• Los melodramas de una rubia desgraciada de Nuria Losilla Subires

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    Mi nombre es Charlotte Katherine Fausser. Tengo 28 anos, salud, trabajo, novio y el mejor amigo de la mujer: un hombre irremediablemente gay. Hasta aqui todo parece perfecto, ?verdad? La vida perfecta, trabajo perfecto, pelo perfecto... Pues no. Soy una desgraciada, mi vida es un drama y, en consecuencia, soy una Drama Queen. Por si todo esto no fuera suficiente, el universo planeaba mi muerte de la forma mas cruel e inoportuna posible, pero eso yo aun no lo sabia. Pensareis que soy una exagerada, pero no es asi. Bueno... Quizas un poco, pero solo cuando tengo la regla... y cuando me tiene que venir. A veces incluso unas semanas despues... Yo me lo tomo como un entrenamiento emocional para que mi mente no se desacostumbre. El caso es que soy una desgraciada, si bien pueda parecer que tenga una vida de ensueno. La Barbie rubia, guapa y triunfadora acompanada de su mejor amigo guapo y triunfador, el Ken. Barbie y Ken, inseparables. Perfecto, ?no? !Pues no! Porque mi Ken tambien es una desgraciada, asi que el drama se multiplica. Hasta el 2018 yo no era una desdichada... Al menos, no tanto. Sufria las desgracias justas de los dramas primermundistas, pero fue salir del 2018, mi fabuloso ano 2018, y todo se torcio. Maldito 2019, !destruyo mi vida por completo! Os pondre en contexto para que me entendais. El que fue el mejor ano de mi vida termino sin yo saberlo tras las doce campanadas. El ano que resumia todos mis exitos y cumplio todos mis propositos: el trabajo perrrrfecto en la agencia de marketing y publicidad Perfect. Ironico, ?verdad? Dinero, centro de Londres, viajes por todo el mundo desde Dubai a Miami, lujos, gastos pagados, un Paul y un Markus. !Lo tenia todo! Un atico en el centro de Londres (!era lo mas!) y cerca de lo mas importante de Londres, el Soho. Y, por ultimo, pero no menos importante, el mejor companero de piso y de vida: mi gato Foffy. En mi familia siempre ha habido perros, pero los gatos son mejores, y yo tenia el mejor gato del mundo. Hasta se parecia a mi cuando se ponia borde. ?No os parece adorable? Asi era mi vida: perfecta, divina y fantastica. Las probabilidades de sentir envidia ahora mismo son altas, y no te culpo, pero en cuanto sigas leyendo un poco mas lo que sentiras sera pena por mi. Desgraciadamente el perfecto 2018 termino, llego el odioso 2019 y, bum, sin saberlo, adios a mi ano perfecto. !Au revoir, vida perfecta! No pude saber que el 2019 seria horrible solo por el primer dia porque empezar, empezo muy bien. Comenzo como un ano cualquiera, de fiesta. Club de moda, fiesta de lujo, cocteles, bares, conocidos y desconocidos... Era como un fin de semana cualquiera, pero con mas gente, mas ambiente y mas alcohol. Lastima que me cruzara con el indeseable de Max. Si ese engreido no hubiera aparecido, habria sido la noche perfecta. Una noche fantastica, divertida e inolvidable si no fuera por el alcohol. Empezo muy bien, pero habia un problema; era 2019 y, por lo visto, el universo decidio que una pobrecita persona normal y corriente como yo no podia permitirse el lujo de ser feliz dos anos seguidos. Eso explicaria el encontronazo con Max y el castanazo de despues. Era un companero de trabajo que me atormentaba la existencia con su mera y embriagadora presencia. Con unos ojos verdes que resaltaban en su tez oscura, el rapado impecable y una sonrisa de anuncio. En resumidas cuentas: un Doctor Jackson Avery de Anatomia de Grey, pero en capullo. Ese tio lo tenia todo y, en concreto, tenia el don de la oportunidad, apareciendo justo a tiempo para ver con esos ojazos como me caia por las escaleras al salir del club, tras lo cual recuerdo a mi mejor amigo Paul meandose de la risa cogido a la barandilla para no caerse, un monton de tipos ayudandome a levantarme y la risilla soberbia de Max al otro lado. Tambien recuerdo el moreton de mi rodilla. Una entrada al nuevo ano bastante normal en mi. Sin embargo, ese no fue el dia en que mi vida empezo a desmoronarse. Recuerdo el momento exacto en el que mi vida, tal y como la conocia, murio: fue el 17 de enero de 2019 a las 11:58 horas. Entonces me converti oficialmente en la chica rubia mas desgraciada de Londres. Capitulo 2 El peor dia de mi vida Aun tengo ese dia grabado a fuego en mi mente, 17 de enero de 2019 a las 11:58 horas. Eran las rebajas. A las 8 de la manana estaba disfrutando de mi desayuno repleto de energia y nutrientes: tortitas de avena con chocolate 0 % en compania de mi queridisimo Paul. Si, mi Ken, mi mejor amigo gay que hacia apenas unos dias se estaba riendo de mi por caerme. No lo culpeis; yo tambien lo hago continuamente. Ademas, por cada una de mis caidas, el sufria tres. Se caia de las tarimas, en los banos y tambien por las escaleras, pero siempre se levantaba rapido para huir del lugar antes de darle la oportunidad a los demas de reirse o ayudarlo. Muy digno. Desde luego Paul no pasaba desapercibido. Era tres centimetros mas alto que yo, es decir, media un metro ochenta y tres centimetros para ser exactos. Ojos azules, tupe negro y pomulos y culo perfectos. Todo un Can Yaman. Amigo, confidente y estilista. Planeamos minuciosamente cada detalle del plan de rebajas para aquel dia: donde parar a comer, que comprar, donde quemar nuestras tarjetas de credito... Lo tipico. Y asi avanzaba la manana de compras en Irregular Choice, Nico Didonna y obviamente, la que no podia faltar, Victoria's Secret, tienda que se convirtio en mi condena sin yo saberlo. Mi mision en aquel lugar era muy clara. Me iba de fin de semana con Markus, asi que necesitaba algo nuevo. Algo que no hubiera visto y que lo dejara sin palabras pero que a la vez le vinieran tantas a la cabeza que no supiera que decir. Y Paul era un experto en encontrar ese tipo de cosas, asi que mientras el estaba enfrascado en aquella ardua tarea yo recibia un mensaje: De Alice: Hoy es el cumple de mama. !Llamala! Estaba tan feliz y tan despreocupada que no me habia parado a pensar en ello. Yo quiero a mi madre, mucho, pero mas y mejor en la distancia; no se si me entendeis. De todos modos, no aprueban mucho mi estilo de vida exitoso y contemporaneo, asi que era mejor limitar las conversaciones para no acabar discutiendo. Alice sabia que se me pasaria y, si no lo hacia de inmediato, yo sabia que tambien, aunque me olvidara a proposito, asi que la llame. Y ese fue mi error, llamarla en mitad de la tienda a la vista de todos, para que todos supieran cuales eran mis movimientos exactos al sacar y guardar el movil. Esa puta llamada fue mi condena porque, cuando llegue a caja para pagar, me di cuenta de que mi movil NO estaba alli. Ni rastro de el: ni en el bolso, ni en los bolsillos, ni en las estanterias de Victoria's Secret donde habia estado hurgando. !Alguna maldita zorra de manos largas me lo habia robado! Ni quince minutos tardo aquella mala pecora en arrebatarme mi vida. Quince minutos de despiste y un segundo para convertirme en la desgraciada mas absoluta del mundo. Procure no sacar conclusiones precipitadas. --Paul, llamame --le exigi y Paul rapidamente pulso el boton de llamada. --El telefono al que llama esta apagado o fuera de cobertura --se escucho. --!AAAAAH! --Aquel grito debieron de escucharlo incluso en Hong Kong--. !Mentira! Mi movil jamas esta apagado. No puedo apagarlo. Imposible. Ese telefono tiene que estar activo 24 horas al dia los 7 dias de la semana. No puede apagarse --Estaba histerica, maldiciendo todo lo posible para mis adentros y actuando como una loca en medio de una tienda delante de mi mejor amigo. Habia perdido los estribos--. Ademas, no me se el pin, no puedo apagarlo --dije mas sosegada tras sacar mi furia e histeria exponiendo el unico y verdadero motivo por el que nunca podia apagar el movil. Ese fue el dia de mi muerte. El inicio de la decadencia. Ese movil era mi vida entera, mi trabajo, mi ocio, mi adiccion. Mi vida, agenda y contactos estaban en ese telefono. Ademas de Instagram, y todo ese tipo de aplicaciones superficiales que son de vital importancia para mi. --?Puedo llamar a mi hermana? --pregunte a Paul. Ya sabia que no tenia ni que preguntarselo, asi que no tardo en alargar el brazo con el numero de Alice. Tenia que bloquear y formatear ese telefono ipso facto. Le indique a Alice todos los pasos que debia seguir para bloquearlo y borrar todos los datos antes de que destruyeran aun mas mi vida. No podia arriesgarme a que tambien me la robaran si con arruinarla y destrozarla no tenian suficiente. !Que drama de dia! Al final irme de rebajas me salio carisimo, no solo por lo del telefono, sino porque casi todo lo que me compre era de nueva temporada. Ya era oficial que el dia era una mierda y no iba a mejorar, pero ?en serio hacia falta que empeorara? Al final tuvimos que detener nuestro plan de rebajas despues de entrar a solo tres tiendas y acabar en la policia. Necesitaba encontrar la caja del movil, necesitaba los datos que contenia para poder denunciar. ?Alguna vez os habeis mudado? Por si alguien dice que no, os dire que es una putada. Cuando te mudas, descubres que tienes mas cosas de las que necesitas y mas de las que te caben. Sin embargo, te lo llevas todo y amontonas aun mas mierda. El hecho de tener que buscar algo como una caja diminuta de un aparato electronico de hace unos cuatro anos se convirtio en algo bastante jodido. Y alli estabamos, rebuscando todo lo habido y por haber en busca de la condenada caja. --Yo no he pedido un dia libre para esto --murmure. Entonces recorde que tambien tendria que alertar al operador de la compania para hacer oficial la conversion de mi movil en un pisapapeles electronico. Un pisapapeles electronico con mucho estilo y muy caro. Ademas de congelar el contrato por si se les ocurria robarme algun minuto de llamada o los datos, aunque eso ultimo era mas improbable. De media, el dia 3 de cada mes, ya no me quedaban datos. Esa era una de mis desgracias primermundistas a las que me referia al principio de todo. Una desgracia continua con la que podia vivir, como todo el mundo, pero una cosa es sobrevivir mendigando wifi y otra muy distinta era sobrevivir sin movil. Paul era una de mis mayores suertes. No solo encontro la caja en el rincon mas recondito de un armario, sino que tambien me acompano a la policia para que la espera se me hiciera lo menos insufrible posible.