Me hizo una audicion para el y me dijo que engordara un poco. Dijo que a los chicos de aqui les gustan las mujeres con carne en los huesos y que yo era demasiado flaca. Que maldito, ?verdad?-- --Si, eso es grosero--. Respondi con autentica empatia. Me senti mal por ella. Pero por una vez, ese peso extra que nunca pude bajar parecia haber funcionado a mi favor y no en mi contra. Karen se sento en su estacion de maquillaje. --No importa. Nunca subi de peso porque mi metabolismo es bueno sin importar cuantas hamburguesas coma.

  • Tenia que ser el de Mar Vaquerizo

    https://gigalibros.com/tenia-que-ser-el.html

    Barbara es una conocida disenadora de zapatos con su vida laboral asentada y la unica preocupacion de sacar adelante la siguiente coleccion, pero todo se complica cuando Toni, su hermana menor, la incluye en la organizacion de su proximo enlace matrimonial.
    No contenta con endosarle todos los preparativos como si fuese su organizadora de bodas, tambien le encarga el diseno de sus zapatos, algo que le trae de cabeza.
    Cuando todo esta controlado y a menos de dos meses para el gran dia, una llamada de la novia hara que su vida se ponga patas arriba.
    La unica persona capaz de sacar la boda adelante no es otro que Mario, un gran chef y su ex mejor amigo, ex novio, ex hombre de su vida
    ?Aceptara el cocinero el trabajo? ?Sera Barbara capaz de salir indemne de este enlace?

  • Quedate 3 de Lily Perozo , Lina Perozo Altamar

    https://gigalibros.com/quedate-3.html

    Victoria sentira que su mundo se viene abajo, luego de que Brandon le confirmase que la noticia de la prensa era cierta; el dolor y la culpa haran estragos en ella, pues la vida no la habia preparado para lo que estara por venir; sin embargo, tendra que poner todo de su parte para sobrellevar su pena.
    Elisa se vera atrapada en una situacion, de la que no podra escapar. Mientras Daniel, debera transitar por caminos dificiles que, de alguna manera, lo acercaran a aquello que su corazon tanto anhela.
    Gerard Lambert y Clive Rutherford, llegaran para intentar conquistar dos corazones que estan cerrados al amor; tras sufrir grandes perdidas y desilusiones.

  • Pide un deseo, Stefania Gil de Stefania Gil

    https://gigalibros.com/pide-un-deseo-stefania-gil.html

    Leah y Jonathan estaban realmente enamorados. Comprometidos y planeando la futura boda. Pero un dia, al llegar a casa despues de una larga jornada, Leah se entera de que Jonathan y toda su familia se marcharon sin dar alguna explicacion. Solo dejaron un vacio que ironicamente estaba lleno incognitas que jamas pudo resolver y una tristeza que parecia querer acompanarla de por vida.
    Decide mudarse a la gran manzana pensando que aquella ciudad le ayudaria a empezar de cero. Pero no. Cada ano, en la misma epoca en la que habia ocurrido todo, Leah revivia cada instante de aquel sufrimiento. Era un luto que vivia ano tras ano desde la misteriosa partida de su prometido junto a toda su familia.
    Con el pasar de los anos, entendio que en ningun lugar del mundo encontraria la felicidad y decide regresar a Arlington, junto a su familia y justo en el momento en el que su mejor amiga Ellie, a quien conoce desde que eran bebes, le propone empezar un negocio juntas. Tambien intuye que Ellie quiere emparejarla de una vez y por todas con Ryan, su hermano mayor. Sonaba con verlos juntos y felices desde que eran adolescentes, cuando las salidas en grupo se disolvian en segundos gracias a Ellie, dejandolos a ellos a solas y permitiendo que ciertas cosas ocurrieran por primera vez en la vida de ambos.
    Necesitaba volver a sus raices y buscaria la manera de ponerle punto y final a ese pasado tan amargo que la seguia a todos lados y no la dejaba ser feliz.
    Es durante la mudanza, cuando sufre un accidente que le da la vision que ella tanto estuvo buscando y entonces, lo encuentra. Su amor, por fin, despues de tantos anos y por un segundo fugaz, lo ve. Lo reconoce y en un abrir y cerrar de ojos, lo pierde de nuevo.
    ?Sera la imaginacion de Leah, movida por el amor, la que evoca la imagen de Jonathan? ?Tendra que resignarse a que nunca encontrara respuestas y cedera ante la propuesta de ser feliz que le ofrece Ryan? ?O esta en lo correcto y su amado Jonathan vuelve a ella despues de todos esos anos para retomar lo que el destino les obligo a interrumpir?

  • Dama Blanca de Marta Martin Giron

    https://gigalibros.com/dama-blanca.html

    ?Que hay en la mente de un asesino?
    ?Que se cruza por la de la victima al caer en sus manos?
    Los detectives Yago Reyes y Aines Collado se enfrentan a uno de los peores casos de sus carreras como detectives de homicidios. La victima, una joven de apenas quince anos, es hallada muerta y semidesnuda en los arrozales de la localidad valenciana de Cullera. Comienza asi una investigacion a contrarreloj para atrapar al culpable. A cada paso dado, aumentan las sospechas de que alguien de su entorno mas cercano pudo ser el responsable de su muerte. Sin embargo, ahondar en sus vidas hara que salgan a la luz secretos terribles; el precio a pagar sera muy alto.

  • STORM. Si te descuidas te robara el corazon de Rose Gate

    https://gigalibros.com/storm-si-te-descuidas-te-robara-el-corazon.html

    Nadie dijo que fuera una buena persona ni pretendo serlo.

  • Amor entre jefes (Los jefes 3) de Victoria Quinn

    https://gigalibros.com/amor-entre-jefes-los-jefes-3.html

    Esta postrada de rodillas.

  • Cuando todo acabo de Anna Garcia

    https://gigalibros.com/cuando-todo-acabo.html

    Os voy a contar una historia de amor diferente. Una historia llena de lucha, derrotas, sacrificios, lagrimas, imperfecciones y cicatrices. Una historia de amor de dos personas que se encontraron cuando no tenian nada y se separaron cuando lo tenian todo. Os voy a contar que paso… cuando todo acabo”

  • AKA de Jose Ramon Perez

    https://gigalibros.com/aka.html

    En un futuro no muy lejano, Kant es un oficinista que anos atras alcanzo la fama como escritor, pero que ahora lleva una gris existencia de burocrata. Un dia se presenta en su oficina un extrano e inesperado cliente y, tras el, comienzan a aparecer tambien una serie de personajes que desean localizarlo a toda costa. Kant se ve de repente arrastrado a una persecucion frenetica donde nada es lo que parece. O todavia peor: porque algunas cosas si son lo que parecen.

  • El hijo de las cosas de Luis Mateo Diez

    https://gigalibros.com/el-hijo-de-las-cosas.html

    Dos hermanas y un hermano forman un trio familiar tan habitual que apenas nos llama la atencion. Dos hermanas que asumen, con frecuencia, una responsabilidad afectiva que cobra todavia mayor relieve cuando los padres faltan. Ellas son dos personajes cruciales en esta novela con la que Luis Mateo Diez vuelve a sorprendernos con un giro humoristico llevado a sus ultimas consecuencias, intensificando el aliento desorbitado de su escritura expresionista. A las dos hermanas les ha caido en esta historia, que no concede sosiego al lector, un hermano tarambana, disoluto, lo que podriamos considerar una penosa herencia que puede llevarlas a la ruina moral y material, si se descuidan. Otros personajes las amparan y ayudan o, en el peor de lo casos, las ponen de los nervios. La historia nos lleva por derroteros sorprendentes, inusitados o absurdos. Ellas no cejan en el empeno de salvar al hermano, un hijo de las cosas que tanto merece lo que no es capaz de ganar, como si en su vida todo se lo debieran. Estamos ante una fabula, tan verdadera como inquietante, entre la risa y la melancolia, sobre los sentimientos manipuladores, la impostura de los afectos, las coartadas de los bienes familiares, la desgracia de lo que tan penosamente se reparte en las responsabilidades de las hermanas y los hermanos. Esta puede ser la novela mas divertida de un autor del que conocemos muchos registros, un prolifico novelista dueno de un mundo inagotable.

  • La chica que leia novelas de amor (Las chicas de Snow Bridge 3) de Ella Valentine

    https://gigalibros.com/la-chica-que-leia-novelas-de-amor-las-chicas-de-snow-bridge-3.html

    Ethan cogio la jarra de cerveza que Kyle, el camarero, le acababa de dejar sobre la barra y regreso a su mesa. Aquella noche habia ido a Snowflakes, el bar del pueblo, con sus amigos Dean y Jason. Los tres chicos habian sido companeros de clase desde el colegio, se llevaban bien y solian quedar a menudo para compartir unas cervezas y hablar sobre sus cosas. A Ethan le gustaba especialmente aquel bar. Era acogedor, calido y el hilo musical era muy bueno. Acababa de sentarse de nuevo en su sitio cuando la puerta del bar se abrio y vio entrar a las que habian sido las dos mejores amigas de su hermana Sophie antes de que esta se marchara a Nueva York. Amy y Leslie, al verle, le saludaron con la mano y se sentaron cerca de los grandes ventanales del local. Ethan sabia que ambas chicas habian acabado los estudios hacia poco y que habian regresado a Snow Bridge en busca de una salida profesional. El era dos anos mayor que ellas, por lo que hacia tiempo que habia pasado por ese proceso. Tuvo la suerte de que el senor Potter, redactor jefe de La Gaceta de Snow Bridge, se jubilo el mismo verano en el que el termino su carrera de periodismo, y pudo cogerle el relevo. Fuera del bar, nevaba. Era una noche fria, una de las muchas noches en las que la nieve caia sobre las calles del pueblo cubriendolo todo con su manto blanco. Aquella tarde, el tiempo paso volando. La conversacion con sus amigos fluia y se lo estaban pasando realmente bien. Ademas, cerca de ellos, un grupito de chicas les lanzaba miradas de reojo. Eran turistas, se notaba por su piel bronceada y sus atuendos provocativos, poco preparados para los dias de nieve intensa que se avecinaban. Seguramente, provenian de la Costa Oeste. Quizas de California. Y era probable que se hospedaran en la pequena pension que se situaba en el centro del pueblo. Ethan se habia fijado en una chica de melena ondulada con mechas rubias y labios carnosos que no hacia mas que sonreirle con coqueteria. Si habia algo que Ethan sabia hacer, era leer las senales de las mujeres. Y esa mujer en concreto estaba deseando que el se le acercara. Ethan se levanto de la silla dispuesto a poner en practica sus desarrollados dotes de seduccion. Pero algo le detuvo a medio camino: la escucha desafortunada de un comentario que un chico le estaba haciendo a otro senalando la mesa de Leslie y Amy donde, en aquel momento, solo estaba Amy acompanada por un chico que parecia estar coqueteando con ella. --Nos hemos apostado cincuenta pavos a que no consigue su numero de telefono --decia el chico entre risas mientras el otro se reia tambien. --Joder, pero !si esta gorda! --Esta como una foca. Ethan se crispo al escuchar esos comentarios ofensivos. No es que tuviera una relacion muy estrecha con Amy, pero la conocia. Tanto ella como Leslie solian monopolizar su casa junto a su hermana cuando eran adolescentes. Amy era una chica dulce y buena que se desvivia siempre por los demas. Ademas, aquellos chicos no tenian motivos para insultarla, porque Amy era una chica bonita. Quizas no tuviera un cuerpo en consonancia con las imposiciones sociales, pero tenia un cuerpo increiblemente sexy con todas sus curvas y redondeces. Volvio a mirar al chico que sonreia a Amy y le apartaba de la cara un mechon de pelo color caramelo. Sin pensarselo dos veces, se acerco a la mesa y les interrumpio. --Perdona, Amy, ?podemos hablar un momento? --pregunto Ethan con urgencia. Amy levanto la mirada y sus ojos brillaron con desconcierto. --?Ocurre algo? --Es que... me gustaria hablar contigo de una cosa. --Ethan miro al chico que no parecia dispuesto a irse y puntualizo--: A solas. El chico parecio captar la indirecta, porque tras escucharle decir aquello, se levanto de la mesa y se marcho, algo molesto. Amy miro a Ethan sin comprender absolutamente nada. --?Que ocurre? --pregunto, alzando una de sus cejas claras. --Ese tio se ha apostado cincuenta pavos a que conseguia tu numero de telefono. Amy abrio mucho los ojos, con estupor, y siguio la direccion de la mirada de Ethan hasta la mesa donde se acababa de sentar el chico en cuestion junto a los otros dos. --?En serio? --Los he escuchado por casualidad y he venido a salvarte. --No menciono el tema de los insultos, pues sabia que aquello le haria sentir incomoda y humillada, y no era su intencion hacerle sentir mal. Amy parpadeo unos segundos y luego solto una risita que sofoco con la mano. --?Que pasa? --pregunto Ethan ante aquella reaccion. --?Salvarme? ?En serio? ?En que epoca crees que nos encontramos? Las mujeres de hoy ya no somos mujeres desvalidas que necesitan ser salvadas, Ethan. Las princesas de los cuentos de hadas actuales podemos salvarnos solas. Solto una nueva carcajada y Ethan fingio indignarse. Pero solo lo fingio, porque cualquier atisbo de indignacion real desaparecio ante el sonido de la risa de Amy. Era dulce, musical, aterciopelada. Como una caricia. --Eh, oye, deberias estar agradecida. --Oh, si, claro. Gracias, mi paladin. Amy reprimio una nueva carcajada y Ethan sonrio. Se miraron en silencio. Y algo ocurrio en aquel silencio. Fue extrano y electrico. Denso. Palpable. Pero en aquel momento, Leslie reaparecio y rompio el embrujo. Sus miradas se desenredaron y la tension se evaporo. Leslie se sento en la silla que habia dejado vacia antes de irse, miro a Ethan y fruncio el ceno. --?Que haces tu aqui? --Yo tambien me alegro de verte --respondio Ethan con sarcasmo. Amy dibujo una sonrisa divertida en los labios, miro a Ethan y luego a Leslie. --Aqui donde lo ves, Ethan Winter es todo un caballero andante. Me acaba de salvar, ?sabes? Ethan puso los ojos en blanco. Pero antes de que pudiera decir nada para imponer su version de los hechos, Amy se adelanto y empezo a relatarle una bastante distorsionada que hizo estallar a Leslie en carcajadas. Aquella noche, Ethan se olvido por completo de la chica de piel bronceada y mechas rubias que seguia observandole con deseo desde su mesa en el lado opuesto del local. Capitulo 1 Actualidad... Ethan cabeceo y se desperto de golpe. A su lado, Aidan, el chico en practicas, solto una risita entre dientes. --Es la tercera vez esta semana que te quedas dormido mientras trabajas --le dijo divertido. Ethan hizo un mohin. Se encontraba sentado en su mesa de trabajo, en La Gaceta de Snow Bridge. La redaccion estaba formada por cuatro mesas de tamano medio colocadas de cualquier manera en una estancia estrecha y alargada. El espacio tenia cierto aire decadente, pero a Ethan le gustaba. Le hacia pensar en la epoca dorada del periodismo, antes de que Internet se impusiera y la venta de periodicos en papel descendiera en picado. De hecho, sacar una version digital de La Gaceta de Snow Bridge fue una de las grandes aportaciones que hizo Ethan al entrar en el periodico local, aunque manteniendo tambien la version impresa. Sabia que los habitantes de Snow Bridge adoraban recibir todos los meses una copia en papel de todas las aventuras y desventuras vividas en el pueblo. Pero poder disfrutar de un magazine digital donde cotillear a diario, habia sido toda una revolucion. --Jacob no deja de llorar por las noches y soy incapaz de dormir mas de dos horas seguidas -- explico Ethan. Jacob era su hermano pequeno, con el que se llevaba la friolera de treinta anos. Su madre habia tenido un hijo con Joe, el dueno de la cafeteria ubicada en la plaza central, y aunque el se alegraba mucho de su relacion y del nacimiento de Jacob, echaba de menos dormir del tiron por las noches. --?Has probado con tapones para los oidos? --pregunto Aidan. --Si, de todos los tipos, pero el sonido que hace al berrear lo traspasa todo. Aidan se encogio de hombros. --Lo siento, tio. Ethan tambien lo sentia. De hecho, hacia semanas que le daba vueltas a la misma idea. Ethan llevaba anos retrasando el momento de independizarse de la casa de su madre y habia llegado el momento de hacerlo. Su madre habia rehecho su vida y, aunque nunca hubiera sugerido que sobrara, sabia que ella y Joe se merecian un poco de intimidad (la intimidad que pudiesen tener compartiendo su vida con un bebe lloron). --Oye, ?tus padres siguen alquilando el piso ese que me dijiste? --pregunto Ethan a Aidan, que dejo de teclear en el ordenador para mirarle. --Si, sigue libre. --?Crees que podria echarle un vistazo? --Por supuesto. Si quieres podemos ir despues de trabajar. Tengo las llaves. --Aidan se metio la mano en el bolsillo y saco un juego de llaves, triunfal. ?? ?? ?? Aquella tarde, se marcharon de la redaccion antes de tiempo, dejando a Earl encargado de cerrar el chiringuito. Earl era un hombre mayor, de cabellos color plata y gafas graduadas que llevaba anos trabajando en La Gaceta y al que le faltaba poco para jubilarse. Al salir, nevaba. Unos copos de nieve danzaban en el aire de forma perezosa antes de caer al suelo. Los meses de nieve sentaban bien a Snow Bridge. Los tejados, copas de los arboles y calles se cubrian de blanco y, en conjunto con las guirnaldas de luces y la decoracion navidena, el pueblo se convertia en la ilustracion perfecta para un cuento de hadas. Ethan estaba enamorado de su pueblo, pero, durante las fiestas navidenas, parecia magico. Cogieron el coche que Ethan tenia aparcado en frente y se alejaron varias calles hasta detenerse frente a un edificio de obra vista. Estacionaron el vehiculo, entraron en el edificio y Aidan llevo a Ethan hasta la segunda planta. Entraron. Era un piso pequeno, de una habitacion, con cocina americana y bano minusculo. Parecia el tipico piso de soltero, y aquello le gusto. --?Cuando crees que podria instalarme? --pregunto Ethan con una sonrisa torcida, pensando en todas las cosas que podria hacer en aquel piso. Cosas que, hasta ahora, no podia hacer en su habitacion. --Pues si decides quedartelo, por mi como si te mudas hoy mismo --dijo Aidan tendiendole las llaves.

  • Erase una vez en Londres de Laura Maqueda

    https://gigalibros.com/erase-una-vez-en-londres.html

    ?Puede el modelo mas famoso del mundo enamorarse de una chica corriente?

  • Te necesito esta noche: (need you tonight…), Sarah Wall de Sarah Wall

    https://gigalibros.com/te-necesito-esta-noche-need-you-tonight-8230-sarah-wall.html

  • Enigma (Argus del Bosque 2) de M.j. Fernandez

    https://gigalibros.com/enigma-argus-del-bosque-2.html

    Un asesino brutal que amenaza la paz de una pequena ciudad de Espana...

    El homicidio de una anciana es el primero de una serie de crimenes diabolicos que desconciertan a los detectives de la comisaria de <>, en Calahorra. En una carrera contra el tiempo, la conflictiva inspectora Luisa Burgos debera ocuparse de la investigacion criminal. Junto a cada cadaver encuentran una nota con un acertijo, donde el asesino usa palabras cripticas para senalar quien sera la proxima victima. Las autoridades disponen solo de veinticuatro horas para descifrarlo. De lo contrario, otro inocente morira…

  • ETA. Las claves de la PAZ de Jesus Eguiguren

    https://gigalibros.com/eta-las-claves-de-la-paz.html

    Son muchos los acontecimientos que estan sucediendo en el Pais Vasco. El mas importante: el fin de ETA. La forma en que se ha puesto punto final a la accion terrorista ha sorprendido a la mayoria y ha generado desconfianza. ?Cuales son las verdaderas claves del final historico de ETA? ?Que papel desempenaron los intentos de negociacion previos al cese de la lucha armada terrorista? ?Cual es el futuro de la paz en Euskadi? ?Como se va a llevar a cabo este proceso? El periodista Luis Rodriguez Aizpeolea reconstruye de forma integra en ETA. Las claves de la paz el proceso de paz que se abrio en Euskadi entre 2000 y 2006, y que es el precedente del cese definitivo del terrorismo por parte de ETA, de la mano de su principal testigo, el presidente de los socialistas vascos, Jesus Eguiguren. Como se gesto la idea del dialogo con ETA, como se llevaron a cabo las reuniones, los horarios, las fechas, los asistentes, el modus operandi de cada uno de los encuentros y sus consecuencias tras la ruptura del proceso con el atentado de ETA en la T-4. Una obra que secuencia de manera magistral el final del terrorismo en Espana, un problema endemico que se venia arrastrando desde la Transicion y un caballo de batalla de los diferentes gobiernos democraticos. El testimonio de uno de los principales responsables del final del terror, un vasco de corazon que lo arriesgo todo en favor de un deseo -que era el anhelo de todos los espanoles-: la paz en Euskadi. Un relato sorprendente y profundo que aun guarda el valor de la inmediatez y que cuenta con todo lujo de detalles, y por primera vez -ya que este es un tema a menudo silenciado- los entresijos de una negociacion con una organizacion terrorista. La explicacion del final de ETA. Todo, sin censuras

  • Furia y Tormenta (El Heraldo 1) de Jennifer L. Armentrout

    https://gigalibros.com/furia-y-tormenta-el-heraldo-1.html

    Puede que a sus dieciocho anos Trinity Marrow se este quedando ciega, pero es capaz de ver fantasmas y espiritus y comunicarse con ellos. Su extraordinario don forma parte de un secreto tan peligroso que Trinity lleva anos escondiendose en un aislado complejo fuertemente vigilado por Guardianes, gargolas cambiaformas que protegen a la humanidad de los demonios. Si los demonios descubren la verdad sobre Trinity, la devoraran, literalmente, para aumentar sus poderes. Cuando llegan Guardianes de otro clan con la alarmante noticia de que algo esta matando tanto a demonios como a Guardianes, el seguro mundo de Trinity se hace anicos. En gran parte debido a que uno de los recien llegados es la persona mas irritante y fascinante que jamas haya conocido. Zayne guarda secretos que pondran el mundo de Trinity del reves una vez mas, pero se ven obligados a trabajar juntos cuando los demonios irrumpen en el recinto y el secreto de Trinity sale a la luz. Para salvar a su familia, y tal vez al mundo, Trinity tendra que confiar en Zayne.

  • Un asesino en tu sombra de Ana Lena Rivera

    https://gigalibros.com/un-asesino-en-tu-sombra.html

    Gracia San Sebastian, investigadora de fraudes financieros, se ve envuelta en la desaparicion de Imelda, una joven psicologa a la que encuentran muerta pocos dias despues en las vias del tren. El marido, artificiero de la Guardia Civil y principal sospechoso, le pide ayuda para descubrir al asesino de su mujer. Junto a su amigo Rafa Miralles, comisario de la policia de Oviedo, Gracia empezara una investigacion que la llevara a la caza de un asesino por varias capitales europeas. Al mismo tiempo, la vida de Gracia se desmorona. La relacion con Jorge, su marido, pasa por un mal momento, y su reputacion como investigadora esta en entredicho tras acusar a un funcionario con esclerosis multiple de fingir su enfermedad para competir en la modalidad mas extrema del triatlon, el Ironman.