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Manana es mi cumpleanos numero veintiuno. Deberia de estar emocionada, muchos lo esperan con ansias. Yo ya no lo sentia de ese modo, pues despues de la muerte de mi madre se volvio una fecha muy deprimente, hasta el punto de casi odiarlo. No me gustaba sentirme asi. Sabia que si mi mama pudiera verme, trataria de animarme para que continuara adelante con mi vida. Ella se emocionaba mucho celebrando mis cumpleanos. Le encantaba consentirme en aquellos dias especiales con lo mejor que sabia cocinar: grandes pasteles de chocolate, fresa o ambos. Adoraba su sabor, recuerdo que siempre trataba de probar la cubierta de chocolate que rebosaba antes de picar el pastel, y mi madre siempre me capturaba en pleno acto. No entiendo como es que se daba cuenta tan rapido. !Mi madre era increible! Pero esos dias se acabaron hace un ano, cuando recibi la noticia de parte de mi padre sobre la muerte de mi madre. Fue el peor dia de mi vida. Yo me encontraba en clases y despues de la llamada me fui corriendo hasta el hospital, quedaba a unas calles de la universidad. Encontre a mi padre en la entrada, me estaba esperando. Mi madre habia fallecido entre la llamada y el tiempo que me tomo llegar al hospital. Me derrumbe por completo, quede desolada. No pude ayudar a mi padre con los preparativos del funeral. Me aleje de todos, cree una burbuja personal. Estoy encerrada en mi cuarto recordando aquellos momentos junto a ella. En la mesa tengo dos cartas: una para mi madre, donde le escribi todo aquello que me hubiese encantado hablar con ella, y otra para alguien muy especial para mi. Una carta la cual no terminaba de escribir. Siendo sincera, solo tenia el encabezado, no sabia como continuar. La unica persona con quien he mantenido contacto, ademas de mi padre, ha sido Francisco. Francisco y yo tenemos mas de cinco anos de amistad, de hecho, nos consideramos los mejores amigos. Pero la verdad, mi perspectiva hacia el ha cambiado en los ultimos anos. Por primera vez un hombre llama mi atencion de tal manera. Desde el primer dia que lo conoci me encanto, y mantuve la esperanza de gustarle un tiempo, pero su trato y comportamiento me demostraron que era (y sigue siendo) unilateral el sentimiento. No soy de fijarme en cualquier hombre guapo, antes pensaba que todos eran unos patanes, pero es increible el impacto que el causo en mi. ?Como le explicas a tu mejor amigo que tienes anos enamorada de el? Hace un momento llamo para preguntarme como me siento. Sabe que estos dias son dificiles para mi, y estoy muy agradecida por ello. Sin embargo, no puedo evitar pensar que mi madre estaria enojada al verme. Lo he pensado, y quizas ya es momento de seguir adelante. No quiero seguir recordando a mi madre con tristeza, ella no se merece eso. Por ello habia decidido escribir la segunda carta: deseaba plasmar todo lo que sentia por el, sacarlo todo. Necesitaba un medio para decirle lo que sentia a Francisco, nunca me habia atrevido de hacerlo en persona. Crei que seria sencillo, pero no tenia ni idea de por donde empezar. Estaba hastiada de estar en la friendzone, viendo como pasaba de novias, “amigas” y mujeres de una sola noche, mientras yo aqui; siendo la del despecho, la que escuchaba sobre Luisa, Andreina, Mariana, Claudia, o como fuese que se llame la chica de turno, para aconsejarle que hacer con cada una, pero nunca siendo yo la protagonista. Ha sido una pesadilla tener que aguantarme las emociones de sus relaciones inestables. La primer relacion amorosa seria que tuvo me afecto muchisimo, porque practicamente coincidio con el fallecimiento de mi madre. El momento en el que mas lo necesitaba. Hace unas semanas celebraron su primer aniversario, y sigue siendo dificil para mi verlo acompanado por Veronica, su novia, como tortolas estupidos, repartiendo su amor por todos lados, tomados de la mano o dandose besos en cualquier lugar. Son inevitables estas escenas. Por ello mi relacion con Francisco menguo hasta al grado de huir cuando los veo juntos. El reloj marca las doce y diez, oficialmente habia comenzado mi cumpleanos. Tenia mi movil apagado, no queria recibir ni llamadas, ni mensajes, ni ningun tipo de felicitacion. Mi companera de casa Angela entro a mi habitacion a desearme feliz cumpleanos, y algo en mi rostro debio avisarle que algo ocurria, porque se me arrojo encima y me dio un fuerte abrazo de oso. Se quedo conmigo hablando, con su ayuda pude adelantar un poco la carta. Eran las tres de la manana y yo solo esperaba que estas paginas fueran suficiente para apaciguar lo que sentia por el. Tenia meses tratando de terminar esta carta, y al fin lo logre. En ella le explicaba mis sentimientos a Francisco, como habia sido mi amor platonico durante estos tres anos, cuanto me habian dolido sus relaciones y cuanto me dolia el hecho que siempre me veria como su mejor amiga y nada mas que eso. Era hora de dormir y dejar las cosas en las manos del destino. Manana encontraria el valor para entregarla. * * * * Hace algunas horas amanecio y yo aun sigo metida en la cama, cubierta con mi sabana de pies a cabeza. Lo unico en lo que puedo pensar es que ya pronto llegan las vacaciones. La clase de esta tarde sera la ultima del mes, y luego de eso tendre dos semanas para perderme en mi y descansar de todo. Son solo dos semanas, pero para mi, una asidua lectora y amante de las peliculas, es demasiado tiempo. La universidad absorbe todo mi tiempo, dejandome muy poco para disfrutar del placer de un buen libro. Son casi las 12, por lo que decidi enfrentarme al destino y encender mi movil. El buzon tenia algunas felicitaciones de mis familiares y amigos, tanto en los SMS como en las redes sociales. Despues les respondere, por ahora quiero seguir acostada, disfrutando la tranquilidad de mi cuarto hasta que sea la hora de irme a la universidad. Mi movil vibro, un mensaje nuevo. Era Francisco. *Buenos dias cumpleanera, espero que estes presentable, porque necesitamos hablar y estoy en camino. Asi que despierta y alistate para mi* ?Presentable? ?A que se referia? es obvio que no, es mi cumpleanos y no debo estar en la universidad sino hasta las tres de la tarde. Tocaron la puerta, tal vez sea mi padre, sorprendiendome con una visita rapida, ya que Angela se fue temprano a la universidad. Me levanto con lentitud, pero seguian tocando el timbre insistentemente. Abro la puerta rapidamente, esperando sorprender a mi padre con mi aspecto, pero… no puedo creer a quien veo en su lugar: Francisco estaba frente a mi, riendo a carcajadas al verme y con un regalo muy llamativo escondido entre sus manos. --!Feliz cumpleanos Marta! --clama Francisco, y repentinamente se lanza sobre mi para abrazarme. !Estoy totalmente avergonzada! Aunque Francisco y yo hemos convivido ya muchos anos, todavia detesto que me vea tan desarreglada, especialmente hoy, ya que el shock de la situacion no hace mucho por disimular la melancolica que me produce pensar que mi madre ya no esta. --Gracias Francisco… --Finalmente respondo y tambien lo abrazo carinosamente. --Por nada linda. Y hey... --Toma una de mis manos, y coloca lentamente la pequena caja en ella-- Mira, traje esto para ti. --!Oh, gracias! ?Que sera? --Clamo algo entusiasmada. No suelo aceptar regalos este dia, pero recorde que tambien habia decidido cambiar algunas cosas. Abro rapidamente el regalo, emocionandome un poco mas y veo que es un hermoso reloj color plata con algunos que otros brillantes. Evidentemente quede fascinada. --!Que hermoso! !Me encanta! Gracias... Si que tienes talento para estas cosas, casi me haces sentir mal por el abrigo barato que te di en tu cumpleanos Francisco sonrie. --!Sabia que te iba a encantar! Oye Marta, se lo dificil que puede ser este dia para ti, hasta me imagino tus planes para este fin pero... hoy quiero que aceptes mi invitacion. -- ?Invitacion? ?A donde? --Respondo confusa. Francisco no suele ofrecer invitaciones asi... Siempre vamos a salidas planeadas por nuestro propio grupo de amigos ?que rayos estaba sucediendo? --Eso es una sorpresa. --dijo, con una inmensa sonrisa. --Uhmmm... Bueno... Pero solo por un rato. No tengo muchas ganas de celebrar nada, la verdad. --Justamente por eso es que quiero que salgas de este encierro --dijo, frunciendo ligeramente el ceno--. Y si, con un rato es suficiente. Vamos, te va a gustar. -- Oye... ?y Veronica? ?No pensara mal si salimos solos tu y yo? -- Ella no es importante en este momento, hoy es el cumpleanos de mi mejor amiga y no podemos pasarlo por alto. Y tu me necesitas con urgencia para distraerte. Ademas, ella sabe lo mucho que te aprecio y cuan importante eres para mi. --Yo tambien te aprecio muchisimo Francisco... Gracias. --?Ella no es importante? Como desearia que esas palabras fueran ciertas. Lo miro fijamente a los ojos, el tambien me mira, pero su mirada es carinosa, protectora... en fin, la mirada de un hermano. --Para eso somos los buenos amigos... !Bueno! Creo que ya deberiamos irnos, se hace tarde --clama y me hala una vez mas de la mano, mientras yo sigo ocultando mi decepcion, preparandome para volver a mi rol de amiga. --!Espera! !No saldre en pijamas! --Y tampoco con esa melena de Leon --bromea, y enseguida volteo hacia el espejo del salon y rio a carcajadas mientras veo mi desastroso cabello color castano claro, y mi rostro palido.
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